Capítulo IV Piojos - Phthiraptera.info

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Capítulo IV
Piojos (Phthiraptera)
Los piojos son una amenaza a la salud de mascotas, del ganado y del ser humano, no
sólamente por sus hábitos de morder o picar para chupar sangre, si no por su habilidad
de transmitir patógenos. El piojo del cuerpo humano ha sido responsable indirectamente
de influenciar la historia mediante su habilidad de transmitir el agente causal de la tifus
epidémica. Sin embargo, la mayoría de las 3,200 especies de piojos son ectoparásitos de
aves silvestres o de mamíferos y no tienen ninguna relevancia médica o veterinaria
significativa.
El orden Phthiraptera se divide en dos grupos taxonómicos; los Anoplura (piojos
chupadores) y los Mallophaga (piojos que pican o mastican). Todos los miembros de
grupo Anoplura son obligados, ectoparásitos hematófagos de mamíferos placentales,
mientras que los más diversos Mallopahaga incluyen especies que son socios obligados
de pájaros, marsupiales y mamíferos placentales. Aunque ciertos piojos masticadores,
ingieren sangre, la mayoría de las especies consumen plumas del huésped, piel, pelaje, y
productos de la piel. Como resultado de las diferencias en hábitos alimenticios de los dos
grupos taxonómicos, los Anoplura que se alimentan de sangre son mucho más
importantes que los Mallophaga, al momento de considerar la transmisión de patógenos
al huésped.
Taxonomía
Como 550 especies de Phthiraptera han ido descritas, todas parasitan mamíferos
placentales, estos piojos están asignados a 50 géneros y 15 familias. Cerca de 2,650
especies de Mallophaga han sido descritas, la mayoría de éstas asociadas a aves, pero
unas 400 (15%) parasitan mamíferos placentales. Los Mallophaga se pueden dividir en 3
subórdenes (Tabla I), 11 familias y 205 géneros.
Los Mallophaga se dividen en los siguientes tres subórdenes: Amblycera (con 7
familias, 76 géneros y 850 especies); los Ischnocera (con 3 familas, 130 géneros y 1,800
especies); y los Rhyncophthirina (con 1 familia, 1 género y 3 especies). (Figuras 4.1 y 4.5)
Sin embargo, hay bastante discrepancia en cómo clasificar estos animalitos. Y algunos
entomólogos los clasifican como dentro del orden Phthiraptera, y ponen a los Anoplura,
Amblycera, Ischnocera y Rhyncophthirina en subórdenes. Otros tratan a los Anoplura y
a los Mallophaga por separado. Independientemente de las discrepancias sobre las
interpretaciones taxonómicas, la evidencia con la que se cuenta apunta a que tanto los
piojos chupadores como los masticadores se originaron de un grupo ancestral noparasítico con una relación cercana al orden Psocóptera (piojos de la madera y de la
corteza). Estos dos grupos divergen en la parte alta del Cretáceo unos 100-150 millones
de años atrás.
Los piojos chupadores de importancia médica están asignados a dos familias, los
Pediculidae y los Pthiridae; mientras que los piojos chupadores de importancia
veterinaria están asignados a 5 familias; Haematopinidae, Hoplopleuridae,
Linognathidae, Pedicinidae y Polyplacidae (Tabla II).
Sólo una especie de piojo
masticador, el piojo masticador del perro, de la familia Trichodectidae tiene relevancia en
el tema de la salud pública. Los Mallophaga de importancia veterinaria están en 5
familias, Boopiidae, Gyropidae, Manoponidae, Philopteridae y Trichodectidae (Tabla I.)
Tabla I. Clasificación y huéspedes de los Mallophaga (piojos masticadores) de
importancia médica y veterinaria.
Figura 4.1 – Diagramas representativos de la cabeza y partes bucales de los cuatro
grupos principales de piojos:
(A) Ischnocera, (B) Anoplura, (C) Amblycera, (D) Rhynchopthirina
Morfología
Los piojos son insectos pequeños (de 0.4 a 10 mm en su etapa adulta), sin alas =
ápteros, y achatados dorso-ventralmente. El abdomen alargado tiene placas
esclerotizadas dorsales, ventrales y/o laterales que proveen rigidez al abdomen cuando
repletos de comida, sea de sangre u otra fuente de alimento. En el adulto, el abdomen
consta de 11 segmentos y termina en la genitalia y placas esclerotizadas asociadas. En
las hembras, la genitalia está acompañada de unas proyecciones tipo dedos o gonopodos
que sirven para guiar, manipular y pegar los huevos a los pelos o plumas del huésped.
En la mayoría de los piojos, el abdomen está adornado con numerosas setas. Los
inmaduros se parecen mucho a los piojos adultos, pero más pequeños y con menos
setas, y no tienen la genitalia desarrollada. Luego de cada muda ninfal, el abdomen es
abrumado progresivamente con más setas y el tamaño del piojo aumenta.
Figura 4.2 – Un piojo chupador generalizado (Anoplura) visto en plano dorsal (izquierda)
y ventral (derecha)
La genitalia del macho es proporcionalmente grande y conspicua, en ocasiones
ocupando casi la mitad del largo del abdomen (Figura 4.3). El pseudopene o aedeagus es
terminal, extrusable y esclerotizado, y apoyado anteriormente por el apodemo basal.
Lateralmente esta bordeado por un par de parameros quitinosos. De dos a cuatro testes
están conectados a la vas deferens, que se une posteriormente para formar la vesícula
seminal. En la hembra, la vagina abre a un útero grande al cual están conectados
mediante los oviductos varios ovariolos que tienen huevos en varias etapas de desarrollo.
Dos o más glándulas accesorias, que secretan material para cubrir los huevos y una
espermateca, en la cual hay semen almacenado están situadas posteriormente en el
abdomen. Excepto por el piojo del cuerpo humano, todos los demás, pegan sus huevos,
llamados liendres, al pelo o plumas del huésped. Los huevos son sub-cilíndricos, con
puntas redondeadas y una cubierta terminal llamada opérculo (Figura 4.4). Encima del
opérculo hay un parche o grupo de huecos o áreas con cutícula fina llamado micrópilos, a
través de los cuales entra aire al embrio. La mayor parte del huevo está esclerotizado
con quitina lo que protege al embrio de daño mecánico y desecación. Una sutura de
cutícula fina cubre los alrededores de la base del opérculo. El momento de eclosionar, la
ninfa, en su primer instar, emerge del huevo rompiendo esta sutura y empujándose del
opérculo.
En los piojos masticadores, la cabeza es más ancha que el tórax. (Figura 4.5)
Piojos masticadores amblíceros (Amblycera) tienen antenas con 4 segmentos y han
retenido los palpos maxilares característicos de su ancestro tipo psocóptero. Sin
embargo, piojos masticadores ischnoceros tienen de tres a cinco segmentos antenales y
no tienen palpos maxilares. En los Amblycera, las antenas están ocultas en ranuras
laterales, mientras que en los Ischnocera y Rhyncophthirina las antelas están libres de la
cabeza (Figura 4.1-4.5)
Figura 4.3 Anatomía interna abdominal de un piojo macho, del cuerpo de un humano.
Figura 4.4 Izquierda - Huevos y liendre de piojos típicos. (A) Piojo del cuerpo del pollo;
(B) Piojo ovalado del güimo; (C) Piojo de la paloma; (D) Piojo mordedor del ganado; (E)
Piojo del elefante; (F) Piojo de la cabeza del humano. Foto derecha – microfotografía de
los detalles de un opérculo. Foto inferior – huevo de Pediculus humanus humanus y la
forma que es adherido a la base de un pelo.
Figura 4.5 – Piojos chupadores (Mallophaga) de importancia veterinaria, morfología
dorsal (izquierda) y la ventral (derecha), en cada caso. (A) Heterodoxus spiniger, macho,
de carnívoros; (B) Tricholipeurus parallelus, hembra, de venado del Nuevo Mundo; (C)
Bovicola bovis, hembra, Piojo mordedor de oveja; (D) Trichodectes canis, hembra, piojo
mordedor de perro; (E) Felicola subrostrata, macho, piojo mordedor del gato; (F)
Haematomyzus elephantis, macho, piojo del elefante
Hay una progresión en la especialización de las partes bucales y del esqueleto
interno de la cabeza, el tentorio, desde el ancestro tipo psocóptero a través de los
Amblycera, Ischnocera, Rhyncophthirina y Anoplura. Aunque todos los Mallophaga
tienen partes bucales masticadoras, (Figura 4.6), los componentes y mecanismos de
masticar difieren de grupo en grupo. En los Amblycera, las mandíbulas se mueven en un
plano vertical o perpendicular a la superficie ventral de la cabeza; mientras que en los
Ischnocera se mueven más o menos horizontalmente. En contraste, los Rhyncophthirina
poseen mandíbulas pequeñas que están situadas en la punta de un rostrum alargado
(Figuras 4.1D y 4.5F). Mediante modificaciones extremas, miembros de los piojos
masticadores del género Trochilocoetes (parásito de los picaflores o colibríes) han
evolucionado partes bucales que funcionan como un aparato chupador.
Figura 4.6 – Partes bucales generalizadas de un piojo masticador amblícero (Mallophaga).
(A) Vista ventral de la cabeza; (B) labium y estructuras asociadas; (C) mandíbulas.
El tórax de los piojos masticadores parece estar dividido en dos y en ocasiones en
tres segmentos. Los piojos masticadores tienen una o dos garras simples en cada pata;
especies que parasitan huéspedes de gran motilidad, como las aves, típicamente tienen
dos garras.
En los piojos chupadores (Figuras 4.2 y 4.7) la cabeza es más fina y estrecha que
el tórax. Los anopluros tienen de tres a cinco segmentos en las antenas y no tienen
palpos maxilares. Los ojos están reducidos o ausentes en la mayoría de los piojos
chupadores, pero bien desarrollados en los géneros de importancia médica, Pediculus y
Pthirus. (Figura 4.7 A, B) y puntos oculares o proyecciones desprovistas de ojos,
posteriores a las antenas y característicos de los piojos del género Haematopinus. Según
indicado por el nombre, las partes bucales de los anopluros, funcionan como aparatos
para chupar durante la alimentación con sangre (Figura 4.8). En descanso, las partes
bucales se retraen en la cabeza y están protegidas por una proyección llama haustellum,
representando una modificación del labrum. El haustellum está armado con dientes
curvos que se anclan en la piel del huésped durante la alimentación. Los estiletes,
consisten de un labium serrado, la hipofaringe y dos maxilas, son los que perforan el
ducto sanguíneo (Figura 4.8). La hipofaringe es un tubo hueco a través del cual se
secreta y fluye la saliva, que contiene elementos anticoagulantes. Las maxilas están
opuestas entre si y forman una curva que permite formar un canal mediante el cual fluye
la sangre chupada del huésped (Figura 4.9).
En los piojos chupadores, los tres segmentos toráxicos estas fusionados y
aparentan ser un solo segmento. En la mayoría de las especies, las patas terminan en
garras altamente especializadas para agarrar el pelaje del huésped. Las garras tibiotarsales consisten de un elemento tarsal curvo que está opuesto a la espina tarsal
(Figura 4.10) para encerrar un espacio que típicamente corresponde al grueso del un
pelo del huésped.
La anatomía interna del piojo (Figura 4.3) es mejor conocida del piojo del cuerpo
humano. Como en la mayoría de los insectos hematófagos, fuertes músculos cibariales y
esofageales producen succión durante la alimentación con sangre. El esófago abre al
estomago medio que está compuesto principalmente del ventrículo. La parte posterior del
estómago medio es angosta y conecta con el estómago posterior. Ventralmente, los
micetomas, contienen microorganismos simbióticos, y conectan con el ventrículo.
Figura 4.7 – Piojos chupadores (Anoplura) de importancia médica y veterinaria,
enseñando planos dorsales (izquierda) y ventrales (derecha). No estan dibujasdos a
escala. (A) piojo del cuerpo humano (Pediculus humanus humanus), hembra; (B) Piojo
lailla del humano (Phthirus pubis), female; (C) Piojo de la ardilla voladora
(Neohaematopinus sciuropteri), macho; (D) Piojo de la rata spined, (Polyplax spinulosa);
(E) piojo del cerdo (Haematopinus suis); (F) Piojo pequeño azul del ganado (Solenoptes
capillatus), macho; (G) Piojo chupador del perro (Linognathus setosus, macho; (H) piojo
nariz larga del ganado (Linognathus vituli), hembra.
Figura 4.8 Región de la cabeza de un piojo chupador (Anoplura) alimentándose de su
huésped.
Figura 4.9 Vista seccional cruzada
Figura 4.10 Garras tibio-tarsales y un pedazo de antena de Linognathus africanis.
Ciclo de vida
Los piojos tienen una metamorfosis hemimetábola. Luego de la etapa de huevo,
hay tres instar ninfales, luego del último emerge el adulto. Aunque hay gran variación
entre especies, la etapa de huevo típicamente dura 4-15 días y cada instar ninfal de 3 a 8
días. Los adultos viven hasta 35 días. Bajo condiciones óptimas, muchas especies de
piojos pueden completar de 10-12 generaciones por año, pero esto es raramente
alcanzado en la naturaleza. El acicalado del huésped, resistencia, mudas, pérdida de
plumas y pelaje, hibernación, y cambios hormonales, así como depredadores
(especialmente por aves insectívoras en ungulados de gran tamaño), parásitos y
parasitoides y condiciones desfavorables del clima, reducen el número de generaciones
del piojo. La fecundidad de la hembra del piojo varía de 0.2 a 10 huevos por día. Los
machos se desconocen en algunas especies partenogenéticas, que típicamente
constituyen menos del 5% de la población adulta en el piojo mordedor del ganado y de
menos de 1% en el piojo mordedor del caballo.
Comportamiento y ecología
La sangre del huésped es esencial para un desarrollo exitoso y supervivencia de
todos los piojos chupadores. Los Anoplura, se alimentan de vasos sanguíneos o
solenófagos, tomando sangre a través de un estilete dorsal hueco, que sale de la
hipofaringe. La contracción de poderosos músculos cibariales y faringeales crean succión
para chupar sangre.
Los piojos mordedores se alimentan mordiendo y raspando con las mandíbulas.
Los piojos que infestan las aves típicamente usan las mandíbulas para remover
pequeños pedazos de pluma, que caen en el labrum y son forzados a la boca. Piojos
mordedores que infestan mamíferos usan sus mandíbulas en una forma similar para
alimentarse del pelaje del huésped. Muchos piojos mordedores que infestan aves y
mamíferos también se pueden alimentar de otros productos del integumento, como
desechos de piel y secreciones. Algunas especies de piojos mordedores son obligados o
más frecuentemente, hematófagos facultativos. Aun esas especies de piojos masticadores
que chupan sangre, raspan la piel y la hacen sangrar antes de chupar la sangre. El
rhincophthiridio Haematomyzus elephantis se alimenta de esta forma. Se entiende que
hay simbiontes en todos los piojos que chupan sangre. Los simbiontes en los micetomos
asisten en la digestión de la sangre consumida y los piojos privados de éstos mueren
luego de varios días; piojos hembra que no tienen simbiontes devienen estériles. En la
hembra del piojo del cuerpo humano, algunos simbiontes migran al ovario, de donde son
trasferidos transovarialmente a la próxima generación. Los piojos generalmente exhiben
alta especificidad al huésped, algunos a un grado que sólo parasitan una especie de
huésped. El piojo del cerdo, el piojo delgado de los güimos, el piojo del pavo grande y
varias otras especies que se incluyen en las Tablas I y II son cada uno, parásitos de un
solo huésped.
La especificidad al huésped es más amplia en otros piojos. Algunos piojos de
importancia veterinaria parasitan dos o más huéspedes relacionados. Ejemplos de éstos
incluyen a tres especies que parasitan perros domésticos: Linognathus setosus,
Trichodectes canis y Heterodoxus spiniger. Estos piojos también parasitan, zorros,
coyotes, y ocasionalmente otros carnívoros. En forma similar, el piojo chupador del
caballo Haematopinus asini, parasita caballos, burros, mulas, cebras; mientras que
Linognathus africanus, parasita ovejas y cabras. Por lo menos seis especies de piojos se
pueden encontrar en aves domésticas, todos parasitan gallinas y pollos, pero algunos
también se alimentan de guineas, pavos-reales y faisanes. Piojos encontrados en
huéspedes atípicos se conocen como extraviados.
Algunos piojos chupadores, como los de las tres taxa que parasitan al ser humano,
el piojo de la pata de la oveja y el piojo de la cara de la oveja no sólo son huésped
específicos, pero también infestan áreas específicas del cuerpo, de donde pueden
diseminarse durante infestaciones severas. Muchos piojos masticadores, particularmente
especies que parasitan aves, también exhiben especificidad al huésped y especificidad al
área; ejemplos son varias especies que se encuentran en aves de corral y especies
restringidas a los pavos, gansos y patos. Piojos que habitan diferentes regiones del
cuerpo en el mismo huésped típicamente han evolucionado adaptaciones morfológicas en
respuesta a los atributos específicos del área. Esto incluye desarrollar diferencias en el
piojo, como resultado de diferencias morfológicas en el pelaje, grueso de la piel,
disponibilidad de vasos sanguíneos, actividad de acicalado y mantenimiento de la piel,
pelaje o plumas, del huésped. Especificidad por el área es más prevalente en las especies
más sedentarias como la Ischnocera, que en las más mótiles y morfológicamente menos
especializadas como la Amblycera. Por ejemplo, en muchas aves huéspedes, los
ischnoceros de cuerpo redondo, cabeza y mandíbulas grandes, son más comunes en la
cabeza y cuello del ave. Formas alargadas y con cabeza delgada y mandíbulas más
pequeñas son más comunes en las plumas de las alas, mientras que formas intermedias
ocurren en la espalda y otras partes del cuerpo.
Algunos piojos masticadores habitan áreas en los huéspedes que son altamente
especializadas. Esto incluye a miembros del género amblicero Piagetiella, que se
encuentran sólo en los bolsos orales de pelícanos, y miembros de varios géneros
ambliceros que viven dentro del área hueca de las plumas, Actornithophilus y
Colpocephalum. Varias especies de aves son parasitadas por cinco o más especies
diferentes de piojos chupadores específicos de área, y más de 12 especies pueden ser
encontradas en el ave neotropical Crypturellus soui.
Especificidad por el área esta menos documentada para piojos chupadores. Sin
embargo, el ganado doméstico puede ser parasitado hasta por cinco especies de
anopluros, cada una predominando en un área particular del cuerpo. En forma similar,
en ardillas y ratas del Viejo Mundo, pueden dar apoyo hasta seis especies de piojos
chupadores.
Como resultado de la importancia de mantener una asociación permanente o
próxima con el huésped, los piojos han evolucionado mecanismos especializados para
pegarse al huésped y resistir las actividades de acicalado del huésped. Las garras tibiotarsales de los piojos chupadores son clave para mantenerlos pegados al huésped.
Varios arreglos de ganchos y espinas, especialmente en la cabeza del piojo que parasita
huéspedes arbóreas y voladoras, como las ardillas, aves, asisten al piojo a mantenerse
pegado al huésped. Las mandíbulas son apéndices para anclaje en los piojos mordedores
isochnoceros y rhincophthirinios. En algunas especies de Bovicola, una muesca en el
primer segmento antenal, rodea el pelo del huésped, lo que facilita su anclaje. Algunos
piojos tienen ctenidia o peinillas que son convergentes en morfología a aquellas
características de muchos piojos. Son más comunes en piojos que parasitan huéspedes
de pelaje grueso, que son arbóreos o voladores. Más aun, piojos mordedores que
parasitan huéspedes arbóreos o voladores con frecuencia tienen garras más grandes y
robustas que la contraparte que parasita huéspedes terrestres.
Dado su dependencia en disponibilidad de huéspedes, los piojos confrontan
problemas especiales con respecto a su supervivencia de largo plazo. Todos los piojos
chupadores son parásitos obligados; el estar lejos de un huésped aunque sea por un par
de horas puede ser fatal para algunas especies. Algunos piojos masticadores son
también hematófagos y no pueden sobrevivir lejos de un huésped por periodos
extendidos de tiempo.
Sin embargo, muchos piojos mordedores, particularmente
aquellos que subsisten de plumas, pelaje y productos de la piel, pueden sobrevivir por
varios días aun cuando no estén en el huésped. Por ejemplo el piojo mordedor del gato,
puede sobrevivir por hasta 11 días, y Menacanthus spp. de las gallinas, puede sobrevivir
hasta 3 días fuera del huésped. Supervivencia fuera del huésped es más baja a
temperaturas bajas y alta humedad. A 26°C y una humedad relativa de 65%, el 4% de
los piojos del cuerpo humano mueren en 24 horas, 20% en 40 horas y 84% en 48 horas!
A 75% de humedad relativa, una porción pequeña de los piojos de la pata de la oveja
sobrevive por 17 días a 2°C, mientras que la mayoría muere dentro de los 7 días a 22°C.
Piojos que recién se han alimentado tienden a sobrevivir fuera del huésped por más
tiempo que aquellos que no se han alimentado. Aunque la mayoría de los piojos están
morfológicamente adaptados para adherirse al huésped y están en desventaja cuando se
desprenden de éste, los generalistas como algunos amblíceros están mejor equipados
para localizar un nuevo huésped, arrastrándose por el substrato. Los amblíceros son los
piojos que con más probabilidades uno se topa lejos de su huésped, lo que valida la
observación de estos piojos en huevos de aves, en nidos desocupados y en sus áreas de
descanso.
El acicalado por parte del huésped, es una causa importante de mortandad en
piojos. Ratones de laboratorio infestados con piojos de ratones, en promedio limitan la
población de piojos a menos de 10 o menos por individuo, esto debido a su tendencia de
acicalarse con frecuencia. El prevenir que el animal se acicale o sea acicalado por otro
como resultado de limitar la capacidad de acicalado porque los dientes o extremidades
estén afectados ha llevado a que se desarrollen más de 100 piojos por individuo. Lo
mismo ocurre cuando el pico de las aves se deforma o recibe algún daño que imposibilita
o limita el acicalado de las plumas y piel. Morderse, rascarse y lamerse son formas de
también disminuir poblaciones de piojos de varios animales domésticos.
Aunque la mayoría de las especies de piojos en mamíferos pequeños y grandes
exhibe sólamente cambios menores en el número de individuos de la población
atribuibles a cambios estacionales, algunos piojos asociados a animales mayores,
exhiben una tendencia estacional muy marcada. Algunos de estos cambios estacionales
han sido atribuidos a que el huésped muda, densidad y largo del pelaje, niveles de
hormonas en la sangre o factores climatológicos, como el calor intenso del verano y el frío
del invierno, intensidad de luz, o desecación. En ungulados domésticos (animales con
pezuñas) en áreas templadas, las poblaciones de piojos típicamente llegan a su pico más
alto durante el invierno o primavera temprana y decaen durante el verano. Una
excepción a esta observación son los piojos del rabo del ganado que aumentan para el
verano.
Otro elemento importante del comportamiento de los piojos es la forma o
mecanismo en que se transfieren de huésped. Contacto directo con el huésped aparenta
ser el mecanismo primario de intercambio de piojos. La transferencia de piojos de una
madre infestada a su cría durante la lactación (en mamíferos) o mientras comparten un
área de anidaje, es un mecanismo importante de transferencia. Varias especies de piojos
que parasitan el ganado son transferidos durante el proceso de mamar, incluyendo el
piojo de la cara de la oveja y el piojo mordedor de la oveja, ambos de los cuales se
mueven de la oveja madre a las crías durante este momento. Los piojos también son
transferidos durante otras formas de contacto físico entre huéspedes, como durante el
apareamiento o durante una pelea. La transferencia de piojos entre huéspedes puede
ocurrir sin que haya contacto físico. El piojo de la pata de oveja, puede sobrevivir por
varios días fuera de su huésped y alcanzar un nuevo huésped trepando y arrastrándose
por el forraje. Los nidos de aves y mamíferos son focos para la transferencia de piojos,
pero son lugares y formas infrecuentes de transferencia.
La dispersión de piojos ocurre por foresis cuando en forma temporera, los piojos se
pegan de otros artrópodos y son cargados de un huésped a otro. (Figura 4.11). Durante
la foresis, la mayoría de los piojos se pegan a artrópodos que se alimentan de sangre,
más grandes y más mótiles, usualmente a moscas, como las hippobóscidas o muscoides.
La foresis es muy común entre los piojos masticadores ischnoceros. El movimiento
horizontal de las partes bucales les facilita su anclaje a una mosca, que a los amblíceros,
en los que las partes bucales se mueven en un plano vertical. La foresis es rara en los
piojos chupadores. Esto es probablemente el resultado de que se pegan mediante un
mecanismo que es menos eficiente para agarrarse utilizando la garras tarsales.
Figura 4.11 Dos piojos masticadores ischnóceros foréticos en una mosca hippobóscida.
El apareamiento en los piojos es en el huésped. Es iniciado por el macho
empujando su cuerpo debajo del de la hembra y doblando la punta de su abdomen hacia
arriba. En el piojo del cuerpo humano, el macho y la hembra asumen una orientación
vertical a lo largo de la base de un pelo, con la hembra tomando el peso del macho según
él se agarra de ella con las garras anteriores. La mayoría de los piojos asumen esta
orientación durante el apareamiento. Excepciones a esto lo presentan el piojo ladilla de
los humanos, en el que ambos sexos continúan su agarre al pelo del huésped en vez de a
cada uno. Y al piojo de cerdo, en el que el macho acaricia la cabeza de la hembra durante
el apareamiento. Algunos piojos mordedores ischnóceros, tienen ganchos especiales en
los segmentos antenales, con los que se agarran de la hembra durante la cópula.
El comportamiento de oviposición de la hembra del piojo conlleva el arrastrase
hasta la base de un pelo o pluma del huésped y cementar cada huevo, cerca del cuerpo.
Dos pares de gonopodos en forma de dedos dirigen el huevo al lugar preciso y en la
orientación precisa al mismo tiempo que se secreta el pegamento alrededor del huevo y
del pelo. Los requisitos óptimos de temperatura son requeridos para el desarrollo de los
embrios de piojos dentro de los huevos son muy angostos, usualmente dentro del orden
de la fracción de grado, como suele ocurrir en áreas precisas del cuerpo. Por esta razón
las hembras de los piojos usualmente ovipositan con preferencia en éstas áreas del
huésped que cumplen con estos requisitos.
Piojos de interés médico
Tres taxa de piojos chupadores parasitan al ser humano a través del globo
terráqueo, el piojo del cuerpo, el de la cabeza y el púbico o lailla. Todos son ectoparásitos
del humano. No obstante, en raras ocasiones los perros u otros compañeros del ser
humano desarrollan infestaciones temporeras y limitadas.
Los piojos de la cabeza y del cuerpo, están íntimamente relacionados y de hecho
pueden entrecruzarse y producir progenie viable, por lo menos en el laboratorio. Por esta
razón, se reconocen como sub-especies de Pediculus humanus. Sin embargo, raramente
se entrecruzan en la naturaleza lo que ha llevado a los epidemiólogos a tratarlos como
especies separadas, Pediculus humanus (cuerpo) y P. capitis (cabeza).
Piojo del cuerpo humano (Pediculus humanus humanus) El piojo del cuerpo
humano (Figuras 4.7 y 4.12) o cootie, en un momento dado fue uno de los compañeros
más ubicuitos del ser humano. Hoy en día es menos común, especialmente en países
desarrollados. El piojo del cuerpo continúa siendo un problema significativo en áreas
menos desarrolladas de África, Asia y de Sur y Centro América. Esto es muy significativo
ya que este piojo es el único que se conoce que en forma natural transmite patógenos.
La disminución a gran escala de infestaciones del piojo del cuerpo a través del globo ha
llevado a que se observen disminuciones en la prevalencia de enfermedades en el ser
humano originadas por piojos. No obstante, situaciones y condiciones que favorecen el
desarrollo de hacinamiento y condiciones no sanitarias (guerras, hambrunas, desastres
naturales) llevan a que re-aparezcan estas infestaciones de piojos y con frecuencia, de
más de una enfermedad originada por piojos.
Figura 4.12 – Piojo del cuerpo humano
El piojo del cuerpo humano, (Figuras 4.7 y 4.12) es de unos 2.3 a 3.6 mm de largo.
Bajo condiciones óptimas su población puede multiplicarse dramáticamente, si no
controlada. Por ejemplo, si la ropa en la que han sido depositados huevos no se cambia y
es lavada en agua caliente con regularidad. En infestaciones severas, se pueden
encontrar más de 30,000 piojos en una persona. Los piojos de cuerpo típicamente
utilizan los artículos de ropa del ser humano para depositar sus huevos, para protección
y para alimentarse. Las hembras depositan un promedio de 4 a 5 huevos diarios, y
típicamente eclosionan en 8 días. Atípico de los piojos, las hembras del piojo del cuerpo
humano depositan sus huevos con preferencia en artículos de ropa del huésped (Foto
4.12 - izquierda inferior) , especialmente a lo largo de uniones y dobleces. Cada estadio
ninfal dura unos 3-5 días y los adultos pueden vivir por unos 30 días.
Las mordeduras del piojo del cuerpo causan intensa irritación, con cada lugar en
el que se ha hecho una picada o mordedura desarrollando una papula roja con una
pústula central. Las picadas duran por varios días y ocasionalmente por semanas. Las
personas expuestas a las picadas durante periodos extensos de tiempo con frecuencia
pierden sensitividad a las picadas y muestran poca o ninguna reacción a las
mordeduras. Las personas con infestaciones severas pueden y frecuentemente
desarrollan un engrosamiento de la piel acompañado de una decoloración llamada la
enfermedad del vagabundo o enfermedad del hobo, nombres que hacen referencia al
estilo de vida de las personas que promueven este tipo de infestación. Varios síntomas
adicionales pueden ser experimentados y frecuentemente acompañan infestaciones
severas. Estos incluyen limfadenopatía, o inflamación de los nódulos linfáticos del área,
edema, aumento en temperatura corporal y fiebre, erupción de la piel, dolor de cabeza,
dolor en las coyunturas, y entumecimiento de los músculos.
Algunas personas desarrollan alergia a los piojos. Ocasionalmente, estos pacientes
experimentan dermatitis generalizada en respuesta a una sola mordida o a un número
reducido de mordidas. Un tipo de bronquitis asmática es experimentada por algunas
personas. Alergias secundarias como el impétigo, envenenamiento de la sangre también
pueden ocurrir como resultado de infestaciones de piojos. Los piojos del cuerpo humano
tienden a generar temperaturas más elevadas en el cuerpo del huésped, y pueden
despegase y arrastrarse a través del sustrato para infestar otras personas. Esto tiene
consecuencias epidemiológicas porque la alta temperatura de personas con piojos con
frecuencia genera fiebre causada por los patógenos que porta el piojo.
Piojo de la cabeza del ser humano (Pediculus humanus capitis)
El piojo de la cabeza es prácticamente indistinguible del piojo del cuerpo humano
en bases morfológicas y su ciclo de vida. A menos que no haya varios especimenes
disponibles de cada subespecie, no es posible hacer la distinción.
En términos
generales el piojo de la cabeza es un poco más pequeño (2.1 a 3.3 mm) que el del cuerpo
(2.3 a 3.6 mm).
Según indicado por su nombre, el piojo de la cabeza humana típicamente infesta el
cuero cabelludo y la región de la cabeza en vez de otras áreas del cuerpo infestadas por el
piojo del cuerpo. Las hembras adhieren los huevos a la base de los pelos individuales
según el pelo crece, el huevo se aleja del cuero cabelludo. Una indicación de cuánto hace
que el individuo tiene piojos se puede estimar de cuán lejos del cuero cabelludo está el
liendre, comparado con la razón de crecimiento del pelo.
Hoy día es mucho más frecuente encontrar piojos de la cabeza que del cuerpo,
especialmente en países desarrollados. La transmisión típica es contacto de persona a
persona o mediante objetos compartidos como cepillos, peinillas, diademas, gorras,
sombreros y audífonos. Niños de edad escolar son más propensos a infestaciones ya que
tienden a compartir más estos artículos. Algunos distritos escolares en los EUA y Gran
Bretaña tienen prevalencia de infestaciones que se aproximan al 50% de los estudiantes.
Se ha estimado que de 6 a 12 millones de personas, principalmente niños, se infestan
anualmente con piojos de la cabeza en los EUA. Algunos grupos étnicos, como las
personas de origen africano, tienen el pelo más grueso lo que las hace menos propensas
a infestaciones de piojos de la cabeza. La razón de esto es que los pelos son lo
suficientemente gruesos como para hacer que la garra tibio-tarsal no pueda agarrar en
una forma efectiva el pelo.
Aunque no hay evidencia de que los piojos de la cabeza transmitan patógenos,
infestaciones fuertes pueden causar irritación severa. Como es el caso del piojo del
cuerpo humano, esta irritación lleva a que la persona se rasque y esto puede llevar a
infecciones secundarias como el impétigo, hypoderma, envenenamiento de la sangre.
Las infestaciones severas del piojo de la cabeza pueden llevar a que se formen cáscaras y
encrustamientos debajo de las cuales los piojos se refugian. El engrandecimiento de los
nódulos linfáticos del cuello puede acompañar estas infestaciones.
Piojo ladilla del humano (Pthirus pubis)
La ladilla o lailla o piojo púbico es de un tamaño mediano con de 1.1 a 1.8mm de
largo, achatado, con garras tibio-tarsales robustas para agarrarse de los pelos,
especialmente los del área púbica o genital. También puede infestar otras áreas del
cuerpo que tengan pelos gruesos como las pestañas y cejas, pelos del pecho, barba y
bigote, inclusive los pelos de las axilas. Este parásito se transfiere típicamente durante el
acto sexual u otro contacto íntimo. En Francia les dicen las mariposas del amor o
“papillons d’amour”. No obstante, la transferencia mediante la ropa de cama y en
asientos de inodoros es algo posible. Sin embargo, es poco probable ya que estos piojos
duran sólo horas fuera de su huésped.
Las hembras depositan un promedio de 3 huevos al día. Los huevos eclosionan
luego de 7-8 días, y hay tres estados ninfales que duran unos 13-17 días. Bajo
condiciones óptimas, el tiempo de una generación es de 20-35 días. El intenso picor
causado por estos piojos se acompaña de coloración púrpura en el área así como el
resultado de las manchas de las heces fecales y las manchas de sangre de piojos que son
aplastados al rascarse el huésped. Las laillas son de distribución amplia mundial. No se
tiene información de que transmitan alguna enfermedad. No obstante hay un estudio
que relaciona la transmisión de hepatitis-B mediada por una infestación de piojos
púbicos.
Piojos de importancia veterinaria
Una amplia variedad de piojos infestan animales domésticos, ganado y de
laboratorio (Tablas I y II). Muchos huéspedes, particularmente roedores pequeños,
mantienen poco si algún piojo, mientras que animales más grandes como el ganado,
incluyendo las aves, pueden ser parasitadas por grandes números de piojos. Por ejemplo,
menos de 10 piojos de ratón (Polyplax serrata) en una ratón de casa, son una carga
típica para éste; pero más de un millón de piojos pueden infestar ovejas, ganado,
caballos y otros animales grandes lo que puede comprometer su salud y bienestar.
Polyplax serrata - piojo del ratón
Piojo del ganado
Los piojos son un problema serio en muchas partes del globo terráqueo. El ganado
doméstico es parasitado por por lo menos 6 especies de piojos; 3 especies de
Haematopinus, 1 de Linognathus, 1 de Solenopotes, y 1 de Bovicola.
Hembras del cosmopolita piojo mordedor del ganado Bovicola bovis deposita un
promedio de 0.7 huevos por día, que eclosionan en 7-10 días. Cada instar ninfal dura 56 días y el adulto tiene una longevidad de unas 10 semanas. El lugar más utilizado por
este piojo es la base del rabo del ganado, los hombros y la línea superior del lomo, pero
en infestaciones severas se pueden encontrar inclusive en el área descornada (pollard).
Bovicola bovis
El cosmopolita piojo nariz-corta del ganado, Haematopinus eurysternus es el piojo
más grande que encontramos en el ganado en EUA, el adulto mide 3.5 a 4.7 mm de
largo. Las hembras ponen de 1 a 4 huevos al día, por unas dos semanas, las ninfas
llegan a adulto en 14 días y el adulto dura unos 10-15 días. Es más común en ganado
adulto. Lugares preferidos para infestar son la parte superior del cuello, el papo o
“dewlap” y la falda o “brisket”. Sin embargo en infestaciones severas, la región entera,
desde la base de los cuernos hasta la cola puede estar infestada. En Norte América,
Haematopinus eurysternus es más prevalente en los Grandes Planos.
El piojo de la cola del ganado (Haematopinus quadripertusus) parasita ganado en las
partes más cálidas del globo. Fue introducido a los EUA inadvertidamente y se puede
encontrar en los estados que dan para el golfo. Las hembras ovipositan en los pelos del
rabo de ganado, que se cubren con huevos en infestaciones severas. Cabezas de rabo
severamente infestadas pueden ser mudadas. El huevo eclosiona a los 9-25 días,
dependiendo de la estación. Bajo condiciones óptimas, el ciclo de vida dura unos 25
días. Las ninfas migran sobre la superficie del cuerpo, pero los adultos típicamente
están limitados al área que se conoce como la cabeza del rabo. En forma atípica con los
otros piojos, es más común durante la época caliente del verano.
Haematopinus quadripertusus
Excepto por H. quadripertusus, en áreas templadas, los piojos de ganado
aumentan sus poblaciones durante el invierno y principio de la primavera. Durante el
verano los piojos persisten en 1-2% de los miembros de un hato. Estos animales
infestados en forma crónica, infestan otros animales durante la época de invierno. Toros
y vacas maduras, fungen como reservorios del piojo. Los toros tienen hombros y cuellos
más anchos y robustos que hacen el acicalado menos eficiente. Durante el verano, un
número reducido de piojos puede sobrevivir en las áreas más frescas del animal, como
las puntas de las orejas, donde las temperaturas letales para piojos raramente son
alcanzadas.
Piojos de otros animales de la finca.
Caballos, burros, cerdos, cabras y ovejas son parasitados por uno a más especies
de piojos (Tabla I y II). Excepto por el cerdo, todos los animales son parasitados por
piojos chupadores y masticadores. El piojo mordedor del caballo Bovicola equi, es el piojo
más importante del grupo equino. Las hembras depositan huevos en los pelos más finos,
evitando los pelos más gruesos de la crin y el rabo. Típicamente se encuentra en los
lados del cuello, costados y base de la cola, pero puede infestar casi cualquier parte del
cuerpo (menos crin, cola y orejas y parte baja de la pata). Animales con pelaje largo son
más atractivos para este piojo.
Bovicola equi
Los cerdos domésticos son parasitazos por el piojo del cerdo Haematopinus suis.
Esta es una especie grande en la que las hembras adultas llegan a medir 5mm de largo.
Los piojos del cerdo, frecuentan los pliegues de la piel de la cabeza, especialmente cerca
de las orejas, cuello y hombros. Las hembras depositan 3.6 huevos por día. Son
depositados uno por pelo a lo largo de las partes bajas del cuerpo, en pliegues de la piel
del cuello y en y dentro de la oreja. Los huevos eclosionan en 13-15 días, cada estadio
ninfal dura unos 4-6 días y se dan de 6-15 generaciones por año, dependiendo de las
condiciones ambientales.
Las ovejas y cabros domésticos son parasitados por varias especies de piojos
chupadores y masticadores. Uno de éstos, Linognathus africanus parasita ambos
huéspedes. Los piojos de las ovejas y cabras, especialmente los masticadores, son de
gran importancia económica en áreas donde se crían estos animales.
Las hembras del piojo mordedor de la oveja (Bovicola ovis) deposita un huevo o dos
al día y puede vivir hasta 30 días. Cada instar ninfal dura de 5-9 días. B. ovis infesta
principalmente la parte de la espalda y partes superiores del cuerpo, pero puede
encontrarse en el cuerpo entero. Este piojo tiene la capacidad de generar irritación
intensa y es común encontrar animales rascándose fuertemente contra árboles, paredes,
postes y salientes, lo que reduce significativamente la calidad del pelaje. Los piojos
chupadores raramente causan problemas económicos de impacto.
Piojos de gatos y perros
Los gatos domésticos son parasitados por una especie de piojo masticador,
mientras que los perros son parasitados por dos especies de piojos masticadores y por
una de chupador. Las cuatro especies tienen distribución global y ninguno está asociado
a gatos y perros bajo cuido adecuado.
El piojo mordedor del gato (Felicola subrostrata) parasita gatos domésticos y
silvestres y puede ser encontrado en cualquier parte del cuerpo.
Tanto el piojo mordedor del perro, (Trichodectes canis) como el piojo chupador del
perro (Linognathus setosus) parasitan perros y canes relacionados al perro.
Trichodectes canis
Linognathus setosus
Trichodectes canis también parasita coyotes, zorras y lobos. Una segunda especie
de piojo masticador, Heterodoxus spiniger que evolucionó en australasia de piojos que
infestan marsupiales, aparentemente se pasó a los dingos como huéspedes (perro
australiano feral). Al momento parasita varios caninos y otros carnívoros a través del
globo. Trichodectes canis típicamente infesta la cabeza, cuello y la cola de los perros, en
donde se adhiere a la base del pelo utilizando sus garras y mandíbulas. Linognatus
setosus ocurre principalmente en la cabeza y cuello, y debajo de los collares. Heterodoxux
spiniger puede ser encontrado en cualquier parte del huésped.
Heterodoxus spiniger
Piojos de animales de laboratorio
Las especies principales de piojos que parasitan mamíferos de laboratorio, también
parasitan poblaciones ferales de este mismo huésped.
El ratón de la casa, Mus musculus es parasitado por el piojo del ratón, Polyplax
serrata. Poblaciones de este piojo son típicamente bajas, con menos de 10 individuos
por ratón, a menos que el proceso de acicalado individual o colectivo esté comprometido.
Los huevos eclosionan típicamente en 7 días. Los tres estados ninfales duran 6 días bajo
condiciones óptimas y una generación dura unos 13 días.
Mus musculus
Polyplax serrata
Ratas domésticas con frecuencia son parasitadas por el piojo “spined” de la rata
Polyplax spinulosa y por el piojo tropical de la rata, Hoplopleura pacifica.
Polyplax spinulosa
Hoplopleura pacifica
Huéspedes comunes incluyen la rata negra (Rattus rattus) y la rata de Noruega
(Rattus norvegicus). El piojo “spined” de la rata parasita otros huéspedes a través del
globo, mientras que en el trópico esta limitado a lo tropical, sub-tropical y al área cálida
del sur de EUA.
Los conejos de laboratorio son parasitados por el piojo del conejo, Haemodipsus
ventricosis. Este piojo se origina en Europa, pero acompañó a su huésped y ha sido
introducido en muchas partes del globo.
Haemodipus lyriocephalus (izq) y Hemodipus setoni (Der)
en Lepus europaeus (Liebre Europea)
Piojos de aves de corral y otros pájaros
Por lo menos nueve especies de piojos mordedores o masticadores infestan las
aves, en varias partes del globo. Un solo individuo puede ser infestado por múltiples
especies, cada una de las cuales con frecuencia ocupa un lugar preferido en el huésped.
El piojo del cuerpo de la gallina, Menacanthus stramineus es el más común y
destructivo de los piojos que le dan a las gallinas. Tiene distribución global y con
frecuencia alcanza proporciones de plaga. Los adultos miden 3-3.5mm de largo. Las
hembras depositan uno o dos huevos al día, pegándolos en grupos en la base de las
plumas especialmente alrededor del “vent”. Los huevo típicamente eclosionan en 4-5
días, cada instar dura unos 3 días y una generación de 13-14 días. Los piojos son más
abundantes en el área del “vent”, pechuga y caderas.
Menacanthus stramineus
Varios otros piojos mordedores son plaga de aves más o menos a través del globo.
Adultos del piojo del “shaft” de la pluma (Menopon gallinae) miden 2mm de largo y las
hembras depositan huevos, uno por base de pluma de la cadera y de la pechuga.
Menopon gallinae
Huevos del piojo del ala Lipeurus caponis, eclosionan a los 4-7 días luego de que la
hembra deposita el huevo en la base de una pluma. Cada etapa ninfal dura 5-18 días, el
tiempo de una generación es de 18-27 días, y las hembras viven hasta 36 días.
Lipeurus caponis
Hembras del piojo de la cabeza de la gallina Cuclutogaster heterographus pegan sus
huevos a la base de los plumones. Los huevos eclosionan a los 5-7 días y los instar
duran 6-14 días cada uno, tiempo de una generación es de 35 días.
Los piojos de las aves típicamente se transfieren a nuevos huéspedes mediante
contacto directo entre cuerpos. Pero como éstos sobreviven fuera del huésped durante
horas y días, es posible su transferencia mediante el uso de jaulas y de vehículos que no
han sido des-infestados.
Los piojos humanos como huésped intermedio de las tenias
Ocasionalmente los humanos se infestan con tenia doble-poro o (Dipylidium
caninum). Aunque los carnívoros son los huéspedes definitivos de este parásito, los
humanos pueden infestarse al ingerir (accidentalmente) piojos mordedores del perro
(Trichodectes canis) (Figura 4.5 y en la sección de “Piojos de perros y gatos”), que fungen
como huésped intermedio. Aunque esto aparenta ser un evento poco probable, infantes
que juegan en el piso y sobre alfombras que también son compartidas por el perro, hacen
esto una posibilidad real.
Importancia veterinaria
Varios piojos mordedores y chupadores parasitan animales domésticos. Aunque las
poblaciones de piojos son relativamente bajas en estos huéspedes, los piojos se pueden
multiplicar a números extremadamente altos, particularmente en animales jóvenes,
enfermos o viejos. Por lo general éste es el resultado de no poderse acicalar o que tienen
un sistema inmunológico comprometido. Excepto por la posibilidad de transmisión de
patógenos, números bajos de piojos rara vez causan problemas al huésped. Sin
embargo, números altos pueden debilitar y causar anemia, dermatitis, respuestas
alérgicas, pérdida de pelo, plumas y otros desórdenes. Los piojos también pueden inducir
el huésped a acicalarse en forma intensiva y frecuente lo que puede llevar a que se
formen bolas de pelo en el estómago, especialmente en gatos y novillas.
Algunos patógenos se sabe son transmitidos a animales domésticos por los piojos,
(Tabla III). Los más importantes son el agente viral del sarampión porcino y los agentes
bacteriales de la haemobartonellosisi murina y la eperythrozoonosis murina, ambas de
amplia distribución. Además a los incluidos en esa tabla, varios patógenos han sido
detectados en varias especies de piojos, pero no hay evidencia de que los piojos son
vectores de ese organismo.
Piojos del ganado
Aunque una población de varios cientos de piojos comúnmente puede ser
encontrada en ganado saludable, en ocasiones este número sube a varios miles y de vez
en cuando a millones por animal. Bajo condiciones de poblaciones altas de piojos efectos
detrimentales son observados. Esto incluye, incomodidad, pruritos o picazón, anemia,
incrustaciones y cáscaras en la piel, dermatitis, cojera por laminitis, daño al cuero (piel),
y al pelaje, pérdida de peso, y disminución en la producción de leche. Poblaciones altas
de piojos en animales domésticos típicamente se inicia en el animal juvenil, senil,
enfermo, o desnutrido o inmuno-comprometido.
Infestaciones de piojos chupadores del ganado, como las causadas por el piojo
nariz-corta del ganado, Haematopinus eurysternus; el piojo de la cola del ganado,
Haematopinus quadripertusus; y el piojo nariz-larga del ganado, Linognathus vituli
(Figura 4.7 H), pueden llegar a causar serios daños al huésped. El daño se puede
manifestar de varias formas, rascar frecuente e intenso en el área infestada, pérdida de
pelo, formación de cáscaras, recuperación lenta de una enfermedad o trauma, y pérdida
de peso o ganancia en peso baja. Animales jóvenes son más susceptibles que los
adultos. Infecciones mixtas en las que se presentan piojos chupadores y masticadores o
ambos piojos y nemátodos pueden afectar negativamente la ganancia en peso del animal
mucho más que si éste tiene una infestación con un solo parásito. Entre aquellos con
infestaciones sencillas o mixtas, los animales en estrés o con dietas deficientes relejaran
las pérdidas en peso mayores. En ocasiones los piojos chupadores de sangre debilitan el
animal al punto que le da anemia, se observan más abortos y hasta la muerte. Una
irritación puede ser causada por un número relativamente bajo de piojos en animales
sensitivos y lleva a que el animal se rasque frecuentemente al punto de llegar a dañar la
piel. Este tipo de actividad llega a afectar las facilidades físicas que alojan al animal.
Animales con infestaciones severas, tienen parchos de piel sin pelo y con una apariencia
grasosa resultado del aplastamiento de los piojos y del esparcimiento del contenido de
éstos y de sus heces fecales sobre la piel. Por lo menos bajo condiciones de laboratorio, o
bajo condiciones de confinamiento, por lo menos tres patógenos pueden ser transmitidos
por el piojo chupador del ganado; anaplasmosis bovina, dermatomycosis (ringworm) y en
raras ocasiones, theileriosis. La importancia del piojo en transmitir estos patógenos en
animales de vida libre es desconocida, pero se presume que es baja.
Haematopinus eurysternus
Haematopinus quadripertusus
Linognathus vituli – Foto izquierda- adulto; Derecha – demostración gráfica de el
número de individuos que se puede observar por unidad de área.
Los piojos que infestan los caballos y otros equinos típicamente no debilitan al
animal a menos que se presenten en grandes cantidades. Pruritos, pérdida de pelo,
deterioro de la piel y del pelaje, son síntomas en animales con condiciones severas.
Estos animales usualmente están irritables, nerviosos, se rozan contra objetos, y son
prestos a patear. Las áreas rascadas pueden perder pelo y el animal aparenta estar en
descuido lo que disminuye su valor. No se conoce de patógenos transmitidos por los
piojos equinos.
El piojo del cerdo puede chupar cantidades significativas de sangre del cerdo,
especialmente de cerditos, quienes con frecuencia tienen infestaciones más severas que
los adultos. En las áreas del animal que estos piojos infestan se perciben los síntomas
de irritación severa, por lo que se rascan con gran intensidad contra objetos, lo que
resulta en pérdida de pelo y lesiones de la piel. Haematopinus suis es el vector del virus
que causa el sarampión porcino, una enfermedad seria y potencialmente letal,
caracterizada por lesiones tipo cráter, principalmente en el área de la barriga.
Haematopinus suis
Algunos estudios han relacionado a este piojo como vector de Eperythrozoon suis y
Eperythrozoon parvum agentes causantes de la eperythrozoonosis porcina y del virus de
la fiebre porcina africana. Sin embargo, la transmisión de estos patógenos por este piojo
aparenta ser muy poco frecuente, si es que ocurre en la naturaleza.
Todas las especies de piojos que parasitan ovejas y cabras causan debilitamiento,
aun cuando presentes en números bajos, esto debido al daño que le causan al pelaje o
lana. Algunas ovejas desarrollan hipersensibilidad al piojo mordedor de la oveja, Bovicola
ovis (Figura 4.16). Este piojo es el causante principal del deterioro y desvalorización del
pelaje de estos animales y es la causa principal del “cockel”, una condición desfigurante
del pelaje de la oveja, con una incidencia particular en Nueva Zelanda. Cualquier tipo de
irritación que lleve al animal a rascarse contra un objeto, genera deterioro y pérdida de
valor del pelaje. Diferentes estirpes de ovejas y cabras tienen diferentes niveles de
resistencia y tolerancia a infestaciones de piojos.
Piojos de gatos y perros
Infestaciones de piojos de gatos y perros son más palpables en animales enfermos
y seniles, condiciones bajo las cuales el número de piojos puede llegar a niveles
dramáticos. Infestaciones severas con cualquiera de las 4 especies relacionadas,
típicamente generan incomodidad en el huésped, inflamación de la piel, pelaje enredado
o amontonado y pérdida de pelaje.
El piojo mordedor del perro, Trichodectes canis (Figuras en pagina 26) es el
huésped intermedio de la tenia de doble-poro (Dipylidium caninum) (Figuras en página
38). Los piojos se infestan cuando ingieren huevos viables de Dipylidium caninum de las
heces fecales del huésped. La tenia se desarrolla a la etapa de cisticercoide en el piojo
donde permanece en dormancia a menos que el piojo sea ingerido por un perro,
típicamente durante el proceso de acicalado. En el intestino del perro, el cisticercoide es
liberado, el cual pasa por una metamorfosis a la tenia adulta. Se ha demostrado que el
piojo chupador del perro Linognathus setosus (Figuras en la página 27) alberga
inmaduros de los nemátodos filariales, Dipetalonema reconditum, que parasita perros,
pero el si éstos piojos son vectores eficientes o no es todavía una interrogante.
Dipetalonema reconditum
Piojos de animales de laboratorio
Algunos piojos que parasitan animales de laboratorio pueden iniciar problemas de
salud severos al causar pruritos, lesiones de la piel, formación de cáscaras, anemia y
pérdida de pelo. Otros son vectores de patógenos que pueden causar problemas severos
en colonias de animales. (Tabla III).
El piojo del ratón (Polyplax serrata) (Figura en página 19) es un vector de la
bacteria Eperythrozoon coccoides que causa la eperythrozoonosis murina, una infección
potencialmente letal de ratas que ocurren en todo el globo. Una infección de este parásito
de la sangre en un ratón puede ser, no-aparente o causar anemia severa.
La
transmisión de este patógeno en una colonia es rápida. El piojo “spined” de la rata,
Polyplax spinulosa es un vector de la bacteria Haemobartonella muris que causa la
haemobartonellosis murina y otras infecciones potencialmente fatales de la sangre que
causan anemia severa en ratones de laboratorio.
Güimos de laboratorio y de vida libre son parasitados por dos especies de piojos
mordedores, el piojo delgado del güimo, Gliricola porcelli y el piojo ovalado del güimo,
Gyropus ovalis. Números bajos de estos piojos no causan daño aparente, mientras que
infestaciones severas causan, inquietud, rascar, sobre todo detrás de las orejas, pérdida
de pelaje y pelaje arrugado.
Infestaciones severas del piojo del conejo Haemodipsus ventricosis causan
irritación severa lo que lleva a que el animal se rasque contra la jaula, lo que a su vez
produce pérdida de pelaje. Los conejos jóvenes son más propensos a ser afectados y
pueden tener un desarrollo más lento como resultado de la infestación. El piojo del
conejo es también un vector del agente causante de tularemia entre la población de
conejos de vida libre. Esta es una enfermedad bacteriana causada por Francisella
tularensis. Los síntomas de la enfermedad son parecidos a los de la plaga.
Tularemia
Piojos de gallinas y otras aves
Aunque las poblaciones de piojos pueden ser altas en aves domésticas, incluyendo
pollos, pavos, guineas, pavos reales y faisanes, no se conoce de patógenos transmitidos
por estos piojos. Poblaciones altas de piojos son detectadas con más frecuencia en
animales que tiene el pico roto o dañado. Lo que afecta su capacidad para acicalarse y
removerse piojos. El piojo del cuerpo del pollo, Menacanthus stramineus (Figura 4.14)
con frecuencia causa irritación y enrojecimiento de la piel como resultado del su forma
de alimentarse. Ocasionalmente, la piel y los plumones sangran como resultado de la
acción de raspar y morder del piojo, alimentándose éste de la sangre que emana. El piojo
del “shaft”, Menopon gallinae también causa pérdidas a la industria, incluyendo la
muerte de aves jóvenes con infestaciones altas. Infestaciones severas con piojos del
cuerpo, “shaft” y otros piojos de las aves, pueden causar daños al promover la pérdida de
plumas, letargo, pérdida de peso, disminución en la capacidad de poner huevos e
inclusive la muerte.
La gran mayoría de los piojos mordedores son parásitos de aves silvestres o
peridomésticas. Varias de estas especies son sospechosas de ser vectores de patógenos
de aves. Algunos piojos chupadores de aves acuáticas, incluyendo gansos y cisnes, son
vectores de la nemátodos filariales. Periquitos mascota, cotorras, y otras aves son presas
de los piojos masticadores, típicamente notado con un aumento en la actividad de
acicalamiento y rascado con el pico, así como la pérdida de plumas. Poblaciones grandes
de estos piojos pueden debilitar el huésped. Aves de rancho como el avestruz, emus y los
rhea son también presa de los problemas causados por los piojos mordedores.
Prevención y control
Varias técnicas han sido utilizadas para intentar eliminar de piojos y de
enfermedades de piojos a humanos y animales. Prevenir el contacto directo entre
individuos infectados y los no-infectados, el uso de productos químico, hormonales,
mecanismos de control biológico son sólo parte del arsenal disponible. Los químicos que
se utilizan en el control de piojos se llaman pediculicidas.
La ropa de las personas con piojos se debe cambiar con mucha frecuencia,
preferiblemente todos los días, y ser lavada en agua jabonosa y caliente, para así matar
los piojos y sus liendres. De igual forma y con la misma frecuencia se debe lavar la ropa
de cama y las toallas. La persona como tal debe recibir un tratamiento de cuerpo entero
con un producto químico recomendado para esos propósitos. El evitar o contrarrestar
situaciones de hacinamiento y de condiciones poco sanitarias durante los brotes debe ser
una prioridad para disminuir o evitar enfermedades originadas por piojos.
La transferencia de laillas usualmente puede ser controlada, si la persona se
abstiene de relaciones sexuales con múltiples personas, cambiando y lavando (con agua
caliente y jabonosa) la ropa de vestir y la ropa de cama, con frecuencia, y evitando usar y
dormir en camas y con personas infestadas. El tratamiento de cuerpo completo con un
pediculicida es también necesario.
Para disminuir el regar de los piojos de la cabeza, se debe desistir de utilizar
peinillas, cepillos, diademas, gorras, sombreros, audífonos, sábanas, almohadas y
mantas de personas que tienen piojos. Con frecuencia al padre de un niño que da
positivo para piojos, se le solicita que el niño no regrese a la escuela hasta tanto no haya
sido tratado, él o ella y sus pertenencias. Si los padres o alguna otra persona que viva en
la misma casa da positivo, esta o estos también deben ser tratados así como sus
pertenencias.
Existen en el mercado varios productos muy efectivos para esto
propósitos. Típicamente conlleva una aplicación de cuerpo completo, seguida por otro
tratamiento en 8-10 días o hasta que no se vean más piojos o liendres. El primer
tratamiento usualmente mata las ninfas y adultos pero no los huevos en las liendres, por
lo que se espera unos 8-10 días en lo que emergen las ninfas de los huevos y se tratan
con el pediculicida. El lavar el pelo vigorosamente, varias veces, con un jabón para el
pelo es recomendable y en ocasiones el utilizar una peinilla de dientes finos es útil para
remover liendres, juveniles y adultos muertos. Aunque su uso está prohibido en los
EUA, el DDT se utiliza en muchos países sub-desarrollados para el tratamiento de piojos
de la cabeza, cuerpo y pubis. Varias alternativas utilizan productos como el lindano,
cholopyrifos, diazinon, malathion, permethrin, y pyrethroids. Los pediculicidas pueden
ser aplicados en polvo, aerosoles, neblinas, atomizadores para tratar los muebles y los
alrededores de piojos. Varios parasiticidas tiene cierto atractivo potencial como
pediculicidas, entre estos; abamectin, doramectin, ivermectin para el control de piojos en
humanos y otros animales.
Dosis recetadas de estos ingredientes pueden ser
administradas oralmente, por inyección, o en forma tópica como polvos o lavados. No
obstante, muchos de estos no han sido aprobados para uso en el ser humano, ya sea
porque se desconoce su toxicidad, efectividad o dosificación o modo a ser utilizado en
forma más efectiva. Por otro lado, hay mucho interés en desarrollar productos nuevos de
forma que se puedan atender los casos de resistencia que se están documentando a
través de todo el globo.
Los piojos del ganado pueden ser controlados con la combinación de prácticas de
cuido de animales y con intervención química. Proveer una dieta alta en energía,
especialmente al ganado vacuno, puede ser una estrategia efectiva en el control de piojos
en el ganado. Si posible es deseable mantener a los animales bajo condiciones que no
haya aglomeramiento y tratar en forma individual o cuarentenar el animal infestado
hasta que haya sido des-piojado. Se utilizan varias formulaciones y formas de aplicar
pediculicidas al ganado. Polvos insecticidas, polvos, aspersiones, líquidos en que
sumergir al animal (dip), etiquetas a las orejas, tiras de resina, bolos intestinales,
collares, líquidos para verter y mojar al animal, lociones, inyecciones y varios otros
productos. Animales infestados se deben tratar dos veces en semana por de dos a cuatro
semanas. Bolsas con polvo insecticida y rascadores de espalda pueden ser utilizados
para que el mismo animal, al pasar por debajo de éste, o rascarse contra este, entre en
contacto y se le pase una dosis del ingrediente activo. Dado el caso que las poblaciones
de piojos tienden a incrementar durante el invierno, los pediculicidas tienden a ser
utilizados en el otoño. Se suelen administrar tratamientos sistemáticos durante el otoño
para ambos los piojos y las moscas tábanos (bot fly). El remover el pelaje de la oveja
remueve el 80% de los piojos que infestan las ovejas.
Mascotas, animales de laboratorio, y aves de corral, pueden ser tratados con piojos
en varias formas. Mascotas como los perros y gatos, pueden ser sumergidos
parcialmente o bañados con lociones o jabones. Varias formulaciones orales o topicales
son muy efectivas para controlar los piojos y pulgas. Las aves y animales de laboratorio
pueden ser tratados con polvos y aspersiones. Aunque tratar al animal es lo más
indicado, también se puede optar por tratar la jaula, el material de la camada, área de
dormir o nido. Insecticidas que se incorporan al alimento, también son utilizados. Tiras
de resina impregnadas con insecticidas se pueden colocar en las jaulas de aves o de
animales de laboratorio y cuando éstos rozan con las tiras reciben una dosis del
pediculicida. El uso de la bacteria Bacillus turingiensis y de los nemátodos Steinernema
carpocapsae y Sterinernema glaseri son mecanismos de control biológico que han
probado ser muy efectivos en el control de ciertos artrópodos y también pueden ser
utilizado en el control de piojos. Algunas formulaciones de análogos de hormona juvenil
y de reguladores de crecimiento de insectos como el diflubenzuron han demostrado tener
la capacidad de posible uso como pediculicidas.
Con relación a enfermedades originadas por piojos, se han desarrollado vacunas
contra el tifus epidémico, pero no son lo suficientemente seguras como para uso común.
Las vacunas con sepas-E vivas-atenuadas han sido administradas a humanos,
particularmente en ciertas naciones africanas en un intento de parar brotes de la tifus
epidémico. Sin embargo, la vacuna eventualmente lleva a que algunos individuos
desarrollen la enfermedad y no siempre previene el que haya infecciones subsiguientes.

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