MANEJO EMOCIONALMENTE INTELIGENTE DEL TIEMPO
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MANEJO EMOCIONALMENTE INTELIGENTE DEL TIEMPO
Medio: Comafi Sección / Suplemento: Espacio Pyme Fecha: 16 de junio de 2014 Link: http://www.comafi.com.ar/espaciopyme/913-Manejo-emocionalmenteinteligente-del-tiempo.Espacio-Pyme-red-expertos-Nota.note.aspx 13 de junio de 2014 MANEJO EMOCIONALMENTE INTELIGENTE DEL TIEMPO La Lic. Mirta Dall´Occhio, directora del Centro de estudios del estrés y la ansiedad Hémera, nos brinda algunos consejos prácticos para para aprender a organizar nuestra agenda de manera eficiente y mejorar así nuestro rendimiento. El tiempo muchas veces no nos alcanza. Lo corremos cuando no llegamos a cumplir con los objetivos previstos; lo padecemos en una espera angustiosa y queda corto cuando se disfruta del momento. Esto principalmente ocurre entre los empresarios Pymes, que muchas veces, por no contar con una infraestructura o un equipo grande, terminan ocupándose de más de una tarea a la vez. Por lo tanto, es importante saber gerenciar la propia vida y administrar el tiempo de modo inteligente. Además, debemos saber que el cuerpo y la mente se cansan, y que la energía no es igual a la mañana que a la noche. Cada hora que pasa es irrepetible, por lo que planificar en qué estamos invirtiendo nuestra vida nos puede ayudar a clarificar el sentido que tienen las elecciones que hacemos. Para lograr un manejo emocionalmente inteligente del tiempo, es vital plantearse objetivos realistas y cumplirlos. ¿CÓMO? Esto requiere: • auto observarse en fortalezas y debilidades, • medir costos y estar dispuesto a sobrellevarlos, • elegir, sostener y también ser capaces de dar de nuevo si creemos necesario. Están quienes pasan para mañana lo que pueden hacer hoy; pero hay quienes toman esta actitud como un patrón de comportamiento cotidiano y sistemático. Así, la procastinación lleva a dejar para más tarde las tareas importantes, reemplazándolas por otras irrelevantes pero placenteras. Con este mecanismo no se afronta la ansiedad que genera hacer lo que hace falta hacer para estar, ser, o vivir mejor. La procastinación persiste con el autoengaño de creer que mañana habrá más tiempo y recursos; basándose en el perfeccionismo, miedo al fracaso y la baja tolerancia a la frustración. Sólo la aceptación del que soy y el andar con sentido, es lo que nos ayuda a valorarnos y a validar nuestro tiempo de vida. Por eso: • Hagámonos cargo y miremos nuestro reloj. • Establezcamos prioridades y cumplámoslas, respetando nuestro tiempo y el de los otros. Aprendamos a delegar, destinemos un tiempo al trabajo, uno al cuerpo, uno a la • familia, uno a los amigos y nuestra comunidad. Hagamos más para que las cosas sucedan y no sólo nos dejemos llevar a ver qué nos • sucede. Seamos más actores y menos espectadores en nuestra propia vida. La presente columna tiene fines informativos y es emitida por su firmante, por lo que el Banco no se responsabiliza por los contenidos de la misma.