Roberto Vázquez Meza, 17 años de estudios de

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Roberto Vázquez Meza, 17 años de estudios de
Roberto Vázquez Meza, 17 años de estudios de
las nebulosas planetarias
Por Karla Navarro
Ensenada, Baja California. 13 de septiembre de 2016 (Agencia
Informativa Conacyt).- Con una vocación definida desde la infancia,
Roberto Vázquez Meza, investigador del Instituto de Astronomía de la
Universidad Nacional Autónoma de México (IAUNAM), campus
Ensenada, se ha dedicado desde hace 17 años al estudio de las
nebulosas planetarias.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, el científico nivel II
del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) relató que desde su tesis
de maestría se interesó por las etapas finales de la evolución de las
estrellas.
“Son objetos que se llaman nebulosas planetarias, el nombre es
histórico, no tiene nada que ver con planetas, es el cascarón de gas que
se forma cuando una estrella evoluciona; el sol en su momento se va a
convertir en nebulosa planetaria”, explicó.
Considera que algo que atrajo su atención es que las nebulosas
planetarias son objetos estéticos con abundantes fenómenos físicos:
“Tienen dinámica de fluidos, los gases se mueven de manera muy
extraña”.
Nebulosas y astrobiología
Roberto Vázquez compartió que en sus etapas de maestría y doctorado
se analizaban los flujos de gas de las nebulosas planetarias sin que se
supiera con precisión lo que se estaba observando.
“La teoría decía que se iban a mover demasiado lentos y tranquilos y
resulta que tienen eventos aparentemente violentos, explosivos, no
como una supernova, determinados flujos que salen a velocidades muy
altas”, refirió.
Mientras que el interés por las nebulosas planetarias surgió desde su
etapa como estudiante, ya en su labor como investigador descubrió una
nueva pasión: la astrobiología.
A través de esta área ha incursionado en trabajos relacionados con
cometas, planetas enanos y objetos cercanos a la Tierra (NEOS, por sus
siglas en inglés), lo que ha mantenido una diversificación en sus
proyectos como investigador.
Descubrimiento de un nuevo objeto
Una de las experiencias profesionales que considera de las más gratas
es el descubrimiento de un objeto nuevo durante sus tareas de
observación.
“Cuando de repente estábamos viendo algún catálogo de objetos
pequeñitos y al observarlo encontramos toda una región que jamás
nadie había visto, la mapeamos alrededor, esa sensación de descubrimiento es formidable”, narró Roberto Vázquez.
Añadió que durante sus estudios de doctorado hizo un descubrimiento
adicional, mientras que entre sus más recientes trabajos está un estudio
cinemático de una nebulosa planetaria, de lo que surgió la publicación
de un artículo en el que detalla cómo se mueve esa nebulosa, dónde
está, qué tan rápido se mueve y qué estructura tiene.
“Ya llevamos 20 años de esto y sigue siendo un problema, entonces mi
interés fundamental es no morirme sin que se descubran al menos las
bases fundamentales de cómo es que surge toda esta morfología en las
nebulosas”, expresó.
Vocación desde la infancia
Si bien su vocación científica no fue abiertamente inculcada por su
familia, Roberto Vázquez recuerda que sus padres le enseñaron el hábito
de la lectura y siempre se preocuparon por brindarle educación a él y
sus hermanos.
“Yo desde los cuatro años aprendí a leer por necesidad, porque todo
mundo estaba ocupado y no había quién me pudiera leer los cómics,
entonces le pedí a mi mamá que me enseñara algunas palabras y ya de
ahí 'agarré el hilo'”, relata.
Desde entonces la lectura fue una constante, lo que lo llevó a una
enciclopedia con temas de ciencia y tuvo los primeros encuentros con la
astronomía a través de imágenes de planetas que despertaron su
inquietud por estudiar un área científica.
Ese gusto por la ciencia se mantuvo hasta la secundaria, cuando obtuvo
su primer telescopio y comenzó a participar en concursos organizados
por las universidades, hasta que en la preparatoria fundó con otros
estudiantes la Sociedad Científica Juvenil, en 1986.
Estudios profesionales
En 1987 ingresa a la carrera de física de la Facultad de Ciencias de la
Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y al egresar, en 1992,
se incorpora a un programa de maestría a distancia en la UNAM, desde
el campus en Ensenada.
Para 1995 comienza a buscar una beca que le permitiera estudiar en el
extranjero y, junto con su esposa, fue becado por la Agencia Española
de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y viaja a la
ciudad de Granada, en España, para estudiar un doctorado en ciencias
físicas.
En 1999 se gradúa del doctorado y, gracias a una beca complementaria
que recibió de la UNAM, hace el compromiso de regresar a trabajar a
México, razón por la cual se sumó desde entonces al Instituto de
Astronomía, en Ensenada.
Ciencia en México
Respecto a su experiencia como científico mexicano, Vázquez Meza
opina que la publicación de artículos es una prueba de la productividad
de la ciencia en nuestro país; sin embargo, considera que los
investigadores no deben temer a participar en proyectos ambiciosos.
“Yo creo que sí hay condiciones para realizar un buen trabajo, en
particular en Ensenada, prueba de esto es la cantidad de extranjeros
que tenemos aquí trabajando, porque es un lugar agradable para
trabajar”, estimó.
Apuntó que el trabajo científico es una labor creativa, con una parte
técnica por la necesidad de obtener datos o diseñar modelos, pero
también implica imaginación y creatividad para hacer un buen trabajo.

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