Rewrite the Future- Policy report.qxp

Transcripción

Rewrite the Future- Policy report.qxp
Reescribamos el Futuro
Educación para niños y niñas en
países afectados por conflictos
Reescribamos el Futuro
Educación para niños en países afectados por conflictos
La Alianza Internacional Save the Children es la más importante organización
independiente del mundo para la defensa de los derechos del niño, con miembros en
28 países y programas en más de 100. Luchamos por la defensa de los derechos del
niño e introducimos mejoras duraderas en la vida de los niños y de las niñas en todo el
mundo.
Nuestra visión:
Save the Children trabaja por un mundo
que respete y valore a cada niño
escuche a los niños y aprenda de ellos
en el que todos los niños tengan esperanzas y oportunidades
Nuestra misión:
Save the Children lucha a favor de los derechos del niño. Introducimos mejoras
inmediatas y duraderas en la vida de los niños en todo el mundo.
Publicado por:
Alianza Internacional Save the Children
Cambridge House
Cambridge Grove
London W6 0LE
Reino Unido
Primer publicación en 2006-08-20
© International Save the Children Alliance 2006
Asociación benéfica registrada con el número 10768220
La presente publicación está sometida a los derechos de autor. Se permite su reproducción por
cualquier medio y sin autorización previa para fines de enseñanza, sin embargo, no para su
reventa. Su reproducción para otros fines requiere la autorización previa por escrito del editor y
puede estar sujeta al pago de cuotas.
Composición tipográfica: Grasshopper Design Company
Fotografía de la portada: Angelina, 13, con el responsable de educación de Save the Children Nyanjur Bilal
en una escuela financiada por Save the Children en el Campo para desplazados internos "Mayo" en el norte de
Sudán (Felicia Webb)
Impresión: Park Communications Limited
Contenido
Abreviaturas
iv
Prefacio
v
Introducción
1
1 El impacto de un conflicto sobre los niños y su educación
5
2 ¿Por qué debemos cumplir el desafío?
11
3 Hacer realidad el desafío - es posible
17
4 Superar los desajustes de financiación
25
5 Reescribamos el futuro - recomendaciones
33
Notas de pie
37
Abreviaturas
AOD
Ayuda Oficial al Desarrollo
DERP
Documentos de Estrategia de Reducción de la Pobreza
DFID
Department for International Development (Reino Unido)
EPT
Educación para Todos
FDPE
Fondo para el Desarrollo de Programas de Educación
INEE
Red Interinstitucional para la Educación en Situaciones de
emergencia
IVR
Iniciativa Vía Rápida
OCHA
Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (Naciones
Unidas)
ODM
Objetivos de Desarrollo del Milenio
ONG
Organización No Gubernamental
ONU
Organización de Naciones Unidas
PIB
Producto Interior Bruto
PNB
Producto Nacional Bruto
SWAP
Enfoque sectorial
UNESCO
iv
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y
la Cultura
Prefacio
Ningún niño debería pagar el precio por las guerras desatadas por adultos. Sin
embargo, ellos sufren cada vez más las consecuencias de esas guerras. Millones de
niños son asesinados, otros millones resultan heridos y millones más son obligados a
pasar toda su infancia en campos de refugiados u otros lugares temporales. Los niños
no pueden esperar a que acabe el conflicto. Por esta razón, nosotros vamos a empezar
a ocuparnos de sus necesidades en materia de educación.
Resulta vergonzoso que en el año 2006 haya todavía 115 millones de niños en el
mundo, privados de su derecho a la educación primaria. Más preocupante aún es el
hecho de que una tercera parte de esos niños esté alejada de las escuelas como
consecuencia de conflictos. Sin educación y sin protección se ven privados tanto de su
infancia como de la esperanza para un futuro mejor.
La educación desempeña un papel vital para el desarrollo de las futuras generaciones.
Fomentando el crecimiento personal, contribuye, así mismo, al desarrollo económico y
social de los países. Asegurar que todos los niños tengan acceso a la educación es una
responsabilidad común de todos nosotros. Debemos prestar una atención especial al
tema de la promoción de la educación de las niñas. Además, hemos de impulsar la
elaboración de unos planes de estudio que promuevan la sinceridad, el pensamiento
crítico y la creatividad.
Las oportunidades que futuras generaciones vayan a tener en sus vidas dependerán, en
gran medida, de la manera en que nosotros seamos capaces de solucionar los
problemas de nuestra época. Celebramos y apoyamos la iniciativa de Save the Children
de asumir un liderazgo para afrontar el desafío de reescribir el futuro de los millones
de niños que se ven privados de una educación por el hecho de vivir en países
afectados por conflictos.
Jan Eliasson
Presidente de la 60ª
Sesión de la Asamblea General
de Naciones Unidas
Haya Rashed Al Califa
Presidenta de la 61ª Sesión
de la Asamblea General de
Naciones Unidas
v
Karin Beate Nøsterud/Save the Children
"Sueño con un país que no esté en guerra"
Mirwais, 14, Afganistán
Introducción
Actualmente, unos 115 millones de niños en edad de enseñanza primaria no van a la
escuela. Estamos hablando de un 18 por ciento de los niños en edad de enseñanza
primaria de todo el mundo. Esos niños son privados de su derecho a la educación, de
una oportunidad justa para su vida, del acceso a capacidades y conocimientos y de las
vías para alcanzar una vida mejor para ellos y sus países. Cada día, esos niños se han de
enfrentar a una vida caracterizada por la miseria y el trabajo, así como por una
perspectiva desalentadora de futuro.
Existen varios factores que impiden que esos niños vayan a la escuela. No obstante,
uno de los obstáculos más importantes y más difíciles de superar es el conflicto.
Además de matar y herir a millones de niños, los conflictos interrumpen la vida
normal, obligan a millones de familias a huir de sus casas, separan a niños de sus
familias y reducen las escuelas a escombros. Según las estimaciones realizadas por Save
the Children, unos 115 millones de niños en edad de enseñanza primaria no van a la
escuela, de ellos, al menos 43 millones, es decir, uno de cada tres, viven en Estados
frágiles afectados por conflictos armados 1.
En una situación de conflicto, todos los sistemas tienden a derrumbarse. La respuesta
tradicional por parte de la comunidad internacional es el despliegue de ayuda de
emergencia, centrada en las necesidades básicas, como la provisión de refugio,
alimentos, agua, instalaciones sanitarias y cuidados de salud. A menudo, la educación
no forma parte de la ayuda de emergencia, independientemente de que dicha
emergencia sea consecuencia de una catástrofe natural o de un conflicto. Cuando la
situación parece volver a la normalidad y las acciones emprendidas por parte de la
comunidad internacional comienzan a centrarse en un desarrollo a más largo plazo, la
educación se convierte en prioridad, al ser considerada uno de los componentes claves
para la vuelta a la estabilidad del país en cuestión.
El problema de este enfoque es que ni el mundo, ni los conflictos siguen una
trayectoria clara o lineal. Los países entran en conflictos y salen de ellos, las situaciones
de emergencia y fases de desarrollo se suceden, como hemos podido observar hace
poco en Timor Leste y Sri Lanka. Con frecuencia, los niños de esos países viven toda
su infancia en una situación de emergencia, recibiendo, en el mejor de los casos, tan
sólo ayuda de emergencia, como, por ejemplo, en Somalia y en partes de la República
Democrática de Congo. Cuando se considere que un país ha entrado en la fase de
desarrollo, puede que no existan fundamentos sobre los cuales empezar a construir el
futuro de ese país. En el Sur de Sudán, por ejemplo, existen muy pocas escuelas, un
plan de estudios totalmente incompleto, una gran escasez de profesores, que además
carecen de cualquier tipo de formación, y la ausencia completa de sistemas educativos.
Uno de cada tres niños en
edad de enseñanza
primaria no escolarizado
vive en países frágiles
afectados por conflictos.
Save the Children fue fundado al final de la Primera Guerra Mundial con el objetivo de
1
REESCRIB AMOS EL FUTURO
satisfacer las necesidades de los niños que, a ambos lados del conflicto, sufrían las
consecuencias de la guerra. En aquel entonces, se dijo que se trataba de la Guerra que
terminaba con todas las guerras. No obstante, casi un siglo después, el mundo está
plagado de conflictos. La diferencia más terrible entre la situación de entonces y la
actual consiste en que hoy en día la mayoría de las víctimas son civiles y no soldados;
de los que son abandonados a la miseria, la mayoría son niños. El mundo se ha
olvidado de esos niños, dejándoles sin educación y, por lo tanto, sin esperanzas ni
oportunidades, en algunos casos, durante varias generaciones.
La educación está reconocida como un derecho humano básico para todos los niños,
independientemente de las circunstancias en las que vivan. Al ritmo actual de progreso,
aún cumpliéndose todas las promesas, el objetivo de alcanzar la educación primaria
universal hasta 2015 no podrá hacerse realidad. Una de las razones de ese fracaso es la
ausencia de cuestiones relacionadas con conflictos o de propuestas de soluciones para
la educación de niños afectados por conflictos armados en los documentos para la
planificación de la educación, en conferencias internacionales sobre educación y en los
debates sobre el programa Educación para todos. Si se quieren alcanzar los Objetivos
de Desarrollo del Milenio en relación con la educación y las metas de "Educación para
todos", aprobadas por el Foro Mundial sobre la Educación de Dakar en 2000, han de
emprenderse acciones urgentes y efectivas.
Si no se consigue proporcionar protección y educación a los niños afectados por
conflictos, su futuro, al igual que el de sus países, estará seriamente en peligro. El
mundo sería un lugar mejor para todos si todos los niños tuvieran una educación y
unas oportunidades justas para sus vidas. Por esta razón, las 28 organizaciones de todo
el mundo que forman la Alianza Internacional Save the Children, han unido sus
fuerzas para reescribir el futuro de los millones de niños privados de educación a causa
de los conflictos que azotan a sus países y porque las comunidad internacional se ha
olvidado de ellos.
Trabajaremos con los niños y sus comunidades para cumplir nuestro compromiso de
escolarizar, hasta el año 2010, a tres millones de niños, actualmente sin ningún tipo de
educación escolar, y de mejorar la calidad de educación de un total de ocho millones de
niños. Así mismo, estamos dirigiendo un llamamiento a la comunidad internacional y a
los gobiernos nacionales para que contribuyan a garantizar que los 43 millones de
niños que viven en países afectados por conflictos puedan gozar de la educación de
calidad a la que tienen derecho.
2
Anna Kari
"Estábamos cansados de sus ataques y de la guerra. Murieron niños y padres. No
había escuela. Todo era malo y caótico."
Sifa*, 15, República Democrática de Congo
* no es su nombre auténtico
301,000
354,000
577,000
497,000
955,000
Camboya
Republica Centro Africana
Chad
Colombia
Cote dIvoire
968,000
Myanmar (Burma)
292,000
Congo3
Leste 5
43,304,000
498,000
Zimbawe
TOTAL
491,000
1,068,000
75,000
2,405,000
22,000
Uzbekistan
Uganda
Timor
Sudan
Sri Lanka 4
1,580,000
431,000
Sierra Leona
Somalia
206,000
Ruanda
Republica del
231,000
Papua Nueva Guinea
7,813,000
142,000
Liberia
Pakistan
818,000
Iraq
7,662,000
572,000
Haiti
Nigeria
493,000
Guinea
1,049,000
5,994,000
Etiopia
Nepal
312,000
Eritrea
5,290,000
536,000
Burundi
Republica Democratica
del Congo
533,000
1,139,000
Primary-aged children
out of school
Angola
Afganistan 2
Conflict-affected
fragile state
3. UNESCO (2006) Education for All Global Monitoring Report 2006
http://portal.unesco.org/education/en/ev.php-URL_ID=43283&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html
2. UNESCO/UNICEF (2005) and United Nations Development Project (2004)
Afghanistan Human Development Report 2004, UNDP
www.undp.org.af/nhdr_04/pdfs/B_chapter2.pdf
1. Source: UNESCO/UNICEF (2005) Children out of School:
Measuring exclusion from primary education, UNESCO Institute for Statistics,
Montreal www.uis.unesco.org/ev_en.php?ID=6427_201+1DZ=DO_TOPIC, except where indicated.
Países afectados por conflictos regionales significativos (no
países frágiles afectados por conflictos armados)
Países frágiles afectados por conflictos armados
5.World Bank (2004) Timor-Leste: Education since independence,
from reconstruction to sustainable improvement.
http://www-wds.worldbank.org/servlet/WDSContentServer/WDSP/IB/2005/01/04/00
0160016_20050104120709/Rendered/PDF/297840PAPER0TP1INEPENDENCE01public1.pdf
4.The World Bank Group (2004) GenderStats Database of Gender Statistics
http://devdata.worldbank.org/genderRpt.asp?rpt=education&cty=LKA,Sri%20Lanka&hm=home2
Países afectados por conflictos
El impacto de un conflicto sobre los 1
niños y su educaciÓn
Desde 1990, el 90 por ciento de los muertos causados por conflictos armados han sido
civiles, el 80 por ciento de esas víctimas son mujeres y niños 3. Durante la última década,
dos millones de niños murieron en conflictos armados, un número tres veces mayor ha
sido gravemente herido o ha sufrido discapacidades de por vida 4. Otros millones de niños
se han visto obligados a presenciar actos terribles de violencia, o a participar en ellos 5. En
situaciones de conflicto, muchos niños son separados de sus familias, sufren el
desplazamiento o el abandono y corren el riesgo de ser reclutados por fuerzas armadas. En
la inmensa mayoría de los conflictos armados se utiliza a niños menores de 18 años como
combatientes 6. En 2003, en más de la mitad de los conflictos armados se utilizaron a
combatientes menores de 15 años 7. Como consecuencia de la ruptura de las estructuras
familiares y comunitarias, los niños son, así mismo, extremadamente vulnerables ante el
riesgo de explotación sexual y de tráfico de menores, además de verse obligados, más de lo
habitual, a trabajar para ayudar a sus familias.
La totalidad de los 19 conflictos armados importantes registrados en 2004, fueron
clasificados como conflictos internos 8. No obstante, en un mundo globalizado, los
conflictos nacionales se convierten cada vez más en conflictos internacionales, en lo que se
refiere a su naturaleza y a sus efectos. Casi todos los conflictos son conflictos de larga
duración. Tan sólo tres, es decir, los de Irak, Dafur (Sudán) y la lucha contra Al-Qaeda,
tienen una antigüedad inferior a diez años.
A pesar de todo, el número de refugiados se ha reducido a 8,4 millones 9, habiéndose
incrementado el de las personas desplazadas internas. En 2005, unos 24 millones de
personas vivían en campos para desplazados internos o en situaciones de temporalidad
dentro de sus propios países 10. Sin embargo, dado que muchos de los desplazados internos
se encuentren en esa situación durante muchos años, en el caso de los millones de niños
que crecen en medio de un conflicto, difícilmente se puede hablar de desplazamiento
"temporal".
Save the Children ha identificado a un grupo de países susceptibles de sufrir conflictos o
afectados por los mismos (véase mapa). En 18 de esos 30 países existen actualmente
combates activos. Juntos representan el 13 por ciento de la población mundial,
encontrándose entre ellos aquellos países que menos posibilidades tienen de alcanzar el
objetivo de la educación primaria universal.
Perder la oportunidad de recibir una educaciÓn
En la actualidad, en los países frágiles afectados por conflictos hay un total de 43 millones
de niños que no van a la escuela. En una etapa en la que los niños podrían sacar el máximo
provecho de las estructuras, de las oportunidades, de las esperanzas, de la protección, de los
conocimientos y de las alternativas que les ofrece la educación, dicha educación les está
siendo denegada. Cuanto más se necesita la educación para romper el círculo de pobreza,
destrucción y conflicto, menos disponible se encuentra. Por ejemplo, en la República
Democrática de Congo, más de 5 millones de niños en edad de enseñanza primaria (6-11
años) no van a la escuela, y más de 6 millones de niños de entre 12 y 17 años nunca han
sido escolarizados 11. En Dafur, en el Norte de Sudán, sólo el 39 por ciento de los niños en
edad de enseñanza primaria está escolarizado 12.
"En la Primera Guerra
Mundial, los civiles
representaban el 5 por
ciento de las víctimas.
En la Segunda Guerra
Mundial, ese porcentaje
se incrementó hasta
llegar al 48 por ciento.
Hoy en día, hasta el 90
por ciento de las
víctimas son civiles, y de
ellos, un número cada
vez mayor son mujeres y
niños."
Olara Otunnu, Representante
Especial de Naciones Unidas
para Niños y Conflictos
Armados 2
5
REESCRIB AMOS EL FUTURO
No sorprende que muchas familias no quieran enviar a sus hijos a la escuela, cuando estos
corren el riesgo de ser atacados con armas, secuestrados o reclutadas por las milicias. En
Nepal, entre enero y agosto de 2006, más de 11.800 alumnos fueron secuestrados de
escuelas rurales para el adoctrinamiento o el reclutamiento forzoso por parte de las milicias
13
. A menudo, los profesores se convierten en objetivo de las fuerzas armadas, ya que son
considerados miembros importantes de la comunidad y empleados del gobierno. Muchos
de ellos son víctimas de asesinatos o deben huir de la violencia. Como consecuencia, a
menudo existe una gran escasez de profesores cualificados. Los profesores nuevos, no
cualificados, que son introducidos para llenar ese vacío, a menudo carecen de sueldo y de
formación. En Afganistán, la mayoría de los profesores, directores y formadores
cualificados huyeron durante el conflicto. En la actualidad, menos del 15 por ciento de los
profesores cuenta con algún título profesional 14. En Uganda, hasta el 46 por ciento de los
profesores carece de formación, a pesar de tener que hacer frente a clases de hasta 200
alumnos 15.
Las escuelas son destruidas o ocupadas por las fuerzas armadas, además de ser utilizadas
como refugio para personas que tuvieron que huir o que perdieron sus casas. En Liberia,
aproximadamente el 80 por ciento de las escuelas fueron destruidas durante la guerra civil
de 1989 a 1997. La guerra desatada en 2003 causó aún más daños 16. En Nepal, tanto los
rebeldes maoístas como las fuerzas estatales han utilizado escuelas como campos de batalla,
además de confiscarlas para utilizarlas como cuarteles y para otros fines 17.
Como en países afectados por conflictos se evita que los niños vayan a la escuela hasta que
sean más mayores, a menudo la edad de los alumnos se sitúa por encima de la media. En
Liberia, tras 14 años de conflicto, aproximadamente un 60 por ciento de los alumnos de
primaria tiene una edad superior a la habitual para ese nivel educativo 18. Esa circunstancia
puede conducir a un incremento de las tasas de abandono escolar, especialmente ante la
ausencia de perspectivas de una educación y/o formación post-primarias, ya que existen
obligaciones adicionales que requieren el tiempo de los niños más mayores. Así mismo, las
familias se resisten a enviar a sus hijos más pequeños a la escuela, especialmente a las hijas,
cuando hay niños de una edad superior en la clase.
Al igual que en situaciones de no conflicto, el acceso de las niñas a la educación representa
un problema más grave. Existen actitudes culturales tradicionales que desaprueban o no
valoran la educación de las niñas, por lo que éstas suelen ser retenidas en casa para cuidar
de sus hermanos pequeños y ocuparse de las tareas domésticas. Así mismo, están expuestas
al riesgo del acoso sexual en su camino a la escuela, o por parte de profesores o alumnos
masculinos. Las niñas corren el peligro de ser secuestradas por grupos armados y de ser
obligadas a convertirse en "esposas" de combatientes, lo que, a su vez, puede conducir a
embarazos no deseados e infecciones con el VIH.
Al igual que en
situaciones de no
conflicto, el acceso de
las niñas a la educación
representa un
problema más grave.
Cuanto más tiempo perdure un conflicto, más difícil resultará mantener la financiación y el
apoyo administrativo para la educación. El fracaso completo o parcial de la gestión y
administración de la educación significa que los materiales escolares y los salarios de los
profesores no llegan a las escuelas de algunas regiones o de gran parte del país. La
realización de exámenes finales se convierte en una tarea cada vez más difícil. Como
resultado, se registra un gran número de cursos escolares incompletos o no acreditados. La
guerra y las acciones contrainsurgencia absorben un porcentaje cada vez mayor de los
presupuestos de los Estados, lo que se traduce en una menor disponibilidad de fondos para
la educación con sus consiguientes repercusiones para todo el sistema. El sustento de las
familias se ve afectado, los ingresos se vuelven más inseguros y la ayuda de los niños resulta
más urgente para las familias, por lo que la asistencia regular de los niños a un sistema
educativo formal, en caso de que exista, se convierte en una tarea cada vez más difícil.
Los conflictos y, en especial, los conflictos prolongados afectan inevitablemente a la calidad
de la educación. La mala calidad de la enseñanza sigue siendo una de las principales razones
por las que los niños no van a la escuela o la abandonan antes de tiempo. Mantener a los
6
1
niños en la escuela representa quizá el mayor reto en ese contexto. En el Sur de Sudán, la
tasa de escolarización es tan sólo del 20 por ciento, y de ellos, sólo un 2 por ciento termina
la enseñanza primaria 19. En el norte de Uganda, el 70 por ciento de los niños que empieza
la enseñanza primaria no la termina 20. En Angola, la mala calidad de la enseñanza y del
aprendizaje es la principal razón por la que un 27 por ciento de los niños tiene que repetir
curso 21. Los niños, por su parte, alegan a menudo el castigo físico y una disciplina férrea
como causas de su abandono escolar. El apoyo emocional y psicológico que tanto necesitan
los niños, y especialmente aquellos que han vivido los traumas de la guerra, con frecuencia
es ignorado.
A medida que la situación empeora y los profesores cualificados son cada vez más escasos,
los métodos de enseñanza suelen perder su eficacia. Existe el peligro de que no se
transmitan los contenidos esenciales y que los materiales no estén disponibles. Para los
niños resulta cada vez más difícil completar la enseñanza primaria. Como consecuencia,
carecen incluso de un dominio mínimo de las capacidades básicas para seguir estudiando o
ganarse un sustento.
En muchos casos de conflictos agudos y crónicos, la comunidad se convierte en el principal
proveedor de educación. Las comunidades se encargan de la construcción de escuelas, de la
búsqueda de profesores, de la negociación con autoridades de cualquier tipo, o con
organizaciones no gubernamentales nacionales e internacionales (ONG), para conseguir el
salario de los profesores, un salario que ellas mismas suelen completar ofreciendo
alojamiento y comida a los profesores. En algunos casos, las comunidades pagan incluso los
salarios de los profesores. Sin embargo, las capacidades económicas de esas comunidades
en dichas circunstancias son limitadas.
La educación
desempeña un papel
clave en el desarrollo de
la identidad nacional y
puede servir tanto de
impulsora de la paz
como de arma.
Prevenir o activar conflictos
Un sistema educativo de calidad puede tener beneficios acumulativos, capaces de mitigar el
impacto de un conflicto sobre los niños y de ayudar a prevenir conflictos. Sin embargo, lo
contrario también es cierto. La educación puede ser utilizada para crear divisiones y
provocar conflictos adicionales. La educación y su denegación han sido utilizadas como
medio de opresión bajo el régimen de apartheid en Suráfrica. Las desigualdades en el
acceso a la educación fueron una fuente de fricciones y una de las causas originarias del
conflicto, tanto en el caso del genocidio en Ruando como en el conflicto de Kosovo. Si, en
medio de un conflicto, se niega a los jóvenes el acceso a la educación, estarán expuestos a
mayores riesgos de ser víctimas de reclutamiento militar, violencia sexual, prostitución y de
contraer enfermedades de transmisión sexual. Pueden ser convertidos en fuerzas
desestabilizadoras y destructivas, dándose así continuidad a círculos de violencia y
vulnerabilidad 22.
La educación desempeña un papel clave en el desarrollo de la identidad nacional y puede
servir tanto de impulsora de la paz como de arma. Los contenidos de la enseñanza pueden
ser utilizados para fines políticos, con profesores que impongan puntos de vista parciales y
distorsionados sobre el lenguaje, la religión o la historia. La asignación, en los libros de
texto, de estereotipos y estigmas a diferentes grupos puede dar lugar a tensiones sociales, ya
que justifican ciertas desigualdades. El plan de estudios puede ser utilizado para perpetuar
ideologías intolerantes. Una enseñanza inapropiada y de baja calidad, así como un entorno
escolar inadecuado pueden dar lugar a malos resultados académicos, al absentismo escolar y
al abandono de la enseñanza, lo que, a su vez, puede desembocar en comportamientos
antisociales y violentos.
La educación puede ser una fuerza positiva para lograr la paz y una contribución valiosa
para la prevención de nuevos conflictos, siempre y cuando sea inclusiva y de buena calidad.
A pesar de todo, la educación, es decir, hacer posible su acceso y su calidad, no es tomada
en cuenta en las intervenciones de ayuda humanitaria en situaciones de conflicto. En
situaciones post-conflicto, cuando existe un mayor interés por la educación y una mayor
asignación de recursos a la misma, en muchos casos no suele ser ni adecuada ni de buena
calidad.
7
REESCRIB AMOS EL FUTURO
El poder rehabilitador de la
educaciÓn
Una serie de guerras que tuvieron lugar, entre 1996 y
2003, en la República Democrática de Congo han
llevado al empobrecimiento del país y a la
traumatización de los niños. Más de 3,5 millones de
personas fueron asesinadas y otros millones fueron
desplazadas. A pesar del armisticio declarado y de las
elecciones gubernamentales celebradas en 2006, el
conflicto aún sigue activo en algunas provincias.
Más de cinco millones de niños en edad de enseñanza
primaria no reciben ningún tipo de educación, y más de
seis millones de niños de entre 12 y 17 años nunca han
asistido a la escuela. Niños han sido obligados a entrar
en las milicias, raptados y secuestrados de las escuelas.
Escuelas han sido quemadas o convertidas en bases
militares o refugio para personas que tuvieron que huir
de sus casas. Durante más de diez años, los profesores
no han recibido salario.
A principios de los años 70, la tasa de escolarización
era muy elevada para la región, pero a partir de
entonces, el sistema educativo ha sufrido serios daños.
Los padres son los que financian no sólo las escuelas,
sino todo el sistema administrativo. Como
consecuencia, en las regiones orientales afectadas por
el conflicto, la mitad de la población no se puede
permitir mandar a sus hijos a la escuela. Muchos de los
niños no escolarizados han estado o están involucrados
en las actividades de fuerzas armadas, y muchos,
especialmente las niñas, han perdido para siempre la
esperanza de recibir educación.
Las provincias orientales están aisladas por vía
terrestre del resto del país y siguen padeciendo el
conflicto, incluida la invasión de países vecinos. Los
habitantes de las aldeas siguen obligados a abandonar
sus casas. Las consiguientes interrupciones en los ciclos
de sembrado y cosecha tienen como consecuencia que
muchos padecen un hambre extrema. Continúa el
reclutamiento de niños por parte de fuerzas armadas, a
veces forzoso, pero también de forma voluntaria ante
la falta de otras oportunidades. Más allá del nivel
escolar, las autoridades educativas son muy débiles.
Aunque en un distrito exista un inspector escolar, éste
carece de oficina y de medio de transporte.
La experiencia de Save the Children
Save the Children se ha fijado el objetivo de
incrementar el número de niños escolarizados en las
alejadas provincias de Kivo del Norte y del Sur en la
parte oriental de la República Democrática de Congo.
En el marco de nuestro trabajo en seis escuelas de tres
distritos, que hemos ayudado a rehabilitar, estamos
ofreciendo programas intensivos de aprendizaje para
8
niños de mayor edad que no hayan podido recibir
enseñanza primaria, además de proporcionar cursos de
formación profesional.
En nuestro trabajo con las comunidades locales hemos
creado comités encargados de la identificación de los
niños más vulnerables. Una de las primeras tareas
consistía en convencer a las comunidades locales de la
importancia de la educación y del hecho de que todo
niños tiene derecho a la educación. Reunimos a
directores de escuelas, profesores, padres y niños para
animar a las escuelas a que acepten a niños que no
pueden pagar las matrículas. En un principio, los
profesores se mostraron reacios, ya que dependen de
las matrículas para el pago de sus salarios. No
obstante, gracias a la rehabilitación de las escuelas, el
aprovisionamiento de material escolar y la formación
de los profesores, se les ha podido convencer.
Finalmente, todas las escuelas estaban dispuestas a
aceptar a niños que no puedan pagar las matrículas,
previamente identificados como especialmente
vulnerables.
Un punto realmente fuerte de nuestro trabajo ha sido
de oferta de distintos tipos de programas educativos,
diseñados para satisfacer las diferentes necesidades
que, en un paso previo, habían sido identificadas en
talleres comunitarios. Actualmente estamos ampliando
ese programa, con el fin de que niñas, que hayan tenido
hijos como consecuencia de su estancia en fuerzas
armadas, puedan asistir a las clases. La educación es una
vía importante para facilitar protección, especialmente
para aquellos niños que, de otra manera, podrían ser
excluidos y despreciados por sus comunidades, debido
a que habían formado parte de grupos armados. Una
vez que los niños han sido aceptados en la escuela,
también son aceptados en su comunidad.
Lo que necesitamos
Save the Children seguirá apoyando a las comunidades
en su lucha por mejorar el acceso a una educación de
calidad y por incrementar la protección de los niños
más vulnerables, incluidos aquellos que han estado
involucrados en grupos armados. Nos hemos fijado el
objetivo de escolarizar, hasta 2010, a 79.000 niños que
actualmente no van a la escuela, y de ofrecerles a ellos
y a otros 184.000 alumnos una educación mejor y más
apropiada.
Así mismo, apoyaremos al gobierno para que
incremente su financiación de la educación del 6 por
ciento actual, al 25 por ciento del presupuesto
nacional, devuelva a los niños, anteriormente
relacionados con fuerzas armadas, a sus escuelas y
comunidades, y supere la brecha de género en la
educación.
Felicia Webb
"Si todos tuvieran una educación, quizá no habría más luchas."
Deborah, 10, Sur de Sudán
"Por favor, vuelvan a
abrir la escuela. La
guerra es cosa de
adultos, pero nos
afecta a nosotros, los
niños. Ambas partes
están violando nuestros
derechos. ¿Por qué no
pueden tomar más en
cuenta a los niños?”
Gamesh, 16, Nepal
2
¿Por qué debemos cumplir el desafÍo?
No podemos ignorar la difícil situación de los niños cuyos derechos han sido
gravemente restringidos o reducidos a cero por el hecho de vivir en países afectados
por conflictos. Por el mero hecho de que resulte más difícil ofrecer educación en esos
países, no se puede justificar que no se proporcione. De hecho, existen varias razones
urgentes por las que el mundo debería centrar su atención en la educación de niños
afectados por conflictos.
En 1990, los delegados de 155 países y representantes de 150 organizaciones
acordaron en la Conferencia Mundial sobre Educación para todos, celebrado en
Jomtien, Tailandia, universalizar la educación primaria y reducir drásticamente el
analfabetismo antes del fin de esa década 24. En 2000, los líderes internacionales
aprobaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio como estrategia internacional para
erradicar la pobreza en el mundo. Dos de los objetivos se refieren específicamente a la
educación, siendo, sin embargo, la provisión de la educación un elemento central para
el marco general. Así mismo, en el Marco de Acción de Dakar, establecido en 2000 25,
se declara que para alcanzar la educación para todos, la comunidad internacional ha de
satisfacer las necesidades de los sistemas educativos afectados por conflictos,
catástrofes naturales e inestabilidad. Se hace un llamamiento a colaboradores
internacionales y bilaterales para que trabajen conjuntamente con sus aliados
gubernamentales y no gubernamentales para restablecer y proporcionar educación en
cualquier situación de crisis o post-conflicto, como un derecho humano de niños,
jóvenes y adultos. A pesar de todo, hay 43 millones de niños en el mundo que no
reciben educación, debido a que viven en Estados frágiles, afectados por conflictos. En
Haití, casi un niño de cada dos en edad de enseñanza primaria no va a la escuela,
ascendiendo el número total de niños no escolarizados en ese país a 570.000 26.
El derecho a la educaciÓn
Educación para todos significa educación para todos. Todos los niños del mundo
tienen derecho a la educación, según queda establecido en una serie de normas
internacionales, como la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 y la
Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Así mismo, dicho
derecho ha sido estipulado en tratados legalmente vinculantes, como la Convención
relativa a la lucha contra las discriminaciones en la esfera de la enseñanza de 1962 y la
Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño de 1989.
Existen otras legislaciones adicionales para los niños más vulnerables del mundo. En la
Convención de Naciones Unidas sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 se
establece que los niños refugiados deberán tener las mismas oportunidades de recibir
educación básica que los niños nacionales del país de acogida. El Convenio de Ginebra
relativo a la protección debida a las personas civiles en tiempos de guerra, de 1949,
"Existe un gran número
de problemas
relacionados con los
Derechos Humanos que
no podrán ser resueltos
mientras no se afronte el
derecho a la educación
como clave para resolver
otros Derechos
Humanos. La educación
actúa como elemento
multiplicador."
Katerina Tomasevski, antigua
Relatora especial de Naciones
Unidas sobre el Derecho a la
Educación 23
11
REESCRIB AMOS EL FUTURO
dispone que en tiempos de hostilidades, los Estados serán los responsables de
garantizar la educación de niños huérfanos o no acompañados y que las escuelas
deberán ser protegidas de ataques militares.
La educación sigue siendo un derecho humano básico para todo niño,
independientemente de las circunstancias e incluso durante un conflicto. A pesar de
todo, cada día millones de niños se ven privados de ese derecho por el hecho de vivir
en países inmersos en conflictos o que están saliendo de los mismos.
Una prioridad para niÑos, padres y comunidades
La educación es una petición constante y persistente de niños y padres en situaciones
de conflicto. Tanto los niños como los padres creen que la continuidad educativa es
muy importante para el futuro desarrollo de los niños y de la sociedad. Los padres
muestran una disposición impresionante a apoyar actividades educativas. Ellos
participan en comités de educación y en asociaciones de padres y profesores, y con
frecuencia están dispuestos a aportar su tiempo, su trabajo y sus limitados recursos. Si
la educación es una prioridad para niños y padres en países afectados por conflictos,
teniendo en cuenta los grandes esfuerzos que están realizando en unas circunstancias
extremadamente difíciles, también debería ser una prioridad para todos aquellos que
trabajen con ellos.
Protección y prevención
Durante la transición de una situación de crisis a la estabilidad, unos programas de
educación bien diseñados pueden brindar a los niños protección cognitiva, psicológica,
social y física. Así mismo, son capaces de promover la solución de conflictos, la
tolerancia, los derechos humanos y el sentido cívico. Resultados preliminares de un
estudio realizado en Nepal demuestran que aquellos niños que han recibido una
educación de calidad en las escuelas financiadas por Save the Children tenían menores
niveles de estrés y mejores resultados de estudio que los niños de otras escuelas 27.
Además, los niños que permanecen en la escuela durante el periodo en que la crisis va
dando paso a la estabilidad, suelen desempeñar un papel constructivo a la hora de
reconstruir las comunidades e impedir que sus países vuelvan a caer en un conflicto.
"Proporcionando una
educación de calidad,
se puede proteger a los
niños de daños físicos,
explotación y
violencia."
12
En situaciones de conflicto y post-conflicto, las escuelas pueden servir de refugio y
ofrecer una cierta normalidad dentro del mundo caótico que les rodea.
Proporcionando una educación de calidad, se puede proteger a los niños de daños
físicos, explotación y violencia, así como de abusos relacionados con su desplazamiento
forzoso. Las escuelas y los demás lugares de aprendizaje pueden proporcionar apoyo y
recuperación psicológicos.
El restablecimiento de servicios educativos durante y después de un conflicto es una
señal de la vuelta a la normalidad y estabilidad. La educación es muy importante para
ayudar a los niños a superar los traumas que han vivido y a desarrollar sus habilidades
sociales y su autoestima. Los niños que van a la escuela son menos vulnerables frente
al reclutamiento por parte de grupos armados, a trabajos abusivos y al peligro de ser
objeto de tráfico de menores. Los "lugares seguros" especialmente señalados, las
escuelas provisionales o las escuelas estatales pueden proteger a los niños,
transmitiéndoles capacidades esenciales para la vida, la concienciación sobre el peligro
de las minas antipersonales, informaciones acerca del VIH/SIDA, una educación para
la paz y habilidades para la solución de conflictos. Las comunidades se pueden
comprometer con la protección de los niños en el trayecto entre sus casas y la escuela,
asegurando que los niños estén protegidos del secuestro y del reclutamiento militar.
2
Así mismo, la educación proporciona a los niños y a sus familias esperanza para el
futuro, ya que reduce la pobreza y las desigualdades, además de sentar las bases para
una administración sólida y unas instituciones eficaces 28. La educación secundaria
puede desempeñar un papel especialmente valioso para la promoción del cambio en
países frágiles 29, ya que ayuda a proporcionar las capacidades necesarias, tanto en el
sector formal como el sector informal, para la creación de unas instituciones nacionales
fuertes y el arranque de la economía. Los países con niveles de educación más elevados
cuentan con mayor estabilidad política y unos derechos democráticos más consolidados
30
. La educación no influye sólo en las posibilidades de un niño de tener un futuro
mejor, sino también en las perspectivas de los países para romper el círculo de pobreza,
violencia e inseguridad.
Una inversión temprana en la educación protege a los niños de los aspectos más
perjudiciales de un conflicto y desempeña un papel importante en la construcción de la
paz, en la vuelta de los países a las vías positivas del desarrollo y en la superación de
los daños causados por el conflicto. A pesar de todo, la protección de los niños y la
educación siguen siendo consideradas asuntos secundarios en la mayoría de las
intervenciones de ayuda humanitaria en países afectados por conflictos agudos o
crónicos.
"A través de una
educación de calidad, se
puede promocionar
valores como la justicia,
tolerancia y paz."
Invertir en los niños
La educación puede ser una parte esencial en un proceso de recuperación de niños que
han vivido un conflicto armado. A través de una educación de calidad, se puede
promocionar valores como la justicia, tolerancia y paz. Se puede enseñar a los niños el
respeto hacia sus valores e identidades y hacia los de los demás. El desarrollo de las
capacidades mentales que tiene lugar en las escuelas, puede animar a los alumnos a
poner en duda ciertos mitos y normas sociales que, a su vez, fomentan la intolerancia y
el conflicto, como está ocurriendo en la situación post-genocidio en Ruanda. La
construcción de la paz, centrada en las comunidades y haciéndola extensiva a las
escuelas, puede suponer una gran contribución a un clima de paz y al proceso de
reconciliación.
Para colectivos desplazados a causa de conflictos, como los refugiados y desplazados
internos, la educación puede devolver una sensación de estructura y organización,
transmitir mensajes importantes para la supervivencia y habilidades vitales, además de
contribuir al desarrollo social y económico de la comunidad de refugiados 31. La
educación adquiere una importancia especial cuando los colectivos desplazados vuelven
a sus casas, ya que llevarán consigo las capacidades y los valores adquiridos. La
educación puede potenciar el capital humano de una comunidad de desplazados
regresados (y de cualquier colectivo afectado por conflictos), capacitándoles para ser
productivos durante y después del conflicto y para contribuir de manera plena a la
reconciliación y reconstrucción nacionales.
Proporcionar educación durante una emergencia o una fase aguda de un conflicto
puede ayudar a crear un marco a largo plazo, que podrá ser implementado en los
sistemas educativos de la fase post-conflicto. La educación puede servir como medida
para la prevención de conflictos y para la reconciliación, además de constituir un
puente entre la emergencia y el desarrollo. La reconstrucción del sistema educativo en
una situación post-conflicto puede restablecer la confianza y la esperanza de
poblaciones afectadas por la guerra. Un sistema educativo reconstruido, basado en un
acceso abierto e inclusivo y provisto de unos planes de estudio apropiados, puede
ayudar a erradicar injusticias causadas por la exclusión social. Para poblaciones
afectadas por conflictos, la educación puede crear un importante capital social a través
13
REESCRIB AMOS EL FUTURO
del establecimiento de conexiones entre escuelas y comunidades, como por ejemplo, la
participación de la comunidad en la gestión de la escuela.
"La inversión en la
educación de las niñas
produce una de las
mayores tasas de
rentabilidad de todas
las inversiones
realizadas en el
desarrollo"
La educación constituye un punto de partida para provocar cambios sociales, económicos y
políticos a largo plazo, especialmente para las familias más pobres. Así mismo, constituye
uno de los elementos claves para la construcción de la democracia, ya que el alfabetismo
universal es una condición esencial para el surgimiento de unos ciudadanos políticamente
activos y de unas sociedades fuertes. A través de la educación, los niños se convierten en
ciudadanos más efectivos, más activos y más dispuestos a defender sus derechos y los de
los demás. La educación puede desempeñar un papel crucial para prevenir que Estados
frágiles vuelvan a caer en conflictos, ayudándoles a alcanzar mayores niveles de estabilidad.
Ningún país ha alcanzado un crecimiento económico sostenible sin haber logrado
previamente la universalidad de la educación primaria 32. En cuanto a la educación, se trata
de una inversión a largo plazo con unos beneficios intergeneracionales. Gracias a la
educación, las personas pueden mejorar sus posibilidades de ganarse un sustento y de
aumentar su productividad. Cada año de escolarización equivale, en el promedio mundial, a
un aumento del 10 por ciento de los salarios de mujeres y hombres 33.
La educación contribuye a la formación de hogares más sanos y de familias más pequeñas,
teniendo ambos unas consecuencias positivas para el crecimiento nacional, para el
desarrollo y para la reducción de la pobreza. Mientras que en los países industrializados las
características y los niveles de la riqueza y del estatus social de las familias constituyen unos
de los factores más determinantes para el éxito que la formación escolar, en los países en
desarrollo la educación escolar es, a menudo, el factor determinante para conseguir empleo
y bienestar.
La inversión en la educación de las niñas produce una de las mayores tasas de rentabilidad
de todas las inversiones realizadas en el desarrollo, ya que genera beneficios personales y
sociales para las personas, las familias y la sociedad en su conjunto. Esa educación puede
contribuir al aumento de las tasas de participación femenina en el mercado laboral y de los
ingresos de las mujeres. Además, genera unos beneficios intergeneracionales. La educación
de una madres supone un factor importante para la supervivencia de sus hijos y para los
logros y las oportunidades educativos de los mismos 34.
Alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio
La educación es un elemento central del marco global de los Objetivos de Desarrollo del
Milenio. Aunque dos de los objetivos se refieren específicamente a la educación (uno
fijando como meta la educación primaria universal hasta 2015, y el otro la igualdad entre
niñas y niños), la educación representa una contribución vital para la consecución de los
demás objetivos 35. Está demostrado el impacto de la escolarización sobre la reducción de
la pobreza, sobre la promoción de la igualdad de género y sobre la disminución de las tasas
de mortalidad infantil y de fertilidad. Ningún país ha podido alcanzar una estabilidad
económica sin haber logrado antes la educación primaria universal. Así mismo, existe una
clara correlación entre pobreza y conflicto. De los 20 países más pobres del mundo, 16 han
sufrido importantes guerras civiles a lo largo de los últimos 20 años. Por esta razón, la
prevención y resolución de conflictos, así como la educación y la reducción de la pobreza
han de considerarse como elementos mutuamente potenciadores (siendo su ausencia
mutuamente destructiva). La educación proporciona, además, una mayor protección frente
al VIH/SIDA y una elevada concienciación sobre temas relacionados con el
medioambiente.
No obstante, mientras los países afectados por conflictos sigan siendo los países más
pobres y con las tasas de escolarización más bajas del planeta (un 67,8 por ciento, en
comparación con el 83,2 por ciento registrado en otros países en desarrollo 36), no se
alcanzarán los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
14
2
La educaciÓn proporciona
protecciÓn
Colombia ha sufrido durante medio siglo varios
conflictos armados internos. Como consecuencia es
uno de los cinco países con mayor número de
desplazados internos. A lo largo de los últimos 15
años, más de tres millones de personas tuvieron que
abandonar sus casas, un 83 por ciento de ellas eran
niños. Así mismo, Colombia ocupa el cuarto lugar
entre los países con más minas antipersonales
diseminadas en su territorio nacional. Las personas
más afectadas por el conflicto, tanto culpables como
víctimas, son jóvenes de entre 12 y 24 años. Casi
11.000 de ellos participan como combatientes en
grupos armados. Otros niños y jóvenes trabajan en el
cultivo, el procesamiento y la venta de drogas.
La lucha, entre insurgentes y grupos paramilitares, por
el control del territorio de zonas urbanas, ha
incrementado aún más, si cabe, las penurias
económicas, además de destruir la estructura social
de las comunidades. Se estima que un 43 por ciento
de la población necesita atención por enfermedades
psicológicas.
Aunque la ley colombiana establece el derecho de
todo niño a una educación gratuita, la tasa de
escolarización es del 82 por ciento, con un elevado
porcentaje de abandono escolar. Muchos padres no
pueden hacer frente a los costes del material escolar,
uniformes y matrícula. Para muchos jóvenes es muy
difícil compaginar la escuela con el trabajo. Otros
abandonan la escuela como consecuencia de
embarazos y por su participación en bandas de
delincuentes.
La experiencia de Save the Children
Hace 15 años, Soacha era una pacífica comunidad
rural. A lo largo de los últimos cuatro años, su
población ha crecido en un 62 por ciento,
convirtiendo la localidad en una urbanización caótica
en las afueras de Bogotá. Cada día llega una media de
cinco nuevas familias, huyendo de la violencia de los
alrededores.
Save the Children está trabajando con niños y
jóvenes en Soacha, con el fin de proporcionarles una
educación y de reducir el riesgo de que esos jóvenes
sean reclutados por grupos armados. "Semillas de
Mostaza" es una escuela comunitaria en Loma Linda,
cerca de Soacha. Los padres que no puedan enviar a
sus hijos a una escuela pública, les llevan a "Semillas
de Mostaza", ya que allí no existen ni la obligación de
llevar uniforme ni los costes de libros de texto y
otros materiales. Puesto que muchos niños están
desnutridos, la escuela proporciona, además, comidas.
Los profesores comunitarios, que en su mayoría son
de la zona y han experimentado los mismos
problemas que sus alumnos, están recibiendo
formación en temas de protección infantil, derechos
de los niños y en la detección y prevención de casos
de abuso sexual. El proyecto ofrece actividades
deportivas, musicales, teatrales, de escritura y de
circo, proporcionando un entorno seguro en el que
los niños y jóvenes pueden adquirir la autoconfianza
necesaria para protegerse a sí mismos contra el
maltrato. Dichas actividades para niños y jóvenes se
complementan con reuniones con los padres y otros
adultos para animarles a que actúen como guardianes
de la comunidad.
Lo que necesitamos
El Plan Sectorial de Educación 2002-06, elaborado
por el gobierno colombiano, constata la necesidad de
una mayor autonomía y flexibilidad de las
instituciones educativas, capaces de adaptarse a los
intereses y expectativas de los estudiantes, y de
estimular la pasión por el conocimiento, el
pensamiento crítico y las relaciones positivas y
constructivas entre las personas.
Save the Children seguirá colaborando con el
gobierno, con la Oficina del Defensor del Pueblo y
con organizaciones locales en el apoyo y el
reforzamiento de iniciativas de educación no formal.
Así mismo, seguiremos elaborando materiales de
enseñanza para promover la solución de conflictos, la
dirección democrática de escuelas y alternativas a la
violencia en los colegios.
15
Olav Urdahl/Save the Children
"Me uní a ellos porque quería luchar, llevar un uniforme y armas. Ahora mi familia
quiere que me concentre en mis estudios, y lo voy a hacer."
Geetha,* 17, Sri Lanka
* no es su nombre auténtico
3
Hacer realidad el desafío
- es posible
Cada país afectado por un conflicto es diferente y los niveles de conflicto varían. En
algunos lugares, como en Dafur, Sudán, la intensidad del conflicto es tal que, en el
mejor de los casos, sólo se puede facilitar ayuda de emergencia. En otros países, como
la República Democrática de Congo y Somalia, los conflictos crónicos de muchos años
de duración han destruido los sistemas e infraestructuras educativos. Otros países,
como Liberia, Serbia y Camboya viven situaciones de post-conflicto y de recuperación
tras años de guerra civil. Esas diferentes circunstancias suelen ser afrontadas mediante
una serie de enfoques específicos, desde la ayuda humanitaria de emergencia hasta el
desarrollo post-conflicto, para desembocar, finalmente, en la elaboración de programas
de desarrollo a largo plazo. No obstante, dichos enfoques han de ser coordinados y
coherentes, y deberán basarse en el objetivo principal de un desarrollo justo y a largo
plazo. Lo más importante en todos esos contextos es la aportación de unos servicios
eficientes y eficaces, es decir, asegurar una educación útil y de calidad, basada en un
análisis del contexto local, contando con la participación activa de las autoridades
nacionales y de las comunidades locales.
La mayoría de los sistemas educativos cuentan con modelos de financiación similares,
establecidos para niños en situaciones comparables y en Estados con sistemas de
gobierno normales y con estabilidad social y financiera. Ese modelo presupone la
existencia de unas condiciones básicas, incluidos un Ministerio de Educación en
funcionamiento, unos servicios de enseñanza razonablemente eficientes, unos
profesores remunerados con regularidad y unos servicios de apoyo, que no se dan en
países afectados por conflictos. Aunque pueda seguir habiendo muchos problemas en
los países en desarrollo, como, por ejemplo, unas elevadas tasas de abandono escolar y
de repetición de curso, un escaso rendimiento o el debilitamiento del sector por una
insuficiencia constante de su financiación, con el tiempo ese modelo será capaz de
alcanzar a muchos de los niños no escolarizados en la actualidad en todo el mundo. Sin
embargo, nunca llegará a los niños más marginados, incluidos aquellos que viven en
países afectados por conflictos. Para poder alcanzarles, se han de cambiar los sistemas,
haciéndolos más flexibles.
Proporcionar educación a todos los niños en cualquier lugar del planeta, incluidos
aquellos que viven en países inmersos en conflictos o en fase de recuperación de los
mismos, es sin duda un gran desafío. Pero a la vez es un desafío posible de cumplir,
siempre y cuando cada uno asuma el papel que le corresponda.
Las responsabilidades de los gobiernos
"Con la campaña puesta
en marcha por Save the
Children para ayudar a
que todos los niños
puedan ir a la escuela,
recibir educación y
protección en
situaciones de
conflictos, podemos dar
un gran paso adelante.
Ahora debemos
multiplicar nuestros
esfuerzos."
Jan Egeland, Secretario General
Adjunto de Naciones Unidas
para Asuntos Humanitarios y
Coordinador de Ayuda de
Emergencia
En los países afectados por conflictos, las estructuras gubernamentales y los
ministerios están funcionando, a menudo, bajo elevadas presiones y, en algunos casos,
con unas capacidades limitadas. No obstante, los gobiernos son los principales garantes
del cumplimiento de los derechos de sus ciudadanos. Para garantizar que todos los
niños puedan disfrutar de los derechos definidos en las normas internacionales, los
gobiernos han de poner en marcha las políticas y los planes adecuados para alcanzar
una educación para todos.
17
REESCRIB AMOS EL FUTURO
Los donantes internacionales han de desempeñar un papel vital a la hora de apoyar a
los gobiernos, incluso a los de países afectados por conflictos, proporcionando ayudas
directas para poner en funcionamiento los servicios básicos, como la educación, y
aportando apoyo técnico para respaldar y orientar dichos servicios. En cambio, los
gobiernos nacionales han de contar con unos mecanismos establecidos para el
desembolso de fondos destinados a la educación, que estén basados en las necesidades
y libres de cualquier discriminación con fines políticos.
Otras organizaciones internacionales, como las agencias de Naciones Unidas y las
organizaciones no gubernamentales, han de asumir, así mismo, un papel importante. A
través de sus programas, esas organizaciones pueden llegar a los niños en las zonas de
más difícil acceso, tanto en situaciones de crisis humanitaria como de reconstrucción
tras un conflicto. Las organizaciones pueden realizar un trabajo directo con los niños,
sus comunidades y sus autoridades de facto o en proceso de formación, identificar las
necesidades y deseos locales, apoyar iniciativas locales, estudiar soluciones innovadoras,
ayudar en la creación de capacidades locales y ampliar y mejorar los servicios.
Hacer que la educaciÓn forme parte de la ayuda
humanitaria
"La educación puede y
debe formar parte de
todas las acciones de
ayuda humanitaria"
Hasta hace muy poco, la educación había sido totalmente descuidada o considerada de
muy baja prioridad en las acciones de ayuda humanitaria de emergencia. Como
respuesta a esa situación se creó en 2000 la Red Interinstitucional para la Educación en
situaciones de emergencia (INEE). INEE ha sabido demostrar e incrementar la
importancia de la educación en situaciones de emergencia, además de asumir el
liderazgo en el desarrollo de unos estándares mínimos para la educación en situaciones
de emergencias, crisis crónicas y reconstrucción. La educación se está convirtiendo en
un elemento cada vez más común en las acciones de ayuda humanitaria tras catástrofes
naturales, como el tsunami de 2004 y los terremotos en Irán, Pakistán e Indonesia. No
obstante, aún no está presente en las ayudas de emergencia como consecuencia de un
conflicto.
La educación puede y debe formar parte de todas las acciones de ayuda humanitaria,
incluidas las situaciones de conflicto. Por ejemplo, en 2001/02 Save the Children
implementó con éxito un proyecto de educación y protección de emergencia para
niños afganos desplazados en las Islas del río Pianj, situadas entre Afganistán y
Tayikistán. Durante seis meses, el proyecto se centró en la oferta de actividades
educativas, así como en la identificación y el apoyo de niños vulnerables, como aquellos
que habían sido separados de sus familias y los niños discapacitados. En base a las
estructuras creadas por nosotros, las comunidades locales pudieron continuar
gestionando las actividades educativas. Ese mismo modelo ha sido utilizado,
posteriormente, por otras organizaciones en otras zonas de Afganistán.
La definición de una actividad como humanitaria depende, normalmente, del contexto
en que se desarrolle, más que de la actividad en sí. Por ejemplo, la creación y el
funcionamiento de unas instalaciones de atención sanitaria primaria son considerados,
en ausencia de una crisis, una actividad de ayuda al desarrollo. Sin embargo, en medio
de una crisis, esa misma actividad sería considerada como una intervención humanitaria
para salvar la vida de personas afectadas. Lo mismo debería aplicarse a la educación.
Proporcionar educación en una fase temprana representa una inversión en el futuro.
Vincular la educaciÓn a la protecciÓn
En los países afectados por conflictos, los niños están expuestos a cada vez mayores
riesgos, por lo que la educación puede desempeñar un papel vital en su protección. La
18
3
instalación de lugares seguros de juego y de centros provisionales de enseñanza puede
suponer un medio eficaz para identificar a menores no acompañados y reunirlos con
sus familias. Cuando las distancias, los problemas de seguridad o el trabajo impiden que
los niños vayan a escuelas formales, la implementación de programas alternativos de
educación básica, que incluyan centros de recuperación escolar, programas
extraescolares y una enseñanza escolar flexible en el tiempo, puede proporcionar
seguridad y protección a esos niños, dándoles, además, la oportunidad de continuar su
educación. Por ejemplo, en el oeste de Darfur, Sudán, Save the Children ha creado más
de 20 centros infantiles que atienden a un total de 55.000 niños en 11 campos. Dichos
centros ofrecen un lugar seguro para los niños, donde puedan jugar y adquirir
conocimientos básicos de lectura, escritura y cálculo.
Unos recintos escolares adecuadamente gestionados pueden ayudar a proteger a los
niños frente a daños físicos, al estrés psicológico y emocional, al reclutamiento por
grupos armados, a la separación familiar y a otros tipos de abusos. Las clases
proporcionan una sensación de normalidad, rutina y esperanza para el futuro, todos
ellos elementos esenciales para el bienestar emocional de un niño. Así mismo, a través
de los programas educativos se pueden transmitir capacidades importantes para la
supervivencia y enseñar a los niños cómo evitar minas antipersonales, cómo protegerse
a sí mismos contra abusos sexuales y cómo superar miedos y rabias. En Dafur, Save
the Children está construyendo 16 escuelas provisionales con 115 aulas, además de
rehabilitar a 13 escuelas existentes. Gracias a esas medidas, se espera un importante
incremento de las tasas de escolarización.
"La educación puede
ayudar a estabilizar
países que estén
pasando por unas crisis
prolongadas o que se
encuentren en fase de
recuperación de
conflictos, ya que
contribuye a
incrementar la cohesión
social"
La educación puede ayudar a estabilizar países que estén pasando por unas crisis
prolongadas o que se encuentren en fase de recuperación de conflictos, ya que
contribuye a incrementar la cohesión social. Los centros infantiles pueden aumentar la
autoestima de los niños e impartir una comprensión temprana de los derechos
humanos, de la justicia social, del trabajo en equipo y del proceso de paz y de
reconciliación. En los Territorios Ocupados Palestinos, los niños identificaron la
violencia dentro y alrededor de las escuelas como una de las mayores amenazas para su
seguridad. Como parte del proyecto de Save the Children "Educación que protege", los
alumnos y el personal de seis escuelas públicas han creado comités escolares de
protección. A través de dichos comités, los niños y el personal de las escuelas han
desarrollado vías creativas para resolver el conflicto y para entablar mejores relaciones
entre los niños, así como entre niños y profesores. Existen planes para extender,
conjuntamente con el Ministerio de Educación, dichos comités a todas las escuelas.
Garantizar el acceso y la calidad
En situaciones de conflicto, cuando los recursos y fuentes de educación escasean, los
ya de por sí marginados lo están aún más. A pesar de todo, una crisis ofrece la
oportunidad de superar deficiencias preexistentes y de crear nuevos sistemas
educativos. A menudo, los proveedores no estatales y las organizaciones no
gubernamentales (ONG) son los únicos grupos que se ocupan proporcionar servicios
básicos, utilizando, con frecuencia, unos mecanismos innovadores de prestación de
servicios. Por ejemplo, en Somalilandia y Somalia, Save the Children está mejorando el
acceso a la educación para más de 20.000 niños, especialmente niñas y menores
pertenecientes a minorías étnicas. Además de beneficiar a los niños en edad escolar, el
programa se aplica también a personas con una edad superior a la escolar, como
mujeres jóvenes casadas que anteriormente no tuvieron la oportunidad de recibir una
educación escolar básica. En un ambiente en que la educación de las niñas está más
aceptada y en que existen modelos de participación femenina en los equipos de
19
REESCRIB AMOS EL FUTURO
profesores, las mujeres jóvenes se ven alentadas a buscar mejores oportunidades de
empleo y a participar plenamente en la sociedad.
"Escuchar
verdaderamente a los
niños y atender sus
necesidades han de ser
elementos centrales
para la definición de
políticas, estrategias,
planes y programas"
Para los niños de mayor edad que no tuvieron la posibilidad de asistir a la escuela
primaria y que no quieren estudiar con niños más pequeños en la misma aula,
programas alternativos pueden proporcionarles una educación intensiva no formal, que
les brinde la oportunidad de recuperar el retraso y de entrar, eventualmente, en una
escuela estatal reglamentaria. La flexibilidad en la enseñanza y en la confección de los
horarios puede ofrecer a niños trabajadores la posibilidad de seguir ganándose el
sustento y de seguir apoyando a sus familias, a la vez que reciben una educación.
No obstante, sin la presencia de unos profesores formados es imposible proporcionar
educación de calidad. En países con conflictos prolongados y en situaciones de postconflicto, en los que profesores cualificados fueron asesinados u obligados a huir, se
necesita implantar la formación de nuevos profesores. En el Sur de Sudán, por
ejemplo, Save the Children ha formado a 100 profesores de enseñanza primaria, de los
que algunos sólo habían completado tres años de escuela primaria. Así mismo, dada la
circunstancia de que muchos profesores que regresaban tras años de desplazamiento en
el norte del país tenían sólo un escaso dominio del inglés, la lengua de enseñanza en el
sur, nosotros financiamos unos cursos intensivos de inglés para profesores.
Resulta muy importante que el currículum tome en consideración la vida y las
experiencias de los niños, satisfaciendo sus necesidades especiales. En Indonesia, Save
the Children ha desarrollado un "Marco para el aprendizaje de niños afectados por
situaciones de emergencia", en el que se destacan tres elementos importantes para el
aprendizaje de niños cuyas vidas y estudios se habían visto interrumpidos. El primero
se refiere a la transmisión de conocimientos esenciales para la supervivencia que
ayuden a los niños a vivir de forma segura en los campos o en otros lugares de paso.
El segundo se centra en un desarrollo individual y social de los niños que les ayude a
superar las experiencias negativas del conflicto. El tercer elemento les servirá de apoyo
para desarrollar capacidades de aprendizaje y propone a los profesores actividades que
ayudarán a los niños a reincorporarse a la enseñanza tras haberse producido una
interrupción en la educación.
Situar a los niños y a las comunidades locales en el
centro de nuestros esfuerzos
Escuchar verdaderamente a los niños y atender sus necesidades han de ser elementos
centrales para la definición de políticas, estrategias, planes y programas destinados a
niños afectados por conflictos. En los Territorios Ocupados Palestinos se preguntó a
los niños por qué no iban a la escuela. La principal razón fue el tráfico. Los niños
tenían la sensación de poner en peligro sus vidas en el camino diario a la escuela. Si no
se hubiera consultado a los niños, con toda probabilidad ese problema hubiera sido
pasado por alto.
Se ha demostrado que los centros infantiles actúan como un importante catalizador
para el cambio y el desarrollo en las comunidades. Dichos centros ayudan a crear la
autoestima y la confianza de los niños, mejoran su acceso a la información, desarrollan
sus calidades solidarias y de liderazgo, además de ofrecer oportunidades de aprendizaje
y recreo. Save the Children ha financiado centros de ese tipo en Nepal y Angola,
ambos países en proceso de recuperación tras años de guerra civil. Hemos
proporcionado formación para que los niños puedan gestionar ellos mismos los
centros. Además, se les ha facilitado formación en temas de periodismo, escritura
creativa y para hablar en público.
20
3
Allá donde hayan quedado en pie, las escuelas locales representan, a menudo, el
principal punto de referencia de acciones colectivas basadas en la comunidad. La
escuela "Fe y Esperanza" en Altos de Cazucá, Colombia, atiende a 200 niños
desplazados internos como consecuencia del conflicto continuo que vive el país. Los
niños organizan las actividades diarias de la escuela. Los padres y otros miembros de la
comunidad son animados a participar activamente. En medio de la violencia y la
inseguridad, la escuela ofrece a los niños y a los adultos una cierta sensación de
seguridad y de control sobre sus propias vidas 37.
Coordinar la educación con la planificación del
futuro
Las iniciativas educativas llevadas a cabo con éxito, tanto por comunidades, grupos
religiosos u ONG, suelen contar con los componentes esenciales del contexto local, de
la innovación y de la calidad (siempre basados en el concepto de que los niños se
encuentran en el centro de todas las acciones). Los buenos ejemplos de prestación de
servicios han de extenderse con el fin de abarcar toda la dimensión del problema. En
ese sentido resulta fundamental involucrar a las autoridades nacionales, aunque débiles,
para que apoyen una eventual extensión de innovaciones y participen en ella. En la fase
de post-conflicto, el reto al que se enfrentan todas las partes, es decir, las autoridades
estatales, los donantes y las ONG, consiste en aprovechar y ampliar esas innovaciones
de la forma más efectiva posible y de canalizarlas hacia la reconstrucción del sistema
educativo.
En países afectados por conflictos, las infraestructuras físicas y humanas suelen estar
destruidas, por lo que ha de desarrollarse un plan global. Las medidas a corto plazo
deben ir acompañadas de perspectivas a largo plazo. El objetivo principal debe ser la
creación de una nación que funcione (independientemente de lo lejos que pueda
parecer en momentos actuales la consecución de ese objetivo), y en la que las
necesidades del sector de la educación formen parte del desarrollo nacional en su
conjunto. La educación no puede percibirse aislada de otros servicios públicos, como la
salud, el agua, la sanidad y la seguridad.
Muchas iniciativas exitosas de pequeñas dimensiones (como por ejemplo, la utilización
de profesores voluntarios) no pueden mantenerse en el tiempo. Por esta razón resulta
especialmente importante colaborar con las autoridades nacionales y afrontar
problemas generalizados del sistema. Los esfuerzos realizados en la formación de
profesores podrían haber sido en vano cuando los salarios de los profesores son tan
bajos que no entran (o permanecen) en el servicio de la enseñanza. Los profesores
necesitan cobrar sus salarios con regularidad y disponer de la perspectiva de una
carrera profesional basada en cualificaciones profesionales, además de contar con un
sistema de apoyo que refuerce sus capacidades para garantizar una enseñanza y un
aprendizaje efectivos y creativos. Ello significa que se han de tomar en consideración
unos costes periódicos y de desarrollo. Al mismo tiempo debe prestarse atención al
sector de la educación secundaria, ya que cuanto menos posibilidades de enseñanza
post-primaria existan, mayores serán las tasas de abandono de la enseñanza primaria
(reduciéndose, por lo tanto, las tasas de conclusión de esas etapa de enseñanza). La
educación secundaria sólo podrá ser aportada por el Estado, no necesariamente como
único proveedor, pero asumiendo, al menos, un papel de liderazgo. Ya que, finalmente,
la reducción sostenible de la pobreza debe ser responsabilidad de los gobiernos
nacionales, la intervención más efectiva puede ser la creación de la capacidad de
liderazgo de un gobierno.
"El objetivo principal
debe ser la creación de
una nación que funcione
y en la que las
necesidades del sector
de la educación formen
parte del desarrollo
nacional en su
conjunto."
21
REESCRIB AMOS EL FUTURO
La educación construye la paz
La guerra civil que Nepal ha vivido durante la última década
ha costado la vida de más de 12.000 personas. La insurgencia
maoísta, cuyo objetivo consiste en derrocar a una monarquía
que ellos consideran anticuada y represiva, controla gran
parte del país. La enseñanza escolar en zonas rurales se ha
visto gravemente afectada, convirtiéndose las escuelas, junto
con otras instalaciones estatales, en objetivo de los
insurgentes. Las escuelas han sido ocupadas tanto por
rebeldes maoístas como por el ejército, y alumnos y
profesores han sido secuestrados para ser reclutados por las
fuerzas rebeldes. Unos 11.800 niños fueron secuestrados
entre enero y agosto de 2005. A menudo, las escuelas
permanecen cerradas debido a "bandhs" (huelgas)
convocadas por los rebeldes.
Las tasas de asistencia a la escuela, ya de por sí no muy
elevadas, han disminuido. Una quinta parte de todos los
niños en edad de enseñanza primaria no va a la escuela. Más
de la mitad de todas las niñas y un 80 por ciento de los
niños de "casta baja" Dalit no reciben educación primaria, lo
que es debido, en muchos casos, a la falta de un acta de
nacimiento, puesto que los secretarios del registro civil no
quieren asumir el riesgo de viajar a pueblos alejados.
A pesar de todo, las aulas están atestadas de alumnos.
Muchas carecen prácticamente por completo de materiales y
de equipamiento. Sólo uno de cada tres profesores de
enseñanza primaria dispone de formación. Hay tensiones
entre el personal de todas las instalaciones financiadas por el
gobierno, incluidos los profesores, y los rebeldes maoístas.
Teóricamente, las escuelas se encuentran bajo la
responsabilidad de las oficinas de educación del distrito, sin
embargo, en muchas zonas los rebeldes se han convertido de
facto en el gobierno local.
La experiencia de Save the Children
Save the Children lleva trabajando en Nepal desde hace 22
años. A lo largo de los últimos 10 años, nuestro trabajo se ha
visto cada vez más afectado por el conflicto, lo que nos ha
llevado a colaborar tanto con el gobierno como con los
rebeldes maoístas, además de trabajar por ganar la confianza
de las comunidades locales. A través de nuestro trabajo a
nivel local hemos sido capaces de demostrar que los niños
pueden convertirse en el centro de una colaboración
constructiva, incluso en zonas de conflicto.
En un distrito gravemente afectado por la guerra civil hemos
animado a las familias a crear comités de educación,
formados por representantes de entre 10 y 30 hogares de
una aldea. En una primera fase realizaron investigaciones a
nivel local, identificando a los niños que no iban a la escuela y
buscando las causas de su no escolarización. A continuación,
esa información fue incorporada en un plan de mejora
escolar. Cada comité asumió la responsabilidad de enviar a
todos los niños mayores de seis años a la escuela de forma
regular.
22
Hemos conseguido que la oficina de educación del distrito
apoyara el plan de mejora escolar. En un primer momento,
los rebeldes reaccionaron con recelo. Sin embargo, a través
de los comités, los miembros de la comunidad dijeron a los
rebeldes que si no les apoyaban, no iban a tener el derecho
de venir a sus pueblos en busca de refugio y comida.
Finalmente, los maoístas se mostraron de acuerdo,
involucrándose en la protección de las escuelas en vez de
destruirlas. Actualmente, en esas comunidades las tasas de
escolarización superan el 90 por ciento.Todas las escuelas
cuentan con aulas nuevas o renovadas, y los profesores están
utilizando unos métodos de enseñanza más dinámicos e
interactivos. En dos años, la tasa de aprobados por curso se
incrementó del 39 al 68 por ciento, reduciéndose a la vez la
tasa de abandono escolar del 23 al 2 por ciento. Los padres
están incluso sacando a sus hijos de escuelas privadas en
localidades más grandes para matricularles en las escuelas
locales.
Con el elevado número de niños que aprobaban la escuela
primaria, aumentó la demanda de ampliar las escuelas locales,
integrando en ellas la enseñanza secundaria. Después de
muchas discusiones, la comunidad decidió invitar, a través de
Save the Children, al funcionario de la oficina de educación
del distrito para que visitara su pueblo. En un principio, el
funcionario rechazó la invitación por miedo a ser
secuestrado. Sin embargo, los rebeldes prometieron que no
le iban a hacer ningún daño. Su visita fue la primera en 32
años, desde que se creó la escuela. Finalmente, él dio su visto
bueno a la ampliación de la escuela.
Save the Children prometió la aportación de 10.000 dólares
para la construcción de la escuela. El funcionario de la
Oficina de educación del distrito se mostró dispuesto a
proporcionar los profesores y el mobiliario necesarios. La
mano de obra fue aportada por la comunidad. A pesar de
haber rechazado en un principio su apoyo a un programa
financiado por el gobierno, los rebeldes terminaron
recaudando fondos, aportando material donado, como
hormigón, y participando con su mano de obra.
Lo que necesitamos
Save the Children seguirá colaborando con el gobierno de
Nepal, con los rebeldes maoístas, con otras organizaciones y
con las comunidades locales para repetir nuestra experiencia
en otros distritos. Apoyaremos al gobierno en sus esfuerzos
por incrementar la tasa de escolarización al 90 por ciento en
todo el país y por aumentar las tasas de conclusión de la
enseñanza primaria. Nuestro objetivo consiste en elevar,
hasta 2010, la tasa de alfabetismo del 57 al 70 por ciento,
además de ofrecer al 40 por ciento de los niños
oportunidades de desarrollo en la temprana infancia.
A pesar de que Nepal dispone de un plan y unos objetivos
claros para el sector de la educación, el gobierno no le
asigna recursos suficientes. Además, sus sistemas de
seguimiento y evaluación son débiles. Por esta razón, la
comunidad internacional debe crear un clima adecuado para
que Nepal acepte que debe y puede cumplir sus objetivos en
materia de educación.
Save the Children
"Si tuviera una barrita mágica, haría dos cosas: Haría la escuela más grande con
ladrillos y con más espacio. También crearía un patio en el que podamos jugar
seguros."
Freddy, 6, Colombia
"En mi zona no hay
electricidad. Así que
tengo que hacer mis
deberes cerca de una
farola al lado de la
carretera"
Junior, 13, Côte d’Ivoire
Superar los desajustes de financiación 4
Para alcanzar una educación para todos, los gobiernos nacionales necesitan unos
fondos de financiación adecuados y previsibles para la educación, y deberán contar con
unos mecanismos establecidos para el desembolso de dichos fondos en base a las
necesidades y sin ningún tipo de discriminación con fines políticos. En el Marco de
Acción de Dakar se destaca el papel de los gobiernos nacionales y de la comunidad
internacional en la lucha por alcanzar una educación para todos, declarando que
"ningún país que se comprometa seriamente con la educación para todos verá frustrada
la consecución de ese objetivo por la falta de recursos 38.
La financiación de la educación por los Estados
Se ha señalado que los gobiernos deberían invertir al menos el 6 por ciento de su
producto nacional bruto en educación 39. Ninguno de los Estados frágiles afectados por
conflictos de los que se disponen de datos llegan a ese nivel de inversión. En términos
de asignación presupuestaria se sugiere que, para que un país pueda registrar éxitos en
materia de educación, deberá asignar aproximadamente un 20 por ciento de su
presupuesto global a la educación40. Sólo dos Estados frágiles afectados por conflictos
han alcanzado ese nivel de gastos (Côte d'Ivoire y Guinea).41 El volumen de gastos
destinados a la educación depende de la situación de cada país y de sus otras
prioridades inmediatas. Puede que los gobiernos de Estados frágiles afectados por
conflictos no consideren la educación como su gran prioridad, por lo que los recursos
pueden ser desviados a la financiación de actividades militares. En el norte de Sudán,
se destina tan sólo el 1,8 por ciento del producto interior bruto a la educación,
comparado con el 28 por ciento asignado a la defensa.42 En Etiopía, durante la guerra
contra Eritrea de 1999/2000 se produjo una reducción importante de los gastos para
educación. No obstante, una vez firmados los acuerdos de paz, el gobierno desvió su
atención de los gastos militares, incrementando sustancialmente el presupuesto
destinado a la educación 43.
Cuando un gobierno no es capaz de proveer a la educación los fondos adecuados o no
está dispuesto a hacerlo, el peso de la financiación de las escuelas recae sobre las
comunidades y los padres. Con el fin de cubrir su déficit presupuestario, a menudo las
escuelas aplican cuotas para poder cubrir los salarios de los profesores, los costes del
mantenimiento de la escuela y de los libros de texto. Por una parte, dichas cuotas
representan la única vía para que las escuelas puedan seguir trabajando. Por otra parte
significan la exclusión de la escuela de los niños más pobres, y especialmente de las
niñas. La República Democrático de Congo gasta 4 dólares por la educación de cada
alumno al año, mientras que los padres han de pagar entre 14 y 32 dólares por hijo, una
suma imposible de aportar para muchos 44.
25
REESCRIB AMOS EL FUTURO
La financiación internacional de la educación
"Disponiendo de unas
capacidades muy
limitadas o débiles, los
países frágiles
afectados por
conflictos necesitan
mayores flujos de
ayuda, concebida a más
largo plazo, con el fin
de poder crear unas
instituciones más
fuertes y sostenibles"
Dos encuentros internacionales de alto nivel celebrados en 2005, la Cumbre de los G8
y la Cumbre de Naciones Unidas, reforzaron el compromiso mundial de combatir la
pobreza y de alcanzar los Objetivos de desarrollo del Milenio, acordados en 2000. En
la Cumbre de los G8, los líderes internacionales se comprometieron a facilitar unos
fondos adicionales de 50.000 millones de dólares al año, necesarios para hacer realidad
los Objetivos de Desarrollo del Milenio hasta 2015, incluidos los objetivos relacionados
con la educación. Poco tiempo después, la Cumbre de Naciones Unidas prometió que
"los niños afectados por conflictos armados recibirán a tiempo una ayuda humanitaria
efectiva, incluida la educación, para facilitar su rehabilitación y reintegración en la
sociedad."45 No obstante, esos fondos no están llegando a los niños en países frágiles
afectados por conflictos. A pesar de un creciente compromiso internacional para la
reducción de la pobreza, para la consecución de los Objetivos de Desarrollo del
Milenio, para el apoyo a la educación y para el incremento de los flujos de ayuda, los
países más necesitados y los que más lejos estén del cumplimiento de los Objetivos de
Desarrollo del Milenio, aún no están recibiendo la ayuda financiera que sus sistemas
educativos precisan. 46 Los habitantes de países frágiles afectados por conflictos están
especialmente desfavorecidas en lo que se refiere a la cantidad de la ayuda que reciben,
al porcentaje de esas ayudas destinado a la educación, al desembolso de la misma y a su
acceso a los mecanismos financieros internacionales.
Ayuda al desarrollo y educación
Es un hecho generalmente reconocido por donantes y organizaciones de ayuda que los
países frágiles afectados por conflictos son más difíciles de apoyar que otros países en
desarrollo. En países que, además de ser frágiles, están afectados por un conflicto, la
voluntad política es a menudo muy débil o falta por completo, las instituciones
estatales se encuentran con frecuencia en diferentes escenarios de desorden y la
capacidad del país en sí está diezmada. En el pasado, muchos donantes se mostraron
reacios a asumir los riesgos relacionados con una financiación de Estados frágiles
afectados por conflictos, muchas veces debido a la ausencia de gobiernos legítimos con
los que los donantes pudieran tratar o, en caso de existir esos gobiernos, por la falta de
transparencia y el miedo a que el dinero pueda ser desviado a gastos militares.
Disponiendo de unas capacidades muy limitadas o débiles, los países frágiles afectados
por conflictos necesitan mayores flujos de ayuda, concebida a más largo plazo, con el
fin de poder crear unas instituciones más fuertes y sostenibles. Sin embargo, dado que
los donantes utilizan determinados criterios de selección para dirigir sus ayudas a países
con buenas políticas o a países considerados como buenos cumplidores,47 los países
frágiles afectados por conflictos reciben menos ayudas. Aunque la ayuda oficial al
desarrollo destinada a la educación en países en desarrollo se haya incrementado de
5.000 millones de dólares en 1999 a 8.500 millones de dólares en 2004, los Estados
frágiles afectados por conflictos están recibiendo una proporción muy inferior a la de
otros países de renta baja. 48 En 2004, los 30 países clasificados como Estados frágiles
afectados por conflictos49 recibieron menos de una tercera parte del total de la ayuda a
26
4
Compromisos globales de ayuda exterior al desarrollo entre 1999 y 2004*
4
Billones de US$
3
2
1
Estados frágiles afectados
por conflictos
Otros países de renta baja
0
1999
2000
2001
2002
2003
2004
Año
*Cifras calculadas en base a millones de dólares americanos de 2003
La Iniciativa Vía Rápida de Educación para Todos
La Iniciativa Vía Rápida de Educación para Todos fue lanzada en 2002 como el principal
mecanismo internacional para la movilización de fondos para la educación, constituyendo,
además, "un acuerdo entre países y donantes"51. Para que un país pueda recibir la
aprobación por parte de la Iniciativa Vía Rápida, debe haber implementado una estrategia
para la reducción de la pobreza u otra estrategia equivalente, y contar con un plan
fidedigno para el sector de la educación, aprobado y respaldado por donantes nacionales.
Una vez recibida la aprobación, la financiación podrá ser obtenida a través de donantes
nacionales y el Fondo Catalítico.52 Además, se creó a finales de 2003 el Fondo para el
Desarrollo de Programas de Educación (FDPE), cuya finalidad consiste en proporcionar
ayuda técnica y en contribuir al desarrollo de capacidades, como ayuda a los países para
la preparación e implementación de un sólido plan de educación.
Aunque la Iniciativa Vía Rápida haya dado un enfoque internacional a la ayuda a la
educación, no ha sido capaz de cubrir las necesidades financieras de los 20 países
previamente aprobados. Además, muchos países frágiles afectados por conflictos habían
sido excluidos de la aprobación plena por parte de la Iniciativa Vía Rápida, ya que carecían
tanto de un documento sobre la estrategia para la reducción de la pobreza o equivalente,
como de un plan de educación.53 No obstante, durante el Encuentro de cooperación de
la Iniciativa Vía Rápida, celebrado en noviembre de 2005 en Pekín, se apoyó la idea de que
la Iniciativa Vía Rápida debería incrementar sus ayudas a los países frágiles. Además, existe
un consenso generalizado de que el Fondo para el Desarrollo de Programas de Educación
debería crear un mecanismo para apoyar a los países frágiles en el desarrollo de
programas de educación. Actualmente, un grupo de trabajo de la Iniciativa Vía Rápida está
estudiando las posibles vías de realización de dicho proceso. A pesar de todo, la Iniciativa
Vía Rápida sólo podrá alcanzar sus objetivos si los donantes cumplen con sus
compromisos de financiación. Si esto no ocurre, los países estarán poco dispuestos a
realizar el trabajo analítico requerido para la concesión de ayudas.
27
REESCRIB AMOS EL FUTURO
la educación, destinada a países de renta baja, mientras que dos terceras partes de dicha
ayuda fueron a parar a los 33 países de renta baja restantes. Estableciendo el cálculo de
la ayuda a la educación per capita, los países afectados por conflictos se encuentran, así
mismo, en una peor situación que otros países de renta baja, recibiendo, durante el
periodo de 1999 a 2003, una media de tan sólo 1,6 dólares por persona al año,
comparado con 3,3 dólares anuales destinados a otros países de renta baja 50.
Ayuda humanitaria y educación
Para los países afectados por conflictos y crisis prolongadas, la ayuda humanitaria es a
menudo la principal forma de ayuda que reciban durante un determinado periodo de
tiempo. Por ejemplo, entre 1993/94 y 2003/04, el 73 por ciento de las ayudas
destinadas por el Reino Unido a Liberia y Somalia, era ayuda de emergencia.54 La ayuda
humanitaria está basada en los principios de imparcialidad, independencia y
neutralidad, su finalidad tiene consideración distinta a la de muchos tipos de ayuda al
desarrollo. A veces es considerada como una manera de trabajar al lado del Estado, en
vez de a través de él. Las acciones humanitarias son tradicionalmente encomendadas a
actores no estatales, como las organizaciones no gubernamentales (ONG), las
organizaciones comunitarias, el sector privado y grupos religiosos.
No obstante, sólo un pequeño porcentaje de la ayuda humanitaria va destinada a la
educación. La mayor parte de la ayuda humanitaria está coordinada a través del
Proceso de Llamamiento Consolidado (CAP), en el que se destina tan sólo un 2 por
ciento de las aportaciones a la educación en emergencias.55 A lo largo de los últimos
años, el número de aportaciones humanitarias asignadas a la educación ha empezado a
aumentar. Sin embargo, la financiación aún no cubre las necesidades de educación
identificadas en los llamamientos, quedándose muy atrás de la financiación destinada a
otros sectores. Por ejemplo, un estudio de los archivos e informes resumidos del
periodo 2001 - 2005 del Servicio de Seguimiento Financiero (FTS) llega a la conclusión
de que sólo se llegó a cubrir el 42 por ciento de las necesidades de educación,
comparado con el 66 por ciento de todos los sectores en general.
"Entre 2002 y 2004,
sólo el 56 por ciento
de las ayudas bilaterales
a la educación
prometidas a países
frágiles afectados por
conflictos llegó a
desembolsarse
realmente"
28
Ajustar los compromisos a la financiación
Muchos donantes prometen ayudas y asumen compromisos, pero no llegan a aportar el
dinero o la totalidad del importe prometido, o se retrasan en el desembolso. Una vez
más, los países frágiles afectados por conflictos se sitúan en peor lugar que otros
países. Entre 2002 y 2004, sólo el 56 por ciento de las ayudas bilaterales a la educación
prometidas a países frágiles afectados por conflictos llegó a desembolsarse realmente,
en comparación con el 65 por ciento para el conjunto de los países en desarrollo. De
hecho, los flujos de ayuda hacia países frágiles son dos veces más volátiles que los
flujos de ayuda hacia otros países de renta baja.56 El potencial impacto positivo de la
ayuda prometida a países frágiles afectados por conflictos se ve reducido, de forma
significante, por su imprevisibilidad, de manera que los países no la pueden utilizar para
la elaboración de planes a largo plazo, para pagar los salarios con regularidad o para
realizar inversiones periódicas.57 El impacto de esa volatilidad es más agudo en países
frágiles o afectados por conflictos que en los países más estables, debido a sus mayores
necesidades iniciales58.
4
Los canales de distribución de la ayuda
La mayoría de los canales de distribución de la ayuda siguen favoreciendo a los países
estables con, al menos, unos niveles mínimos de buen gobierno y/o de capacidades
administrativas, lo que, una vez mas, sitúa en desventaja a los países frágiles afectados
por conflictos. Las fuentes de financiación varían, pudiendo provenir la financiación
directamente de los donantes o de fondos comunes, como el fondo de fideicomiso de
varios donantes. Así mismo, existen varios canales para el desembolso de la ayuda,
incluidos la ayuda presupuestaria directa, la ayuda presupuestaria sectorial, la ayuda a
proyectos y los fondos comunitarios, que podrán ser utilizados de forma combinada
para que la financiación pueda llegar a los gobiernos y a la educación.
La ayuda presupuestaria directa, por ejemplo, facilita recursos no vinculados
directamente a un presupuesto nacional. Ese tipo de ayuda es muy poco utilizado en
emergencias o en Estados frágiles. No obstante, Ruanda y Sierra Leona son ejemplos
de la aplicación de una ayuda presupuestaria directa en fases tempranas de una
situación de post-conflicto.
"Los donantes han
tomar en consideración
el papel de la sociedad
civil como guardiana y
defensora, y no sólo
como proveedora de
servicios"
La ayuda presupuestaria sectorial asigna fondos a un sector específico, como el de la
educación. Los donantes acuerdan un plan de desarrollo sectorial, acompañándolo con
la financiación y la ayuda técnica necesarias. Los donantes pueden recurrir a un
enfoque sectorial (SWAP) para ajustar sus recursos (financieros y técnicos) a un sector
determinado. No obstante, la aplicación de la ayuda presupuestaria sectorial no
garantiza, necesariamente, que los fondos sean complementarios al presupuesto de un
sector. En su mayoría, ese tipo de financiación no suele utilizarse en países con
gobiernos frágiles, debido a problemas de transparencia y de justificación de gastos.
Los proyectos individuales representan el mecanismo de desembolso más habitual. Los
fondos son transferidos a actores estatales o no estatales con el fin de que
implementen un proyecto específico de una duración determinada. Un ejemplo de
mayor envergadura se ha creado en el Sur de Sudán, donde se fundó, en 2003, un
consorcio de ONG para apoyar el desarrollo del sistema de educación, en especial la
formación de profesores y la creación de infraestructuras. Sin embargo, hay voces
críticas que alegan una utilización excesiva de proyectos para la prestación de servicios,
la posible duplicación de procesos existentes, la creación de cargas burocráticas
adicionales y la escasa financiación de costes recurrentes.
Los fondos comunitarios (o fondos de protección social) son creados dentro de o
paralelos a las estructuras gubernamentales, con el objetivo de desembolsar el dinero
directamente a las comunidades. Se puede exigir a las comunidades que proporcionen
el apoyo correspondiente, especialmente en especie (por ejemplo, mano de obra). En
las situaciones de post-conflicto de Ruanda y Timor-Leste, las comunidades utilizaron
algunos de esos fondos para financiar la educación y construir escuelas. De forma más
general, se utilizan esos fondos para aliviar la pobreza, por lo que sirven, así mismo,
para incrementar el acceso a la educación.
A la hora de utilizar cualquiera de esos canales de distribución de ayuda, los donantes
han tomar en consideración también el papel de la sociedad civil como guardiana y
defensora, y no sólo como proveedora de servicios, debiendo proporcionarla el apoyo
financiero y político adecuados.
29
REESCRIB AMOS EL FUTURO
Crear las capacidades técnicas
"Es muy importante
que otros países nos
ayuden. No se trata
sólo de dinero, ya que
tenemos muchos
recursos.
Se trata también de los
conocimientos, ya que
no tenemos
suficientes".
Moises Samuel, Director de
una organización de derechos
de la infancia en Angola
A largo plazo, un gobierno estable deberá ser el punto central para la gestión del
aumento de los flujos de ayuda hacia países frágiles afectados por conflictos. Por esta
razón es muy importante que no se creen sistemas paralelos, aunque los fondos sean
canalizados durante un tiempo a través de ONG y otros actores no estatales. Las
capacidades del Estado deberán fortalecerse al tiempo que los actores no estatales
representen un canal provisional para la destinación de fondos. En ese concepto se
incluye la aportación de una ayuda técnica simple y efectiva, con el fin de asegurar que
la ayuda a la educación pueda ser desembolsada a nivel local y de distrito.
La prestación de ayuda técnica y la creación de capacidades de las autoridades
educativas a todos los niveles representan elementos esenciales para la renovación del
sistema, así como para el desarrollo de una educación de calidad que no reproduzca las
debilidades anteriores que puedan haber contribuido al surgimiento del conflicto y a la
fragilidad del país. Para lograrlo, se necesitan compromisos financieros para apoyar la
renovación de los planes de estudio y la modernización de la formación y de la
supervisión de profesores, así como unas inversiones importantes en el desarrollo de
capacidades técnicas. Escuelas destruidas pueden ser reconstruidas, se pueden comprar
nuevos libros de texto, pero cuando exista una falta de conocimientos técnicos, cuando
se necesiten elaborar planes de "Educación para todos", cuando un plan de estudio
tenga que ser revisado, cuando profesores, personal de planificación o de
administración haya huido, entonces los recursos solos no podrán llenar ese vacío.
También se requiere ayuda técnica, ofrecida a través de cursos de formación y
materiales, y apoyada por instalaciones y nombramientos adecuados.
Oportunidades para el cambio
Los Estados frágiles afectados por conflictos se encuentran, desde cualquier punto de
vista, en situación de desventaja a la hora de acceder a la ayuda externa a la educación.
No obstante, no todos son iguales y los retos que afronta cada uno de ellos tienen
características muy diferentes. Algunos países, como la República Democrática de
Congo disponen de importantes riquezas naturales, pero cuentan con unas estructuras
gubernamentales muy débiles. Otros, en cambio, disponen de buenos sistemas que, sin
embargo, como consecuencia de conflictos crónicos, se han vuelto ineficaces, como es
el caso de la región del noreste de Sri Lanka. A pesar de todo, hay un hecho muy
evidente. El dinero puesto a disposición para la ayuda a la educación no está llegando a
los niños de los países con las mayores necesidades ni a aquellos de los países afectados
por conflictos.
Hay una gran oportunidad para cambiar los modelos de financiación establecidos.
Debido, en gran medida, a las preocupaciones por la seguridad, surgidas tras el 11 de
septiembre, se ha producido un fuerte aumento del interés por los países frágiles
afectados por conflictos, sobre todo en lo que se refiere a la búsqueda de mecanismos
de financiación y de implementación de programas, capaces de aportar servicios
básicos, de promover el buen gobierno y de incrementar la estabilidad. Por esta razón,
los donantes deberán tomar la iniciativa y buscar enfoques innovadores para el diseño y
la utilización de mecanismos combinados de desembolso, que permitan que los
recursos sean canalizados de tal manera que lleguen a los niños más pobres en los
Estados afectados por conflictos.
30
4
La educación abre oportunidades
Durante dos décadas, Haití ha estado plagado de
revueltas políticas y de una falta de estructuras
gubernamentales. El país cuenta con pocos profesores
cualificados y unas infraestructuras escasamente
desarrolladas, además de sufrir la falta de materiales.
Más de 500.000 niños no tienen acceso a la
educación básica y sólo dos terceras partes de los
niños de entre 6 y 12 años de ese país van a la
escuela. Menos de una tercera parte de todos los
niños termina la enseñanza primaria.
Aproximadamente la mitad de la población tiene
menos de 18 años. Hasta el año 2030 se prevé una
duplicación del número de habitantes, por lo que se
presentan unas necesidades sin precedentes para los
servicios de educación.
El noventa por ciento de todas las escuelas primarias
de Haití son regentadas por el sector privado. Dado
que el 80 por ciento de la población vive por debajo
del umbral de pobreza, muchos padres no se pueden
permitir enviar a sus hijos a la escuela. Los padres en
zonas rurales animan a sus hijos a que trabajen en el
servicio doméstico, pensando que de esta forma
podrían conseguir una educación. Existen alrededor
de 300.000 niños trabajando en el servicio
doméstico. Algunos de ellos terminan siendo niños de
la calle tras haberse escapado de sus patronos,
huyendo de los abusos.
El nuevo gobierno, creado tras las elecciones de
febrero de 2006, ha convertido la educación universal
y los comedores escolares en dos de sus prioridades.
Los comedores escolares son un factor muy
importante, teniendo en cuenta los elevados niveles
de hambre y desnutrición entre la población. Así
mismo, el gobierno se ha comprometido a seguir
implementando el Plan Nacional de Educación y
Formación, elaborado en 1996, que cuenta con las
siguientes cuatro prioridades: acceso, calidad, buenas
estructuras administrativas y eficacia.
La experiencia de Save the Children
Save the Children trabaja con 94 escuelas
comunitarias, estatales, religiosas y privadas en dos
distritos rurales, llegando, de esta forma, a más de
20.000 niños. Además de facilitar libros y
equipamiento, hemos construido once escuelas y
ofrecido formación para profesores, directores de
escuelas, comités de gestión de escuelas y
asociaciones de padres.
Save the Children trabaja, así mismo, con 2.000 niños
de la calle en la capital del país, muchos de los cuales
no han ido nunca a la escuela. Hemos creado centros
de acogida y escuelas no formales, donde esos niños
puedan aprender a leer y a escribir, de forma que,
más adelante, podrán incorporarse al sistema
educativo oficial. Una vez que estos niños estén
preparados para entrar en el sistema educativo
formal, nosotros les proporcionamos los uniformes y
les pagamos los costes de matrícula.
Lo que necesitamos
Save the Children seguirá colaborando con los
sectores público y privado, así como con las
organizaciones contrapartes para extender nuestras
actividades y crear un acceso a la educación a 40.000
niños. Así mismo, colaboraremos con el gobierno
para apoyar a las escuelas comunitarias en zonas
alejadas y abogaremos por la transparencia a través
de un reconocimiento institucional. La legislación
existente, relativa al derecho a una educación
gratuita, deberá imponerse en el mayor grado
posible. El aumento de la financiación de la educación
por parte del Estado deberá seguir centrándose en la
educación básica, sin perder de vista la necesidad de
introducir mejoras en todo el sector.
31
Felicia Webb
º
"Tengo un mensaje para otros niños: Por favor, no dejéis la escuela, porque en
el futuro tenéis que confiar en vosotros mismos, y no en otras personas."
Hijazi, 12, Norte de Sudán
º
5
Reescribamos el futuro recomendaciones
Save the Children plantea al mundo el reto de asegurar que los 43 millones de niños no
escolarizados en países frágiles afectados por conflictos tengan acceso a una educación
de calidad, que todo niño merece y a la que tiene derecho. Nosotros asumiremos
nuestro papel en la lucha por cumplir ese desafío. Aprovechando nuestra presencia en
el terreno y utilizando nuestra experiencia en el campo de los derechos del niño y de la
educación, queremos asegurar que, hasta 2010, tres millones de niños no escolarizados
en países afectados por conflictos puedan ir a la escuela. Al mismo tiempo queremos
mejorar la calidad de la educación de un total de 8 millones de niños. Mediante la
promoción de esta campaña y una colaboración activa con otras entidades, queremos
animar a otras organizaciones no gubernamentales (ONG) y organizaciones
comunitarias a que capaciten a los niños, a sus familias y comunidades para que
reclamen y obtengan su derecho a una educación de calidad.
Save the Children reconoce que, a pesar de que los gobiernos sean los principales
responsables del cumplimiento y el respeto de los derechos de sus ciudadanos, en
países afectados por conflictos, los gobiernos pueden estar debilitados hasta el punto
de ser incapaces de cumplir, sin ningún tipo de ayuda, sus obligaciones básicas. Por esta
razón creemos que la comunidad internacional, es decir, los gobiernos donantes, las
instituciones financieras internacionales y las agencias de Naciones Unidas, tienen la
obligación de asegurar que todos los niños, incluidos los niños en países afectados por
conflictos, puedan disfrutar de su derecho a la educación. Si el mundo quiere cumplir
los objetivos de educación que formen parte de los Objetivos de Desarrollo del
Milenio y los objetivos fijados en Dakar para la iniciativa Educación para todos,
deberán tomarse acciones urgentes y efectivas.
Save the Children hace un llamamiento a los líderes internacionales, a las
organizaciones, a los gobiernos y a todas las personas para que declaren públicamente
su apoyo al derecho de todos los niños a la educación, y para que emprendan acciones
inmediatas y sostenibles con el fin de implementar los cambios señalados a
continuación y de asegurar que esos 43 millones de niños tengan acceso a una
educación de calidad.
Los que ostentan el poder, es decir, los gobiernos, los donantes y las organizaciones
internacionales, hasta la fecha no están demostrando ni la voluntad política, ni los
compromisos necesarios para alcanzar a esos 43 millones de niños. La comunidad
internacional ha de actuar con mayor rapidez para prevenir conflictos y responder ante
el estallido de conflictos, además de proporcionar la ayuda financiera y de capacitación
necesaria para mantener la paz en el momento en que los países en situación de postconflicto inicien su proceso de reconstrucción nacional.
"Save the Children hace
un llamamiento a los
líderes internacionales, a
las organizaciones, a los
gobiernos y a todas las
personas para que declaren
públicamente su apoyo al
derecho de todos los niños
a la educación"
33
REESCRIB AMOS EL FUTURO
La educación reescribe el futuro
Como consecuencia de más de dos décadas de guerras, la
educación es algo casi inexistente en el Sur de Sudán. Más de
1,5 millones de personas han sido asesinadas, alrededor de 4
millones se han visto obligadas a huir al norte del país o a otros
países. Muchas de ellas aún no han podido volver. El sistema y
las infraestructuras educativos han sido totalmente destruidos.
Durante los últimos diez años, varias comunidades locales,
ONG y organizaciones religiosas han puesto en marcha
programas educativos ad hoc. Sin embargo, el Ministerio de
Educación está siendo gestionado por voluntarios, los
profesores carecen de formación y sueldo, y muchos de ellos
disponen tan sólo de una educación escolar muy reducida. Ir a
la escuela significa para todos aquellos niños que lo puedan
hacer, estar sentados debajo de un árbol o en una cabaña de
paja, sin agua ni servicios, sin los materiales más básicos de
enseñanza y aprendizaje.
Los niños del Sur de Sudán son los que menos acceso a la
educación primaria tienen en todo el mundo.Tan sólo alrededor
del 20 por ciento de los niños está escolarizado, y tan sólo el 2
por ciento termina la educación primaria. Para las niñas, la
situación es aún peor. De una población de entre seis y siete
millones de niñas en edad de enseñanza primaria, sólo 500 niñas
concluyen cada año la escuela primaria.
Tras haberse instaurado hace poco un gobierno separado y
haberse negociado unos frágiles acuerdos de paz, las personas
desplazadas empiezan a volver al sur del país, lo que, a su vez,
supone una carga aún mayor para un sistema educativo
prácticamente inoperativo.
La experiencia de Save the Children
Save the Children lleva trabajando desde hace 12 años en el Sur
de Sudán. Desde 2001 estamos realizando nuestro actual
programa de educación en esa región. Actualmente estamos
trabajando en cinco regiones crónicamente afectadas por la
guerra, ayudando a reconstruir el desmoronado sistema
educativo del país. Nuestro trabajo implica la ayuda para la
construcción de escuelas, la formación de profesores y la
promoción de formas flexibles de aprendizaje, como los
programas de aprendizaje intensivos. Creados para aquellos
niños que no hayan tenido la oportunidad de iniciar su
educación, los cursos comprimen ocho años de enseñanza
primaria en cuatro años, permitiendo a los niños estudiar con
alumnos de su misma edad. Estamos apoyando dichos
programas de aprendizaje intensivos en un total de 39 escuelas.
Uno de nuestros mayores desafíos es conseguir que un mayor
número de niñas vaya a la escuela. Muchas niñas no asisten
nunca a la escuela, porque son obligadas a quedarse en casa
para cuidar de hermanos y del hogar. Además, las niñas son
consideradas como una importante fuente de ingresos, ya que al
casarse una hija, las familias reciben una dote consistente en
vacas. Como consecuencia, los padres a menudo no envían a sus
hijas a la escuela por miedo a que puedan ser "estropeadas", es
decir, que pierdan su virginidad por culpa de compañeros de
clase, y que, por lo tanto, ya no valgan una gran dote.
34
Para promocionar la escolarización de las niñas y prevenir su
abandono escolar, Save the Children está apoyando comités de
sensibilización social en las escuelas. Compuestos por seis niñas
y seis niños, esos equipos van a sus comunidades para hablar
con todos aquellos padres que no envían a sus hijas a la escuela,
intentando que cambien de actitud.
En esos equipos, en los que los niños participan de forma
voluntaria, se utilizan la danza, el teatro y el canto para
demostrar la importancia de la educación de las niñas y para
llamar la atención de la comunidad sobre ese asunto. Los niños
recurren a discursos y debates públicos para animar la discusión
sobre conceptos de educación, van de visita a las casas de los
padres y participan con actuaciones en las reuniones de la
comunidad. Dentro de las escuelas, los equipos utilizan el
deporte, como el voleibol, para fomentar la participación de las
niñas, organizando campeonatos entre las clases de la escuela.
Save the Children ha formado ya a 31 equipos de
sensibilización, otros 15 se encuentran en proceso de creación.
Para preparar a los miembros a hablar con convicción en sus
comunidades, les impartimos cursos sobre cómo hablar en
público, así como sobre temas importantes, como los derechos
del niño. Los equipos participan también en talleres de debate
sobre temas de educación y en la toma de decisiones acerca de
su propia educación.
Lo que necesitamos
No existe una política global de educación en el Sur de Sudán.
El Ministerio de Educación padece una grave falta de recursos.
Save the Children está ayudando a mejorar los conocimientos y
capacidades de las autoridades educativas locales y abogando
por que el gobierno del Sur de Sudán incremente su
presupuesto destinado a la educación al 15 por ciento del total
de gastos.
Aún existe una fuerte reticencia a enviar a las niñas a la escuela.
Además de querer incrementar las cifras globales de
escolarización primaria de 60.000 a 250.000, nuestro objetivo
consiste en conseguir que un 40 por ciento de los nuevos
alumnos sean niñas. Seguiremos colaborando con las
asociaciones padres/profesores y con los equipos de
sensibilización dirigidos por niños para generar un cambio de
mentalidad en las comunidades. Así mismo, estamos trabajando
para incrementar el porcentaje de profesorado femenino al 10
por ciento.
Muy pocas escuelas disponen de edificios estables. Actualmente,
estamos participando en la construcción de 50 edificios
escolares. Seguiremos proporcionando material escolar y
ayudando en la elaboración de nuevos planes de estudio. Hasta
la fecha hemos formado a 1.040 profesores (incluidos los
profesores para nuestros programas de aprendizaje intensivos y
para nuestros proyectos de desarrollo de temprana infancia).
Seguiremos realizando grandes esfuerzos para que, hasta el año
2009, el 60 por ciento de los profesores utilicen métodos de
enseñanza respetuosos con los niños y con la problemática del
género. Desde 2006, estamos apoyando, así mismo, el sistema de
formación de profesores, recientemente creado en el Sur de
Sudán.
5
Recomendaciones
Los gobiernos nacionales han de tomar medidas para:
• establecer un plan de duración determinada para cumplir con el compromiso de abolir los
costes de matrícula en la enseñanza primaria, a la vez de dar los pasos adecuados hacia el
mantenimiento y la mejora de la calidad de la educación
• Garantizar el número y la calidad adecuados del personal de enseñanza, reformando los
sistemas de promoción de profesores y mejorando los salarios y las condiciones de trabajo de
los profesores
• elaborar unos planes de estudio que transmitan una comprensión temprana de los derechos
humanos, de la justicia social, del trabajo en equipo y del proceso de paz y de reconciliación, y
que ayuden a los niños a protegerse a sí mismos contra los riesgos asociados a un conflicto,
como los riesgos de las minas antipersonales y del VIH/SIDA.
• financiar a las escuelas y/o centros de educación alternativa
• proteger a niños y profesores contra la violencia ejercida por fuerzas estatales y/o milicias
armadas, garantizando que todos los autores de crímenes sean sometidos a la persecución
conforme a las leyes nacionales
• promover la comprensión del derecho y del valor de la educación entre padres, niños y las
comunidades en su sentido más amplio.
Los donantes y organizaciones internacionales deberán
Asegurar que la educación forme parte de las acciones de ayuda humanitaria
de emergencia:
• proporcionando educación de calidad como un servicio de primera línea en todas las acciones
de ayuda humanitaria en los 30 primeros días, utilizando los estándares mínimos para la
educación en emergencias, definidos por la Red Interinstitucional para la Educación en
Situaciones de Emergencia (INEE), como referencia para la calidad 59
• asegurando que la educación, en el marco de la ayuda humanitaria, cuente con la financiación
y coordinación necesarias, y que un porcentaje de los fondos recaudados a través de los
llamamientos de Naciones Unidas para situaciones de emergencia sea destinado al sector de la
educación.
Garantizar la protección infantil a través y dentro de una educación de
calidad:
• apoyando la creación de espacios escolares adecuadamente gestionados, para proteger a los
niños contra daños físicos, angustias psicológicas y sociales, el reclutamiento por parte de
grupos armados, la separación familiar y los abusos relacionados con su desplazamiento
• promocionando la creación de programas alternativos de educación básica, que incluya
centros de recuperación escolar, programas extraescolares y una enseñanza con horarios
flexibles, especialmente en situaciones en las que los problemas de seguridad impidan que los
niños vayan a escuelas normales.
Asegurar la financiación adecuada de la educación en países en situación de
conflicto y post-conflicto:
• incrementando sus compromisos con países frágiles afectados por conflictos, asumiendo un
papel de liderazgo en la búsqueda de mecanismos de financiación que permitan que los
fondos puedan ser canalizados de forma efectiva hacia la satisfacción de las necesidades
básicas, especialmente ante la ausencia de un gobierno eficaz
• incrementando las asignaciones a una ayuda previsible y a largo plazo para la educación en
países frágiles afectados por conflictos, destinando una parte importante de dicha ayuda a la
educación básica
• extendiendo la Iniciativa Vía Rápida de Educación para todos, con el fin de que los países
frágiles afectados por conflictos puedan beneficiarse de un aumento de la ayuda financiera y
técnica aportada a través de la Iniciativa Vía Rápida, lo que deberá ir acompañado de un
incremento de los recursos globales de dicha Iniciativa.
35
Louise Dyring Nielsen/Save the Children
"Estudiar es lo más importante en mi vida."
Selestina, 14, Angola
Notas de pie:
Introducción
1 No existe ninguna lista oficial de países afectados por conflictos. Save the Children ha identificado a un
grupo de países calificados como afectados por conflictos y frágiles, a través de la elaboración de
referencias cruzadas de varias listas. Los países identificados como Estados frágiles afectados por
conflictos son aquellos que aparecen en al menos dos de las siguientes listas: (1) Lista del Proyecto
Ploughshares de Estados que hayan experimentado al menos un conflicto armado durante el periodo
1995-2005 www.ploughshares.ca/libraries/ACRText/Summary2004/pdf (2) Índice de Estados Fallidos
2006 www.fundforpeace.org/programs/fsi/fsindex2006.php (3) Grupo LICUS (Países de bajos ingresos
en dificultades) del Banco Mundial 2004
http://siteresources.worldbank.org/IDA/Resources/2004CPIAweb1.pdf.
Capítulo 1
2 http://www.bbc.co.uk/worldservice/people/features/childrensrights/childrenofconflict/wounded.shtml
3 UNICEF (2006) Estado Mundial de la Infancia 2006
4 Oficina del Secretario General de Naciones Unidas para la cuestión de los niños y los conflictos
armados (2005) www.un.org/special-rep/children-armed-conflict/
5 Graça Machel (1994) Impact of Armed Conflict on Children, UNICEF www.unicef.org/graca/a51306_en.pdf
6 300.000 niños son utilizados como niños soldados en conflictos armados, un 40 por ciento de ellos son
niñas. UNICEF (2005) Estado Mundial de la Infancia 2005
7 Project Ploughshares http://www.ploughshares.ca/imagesarticles/ACR04/Child_Soldiers_Map.pdf 8
El anuario de 2005 del Instituto Internacional de Estocolmo para Investigaciones sobre la paz define
como conflictos importantes a todos aquellos que causen más de 1.000 muertes como consecuencia de
combates en cada año de duración del conflicto http://yearbook2005.sipri.org/ch2/ch2
9 Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) www.unhcr.org/cgibin/texis/vtx/statistics
10 ídem
11 http://yearbook2005.sipri.org/ch2/ch2
12 Annual Education Statistical Report (2001/02), Ministerio de Educación, Khartoum, Sudán
13 Concern for Working Children in Nepal (2005) Children in Conflict Fact Sheet, CWIN, Kathmandu,
Nepal
14 A. Wirak et al (2005) Afghanistan -Norwegian Education Team Report (borrador), www.deco.no
15 Ministerio de Educación y Deportes de Uganda (2004) Strategic Framework for Education for All in
the Conflict and Post-Conflict Districts, Abril de 2004
16 Watchlist on Children and Armed Conflict (2004) Nothing Left to Lose: The legacy of armed
conflict and Liberia's children http://www.watchlist.org/reports/liberia.report.pdf
17 Watchlist on Children and Armed Conflict (2005) Caught in the Middle: Mounting violations against
children in Nepal's armed conflict http://www.watchlist.org/reports/nepal.report.20050120.pdf
18 Save the Children Reino Unido (2005) Education Assessment Liberia: Views of children, teachers and
other adults on education in post-conflict Liberia, Monrovia, Liberia
19 New Sudan Centre for Statistics and Evaluation, en colaboración con UNICEF (2004) Towards a
baseline: Best estimates of social indicators in South Sudan, Mayo de 2004
20 N. Lanson (2004) Increasing Access and Quality of Education for Vulnerable and Drop-out Children
Diciembre de 2004.
21 Indicadores fundamentais de Educacao, Ministerio de Educación, Angola
37
REESCRIB AMOS EL FUTURO
22 J. Lowicki (1999) Missing Out: Adolescents affected by armed conflict face few educational
opportunities and increased protection risks, www.tc.columbia.edu/cice/archives/2.1/21lowicki.pdf
Capítulo 2
23 K Tomasevski (2003) Education Denied: Costs and remedies, Zed Press, Londres
24 UNESCO (1990) Educación para todos www.unesco.org/education/efa/ed-for-atl/faq.shtml
25 El Marco de Acción de Dakar, Educación para todos: Cumplir nuestros compromisos
comunes, aprobado por el Foro Mundial sobre la Educación, Dakar, Senegal, 26-28 de abril de 2000
26 UNESCO/UNICEF (2005) Children Out of School: Measuring exclusion from primary
education, Instituto de estadística de la UNESCO, Quebec. Los datos corresponden al curso
académico 2001/02.
http://www.uis.unesco.org/template/pdf/educgeneral/OOSC_EN_WEB_FINAL.pdf
27 Save the Children (2006) Taking Positive Action for Children in Conflict: Save the Children's
programme schools in Nepal, estudio sin publicar
28 Banco Mundial, 'Achieving Education for All by 2015', citado en E. Hannum y C. Buchmann
(2003): The Consequences of Global Educational Expansion: Social science perspectives,
American Academy of Arts and Sciences Cambridge, Massachusetts
29 L.Chauvet y P. Collier (2004) Development Effectiveness in Fragile States: Spillovers and
Turnarounds, Centre for the Study of African Economics, Department of Economics, Oxford
University
30 Academy for Educational Development (2003) Facts about Basic Education in Developing
Countries, Washington, http://www.aed.org/education/edu_facts.html
31 M. Sinclair (1998) 'Refugee Education in the Mid-1990s', en: G. Retamal y R. Aedo-Richmond
(eds), Education as a Humanitarian Response, Cassell, Londres.
32 E. B. Fiske (1993) Basic Education: Building blocks for global development, Academy for
Educational Development, Washington
33 Banco Mundial - Preguntas & Respuestas
http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/TOPICS/EXTEDUCATION/0,,contentMDK:
20205793~menuPK:543217~pagePK:148956~piPK:216618~theSitePK:282386,00.html#5
34 Banco Mundial - Educación - La educación de las niñas
http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/TOPICS/EXTEDUCATION/0,,contentMDK:
20298916~menuPK:617572~pagePK:148956~piPK:216618~theSitePK:282386,00.html#why
35 Banco Mundial - Educación - Resumen
http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/TOPICS/EXTEDUCATION/0,,menuPK:2823
93~pagePK:162100~piPK:159310~theSitePK:282386,00.html#education_development
36 UNESCO/UNICEF (2005) Children out of School: Measuring exclusion from primary
school, Instituto de Estadística de la UNESCO, Quebec
Capítulo 3
37 V. Cipolat (2003), Internally Displaced Children: the impact of displacement on the
education of children from 5 to 18 in Altos de Cazucá, Colombia
Capítulo 4
38 Marco de Acción de Dakar, Educación para todos: Cumplir nuestros compromisos comunes,
aprobado por el Foro Mundial sobre la Educación, Dakar, Senegal, 26-28 de abril de 2000
39 Señalado en el Informe de Seguimiento global 2006 de la UNESCO, con referencias a Delors et al,
38
1996
40 El Marco Indicativo de la Iniciativa Vía Rápida - Educación para todos establece que el 20 por ciento
es el porcentaje medio de asignaciones presupuestarias a la educación en algunos países que han
registrado éxitos en esa materia
41 Según datos del Informe de seguimiento global de la UNESCO (2005)
42 Ministerio Federal de Educación de Sudán (2003) National Education for All Plan
43 A Wood (2005) Financing Education in Ethiopia, Save the Children Reino Unido, informe sin publicar
44 Ministerio de Planificación Económica de la República Democrática de Congo (2005)
45 Naciones Unidas (2005) 60ª Sesión de la Asamblea General.
www.unep.org/greenroom/documents/outcome.pdf
46 En el Informe de Seguimiento de la Educación para todos en el mundo de 2006 se constata que
resulta evidente que los países con los Índices de la EPT (EDI) más bajos no son los que prioritariamente
reciben ayudas a la educación, lo que confirma otros análisis según los cuales esas ayudas no son
necesariamente concedidas a los países más pobres y necesitados. En cambio, unos volúmenes
desproporcionados de ayuda son destinados a países de renta media con unos indicadores sociales
relativamente mejores, incluido el indicador de la escolarización primaria. (Informe de seguimiento de la
Educación para todos en el mundo (2006: 114).
47 'Buenos cumplidores' según las puntuaciones obtenidas en la Política del País y la Evaluación
institucional del Banco Mundial (CPIA). Para cada uno de sus 136 prestatarios, el Banco Mundial
establece una clasificación anual de CPIA, como base para un ranking global de resultados de cada
gobierno prestatario. Las clasificaciones se basan en evaluaciones del funcionamiento estatal, así como de
las políticas de reformas económicas, estructurales, sociales y públicas de cada país.
48 Basado en datos procedentes de la base de datos online DAC de la OCDE sobre Actividades de
Ayuda, en la que se incluyen las informaciones estadísticas oficiales transmitidas a la OCDE por los
miembros de DAC y las organizaciones internacionales.
49 Entre los países frágiles afectados por conflictos se incluyen, así mismo, cuatro países de renta media
(Angola, Colombia, Irak y Sri Lanka). Si se excluyera a esos países de los cálculos, quedaría demostrado
que el volumen de ayuda destinado a los países frágiles afectados por conflictos y de renta baja es aún
menor.
50 Datos procedentes del Informe de seguimiento de la educación para todos en el mundo (2006)
51 EPT-IVR www1.worldbank.org/education/efafti/
52 Los países con menos de cuatro donantes en el país reúnen las condiciones necesarias para obtener
una financiación catalítica. A menudo, esos países son denominados como "huérfanos de donantes".
53 19 Estados frágiles afectados por conflictos se han beneficiado del FDPE. No obstante, hasta ahora
en términos de provisión de fondos, el FDPE es una caja relativamente pequeña de dinero, con un total
de tan sólo 1,5 millones de Dólares americanos, desembolsados hasta marzo de 2006.
54 N. Leader y P. Colenso (2005) Aid Instruments in Fragile States, PRDE Working Paper 5 - March
2005, Department for International Development, Londres. De 1993/94 a 2003/04, la ayuda prestada
por Reino Unido a Liberia y Somalia se componía de ayuda de emergencia (en un 73%) y de cooperación
técnica (en un 18%).
55 J. Randel, M. Cordeiro y T. Mawjee (2004) 'Financing countries in protracted humanitarian crises: An
overview of new instruments and existing aid flows' en: A. Harmer y J. Macraw, Beyond the Continuum:
The changing role of policy in protracted crises, ODI Humanitarian Policy Group, Londres
56 V. Levin y D. Dollar (2005) The Forgotten States: Aid volumes and volatility in difficult partnership
countries (1992-2002), documento de resumen elaborado para el DAC Learning Advisory Process on
Difficult Partnerships, mimeo
57 Save the Children (2006) The Role of Aid Donors in Creating Aid Volatility and How to Reduce it
58 ídem.
Capítulo 5
59 Los estándares mínimos para la educación en emergencias han sido desarrollados tras consultaciones
por la Red Interinstitucional para la educación en situaciones de emergencia (INEE) www.ineesite.org
39
Reescribamos el Futuro
Educación para niños y niñas en
países afectados por conflictos
Según cálculos realizados por Save the Children, unos 43
millones de niños, es decir, una tercera parte de los 115
millones de niños en edad de enseñanza primaria no
escolarizados en el mundo, viven en países frágiles afectados
por conflictos. Además de matar y herir a millones de niños,
los conflictos interrumpen su vida normal. Familias son
obligadas a huir de sus casas, escuelas quedan destruidas. Los
presupuestos nacionales para la educación se desvían a otros
fines. La respuesta habitual por parte de la comunidad
internacional consiste en proporcionar ayuda de emergencia
que raras veces incluye la educación.
Los líderes internacionales se han comprometido a escolarizar
a todos los niños hasta 2015. No obstante, incluso
cumpliéndose las promesas actuales, ese objetivo no se hará
realidad para los niños en países frágiles afectados por
conflictos, en los que se requieren medidas especiales.
Basándose en su experiencia de 80 años de trabajo con niños
en situaciones de conflicto, Save the Children se ha
comprometido a lograr, hasta 2010, la escolarización de tres
millones de niños no escolarizados en países frágiles afectados
por conflictos, y a mejorar la calidad de la educación de un
total de ocho millones de niños.
"Reescribamos el futuro" constituye, así mismo, un
llamamiento a los gobiernos nacionales, a los donantes y a las
organizaciones internacionales para que emprendan acciones
inmediatas y sostenibles, con el fin de asegurar que 43
millones de niños en Estados frágiles afectados por conflictos
tengan acceso a una educación de calidad.
www.savethechildren.es
902 013 244

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