ruta de pétalos - Hotel Metropole Monte

ESCÁPATE
A DÓNDE IR Y CÓMO VIVIRLO
Lobby del hotel
Metropole
Monte-Carlo, un
ícono de la industria
de la hospitalidad
en Mónaco.
FOTOGRAFÍA: CORTESÍA DEL HOTEL METROPOLE MONTE-CARLO.
RUTA DE
PÉTALOS
Empleadas en la
decoración y la creación
de menús de alimentos,
bebidas y tratamientos, las flores
se han convertido en la
brújula de los viajeros
que veneran la delicadeza
del mundo natural.
Por Pedro Aguilar Ricalde
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ESCÁPATE
Uno de los
espacios de
descanso de Spa
Matilda, en San
Miguel de Allende.
as flores son música para los ojos y uno de los elementos de la naturaleza que nos acompaña a lo largo
de la vida. Su belleza ha servido como inspiración
recurrente para creadores de múltiples disciplinas artísticas: desde pintores y fotógrafos hasta músicos y
diseñadores de moda. Su sola presencia tiene el poder
de dibujar sonrisas en quien las admira, sus esencias evocan memorias y para algunos son un antidepresivo natural que nos recuerda
nuestra conexión con la tierra y la naturaleza.
Las evidencias indican que el mundo está floreciendo no sólo
gracias al trabajo de los floristas más reconocidos del mundo, pero
también gracias al de chefs, decoradores de interiores, mixólogos
y esteticistas. Este frenesí es también una fuente de ideas para los
Terraza del hotel
Four Seasons
George V con
vista a la Torre
Eiffel.
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“Huampo, lúcuma, retama y
manzanilla”, platillo servido
por el chef Virgilio Martínez en
el restaurante Central, en Lima.
viajeros, especialmente aquellos que buscan experiencias fuera de
serie que atesorar en la memoria, y cuentan con los recursos necesarios para trazar rutas, definir itinerarios y embarcarse en aventuras
enmarcadas por la compleja delicadeza de las flores.
En el campo de la hospitalidad, las flores poseen un incuestionable potencial para transformar la experiencia de los huéspedes. La
cadena Four Seasons ha sido una de las primeras en capitalizar el
diseño floral en sus propiedades. Desde 1999, Jeff Leatham ocupa el
puesto de director artístico del Four Seasons Hotel George V de París y tiene a su cargo la creación de los espectaculares arreglos florales
que adornan el lobby, los pasillos y las habitaciones del hotel. Con
un equipo de nueve personas crea y elabora composiciones que a
menudo son comparadas con el arte contemporáneo. Cada semana el hotel recibe tres camiones repletos de flores provenientes de
Amsterdam que le aseguran a Leatham la materia prima para llevar
a cabo su magia. “El mejor cumplido que recibo es cuando alguien
me comenta que se ha hospedado en el hotel por 16 años y nunca
ha visto la misma disposición dos veces. Es un reto fascinante”, asegura. Un caso similar es el del hotel Metropole Monte-Carlo, que
ha dejado en manos de Perrine Guyonnet la decoración del lobby
FOTOGRAFÍAS: CORTESÍA DE HOTEL METROPOLE MONTE-CARLO; CORTESÍA DEL FOUR SEASONS HOTEL GEORGE V PARIS;
CORTESÍA DE HOTEL MATILDA; BRICK DELGADO; CORTESÍA DE DANDELYAN BAR; GETTY IMAGES/ISTOCK.
L
Los conceptos
decorativos del
hotel Metropole
Monte-Carlo están
a cargo de Perrine
Guyonnet.
Los chefs tampoco pueden resistir el seductor encanto de las flores. Virgilio Martínez, considerado el mejor chef de Latinoamérica
gracias a su restaurante Central, con sede en Lima, Perú, es uno
de los grandes exponentes y defensores de la incorporación de éstas
a sus recetas. “La cocina que hacemos es muy paisajista –por ser
una interpretación de las distintas regiones de Perú– y las flores son
ideales para reproducir los colores y matices que encontramos en la
naturaleza”, nos explica en exclusiva. Además de ser elementos decorativos, éstas aportan texturas, sabores, colores y aromas que otros
ingredientes no poseen. Muchas de las que él emplea provienen de
un huerto que está arriba de la cocina de su restaurante, pero también hay especies que manda traer de otros lugares. “Para usar flores
en la cocina es básico no caer en los excesos y cuidar que exista una
verdadera conexión con la comida”, añade. De este modo, flores de
cilantro, cacao, manzanilla y capuchinas, entre otras, son incorporadas a su propuestas; en algunas ocasiones, su inspiración proviene de
el uso tradicional que se hace de ellas en comunidades y pueblos de
Perú y, en otras, de sus propias investigaciones.
Algo similar ocurre en la coctelería. Si bien los cocteles tiki de
los años 30 ya empleaban flores de mayo e hibisco para transportar
a quienes los bebían al exotismo de la Polinesia, hoy los criterios
van más allá de lo estético. Arnold García, sommelier de Grupo
Patanegra, destaca los nutrientes y las propiedades relajantes y
antioxidantes que aportan las flores. Desde luego, es muy cuidadoso en su selección y tiene en cuenta de qué manera se
les empleará –mermeladas, aguas, espumas, infusiones, sales,
etc.– para dar paso a experiencias únicas. Begonias,
violas, violetas y pensamientos son algunas de
las especies que se emplean en el menú de
coctelería de bares como Limantour, en la
Ciudad de México, y Dandelyan y The
Botanist, en Londres. Es momento de
empacar y dejar que tus sentidos sean
acariciados con la delicadeza de un pétalo. Bon Voyage! n
y del Salon des Princes para
ajustarse al espíritu de las distintas estaciones y celebraciones a
lo largo del año.
Los beneficios medicinales y
terapéuticos de las flores no han sido
pasados por alto en el segmento del bienestar.
Tal es el caso del Spa Matilda –localizado en San Miguel de Allende, en el interior del hotel del mismo nombre–, que ofrece a sus clientes un tratamiento conocido como Compresas
florales. Con una mezcla de flores secas –rosas, flor de azahar, caléndula, lavanda
y coco rallado– obtenidas localmente, se preparan compresas que se calientan al vapor para estimular sus elementos activos y posteriormente se aplican en todo el cuerpo, a
excepción de la cara y el estómago. En general, los hidrolatos o aguas florales ayudan a preservar el pH de la piel y a mantenerla sana y equilibrada, aunque cada una aporta distintos
beneficios. Por ejemplo, las rosas tienen propiedades tonificantes, hidratantes y antisépticas;
las flores de azahar ayudan a evitar el envejecimiento celular; y las flores de lavanda ayudan
a la desinflamación y relajación. Al final de los 90 minutos que dura la sesión, los clientes
experimentan una sensación de relajación profunda, así como alivio de dolores musculares
y mejoras en el aspecto de la piel.
De izquierda a derecha:
cabina de tratamientos e
ingredientes utilizados en el
tratamiento de compresas
florales de Spa Matilda; coctel
Peach in a Pine Cone del bar
Dandelyan, en Londres.
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