Natalicio del Fundador - Universidad Laica Vicente Rocafuerte de

Transcripción

Natalicio del Fundador - Universidad Laica Vicente Rocafuerte de
Recordando al
Dr. Alfonso Aguilar Ruilova
Fundador de la ULVR, a los 102 años de su natalicio.
Quienes a diario transitan por la Av. de las
Américas, pueden observar de lejos la silueta de
los edificios que conforman la Universidad Laica
VICENTE ROCAFUERTE de Guayaquil, que
forman parte del paisaje habitual de la zona. Sin
embargo, muchos de ellos no imaginarían que
hace casi 50 años la estructura que alberga el
campus universitario laico, era solo un sueño, un
sueño de un visionario progresista llamado
Alfonso Leónidas Aguilar Ruilova.
Alfonso Aguilar experimentó lo que a mucha
gente de su época le tocó vivir: debió truncar sus
estudios por la responsabilidad que acarrea
formar un hogar. Experiencia que lo motivaría a
crear una universidad para aquellos que, como
él, querían superarse a través de la obtención de
un título universitario.
Este hombre que forjó a lo largo de su vida, los
cimientos que darían forma a la ULVR, su estrella
más brillante, nació el 5 de marzo de 1914, en el
hogar formado por don Alfonso Aguilar
Izquierdo y doña Margarita Ruilova Illesca, de
quien se refería como su primera maestra.
Estudiante destacado del colegio Vicente
Rocafuerte, graduado de bachiller en 1935, con
las más altas calificaciones, se inclinó por las
ciencias matemáticas, de la que ejercería con
ahínco la docencia, y más tarde el periodismo,
que lo llevaron a conquistar las cumbres más
altas de reconocimiento en ambas labores.
En 1941 obtuvo su título de Contador Mercantil,
y tres años más tarde ingresa a la Facultad de
Ciencias Matemáticas y Físicas de la Universidad
de Guayaquil, de la cual se retiró en el cuarto
año de la carrera de Ingeniería Civil por la
imposibilidad de compaginar su trabajo con sus
estudios. Esta vivencia la albergaría Alfonso
Aguilar durante mucho tiempo, y crecería en su
ánimo de crear la primera universidad en el
Ecuador para los trabajadores.
En 1948 recibió del Ministerio de Educación
Pública el título de Profesor de Segunda
Enseñanza
en
la
especialización
de
Matemáticas, y ese mismo año inició su carrera
periodística que lo llevaría a ser editorialista de
Diario El Universo.
Recordando al
Dr. Alfonso Aguilar Ruilova
Fundador de la ULVR, a los 102 años de su natalicio.
En 1957 fundó la Confederación Nacional de
Periodistas del Ecuador de la cual fue su primer
presidente; y años más tarde sería nombrado
presidente del Círculo de Periodistas del Guayas.
Con la fundación del Centro Educativo
Miraflores, en 1958, Alfonso Aguilar, inicia la
construcción de su visión. Amplio conocedor de
la problemática en la educación superior, a la
cual se incorporó como docente de la
Universidad de Guayaquil, ese mismo año,
Alfonso Aguilar tomó conciencia de la gran
cantidad de jóvenes que no podían continuar
con sus estudios universitarios, ya que el horario
matutino de aquel entonces representaba una
encrucijada radical: o los estudios o el trabajo.
Entonces surge el proyecto salvador para miles
de jóvenes trabajadores en la creación de una
universidad nocturna. Es así que el 10 de
noviembre de 1966, el presidente interino
Clemente Yerovi Indaburu, firmó el decreto No.
1536 autorizando al H. Consejo Nacional de
Educación Superior a fijar los requisitos para el
funcionamiento de la Universidad Laica
VICENTE ROCAFUERTE de Guayaquil, templo
del saber que desde ese entonces ha cobijado a
miles de estudiantes, formándolos como
profesionales bajo la visión y el talento de
Alfonso Aguilar, a quien el 25 de agosto de 1978
el Consejo Universitario de la ULVR le confirió el
título de Doctor Honoris Causa en la Educación
y la condecoración Vicente Rocafuerte, presea
única que no se volverá a entregar a persona
alguna.
“Alfonso Aguilar Ruilova, demostraba a los
educandos que el álgebra es una forma de
disponer en ecuaciones lo conocido y lo
desconocido, de suerte que lo desconocido
pueda conocerse fácilmente”, es la frase que
apareció en Diario El Universo el 11 de marzo de
1989, un día después de su fallecimiento, que
recoge parte de su enseñanza y su legado: el
demostró que lo desconocido (universidad
nocturna para los trabajadores) puede conocerse
(ULVR) si se dispone de lo que durante su vida
poseyó Alfonso Aguilar Ruilova: capacidad,
voluntad, sacrificio, dedicación y amor por la
docencia.
“Yo no me quiero morir hasta que no cumpla, yo
quiero hacer la primera Universidad Laica aquí
en Guayaquil”, le confesó al Dr. Jorge Hurel
Cepeda, su entrañable amigo. Y lo cumplió.
Basado en el libro Dr. Alfonso Aguilar Ruilova.
Pedagogía y Acción. Una aproximación a su
biografía profesional, del Ing. Com. Alfredo
Aguilar Álava, MSc.

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