editorial - Silifrance
Transcripción
editorial - Silifrance
www.sebbin.com N°4 ( ( ( Septiembre 2012 L’expander El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires Sebbin ( EDITORIAL de Anne-Caroline d’Ursel, Business Unit Manager Benelux Para el Groupe Sebbin, este año 2012 constituirá un punto de inflexión. Tras una próspera reactivación que comenzó en 2010, ha llegado el momento de la reorganización. Desde el 1 de enero de 2012, en Sebbin nos hemos fijado el objetivo de imponer de forma sólida nuestra marca y la calidad de nuestros implantes en todo el mundo. Este es un desafío que comienza a tomar formar en Europa y, más concretamente, en Benelux. Se trata de la primera región en la que el Groupe Sebbin se ha implantado de forma directa y donde los profesionales de la cirugía estética y reconstructiva han conferido a nuestro joven equipo una acogida especialmente calurosa y abierta. Con una población de más de 27 millones de habitantes y cerca de 1000 médicos, la cirugía estética y reconstructiva se ha convertido allí en un mercado muy dinámico. Esta es la razón por la que el Groupe Sebbin desea poner a disposición de sus socios en Benelux una gama de productos innovadores y un servicio premium ejemplar en lo referente a la capacidad de reacción, a la atención y a la proximidad con sus clientes. Esta cuarta edición de L’Expander pretende expresar todo eso: esperamos que su lectura le permitirá una vez más profundizar en sus conocimientos científicos acerca de asuntos de la actualidad quirúrgica. No dude en dirigirnos sus comentarios e ideas. Estaremos encantados de tenerlos en cuenta para las próximas ediciones. Disfrute de la lectura y hasta pronto. ( El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander ( N°4/ Septiembre de 2012 CARTA del Doctor Julien Glicenstein El ser humano siempre ha tratado de descubrir la fuente de la eterna juventud. Recuperar un aspecto joven es la respuesta que, cada vez más, esperan nuestros pacientes. Al abordar la problemática que representa la cirugía de los excesos cutáneos en esta cuarta edición de L’Expander, hemos querido apuntarnos a esta tendencia. Para ello, le hemos pedido al Dr. JeanFrançois Pascal y al Dr. Claude Le Louarn que nos hicieran partícipes de sus reflexiones y del fruto de su experiencia en este campo.Asimismo, en esta edición, encontrará nuestros resúmenes científicos de las últimas semanas, así como la continuación de nuestra serie histórica… Í n d i c e N°4 Una asociación tecnológica con Crisalix ............................................................................. pág.2 Cirugía de los excesos cutáneos: los grandes principios ................................................. pág.3 Abdominoplastia e injerto renal ........................................................................................... pág.6 Nuestra industria desde el punto de vista de los senadores ............................................ pág.6 El melanoma de Dubreuilh: ¿cuál es su tratamiento? ......................................................... pág.7 ¿Ha operado usted ya a algún miembro de su familia? ...................................................... pág.7 Inyecciones faciales y ceguera ................................................................................................ pág.8 Lipofilling, células madre y cáncer de mama ....................................................................... pág.8 Toxina botulínica e hiperhidrosis ......................................................................................... pág.9 Enfermedad tromboembólica y abdominoplastia ................................................................. pág.9 Ayer/Hoy: Blefaroplastia por vía conjuntival ................................................................. pág.10 Flashback sobre la historia de los injertos: Jacques-Louis Reverdin y los injertos epidérmicos ..............................................................pág.11 ( Una asociación tecnológica con Con el inicio de su asociación con Crisalix en Francia, el Groupe Sebbin ofrece ahora a sus clientes el simulador Crisalix, el primer simulador que, mediante una interfaz web, integra las propiedades físicas del cuerpo. Crisalix permite simular la representación gráfica en 3D de un aumento mamario y, de este modo, da la posibilidad de optimizar la satisfacción de las pacientes. 2 ( El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander ( N°4/ Septiembre de 2012 Los invitados de ha sido luchar contra estos dos fenómenos. Hacía falta idear un medio para retirar la materia (cutáneograsa) sin cortar los elementos vitales, pero que también movilizara la piel sin despegarla. ( L’expander LOS GRANDES PRINCIPIOS En todas nuestras operaciones, ponemos en práctica rigurosamente tres grandes principios: A. Limitar el despegamiento al mínimo estrictamente necesario (e incluso no hacerlo si es posible). Doctor Jean-François Pascal Esta es una decisión que debe tomarse antes de la operación. El despegamiento es un gesto agresivo para los tejidos y que acarrea muchas consecuencias. Corta una parte importante de la vascularización y de la inervación, crea un espacio muerto y pone en marcha fenómenos de cicatrización y, por consiguiente, de inflamación. Vamos a ver como podemos hacerlo de otro modo, conservando la eficacia operativa. En primer lugar, ¿para qué sirve despegar los tejidos? La respuesta es doble: - para movilizarlos, - so para dejar al descubierto una estructura sobre la que queremos actuar (pliegue aponeurótico, por ejemplo). Doctor Claude Le Louarn CIRUGÍA DE LOS EXCESOS CUTÁNEOS: LOS GRANDES PRINCIPIOS Analicemos y comprendamos la lógica de las adhesiones tisulares: el cuerpo lucha contra la pesadez bloqueando el descenso tisular mediante numerosas adhesiones entre la cara profunda de la dermis y los tejidos subyacentes. Esto resulta lógico, pues si no, a partir de cierta edad habría un exceso de piel en los tobillos, enroscada como un calcetín viejo. Con la edad, la piel se estira y estas adhesiones se ponen tensas y se vuelven visibles, formando numerosas grietas sobre la piel, como, por ejemplo, en las nalgas o en los muslos. PREÁMBULO La extracción de grasa (liposucción) tiene consecuencias más bien simples. Por el contrario, la extirpación de piel (dermolipectomía) es conocida por sus complicaciones, que además aumentan en el caso de un adelgazamiento masivo o de obesidad: seromas, necrosis cutáneas o grasas, infecciones, queloides y, finalmente, resultados poco satisfactorios y una experiencia traumática tanto para el cirujano como para el paciente. Esta mala reputación es la responsable de numerosos abandonos terapéuticos y de que muchos equipos (especialmente los anestesistas) se nieguen a practicar esta operación. Al cotejar los casos de numerosos pacientes, hemos tratado de elaborar nuevas opciones técnicas. Todas las investigaciones se fundamentan en dos ideas principales: evitar las complicaciones y mejorar los resultados. Resumiendo el problema en pocas palabras: retirar la piel en bloque con tejido subyacente supone la sección de grandes vasos linfáticos y arteriovenosos cuya supuración rellena los espacios muertos creados por los despegamientos cutáneos. Dicho de otro modo: ¡el cirujano suministra el líquido y el recipiente que se llena! Numerosas grietas que materializan las adhesiones cutáneas visibles solamente de pie. Por lo tanto, el objetivo de todos nuestros avances técnicos 3 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 Los tejidos se pueden mover de forma natural. Ejemplo: no es necesario un despegamiento lateral para realizar una plastia abdominal vertical. Para que quede aún más claro, tomemos como ejemplo la operación de las caras internas de los muslos con cicatriz vertical. Estas grietas siempre han sido analizadas por las pacientes y las esteticistas como consecuencia de la celulitis. Varios institutos y demás las tratan como tales con resultados prácticamente nulos, puesto que no son un problema de grasa, sino un estiramiento de la piel. La movilidad de los tejidos se bloquea así hacia la parte baja, pero nunca hacia la parte alta ni horizontalmente. En una plastia abdominal, si respetamos la lógica de estas adhesiones, deberíamos levantar los tejidos de la parte supraumbilical y bajar los de la parte subumbilical. Esto supondría hacer 2 cicatrices (una submamaria y una suprapúbica), lo cual no resulta deseable en los casos clásicos.Por nuestra parte,preferimos realizar una cicatriz baja, porque es más fácil de ocultar y porque el exceso cutáneo máximo es subumbilical. Sin embargo, esta elección estratégica tiene bastantes dificultades y debemos hallar procedimientos para: - no cortar los troncos linfáticos inguinales principales, - despegar muy poca piel, al tiempo que se retensa la región epigástrica y la de los rebordes costales. Este es el desafío de la plastia abdominal que se resuelve mediante la HSTA: abdominoplastia a alta tensión superior. Por eso, el despegamiento es necesario en la plastia abdominal para liberar la adhesión del rafe medio supraumbilical: hace falta despegarlo si pretendemos bajar los tejidos (principio del despegamiento en túnel). Sin embargo, lateralmente, el pseudo-despegamiento de la liposucción también es tan eficaz como un despegamiento clásico. La diferencia reside en que, en el primer caso, todos los vasos, especialmente los linfáticos, quedan intactos y no hay ninguna verdadera agresión. Este también es el caso en la cara externa de los muslos para la adhesión lateral entre el ala ilíaca y el trocánter que limita la subida de la piel sobre el muslo. Fuera de esas zonas, no hay ninguna adhesión fibrosa que impida una movilización tisular determinada para realizar una tracción hacia arriba u horizontalmente. Exceso cutáneo de las caras anteriores e internas de los muslos. Asimismo, son visibles numerosas adhesiones. Los tejidos se pueden mover de forma natural en torno al miembro. Por eso, no es necesario ningún despegamiento para tratar esa región. Los tejidos se pueden mover de forma natural en torno al miembro. Además, una liposucción profunda de las caras anteriores las moviliza aún más.Y entonces, ¿por qué realizar un despegamiento? Lo más habitual es que se haga solamente como acto reflejo quirúrgico, porque pensamos que retiraremos más piel de este modo. Sin embargo, la ausencia de despegamiento elimina los derramamientos, las necrosis y las infecciones, y permite evitar los drenajes. Este razonamiento también se puede aplicar a los brazos, la espalda, etc. En la zona de las nalgas, tampoco es necesario un despegamiento para subir la piel, salvo si colocamos un fragmento adiposo: únicamente hay que realizar el despegamiento cuando exista una verdadera razón para hacerlo. No hay ninguna adhesión que impida volver a poner la piel en tensión hacia arriba, por lo que no es necesario ningún despegamiento. 4 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 ras de la dermis. Este es el principio de separación de la extracción de grasa y de la de la piel: en resumen, se retira la materia cutánea y grasa sin cortar ningún vaso. Las consecuencias positivas son múltiples: más precisión en la apreciación del largo de la resección (lo cual condiciona todo el resultado) puesto que no queda grasa alguna en los dos bordes, sin despegamiento, sin necrosis, con una fácil cicatrización... La dificultad de la operación reside en hacer un buen cálculo preoperatorio de la longitud de los tejidos con los que se trabajará. Efectivamente, esta superficie se aspira de forma tan íntegra que no es cuestión de guardar la piel agredida de esa manera. No debe olvidarse que, a continuación, se estirará y se suturará la piel restante de cada lado de la zona de resección. Por eso, no debe sufrir ninguna agresión ni ningún despegamiento para poder obtener una máxima calidad de cicatrización. Por otra parte, cuanto más completa es la liposucción, menos tensión es necesaria para unir los bordes y mejor calidad presenta la cicatriz. Si analizamos las representaciones anatómicas de los vasos linfáticos (SAPPEY 1874), constatamos que las nalgas son el foco de la anastomosis entre los vasos de origen inguinal e isquiático. Hay en ellas una tierra de nadie linfática: dicho de otro modo, solamente hay presencia de vasos de pequeño calibre. Como consecuencia, podemos cortarlos sin riesgo de supuración. No obstante, no existe justificación para despegar las nalgas o las caras externas del muslo para conseguir elevar mejor la piel, pues no hay nada que se oponga a la movilización hacia arriba aparte de la gravedad; en todo caso, no existe ninguna adhesión fibrosa que haya que cortar. El mayor riesgo se encuentra en la zona de los brazos. La cara interna es rica en grandes vasos linfáticos, y se entorpece fácilmente la circulación de retorno. La sección de los vasos linfáticos puede producir “brazos gruesos” crónicos exactamente igual que tras una limpieza ganglionar axilar. En resumen, la liposucción es una herramienta muy útil, pues permite reducir volúmenes y movilizar los tejidos sin despegarlos y, por ello, sin cortar elementos vitales (vasos y nervios). El único inconveniente es la prolongación del tiempo operatorio. Y una regla de oro es que en ningún caso se debe combinar una liposucción agresiva con un gran despegamiento. Esta combinación comporta un gran riesgo de necrosis tisular. ¡Será necesario elegir! C. Cerrar nuevamente los espacios muertos. La definición de espacio muerto es todo aquel espacio, virtual o no, creado mediante una acción quirúrgica. Si no se vuelven a cerrar, el cuerpo tiende a rellenarlos mediante supuración de las superficies, sobre todo si: - la hemostasis no es perfecta, - se han cortado los grandes vasos linfáticos. B. Respetar los troncos linfáticos principales. En cada operación, nos viene bien saber cómo se presenta la anatomía de los troncos linfáticos principales. Para ello, es esencial contar con buenos libros de anatomía. El principio siempre es el mismo: el volumen de la zona de los troncos linfáticos principales se refina mediante liposucción profunda (por lo tanto, bajo la fascia superficialis). Dejamos así una telaraña fibrosa lipoaspirada que ya no tiene volumen y en la que todos los vasos y otras estructuras vitales quedan intactos. A continuación, habrá que retirar quirúrgicamente la capa de grasa suprafascial y así se resuelve el problema. Nótese asimismo que en un momento dado es necesario cortar los vasos, pero el principio básico es que dicha acción tendrá siempre lugar en una región en la que estén ramificados, es decir, que sean de pequeño calibre. En la zona de los miembros, los brazos y las caras internas de los muslos, el problema es un poco más sutil. Efectivamente, hay troncos linfáticos incluso en la grasa superficial cuya sección puede acarrear consecuencias catastróficas. Prosiguiendo con nuestra lógica de no agresión, aplicamos el mismo principio que a la capa de grasa superficial: reducción del volumen mediante liposucción y conservación de la telaraña fibrosa que carece de espesor. Finalmente, se aspira la grasa en su totalidad entre la aponeurosis y la piel. A continuación, no queda más que retirar la finísima capa de piel pasando a Los movimientos del cuerpo provocan un rozamiento de las superficies entre ellas que, como es fácilmente comprensible, no favorece precisamente a la cicatrización. Por esta razón, es necesario volver a cerrar cualquier espacio muerto creado de forma quirúrgica almohadillándolo cada 2 ó 3 cm. Este es el tercer pilar de la prevención contra derramamientos: cuanto más se cierran los espacios muertos, menos complicaciones hay. La técnica parece simple, aunque, de hecho, lo que hace es complicar la actuación del cirujano, que tendrá que anticipar la posición de los puntos de almohadillado con respecto a los desplazamientos cutáneos. Además, se trata de una tarea adicional que es necesario realizar en operaciones ya de por sí largas. No obstante, la recompensa es enorme: no habrá derrame ni drenaje, puesto que, si se cumplen los principios de limitar los despegamientos y el corte de los troncos linfáticos principales, ¡no habrá nada que drenar! Es necesario almohadillar en todo aquel lugar en el que sea posible y, entre otros, bajo las zonas de sutura. Esta acción descrita por Baroudi tiene otra ventaja: podremos tirar ligeramente más colocando un poco de tracción sobre cada punto. Y con respecto a la inutilidad de los drenajes: la cirugía plástica sin drenajes es posible y conlleva una inmensa comodidad para los pacientes y disminuye drásticamente la duración de su hospitalización. 5 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 injerto. Esto es lo que los autores han propuesto sabiendo que esta intervención tendrá que realizarse en condiciones difíciles.Además de los riesgos propios de la abdominoplastia (infección, desunión cutánea, etc.), hace falta tener en cuenta el panorama específico (pacientes sometidos a diálisis con anticoagulantes, necesidad de modificar el trazado de la incisión del injerto renal para no dejar una banda cutánea que pueda necrosarse, etc.). Los autores han operado a 9 pacientes (6 mujeres y 3 hombres), de los cuales 4 eran diabéticos con un IMC medio de 31 kg/m2. El peso medio del fragmento resecado era de 3 kg, la duración de la hospitalización de 1 a 3 días y se practicó la diálisis el día antes y el día después de la intervención. Se interrumpió la heparinización hasta la retirada de los drenajes. Cuando se completó la cicatrización, se remitió a los pacientes a un centro de transplante renal. Se les practicó el transplante por la zona lateral de la cicatriz de la abdominoplastia. Recordemos que el primer injerto renal lo llevó a cabo un cirujano plástico en Boston (Joseph Murray, nacido en 1919) en 1954, lo que le valió el Premio Nobel de Medicina en 1990. Colocar un drenaje es un gesto agresivo que puede provocar una cierta yatrogenicidad: dolores y sagrado durante la extracción, especialmente si la enfermera no retira el vacío con el pretexto de aspirar todavía más líquido, y sepsis. Los pacientes se sienten atemorizados por los drenajes, puesto que representan un importante factor de estrés para ellos. Por lo tanto, ya no utilizamos ningún drenaje desde hace más de 10 años y no lo hemos echado de menos en ningún caso. Es perfectamente deseable drenar una cavidad natural como una articulación o la cavidad peritoneal, por ejemplo. Por el contrario, es absurdo drenar un espacio muerto que ya no existe porque se ha vuelto a cerrar, sobre todo cuando el vacío genera una autoproducción por aspiración de los tejidos intersticiales. Muchos cirujanos emplean drenajes únicamente por motivos médico-jurídicos, debido a que el diagnóstico de hemorragia se hace más rápido. Sin embargo, un drenaje no evita en absoluto que se produzcan hemorragias y el cirujano tiene perfectamente otros medios a su alcance para hacer el diagnóstico, empezando por los numerosos indicios clínicos. En caso de hemorragia, podemos preguntarnos si el drenaje aumentará la cantidad de sangre perdida, puesto que el vacío aumenta la velocidad de aspiración. En conclusión, es esencial respetar los principios generales que transforman la recuperación postoperatoria.Es a este precio al que se liberarán los obstáculos que afectan a la cirugía de dermolipectomías. Todo el equipo (anestesistas y resto del personal sanitario) que recibe al paciente durante la fase postoperatoria registrará la diferencia y tendrá menos dificultad para gestionar esta fase. Panniculectomy in preparation for renal transplantation. Kuo, J. E. et al., Plast Reconstr Surg 2011; 128: 1236-40. Nuestra industria desde el punto de vista de los senadores ( Bibliografía 1. Pascal J.F., Le Louarn Cl. Remodeling bodylift with high lateral tension, Aesth Plast Surg 26 : 223-230, 2002. 2. Le Louarn Cl, Pascal J.F., The concentric medial thigh, Aesth Plast Surg 28 ; 20-23, 2004. 3. Pascal J.F., Le Louarn Cl. Brachioplasty Aesth Plast Surg 29 : 1-8, 2005. 4. Le Louarn Cl., Pascal J.F.,The high superior tension : evolution of lipoabdominoplasty, Aesth Plast Surg 34 : 773-781, 2010. Con el objetivo de preparar el informe de sus labores senatoriales, los senadores visitaron nuestra fábrica de prótesis mamarias y pudieron constatar el rigor de las prácticas industriales de nuestro laboratorio. Para la Sra. Chantal Jouanno: “La mayoría de las propuestas de la misión del Senado proviene de los propios fabricantes que desean que se distinga claramente entre las buenas y las malas prácticas”. ( AbdominoplastiA e injerto renal En Estados Unidos (y muy pronto en Francia), la obesidad plantea un verdadero problema social. Los pacientes aquejados de insuficiencia renal en fase terminal y que deben someterse a un injerto renal normalmente son portadores de un abdomen pendular. El pliegue inguinal-púbico es un depósito de bacterias difícil de destruir y representa una fuente de complicaciones infecciosas para el injerto renal. Es tentador realizar una abdominoplastia antes de colocar el Chantal Jouanno, Senador de París y Olivier Pérusseau, PDG del Groupe Sebbin. 6 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 EL MELANOMA DE DUBREUILH: ¿CUÁL ES SU TRATAMIENTO? ( a efectos diagnósticos. En general, se biopsian las zonas oscuras o en relieve. El tratamiento quirúrgico del léntigo maligno es difícil, pues normalmente suelen ser lesiones de gran tamaño, mal delimitadas y que están ubicadas en el rostro. El margen de «seguridad», una escisión de 5 mm, parece insuficiente para evitar reincidencias. La técnica de Mohs - poco utilizada en Francia - resulta polémica por sus dificultades de interpretación histológica. Los autores del presente artículo prefieren decantarse por las escisiones por etapas tras la delimitación de las lesiones con luz de Wood, y seleccionando un margen de 5 a 10 mm en función de la profundidad de la lesión. La zona marginal se divide en 4 cuadrantes. Los resultados del examen se conocen pasadas 24 horas. La escisión se repite hasta que exista una certeza total de la ausencia de lesión infraclínica. La pérdida de sustancia no se cubre hasta ese momento y se realizará mediante injerto o colgajo. El melanoma de Dubreuilh (léntigo maligno) representa del 4 al 15% de los melanomas y, sobre todo, ocupa la cabeza y el cuello en personas de edad avanzada en las zonas expuestas al sol. Su gravedad, como la de otros melanomas, está vinculada a la profundidad de penetración de la piel. Las formas in situ tienen un pronóstico excelente, pero aquellas en las que existe una invasión dérmica profunda pueden metastatizar. El diagnóstico clínico resulta difícil. La lesión suele estar extendida, a veces es de color pálido y otras de color marrón oscuro, que recuerda a una queratosis seborreica. Los sucesivos exámenes al paciente con fotografías, la dermatoscopia, permiten realizar el diagnóstico. Las grandes dimensiones de la lesión y su ubicación dificultan su exéresis completa Melanoma of the lentigo maligna subtype Diagnostic challenge and current treatment paradigma. Mc Guire LK and al Plast Reconstr Surg 2012; 129 : 288e-299e. ¿Ha operado usted ya a algún miembro de su familia? ( Sumner Slavin y Robert Goldwyn (el exredactor jefe de Plastic Reconstructive Surgery cuyos editoriales cargados de ironía y humor eran verdaderas pequeñas maravillas), ambos cirujanos plásticos, y la señora Slavin, psicóloga, enviaron a los miembros de la American Society for Aesthetic Plastic Surgery, un cuestionario que respondieron 465 de 1513 cirujanos. El objetivo de este estudio era saber si los cirujanos habían practicado o practicarían una intervención quirúrgica estética a algún miembro de su familia. Tratar a un familiar plantea problemas éticos, de objetividad y de barrera afectiva a la hora de operar, entre otras cosas. No obstante, la inmensa mayoría de los cirujanos interrogados (88%) afirmaron que operarían o habían operado (84%) a algún miembro de su familia, muy frecuentemente a su mujer. Las motivaciones de los profesionales de la cirugía plástica son interesantes.Algunos afirmaban que no pudieron negarse a las insistentes peticiones de su familiar. Sin embargo, la razón principal mencionada fue que ellos eran los más aptos y competentes (67%) para llevar a cabo la operación, el 34% consideraba que era una solución práctica ¡y el 8% aseguraba que así conseguían ahorrar! Estos cirujanos llevaron a cabo todo tipo de intervenciones de cirugía estética:rinoplastia,lifting,liposucción,intervenciones mamarias y abdominales. El 94% de las intervenciones se desarrollaron sin complicaciones y el 99% de los cirujanos consideran que sus pacientes quedaron satisfechos. A family operation : plastic surgeons who perform aesthetic surgery on spouses or other family members Slavin S. and al Plast Reconstr Surg 2010 ; 125, 1018-23. 7 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 ( INYECCIONES FACIALES Y CEGUERA Todos aquellos médicos y cirujanos estéticos que inyectan grasa y otras sustancias de relleno en el rostro deberían leer este importante estudio. Los autores describen en detalle las observaciones realizadas a 32 pacientes que se han sometido a una inyección facial, 15 de grasa y 17 de otros productos diferentes (colágeno, silicona, ácido hialurónico y otras sustancias de relleno como corticoides y parafina) y que han sido víctimas de una ceguera unilateral. El lipofilling se llevó a cabo 3 veces en la zona del tercio inferior del rostro (surco nasogeniano, labios y mentón), 7 veces en el tercio superior (frente, entrecejo y caballete nasal) y 3 veces en el tercio medio (mejillas, zona periorbital...). En todos los casos inmediatamente después de la inyección, se produjo la ceguera acompañada de un dolor agudo. La ceguera no remitió en ningún caso, a pesar de los intentos de tratamiento médico. mejillas y la región temporal. La ceguera fue definitiva en todos los pacientes excepto en 3. Uno de ellos recuperó la vista 5 minutos después de una inyección de corticoides, el segundo la recuperó después de un tratamiento de diuréticos y el tercero recobró la vista tras un tratamiento de corticoides, aunque con una parálisis óculomotriz y una necrosis cutánea. Los autores estudiaron la fisiopatología de la ceguera: trauma vascular, una gran presión que provoca un émbolo a contracorriente en la arteria oftalmológica y la arteria central de la retina. Además, consideran que, de momento, no hay ningún tratamiento que haya demostrado su eficacia y aconsejan precaución en el momento de la inyección, aspiración antes de la inyección, aplicación de vasoconstrictores locales, uso de jeringas de tamaño pequeño, de cánulas de poco calibre y no afiladas, e inyección lenta y en poca cantidad. Debe evitarse llevar a cabo la inyección en tejidos “traumatizados” (los autores desaconsejan realizar un lipofilling durante un lifting). 17 pacientes fueron víctimas de ceguera tras una inyección de un producto diferente a la grasa. La nariz y el cuero cabelludo (7 y 3 casos) fueron las zonas de inyección más habituales. Las otras zonas de inyección fueron la frente, el entrecejo, las Blindness following cosmetic injections of the face. Lazzeri D. and al Plast Reconstr Surg 2012, 129 ; 995-1012. ( LIPOFILLING, células madre y cáncer de mama La inyección de grasa en el rostro, los senos y otras partes del cuerpo es una técnica muy utilizada por los cirujanos plásticos. Los autores de este artículo - dos cirujanos plásticos y un investigador de cancerología - se preguntan por la inocuidad del lipofilling tras una tumorectomía o una cuadrantectomía. Los estudios más recientes tienden a demostrar que no existen obstáculos o retrasos en la detección del cáncer de mama vinculados a las dificultades de interpretación radiológica. No obstante, la grasa inyectada no es un producto inerte, sino que se trata de un tejido metabólico activo que secreta de forma abundante hormonas, ciptoquinas y otros factores de crecimiento. La calidad de la grasa como material de reconstrucción está relacionada parcialmente con la presencia de células madre mesenquimatosas derivadas de la grasa mediante un proceso de adipogénesis y de angiogénesis. Los autores tratan de responder a varias preguntas relativas a las células madre mesenquimatosas, abundantes en el tejido adiposo. Son células que cuentan con un importante potencial de transdiferenciación y de secreción de un factor de crecimiento vascular que se detecta en la proliferación de cánceres y metástasis. Los modelos experimentales (en ratón) muestran que las células madre implantadas pueden provocar metaplasia, displasia y cáncer, y este fenómeno no se ha observado en seres humanos. Sobre todo, presentan un potencial de transformación en tejido conjuntivo y de forma más hipotética en tejido epitelial. Los adipocitos en el tejido conjuntivo podrían representar un papel de estimuladores en el cáncer de mama. Los autores piensan que, tras una tumorectomía o una cuadrantectomía, la inyección de grasa que contiene células madre mesenquimatosas pone en peligro de forma inaceptable a las mujeres que han sido operadas de un cáncer de mama. Esta opinión será sin duda polémica. The safety of autologous fat transfer in breast cancer. Lessons from stem cell biology. Pearl A. and al J. Plast Reconstr Aesth Surg 2012, 201 ; 65 : 283-8. 8 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 ( Toxina botulínica e hiperhidrosis La hipersudoración es una anomalía menor, pero que suele suponer un trastorno para la vida social. Los tratamientos locales, como los antitranspirantes, deben aplicarse repetidas veces diariamente y conllevan irritaciones y alergias cutáneas. Los tratamientos quirúrgicos, como la simpatectomía torácica endoscópica o la extirpación de las glándulas sudoríparas axilares, están plagados de complicaciones y no garantizan la posibilidad de que se produzca una recaída. La hiperhidrosis localizada, axilar, palmar y plantar, puede tratarse mediante la toxina botulínica. Esta toxina inhibe la hipersecreción de acetilcolina y previene la hiperestimulación de las glándulas ecrinas que son el origen de la hipersudoración. Los autores emplean la toxina de tipo A. Los estudios publicados tras cerca de diez años muestran que reduce un 75% de la transpiración. Los pacientes sometidos a tratamiento son aquellos que padecen una hipersudoración grave con perjuicio para sus actividades cotidianas. La hiperactividad de las glándulas sudoríparas puede confirmarse mediante el test de Minoz (untura mediante una solución de alcohol yodado al 3,5%). Cualquier infección local supone una contraindicación. Se diluyen 25 unidades de toxina botulínica en 1 ml de suero fisiológico, añadiendo ocasionalmente lidocaína. En la axila, la zona que ha de tratarse se delimita por el test de alcohol yodado y en función de la zona pilosa. La inyección se hace con una aguja de 26G o 30G. Son necesarios 40 puntos de inyección separados 8 mm para tratar una axila. La aguja se orienta a 45° y penetra la piel 2 mm. Se inyectan 0,05 ml de solución en cada ocasión y son necesarias 50 U de toxina para una axila. Las inyecciones en las palmas de las manos y las plantas de los pies son dolorosas y se pone en práctica una anestesia de contacto por bloqueo nervioso o por crioanalgesia 15 minutos antes de la inyección. Son necesarias 100 unidades de toxina para tratar una palma y 150 para la planta del pie. Los autores piensan que es un método seguro y eficaz. Desgraciadamente, la mejora es transitoria (de 6 a 9 meses de eficacia) y lo dolorosa que resulta esta técnica suele desanimar a los pacientes a volver a someterse a ella. Treatment of hyperhidrosis with botulinium toxin. Doft MA and al Aesth Surg J 2012; 32:238-44. ( ENFERMEDAD TROMBOEMBÓLICA y ABDOMINOPLASTIa Los autores del artículo han operado a 404 pacientes a lo largo de diez años: 247 abdominoplastias simples con o sin liposucción, 157 plastias abdominales combinadas con una intervención estética mamaria o con una liposucción extendida. En todos los casos, se trataba de una intervención con transposición umbilical. Todos los pacientes fueron tratados de forma ambulatoria (después de 2 a 3 horas en la sala de reanimación) y se les dio el alta de la clínica el mismo día. La duración de la intervención fue de 100 minutos de media para los casos de abdominoplastia aislada y de 140 en los casos de intervención combinada. Los autores piensan que el tratamiento autocoagulante no es necesario si se aplica un protocolo muy estricto: - uso de medias compresivas y de un dispositivo de compresión neumática intermitente colocado antes de la inducción anestésica, - levantar y caminar de forma precoz unas horas después de la intervención para evitar dormir demasiado tiempo en decúbito, - abdominoplastia con tensión progresiva de la pared y sin drenaje, pues la retirada del mismo suele ser un factor de ansiedad postoperatoria, - mantenimiento de la “normotermia” dejando que los pacientes lleguen al quirófano con un pijama y un gorro de quirófano, recubiertos con una manta eléctrica, y que la temperatura del quirófano sea como mínimo de 24 grados, - tratamiento antidolor mediante bomba con catéter, - duración limitada de la operación. El equipo quirúrgico debe estar especialmente preparado para que se cumpla con precisión y rapidez cada una de estas condiciones. La ausencia de tratamiento anticoagulante está claro que es discutible, pero la metodología merece tenerse en cuenta. Venous thromboembolism in abdominoplasty.A comprehensive approach to lower procedural risk. Somogyi RB and al Aesth Surg J. 2012 ; 32; 322-31. 9 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 AYER HOY Blefaroplastia por vía conjuntival En 2008, el informe del congreso francés de cirugía plástica tuvo como tema «la cirugía estética de los párpados». En el capítulo dedicado a «las bolsas», se reservó una gran parte a la “vía conjuntival”, cuya técnica se detalló entonces. En un comentario, Daniel Marchac subrayó que esta Julien Bourguet técnica la redescubrió Paul Tessier en los años 70 y que su autor fue Julien Bourguet en 1928. De hecho, la descripción de Bourguet la hizo ante la Academia de Medicina el 25 de noviembre de 1924 y posteriormente se publicó en 1925 en los archivos francobelgas de Cirugía. Durante su presentación ante la Academia de Medicina, Bourguet fue el primero en denominar “hernias adiposas” a los lóbulos de grasa periorbital cuyo saliente determinaba la “bolsa”. En primer lugar, practicó el corte por vía subciliar, pero como temía que dicha incisión provocara una cicatriz visible e incluso un ectropión, se le ocurrió realizar una incisión en el fondo de saco conjuntival. En su obra “La véritable chirurgie esthétique du visage” (“La verdadera cirugía estética del rostro”, Plon, París, 1936), numerosas fotografías ilustran esta técnica. Vía de abordaje conjuntival Visite Groupe SEBBIN EN lOs SIGUIENTES congrEsOS: ISAPS (International Society of Aesthetic Plastic Surgery): del 4 al 8 de septiembre en Ginebra. IQUAM (International Committee for Quality Assurance, Medical Technologies and Devices in Plastic Surgery): del 1 al 4 de noviembre 2012 en Atenas. Marrakech World Aesthetic Congress - Intensive Course on Volumetry & Volume Restoration: los días 9 y 10 de noviembre 2012 en Marrakech. SOFCPRE (Société Française de Chirurgie Plastique Reconstructrice et Esthétique, sociedad francesa de cirugía plástica reconstructiva y estética): del 19 al 21 de noviembre en Paris. Resultado: Antes / Después 10 El boletín informativo de cirugía plástica de los Laboratoires ( L’expander (( N°4/ Septiembre de 2012 ( FLASHBACK sobre la historia de los injertos CAPÍTULO IV: Jacques-Louis Reverdin Y LOS INJERTOS EPIDÉRMICOS El 8 de diciembre de 1869 en la Sociedad Imperial de Cirugía de París, un joven cirujano de los Hospitales, Felix Guyon, presentó el “trabajo” de uno de sus internos de nacionalidad suiza, pero que había sido nombrado interno de los Hospitales de París. Guyon se expresó con precaución delante de aquella docta congregación:“El comunicado (...) tiene como tema una cuestión de patología bastante común (...), pero que todavía plantea varios puntos oscuros y que sería interesante aclarar. Se trata de la cicatrización por segundo intento”. Reverdin había tratado a un hombre de 35 años víctima de un accidente. Se le había desgarrado la piel del antebrazo izquierdo y la herida resultante cicatrizaba muy lentamente. Reverdin levantó “una punta de lanceta” en el brazo derecho del enfermo, dos pequeños colgajos de epidermis que colocó en mitad de la herida, la cara profunda sobre las granulaciones, separados uno del otro. Tres días después, había un nuevo injerto sobre la herida. 10 días más tarde, los islotes cutáneos se habían expandido y se habían reunido en una fina placa comparable al ribete epidérmico del borde de las heridas. Guyon concluyó su exposición indicando que se estaba realizando un segundo experimento. Reverdin había llevado a cabo el primer injerto cutáneo en humanos. El discurso suscitó una viva discusión entre los cirujanos presentes, que se mostraban escépticos. Algunos subrayaron que una única experiencia no significaba nada, otro que el injerto en realidad era dermoepidérmico y no simplemente epidérmico, y otros afirmaron que este tipo de intervención exponía al paciente a una erisipela mortal. Únicamente dos de los contertulios consideraron que la experiencia resultaba interesante. Reverdin perseveró y publicó varios años más tarde, en 1872, un importante estudio clínico y fisiológico basado en 50 pacientes. A pesar de sus detractores, la idea de Reverdin se difundió rápidamente por Europa y a partir de 1870, el inglés Lawson (1831-1903) presentó 3 casos de injertos cutáneos realizados con éxito. Jacques-Louis Reverdin (1842-1928) abandonó Francia después de la guerra francoprusiana de 1870-71, donde se alistó en el Servicio de Salud francés, y consiguió una plaza de catedrático de Cirugía en Ginebra. Próximo episodio: Ollier y los injertos cutáneos autoplásticos. R e d a c t o r j e fe : D r J . G l i c e n s t e i n / E d i t o r : O u i z a S e b a / D i re c c i ó n a r t í s t i c a : F re e F a c t o r y L’Expander es una publicación del GROUPE SEBBIN SAS - 39 parc d’activités des Quatre Vents - 95650 Boissy l’Aillerie (Francia). 11 ( ( ( Consulte los próximos números de nuestro boletín L’EXPANDER, así como los números anteriores (1, 2 y 3), conectándose a su espacio privado en: www.sebbin.com