Cosas de Meigas 23 - Hogueras de San Juan
Transcripción
Cosas de Meigas 23 - Hogueras de San Juan
ASO CIACIO N DE ME IG AS DE L AS HO G UER AS DE S AN J UAN Abril/2016 La Coruña Año 3. Nº 23 COSAS DE MEIGAS Finalmente, es primavera Sumario Veto total 1 Abril festivo 2 Baúl de recuerdos 3 Recuerdos de mi calle 4 Las Meigas, una evocación de... 5 1916. Crimen en las fiesta de... 6 La Coruña de ayer 7 Se celebró la Ceremonia de... 8 Veto total El pasado día 18, la Presidenta de la Asociación de Meigas, Mª Concepción Astray, y la Meiga Mayor, Belén Ferreiro, se entrevistaron con el Concejal de Cultura quien estaba acompañado de un asesor, aunque no sabemos muy bien para asesorar qué, salvo por el hecho de que le pagamos el sueldo todos los coruñeses. Ambos individuos, con una actitud sectaria y excluyente, les hicieron saber que la Meiga Mayor no encenderá la Hogueras 2016, honor que reservan para un coruñés que ellos elijan—es decir uno de su pelaje—; que tampoco la Cabalgata de San Juan discurrirá por el Paseo Marítimo; que no habrá verbena ni concierto alguno en los días previos y suponemos que tampoco habrá fuegos artificiales para que duerman bien los pájaros que anidan en San Pedro. En total que no habrá nada salvo el macrobotellón de las playas y eso si al final no lo prohíben aduciendo daños irreparables en la conducta de los peces y crustáceos de la ensenada del Orzán. Por descontado que la Asociación de Meigas, pese a montar casi un centenar de actos de carácter gratuito, no tendrá ni un duro de subvención ya que eso lo tienen reservado para los titiriteros de su cuerda a quienes les dan dinero, les ceden teatros e incluso les permiten cobrar la entrada alegando la importancia que tienen para potenciar las artes escénicas en la ciudad. Da la risa. Según les manifestaron los personajes con los que se reunieron, “estamos aquí para cambiar las fiestas; para cambiar .la Navidad, el Carnaval y el San Juan”. Creen que la ciudad es de ellos cual vulgar dictadura al más rancio estilo bolivariano y son estos los mismos que se apresuran a cambiar los nombres de las calles argumentando que eran recuerdos de la Dictadura. La Asociación de Meigas hará todo lo que esté en su mano para revertir esta vergonzosa situación. No se van a regatear esfuerzos y se llegará hasta donde se tenga que llegar. Se pedirá apoyo a quien sea y por los medios que sean. No se puede tolerar que porque a unos individuos no les guste algo lo prohíban sin más, echando por tierra casi cincuenta años de historia. No debemos permitirlo pues mañana harán otra cualquiera. El Certamen de Danza Otro de los “grandes logros” de los de la marea, para hacer economías en las arcas municipales, ha consistido en negar la cesión del Teatro Rosalía Castro a la Asociación de Meigas para celebrar su ya tradicional Certamen de Danza de A Noite da Quiema. En este alarde de ahorro se han olvidado de dos aspectos fundamentales. Uno de ellos, que el acceso al acto ha sido siempre gratuito y el otro, que el Certamen sirve para que actúen las jóvenes coruñesas que, sacrificando otras facetas de su vida, consagran su tiempo libre a la danza. El Teatro Rosalía Castro es un bien de la ciudad que pagamos y mantenemos todos los coruñeses con nuestros impuestos; no es propiedad de la marea ni tampoco está ahí para ser usado solo por aquellos que les caen en gracia. Es de todos, ojalá que eso no se les olvide nunca. 2 Abril festivo Este mes de abril presenta citas festivas de gran relevancia en el panorama lúdico nacional. La más universal, sin duda alguna, es la Feria de Abril de Sevilla que se celebrará entre los días 12 y 17 en la capital hispalense. Sus casetas, sus corridas de toros, sus paseos de caballos y los demás actos que dan forma el programa de festejos constituyen una fuente de atracción de miles de personas que visitan España para vivir esta fiesta de fama mundial. Pero el mapa de festivo de este mes de inicio de la primavera no concluye en la capital andaluza; la bella ciudad de Murcia celebra también sus fiestas de Primavera o del Bando de la Huerta, declaradas de interés turístico internacional, que arrancan a finales de marzo y que tienen como uno de sus números centrales el Entierro de la Sardina que, en esta edición, se celebrará el próximo sábado, día 2. Salamanca, ciudad universitaria por excelencia, celebra en este mes, concretamente el día 4, el llamado “lunes de aguas”; la tradición remonta su origen al año 1497; por aquellas fechas el ejercicio en casas de mancebía estaba prohibido durante la Cuaresma, motivo por el cual las meretrices eran sacadas de la ciudad. En la octava de la Pascua, los estudiantes iban a buscarlas en barcas y el resto de la ciudad acudía a orillas del Tormes a festejar la algarabía de los estudiantes, llegando hasta nuestros días la costumbre convertida en una cita gastronómica. Dentro de las llamadas fiestas ígneas, destaca este mes la Noche de las Hogueras que se celebra el día 22 en la localidad alicantina de Onil en honor a su Patrona, Nuestra Señora de la Salud. Su origen se establece en 1648 fecha en la que una epidemia de peste asoló la localidad. Con motivo de la celebración de San Jorge, 23 de abril, se celebra el Día del Libro, recordando la fecha de la muerte del inmortal Cervantes. Son muchas las localidades españolas donde tienen lugar actos relacionados con esta conmemoración. También por San Jorge, la ciudad de Alcoy celebra sus Fiestas de Moros y Cristianos declaradas de interés turístico internacional. El origen de esta fiesta se data en 1511 y en ella se recuerdan los enfrentamientos durante la Reconquista entre tropas del bando cristiano y el árabe. Aunque por diferentes motivos, las Comunidades de Aragón y CastillaLeón celebran, el 23 de abril, su día grande. Para los aragoneses por ser el día de su Patrón, San Jorge, mientras que para Castilla-León en recuerdo de la batalla de Villalar, 23 de abril de 1521, fecha en que los Comuneros fueron derrotados por S.M. D. Carlos I. Foto de familia de la Ceremonia de Proclamación 3 Baúl de recuerdos Extraemos hoy de nuestro “baúl de recuerdos” esta fotografía tomada con motivo de la celebración de la II Fiesta del Solsticio Poético, acto de proclamación de Elena Liste Quintela como VI Meiga Mayor Infantil de las HOGUERAS-89. La fotografía debe estar tomada la noche del 22 de junio de ese año, en las instalaciones del Restaurante “Os Arcados” (Playa Club) que sirvieron de marco a la ceremonia de proclamación en la que actuó de pregonero Carlos Fernández Barallobre, Vicepresidente entonces del Sporting Club Casino de La Coruña y que, con anterioridad, había ocupado puestos de responsabilidad en la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan. Aquella noche solsticial, la Banda acreditativa a la VI Meiga Mayor Infantil, Elena Liste, se la impuso el I Teniente Alcalde de la ciudad, Federico de la Fuente Esperante, en tanto que a las Meigas de Honor Infantiles se las impusieron el pregonero y directivos de la Comisión Promotora. Elena Liste, que en aquella ocasión lucía un bonito vestido blanco, estuvo acompañada de sus Meigas de Honor Infantiles, las niñas coruñesas Almudena Mantenga Castro, Ana Vázquez Rabuñal, Carlota Florez Ogea, Loreto García-Garabal Sánchez- Harguindey, Cristina Gayoso Nieto, María Alvela Varela, Pilar Novoa Blasco, Rosa Remuiñan Villanueva, Teresa González Guisen, Vanesa Vázquez González, Victoria García Otero y Teresa Lueiro García, todas ellas vestidas con un traje azul noche. Elena Liste Quintela había sido Meiga de Honor Infantil de las HOGUERAS88, siendo nombrada al año siguiente Meiga Mayor Infantil, siguiendo una tradición también vigente para sus homónimas mayores por la cual, una Meiga de Honor o Meiga de Honor Infantil, era nombrada Meiga Mayor o Meiga Mayor Infantil en la siguiente edición de HOGUERAS; esta costumbre se mantuvo vigente durante varios años hasta la modificación del sistema de elección de la Meiga Mayor. En estas HOGUERAS-89, fue nombrada XX Meiga Mayor, Mª Luisa Novoa-Cisneros García que, siguiendo la tradición iniciada en 1971 fue proclamada Meiga Mayor en el transcurso de la XIX Fiesta del Aquelarre Poético, celebrada también en “Os Arcados” en la tarde-noche del 23 de junio. Las HOGUERAS-88 habían comenzado su andadura el día 1º de junio, desarrollándose hasta el 24 siguiente, festividad de San Juan. Durante estos días se celebraron un total de 119 de actos de carácter social, cultural, deportivo y popular. Igualmente, a lo largo del año, se celebraron diferentes actividades organizadas por la Comisión Promotora, muchas de ellas dirigidas, exclusivamente, a celebrar el cuarto centenario de la gesta de María Pita habida con ocasión del asedio y asalto a la ciudad por parte de la Contra armada inglesa en mayo de 1589. Aquel calendario específico de actos sirvió para que la Comisión Promotora se sumase a este centenario. 4 “Recuerdos de mi calle” La noche cae fría y húmeda sobre una ciudad adormilada y callada; las candelas de amarillo gas propician el lento discurrir de sombras inquietantes que se pierden tras las esquinas por las que se cuela una brisa helada plena de matices salitrosos. He vuelto a Fernando Macías, mi vieja calle, mi calle de siempre, seguro de encontrarme cara a cara con los viejos y amables fantasmas de un pasado que ya se me antoja lejano. Deseo, por un instante en este nocturno frío de febrero, recorrer los espacios que fueron testigos de mi juventud, de mis sueños, de mis deseos. Volver a mirar a los ojos aquel viejo, de pitillo mal liado, contador de mil historias increíbles jamás vividas; volver a sentir como la mar ruge en la lejanía mientras mi rostro es acariciado por una brisa evocadora de los mejores atardeceres de mágicos veranos; volver a recuperar el tiempo que ya no es. La calle está solitaria, vacía, tanto como lo estaba aquella tarde otoñal cuando salimos del viejo cine del colegio de la cuesta después de ver la película “El clavo” y nos encontramos con nosotros mismos al pie del eucalipto que lloraba sangre, hablando de la vida, del amor, de la noche. Cuantos recuerdos se amontonan al evocar aquel anochecer tan especial sumidos en el silencio y sobrecogidos por el ambiente lúgubre y misterioso que rodeaba a nuestro particular refugio de fantasmas. A lo lejos todavía acierto a distinguir la casa de Isabel, con su terraza abierta a las estrellas. ¿Qué habrá sido de ella? Casi no volví a verla desde aquella tarde de guateque en que traté de retener a la chiquilla de mis sueños antes de huir en pos de un brillante Venus que le guiñaba su ojo de plata de gran cíclope, flirteando con ella, tratando de enamorarla. La vieja plaza de cemento. Cuanto sabe de amores callados, de sueños sin despertar, de deseos inconfesables, de silencios elocuentes. Cuantos mensajes encriptados, escritos bajo sus bancos, en la corteza de sus árboles. Cuantas veces sus muros, en forma de celosía conventual, fueron testigos de románticas declaraciones, de eternas confidencias, de cómplices miradas a la luz de sus tenues faroles. Corretear por las aceras, de una a otra; griterío infantil de aquellas tardes de martes de Carnaval que se morían sin indulgencia, indolentes, ocultos tras aquellos disfraces de fortuna que revivían las correrías del “Napias”, el más famoso guerrillero de la Guerra contra el francés; disfraces con los que asustar a la anciana que regresaba a casa tras comprar una docena de huevos, envuelta en un cartucho hecho con papel de periódico, en la tienda del fondo de la calle de al lado. A la vuelta de la esquina, entre sombras amenazantes, la silueta imponente del viejo castillo de cuento de hadas. Cuantas conjeturas formuladas sobre sus secretos indescifrables; cuantas preguntas sin respuesta; cuantas horas soñando con las damas que se ocultaban tras sus muros; toda una constante en nuestra juventud, siempre omnipresente, siempre protagonista, siempre añorado, siempre deseado, siempre impenetrable. Que íntima satisfacción recorrió nuestro cuerpo y José Eugenio Fernández Barallobre nuestra alma al ver terminado el primer ejemplar de “Lepanto”, el periódico de nuestra pandilla. Cuantas horas escribiendo sus renglones, haciendo sus dibujos, sintiéndonos importantes al ver en él contenidas nuestras opiniones, nuestras dudas, nuestros anhelos. Quizás aquella tarde, ante el número uno de “Lepanto”, se comenzó a forjar nuestro particular espíritu que todavía hoy nos acompaña por los caminos de la vida. Nuestro campamento, íntimo, entrañable, perdido entre maleza en el camino hacia los viejos vanos silenciosos. Nuestro ágora particular de sueños, de debates de altos vuelos queriendo jugar a ser hombres mientras los tenues reflejos de una pequeña fogata iluminaban nuestros infantiles rostros plenos de sana ingenuidad. El primer idilio. ¿Quién no lo recuerda?; ¿cómo olvidar la primera declaración de amor? Noches en blanco pensando en ella, deseando que los días tuviesen menos horas para volver a verla al llegar la hora mágica, aquella hora que ningún reloj marcaba salvo el del corazón. Nerviosismo, excitación, temor, todo se conjugaba cada atardecer mientras esperaba que su presencia iluminase mi calle a su paso. De fondo una canción que ya ni recuerdo. Luego, cerca de la plaza de cemento, la primera declaración, sin saliva, con la boca reseca, con voz temblorosa, insegura. Al final... ¿quién lo recuerda? Un sí, un no, casi todo tenía un valor parecido. Sin embargo, creo que fue un sí. Aquellas largas tertulias, interminables, dando una y otra vez la vuelta a la manzana mientras nos confesábamos sobre lo divino y lo humano. Horas y horas charlando, contando sobre nosotros y nuestros anhelos, nuestras vidas, nuestros amores. Cuantas veces nos sorprendió el día en aquellos dilatados paseos alrededor de nuestra calle. Cuantas veces la magia de la noche hizo de una simple frase la más íntima confidencia. Cuantos secretos se revelaron bajo la atenta mirada de Sirio, escrutante, silencioso, amigo. Aquellos paseos fueron, sin duda, uno de los grandes pilares de nuestra amistad, de nuestra unión, de nuestra comunidad eterna. Noches de San Juan alrededor del fuego, cantando las viejas canciones heredades de nuestros mayores, lazándonos las manos mientras las llamas se reflejaban en nuestros rostros quemados por el calor de la noche solsticial. Aquella cruz de mimbre que no ardió marcó para siempre nuestras vidas uniéndonos, de forma indisoluble, con la noche de las noches, la fiesta de las fiestas. Cuantos sueños tejidos cerca de esta mágica noche de lumeradas; noche de cantos y amores, a la ilusión amplia puerta. Que sensaciones surgen del alma cada vez que se acerca la mítica fecha del 23 de junio, una de esas fechas que desde siempre hemos remarcado de rojo en nuestro particular calendario de vivencias. Tardes de largos preparativos; de tensa vigilancia cerca de la pira en evitación de posibles acciones de rapiña por parte de grupos vecinos; de atrevidos e intrépidos golpes de mano para sustraer el elemento combustible necesario para consumar el ancestral rito de las hogueras; al final, abrazos, sonrisas, canciones y un deseo en los labios siempre repetido: el año que viene será mejor si el Señor San Juan nos ayuda. Veranos de playa, de sol, de mañanas jugando en el mar de Riazor; jugando a ser hombres, a ser protagonistas de una juventud sin problemas, sin preocupaciones, sin temores. Luego, por la tarde, empapados en olor a colonia, correr a buscar el romántico parque donde poder bailar con la chiquilla amada a los compases de aquellas canciones lentas, maravillosas, cargadas de íntimo significado; aquellas que hablaban del mar, de un lejano puerto con dos niños de la mano, de un atardecer, de la noche, de un baile... de ti. A la vuelta del verano las clases y con ellas las tardes de espera en la pequeña cafetería cercana a la playa. La cita, la sonrisa, dos manos juntas, un beso, una frase de amor y luego..., después los sueños con un futuro común, con una vida entera juntos, con un amor que ya por entonces se nos antojaba imposible a los dos. Allá, en la cuesta, sigue la iglesia, la de misa dominical de doce y media. Cuantas veces cruzamos allí nuestras miradas con las de las chiquillas que amábamos, con aquellas que nos privaban de otros sueños que no fueran los que ellas protagonizaban cada noche; aquellas que luego vigilábamos, a hurtadillas, mientras preparaban la mesa para la comida familiar en sus casas. Casi todo sigue igual que entonces o quizás ya nada sea como antes. Muchas cosas han desaparecido con el paso de los tiempos. La tienda de ultramarinos de la calle; la quincalla de la esquina; el bar existencialista con nombre siniestro; la pequeña farola del número dieciséis; el solar donde guardábamos la madera de la hoguera de San Juan; el gran depósito de agua de la Electra; el pequeño campamento; el árbol que lloraba sangre... Muchas de las gentes que aquí vivían se han ido, algunas para siempre, para no regresar jamás, otras simplemente han iniciado otra vida cuyos derroteros las han alejado de mi calle. Sin embargo hay otras cosas que siempre seguirán siendo igual por mucho tiempo que transcurra y ahí es donde radica, precisamente, la esencia de mi calle. Hoy he estado aquí y aquí sigue la plaza de cemento con otros niños que ocupan mi lugar de juegos; también sigue el viejo castillo de cuento de hadas y seguro que alguien espera, cada tarde, que algún reloj marque la mágica hora tantas veces esperada por mí; tampoco ha desparecido el perdido reducto de fantasmas que a muchos hará reflexionar sobre las verdades trascendentales de la vida; incluso sigue en pie el kiosco de la calle atendido, como siempre, por el que fuera compañero mío de correrías; ni siquiera ha desaparecido la terraza de la casa de Isabel donde seguro alguien habrá hecho otros guateques. Muchas cosas siguen igual en mi calle de siempre, muchas cosas que me recuerdan aquellos años felices en los que yo correteé por sus aceras, soñé con sus hogueras de noche de San Juan y me enamoré de una chiquilla que vivía a la vuelta de la esquina. Ya es tarde, llueve y hace frío. Me alejo de mi calle sin volver la vista atrás, me alejo para buscar ese mundo mío que se forjó entre las cuatro esquinas de mi calle de siempre, rodeado por mis amigos y soñando con metas inalcanzables cerca de las estrellas. 5 Las Meigas, una evocación de la Semana Santa Él último desfile procesional se encerró en su templo; poco a poco, los capirotes vuelven a sus cajas y los hábitos a los largos armarios; se guardan con cuidado guiones y estandartes e incluso alguna imagen se retira del culto público cubierta con telas y paños que la preserven durante todo el año. La Semana Santa ha concluido y tras el último redoble de tambor y el postrer agudo del clarín, todo vuelve a ser como antes. La Semana Santa coruñesa ha concluido y las Meigas guardarán, por unos días, mantillas y peinetas, Bandas y trajes regionales, para darles el descanso que merecen una vez pasados estos agotadores días de largos desfiles procesionales por las calles de nuestra ciudad. Para muchas fue su primera puesta de Mantilla y para otras el estreno del Traje regional. Todas se han hecho fotografías que guardarán como el mejor de los recuerdos del inolvidable año en el que fueron proclamadas Meigas del San Juan coruñés. Un recuerdo que, como la Semana Santa 2016, no olvidarán y de manera muy especial en este año en que sufren la incomprensión, los odios, los rencores y el más amargo y atávico revanchismo de los sectarios que dicen gobernar la ciudad. Estoy seguro que durante estos días, que ya quedan atrás, las Meigas, habrán vuelto sus ojos al Cristo del Buen Consuelo o a la Santísima Virgen, en sus diferentes advocaciones, para pedirles mediación. La Semana Santa 2016 es ya tan solo una evocación que, poco a poco, se irá perdiendo en el tiempo, quedando de ella, entre otras cosas, el recuerdo de este maravilloso grupo de chiquillas que, con muy pocos años a cuestas, son capaces de luchar contra viento y marea, sobre todo contra marea, para sacar adelante una fiesta que es de todos y que gracias a su presencia a lo largo de los años llegó a ser lo que es, una cita de interés turístico internacional. Abril ha doblado la esquina de marzo y con él se disipan definitivamente los últimos ecos de los lentos redobles de cajas y tambores y los agudos sonidos de los clarines que acompañan, a paso lento, el discurrir de los pasos. Finalmente, es primavera. Las Meigas 2016 en la procesión de Jueves Santo 6 1916. Crimen en las fiestas de San Juan de Altamira A pesar de que el Papa había suprimido del calendario los festejos en honor a San Juan Bautista y otros que eran inmemoriales y añejos, viniéndose medio santoral abajo para tornarse esos días en trabajo, el vecindario de las calles de la Torre, Progreso y San Juan instaló profusión de farolillos multicolores y varios arcos voltaicos en combinación con banderolas y arcadas realizadas con ramaje. En la calle de San Juan se sorteó entre los vecinos un hermoso cordero y magnifico gallo. Buen número de murgas y organillos situados en lugares estratégicos se encargaron de marcar el compás a los danzantes callejeros quienes mantuvieron la animación y el buen humor hasta muy superada la medianoche. Varias hogueras alumbraron con su resplandor las mencionadas calles. Para honrar al Santo precursor y a la octava del Corpus, los vecinos de las calles de Sinagoga y Santa María prepararon sus calles durante una semana con iluminación a la veneciana con cohetes, bombas, gaitas y organillos y una hoguera en la plazuela de las Bárbaras. En Rubine, Plaza de Pontevedra, Camino Nuevo, Monelos y huertas de Garás se quemaron hogueras y algún que otro organillo amenizó improvisados bailes. La noche estrellada y de magnifica temperatura contribuyó de forma clave para que los vecinos se lanzasen en masa a las calles. Sin embargo la prensa hacía hincapié en que comenzaba a abandonarse la tradición de lavarse con las hierbas de San Juan para hacerlo con jabón y que la costumbre de ir a comer las fresas al Pasaje había decaído notablemente en ese año. Ningún día más indicado tuvo el Juzgado de La Coruña para entender de un caso donde un matrimonio, que había amenazado a una vecina con quemarle una finca en los altos de Eirís en venganza de no se sabía muy de que, se sentó en el banquillo de los acusados. El matrimonio llevó a cabo la venganza y le quemó un trozo de finca en el mes de mayo del año anterior que la perjudicada valoró en 18 pesetas. La Fiscalía les procesó solicitando para ellos una multa de 150 pesetas y la indemnización correspondiente de 18 pesetas. Al no haber encontrado el Juez pruebas suficientes contra el matrimonio, este quedó libre sobreseyéndose el juicio. Con motivo de las fiestas de San Juan, en un baile celebrado en una taberna de Altamira tuvo lugar un crimen. Alrededor de las once de la noche del día 25 de junio varios mozos discutieron acaloradamente cruzándose frases insultantes saliendo a relucir armas de fuego y blancas. Uno de los enfrentados, el joven de 15 años Emilio Prego, recibió un disparo en el vientre. Sus agresores se dieron a la fuga pero la Guardia Civil del puesto de Sigrás detuvo a Antonio Naya y Manuel Pardiñas, ambos de 19 años y vecinos de Anceis que fueron puestos a disposición judicial en La Coruña. Meigas en la presentación del cóctel “el orgullo de ser Meiga” Calín Fernández Barallobre 7 La Coruña de ayer Esta vieja fotografía, de la que desconocemos la fecha en la que fue tomada, recoge el inicio de la calle de Fernando Macías, en su confluencia con la avenida de Finisterre. Las dos edificaciones que se observan a derecha e izquierda pertenecen a las instalaciones que en esta calle poseía la “Electra Industrial Coruñesa”, una de las Empresas precursoras de la actual FENOSA. Allí, al inicio de la calle, se mantuvieron en pie, hasta la década de los 60 del pasado siglo, las dos edificaciones que observamos en esta vieja foto que constituyeron toda una seña de identidad de la querida calle de Fernando Macías. A la izquierda, en lo que hoy se corresponde con los números 1 al 11, se ubicaba una planta de transformación con unas enormes turbinas y frente a ella, en el espacio que hoy ocupa el polémico edificio “Conde de Fenosa”, se hallaba lo que debía ser un enorme depósito de agua, todo ello construido en los años 30. También, si observamos la fotografía con detenimiento, al fondo, muy difuminado por la mala calidad de la fotografía, se advierte vagamente el cuerpo central del convento y colegio de la Enseñanza, la Compañía de María, obra del arquitecto Bescansa y abierto en 1917 y en un segundo plano la silueta del Observatorio meteorológico, en los altos del Agra del Orzán, cuyas obras de construcción se iniciaron en 1928, concluyendo el 1º de abril de 1930, fecha en que se entregó al Estado. Las edificaciones de la Electra Coruñesa abrían la imaginaria puerta de la calle de Fernando Macías en su parte baja cuyo primer inmueble, en los números impares, se correspondía con el número 15; en tanto que por la acera de los pares no comenzaba, una vez cruzada la parte alta de la plaza del Maestro Mateo, hasta el número 12, lo que da idea de que los solares ocupados por la Electra suponían, en ambas aceras, más de un tercio del total de la calle. No podemos datar la fotografía que ilustra estos comentarios si bien debe ser de la década de los 30 o 40 del pasado siglo a tenor del estado que presenta la actual avenida de Finisterre que todavía no se advierte su trazado. Igualmente la calle de Fernando Macías no está urbanizada y no lo estaría hasta final de la década de los 40 en que se construyeron sus primeros edificios. Ambas edificaciones, suponemos ya casi fuera de uso, se mantuvieron en pie hasta los inicios de la década de los 60, siendo testigos mudos del ir y venir de aquella pandilla de chiquillos que en 1962 celebraron la primera Noite da Queima. Hoy, la fisonomía de la calle ha cambiado y los solares en los que su ubicaban la Electra coruñesa y el gran depósito están ocupados por modernos edificios, sin embargo queda de ellos el recuerdo y esta vieja fotografía que sirve para ilustrar todo lo antedicho. Correo electrónico: NOTICIARIO [email protected] En fechas pasadas en Delegado de la Xunta de Galicia en Madrid y Director de la Casa de Galicia en la Capital de España, José Ramón Onega López, aceptó la invitación, cursada por la Presidenta de la Asociación, para ser el encargado de pronunciar el Pregón de las HOGUERAS-2016. José Ramón Onega dará lectura a su pregón en el transcurso de la XLVI Fiesta del Aquelarre Poético que se celebrará, el próximo 19 de mayo, en el Teatro Municipal Rosalía Castro. Edita: Dpto. de Imagen y Protocolo de la Asociación de Meigas de las Hogueras de San Juan de La Coruña Nuestra página web: www.hoguerassanjuan.com DISTINTA VARA DE MEDIR Una vez más, estos personajes que gobiernan nuestro Ayuntamiento han utilizado diferente vara de medir en función de sus simpatías políticas lo que pone de manifiesto el sectarismo y el nepotismo por el que se rigen. Según hemos podido saber de fuentes de toda solvencia, hace unos meses el Ayuntamiento cedió el Teatro Rosalía Castro a una Entidad con ánimo de lucro que recibe asignaciones municipales y que suele ser contratado por el Ayuntamiento con motivo de la celebración de distintos eventos. Inclusive les permitió cobrar la entrada al Teatro pese a serle cedido de manera gratuita. Llama la atención que, sin embargo, a la Asociación de Meigas les hayan hecho saber que si quieren utilizar el Teatro para la celebración de la Fiesta del Aquelarre deberán hacer efectivo un canon de 2.000 e., despreciando el hecho de que el acceso a este acto es gratuito y sobre todo cuando la Asociación es una Entidad sin ánimo de lucro y que todos los actos que organiza son de carácter popular. Una vergüenza. Nunca una ciudad llegó a menos ni una gente como esta a más. Ver para creer. Fiesta de Interés Turístico Internacional Igualmente, la que fuera Meiga de Honor de las HOGUERAS-95, Carmen Mª No Varela ha aceptado la invitación para dar lectura al Pregón de la XXIX Fiesta del Solsticio Poético, acto de exaltación de la Meiga Mayor Infantil y de las Meigas de Honor Infantiles, que se celebrará el próximo 21 de mayo, en el Paraninfo del Instituto Eusebio da Guarda. El próximo día 27 se celebrará, en el Centro Cultural Agora, el XIII Certamen de Danza de A Noite da Queima que, por primera vez, no se celebrará en el Teatro Rosalía por una negativa expresa de los de la marea que parece que no consideran de interés una convocatoria como esta que reúne a la mayor parte de las Escuelas de Danza de la ciudad. Se está ultimando el programa de actos de las HOGUERAS-2016. Como es habitual estará integrado por el Ciclo “Páginas Coruñesas”; las Jornadas de Teatro, Música y Danza; la Semana de San Juan y el calendario de actos sociales en el que figuran la Fiesta del Aquelarre Poético, a celebrar el próximo 19 de mayo; la Fiesta del Solsticio Poético que se celebrará el día 21 de ese mismo mes y el Homenaje a la Bandera que cerrará las HOGUERAS-2016 el 30 de junio. Se celebró la Ceremonia de Proclamación Con brillantez se celebró, el pasado día 17, en la Sala de Cultura del Sporting Club Casino, la Ceremonia de Proclamación e imposición de Bandas a las Meigas 2016 que, por primera vez, por la negativa expresa del Alcalde no se pudo celebrar en el Salón de Sesiones del Palacio Municipal como venia siendo habitual desde el año 2010. La Ceremonia resultó brillante, contando con la presencia de numerosas Autoridades, representaciones, Meigas Mayores y de Honor de años anteriores y familiares y amigos de las Meigas-2016. La Banda a la Meiga Mayor, Belén Ferreiro, se la impuso el General Francisco Sánchez, Jefe de la Fuerza Logística Operativa, haciendo lo propio con la Meiga Mayor Infantil, Alba Rodríguez, la Directora Xeral de Gandería, Belén Mª Do Campo. Tras la proclamación de las Meigas Mayores se procedió a la imposición de Bandas a las Meigas de Honor y Meigas de Honor Infantiles que corrió a cargo de diferentes Autoridades, representaciones y Meigas Mayores de pasadas ediciones. Los discursos pronunciados tanto por Belén Ferreiro como por Alba Rodríguez, pusieron de manifiesto su cariño a la fiesta de las HOGUERAS, utilizando palabras muy emotivas y comprometiéndose para trabajar por la fiesta de San Juan en nuestra ciudad. La última en intervenir fue la Presidenta de la Asociación de Meigas, Mª Concepción Astray, quien deseó a os asistentes un feliz San Juan 2013. Felicitamos a la Asociación de Meigas y en especial a la Directora del acto, Lucía Fonte, por el éxito alcanzado en su organización. Enhorabuena.