El Noticiero - 08/04/1960, Página 5
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El Noticiero - 08/04/1960, Página 5
Semana Santa 1960 EL NOTICIERO Número extraordinario LO QUE '^UNCA MUERE fe li M Que tendrA iruesitra Pal rana la Virgen Ue Oalrr^ que 'M hay quien no tengj fe en su atmparo maitemiail y -an lia vertú mUaigrosít de su poer celestial. No hay pecho cartaganero añile no teng^^ un allbar, ni vivienda ande Su Imiaj^n no esté también venerát Aquí no vie fofatsta.'o, que ¿á llog<]r a la zudíá, •no vaya erecho al templo a honrar tu tteviniá, y a ofrecellp v\ corarón, con fervoro:>a 'ansió. lie como i;t Macari-na ./'-.•'• |3 evoción ¡pepular, que lleva al puet>lo and^lú^ 11 fa fie máis <esartá. Til* ei raciJ sentir ba-turro (le la Viirgen de! PMar, que lleva '^1 pueiblo bravio di heroisaio -nacional. Bl'3 inframa corazones vtn Juego de santlá, pa sosraoer, con tó fnvp, •j| larm-a de su He3pit;il, (uvijo de desvaí! ios, que tien la garra clwrvá (Je Jias e^racias hum'.uiia'i, (on miseria esasperá. Kse He^itutl, que c-> bl'XWtn alustre de osta zudiá, , que ipue iicir arbuliusj; No lo tie denguna iguar. Tie Je Reina d'E^ ios cítelos 1:\ g-'andeza y majastá, y luS devlna la engüerve pa que re^landesca más; pero más que ló eso ti 3 .ele Ma-are la relumbra. Na e ItijOLsa3 vcstime'ntia'S, más u menos aiihajáj. Tó a la oencilla imoestiiía, por su Hijo ipraicá: La Viigen cartaigenera es un-a M<aere sagra, que no lleva más aoTno que ed de 3u ain>or miaiternai, la Joya de mes vailha, qua a Ja f,cexma. pue ornan B 01198 '3quí del partió» que tie pa ser venera, es ese, «amor santo y puio», qti? calor ide nuarere OEL Cuando a Ja Virgen se i«2ia, se le ioe «Maere snáórA»^ m wí^^^r mTM d^ §mT%^ h iSAl.VE, MARÍA! Tu pueblo rinde su cofazón ante tu imagen | purísimas y haciendo con eUns en un ferviente voto de admiración y de cariño. el ramo de sus estrofas», te las 1^ mano del artista moldearála corona que ha decefiir tuegre| ofrecerá, recogidas todas con pa quí! dtíl hijo reciba con cariñoj la ¡implora. Esta, abrazando a iu Hijo, cíolorosa y apena, ñtorga h coiíAanza de ser !a Maere busca. con ¿I ilijj en el reg.iza, i a quien centftTípIa ambu^tiá, de ver ;jpai;á una vía, yn sus entrañas forma, e.' el cu;idro «j toa> las madres on el s.^tíTM: cíal hotfar, con U) el ,;qiíc'l ú'O yrandoz.n, rfue lie ?! proem.'i rncerr.-'i. Por eso M-si^ Viraren es, niá'r. que Pt;;y;i', MMí'.e •¿^n^¿i Á fat. macTi»^ st- idrolala. Por e-^o v.ytd iOr'.'intíi. t n ese vnesmo rB^jzo, -. que ei Devino Hijo osíá, enciíentran t^aior mafprno los ios hijos, que a vlla van '.n busca dj los cxínvueioi, que eseciSj su penar. L2.S miaeres cartageneras, atando naco argún zagal, en intóell.f u asciapul.irío, ((ue pa jl rom;ilu> t*^ is'uar, •in el ipechiquíD del hijo ponen la Imájtín Stig;.'!, V van íciéndol(í- Mm-iifo, al enjtín;íllü a re^.ir; Fsla es iii maere (a-nbJén. Kfla que hermosa. Resala. Quiéla siempre más que a mi, que eso ct>los no me dá. Dtí esa TTioa sacen hombras, con la fé bien agarra di que ti=n dos maeres güena que por T:lits velarán. Hay preso.ias zcquetonias, que icen que ,no cresh en ná. Como sea cártaigenero, cneé en la Virgen Caciá, y dá pCí- ©lid su sangre, caso e tantila que dar. ICje mar, qee iu aliaje besa iais t'raás de su artar, está formuló por las lágrimas vertías sn su rezar. Mientras Cfi).'tagena tenga su Vingen de Oariá, tendrá la vertú con Ola de l<a cristi'ana pJfeú, y no habrá esampa.raos en fa miseria saciar. • •• • PASCUAL MARTÍNEZ gla frente y el soplo divino de la inspiración culminará en la obra; pero en el fulgor vivisimn de sus destellos, cuando la luz se quiebre en el esplendor de las joyas y sea como un arco iris celestial y único, el lirio blanco de tu frente destacará la luz de su pureza. Pulsando el corazón como una lira, te escribirá él poeta sus canciones; cantos de amor de un alma que suspira, cantos de fe» de anháos, de emocione.s. El n ás galano de los romanceros, cortará de su jardín romántico las flores más un rayo de luna; pero cuando llegue hasta tu trono la música hablada del poeta» y ascienda hasta tu Imagen el místico murmullo de sus versos, el divino poema de tus lágrimas hará enmudecer al Juglar. ¡Que por grande que sea ía ternura. que el corazón en su caatar exhale, no habrá ternura igual a tu ternura, no habrá dolor que a tu dolor se iguale! £1 pueblo todo elevará sus preces y el alma popular, radiante en la satisfacción del más puro de sus ideales, de-^ bordará et tesoro de sus sentimientos en una ofrenda unánime; y con los suspiros de to^ dos los pechos, con las ocacíone^ de todos los labios, con la fe de lodcs los coraíones, con la gratitud de todos tus nljos. se mezclarán los aromas de las itores, las melodías soñadoras re las músicas, la lu¿ del .sol y el beso de la brisa marina, L.a c.iioción subfime del mn* mentó, electrizará a iodos los cartagenercs y en la exaltación de sus amores, estallarán los vítores, meciéndose en el espa lio ccmo una bandera espiritual y simbólica; pero Tú, secrujtás mostrando ante las trentes la eirxruencla de tu an^or humanamente divino en' el sacrificio de (u Hijo, mirando en la palidez rxangUe de su cuerpo yacente, las huellas del marlirjo por todas nuestras culpas. ¡iü m Pasarán lo5 días y pasará el Cítriejo de las grandes fastas ^onmemurativas; se mustiarán las flores, se olvidarán las musicas, se acallarán los vítores y se apagará el esplendor de !as su ntuosidades.Canagena^ habrá escrito la más bella página sentimental dtíl libro de su historia. Y cuando en el solemne silencio de tu templo, dame el snllozD de una madre, que acude a Ti para Implorarte el teSOTO de vida de su hijo: cuando mires, a tus divinos pies postrado, todo el dolor de la angustia, como un desgarrar de las entradas rotas, como m desfallecer del corazón partido, dando el ejemf^ de jiledad sublime levantarás tus ojos hasta el cielo, y a cambio del d<H lor de aquella madre ofneicerás propicia tu martirio, ahondándote en el pecho los poílaies de tus SIETE DOLORES. , A. SOLER MAMZ:A!NAIfeS I' '1 rñ