editorial - Silifrance

Transcripción

editorial - Silifrance
www.sebbin.com
N°4
(
(
(
Septiembre 2012
L’expander
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires Sebbin
(
EDITORIAL
de Anne-Caroline d’Ursel, Business Unit Manager Benelux
Para el Groupe Sebbin, este
año 2012 constituirá un punto
de inflexión. Tras una próspera
reactivación que comenzó en
2010, ha llegado el momento
de la reorganización. Desde el
1 de enero de 2012, en Sebbin
nos hemos fijado el objetivo de
imponer de forma sólida nuestra
marca y la calidad de nuestros
implantes en todo el mundo.
Este es un desafío que comienza
a tomar formar en Europa y, más
concretamente, en Benelux. Se trata de la primera
región en la que el Groupe Sebbin se ha implantado
de forma directa y donde los profesionales de la
cirugía estética y reconstructiva han conferido a
nuestro joven equipo una acogida especialmente
calurosa y abierta. Con una población de más de 27
millones de habitantes y cerca de 1000 médicos, la
cirugía estética y reconstructiva se ha convertido allí
en un mercado muy dinámico. Esta es la razón por
la que el Groupe Sebbin desea poner a disposición
de sus socios en Benelux una gama de productos
innovadores y un servicio premium ejemplar en lo
referente a la capacidad de reacción, a la atención
y a la proximidad con sus clientes. Esta cuarta
edición de L’Expander pretende expresar todo eso:
esperamos que su lectura le permitirá una vez más
profundizar en sus conocimientos científicos acerca
de asuntos de la actualidad quirúrgica. No dude
en dirigirnos sus comentarios e ideas. Estaremos
encantados de tenerlos en cuenta para las próximas
ediciones.
Disfrute de la lectura y hasta pronto.
(
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
(
N°4/ Septiembre de 2012
CARTA
del Doctor Julien Glicenstein
El ser humano siempre ha tratado de descubrir la fuente de la eterna juventud. Recuperar
un aspecto joven es la respuesta que, cada vez más, esperan nuestros pacientes. Al abordar
la problemática que representa la cirugía de los excesos cutáneos en esta cuarta edición de
L’Expander, hemos querido apuntarnos a esta tendencia. Para ello, le hemos pedido al Dr. JeanFrançois Pascal y al Dr. Claude Le Louarn que nos hicieran partícipes de sus reflexiones y del
fruto de su experiencia en este campo.Asimismo, en esta edición, encontrará nuestros resúmenes
científicos de las últimas semanas, así como la continuación de nuestra serie histórica…
Í n d i c e
N°4
Una asociación tecnológica con Crisalix ............................................................................. pág.2
Cirugía de los excesos cutáneos: los grandes principios ................................................. pág.3
Abdominoplastia e injerto renal ........................................................................................... pág.6
Nuestra industria desde el punto de vista de los senadores ............................................ pág.6
El melanoma de Dubreuilh: ¿cuál es su tratamiento? ......................................................... pág.7
¿Ha operado usted ya a algún miembro de su familia? ...................................................... pág.7
Inyecciones faciales y ceguera ................................................................................................ pág.8
Lipofilling, células madre y cáncer de mama ....................................................................... pág.8
Toxina botulínica e hiperhidrosis ......................................................................................... pág.9
Enfermedad tromboembólica y abdominoplastia ................................................................. pág.9
Ayer/Hoy: Blefaroplastia por vía conjuntival ................................................................. pág.10
Flashback sobre la historia de los injertos:
Jacques-Louis Reverdin y los injertos epidérmicos ..............................................................pág.11
(
Una asociación tecnológica con
Con el inicio de su asociación
con Crisalix en Francia, el Groupe
Sebbin ofrece ahora a sus clientes
el simulador Crisalix, el primer
simulador que, mediante una interfaz
web, integra las propiedades físicas
del cuerpo. Crisalix permite simular
la representación gráfica en 3D de
un aumento mamario y, de este
modo, da la posibilidad de optimizar
la satisfacción de las pacientes.
2
(
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
(
N°4/ Septiembre de 2012
Los invitados de
ha sido luchar contra estos dos fenómenos. Hacía falta
idear un medio para retirar la materia (cutáneograsa) sin
cortar los elementos vitales, pero que también movilizara
la piel sin despegarla.
(
L’expander
LOS GRANDES PRINCIPIOS
En todas nuestras operaciones, ponemos en práctica
rigurosamente tres grandes principios:
A. Limitar el despegamiento al mínimo estrictamente
necesario (e incluso no hacerlo si es posible).
Doctor Jean-François Pascal
Esta es una decisión que debe tomarse antes de la
operación. El despegamiento es un gesto agresivo para los
tejidos y que acarrea muchas consecuencias. Corta una
parte importante de la vascularización y de la inervación,
crea un espacio muerto y pone en marcha fenómenos de
cicatrización y, por consiguiente, de inflamación. Vamos a
ver como podemos hacerlo de otro modo, conservando
la eficacia operativa.
En primer lugar, ¿para qué sirve despegar los tejidos?
La respuesta es doble:
- para movilizarlos,
- so para dejar al descubierto una estructura sobre la
que queremos actuar (pliegue aponeurótico, por ejemplo).
Doctor Claude Le Louarn
CIRUGÍA DE LOS
EXCESOS CUTÁNEOS:
LOS GRANDES PRINCIPIOS
Analicemos y comprendamos la lógica de las adhesiones
tisulares: el cuerpo lucha contra la pesadez bloqueando el
descenso tisular mediante numerosas adhesiones entre la
cara profunda de la dermis y los tejidos subyacentes. Esto
resulta lógico, pues si no, a partir de cierta edad habría un
exceso de piel en los tobillos, enroscada como un calcetín
viejo. Con la edad, la piel se estira y estas adhesiones se
ponen tensas y se vuelven visibles, formando numerosas
grietas sobre la piel, como, por ejemplo, en las nalgas o
en los muslos.
PREÁMBULO
La extracción de grasa (liposucción) tiene consecuencias
más bien simples. Por el contrario, la extirpación de piel
(dermolipectomía) es conocida por sus complicaciones,
que además aumentan en el caso de un adelgazamiento
masivo o de obesidad: seromas, necrosis cutáneas o grasas,
infecciones, queloides y, finalmente, resultados poco
satisfactorios y una experiencia traumática tanto para el
cirujano como para el paciente. Esta mala reputación es
la responsable de numerosos abandonos terapéuticos y
de que muchos equipos (especialmente los anestesistas)
se nieguen a practicar esta operación. Al cotejar los casos
de numerosos pacientes, hemos tratado de elaborar
nuevas opciones técnicas. Todas las investigaciones
se fundamentan en dos ideas principales: evitar las
complicaciones y mejorar los resultados. Resumiendo
el problema en pocas palabras: retirar la piel en bloque
con tejido subyacente supone la sección de grandes
vasos linfáticos y arteriovenosos cuya supuración rellena
los espacios muertos creados por los despegamientos
cutáneos. Dicho de otro modo: ¡el cirujano suministra el
líquido y el recipiente que se llena!
Numerosas grietas que materializan las adhesiones cutáneas
visibles solamente de pie.
Por lo tanto, el objetivo de todos nuestros avances técnicos
3
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
Los tejidos se pueden mover de forma natural. Ejemplo:
no es necesario un despegamiento lateral para realizar
una plastia abdominal vertical.
Para que quede aún más claro, tomemos como ejemplo la
operación de las caras internas de los muslos con cicatriz
vertical.
Estas grietas siempre han sido analizadas por las pacientes
y las esteticistas como consecuencia de la celulitis. Varios
institutos y demás las tratan como tales con resultados
prácticamente nulos, puesto que no son un problema de
grasa, sino un estiramiento de la piel. La movilidad de los
tejidos se bloquea así hacia la parte baja, pero nunca hacia
la parte alta ni horizontalmente. En una plastia abdominal,
si respetamos la lógica de estas adhesiones, deberíamos
levantar los tejidos de la parte supraumbilical y bajar los
de la parte subumbilical. Esto supondría hacer 2 cicatrices
(una submamaria y una suprapúbica), lo cual no resulta
deseable en los casos clásicos.Por nuestra parte,preferimos
realizar una cicatriz baja, porque es más fácil de ocultar
y porque el exceso cutáneo máximo es subumbilical.
Sin embargo, esta elección estratégica tiene bastantes
dificultades y debemos hallar procedimientos para:
- no cortar los troncos linfáticos inguinales principales,
- despegar muy poca piel, al tiempo que se retensa la
región epigástrica y la de los rebordes costales.
Este es el desafío de la plastia abdominal que se resuelve
mediante la HSTA: abdominoplastia a alta tensión
superior. Por eso, el despegamiento es necesario en la
plastia abdominal para liberar la adhesión del rafe medio
supraumbilical: hace falta despegarlo si pretendemos
bajar los tejidos (principio del despegamiento en túnel).
Sin embargo, lateralmente, el pseudo-despegamiento de la
liposucción también es tan eficaz como un despegamiento
clásico. La diferencia reside en que, en el primer caso, todos
los vasos, especialmente los linfáticos, quedan intactos y
no hay ninguna verdadera agresión. Este también es el
caso en la cara externa de los muslos para la adhesión
lateral entre el ala ilíaca y el trocánter que limita la subida
de la piel sobre el muslo.
Fuera de esas zonas, no hay ninguna adhesión fibrosa que
impida una movilización tisular determinada para realizar
una tracción hacia arriba u horizontalmente.
Exceso cutáneo de las caras anteriores e internas de los
muslos. Asimismo, son visibles numerosas adhesiones.
Los tejidos se pueden mover de forma natural en torno al miembro.
Por eso, no es necesario ningún despegamiento para tratar esa región.
Los tejidos se pueden mover de forma natural en torno al
miembro. Además, una liposucción profunda de las caras
anteriores las moviliza aún más.Y entonces, ¿por qué realizar
un despegamiento? Lo más habitual es que se haga solamente
como acto reflejo quirúrgico, porque pensamos que
retiraremos más piel de este modo. Sin embargo, la ausencia de
despegamiento elimina los derramamientos, las necrosis y las
infecciones, y permite evitar los drenajes. Este razonamiento
también se puede aplicar a los brazos, la espalda, etc. En la
zona de las nalgas, tampoco es necesario un despegamiento
para subir la piel, salvo si colocamos un fragmento adiposo:
únicamente hay que realizar el despegamiento cuando exista
una verdadera razón para hacerlo.
No hay ninguna adhesión que impida volver a poner la piel en tensión
hacia arriba, por lo que no es necesario ningún despegamiento.
4
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
ras de la dermis. Este es el principio de separación de la
extracción de grasa y de la de la piel: en resumen, se retira
la materia cutánea y grasa sin cortar ningún vaso. Las
consecuencias positivas son múltiples: más precisión en la
apreciación del largo de la resección (lo cual condiciona
todo el resultado) puesto que no queda grasa alguna en
los dos bordes, sin despegamiento, sin necrosis, con una
fácil cicatrización...
La dificultad de la operación reside en hacer un buen
cálculo preoperatorio de la longitud de los tejidos con
los que se trabajará. Efectivamente, esta superficie se
aspira de forma tan íntegra que no es cuestión de guardar
la piel agredida de esa manera. No debe olvidarse que,
a continuación, se estirará y se suturará la piel restante
de cada lado de la zona de resección. Por eso, no debe
sufrir ninguna agresión ni ningún despegamiento para
poder obtener una máxima calidad de cicatrización. Por
otra parte, cuanto más completa es la liposucción, menos
tensión es necesaria para unir los bordes y mejor calidad
presenta la cicatriz.
Si analizamos las representaciones anatómicas de los
vasos linfáticos (SAPPEY 1874), constatamos que las
nalgas son el foco de la anastomosis entre los vasos de
origen inguinal e isquiático. Hay en ellas una tierra de nadie
linfática: dicho de otro modo, solamente hay presencia de
vasos de pequeño calibre. Como consecuencia, podemos
cortarlos sin riesgo de supuración. No obstante, no
existe justificación para despegar las nalgas o las caras
externas del muslo para conseguir elevar mejor la piel,
pues no hay nada que se oponga a la movilización hacia
arriba aparte de la gravedad; en todo caso, no existe
ninguna adhesión fibrosa que haya que cortar.
El mayor riesgo se encuentra en la zona de los brazos.
La cara interna es rica en grandes vasos linfáticos, y
se entorpece fácilmente la circulación de retorno. La
sección de los vasos linfáticos puede producir “brazos
gruesos” crónicos exactamente igual que tras una
limpieza ganglionar axilar. En resumen, la liposucción
es una herramienta muy útil, pues permite reducir
volúmenes y movilizar los tejidos sin despegarlos y,
por ello, sin cortar elementos vitales (vasos y nervios).
El único inconveniente es la prolongación del tiempo
operatorio. Y una regla de oro es que en ningún caso
se debe combinar una liposucción agresiva con un gran
despegamiento. Esta combinación comporta un gran
riesgo de necrosis tisular. ¡Será necesario elegir!
C. Cerrar nuevamente los espacios muertos.
La definición de espacio muerto es todo aquel espacio,
virtual o no, creado mediante una acción quirúrgica. Si
no se vuelven a cerrar, el cuerpo tiende a rellenarlos
mediante supuración de las superficies, sobre todo si:
- la hemostasis no es perfecta,
- se han cortado los grandes vasos linfáticos.
B. Respetar los troncos linfáticos principales.
En cada operación, nos viene bien saber cómo se
presenta la anatomía de los troncos linfáticos principales.
Para ello, es esencial contar con buenos libros de
anatomía. El principio siempre es el mismo: el volumen
de la zona de los troncos linfáticos principales se refina
mediante liposucción profunda (por lo tanto, bajo la
fascia superficialis). Dejamos así una telaraña fibrosa
lipoaspirada que ya no tiene volumen y en la que todos
los vasos y otras estructuras vitales quedan intactos.
A continuación, habrá que retirar quirúrgicamente la
capa de grasa suprafascial y así se resuelve el problema.
Nótese asimismo que en un momento dado es necesario
cortar los vasos, pero el principio básico es que dicha
acción tendrá siempre lugar en una región en la que
estén ramificados, es decir, que sean de pequeño calibre.
En la zona de los miembros, los brazos y las caras
internas de los muslos, el problema es un poco más sutil.
Efectivamente, hay troncos linfáticos incluso en la grasa
superficial cuya sección puede acarrear consecuencias
catastróficas. Prosiguiendo con nuestra lógica de no
agresión, aplicamos el mismo principio que a la capa
de grasa superficial: reducción del volumen mediante
liposucción y conservación de la telaraña fibrosa que
carece de espesor. Finalmente, se aspira la grasa en su
totalidad entre la aponeurosis y la piel. A continuación, no
queda más que retirar la finísima capa de piel pasando a
Los movimientos del cuerpo provocan un rozamiento
de las superficies entre ellas que, como es fácilmente
comprensible, no favorece precisamente a la cicatrización.
Por esta razón, es necesario volver a cerrar cualquier espacio
muerto creado de forma quirúrgica almohadillándolo cada
2 ó 3 cm. Este es el tercer pilar de la prevención contra
derramamientos: cuanto más se cierran los espacios
muertos, menos complicaciones hay. La técnica parece
simple, aunque, de hecho, lo que hace es complicar la
actuación del cirujano, que tendrá que anticipar la posición
de los puntos de almohadillado con respecto a los
desplazamientos cutáneos. Además, se trata de una tarea
adicional que es necesario realizar en operaciones ya de
por sí largas. No obstante, la recompensa es enorme: no
habrá derrame ni drenaje, puesto que, si se cumplen los
principios de limitar los despegamientos y el corte de los
troncos linfáticos principales, ¡no habrá nada que drenar!
Es necesario almohadillar en todo aquel lugar en el que sea
posible y, entre otros, bajo las zonas de sutura. Esta acción
descrita por Baroudi tiene otra ventaja: podremos tirar
ligeramente más colocando un poco de tracción sobre
cada punto. Y con respecto a la inutilidad de los drenajes:
la cirugía plástica sin drenajes es posible y conlleva una
inmensa comodidad para los pacientes y disminuye
drásticamente la duración de su hospitalización.
5
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
injerto. Esto es lo que los autores han propuesto sabiendo
que esta intervención tendrá que realizarse en condiciones
difíciles.Además de los riesgos propios de la abdominoplastia
(infección, desunión cutánea, etc.), hace falta tener en cuenta
el panorama específico (pacientes sometidos a diálisis con
anticoagulantes, necesidad de modificar el trazado de la
incisión del injerto renal para no dejar una banda cutánea
que pueda necrosarse, etc.). Los autores han operado a 9
pacientes (6 mujeres y 3 hombres), de los cuales 4 eran
diabéticos con un IMC medio de 31 kg/m2. El peso medio
del fragmento resecado era de 3 kg, la duración de la
hospitalización de 1 a 3 días y se practicó la diálisis el día
antes y el día después de la intervención. Se interrumpió la
heparinización hasta la retirada de los drenajes. Cuando se
completó la cicatrización, se remitió a los pacientes a un
centro de transplante renal. Se les practicó el transplante
por la zona lateral de la cicatriz de la abdominoplastia.
Recordemos que el primer injerto renal lo llevó a cabo un
cirujano plástico en Boston (Joseph Murray, nacido en 1919)
en 1954, lo que le valió el Premio Nobel de Medicina en
1990.
Colocar un drenaje es un gesto agresivo que puede provocar
una cierta yatrogenicidad: dolores y sagrado durante la
extracción, especialmente si la enfermera no retira el vacío
con el pretexto de aspirar todavía más líquido, y sepsis. Los
pacientes se sienten atemorizados por los drenajes, puesto
que representan un importante factor de estrés para ellos.
Por lo tanto, ya no utilizamos ningún drenaje desde hace más
de 10 años y no lo hemos echado de menos en ningún caso.
Es perfectamente deseable drenar una cavidad natural como
una articulación o la cavidad peritoneal, por ejemplo. Por el
contrario, es absurdo drenar un espacio muerto que ya no
existe porque se ha vuelto a cerrar, sobre todo cuando el
vacío genera una autoproducción por aspiración de los tejidos
intersticiales. Muchos cirujanos emplean drenajes únicamente
por motivos médico-jurídicos, debido a que el diagnóstico
de hemorragia se hace más rápido. Sin embargo, un drenaje
no evita en absoluto que se produzcan hemorragias y el
cirujano tiene perfectamente otros medios a su alcance para
hacer el diagnóstico, empezando por los numerosos indicios
clínicos. En caso de hemorragia, podemos preguntarnos si el
drenaje aumentará la cantidad de sangre perdida, puesto que
el vacío aumenta la velocidad de aspiración. En conclusión, es
esencial respetar los principios generales que transforman la
recuperación postoperatoria.Es a este precio al que se liberarán
los obstáculos que afectan a la cirugía de dermolipectomías.
Todo el equipo (anestesistas y resto del personal sanitario) que
recibe al paciente durante la fase postoperatoria registrará la
diferencia y tendrá menos dificultad para gestionar esta fase.
Panniculectomy in preparation for renal transplantation.
Kuo, J. E. et al., Plast Reconstr Surg 2011; 128: 1236-40.
Nuestra industria
desde el punto de vista
de los senadores
(
Bibliografía
1. Pascal J.F., Le Louarn Cl. Remodeling bodylift with high
lateral tension, Aesth Plast Surg 26 : 223-230, 2002.
2. Le Louarn Cl, Pascal J.F., The concentric medial thigh, Aesth
Plast Surg 28 ; 20-23, 2004.
3. Pascal J.F., Le Louarn Cl. Brachioplasty Aesth Plast Surg 29 :
1-8, 2005.
4. Le Louarn Cl., Pascal J.F.,The high superior tension : evolution
of lipoabdominoplasty, Aesth Plast Surg 34 : 773-781, 2010.
Con el objetivo de preparar el informe de sus labores
senatoriales, los senadores visitaron nuestra fábrica de
prótesis mamarias y pudieron constatar el rigor de las
prácticas industriales de nuestro laboratorio. Para la
Sra. Chantal Jouanno: “La mayoría de las propuestas de la
misión del Senado proviene de los propios fabricantes que
desean que se distinga claramente entre las buenas y las
malas prácticas”.
(
AbdominoplastiA
e injerto renal
En Estados Unidos (y muy pronto en Francia), la obesidad
plantea un verdadero problema social. Los pacientes
aquejados de insuficiencia renal en fase terminal y que deben
someterse a un injerto renal normalmente son portadores
de un abdomen pendular. El pliegue inguinal-púbico es un
depósito de bacterias difícil de destruir y representa una
fuente de complicaciones infecciosas para el injerto renal. Es
tentador realizar una abdominoplastia antes de colocar el
Chantal Jouanno, Senador de París
y Olivier Pérusseau, PDG del Groupe Sebbin.
6
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
EL MELANOMA DE
DUBREUILH:
¿CUÁL ES SU TRATAMIENTO?
(
a efectos diagnósticos. En general, se biopsian las zonas
oscuras o en relieve. El tratamiento quirúrgico del léntigo
maligno es difícil, pues normalmente suelen ser lesiones
de gran tamaño, mal delimitadas y que están ubicadas en
el rostro. El margen de «seguridad», una escisión de 5 mm,
parece insuficiente para evitar reincidencias. La técnica
de Mohs - poco utilizada en Francia - resulta polémica
por sus dificultades de interpretación histológica.
Los autores del presente artículo prefieren decantarse
por las escisiones por etapas tras la delimitación de las
lesiones con luz de Wood, y seleccionando un margen de
5 a 10 mm en función de la profundidad de la lesión. La
zona marginal se divide en 4 cuadrantes. Los resultados
del examen se conocen pasadas 24 horas. La escisión se
repite hasta que exista una certeza total de la ausencia
de lesión infraclínica. La pérdida de sustancia no se cubre
hasta ese momento y se realizará mediante injerto o
colgajo.
El melanoma de Dubreuilh (léntigo maligno) representa
del 4 al 15% de los melanomas y, sobre todo, ocupa la
cabeza y el cuello en personas de edad avanzada en las
zonas expuestas al sol. Su gravedad, como la de otros
melanomas, está vinculada a la profundidad de penetración
de la piel. Las formas in situ tienen un pronóstico
excelente, pero aquellas en las que existe una invasión
dérmica profunda pueden metastatizar. El diagnóstico
clínico resulta difícil. La lesión suele estar extendida, a
veces es de color pálido y otras de color marrón oscuro,
que recuerda a una queratosis seborreica. Los sucesivos
exámenes al paciente con fotografías, la dermatoscopia,
permiten realizar el diagnóstico. Las grandes dimensiones
de la lesión y su ubicación dificultan su exéresis completa
Melanoma of the lentigo maligna subtype Diagnostic
challenge and current treatment paradigma. Mc Guire LK
and al Plast Reconstr Surg 2012; 129 : 288e-299e.
¿Ha operado usted
ya a algún miembro de su familia?
(
Sumner Slavin y Robert Goldwyn (el exredactor jefe de Plastic Reconstructive Surgery cuyos editoriales cargados de
ironía y humor eran verdaderas pequeñas maravillas), ambos cirujanos plásticos, y la señora Slavin, psicóloga, enviaron a los
miembros de la American Society for Aesthetic Plastic Surgery, un cuestionario que respondieron 465 de 1513 cirujanos.
El objetivo de este estudio era saber si los cirujanos habían practicado o practicarían una intervención quirúrgica estética
a algún miembro de su familia.
Tratar a un familiar plantea problemas éticos, de objetividad y de barrera afectiva a la hora de operar, entre otras cosas.
No obstante, la inmensa mayoría de los cirujanos interrogados (88%) afirmaron que operarían o habían operado (84%)
a algún miembro de su familia, muy frecuentemente a su mujer.
Las motivaciones de los profesionales de la cirugía plástica son interesantes.Algunos afirmaban que no pudieron negarse
a las insistentes peticiones de su familiar. Sin embargo, la razón principal mencionada fue que ellos eran los más aptos y
competentes (67%) para llevar a cabo la operación, el 34% consideraba que era una solución práctica ¡y el 8% aseguraba
que así conseguían ahorrar!
Estos cirujanos llevaron a cabo todo tipo de intervenciones de cirugía estética:rinoplastia,lifting,liposucción,intervenciones
mamarias y abdominales.
El 94% de las intervenciones se desarrollaron sin complicaciones y el 99% de los cirujanos consideran que sus pacientes
quedaron satisfechos.
A family operation : plastic surgeons who perform aesthetic surgery on spouses or other family members Slavin S. and al Plast
Reconstr Surg 2010 ; 125, 1018-23.
7
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
(
INYECCIONES FACIALES Y CEGUERA
Todos aquellos médicos y cirujanos estéticos que inyectan
grasa y otras sustancias de relleno en el rostro deberían leer
este importante estudio. Los autores describen en detalle las
observaciones realizadas a 32 pacientes que se han sometido
a una inyección facial, 15 de grasa y 17 de otros productos
diferentes (colágeno, silicona, ácido hialurónico y otras
sustancias de relleno como corticoides y parafina) y que han
sido víctimas de una ceguera unilateral.
El lipofilling se llevó a cabo 3 veces en la zona del tercio inferior
del rostro (surco nasogeniano, labios y mentón), 7 veces en el
tercio superior (frente, entrecejo y caballete nasal) y 3 veces en
el tercio medio (mejillas, zona periorbital...). En todos los casos
inmediatamente después de la inyección, se produjo la ceguera
acompañada de un dolor agudo. La ceguera no remitió en
ningún caso, a pesar de los intentos de tratamiento médico.
mejillas y la región temporal. La ceguera fue definitiva en todos
los pacientes excepto en 3. Uno de ellos recuperó la vista 5
minutos después de una inyección de corticoides, el segundo la
recuperó después de un tratamiento de diuréticos y el tercero
recobró la vista tras un tratamiento de corticoides, aunque
con una parálisis óculomotriz y una necrosis cutánea.
Los autores estudiaron la fisiopatología de la ceguera:
trauma vascular, una gran presión que provoca un émbolo a
contracorriente en la arteria oftalmológica y la arteria central
de la retina. Además, consideran que, de momento, no hay
ningún tratamiento que haya demostrado su eficacia y aconsejan
precaución en el momento de la inyección, aspiración antes
de la inyección, aplicación de vasoconstrictores locales, uso de
jeringas de tamaño pequeño, de cánulas de poco calibre y no
afiladas, e inyección lenta y en poca cantidad. Debe evitarse
llevar a cabo la inyección en tejidos “traumatizados” (los
autores desaconsejan realizar un lipofilling durante un lifting).
17 pacientes fueron víctimas de ceguera tras una inyección de
un producto diferente a la grasa. La nariz y el cuero cabelludo
(7 y 3 casos) fueron las zonas de inyección más habituales.
Las otras zonas de inyección fueron la frente, el entrecejo, las
Blindness following cosmetic injections of the face. Lazzeri D.
and al Plast Reconstr Surg 2012, 129 ; 995-1012.
(
LIPOFILLING, células madre
y cáncer de mama
La inyección de grasa en el rostro, los senos y otras partes
del cuerpo es una técnica muy utilizada por los cirujanos
plásticos. Los autores de este artículo - dos cirujanos
plásticos y un investigador de cancerología - se preguntan
por la inocuidad del lipofilling tras una tumorectomía o
una cuadrantectomía. Los estudios más recientes tienden
a demostrar que no existen obstáculos o retrasos en
la detección del cáncer de mama vinculados a las
dificultades de interpretación radiológica. No obstante,
la grasa inyectada no es un producto inerte, sino que
se trata de un tejido metabólico activo que secreta de
forma abundante hormonas, ciptoquinas y otros factores
de crecimiento. La calidad de la grasa como material de
reconstrucción está relacionada parcialmente con la
presencia de células madre mesenquimatosas derivadas
de la grasa mediante un proceso de adipogénesis y de
angiogénesis.
Los autores tratan de responder a varias preguntas
relativas a las células madre mesenquimatosas,
abundantes en el tejido adiposo. Son células que cuentan
con un importante potencial de transdiferenciación y de
secreción de un factor de crecimiento vascular que se
detecta en la proliferación de cánceres y metástasis.
Los modelos experimentales (en ratón) muestran que las
células madre implantadas pueden provocar metaplasia,
displasia y cáncer, y este fenómeno no se ha observado
en seres humanos. Sobre todo, presentan un potencial
de transformación en tejido conjuntivo y de forma más
hipotética en tejido epitelial. Los adipocitos en el tejido
conjuntivo podrían representar un papel de estimuladores
en el cáncer de mama. Los autores piensan que, tras
una tumorectomía o una cuadrantectomía, la inyección
de grasa que contiene células madre mesenquimatosas
pone en peligro de forma inaceptable a las mujeres que
han sido operadas de un cáncer de mama. Esta opinión
será sin duda polémica.
The safety of autologous fat transfer in breast cancer. Lessons
from stem cell biology. Pearl A. and al J. Plast Reconstr Aesth
Surg 2012, 201 ; 65 : 283-8.
8
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
(
Toxina botulínica e hiperhidrosis
La hipersudoración es una anomalía menor, pero que suele
suponer un trastorno para la vida social. Los tratamientos
locales, como los antitranspirantes, deben aplicarse repetidas
veces diariamente y conllevan irritaciones y alergias cutáneas.
Los tratamientos quirúrgicos, como la simpatectomía
torácica endoscópica o la extirpación de las glándulas
sudoríparas axilares, están plagados de complicaciones y no
garantizan la posibilidad de que se produzca una recaída.
La hiperhidrosis localizada, axilar, palmar y plantar, puede
tratarse mediante la toxina botulínica. Esta toxina
inhibe la hipersecreción de acetilcolina y previene la
hiperestimulación de las glándulas ecrinas que son el origen
de la hipersudoración.
Los autores emplean la toxina de tipo A. Los estudios
publicados tras cerca de diez años muestran que reduce
un 75% de la transpiración. Los pacientes sometidos a
tratamiento son aquellos que padecen una hipersudoración
grave con perjuicio para sus actividades cotidianas.
La hiperactividad de las glándulas sudoríparas puede
confirmarse mediante el test de Minoz (untura mediante
una solución de alcohol yodado al 3,5%). Cualquier infección
local supone una contraindicación.
Se diluyen 25 unidades de toxina botulínica en 1 ml de
suero fisiológico, añadiendo ocasionalmente lidocaína.
En la axila, la zona que ha de tratarse se delimita por el
test de alcohol yodado y en función de la zona pilosa.
La inyección se hace con una aguja de 26G o 30G. Son
necesarios 40 puntos de inyección separados 8 mm para
tratar una axila. La aguja se orienta a 45° y penetra la piel 2
mm. Se inyectan 0,05 ml de solución en cada ocasión y son
necesarias 50 U de toxina para una axila.
Las inyecciones en las palmas de las manos y las plantas de
los pies son dolorosas y se pone en práctica una anestesia
de contacto por bloqueo nervioso o por crioanalgesia 15
minutos antes de la inyección. Son necesarias 100 unidades
de toxina para tratar una palma y 150 para la planta del
pie.
Los autores piensan que es un método seguro y eficaz.
Desgraciadamente, la mejora es transitoria (de 6 a 9 meses
de eficacia) y lo dolorosa que resulta esta técnica suele
desanimar a los pacientes a volver a someterse a ella.
Treatment of hyperhidrosis with botulinium toxin. Doft MA
and al Aesth Surg J 2012; 32:238-44.
(
ENFERMEDAD TROMBOEMBÓLICA
y ABDOMINOPLASTIa
Los autores del artículo han operado a 404 pacientes a
lo largo de diez años: 247 abdominoplastias simples con
o sin liposucción, 157 plastias abdominales combinadas
con una intervención estética mamaria o con una
liposucción extendida. En todos los casos, se trataba
de una intervención con transposición umbilical. Todos
los pacientes fueron tratados de forma ambulatoria
(después de 2 a 3 horas en la sala de reanimación) y se
les dio el alta de la clínica el mismo día. La duración de
la intervención fue de 100 minutos de media para los
casos de abdominoplastia aislada y de 140 en los casos
de intervención combinada.
Los autores piensan que el tratamiento autocoagulante
no es necesario si se aplica un protocolo muy estricto:
- uso de medias compresivas y de un dispositivo
de compresión neumática intermitente colocado
antes de la inducción anestésica,
- levantar y caminar de forma precoz unas horas
después de la intervención para evitar dormir
demasiado tiempo en decúbito,
- abdominoplastia con tensión progresiva de la pared
y sin drenaje, pues la retirada del mismo suele ser un
factor de ansiedad postoperatoria,
- mantenimiento de la “normotermia” dejando que los
pacientes lleguen al quirófano con un pijama y un gorro
de quirófano, recubiertos con una manta eléctrica, y
que la temperatura del quirófano sea como mínimo de
24 grados,
- tratamiento antidolor mediante bomba con catéter,
- duración limitada de la operación.
El equipo quirúrgico debe estar especialmente preparado
para que se cumpla con precisión y rapidez cada una
de estas condiciones. La ausencia de tratamiento
anticoagulante está claro que es discutible, pero la
metodología merece tenerse en cuenta.
Venous thromboembolism in abdominoplasty.A comprehensive
approach to lower procedural risk. Somogyi RB and al Aesth
Surg J. 2012 ; 32; 322-31.
9
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
AYER
HOY
Blefaroplastia
por vía conjuntival
En 2008, el informe
del congreso francés
de cirugía plástica tuvo
como tema «la cirugía
estética de los párpados».
En el capítulo dedicado a
«las bolsas», se reservó
una gran parte a la “vía
conjuntival”, cuya técnica
se detalló entonces. En
un comentario, Daniel
Marchac subrayó que esta
Julien Bourguet
técnica la redescubrió
Paul Tessier en los años 70 y que su autor fue
Julien Bourguet en 1928. De hecho, la descripción
de Bourguet la hizo ante la Academia de Medicina
el 25 de noviembre de 1924 y posteriormente se
publicó en 1925 en los archivos francobelgas de
Cirugía. Durante su presentación ante la Academia
de Medicina, Bourguet fue el primero en denominar
“hernias adiposas” a los lóbulos de grasa periorbital
cuyo saliente determinaba la “bolsa”. En primer
lugar, practicó el corte por vía subciliar, pero como
temía que dicha incisión provocara una cicatriz
visible e incluso un ectropión, se le ocurrió realizar
una incisión en el fondo de saco conjuntival. En su
obra “La véritable chirurgie esthétique du visage”
(“La verdadera cirugía estética del rostro”, Plon,
París, 1936), numerosas fotografías ilustran esta
técnica.
Vía de abordaje conjuntival
Visite
Groupe SEBBIN EN lOs SIGUIENTES congrEsOS:
ISAPS (International Society of Aesthetic Plastic Surgery):
del 4 al 8 de septiembre en Ginebra.
IQUAM (International Committee for Quality Assurance,
Medical Technologies and Devices in Plastic Surgery):
del 1 al 4 de noviembre 2012 en Atenas.
Marrakech World Aesthetic Congress - Intensive Course
on Volumetry & Volume Restoration:
los días 9 y 10 de noviembre 2012 en Marrakech.
SOFCPRE (Société Française de Chirurgie Plastique
Reconstructrice et Esthétique, sociedad francesa de
cirugía plástica reconstructiva y estética):
del 19 al 21 de noviembre en Paris.
Resultado:
Antes / Después
10
El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires
(
L’expander
((
N°4/ Septiembre de 2012
(
FLASHBACK
sobre la historia de los injertos
CAPÍTULO IV:
Jacques-Louis Reverdin Y LOS INJERTOS EPIDÉRMICOS
El 8 de diciembre de 1869 en la
Sociedad Imperial de Cirugía de
París, un joven cirujano de los
Hospitales, Felix Guyon, presentó
el “trabajo” de uno de sus internos
de nacionalidad suiza, pero que
había sido nombrado interno de
los Hospitales de París. Guyon se
expresó con precaución delante
de aquella docta congregación:“El
comunicado (...) tiene como tema
una cuestión de patología bastante
común (...), pero que todavía plantea varios puntos oscuros y
que sería interesante aclarar. Se trata de la cicatrización por
segundo intento”. Reverdin había tratado a un hombre de
35 años víctima de un accidente. Se le había desgarrado la
piel del antebrazo izquierdo y la herida resultante cicatrizaba
muy lentamente. Reverdin levantó “una punta de lanceta”
en el brazo derecho del enfermo, dos pequeños colgajos de
epidermis que colocó en mitad de la herida, la cara profunda
sobre las granulaciones, separados uno del otro. Tres días
después, había un nuevo injerto sobre la herida. 10 días más
tarde, los islotes cutáneos se habían expandido y se habían
reunido en una fina placa comparable al ribete epidérmico del
borde de las heridas. Guyon concluyó su exposición indicando
que se estaba realizando un segundo experimento.
Reverdin había llevado a cabo el primer injerto cutáneo en
humanos.
El discurso suscitó una viva discusión entre los cirujanos
presentes, que se mostraban escépticos. Algunos subrayaron
que una única experiencia no significaba nada, otro que el
injerto en realidad era dermoepidérmico y no simplemente
epidérmico, y otros afirmaron que este tipo de intervención
exponía al paciente a una erisipela mortal. Únicamente dos
de los contertulios consideraron que la experiencia resultaba
interesante. Reverdin perseveró y publicó varios años más
tarde, en 1872, un importante estudio clínico y fisiológico
basado en 50 pacientes. A pesar de sus detractores, la idea
de Reverdin se difundió rápidamente por Europa y a partir
de 1870, el inglés Lawson (1831-1903) presentó 3 casos de
injertos cutáneos realizados con éxito.
Jacques-Louis Reverdin (1842-1928) abandonó Francia
después de la guerra francoprusiana de 1870-71, donde se
alistó en el Servicio de Salud francés, y consiguió una plaza de
catedrático de Cirugía en Ginebra.
Próximo episodio: Ollier y los injertos cutáneos autoplásticos.
R e d a c t o r j e fe : D r J . G l i c e n s t e i n / E d i t o r : O u i z a S e b a / D i re c c i ó n a r t í s t i c a : F re e F a c t o r y
L’Expander es una publicación del GROUPE SEBBIN SAS - 39 parc d’activités des Quatre Vents - 95650 Boissy l’Aillerie (Francia).
11
(
(
(
Consulte los próximos números de nuestro boletín
L’EXPANDER, así como los números anteriores (1,
2 y 3), conectándose a su espacio privado en:
www.sebbin.com

Documentos relacionados