Mil poemas a Miguel Hernández

Transcripción

Mil poemas a Miguel Hernández
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 1
Mil poemas a Miguel Hernández
MIL POEMAS A MIGUEL HERNANDEZ
Alfred Asís
Poetas, Escritoras, Escritores y Niños del mundo
Consagrados y Emergentes
Desde Isla Negra, Chile a Orihuela, España
978-956-351-500-8
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 2
Mil poemas a Miguel Hernández
Diseño, dibujo, edición de cubierta, contracubierta y fotografía
Alfred Asís
Edición, diseño interior: Alfred Asís
Imagen de cubierta: La luna de Isla Negra y el Poeta Hernández
Registro propiedad intelectual:
ISBN: 978-956-351-500-8
Advertencia:
Ninguna parte de este libro, incluyendo el diseño de la cubierta, puede
reproducirse, almacenarse o transmitirse en manera alguna ni por ningún
medio, eléctrico, químico, mecánico, óptico, de grabación o fotocopia, sin el
permiso escrito del autor.
Todo aquel que haya contribuido a esta obra de amor, tiene el derecho por la
ley moral de utilizar su contenido para difusión, impresión, estudio o lo que sea
necesario, siempre que sea sin fines de lucro personal. Si hubiera algún
beneficio económico, que este sea para fines culturales y literarios.
[email protected]
Agradezco en especial a la Fundación Cultural Miguel Hernández, por la
confianza depositada en este proyecto que contó con la ayuda de varias
instituciones y la participación de Poetas y Escritores, emergentes, consagrados
y niños que se inician en la letras. Ese es el valor que le asignamos estas obras
de oportunidades para todos. Quienes crean, que los emergentes y los niños no
tienen valores ni derecho a estar en este libro se han equivocado, pues, estos han
demostrado sentimientos muy profundos y lo han expresado alabando a nuestro
homenajeado, Miguel Hernández de manera universal.
Hemos trabajado bajo una sola bandera, blanca, inmaculada, la de la PAZ y el
diálogo civilizado, aquella que flamea libremente en la mente de aquellos
grandes de espíritu, que sienten, ven y hacen las cosas desde el corazón, y no,
por obligación.
Grandes son ustedes, que han demostrado su solidaridad incondicional para
esta obra maravillosa. Abrazos fraternos, Alfred Asís
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 3
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 4
Mil poemas a Miguel Hernández
PORTADA
El espíritu de Miguel Hernández en Isla Negra
Diseño, dibujo y fotografía
Alfred Asís
Fotografía:
La luna y neblinas de Isla Negra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 5
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 6
Mil poemas a Miguel Hernández
HOMENAJE UNIVERSAL DESDE ISLA NEGRA A MIGUEL HERNÁNDEZ
Durante 2010-2011 se han llevado a cabo en todo el mundo –a través de
asociaciones, colectivos, entidades, instituciones, etc.- importantes actividades en
torno al centenario del nacimiento del universal poeta oriolano. Por lo que se
refiere a nuestra Fundación, a lo largo del Año Hernandiano se organizaron
representaciones teatrales, conciertos, exposiciones, recitales y encuentros
poéticos, conferencias, cursos de verano, animación lectora para escolares,
ediciones audiovisuales y recursos multimedia, concursos y adaptación de
poemas para personas con deficiencias visuales o auditivas. Además, cerca de
sesenta centros educativos españoles y extranjeros trabajaron en sus clases al
poeta con la colaboración de la Fundación. Sin olvidar el amplio capítulo de
publicaciones relacionadas con Miguel, sus coetáneos y los poetas
contemporáneos locales que fueron apareciendo durante todos los meses del
año, dentro de nuestro sello editorial ‘Biblioteca Hernandiana’, o el patrocinio
de un documental y varios discos compactos de otros tantos cantautores que han
puesto voz a los poemas hernandianos. Y la rotulación de una aeronave de
Iberia, así como la Estación Intermodal de Orihuela, con el nombre de Miguel
Hernández.
En cuanto a la proyección internacional del centenario, una treintena de
países –a través de universidades o centros culturales y sociales- solicitaron
nuestra colaboración para homenajear al poeta a lo largo de los dos últimos
años. En este sentido, la utilización de las nuevas tecnologías constituyó también
una herramienta de capital importancia en el desarrollo y difusión de las
múltiples actividades organizadas, como se evidencia con los millones de accesos
registrados en nuestra web durante el citado periodo.
Y, dentro de esta difusión internacional de la obra hernandiana, Chile ha
tenido un peso muy importante. Si en todo el país se ha tributado sentidos actos
de recuerdo entrañable y homenajes vivificadores, es ahora, en 2012, dos años
después de la conmemoración del primer centenario del nacimiento de Miguel
Hernández, cuando ese tributo recobra nueva fuerza y sentido gracias a la
iniciativa de un soñador como Alfred Asís. El reto era reunir mil poemas
dedicados a quien supo, con su voz, dar esperanza a quienes no la tenían en los
oscuros años de la Historia reciente, no sólo en España, Chile, Argentina, etc.,
sino en todos aquellos países en los que el reloj de los Derechos Humanos se
paró por culpa de unos pocos. Es para nosotros un deber de gratitud y de cariño
el intenso trabajo desarrollado en torno a este ambicioso y necesario proyecto
en el que el resultado, siendo importante, no lo es todo, sino la unión y
solidaridad de tantas personas en un único sueño. Nos sentimos muy
agradecidos y conmovidos por todas las muestras de cariño y de respeto hacia
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 7
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández. Y deseamos para Miguel Hernández lo que él mismo quiso
para su amigo Ramón Sijé:
“Pueblo donde ha nacido y agonizado esta gran criatura: todos los
homenajes que le hagamos se los merece. Procuremos que éstos resulten lo más
duraderos y de verdad y lo menos teatrales y de relumbrón posibles. Yo sé que
él aceptará los mejores y rechazará los otros: que aunque parece que a los
muertos todo les da lo mismo, no es así”.
Para ello, necesitamos toda la colaboración posible, y el cariño por la
admirable figura del cantor de alegrías y penas, y de esperanzas en un mundo
mejor.
Aitor L. Larrabide
Director de la Fundación Cultural Miguel Hernández
Orihuela, 5 de septiembre de 2012
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 8
Mil poemas a Miguel Hernández
PROLOGO a la Antología “Mil Poemas a Miguel Hernández”
A Alfred Asis y todos los Poetas que
conformamos esta Antología
Describir a Miguel Hernández por medio de la palabra es como empezar a
tomar color y madurar ciertos frutos, como mostrarse la pinta de los naipes cuando se
está tallando. Es pintar como querer. Poeta que pertenece a la lira o a la poesía propia
para el canto. Nostálgico, con esa dolencia causada por la ausencia de la patria
arrebatada , su poesía posee ese elemento primitivo, el más puro, y permanente de un
vocablo que es el que más se resiste a modificarse. Por lo cual suele encontrarse con
muy pocas alteraciones. Poesía en álgebra, en la que cada uno de sus valores puede
tener la incógnita de una ecuación, a raíz de los criminales sucesos acaecidos.
Nostálgico, soñador, hasta salir de la edad pueril, con sentido práctico de la
Vida y la verosimilitud o apariencia fundada de Verdad, poniendo la mira y el Verso
en el campo, los montes, las cabras, el susurro de los ríos, que acostumbran a
murmurar a escondidas o secretamente, el hambre, donde se hace sentencia “ a buen
hambre no hay pan duro”, más discurriendo él que cien letrados, el tocino, viniendo
al témpano de la canal del cerdo, y su mujer preparando un dulce de huevo y otras
cosas, la cebollada culinaria de cebollas, y el grillo cebollero cantando noramala.
La naturaleza que le rodea ni es virgen ni manceba. El cornisamiento del
edificio patrio comprendido entre el arquitrabe y la cornisa nos muestra un aguilucho
ligero, veleidoso, insustancial, fútil, de poca substancia, pero asesino donde les haya.
Por eso, la faja de sus poemas se adorna con un sentimiento de soledad y melancolía,
como las zonas que rodean la Tierra con esa música popular de carácter melancólico
y de compás de tres por ocho en copla con que se le acompaña, y danza que se baila
con ella, de lo que inspira melancolía como el candelero con pantalla de que se sirve
el traspunte en el teatro, o el jugo de la caña cuando, mediante la evaporación, ha
adquirido ya consistencia de miel y está en disposición de pasar a los tachos.
“ A fuerza de golpes, fuerte,
Y a fuerza de sol, bruñido,
Con una ambición de muerte
Despedaza un pan reñido”
-Viento del pueblo. El niño yuntero
La Poesía de Miguel es una Poesía que se acerca a la vida social y a los
problemas de España, a la paila inmediatamente anterior a los tachos en el tren de
fabricación de azúcar tricolor. La Naturaleza despierta en él y en sus versos con una
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 9
Mil poemas a Miguel Hernández
nueva corriente ecológica y un grito de protesta ante el amenazante mundo del valor,
la falsa fe y la impostura, entregados sin freno a la crápula cristiano fascista. De ahí
su romanticismo comunista que siente en lo provinciano y los detalles de su vida, su
dolor y cavilaciones enfermizazas, recogiendo el alfiler grueso para sujetar el enfaldo
o falda de su amada caído. Hombre de gran saber salido de la Nada, como todos los
grandes y sublimes Héroes y Poetas que en el Mundo han habido, sabedores de
quienes son sus enemigos: los de su oficio. ¿ El enemigo de la novia ¿cómo dirá bien
de la boda?
Con su ropa, ajuar y provisiones que llevan los pastores cuando andan con el
ganado, como hatero destinado a llevar a los pastores la provisión de víveres, entre
gavillas o atado de mieses, sarmientos, varas, ramas o cualquier otra cosa semejante,
camino del hatillo o hattico, lugar dentro de los linderos de un corral y distante de su
asiento, destinado a la cría de ganado mayor, por ser la de ganado menor el objeto
principal con que se mercedó el corral, yendo de veinticinco alfileres, él compone
sus versos y poemas en el violín rústico de sus dedos, transformando el Verso en un
sentimiento puro e inquietud cultural artística y profunda.
“Alimentando lluvias, caracolas,
Y órganos mi dolor sin instrumento,
A la desalentadas amapolas
Daré tu corazón por alimento”
-Elegía ( a Ramón Sijé, compañero del alma)
El recorre los hayales, mientras una especie de tos ferina le convulsiona y sus
versos enajenan y cautivan por su gracia y hermosura. El negocio de la justicia
dormita en la hediondez fascista de donde sale, despertando para llevárselo a la
cárcel. Su Poesía es una desgarrada angustia en meditación e intimidad esperanzada.
Ingenuo se abre a las almendras, alcaparras, aceitunas y otras muchas cosas,
adivinando el réquiem de la cultura gracias a la magia y superstición de un pueblo de
bueyes, amargado, domesticado y sufrido.
Atrevido, habla un lenguaje metafísico brillante y audaz. El es un cometa
temerario, que desde el rastrojo de las cabras eleva el poema hasta las estrellas de
cebolla. Expresionista revolucionario su Poesía va soltando poco a poco un hilo,
cordel, cable, tela, hacia la conquista del pan, soltando como bandera la República y
la Libertad. Por ello, fue rápidamente perseguido por esta sociedad preñada de
fascismo y fe católica cuyo anhelo siempre ha sido el de “muerte a la cultura”.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 10
Mil poemas a Miguel Hernández
A este Poeta profundo y autodidacta, educado en el campo “frente a un
colegio” ”Macuadre” como el indio bozal que no ha recibido ninguna instrucción,
no se le puede permitir el sentir y expresar lo bello en cualquiera de sus formas
mediante el verso, o sea, la palabra sujeta a media y cadencia. Su poesía épica, lírica,
dramática, bucólica, que produce la creación en el entendimiento o en la fantasía,
se enfrenta a los energúmenos de la mentira y la ceguera que devastan, sin
conseguirlo, la magnificencia terrenal y carnal evocada en sus hermosos
y lacerantes poemas.
“Como el toro he nacido para el luto
Y el dolor, como el toro estoy marcado
Por un hierro infernal en el costado
Y por varón en la ingle con un fruto”
-El rayo que no cesa
El desamparo y la renuncia obligada de su mujer definible y alcanzable, le hace
crear una Poesía que le contiene, como un conjunto de tallos nacidos de un mismo
pie. Sus carceleros y esbirros quisieron llevarle al suicidio en las junturas de los
sillares mazonados de sable, arrebatándole su lira escondida en el morral,
encadenado como Kafka entre lo posible e imposible por enlaces sinuosos y
complicados.
Poeta, filósofo y revolucionario nunca cantó el “mea culpa” ante la acción
mezquina e indecorosa del fascismo cristiano, criminal y cuartelero, que en
conjunto de piezas de plata u oro para el servicio divino, implantó la tortura, el
garrote vil y el tiro en la nuca. El siempre se mantendrá ardiendo y consumiendo
muy poco a poco, sin apagarse, y nos dará fuego para aguantar la mecha de la Vida,
desde Orihuela, llamada en la antigüedad Orcellis y Auriola.
“Frontera de lo puro, flor y fría.
Tu blancor de seis filos, complemento,
En el principal mundo, de tu aliento,
En un mundo resume un mediodía”
- Perito en Lunas. Azahar
-Daniel de Cullá
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 11
Mil poemas a Miguel Hernández
CARTA ABIERTA A LOS POETAS QUE CONFORMAN LA ANTOLOGIA
“MIL POEMAS A MIGUEL HERNANDEZ”
Como autor, alabo la feliz idea de Alfred Asis de llevar a buen término
esta Antología, y me jacto de pertenecer a este elenco de poetisas y poetas que la
conforman y que, por su total interés, su voluntad y buenos deseos se ha hecho
mayor y más eficaz en dar a conocer lo que vale la Poesía de Miguel
Hernández, autor muy alabado, pero poco conocido hasta ahora.
Hemos tenido un vasto campo donde explayarnos.
Todo estuvo a nuestra disposición.
El físico y la moral del Poeta nos han presentado abundancia de ideas,
y esta amplitud me pone en estado de agradecer a todos los autores las bellas
calidades, las honras y las glorias debidas, pues que sin vosotros y yo nunca se
hubiera realizado esta bella prenda, antología, florilegio,
colección de trabajos literarios y poéticos.
Al cantar, me veo obligado a un grito de alegría, a un clamor ruidoso,
a un estrépito; es muy grande el campo en donde podemos enseñorearnos;
y muy pequeño el campo en donde Miguel pudo enseñorearse, quien,
a pesar de ser arredrado por el sistema de la arbitrariedad y la injusticia,
no nos quiso privar de las nuevas glorias de la Poesía universal.
La Vida de Miguel es larguísima. El, que llevó una vida de perros,
animada por los crápulas que impusieron por garrote vil y tiro en la nuca el
“no dejaremos un contrario a vida”, nos guía en la mí, tú, su, nuestra,
vuestra, vida, en la enorme magnitud de sus poemas,
que sobrenadan formando balsas y almadías.
Esta Antología “Mil Poemas A Miguel Hernández” es renuevo o tallo
tierno que brota del árbol de la Vida. Y está aquí, con la gloría de haber podido
dedicar al Poeta mil versos todos cuantos nos hemos dedicado a este quehacer
cultural constituyendo una gran “familia literaria” sin fronteras, conociéndonos
sin conocernos, unidos por el mismo latido del corazón, sin perdonar gastos ni
fatigas; así lo merece el asunto. De ahí, la obligación tan esencial de agradecer a
todos los participantes de traer a buen fin esta Antología, quedando con la
gloria de haber traído al Poeta al camino impresionante de Vida y Poesía,
el nuestro.
Estamos en un mundo que camina a su autodestrucción, y sólo la Poesía
porta esa esperanza que brotó un día de los campos de Orihuela, en Alicante.
Poesía, razón de nuestro ser y nuestra existencia. El lector podrá juzgar del
mérito nuestro, no menos que del alto, digno y justo aprecio de Miguel; pero,
feliz yo, y todos vosotros, los Poetas de la España y todos los Continentes, Poetas
por excelencia y sin iguales que, en esencia, presencia y potencia dedicamos esta
Antología a los pueblos de donde hemos venido y al Mundo universal.
-Daniel de Cullá
.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 12
Mil poemas a Miguel Hernández
MIL POEMAS EN UN LIBRO DE ORO A MIGUEL HERNÁNDEZ
Por José Pablo Quevedo
Desde algunos años conozco al poeta y publicista chileno Alfred Asís, a través de
nuestras inquietudes literarias, y al difundir comentarios y ensayos bajo el abundante
material que nos ha sido publicado a través de Poetas del Mundo, Isla Negra, Poetas
de la Tierra, CAPULI- César Vallejo y su Tierra, Sociedad de Poetas del Norte, y una
serie de revistas y páginas webs de nuestra América Latina y de Europa.
Conozco de sus sueños, inquietudes y de sus utopías realizables, de su labor y la
actividad de su SER, tal “rayo que no cesa”. El poeta, así tiene un único ingrediente
de actualidad: estar representando a su tiempo o como expresa el filósofo alemán
Hegel, el primer sistematizador moderno de la dialéctica en sus Lecciones sobre la
Historia de la Filosofía, “Nadie podrá salirse verdaderamente de su tiempo, como no
puede salirse de su piel”.Pero también el mismo Hegel escribe, que cada hombre es
hijo de su tiempo, (Jeder Mesch ist ein Sohn seiner Zeit), además también nos
explica que, “La filosofía es el tiempo contenido en el pensamiento” ( Philosophie ist
Zeit in Gedanken gefasst).
“MIL POEMAS A MIGUEL HERNÁNDEZ”, será la tercera Antología que
promueve Alfred Asís, un Libro de Oro para el presente y para la posteridad pensante
y para los amantes de las Letras, y que se suma a las otras dos Antologías ya
editadas: “Mil Poemas para Pablo Neruda” y “Mil poemas para César Vallejo”, las
dos más grandes personalidades representativas de la Literatura de nuestra América.
Lo que une a muchos poetas del globo en torno a este proyecto de ofrecer sus poesías
para editar el libro de Homenaje al poeta español Miguel Hernández, también es un
proyecto en el cual muchos nos sentimos compenetrados y hasta convergimos
totalmente con la idea, y tal vez, su realización de una u otra manera nos hemos
formulado como un impulso que mueve nuestro tiempo, y como un verdadero
reconocimiento a toda la creatividad y la labor hecha por este gran poeta, pues en
ello hay una identificación de esa unidad indisoluble de lo que significa el hombre, el
poeta, y su actividad hacia el cambio humano por un mundo mejor.
La Antología a la cual se han adherido cientos de poetas está presentada en diversos
estilos, contando a autores consagrados y a otros quienes expresan su mensaje con
sencillez; pero todos rodean a la persona del poeta Miguel Hernández, abrazan las
ideas de su tiempo, y van en pos de un verdadero ideal de fraternidad, de hermandad
y de solidaridad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 13
Mil poemas a Miguel Hernández
2.-La actividad repetitiva diferente para el cambio.
Regresar al río de la historia que fluye permanentemente y que cambia igualmente,
es un acto regresivo (proceso en regresión) que se da en el conocimiento dialéctico
de la historia y de la lógica histórica. Es además, no solamente reflejar la historia y el
tiempo, sino un acto de reflexión, y más aún, de comportamiento social sensible para
el cambio. La Literatura como una forma de consciencia social tiene en sí esa unidad
indisoluble, pues toda la energía espiritual que impulsamos y que pasa por el cerebro
humano, no sólo refleja el mundo y sus motivaciones, sino nos sirve para mejorarlo o
cambiarlo.
Y esos objetivos le sirvieron a Miguel Hernández, precisamente, como brújula en su
breve y humano recorrido.
El Tiempo Global, no solamente es la comunicación global en que la intelectualidad
actual ha alcanzado grandes metas, sino el tiempo consciente hecho por ella misma
con sus nuevas ideas de superación y con la creación de los diversos movimientos de
vanguardia, a los cuales anima nuevos conceptos de renovación que han sido
esbozados en manifiestos, programas y actividades prácticas.
Lo que une a diversos movimientos literarios compete a las razones de nuestro
tiempo, ellas se han impregnado en la vida de diversos poetas que asumen una
integridad con la palabra y la actividad práctica, frente a lo que consideran que
derivará al cambio social.
Por eso, ese mismo acto reflexivo hacia el pasado, nos sirve como punto de
referencia para conocer el presente, ello nos alecciona a entender los dramas y
tragedias sociales que han habido en la historia universal, como son la guerras, la
violencia irracional, el militarismo y el fascismo, y con nuestra acción tratar de evitar
esos desenlaces de tragedias, en base a la conquista de un espíritu más universal y
más humano.
A través de la vida y obra del poeta Miguel Hernández, podemos tener varios puntos
de referencias para medir una y otra época, y relativizarla con el tiempo actuante .El
pensamiento dialéctico es como un gran imán que atrae a su fuerza reflexiva los
elementos históricos del pasado y los hace regresivos tanto en sus momentos
positivos como negativos.“El pastorcito de Orihuela” y lo que podía haber sido la
vida cotidiana antes del tiempo de la República Española, también pudo tener un
escenario en cualquier país del mundo llamado “tercermundista“. Ello, lo digo
porque al conocer la vida del mapuche y gráfico Santos Chávez, también me di
cuenta que existían bajo realidades parecidas y condiciones concretas, este modo de
vida de enajenación y de explotación para la niñez; pero también la voluntad de
querer superar esas formas de vida anacrónicas y establecer la vida del hombre
solidario.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 14
Mil poemas a Miguel Hernández
Para ello es necesario y nos sirve el Arte y la Literatura. Ese es el arma y la
herramienta que los dos usaron. Santos Chávez llegó a conocer e ilustrar los libros de
Pablo Neruda y plasmó con el viento del sur las imágenes de los personajes
araucanos en sus obras con su realismo poético. Miguel Hernández, también conoció
al poeta de Isla negra, y también tuvo al viento libertario como amigo en su canto, y
con él compartió los mensajes para su pueblo. Y así, derivaron en este acto genial de
lo que “viene del pueblo y va hacia él”, según César Vallejo.
A través de las lecturas de diversos poemas de los antologados, conozco la vida de
muchos de los poetas latinoamericanos contenidos en esta Antología. Muchos de
ellos han compartido en parte una suerte de existencia parecida a la de Miguel
Hernández, y se forjaron en la realidad de una lucha que se continúa hasta hoy en
día. Muchos de ellos, conscientes de las tareas de su tiempo saben que la historia
solamente se repite, pero en calidades diferentes, y que no hay de ella una copia o
calco, o se da como círculos de lo igual repetitivo o cerrada sobre hechos parecidos y
para siempre.
Leyendo el contenido de los manifiestos de los movimientos de vanguardia que en
estos últimos tiempos se han formado, constato estos hechos; pero también en la
acción de sus actividades nos damos cuenta, las semejanzas de proyectos y de
objetivos alcanzados. Hay una alta responsabilidad de los poetas frente a estos
nuevos desafíos, ellos toman la posta de las generaciones pasadas para realizar las
tareas globales de nuestro tiempo.
En los programas donde se esbozan las tareas globales, se nota una nueva calidad de
lucha muy diferente a las anteriores; pero también se demuestra que ellos toman la
posta que inició el poeta MIGUEL HERNÁNDEZ, y por eso, es el Homenaje que le
entregan como ramos de flores de una renovación en esta Antología.
Aquel engendro de crueldad, de muerte, de barbarie y de guerras creados por
Mussolini, Hitler y Franco con la colaboración de las capitales imperiales, es
condenado. En muchos de los poemas que reúne esta Antología se condena
conscientemente al fascismo y sus consecuencias.
La seudo teoría social-biológica de la “raza pura y del superhombre” es un concepto
que entregó a los pueblos europeos, las desgracias de una política expansiva y
beligerante de los monopolios guerreristas contra otras naciones y países, y cuyos
altos costos llegaron a eliminar a más de 60 millones de vidas humanas.
Bajo las muletas postizas de la arrogancia psíquica de la “super raza”, fue creada la
coraza de la fuerza y del irracionalismo contra la fraternidad y la solidaridad humana.
Una subseción histórica o trasmutación sacada de las retortas imperiales románicas y
medioevales pasadas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 15
Mil poemas a Miguel Hernández
3.- Los nuevos molinos más gigantes que antes, pero no imposibles
El pensamiento teórico en cada época, el cual también es nuestro, es un producto
histórico que en cada tiempo toma forma diferente y se manifiesta con varios
contenidos.
(Nota: Traducción lineal autor. F.Engels, Anti-Dühring/ Über Kultur, Ästhetik,
Literatur, Reclam Bibliothek, S. 220).
La primera aspa del molino quedó derribada y esa fue el inicio de la hazaña de Don
Quijote, y aquello fue el paso al basurero de la milenaria historia medioeval, podrida
de mitos pasados, mediocre en invención de sus héroes de caballería y romances, sin
imaginación hacia el futuro. Lo que quedó de los cientos de novelas de caballería,
fueron fulminadas por la adarga de tan brillante caballero. El basurero de la historia
quedó repleto con todas esas historias que nadie ya se acuerda.
La repetición y la diferenciación contenidas dentro de la dialéctica, nos permiten
entender, el porqué el movimiento no es algo estático, sino porque la realidad está en
continuo proceso de desarrollo. También nos hace ver, el por qué el movimiento no
es algo que se repite como un “perpetuo mobile”, sino que nos ayuda a relacionar
con mayor flexibilidad, el por qué en el mismo proceso de desarrollo se dan
calidades diferentes en la misma realidad histórica.
La Literatura en el tiempo global está condicionada a su tiempo, en lo que es el
devenir mismo, es decir, el andar del tiempo mutante en su propia piel epocal. Pero la
buena Literatura es la Literatura de vanguardia que emerge vertida del tiempo
consciente, la cual trasmuta con objetivos definidos y humanos. Esa Literatura,
tiende a la reflexión y al esclarecimiento con la actividad creativa del buen trabajo,
del intelecto y la praxis.
El escritor y el poeta de vanguardia debe saberse medir con su tiempo, y debe de
arremeterlo saltando las diversas postas de las anteriores épocas, él no debe de
quedarse en uno de sus meridianos epocales, tampoco nadar a la superficie de las
necesidades que las cuestiones postizas y mediocres nos exigen, sino desenvolverse
en la profundidad de una corriente.
Al contrario de lo que plantean los diversos movimientos de vanguardia, descubro en
mis lecturas una serie de autores noveles, pero también de algunos “experimentados”
que estimulados por los premios de algunas casas editoriales, se desean ser erotistastardíos, pornográficos, braguetistas, poetús, acústicos, etc., pues la publicidad y los
premios los atraen, y muchos de ellos se meten en este remolino para ser absorbidos
en uno de los huecos negros de las competencias superficiales.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 16
Mil poemas a Miguel Hernández
También hay otros “poetas” que siguen encerrados en su “torre de marfil”, otros que
son excéntricos, otros que buscan solamente la publicidad, y otros que desde el
mundo de sus vericuetos nos hablan del «L’Art pour l’ Art». Los que entienden de
esa manera la relación de la poesía y el arte con la vida, no han alcanzado a
comprender lo que es el objetivo de la Literatura y para qué la necesitamos en este
tiempo.
Los premios son transitorios, su acción concreta hay que verla permanentemente en
función de la praxis, y no en las leyes que dictan los mercados o bajo consumo, de
cualquier artificio que se quiere para que alguien sea favorecido. El tiempo actual es
agitado, refleja el espíritu de las clases y grupos sociales en pugna, y nos muestra las
formas intelectuales de las luchas en las tendencias literarias.
El tiempo mismo nos muestra la vanguardia y la decadencia. Esta afirmación la
refleja la dialéctica subjetiva de la repetición diferente, nos enseña que en cada época
no hubo un Arte indiferente, sino que éste estuvo unido a los intereses o designios de
los pueblos como una forma de consciencia social.
El tiempo nos impone las tareas, y no al revés de lo que se desea el poeta. El poeta es
un actor de su tiempo con su obra. Y si su obra, como cualquier obra sólida y
competente resiste a su tiempo, tendrá su permanencia en él.
Por eso los escritores que marchan con el tiempo, no tolerarán obras de mediocridad
y de decadencia impuestas por las clases sociales, las cuales promueven la
enajenación solamente. Y por eso también, ante las nuevas tareas de nuestro tiempo y
ante los nuevos molinos más gigantes que antes, la literatura actual necesita de
nuevos Quijotes para derribarlos.
Responder a lo que compete a nuestro tiempo, lo que es la poesía sin responder las
tareas trascendentales del hombre, no es responder a nuestro tiempo. Toda afirmación
a nuestro tiempo debe responderse con la función social que tiene el hombre; pues en
donde el poeta se integra a un grupo social, hay una unidad entre lo que él escribe y
lo que hace; en donde el poeta forja un movimiento fortalece una idea y promueve
una actividad para muchos. Por eso, la poesía en el tiempo “global”, es el lenguaje
de un espacio opositorio en la lucha que arma y desarma el propio verbo.
La lucha entre lo nuevo y lo viejo anima nuestro tiempo, activa los espacios del
intelecto y hace el tiempo pensante de sus creadores, y nos hace ver los polos de las
diferencias en un país, en un continente y en el mundo en el cual vivimos. Si no hay
sensibilidad hacia los principios fundamentales de las grandes mayorías, no nos
daremos cuenta de los espacios que marcan los intereses de los mismos hombres, de
la clase de poetas que somos y a qué clases sociales favorecemos.
La poesía va a lo general y a lo que trasciende de su tiempo y lo sintetiza como rayo
que gravita en el hombre. La palabra es el grito continuo del hombre contra cualquier
subseción humana.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 17
Mil poemas a Miguel Hernández
Los poetas también somos los parteros de un tiempo nuevo, y nuestra acción
escritural, nuestra pluma, es el arma en ristre contra los que quieren determinar aún
al tiempo dentro de cánones conservadores e inacabables.
La poesía es el parto más glorioso de la creación humana y, por lo tanto, la más bella
de las artes.
La poesía es la Flor siempreviva, cuyo colorido y pétalos vitales se miden en la
jardinería del tiempo. Cada pétalo es epocal, transitorio, pero lo mejor de su perfume
se queda absoluto. Ella es silenciosa pero sensible, y la advertimos cuando hay un
anuncio de cambio de una estación a otra.
Con estas palabras, van mis mejores deseos a todos los poetas participantes de esta
Antología, un proyecto donde nos une la hermandad, la incondicionalidad, la
solidaridad y el amor; y con la cual también queremos abrazar a Alfred Asís y su
excelente iniciativa de unirnos en torno a Miguel Hernández.
Berlín, octubre de 2012
José Pablo Quevedo
Dr. de Filosofía egresado de la Universidad de Humboldt, Berlín.
Embajador del Poetas del Mundo en Berlín.
Creador de la Cita de la Poesía: Berlín- Latinoamérica.
*******************************************
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 18
Mil poemas a Miguel Hernández
MIL POEMAS A MIGUEL HERNÁNDEZ
Andrés Eduardo Pierucci, Argentina
Soneto a Miguel (Hernández)
“Sobre la pena duermo solo y uno,
pena es mi paz y pena mi batalla…”
Miguel Hernández
Por hábito a tus causas y tus versos,
al hijo que entre nubes te ha dejado,
por ese algo que hay en tu costado
que te hace el más sutil del universo.
Por tu irisado don, por el diverso
genio de tu sentido enamorado,
por el balido que creció a tu lado:
pastor de día, poeta en su reverso.
Por Orihuela, molde de tu grito,
por la cebolla, por cantar bajito
compañero del alma, compañero;
por amansar amigos, por tu sombra
que sigue perfumando a quien la nombra,
por ese corazón sin carcelero.
Stella Maris Taboro, Argentina
Espada de luz
Orihuela dio un hijo que fue espada de la luz.
Las sombras del país golpeaban
pero tu corazón de poeta
creó vientos que fuerte soplaban
para salvar al pueblo de toda bayoneta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 19
Mil poemas a Miguel Hernández
Si los jilgueros cantan sobre las armas
la fuerza de un pueblo debía elevarse más.
Como la alta torre de Babel
alcanzar el cielo con los sueños
sin romperse como cristal liviano.
No pudo la cárcel encerrar tus pensamientos
y el niño que nacerá ya tenía
la mas bella canción de cuna
con las nanas a la cebolla.
Te cantan los vientos del pueblo
A Miguel Hernández
Los vientos del pueblo te cantan
porque pusiste alas a tus versos
enseñando a no caer en los miedos
y salvarse de las jaulas.
Elevarse sobre la miseria que esclaviza
y levantar la frente bien alta
sobre los fusiles y las trampas
Llevar en las manos cien olivos
floreciendo cada mañana
aunque el filo de la muerte
ruede y remueva las calles .
Encender un sol ardiente y bello
en la senda de los que siembran
la noche en su terror que aturde,
sin olvidar que las palabras no mueren
como fusilan los cuerpos.
María del Mar Estrella, Argentina
ELEMENTOS NATURALES
A Miguel Hernández, poeta en acción
Perito en lunas
apacienta majadas de ternura
y vela como un rayo viril que nunca cesa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 20
Mil poemas a Miguel Hernández
de provocar temblores
en la tierra, en el fuego, el agua, el aire.
Entre rejas de pólvora combate
esparciendo poemas de libertad preñada
viento del pueblo
que arrea lágrimas incorruptas
sobre andamios de flores y trincheras.
No puede con el odio, no le queda ni un grito en la garganta
ni un hijo para el beso.
Nadie puede sobrevivir a lo indefenso.
Ya custodia la tierra su calvario
y un ángel le disputa su silencio traslúcido.
Ya la sombra le sirve de follaje
a ese barro "escaso en todo y abundante en nada".
Nadie lo hiere ya. Nada lo humilla.
Ya dio su corazón por alimento.
Ya es fuego y barro, agua y aire.
Y nosotros aquí, pastando sueños…
Mario Ozny Rosa, Brasil
A INCERTEZA –
MOR
No presídio que temia
Reflexo no seu poetar.
A arma que logo via
De ali logo o matar.
Refeltia a incerteza
O medo a lhe rodear.
Rever aquela pobreza
A poesia recitar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 21
Mil poemas a Miguel Hernández
Humanismo ia além
Da poesia o amor.
De só querer o bem
Sentia a grande dor.
Seu grito foi emplogante
Lutava com humildade.
Na poetica bem elegante
A salvar a humanidade.
ERA UM MENINO POBRE –
MOR
Uma vida de pobreza
Do rebanho de cabras cuidar.
Menino sua esperteza
No frio inverno a tilintar.
Tinha que trabalhar
Seu pai o obrigava.
Nem deixava estudar
Na poesia já pensava.
Via toda aquela pobreza
O pobre queria salvar.
Pensava naquela nobreza
Quem o poderia ajudar.
Por sua sandália velha
Vendo o futuro ao seu lado.
Nem se sentia humilhado.
Sentia-se um revoltado
NANAS DE LA CEBOLLA
La cebolla es escarcha
cerrada y pobre.
Escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla,
hielo negro y escarcha
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 22
Mil poemas a Miguel Hernández
grande y redonda.
En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba.
Pero tu sangre,
escarchada de azúcar
cebolla y hambre.
Una mujer morena
resuelta en lunas
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete niño
que te traigo la luna
cuando es preciso.
Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus labios
relampaguea.
CADA POETA TEM SEU FIM
MOR
Ter vencido na vida
Trabalhou com ardor.
Em etapa comovida
De menino foi pastor.
Foi autentico autodidata
Sozinho sempre estudou.
Venceu em toda a meta
Com a poesia tudo mudou.
Sempre com seu ideal
De sua mais livre ideologia.
Numa luta bem natural
Volta a sua terra ela que trazia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 23
Mil poemas a Miguel Hernández
Foi preso e apenado
Pelo poetar que trazia.
Como preso colocado
Pela pobreza morria.
Seu idealismo não morreu
Na história será consagrado.
Miguel Hernández viveu
Mil poemas homenageado.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Seu belo sonhar
MOR
Era um sonho a poesia
No seu belo poetar.
Na mais bela melodia
No momento de ensaiar.
De um poeta que medita
Vendo a desigualdade.
Sua critica facilita
O porquê daquela maldade.
De cabras era o pastor
Ajudando a família.
Trabalhava com amor
Nada na vida o humilha.
Tinha o dom da palavra
Na força do poetar.
Da poesia a sua lavra
Sua mensagem levar.
HERNÁNDEZ O OBSERVADOR
MOR
Hernández a visualizar
A Espanha em novos dias.
Logo a textualizar
O que mesmo diria.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 24
Mil poemas a Miguel Hernández
Com magoa no coração
Tudo pensa em reverter.
Sentiria grande emoção
Vendo o povo hoje sofrer.
Do seu tempo a nova era
Espanhóis em sofrimento.
Sofrem a mesma quimera
Da globalização o momento.
Continua a sua tristeza
Que viveu na sua infância.
Com esperança e firmeza
Reluta com confiança.
UM AMOR CONTEMPLATIVO
Miguel Hernández
MOR
Era muito estudioso
Cedo deixou de estudar.
Voltou à labuta do campo
Para seu pai ajudar.
A lua contemplava
Aquele céu estrelado.
Na mente elaborava
Seu verso já guardado.
Sua mente evoluía
Só pensava no futuro.
Nem era por rebeldia
Um novo tempo seguro.
Num tempo de pouca cultura
Suas ideias a expor.
Naquele tempo nem era segura
Era um grande temor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 25
Mil poemas a Miguel Hernández
SÓ PENSAVA NO FUTURO
Miguel Hernández
MOR
Aquelas cabras a conduzir
Dedicou-se a leitura.
Pensando num belo porvir
Com uma nova estrutura.
Lendo poetas e pensadores
Com aqueles entendimentos.
Que foram seus instrutores
Ampliou seus conhecimentos.
Cresceu num tempo difícil
Com sua própria metodologia.
E até mesmo irreversível
Quem nele logo acreditaria.
Na certeza de vencer
Vai para a cidade.
Sem nada mesmo temer
Entra a Universidade.
CHEGA À UNIVERSIDADE
Miguel Hernández
MOR
Ali reúne idealista
Com os mesmo ideais.
Com meta prevista
Na poesia canta seus ais.
Começa um novo labor
Num estudo aprofundado.
Entrega com muito amor
Por tudo que tinha lutado.
Há discutir já aquele tempo
Com uma nova ideologia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 26
Mil poemas a Miguel Hernández
O que acontecia no momento
Com uma lidima filosofia.
Impor a velha oligarquia
Numa mudança radical.
Eu o tempo já pediria
Numa luta emocional.
ABANDONA A VIDA CAMPESINA
Miguel Hernández
MOR
Depois de muito sofrer
De cuidar de animais.
Vai lutar por outro lazer
No mundo dos demais.
Na cidade grande a chegar
Na busca de experiência.
Alguns poetas há encontrar
De tudo já toma ciência.
Os encontros são marcados
Começa os novos trabalhos.
Os debates já ensaiados
Era a poesia em retalhos.
Eram ensaios poéticos
Com poetas experientes.
Todos com tino ético
Na poesia eram exigentes.
O REBANHO NA COLINA
MOR
Com alforge e cajado
O rebanho logo a recolher.
Pela colina correndo
Cabras e carneiro não perder.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 27
Mil poemas a Miguel Hernández
Na mente ia guardando
A poesia a mentalizar.
O rebanho logo tocando
Num belo cantarolar.
No seu tempo de criança
Lutava com todo fervor.
Tinha sempre a esperança
De vencer com seu labor.
Na hora de descansar
Sua poesia escrevia.
Depois de memorizar
Era tudo que fazia.
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz” Guatemala, C.A.
Romance a: MIGUEL HERNÁNDEZ
Venero a Miguel Hernández
a plena luz lo recuerdo…
su fotografía y tierra.
De sus campos y su olivo
hermosura de Orihuela
en donde poeta altivo
cual ave cóndor que vuela
traspasa el campo furtivo.
A esta España de mi siempre
con mi poema votivo
te canto y canto a los mares
verso real intuitivo
que glorifica con tu huella
musa en numen sugestivo
estampa que deja en ella
luz corazón intuitivo.
Tu voz vertida en la sombra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 28
Mil poemas a Miguel Hernández
con el acento incisivo
emergiendo entre azahares
hombre en sus letras cautivo
que de pastor llego a Vate
gracias a su ser flexivo
y a su amor que encadenó
Maruja Malló abrasivo.
Republicano y guerrero
y por su amor aditivo
renueva en vida otro viaje
en letras nuevo incentivo
fiel depuración franquista
te convierten en cautivo
y Nanas de la Cebolla
nace en momento aflictivo.
Los pregones de la guerra
que te tienen inactivo
y vas de cárcel en cárcel
tienes fe amigo afectivo
con gestión liberadora
calmen el gesto agresivo
l carcelero que a mala hora
Te harán hombre siempre vivo.
Canción a: MIGUEL HERNÁNDEZ
30 de octubre 1910, Orihuela (Alicante)
28 de marzo1942 (31 años) Alicante, España
Entre reses alegórico
de Orihuela alabastrina
epígono que ilumina
la crema y grupo retórico
Dadivoso relucido
vate de luz cenital
luz espesa del panal
con claridad ha nacido
entre cabra alicantina
en grupo de crema austrina
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 29
Mil poemas a Miguel Hernández
Guerrero en Teruel poeta
pasa por Andalucía
y Extremadura otra vía
destruyen su obra completa
pastor su obra alabastrina
en grupo de crema austrina
Carlos Segundo Quiroz Quintero, Colombia
EN ORIHUELA
(En Orihuela, su pueblo y el mío, se me ha
muerto como del rayo Ramón Sijé, con quien
tanto quería.)
Miguel Hernández
En Orihuela
nació un árbol de voluntad firme
que avanzaba por el bosque de las palabras,
árbol bardo cantor
que a Ramón Sijé
insigne poeta en flor
cantó una elegía
al pie de su tumba fría.
Árbol de voluntad firme que avanzas
por las landas de estos mil poemas
son para ti mis esperanzas
cual quiméricas gemas
que cuelgan como ramas de ciprés
a tu memoria conto una y otra vez.
¡Oh!, entrañable poeta,
escribiste versos de saudades sin temor
con la tinta indeleble del amor
en tu paso por la vida como saeta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 30
Mil poemas a Miguel Hernández
Héctor Luis Asensio Duque de Heredia. ‘’El Duque’’
La Habana, Cuba.
A: Miguel Hernández
ODA
Dijisteis, ’’el universo gira’’,
junto a él todos los poetas como tu,
y se despiden del sol, de todos, no de la vida,
que sigue en las poesías tan hombres que no reposan.
Aquel tajo cerril de la montaña… en los días que hace sol.
Agrios huertos, azules limonares… presentes al fin, futuros.
Este paisaje sin mantel de casa gris… y se obra un cigüeñal reávidos cuellos.
Trino mollar de ruy-señor tenias… por epitafio un rabo.
Gozar y no morirse de contento… ¡que agraciado en su centro encontraras
al desgraciado limite del llanto¡
Que buena es la tierra de mi huerto… dejando estos ojos que dan pena.
Por tu pie, la blancura más bailable… pisa mi corazón que ya es maduro.
Me llamo barro aunque Miguel me llame…
desprecie todo el amor que hacia tu pie levanto.
Por una senda van los hortelanos… olvidando que es toro y masculino.
Yo quiero ser el hortelano…compañero del alma, compañero.
Nata del polvo y su gente y nata del cementerio… ¿Sigue su polvo sonando?
Quiso ser trueno y se quedo en sollozo,
Quiso ser trueno y se quedo en gemido,
Quiso ser trueno y se quedo en lamento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 31
Mil poemas a Miguel Hernández
Sentado sobre los muertos que se han callado en dos meses…
Varios tragos es la vida y un solo trago la muerte.
Vientos del pueblo me llevan… en medio de las batallas.
Carne de yugo, ha nacido más humillado que bello…
que antes de ser hombres son y han sido niños yunteros
Me quedaré en España, compañero…
aunque el tiempo devaste su gigante esqueleto.
Los quince y los dieciocho… y un sonido de valiente
Juventud solar de España:… ¡ay España de mi vida, ay España de mi muerte!
Rosario, dinamitera… del alma de los traidores
Jornaleros que habéis cobrado en plomo, sufrimientos, trabajos y dineros…cluecas
del capital y sus doblones, ¡fuera, fuera!
¡No permitáis que el rico se la coma.
Si hay hombres que contienen un alma sin fronteras…
desplegando en la tierra sus más férreas raíces.
He poblado tu vientre de amor y cementera…
quedando una mujer y un hombre gastados por los besos.
Moriré como el pájaro: cantando…Y aquel que de la cárcel fue mordido terminara su
llanto en tus cabellos.
Paso a paso, mi tierra vuelve a mí. Trozo a trozo… y aún sonaran los nombres y las
pisadas rojas cuando el bronce y el cañón echen canas.
Eres la noche, esposa: la noche en el instante mayor de su potencia lunar y
femenina… Yo soy el medio día.
Tu eres el alba, esposa: la principal penumbra… Yo soy el medio día.
Tejidos en el alba, grabados, dos panales no pueden detener la miel en los pezones…
se besan los primeros pobladores del mundo.
Te has negado a cerrar los ojos, muerto mío… la noche continua cayendo desolada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 32
Mil poemas a Miguel Hernández
El hombre no reposa… Y el universo gira como un pecho pausado.
Adiós, hermanos, camaradas, amigos: ¡Despídanme del sol y de los trigos!
La vida, la historia de los seres que aman y crean, se vislumbran en su
prosa, pues recogen en discursos, el accionar, el pensar, de ellos y los demás que no
se pueden expresar en versos. Del ayer hacia el presente, y el futuro, como Miguel
Hernández en estos parafraseados poemas.
Enrique Sánchez Liranzo, Rep. Dominicana
Miguel Hernández (1910-1942).
Miguel Hernández, Orihuela 1910-Alicante 1942. Un poeta y dramaturgo de especial
relevancia en la literatura española del siglo XX. Poeta vinculado a la generación del
27, considerado por Dámaso Alonso como ‘’genial epígoro de dicha generación’’.
Autor de varias obras gongorina, como Perito en lunas (1933). El rayo que no cesa
(1936) contiene espléndidos sonetos amorosos y la famosa elegía a Ramón Sijé. Para
comienzo de la guerra española, se alistó en el ejército republicano y desde entonces
la poesía se convirtió en un arma de combate: Viento de pueblo (1937) y El hombre
acecha (1939). Ya hecho prisionero, donde moriría en prisión escribió cancionero y
romance de ausencias (1938-1941), publicado póstumamente, y sus últimos poemas
(Nanas de la cebolla), en los que advierte el uso de la canción popular. Escribieron
también la obra teatral los hijos de la piedra, publicada póstumamente en el año de
1959.
Miguel Hernández catalogado por otros poetas como un romántico acérrimo y
perteneciente a generación posterior a la del 27, fue un romántico amoroso, tierno y
comprensivo, desarrollando un estilo único en la poesía de su época, donde hace
sentir el gongorismo y prosas de hermosísimas rima poética, que han de catalogarlo
como el poeta romántico de su tiempo.
Su vocación literaria le llevó a conocer profundamente a los autores del Siglo de Oro
español. Influido por éstos, desechando las modernas tendencias propias de la
llamada generación del 27, cultivó la métrica renacentista y barroca. Trasladado a
Madrid en 1934, fue unánimemente admirado y colaboró en la revista ‘’Cruz y
Raya’’. Su lirismo, su independencia con respecto a las servidumbres de la moda
literaria, y la sencillez y pureza de su obra, le han convertido en uno de los grandes
modelos de numerosos poetas posteriores.
En su soneto: ‘’El Rayo que no cesa’’. Hernández nos dejas lleno de ternuras y de
pasión, por sus hermosas estrofas en dicho soneto, cuando nos dice:
Por tu pie, la blancura más bailable,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 33
Mil poemas a Miguel Hernández
Donde cesa en diez parte tu hermosura,
Una paloma sube a tu cintura,
Baja a la tierra un nardo interminable.
He aquí esta estrofa de este hermosísimo soneto de Miguel Hernández, donde nos da
el sentir amoroso de las hermosas y blancas flores de plantas herbáceas, cuando con
todo ese romanticismo poético se lo dedica a una bella y hermosa mujer, con todo
ese amor florido de fragancias y ternuras de su encantador lirismo.
Miguel Hernández, uno de los poetas más destacados del Siglo XX, en toda España y
el mundo, nos has regalado un legado hermosísimo de versos y poesías románticas
como: ‘’Canción del Esposo Soldado’’; ‘’El Cementerio´´; ‘’El Niño Yuntero’’; ‘’El
Rayo que no cesa’’; ‘’Elegía’’; ‘’Inocencia’’; y, ‘’Sentado Sobre los muertos’’, entre
otras tantas de hermosas composiciones poéticas, que nos inspiran ha seguir leyendo
a este gran poeta español.
Es por consiguiente, que hay un tono post modernista –del post modernismo más
rico—en dichos versos donde las imágenes son todavía muy claras y vemos una
nostalgia a lo Herrera Reissig --a pesar de la distancia que va de un poeta a otro—
en ese ‘’reloj de una doncella chusca’’, y algo de Miguel Hernández en ‘’La guitarra
de la pena mía’’.
Los vemos ya así, en la ‘’Elegía’’, de Miguel Hernández, y en su muy sentir poema
‘’Inocencia’’, al igual que ‘’Sentado sobre los muertos’’. Donde Miguel Hernández
demuestra la sensibilidad y el amor a la eternidad en cada una de sus composiciones,
en cuanto a referirse a Herrera Reissig, como ya lo hemos citado más arriba y, como
podemos ver en sus poemas ¡ERES TODO! Y LA GOTA AMARGA.
Esto así, por ser Julio Herrera Reissig, poeta uruguayo, uno de los máximos
exponentes del modernismo en Hispanoamérica. En su poesía, lo cotidiano se mezcla
con lo fantástico y la ironía se abre paso mediante personales metáforas. La rima en
sus versos y su sentir apegado a la verdad, hacen ver en Miguel Hernández que es un
verdadero dramaturgo y poeta español del Siglo XX.
POEMA A MIGUEL HERNANDEZ.
Miguel Hernández poeta
De gran sensibilidad,
Tu poesía tiene encanto
Y también ingenuidad.
Poeta de gran valor,
Elegía en manantial:
Tu poesía tiene aroma
Que brotan del paladar.
Romancero y gitanillo;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 34
Mil poemas a Miguel Hernández
Gongorino al expresar:
El verbo de tu poesía
Que nadie te ha de igualar.
Poeta de gran renombre,
A una muy corta edad:
Conociendo muy bien la métrica
Para componer en versos
Tu más hermosas elegía
En inocencia sin par que nadie
Te ha de igualar al componer dicha rimas
De versos en un manantial.
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz” Guatemala, C.A.
OVILLEJO HERNANDIANO.
¿De dónde, los poetas hablan de él?
Miguel
¿Quién dice pertenece a los “Grandez”?
Hernández
¿Quién tiene honor la grandeza del llande?
El grande
Jamás el recio soldado se ablande
pero tu inocencia quedó arrugada
tu deseo de justicia, quemada
¡Miguel Hernández! “El poeta Grande”
Grandez_ Superiores. Consagrados.
Llande:
Bellota del Roble.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 35
Mil poemas a Miguel Hernández
Yamily Falcon Sarkis, México
SILENCIOS
Silencios que mitigan la vida,
Tropiezo con el denso sabor de la oscuridad que habita tus ojos
Me oculto en el hueco más profundo del olvido
Esos ojos van borrando mi esqueleto
Al miedo escandalizo
Arrastro la presencia que me incluye y destierra…
Un reflejo golpea mi consciencia…
Rumio mi demencia asechada por la mala entraña, apilo recuerdos tardíos:
Me atan, me anudan
Ancla la bestialidad del alma desgarrada…
Algo… yace inerte bajo la almohada
Ángela Reyes, España
A LA MEMORIA HAY QUE AYUDARLA UN POCO.
Hay que cogerla entre las manos
y tirar leve, pero definitivamente,
como se tira de un bebé que está naciendo.
Solo así volverán aquellos rostros familiares
que el tiempo ha resumido
en una sola lágrima.
Y es que a los muertos nunca
se les enturbia el ojo.
Uno llega cansado,
con la lengua dormida muy dentro de la boca,
y se sienta, y bebe cualquier vino
esperando a la noche para hacer inventario
y guardar lo que quede de risa y juventud.
Y al instante,
a la altura del hombro dolorido,
se posa una mirada oscurecida y familiar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 36
Mil poemas a Miguel Hernández
De estas miradas tengo el hombro lleno.
La de Miguel, me envuelve con su pátina húmeda.
Al enterrarle, nadie se acordó
de secarle los ojos
o de achicarle el lagrimal;
por ello sigue generando llanto.
Llora muy encalmado,
apenas sin parpadear, para que no le sientas,
y evitando mojarte.
A veces, lo más triste son las noches.
No sirve que me duerma con las manos muy juntas.
Siempre acabo rozándole una lágrima
y ello me obliga a incorporarme
para buscarla entre la ropa
y guardarla en el puño.
Así empecé a tener la sensación
de que dentro de mí vivía un hombre
y que yo le tenía sujeto por la muerte:
esa parte del alma que más duele.
Y así caí en la locura
de convertir mi lecho en un zaguán
donde Miguel venía -con un poco de fríoa compartir conmigo la petaca
y a fumar despacioso, mirando cómo marzo
nunca parte definitivamente.
AL MORIR
hay que dejar el cuerpo
bien apoyado en la pared,
o apuntalarlo como un árbol repleto de cerezas.
Luego, hay que partir disimuladamente
diciendo una palabra, solo una,
para que nos perdure
y humedezca el aire de la alcoba.
Es importante que mañana
el hombre que conviva en nuestro hogar,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 37
Mil poemas a Miguel Hernández
ese que sube al dormitorio
a cubrirse con nuestra colcha,
no sienta que la piel se le desprende
o se le descoloca el corazón
por culpa del silencio de los cuartos vacíos.
Daban las cinco y media de un marzo por amanecer
cuando Miguel tan sólo dijo: Josefina.
Y ese nombre,
que se quedó de pie junto a su boca
intentando adaptarse a la orfandad,
el tiempo lo mudó en un trozo de tierra
que crece con la lluvia.
Crece, y es necesario sujetarlo
para que no le broten moras
y no surja retama
y no vengan de noche los toros a pastar.
Si los toros anegan un nombre de mujer,
ya nadie puede pronunciarlo,
recuérdelo,
porque es igual que si tuviéramos un asta
enclavada en el cielo de la boca.
Así, Miguel,
al sentir que la nieve le invadía por dentro,
apenas dijo: Josefina.
Luego, cuando supo que los erales venían todos juntos,
volvió a llamarla,
con sus ojos de tierra.
NI UNA SOLA NOCHE
le ha faltado la voz a esa montaña.
Siempre, al atardecer, levanta su cabeza
como buscando inútilmente a Dios entre la bruma.
Apenas dobla el ángelus,
el viento la desmembra,
le arranca trozos de su carne
y la montaña llora,
rueda por la pendiente una quejumbre
como mujer mordida por un tigre.
Y, en ese instante, Miguel abría la ventana
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 38
Mil poemas a Miguel Hernández
y a su mesa de pino caía un poco de llovizna
o más bien desconsuelo,
ya sabe,
esa humedad tan propia de los montes que sufren.
¿Quién pondría esa peña junto a la almohada de Miguel?
¿Quién la colgó al borde mismo de su infancia
para que él tuviera que subirla
muchas veces al día?
¿Cuándo creció y no se lo dijeron
ese cantil desnudo
que desde niño estuvo asustándole el poema?
Usted viene y pregunta
por la guerra y la escarcha de cebolla,
ignorando que el risco descendía
a compartir con él la luz del flexo
y el caldo en la cuchara.
De siempre, en este pueblo hubo casas
en donde la congoja dormía junto al porche,
pero en ninguna como en esta
cuando el aprisco entraba hasta la alcoba
llenándola con ruidos de corazón lejano.
Tuvo que ser esta pared
la que en sueños viniera a suplicarle
un espacio en su rostro para imitarle la tristeza.
Y parece que a él no le importaba
que hacia el anochecer viniera
toda brazos,
toda labio amarillo,
y como mantis religiosa
se le quedara asida al hombro
quieta, muy quieta,
sin devorarle,
pero doliéndole en el pensamiento.
Tiene que ser el monte el que siga llorándole
y de rodillas cruce el pueblo
con su traje de yerba descosido
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 39
Mil poemas a Miguel Hernández
y derramando una neblina gris
que invita a la locura.
María Alicia del Rosario Gómez de Balbuena, Argentina
Homenaje a Miguel Hernández
Qué cantos, qué sirenas…
¿Qué aullidos, del recuerdo, romperán las cadenas?
Y en los muros de tu sagrado encierro
¿Qué secretos funestos escondidos te llevas?
¡Ah Miguel, el de Orihuela…!
Ah poeta -en compromiso de una ideaSi los ángeles acunaran tu marcha de pastor
Y Góngora te hablara, como ayer, al oído
Creeríamos, todos, que aún no estás vencido.
Tu caminar poético nos muestra la contienda:
Poesía y palabra: Machado. Rubén Darío.
Y en el verso creyente, el abrazo al amigo…
Una fuerza fluyendo entre pastos pisoteados.
Por cabras abonados, en tus sueños de niño….
Las letras españolas acunaron tu esencia
Y lamentan el sino de tu partida enhiesta
Guerrero enamorado del poema naciente
Tu recuerdo acaricia la humanidad doliente…
Un Neruda, en la historia,
Va contándonos cuitas de luna paseandera.
De tu luna ¡Maestro! De tus versos geniales
De esa sombra, entre luces, de esa luz entre cruces…
¡Oh Miguel de la historia!
Como un rayo certero, penetras la palabra
Y un soneto de muerte se agita en la memoria
¡Ah Miguel de Orihuela!
Cabalgata nocturna de romántica espuela.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 40
Mil poemas a Miguel Hernández
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Guerrero que en polvorines le vas cantando a la lluvia
Adalid de la justicia que en palabras vanas, vuela
¡Ah Miguel el de Orihuela! El de incansables espuelas
Aquél que entre pastos vivos soñó con su ser poeta
Éste que vive, poeta, aún entre pastos, dormido.
Dame esa mano que tañe ¡Dame tus sueños Miguel!
Quiero captar en tus dedos, la magia total del SER
De aquél que sufriendo vive, para no morir después…
De quien transporta su cruz, pensando que volverá.
Y en la magia de las noches, que se pueblan con estrellas
le va cantando a su cielo, entremezclándose en ellas
Y en la magia de los días, entre renglones alados,
va contándole sus sueños de poeta dislocado
a todo niño que duerme… A todo poeta en ciernes…
A todo aquél que aún hoy piensa en sus palabras donadas
como granas confitadas de la gran fiesta vivida;
como cuentas de un rosario que acompañan tu partida.
Dame esa mano que tañe… ¡Dame tus sueños Miguel!
¡Quiero captar en tus dedos la magia total del SER!
No me dejes sin espuelas, ¡Oh Miguel! El de Orihuela…
Willian Baccino, Uruguay
A MIGUEL HERNÁNDEZ,
En el centenario de su nacimiento
Creciste con las riendas en la mano
….....libre
pisando el surco del arado
la madre tierra acariciaba tus pasos
la naturaleza enseñó su realidad
aprendiste su lenguaje
lo hablaste como pocos
con amor a lo visto
sol, luna, árboles, ríos , viento
ilustraron tus letras, forjando
espíritu indómito y libre
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 41
Mil poemas a Miguel Hernández
Fuiste rebelde defendiendo
te alzaste brioso
ante la injusticia del tirano
el cruel, el mal nacido,
que piso sobre España
sometiéndola, sangrándola
hasta su muerte
luchaste fusil en mano,
mente brillante
queriendo romper cadenas
toro español, sojuzgado
Capturado, encerrado
la cárcel fue tu final
dejaste, como enseñanza
toda la rebeldía
la honestidad
el estandarte de la lucha
el fusil, la adarga y la espada
a defender, la libertad
ese grito sagrado,
esa poesía que nos llega
y nos enseña la dignidad de vivir.
Ronald Bonilla, Costa Rica
PASTOR DE LA SANGRE
Homenaje a Miguel Hernández
Como tu sangre, amapola del alba,
pastor de la espiga, de tanto silbo malherido
por el viento. Como tu sangre,
todo es abrazo, perito en penas,
soldado de la luz serás mañana
cuando amanezca el mundo.
Como tus ojos, alucinados,
de las nobles fatigas del yuntero,
venda del oprobio, ración de escarcha.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 42
Mil poemas a Miguel Hernández
Desde tanto abandono y sus guijarros
y sus almas colmeneras y sus abrojos,
todos tus amigos te cercan y la luna
sigue resuelta como tu Josefina entera.
Nada es olvido. Nadie te olvida.
Muerte, amor y vida:
Te sangran los costados.
Yo voy amando, Miguel, tan de tus pasos,
iterando tu fuego y tu palabra.
Yo voy contigo;
la luz es nuestra. (diciembre 2010)
Ana María Hernáez, Argentina
Caricia Del Viento, Viento Del Pueblo
Vio turbio su mañana
y se quedó en su ayer.
No quiso ser.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Poeta pastor de rebaños
soldado viento de pueblo
toro de fuego en la sangre
soplo tumultuoso en el correr universal
poro abierto en heridas sin cicatrizar.
Sentiste el amor como un destino trágico
brotaste del manantial surgido del terruño
y a él dejaste tu obra derramada en sangre
Fueron los traidores
los que se atrevieron a manchar
esa sangre escarlata derramada
y quedaron para siempre refregados en el lodo
Hacia la plebe tendiste tus raíces
y a ella quedó adherida
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 43
Mil poemas a Miguel Hernández
alimentando como savia nueva toda su vida
Gritaste al aire para que te oyeran
“Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta”.
Y esperaste la muerte con ruiseñores cantando
sobre los fusiles en batalla
y fuiste pura simiente
quedó la muerte fecundada
La gente te salió al encuentro con el alma tendida
como hoja en blanco
esperando
ser llenada de esperanza
Fuiste cumbre
encarnizado defensor de las masas
su dignidad y su libertad
“Llegó tan hondo el beso
que traspasó y emocionó los muertos”
se convirtió en nana escarcha de los días y las noches
forjó la paz para su hijo
aún debiendo matar para seguir viviendo
hasta lograr que . . .
“En su sangre se envuelva la victoria”.
A.G.G (Ángeles Garrido Garrido, 89 años)
Cuanto pesa la muerte
Cuanto pesa la muerte
si a rastras la llevas.
Cuanto pesa la muerte
si la llevas a cuestas,
pero no desesperes.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 44
Mil poemas a Miguel Hernández
Tú, Miguel sabías
que desde que nacemos la muerte
es nuestra compañera
Tú la aceptaste
primero con la pena de muerte
que con el Cristo en la mano te regalaron.
Después de tu enfermedad,
fuiste muriendo a grandes pasos,
llevabas la muerte a cuestas
y moriste a tus 32 años.
Tu vida fue corta
para escribir fue larga
escribiste mucho
hasta cuando respirar no podías
tu pensamiento componía
y tu pluma con muchos
descansos los escribía.
Tú querías ser poeta pastor y lo fuiste
Escribiendo muchos tristes y bellos poemas.
Hoy escribiendo para ti los españoles los mil poemas
queremos que tú seas nuestro maestro el pastor poeta.
Guerra
Guerra roja y negra
cuando alguien te anuncia
el pueblo tiembla.
Tiembla por estos colores tuyos
que desde que empieza llevas
rojo y negro, negro y rojo
son tus colores de tu herencia.
¡Oh triste guerra!
Cuánto sangre por ti derramada,
cuántos crespones negros
Nos engalanan.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 45
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Cuantas vidas por ti quedan truncadas!
¡Cuantas lágrimas por ti derramadas!
¡Oh triste guerra! Rojo y negro, negro y rojo
son los colores de tu herencia,
Miguel, tú y yo la vivimos como tantos otros
hermanos en nuestras propias carnes,
cada uno a su manera en la desolación
y el dolor de la triste guerra.
Miguel Hernández: Pastor de cabras y ovejas.
Pastor de cabras y ovejas, pastor de silabas y letras, con tu silbido a tus cabras y
ovejas llamabas, ellas acudían a ti, las tenias bien enseñadas, las tenias libres, a su
voluntad por los campos pastaban.
Tú, eras feliz al ver tu rebaño pastando, la hierva fresca de la mañana. Desde que
naciste amaste la libertad y como pastor, eras libre como el viento, No sabias leer ni
escribir y amabas las letras, tu pensamiento escribía poemas, y con tu gran memoria
los recitabas en silencio.
A la escuela de los dominicos fuiste una temporada, apenas aprendiste a leer y
escribir. Tu padre te saco de la escuela para que ayudaras en casa, eran tiempos
difíciles y tu ayuda era necesaria, por eso te hicieron pastor de ovejas y cabras.
Con 15-17 años con tus amigos tienes reuniones de aprendizaje, tu lo tenías claro,
la poesía era tu sueño y escribes, escribes a veces en revistas,
también escribes a veces tu escritura te anima, otras te desanima.
Eran tiempos revueltos, tiempos difíciles y tu miguel no lo tienes fácil por eso tus
escritos después de estar escritos con la tinta de tu corazón son tan importantes y
“tan bellos” porque son escritos sin lugar ni tiempo.
Ya conocían a Josefina a la que amabas, ella también de ti estaba enamorada.
En 1937 con ella te casaste en plena guerra civil, el ejercito te reclama y con ella
poco tiempo pasas, eres feliz esposo, padre amoroso a la distancia.
Esta felicidad te dura poco el luto te abraza muriendo tu hijo en 1938 esto te hace
escribir febrilmente, escribes mucho, tu pluma deshacen la madeja de tu dolor.
La nueva primavera te trae ilusión, esperar a tu segundo hijo, esta alegría te
reconforta al terminar la contienda, las rejas fueron la decoración de tu mansión.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 46
Mil poemas a Miguel Hernández
Tu escribías, escribías formando poemas de sufrimiento y de amor,
Habías perdido tu libertad que tanto amabas, lo que no perdiste fue la imaginación
para crear hermosos poemas que hoy leemos con mucha admiración.
Esto te duro poco porque la enfermedad también te rondo seguiste escribiendo
seguiste sufriendo hasta el 28 de marzo de 1942, día en que tu martirio termino,
termino tu martirio Miguel lo que no termino fue el poeta pastor, tus letras y tus
silabas en todo el mundo inmortales son.
Tus alas
Tus alas de plumas no vuelan
han perdido la libertad
que un día con tu rebaño tuvieran.
Tus alas están entre rejas
han sido prisioneras,
te ofrecen sus plumas
para que tú escribas con ellas
bellos e inmortales poemas.
Poeta que llevo la muerte
arrastras y a cuestas
pero que no ha muerto
porque eres inmortal
en todos los tiempos,
en el pasado,
en el presente
y en el venidero.
Vivo que esta muerto
Vivo que esta muerto.
Vivo que no come.
Vivo que no bebe.
Vivo que no ve.
Vivo que no anda.
Vivo que esta ido.
Vivo que estas lejos.
Vivo que estas muerto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 47
Mil poemas a Miguel Hernández
Que los mismos muertos
solo lo resucita
su pluma y su pensamiento
plasmándolo en cuadernos pobres.
Sus tragedias sucedidas
en terribles momentos
esas tragedias que hacen
que estando vivo este muerto.
MA (María Ángeles García Garrido). España
Mil poemas para Miguel Hernández
La mirada …
No mires mal al hombre, ni a la mujer
que pasa por tu lado acechándote
ni toques con tus manos su hombro, para señalar
al jinete de la noche negra con su guadaña,
volvería la cara y se haría la noche de tiniebla.
Un noche oscura sin nubes sin estrellas
Si luceros y sin luna.
En oscuridad absoluta y soledad quedarían
Como estatuas de sal petrificadas.
Seria necesario esperar a que la bella luz divina
pasará para alumbrar su camino
en la noche de luz eterna.
Con su bello manto nos arropará
en las luces y sombras del infierno
de la vida sufrida y vivida
en la minada de su alma,
se refleja y mira a los lejos
hacia la luz divina de la esperanza,
que se note en tu mirada y
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 48
Mil poemas a Miguel Hernández
en mi mirada la buena onda hipnotizada.
De donde en las miradas de los ojos
se ve el espejo de luz,
de nuestras almas iluminadas.
Vivió venciendo a la muerte con su poesía
Miguel Hernández, con voz de hombre
que luchó por la libertad vivió venciendo
a la muerte con su poesía, en la otra vida
sigue cantando versos de libertad.
Vivió luchando por España hasta morir joven
por el sufrimiento de su enfermedad,
y en su pecho tatuado con sangre
del corazón amado llevaba estos versos
de furor patriota:
“¡Ay España de mi vida ,
ay España de mi muerte!”
Miguel Hernández tu cantar
de versos desde el cielo
nos honra a nosotros tus hermanos
de sangre en esta tu patria querida .
España la voz cantora de tu alma.
¡Ay España de tu vida,
ay España de tu muerte!
Hoy eres hijo predilecto y te versamos
con la luz de poetas del mundo a ti maestro.
Dale que dale Miguel al verso...
Miguel un día escribiste El silvo del dale.
Dale Miguel, dale, que dale, a tu verso al universo.
Dale que dale poeta del pueblo, tu poesía reina en la tierra
y en el cielo, con tu amor ,dolor y fuerza guerrera en paz.
Dale que dale Miguel poeta cabrero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 49
Mil poemas a Miguel Hernández
Dios te abrazó un día en su seno, y hoy
tú encuentras la luz en la tierra y en el cielo.
Tu poesía tiene su gloría e infierno entre el más acá y más allá.
Dale que dale Miguel con el silvo del dale, naces a la vida,
con poetas del mundo entero, que te damos vida
en nuestros cantos de versos te vitoreamos en gloría viva...
Dale que dale Miguel al verso.
Miguel beso eres.
Miguel beso eres ante el odio vivido
eterna sombra de luz y paz,
hoy en nuestros corazones lates
y bates como el firmanento en la noche azabache de luna.
Miguel vientos del pueblo te llevan al mundo de los vivos,
donde te clamamos con tus letras escritas,
son tinta roja del corazón.
Miguel poeta de sangre viva,
epitafio de un alma errante ansiosa de libertad.
Eres hijo de la luz y de la sombra,
eres hijo del pueblo español,
te sobra corazón y alma entre tantos poetas.
La bandera de la libertad, fraternidad y del amor
entre pueblos del mundo ondeas,
con tus versos en tu cantar,
nos honrras Miguel.
Haikus
Miguel Hernández
Odas de amor y luz
poetas del mundo.
_______________________
Roja tu alma
roja sangre del pueblo
roja tu vida.
_______________________
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 50
Mil poemas a Miguel Hernández
Luchador de paz
soldado valiente
tú alma libre.
_______________________
Guerra de odio
Guerra de sangre vertida
sangrientas vidas.
_______________________
Sino de poeta
vives en tus versos
tú alma de paz.
_______________________
Bocas de ira
antes fue odio
hoy luce paz.
_______________________
Naces poeta
vives dejando huella
tus versos laten.
_______________________
Orihuela
te guarda en tu tierra
corazón de amor.
_______________________
España libre
tu poesía nuestra
la nuestra tuya.
_______________________
A ti versándote
el mundo te escribe
en libertad total.
_______________________
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 51
Mil poemas a Miguel Hernández
El mundo te lee
viva tu poesía
nunca mueres.
_______________________
Miguel Hernández
tu poesía es luz
es eternidad.
_______________________
Mil poemas
el mundo escribe
a ti poeta .
María Luisa Mayorga Sánchez, México
Malusa
ELIJO TU TRISTEZA Y REBELDÍA
Quien no oyó hablar de ti , en sus mocedades
Miguel Hernández, el rebelde poeta español
ese chiquillo que en el monte , feliz cuidaba cabras.
que cambio un día hojas blancas y pluma por fusil,
sin dejar que por ello , esta parase de escribir…
pues la truecas en arma de denuncia y de lucha.
Que llega al fondo de la gente vestida de verdades
Era el Franquismo la lucha que querías,
abordar por tu España que oprimida
se veía de frontera a frontera escarnecida ,
en las manos de un loco inquisidor
Alicante te vio nacer un día del 1,9,10
Y en una prisión de aquellas de tu “ruta turista” ,
te dejaron de morir …De pulmonía, otro día .
Yo elijo tu tristeza y rebeldía , con 31 años
ya dejabas la vida luego de arrastrarte itinerante
tres años largos y sombríos , escribiendo de lleno
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 52
Mil poemas a Miguel Hernández
en cárceles umbrías y ahí en tu propia Alicante
entre cuatro paredes nace del destierro y el dolor
Nanas de la cebolla, que hoy entona tu pueblo
¡con amor!
QUERIENDO HACER UN VERSO TE DESCRIBO
Queriendo hacer un verso te describo; poeta del pueblo Alicantino,
Tu encuentro con Neruda al galope te llevó en los lomos…
De aquel “caballo verde” hacía el ocaso, pasando por la aurora .
Te enlistas en la guerra civil del 36; llevando de fusil el sueño libertario
con que sueña , cualquier hombre de bien en toda tierra.
Si en tu mundo literario tu tenías , otras formas tal vez de dar pelea ,
Como fuiste a enlistarte soñador en una lucha que no podías ganar .
Ha sido siempre…ayer, hoy y mañana, la guerra contracara de ambición
Y nunca faltará loco ambicioso que mate por llegar a ser un Dios .
Cinco años dedicaste a esa tu lucha , de los que tres viviste en la prisión.
Te llevaron de una a otra cual turista , declaraste un día . Y no entiendo ,
si al conmutarte aquella pena de muerte …te hicieron un favor o se cobraron
a un coste más que alto tu adhesión a esa patria que oprimida ,
ganara un día su cruenta lucha contra el tirano que la dominó .
El destino está escrito según dicen ¡Maktub! Y ese era tu destino.
Dejarnos por legado en la lectura, el rayo que no cesa, cruz y raya ,
Y en tu viento del pueblo deleitarnos con paisajes de la poesía posguerra
Que dictaba tu triste cautiverio en ese anhelo pleno de libertad
LA ESPAÑA QUE SOÑABAS
Decir Miguel Hernández cuando leo, aquella tu elegía a Ramón Sijé
me llega una pregunta que insidiosa no puedo contener,
me lleva a preguntarte…o a preguntarme cada vez que la leo.
¿Encierra un gran dolor por ese amigo, que parte antes que yo ?
o¿ cubre entre sus letras la tristeza de a una gran amistad no hacer honor?,
Comprendo que Neruda te llevará a otra corriente de sentir y hacer ,
que tus nuevos amigos te alejarán de tu entorno feliz y juvenil.
Su ritmo literario era si cabe; un poco descreído e irreverente;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 53
Mil poemas a Miguel Hernández
o apasionadamente libre del citadino libre y decadente .
Y tu …habías sido educado de otra forma, con un grande fervor ,
así fuiste dejando atrás a tus amigos, a tu Orihuela con olor de inocencia,
con sabores de pueblo, y alegrías candorosas cual corriente de río.
a veces en la vida no entendemos, que Dios…no es una corriente filosófica ,
que EL solo es amor, por el amor
La vida continúa sin darnos tregua y el estallido de la guerra Miguel …
Un día te alcanzó, tu poemas llevaban puesto el sello inconformista ,
De Alberti, Zambrano, Neruda y Altolaguirre y así sin dudas ,
te alistas a la lucha sin temor, y es entonces que tu poemas cambian .
Y tu creación se torna en testimonio de lucha, que se torna dolor.
El hombre acecha es un libro cansado, donde hablas de lucha y de dolor,
Y me viene a la mente ese concepto que te junta con Machado, Jiménez ,
García Lorca como los pilares que lucharon incansables por un sueño :
El sueño de todo hombre: ¡La España que pudo ser y no fue!
UNA MAÑANA FRÍA
Una mañana fría con vientos de levante ,
Un poema tuyo Miguel , yo releía .
Y esos vientos del pueblo me llevaron
a comprender por fin …tu poesía.
Toda la España tuya, la expresaste
en esos montes y valles de tu sierra ,
en tu callado grito de dolor y rebeldía.
Te negaste a ser parte de un pueblo sometido,
y no quisiste dócil relegarte a tras la puerta
impulsar al honor desde tus letras ,
y tomaste el fusil con energía vibrante,
queriendo ser por los tuyos un valiente.
Con entusiasmo enarbolaste igual tu pluma;
que enérgica los caminos de lucha recorría.
No aceptaste un yugo sobre el cuello,
De mil hombres nacidos en tu Iberia ,
Que lloraba y sufría con digno orgullo.
Mostraba al mundo su frente alta
En tus versos plasmada su hidalguía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 54
Mil poemas a Miguel Hernández
SURGISTE ENTRE LAS PEÑAS
Orihuela ciudad bravía y buena
un día te vio surgir de entre las peñas ,
y vagando tras las cabras de chiquillo,
te imaginaba ya en el cante de las nanas.
Nanas de la cebolla que entonamos…
Donde esa bella morena derramaba
todo su amor de madre en una cuna .
Símbolo de la España convertido,
te has visto tú, Sr. Miguel Hernández.
Cantado por Serrat, pájaro herido
que dulcedumbre da pensar en tus palabras:
Que solo quien ama vuela.
Y volaste tan alto, para caer en ese vuelo
En la triste mazmorra de una celda,
que acabó con tu cuerpo y con tus sueños
No sabemos jamás, donde la vida
con su extraño avatar nos llevará .
Si a las cumbres nevadas de alegría
O las simas oscuras del dolor ,
Donde estés querido poeta alicantino,
sigue inventando nanas; que en el mundo
hacen falta poetas y cantores .
Ya lo decía Facundo en sus canciones ,
que con cada cantor , habrá un soldado menos.
NO SERÁ CON FUSILES
Un día enarbolaste tu pluma en el ardor bendito de la poesía ,
El otro… agarraste un fusil y por tu patria, a la guerra te fuiste.
Tus letras se fueron espaciando, sin llegar a faltar.
En una espada devorada por el sueño de ansiada libertad;
gritaste alto y fuerte contra el tirano y cruel inquisidor.
Y rogaste a la vida que tu grito, llegara claramente
a todos los confines de la tierra y hoy ese sueño
quizá tu no lo sepas, pero es una bendita realidad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 55
Mil poemas a Miguel Hernández
Terminada la guerra te apresaron arteros,
Y ¡condenado a muerte! te dijeron sin más.
cambiaron tu condena de morir por prisión;
una prisión que eterna; encarceló tus sueños,
fuiste …de torre en torre, turista prisionero.
Hasta morir un día, de tristeza y dolor.
Tristemente, no falta en la historia de hoy…
el tirano vestido de “Armani”
que de pipa y guante, el sigue torturando
la libertad del pueblo con sus falsas promesas;
lleno de falsedad promete mil quimeras que nunca cumplirá.
Destino de mil pueblos es seguir soportando,
que seres deshonestos lleguen a gobernar,
es la cruz de tu tierra, la de él, y la mía .
Quiera Dios que algún día, lo podamos cambiar.
No será con fusiles, eso ya no es posible…
cuando pueden hacer… cualquier bomba estallar.
Quizá sea con las letras de mil gentes que buenas,
tratan con poesía… hacer conciencia de paz,
que solo el amor reine como sana promesa,
en todos los rincones de este mundo mundial.
¿QUIEN ERES EN VERDAD?
Octavas y sonetos fueron dando
imagen , a tu rostro de soldado.
¿Qué pretendías Miguel ? yo me cuestiono,
¿Mejor destino a los desheredados?
¿o era tu sueño…la poesía de guerra?
¿que te llevó a crear “Vientos del pueblo”?
Esa poesía que al adentrarte en paisajes de oro ,
netamente campiranos , con esa nuestra gente ,
que desde que nace el sol hasta el ocaso ,
duramente arrebata a la tierra ese pan…
Para poner la mesa cada día .
Dónde el Niño Yuntero se hace hombre
por medio de tus versos , tu sentir y tu pluma.
Y el esposo soldado de noche… ahí en las filas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 56
Mil poemas a Miguel Hernández
cantara su canción del desespero
por la mujer amada
Quien eres en verdad ¿Miguel Hernández ?
Filosofo rebelde; cabrero alicantino.
Que alimentaste tu sed de libertad ,
en los primeros cuartetos que escribías
para aquella revista del amigo Ramón.
Al que un día …al crecer como escritor
y codearte con Alberti, Neruda ,
dejaste allá olvidado , más luego …
¡o pudiste jamás el olvidarlo!.NO SOLO A TI TE DUELE …
No solo a ti te duele ese mozuelo hambriento
de tu Niño Yuntero poeta Hernández ,
Porque cierto es …que en la vida ,
los ruiseñores cantan encima de los ruidos de metralla
En todas las batallas , esas batallas sin sentido,
encarnecidas sangrientas, incoherentes.
Forjándose en los sueños de tiranos …
hombres sin respeto hacia la vida
que consideran , la vida les debe algo.
Y así desde un sitio protegido , cobijados quizá
en brazos de una amante …una esposa .
No importan las huellas que sangrantes ,
van dejando pies descalzos que cansados ,
luchan por un ideal a veces , otras …simplemente
arrogante adolescente que se enlistó en aras de la gloria.
Pasa …en tu Iberia , en mi tierra , en el mundo .
Como librarnos de ambiciones cruentas ?
Si el poder enloquece y obnubila .
Cuanta sangre salvajemente derramada,
cuanto dolor , soledad y frío
cubrieron esos campos de batalla .
Cuando por Dios descubrirá el humano ,
que la paz no se conquista con espadas ?
que es más fácil quizá desde las letras , del cante
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 57
Mil poemas a Miguel Hernández
del sentimiento que cubre de hidalguía al hombre .
Más no de fama y fortuna con el dolor ajeno.
No Miguel …¡no solo a ti te duele!
CARNE DE YUGO
Crecí , leyendo tu romancero de ausencias ,
a mi adolecer dramático ya eras leyenda
Miguel Hernández, el poeta del pueblo español.
Pueblo Valenciano alicantino, a orillas del Segura;
donde monte , campo y playa se hermanan
en armonía bucólica y serena .
Carne de yugo proclamaste,
En aquel poema que obligaba
A evocar esa yunta envejecida
Conducida afanosa por un niño
Que se hace hombre regando cada día
Con su sudor la tierra ennegrecida
Regándola no solo con sudor ,
sino …con sangre y llanto ,
Porque los sueños de libertad,
a medio surco van agonizando.
Y la vida …recién nacida apenas;
va muriendo…como ese grano,
que al morir renace .
A veces me pregunto que pensabas ,
Mientras al hijo de la luz y de la sombra describías.
Te describías tu mismo , pienso yo
entre la luz del amor que hubiera un día
y el recuerdo que solo va quedando .
De lo vivido un día con alegría
Quizá por eso, el “tu eres la noche esposa,
Yo soy …el medio día “.
Porque tu sueño era perpetuarte …
El que tenemos todos : ¡la familia ¡
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 58
Mil poemas a Miguel Hernández
ESE ESPOSO SOLDADO
Ese esposo soldado que se ha ido
Dejando atrás un vientre fecundado
Dolor de muchos con sueños de tornar
A estrechar en los brazos sus mujeres
Y observar con los ojos arrasados
A ese chiquillo de pantalones cortos
Que los recibe después de muchos años.
Cuando soñaran al ritmo de metrallas
volver un día a brazos de la amada ;
y en un mundo de paz, libertad, equidad
uncir la yunta y fertilizar el campo.
Ese sueño lo vas haciendo versos ,
Miguel Hernández mientras planeas volver.
A trabajar el pan de cada día
En esa duramente forjada libertad y paz
que más tarde entendemos tan solo es utopía.
Para el pueblo lo es , y lo será
¡una eterna utopía!
Cuantos hombres volvieron de la guerra ,
pero en sueño incompleto van sin brazos .
Con la mente perdida en el horror , los gritos
de aquellos compañeros que caídos ,
no pudieron volver a sus terruños.
Cuantos quisiesen haber quedado allí ,
regando con su sangre la tierra española ,
que les pidió la vida …y les devuelve
un existir vacío , falto de gloria .
Envuelto en un sudario de piedad.
TU OFICIO DE POETA
MIGUEL HERNANDEZ .
Tu “oficio del poeta” te describe
entre luces y sombras imperfecto,
como todo mortal te va pintando
en rumor de otras bocas …
En poeta-pastor que itinerante;
invita al sueño que tenemos todos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 59
Mil poemas a Miguel Hernández
El vivir de los libros;
convertirte en poeta a toda costa.
Nos dará de comer tu te decías
recopilando con furioso celo
las hojas de apretadas escrituras.
Trazos logrados en penumbra vaga,
quizá ilegible escritura que narraba…
eternas noches de soledad y frío .
Las enviabas a Josefina suplicando,
cuidara celosa todos tus manuscritos.
Esos que ponen hoy en abundancia
pan y caviar en la mesa de los tuyos.
Ese proyecto tuyo te llevara
a llenar de vivencias y de amores
cuartillas y cuartillas.
Amor por la libertad y por la vida,
intentando fluir al viento del pueblo,
En prisión aprendiste a tener calma,
A luchar contra toda desventura
y saber que vivir… es un oficio artero.
ATIPICO POETA.
Te dicen por ahí Miguel Hernández atípico poeta,
sin embargo yo pienso que fuiste…Tú fuiste;
emblema de la guerra en tus poemas,
peleando con denuedo por tu suelo,
detrás quizá; tan solo
de quimérico sueño en libertad.
“Me llamo barro aunque Miguel me llame”
Al leerte me sonaba como un triste reclamo.
En aras de tus sueños desgranaste…
Lealtad, conveniencias, desamor
Comunista…quizá libertador. Todo soñaste ser
Tu Oda al afecto y la amistad;
la elegía a tu querido Ramón,
me habla de lealtades divididas,
que te rompieron también el corazón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 60
Mil poemas a Miguel Hernández
Hablas del hombre amigo que dejaste atrás
en aras tal vez, de una vida mejor…
De otros amigos, otras corrientes.
Nos recuerda aquel espacio vacío,
que va quedando en el alma
cuando un amigo se va.
Escuchando a Serrat en tu elegía,
se estremece el alma en tu dolor,
mas grande es el dolor cuando sentimos
que ya dejamos por siempre
la deuda ¡no saldada!
Para la libertad tu mejor himno,
donde llegas de lleno hasta la gente.
Quizá le debas a ese Joan Manuel
el que hayas quedado en tanta gente;
gritando que tus manos y tus ojos
lucharon con tesón bravío,
por esa libertad de tu pueblo español.
Regina Célia de Aquino Xavier, Brasil
Miguel Hernandez, alma poética
Miguel Hernandez,
Homem do campo,
Alma de poesia!
Quem lhe diria
Que nasceste para ficar na história?
Tua jornada, tuas memórias,
Foram frutos de tua arte,
Que lhe renderam os louros
da glória!
Teus propósitos e ideais
Mescladas à inspiraçoes divinais
Deixou-nos por herança
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 61
Mil poemas a Miguel Hernández
Poemas belísimos e peças teatrais!
Hoje revivemos a tua memória
Em homenagens singelas
Pela honrosa trajetória!
Jorge Castañeda, Valcheta (Río Negro) Argentina
POETA EN ORIHUELA
¿Se puede hablar de Orihuela sin hablar de Miguel Hernández? ¿Se puede hablar de
Miguel Hernández sin hablar de la Poesía?
Seguro que todo en la aldea lo recuerda. Los amigos, los dolores, los afectos, los
caminos. Las huertas.
¿Fue el suyo un silbo vulnerado? ¿Fue su silbo el silbo apacible que el Jehová del
Antiguo Testamento le mostró al profeta Elías después del viento y del terremoto?
¿Fueron los vientos de su poesía los vientos del pueblo? Pueblo campesino, de gente
trabajadora, de jornales agotadores, de ternuras contenidas, de afectos bruscos pero
intensos, de pocas palabras y de muchos silencios.
¿Dónde estarán las nanas de la cebolla? Humilde hortaliza para engañar el hambre.
Tesoro redondo de finas capas. Quién te corta llora. Y así debe ser para tener
presente las tristezas cotidianas.
¿Dónde estará Ramón Sijé a quién tanto el poeta quería? ¿Acaso todos no nos
moriremos como el rayo?
El corazón de Miguel Hernández era una colmena llena de bullicios. ¿No se dice
acaso que “del fuerte salió dulzura?
¿Puede haber cosa más grande para un poeta que tener a España en el corazón, como
escribiera desgarrado Pablo Neruda? Miguel Hernández la tenía. Con su historia, con
sus poetas, con sus escritores, con sus desgarros, con sus días al decir de Borges
“más populosos que los de Balzac”.
¿España podrá apartar ese cáliz de la boca de los poetas como quería César Vallejo?
No. Algunos debieron beberlo hasta las heces, y no hubo ni siquiera vinagre y estopa
para aliviar los dolores del alma.
¿Se puede hablar de Orihuela sin hablar de Miguel Hernández? No. Porque Orihuela
es Miguel Hernández. Como Isla Negra es Neruda. Como Macondo es García
Márquez. Como Comala es Juan Rulfo. Como Granada es García Lorca. Coma La
Mancha es Cervantes. Como Avon es Shakespeare.
“El viento sopla de donde quiere” dice el Señor de los Evangelios. ¿Alguien puede
predecir los vientos del pueblo? ¿Y los vientos de la poesía de dónde vienen?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 62
Mil poemas a Miguel Hernández
¿Quién pudiera ser “llorando el hortelano de la tierra que ocupas y estercolas?
¿Quién podría levantar la voz venido del desierto para decir que tu poesía no ha
estado prisionera en una celda ni ha muerto? ¿Qué tu poesía no enfermado, ni pasado
hambre ni llorado de pena? ¿Quién pudiera?
Nosotros, los poetas, para eso estamos.
Julio Carmona. Perú.
Es rayo que no cesa
Rayo nacido entre nubes de ovejas
Para llenar de estrellas el camino:
Es rayo que no cesa su destino
Y en los ojos nocturnos se refleja,
Igual que –en labios sedientos– el vino
Rojas flores de corazones deja
Para envidia o solaz de las abejas:
En campo hollado por vil asesino…
Miguel floreando en el surco Hernández
Y resplandeciendo en su Orihuela
Hizo crecer la música más grande:
La que, con el candor de la ciruela,
Por la inmensidad del pueblo se expande,
Y no llora y no sufre: se rebela.
Eduardo H. González, México
Opus de la armonía (en dos acordes)
Al poeta Miguel Hernández.
Porque sus Nanas de cebolla
aún me estremecen
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 63
Mil poemas a Miguel Hernández
Acorde primero
… sojuzgado, cual lampo aterido,
el poeta
desnuda la pregunta:
¿Cuándo el hombre olvidose
del ser humano?
Te duele, poeta, abrir las puertas del alma
y mirar el estallido de la desesperanza,
la fiera diligencia adoptando enjambres
de la discordia.
Mas bien sé, tu derrotero
insólito dará luz a la incógnita.
Eres, poeta, la respuesta.
Flébil soliloquio es la cumbre solitaria;
enciende rumores enternecidos
por virgíneas claridades.
No cedas, aguza el poema,
tu inefable porfía de colocar el acento,
dala al verso.
Enuncia el vuelo suspirante
y no desdeñes las lágrimas propincuas.
Canta, propicia el umbral germinante,
los sueños recónditos mas necesarios.
Sufre, tu sino de incienso apacible
cédelo a la egregia serenidad…
Acorde segundo
… pasarán los cendales, y el canto armónico
del poema tendrá nuevos gestos;
sembradíos venturosos fundarán
el blando mármol; cedido ha la piramidal
cimitarra del desafecto,
el oprobioso estruendo del sobresalto
también cederá.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 64
Mil poemas a Miguel Hernández
Ya poeta, tu canción hilvana
trémulos pechos; empecinada ave
acaeciendo después del pico caído.
Aun así, si el vórtice del infecundo
aposento existe afuera,
y proviene el siniestro hálito,
el apoteótico compás de la ronca mirada,
poeta, desnuda nuevas preguntas,
da el verso al tálamo mordaz,
despierta los insomnes corazones
a la aurora benéfica. Tributa aire
al laberinto cadavérico y divagante.
Descifra la eurítmica y profunda
clarividencia del apego.
Queda en sosiego, poeta, mas no cedas
a la inmolación del armisticio.
Vierte infinitamente la poesía,
aligera el verso pacífico.
No calles, enmienda los espasmos hostiles.
Canta, poeta, ya otros proseguirán
Fausto Antonio Aybar Ureña, Rep. Dominicana
MIGAJAS DEL CANTO
Las sombras no habitan en los espejos,
murmuran los colores cuando dos soles se abren.
Vienes del polvo, vas al silencio,
la cárcel no calla a las salamanquesas,
claudicar, no es ni para los muertos,
es para el verbo iracundo y perverso.
Lluvia de sueños,
luciérnagas de en un siglo
oscuramente eterno, y emergen de tus labios
un horizonte de palabras subyacentes,
una premura, afección
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 65
Mil poemas a Miguel Hernández
Va corriendo el tiempo, no hay mutaciones
que puedan deshilar la grandeza de tu canto,
los tránsfugas no habitan en esta historia,
sólo en la longevidad del sueño, los ángeles
y los fantasmas convergen en una misma rosa.
Y despierta el hombre; y con él la palabra.
El sur tiene un olor a olvido, un olor a yunta
y a tierra mojada, no hay mas estrellas en
el universo que en tu cielo, borbotean del
oxido lentejuelas de amor, del llanto,
retoños de una escueta oración.
CANTO; HOMBRE, SUEÑO.
(Miguel Hernández)
Hombre,
polvo de estrella,
sangre,
volcán.
Las fronteras sólo son
para los débiles, el carbón
es el arma mortal de los poetas.
Hombre,
universo feroz,
hidrogeno sobre hidrogeno,
explosión de luz, de las cavernas
emergen gritos de una tierra oprimida,
liquidas metáforas navegan
hacia un horizonte de papel.
Hombre,
raíz,
carne,
tierra,
babel de estiércol,
los dioses no fluyen,
las rosas revientan de tanta soledad,
escuálida la noche, prefiere llorar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 66
Mil poemas a Miguel Hernández
Hombre,
Niño,
Sueños,
senderos de héroes dormidos,
latidos policromados,
huellas, ampollas del tiempo,
eternamente humano,
los náufragos no sólo son del mar, también del olvido
Hombre,
cebolla,
pan
y pastor.
Trigo, piel indeleble
de un viento que no envejece,
rayos; transitar de embriones furtivos,
hombre, legado, canto; alma de la patria alambrada.
María Luisa Mayorga Sánchez, España
ETAPAS
La vida que elegida fuese tuya
querido poeta de Orihuela
no sé si acomodarla por etapas.
En un antes y después
de que tomaras las armas y tu pluma,
y marcharas buscando una España
mejor para los tuyos .
Pues igual, se me da leer
tu Oda al vino, donde imagino
ese lagar repleto de mozuelas
en el baile a la cosecha tan soñado.
Cosecha abundante y perfumada
En la bodega añeja donde en lo oscuro
reposa el mosto esperando el día ;
que una copa se alce zalamera.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 67
Mil poemas a Miguel Hernández
Y unos labios sonrientes se remojen
en su aroma y sabor,
con esa sazón que un día le diera
La Virgen del Carmelo.
O leer aquel Umbrío por la pena;
dónde tan solo penas desayunas
y es un hato de penas tu sudario.
Dónde entonces Miguel…
¿yo te acomodo?
Romántico irredento algunas veces.
Rebelde enfebrecido algunas otras.
Lo único que sé es que te leo,
y me sumerjo en esa España vieja ,
tan llena de dolor; donde la lucha
la dejara para siempre herida.
¿QUIEN ERES?
Alguna vez, cuando tomas un libro
y este se convierte por instantes,
por horas o por días
en tu mejor amigo.
Sucede que a veces…
te encuentras raramente
cara a cara con quien lo escribió.
Y vienen a riadas las preguntas ,
¿Que pensabas? Cuando fue?
queriendo comprender
el como y el porqué .
Me sucede contigo, poeta Hernández.
El poeta de la patria , del pueblo
del amor y la muerte te llamaron .
Y Serrat te va cantando
al mundo entero .
Pero en verdad ¿quién eres?
Aquel chiquillo cabrero por el monte
que lleno de alegría corría por el campo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 68
Mil poemas a Miguel Hernández
tras sus cabras y sus sueños ,
O el estudiante que tropezando de lleno
con la poesía en Aleixandre y Neruda ;
tomara con fervor papel y pluma
y a su tierra, su gente , al mundo conocido
dedicara sus primeras letras.
Aquel que a la vera de Alberti, García Lorca,
se fueran madurando y así…
Se inflamara el sentir en tu espíritu joven
enamorado de su patria ; te encaminaras
al frente con un sueño, que en el tiempo…
Se avino a dormir en una celda ,
esperando la muerte.
¿Quién eres en verdad, Miguel Hernández?
TE IMAGINO YO A TI
Una mañanita fría
donde la brisa te besa;
y se alzan en plegaria
mil motivos por la vida
recordándote Miguel
te imaginé yo en el campo
tras las cabras en tu monte.
De chiquillo elucubrando
mil poemas, a la vista…
de aquella vasta pradera.
Quizá entonces son pensabas
que un día cualquiera sería,
que alguien sentado en la peña
esa que ayer tú veías.
Vientos del pueblo en la mano
Niño Yuntero leyera.
imaginándote a ti
Despedazando el agua en los zarzales
gritándole ¡Salud! A los que pasan,
con la boca llenita de cosecha.
Como bien lo expresaste
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 69
Mil poemas a Miguel Hernández
en tu juramento a la alegría
Tal vez no lo pensaste jamás
Miguel Hernández, pero provocas
imaginar tu campo, sus maizales
tus cabras en el monte y a ti…
tras ellas; pluma y papel en mano
no un cayado.
Así…te imagino yo a ti.
PORQUE CAMBIASTE LA LIBERTAD DEL MONTE
¿Por qué Cambiaste la libertad del monte
por campos de batalla poeta Hernández?
Solo tú …solo tú bien lo sabes.
Quizá los ideales nos trastocan,
y dejamos atrás las utopías…
para buscar, igual… las realidades.
Que en guerras, nos queda claro
no habrá jamás ganadores, ni vencidos.
Mil perdidas totales, es la suma;
existen los escombros de los sueños,
mil tumbas que sombrías y abandonadas
adornan tristemente cementerios.
Un monumento perdido,
alzado con mortal remordimiento.
Por los que no estuvieron, ni estarán
ahí…en el frente de batalla.
La pérdida total de la alegría
en familias enteras es el logro.
Y el dolor lacerante que perdura
a quien la calma dulce del recuerdo
les robara… esa guerra.
Por las generaciones venideras,
quiera Dios que muera para siempre
el concepto errado de las guerras.
Y nos quede bien claro que una lucha
por la justicia y la equidad
no puede hacerse,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 70
Mil poemas a Miguel Hernández
bañando de sangre
¡Nuestra tierra!
CUANDO MUERE UN POETA
“Cuando muere un poeta y la creación
se siente herida y moribunda en las entrañas
un cósmico temblor mueve terriblemente las montañas”
dijiste un día refiriéndote a Lorca. ¡Estoy de acuerdo!
En que su muerte fue cobarde e impía.
No puedes en la vida de ninguno
obligarle a pensar como tu piensas.
Pero así es el mundo en que vivimos;
donde el tirano, el ególatra falaz, el prepotente
Impone a su manera y sobre todo
que se comulgue con ruedas de molino.
La rebeldía de Lorca, su vida, sus amigos
sus andanzas… serán siempre un poema
¡una elegía! Y me gusta el tributo que le hiciste
como se lo hace también Andalucía
Y un día también Miguel Hernández;
fuiste tú; el adalid del oprimido,
e igual que Lorca fuiste asesinado,
quizá no a balazos, ni en Granada
pero si en una cárcel de tu tierra.
Por abandono, tristeza o pulmonía
que mas da la razón…si un día te fuiste.
Dejándonos como legado al orbe entero
tus letras , tus sueños, tu poesía.
ROTURANDO LA TIERRA
Un tarde de verano, donde las lluvias incoan
a mojar la tierra. Observo a un chiquillo
de escasos años larguirucha talla
roturando la tierra.
Sentado en un viejo tractor;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 71
Mil poemas a Miguel Hernández
trae a mi mente…
a tu Niño Yuntero poeta Hernández.
¡cuando ha corrido el agua
desde aquel tu poema.
Sin embargo; evoca uno…
aquel dilema eterno:
El clamor de la gente del campo
que hoy en día, en mayor abandono
clama igual… ¿Por qué yo?
Porqué la falta de oportunidades,
porque tu si… y yo no.
Hoy, ya nos vemos las yuntas
recorrer los barbechos.
Creo el término “barbecho” está en desuso,
aquel léxico hermoso campesino;
se ha olvidado.
Hoy recorre la parcela en moderno tractor,
un chico con audífono al oído.
Mas usual, ¡un anciano! Eso no cambia;
la juventud se vuelve a las grandes ciudades
buscando el sueño aquel…
del feliz ganador ¡dulce utopía!
Y cabe la pregunta al observarle:
si es que alguno lo encuentra o aún sueña.
O dejan en la acera y el asfalto,
sueños rotos, dolor, desilusiones
Ese Niño Yuntero en medio del dolor,
que tus letras pintaban.
Era parte del entorno existente Miguel…
Y quizá no sufría tanto como tu pensabas.
TARDES DE OTOÑO
Esas tardes de Otoño
donde la puesta de sol,
baña las hojas de un dorado rojizo
y permea el ambiente del paisaje
una tristeza sutil como la bruma
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 72
Mil poemas a Miguel Hernández
Me maravilla el saber que pese a todo,
el sol de nuevo llegará mañana.
Y al levantarse, la bruma de la aurora
disipándose lenta, se perderá en la nada
El astro Rey calentará la tierra,
y la semilla incoará a brotar,
los frutos en el árbol se maduran
y la vida… ¡sique igual
Igual que cada ciclo,
sin importar siquiera tu tristeza,
o ese caer del sol en cada ocaso.
Recuerdo aquellas tus palabras
Miguel Hernández, poeta de Orihuela,
dónde haciendo un recorrido frutal
que no entendí del todo;
desgranabas Miguel en esos versos :
Dónde uvas, granadas, dátiles
doradas, rojas, rojos
hierbabuena del alma
azafrán de los poros …
Uvas como tu frente
uvas como tus ojos
Todo puesto sobre la mesa pobre,
gastada del otoño
Más nunca comprendí…
dónde quedaba el muerto derramado
con Octubre en los hombros.
HOMENAJE
Hoy por ahí tropecé Miguel Hernández
con una invitación a homenajearte.
Vinieron a mi mente mil conceptos;
homenajearte a ti… el poeta del pueblo,
de la patria, de la vida y la muerte.
¿Cómo? ¿ con que palabras?
Como desnudo yo tus letras…
vistiéndolas luego con las mías?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 73
Mil poemas a Miguel Hernández
Que terrible sería sentir que puedo;
llegar a comprender tus elegías.
He leído mil y un veces el poema
que hiciste a tu amigo Ramón Sije.
Y advierto en el… remordimiento,
pena y dolor de haber dejado
en aras de la fama y la fortuna
la mano amiga, el oído atento.
Y sé; que hubieses querido volver
y andar de nuevo… los pasos
que llevaron tu camino un día…
lejos, de la amistad fraterna.
Pretender entender esas octavas,
que llenaron cuartillas y cuartillas.
Hablando de mil cosas cotidianas
en tu libro perito en lunas
Quizá diré tan solo que me gusta leerte,
Y me encanta Serrat con sus canciones
en las que él; si que gusta homenajearte.
Puedo contarte Miguel que hoy te actualiza
con ese hijo de la luz y de la sombra
Eres la noche esposa,
Yo soy el medio día…
Ernestina Ramírez, México
Cuando te sientas sobre la muerte
Cuando le cantas al pueblo
sentado sobre la muerte
tu voz retumba en la tierra
y el puño se alza valiente,
cuando le cantas al hambre
el alma se te estremece
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 74
Mil poemas a Miguel Hernández
con el nudo en la garganta
por la gente que te duele.
La tristeza te ha sentado
sobre la muerte callada
y desfilan a tus ojos
como fondo de batalla
como marchando los huesos
que aún sostienen las entrañas
y que en sus fusiles cargan
la rabia que no les falta,
Cuando le cantas al pueblo
con esa voz enlutada
por héroes que se han ido,
porque no te queda nada,
la muerte te hace la silla
y es el eco en tu tonada.
María Elena Solórzano, México
NIGROMÁNTICO ROMERO
Tu palabra en mágica dehiscencia,
rueda por senderos infinitos,
semilla que germina en páramos inhóspitos,
chisporrotea en la lámpara votiva de los templos,
alumbra lobregueces.
Resplandor atrás de la montaña.
Cabalga en los renglones del mar.
Riela en espejos de obsidiana.
Su rumor anida en rosadas caracolas.
-Nigromántico romero que todo lo transforma.
La poesía fue tu amante en las noches sin luna
y llenó de incandescencia tu alma de hombre niño,
tus pupilas de genciana y hierbabuena-.
Tu palabra es el vino de la tierra:
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 75
Mil poemas a Miguel Hernández
imanta los labios de los viejos,
seduce a las doncellas con desnudez de luna.
Los bardos la buscan entre las violetas
cuando la tormenta destruye los ensueños.
GIRONES DE SOL
Te extraviaste
en el valle de las sombras.
Receloso marchaste entre guijarros.
Pero insuflaste
la nobleza en tu alma
-disipada entre sargazos,
en ciénaga
infestada de lagartos-.
Tu tálamo manchado de cieno,
pletórico de insectos devoradores de madera,
El olor a canela llegó hasta tu reja,
aromó tu pequeño espacio.
A pesar de todo tu palabra brotó
en surtidores de espléndida poesía
Por fin llegaste al lugar
donde florecen las azaleas
y grita el pavo real.
Hoy tus versos inundan las plazas,
ruedan por el mundo,
girones de sol que todo lo iluminan.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 76
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Chile
Miguel has partido a la eternidad
Había un silencio sepulcral
que lo bañaba la luna espectral
Sonaban campanas
y la brisa llevaba los sones a pasear por el campo
Las ánimas sollosaban
y un jardín encantado nacía
Era tu jardín Miguel
que bullía de sones entre el silencio
Las avecillas cantaban
y el ocaso hacía el marco del espectáculo
La batalla había concluido
Los morteros silentes ya no asustaban
Tierra
Cielo
Sol
Estrellas
Firmamentos
nacerían de tu mano...
Se había acabado el tormento...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 77
Mil poemas a Miguel Hernández
Robert A. Goodrich V. Panamá
EL POETA DEL PUEBLO
A MIGUEL HERNÁNDEZ.
El último y el primero:
rincón para el sol más grande,
sepultura de esta vida
donde tus ojos no caben.
(Del Poema: El Último Rincón, Miguel Hernández).
Joven falleció por un crimen que no cometió
Lo dejaron allí tirado muriéndose poco a poco
y una familia sufrió por su partida.
Sólo 31 años tenía el joven poeta
Que tuvo muchos sueños e ilusiones inalcanzables
pero en el poco tiempo que vivió:
Un inmenso y enorme legado dejó.
El poeta del pueblo
el hombre humilde
el pastor sin huesos
que murió abandonado a su suerte en una oscura y lúgubre celda.
Los años pasaron y muchos aún lo recuerdan con cariño y tristeza
por sus grandes e ilustres poemas llenos de amor y dirigidos al mundo.
Cuanto, cuanto sufrió el poeta
El joven ser humano en una celda oscura y tenebrosa de una neumonía mal tratada
Murió.
Hoy te recordamos todos con cariño y admiración sincera
Poeta humilde, poeta joven, poeta del pueblo
Ilustre y grande: Miguel Hernández.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 78
Mil poemas a Miguel Hernández
EL CAMINO DEL PASTOR-POETA
Por los caminos ya sin flores
Camina el joven poeta como un fantasma
Entre vivos y muertos.
Su gente lo llora y lo aclama
Al pastor sin huesos
Al pastor poeta.
Y todos recordamos sus bellos poemas
Poemas escritos con el corazón en la mano.
Y es que el poeta camino por duros senderos
Entre guerras, pobreza y poesía.
El Pastor y poeta ya con nosotros no se encuentra
Más su fantasma camina como un pastor sin huesos
En medio de la noche y con la luna como su guía.
Ulises Mora Ortíz, Melipilla – Chile
YO SIENTO
De lejos me vienen nostalgias
el tintinear de un cencerro
que atraviesa las puertas
y siento el viento
todo el viento de oriente
que no conozco
pero que empaña mis ojos
y cicatriza mis huesos
y siento lluvia
y siento llantos de madres y niños
arrancados de su lecho
resoplo de fusiles
aullidos espantados de perros
la sonrisa endiablada del tirano
en la mirada burlesca del esbirro
Rocinantes sin Quijotes
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 79
Mil poemas a Miguel Hernández
que galopan desbocados
hacía las aguas oscuras del destierro
alaridos de cárceles
muertes desgarradas
oraciones que cruzan en secreto
los balcones
y cantos desangrados
que caen al vacío
entre el frío y el fuego...
Yo siento
yo siento los versos de Hernández
agitarse en mi pecho.
Maia de Melo Lopo, Lisboa/Portugal
MURMÚRIO DE POETA
Ai, ai, se foste sol me liberto e sem conseguir ser livre te escrevo,
Miguel Hernández, a liberdade não é livre, tem ditadura e exilada vigia.
Se foste sol eu sou mi, ainda serei cadáver e haverão flores na janela da alegria,
passarei na gaiola da morte delirante, por onde tu passaste,
na dança rodopiaram teus pés descalços, pastor com sapatos subterrados,
em terra profunda o raio arrancou-te a pele, céus em chamas fulminados,
tu, belo desnutrido, revoltado sofrido, tempos, memórias enterraste,
homens presos em frios metais, loucos apaixonados riem aos ais,
sangue algemado, irmãos coram sobre ossos e pestes, sós, gritam pelos pais.
Ai… se foste corajoso e ré, eu fui mi, se também sou sol tu foste lá, as
novas guerras tempestuosas lá e cá surgirão nos céus Miguel, oh lá, lá.
Raízes do amor, são raízes virgens facetadas em sexos de mulheres,
carinhosa amada, teu bebé chorou, mamou leite de cebola, povo acomoda a noite, ai
o medo da solidão agarra o desconforto, come a boca sexual do amor, boca devora a
ferida do prazer, a boca do deboche mente, não cura o mal de cada língua, ignora o
silêncio que outras línguas sofrem, andou a tua na guerra à fome à míngua, saboreou
côdeas de pão fermentado na podridão, paixão do abraço, doente, laço da dor, poeta
Miguel, mataram tuas palavras no terror, violaram a falsa escória da vil glória.
Ai, jovem… se sou si, não foste mi, mas ré… tu, fá lá si dó, de dó? Dó não!
Armas unidas são vozes, cores vermelhas ou verde das flores, morrem peixes na
rede, mar fértil de riqueza, água profunda bebe a sede, que foi da luz e de ti aflito
Miguel?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 80
Mil poemas a Miguel Hernández
Nada me acalme, que foi feito de Hirohito, Jango, Franco, Hitler, Gaulle ou Palme?
Infortúnios, terra mar, Lincoln, King, Lenine, Estaline, Trotsky, Czar, Mao, Salazar?
Tantos. Escaldaram holofotes, fervores, sentenças de morte em caldeiras de
ganância, pivete do enxofre, ouro e cal, rudeza da prisão, diabos intoxicados
derramam veneno, escravizam crianças no templo da infância, amigos, chulos ricos
viram-te sem abrigo, nunca esquecerão a roda do mal, deixaram-te só, só, e só assim
poderei falar contigo.
INGLÓRIA
Inglória sem dia, sagrado anjo Hernández, brilho de estrela,
A alma é candura de coração, solitário enlouquecido se anima,
Nasce a terra em granadas, vem dentro o beijo que se beija ao vê-la,
Misericordiosa explode a bomba, celebra a noite fria, luz de amor,
Brilha dança negra, sinos vibram sem festim, gritos de morte no tambor.
Canta a neve da miragem, sobe no céu a vida na linda carruagem,
As pombas de Jesus são jóias mil, afogadas sobre humanos cisnes de ouro,
A sorte anda perdida na saudade, força brutal desliza, sagrada viagem,
Bombons dado a leões é desperdício, nas dores rosna faminto o dono,
Flautas em lagos de poesia, sopram sabedoria, fortuna no belo tesouro.
Cânticos do céu, barrigas roucas em perigo são feras ao abandono,
A tristeza de um espírito amado é doença desastrosa que geme a soluçar,
Carnuda a boca enorme do prior, ganância obediente e Franco missal, cruz no trono,
Mendigo cheio de chagas, mirra, incenso, ouro, nua morte torre da fome,
Coração de Deus é música divina, romântico esplendor acumulado no olhar.
Lar é prisão do veneno, altar sem fé e rosas, sóis de sangue no
campanário,
Espera a benção, lágrima no berço, pobre terço na guerra civil um rosário,
Blasfema a raiva da miséria, trágica, muda, agoniza a Espanha em febril dor,
Mão celestial, mais forte que o mal, castiçal sem ventura, bondade é doçura,
Inglória sem dia, triunfal tristeza, imaculado calvário, destruição, infeliz amor.
Yalitza Rondón, Venezuela
SIGUES DESPERTANDO SUEÑOS
Poeta de sangre justa
cabalgador de desdenes y penurias
no amansado como cabra de corral,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 81
Mil poemas a Miguel Hernández
tras rejas tormentosas
vence hierros, con poemas.
Sentir de las aves mañaneras
sin apagar trinar cautivo,
le acecha la muerte quitando cueros y
en ojos de lucero marcha al rumbo eterno
la cebolla ,la llorona nunca
aliñó consuelos
fusiles deletreados
dando la guerra al imperio
al cobarde que ha investido pisoteando
las proclamas
,discursos sin papel bueno;
ojos en vigilia peregrina dan fuerza al poeta nuevo
azuzando al lebrel , al guardián de su poesía
niega dejarte en silencio
toma tu voz en los versos como acuarela en un lienzo
te envovolvió el quijote aquel para que fueras al yermo
entrando con Kafka,. Lewis,con Manrique , García Lorca
con Neruda y Andrés Bello
a escribir desde el umbral de un humilde cementerio
con epitafios desiertos
los ángeles gozan al escuchar de tus destierros,
enseña a mi hermano bueno a rimar sólo aplaudiendo
a declamar tus cantares por allá en tus linderos
que aquí en la tierra estoy yo
para repetir tus versos .
Deja mi puesto vacio para que seas mi maestro
cuando tenga que marchar
a ese plano de misterio
como llamar tu poesía
la del mundo de los muertos
que habla al oído del vivo
acelera su pecho dictando versos
que no son un homenaje
sino tu pluma escribiendo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 82
Mil poemas a Miguel Hernández
Carlos Fidel Borjas Diaz, Perú
SI ME LLAMARA………
SI ME LLAMARA MIGUEL
LE PEDIRIA AL PRINCIPE DE PAZ
QUE ME GUIE A HACER UN VERSO
QUE HAGA HABLAR AL PAPEL,
COMO LO HACE EL VIENTO, COMO LO HIZO EL.
SI ME LLAMARA MIGUEL,
PEDIRIA PERMISO A LA PLUMA
PARA QUE GUIE MI MANO CON MAESTRIA,
COMO ESCRIBIA HERNANDEZ,
CON RUMBO A LA POESIA.
ALLI, EN DONDE ROMANCEROS AGUARDAN
ME CONFORMO CON MODESTO INTENTO
DE EMULAR DE TU EXPERIENCIA
TU LUCHA Y TU NOBLE INTENTO,
CON FENOLL Y LA ELEGIA.
CULMINARE DE MI AFAN, MI FANTASIA,
CAMNINARE MAGINARIO VERSO, EN SENCILLA PROSA,
SENTIDA POESIA, DE QUIEN TE VE,
DE QUIEN TE ESCRIBE, DE QUIEN TE HA VISTO
HERNANDEZ, CAMINO DE LA AUSENCIA
LARGO PERGAMINO EN LA EXISTENCIA
VIENTO EN EL PUEBLO QUE TE VIERA NACER
SI ME LLAMARA MIGUEL, PARA SENTARME EN TU ESTANCIA
PASTOR DE CABRAS Y DE LAS LETRAS.
QUE VUELEN CON EL VIENTO LOS PENSARES
DE LOS QUE CLAMAN JUSTICIA
CON LOS VERSOS QUE ESENCIA GUARDAN
DONDE LIBERAN LOS OPRIMIDOS
EL SILENCIO DE LOS DADOS POR AFLIGIDOS
PAZ Y JUSTICIA, PASTOR DE OBEJAS Y DE LAS LETRAS
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 83
Mil poemas a Miguel Hernández
Joel Francisco Bustos Tello, Ecuador
LOOR A MIGUEL HERNANDEZ
Mi gran amigo sí, compañero, del verso pastor
entonando el viento tu canto
al hombre del pueblo le diste valor
y al poderoso le llego el espanto.
Postraron tus fuerzas, hasta aniquilar
como sea te tenían que desaparecer
Pero tus ideas sabían ya volar
fatuos, para la libertad no existe el anochecer.
Luchando contra mentes de papel
contra un corazón arrullado por las penas
del trago que no paso, por el hijo que se llevó él
penas, más punzantes cuando son ajenas.
El sol no sea ocultado
no se han ido las flores, ni las alondras, vez.
tu puño sigue cerrado por el mundo.
Tú, eres ese escudo Miguel Hernández.
Julio Alberto Albarracin, Argentina
“Me llamaste Miguel”
Me llamaste, aquí estoy
No te despertare de tu sueño
eterno.
El mensaje del mortal
es río caudaloso
que todos los días
humedecen el latir
del corazón.
No hay guerra que justifique
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 84
Mil poemas a Miguel Hernández
los llantos de los cándidos,
no hay cadenas, ni tortura
que silencie el pensamiento)
Tú, en tus versos lo dices:
“No, no hay cárcel para el hombre.
No podrán atarme. No.
Este mundo de cadenas
me es pequeño y exterior.
¿Quién encierra una sonrisa?
¿Quién amuralla una voz?
A lo lejos tú, más sola”
Miguel Hernández
Me llamaste, aquí estoy
entre miles de versos
realizando tu misión mortal.
Eterno, hacer de ellos un coro
para la noble justicia, justicia.
Entregaste tu substancia,
estas entre los señalados,
al presente eres eco de la sabiduría,
de los caracteres
para una vida libre.
Gladys Quiroz Carcher, Melipilla – Chile
PARA QUE NUNCA EL OLVIDO
Por no conocer tu historia
me he sentido avergonzada,
por no leer tus poemas
que trae el viento de España
llevo cien puñales rotos
clavados en la garganta
y un agüacero de guindas
ha coloreado mi cara.
Sólo escuché una canción
que alguna vez entonara
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 85
Mil poemas a Miguel Hernández
y hoy me sorprenden tus versos
que hablan de niños yunteros
y de desiertas abarcas
y me he dejado llevar
sumergida en el oleaje
verde-azul de tus palabras.
¡Tanta lucha, tantos sueños,
tanta esperanza y porfía!
¡Tanta vida en pocos años
y pocos años de vida!
Y un corazón que en el pecho
dificilmente cabía.
Voy a hacerte un juramento
que jamás se borrará,
he marcado entre mis sienes
tu nombre: Miguel Hernández
¡para que nunca el olvido
logre que pueda olvidarte!
Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz” Guatemala
Décima Espinel
Que no preocupe amigo ese instante
pues por poeta ya eres inmortal
si bien es cierto, el momento fatal…
llegará, con la musa relevante.
Si llegamos con los pies por delante
tampoco se enmudecerá la lira
y siempreviva es la letra que inspira
dejando entre cenizas sepultado
el valor adquirido y heredado
aunque tal Juglar este en una pira.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 86
Mil poemas a Miguel Hernández
Elizabeth Ramos Araya, Melipilla – Chile
EL VUELO AZUL DE MIGUEL HERNÁNDEZ
Miguel Hernández, el poeta
que transita desde el horror
de la guerra y la injusticia
al compromiso con el desheredado.
En sus huesos el grito del pobre
que ni la misma muerte
pudo matar en sus ojos,
ni abatir en su lira telúrica.
Pastoreando sueños poblados de versos,
en un viento azul que corre por las venas
de un pueblo que se resiste
a mirar por los ojos del fusil
que otea desde la muerte.
Hinojos y azahares
acompañaron su camino,
su mirada hecha para contemplar
el pecho abierto de la pena,
de la iniquidad,
de la iracundia del tirano,
que a la postre logró rendir
el dominio externo de la vida,
mas, no un espíritu
que gritó más alto
por los que no tienen voz.
Aunque su cuerpo prisionero
por la sin razón ,
su pasión, su verdad
abrieron las alas
y remontaron el vuelo
hasta enamorar la luna
que le seguirá brindando
la luz de los vates.
Ya no más sombras,
sólo el albor del recuerdo
del inmortal que deja huellas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 87
Mil poemas a Miguel Hernández
Byron Picado Molina, Nicaragua
Pastor de luz, siempre poeta
Miguel Hernández Gilabert viniste en Orihuela para jamás morir,
en Valencia de la eternidad, luchas por un mundo mejor.
Hoy te he visto optimista y sonriente por el hombre,
por la vida y mujer, por la naturaleza y sus rebaños.
Aún se posan sinrazones en el rostro del mundo,
coletazos de furia que pretenden hacernos claudicar
pero nunca podrán, nunca más nunca pues hemos despertado
y más organizados preparamos liberación total.
Pero el ¨ rayo no cesa ¨ y en ¨ teatro de guerra ¨ marchamos labradores,
purificamos aire, cultivamos el trigo y las cebollas
para destruir los calabozos.
Miguel Hernández Gilabert viniste en Orihuela para jamás morir,
siempre vamos contigo a desterrar las sombras de la cárcel mortal.
Argenis Díaz, Venezuela
Poeta de Orihuela
A Miguel Hernández
Poeta de rayo y de luz
pastor de cabras de estrellas
en la vigilia de la madrugada
tu verso se enciende como la luna
tu poesía vegetal y animal
humana de aliento terrenal convida.
Tu poesía de pájaros
desprovistos de silencio
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 88
Mil poemas a Miguel Hernández
del frío sideral de los amaneceres
desciende
voz de España
madre de tantos poetas celestes
como Juan de Yepes
el místico de Ontiveros.
Oigo las caracolas
siento las hachas
estridentes
en el bosque de tu poesía
tu palabra de poeta juvenil
de boca cósmica
labios de tierra y agua.
Presiento arrullo de rejas
donde vierten llanto los inocentes
cadenas del irreverente que fuiste
en faena de dolor
poeta de los pobres que esperan
un cielo mejor sobre la tierra.
Alfred Asís, Chile
Eres mi tarea…
Me dijiste:
Siembra el campo
aclara el día
inunda el vergel
baila con tu amada por los prados…
Sentiré:
Esas caricias
la cosecha
la luz
me alimentaré del vergel…
Pues, mi espíritu está vivo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 89
Mil poemas a Miguel Hernández
quiero tomar en mis brazos a mi amada Josefina
abrazar a mis hijos y decirles:
vuestro padre estará junto a ustedes hasta la eternidad…
Y decirle a mi amada:
mis besos te recorrerán en toda tu magnitud…
Y decirle a mi pueblo… ¡gritarle a mi pueblo!
que amo a mi España…
Que no han logrado separar mi patria de mi corazón
Que palpita fuerte en las mentes de poetas
del nuevo tiempo, mi renacer de entre las cenizas…
¡Ya no son simples fotografías!
No les quiero inertes
luchen por sus ideales hasta la muerte…
Dimitar Kostadinov – Burgas, Bulgaria
ПРЕЖИВЯНА ОДИСЕЯ
На Мигел ЕРНАНДЕС
Мълния… И гръм след нея.
И се сипе Одисея…
Гръм…А тътенът – протяжен…
Ех, небето ли е важно,
любовта ли в тъмни нощи?!
Еква гръм със чувства мощни!
Радост ли дъждът излива
над съня ни и над ниви?!
…Ангелите вече могат
нежно да си шепнат с Бога!
Дъжд земята е залял –
еква стръмен идеал!
…Слънцето над нас се смее –
с преживяна Одисея.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 90
Mil poemas a Miguel Hernández
Deth Haak, Natal- Brasil
“ A Poetisa dos Ventos”
Cônsul Poeta Del Mundo
Rito fecundo
O vento a soprar, envolve o sacrário,
Acercando a obra evocando a missão
Luz rompida das grades na inspiração
Pelos campos arados de cardo vário...
Relampejam nuvens na contestação
E avessa clave, valora o humanitário;
Semeia esse pleito sola o campanário
Rumando ao templário jaz a ovação.
Regaremos seu horto oh! Estrela guia
Poeta do povo hei de cantá-lo afinando
As libertárias vozes na regência do dia.
Elevo no ocaso o pátrio cálice brindando
Á Miguel Hernández na excelsa harmonia,
Poetas Del Mundo saúdam a ele cantando!
Como se aroma de azeite derramado
Exala a saudade cumulando no tempo
Os fios de aranhas tecidos no passado
Entre as Palmeiras folheada ao vento.
Febris sombras de horizonte esvaziado
Ocupam sucos as lágrimas de lamento
Bruma dos astros os sonhos no telhado
Combatendo a chuva à ruína dos prados
E o calar dos pássaros rumo à sepultura...
E por sobre os ossos a romper os fardos
Espreme o alvor de o rocio sem clausura
Limões azedos na premonição do Bardo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 91
Mil poemas a Miguel Hernández
Urgência
Exilados da pátria valoram seu chão
Atendendo a nota de o airoso poeta
Abaixo dos signos a criação decreta
Um basta aos caudilhos da revolução.
Gemendo no cárcere do outro plano
As aparições feridas sangrando ainda
Pelos sonhos estilhaçados de doridos
A urdida miséria de uma fria guerra.
E a musa que volita sobre os ossos
Consola com seus versos o poeta
E pelas nuvens noturnais sombrias
Pranteia a arvore prenhe de folhas.
Chagas que o século não cicatrizou
Purulentas, a desgraça inda macula;
Pelos vergéis da poesia que afigura
À solidão das formigas que versou...
Livre de cargas e opressões caóticas
Impondo a pena convocando a luta
Murmura a erva e em versos imputa
Deus tudo vê pelas fendas históricas.
Como as raízes na aridez dos campos
Aleitando as cabras a luz da escuridão
Frutados caules lançados na erudição
O poeta do povo inspirando a tantos!
Mercedes Dembo Barcessat, Australia
ANTOLOGIA A MIGUEL HERNANDEZ
JUVENTUD
Se acerca porte erecto
triunfante,
¿de donde vienes? Pregunto
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 92
Mil poemas a Miguel Hernández
de cazar el aire me dice,
es su boca amapola;
y en la mía deposita rubís .
En el estiércol nos amamos,
bebiendo leche de cabra;
se asoma la luna discreta;
sonrisa en el rabillo
viste tirabuzón la noche.
DE TOROS Y TOREROS
Toreando con la pluma
con atuendos de oro y rojo,
todo cubierto de bruma
se escurre por el cerrojo..
BLANCA HASTA LOS PIES
Mis ojos solo ven esa blancura,
de nácar y jazmines son tus pies
cuélgate a mi tallo en palmas de olés;
se enredan en tu cimbrada cintura.
Desvanezco frente tanta hermosura,
y te infiltro bailando a puntapiés,
y aspiras la sabia de este ciprés,
envueltos los dos en suave ternura.
Las sábanas de arena huelen a nardos,
cubierta de espuma lames las uvas;
mientras aliso tus hilos de seda.
La noche salpica al compás de este bardo,
fervor de sangre destila la tuba;
duermen corazones en la arboleda.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 93
Mil poemas a Miguel Hernández
Carlos Oraá, Venezuela
Al poeta Miguel Hernández
Tu cuerpo fue amalgama
de pasto, tierra y agua
que se formó en la fragua
del sentir de la gente.
Maestro de las formas
que expresas lo que sientes,
tu corazón es la horma
donde el pueblo vació
avatares y angustias;
tu verso fue la voz
que abonó a la esperanza.
Tu verso vence al tiempo...
se expande, y lo alcanza;
cuando digo tus versos
haces tuya mi voz.
Sigues tocando el alma
con la mano de Dios.
"... antes que la sequía lo consuma
el barro ha de volverte de lo mismo".
Raquel Rueda Bohórquez, Colombia
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Quisiera iniciar el pastoreo
Sobre los pequeños cerros
Donde las cabras balaban contentas
Y con tus libros en la mano te entusiasmabas…
Ojos hambrientos y mente abierta
Aprendiendo con los golpes de la vida
Releyendo versos para entibiar tu corazón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 94
Mil poemas a Miguel Hernández
Cuántas nanas de la cebolla entristecidas…
Aún en estos difíciles tiempos,
Donde la miseria se acompaña de lluvia salobre
Y el pan escasea tanto que las tripas se resecan,
Convirtiendo la vida en un martirio,
Con la boca sedienta siempre de besos
Y el cuerpo hambriento de caricias…
Aún la cebolla es bienaventurada
Y la sal dando sabor a la vida…
Con ese caldo de lunas blancas,
Como el pan nuestro de cada día
En días aciagos que todos solemos tener.
Aquí vamos… sembrando senderos de amor
Recordándote aún a pesar del tiempo…
Las generaciones venideras sabrán que aquí
En Orihuela… aún pastan los chivos de monte
Y se engorda el ganado con los mismos verdores
Que iluminaron tus ojos.
CAMINANTES/
Miguel Hernández
Curtidos pies llevan los caminantes
Es pesado el andar, denso y rocoso
Fuertes marejadas nos sacuden
Látigos arrogantes abren sendas heridas
Donde ayer sólo calzaban escarpines blancos.
En el camino, cuando los sueños nos topen
Bajo un inmenso árbol sin nombre
Con sus ramas tan frescas…
Allí cuando cansados de vagar estemos
Sin una reja ni una cadena que nos azote…
Pensaré en ti, cubierta de tu piel morena
Con ese ardor de palmeras al mecer la brisa
Oliendo los caldos que la vida nos cocina
Con el sabor del sudor de tu piel sobre mis labios.
Espera un poco… ¡tal vez no demore tanto…!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 95
Mil poemas a Miguel Hernández
Ha sido larga la travesía… fiebre alta me consume
Elevo la mirada atardecida ausente de amor
Refugiándome en los brazos de la poesía.
Miguel sólo observa con su habitual mutismo…
El ardiente sol parece que lo tomara,
Cuando un lucero resplandeciente en el ocaso,
Dice que no andará más éstos senderos.
¡Quedó la fantasía de la vida…!
Los cerros imponentes tienen tu olor,
Y el canto de un ave cualquiera que viaja aprisa
Me contará historias de caminantes del ayer,
Donde tus ojos negros esperarán los míos
Y mi boca nunca morirá de sed.
Marden Nóchez, Honduras, El Salvador
Cabrero Ruiseñor
Evocar a Miguel Hernández,
que murió en las tinieblas,
de una triste prisión… franquista.
Evocar a Miguel Hernández, digo,
y recordarlo a la luz de la ternura,
es una obligación de la magia del amor,
es compromiso del plectro universal.
Poeta mártir de la dormida Orihuela
trovador de colmenas de sangre y oro
de nostalgias y angustias de mazmorra
que un tirano confinó a las sombras.
Nos toca ahora expatriarlo del olvido cruel
para tallarlo en el corazón del mundo
y en las entrañas de la Alicante ancestral
que lo revelen, como un dios inmortal.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 96
Mil poemas a Miguel Hernández
Juglar del quinto regimiento republicano
malabarista de versos engarzados en nostalgias
Aún estás aquí con los luchadores de siempre.
El hombre poeta rebelde…
acecha en la luz y en la sombra,
en romanceros de ausencias
y en las Nanas de la cebolla;
porque el rayo no cesa en el Mediterráneo…
montado en el viento del pueblo
del cabrero y ruiseñor poeta alicantino.
No pudieron cerrarte los ojos el 30 de marzo…
y aún vigilas desde la luminosa sierra oriolana.
Poeta Manantial
Poeta guitarra, poeta manantial
poeta del pueblo… de la eternidad.
Tu voz resuena en los ecos republicanos
tu voz es el viento del pueblo…
luz derramada ante la sombra.
Tu poesía de guerra busca la paz
en cada trinchera miliciana,
blandiendo un estandarte de luz
para desterrar las sombras para siempre.
Miguel Hernández mostró,
con su vida y su obra,
que la poesía no está hecha solo de palabras…
que la poesía es sangre embriagante
para no olvidarlo jamás.
Varias veces morimos en la vida
pero la poesía es eterna, no muere…
consecuentemente los poetas no mueren
por lo tanto Miguel Hernández aún vive…
Poeta de nosotros, poeta de España
poeta de la humanidad…
Poeta guitarra, poeta manantial.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 97
Mil poemas a Miguel Hernández
Hernán Dufey, Ginebra – Suiza
El poeta de Orihuela
Perfumada por los aromas
de los limones y las naranjas.
donde crecían los almendros
y daban sombra las palmeras
Ahí nació un poeta y sus poemas
en Orihuela ciudad valenciana
Miguel Hernández es su nombre
sus poemas lo cantan los trovadores
y los recitan los poetas y artistas
y algún bohemio en las cantinas.
.
Lo privaron de la libertad
y lo alejaron de su familia.
Pero detrás de las rejas
igual escribió su poesía.
La cárcel y las torturas recibidas,
por defender lo que eran sus ideales
lo llevaron a una cruel enfermedad
y a los brazos de la siniestra muerte.
Murió en Alicante sin poder envejecer
ni ver la mar y tampoco la libertad.
Miguel volvió a nacer, no en Orihuela
sino en las almas de los poetas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 98
Mil poemas a Miguel Hernández
José Hilton Rosa, Brasil
“Miguel Hernández”
Versos autênticos
Um compromisso com seu povo
Com o pastoreio fez seu passadio
Fazendo de suas poesias sua arma na guerra
"El niño yuntero"
“El hombre acecha”
Um soldado na guerra
Falando com o tempo
Sofrendo os raios do ódio falso
Humilde ser companheiro
Solto pelo vento
Um sonho real
Um grito aos deserdados
Um choro não ouvido
Um pecado por ser homem
Condenado por nenhum feito, apenas a guerra
Tendo a morte como companheira de prisão
Solitária dor.
“Miguel Hernández”
Num acanhado pedaço de terra
Floresceu uma vida em primaveras
Num mistério da natureza
Rodeado de animais em pastoreio, sua beleza
Pela força de sua vontade
Com talento e humildade
Tendo os livros como companheiros
Espelhando os grandes mestres dos versos
Nascem e germinam sua expressão pela poesia
Passifica-se sem heresia, sua criação
Seu nome, alvejado em versos
Como um infante varonil
Lutou pela pátria que o levou ao cárcere
Com aguda tuberculose é colocado em liberdade
Para que se deitasse ao leito da terra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 99
Mil poemas a Miguel Hernández
Jovem poeta, infante lutador
Pela sua poesia pode ser lembrado como doutor
Cultuado pela vontade de um povo
Homenagem em versos, é ovacionado.
Antonio Gómez Hueso, España
ELEGÍA A MIGUEL HERNÁNDEZ
(En Alicante, ni su pueblo ni el mío,
se murió aquel rayo, Miguel Hernández,
quien tanto quería)
Yo quiero ser llorando el prisionero
de la celda que ennobleces y habitas,
compañero del tiempo, tan sincero.
Alimentando ilusiones y cuitas,
deshojando poemas y esperanzas,
vas consumiendo las horas marchitas
mientras fluyen, locas, las añoranzas.
Tanta injusticia se agolpa a tu lado
que todo lo veo con desconfianza.
Un abrazo tierno, un beso honrado,
un llanto amargo es mi único consuelo,
un furioso vendaval te ha llevado.
No hay dolor más grande que el de mi duelo,
sufro mi amargura y tu cruel ausencia
y siento más tu tumba que mi suelo.
Camino protegido por tu influencia,
teniéndote presente, sin tenerte,
llevo en mi corazón esta dolencia.
Temprano te llegó la mala muerte,
temprano se cerró la madrugada,
temprano se fue el daño sin vencerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 100
Mil poemas a Miguel Hernández
No perdono a la guerra despiadada,
no perdono a tus viles delatores,
no perdono al destino ni a la nada.
En mi mente oigo llantos de pastores,
un río de lágrimas de poetas,
hombres y mujeres, tus bienhechores.
Quiero entrar en la tierra por las grietas,
quiero buscar tus restos y encontrarte,
hasta ver tu semblante entre siluetas.
Quiero escarbarlo todo hasta abrazarte
y besar tu renacida figura,
protegerte, mirarte y despertarte.
Volverás al monte y a la llanura;
por las orillas frescas del torrente,
llevarás en tu cuerpo la hermosura
de las inquietas aguas de la fuente.
Volverás a los campos de tu tierra,
con tu mujer, tus hijos y tu gente.
Guiarás a tu rebaño por la sierra,
contigo mi alma reluce y asciende,
la feroz pesadilla escapa y yerra.
Tu voz amable todo lo comprende,
alivio de las ovejas miedosas,
que a las cabras reconduce y atiende.
Frente al arroyo de orillas brumosas.
con la sombra del chopo de testigo,
hablaremos de todas nuestras cosas,
amigo de desventuras, amigo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 101
Mil poemas a Miguel Hernández
Luis Rafael Figuera Fuentes, Barcelona-Anzoátegui-Venezuela
NOTICIA
Hoy supe de tu muerte... Con hastío
escribo tu nombre en la corteza
del árbol, en la piedra junto al río,
y en el agua monótona que reza.
El presagio de la muerte me tropieza
constante, melancólico y sombrío...
Lo difuso se vuelve una certeza,
la noticia sorprende con su envío...
Aquí, todo termina y todo empieza.
Hoy supe de tu muerte y sentí el frío
helarme el corazón y la cabeza.
Lanzo esta interrogante hacia el vacío:
¿Quién pudiera quitarme esta tristeza?
Compañero del alma, amigo mío...
TRIBUTO
Ni lágrimas ni flores... Solo traje
para rendir tributo a tu memoria,
recuerdos fragmentados de una historia
que está escrita en el rostro del paisaje.
Compañero del alma... Un largo viaje
-(La muerte no ha dejado escapatoria,
y te emplaza a seguir su trayectoria)sin adiós, sin retorno ni equipaje.
En la España aguerrida y consecuente,
tu espíritu de lucha está presente
iluminando tu agreste poesía...
A la tierra volvió tu vida agraria,
y en forma de soneto o de plegaria
te escribo sin querer esta elegía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 102
Mil poemas a Miguel Hernández
ELEGÍA
España, para ti claveles rojos,
la sangre derramada en tu agonía;
ayer la guerra enlutó tu poesía,
Miguel murió, entre muros y cerrojos.
Poeta, la celda, el llanto, los abrojos,
no endureció el cristal de tu alegría,
el rayo que no cesa, todavía
ilumina la gracia de tus ojos...
Pastor de cabras, estrella y universo,
donde pasta el rebaño de tu verso,
y el pájaro del canto trina y vuela.
Hoy quisiera olvidar estas palabras,
y perderme contigo y con tus cabras,
por los campos floridos de Orihuela.
CENTENARIO
Miguel Hernández, poeta centenario;
amalgamado en nubes y desiertos,
en este mundo real e imaginario,
sociedad entre vivos y los muertos.
El sueño divisor extraordinario,
noches, pentagramas y conciertos;
cantos y cuentos, cruces y calvarios,
la soledad, leyenda de los puertos.
Y de nuevo fechas, calendarios,
conjugando pasado con presente;
el verbo se hace carne de sicarios.
Vociferan demonios sedentarios;
el poeta, miliciano combatiente
de chacales y lobos esteparios...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 103
Mil poemas a Miguel Hernández
Juan Fran Núñez Parreño, España
A Miguel Hernández
Mi querido compañero Miguel,
el más admirado, del pueblo, poeta,
tus ideas y principios son meta
para el ser que habita bajo mi piel.
Ejemplo del compromiso más fiel,
ejemplo de una lucha justa y neta,
con tus palabras de la a a la zeta
nos mostraste una vida en el papel.
Luchador modelo republicano,
modelo de camarada y hermano,
miliciano del Quinto Regimiento
de corazón, honor y sentimiento.
La hiel fascista te quitó la vida,
pero tu obra en nuestra alma está prendida.
(Acróstico)
Es
Magistral.
Idealista.
Generoso.
Universal.
Español.
Libre.
Honorable.
Ejemplar.
Republicano.
Nuestro,
Admirable.
Novedoso.
Divino.
Eterno.
Zafiro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 104
Mil poemas a Miguel Hernández
Mariluz González Hidalgo, España
Al viento - a Miguel Hernández
Con la muerte apagaron tu vida,
tu futuro, tu presente,
pero nunca tu voz
ni tu semilla.
Fue la muerte el mejor amplificador
de tus versos
el abono inmaculado
para tu semilla
esparcida por el viento del pueblo,
para todos los pueblos.
Quienes quisieron tu muerte
han hecho de ti un poeta libre
vivo en el pueblo para siempre.
Quienes callaron tu lamento
dieron voz al hambre y la guerra
al amor y la amistad en duelo,
al hijo y a la madre... a la tierra.
Contigo, siempre volvemos a la tierra.
Te quisieron muerto, en silencio
entre barrotes –enfermo, sin voz y muerto.
Pero, dime Miguel:
¿quién puede poner alambradas al viento?
Raúl Garcés Redondo, España
Tú
Otros se marcharon.
Tú decidiste quedarte.
Otros tomaron aviones, trenes, barcos.
Tú tomaste el fusil.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 105
Mil poemas a Miguel Hernández
Otros vivieron en el exilio.
Tú sucumbiste en una cárcel.
Otros caerán en el olvido.
Tú serás recordado
Por siempre.
Eric Cobas, Cuba
“No sé ahora que hacer”
A: Miguel Hernández
No sé ahora que hacer
Miguel con todo tu verso.
Se me entrecruza confieso
Con el hoy que puedo ver,
Y sin pensarlo, a correr
Se echa tu rebeldía
de pastor , tu valentía
no deja espacio a la duda
y aunque el cuerpo todo suda
de escudo va tu osadía.
No sé ahora que decir
En tardes de puro verde
Cuando el viento no entiende
De como a tu pena ir.
Luchando más que vivir
Se erige el árbol talado,
Y la prisión no ha bastado
Para ahogar tu garganta
La injusticia se atraganta
En tu andar elevado.
No sé, repito perplejo
Y me bebo tu Elegía
Condeno la cobardía
De asesinos y no cejo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 106
Mil poemas a Miguel Hernández
Aunque a veces el espejo
Me devuelve la codicia.
Me someto a la requicia
De tus recursos en verso
de tus acciones y rezo
para alcanzar la justicia.
No sé ahora que hacer
Miguel Hernández te digo
Ahora que eres ombligo
De la lucha ,a vencer.
Creo que debo tejer
Banderas con tu idea
Bayonetas en la aldea
Con jornaleros marchando
Para que siempre esté al mando
Tu verso dando pelea.
“Anda con prisa “
A: Miguel Hernández
Anda con prisa Hernández
Que la península apremia.
Anda, que el pueblo premia
Tu verso, tu sencillez.
Anda con prisa Miguel
De Orihuela al mundo
Anda que no eres segundo
Jamás en este vergel.
Anda con el verde mayo
Con tardes de puro verde,
Anda que la vida entiende
Tu verso como de rayo.
Canta el diez del novecientos
A la lluvia, a la flor.
Canta por tantos momentos
De lucha, verso y amor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 107
Mil poemas a Miguel Hernández
Llora el cuarenta y dos
Del mismo siglo convulso,
porque en prisión tu voz
De un golpe apagó tu pulso.
Por suerte estas en el viento
En el amor, las guitarras
En el bosque, las cigarras
En el huerto cual sustento.
Miguel Hernández, que andes
te imploro, te ordeno
Te sugiero y no perdono
Que estés quieto, que no andes
Anda con prisa Hernández
Con la esperanza a cuesta
Anda que en esta apuesta
Tú ganas, Miguel Hernández.
“Me duele”
A: Miguel Hernández
Me duele hoy más tu muerte
que mi vida sin porfía.
Me hierve la osadía,
tú corta vida sin suerte.
me duele también no verte
en las calles de Orihuela,
corriendo o en parihuela
defendiendo el derecho
de tu pueblo que de hecho
ya es parte de tu zarzuela.
Me duele el no encontrarte
Para beber de tu sabia.
Me duele la tanta rabia
De tu partida sin parte.
Me revienta el que reparte
Sin contar al jornalero
Y se para en el alero
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 108
Mil poemas a Miguel Hernández
del sentimiento, del verso
disfrazado de converso
sin esperanza, entero.
Me duelen las tres heridas
Las mismas que tú nombraste.
Me duele lo que dejaste,
Tus palabras aun temidas,
Tus sombras nunca rendidas
Tus sueños de otro mar.
Me duele tanto penar
Tanta batalla sin paz,
Me duele todo el haz
de tu cuerpo al luchar.
Me duele Miguel, me duele
Lo repito hasta el cansancio
Derribo cualquier palacio
Con un grito y me duele,
El sueño también me duele
El no verte en mi portal
El olivo, el arrozal
Las cabras en algún cerro
La guitarra, el cencerro
Me duele hasta el pastizal.
Raquel Fernández, Argentina
MIGUEL
A Miguel Hernández
Miguel, barro y arcilla,
tempestad y aguacero,
el poeta más noble
que dio la dulce tierra
soleada de Alicante.
Un maduro clavel
reventando en la boca
besadora de España.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 109
Mil poemas a Miguel Hernández
Sangre republicana
y pluma bendecida.
La muerte no ha podido
cerrar tus sabios ojos.
Muerto de ojos abiertos
temblando en los caminos
bajo un rayo de luna.
La muerte no ha podido
arrancarte la lengua.
Tu voz se multiplica
en la voz del poema.
Retoñas como un árbol
de savia poderosa
con la fuerza sublime
que habita en la palabra.
La muerte no ha podido
clausurarte las alas.
Vuelas por siempre libre
por el cielo de España.
Miguel, barro y arcilla,
tempestad y aguacero,
ángel de ojos abiertos
y lengua desatada.
Inés Zeiss, Viña del Mar, Chile
NO ES TARDE HOY…
No es tarde hoy.
para pastorear vocablos en tus versos
para seguir tus ayes libertarios
de amor y hierbas mezclados,
texturas de hambre, batallas y cantares.
No es tarde hoy,
para asir el vuelo del niño yuntero,
declamar junto a “Sijé”, el aroma de Orihuela
dormitar las ansias, los placeres
al compás de oriflamas y besos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 110
Mil poemas a Miguel Hernández
No es tarde hoy,
para oír tu voz de vanguardia
“Basta de remilgos y empalagos…
Y en el vientre de Orihuela
escribiente ser, de un importante notario,
a Neruda visitar entre humo y azucenas,
escuchar de rojas amapolas, el viento,
desatar la piel de los ayeres,
junto a ella:¡desangrarse!
La luz de tu Auto Sacramental
alumbra cuerpos transparentes
de trovadores, bardos, vates,
en luchas de cadenas, respuesta de metralla.
De tu prima voz, “Perito en lunas”,
el maná cae entre mis manos,
exprime la sal que hay en ellas
y dibuja este poema
en los zapatos de tu pueblo
en laureles de tu almohada
en tu mar surrealista
dinamitado de rincones y guitarras.
Son proclamas de un destino
la sed de impolutos panes.
¡Cuencas vacías, ausencias!
¡Miguel Hernández, no es tarde hoy
para besar tu río de agonía y verso!
EN EL RIO SEGURA HAY HUELLAS…
En el río Segura hay huellas, Miguel
de tus lágrimas de niño
alguna vez tu cantar, nació
en sus piedras, en sus riscos…
Tu desazón llegó en sus aguas
deshecho navegó un libro
¡hojas impresas
quebradas por gemidos!
El río Segura vive hoy
y porta tus huellas ¡cabrero!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 111
Mil poemas a Miguel Hernández
temprano conoció los versos
de manzanas y trincheras.
Gallardo torrente de Orihuela
traes de Góngora y Miró
el frutos de sus huertos
entre raíces del alba y
olor de limoneros.
Río Segura, ¡vibra Orihuela!
eres fértil herida de su sierra
palpaste el olor de una semilla
entre espinas, cabras y grietas.
Esencia de lluvia y nieve
traes los versos del cabrero
brotan entre matorrales
perseverancia de niño
golpes y sangre adolescente
instinto, sudor, metralla,
en el agua que se va, que se queda.
Fue tu sino río Segura, recibir
en tus aguas a Miguel, el cabrero
a Hernández, el oriolano
¡a Miguel Hernández
el poeta necesario!
LA PISADA DEL TIEMPO…
Tu lluvia se hizo en Madrid, otra lluvia
mojó sangre y verdades lejanas,
la pisada del tiempo certera dijo:
¡cabrero, eres poeta oriolano!
Ignorante que restañabas heridas
en cada boca, en cada espalda
en cada ojo de cicatrices maltrechas,
tu saliva brotó como granada y miel
en nanas para Manuel Miguel.
No pudiste gritar tu fuerza,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 112
Mil poemas a Miguel Hernández
la tos ahogó tus libertades,
mas tu verso, fue la respuesta
a maleza, a crueldades.
Feroces tus lágrimas,
traspasaron rejas y muros
la pisada del tiempo sentenció
¡sólo treinta y un pasos!
La sazón del tiempo
da a su lagar, la duda.
Curiosa se hace profunda
inmensa, bañada en sudor
de resplandores.
¡Vaho de fuego y timbales!
La pisada del tiempo se eleva
desde tu río, desde tu sierra
feraz viaja a confines del universo,
y reverbera tu luz
en otras aguas, en otras tierras
con entrañas desgarradas de
humo, libertad y poema…
¡La pisada del tiempo,
poeta Miguel Hernández
a veces, es incierta!
Marcos Callau, España
Llegado de otros tiempos
Recuerda
cuando la noche era insuficiente
y el día escaso.
Recuerda
cuando eras una mancha gris,
apenas definida,
paseando de la Calle Estudios a Cortesías
y bajo esa torre mudéjar de la Magdalena,
recuerda
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 113
Mil poemas a Miguel Hernández
cómo urdías todos aquellos versos
que no se debían escribir.
Solo soñabas, pero eras entonces
un cuerpo vacío
formado con rastrojos de otoño.
Solo soñabas entonces pero fuiste,
a fuerza de los golpes que otorga la vida,
la marca o señuelo al que regresar
si se bifurca el camino.
Recuerda
las horas grises
de lunas oscuras.
Si te lo hubieran preguntado entonces
no hubieras apostado
ni un gramo de vida
por la felicidad conseguida
en esta amarga ciudad cercada.
Sin embargo ahora, dichoso
y ante un café humeante en la Urbana,
anhelas, con todo lo que tienes hoy,
recuperar algo que dejaste prendido
y ahogado
en aquellos viejos tiempos aciagos.
Fernando Olivo Rivas, Villa de Cura, estado Aragua. Venezuela
Un Poema para Miguel… ¡Vaya compromiso!
La Palabra se hace presente y en su intento busca valorar al gran Poeta.
Comprende a este corazón
ola espesa de navajas
asilado en pordioseros
cubierto de certezas
pared de barbería
zaguán de escuela abandonada
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 114
Mil poemas a Miguel Hernández
o medianoche
órgano visceral de las tinieblas
acurrucado
en el temor que se le tiene a mona lisa
en la lectura del tabaco
agazapado
en un boleto
en tu respiro
convulsión de pataletas
madrugada
habítalo
así
como regazo eterno e infinito de tu nueva casa
René Aguilera Fierro, Bolivia
Potro de vientos
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Montado en potro de vientos;
el poeta cuida ganados.
anda entre versos y cabras
camino hacia la alhambra.
La amistad es sagrada,
forjada en crisoles de tinta;
Miguel Hernández es la muestra,
su voz temprana fue cantada.
Tuvo por escuela el monte
sus maestros los libros
fiel cargó sobre los hombros
su destino hasta la muerte.
Fue un toro en la arena,
entre la cruz y las migajas;
airoso salía de sus penas,
con un soplo en las orejas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 115
Mil poemas a Miguel Hernández
Entre el verso y los sables;
hay paredes de silencios,
cuando conviven, son invencibles:
cantar solo, es buen anuncio.
La patria dividida llora
la república es su norte
la sangre en poemas aflora
en cortejos de flores y muerte.
Su fuerza cabe en un puño
ideales, amores y sueños
nadie muere en el suelo
cuando se vive en el cielo.
El vencedor tiene razones
que la ley jamás conocerá,
como el cobarde que ignora,
los principios de la guerra
Miguel, tu paso por la vida
fue un sueño, un suspiro
una elegía por morada
en el verso de un disparo.
José Sánchez Hernández, Cuba
VIENTO DE PUEBLO
Compañero del alma tan temprano…
compañero del alma, compañero.
Miguel Hernández
I
Miguel, viento de pueblo, tu poesía,
el rayo que no cesa en Orihuela,
cantó en verbo de sangre dura estela
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 116
Mil poemas a Miguel Hernández
del pastor frente a un llanto de hidalguía.
Miguel, barro te llamas, en porfía
de piedras, lunas y hachas. Voz que vuela,
del esposo soldado al sol que anhela
el beso que la ausencia no escribía.
Pan y cebolla al hijo de azahares,
pena mortal que escucha de otro modo
el árbol preso al pie de un hierro vano.
Tu corazón partido en dos altares,
supo llegarnos libre codo a codo,
compañero del alma tan temprano.
II
Miguel, en la elegía de tu acento,
cargamos dulces deudas homicidas,
se alzan olivos como hondas heridas
donde el recuerdo afina su instrumento.
Miguel, que pones huesos al sustento,
huesos de espinas ciegas y esparcidas,
en el magro paisaje de otras vidas
que en ti beben relámpagos de aliento.
Rabian tus ojos de un clamor humano,
sediento en el fervor que nada espera
ni teme frente al fiel despeñadero.
Pudiste ser cantando el hortelano
del verso en la taberna de la higuera,
compañero del alma, compañero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 117
Mil poemas a Miguel Hernández
EL SIGNO DE LOS ARGONAUTAS
Para ti, poeta, que sentiste en tu aliento
la embestida brutal de las aves celestes...
Vicente Aleixandre
La tumba del poeta es un bramido,
no es Olimpo ni lenguas que se agitan.
Martí, Miguel y Dalton aún gritan
en las ramas del polvo que han herido.
A Lorca no le matan la canción
y nuevos césares su sangre escalan.
Siempre habrá nombres que el horror señalan,
como un grito desde Auschwitz a Villón.
Desnos y Maiakovski, un solo tiro
de la historia, un rasguño del poeta
contra la infamia absurda de la meta.
La tierra que le canta no es suspiro,
sino temblor y azada, fuego y vela.
Es el verso de amor que se rebela.
Mar Barrientos, México
INSTANTES DE BOLSILLO
Pequeñas cosas, cualquier momento, mínimo.
Gotas de luz para inventar en las manos estrellas de agua,
nostalgia retorcida y lluvia.
Sed en la mirada.
Labios de seda, bocados de letras en lira de amor
para voltear los deseos
y en carruseles de vientos denunciar al silencio.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 118
Mil poemas a Miguel Hernández
Aires de libertad, en papel, sombras perfumadas,
sin cesura detrás de las rejas multiplicándose beso a beso.
Gotas de música, medula del alma,
y en las venas adhiriendo a vapores su nido de recuerdos.
Alas negras, silencioso oasis,
puñados de lunas, en cascadas, la piel del poema.
Horizonte de arena desde el rincón de los huesos
golpe de tinta fresca,
trago de luna, arrullos de silencio, igual a todo y nada.
Adelfo Zarazúa Camargo, Guatemala – Suecia
Memoria de sol
Al poeta Miguel Hernández
Se prendió la mecha en el azul del cielo
en el azul, el profundo azul
y el fuego estalló
detrás de la aurora.
No es un punto sino un pájaro
que navega en el cielo azul.
Las ramas secas de los olivos se alzan
hacia el sol queriendo escribir
por la restauración del corazón.
Los pinos se arrullan por el viento.
No es un punto sino un pájaro
que dejó tirada su pluma
cuando voló hacia el cielo azul
su pluma por los cuatro vientos.
Fuiste barro, fuiste olivo,
fuiste azul de un cielo vivo
fuiste el eterno pastor
que se fue a buscar sus cabras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 119
Mil poemas a Miguel Hernández
atravesando la paz y la guerra
con su pluma de poeta
sucumbiendo batallas por el amor a los pobres.
Ayer quizás llovió sol
mañana quizás llueva sol
pero hoy se despertó el sol
para levantar y reventar la naturaleza
con todo su esplendor.
Abriste la ventana
para buscar y perseguir el día
como pájaro madrugador e impaciente.
Atrás dejaste los arbustos incendiados!
Jael Uribe, Rep. Dominicana
Ante tu luz
Yo no quiero más luz que tu cuerpo ante el mío:
claridad absoluta, transparencia redonda.
Limpidez cuya extraña, como el fondo del río...
(Miguel Hernández)
Ya no quiero más luz
que el eco blanco de tus ojos
trepidando en las sonrisas.
Ni más soles que el recuerdo
inmaculado de tu rostro esparcido en lo fragante
de la leve brisa.
Ciego soy ante la burla
cocedera de sueños que transitan
y los fantasmas taciturnos que deambulan
bajo el paso acelerado de tu paz continua.
Ya no quiero más sombra que tu luz
ni más color que el verde ojos
distendido implacable sobre la
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 120
Mil poemas a Miguel Hernández
llanura infinita.
Solo quiero los dorados arropados
bajo el cuerpo moreno de la noche
como amantes espectrales tendidos
en la hierba negra,
como anillos de ensueños fulgentes
en las miradas de los días azules
y la rima indolente de una danza que olvida.
¿Qué colores te adornan,
Negro llanto, rojo angustia, gris perdido
tras la transparencia de las cosas?
Yo no quiero más color que el rosa inocuo
del rubor de tu sangre
en las mejillas de un mañana insondable
que al naciente se duplica.
Claros son tus astros
los fulgores, la pureza,
y el calor fecundante de la sombra que colora
la piel de tus esencias.
¡Ya no quiero más llanto en las esperas!
Ni materias relucientes que me ocupen los espacios
en que faltas
tras mi ausencia.
Marlon F. Guerra Tejera, Cuba – EEUU
Voz de tiempo, sucede
Eres la medianoche: la sombra culminante
donde culmina el sueño, donde el amor culmina
MIGUEL HERNÁNDEZ
Escapado del tiempo
Nacido con la esencia campesina
de España, de Orihuela, de Alicante;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 121
Mil poemas a Miguel Hernández
fue Quijote a destiempo, caminante
que llegó para siempre, y hoy germina.
Te me escapas Miguel, Perito en lunas
que resguardan el rayo que no cesa;
pues trasciende tu voz -luz que embelesaestrofas con esencias oportunas.
Te escapas, cancionero y romancero
de ausencias, que resguardan tu sonrisa;
y te esfumas erguido entre la brisa
que eterniza tu don de caballero.
Escapado del tiempo, hombre de guerra:
pastor de cabras, versos y destinos.
Sentenciado a morir por los caminos
llega a mi alma su impronta, a mi se aferra.
Hoy te escapas de dudas cuando nombras
la esencia del orgasmo de la noche;
y vas hacia lo eterno, sin reproche,
varón que aun fragua sueños entre sombras.
Te escapas del poder, místico fuego
que barniza la fe de tus pupilas,
y fluyes entre cantos, y destilas
gestos de amor, sapiencia, y tornas luego.
Pedro Mateos Sánchez, España
Hierros y sueños
(En homenaje a Miguel Hernández)
Me duele verte amigo
con esos hierros.
Que no puedan contigo
es un consuelo.
Quiero que vueles
lejos, con ese viento
que sopla fuerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 122
Mil poemas a Miguel Hernández
Y sueñes con la casa,
el niño duerme,
su carita en la almohada,
no puede verte.
Le das un beso,
se revuelve en la cuna,
se queda quieto.
Sabe que envías nanas
desde la celda
él las oye lejanas
en duermevela.
Llegas despacio
y en sueños le susurras
por su descanso.
Tu morena mujer
que, a toda prisa,
canta al amanecer,
es por su risa.
Dulce es el canto
pues no puede llorar
por el muchacho.
Surcos en sus mejillas
ya están labrados
siendo ella una chiquilla,
con sus quebrantos.
Vive entre olivos
de troncos dilatados
y retorcidos.
Su pecho es lacerado
por una espina
hendida en su costado.
Madre dolida,
abraza al niño
lo arrulla poco a poco
entre suspiros.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 123
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Chile
¡Amigo ven conmigo!
Vamos a caminar Miguel
no nos cansaremos
subamos esa loma, ¿Qué habrá del otro lado?...
Ya sabemos amigo
antes de ver, ya sabemos lo que nos espera
eso dependerá de nuestra alma viajera
aquella que se evade de toda distancia
que atraviesa ríos y manantiales
mares y montañas
con solo el pensamiento…
¡Vamos Miguel, vamos!
sigamos el sendero
allá se ve una higuera
hemos llegado a casa de Orihuela…
Vamos a la noria Miguel
nos espera el agua fresca
luego una cazuela
y el fruto de la higuera…
Allá viene tu padre Miguel
llega recién del campo
trae el pastor la oveja hembra
que a punto de parir viene a penas…
Vamos Miguel, una letra, dos y tercera
y compuesto el verso de la primavera
nos abrazamos como hermanos
en esta bendita tierra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 124
Mil poemas a Miguel Hernández
Astrid Sofía Pedraza, Colombia
ALAS ROTAS (Homenaje
a Miquel Hernández)
Tu dolor traspasó mi piel
treinta y un año... han podido ser noventa y seis
para verter el estiércol de las vacas
sorprender a los bueyes
alimentar las cabras.
Espinas en el rosal de níveas ilusiones
desechadas por los bichos que pululan
cuando lenguas disparan luz y
encandilan conciencias vacuas.
Voz que cantó al hambre
las ausencias prematuras
con sus abarcas vacías
con sus abarcas desiertas.
Alas rotas por el coraje
ciudad dormida ¡no volarás!
encadenado estuvo tu vuelo
más no tu voz, ni tu espíritu.
En cada gota de sangre
derramada injustamente
se lee tu poesía
Es la virtud del poeta consagrado
su obra lo hace inmortal.
Arturo Barreira, Suecia
A Miguel Hernández
Enviaron tu cuerpo, tu traje
al fondo espectral de la mazmorra,
te alejaron de Orihuela, estrella
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 125
Mil poemas a Miguel Hernández
de versos desenhebrados en tu alma.
Acusado de transitar los andamios,
los bosques ancestrales,
los surcos pastorales,
de expresar en cada palabra,
en cada frase, en cada reflexión
de equidad, de amor compartido.
tu convicción de emancipación.
Te sentenciaron al silencio desbocado
de las botas pusilánimes beocias
en esa España, cruelmente denigrada.
Te levantaste desde la profundidad secular
De la agonía constreñida,
Para seguir sembrando en los tiempos
Una epístola cósmica al albedrío
Nuestros ojos, nuestra voz,
debe ser una extensión inagotable,
de lontananzas a lontananzas
de recónditos apóstoles universales
para refugiar, diseminar Miguel,
tu mensaje de cereales ,
de aspiraciones proyectadas
en el corazón invicto
de los hombres bondadosos
del planeta.
María Teresa González, Cuba
Vientos del pueblo me llevan, vientos del pueblo me arrastran
Me esparcen el corazón y me avientan la garganta.
Miguel Hernández
Campanas en dos Tiempos
Sentada en mi carpa, al norte,
escribo, Miguel, mis versos
y rememoro reversos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 126
Mil poemas a Miguel Hernández
de tu encierro, y de tu aporte.
Busco tu Sierra Oriolana
tan parecida a la mía
y camino día a día
con tu voz que me engalana.
Eres la estrella que enrumba
a mis cabras en su andar,
eres eterno, sin par:
el cantor que al mal derrumba.
Como eterna primavera
cubres de savia el jardín
dando paso hacia el jazmín
que se convierte en quimera.
Me estremecen esos vientos
que llegan desde Orihuela,
Miguel, hoy tu voz consuela
a mis pasos, mis intentos.
Tus versos son el trinar
que se apodera del monte,
no conozco otro sinsonte
con semejante cantar.
Alma que en sus contratiempos,
nunca dejó de brillar
y puso siempre a sonar
las campanas en dos tiempos.
Miguel hombre-luz, bondad,
esencia, palabra activa,
tu sapiencia sigue viva
en busca de la verdad.
Justina Cabral, Argentina
MOTIVO DE TU CANTO...
la tibia madrugada... las estrellas, la luna
las plantas y animales... el cielo, la laguna.
La lluvia con el viento... la brisa con su llanto
peinando los trigales... motivo de tu canto.
Un día los rosales... marchitos en tu tierra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 127
Mil poemas a Miguel Hernández
lloraron por tu muerte... sangraron por la guerra.
Motivo de tu canto... poeta de Orihuela
tu música recuerdo... aunque en el alma duela.
TU BATALLA
Honesto, trabajador
con el alma de un valiente
tu vida fue la batalla
sudor y sangre en tu frente.
Tu dolor y sufrimiento
la pena de mucha gente...
¡Así te fuiste poeta...
con la noche de repente!
MARCHITA ESPERANZA
Te descubrí una mañana
dibujando una sonrisa.
En las olas, y en la espuma
guardaste tu melodía.
Los colores de las aves
formando un aura divina
te envolvían en sus cantos
y en los cantos de la brisa...
Moldeado con sufrimiento,
de esperanzas te cubrías,
y por dormir sobre rosas
viste tu rosa marchita.
Caminaste rumbo al sol
con tus pies llenos de estigmas
pero un milagro de cristo
recreo tu maravilla.
FLAMEANTE EN TI
Vivo en ti... ¡Flameante en ti!
entre todos los poetas
y en mis estrofas y versos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 128
Mil poemas a Miguel Hernández
te revivo entre cuartetas.
Vivo en ti... ¡Flameante en ti!
como espina de tus penas…
¡Me hago carne de tu sangre
para vivir en tus venas!
Vivo en ti… ¡Flameante en ti!
al encuentro de mi esencia,
de la guerra te resguardo
del sadismo, y la violencia.
INTACTO
La luna guarda
tu dulce sueño
que brilla intacto
en lo pequeño.
Claman las flores
¡Si... poesías!
y el cielo canta
¡Tus melodías!
Una mañana
muerta de frío
graba tu rostro
en el rocío.
Estás intacto
en Orihuela
dentro del alma
de una "espinela".
Elsa Solís Molina, Argentina, España
El elegido
No todos fueron historia, ni valientes ni elegidos.
Algunos montaron barcos, huyendo hacia otros caminos....
Padres hubo que la historia de una España valerosa,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 129
Mil poemas a Miguel Hernández
no los t
uvo en su destino...
Barcos con niñatos recios, para juergas , sol y vino,
exportaron subrepticios, a cobardes mantenidos....
Por eso brilla fulgente,
la historia del elegido, junto a soldados valientes
que aceptaron su destino ....
Y el mismo Miguel relata, en alta voz y sonido,
"Aquí echaremos raíces,"·(fue su muerte y su destino)
Y es el orgullo de ESPAÑA, su valor fuerte y perenne,
"Y la muerte se sintió, orgullosa de tenerles"
Casa vacía
"Tu risa me hace libre,
me pone alas, soledades me quita, cárcel me arranca"
Miguel Hernández
Casa vacía,
paredes que el musgo ganó y siguió creciendo
dentro de dos almas separadas..
Risa que quedó vibrando entre lágrimas ocultas...
¿Será más valioso el ideal ?
¿O el amor que la risa eleva,
o el brillo de su mirada...
que solo quedó en el recuerdo de la soledad elegida?
Pero el alma, puede viajar y llevar consigo
los recuerdos mutuos que se esfuman
en el abrazo de los sueños...
Sólo detrás de los montes solitarios o entre las rejas de su celda,
percibe el brillo de sus ojos,
el perfume de sus besos,
la cárcel de su renuncia....
Y aunque su ideal lo sostiene,
Sólo la muerte, será su compañera.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 130
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
Al amigo
Fraterno dolor, grito a la tierra
que cubre los despojos del amigo
grito por esa muerte, en la eterna
quietud incomprensible del olvido
En la oscuridad fría e infecunda
del final que lo abruma y atormenta
apretando los puños a la bruma
del misterio final, llora y lamenta...
Tan fría, brutal e incomprensible
en medio del dolor que no termina
increpa , grita, llora y gime...:
¡"Y siento más tu muerte que mi vida"!
Para Miguel Hernández
Fuerza multiplicada, potente voz lanzada al viento,
inalcanzable, palabra que nacida en el grito que brota
sola, valiente inútil , desde el fondo de su alma....
Aún en la lucha , el hambre, no abandona
su intento...Y mirando el camino que llorando
despide, deja sola a su alma, su lugar , su destino
y lo cambia en destierro...Y sus manos amantes
de caricias perdidas, se aprietan con la sangre,
el sudor, las heridas, y escriben su renuncia
en la celda dormida. Cumplida la injusticia
se aquietan, juntas vagan y mueren yertas,
solas, las historias dormidas.
"Cuatro pasos y los muertos.
"Cuatro pasos y los vivos "
Miguel Hernández
Cuatro Pasos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 131
Mil poemas a Miguel Hernández
Brillan en su poesía, apasionadas propuestas de un destino marcado ¿Qué fue lo que
le hizo tener siempre tan presente a la vida como a la muerte?
Su juventud, era esperanza de libertad, amor y vida... ¿Por qué entonces tomó
decididamente el sendero que más lo acercaría a un final prematuro?
La pasión en su alma, vibró con la más bella historia de amor que el destino le
reservaba; su recuerdo fue bálsamo en momentos aciagos, forjaron a su alrededor, un
mundo de sueños, en medio de la enfermedad que se agravaba con las penurias de la
cárcel... A veces, pareciera que el destino, eligiera a ciertas vidas en la historia, para
que como árbol en medio del jardín de las penalidades, fructificaran con más
esplendor .Así, la obra literaria de Miguel Hernández, pasando por el tamiz de su
pasión y valentía, son ejemplo vigente de lo que es llegar con su palabra, al mismo
núcleo del sentir humano.
EL NIÑO
Mirada absorta del niño, hecha de hierbas y estrellas
grito universal su sino, que lo arrulla , nutre y besa
principio de su camino, principio de su condena
escuela de sol y vino desde el fondo de la sierra...
Tierra fecunda de soles, pasos calientes de arena
mientras sus ojos enormes, buscan senderos y piedras
¿Qué semilla bien sembrada, hundió en su alma la pena
que dio flores perfumadas de dolor, allí en la sierra?
Anticipo de inclementes, zarpazos de su destino
escondidas entre pliegues de aquellas nubes del cielo
luchas, renuncias dolores, ya marcaban su camino
y el niño sueño moría y nacía un hombre nuevo
Hombre valiente que lucha, apasionado que ama
tanto la mirada ausente, como el sino que fue vida
dura, valiente y perdida, pero ejemplo, luz y palma
en la batalla, en la vida y en la eterna paz de su alma.
"Cantando espero la muerte
que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas"
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 132
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
DESTINO
Vida de trabajo y sueños, guerra y amor maniatados
como buey fiel a su dueño, como recuerdo amarrado
como los ojos perdidos de aquel niño abandonado
como espíritus bravíos, que luchan esperanzados
como el hundido navío de los tesoros guardados
Así el alma de aquel niño, vivió su vida atrapado
entre su amor, lucha y sino consabido y preparado
por cruel y amargo destino y ruiseñores cantando.
La luz del amor
"Yo no quiero mas día, que el que exhala tu pecho"
Tu sangre es la mañana que jamás se termina"
Miguel Hernández
Percibo la incorruptibilidad de tu alma de niño,
dentro de un apasionado cuerpo de hombre íntegro,
genuino, fuerte.
Todo lo que emprendiste,
necesitaba de un alma,
con temple de acero,
con la fuerza que engendró en tu corazón,
la misérrima vida de los montes.
En la lucha impotente
del que no tiene nada,
forjaste los sueños mas bellos entre la batalla,
la soledad y las lágrimas ...
La fidelidad al AMOR
perfumó tus días de cárcel y lucha.
Tus amores fueron la luz de tu calvario
floreciendo en la soledad de la amarga celda
y la ausencia eterna de la luz y tu amada....
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 133
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
FUERZA
El coraje que regaba los valles y las colinas
flores nacidas del alma que alimentaba y cubría
Sangre y viento huracanado que a duras rocas vencía
lo llevaban de la mano nutriendo toda su vida.
León bravío y rebelde, grito de coraje al viento
y su corazón ardiente cobijando el sentimiento
Amor y lucha vehementes, renuncia sin un lamento
espinas, llagas y siempre, ¡ ardiendo fuego en su pecho !
(De su prisión y muerte)
De la cárcel de Sevilla, a aquel Penal de Madrid
con la muerte a sus espaldas, sin perdón vuelve a partir
La reja fiel compañera, carga y estigma sin fin,
Y en setiembre ya en Palencia y en Alicante, morir...
El niño débil y el hombre, van su destino a cumplir
la muerte por compañera, y el destino sin venir
y la oscura madrugada, también parece sufrir
y no hay cantos, y no hay trinos, ni el sol, se anima a salir
Murió mirando de frente quien valiente fue al vivir...
(hombre y niño, fuego y temple, brazo rebelde y viril)
a su ESPAÑA, a sus sueños, joven, enfermo y febril
mientras la lucha seguía, y este mundo, sigue así...
Miguel Hernández
Comentario
Sus amores,
tan plenamente sentidos,
fueron el sostén de su vida atormentada.
La salud,
tan quebrantada le obligó a vivir de sueños,
que su talento convirtió en Poemas inolvidables.
¡Cuánta fuerza en humanidad tan debilitada...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 134
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Qué flor tan hermosa creció y perfumó su triste existencia
convertida en Poemario tan expresivo e inolvidable...
Su destino breve y atormentado,
hizo posible que desde sus apuntes,
legara al mundo tanta maravilla hecha verso.
"No volarás. No puedes volar cuerpo que vagas,
por estas galerías donde el aire es mi nudo.
Por más que te debatas en ascender, naufragas.
No clamarás. El campo sigue desierto y mudo."
Miguel Hernández
MUROS
Muros que entre tinieblas, se levantan ajenos
a los sueños perdidos en noches de silencios
ojos ensombrecidos, ojos del niño bueno
mirada ilusionada detrás del firmamento...
Soledades nutridas de ideales , de sueños,
silencios compartidos con estrellas errantes
principio del camino que sigue con empeño
y es su cruz, su sendero, es su luz, y su amante.
Pero él sabe que nunca abrazará sus sueños
pero él sabe que nunca florecerán sus ansias,
pero él sabe que amores y paz, son un ensueño
y sabe que a su espalda la muerte lo acompaña
GRITO DE AMOR
Es el grito de amor en la penumbra
que en desesperado pavor, solo el vacío
encuentra en esa búsqueda y murmura
su desencanto y orfandad a los caminos
Y clama al firmamento mudo y ciego
mientras inmutable sólo está el vacío
y sus brazos increpan al oscuro cielo
y su amor en el pecho, es un suspiro
No sabe si al amor o a sus amores
necesita en su alma desvalida
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 135
Mil poemas a Miguel Hernández
y el nombre de aquella con las flores
de distancia y pavor, caen rendidas.
ESE PASTOR
No sabía de luchas y reclamos,
ni de injusticias ni de amo, sabía
el aroma de los montes cercanos
fue su escuela, su luz, su melodía
el tiempo en su alma parió rosas
la injusticia, levantó sus manos,
y toda la armonía montañosa
acuñó en el, paz para sus hermanos
Aún el mundo, ignoraba que nacía,
esperanza para el pueblo sojuzgado
Aún Miguel no sabía que sería...
el soldado -poeta más nombrado
El Toro
"Como el toro he nacido para el luto"
Miguel Hernández
Tanta pasión contenida
tanto amor apasionado
recíproca llama desairada
espada hundida en su costado
Tozudez de la bestia callada
Humanidad ,amor embelesado
actitud de fuerza calculada
mente y corazón apasionados
Nunca aquella violencia desatada
nunca en los ojos rencores enquistados
¡Nunca la furia ciega desmañada
nunca la rabia golpeteando el suelo!
Rescata los proyectos maniatados
conciencia de respeto a sus ensueños
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 136
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Potencia de un amor desesperado
que no se envilece ante los dueños!
ACEITUNEROS
"Vuestra sangre, vuestra vida,
no la del explotador
que se enriquece en la herida
generosa del sudor"
Miguel Hernández
OLIVARES
Jaén le muestra su surco
e increpa al trabajador
conciencia quiere que tome
de sacrificio y sudor
No es trabajo de los dueños
la tierra pone el valor.....
de años, soles y sueños
de lunas , lluvia y amor
Estímulo que la tierra
del obrero recibió
mano de surco y arena
al olivo lo acunó
Verano, agua y trabajo
como a niños, arropó
la lucha, el valor y el trato
que el hombre duro...donó.
Madre España
"España,piedra estoica que se abrió en dos pedazos
de dolor y de piedra profunda para darme...
no me separarán de tus altas entrañas,
madre"
Miguel Hernández
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 137
Mil poemas a Miguel Hernández
FIDELIDAD
Nunca un hombre fue tan fiel a su destino ni amó tanto a su tierra,
su libertad y su pueblo...
Respetó cada signo de ese mandato y lo sublimó con su conducta e ideales....
Y llevó esa estirpe hasta las últimas consecuencias,
sin desfallecer en la lucha
La dulce carga de su España será ejemplo
de la entrega más profunda y su pecho apasionado,
guardará hasta su último suspiro,
sus ideales de honor y el amor a su amada.
Ejemplo de la fortaleza del alma,aún desde un cuerpo,
maltratado y enfermo...
Ivonne Sánchez Barea, España
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
(fragmento de: VIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVAN)
Miguel Hernández
Respuesta a Miguel Hernández
Los ruiseñores del alba,
cantan su serenata
en la tumba de tu pueblo,
Miguel, poeta, poeta del alma.
Huracanes sin yugos ni trabas,
rayos y tormentas sin jaulas,
Miguel en su calma agoniza
aún hoy en nuestra espalda.
Cielo calmo e infinito,
testigo de bueyes y arados,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 138
Mil poemas a Miguel Hernández
toros amansados, leones cabizbajos,
águilas desplumadas.
Si levantaras la cabeza, Miguel,
veinte veces de tu muerte,
se ahogaría en tu garganta
el corazón de tu España.
Un doblón de libertad,
atrapado en su deuda extraña,
pueblo manso que se acalla,
¡Ay… Miguel.!, ...
que canten tus alas.
María de Lourdes Barsallo Jaén, Panamá
Tu palabra, Miguel Hernández
Tu palabra
reposa en la posteridad.
Siempre comprometida
en dibujar los detalles
de tu vida sencilla.
Inspirado en la vida
a la vida retratas
y es tu canto de amor
una ofrenda purísima
a la mujer amada,
Josefina.
Tu palabra,
comprometida siempre
por la angustia existencial
del ser y la verdad,
comprometida
por el sueño sin logros
de los pobres y los desheredados
de la tierra,
estímulo tenaz de tu poesía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 139
Mil poemas a Miguel Hernández
Tu palabra, Miguel Hernández,
comprometida
por la amistad sincera,
por el amor, por la muerte
y por la vida.
Para encontrarte,
Miguel Hernández,
eternamente y siempre,
vayámonos entonces,
lucero en mano,
a explorar
los caminos heredados
del ciudadano anodino,
caminemos,
avancemos,
por el pueblo que sufre,
por el pueblo que calla,
por la mujer que llora incertidumbres,
por los niños que mueren
antes de conocer el rostro
de su madre.
Por la Naturaleza
que amaste
y que hoy se extingue
por la avaricia sin límites del hombre,
por los ríos contaminados
que ya no reflejan más
en sus estancadas aguas,
el rostro enamorado,
del hermoso Narciso.
Por el amor, por el dolor.
Por los ancianos extraviados
por calles y avenidas,
sin saberse nombrados
tesoros inabarcables,
del Siglo XXI.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 140
Mil poemas a Miguel Hernández
En fin,
en este bregar
de instantes, como siglos,
avancemos,
para alcanzar,
solo
solamente, ay,
los aplausos silenciosos
en el corazón de los hombres.
Caminemos,
solo solamente,
por liberar de su cerco
las ideas más profundas,
más secretas, dormidas
en la savia fecunda
de tus letras,
por liberarnos del miedo
a la desnudez inviolada
de palabras,
nunca-antes-pronunciadas.
Por el presidio en las almas
y por las almas
inocentes,
que mueren en presidio.
Por el amor, por el dolor.
Caminemos.
Avancemos unidos.
Seguros de encontrarte,
en la gloria y resurrección
del verso y la palabra.
Solidario.
Guerrero inclaudicable.
Miguel Hernández.
Soldado del amor
y del dolor, prisionero.
Mártir de la verdad,
loada sea la luz
en tu memoria,
prisionero de Osuna.
Imbatible y lejano
y siempre presente,
vigilante
de auroras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 141
Mil poemas a Miguel Hernández
Sonia Castro, EEUU
A Miguel Hernández.
Vida y canción de un hombre sombrío,
penas y amores que marcaron su alma,
vientos turbulentos que cual desafío
le robaron la paz, también el alma.
Con suavidad de flores por entre los olivos
levantó recia la voz, entre la tierra dura
y hoy como nunca su verso altivo,
recorre las esferas, sin atisbos de dudas.
Desdeñando la escarcha de sus noches,
asumió su vida de miseria y hambre
pero la cerró para siempre con el broche,
de que el Olympo es solo, ¡de los grandes!
Maigualida Pérez González, Venezuela
Miguel Hernández el poeta mártir que murió con los ojos abiertos.
Pablo Neruda le dejó estas palabras:
“Recordar a Miguel Hernández que desapareció en la oscuridad y recordarlo a
plena luz, es un deber de España, un deber de amor. Pocos poetas tan generosos y
luminosos como el muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará algún día entre
los azahares de su dormida tierra. No tenía Miguel la luz cenital del Sur como los
poetas rectilíneos de Andalucía sino una luz de tierra, de mañana pedregosa, luz
espesa de panal despertando. Con esta materia dura como el oro, viva como la
sangre, trazó su poesía duradera. ¡Y éste fue el hombre que aquel momento de
España desterró a la sombra! ¡Nos toca ahora y siempre sacarlo de su cárcel
mortal, iluminarlo con su valentía y su martirio, enseñarlo como ejemplo de corazón
purísimo! ¡Darle la luz! ¡Dársela a golpes de recuerdo, a paletadas de claridad que
lo revelen, arcángel de una gloria terrestre que cayó en la noche armado con la
espada de la luz!"
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 142
Mil poemas a Miguel Hernández
Y yo, una poeta más desde el norte del sur le escribo mis letras con sabor a tierra, a
pueblo, a música y a verdad…
Desde el fondo de la tierra
Oscuros y tristes
Llegaban los gritos
Y los disparos
Matando sueños
Y poesía
Asesinando nanas
Y fantasías
Pan y cebollas
Es lo que había
Y un alma triste
Que las mecía
Un sollozo
aviva el duelo
El muchacho
ha muerto
En plena vida
Pero sus ojos
No se cerraron
Y su mirada
Siempre está viva
El mito empieza
Dice la gente
Y tú Miguel
¡Siempre presente!
Olga Sánchez Guevara, Cuba
Yo no quiero más luz que tu cuerpo ante el mío...
Miguel Hernández
Porque has crecido junto a mí
conmigo
porque he crecido junto a ti
como dos árboles que en un abrazo
inseparables
ya son uno
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 143
Mil poemas a Miguel Hernández
Los consuelos para la ausencia
aquello de que siempre estás aunque no estés:
vanas palabras
Nada como tu piel junto a la mía
Desnúdame de sombras
inúndame de aromas
desbórdame de luz.
Alma Mateos Taborda, Argentina
AL POETA MIGUEL HERNÁNDEZ
No lo ha matado la muerte, tan sólo fue provisoria,
porque igual que el Ave Fénix, renacer fue su victoria.
Se mantendrá siempre vivo y aunque pase mucho tiempo
siempre será un elegido, porque elegimos sus versos.
Luz y epígono del grupo Generación 37
donde adscribirse le cupo con ilusión que arremete.
Puso su acción y su pluma en las causas de su tiempo.
Los excluidos tuvieron su voluntad y su esfuerzo.
Su corazón tan inmenso, pudo por siempre cantar
a aquel niño yuntero, que nos hace emocionar.
Con “Las albarcas vacías”, pudo su pluma soñar
universos de juguetes, que invitan siempre a pensar.
Y en el “Rayo que no cesa” desplegó su corazón,
donde los ejes centrales son vida, muerte y amor.
Pusieron su cuerpo preso, pero nunca hubo cadenas
sobre su amplio pensamiento, ideal de sus ideas.
Su compromiso social entre sus versos navega.
Su compromiso político puso combate en la guerra.
No lo ha matado la muerte porque en sus verbos se queda,
pero fue triste la suerte para el genio de las letras.
No lo ha matado la muerte sin que repiquen campanas,
fue la luz de un rayo fuerte, manantial del siglo veinte
que nos va mojando el alma, que nos va sangrando el alma.
Nadie muere sin olvido, por eso, Miguel Hernández
ha de estar por siempre vivo, caminando entre los grandes.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 144
Mil poemas a Miguel Hernández
Sor. Cecilia Codina Masachs , Argentina
CANTO A MI POETA
Mi poeta campesino,
no has muerto al olvido
vivirás en mi silencio
como poeta divino.
Buscaré oír tu trino,
en lo que he vivido
y cantaré al cielo
tus letras en grito.
Tú eres árbol ergido
figura de Dios elegido,
para cantar sin miedo,
la bella poesía del siglo.
Miguel, de amor poseído,
de tu tierra vas teñido,
de amores, penas yo te tengo
para siempre mi amigo.
A MI POETA MIGUEL HERNÁNDEZ
Mi querido poeta de Levante,
que entre los animales plateados
donde secretamente tan soñados,
dejante resplandores de diamante.
Tus letras transcendiendo en caminante,
por esta España, andando peleados,
que no entienden de gustos de letrados,
y ciegos no conocen , un gigante.
Este ilustre poeta encarcelado,
se muere con sus letras tan amando
que escritas las dejó con roja sangre.
Mil poetas le cantan hoy soñando,
la belleza poética del siglo,
una estirpe de un hombre recordado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 145
Mil poemas a Miguel Hernández
Javier Dicenzo, Argentina
Tu elegía en el alma tras las rejas
En recuerdo del poeta Hernández con el corazón desde Argentina
Se te ha muerto la ilusa melancolía
el olvido que deja a su paso la vida.
Tu dolor elegía latente en las manos
fue tu homicidio universal
la daga de toda España.
Tu rostro de niño durmió la noche,
es tu elegía una mascara letal
tu tormenta es un hachazo al corazón
ese dolor era para unos ojos
tibios ojos en las manos de los dioses.
¡Vuelve higuera herida!
tus pájaros y tus ángeles duelen
tu elegía en el alma tras las rejas.
Es tu sangre flor de cerezos,
es tu alma la infinita voz de la penumbra, amigo
desconocido poeta que irrumpe en el llanto.
Español, muere en tu flagelo de los árboles,
siente la vida en la guerra
tu tierra es la maldita guitarra de los cementerios,
esa desesperación yace con los vientos
aguda percepción de lo mágico,
guitarra perdida en el susurro de las arañas.
No existe corazón ni latente vena de sangre
que borre tu agonía,
ellos los rateros de la noche
en tus paisanos amigos de la penumbra
¡Que triste es vivir como tu mano herida!
Mis ojos lloran tus heridas
Miguel hermano querido
yo te entrego tus propias penas a tu costado
no mueras en tus asesinos
hoguera de sangre que vive en la brutalidad,
no existen más paraísos dolidos
que ese dolor de la vida en rastrojos a puñados.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 146
Mil poemas a Miguel Hernández
Temprano la muerte muerde la tierra
inminente moneda que se arrastra
con los ficticios focos en las calles
queriendo perdonar a la noche.
Tus noches de agonías y soledades
elegía de tormentas en España,
hachazo hambriento
con los jazmines de tus mendigos tiernos,
caliente herida que busca su yugo en la flor
¡Vive!
¡Vive!
Miguel Hernández
¡Vive en este recuerdo!
Que es solo la mitad de una vida
amante perdido en los mares
para vestir a la sombra
para hermanar la paz
el horror de las novias queridas
terciopelo de la quebradura
de los almendros en invierno.
Te sobra el corazón
¡ Perdón, amigos de España! El autor
Te sobra el corazón hambriento amigo
aunque no estoy contigo poeta.
Se te han caído las campanas.
Tu suicidio melancólico sangró,
sangró la sangre frente a las iglesias
en tu laberinto letal
entre murciélagos de visiones.
Arráncate de cuajo el corazón,
llora porque no ha nacido la madre
esa mujer desgarrada por un fusil.
La muerte acecha todo el campo
los campanarios mueren de silencio.
Ser espiritual
te sobra el corazón amigo poeta
acecha los lugares los fantasmas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 147
Mil poemas a Miguel Hernández
Quisiste llenar el mundo de lunas
alegría ausente de prisioneros sueños…
Tus ojos y tu boca…
Tus ojos y tu boca…
Tus ojos y tu boca…
Benditas las manos y la melodía,
si amigo te sobra el corazón.
Amarga muerte
yo se por qué te perdonaste la vida,
cada día
cada noche
cada latido de la muerte.
Escribe la carta
con el tintero de las venas.
Sangre
naciente de mala luna,
pena de todas las tristezas.
Amor que cae
al vacío
boca durmiente de piedad,
dolor de tijeras
dolor del padecimiento.
Corazón de ruiseñor
habita hombre
habita que ya es tarde
Vida
Pena
Perdón
Cada día.
Elegía tuya Miguel
Las caracolas van en fila hacia el infinito…
Elegía tuya miguel en la desesperación de esa tierra sangrienta,
amapola de la enunciación maldita
dolor de crepúsculos negros
golpes de los homicidas.
Elegía tuya, exterminio de conjuros malditos,
andadura de difuntos en la furia.
La muerte te acecha
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 148
Mil poemas a Miguel Hernández
elegía de madrugada temprano
muerte que no perdona.
Tú no perdonas la muerte
la nada exterminando las tormentas,
las hachas descuartizando la vida.
Escarbas la tierra con los dientes
partes de órganos en laberintos,
noche de fantasmas locos.
Elegía tuya miguel
Elegía del último poeta
colmena de las almas con hambre.
Por vos Miguel se me ha roto el corazón
( Porque yo también perdí la ausencia de ti )
Ya la noche va creciendo entre malditos pastos,
se me ha roto el corazón
todos los sentidos de la vida.
Por vos Miguel
casi atrapando las balas
va creciendo el poema
entre sangrientos mundos
van las cabras juntas tras tus huellas.
¡ Dios ¡ ¡Es tan hermosa la vida!
como un putrefacto lagarto
herido
por todas las flechas de España.
Tu boca aflige los tormentos
ya la luna va creciendo
los rostros se miran
por vos Miguel estoy en esta silla
escribiendo soledades , sueños.
Por que soy tan maldito , puro?
Donde quedó la sangre de tu mundo?
Si la paz de tu ausencia
sobra corazones solitarios
vive como el puro ángel
cada piedra del camino.
Ya la noche se va Miguel
se va tras tu olvido
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 149
Mil poemas a Miguel Hernández
como esas historias
que terminan
cuando empieza a amanecer el crepúsculo
del amor.
Rosas te regalo, espinas en el corazón
Rosas te regalo Miguel, espinas en el corazón
un recuerdo lejano sobre las mareas de muerte,
cáete de todos los universos del ayer
rosas te regalo Miguel, espinas en el corazón.
Escribe adioses y regalos para el corazón
justicia divina que alegra la llama
que va de boca en boca sin perder el alma.
Estabas con todos los gritos del horror
pena de ruiseñores en el lamentado amor.
Grito que se escucha ausente en las llamas
Grito de guerra en las nubes del olvido
Rosas te regalo espinas en el corazón
espinas que sangran como la lluvia
demencias que son pasión de lunas
con verdes espinas secas de llantos.
Rosas te regalo espinas en el corazón
no pudiste ni con la estrella ni con la muerte,
hachazos en el corazón
sereno poeta que no sabes el por qué.
Rosas te regalo como a un niño amor
rosas puras con tintes de sangre
pena de la sola pena.
Amor dejado con brazos extendidos
en las inconformes lágrimas de dolor.
Rosas cortadas por tijeras
del alma, como un corazón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 150
Mil poemas a Miguel Hernández
Al mismo Paraíso donde Miguel
( con o sin ruiseñores )
Otra vida sangrienta en la cárcel del corazón,
otro cielo derrumbado y maldito.
¿ Que esperanza acoge ese recuerdo?
Pido una navaja para arrancar otro dolor
otro paraíso para el poeta Hernández
salto de suicida en la sangre misma de ese Poeta.
Tu eres ese poeta
que a través de mi puño pecador
escribe nuevamente un poema.
Tienes la misma pena
todo lo que existe a tu manera
bocas que arrancan la tierra.
¿ Si esto no es el infierno donde esta la cruz?
Te enterrare en mi jardín Hernández,
hermano otro paraíso para el poeta
amargo sabor sin sabores errantes.
Canto desgarrador en pinceles del cielo,
canto de arrullo y amores
que se cuecen en la sentencia del como o el por qué.
Buscaré un infinito en el horizonte
con rayos que me lleven
debajo de un zapato al mismo paraíso
donde Miguel.
Juan Cerda Zúñiga, Chile
Pastor de Viento
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Soy
Invierno y espiga
Busque en el sentir de los establos
Los cataros peregrinos de la leche.
Hable
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 151
Mil poemas a Miguel Hernández
Herido y simple
Con los pajares que acunaron mi cuerpo
Pausado, inerte me entregue al respirar de las lluvias
Y baje
A ver a los segadores escarchando en el emigrar de la memoria.
Se
Que la tierra es pan y cobijo
Que desatara mis huesos a la hora del descanso
Esposa que me dará su sabiduría morena.
No temo a este efímero dormir
Dejare huir mis heridas
Y el viento que funde mi infancia
Pastoreara conmigo de nuevo
Orietta Fúster Evora, La Habana, Cuba
Luz a la Vida
Yo quiero más luz en mi planeta Tierra, formado por diferentes culturas,
lleno de maravillas que nacieron y nacen
con el sol que escribe
con la luna que lee
con las estrellas que sueñan
vivir, vivir, vivir...
Yo quiero más luz en mi planeta Tierra, formado por diferentes culturas,
volar en manadas por el cielo azul de Dios
correr tras la lluvia descalza, por las llanuras y empedrados de la naturaleza
detenerme en cada tiempo y ver amaneceres
vivir, vivir, vivir...
Yo quiero más luz en mi planeta Tierra, formado por diferentes culturas,
llenar los volcanes de flores rojas
y cambiar la lava que despiden y se desliza, por pétalos de amor
vivir, vivir, vivir...
Yo quiero más luz en mi planeta Tierra, formado por diferentes culturas,
tomar y que todos tomen sus lápices, como estrellas vamos,
y así llegar a Miguel Hernández
vivo, vivo, vivo...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 152
Mil poemas a Miguel Hernández
Ernesto R. del Valle (Cuba) EUA
Poeta del Mundo.
CANCION DE MEDIA NOCHE PARA MIGUEL HERNANDEZ
Del treinta de octubre de mil novecientos diez al veintiocho de marzo del cuarenta y
dos tu nombre calla la pena de tu nombre siempre amenazado por las balas, por el
odio, por la muerte y por el hombre mismo que no supo de tus alas, ni conoció la
cosecha de los silencios en tu pecho…
No vengo a vigenciar tus noches
ni los veredictos que pusieron tu vida en peligro.
No, Poeta de Orihuela, mucho más hay que decir
para morder el pulso de tus canciones,
y entender cómo levitas con tus versos
entre las trincheras, entre los pétalos amargos del peligro
y el hueco de tu angustia de flor en las Nanas de la Cebolla
O solamente ¿por qué no? en aquel poema
donde le hablas al iprimo de las manzanas
y le intuyes en la vestimenta de esqueleto
su grandeza creciendo bajo la grama.
Y tu, Miguel, ya caído de la rabia almacenada
de tanta furia celeste, de tanta, nobleza, tanta.
¿Hoy no eres sino eso que la memoria resguarda?
¿Una nube sin sol? ¿Pulmón roto? ¿¡Llamarada!?
De Orihuela hasta Alicante de Alicante a la galaxia
caminas con los gladiolos furiosos de tus palabras.
Ana Cuadra Hernández, Suecia
Sangre
"Poeta Cabrero"
el amanecer, despertaba tu palabra
homenaje noble al universo ultrajado
aritmética, geografía maratónica
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 153
Mil poemas a Miguel Hernández
pasearon como Einstein escribiendo poesía.
Sangre y cebolla no fue pesadilla
tu amada, tu nana tejió el hambre,
usurpador infinito del orbe
con el polen de geranios luminosos.
urdidos en el vientre.
llegaron tus versos tras cadenas metálicas.
Luz de Orihuela besó el alumbramiento
antes de tu peregrinar.
el limonero miró amargo , triste la ausencia
perlas , perlas de Niágara caricias perenne
descubrieron la geografía en tus letras
penetraron doloridas en tu juventud sesgada
"Sangre y cebolla" eco de cactus forasteros
Sangre y cebolla estrujaron los pechos
nítidos de Josefina
la luna vistió azul , azulado , azulosos
temblorosos el mal tiempo sin tus cabras
aves, grillos no cesaron de llamarte
tu pluma encarcelada encolerizada
reportearon el ultraje de la Republica
"Sangre y Cebolla , sangre y cebolla"
bebió la noche , el día
tu omega palpitante!!!
Rejas
La muerte cubrió los cortos senderos
hijo de Orihuela
en medio de las rejas crecia el amor...
más solido visto en cautiverio de un poeta
tan intenso que ni las tempestades minaban
"sin ti, sin Manolillo , sin libertad , entre piojos, sarna"
eran los dias más lúgubre de su existencia
exclamó con versos de sangre , a Josefina amada , su Mantra.
Còmo no amar a tu musa de epístolas?
creación a tu medida del corazón
en el encierro atravesaste todas las venas
para sentirla tuya cada dia
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 154
Mil poemas a Miguel Hernández
donde tus labios soñaban con secar
su boca a besos y su cuerpo en el tuyo
una sola carne Tú y Ella en los confines de la tierra.
Como no amar a la diosa de tus escasas noches
junto al lecho ,dos remolinos enardecidos
en la pasión más sublime de Perito de lunas.
Como no levantar al alba y conocer tus desvelos
como no amar tan fiel como tus extrañas
oh! quisiera solo trepar los limoneros hacerlos crecer
junto a las araucarias de mi Sur oir sinfonias
del zorzal y tú pastoreando besando la luna
el sol bebiendo la mas dulce de las leches
en tu cuna verde en tus trapos de "Cabrero"
como no soñarte con tu pluma apasionada
dolorida , ensangrentada....
Qué hicisteis tú para merecer tanta cárcel
hermano mio!!
Ilumina
Por los cerros de Orihuela canta un niño descalzo
se oye el cántaro de leche tan nitido como la voz de Miguel
el cielo cubre de notas verdes la infinita cabellera verde
pintan las tierras de su rebaño.
El aire trae el incienso de la escuela inconclusa
sus cabras ... el padre reclamaron su presencia
iluminadas fueron las noches en su pastoreo...su vida.
Los naranjos y los ciruelos pusieron notas a sus letras
los grillos armonizaban la noche en todos los senderos.
Ay! poeta de persuadidas palabras , cuántos amores
llegaron a tus brazos
tus palabras llovian como aromas de geranios
las musas
sucumbian a tus pies
Poeta de el “Rayo que no cesa”
sigue viajando junto al canto de Josefina
tu amada hasta la resina de huesos
Miguel en coros celeste te cubro
siento tus pasos en la cima , tu voz
de miel a tus cabras
rebaño que llevaste prendido en tu solapa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 155
Mil poemas a Miguel Hernández
imaginaria de tertulias cercenadas
escucho tus quejidos y me duermo
en las frias noches carcelarias
nada es igual sin ti en el campo
las golondrinas llevan en sus alas
Misa para Requiem.
Dolor sin miedo
Los dolores en tu cuerpo fueron clonados
en cada letra tras las celdas
celdas que bebiste ante el NO
de tu asilo en Chile
La España de la epoca te inspiró
e inspiró los versos más dolorido
"Aparta de mi este caliz" de Vallejo
España en el Corazón del gran Neruda
Por quién doblan las campanas de Heminwey
dolores dolores de un parto con penas de muerte
apenas tenias treinta años Miguel y bebias el trago
mas desabrido de tu existir
tu amada Josefina envuelta en lágrimas recibió tus reproches
Debes ser fuerte" te dedicas a llorar como si solo existieras
exclusivamente tu y yo en este mundo"
Fuiste el poeta que supo sacarle brillo a la pena"
volcando los mas sencillos y sensibles versos
a la insensata Guerra Civil
Cuanto dolor llevaste en la oscura cama
Ni tus brazos ni tus ojos palparon tu primogénito
el se fue apenas cumplia los diez meses y tu
soñandolo en tu regazo al que no llegó...
Hay! Miguel desangro junto a tu recuerdo
veo tus pies pastoreando en Orihuela
escucho tus quejidos , palpo esa TBC
que carcomio tus pulmones
la misma que alimentaron tus celadores.
"poeta cabrero"
descansas en la inmensidad de tus letras
en todos los que han bebido de tus
sencillos y profundos versos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 156
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus pasos en mi
Doy un paseo en los Andes, busco a Neruda
a lo lejos viene cabalgando su voz
a lo lejos escucho el zarpazo del Winnipeg
ahi no va Miguel Hernández
autoridades de la época negaron su asilo
ahi en esa voz autoritaria quedaron miles de versos
miles de letras inconclusas
la muerte llego temprano para el gorrión de Orihuela
13 cárceles lo acogieron en la podredumbre estancia
los ciruelos vistieron de luto antes de tu partida
las mariposas rodearon tus jardines sollozando tu ausencia
Josefina solo podia escribir escribir
el encuentro contigo fue escaso en tus prisiones
la miseria rodeaba sus bolsillos
sangre y cebolla cubrieron su lecho
esperando un milagro
milagro que no pudo llegar...
las prisiones apuraron tu sueño
y tu juventud fue tan efímera como
un amor de otoño.
Poeta Cabrero.
Vientos del pueblo me llevan....
vientos sin calzado cubrieron los campos
no vestiste trajes ni zapatos fuiste recio ante
el contrato
el compromiso sereno... un roble a tus herman
"Viento del pueblo me arrastran
me esparcen el corazón"
Un corazón sangrado sin la mujer amada
un corazón hecho espinas ante un pueblo ultrajado
Cantando esperaste la muerte como lo vaticinabas
sin aceptar el yugo que en pueblo gallardo pusieran
poeta de la Salvia viva de los toros a tu cuesta
sepultaste con tus versos el fruto sin conocer
tanto dolor almacenaste que no habia espacio en tu huerta
tus ojos siempre despierto guardaban la tristeza de su amada
nunca hubo tanta lágrima en tu corazón
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 157
Mil poemas a Miguel Hernández
al ver el yugo a tus congéneres
espinas, espinas clavaron a tu corta vida
el cielo pidió un minuto de silencio
mientras tu TBC te llamaba
la sangre de tus pulmones no pudo
con tu agonia
ahi quedó tu amada sin lágrimas que derramar
se alimentó de tus versos a toda cabalidad
siguió tus letras alimentando su bondad
hoy descansa junto a ella y tu retoño
para la eternidad.
Helenice María Reis Rocha, Brasil
Poema a Miguel Hernández
Quem vê luz quando a sombra caminha
é como um menino que brinca na noite
e como Miguel que viaja em penumbra
sonho caminhos que não vejo
e existem
Tirésias,cego,via a clareza dos rumos
e seja Miguel,anjo ou poeta
desarma armadilhas de amor e silêncio
onde haja flor,há espinho
Maria,que sou,apenas sonho
teorema complexo do real
que é o sonho
mais denso em sua definição de bruma
e estrelas
alí,onde o perigo encanta e o amor salva.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 158
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Isla Negra, Chile
Tus preferencias Miguel del pueblo
Cuando sales de la cárcel
tus pies buscan otro camino
no querían el exilio
si no, llegar a tus dominios…
Te esperaban tus campos
y tu amada
tu tiempo pasado
huellas
siembras
hasta penurias
y salvajadas…
Viste tu vida
pendiendo de un hilo
mas, no te preocupó
si desde tus campos
partías a la eternidad,
eternidad que ha quedado en tantos
que recordamos tus letras
Tu laboriosa construcción
Tu siembra generosa
Tu semblante despierto
que no dormirá jamás.
Quisiera
Como quisiera descubrir
tu Orihuela mágica
caminar por tus campos
Resonando los tacos
como en marcha a la guerra
En tiempos de paz
arder como hoguera
para dar calor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 159
Mil poemas a Miguel Hernández
a quien lo quiera…
Como quisiera
ver tu cielo crepusculino
desde el azul intenso y las nubes
hasta el pálido rosado…
Mientras las rosas no tienen espinas
Los frutos son más dulces
y el huracán ya es una brisa
que mi rostro acaricia…
Como quisiera cosechar tu tiempo
aquel que dejaste en tu tierra
tomarlo en mis manos
y regalártelo sin tregua.
Quiero, escuchar tu voz
¡Miguel … !!!
Si, quiero sentir tu expresión
de aquellos días grises
De tus sentimientos orlados
caminando por los prados
sumiéndote en la esperanza.
Aquella que te esquiva
que hunde ilusiones
Como el ave rapaz
que va tras su presa,
que apetece la inmunidad
para ser siempre lóbrego de letras.
¡Ah! Miguel…
Ya te escucho
Suave y candente
y ¿me creerás?...
Ya no te siento ausente…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 160
Mil poemas a Miguel Hernández
Te dicen “MIGUEL DEL PUEBLO”
Tu pueblo que nació contigo
Que siempre fue tu amigo
Convergente tu imagen
con el cielo y la nube
que sembró tus campos fértiles
pronunciando la lluvia de tus letras
Coraje embravecido
Convicción en tus ideales
Tinieblas y misterios
asolaron tu entorno imaginado.
Perseverante, fecundo batallador
Pródigo de la naturaleza humana
Aunque abruptos empedrados
se interpusieron en tu camino
seguiste tus huellas hasta el fin
esforzándote, desvaneciendo
entre las tinieblas,
iluminado en reflejos de tu alma
germinando, ¡germinando!...
hasta más allá de las batallas
con tus letras anunciadas
escurriéndose entre la nada
para responder al llamado de tu amada.
Sin fatigar,
siempre caminando
sobre tu huella imperecedera
que no se perderá jamás
aunque el camino esté sembrado de espinas
NO SE PERDERÁ ¡JAMÁS!
Miguel en los campos
Una nube gris
cubre los campos...
La retaguardia se ha quedado
Llueve el fuego concentrado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 161
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Corre Miguel, corre!...
Atraviesa las líneas enemigas
Hazlos tus amigos
Siémbralos de letras
fecúndales el corazón...
En el intento,
morirás ante la razón...
Miguel vuelve
Vuelves a tus campos
Suenan las campanas
La tierra te atrae...
¡Gloria, Gloria a Dios en las alturas!
Los cerros estallando
Con Dios conversando
en diálogo y quebranto
pidiendo ser más hermanos.
Tengo tanto que escribir
y no quiero
morir temprano.
Miguel cansado
Charcos de invierno
ensangrentados los barros
Las armas al hombro
Los pies cansados
Siembras de letras caen como bombas
entre cuerpos aniquilados
Se remece tu tierra Miguel
que temprano anunciará tu muerte
Cosechando a indefensos
La discordia, el desencuentro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 162
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel, nuestro
Miguel del pueblo
Miguel, del amor
Miguel, combatiente
Miguel, del dolor
¡La cárcel para el Poeta!...
¡Apaguen su voz!
¡Marchiten sus letras
riéguenlas con dolor!
Que fallezcan las zetas
los verbos y adjetivos
y los sinónimos de amor.
Yanexi Matos Matos, Cuba
Tú sabías
Tú sabías que aunque murieras no dejarías
serrar tus ojos, en ellos estaba toda la juventud
que escribiría cada paso que dabas,
y aunque no escribieras con tus manos cada
uno de tus enojos, recuerdos tiene el poeta de
todo aquello que amaba. Amabas cada paso que
dabas por la vida, le escribiste a tu país
Y tu país te regocija, te libera de tu muerte
haciendo público tu suerte, de estar vivo en cada
persona que se inspire con lo escrito en
cada página que dejaste, tantos sentimientos
impregnaste que no es feliz el que no lea una estrofa
de lo que amaste. No es dolorosa la muerte cuando
se sabe a triunfo, cuando se sabe a armonía,
gran poeta que has triunfado con todas tus
poesías, que has logrado que a los tiempos les
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 163
Mil poemas a Miguel Hernández
falten horas y no días para que al mundo
le llegue toda tu sabiduría, gran escritor de las
luchas, del pueblo y de la vida. Tú sabías poeta,
que al morir en tus ojos se vería la gran labor que el
hombre espera, no es en sombra ni es en guerra,
es en el rayo que cae de miles victorias que se
esperan, pero tú sabías poeta que tu obra continuaría,
no en luchas ni en heridas, sino en revolución y energía.
Escribiste al amor en lejanía y el amor te acompañó
sin quejas ni medidas, escribiste a los de tu sangre
y no hubo en ellos desmedida. Es tiempo ya, gran
poeta de que le demuestres a la muerte que tus
ojos no se sierran, que no esfuerce tal acción,
mírala con pasión y enséñale los resultados
que tus ojos no se serraron para que sigan mirando
lo que se ha logrado hasta hoy.
Dúo, Alfred Asís, Chile - Yanexi Matos Matos, Cuba
Alfred
Miguel Hernández, poeta
tus letras acudieron a tu mente
en ritmos de tu tierra y tu gente
misterios convergieron
en sinfonías de tu alma
y reflejos tempranos de tu magia.
Frenético sonido de tu voz
quebrada por el explotar de las bombas
que asolaron tu entorno
más no apagaron tu plegaria
Yanexi
ni apartaron tu energía.
Más hubo fiebre de alegría
Impetuoso deseos de antojos
para elevar el deseo de no perderte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 164
Mil poemas a Miguel Hernández
Extraviado el papel por tu
ausencia no ha dejado de
inspirarse porque eres poeta
del aire, del amor y de la guerra,
pasiones hechas en letras musicales
pusiste en alto el honor
de los verdaderos instintos
que nacen, sufren e inspiran
en sonetos y cantares.
Marina Aoiz Monreal, España
Sed de mañana
El ojo percibe la impetuosa ola del viento.
Sales al encuentro de una atmósfera nueva,
del color violeta de la boca
cuando acoge al huésped de la fiebre.
Sobre la viga de roble
alumbran la tarde las glicinas.
La tarde,
coronada de un perfume a tierra
que asciende de los huertos
y los diamantes de las acequias,
celebra la lectura de las hojas tiernas
y permite la simiente de la dicha
en las pupilas de las acróbatas.
Nos acercamos a la vida clara,
lejos de la ceguera
y del crujido insolente de la bestia.
Apostadas en la piedra
crudamente cincelada,
se desencadena la lluvia
que aguardábamos sedientas.
Al fin gotea lo no oído.
Si cierto es que el hombre
construye un ataúd
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 165
Mil poemas a Miguel Hernández
con la madera del violonchelo,
también lo es que advierte
un abrazo en el néctar del bosque.
En el lugar donde los últimos zapatos
demuestran ser cortezas,
el penal de ruiseñores moribundos,
abre de par en par
los postigos de cuarzo y malaquita.
Cautos observamos
el despertar del lirio en la garganta
con un cuerno,
un tintero,
un monaguillo
y un collar de cencerros arrebatados.
A pesar de la lluviosa pena de los retratos,
para las hijas e hijos
será la paz que forjas
con trigales temblorosos,
en la pleamar de los caballos
y la luz de los lagartos.
Por eso persistimos
y escribimos a la tierra profunda
los libros de tus rosas.
No te arrimes al tronco amargo, Miguel.
Del huerto de tu corazón,
brota un naranjo alegre
y ya no lloras tanto.
Desde la abierta ventana
escuchas el oleaje del viento.
Respiras esta atmósfera nueva
para la sed de mañana.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 166
Mil poemas a Miguel Hernández
Marietta Cuesta Rodríguez, Cuenca-Ecuador
VERANO DE PASIONES
Quiero volver hacia el verano
que me orientó a tu playa,
vestido de pasiones y de amores,
removerme en sus olas veraniegas de mar,
de amor, de duerme vela-caricias-sensaciones.
Extasiarme en azules de cielos y mis olas,
pintando el color de tu mirada
enredarme a tu cuerpo en humedades
en glorias coronadas de locuras.
Morirme entre tus brazos y revivir de nuevo
navegando en tu faro- plenilunio
champán de no- me olvides
y el silencio encendido de tus besos.
Yo recuerdo un verano
calentándome al sol de tus entrañas
bañándome de amores y de adioses…
Con un abrazo latinoamericano y del mundo
Dúo, Alfred Asís, Chile - Antonio Oxte León, México
Alfred Asís
Miguel Hernández
Resplandece tu obra ante nuestras almas
Brillas en el universo
Tus sinfonías son tan claras
que nos llenan el alma.
Alfarero de letras en imagen a semejantes
que adoran tu vida
hasta más allá de las estrellas...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 167
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio Oxte
Aquí en la tierra de Levante
cuna regada en sudor y sangre
en tiempos otrora de lucha por la paz
engendradora de tu ser sediento de luz y gloria,
recoge hoy frutos de tu faz serena y estoica
labrando la palabra como sólo tú haces
con hombría plena
hermano poeta omnipresente
con estos versos dejo
al sol de Orihuela
una rosa escarchada
de agradecimiento
y sobre tu lecho de paz eterna
Mi amor fraterno.
Dúo, Alfred Asís, Chile – Lucina Medina de Barry, Australia
Alfred Asís
POETA DEL PUEBLO
Miguel,
¿cuantas angustias te acecharon?
Tu virtud, amplia, generosa
El amor a tu tierra generosa
Proclamando la palabra embelesado en ella
Eres nuestra ofrenda a la libertad
Ascendiendo a los cielos...
Cual canto de amor y paz.
Lucina Medina de Barry
Miguel Hernández,
Hoy eres,
Cual ecos de los mares…
Que resonará para siempre.
Desde las ultratumba…
Miguel Hernández,
Hoy y siempre,
Eres, y serás esperanza,
En los altares.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 168
Mil poemas a Miguel Hernández
De los marginados,
De los oprimidos,
De aquellos sin justicia.
Eres,
Voz,
Palabra,
Grito
Sonidos…
De niños, hombres, mujeres.
De aquellos,
Sin aliento.
Que lloran contra vientos.
POET OF THE PEOPLE
Alfred Asís
Miguel,
How many anguish you stalked?
Your virtue, broad, noble
your love for your land generous.
Proclaiming the word rapture in it
you are our gift to freedom
ascending to the heavens...
like song of love and peace.
Lucina Medina de Barry
Miguel Hernández,
today you are,
as echoes of the seas...
that will resonate forever.
From the grave...
Miguel Hernández,
today and always,
you are, and you will hope,
on the altars.
Of the marginalized,
of the oppressed,
of those without justice.
You are,
voice
word
cry
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 169
Mil poemas a Miguel Hernández
sounds...
of children, men, women.
Of those,
breathless.
Of those who cries against winds.
María Teresa Casas Figueroa, Colombia
AL POETA DEL PUEBLO
MIGUEL HERNANDEZ
PALABRAS CON MEMORIAS
Alma y cuerpo
conjugados en uno,
pastor de cabras
autodidacta
joven de Orihuela
pasos son tus paisajes
de rutas hechizantes,
espejo ancestral
y seguidor petrarquiano.
Escritura hernandiana
Sanjuanista
dejando en Miguel
huellas cotidianas
identidades expresivas
de pasado espiritual
proyecta su naturaleza.
Intelectual antifascista
camina por la libertad,
con alpargatas labra
su huida
camina desesperado,
Su afán lo frena
la mano implacable de Franco.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 170
Mil poemas a Miguel Hernández
Detrás del umbral
te quedaste
suspendido en el letargo
con tus pensamientos
y tus versos en el tiempo.
Magalis Rodríguez Borges, Cuba
Moa - Holguín
AL GRAN POETA ESPAÑOL MIGUEL HERNANDEZ
Le nació a España un poeta
Que trascendió sus fronteras
Nunca temió a las quimeras
Ni al dolor de la saeta
Conoció de la carreta
Y de sentimientos grandes
Su obra surco los andes
Los mares, la cordillera
Por eso el mundo venera
A ese gran Miguel Hernández.
MIGUEL HERNANDEZ: UNA LUZ BRILLA EN ALICANTE
El amor, la muerte, la guerra y la injusticia
En la gran obra de Miguel perduran
Góngora y Garcilaso le saludan
Con Neruda y Alberti por justicia.
Y es que su lírica poética se inicia
En las tertulias de Orihuela un día
Donde Efrén, Ramón, José María
Reconocen su obra y su pericia.
Junto al viento del pueblo cancionero
Una amistad sincera le brindaron
Y al rayo que no cesa convocaron
Junto al hombre que acecha, al romancero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 171
Mil poemas a Miguel Hernández
Llevó misiones de pedagogías
A las zonas de España deprimidas
Hay lírica y pasión comprometidas
En Perito en Lunas con poesías.
Poeta y dramaturgo hoy convocante
Miguel Hernández no acepta la prisión
De España es comunista y su pasión
Es una luz que brilla en Alicante.
IMPRONTA
Genial epílogo es
Del grupo Miguel Hernández
Y si en la historia te expandes
Hallas la generación
Del veintisiete en acción
Donde su huella quedó
Y en Orihuela dejó
Su impronta como escritor.
Levanta España
Levanta España tus brazos
Y da gracias a tu suerte
Porque no existe la muerte
Cuando son fuertes los lazos
Recibe con mil abrazos
A tu hijo, al gran poeta
Al Miguel de la carreta
Al militante, al patriota
Con lirismo de gaviota
Y un amor que se respeta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 172
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio Arroyo Silva, España
A MIGUEL HERNÁNDEZ
La que llega al amor y se entierra
más hondo que el antídoto del amor.
El veneno y la culpa,
la quebrantada tregua del odio.
El barro del amor y el fiel de su balanza
que llegan de la vida a saciarse en su muerte.
La que llega sin vida a saciarse del amor,
el tajo y el machete buscando ríos blancos
en la espuma del cuello, la cascada de sed
cuajada en el alféizar de la sangre.
La vampiresa insomne,
la que huyó del vampiro
azul de la mirada
llegó con tres heridas al verso del poeta
Miguel Hernández.
Manuel Roberto Leonís, Orihuela(Alicante)España.
RETRATO VERSAL.-
Miguel, siempre tu frente
ardiente y la risa anacarada
es esplendente luz de tus dientes
que inunda tu límpida cara.
Cuando necesito verte me miro en el espejo de este…
Retrato de Miguel Hernández.
El generoso y enamoradizo Miguel,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 173
Mil poemas a Miguel Hernández
durante su corta e intensa vida,
fue un pincel carmesí, que pintó
de amor toda su odisea,
en cambio recibió muy poco.
Con sobrenatural plenitud mental
y madurez literaria, entregó
el triste y escaso lamento.
Bonhomía y hombría:
¡Lo más pesado del cuerpo!.
José Miguel Arranz, Bruselas, Bélgica
Soneto a Miguel Hernández
Por los altivos riscos de tus lares
y niño tempranero cual la aurora
tu rebaño conduces como otrora,
sabor guardando en tu zurrón a pares.
Libros, tu pan más suave que manjares
dan remedio a tu hambre trovadora
que rebrota en el día y a la hora
hecha Flor de exquisitos paladares.
Cucaña agreste el rastro de tu vida,
perfume de alhelí tan corto y fuerte,
avatar de premura como aviso.
Grave trasiego de extremada herida,
anticipo y presagio de tu muerte,
eres Lengua de fuego y compromiso.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 174
Mil poemas a Miguel Hernández
Ana Esmeralda Piña Recuenco, España
MIGUEL…
(HOMENAJE A MIGUEL HERNÁNDEZ).
Entre versos con sabor a derrota
se abre tu imagen de bruma y mies,
jamás fuiste barrote sino alondra,
compañero del alma,
Miguel…
Palabras henchidas en el letargo
de un alba que jamás llegó,
quebrantado entre requiebros de espanto
florece de nuevo el poeta que fue pastor.
En el aire aún palpita tu ausencia,
la del hombre que jamás silenció su voz;
el pueblo ya llora sus tres heridas,
la de la vida,
la de la muerte,
la del amor…
Hoy de nuevo seré el hortelano
que acaricia el miedo bajo la piel,
hoy renacen vientos del pasado,
compañero del alma,
Miguel…
Alfredo Alberto Torres, Argentina
CANTODOLOR DE AMOR
¿ Por qué la luz solar y el aire / aliados
pueden cantar y ser sufriendo a un tiempo?
Porque el amor por todos es más grande
Para quién sueña a lo Miguel Hernández /
Cómo es que España fue salvando obstáculos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 175
Mil poemas a Miguel Hernández
para dejar atrás alevosías / violentas herejias
y la inhumana inqusidora rémora?
Porque se van ganando libertades
democracia / justicia / paz y luz
si el combatiente es un Miguel Hernández /
Cantan con él pr todos los caminos
sus ideales / sus lúcidas metáforas
las iluminaciones de su voz sin mengua
y el cancionero de un nueva España /
Vibran alucinados por su gloria
hialina roca labrada en Orihuela
los lirios / los olivos y el laurel
encendido en la sangre de otro tiempo
el que adviene de industrias y trigales
inexorable despertar en ciernes
sobre la tierra que esperó sangrando /
Hoy es nardo de amor que fue elevándose
dando la claridad del despertar
el que todos deseamos paa España
transfigurándose y hacia el futuro
vive en nosotros / canta y nos sonríe
desde su corazón Miguel Hernández //
LA VIDA DIGNA , LA PALABRA EN VUELO
No / no pudieron/ ellos los mas oscuro
no pudieron contra los resplandores
de tu voz en pugna...
eran vientos / pájaros
los de Miguel Hernández
por ser vientos del pueblo/
no. no pudieron...ellos retrocedían
creyendo que avanzaban
se estrellaban contra tus murallas/
tus murallas de luz
Miguel Hernández
coronada de antorchas insurgentes/
si pudo/ la belleza de tu canto
una flor y otra flor
del árbol gigantesco de tu sufrimiento
un fruto y otro fruto constelados
de música y poesía/
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 176
Mil poemas a Miguel Hernández
una flor y otra flor fueron naciendo
de las gotas de sangre de tu España
porque más han podido tus palabras
bombardas de metáforas sin mengua
lluvias de flechas encolerizadas
amapolas de amor de tu humanismo
nardos blindados de épico lirismo
lanzas de dignidad/ hachas de fuego
aviones impregnados de ternura
perfumando tu España de esperanza/
no han podido lo falso y lo ominoso
no pudieron ni espurias homilías / ni las traiciones
de criminosas garras
pudo si/ pudo mas Miguel Hernández
en todas las vanguardias/ con sus soles
hoy laureado fulgor de pie y eterno
en todas las trincheras de estos cielos//
Malu Otero, Brasil
FUERZA POÉTICA
(Homenaje a Miguel Hernández)
Cuando se mira a lo lejos,
Se percibe lucha distinta,
Sin sospechas y sin dejos,
Se sabe de forma sucinta:
Nanas de cebolla logran
Hacer llorar el presente,
Como el poeta todos prueban
¡Del mundo anclado en su mente!
Se puede cruzar espacios,
Se puede vencer el tiempo,
Se puede llegar despacio
A recobrar el momento:
En un simple movimiento
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 177
Mil poemas a Miguel Hernández
Que es de pura fe y lucha,
Que no es triste lamento,
Pues combate la tortura.
Se puede llegar más allá,
A pesar de las heridas,
Que el hombre incauto abrió
Con guerras tan fratricidas.
HERIDAS
El poeta llegó con notables heridas,
Pero la poesía le abrió el horizonte.
Han sido más que todo fruto de la vida,
El pecho cuidadoso de todos las esconde.
Logró saber que un día ellas se cerrarían
Y de nuevo se volvería a empezar...
Las tristezas apenas las recordaría,
Porque vivo estaría el hecho de luchar!
La muerte es lo único que no tiene remedio,
Pero aún así el amor deja su marca.
Enfrentarse el poeta con las tres heridas
Le ha tocado y eso lo hizo más fuerte.
Nos ha llegado el reto por su intermedio:
No importan las heridas, lo que importa
Es la lucha de uno por cambiar la suerte,
El amor es lo que puede dejar su marca,
Solo él puede más que la misma muerte.
CÁLMATE, MIGUEL
Coraje y lucha sin cobardía
Cálmate, Miguel, ya pasará,
No te imagines lo peor:
¡Tu gente todo lo enfrentará!
Lo peor lo viviste un día…
Cálmate, Miguel, tú verás,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 178
Mil poemas a Miguel Hernández
El pueblo tiene gran valor,
La crisis, juntos, la superará.
CONSTRUCTOR DE CAMINOS
Tus caminos los buscaste,
Sin atarte a comodidades,
Sin temor, te los buscaste.
Miguel, constructor de caminos!
Por el bien de todos, por la libertad
Y, cuando se manifiesten veleidades,
Recordaremos tu lucha y dignidad:
Por el bien de todos, por sus destinos.
ANTES DE TI
Ha habido otros antes de ti,
Pero de tu estirpe muy pocos,
Con tantos ideales, translúcido así…
Como un cristal, sin disfraz,
Has sido un hombre como pocos,
Todo lo hiciste por los demás.
Has combatido la opresión y desidia
Dando tu vida, tu integridad, tu familia
SUPREMO BIEN
Vida de campesino, pero hubo un afán,
La poesía que te dijo ¡VEN!
Y a partir de eso las palabras te animan
Y creces, y creces tanto, pero tanto,
Que de pronto ya no cabías con espanto
En aquel pequeño mundo, había crecido
Tu horizonte y ya pensabas en el supremo bien:
La democracia, el pueblo dueño de su destino.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 179
Mil poemas a Miguel Hernández
SUEÑOS
Cuando los sueños nos conducen
Transforman nuestras vidas
Y tú has sido un soñador
Un soñador con acciones
Un soñador con coraje
Los sueños pueden cambiar el mundo
Por eso sigues con nosotros
En los sueños por un mundo mejor.
A Miguel Hernández
Orihuela te esperaba y llegaste,
Primero tan tímido, pero luego,
Con gallardía el mundo ganaste.
Primero Madrid, y otra vez al pueblo
Volviste, tus raíces, otra vez allí...
Pero a otros poetas supiste mirar,
Ardía un deseo, te llamaba Madrid.
De otros poetas te pudiste acercar,
De todo y de todos supiste aprender
Y buscar una causa por la que luchar,
Y con tu experiencia pudiste crecer,
Decidir de la guerra participar.
La poesía fue arma, fue bravo fusil,
Con que defendiste elevado ideal,
Te ensanchó el horizonte de azul añil
Y creó dimensión así algo especial,
De quien se dedica con alma a su gente.
Orihuela, su cuna; el mundo, su huerto,
Donde ha sembrado con amor indulgente,
Poesías por la unión de su pueblo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 180
Mil poemas a Miguel Hernández
Socorro Carranco, México
SOLDADO Y POETA
Tus pasos decididos
pisan pólvora esparcida
remueven llanto.
Duerme soldado
se acerca cinco de enero
empieza a soñar.
Vuelve amigo
para mirar a tus hijos
crecer como el trigo.
Nuevos vientos anuncian
tu despertar en libertad.
Vuelve Miguel vuelve.
Wilfredo Dorador Astudillo, Chile
Homenaje a Miguel Hernández
Sobre las sombras sembraremos con la luz que fue golpeada
los nuevos bosques. Los nocedales del fruto imaginado.
Como las olas del mar avanzan los pueblos libres en la Tierra
y flamean indestructibles las banderas de la nueva vida.
No será un deshecho de muerte vuestro maldito casco de guerra,
Sobre él, ¡Miguel Hernández, Miguel!:
Una magnolia magnífica elevará, al fin, tu ternura.
¡Un tiempo de azucenas y jazmines se avecina!
Las aves fraternales saludan al océano de las fecundidades.
Sobre las sombras sembraremos con la luz que fue sacrificada.
¡Contemplen la nueva realidad de la Paz el amor y la dulzura!
El Universo me obsequió sus turquesas fluviales
y los ríos regresan con la miel de las enhiestas montañas.
La conciencia es este Universo invulnerable:
¡Sólo en los rebeldes e indómitos nace y vive la Libertad!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 181
Mil poemas a Miguel Hernández
Al dolor de milenios llamarán “raíz de toda primavera”.
Restituidas las rosas en su sangre
se reunirán los girasoles a obsequiar el polen humano de la fraternidad
y los héroes laboriosos construirán la más excelsa dignidad.
Este es el mar de las inmensidades:
las fuerzas obreras de la más honesta humanidad.
La Poesía es el pueblo que se moviliza en las calles
como el mar del amor que avanza incontenible
y se yergue en la historia social con su bandera de inevitable Libertad!
¡Es el viento del Pueblo el que te nombra;
es el viento de Libertad del Pueblo el que te llama!
María Marrero Berbel, España
A Miguel Hernández.
(Desde Orihuela, su pueblo y el nuestro).
Lloró el olivo escapándose en poemas,
con las manos del viento destilado,
con los pasos perdidos o quemados,
con las cuentas calladas entre penas
y aquí se queda escrito en la libreta,
los grillos de tus noches olvidadas,
las cárceles del alma tan cercadas
y los suspiros del aire en Orihuela.
¡Qué sabes tú, Miguel, de islas lejanas!
Tú sabes tanto de lo lejos y lo cerca,
de aquellas cosas que no tuvieron su mañana,
de aquel ayer que no sirvió de nada,
de aquel ayer que no cerró su puerta,
y de este hoy hecho poesía que se derrama.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 182
Mil poemas a Miguel Hernández
María Luisa Mayorga Sánchez, México
Cuando pasa el amor.
Un día Miguel Hernández ,
te leí en un poema ...
en un tiempo dónde el amor
me transpiraba, me bebía entera.
Y aquel..."Pasó el amor, la luna, entre nosotros"
me hizo estremecer con la cadencia franca
de aquellas dos palmeras que nunca se abrazaron.
Las imaginé tendiendo sus ramas hacia el otro
apasionadas.
Sonreí; porque tu voz hacia eco en mi sentir
y amaba amando con esa fe ciega,
que nos nubla extasiada los sentidos
cuando el amor es brisa, es luna, es latido.
Mucho tiempo después...años quizá
volví a leerte en aquellos renglones.
Que distintas palabras susurraron tus letras,
a mi alma...a mi oído.
Aquellas palmeras me hablaron de cautela,
ya no ...de aquella hermosa entrega
La luna, la playa...me hablo de soledad.
El arrullo del oleaje besaba la playa
borrando los últimos vestigios de un nombre;
el nombre del amor, no del primero ...
que lleno de utopía e ilusión se queda en el recuerdo
si no del real...ese que destroza la vida
y en jirones deja el corazón confiando
rogando por olvido.
Pasó el amor...
que tristeza profunda comprobarlo.
Pasó el amor...en él, no en ti
el corazón se queda cual fantasma errante
a la espera de ese olvido que asciende hacia el amor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 183
Mil poemas a Miguel Hernández
Tu portavoz Miguel.
Yo suelo preguntarme vate Hernández
nacido en Orihuela y muerto en la tristeza.
Que te llevaba a ti ...a las trincheras ?
un ideal quizá ; de un mundo nuevo
equitativo , libre y generoso
más todo aquello resumiose un día Miguel
en una oscura celda que matara tu gozo.
Te intuyo en un rincón ensimismado,
escribiendo apasionados versos.
Tu canción del esposo soldado...
dónde sabias que estabas describiendo,
aquella vida que te había dejado.
Poblaste un vientre de amor y de esperanza,
en visita fugaz a tu terruño, no disfrutaste nunca
al hijo de esa entraña ...pues partió...
negándose a vivir, en un mundo que se antojaba fiero
y quedose ahí ...en el hijo de la luz y de la sombra
en ese amor intenso de tu alma ,donde clamas:
¡Todo es confuso, menos tu vientre!
Te he leído y siento que el corazón se estruja
al escuchar que tu naciste en mala luna,
y que tus penas valen mas que toda la alegría .
Toda esa pasión desperdiciada o no...
no alcanzo a comprenderlo.
Cuantos valientes se lanzan a la lucha, ignorando
que solo la tristeza, el dolor y el olvido
abrazaran del todo…el entusiasmo, el valor, el arrojo
como tormenta airada del verano ,
que por hacer un bien...al empapar la tierra ...
destroza inclemente; lo que a su paso encuentra
Quizá hoy, allá donde te encuentras ...
sonrías al escuchar hechas canciones
tus doloridas poesías, tus versos acuñados al dolor.
Si, quizá sonrías al son de la ternura de nanas de la cebolla .
O tu corazón se agite inquieto en la sombría melancolía
del hijo de la luz y de la sombra en la voz de Serrat
valiendo aquí la tenue redundancia
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 184
Mil poemas a Miguel Hernández
¡tu portavoz Miguel!
Detener ese tren.
Silencio que naufraga en el silencio,
de aquel tu oscuro tren de los heridos.
No imagino Miguel que es lo que tu pensabas;
al hacer de los trozos que dejan las metrallas
un poema cargado de dolor, de silencio y de muerte.
Aquel tren que arrojaba brazos, piernas , ojos
y te hacia encogerte estremecido visualizando
de la guerra impía de todo tiempo y lugar.
Aquellos tristes y heroicos despojos.
Un día cualquiera en ese vicio mio de leer;
me empapé de la guerra inglesa contra Napoleón.
Tarde con tarde corrí hacia aquel muelle ...
donde llegaban en pedazos, hombres y hombres-niños,
que habiendo luchado contra el corzo,
sin importar sus cuerpos mutilados...
ansiaban estar listos para de nueva cuenta,
luchar a su manera contra aquel invasor.
Cuanto dolor y cuanta sangre...imaginaba,
y me perdía en las letras sintiendo raramente
que el alma estremecida...compartía aquel dolor.
Eran solo palabras en las hojas de un libro,
bien contadas...tan bien, que muchas veces
mis lágrimas rodaron en sus hojas ,
sintiendo con el alma ...dolor y compasión.
Así te leo yo a ti Miguel Hernández,
¡con el alma! no solo mi mirada es quien recorre ...
el silencio, la noche que no acaba, el dolor
Aun hoy…¡yo también vate Hernández, yo también!
quisiera que ese tren se detuviera al fin
en luminosa estación donde permeara,
la paz ...la armonía y la equidad.
Dando fin al dolor de tantas patrias,
desgarradas y heridas…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 185
Mil poemas a Miguel Hernández
cuyas tierras se empapan con la vida ...
que escapa de la sangre derramada,
de sus hijos ;que la quieren liberar.
Tres heridas yo
Un día de esos, poeta de Orihuela;
en que la tristeza más profunda
me bañaba el alma de melancolía.
Escuché de Serrat ese poema tuyo
vate Hernández, "llegó con tres heridas"
Pensé que todos vamos por la vida Miguel,
con esas tus heridas vueltas canción.
Que Serrat, Joan Báez, Nana Mouskouri
le van eternizando con amor y dolor.
La del amor...ese amor,
que lacera el alma de emociones...
y rompe el corazón más de las veces
que lo colma de amor y de venturas.
La de la vida Miguel;
quizá, es la torta aquella
que el vulgo te asegura ...
lleva todo niño nacido
bajo el brazo.
La de la muerte...
que es la única certeza,
que podemos tener en esta vida
desde el momento
de nuestro nacimiento
Igual que tu Miguel...
con tres heridas yo:
la de la vida ,
la de muerte,
la del amor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 186
Mil poemas a Miguel Hernández
Mª José Vidal Prado, España
COMPAÑERO DEL ALMA
Todo era confuso
menos tu voz
cuando lloré sobre la tierra
tan temprano.
Tu verso fue la espada
más victoriosa
y corté las cabezas de los ídolos.
Después de la batalla,
tomé tu corazón por alimento.
Tu sangre me hizo libre,
me puso alas.
Esther Rogessi, Brasil
Miguel Hernández da ordenha de cabras à poesia
Orihuela – cidade-oásis, espanhola. Mãe-terra de Hernández,
rico em simplicidade.
Cresceu tal qual Davi – pastoreando.
Na ordenha de cabras, embaixo do céu estrelado; na luz da lua, ou,
na chuva, encontrou a poesia – o belo.
Poderia ser rude em modos; não dado a cultura;
aparentemente bronco – a força adquirida com o trabalho duro;
o corpo fadigado, suado...poderia induzi-lo a isso.
Mas, nem tudo que o homem faz denomina o que ele é de fato;
nem sempre o homem condiz com os seus atos.
O homem é uma incógnita; é surpreendente, principalmente para si.
Em meio à natureza Hernandez se encanta com os seus mistérios.
Desperta no filho do empreiteiro de gado, o desejo de expressão literária;
de ordenhar as letras e transformá-las em leite forte – alimento surreal.
Buscando estudar, destacou-se por sua inteligência.
Aos quinze anos de idade, deixa os estudos para atender
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 187
Mil poemas a Miguel Hernández
as necessidades financeiras da família – volta ao pastoreio de cabras.
O ardor de sua alma, pela poesia faz com que,
ele transforme os momentos solitários do pastoreio, em aprendizado:
dedica-se à leitura: Zorrilla, Gabriel y Galán, Miró,
Dario Ruben, adentram o espírito do poeta saciando-lhe a sede poética; induzindo-o a
escrever os seus primeiros poemas,
corrigidos pelo jovem Sijé Ramon que o conduz a leitura
dos clássicos e da poesia religiosa.
A tamanha sede de aprender alimentou e fortaleceu sua alma.
Em 1930 Miguel Hernández começou a publicar os seus poemas.
Assim, começou a alcançar o reconhecimento de sua obra.
Na segunda viagem a Madrid conhece Josefina Manresa
vindo a se apaixonar. Em julho de 1936 o poeta participa da guerra civil,
foge para contrair núpcias matrimoniais, aos 09 de março de 1937.
Nem mesmo a guerra o afastou da poesia, porém,
o stress oriundo das múltiplas atividades, o conduziu a enfermar –
anemia aguda.
Em 1939 Hernández é devolvido às autoridades espanholas
tentando atravessar as fronteiras portuguesas.
Começa então a peregrinação do poeta do povo pelas prisões espanholas: Sevilha,
Madrid, Ocana, Alicante. Em setembro de 1939 ele é solto.
Volta a sua terra – Orihuela, onde é preso mais uma vez.
Seu corpo debilitado sofre uma tuberculose pulmonar aguda,
em ambos os pulmões. Dor, amargura, tosse e hemorragia aguda consome
inexoravelmente Miguel Hernández que vem a falecer aos 28 dias do mês de março
de 1942, aos trinta e um anos de idade.
Imortalizado por sua obra magnânima desperta, hoje, aplausos;
a saudade de não o tê-lo conhecido;
o aprendizado no tocante ao fato de que, há poesia na ordenha;
no cultivo de ervas; no pastoreio de cabras, gado; no amor;
na paz e na guerra; na vida e na morte; há poesia além dela.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 188
Mil poemas a Miguel Hernández
Ramiro Rodríguez, México
VIGÉSIMA DE LAS FRUTAS
Me tiraste un limón, y tan amargo
Miguel Hernández
Si dices sin rodeos que me quieres
se derriten de gusto las guayabas,
se pueblan de fulgores las palabras
en los espasmos de limones verdes.
Si dices que mi vientre te estremece
me lamen de calor las mandarinas,
sin la catarsis se me acaba el día
en la ebriedad sutil de las toronjas,
la maldad de las uvas me trastorna
en un coloquio inquieto de semillas.
Si dices sin rodeos que eres mía
soy mango para el tacto de tus manos,
durazno que consiente tu descaro
y en tu lengua, el licor de la sandía.
Si dices que en mis brazos resucitas
la textura del níspero se enmienda,
se convulsionan de color las fresas
en la blancura intensa de tus dientes,
si dices fragmentarte de placeres
en los cuerpos tatuamos la materia.
ESTATUA
Me tiraste un limón, y tan amargo
Miguel Hernández
Me tiraste un limón, y tan amargo
que me volví contorno en las paredes,
una estatua sin nombre en los burdeles
para exhibir las ruinas de la imagen.
Mi tirante un limón, y tan amargo,
me callé como calla el delincuente,
me morí como mueren los imberbes
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 189
Mil poemas a Miguel Hernández
cuando ven su navegación sin nave.
Me tiraste un limón, y tan amargo
que me advertí tatuado para siempre,
me encontré en los espejos indigentes
para quedar como insecto en el aire.
René Arturo Cruz Mayorga, El Salvador
PASTOR DE VERSOS
Poeta cantor
amante de las palabras
te convertiste con amor
en pastor de cabras.
Recorriste los campos
con alegría
llevando en tus ojos
la emoción de un nuevo día.
Te paseabas por los valles
admirando el universo
llevando en tu alma
la belleza de tus versos.
Orihuela te vio nacer
al pie de la sierra,
sin saber que te convertirías
en el Poeta de tu tierra.
Tu ocaso fue tan temprano
que a causa de una querella
España en un verano
apago una estrella.
Con tu alma de cantor
pasaste por Huelva y Sevilla
esparciendo el amor
de tu alma limpia y sencilla.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 190
Mil poemas a Miguel Hernández
Cuando letrado bebiste
el cáliz del dolor
y de la amargura
acompañado de
Alberti, Rosales y Neruda.
Con tu muerte
las autoridades
acortaron tus años
dejando como escaño
la cárcel de alicante vacía.
SIGUES VIVO
Siempre te recordaran
en este universo,
porque la poesía guardara
eternamente tus versos.
Tu cuerpo inerte
permanece en calma
venciendo la muerte
con los suspiros del alma.
Orihuela no olvida
aquellos hermosos días
que viviste a plenitud
lleno de entusiasmo y alegría.
Tu oración secreta
aun se escucha
en los campos agrestes,
la plegaria de un poeta
que cree en los seres celestes.
Muchos piensan
que tus recuerdos se alejan,
pero entre mas pasa el tiempo
el pueblo contra el ayuntamiento se queja.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 191
Mil poemas a Miguel Hernández
TU NOMBRE
Tus huesos se han
vuelto inmortales
apareciendo junto
a los nombres de
Neruda y rosales.
Estas entre los
poetas luminosos,
ahora subes con ellos
acariciar las estrellas
lleno de gozo.
Fuiste el halcón rebelde
que creció en los
campos de Orihuela
llevando en sus alas
el perfume de la primavera.
Ahora tu semilla crece
como trigo maduro
en la sangre universal
de la tierra.
El viento recoge
tu silencio
recoge tu mirada,
para que nunca
tu memoria sea olvidada.
POETA CANTOR
Para Orihuela nunca cambias,
sigues siendo el mismo,
el poeta cantor
que nunca envejeces
y que a cada momento
en su historia reapareces.
La justicia contigo
fue muda,
olvidaron quien eras,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 192
Mil poemas a Miguel Hernández
tratando de condenarte
o intentando que murieras.
El poder blasfemo
preparo tu caída
con el deber supremo
de encarcelarte en una celda
para toda la vida.
Tu final fue un triste destino
de mucho dolor
sembrando en tu camino
espinas en vez de flor.
La inteligencia militar
te encerró en la prisión
sin saber que tu pueblo,
te iba a inmortalizar
llevándote en el corazón.
Ahora el pueblo
te sonríe,
el pueblo te canta,
porque saben que vives
en la ciudad santa.
CANTO A LA MUERTE
Miguel, pensaste que morir
era dejar de suspirar
y quedarte quieto
para siempre.
Pensaste que morir
era cerrar la bóveda azul
de tus ojos y navegar
en el mar infinito
de la oscuridad.
Pensaste que morir
era cerrar la ventana
del pasado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 193
Mil poemas a Miguel Hernández
y olvidarte
de los sueños
del presente.
Pensaste que
estar muerto
era dejar de
comerse
la manzana
de la vida
y entregarse
al olvido.
Jamás pensaste
que estar muerto
era otra forma de
estar vivo.
Ahora caminas con el pueblo
levantando tu nombre
en las avenidas de las ciudades,
condenando el abuso de poder
que cometieron contigo las autoridades.
Thelvia Marín Mederos, Cuba
NANA A MIGUEL HERNÁNDEZ
Miguel Hernández, deja
que te acune en mis brazos
y te invente una "nana"
donde vuele tu verso
en un rayo de azogue,
de clavel y de llama.
En tu cárcel de sueños
la libertad es lágrima:
"Nana de la Cebolla"
que en silencio le cantas
a ese niño que duerme
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 194
Mil poemas a Miguel Hernández
en el líquido amniótico
de la mujer que amas...
Tu mano se desliza
en la comba dorada
de tu sangre futura.
La estrella que te aguarda
no te abandona : sufre
y tú, mártir de pueblos
derrotas la nostalgia
y retas al destino;
en el eterno jueves
de tu muerte anunciada.
Déjame que te acune;
déjame que te cante
hasta siempre, una "nana"!.
DÍA JUEVES
(al Jueves de Miguel Hernández)
No me importa
-claro estáAlguien que no sea yo
en la insignificancia de este jueves.
Urgido de otros nombres
mi andar repite su historia
pero hoy no me interesa la palabra
sino la voz que la pronuncia.
-cierto esEn la clarividencia de esta hora
no quiero otro ejercicio
que este decir domesticado
con el que juego a la verdad:
-puede serque ensaye un acto generoso
conmigo, ya que siempre
uno se afana en pensar en los demás
y no se arriesga a dedicarse un jueves,
ni siquiera aquel jueves de París
junto a Miguel Hernández.
-Es decirque el azul no se encorva
bajo el peso del cielo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 195
Mil poemas a Miguel Hernández
porque vaya a llover
y el mundo no se inmuta
aunque en el pentagrama de mis dedos
estén escritas
las siete claves de la vida.
-Pregunto¿de qué me vale tenerlas
si he comprendido en jueves
cuánto mentía al proclamar
que no me importa en jueves
alguien que no sea yo?
-Por tanto-claro está-puede ser-es decir -afirmoque he de ofrendarte un jueves.
Francisco Coimbra, Portugal
MIGUEL HERNÃNDEZ
Todos os poetas
amantes da poesía
e do teatro das letras
deveriam ser cantados
em Miguel H. foi-se um
poeta que morreu jovem
amado pelos deuses…
deixo estes versos
para levar seu nome
até a imortalidade acabar!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 196
Mil poemas a Miguel Hernández
Rodrigo Verdugo, Chile
SETENTAYDOS AVO ANUNCIO
A Miguel Hernández
Un día las lámparas tendrán que tener su propia luz
Y ya nadie podrá cambiar nada en esta raíz
Seguiremos el viaje que la piel abandono
El silbido de la luz llama a que la oscuridad escriba
su nombre en las camas
No es solamente niñez de las raíces
Esto de enterrar ríos en la sangre
No es solamente niñez de las raíces
Esto de poner un candado de abejas en las escaleras del ovario
Porque los que aun no han nacido tienen rostros
que son apretados por montañas
El sol les hace de nuevo la mascara
Y así pueden subir
Mientras una orquesta de lombrices dirige
el movimiento de nuestros pies
Lo que se demora en ser fuera de nosotros
Como la sal y la espuma
Es lo mismo que se demora en estacionar relámpagos
Y tú huyes, antes que los hombres te hagan una playa diluida
Y la sangre no encuentre las flechas
Vamos a ver como enjuician a los relojes en los cementerios
Vamos a ver como algo se vacía sin rebalsarse fuera de nosotros
Vamos con esta despedida de sangre
Que es como dejar candados de abejas en las escaleras del ovario
Que es como una ausencia vertical en medio
de todos los estallidos y de las camas
Me aprietan el rostro las montañas
Sale espuma, y sal
Yo no quiero subir desde el ovario
Porque allí el sol me hace de nuevo la mascara
Y después el hueco vendría del sueño
Y ya nadie podrá cambiar nada en esta raíz
Los que aun no han nacido
Se guarnecen en un candado de abejas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 197
Mil poemas a Miguel Hernández
Las montañas nos aprietan a todos el rostro
Aquí esta la sal para petrificar el caos
Esta es la orquesta de lombrices que hace un cristal
Donde el infinito se interroga así mismo
Consiguen nuestros pies el movimiento total
de esa orquesta de lombrices
El silbido de la luz llama a seguir ese viaje que la piel abandono
Lo que se demora en ser fuera de nosotros
Lleva sal y espuma para esas playas diluidas
Los hombres huyen, se justifican,
ante la ausencia vertical que llevan sin querer
Los relojes serán enjuiciados en los cementerios
Oh sol hacedme de nuevo la mascara
Algo se vacía sin rebalsarse fuera de nosotros
Oh mujer, no cesaran las montañas de apretarnos el rostro
Aun así te besaremos
Aun así vamos a guarecernos en ese candado de abejas
Y enrojecidos bajaremos por la escalera del ovario
Una orquesta de lombrices dirigirá el movimiento total de nuestros pies
Y esto no será solamente niñez de las raíces
Es la propia luz que algún día tendrán que tener todas las lámparas
Carmen Rosa Monzon Delgado, España
AL POETA DEL PUEBLO MIGUEL HERNANDEZ
Naciste de un pueblo
Que aborrece el totalitarismo
Que aborrece la opresión
Que ama libertad
Como tú mismo
Por encima de todo.
Viviste amando al hermano fraterno
Compañero del alma, compañero
Hasta que te dejaste el aliento
Ese aliento indómito e indeleble
De tu camaradería
Ese Amor por el pueblo
Intocable e intachable
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 198
Mil poemas a Miguel Hernández
El amor por la verdad, la justicia y la libertad.
Y, por el fin, nos haces libres.
Con tu pasión libertaria: EL AMOR FRATERNO
Irradia por siempre inmortal
Hermano poeta del pueblo
Por siempre amante.
Viva, latente, está tu floreada obra
Jardín vibrante que siempre añoraré revivir.
Paz Ortuzar Fuenzalida, Chile
A Miguel del pueblo
Porque caminaste
desde el campo a la ciudad
Desde tus huellas
A las de la patria
Desde tus letras
Al mundo
Desde tu amor
A Josefina…
Desde siempre
Y hasta ahora,
en donde te encontramos
y te alabamos…
En la esperanza de verte sonreír
Sanar tus heridas
Y llevarte rumbo a Orihuela.
Tu campo amado
Tu amada y tus hijos
Y sembrarte en la tierra
Cual árbol fecundo
Para tomar tus frutos
Dulces de la vid
En mostos divinos…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 199
Mil poemas a Miguel Hernández
Haciendo un ¡salud, Miguel!
Por tu terraneidad
Y celestial obra…
Espíritu imperecedero
¿Porque será Miguel,
Que no te siento lejano?
Hay fuerzas magistrales
Que dejan las huellas en la tierra.
Hay huellas en la tierra
Que no se borran jamás.
Hay imágenes
Que permanecen en el tiempo
Y cada vez son, más claras
Como clara tu mirada
Que atravesó humos densos
De cada batalla
Y prisión desgraciada…
Se iluminan tus ojos
al verte cada mañana
sembrado de estrellas
y de palabras sanas…
Miguel, amigo
déjame sentir
que con tus letras
me siento en pleno vivir.
Quiero ir a tu tierra
Quiero llegar a Orihuela
tomar la tierra que pisaste
amasarla con mis manos
y cubrirme la cara
para sentir cuando tu rostro
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 200
Mil poemas a Miguel Hernández
cayó en desgracia
en la pradera embarrada…
Quiero que mis pasos resuenen
en tu tierra bendita
la que amaste hasta la muerte
sin ser correspondida…
Y en las noches de luna
escuchar tu voz Miguel,
con la tenue bruma
desde la noche
al amanecer…
Jania Souza (Natal/RN-Brasil)
Ideal, Luta Libertaria
a Miguel Hernandez
A luta sempre é a caminhada
de uma alma comprometida
com seus sonhos, seus ideais, seus brios
andeja montes, vales, montanhas
levando no peito o grito ardente
da liberdade de pensamento
da libertaria ação do ir e do vir
do agir em comunhão
pela grandeza de um povo
sua real nação
seu coração
seu chão
seus cantares em versos e rimas
ecoaram por estradas, por vilarejos
na busca de outras emoções pensantes
para unidos fazerem uma única
e forte canção de união
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 201
Mil poemas a Miguel Hernández
sua voz poetou lírica de elevado teor
sem jamais se esquivar ao amor
ao bardo menestrel espanhol
fica a homenagem do rio Potengi
terra do esquecido poeta Poty
que sonhou com liberdade
mas partiu cativo, lutando lado a lado
com as forças opressoras do seu país.
Carmen Sánchez Cintas, España
“POETA DEL AMOR HERIDO”… te
canto
No fuiste barro Miguel
Ni tu voz quedó perdida en Orihuela
Tus palabras rozaron en metal
devolviendo eco y placer,
donde cobijarse
Un olivo centenario, un tronco,
con un reguero de sombra
para los que de furia,
hincharon tantas venas
oprimiendo sus gargantas
¡¡¡ silenciadas!!!
en un perfil de esfuerzo inútil
Impulsor de tantas vidas
que soñaron… que buscaron
Paz y patria feliz…
en un panorama roto , sabiendo
que el drama prosigue
sobre la tierra exhausta
Mamé Miguel, mamé…
La leche amarga de la España
disconforme, desdeñando lo mismo
Igual dolor, ¡abruma! …
Masticar tantos lutos
Cuervos, protestando sin palabra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 202
Mil poemas a Miguel Hernández
engullendo la presa del silencio
ordeñando los pechos con las manos
Amamantando niños, NIÑOS YUNTEROS
asfixiados en moldes apretados
audibles en las distintas tierras
con el amplio paisaje de la espiga
que teme ser quemada
Viví Miguel, viví…
En horas de ayer, todavía, siempre
Como animal manso, agazapado
con los músculos tensos y miedo…
En nuevo amanecer… en un presidio,
sin dejar lugar a morir los sueños
aún sabiéndose fluvial cadáver
…entre los sometidos
Esperar y mirar a la muerte de cara
Olvidando al jilguero en los campos
borrando de su faz …
la paz de la era y la huella del trigo
…esperando molienda
Te amé Miguel, te amé…
“Poeta del amor herido”
Incomparable cantor del pueblo
Empaño con mi aliento el aire
proclamando que te amé
por ser hija, que viviendo
…en vidas paralelas…
aprendí de tu historia
Tantos surcos de dolor,
silbado en tus palabras,
acariciaron mi rostro
Lágrimas, que por algún resquicio,
…entraron en mi alma
SENDA ©
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 203
Mil poemas a Miguel Hernández
Pedro Flores, España
EL POETA AL QUE NO LE GUSTABAN LOS CORONELES
NO TIENE QUIEN LE ESCRIBA
Aunque bajo la tierra
mi amante cuerpo esté
escríbeme a la tierra
que yo te escribiré.
M.H.
Pasó la estación de las cebollas
y Josefina no escribía.
Al pueblo lo partió el rayo, lo barrió el viento
y Josefina no escribía.
Te escribían los dinamiteros, los aceituneros,
los niños carne de yugo con la sangre de sus bueyes,
todos te escribían pero Josefina no escribía.
Se escaparon por el mundo
los toros castigados, los leopardos de la pena,
se murió el tipo de los sellos de la carta que esperabas,
se murieron todos los muertos del cementerio
menos tú,
detonaban las últimas bombas de la guerra
y Josefina no escribía.
Los tinteros son piezas de museo,
los poetas son piezas de museo
y Josefina no escribía.
Entonces se murió Josefina, la muchacha
que se moría de casta y de sencilla
y registramos su alacena y su costurero,
los bolsillos de su ropa negra,
las macetas del patio, los atlas de la ternura
buscando la carta que ella nunca escribió,
o que escribió mil veces
con la invisible caligrafía del desconsuelo
y rompió otras tantas con la rabia sorda
de las amantes abandonadas.
Llevamos toda la vida esperando
que recibas una carta;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 204
Mil poemas a Miguel Hernández
realmente nos creímos
que responderías a esa carta.
Solo ella sabía
que los muertos no escriben,
que era otra argucia del amor,
otro truco de poeta.
Patricia Benavente Vásquez, Chile
Poema a Miguel Hernández
Muchacho amado de ojos tristes
reposada tu voz, castiza y ronca
se hunde triste
en mis lejanas raíces, cuando,
al partir tú
yo aparecía.
Cómo quisiera hablarte
y me escucharas; tú,
sentado en un peñasco,
con tu hato allí, muy cerca
y pícaro me guiñaras
con tu mirada verde
de ojos descalzos, de montaña,
mientras escuchas el nacer de la leche
en el vientre de tus cabras.
Tengo conmigo tu voz,
grabada allá en la distancia,
de la bendita mano del Buero,
tu presencia dibujada
encadenada a mi vida,
no tan sólo por los tiempos.
Me unen a ti tus versos
de hambre, sangre y espada,
de amor a hijos y Patria
y en mi lejana infancia
también mis chanclos vacíos
en la luz de la alborada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 205
Mil poemas a Miguel Hernández
Triste Alicante se queda.
Era Domingo en España.
Las campanas, silenciosas,
tañían penas al alba
por el muchacho poeta
que vino desde la sierra,
a sembrar versos del alma,
de sueños, cebollas y faltas.
Poema segundo a Miguel Hernández
Hambre en la pampa.
Dices que sí, que el hambre,
es la necesidad primera.
Primer grito, primer llanto,
el despegue de la madre
y del seguro alimento.
Con fuerzas que nadie sabe
el niño crece, ya es hombre,
hombre que grita en silencio
y aterrado por el hambre,
llora sus lágrimas secas.
Golpeando piedras el padre
de sol a sol en la pampa
recibe una falsa paga
siempre con falsa moneda .
Lo viste antaño Miguel ,
misma historia, la misma hambre,
que ya ha secado la leche
de otra madre pampina,
y el grito del postrer llanto
es el eco de la historia
que se repite a porfía.
Poema tercero a Miguel Hernández
Me hubiera gustado ser
tu Josefina Manresa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 206
Mil poemas a Miguel Hernández
y disfrutar de tus sueños
de amor, de paz, sin la guerra.
Leer junto a ti en la sierra,
apacentar tu rebaño
sentada en la misma piedra
la de tus primeras letras.
Posar mi cabellera negra
entre tus versos nacientes,
acogerte en mi regazo
que ningún dolor te duela.
Que la sangre de los otros
no entristezca tu mirada
cuando gimes de impotencia,
porque las rejas te encierran.
Cual si fuera Josefina
protegerte yo quisiera
allí, en el rincón de tu celda,
del frío, el hambre, la pena,
tu angustia, la soledad.
Cuánta tristeza me embarga.
No hay mano amiga contigo
que cierre tu mirada triste
cuando, muy lento, te vas…
Samuel Cavero Galimidi (Perú)
Oda al poeta encarcelado
Hoy, todavía nos preguntamos:
¿Quién te sacará de la otra cárcel? ¿Quién?
Si tenías solo 31 años
Alicantino universal
Pastor de versos y de pasiones
entre los azahares de tu dormida tierra
Orihuela, tierra de cancioneros y romanceros
hoy te recordamos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 207
Mil poemas a Miguel Hernández
Hay muchas cárceles, hermano Miguel
Donde no se come pan ni cebolla
Donde se comen las uñas, los dolores y las penas
Esas son:
La cárcel del olvido
de la traición
del desamor
de la guerra y la muerte
de un islote rocoso en medio del mar.
La cárcel, hombre,
es un puñal escarapelado en tu pecho…
y el mío.
Pastor de besos
(y de versos)
Josefina Manresa, tu esposa, lo supo
tu abnegada madre
y Manuel Román, tu retoño
Hijo de la luz y la sombra
que dormiste haciendo PAZ nuestras pupilas
sin conocer tus manos de pastor y tu cayado
también tus pies trashumantes
que odios y rigores penitentes han sufrido
bajo esa carga furibunda martilleando la tierra cual Bucéfalo.
La cárcel, poeta,
es un puñal escarapelado en tu pecho…
y el mío.
Carmen Barrios, España
A Miguel Hernández
Todo tuvo su tiempo, a ti te cupo
observar el horror de las jornadas,
de campos destruidos por el fuego,
de vidas por los suelos desangradas.
Miguel, Miguel Hernández tus poemas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 208
Mil poemas a Miguel Hernández
son gritos, son canciones son nostalgias
de lo que se nutrió tu vida campesina,
de lo que desgarró tu sien acelerada.
Tu corazón y el mío se consuelan
en tristes versos que golpean la nada,
de tanta mala gente que te hirieron,
de tanta rala hierba seca y mala…
De tanto mal nacido vengativo,
de vencedor apostólico que arrasa
dejando consumirse las existencias
en aquellas prisiones de cloacas.
Habiendo terminado la incivil guerra,
siguió una procesión dura y canalla
hostigando a la adversaria idea,
el exterminio triunfó en “la cruzada”.
Nada hay más ruin que las envidias,
el clero mostró apoyo en esa farsa,
y atornilló el yugo a unas cabezas
que atrevidas, soñaron otra España.
El perfil de tu última agonía…
apuntes de un Miguel que muere y clava
sus ojos preguntando a un mundo hueco
por qué no le socorren en su mudanza.
Todo tuvo su tiempo, tu desdicha
es copia de otras más, cruel arrogancia
fue masacrar el paso del vencido,
y escarnecerle con insistente saña.
Olvido sobre olvido y tan injustos,
proclaman las familias afectadas,
no dejan prosperar una Memoria digna
que iguale los dos bandos y misma raza.
Los “otros”, tuvieron sus tragedias,
después, la gloria, misas y alabanzas
para el vencido, el hambre, la miseria,
para los muertos, una tierra ignorada.
A ser posible sin lápidas, ni señas…
que vengan hoy tratando de ocultarla
no es justo y esta Memoria digna
ha de lograrse y serenar gargantas.
Que ya esta bien de acallar protestas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 209
Mil poemas a Miguel Hernández
de perdedores en la sufrida patria
que un día se dividió tan homicida
y fue dejando cicatrices sin curarlas.
Miguel, Miguel Hernández, te dedico
este sentido pésame en la distancia,
tu alma colmenera está conmigo…
tu imagen moribunda ¡me acompaña!.
Verónica García, España
Esta carta sin ojos es para tu lengua en corazón bañada,
para tus golpes.
Pocas cosas han cambiado:
hay cuchillos en el aire,
la emoción sigue siendo del toro y la guerra del hambre,
crecen las mismas cicatrices en el cielo cada día.
Los campesinos han sacado a Dios de los trigales,
el mar muere en el agua y la novia viste de seda sus mejillas de nácar.
Neruda te ha escrito y Lorca le ha contestado en tu ausencia.
Truénate, levántate y cuéntame del hijo y la rueda
de tus brazos en su pelo,
ahora que el pozo se desborda y a mi me falta un cuerpo,
veo el suyo volar hasta la aurora.
¡ Sálvale! que aún tiene quien le quiera.
Para la libertad han volado los puentes,
han traído tristes armas hombres tristes.
Dile a Vicente que han sembrado
Espadas como Labios en las bocas de mañana.
Pocas cosas han cambiado Miguel,
ni los nombres de las calles ni las naranjas.
¿ Recuerdas los chopos? ¿ El silencio bajo las Higueras?
¿Tienes hambre? Si ves a Ramón Cijés dale recuerdos.
Nunca te lo dije pero tuve celos de las manos de Delia
y de tu paseos con María por el Claro del Bosque
pero te perdono que les hayas dedicado un poema.
Cuando hablo el idioma de la tierra me crecen alacranes,
hazte cargo tú de mi voz y de mis ganas.
Sé que gozas de la muerte día a día,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 210
Mil poemas a Miguel Hernández
en ti culminan mis sombras y después de tu amor nada.
Recoge esta carta en los palomares.
No puedo olvidar
que no tengo alas,
que no tengo mar,
vereda ni nada
con que irte a besar.
Tuya,
Josefina.
José Miguel Junco Ezquerra, Isla Canarias-España
APÚRATE MIGUEL, NO TE DEMORES
Apúrate Miguel, no te retrases,
cuidado con el tiempo que te toca,
cuidado con la hiel del enemigo,
cuidado con las patas paquidermas.
Apúrate, saca por los barrotes la sonrisa,
saca tu voz y quédate tranquilo y quédate traspuesto
en algún verso de los que no terminan todavía.
Apúrate Miguel, viene la luna,
vienen los cuervos de la despedida,
viene a caballo negro la venganza,
viene hacia el corazón la muerte ciega.
Saca también los ojos, el semblante, saca la tos,
la magua, la nostalgia, que aquí afuera te haremos la casita
para que arrulles con tu canto el aire.
Apúrate Miguel, te han señalado el instinto animal
y los designios del yugo y de la flecha envenenada,
y no van a parar hasta dejarte quebrado en una esquina y sin resuello.
Ya lo sabes Miguel por las cadenas,
por las sombras que crecen en tu pelo,
por las claudicaciones de los trigos,
por la ausencia del sol en tus mejillas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 211
Mil poemas a Miguel Hernández
Apúrate Miguel, viene la noche y han secuestrado lágrimas
y estrellas y aguardan a que el sueño se te apague y quieren,
ignorantes, que no existas.
Saca también si puedes las dos manos para poder sembrarte la semilla
y así que crezcan fuertes tus prodigios
y que se robustezcan las palabras cansadas de penar lo que tú penas.
Apúrate Miguel, las cicatrices, el silbo vulnerado, la sonrisa,
el mar que se desata en tus pulmones, el ansia que navega por tus brazos,
el sueño que te deja en la estacada, la escarcha que se clava en la cebolla,
los dientes que en la cuna van meciendo el ímpetu de seres que te lloran,
y todos los rebaños de este mundo cantando una canción de despedida.
Apúrate Miguel, no te demores.
Adelfa Martín Hernández, México
CON LOS OJOS MUY ABIERTOS
(A: Miguel Hernández)
Pastor de cabras tu, lector voraz
escritor de versos y soldado
de orígenes humildes, un rapaz
luchador valiente y arrojado
Inmensa fue la obra que heredaste
Las Nanas de la Cebolla; inmortales.
Como un deber sagrado nos dejaste
perpetuar tu recuerdo en los chavales
Traspasaste las fronteras de la historia
contra el esfuerzo vil y asesino
de dictadura cruel y sanguinaria
que decidió por su cuenta tu destino
La mano negra y larga del tirano
desoyendo los pedidos y desvelos
te dejò morir enfermo y solitario
en fría celda, solo y sin consuelos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 212
Mil poemas a Miguel Hernández
Desaparecer tu obra decidieron
eruditos sagaces y mendigos
del poder, que nacía vengativo
Mas no supieron ver, ni nunca vieron
la gran solidaridad de tus amigos
que con riesgo de libertades propias
salvarla totalmente consiguieron
Ultimo acto; rebeldes desconciertos
de un joven torturado, no vencido
fue morir con los ojos muy abiertos
mirando fijamente a su enemigo
EL JOVEN DE ORIHUELA
Perito en Lunas de grandes ambiciones
con su Canto a Valencia de montera
en un viejo Ford destartalado
vuela por los caminos de su tierra
tras su único premio connotado
No descansa ni un segundo en el intento
por alcanzar su ambición una por una
yéndose lejos del terruño que lo acuna
en la búsqueda tenaz de otro sustento
El Rayo que no cesa; a sus pasiones
a su mas entrañable amigo; su Elegía.
Después de Alexandre y Neruda se diría
mas cercano que nunca de los pobres
El niño yuntero, Pastor de la muerte.
Por la injusticia de su tiempo conmovido
nos deja en sus versos de El herido
palabras que desgrana vehemente
Envuelto en los aromas del Azahar
enternecido por El niño de la noche
con valor dio pelea a los fantoches
pues jamás les permitió verle llorar
Ni aun en los momentos que El sudor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 213
Mil poemas a Miguel Hernández
bañó su cuerpo enfermo y abatido
Hernández dejó de escribir su cometido
o de asumir la injusticia con honor
Como el Hijo de la luz y de la sombra
que nos deleita con su Canción primera
se despidió un tibio día de primavera
el joven de Orihuela ...que aun se nombra.
UN POCO DE HISTORIA
Cuando este joven de Orihuela, el gran poeta Miguel Hernández, luchaba contra la
ignominia; contra el oscurantismo que pugnaba por salir de esos recónditos y
tenebrosos lugares donde se agazapa a veces por años, hasta que encuentra el caldo
de cultivo adecuado para desarrollarse, crecer, multiplicarse y corromper todo lo
decente, otros cientos de miles de españoles hacían lo propio, algunos, en lejanos
lugares de esa España que, a pesar de los esfuerzos de tantos inocentes que dejaron
en ello la vida, está a punto de sumirse en una de las mas negras, largas y
vergonzosas etapas de toda su historia.
Uno de ellos, un humilde desconocido, y con poca diferencia de edad – nacido en
1906 en la Isla de La Palma (Canarias) -, de nombre Argelio Martín García, luchaba
también en frentes similares, participando en el Bloque Popular de Izquierdas del
municipio, por el Partido Comunista, habiendo constituido en 1933 la Unión de
Trabajadores de Breña Alta, donde fue elegido como Secretario, y como Presidente
en 1936, además de Concejal del Ayuntamiento. Con el triunfo masivo del Frente
Popular, se legalizaron los partidos de izquierda, apareciendo su nombre entre los
firmantes. Fue secretario General del Radio Comunista de Breña Alta, y en la
Primera Conferencia Insular, elegido miembro del comité. Al llegar el tristemente
célebre barco Canalejas, huyó, siendo apresado posteriormente, torturado y
condenado, primero a muerte y luego conmutada la sentencia a 16 años de cárcel,
debido a los buenos oficios de un Obispo. Al no haber existido frente de batalla en
las Islas Canarias, los presos fueron sacados de las improvisadas cárceles – muchos
de ellos bajo prisión atenuada - en 1940. Argelio finalmente obtuvo su libertad en
1941, aunque junto con otros compañeros, férreamente vigilado, pues incluso se les
impedía trabajar, esperando que cometieran algún error. Este hombre, fue mi padre.
(*1)
La situación en la España peninsular de Miguel Hernández, la que le tocó vivir junto
a tantos jóvenes contemporáneos, que aún muchos años después de terminada la
guerra, permanecieron presos en esas lóbregas cárceles parecidas a mazmorras de la
edad media (en una de las cuales falleció), y donde siguieron los juicios sumarios, las
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 214
Mil poemas a Miguel Hernández
torturas y ejecuciones de esos “rojos malditos”, a pesar de las peticiones de
clemencia que llegaban de diferentes partes del mundo - incluso de Roma -, se
considera aun mas triste, y ello, porque ciudades como Madrid por ejemplo – entre
muchas otras -, habían quedado casi destruidas y la poca infraestructura existente por
aquéllas épocas, así como los campos, estaban en total abandono.
En las Islas Canarias de los 40`s, cuya economía era básicamente rural, el hambre no
fue tan apremiante como en la península, seguramente debido al hecho de no haberse
librado batallas con sus consiguientes consecuencias destructivas, aunque las
famosas libretas de racionamiento si continuaron – como en todo el territorio- hasta
muchos años después de terminada la mal llamada Guerra Civil- realmente un golpe
de estado -, y no lo fue además, porque el que mas y el que menos tenía una huerta
donde sembrar–a pesar de las escasas semillas-, se podían criar en casa gallinas y un
puerco –que se compartía con vecinos y familiares- y que se alimentaba con sobras y
algo de afrecho -cuando era posible-, salándolo y guardándolo para todo el año. Se
tostaba y molía el poco maíz que se encontrara, mezclado con cebada, para el
indispensable y típico “gofio” - que se elabora normalmente de trigo -, y se compraba
o canjeaba por huevos, papas, queso ahumado u otro alimento, el pescado fresco que
pasaban ofreciendo. Pero en la España continental, las cosas eran diferentes y mucho
más duras.
Podría pensarse que habiendo salido Europa de una terrible guerra que la dejó piedra
sobre piedra, la falta de ayuda hacia este país se debía a eso, pero realmente lo fue,
primero, por el hecho de que el “Generalísimo Francisco Franco, Caudillo de España
por la Gracia de Dios”, había asumido el mando sobre los cadáveres de un millón de
muertos, y particularmente -a los ojos de una humanidad especialmente sensibilizada
y horrorizada-, debido a su apoyo y simpatía incondicionales, tanto por la Alemania
Nazi, como por la Italia de Mussolini, cuestiones que ocasionaron que los gobiernos
de medio mundo lo repudiaran, lo que tuvo por efecto que los pocos apoyos
internacionales fuesen contados, y mas que nada, del orden humanitario.
Nadie quería tener nada que ver o ser relacionado con el poder que se había instituido
en España por la imposición de las armas –solidario además de las fuerzas mas
oscuras y terribles que habían bañado en sangre a un continente - y donde como
corolario, siempre hizo oídos sordos a los constantes llamamientos al perdón y
libertad de los presos políticos, no solo por parte de muchas naciones, sino también
de intelectuales y personalidades relevantes de la época.
Uno de los pocos países que ayudó especialmente con enormes cantidades de trigo,
fue la Argentina de Perón, cosa que agradeció siempre el pueblo español, pues el
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 215
Mil poemas a Miguel Hernández
pan, alimento básico en tantos lugares, es de consumo casi obligado para la gente de
esa hermosa y querida tierra...
Adelfa Martín Hernández
*1- Bibliografía sobre D. Argelio Martín García.: La Conspiración contra la
República en La Palma (Centro de Cultura Popular Canaria),
www.centrodelacultura.com, libro del autor D. Alfredo Mederos, decano de la
Universidad de La Laguna, Tenerife.
Raúl Oscar Ifran, Argentina
EL HOMBRE ACECHA DESDE EL ROMANCERO...
El hombre acecha desde el romancero
de la ausencia con gris melancolía,
no lo pudo la guerra ni el acero,
trae las manos llenas de poesía.
Ay Orihuela! Por tus limoneros
el rayo que no cesa de los días
reparte versos, tórrido y ligero,
porque Miguel respira todavía.
Su voz cruzó entre las ballonetas
desafiante, rebelde, conmovida
y más allá de los tiempos se expande.
Oigan la voz, que es de Miguel Hernández;
la voz, eco sublime de la vida;
la voz, alma inmortal de los poetas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 216
Mil poemas a Miguel Hernández
Danilo Sánchez Lihón, Perú
LA MAÑANA
QUE JAMÁS
SE TERMINA
“Tu sangre es la mañana
que jamás se termina”.
Miguel Hernández
1.
Pocos
son los puros de corazón, y tú Miguel
lo eres. A pocos les dura tanto
el fervor,
y arraiga tan hondo la fe, como
ocurre
en tu caso. Tan inagotable es
tu fuente
de amar, que ya para siempre
nos sustenta.
2.
Ya
todo estuvo muy cerca de tus
manos,
y se esfumó, incluso la dicha.
Por eso
al morir no pudieron cerrarte
los ojos
azules, redondos e inocentes,
y quedaron
abiertos para mirarle de frente
a la muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 217
Mil poemas a Miguel Hernández
3.
En un alto
del combate viajaste a casarte
en Orihuela
con una mujer más luz y altar
que el más
inhiesto acantilado del planeta
¿Y cómo son
los crepúsculos de los caminos
cuando
se tienen esos ojos clavados
en el alma?
4.
Y también
pregunto: ¿cómo es que nace
y crece
en lo más inesperado de una
montaña,
en un paraje hostil y agreste,
compartiendo
abrojos con el hato de cabras,
la luna y
los relentes, un brillo tan claro
y un corazón
inmenso como es el tuyo que
estremece?
5.
Miguel,
¡qué coraje el tuyo para asumir
una causa.
¡Y liberarnos de tantos agobios!
Esa pasión
y fulgor en la frente. Y renuncias
totales
más allá de la vida y la muerte,
hasta
hacerte leyenda tenaz de valor
para siempre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 218
Mil poemas a Miguel Hernández
6.
Te escribo
desde Santiago de Chuco, tierra
de Vallejo,
tu férvido camarada, quien desde
su trinchera
te saluda, soldado de la dignidad
y la vida,
del borbotón de sangre conmovido
e irremplazable,
del fuego encendido e inapagable
del alma.
7.
Ambos
con hombría obstinada en amar
al pueblo,
a consagrarse en quererlo pese
a sus reveses.
Y defenderlo, pase lo que pase.
Con recóndito
coraje para amar a España como
se ama a
un hijo, a un padre o a una dulce
enamorada.
8.
La vida
fue despiadada contigo. Y todo
por la tenacidad
que pusiste. Te privó de lo más
mínimo,
padeciendo prisión tras prisión.
para morir
a los 31 años ahogado en sangre.
Pero la vida
te dio a Josefina y con ella todos
los dones.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 219
Mil poemas a Miguel Hernández
9.
Con una mujer
que reúne amor y valor, como fue
ella,
todo está obtenido, quien se unió
a ti sabiendo
que todo sería martirio. Por eso el
vuestro
es amor legendario y sublime, más
por tener
que extrañarse. Antes que verse
era anhelarse.
10.
Deja
que te salude y admire entonces,
poeta y soldado,
también por la mujer que tuviste,
capaz
de cariños, lealtades y renuncias
tan hondas,
en quien no hizo mella las cárceles
que padeciste,
años en que ella se mantuvo firme
e incólume.
11.
Un hombre
que es capaz de tener una mujer
de ese temple,
cristalina como una fuente y dulce
como fruta,
está salvado para siempre, aunque
lo maten,
desaparezcan o caiga fulminado.
Porque eso
es lo que vale, hermano, al final
de cuentas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 220
Mil poemas a Miguel Hernández
12.
Contigo
España para nosotros dejó de ser
Imperio
para ser un pueblo que sufre y ama
como el mío
y el de todos, y que nos duele tanto.
Por eso te
abrazamos, siendo tu canto nuestro
canto,
y tu lucha nuestra lucha, aquí, ahora
y para siempre.
Nelly Salas, Chile
DEDICADO A MIGUEL HERNANDEZ
En Orihuela, un pequeño pueblo del Levante español, rodeada del oasis exuberante
de la huerta del Segura, nace Miguel Hernández el 30 de octubre de 1910.
Este rayo ni cesa ni se agota:
de mí mismo tomó su procedencia
y ejercita en mí mismo sus furores.
RAYO QUE NO CESA
Rayo que pulverizas
la alucinación de los reyes
la miseria del hombre
el cadalso del que siempre
es sacrificado en la miseria
Y la injusticia.
Rayo alucinante
fenómeno melancólico
de la naturaleza
cuando estalla en llanto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 221
Mil poemas a Miguel Hernández
Rayo silvestre
en medio de la vorágine
que cobra vidas
lamento del corazón en llamas
Rayo direccionado
se desmaya en la cima del ocaso
desintegrando la hierba
fresca de la primavera
en parición.
Rayo que no cesa
de exclamación y auxilio
para almas que vacían
heridas de sus vientres.
Julia Calzadilla Núñez, La Habana, Cuba
Sigo en la sombra, lleno de luz.
¿Existe el día?
(Últimos Poemas)
Lacerado, Miguel, tu cuerpo viene
de la guerra, Miguel, de la cruel guerra,
mustio está de barrotes y de fiebres,
entumecido, flaco, amoratado.
Con frialdad de muerte en cada hueso
desplomados tus brazos y tus piernas,
de la mazmorra, así, viene tu cuerpo
con la lanza encajada en tu costado.
Viene tu cuerpo así, Miguel Hernández,
y el corazón me llora de mirarte.
Y al oír tus latidos de quebranto
lloro en las venas y en los ojos lloro
y te lavo la sangre con mi llanto.
Pero ¡gracias a Dios!, ahí en tu cuerpo
va tu alma pariendo un nuevo día,
tu alma en la trinchera renacida,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 222
Mil poemas a Miguel Hernández
de azul mar, de polen, de montaña.
¡Esa alma que empuñas cuando cantas!
Aquí de nuevo empieza el orden/
se reanuda el reposo, por yerrs alterado
(El Silbo de Afirmación en la aldea)
Por el Alfa, el Principio en Orihuela,
por tu niñez de libros y cuadernos,
por tu letra corriendo en los renglones,
por tu infancia de ovejas.
Por granadas, palmeras, limoneros,
por el río Segura que corría,
por el castillo árabe, y la historia
que acumuló tu pecho.
Por los pies de los viejos más cansados,
por la hambruna arrasando los senderos,
por los bancos desiertos de los parques,
por el puño cerrado.
Por el grito asustado en el pañuelo
que temblando se queda ahí escondido,
por el grito que sale y que retumba
en el viento del pueblo.
Por tu amor, por tu guerra, por tu muerte,
por tu pulmón tan joven ya rajado,
por ese adiós en el penal de Ocaña
dejando tu simiente.
Por Valencia, Orihuela, los olivos,
y el rayo que no cesa justiciero,
por la iglesia que amante te cobija
vestida de domingo.
Y al final, por la Omega inevitable
que te llevó y pudo hacerte eterno,
regresándote al Alfa
y al Principio.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 223
Mil poemas a Miguel Hernández
Edda Ottonieri, Argentina
MIGUEL HERNÁNDEZ
A TI, MIGUEL HERNÁNDEZ
(Poema surrealista)
Con infantil ingenuidad enfilabas senderos tras la majada
en tierras de todos, y de nadie…
mientras en tu mundo de ideas,
volaban imágenes
que tejían y destejían versos,
y formaban símbolos de poesía.
Así, un día,
iniciaste el sutil sendero de la lírica
en tierras de todos y de nadie...
Después…
Esos mismos símbolos mutaron a protestas
por sentidas y candentes injusticias.
Tu voz poética acusó infamias
y con barrotes carcelarios cercaron tu cuerpo… y tu alma
en tierras de todos y de nadie
La lírica fue tu libertad y tu prisión.
Cuando hombres poderosos te coartaron ilusiones
quisiste volver a ser pastor
pero ya no eras libre
en tierras de todos y de nadie
.
Desarmaron tus ideales y tu cuerpo
en la lobreguez del encierro
y tus poemas se tornaron dolientes
en la inmensidad diáfana de las verdades
que ahogadas quedaron
en los campos de la muerte
en tierras de todos y de nadie
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 224
Mil poemas a Miguel Hernández
LOBREGUEZ
Poeta sufriente, la lírica le dibujó arabescos metafóricos
en páramos de inspirado caudal
que formarían vórtices de angustia…
de vida, de muerte
Cargadas lastimaduras en el alma,
sensibilidades de percepción
desmenuzaron desconsuelos …
Sangre enrojecida batallante contra sus “propios molinos de viento”
y embravecidas aguas de infamia
marchó en pos de ideales de manos enlazadas.
La vida no le ofreció rosas ni vinos dulces,
clausuró escapes a su espíritu
y a su propio cuerpo
y en vendaval de “Las nanas de la cebolla”
embotelló pesares y hasta la misma muerte.
Mas, con las alas expandidas, sus versos,
los de Miguel Hernández.
serán eternos…
Domingo Acevedo, Rep. Dominicana
TU VOZ, CANTO QUE NO CESA.
Tu voz regresa de la pena en una lágrima
tu voz
que resplandece como un rayo en su breve eternidad
que de la sangre brota como un unicornio de cristal
cabalgando en la noche de tu agonía
hacia los bosques fabulosos de la esperanza
en donde tu vida herida por la ausencia
se escapa sin remedio al hastío
campanario de agua que ilumina de mariposas tu sonrisa
enredadera de luna llena en las noches mas frías del olvido
allá en las lejanas praderas de la soledad
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 225
Mil poemas a Miguel Hernández
detrás del espejo
tu cuerpo yerto
tus ojos que miran asombrado al mundo perdido
tu voz
canto que no cesa
por siempre en el viento ondea
María de Lorudes Barsallo Jaén, Panamá
Tus Versos, Miguel Hernández
Nos inundan.
Nos llaman.
Cual austero latido.
Pálpito en la memoria.
Compromiso colectivo
en el deseo común
de hacernos todos Uno.
Sellado el pacto.
Un amor.
Un pueblo.
Un Partido.
Hombre de convicciones
y palabra inextinguible.
Te entregas por completo
a la misión
de amorosa existencia.
Fiel urdimbre de Hombre.
Fruto.
Raíces.
Árbol.
Con sus ramas
creciendo
en silencio fecundo.
Escarnecido hasta morir
en presidio inhumano
Desgarrador aprendizaje
el de la muerte
Miguel Hernández.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 226
Mil poemas a Miguel Hernández
Cuando palpas
en tu dolor
de cielo oscurecido
exactamente
que es la cruel injusticia
la que en ti
hinca sus garras.
Y te obliga a aceptar
sin remedio
que mañana
o más pronto
tus hermanos
aquellos desheredados
que intestaste liberar
serán medidos
con la misma
estrecha vara
que tú mismo padeciste
y que hubieres deseado
convertir en cenizas
en las sagradas llamas
de tu Amor Universal.
Combatientes eternos
de un mundo sin arraigo
tu entrega a la palabra
nos redime del dolor
y el abandono.
A través de tus versos
cual fecundados granos
inauguramos nuevamente la fe
y elevamos unidos
nuevos cantos de amor
y de esperanza.
Por un mundo más justo
por un hombre más libre
y todos como Uno
semilla
fruto
llama.
Hogueras encendidas
en el Amor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 227
Mil poemas a Miguel Hernández
del Hombre por el Hombre
y en este Nuevo Mundo
Dios
como único camino.
A Miguel Hernández (Cuento en Versos)
“El mundo nada puede contra un hombre que canta en la miseria".
Ernesto Sabato
Un día
intenté ver a Cristo
cara a cara
desde sus grandes ojos
de claridad de luna
y caminé hacia el valle entre pastores
y lo llamé en silencio y recriminé
amargamente amargamente su viaje sin regreso
más allá de su Resurrección y de su Gloria
y caminé y llamé
como aquél que clamó
un día en el desierto.
Si entre nosotros te encuentras
dime Señor ¿quién de estos eres?
y una luz dulce-dulce
como de luna-luna
iluminó mi rostro y
una mano muy tierna
como el toque de un ave
con amor indecible rozó mi frente
y una voz tan profunda
como el silencio eterno
me contestó
Tú eres
y Yo soy
y somos y seremos
Uno siempre.
Y amarás a tu prójimo
como a Mi mismo y un día
como el cordero serás sacrificado
intentando amoroso
la salvación de tu pueblo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 228
Mil poemas a Miguel Hernández
pues habrá quienes no crean y te traicionarán
y serás entregado
y prisionero morirás de dolor hundido en la pobreza
Miguel Hernández poeta de la esperanza. Mártir de amor.
Y volverás a tu pueblo vencedor
de la vida y también de la muerte
e igual que yo serás glorificado
por la fe de tu gente
en tu palabra justa
en tus versos de penas de lumbre de bocas de huesos inflamados
y tu grande, grande
amor por Josefina
y apóstoles vendrán
para seguir tu huella…
Gianina Piccioni, Venezuela
ENTRE SUEÑOS Y BANQUETES
Una mañana con aroma a letras pintadas de mágicos colores trazadas por
el azar de la bondad del destino, abrían el día vestido de un repertorio de
paletas de acuarelas seducidas de rumores de mares y vuelo de aves
marinas de alas de azul perpetuo.
La naturaleza se había tornado dulce y misteriosa entre los azahares
dormidos de la tierra, cargándose extrañamente de alusiones febriles
transmigrando los cantos de miel ; dando paso a manos teñidas de
bitácoras que desplegaban, un oasis de caricias, enredadas entre teclados,
plumas, pinceles, lápices, hojas y pergaminos que apresuradas e
intranquilas daban la bienvenida a los versos y poemas y a los cantos
llenos de cuentos y relatos, adolecentes y juveniles, maduros pero no
seniles de miguel, un muchachón de Orihuela que un día cambio su
rebaño por el rocío escondido de su s letras.
La ausencia de la música dormían entre los filamentos del silencio, mientras afuera
la calle hervía con las risas de los chavales que habían tomado los espacios que
transitaba el Nazareno, calle con el nombre del que un día fue el conde de Peñalver,
ahora invadida por el churro, mediamanga, mangotero, capitaneando en el ambiente
una colección emperifolladas de nanas de cebollas de perdurables trazos con
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 229
Mil poemas a Miguel Hernández
fragancias de verdes esperanzas jugando con las estelas zurcidas de las hojas alegres
del pastoril de cantos y blancas ternuras, cuan bella siembra comienzo de primavera.
Las campanas de las flores anunciaban que era primero de marzo, parecido a
muchos pero diferente a otros, con un reloj despidiendo a los segundos, asentados
en una blonda catarata de colores y luces. Un primero de marzo diferente porque
hoy todos los caminos conducían al canto y a la poesía y es verdad porque el mio y el
de mis amigos, nos llevaban esta hermosa mañana a Orihuela donde podremos hablar
a la suave brisa y regar la noche de sonrisas y poesías. Una caravana de letras desde
el maíz de América, el arroz de Asia, el trigo de Europa, la cebada de Oceanía,
llegaban a Orihuela cargadas de mágicos colores y sueños, de amores con dosis de
melancolía, verdades y temores, de debilidades y miserias, de risas y llantos de
cortesía y filosofías, de formas y fondos, murmurando entre los dedos, abriendo
paso a poetas, escritores, cuenta cuentos y cantautores engalanados con floridos
atuendos que iniciaban sus cantos de blancos de lunas, de amarillos de soles, de
verdes de sabanas, de azules de cielo, ataviados de plata de charros con botonadura
de plata, gauchos con guardamontes, ponchos y ruanas todos llenos de vientos,
chumpas bañadas de manglares, tricolor con inciensos de simón, güipil y
guayaberas soleadas con paliacates, faldas de satín rodeadas de arandelas, masayas
planchadas con flores coloridas, chamantos colgando mazurcas, kygua con
incrustaciones de ágatas y amatistas, hanfus chapoteados de bambúes, camisetas vino
tinto, danzando al ritmo de albicelestes, canarinha y furia roja que daban de beber la
pasión por las letras Pies hermosos como los de Mario Benedetti, pegados a los
aromas de tierra calzados de zuecos de sauce y álamo, ojotas cruzadas de badanas,
chinelas, otros en alpargatas de oro y plata, babuchas con olor a papagayo,
escarpines bordado de colores que mudan, marchaban cargados de poemas
dibujados en lindos matices alegres, salpicados de armonía que eran recibido por
Alfred Asís, un chaman venido de Isla Negra que acicalaba el espacio con su
desordenada cabellera, enredada entre el abecedario; un caminante con el don del
lenguaje y el talento de congregar letras. Lucia una chaquetilla bordada de arabescos
de hierbas aromáticas entre la que se escondía un collar de caracolas marinas
extrasnochadas, calzaba unos zapatos de huaso; de su rostro brotaba una nariz
perfilada por, Diego de Siloé, aderezando arriba de ella, unos ojos llenos de sonrisas
placenteras que extendían sus manos para recibir los mil cantos con aroma a
poemas. A su lado serena estaba Josefina una hacedora de arte bañada por las
dulces aguas del Guadalquivir, adornada con un vientre poblado de amor y
sementera, bellamente ataviada con un vestido elaborado por sus manos, una falda
plisada verde limón con cuatro volantes de lunares, ceñida a su cintura en la cual
resaltaba una lazada blanca y roja España resaltando su corpiño, la base de la blusa y
los puños de las mangas así como el escote y el volado del bajo estaban adornado
con una blonda fruncida, bordada en tul de luceros, haciendo juego con la pañoleta
que abrigaba su cabello tan corto como los amaneceres de Miguel, destellando
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 230
Mil poemas a Miguel Hernández
ilusiones y sueños dorados. Sus pies estaban finamente engalanados con unas
zapatillas con borlón de sedas y azucenas, su mirada peregrina paseaba de vez en
cuando por los rincones buscando entre el bullicio los ojos de su amado donde su
amor se peina todas las mañanas.
Los zaguanes de la casa de los Hernández, lucían sin tapices, sombreados por visos
de piel arrugada, patios saturados de plegarias y tertulias. A lo largo y ancho se
habían desplegados mesones ataviados con bordados color rojo y amarillo que
relumbraban entre los muranos repletos de vino de racimos de uvas blancas y
negras cosechados por Nicanor Parra. El ambiente estaba impregnado de guisado de
pava borracha cargada de albahaca y tomillo acompañados de canto de canela y un
cocido de peroras, separando los paladares de la harina y el barro dando así la
bienvenida a los hacedores de las letras de los mil poemas a Miguel. Vicente y Elvira
ataviados con el silbido del jilguero danzaban entre los mesones, ofreciendo su
cargamento de dulzuras, mezclado de aromas de anís, vainilla y ralladuras de
limón, habitando silenciosamente los almendrados, las toñas, las torrijas, los
pasteles de gloria y el tocino del cielo. El banquete transcurría entre suaves
armonías que producía el kultron de Asís que dominaba los espacios y removía el
abismo de las hojas de los hijos de la luz y la sombra, Miguel regocijado camina
entre los mesones saludando a los presentes en su rostro se dibujaba su humildad que
hacía gala del orgullo de ser pastor de cabras y ahora un caballo verde para la
poesía.Mil cosas cruzaban por su pensamiento, sentía el ambiente embrujado por los
trovadores que habían acudido a la cita, de afuera seguían llegando la serenata
cargada de risas de los chavales que se mezclaban con el olor de las letras. Miguel
seguía enlazando una a una las palabras tejidas con el afecto de las estrellas, poseía
cada uno de nuestros trazos los hermosos colores de la presencia de la luz, dibujada
en la piel de las estaciones, sabíamos que el simple hecho de estar ahí iba a dejarnos
una huella, la mas hermosa la de rendir honor a quien honor merece.
Florecieron mil letras
Florecieron mil letras por los caminos de Miguel
Convertidos en poemas cosechas de nuestros países
El rojigualda imponte de su bandera luce por todas partes
Moteando de vexilos el firmamento
Letras convertidas en obras de arte
Llenas de la acuarelas de la paleta del pintor
Que caminan despacio para alegrar sus melodías
De nuestros mil trazos colmados de aromas sabores y colores
Mil poemas que corren al encuentro
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 231
Mil poemas a Miguel Hernández
Del hijo de la luz de los rayos que no cesan
Escribanía de plata de bellos cantos.
Entre las más hermosas flores con aromas
Mil poemas que corren al encuentro
De los pasos de Miguel que a lo lejos ya se empiezan a oír
De Argentina a Paraguay, de Guatemala al Salvador
De Chile al tricolor de Venezuela, Colombia y Ecuador
Del ceibo del Uruguay y las palmas de Cuba que llegan vestidos de fiesta
Del cóndor que se columpia en el viento de México y Honduras
Mientras Brasil y Nicaragua juegan a la ronda con las mil letras
Observados de cerca por Panamá y Costa Rica.
Pies hermosos que cruzan los senderos que vienen de Oceanía,
África y Europa, pasos de América y Asia
pies todos camino a España pegados a los aromas de tierra
Calzados de sauces y álamos y de pinos
Trayendo para Miguel mil amores que dar
Pasos que llegan a la casa del muchachón de Orihuela
Todo sobre Miguel
Al alba blanca le conto
Sobre sus sueños azules y sobre sus piedras doradas
Sobre sus historias, amores y santos
Sobre su tierra bonita
Le hablo de sus mil colores
De su paciencia y su sonrisa
Sobre el hambre y sobre sus penas
Sobre sus miedos y sobre sus sueños
Sobre como crece la semilla a orillas de su mar
Cuando el sol derrama fuentes llenas de gotas de arrumacos
Le hablo sobre su mente terca que se resiste cuando cae la noche
y llega la luna llena.
Sobre como el orgullo fundo castas perdiendo el aroma las almas y la virtud la tierra
Sobre el estúpido perjuicio del color que van llenando las esencias de polvo
Sobre la inquietud de sus pensamientos
Sobre la magia de las noches alicantes sobre las tardes de orihuelas
Buscando en el principio de la morada sus espacios entre melodías y poesías
Y con canticos subjetivo fue abrazando su noche de fábulas pintadas
Seduciendo los azules de los luceros del alba
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 232
Mil poemas a Miguel Hernández
Julio Pérez Tejera, España
"A Miguel Hernández"
Treinta y un años se tomó la vieja pérfida muerte para dar contigo,
quiso arrancarte de golpe un amigo y un hijo,
su guadaña que no ceja.
No la dejó tu laboriosa reja,
tu corazón en tinta que hizo eterno
al amigo del alma,
al hijo tierno, disputando su sangre a cada abeja.
Al almendro de nata devolviste
el alma del amigo a dentelladas
y dejaste a la novia menos triste.
Y en el hijo quedaron enredadas
las luces y las sombras en que fuiste mediodía
alumbrando madrugadas.
Boris Espinosa, Argentina
A Miguel Hernández
Pastor del rebaño de letras
Las llevaste desde el campo
a nutrirse a la ciudad…
Buscaste rincones
en donde aplacar tus ímpetus.
Sembraste de amor e ilusión
las hojas blancas y amarillas
mientras el rojo púrpura de tu corazón
bombeaba a full tu pasión…
Hoy te llamamos
“Poeta del pueblo”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 233
Mil poemas a Miguel Hernández
Republicano y humano
Sufrido español bajo la espada certera
Hermano perdido, pero recuperado
Elevado a la cúspide del mundo
bajo un gran cielo estrellado
con mil poemas
de Poetas amados…
Miguel, antes de irte…
De mártires y poetas el mundo necesita
En ideas que encienden de la libertad la flama
Entre letras y decires
Espíritus valientes se inmolan
Hoy recibimos de ellos el agua
que nuestra sed calma
Del pozo por otras manos creado
infinitas gotas se encienden y hablan
para no apagar esas luces
Estamos de testigos los poetas
indicando una y otra vez
de miguel Hernández sus letras
Mas su vida dio para que sintieran
que firmar con sangre es gritar en silencio
Que su amor es tan grande
que llena el firmamento
Inmortal tu alma poeta hoy siento
y sé
que hoy
todos al saberte hacemos un juramento
decirte que sabemos de tus dolores
trastocado en amores
Hermano fraterno
la pluma se eleva al nivel de los cielos
y estamos aquí…. de saberte eterno
Poetas sentimos que tú no has muerto
Solo cambiate tu hogar
por otro aposento
Estaremos pronto contigo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 234
Mil poemas a Miguel Hernández
será un hermoso encuentro
Escribiremos prosas
y de tu vida un cuento
Para que todos sepan
que tu mejor poesía
La escribiste en el cielo
cuando te estabas yendo.
Benjamín Araujo Mondragón, México
A MIGUEL HERNÁNDEZ
VIENTOS DEL PUEBLO
Nunca tuve zapatos,
ni trajes, ni palabras:
siempre tuve regatos,
siempre penas y cabras.
Miguel Hernández.
Tus recuerdos ya me llevan,
corriendo por la pradera
para gritar los dolores de gente
como tu gente; de gente como nosotros…
Tus dolores no son nuevos son dolores muy añejos,
que de tanto apacentarse ya se nos volvieron viejos,
y de tanto presumirse, ya se volvieron bronca,
pues son males de la gente, que son sociales y ronca…
Tus pasos me hacen cantar cuando recito tus coplas,
y me llevan a bailar, con arpegios populares,
para saber de tus cuitas, hay que mamar de tus coplas,
y esconderse tras la puerta, detrás de los lupanares…
Miguel, te estimo, te quiero, te alabo en tu poesía,
pues tengo un dolor adentro que sólo con letra sale
aunque eso no sea remedio para el mal que nos asedia
y ojalá mi canto quede, como homenaje y ¡te vale!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 235
Mil poemas a Miguel Hernández
Ay, el rincón de tu vientre;
el callejón de tu carne:
el callejón sin salida
donde agonicé una tarde.
Miguel Hernández
Tus pasos, son paso firme,
donde el ritmo se agradece,
y es que te leo antes de irme
a mecer, en tus versos, y me mece…
Quiero tener puño firme,
no blandengue y que no crece,
para escribirle a mi amada
todo lo que se merece.
Verso, habla, recita y lee
pero díselo muy fuerte
para que lo sepa Hernández
y se lo cuente a Miguel.
Sigo tus pasos, poeta,
por las calles de los libros,
sigo tu vuelo, saeta,
para aprender tus requiebros.
Sigo, miro, y no comprendo,
porque resulta te leo, y leo,
pero no te aprendo
por más que veo, leo y veo.
Francisco Lezcano-Lezcano, España
A TRAVÉS DEL TIEMPO
Voy a cumplir setenta y nueve años
y aún tengo, Miguel Hernández,
mi puño en alto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 236
Mil poemas a Miguel Hernández
Abro la mano
sólo para estrechar mano amiga,
darla al que me pide asidero o abrigo,
a quién siga disparando sus palabras.
Tuve hermanos con sus pulmones
floridos de república,
tu alma en la sangre
y en los labios tus versos.
Así crecí aprendiendo
quienes asesinan libertades,
quienes detestan los amaneceres,
la blanca bandera,
la paloma y el laurel…
Voy a cumplir, Miguel Hernández,
setenta y nueve años
y aún tengo mi puño
y mi verso en alto,
porque de quienes te torturaron,
quedaron esquejes
que han crecido
y la peste sigue, hermano Miguel,
la peste sigue…
Pero tu palabra,
aún está aquí,
fuera de trinchera
Luis Alberto Ambroggio, EEUU
¿Quiénes son los mártires?
A Miguel Hernández
Los que se distinguen
en blanco y negro
y mueren en las banderas
de la muchedumbre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 237
Mil poemas a Miguel Hernández
Rostros testigos,
almas que viven
rocas
de conjuros
y vigilias,
la fuerza del amor;
despojos de un origen
y de un final.
Números de la voluntad
cuerpos de los cuerpos
que transcienden
las quejas, las noches,
el vacío,
el anillo del imperio,
el féretro del olvido,
la ceguera del silencio.
También y siempre,
dioses intactos,
muerte.
María Eugenia Caseiro, Miami, EUA
Lloro por Miguel Hernández
Un viento de metal cruje y se atasca
en las ramas de un árbol sin que vuelva
a girar el reloj que nos devuelva
del mármol ya tu voz cual fina huasca.
El otoño ventea la borrasca,
¡aliento perfumado!, quiso Huelva,
sembrados ya de vid y madreselva,
tus versos cual tambores de hojarasca.
El aire viene y va con su quejido
desolado y sustrae de una sombra,
tu nombre ya en destino convertido.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 238
Mil poemas a Miguel Hernández
De otoño es este viento que te nombra
y derrama su llanto adolorido
en las hojas castañas, como alfombra.
Golpes de mal verso en tu mejilla
"Alto soy de mirar a las palmeras"
Miguel Hernández
Si el verso descuidado en estampida
a las cabras del tiempo empuja al lodo
y al Levante detiene en un recodo,
es la señal de que no lleva brida.
Resulta que la sombra envilecida
de ese verso fatal que invade todo
se pudre ante el buen verso de tal modo
que no logra alcanzar su luz erguida.
Pues se cuaja, Miguel, ante tu puerta,
la máscara que con palabra yerta
espera un movimiento de la llave.
Y es su ocioso vagar frente a la huerta
lanzado a tu ventana siempre abierta,
que devuelve cual luz un canto suave.
Nicolás del Hierro, España
LA SOMBRA DEL AYER
Homenaje a Miguel Hernández en
el centenario de su nacimiento.
Galería de Arte Orfila.
Madrid, 3 de noviembre de 2010.
Esta tarde nos llama la memoria.
La sombra del ayer es como un grito
rebelde y amoroso, necesario.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 239
Mil poemas a Miguel Hernández
No hay angustia en la boca
ni sequedad en la palabra,
porque es tu luz, Miguel, la luz,
el peso de un amor plural
que extiende su gemido
sobre parcelas en recuerdo
de un centenario niño que levanta
su calendario sobre noches
que llenará la luna tras su grito
de peritaje antiguo y siempre nuevo.
Miguel, la gloria cuesta cara.
Me refiero a esta gloria, la de aquí,
ésta, de la que algunos te negaron
el aroma y el pulso, la belleza
del diario clavel que cultivaste,
la que sangrar hizo las llagas
de tu cuerpo, y el ánimo del joven
se acogió a la esperanza de los hombres,
y esos hombres son otros:
no se ajusta
la forma de su piel al traje
que el sueño idealiza en la razón
de quien se asoma cada despertar
al mirador de auroras y horizontes
que hacen pequeño el mundo.
Sueña
crecido en el amor de los humanos;
pero descubre un sueño incompartido.
Teñida en sombras y misterios,
herida la palabra, descompone
su armónica destreza: la condena
el silbo de las balas, la descarga
de las avaras fórmulas en pánico.
En silencio de afónicas gargantas,
sólo el viento del pueblo rumorea
los rincones de ibéricas cocinas.
Y fue la muerte un grito susurrado,
un requiebro en la sombra, un silencio
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 240
Mil poemas a Miguel Hernández
que levanta su voz, tu voz estética,
Miguel, tu voz de silbo vulnerado,
esta tarde de gloria centenaria,
aquí, en esta tierra nuestra,
en esta gloria tuya, tan amarga,
tan amarga y cruel, tan dura
cuando el recuerdo viene a la memoria
granítico perfil, invicto pedernal,
que, imagen del ayer, es hoy un grito
rebelde y amoroso, necesario,
acicate en la fe que nos anida,
“porque un pueblo ha gritado ¡libertad!,
vuela el cielo, y las cárceles vuelan”(*).
(*) Estos dos últimos versos,
con pequeñas variantes, son
también el final del poema
“Las Cárceles” de M. H.
Juan Orozco Ocaña, España
DESDE EL FONDO de
la tierra
te levantas Miguel Hernández,
desde el filo del cuchillo
a la noche hambrienta de inclemencias;
desde la pólvora terrible a las balas,
desde el fragor inusual de las batallas
hasta la arena concisa del desierto
en el que brotan las lágrimas
del destierro profundo de tus horas.
Yo avanzo en los minutos sedientos
cual un huracán en la lucha
contra la guerra fraticida,
el holocausto soez de los hermanos,
el vano estropicio de los (ejércitos),
los murallones sin epitafios,
los paredones sombríos,
las violaciones heridas y doloridas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 241
Mil poemas a Miguel Hernández
de las hembras “cabeza-calva”;
y un hondo pesar sombrío
que me dejó dormido el pecho
ante tantos muros acribillados
por el rugir de los asesinos
de uno y otro bando –por desgracia--.
Es tanta la pena de mi soñar dormido,
que si mañana despertara, me diese
de bruces con los esqueletos del pueblo.
Menos mal que aquello ya pasara,
menos mal que el desastre ya no está;
sin embargo te perdiste en la nada
Miguel, tal desapareció el amigo
cansado de entregar desmantelada sangre:
el bueno y querido don Ramón Sijé.
Cyro Mascarenhas Rodrigues, Brasília, Brasil
A MIGUEL HERNANDEZ, POETA DEL PUEBLO
Chora comigo a tua dor, solta o teu pranto,
Oh, triste Espanha flagelada pela guerra.
O sonho republicano caiu por terra
E poetas sangraram seu último canto.
Não bastasse o assassínio de Garcia Lorca
Os fascistas cometeram a sordidez
De calar o poeta Miguel Hernandez
Na solidão de uma masmorra fria e porca.
Camponês, poeta e revolucionário,
Ele trocou pelo fuzil o arado e a pena
Para combater uma cruel tirania.
Fez da igualdade o seu lema libertário.
Foi luz na sombra e, no revés, alma serena.
Morreu pela Espanha, su madre e su poesia...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 242
Mil poemas a Miguel Hernández
José Valle Valdés, Cuba
El Poeta
El rayo que no cesa
Miguel Hernández
Amar lo desconocido fue su violencia
su enfrentamiento, que los perfectos
no le perdonaron, y se esmeraron
en ganarle culpas, tergiversando
a conciencia, sus utopías
de ser inquieto a las normas
y las fronteras que establece
la monotonía de los viles.
Dijo su verdad
al silencio de la noche.
No lo oyeron
y siguió, desahogado,
el camino de las estrellas
rompiendo entre sus manos
las espinas de la última rosa
que le despreciaron
las damas de la aristocracia.
Alarmadas en fingidos sonrojos
por sus viriles versos;
alejados de las huecas rimas
de amanerados elogios,
de los bien pagados
al ruin oficio, de adular fortunas.
Fue mordiendo, a toda furia,
los versos más reñidos
que desgarraron la suerte
de su pluma, a merced
de los bajos editores
negados al menor compromiso
dados a la mediocre tarea
de la complacencia oficialista
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 243
Mil poemas a Miguel Hernández
-en la banalidadde reiterar ensalces:
para el seguro aplauso
merecedor al día
de los premios que entorpecen.
Hacedores del verso débil
que se hace espuma,
denigrante
al desgarrador oficio
de elevar al cielo
la palabra necesaria.
Lo acosaron en su camino,
al son de sutiles trampas;
diluvio oportunista
en el filo de la crítica hueca
panfletaria de los más arcaicos dogmas
de pérfidos intereses
de los circunstancialmente instalados
al dominio -que se les repite-.
Mas no le desviaron…no le cansó el verbo.
Y cuando de cuerpo se derrumbó
ya era su existencia astral…
las estrellas le tenían de la mano.
Es la voz merecida de las justas causas
es el rayo que no cesa
en la luz de los fuegos necesarios:
Es el Poeta.
César Tellería Oliva, Argentina
A MIGUEL HERNÁNDEZ GILABERT
Fue Miguel Hernández Gilabert, el muchachón de Orihuela,
que nació de una familia humilde, trabajadora y buena,
que obligado por la vida, a temprana edad a abandonar la escuela,
para ponerse a trabajar y para ganar con sudor su sustento
Pero él nunca abandonó su afición por la poesía,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 244
Mil poemas a Miguel Hernández
Y esa afición lo llevó a la prisión... pero también a la gloria;
Y aunque muriera muy joven y desconocido para España,
su recuerdo y ejemplo perdurará para siempre en nuestra memoria.
El fue poeta y un mártir de la literatura,
Condenado a vivir como un pez en una pecera;
Por escribir y decir lo que creía y pensaba,
Fue castrado y condenado al polvo del olvido;
Por vivir en un país sometido y un régimen totalitario,
El fascismo no soportó su osadía de enfrentarlo y criticar;
Y lo condenó sin juicio ni cargos a la pena de muerte,
Aunque después se arrepintió para no convertirlo en un mártir,
le cambió su condena por el de cadena perpetua en una cárcel.
Así pudo, este régimen silenciar su voz y acabar con su oposición,
Pero no pudo acallar su palabra liberada en sus escritos;
Porque sus versos viven y vivirán por siempre entre nosotros,
Inmortales y gloriosos repartiendo en los corazones dignidad.
El, con sus versos nos enseñó a morir de pie ante el tirano,
Antes que vivir esclavos o suplicando de rodillas,
A un régimen totalitario, demente, abusivo y mentiroso,
O, a la tiranía despótica de una dictadura .
Fueron las ideas marxista de don Pablo Neruda
Las que tuvieron gran influencia en el camino de su vida,
Que lo inició en su evolución ideológica y lo alejó del catolicismo,
y condujo a tomar posición beligerante en la guerra civil española.
Fue un poeta luminoso y generoso con sus letras,
Considerado por algunos como epígono de la generación del 27,
que destacó por la hondura y autenticidad de sus versos,
que se vieron reflejados en su compromiso social y político.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 245
Mil poemas a Miguel Hernández
Fausto Antonio Aybar, Rep. Dominicana
SENDERO, ESTENSO POETA
Homenaje a Miguel Hernández
(Poeta Universal)
Fronteras,
que no son fronteras,
son espejismos,
romerías de salamanquesas
devorando amapolas heladas.
Horizonte,
sobre horizonte,
la carne no retorna,
las palabras, indeleble follaje
de los siglos, raudo rumiar del poeta.
extensa
o inextensa,
la muchedumbre vocifera tu canto.
La tierra, jardín del llanto,
Orihuela, vendimia de oasis de amor.
Sendero, infinitos relámpagos,
juego de luciérnagas, escaramuza de luces,
los huesos, no van al olvido,
son ecos, transmutar de los sueños,
manecillas de palabras hilando el tiempo.
Anahi Duzevich Bezoz, Argentina
A MIGUEL HERNANDEZ
Bajo la tierra quiero/porque hacia donde corras
quiere correr mi cuerpo.
Ardo desde allí abajo /y alumbro tus recuerdos.
Miguel Hernández
Aquí estoy, frente a la hoja en blanco
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 246
Mil poemas a Miguel Hernández
tratando de escribir un poema
“o poemas sueltos ó poemas últimos”
dedicados a Miguel Hernández
“mientras el hombre acecha.”.
Convocando que vengan a mí las palabras
las mejores palabras del lenguaje
que puedan expresar
la inmensidad del recuerdo
“La imagen de tu huella”
Gran poeta, “Perito en Lunas”
perpetuo, indestructible, forjador
explícito, insuperable.
Se acumulan las voces en mi mente
Miguel Hernández las convoca desde su lugar sempiterno.
Desde las entrañas de la lengua patria
ahonda su mensaje en las musas, su escritura es perenne
“El rayo que no cesa”
que no claudica en la misión literaria.
Aquí sigo, frente a la hoja en blanco
esperando rebasen en mí, las mejores señales
las más dignas, para homenajear a un grande
de la palabra.
Alguien que supo sin lugar a dudas
en el “viento del pueblo”
con su pluma destinada a la labranza poética
esculpir su inmortalidad.
Jesús María Stapper, Colombia
DE CAMINO POR LA HERNANDÍA
Al profesor Otto Ricardo-Torres y su trascendental
ensayo entre Miguel, Josefina y Dafne: la hija de la tierra
A las aladas almas de las rosas
Miguel Hernández
Como un hombre de la estepa que no termina.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 247
Mil poemas a Miguel Hernández
Como un andariego popular de la serranía…
Bajo las lunas taciturnas y los soles arrugados
voy por Orihuela el camino abierto de la Hernandía
y llevo pegado al pecho el eco de un canto inmortal.
¡Qué bien lo sabes tú que eres un pastor de cabras miles!
Qué bien lo sabes Miguel, tú que bebiste todos los naufragios…
y sabes que -“el silencio naufraga en el silencio”.
Cuántas penas asumiste por vocación en la batalla de Teruel.
Cuántas veces llegaste a tu casa vestido de pobreza.
Cuántas guerras cruentas tuviste en tus soledades de poeta.
Todas las temporadas del infierno pasaron por tu existencia.
En el cuenco perdido de una mazmorra infernal
escondieron tu nombre para que no lo alumbre el sol…
Miguel ‘una daga cobarde’ cercenó tu alma
y tu sangre superó con creces todos los abismos.
Tus enemigos están más presos… y más muertos que tú
han pasado los años y no han visto la luz del día ni la verán.
Con tu mirar profundo sembraste rosas desconocidas
en los ojos de los hombres: “De la contemplación
nace la rosa / de la contemplación el naranjo / el laurel”.
En tus cancioneros y en tus romances: las ausencias.
Tú fuiste el canto que nació de ti no la canción que a ti llegó.
Tu palabra tiene agua pura para alimentar la tierra.
Las piedras ruedan y retumban para anunciar que existen.
Miguel tú eres la piedra viva y la roca eterna es tu pueblo.
Tu temperamento tiene las alas libres de un cóndor milenario.
Tu legado germina cada tarde en el pendón de los crepúsculos.
Tú valiente no evitaste la cárcel de tu cuerpo y eres libre… eres templo.
Hombre libre no es el no condenado sino el que vuela.
Sé que cuando la muerte nace empiezan los recuerdos: Miguel
te recordamos como si un costado tuyo estuviera con nosotros
y sabemos que “no hay extensión más grande que tu herida”.
Tú y Josefina y tus “Manuel-es” abrazados vuelven hoy
y juegan y comen pan nuevo en la tahona de Carlos Fenoll.
Como un hombre de la estepa que no termina.
Como un andariego popular de la serranía…
Como un dios resucitado me acuesto yo esta noche
y soñaré con volver mañana a los caminos de la Hernandía
y recogeré tus sueños y recogeré de tus madrigales: las rosas.
La gente no ha dejado de soñar… no ha dejado de hablar contigo.
Miguel quizás un día divaguemos tú y yo en el insomnio de la vida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 248
Mil poemas a Miguel Hernández
Del Libro,
A LA ESPERA DEL VIENTO
TIEMPO SIN ROCÍO
Hoy no hay una sola gota de rocío.
Hoy será un día de Apocalipsis.
Antes de la salida del último sol
los árboles lamieron sus tallos,
sus ramas, sus hojas, sus frutos,
y son un ejército verde-pálido
preparado para la fotosíntesis final.
La tarde para las almas de las plantas
se tornará amarillenta y pálida,
será dolorosa y será agonizante.
Como un suplicio maldito
las plantas serán frágiles esqueletos
que se quebrarán con el viento tenue.
Los árboles morirán de penitente sed.
Desde los tiempos inmemoriales
las plantas tenían escritas sus profecías
en el Diccionario Histórico de la Selva.
Todas las plantas
se tomaron el rocío de esta madrugada
de una vez por todas,
y resecas, no guardaron nada para después...
y vivirán esta misma tarde
el Primer Apocalipsis Vegetal.
Sucederá antes que llegue
el gran Apocalipsis del Hombre
que será pronto…¡tan pronto!
MI FOGÓN MARINO
Instalaré un fogón
de tres piedras
sobre el lecho del mar.
Con tres astillas secas
de una ceiba milenaria
encenderé fuego
sobre las olas.
Hace tiempo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 249
Mil poemas a Miguel Hernández
que la luz de la luna entera
y la luz tenue
de tres estrellas cómplices,
alumbran mis noches
de perdido navegante
por el mar, y por la vida.
Prepararé tres tazas de café
con humeante
sabor a recuerdos.
Pasadas las tres de la mañana
las tres piedras ardientes
golpeadas por las olas
y lo restante
de las tres astillas de ceiba,
incinerarán mi cuerpo.
Y abrazado por el calor voraz
de mi fogón marino.
partiré… partiré…
arropado de eternidad.
ESTRELLAS EN MI BOLSILLO
El hombre siempre efímero
será un navegante eterno.
El hombre anhela subir a las estrellas
a palpar su cuerpos de intermitente luz.
Un hombre quiere bajar una estrella
para incrustarla en el vientre de una mujer.
Una estrella parece miga de un cometa claudicante.
Alelado de rutilancias y resplandores
otro hombre -cósmico- desea volar
con su equipaje de morral
para llegar a la estrella preferida
a instalar en ella la totalidad de su existencia.
Gruesas sumas de dinero (perdido) se invierten
en sueños pragmáticos de navegación celestial.
Por la mar del tiempo-espacio
zarpan las barcas voladoras.
Muchas madrugadas
derrocha un hombre iluso
con virtud de rana
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 250
Mil poemas a Miguel Hernández
que quiere de un salto llegar a la luna
y de otro salto llegar a su lucero encantado.
Yo insulso navegante de mi charca secreta
donde apenas gira mi canoa de solitario bogador
con mi red espontánea pesqué siete estrellas
que guardo en el bolsillo de mi desaliñado pantalón.
No tengo dinero, tengo siete luceros guardados.
Ah de todo lo que he logrado con mis estrellas.
A LA ESPERA DEL VIENTO
Es ancha la tarde
y camina lenta
por mil siglos de distancia.
Es ancha la tarde
y no la mueve el viento.
Esta tarde me arropo
con un extraño olor de lejanas tristezas.
Como ácidos frutos
llegan pesadas nostalgias
venidas desde lontananza
por los días y por los años.
Esta tarde, en mi pecho,
se agrupan las ausencias.
El viento no me golpea como antes
cuando sus febriles auras
se llevaban hacia lejanas tierras
los inciertos avatares,
las alegrías y los pesares
que reposaban en mi alma.
Es ancha la tarde
y no tiene murmullos en su senda.
Esta tarde mi pensamiento
vuela sin destino y en un instante,
le da mil vueltas al universo entero.
Es ancha la tarde
y no se moverá mi cuerpo
hasta que se lo lleve el viento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 251
Mil poemas a Miguel Hernández
MÁS ALLÁ DEL VIENTO
Más allá del viento…
está mi hogar.
Viento caminante por la travesía infinita.
Lejana travesía que va más allá
de un país de vasta jungla: ¡universo de colibríes!
Infinita entonces será mi senda
para llegar a casa.
¡Cuando viaja mi espíritu,
es más veloz que yo!
Llegaré, quizás, después que mi alma,
a mi morada.
A mi lar llegaré
después del tiempo…
Diosas y dioses suplicarán
por la buena ventura de mi destino.
Antes de llegar a mi bohío
algunos cielos
abrirán sus puertas
a mi cuerpo agónico.
Albas y auroras, lunas y soles,
iluminarán mi camino.
Soy un hombre anónimo
con la única misión
de llegar a salvo… a casa.
Más allá del viento…
está mi hogar.
EL VIEJO BARCO
El viejo barco
tiene la melena canosa,
cabellera tan blanca como la de mi abuelo,
blanco acendro de mis antepasados navegantes.
El viejo barco
tiene la experiencia grabada
en su ceño anciano,
y dejó su juventud perdida
entre las brumas del tiempo,
y con su bamboleo incierto,
camina lento sobre las olas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 252
Mil poemas a Miguel Hernández
El viejo barco
durante mucho tiempo
guardó silencio
aunque abrió sus oídos
a los rumores del viento vagabundo.
El viejo barco
retornó muchas veces al antiguo muelle,
algunas ileso, otras herido, y otras, moribundo.
El viejo barco
se robó los espíritus perdidos
de las mujeres desnudas, invisibles, y olvidadas
que en las noches frías,
caían del malecón al mar.
El viejo barco
tiene su mástil corroído y doblado
por los duros golpes acontecidos
en su dura historia de trashumante acuático.
El viejo barco aprendió a leer.
Lee las penas y las alegrías
de su terco capitán barquero.
Lee el dolor de los océanos
cuando sus grietas sangran.
Nancy Castellanos, Argentina
Aún me desvela
Tu impronta
El arte de parir versos
Tu sed, el sudor
La elegía inconclusa
De una vida incandescente
Inmensamente breve
Hijo de la luz
Viento de libertad
Esperanza embriagadora
Como tus versos, generosos
Misterio del pan multiplicado, compartido
Y el Amor, siempre el amor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 253
Mil poemas a Miguel Hernández
Razón de la sin razón como estandarte
Partiste a la guerra
sin antídoto, la oscuridad
Cuando gatilla
Sólo convoca buitres
Adiós a tu cotidiano poético de humanidad
Una lágrima cae
inevitable, helada, final
Hasta siempre Poeta,
Viva Miguel Hernández!
María Serralba, España
“ENTRE TRINCHERAS” (Carta
de Miguel a Josefina)
Hoy desperté sudoroso, Josefina, como siempre,
tiritando, y cegado por el llanto que emana de mis ojos polvorientos.
desolado, al mirar un paisaje de esperanza que existía, y que ahora yermo,
se ahoga entre charcos de sangre, que no es agua, que le nutra su sustento.
Y he llorado, Josefina, como un niño asustado,
esperando en mi trinchera,
agazapado cual cobarde a que el silencio que interrumpe la batalla,
permitiera abrir la carta que te escrito.
Y he besado, Josefina, con pasión,
ese pliego de papel enmohecido,
a fin de impregnarlo de mi anhelo y mi esperanza,
de las noches solitarias que entre balas,
confundí tu belleza con el rostro de la muerte, y a tus ojos,
con el breve atisbo de vida que quedaba en mis entrañas.
Y he huido, Josefina, con temor,
del silbido del viento que me corta cual guadaña,
que aparece ante mí cuando menos me lo espero,
y que anuncia sin recelo,
que seré yo el próximo si yerro,
pero hoy salve la vida por los pelos, en mi lugar,
sin respeto y con saña, se cernió sobre el pecho del amigo medio muerto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 254
Mil poemas a Miguel Hernández
Y desperté sudoroso, Josefina, como siempre,
rebuscando en mi jergón tu bello cuerpo,
y palpando con mis manos esta tierra ennegrecida, me hice sangre,
y traté de arrancar las raíces de su suelo con esmero,
pero nada, ni con eso,
Josefina, tu no estabas,
y yo sudoroso y maltrecho, esperé hasta que se hizo el alma,
pero nada, ni con eso,
Josefina, tu no estabas, y yo muero.
“LAS CENIZAS DEL OLVIDO”
Creí estar soñando y, sin embargo,
la sentí avanzar con paso erguido,
sorteando los árboles callados,
mil cipreses, que unidos sin atino,
proyectaban su sombra en el camino.
La mujer cargaba en su costado el fruto de la última reyerta,
un niño con ojos entornados,
que pedía a todas horas,
que le dieran el néctar que su madre,
protegía con su vida en su pechera.
De la otra, la cogía una pequeña,
que aferrada al pliegue de su falda,
insistía en cruzar a la otra acera,
y observar más de cerca la morada,
de un hombre que vivió de sus poemas.
Enlutada de los pies a la cabeza,
la mujer se acercó hasta mi nicho,
soltando de la mano a la pequeña,
dejó sobre el suelo al triste niño,
y dejando de lado su entereza,
de rodillas cayó cual tierno lirio,
a los pies de mi lápida mugrienta.
Sólo entonces pude oí su dulce llanto,
desgarrar el abismo de mis huesos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 255
Mil poemas a Miguel Hernández
y mi fosa medio abierta, fue observando,
la triste realidad de aquellos niños,
que padre no tuvieron, sin embargo,
lloraban a este ser desconocido,
que a su madre le hizo explotar en un quebranto,
y anhelar un amor correspondido.
Marilyn Zumbo, Argentina
"Para la libertad:
Sangro, lucho, pervivo (...)" Miguel Hernández
Se entregó en un instante sin tiempo
al laberinto de las emociones: sangró, vivió, huyó
de las hipocresías, de las injusticias, del maltrato
como las azucenas entre los algodones.
Y no supo nada, la oscuridad fue su aliada.
Para la libertad entregó sus ojos,
en la luz plateada del alba.
entregó sus manos,
al árbol frondoso, como carnada.
entregó su corazón,
un día azul, de madrugada.
Y no supo de penas,
Y no supo de llantos.
De pie, a golpes, pero de pie.
Nos dejó el legado en el cruel estado.
Para la libertad se desprendió a balazos,
dejó su cuerpo, en un último intento
Desgajó su corazón, como una rama al viento.
Nos entregó su Luz en la oscuridad de su tormento.
Y pudo albergar todas las almas
más allá de los tiempos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 256
Mil poemas a Miguel Hernández
Osvaldo Rodríguez Morán, La Habana. Cuba
EN EL PENSAMIENTO
Siempre que te pienso, Miguel,
lo sé todo de golpe,
desde el origen de lo desconocido
hasta la bajada del ancla
más allá del enigma de la sonrisa
y de los motivos sin términos.
Siempre que te pienso
lo sé todo de golpe,
aunque me sorprenda tu voz
enterrada en la ausencia
de la altura voraz en la memoria.
PALABRAS CAUTIVAS
La poesía de las prisiones
tiene ese hálito inconfesado
de las paredes que la envuelven.
Tu voz coloreaba con estertores
lo intrincado en lo breve
y regalabas el sabor sonoro
que se descubre solamente
en las confabulaciones del tiempo.
En tu manía de hurgar
en las pasiones de las piedras
y en lo introvertido de las rocas,
tus palabras se acercaron a la luz
sobre el hombro herido,
más allá de la desnudez eterna,
que se remontará eternamente
desde los poros encrespados de la luna
hasta la insaciable verdad del misterio.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 257
Mil poemas a Miguel Hernández
BOCA DE LOS TIEMPOS
A Miguel Hernández
Boca que arrastra mi boca.
Boca que me has arrastrado:
boca que vienes de lejos
a iluminarme de rayos.
Miguel Hernández
Relampaguean tus labios
sobre el húmedo estallido
de ese beso no fallido
ambicionado por sabios.
Telescopios o astrolabios,
ninguno su origen toca
para saber si mucha o poca
es la fiesta en mi paladar
y solo logro pronunciar:
Boca que arrastra mi boca.
En un torbellino envuelto
-como impulsador de navestu boca tal vuelo de aves
me empina serio y revuelto.
A un placer atado y suelto,
tu boca me ha concentrado
y su humedad penetrado
en lugares que permito
hasta ahogarme en el grito:
Boca que me has arrastrado:
Desde la lejana historia
en que los labios nacen,
es que deshacen y hacen
maravillando la gloria.
Eco lleno de euforia,
tu sonido hace reflejo
en el labio nuevo y viejo
como cien broches de luna,
y descubro que eres una
boca que vienes de lejos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 258
Mil poemas a Miguel Hernández
Vienen rodando en la vida
del interior de las grutas
y se muestran como frutas
a punto de la envestida.
Boca de entrada o salida,
me salva de los desmayos
de los agostos y mayos
de la angustia y de la brega
y su beso pronto llega
a iluminarme de rayos.
María Eugenia Mesa Olazábal, Cuba
CABRERO POETA. POETA INTUITIVO
El pastor poeta fue profeta en su tierra. Así lo expresó quien fuera su amigo, el
escritor Leopoldo de Luis, en sus Aproximaciones a la obra de Miguel Hernández
(Madrid, 1998), aserto que “parecería extravagante, cuando de tanto vacío y tanta
adversidad se le ha hecho víctima. Ambas cosas son ciertas, sin embargo, las
circunstancias sociopolíticas distaron mucho de serles favorables y cruelmente
difíciles llegaron a producirse en torno suyo, a veces.” Y, en efecto así lo muestran
la vida y obra del insigne creador español que tanto brillo dio a las letras hispanas.
Afortunadamente aparece en el panorama de la poesía española en un momento de
esplendor. Era la época de los poetas del 27, quienes se habían dado a conocer
durante la segunda mitad de la década del veinte del pasado siglo; entonces, se
encontraban publicando sus obras más significativas. No obstante, él sin tener la
formación literaria rigurosa de la mayoría de los que constituyeron este grupo de la
“poesía nueva”, se incorporó al mismo, llevando al par sorprendentes cualidades para
adaptarse al desconocido estilo, impregnándole potencia y energía naturales
mediante el autodidactismo. Trascurrían los años iniciales del treinta, los de la
segunda República, coexistían dos generaciones: la del 27 y muy unida a ésta, la
nueva generación juvenil. Eran tiempos de crisis políticas derivadoras de la guerra
civil de 1936; y, de crisis artísticas, suficientes para llevar a los intelectuales al arte
de compromiso. Es justamente -en ese contexto- cuando el joven Miguel Hernández
irrumpe en el espacio cultural español.
La lírica del poeta de Orihuela presenta diversos temas; pero solamente me referiré a
cuatro de ellos abarcadores de otros tantos:
La tendencia al tema pastoril se descubre de forma inmediata dada por su origen y
oficio de la adolescencia; más, perdurará –incluso- cuando ya se encuentra distante
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 259
Mil poemas a Miguel Hernández
de ella. Alguna vez explicó cómo durante esa etapa escribía: “teniendo por mesa el
lomo de una cabra”. Sus experiencias personales se insinúan en no pocas
composiciones, tales como: la octava XXVI y la XXXIII pertenecientes al álbum
Perito de lunas (1933) y, de manera contundente en la serie de de Sonetos pastores.
Similar inclinación se aprecia al abordar el tema campesino demostrativo en: “La
morada amarilla”, “Huerto mío”, “Égloga menor”, “Profecía sobre el campesino”,
odas “Al vino” o “La higuera”. Toda una simbología rural distintiva por su
vocabulario agropecuario advertida además, en temática fabril como se aprecia en
“La fábrica-ciudad” de El hombre acecha, dedicado a cantar la producción de
tractores; allí las máquinas aparecen como ganaderías, los talleres son custodiados
por flores y, los ruidos mecánicos son resoplidos brutales que van pisoteando como
un caballo huracanado. Vivencias mezcladas con notable asimilación literaria
adquirida a través de inteligentes lecturas a Góngora, Garcilaso y también un poco a
Virgilio, de ahí el empleo de la mixtura esencialmente garcilasista y gongorina.
El tema taurino, largamente estudiado por la crítica desde la “Corrida real” y con
mayor visibilidad e importancia en El rayo que no cesa (1936) por la ascendencia a
una simbología de destino trágico, nobleza y virilidad posibilitadoras del cambio
ostensible en “El silvo vulnerado”, versión previa de El rayo que no cesa; uno de los
poemas más examinados de los escritos en esa etapa productiva de sonetos taurinos.
Período breve pero intenso, destacable por la evolución vertiginosa del poeta que
trasciende a una poesía culta.
Para el lírico de extracción popular y de impulso espontáneo, el tema social ocupará
un espacio preferencial. Al sentirse involucrado, en la contienda bélica, revive en él
ese sentimiento ingénito y clama: pueblo de mi leche, en tanto aborda el realismo en
una poesía combativa. Está consciente de que los versos son viento del pueblo, y
que su tarea es conducir las pupilas de las gentes a las alturas más bellas haciéndolos
volver a éste. Utiliza el romance para encausar sus emociones; la expresión poética
resultada de un fenómeno social y literario que emerge del conjunto de las fuerzas
puestas al servicio del Ejército republicano. Junto a los bardos: Rafael Alberti,
Vicente Aleixandre, Emilio Prados, José Bergamín y otros, incita el empleo de esta
forma del verso al comenzar el verano del 36. En ese contexto crea piezas
antológicas como los romances: “Sentado sobre los muertos”, “Vientos del pueblo
me llevan”, “Los cobardes”, “Llamo a la juventud” y “Campesino de España”,
escritos para Viento del pueblo (1937); el libro exponencial de la poesía de combate
de la guerra civil. Su segundo poemario de guerra cuenta con dos romances: “Carta”
y “Canción última”, ambos recogidos en El hombre acecha, volumen conmovedor
erigido fuera de todo halago al heroísmo y donde el poeta asume como propio el
dolor humano.
La presencia del amor al paisaje y de hecho el tema de España, se presenta desde los
comienzos de su quehacer poético, evidenciando la complicidad del poeta con la
naturaleza traducida en versos amatorios a la tierra, específicamente los dedicados a
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 260
Mil poemas a Miguel Hernández
la barraca oriolensa; la llama Bendita tierra y en otro exclama ¡Contemplad mi
tierra!, y no faltan las composiciones exaltadoras de los accidentes geográficos; así
en su “Canto a Valencia” de 1931, describe los espaciosos dominios de la Vega de
Oleza/ que junto al Murcia empieza. Canta apasionadamente a la campiña, la siente
dentro de sí. Más, el impacto de la guerra le aviva su amor por la patria y convoca a
los jóvenes a defenderla cuando dice en uno de sus versos: Juventud solar de
España// Echa tus huesos al campo. Así, una y otra vez muestra sus sentimientos al
pueblo del que es parte:
Acércate a mi clamor,
pueblo de mi misma leche.
Árbol que con tus raíces
encadenado me tienes,
que aquí estoy yo para amarte
y estoy para defenderte
con la sangre y con la boca
como dos fusiles fieles.
Jorge Bousoño González, Cuba
Por lo general no se sabe
con quien / en que momento y lugar
el amor abre sus brazos
(ese precisamente es
el pecado de los escudos).
APUNTES (DES)VARIADOS DEL RELOJ
Lost, won
lost, won
lost, won
respuestas:
¿dónde?
todos los días me siento en la sala / puerta abierta
a la espera
a la espera
a la espera de algo
(de alguien quizás)
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 261
Mil poemas a Miguel Hernández
ojos una y otra vez en pasos ajenos
(que no llegan)
una lágrima indiferente
quiere desbordarse
posiblemente la atrapará el reloj
y no vuelva a encontrarle.
-IINegación de la negación
unidad y lucha de contrarios
miedos, intolerancia
(irracional causa y efecto)
el caos puede ser tan abarcador
que constantemente nos agrede
querer / y que nos quieran
creer / y que nos crean
para cualquiera es necesidad
aun
cuando no siempre alcance con ser buenos
ni con erguir el rostro hasta el sol.
-IIICalles empapadas de mar
historias frías, inmutables
prestas a superar situaciones extremas
un viento intenso se lleva las no palabras
de entre tantas espaldas
derrumbe, vida
hay cosas que no son inmensas
pero que merecen atención
ahora trato de convencerme
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 262
Mil poemas a Miguel Hernández
de estar conforme conmigo mismo
(armonía de fuerzas y acciones)
calles empapadas de mar
hechizo de isla, amor atrapado
terco y triste rap
otoño renueva hojas
sólo hasta un día.
Irel Alma, Argentina
Y por eso escribo
“Aunque bajo la tierra mi amante cuerpo esté,
escríbeme a la tierra, que yo te escribiré…”
Miguel Hernández
Cuentan, que entre los azahares
y olivos - entre - los verdes,
han visto, un soldado de luz pasar
y se ha sentido, al poeta cantar.
Dicen, que en su taciturno andar,
en purpuras alforjas, solía trajinar,
esa musa… llamada poesía,
de igual forma, la muerte y la vida.
Lumbrera de palabras, su semilla
y la miel… en los avíos del alma.
Pugnando… entre suelo y cielo,
latió su corazón, a sangre y fuego.
Juran, que era un pájaro a la deriva,
noche eterna… y mediodía.
Hoy, enraizó al orbe, su nombre,
como cirio, laborioso en la candela.
Y por eso… por eso escribo, Miguel.
En la saeta, una elegía he de cantar,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 263
Mil poemas a Miguel Hernández
por aquella soñada y azul libertad.
Índigo azul, cual estela en su aura.
Palomas blancas, al peregrino escribo.
Porque así, le voy a recordar,
con el sonido de un ave, al retoñar
y en sus alas, libre por su tierra volar.
“Bendito sea tú nombre, si en el vuelo es infinito
y en el orbe inmortal… ”
Por si acaso
Por si acaso se pregunten, por si acaso,
tus muertos o los míos y esos niños,
desprovistos de asistencia en el coyuyo.
El anciano relegado o el enfermo desolado.
Las nanas con sus pechos de cebollas,
y la heredad natal, los nietos y bis nietos.
Los cálidos amigos y también los enemigos.
Las patrias y la puebla, por si acaso…
Aquellos que a la sombra te desterraron,
Miguel Hernández, nacido en Orihuela,
guerrero de la luz y la palabra eterna,
por si acaso tu dormida tierra se despierte…
Y lean tu nombre y apellido de bautismo,
tantas veces repetido con vehemencia,
entre amarillentas, viejas y deterioradas,
mis papeletas letras
y saber quieran, por si acaso…
Los por qué de los porque… y se pregunten.
¿De por qué escribí al niño pastor de cabras?
Palomas blancas, de rojo y negro teñidas,
daré por toda respuesta en el libro de la vida…
Escribí para honrar la existencia y la dignidad,
apenas como aspirante de poeta y que aún,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 264
Mil poemas a Miguel Hernández
después de muerta preservará,
mi mutilada garganta, él divino verbo intacto.
En la unidad hermanada y en la lucha…
¡Soberana de los Pueblos!
Al Poeta del Pueblo
Divisó el abra existencial entre la brecha
y la ensenada hacia la madre tierra.
La basa noche y lo poco que hay de soles.
Escribió para la libertad, al hombre.
Al hombre, que adormila en la trinchera,
vasto y ciego, curtido en la reyerta.
Porque hay que retornar y ser Lázaro.
¡Despiértate, levántate, camina… y anda!
Que la poesía es de hechos y palabras,
se siente al escribirla como el llanto
y el poblador ha de cantarla con el alma.
¡Hoy… mil poemas a Miguel iluminarán!
Porque si la noche, fue más que noche
y entre nubes oscuras se cubrió su manto,
es por deber de honor, rajar la piel de asno.
Dándole al poeta del pueblo, luz perpetúa.
No queremos ser carne de cañón.
Cavilando entre el montón ni uno más,
esta vida no es un juego, no es de rosa color,
la lucha originaria es caudalosa.
Y aunque menguada luna y noche fue,
dejó su azul estela, ardiendo en la candela.
Que más le valga al hombre,
morir en el intento, siendo uno…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 265
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Y en todos siendo Pueblo!
Voy a cantarle al Poeta
Voy a cantarle… a tu luna enamorada,
y como cada grieta de la tierra,
partiéndome los labios,
voy a temblar con la saeta emocionada.
Sin saber, cuánto dure el alba en su clara,
hay que escribir con verdad en la palabra,
sé que hay trecho todavía por andar
y la noche con mentiras, no se acortará.
¡Voy a cantarle al poeta Miguel Hernández!
Ya que conoció de andares en batallas,
persiguiendo apenas, utopías y quimeras,
con un haz de luz en su pequeña estrella.
Buscando esa dorada línea que se aleja,
cuajando una queja en las entrañas…
¿Que sería el mañana de los niños?
¡ La juventud, los ancianos y los nuestros!
Mirando los lados a la vera del camino,
bregó viendo a sus hermanos camuflarse,
en aquellos azahares pernotados,
herido en su costado el descalzo peregrino.
Es que se anda de paso poeta,
no es necesario ser sabio, ni maestro,
sino savia, para defender mínimamente…
¡El pan nuestro por prioridad y derecho!
Tributo al Poeta
Hay una casa enclava en la falda del monte
y un árbol higuera que perpetúa tutelando…
El sonido del silencio con la flor del pensamiento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 266
Mil poemas a Miguel Hernández
Colores multifarios espiralan aromas circundantes,
con el viento a favor en su follaje.
Allí a pasos de su raíz… hay resina esparcida,
el amor bregando atesorado está en la siembra.
Un clamor de libertad a lápiz grafito y pergamino,
cual impronta de una insigne natura honesta.
Pájaros en el aire aletean entre órbitas violetas.
Tatuado guarda la higuera un nombre sempiterno,
cincelado con dos alas de pugilato,
los anhelados clamores del poeta para el orbe
y el poblador en su hijo de la luz y de la sombra.
Corazón forjado a fuego, lía iníciales con la fémina.
Hay ramas, brazos linajes como lazos,
manos unidas en la humana y constructiva cadena,
edificando puentes, blanco y celeste en pasarelas.
Agua clara, derribando muros transitan por debajo.
¡Y sobre el puente se ve cruzando al poeta!
En sus viejas alpargatas costeadas desde el esfuerzo,
con su bagaje de sueños y aletargadas quimeras,
en el frio que tras las rejas congeló su pulmón dolido.
Desciende la primavera con su cálido
y eterno el pastor níveo, mora entre su rebaño.
¡Con su sangre amada… de grillo espesa!
Thais Margarita Ballenilla Rodríguez, Cuba
TRANSPOSICIÓN DE LA LUZ
A Miguel Hernández
Y si la luz es un hombre simple,
con la voz del infinito, mar y viento,
ojo de pastor, en el extremo verde de algún tajo,
quema la mano de Dios, perita lunas en nombre
del efugio de la espiga, y al silencio desnuda en su olivos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 267
Mil poemas a Miguel Hernández
!Cuanta luz! Miguel
Y si la luz es el tránsito vital del andariego,
cierne la pureza en tu aroma de limón
después del golpe de agua necesario,
versos de punta a punta recorren las Callejas,
sin otra luz que una mancha roja en la frente,
mientras el toro parte hacia la arena, incólume a la última cita.
Y si la luz se tiende enamorada al –yoen busca de silbos y muchachas,
vocifera el dolor de manos libres,
y la potestad de la suerte urge el canto de la espuma.
¿por qué lado la lengua estallaría, Miguel?
Si solo el pecho es higuera del Pájaro orinador de orín divino.
Y si la luz no es más que un cuento pirotécnico,
multiplica el amarillo del Sol, litiga el oro de tus dones,
la sonrisa, una junta de rayos y ombligos, o una paloma
que sólo al pan le pidan los milagros y la verdad al hombre vulnerado.
Sombra contra sombra, ¡Miguel, tanto fuiste, tanto eres!
Y si la luz fuera el azul ileso de los corazones.
No serás un mártir de madera, ni hacha alguna será verdugo
de tu sombra,
de leche con espumas, vendrá la hora final del parto, y en la recta
viene el Ruy-señor con voz de silbo.
Y si la luz es la muerte, al filo de la hora nupcial de las raíces,
un mandato final del rayo que no cesa
escribo versos copados de Sol, ancha utopía,
ante el desnudo polvo de la pena.
¿Para qué necesito los espejos?
El mundo vuelve al día originario, ojo de pastor y campesino con un ay entre los
labios y manos de huerto
Y todos los ruy-señores solitarios, Silbo para consolar / mi dolor de canario / y a lo
ruy-señor. y el silbo, / ¡ay! me sale vulnerado
Como empequeñece andar metido en la muchedumbre, sin medir la cabeza del pobre,
Ruy señor, enamorado, silbo en mi soledad, pájaro
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 268
Mil poemas a Miguel Hernández
La tierra umbría desde la eternidad está dispuesta a recibir mi adiós definitivo
No serás un mártir de madera, ni hacha alguna será verdugo de tu sombra
campesina, ¿qué fueron las virtudes? En la era del polvo y de la nada,
serán las fuentes pura de tus venas, los cardos mondos de tus manos,
los pozos quietos de tus ojos. Que besan, aman en medio de la lumbre
Del Silbo vulnerado
Se me durmió la sangre en la camisa, y seguirás perseguido
por la sombra del último descanso., cuando concluyas al pie del limonero
Porque la pena tizna cuando estalla y hace silbar un ruy-señor
en la ilustre soledad del silbo vulnerado.
Vuelve el pensamiento a sus giros, como pájaros negros en tu memoria,
y a las cavilaciones, voy entre pena y pena sonriendo”
Del rayo que no cesa
Es rayo que nace de ti y ejercita su furor, con el silencio metálico,
redoma un hueso y eclipsa la luna en un corazón desmesurado.
Quiero escarbar la tierra con los dientes, para hablar de muchas cosas.
Del dolor, del origen y del barro que mancha con su lengua cuanto lame.
Otros poemas
No me consientas ir de sangre en sangre como una bala loca,
un rayo poroso que me aboca abrir los ojos del destino,
bajo el yunque sufrido de mi frente., un cadáver de espuma, viento y nada.
Los altos personajes de la muerte, todos con agujeros y una caja boquiabierta.
Eterno bajo el Tajo, transparente defensa del hoyo y del paladar del gusano,
cuando el ahogado humedece las aguas con el silbo
y se dedica a cisnear el rio para lavar la muerte.
Un antes de leche en tu cabeza, un caracol que crece en el mar,
y solicitan su asistencia al árbol mostrando la huella
y la coincidencia del barro y la cólera del hambre.
Si no fuera ¿por qué?... no sé por qué mi corazón escribiría…
un carta que llevo allí metida…
Viento de pueblo.
El pueblo espera a los poetas con la oreja y el alma tendida al pie de cada siglo.
Cultiva el hombre sus raíces, cegado el manantial de tu saliva,
y tu llanto de hombre
Entretejido de palomas y una sombre larga, y la agonía, de la muerte diaria.
Aquí estoy para vivir mientras que el alma me suene
y aquí estoy para morir cuando la hora me llegue.
Y la muerte frutalmente propagada, tiene del toro la arrogancia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 269
Mil poemas a Miguel Hernández
y ruiseñores que cantan por encima de las balas, y pueblan los rincones del cielo los
hombres de frente ancha.
A pesar de la muerte, la patria cubre el horizonte, la piel del olivo y la bandera.
Tiene el mundo tiene otra cara.
Despierta hombre, que no es tarde.
Sálvate toro, que la muerte aceha.
Cicatriz del hambre y la conciencia, palomas que solo saben cantar a la inocencia
Y pierdo las reliquias de mi cuerpo en cada herida, Porque soy como el árbol talado,
que retoño, porque aún tengo la vida.
Un hombre hace memoria de la luz, de la tierra, húmedamente negro,
sopla la luz de la muerte, y la apaga.
Un alma en toda la verdad del cielo y un nutrido cementerio.
La noche se desprende de la luz incierta y la exige embestida de la sombra,
niega la luz del vientre, el hijo mal parido, (/hijo de la sombra),
Oigo un grito, de leche con espumas, al final de los muros,
y es la gran hora del parto, luminoso, (hijo de la luz), y en mezcla de luz y sombra,
viene el hijo con voz de silbo.
Ceferino Daniel Lazcano, Argentina
De rayo, luna y silbido
A través de las rejas del mundo
se oye tu grito, Miguel,
que todas las prisiones juntas
no pueden callar
el ansia de libertad
de un solo hombre verdadero.
Venciendo a la muerte
vuela tu verso, Miguel
junto a tu mujer y a tu hijo;
permanece escrito
en la memoria del pueblo,
grabado en el aire del cielo.
Versos claros, lúcidos como rayos
para iluminar y sanar las heridas.
Silbidos que por fin acarician
tu tierra de Orihuela ensangrentada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 270
Mil poemas a Miguel Hernández
Florecen sonetos de amor
y se elevan:
zumo de luna/baño de rocío
para los amantes.
Un clamor nace y se agiganta entre las peñas:
…Y que se acallen las guerras
y que se acallen las guerras,
que enmudezcan para siempre las metrallas.
Y que el Amor, hermano,
gane de una vez y para siempre, la batalla.
Carlos De los Ríos, Chile
Miguel Eterno
Miguel, Baltazar
quiso buscarte
a ti y a los miles
caídos masacrados
por la gárgola a nombre
de una hostia fabricada
en el culo diabólico
inquisitorial.
Tampoco perdono
a la muerte enamorada,
aún te sigo buscando
noble calavera.
Despierta camarada,
entonces,
en la boca de los
eternos indignados,
desterrados de
la tierra prometida,
de una España que
aún llora tu absurda
partida con las manos
de un pueblo que ha
perdido brújulas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 271
Mil poemas a Miguel Hernández
Nadie levantó
más alto que tú Miguel,
las banderas dignas
de un nuevo horizonte
repartido en cuotas
cotidianas de ternura.
Ahora, más que nunca,
levántate Miguel Pueblo,
ocupa todas las plazas
y suelta todos los toros
rabiosos de la melancolía
que esta elegía intenta
sanarte,
Miguel eterno.
Margarita Rosa Walling, EEUU
ENTRE BARROTES
Penumbra humedecida,
lúgubre mazmorra
encierra en sombras
el ser en angustia.
Un ideal de libertad,
de abolición por la injusticia;
arrastro la juventud de tu alma
a la humillación más baja.
Grito tembloroso se desgarra
bajo el tenue rayo de luna,
que cauteloso se desliza
entre los barrotes de la esperanza.
Tiempo detenido en la condena.
Cautivo el ser que se desploma
en la incapacidad física;
aunque el pensamiento libre lo sea
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 272
Mil poemas a Miguel Hernández
La ironía de la maldad humana,
que carcome al ser irracional;
pero fortalece en las cenizas
al alma en busca de la conquista.
Fueron más que simples palabras
las que dejasteis plasmadas,
en una constante historia poética;
en las almas buenas encarnadas.
POETA O MARTIR
Hoy se reviven los sentimientos
de tu lucha incansable.
¿Serás poeta o mártir?
Eres inspiración latente,
con tu vida de sueños.
No se te llora, no hay sufrir.
Se empuñaron tus manos
para los inertes rifles.
Se empuñaron tus manos
para los inertes lápices;
qué más da, si fueron ensordecedores escritos
o bulliciosos balazos.
Solo buscabas que la verdad
fuera vista y escuchada.
Que existiera una clara igualdad,
entre los derechos de cada cual;
honrando la paz y la libertad.
¿Serás poeta o mártir?
Mery Larrinua, EEUU
Mil poemas a Miguel Hernández
Barrotes
Cual “El rayo que no cesa”…Miguel Hernández
Amores apasionados…perdidos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 273
Mil poemas a Miguel Hernández
Vida intensa…años sufridos
Camino pedregoso…brío traspasa
aliento fogoso, rejas
barrotes inquietos
tras la palabra, tras los versos
“…armado con la espada de la luz!...”
Pablo Neruda enseña
de su amigo la fuerza
la tenacidad de gloria terrestre
Poeta del pueblo
Poeta del amor
Del romance…sencillo
de prisión de muerte
de libertad de luz
de sueños cumplidos
¡Te honro,
Miguel Hernández!
José Rafael Montilla Caballero, España
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Cuando las palabras
son tormenta de amor
y rayo de deseo,
escritas en los renglones
invisibles del pensamiento.
Son morada de un beso infinito,
que respira la sonrisa eterna de un niño.
Cuando las palabras
alumbran trigo en la mirada del campesino,
y las penas pastorean en los rincones del alma.
Cuando las palabras
lloran razones, mutiladas por la resaca de la guerra,
y las sombras de la luna se pintan de rojo sangre.
Cuando las palabras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 274
Mil poemas a Miguel Hernández
sacuden el árbol de los sentimientos,
que caen maduros entre las grietas
de corazones nunca olvidados.
Abrigan, como capas de cebolla,
el frío hierro de la cárcel.
y lloran soledades no deseadas,
abrazando, con sus largas manos,
la libertad.
Cuando las palabras
son racimos de uvas
y rebaños de amapolas,
soñadas por la luz de mis sueños.
Son arados abriendo
surcos profundos,
en la tierra yerma de mi alma.
Cuando las palabras
son la proa del barco de mi horizonte.
Aves que emigran a la primavera
de mis labios.
Gotas de rocío que empapan
mi voz dormida.
Cuando las palabras
son los pasos que abren
el camino eterno de un verso.
Vivo tu nombre. Miguel.
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Muda quedó
la mano del poeta.
Roja de sangre la cuneta
donde su letra se quebró.
Desierta la voz
que pinta la cintura de la luna,
la sonrisa azul de una cuna,
los milagros rotos de un dios.
Ya no lloverán, sobre el papel,
sino lágrimas rizadas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 275
Mil poemas a Miguel Hernández
Trocitos amargos de hiel,
figuras de barro pisadas
por aquellos deformes pies,
que la muerte tiene en sus patas.
Amelia Biart Alfonso, La Habana, Cuba
Poema a Miguel Hernández
Cuándo regresará nuestro ruiseñor
de madero fundido
de trino con aroma a monte
A dónde habrá ido
cómo
y por qué
El niño sostiene
con la punta de los higos
los maltratos del padre
pétalos de colores se tuercen de bravura
y las riberas las espigas los álamos
la sed el lagarto los jinetes
el río
fabrican parda muralla
para detener al bárbaro
Bajo un friso de lunas
abre la puerta Miguel Hernández
canta a la suerte mala
a la soledad castaña
a la vida de todas las cosas
por encima de su valor
fuera y dentro del círculo
más allá de los eclipses
las fronteras el rocío el manigual
Le cimbran la mirada los pescadores
que con rieles agitan las manecillas del reloj
tirando el ancla
y el mar amanece
con bandadas de conchas
salina que liba un gorjeo dulce
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 276
Mil poemas a Miguel Hernández
Se le une al curtido de la faena el jornalero
que a fuerza de necesidad
labra el pan el trigo los olivos
el lomo de pura encina
la herramienta las minas el fusil
Salta el clamor de la justicia
en una voz
que rompe raja trueca
el dolor del pueblo
hondo como la devastación
como el rugir de los toros tintos en sangre
bajo la mueca de los verdugos
Pueblo que hace bullir el alma
su alma
discierne como un semidiós
o como un Dios entero
los declives de la tristeza
Destripa el abuso con el filo de su palabra
que es trinchera cañón ramalazo
que apunta al blanco del yugo
para librar a los oprimidos
Y hace brotar la semilla
por entre las ráfagas
las guerras
la muerte
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Con los vientos que te sostienen y multiplican te lías al presente en una cuerda
interminable. Nos halas silencioso con el rostro lleno de marcas dolorosas, pleno de
belleza porque en tu mirada secreta aún vibra el volcán de grana, las palmeras, los
racimos y los vientos que se inflaman cazando amoríos con una delicada
ensoñación.
La medicina del sol cubre tus rebaños, viste tus praderas al roce oportuno del
guijarro. Y te nos ofreces cada vez de mejor sabor, apostando a tu España de ayer y a
la del hoy de nuevo convulsa, como un pestañazo de flores que rasgan el puño que
las macera.
Atraviesa tu silbo la porfía que empaña y estalla a pulso, sin tino cuando los que no
dejan nadalo quieren todo e inventan guerras de estiércol con improvisadas
componendas.
Tu libro, Miguel, es mi casa; tus versos, nuestra patria. Imantados en tu nombre,
no cometa nadie pecados; los frutos no serán prohibidos, sabia será la mazorca,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 277
Mil poemas a Miguel Hernández
virgen el manantial, bendecidas las migajas.
Tiéntanos de obrar siempre en la luz, de no perecer en la pudriciónterrible que
amenaza el gozo y corroe el corpiño de la buena ventura.
Impide que la música del alma se nos aleje como un pájaro asustado, huyendo de la
jaula con dientes de acero.
Haz que los vientos se nos abalancen; los vientos del pueblo rudo, enorme, atento
ensimismado. Victorioso en cuanta ala se disponga a volar, cuanto árbol se afinque a
la tierra, cuanta existencia útil se colme de nacimientos.
Yo quería enarbolar para ti unas breves líneas y al descubrirte encontré un oasis
que cristaliza de mundo, de recóndito verdor, la exquisita centuria en la pasión de tus
ramas sombrías.
Se torna primavera el corazón, acerca el cuerpo el rosal y de golpe los vientos
figuran para la tierra un pedestal; para tu tierra donde te llora el niño hambriento,
donde las barbas apartan los sombreros para ceremoniarte y las mujeres sueñan y
veneran tu imagen de campesino.
Inmerso en el canto del pueblo, te trae de vuelta el viento de todos los pueblos, en la
zarpa deliciosa, en el centeno, en la cordillera, en el último trazo de humildad conque
despediste al horizonte.
Vicente Rodríguez Lázaro, España
La libertad entre barrotes
(A Miguel Hernández)
A través de los barrotes
de la celda que te oprime
se niega la libertad a abandonarte.
Llega en forma de luz, tenue y sencilla,
hasta tus ojos apagados,
inmersos en la tristeza de la prisión,
del peregrinaje interminable
que las hordas del oprobio
te obligaron a sufrir.
Esa luminaria inaprensible
ha superado la derrota
de tus pulmones arrasados.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 278
Mil poemas a Miguel Hernández
Ha trascendido el dolor de tu cuerpo
y ha sembrado tus rincones más ocultos
con la fértil semilla
de los versos invencibles.
Incapaz de soportar tanta opresión,
marchaste de tu ser mundano,
escalaste la senda
que el tibio rayo te trazaba
y acariciaste la libertad
con los dedos infinitos del poema.
Hoy contemplas, desde el Paraíso
de las Musas que te abrazan,
cómo esa libertad que te acogió
se expande entre nosotros,
bardos del presente,
degustadores del jugo de tu poesía
extendida en nuestros ánimos,
testigos de tu victoria
que el tiempo justiciero
ha elevado hasta la cumbre del recuerdo.
Ellos, tus opresores,
han caído en el abismo del olvido,
reptan ignorados
por la senda terrible de la Nada.
Y tú, Miguel,
vuelas al fin libre
a través de los caminos del poema,
en las mentes y espíritus
de quienes hoy honramos
tu entrañable memoria
de cálido poeta
y mártir de la justicia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 279
Mil poemas a Miguel Hernández
María Luisa Mayorga Sánchez, México
Tres heridas yo
Un día de esos, poeta de Orihuela;
en que la tristeza más profunda
me bañaba el alma de melancolía.
Escuché de Serrat ese poema tuyo
vate Hernández, "llegó con tres heridas"
Pensé que todos vamos por la vida Miguel,
con esas tus heridas vueltas canción.
Que Serrat, Joan Báez, Nana Mouskouri
le van eternizando con amor y dolor.
La del amor...ese amor,
que lacera el alma de emociones...
y rompe el corazón más de las veces
que lo colma de amor y de venturas.
La de la vida Miguel;
quizá, es la torta aquella
que el vulgo te asegura ...
lleva todo niño nacido
bajo el brazo.
La de la muerte...
que es la única certeza,
que podemos tener en esta vida
desde el momento
de nuestro nacimiento
Igual que tu Miguel...
con tres heridas yo:
la de la vida ,
la de muerte,
la del amor.
Malusa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 280
Mil poemas a Miguel Hernández
Fidel Alcántara Lévano, Perú
POETA DE LA VOZ TRUNCA
Al ser fuente de armonía
Donde se forja su encanto
Con mensaje de ambrosía
¡MIGUEL HERNÁNDEZ DA UN CANTO!
Su fragante creación
De belleza singular
Marcó una ruta sin par
Por brillante inspiración.
Fue un indicio de pasión
Al ser tierna sinfonía
Y por vasta melodía
Apertura noble senda,
Y se eterniza su ofrenda
Con la estrella de su cielo
Le da luz al horizonte
Y permite que remonte
Consolidando un anhelo.
Es un remanso y consuelo
Que da la paz entre tanto
Y del futuro, adelanto
Por su albor tan cristalino,
Y con lenguaje divino
DE SU FUENTE DE
ARMONÍA.
¡DANIEL HERNÁNDEZ DA UN
CANTO!
II
Por variada su faceta
Y si visión planetaria
Lució aureola solidaria
Con las albricias de esteta.
Dejó la ruta obsoleta
Extendiendo níveo manto
Y muy lejos del quebranto
Edificó su perfil,
Y es un venero sutil
V
A todo el saber humano
en su trova da cabida
e innova su fe prendida
Con sentimiento temprano.
Con el afecto de hermano
A la ignominia derrota
Y su cariño le brota
De su tan fresco pistilo,
Y es por su grácil estilo
DONDE SE FORJA SU
ENCANTO.
“GARCILASISTA” DE NOTA.
III
Rinde culto a la belleza
Al embrujo de su pluma
Y se despeja la bruma
Por su ardiente sutileza.
Es ejemplo de realeza
Anunciando un nuevo día
Y sin mañana vacía
VI
Nos lega su poesía
Opacada por la muerte
Más su fundamento vierte
Dado senda de valía.
En el arte augura vía
Sobre un dulce espacio terso
y en panorama disperso
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 281
Mil poemas a Miguel Hernández
Depara norte encendido,
E irradia su fiel latido
brinda esencia espiritual,
al ser voz universal
CUAL MENSAJE DE
AMBROSÍA.
¡POR LA MAGIA DE SU VERSO!
AL AVE DE TRINO ARDIENTE
Al ser poeta del mundo
Por su esencia positiva
Un bello norte fecundo
¡MIGUEL HERNÁNDEZ MOTIVA!
Es vate de lo imposible
De una vena inmarchitable
Fija ruta inolvidable
Por su aporte inextinguible.
Pinta un paisaje increíble
En la piel cada segundo
Y al ser prolijo y profundo
Acrisola su aptitud,
Y da pauta a la actitud
Es cual pétalo fragante
Que perfumado florece
Y aunque muy pronto fenece
Dio alborada impresionante.
Forja estela fascinante
De eterna cultura viva
Y en cada suelo incentiva
Con su gama de virtudes,
Y en lejanas latitudes
AL SER POETA DEL
MUNDO.
¡MIGUEL HERNÁNDEZ
MOTIVA!
II
Le brinda al tiempo su
aurora
A través de su cristal
Y su palabra inmortal
El ser del alma atesora.
Da su lira sin demora
En razón a su inventiva
Y su aureola proactiva
Logra el pódium conocido,
Y no sabrá del olvido
V
Es un latido imponente
Que se forma desde ESPAÑA
Y la heridas restaña
Con la fuerza de su mente.
Como un astro refulgente
Destella su ensoñación
Y aroma cada rincón
Con poéticos perfiles,
Y recorre sendas miles
POR SU ESENCIA
POSITIVA.
DANDO ALIENTO AL
CORAZÓN.
VI
III
Con sus nítidos albores
Que su espíritu prodiga
Junto al entorno se liga
Entre mutuos resplandores.
Es un hito de esplendores
De postulado oriundo
Bajo la luz de la luna
Le da un segmento a la noche
De belleza hace derroche.
Con su manera oportuna.
Hoy delega cual fortuna
Una entrega cautivante
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 282
Mil poemas a Miguel Hernández
Y por su trino rotundo
Cimenta su inmensidad,
Y ser a posteridad
Que seguirá deslumbrante
En el orbe sideral,
Al ser gloria terrenal
UN BELLO NORTE
FECUNDO.
¡DEL ACERBO
HISPANOHABLANTE!
HALO DE VUELO FUGAZ
Al reflejar la existencia
En su versar tan fecundo
MIGUEL HERNÁNDEZ dio esencia
¡DE ORIHUELA PARA EL MUNDO!
Desde su añeja niñez
No tuvo la miel del alma
Pero sin perder la calma
Asomó su solidez.
Hizo gala de avidez
por literaria presencia
y al despertar su conciencia
cimento su virtuosismo,
Y delegó su humanismo
Jamás se hizo un imposible
La más difícil barrera
Y superó la frontera
Con pundonor increíble.
Al enemigo invisible
De carácter iracundo
Con su saber oriundo
Le ofrendó su fiel aporte,
Y dio su palabra un norte
AL REFLEJAR LA
EXISTENCIA.
¡DE ORIHUELA PARA EL
MUNDO!
II
De las bondades terrenas
vio la ausencia en su camino
más persistiendo con tino
tuvo mañanas serenas.
En las estancias amenas
Fue creando en un segundo
tras sentimiento profundo
Sin tener la fe perdida,
con esperanzas de vida
V
Su voz se volvió fusil
Ante la cruel injusticia
Y con mágica pericia
Iluminó su candil.
Alumbraba su perfil
En pos de un aura solaz
Y en memoria de la paz
Anhelaba un fiel paisaje,
Y denotó en su mensaje
EN SU VERSAR TAN
FECUNDO.
SURREALISMO FERAZ
VI
III
Ante la dificultad
De su agresivo sendero
Edificó un derrotero
Con sencilla cualidad.
Su paseo terrenal
Fue de muy corto horizonte
Más logro que se remonte
Su legado espiritual.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 283
Mil poemas a Miguel Hernández
Fue forjando inmensidad
Derrotando a la inclemencia
Y con sutil insistencia
Le dio a su ruta color,
Y venciendo el sinsabor
En el núcleo sideral
Es un lucero encendido
Y su afecto desprendido
Aún es acorde en canción,
Y en el orbe su versión
MIGUEL HERNÁNDEZ DIÓ
ESENCIA.
¡ES UN ETERNO LATIDO!
Alicia Almeida. *Diluz, Buenos Aires, Argentina
AL POETA DE ORIHUELA
Guardas Poeta la calidez del verbo
marcado con tu sello imborrable,
tu poesía profunda y sincera
con virtud inquebrantable.
Esa lírica de tu pulso y letra
esa letra de tu cuerpo y sangre
ya quedaron en la historia cierta
sin fronteras hoy, Miguel Hernández.
Un arma fue tu voz escrita
empuñaste el alma con tu canto,
creciste íntegro, hombre apasionado
del trabajo a la lucha y de la risa al llanto.
Del valor insobornable de tu hombría
en los versos acunados de tus sueños
se esparcieron aires puros por tu cielos
y en lo eterno hoy anida tu poesía.
El eterno ruiseñor será tu canto
desprendido en su garganta enamorada,
ee tu España de tu cuna en Orihuela
de tu historia que jamás será olvidada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 284
Mil poemas a Miguel Hernández
Fuisteis de la tierra y también del cielo.
Llevas tu pluma con grácil melodía
desgranada de esencias, bien envuelta
en una cáscara tan fresca que cautiva
el dulce anhelo de escuchar tu canto.
Eres poeta ejemplo de la hombría
que acunó la vida desde tu Orihuela
de tu tierna infancia esa luz que ardía
amando los libros, con mi poca escuela.
Aunque te encerraron siempre fuisteis libre,
libre como el viento que besó tu pluma
tus hermosas letras sin maldad ninguna
fueron de tu cuna siempre compañeras.
Mecidas estaban en noches oscuras
esperando el día de nacer de nuevo
escribías todo y de todo hacíais
los mas bellos versos para tu consuelo.
Y fuisteis de la tierra y también del cielo,
el poeta innato que alumbró la aurora,
fuisteis luz y sombra, y el eterno rayo
que desde la ausencia alumbro tus horas.
Horas que encerrado sin pedir clemencia
llenasteis las penas con tu eterna nana
¡Nana a la cebolla”, que ternuras guarda,
de tu eterna pluma, hoy aquí y ahora.!
Espíritu de Poeta.
( A Miguel Hernández)
No te fue fácil la vida
ni fácil te fue la muerte,
mas nada pudo vencerte
mucho menos el olvido!
Y aquí se yergue la flama
de tu poesía encendida
con la fuerza y el talante
resurgiendo cada día.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 285
Mil poemas a Miguel Hernández
Fuisteis paciente y capaz,
perseverante en la lucha
sin ánimos de aflojar
pusisteis garra y criterio,
de los libros fue tenaz
tu corazón, aprendiendo
todo y cuanto de Poetas,
decollando fuisteis nervio.
Luego te llegó la muerte
con la cruel enfermedad
y te fuisteis con tus alas
por siempre a la eternidad.
Que se quedaron tus letras
para siempre recordadas
en el corazón de tu pueblo
que trascendió tu mirada.
Esa mirada que ardiera
con el fuego de un volcán
de tu España enamorado
y amando la libertad.
Soñador como ninguno
tu pluma gozo y verdad.
sepultado está tu cuerpo,
tu espíritu libre va.!
Juan Fco. Cutillas Murcia, España
DE PENSAMIENTO LIBRE Y ALAS INFINITAS
En un gran vergel, la huerta oriolana,
llena de palmeras e higueras,
de naranjos y chumberas,
de barracas valencianas.
A lo lejos un rebaño conducido por un poeta,
tan humilde como un limón y libre como un gorrión.
De su mente mana libertad,
la cual fluye por el papel,
convirtiendo palabras en poesías,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 286
Mil poemas a Miguel Hernández
llenas de amor, esperanza y pasión.
La fértil tierra del río
Segura se empapa de tus pasos,
de las miradas absortas mientras llenas cuadernos de poemas.
Todavía las calles oriolanas están impregnadas de tu olor,
las cuales recorrías dejando tus huellas de amor a tu pueblo.
Hay quien quiso contarte las alas para que no volaras,
quien te puso piedras en el camino,
las cuales apartabas,
pero no hubo quien borrase tu nombre de esta tierra,
la que te vio nacer,
la cual te inspiró en tus días de pastor
a escribir páginas llenas de libertad y amor.
Los que intentan silenciar tu voz
hoy son los que ya tienen la suya silenciada.
Norma Barrientos, Argentina
TODO POETA
Me conmuevo…
Trinidad, es para Miguel, toda la vida:
amor, vida y muerte.
Vibro engendrado, nacido, sentido
en existencia, en potencia, en insistencia.
Tanto en un todo poeta, tanto en pureza
cósmica, en calidad de entraña.
Me conmuevo…
Pastor de versos calientes, en viril sollozo,
colectivo, universal, impregnado, a veces,
en borbotones purpúreos de su sangre.
Me conmueven:
La muerte incrustada en su carne.
La vida en huerto, en limonero, en ruiseñor,
el amor cuajado en el vientre culminante.
Me conmueven:
Las penas de cárcel, de aire sin vuelo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 287
Mil poemas a Miguel Hernández
exprimiendo su alma hasta su última agonía.
Me conmueve
Su conciencia limpia, con ira convertida
en luz, en guía, en resplandor.
Me conmuevo y siento está
vivo en el colorsonido de su verbo,
vivo en el amornectar de sus horas tristes,
vivo en el acento telúrico de frutos y de flores,
vivo en la tierra estremecida de aflicción ardiente,
vivo en el clamor de la justicia,
vivo en el aire que dejo con vuelo.
Todo poeta:
Me conmueve en tiernas heridas tu sensibilidad
tremenda “sin poder declinar”
Miguel Hernández: Me conmueves tanto…
Francisco José Blas Sánchez, España
Miguel Hernández en la memoria
En la soledad te encontraste
materializando sentimientos en versos
con influjos de luna.
El viento arrastraba tu aliento
en una España escindida.
No considerabas yerto al amor.
Tu ser epígono
te llevó donde no cesa el sueño.
¿Por qué esa discordia
que acecha al pueblo?
Ausente quieren dejar a la vida,
ausente quieren dejar al amor,
mientras acompaña la muerte
en el silencio hiriente
de una realidad de desazón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 288
Mil poemas a Miguel Hernández
La huerta quedó huérfana
llora la higuera al sol.
Cayó el grano de trigo a la tierra
poemas ecuménicos son fruto,
pasando de manos a manos
generación tras generación.
Miguel, yo te imagino
en el más alto pináculo
donde jamás el corazón endureció.
José Cercas Domínguez, España
SI VIENE MIGUEL
Si viene el poeta, decidle
que la mordaza se despide de la boca,
que tras la fiera marca de la huella
viene cantando la alegría.
y que bajo el peso virtual de una mirada
nace la inocencia con cara de niño.
Decidle, también,
que el toro vuelve a su raza
y que el fiero estoque muere
de frío sobre el agua de la ventisca.
Decidle que pida, al viejo soldado, responder
a la bala con una trova
y al terror con un beso...
si viene Miguel, decidle
que la tierra en contacto piadoso, espera…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 289
Mil poemas a Miguel Hernández
Angeles Ochoa Garza, México
VUELVE MIGUEL
Cada flor de mi lirio te recuerda,
flotando en el charco,
como tú flotando entre vivir y no,
los lirios te los regalo,
pero no transijo en escoger si vives o no,
déjale eso a los caballos que tiran de tu carro,
suelta la rienda, a ver a donde te llevan,
pero no desistas en ser alado,
en caminar por encima del lago a pies descalzos,
verte así me inflama, te sé cierto por eso te quiero,
también porque vuelas,
hacia arriba donde tu cielo no alcanzo,
hacia abajo donde en el suelo me recitas Miguel.
Lo que más me gusta es
que a la muerte que acecha le sonríes
y en tu lomo la llevas hasta el horizonte,
y la devuelves esperando que sea ella quien te nombre.
Aunque duela hasta la cutícula
tengo que dejarte partir
eres ahora capilla ardiente,
en un intento por sobrevivir
me dices que tal vez me digas adiós,
pero primero tus caballos
empollarán años bisiestos.
Teresita R. Díaz, Argentina
Oda para Miguel Hernández
En tu amada España
se abrieron
tus ojos labriegos.
Campos de Orihuela te
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 290
Mil poemas a Miguel Hernández
vieron pasar
junto a tu majada, poemas, morral.
Acunando sueños, sueños de libertad
todos ideales de un mundo mejor.
Y pasó la vida y llegó el dolor.
Tu tierno angelito al cielo voló.
La vida ofrendaste por un ideal:
eran tiempos duros allá por España
cárceles, puertas, pensamientos, libros
cerrados, bajo siete llaves.
Tu frágil figura buscaba otros cielos
donde no fuera presa la libertad.
Un día de mayo del cuarenta y dos
allá en Alicante,
callaron tus poemas,
se apagó tu voz.
María Magdalena Gabetta, Río Tercero - Córdoba – Argentina
Pequeño Pastor de Cabras (A Miguel Hernández).
Hay un pastorcillo niño
correteando tras sus cabras,
en el morral, lleva un pan,
un libro y un par de sueños,
por cumplir en el mañana.
Ignora el pastor su muerte
tras el muro y las grises torres,
dónde lo arrojará la barbarie,
la vileza y la ignorancia.
Ignora el pastor su futuro,
mientras su mente absorbe ávida,
las letras de añejas páginas
o mientras corre feliz
tras un hato de cabras flacas,
que saltan entre otras piedras,
la de libertad anhelada,
por la que luchará día tras día,
en el ignoto mañana.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 291
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Ah que triste será tu destino
pequeño pastor de cabras,
pero qué grande será tu legado.
luchador de cuerpo y alma !
Ignora el pastor el mañana
los vientos de guerra,
la lucha y el poder de su heroica palabra,
que hará sacudir otras mentes,
que lo encerrarán tras las vallas.
Ignora el amor que vendrá,
la mujer solitaria,
el pan, la cebolla y el hijo,
que le inspirarán una “Nana” .
Ignora el pastor tantas cosas,
que templarán su mente y alma
y mientras ignora, ríe feliz,
corriendo tras sus cabras.
Tiempo de Libertad (a Miguel Hernández)
Es tiempo de libertad
¿lo soñaste Miguel?
Sí me atrevo a decir que sí,
que era lo que soñabas.
Libertad e igualdad
y sin embargo….
¡Ay Miguel!
no pudiste disfrutarlas.
Mira Miguel….
canta el ave en el tejado,
corren las cabras en el prado,
ríe el niño,
y tu alma vuela entre esos pájaros,
que envidiaste un día, desde tus rejas,
¡Ay Miguel!
tan injustas .... tan ingratas.
Fue un tiempo de espera,
una lucha, días de agobio y desesperanza,
un niño se asoma y bebe,
sopas de pobreza y ausencia,
luz y penumbras,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 292
Mil poemas a Miguel Hernández
letras y versos saltando
entre páginas de dolor,
pero también,
¡Ay Miguel!
de esperanzas.
Brilla el sol,
corre el agua entre las piedras,´
vuelan las mariposas
y la araña teje laboriosa,
como vos Miguel,
tejes sueños con tus letras,
tejes …. Patria.
Oye… canta el ave,
canta el agua,
canta la lluvia,
y tu alma canta,
es tiempo de Libertad Miguel,
la que tanto anhelabas.
Júlio Cesar Bridon dos Santos, Brasil
ACRÓSTICO: "MIGUEL HERNÁNDEZ"
M estre de versos encantados siempre
I nvestiu en las letras para mostrar al mundo la
G rande poeta que fue aún venido de
U me la familia humilde que
Y mpunhava el cajado para pastorear cabras que la
L evaram a componer suyos más bellos poemas.
H avia en él algo noble, sublime y altivo que demostraba
Y ntre escritos religiosos su intolerancia y
R evolta a aquellos que desean dominar su tierra
N atal, por eso, alistou-si y empunhando
A rmas fue designado para enfrentar la enemiga
N a esperanza de poder salvar los indefensos que se
D eixavam abatir sin haber siquiera lo que hacer para
Y nfrentar los enemigos, por eso, sufrió, fue prendido y como un Ángel
Z arpou de esta vida para encontrarse con la eternidad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 293
Mil poemas a Miguel Hernández
“PASTOR DE VERSOS”
Escolheste ser poeta
Mesmo sabendo
Que a dor, a tristeza e o amor
Fariam parte do teu eterno caminhar.
Não temeste as agruras
Do tempo que pastoreavas
Pois foi assim, contemplando os céus,
Que te inspiraram as milhares de estrelas.
Tua voz calada, sensível
E teus sonhos de poeta
Fizeram de Ti, ó Grande Mestre
Um sonhador apaixonado.
“POETA SONHADOR”
Poeta que pastoreou cabras
e que, olhando os céus estrelados,
aprendeu a tirar dali,
seus mais sublimes versos.
Sonhador, alimentava seu espírito
Como um ser que busca nos Infinitos
Explicações que lhe fugiam
Do entendimento.
Nunca se deu por vencido
O que o levou às prisões
Mas que despertou naqueles lugares
A paixão crescente de ser poeta.
Sonhava sozinho!
Pensava sozinho!
Transformou os dias e horas tristes
Em letras que jamais serão esquecidas.
Lutou como um bravo!
Caiu porque a doença tomou seu corpo frágil
E o transformou dia após dia
Num ser quase sem esperanças de vida.
Assim, o poeta findou
Mas, sua história, seus versos e sua coragem
O mantém firme e vivo
Até os dias presentes.
Herói de guerras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 294
Mil poemas a Miguel Hernández
Herói das letras
Que jamais será esquecido
Por todos que o admiram.
“NÃO ESTAVAS CANSADO, NEM DESANIMADO... ESTAVAS TRISTE!”
O que faço
através dessas grades enferrujadas
e desse fétido canto
que aqui me jogaram?
O que fiz de tão errado
para sofrer tanta dor
e passar por sofrimentos atrozes
que estão levando
meu corpo e mente à
falência de física e moral?
Será que não entenderam
a mensagem que tentei passar
para que todos tivessem
os mesmos direitos e igualdades?
Olho as estrelas e baixo a pensar...
Por que, Meu Deus?
Por que os seres humanos
se transformaram em algo desconhecido?
Tinha quase a certeza
que minhas palavras,
mensagens e gestos
seriam compreendidos.
Enganei-me, completamente!
O corpo sofre as agruras
da dantesca violência
a que me estão me submetendo.
Minha mente
parece desanuviar-se
ante tamanho horror
que dela se apodera.
Sinto o fim se aproximar
preparo-me para ir
ao encontro do infinito
onde lá, minhas palavras
encontrarão um lugar merecido.
Somente a paz divina
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 295
Mil poemas a Miguel Hernández
fará encontrar-me novamente
com esse eu interior que tanto aqui procurei
e não consegui encontrar.
Sou só um poeta sonhador
que almejou alcançar,
através do brilho das estrelas
um pequeno lugar nesse mundo que parece tão irreal.
“OLHANDO AS ESTRELAS”
Olho as estrelas pelo único lugar
que me deixaram para admirar esses céus
que tanto busquei para mostrar que é possível, sim
um mundo melhor e mais humano.
Não me deixaram ocupar
O pequeno espaço que não disputava com ninguém
Porque desejava com todo meu empenho
Encontrar abrigo àqueles jogados pela vida afora.
Era um sonhador!
Um sonhador que sonhava um sonho
Já esquecido pelos homens
Por isso lutava com palavras e gestos.
A guerra tirou-lhe as forças
Embruteceu seu ombro amigo
Tornando-o um sonhador triste
Em busca do tesouro perdido.
Foste mais um, grande poeta
Mais um a trilhar o caminho dos que
Apenas desejavam viver e ter um pouco de paz
Neste mundo criado para que todos fossem felizes.
Jogado às prisões
Encarcerado por estranhos
Tornou-se um estranho desconhecido
Dentre tantos que lá se achavam.
Um dia terás a certeza
De que tuas palavras não foram em vão
Por isso, mesmo sofrendo
Te tornaste um herói admirado por todos.
Vais ser um sol, nesses Universos sem fim,
Tendo teu brilho próprio
Para iluminar a tantos
Que em teus sonhos acreditaram.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 296
Mil poemas a Miguel Hernández
Elcira Martínez Chacón, Venezuela
Pastorcito de Cabras
(En Homenaje al Glorioso Poeta Español, Miguel Hernández)
En tierras de Orihuela naces al terminar la primera década del siglo XX.
La luna y las estrellas alumbran tus noches de hato,
¡Oh Recordado Pastorcito de Cabras!
Repartes la nutritiva leche en el vecindario
hasta que tus días de Colegio llegan hasta ti…
Fecundado en la Poesía,
encuentras belleza en la lectura que cultivas
junto al pastoreo de tus cabras…
Tu mente infantil sueña con versos coronados de fe
¡Oh Pequeño Pastorcito de Cabras!
El Círculo de Bellas Artes te orienta a seguirla y a encontrar inspiración
en las Letras del Siglo de Oro Español…
¡Qué lejos llegarías con tus Palabras bien hiladas!
¡Oh Tenaz Pastorcito de Cabras!
A la conquista de Madrid te vuelves nutrido por la leche de tu granja
sin sospechar que tus Poemas son fuerza viva en tu viaje…
Tu perseverancia vence y templa la cuerda que te ata a tus amores.
Aprendes de Neruda y de Alberti la Poesía comprometida
y tu joven corazón se consolida junto con tu Arte…
¡Oh vivaz Pastorcito de Cabras!
La República te llama y asistes a su encuentro.
Arma de denuncia es tu palabra de combate…
Testimonio de declaración que en Poesía se expresa…
Ya tu Letra es Bandera que se iza al viento.
¡Oh Fecundo Pastorcito de Cabras!
Por ello pagas cárcel en peregrinación
que te condena a enfermedad y tristeza…
31 años contaba ya tu tiempo cuando terminó tu andar en pastoreo
Hoy retornas al frente para recordar tu lírica
y tu peregrinar de sueños patrios…
¡Oh Glorioso Pastorcito de Cabras!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 297
Mil poemas a Miguel Hernández
Julio Pavanetti, España
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Ni siquiera tuvieron que matarte.
Te llevaron a cárceles muy frías
donde con llanto sordo, tú escribías
para pintar de versos tu estandarte.
Te dejaron morir sin auxiliarte.
Peregrinaste por enfermerías,
y cuando tus pupilas ya vacías
se opacaron, creció vivo tu arte.
Tus poemas llegaron a la cumbre.
Escritos con el alma congelada
de pena, abandonados a su suerte,
empezaron a ser nuestra costumbre
cuando el gran resplandor de tu mirada,
se apagó en la neblina de la muerte.
TUS VERSOS, MIGUEL
Tus versos limpios, crecieron
entre cabras y rastrojos
por los campos de Orihuela.
Acompañaron rebaños
por caminos pedregosos,
escoltados de palmeras.
Fueron peritos en soles radiantes
y cielos amplios,
lunas grises, noches frescas.
Pasearon su ritmo por las grietas,
por el fuego,
por las heridas,
por las trincheras.
Tras ser vulnerados, como tu silbo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 298
Mil poemas a Miguel Hernández
llegaron hasta hoy, puros y libres,
para advertirnos que el riesgo permanece:
Siempre hay hombres que acechan.
Tus versos, Miguel, son luz,
ígnea roca volcánica fusionada
que arde y no cesa.
Ellos, que conocieron la dureza
de las prisiones de barrotes oxidados y fríos,
fueron esparcidos por el viento del pueblo
en el humus superficial de la tierra,
tierra que, removida por arados,
nos cubrió con tu sonrisa de olivo
hasta convertirnos en barro
-como a ti, Miguelen barro libertario y alado.
POR LA SENDA DE MIGUEL
“Me llamo barro aunque Miguel me llame…”
Miguel HERNÁNDEZ
Quisiera ser esa sombra
que el éxtasis proyectara
sobre los sembrados campos
con los granos de tu verbo,
en labrantíos regados
por la polifonía de tus versos.
Quisiera ser ese arado
que el légamo encadenara
con estrofas fulgurantes,
bajo el astro meridiano
que calcinara la sangre,
abriéndose en las puertas de tus manos.
Quisiera ascender la escala
del pentagrama labrado
con redondas y silencios,
bajo las altas palmeras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 299
Mil poemas a Miguel Hernández
entre cabras y trebejos,
que le insuflaron vida a tus poemas.
Quisiera andar por las sendas
que transitara tu pluma
disparando las saetas
que identifican la vida,
que aman la naturaleza,
y a la entraña telúrica te ligan.
Lurima Estévez Álvarez, Cuba
El instante feliz
Escribo desde el instante en que mi padre
descubrió la empatía del crítico y del arte.
Las estrellas indicaban la sorpresa del novato
hacedor de faroles papier maché.
Mi madre se escondía tras la puerta.
Noche tras noche creía ver en mis sábanas
la culpa de su insensatez.
No eran traidores el tiempo ni el destino.
La ruta del esclavo y el incontenible: Por los siglos de los siglos.
Amén.
Escribo en el piso palabras que nunca llegarán a oídos sordos.
El pecho crucificado, el hombre que simula la paz del soldado
y se convierte en el traidor de su prójimo.
Desde el cuadro el niño predice escritos sagrados,
la resurrección de la carne y el cáliz.
Recuerda mi padre los años pasados,
el instante en que el júbilo bendecía la estancia de los seres;
el pueblo saltaba a las calles recorridas con sueños
y la quema del cuerpo para matar espantos.
Recuerda mi madre las cartas bien amadas
del hijo que fue a la guerra y murió con la insignia en lo alto.
Solo hubo un momento feliz,
la noche en que brindaron por la luz de los astros.
Recuerda el hijo bien amado el choque de las copas,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 300
Mil poemas a Miguel Hernández
regalos, juegos de naipes,
las caras amarradas de los reyes,
el bufón que traduce una carta blanca.
Y el instante se desvaneció con los recuerdos.
Desde el cuadro el niño contempla la ironía del minuto triste,
el vacío que carcome a un hombre infeliz.
Sebastiao Luis Alves, Brasil
Guerrero de oro
Oigo gritos rebeldes
Murmullos de un soñador
Semblante de la tierra de fuego
Mundo imaginario en la mente
Visión niebla en estéril
Sufrimiento...
Tristeza y dolor
Miguel sabio guerrero.
Hablo sandeces
Como un visionario de los conflictos del pasado
Busco universos que abarca pensamientos
Desaliñada alma carente de aburrimiento
Y sin querer encontrar
Encuentro su historia
Prisión, la pasión y la guerra
Escenas pasa mi memoria.
Sensibilización para la libertad
Clamor por la justicia
Pluma dorada
Las palabras contiene la verdad
A favor de los humildes
Las personas fuertes y débiles.
La escritura se convirtió en su arma
Contra los dictadores
Manteniéndolo en hierro
Pero no es el ideal
Eso mantuvo vivo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 301
Mil poemas a Miguel Hernández
Y se unió a los soñadores
Trayendo esperanza
La gloria de nuevo
Miguel del pueblo.
Odalys Leyva Rosabal, Camagüey, Cuba
LA ETERNIDAD PROBABLE
A Miguel Hernández.
Miguel de gloriosos trazos,
poeta de ardiente señal
¿Cuánto de azúcar y sal
crece en los aldabonazos?
La llaga: los fogonazos
que se adentran en la inerte
razón de versar la suerte
donde un hombre sin reposo
ganó en un poema el copioso
signo que engañó la muerte.
La efigie: la eternidad
a donde Cristo festeja,
Miguel que en el fuego deja
un rojo de libertad.
¿Qué sublime probidad
reina en la casa y el oro?
¿Qué descuidado tesoro
se pierde junto al tormento?
¿Quién escuchará el lamento
más sufrido del decoro?
Vibras y el mundo se adentra
en tu luz de algarabía,
qué aciclonada poesía
la voz del ángel concentra.
Por la puerta grande entra
la inmediatez asombrosa
donde la lira reposa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 302
Mil poemas a Miguel Hernández
y despierta de la fuente
musical y reverente
con espinas de su rosa.
Pedro Yajure Mejía. Venezuela(Zulia)
Poeta Miguel Hernández
Una luz
avanza de frente
el que contigo ande
encontrará la vida siempre
poeta Miguel Hernández
Te colocaron grilletes proscritos
como un código de muerte
con tu poesía resististe
y brillaba más la luz de tu frente.
Los incultos gobernantes imbéciles
temerosos más de los poetas
que de Dios,
ordenan encierro, exilio y fusilamiento
a quienes riegan las simientes
de la libertad y la justicia
que son esperanzas y albricias
de las gentes que sufren injusticias.
Te mataron en el encierro
de fiera tuberculosis padeciste
que hoy todos los poetas y poetisas
contigo anden, desenvainando tu poesía,
golpeando a los miserables
elevando voz y conciencia
por todos los rincones de la tierra
a tu lado siempre, poeta Miguel Hernández.
Eterno y para siempre
Poeta tenaz y combatiente
Luz humana resplandeciente.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 303
Mil poemas a Miguel Hernández
Josefina Ezpeleta, Cuba / EE.UU.
El corazón es agua
A Miguel Hernández
El corazón es agua
que se acaricia y canta.
Y el agua nos trae
el canto de tu corazón
fiero y apaleado,
nunca vencido.
El corazón es puerta
que se abre y se cierra.
La puerta siempre abierta
y nosotros recorriendo
tu torrente,
de ventrículo a aurícula,
de aurícula a ventrículo
sin descanso
en nuestras venas, tu sangre
y nuestra sangre en tus venas.
El corazón es agua
que se remueve, arrolla,
se arremolina, mata.
Corazón puerta-agua
corazón agua-puerta
arrolladora corriente
que en su remolino,
al no ser transparente
y fiel amigo,
mata.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 304
Mil poemas a Miguel Hernández
Mercedes Eleine González, Cuba / EE.UU.
Al poeta de Orihuela
Una melodía rueda suave y lenta
por mis oídos y
yo pienso que son los ángeles que tocan
las arpas del cielo,
Alguien canta una hermosa canción de cuna
y tu hijo —el que se fue a destiempo—
cierra suavemente sus ojos
llenos de esa pura inocencia
que luego la vida ya no le develó.
“La Nana de la Cebolla” lo acaricia
mientras sus manitas se aferran al instante
en un intento de resguardo pleno.
en el tiempo en que tú concebías
la Nana más bella
que he escuchado en mi vida,
Mi pequeño hijo salido de mi vientre
apenas era una sombra de duda
en la sombra de otra duda
de la niña que fui
cuando ya eras tú
el poeta del pueblo y de los tiempos,
más allá del futuro
de ese pasado incierto
en la memoria de los que yacen el sueño eterno.
Como “el rayo que no cesa”
fuiste y serás, amigo de los pobres
y de los redimidos,
mientras te alcanzó el aliento
antes de que la Injusta causa
te cercenara la vida en plena vida, Poeta,
privando a los que luego vinimos
a esta tierra, de tu esencia
de hombre bueno y sencillo.
Cuánta injusticia, cuánto dolor humano,
cuánto amor al poniente, al sur, al norte, al este
y al oeste de este mundo que ahora,
Al cabo de los años te redime,
muchacho de Orihuela.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 305
Mil poemas a Miguel Hernández
Roberto Bianchi, Uruguay
Canto inconmovible
me impide pensarte más allá de tus años escasos
la inevitable guerra que consumió tus huesos y palabras
que se escaparon para formar un arcoíris gigantesco
escarcha de tus días que inundó el invierno
me siento equilibrando el cosmos de tu cárcel con exilios y sombras
nos daban palos los mismos criminales que pudieron alzarse con su odio
pero tú estás enhiesto en el mayor poema
cometiendo tu enorme ráfaga de abismos
fuiste miguel quien quiso ver la vida en el fondo del agua más clara
y atravesabas las rejas de tu celda con un canto de amor
donde las balas que no querían ser que no mataban salían disparadas
en la niebla de los amaneceres extenuados
ay hernández de poemas presos en la memoria fiel que te persigue
en cada consecuencia sigue estando la mano que escribía
el corazón latiente que perdura en las letras y la definitiva
marca en dulces granos de la arena amarga
si me impide pensarte más allá de tu tiempo de soldado
la voluntad de asirte en tus poemas
me libera la voz y la ternura
tu mudo canto inconmovible que se sostiene vivo
Pastora Hernández, República Dominicana
Miguel Hernández
Árbol inmenso arraigado con fuerza en la tierra generosa
Más que palabras derramadas desde tu fecundo corazón,
tus páginas son las flores de tu infinito jardín
Dulce padre de un niño hambriento,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 306
Mil poemas a Miguel Hernández
qué hondo me llega tus “Nanas de la cebolla”
Poeta exquisito, de maduración precoz
tus crespúsculos desgarraron el cielo,
sublimando tu dolor
Tu alba rasgada renace en los ojos de tus hijos
Humilde eras y con los humildes te fuiste
Tierno corazón que no oscureció en las adversidades
valiente y valeroso esparciendo su luz
Habitado de grandes amores, combatía la soledad
A golpe de poesía
Tu alma resguardaba niños y paisajes
Desde el fondo del tiempo, llega tu poesía limpia y pura
Te imagino pensando con el corazón
Nadie pudo apagar la llama bella de tu rostro
Nadie pudo encerrar tus grandes tesoros
Nadie pudo detener el río libre de tu mirada
Tierno dios creador de belleza
Tu grandeza desborda los límites de las palabras
Arde en mi pecho como precioso rayo de luz.
Waldo González, Cuba / EE.UU.
Miguel Hernández, poeta,
tú, labrador de más aire,
grande fuiste y sigues grande:
vientos del pueblo te llevan.
Porque no hay ninguna pena,
poeta Miguel Hernández:
novio, soldado y amante,
vivo en la paz y en la guerra.
Que no has muerto, y estás vivo:
corazón al viento, emblema.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 307
Mil poemas a Miguel Hernández
Manuel García Verdecia, Cuba
Una desconocida fuerza
una desconocida fuerza nos sume en las entrañas del suceder
fruto que la tormenta arroja a la corriente inexorable
albur cumplido en medio de tanta sustancia posible
una vez que fruteces solo puedes desafiar el vacío
colmarlo de color y aroma hasta lo impostergable
cuando debes volver a la corriente que no cesa
somos espuma en la marea que por doquier se expande
linfa en la que flotamos sobre la tabla del deseo
es todo cuanto hacer podemos
flotar y decirnos que hacemos un camino
respira y paladea cada gota de aliento en la deriva
somos el fruto e igual somos esa corriente.
Diana Rosa Gómez, Cuba / EE.UU.
Miguel Hernández: la historia te abraza
La pasión le abraza el alma.
La pluma entre sus manos
sacude las palmas.
Mientras la sangre corre
bañando el campo,
la historia se plasma.
La mente sufre
colmada de añoranzas.
Las memorias se mecen,
sus sueños duermen entre zanjas.
Un verso se despierta en su recuerdo
y una fruta se deshace en su garganta.
Aún no pierde la esperanza.
El amor lo empuja en la contienda.
Ama, ríe, sueña, sufre, tiembla, calla…
La sangre en su cuerpo
se transforma en agua.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 308
Mil poemas a Miguel Hernández
Las rejas tristes que encierran
sus versos de alabanza
desgarran entrañas.
¡Orihuela lo aclama!
Un prematuro suspiro
arranca una lágrima.
Se hiela el alma…
Y aun así Miguel Hernández,
la historia te abraza…
María Ángeles García Garrido, España
Poeta vivo.
Miguel Hernández tu corazón como un pájaro en libertad
no pensaba más que en volar y volar,
escribir y escribir lo que tus ideales te dictaban.
Cuantas penas viviste, cuantas lágrimas vertiste,
por la vida de dolor que te toco vivir
en la España negra de antaño.
Tu voz de poeta sube a los montes y se pierde en el mar de la vida
y baja del cielo con tu versar,
son un estruendo de libertad.
Viviste con tres heridas, la de la vida,
la de la amor y la de la muerte,
porque cuando escribiste tu sentir de alma
empuñaste tu corazón con tu canto de versos
y el mundo te recuerda hoy
como un poeta vivo del pueblo en Mil poemas para ti.
Poeta del pueblo.
Miguel Hernández como hombre mortal a corta edad
yaces a la sombra en la tierra querida por ti. Tu querida España.
Como poeta del pueblo vives y te elevas a los cielos de los poetas del mundo,
siendo libertad y gloría eterna, en tu corta y fértil vida fecunda.
En el aire se respira tu poesía con vientos de libertad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 309
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus primeros versos impresos son Pastoril,
siendo poeta pastor, escribiste Perito de lunas
y tus últimos versos fueron escritos en la cárcel
donde la muerte te sorprendió por tu enfermedad
y descansaste en paz en del cementerio de Alicante reposa tu cuerpo
diciendo adiós al mundo cruel que viviste en tus carnes ensangrentadas
de dolor de guerra y de poesía.
Hoy eres luz entre los poetas vivos que te claman.
Tu poesía es alma de luz de tus entrañas.
Tu infancia
Te he escrito con cariño Miguel,
pero he escrito tristezas de tu vida,
con estas nuevas letras
quiero hablarte de tu infancia,
aunque eren tiempos difíciles fuiste feliz.
Te criaste con amor de tus padres
y la alegría de vivir con tus hermanos a los que adorabas.
También fuiste feliz, viviste entre la naturaleza,
entre sierras valles y huertas con su fauna, con sus prados,
con su río, con sus árboles con sus mariposas bailando sus bailes volando,
y los pajarillos haciendo sus nidos, en los árboles cantando.
En cuanto pudiste, pues tenias muy pocos años, cuidaste de tu rebaño,
lo llevabas a que pastara, por la sierra, por el secano, por el prado
y eras feliz al ver a tu rebaño saciado.
Mucha felicidad en esta época tenias, con este trabajo.
Le ayudabas a tus cabras y ovejas en el parto
y los nuevos cabritillos y corderillos, para ti eran tus ahijados,
saltaban y brincaban y tú con ellos jugabas.
Tenías tus perros que de las alimañas defendían a tu ganado.
Tú les dabas cuscurros duros y queso apelmazado,
en agradecimiento ellos te lamían las manos.
Te querían Miguel, eras su dueño para ti ellos eran tus amigos
por esto también los querías a ellos tanto,
Jugabais en los ratos libres de descanso y como corzos corríais por el campo.
En verano, cuando por la noche al redil a tu rebaño llevabas para que descansara, tú
también descansabas, encima de tu mata de cuadros y rayas.
Que feliz eras al ver a tu rebaño saciado,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 310
Mil poemas a Miguel Hernández
a aquellas altas horas los corderillos dormían" a orillas de tu vientre"
de sus madres buenas y tú" Miguel"
contemplabas la luna y las estrellas, aprendiste mucho de ellas,
esto, haría crear el titulo de Perito de lunas.
Y ser tu el poeta de luna llena.
Poeta de Orihuela.
En Orihuela viste la luz por primera vez,
me imagino Miguel, que lo primero que vistes al abrir los ojos,
fue una pluma con tinta negra y un blanco papel,
donde escribiste tu primera poesía recitándosela
a Orihuela con el primer llanto, que tuviste al nacer.
Ya desde aquel primer llanto fuiste el poeta de Orihuela
y el poeta de nuestra España dolida, una España,
que al tu nacer contigo lloró también.
Fuiste oriolano, feliz en Orihuela jugabas en sus calles
y en su río, en su rivera, seguías el curso del río,
llegabas a su desembocadura y en ella chapoteabas,
veías como se unían las aguas dulces y saladas y yo te digo" Miguel"
Así es la vida dulce y salada, tú y yo rodamos por aquella guerra malvada,
como las aguas del río segura ya mezcladas con el agua de la mar salada.
En ellas dulces y saladas nadabas, cuando frío tenias
y te cansabas el sol en la arena tomabas
y como la poesía en la sangre llevabas aunque tenias pocos años,
poemas cortos en voz baja recitabas.
El que en la arena estaba y te escuchaba decía:
este niño es una estrella este niño cuando nació su llanto fue un poema.
Este niño es el poeta del pueblo de Orihuela.
Benito Gallardo Martín, España
COMO EL LUCERO DEL ALBA
(palabras para recordar a Miguel Hernández
escritas en el centenario de su nacimiento)
Yo, que fui niño yuntero
como aquel a quien cantabas,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 311
Mil poemas a Miguel Hernández
me emociono con los versos
que bien reflejan mi infancia:
Los de la cuna del hambre,
los de la muerte y la nada,
y los que abrieron heridas
en tu cuerpo y en tu alma.
Por ello, cuando me asomo
a tus altas atalayas
mi voz recoge los ecos
de la verdad que proclamas
por los rastrojos del sol
y los campos de batalla.
Vientos del pueblo te llevan,
vientos del pueblo te arrastran
y esparcen tu corazón
en las humildes besanas
donde sembraste tus sueños
como granos de cebada .
Setenta años después
que la muerte te abrazara
sigue tu voz tan despierta
como el lucero del alba,
y sigue abierta tu herida
lo mismo que una granada.
Setenta años después
siguen brotando palabras
que se inspiran en la estela
de tu dimensión humana.
Y es curioso que te elogien
los que ayer te traicionaban
arruinando tu vida
y arruinando tu casa.
¡ Gran paradoja, Miguel!,
la que el tiempo nos depara:
Si estás muerto... da dan flores;
si estás vivo...puñaladas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 312
Mil poemas a Miguel Hernández
Dime por qué te fuiste tan deprisa
¿quien te esperaba, di, quien te llamaba?
para dejar tu casa desolada
y el cristal de unos ojos hecho triza.
Dime cómo apagaron tus sonrisas,
tu corazón, tus sueños, tu mirada,
- cuya luz se vertía enamorada
de las puestas de sol y de las brisasDime qué rayo te arrancó cual árbol
que nos daba su sombra gratuita,
su madera, su fruto, sus lecciones...
¿Cómo es posible que se troque en mármol
o se convierta en fría estalagmita
un volcán encendido de pasiones?
Javier Díaz Gil, España
VUELA EN BRASIL MIGUEL HERNÁNDEZ
Sólo quien ama vuela.
Sobreviven, Miguel, tus versos refugiados
Entre libros de viajes y novelas
En portugués en este lado del mundo.
La voz del poeta
Que se impone sobre la tierra,
Volando ya sobre este mar poderoso
Y tristes playas vacías.
Yo también soy barro aunque Javier
Me llame.
El viento le mueve los brazos
A las palmeras que te buscan.
Las palmeras que alzan
Sus ojos buscándote,
Claros de deseos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 313
Mil poemas a Miguel Hernández
Ardiente de alas y de penas.
Regreso tus versos
Junto a los otros libros.
Tan lejos de tu patria…
Para que todos los ojos te lean.
Donde faltaron plumas
Pusiste valor y olvido.
Ana María Hernáez, Argentina
Senryus al Poeta
Fue en Orihuela
oasis del Levante
nació el poeta.
*****
Niño de Luna
sembrando mil estrellas
bebiste lluvia.
*****
Tu vida pasa
por “HUERTO” paraíso
bajo la higuera.
*****
Pastor de cabras
regalaste poemas
pastor del alma.
*****
Paseando cabras
leíste a los poetas
sembraste versos.
*****
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 314
Mil poemas a Miguel Hernández
Cantos de ausencia
guerra, cárcel y muerte
vivió injusticias.
*****
Fue prisionero
pagó su libertad
voló hacia el cielo.
*****
Muere el pastor
poeta soñador
llora la tarde.
*****
Habla el silencio
“El tren de los heridos”
transporta muerte.
*****
Late la sombra
la noche está encendida
besos y arrullos.
******
Mujer y esposa
cumbre de mis mañanas
mudos letargos.
******
En ti principia,
“abrazado a tu cuerpo”
has poblado mi vientre.
******
Nana del hambre
oscura descendencia
escarcha y sangre.
******
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 315
Mil poemas a Miguel Hernández
Hilando sueños
engendramos al hijo
lágrimas sueltas.
******
Brillan luceros
hijo de nuestra sombra
bebe tu zumo.
******
Cariño trae
tu cuna de cebollas
dolores quitan.
Tres Sedokas al Poeta
1º
Quienes te han visto
quien te vio luchador
el denunciante.
Arma de lucha
fue revolucionario
silencioso y genial.
2º
Vientos de guerra
¡Levántate, despierta”
“No hay cárcel para el hombre”.
Aventurero
su sangre fue el camino
tuvo el amor del pueblo.
3º
Te abres al parto
escapa de tu nido
nuestro niños sonoro.
Alba en pañal
hijo del mediodía
hijo de nuestra sombra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 316
Mil poemas a Miguel Hernández
Jorge Córdova Chuquihuanga (Fausto), Paimas – Piura – Perú
HIMNO SEMPITERNO QUE SE ESCUCHA EN LA AURORAS
A Miguel Hernández
Azul las mañanas en que subías al monte con tus cabras y ovejas,
cantando y cantando al vaivén del viento, acariciado por la hierba.
En tu alforja, el menú sonreía preñado de versos deleitados,
frondosas luces que despertaron el cosmos fecundo de tu mundo:
un verde sendero que llenaste de amor con tu vasto ideal de libertad.
El camino pertinaz que inclinó hacia ti, la vida,
es un himno sempiterno que se escucha en la auroras,
repicando con euforia en barracas y mazmorras
desde Orihuela del mundo hasta el llanto del rebaño solitario.
Cuántos ríos escarlatas, espesos de sueños derrumbados,
cuántos cielos eclipsados por tantas despedidas obligadas,
cuántos árboles caídos, derribados y condenados a las cruces,
cuántos gritos desgarrados de los pechos empinados, cercenados
por esa negra espada, opresora, que asolaba a tu generación,
cesó jamás tu convicción de Poeta- miliciano, buscador de libertad,
pues, aun confinado, cual pájaro en una jaula, jamás cesó tu trino.
Y el rayo que no cesa, es tu voz labrada en la bandera de la vida,
el eco furibundo de una historia que aún sangra dolorosa,
como un torrente de angustias sobre el mar de la esperanza,
esa misma esperanza que dibujaste con tu dolor tras los barrotes
y que hoy sigue cantando en toda la tierra, tu tierra, nuestra tierra,
desde donde todos venimos y hacia donde todos volveremos.
Negros crepúsculos en que marchaste al eterno, solitario y silencioso,
tomado de la mano de una tisis mortal que encontraste, hambrienta,
entre las madrugadas sofrías y los rincones mugrientos de tu celda.
Te fuiste, Miguel, te fuiste, con tu halo pastor y tu Josefina en la carne.
Se apagó tu mirada más no tu sonrisa ni tu voz.
El horizonte atraviesa de tarde en tarde contemplando tus huellas,
escuchando el trinar de las aves tras los verdes océanos del bosque;
tu rebaño solitario aún no se adiestra a la triste compañía del huérfano can
que no se abasta solo y te busca impaciente cada mañana
con sus ojos aguados arrojados al camino por donde un día te vio partir.
Nuevas mañanas, hoy, se inclinan sedientas hacia tu portentosa palabra,
absorbiendo la savia fecunda que legaste al amor y la libertad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 317
Mil poemas a Miguel Hernández
Clara Schoenborn, Colombia
AGUA INTRÉPIDA DE CARDO
A Miguel Hernández
Por lo restos de Miguel
sigue pasando un águila,
los sembrados del incienso,
-sus aires de concha y pétaloDicen que por ese jardín,
cuando mueren las palomas,
a veces se escucha un poema
imposible de entender,
más estas reviven en las raíces
y son las seis de la tarde
que nunca olvida el otoño.
Cantan ahí las ovejas,
los telones, los cuartuchos,
se acercan esos caminos
a dejar un sudor de infancia.
Desembarca de pronto un hijo
caído de algún regreso,
y al amanecer se parte una lágrima
pues un obrero se hinca en su celda
a explorar un calendario.
Ahora ya todo está escrito
y Miguel mira hacia arriba,
ha olvidado la tierra y la muerte,
el amor, los peligros del papel.
Ya no sabe dónde vive
o con quien evita huracanes,
pues se ha vuelto camino y sal
oxígeno, cuerno,
herradura, delfín
y agua intrépida de cardo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 318
Mil poemas a Miguel Hernández
Gloria Cepeda Vargas, Colombia
MIGUEL
I
Revientan sobre el mundo
los cascos de la guerra
cantando viene un hombre
Miguel se llama
Hernández y poeta
fatiga los collados familiares
conversa con las cabras y los libros.
"Fue de acero
-murmuranfue de lumbre
no tuvo tiempo para hacerse viejo
murió de España
de balanza coja
de luto en el costado."
II
Apenas despuntaba
cuando le cortó el paso
un muro inexpugnable
de cabezas sin dueño
"Yo no puedo morirme
-se decíaantes de que madure la manzana"
y de repente fue palideciendo
hasta volverse noche.
III
Van los ríos de España
como rojos espejos
la juventud se dobla por el tallo
desmesuradas madres
huérfanas de los hijos
abrasan la llanura.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 319
Mil poemas a Miguel Hernández
IV
Hombres uniformados
matan y van a misa
caes y te levantas
te alargas
te recoges
lloran cuerdas moradas
cuerdas negras
tres años te bastaron
para cambiar de crines.
V
No hallaremos en minas
ni graneros
un animal telúrico
tan bien abastecido
ahora escribo su nombre
con letras de diamante
no diré la raíz
segada en primavera
sólo las sajaduras verticales
el derroche solar de la camisa.
VI
Sigues entero
porque para serlo
no hacen falta la piel
ni los cabellos
sólo crecer hasta donde permite
la buena levadura
medir las torceduras
sin saltarse el camino
amar la vida
caminar de frente.
MIGUEL HERNÁNDEZ
"Los poetas somos viento del pueblo", dijo Miguel Hernández,
el alicantino vertical nacido en Orihuela el 30 de octubre de 1910.
Cada vez que tanteo la pieza única que conformó su esqueleto escuchándolo cantar
con las tripas, desmenuzarse y rehacerse,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 320
Mil poemas a Miguel Hernández
me topo con un hombre y un poeta.
Es la figura más perturbadora de su generación. Nacido entre las cabras familiares y
unos padres que no veían más allá del redil,
carente de la atmósfera que alimentaba a los señoritos y pensadores de la Residencia
de Estudiantes de Madrid, capeó con el solo recurso de la palabra las carencias y
dobleces de un mundo que escocía su piel de viento limpio.
De ahí el salto acrobático dado a sus 26 prometedores años de los poemas de "El
rayo que no cesa" a un batallón republicano. De ahí la lucha sin cuartel,
el despilfarro de su juventud, la vasta noche que no pudo cerrarle los ojos.
La poesía hernandiana es un desgarramiento sin final.
Desde la iniciación de "Perito en lunas" hasta el adolorido
"Cancionero y Romancero de Ausencias", clama, se revuelve,
choca y se precipita para volver a cantar lo acerbo del momento:
"No, no hay cárcel para el hombre/ no podrán atarme, no/
este mundo de cadenas/ me es pequeño y exterior".
Todo en él es agua clara, piedra, raíz fuera del nido.
Hasta su poesía de amor discurre como un río turbulento.
Acá la "Canción del esposo soldado", escrita en el frente de batalla,
allá las emblemáticas "Nanas de la cebolla", donde con lenguaje conmovedor,
concita las desventuras del hijo y por lo tanto, de los niños nacidos en la España de
Franco.
¿A qué agrupación poética perteneció Miguel Hernández? ¿a la protagonista de
transformaciones históricas y literarias,
conocida como la Generación del 27 o a la que en virtud de clamores
obreros y sindicales imposibles de silenciar, fue bautizada como la Generación del
36? La crítica, con Dámaso Alonso a la cabeza,
se inclina por la primera. Y no es para menos,
también fue ése el tiempo de Ramón Sijé, Alberti, García Lorca,
María Zambrano, Neruda, Ortega, Juan Ramón,
del acercamiento a su entrañable Vicente Alexandre
y los desbordamientos que franquearon la entrada al mundo de post guerra.
Esa irrupción transformadora lo concibió y lo hizo como fue.
Nacido a principios de siglo con la Revolución Trágica de Barcelona
y catador de los excesos de Primo de Rivera, saludó el establecimiento
de la II República Española, se batió en lucha desigual durante los tres años en que
rugió desmandada la fiera de la Guerra Civil para consumirse y desaparecer el 28 de
marzo de 1942 en los excesos de una peregrinación interminable por distintas
cárceles de su país.
La poesía de Miguel Hernández serviría para conocer mejor la historia moderna de la
España mártir. En sus líneas, como por socavones o laberintos desamparados,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 321
Mil poemas a Miguel Hernández
desfilan los obreros, los campesinos, el viento crepuscular, "El olor de herramientas
y de manos", el parto, la novia que se muere
"de casta y de sencilla", el pequeño yuntero en las páginas sudorosas de "Viento del
pueblo". Ni universidades ni maestros asistieron su niñez y adolescencia.
Sólo el pastoreo de las cabras a orillas del río, el adusto ceño paterno,
la negación de lecturas que el padre consideraba inútiles.
Se hizo de acero para soportar y de algodón para sentir.
Quizá el dios de esa palabra calficada calificada por Steiner como
"música del pensamiento" dotó a su verso del equilibrio
que precisan la originalidad y la osadía. La rima y la métrica,
tantas veces subestimadas, enmarcan gran parte de su obra poética.
Sus poemas de factura libre, son eso: criaturas sin ataduras,
sólo obedientes al mandato del oído universal.
Se derramó en sonetos de estructura cabal.
Atreverse a concebir y alumbrar ese ángel arisco que con el nombre de soneto pulsa
el acorde más exclusivo de la literatura, es hazaña pocas veces lograda. Los suyos ni
abundan ni rebasan. Son piezas magistrales donde se permite sentir sin abrumar.
Pocas veces la vida y la obra del poeta se retroalimentan de manera tan justa como
sucedió con este muchacho quemado prematuramente en una hoguera que a más de
setenta años de distancia, pide cuentas a los incendiarios.
La Guerra Civil Española fue producto de la racha totalitaria que entonces recorría
Europa entre sotanas y arreos militares.
Quizá la fugacidad con que cruzó un cielo de barbarie, condensó en sus 31 años de
vida, una experiencia reflexiva y libre, acuñada a lo largo de siglos de aprendizaje
planetario. Su palabra crece con los días ajena a encasillamientos circunstanciales.
En su caso, la acotación humana se subordina a la prerrogativa del verbo esencial. Su
origen campesino y lucha sobrehumana lo hacen simbólico y delirante. Jugó y
perdió, jugó y ganó. Como los naranjales de su tierra levantina, fue producto genuino
de la naturaleza. Como ella, ajena a ráfagas fugaces; como ella, encinta de ríos,
árboles y batallas.
Zheyla Henriksen PhD, Ecuador
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Sierra oreolana te dio
La dulzura de las letras,
Pastor de un rebaño
Colmado de poemas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 322
Mil poemas a Miguel Hernández
Entre praderas y valles
Sopla tu canto inmortal
Miguel Hernández, poeta.
Tu pluma cruza horizontes
De luna, lluvia y estrellas
Playándose en la mirilla
De un Góngora, Lope de Vega
De un Cervantes, Juan Ramón
Y un Machado
Y transpasando fronteras
De Orihuela a Madrid
Y de Madrid a Orihuela
La una te cobija en un manto
De estelas
Madrid te acoje impetuosa
Rasgando pluma en el aire
Te sumerge en surrealismo
De un Neruda y del Alberti
Se compromete tu canto,
Revoluciona tu obra
Y en una guerra entre hermanos
Te aprisionan falsamente
Tu cuerpo muere en la lucha
De cárceles sin denuncia
Pero tu verso entre rejas
Toma vuelo, rompe cuerdas
Rompe tiempo
Hoy va veloz
Cruza el aire de ideales
Y hoy te tenemos eterno
Entre la prosa y el verso
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 323
Mil poemas a Miguel Hernández
Norália de Mello Castro, Belo Horizonte-Brasil
O despertar
Quando o coração está a largo
e encontra,
que da pedra brotou uma flor,
das mais belas ,
da aspereza à leveza do viver,
na procura de seu centro,
entre sonhos e realidade:
o homem chora,
o céu se eleva,
e o ar completa os movimentos ,
sua razão para aqui estar.
A cebola se impõe
a cobrir todas as fomes,
e o vento carrega vitórias,
e ele grita o seu grande despertar.
No deserto agreste
nasceu a flor – o sentido,
De sentimentos: pensamentos
colocados na ordem do estar aqui,
por entre magias e loucuras,
a dor se fez em palavras.
Subindo aos céus ou descendo aos infernos,
encontrou o homem sua trajetória.
Não há dor maior do que ver um filho morto,
nem assim se curvou diante das intempéries.
Ressuscitou ele em palavras,
por vezes ásperas e limitadoras.
Mas, ele se fez, e refez, no seu centro,
o encontro de seu pranto.
Curvou-se eternamente diante de tanta beleza;
a Terra se fez.e. o céu o acolheu.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 324
Mil poemas a Miguel Hernández
A cebola
Em busca da paz e do pão,
encontrou na cebola um sentido.
Despetalou-a parte por parte,
mitigou a fome e o pranto.
Mesmo assim, volteando a planta,
Em desespero buscou sentido,
para a dor maior diante da morte
e gritou a ausência do nada.
O nada não é nada, pois é tudo.
Mesmo sem poder voar,
voa por entre nuvens,
despeja a loucura
de querer integrar-se à Terra,
tomando-a inteira por entre as mãos.
E voa com os seus sentidos,
para além de seus prantos.
Traduz em palavras escritas
todo o seu encontro e
solta-o aos ventos.
e o movimento se faz...
Noutra realidade se aporta... ficam seus escritos
aqui
ainda a emocionar.
A razão de tudo
A cebola mitiga a fome.
Dá também sentido aos voos...
Adoça os Aires.
Penetra nos olhos todo ardido do pranto,
volta poderosa no adocicado do tempero.
Do nada, preenche a Terra,
faz do inferno a alegria do céu.
E o homem encontra asas
Para expressar sua Dor.
Diante da dor, da fome e da morte,
Atravessa os pensamentos e
autentica suas palavras,
E o poeta redime-se e
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 325
Mil poemas a Miguel Hernández
desnuda sua alma.
Atravessa o Tempo.
e em outros corações despeja
A Beleza de sua poesia,
dando sentido ao agora,
como, neste momento.
Ele revive e se põe em missão.
Não há morte quando as palavras
se tornam mais fortes do que o viver,
para sempre renascer,
fazendo do Nada que não existe
a razão de tudo está aquí
Voo
Por entre pedras do deserto,
nasce sempre uma flor,
Tão bela é aquela suculenta!
Cheia de água a impor sua presença,
E o homem redime...
Sua dor maior se transforma.
E palavras são soltas ao acaso.
E o homem se levanta,
se ergue ereto e firme,
transbordando sentimentos,
expressos em pensamentos,
vindo lá das profundezas de seu ser,
e a vida se refaz por inteira:
Palavras soltas pelo ar,
traduzem toda a imensidão
da Beleza do viver...
E o homem se recolhe,
Assim,
se desdobra e encontra motivos
Para continuar.
Despetala uma cebola inteira e
encontra o seu alvo: viver, sorrir,
chorar, transparência da dor:
Ele se refaz por inteiro. Voa.
Sonha. Se lança aos céus.. Suas asas estão feitas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 326
Mil poemas a Miguel Hernández
No deserto nasce uma flor.
Uma linda flor!
Misteriosa de cores do branco ao vermelho,
Com cheiro de jasmim...
A suculenta orgulhosa se exibe daquela flor
que permanece a encantar alhures,
Sem que os dentes possam desmembrá-la,
separando Terra e Céu.
O voo está dado.
Acobertado de sabores
na Dor redimida, engolida,
não há como separar, a magia desta beleza,
que se faz eternoa em Palavras,
a tocar outras almas sensíveis
e encontrar outras respostas.
Esta flor especial, é como a cebola
a matar todas as fomes,
especialmente a ditar,
que o nada não existe,
O nada é o tudo deste viver
Do agreste ao trilhar dos sonhos,
Do invisível colocado em Palavras.
Do poeta que vive sua Poesia.
Justo Javier Marrero Pons, Cuba
Oportuno reclamo
Con sus manos fue trazándose el camino,
Siguiendo las tortuosas huellas de su humanidad.
Ya confronta el morboso fin de su existencia,
Para entonces, ennoblecido en el ocaso de sus días,
Rodilla en tierra, llama al Dios que no asistió a sus plegarias en tiempo de paz.
No importa donde estés, tampoco si alguna vez me escuchaste,
Solo escúchame esta vez que tanto te necesito,
Aunque no seas real, aunque te encuentres en el ultimo rincón del infinito,
Y si existieres, no te detengas,
Baja raudo en la estrella más fugaz del firmamento.
Hazlo pronto, te solicito.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 327
Mil poemas a Miguel Hernández
Ivonne Concha Alarcón, Chile
¿POR QUÉ TE HICIERON TANTO DAÑO?
¿Por qué te hicieron tanto daño?
Tus peregrinajes por esas cárceles
Mermaron tus pulmones
Te hicieron daño a la carne
Pero no minaron tu espíritu...
Pobres de esos ignorantes
Tanto les daño les podía hacer
Con sus benditas letras
El pastorcito de cabras
Sí, te temían por eso lo hacían.
Los hielos de la cárcel
Quemaban tus entrañas
Tu ardías a pesar de todo
Con tus poesías generosas
En hermosos versos tristes.
Estás en la historia de tu patria
el mundo entero te añora
Tus versos Fueron gritos oídos
En cielo, tierra, mar y montañas
España y el mundo te admiran...
TU CUNA NATURAL, LA TIERRA DE ORIHUELA
Tu cuna natural, la tierra de Orihuela
fértil oasis de exuberante belleza
Aireada y luminosa sierra morena
Niño campesino, pastor de cabras
aprendiste en tu espacio natural
a ordeñar cabras, vivir entre ellas.
Curioso niño, aprendiz de la vida.
Tu día pastoril comenzaba al alba
avanzando entre cerros con tus protejidas,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 328
Mil poemas a Miguel Hernández
en las tardes entregabas la leche al vecindario
la noche, cansado te sorprendía entre estrellas.
Dulce e inocente naturaleza campesina
entre reflejos del sol, hierbas, pastos y cabras
fuiste de a poco dibujando tu vida irisada
el cielo azul te alumbraba la aurora
mientras el agua cristalina apagaba tu sed,
la vida natural, plácida, sencilla dejó sus huellas
en tu alma natural de poeta aún sin saber
podías escribir bellos versos...
A tus quince años la vida escasa
te obliga abandonar la escuela.
Las cabras de nuevo son tus testigos
observando que mientras las cuidabas
los versos se metían en tus venas
embelleciendo la monotonía con libros
de los grandes poetas que cayendo en tus manos
depositan en tu espíritu el deseo
De expresar tus sentimientos, experiencias y emociones
en letras que hasta hoy nos llegan
al alma y el corazón.
Gran poeta, gran hombre
Demostraste al mundo tu fortaleza
Tu gran hombría, y tu grandeza
La vida se te fue muy rápida de esta tierra
Con apenas 31 años dejaste huella profunda
En tu España, el mundo y en Orihuela
¡Gracias señor de la poesía española!
MIGUEL HERNANDEZ Y SUS IDEALES
Tus ideales eran sólidos, en la niñez y adolescencia mientras pastoreabas tus cabras
tuviste tiempo de pensar, analizar en por qué la pobreza, por qué las diferencias
sociales, por qué tenías que dejar de estudiar para producir el alimento y mantener tu
cuerpo cuando ya descubrías que podías escribir tus primeros versos. La necesidad
material te mostraba un mundo injusto, la riqueza del planeta estaba mal distribuida,
sentiste requería humanos luchadores del pensamiento, del sentido común y la
justicia social.
Entendías que la educación era absolutamente necesaria pero era imprescindible el
alimento personal y familiar viéndote obligado a dejar la escuela a los 15 años, junto
con ello perdiste tus primeros amigos poetas y escritores que empezaban a formar tu
intelecto, cuando tenías todo el derecho humano a educarte en paz y justicia social.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 329
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Pero al guerrero Miguel Hernández no le asustan ni lo frustran los sinsabores de la
vida!, entendiste el ser humano debe ser capaz de encontrar su crecimiento aun
buscando debajo de las piedras, en la profundidad de la dura roca. No tenías dinero,
tenías amigos, tenías bibliotecas cercanas a Orihuela, así, a pesar de los
inconvenientes cultivaste tu conocimiento, comprendiste tu entorno social, pensaste
que debías a través de tus letras buscar la justicia social.
La vida te muestra la guerra siempre funesta, entonces empiezas la etapa de la poesía
comprometida y circunstancial, es así como escribes “Viento del Pueblo”. Dices: “
Los poetas somos viento del pueblo : nacemos para pasar soplando a través de sus
poros y conducir sus ojos y sus sentimientos hacia las cumbres más hermosas”. Sí,
poeta Miguel Hernández, estoy completamente de acuerdo contigo, el poeta debe ser
un aporte en todas las áreas del ser humano y tú lo entendiste así. Escribiste a la vida,
al amor, la guerra, la paz, la justicia, a la patria y a la muerte. Lamentablemente te
fuiste de este mundo siendo muy joven, ¿cuánto nos perdimos por no existir la
penicilina?, seguramente hubieses vivido más años... Tanta penuria en cárceles
crueles, dañaron tus frágiles pulmones.
No alcanzaste a disfrutar de la compañía y el amor de tu familia, ver crecer a tu hijo
vivo porque te entregaste a tus ideales, no hubo tiempo para hacer, escribir y amar
porque debías volar hacia lo alto...Gracias Miguel Hernández por tu enseñanza de
vida.
Yolanda Aguilera Zayas Bazan, Cuba
Desde Sydney, Australia
A Miguel Hernández.
Manos prodigiosas de palabras
Incienso que perfuman tus letras
Gran corazón latiendo por la vida
Unicornio azul, dulce poeta.
Eso eres tu inolvidable amigo
La fe de tu alma nos dejaste
Hombre inmenso, peregrino
Estrellas iluminan tus paisajes.
Recorriste tanto dolor y pena
Nada te impidió que así escribieras
Amor salía de tus manos llenas
Nunca pusiste en tu dolor quejas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 330
Mil poemas a Miguel Hernández
Esposo, amante, soldado
Que tan joven te arrebato la muerte
Pero no se perdieron tus palabras
Eres luz que vive eternamente.
Y en tu nostalgia de noches inseguras
Tu pluma no dejo de pronunciar
Ese amor de tu alma pura
Que a tu amada le habías de regalar.
Ay amigo poeta, sonador,
Qué maravilla nos dejaste,
Con tus preciosos escritos
La vida de muchos, tu cambiaste.
Diste lo mejor de tu alma
Este homenaje es para ti
Surco de tus poesías llenan la vida
Nos haces sentir el frenesí.
Una palabra adecuada
Busco en muchos diccionarios
Con la cual pueda decir para ti
El más hermoso poemario.
Miguel, soldado, esposo
Poeta de los poetas
Que tengas dulce reposo
Siempre vivirán tus letras.
MIL POETAS.
He tenido yo la dicha
De poder abrir mis alas
Y encontrar los mil poetas
Que ha despertado mi alma.
Ay! Mil poetas escribiendo
Tantos versos, tantas cosas
Homenajeando a los grandes
Dándole vida a las letras.
Es universo de amor
Entregando mil pasiones
Huracán de manos puras
Que inspira a los escritores.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 331
Mil poemas a Miguel Hernández
Es el mundo y su belleza,
También el dolor, la guerra
Estremeciendo las plumas
De nuestros grandes poetas.
Maneras de decir de un mundo
Que pide a gritos cambiar
La ambición, el egoísmo
Por nuestro gran verbo AMAR.
Mil escritores deshojan
Cada mañana una flor
Y nos dan con sus palabras
El latir de un corazón.
Un corazón que hace ecos
Y que se vuelve canción
En mil poetas del mundo
Regalándonos el sol.
Árboles inmensos, frondosos
Dándonos reposo y sombra
Esos son los mil poetas
Canto dulce de palomas.
Cesar Vallejo te han escrito
Poesías, versos sinceros
Los mil poetas del mundo
Alzando tu voz, compañero.
Pablo Neruda inspiraste
También a los mil poetas
Poesías como rosales
Brotaron bellas y frescas.
Ahora a Miguel Hernández
Mil poetas han de escribir
Versos, poesías sublimes
De homenajes para ti.
Y otros poetas serán
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 332
Mil poemas a Miguel Hernández
Motivos de nuestros versos
Son muchos, son miles aquellos
Que merecen nuestro respeto.
El recordarlos a todos
Nos da dicha al corazón
Poetas de todo el mundo
Hacen vivir el amor.
Rosa Francisca Iglesias Ferriols, España
A DONDE EL CIELO TE LLAME
A Miguel Hernández
Ya no pareces nada.
Se ha esfumado tu corazón de plumas
en el registro sofocado de mis versos.
Y tú, que comías del más alto y bello árbol,
desde tu mano a tu conciencia,
eres hoy el alimento de mis raíces cotidianas.
Todo silencioso en estas anchas ausencias de ti
mientras tú te vas acrecentando
en la nada de mi nada,
en la penumbra de mi todo,
en la esquina aquella de mi mirada
que te perseguía tan cercana y tan ausente.
Pero la espada de fuego ha partido tu vuelo en dos
sin darte tregua ni defensa en la batalla;
me has manchado de penas, el corazón y la calma,
para que sea yo el cementerio de estrellas
donde tus ojos brillan, donde tu terciopelo rebrota,
donde se regeneran tus alas.
Regresando de nuevo a sembrar tu huerto, cualquier día,
volverás cantando más alegre, a tu higuera, en la mañana
retornarás al cielo de mi alma solitaria, amante y triste,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 333
Mil poemas a Miguel Hernández
al cielo mío que, alto y claro, siempre siempre te llama:
Miguel… Miguel…¡ Migueeeel ! :
que el andamio de mis flores está triste y se marchita
que las guitarras, sin las cintas de tu amor, ya no braman
que el labrador de más aire de tan puro se murió de pura pena
que el limonero amarga de tan amargos azahares y limones
que los astros, amapolas, cinchas, albahacas,
torres de bravura, y hasta tus penas circundantes,
se marcharon de vendimia con las cabras y las lunas
reagrupando, tu sangre, con el llanto y las escarchas
que los aires del pueblo, cantarines, hoy arrastran
a un perito en lunas, a un poeta y a un cabrero
que las voces del pueblo ya tu nombre han pronunciado:
que regreses a casa, que te están esperando a cientos,
que te vengas a soplar tus cien velitas, de cumpleaños,
compañerito de mi alma…¡ COMPAÑERO !
María de Lourdes Barsallo Jaén, Panamá
A Miguel Hernández (Cuento en Versos)
“El mundo nada puede contra un hombre que canta en la miseria".
Ernesto Sábato
Un día
intenté ver a Cristo
cara a cara
desde sus grandes ojos
de claridad de luna
y caminé hacia el valle entre pastores
y lo llamé en silencio y recriminé amargamente
amargamente su viaje sin regreso
más allá de su Resurrección y de su Gloria
y caminé y llamé
como aquél que clamó
un día en el desierto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 334
Mil poemas a Miguel Hernández
Si entre nosotros te encuentras
dime Señor ¿quién de estos eres?
y una luz dulce-dulce
como de luna-luna
iluminó mi rostro y
una mano muy tierna
como el toque de un ave
con amor indecible rozó mi frente
y una voz tan profunda
como el silencio eterno
me contestó
Tú eres
y Yo soy
y somos
y seremos
Uno siempre.
Y amarás a tu prójimo
como a Mi mismo y un día
como el cordero serás sacrificado
intentando amoroso
la salvación de tu pueblo
pues habrá quienes no crean y te traicionarán
y serás entregado
y prisionero morirás de dolor hundido en la pobreza
Miguel Hernández poeta de la esperanza. Mártir de amor.
Y volverás a tu pueblo vencedor
de la vida y también de la muerte
e igual que yo serás glorificado
por la fe de tu gente
en tu palabra justa
en tus versos de penas de lumbre de bocas de huesos inflamados
y tu grande grande
amor por Josefina
y apóstoles vendrán
para seguir tu huella…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 335
Mil poemas a Miguel Hernández
Flóbert Zapata Arias. Filadelfia, Colombia
A PIE LIMPIO.
I
Siempre recuerden Los Andes
al que des amordazó
la palabra y dijo No
a las crueldades: Hernández.
Cuando la pena desandes
lo encontrarás siempre a él:
lleva mazmorras por piel,
injusticia en vez de mesa,
su sexo fue la tristeza
y lo llamaron Miguel.
II
Canto desde pobre olla
con panela,
sin el olor a cebolla
de la batalla más triste
y una incuria que me embiste,
para Miguel de Orihuela.
Eliana Flores Pineda, Colombia
Quizá Hoy.
Quizá hoy, quise escribirte mis letras dichas al cielo,
Quizá, en este día hoy, mi amigo de la luz y de la sombra Miguel,
Quién lo diría.
Quisiera haber sido tu amanecer mientras el sol se asomaba a tu ventana,
Quisiera haber sido la calma mientras el dolor te agobiaba.
Quisiera haber sido la musa a tu inspiración,
Bajo los árboles de un hato, mientras pastoreabas cabras,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 336
Mil poemas a Miguel Hernández
Quisiera haber sido el rebaño que pastabas mientras pulías tu alma.
Quisiera haber sentido como amaste a Josefina tu mujer,
Para probar un escasito de ese amor que dio frutos, Manuel Ramón, Manuel Miguel.
Quisiera haber sentido a que sabían tus besos mientras ella escuchaba tus versos.
Quisiera haber experimentado el luchar hombro a hombro por tu pueblo amado
Orihuela,
O meramente ser ese paraje que divagó tu moción, viento del pueblo a Madrid.
Quisiera haber sido tu carcelera, y cuidar tus dulces elegías
O simplemente tu pluma,
Mientras se embellecía el papel con tus letras sensibles hechas a los seres que
amabas.
Quisiera haber sido, España amada patria,
Para arrepentirme por tu inicua punición
Y darte más de 31 treinta una primaveras.
Hoy, sólo quizás quise escribir estos dulces versos
A tu nombre amigo extinto Miguel Hernández,
Para que el mundo celestial escuche los más de mil
Suspiros que a tu nombre se han escrito.
María del Carmen Guzmán
RAYO
Por el exiguo marco la turquesa
de un cielo de papel se desmesura,
un hacha desquebraja la hendidura
y la sangre, feroz, se vuelve espesa.
El fuego de ese rayo que no cesa
te ha quebrado la voz en su premura
y el lamento de amor se transfigura
en flecha que los muros atraviesa.
Misterioso poder del alquimista
-al que yo como náufraga me aferro-
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 337
Mil poemas a Miguel Hernández
de convertir la piedra en amatista.
A golpes de martillo funde el hierro
el dolor como en mágica conquista
que ha escapado cantando de su encierro.
Rosa María Fiocchetta, Argentina
Carta a Miguel Hernández
(Sito en: Algún lugar de Algeciras cuando pasaste…)
Buenos Aires siglo XXI
Te escribo para decirte que vengo de otro tiempo, te mando algunos versos libres
que he pensado para ti. Más bien son frases.
“simbolismo que has dejado”. Influencias: que toscamente me he copiado….
Así te veo
Hecho de amaneceres y de campo
Armado hasta los dientes de amapolas
Forjador de hermosura
Poeta y pastor de ovejas desconcertadas
Mayoral de sol, lector devorador de lunas
Tu sensibilidad ha roto los cristales del tiempo
Y desde el pasado vienes intermitentemente
En anchísimo mar rompiente de olas.
Cargado de pasión;
Con sentires, Que impregnan mis huesos
Y muchos otros huesos contemporáneos
Así te vemos:
Enamorado padre desde la simiente
Amante esposo. Flor de azahar
Novio por siempre.
Amante republicano. Amigo eterno…
Sabemos que tuviste;
Enemigo vetusto, escapado de los tiempos
Tigre diente de sable. Que te ha dado,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 338
Mil poemas a Miguel Hernández
Zarpazo al aire. Arañazo congelado.
Y entonces imagino…
Estalactitas de lágrimas, colchón de musgo,
Cárcel húmeda y negrura persistente
Un frío verdín… insana almohada. Tu morir
Para vivir eternamente.
Julia Gallo Sanz (Madrid-España)
¡Ay, Miguel!
¡Cómo me sangra –toda- tu frente de alambrada!
Cómo me suda acíbar la memoria cobarde
en cada amanecer, de sudarios y muertos,
en cada incertidumbre de arcángeles perdidos!
¡Ay, Miguel!
¡Cómo se me entumecen los nudos de este siglo
de puños enterrados en el fondo del bolso,
Imparable ignominia poblando las trincheras,
y tú, desde el costado, izándonos el verso!
¡Ay, Miguel!
Nosotros, los que amamos tu alma y el martirio
de tu calvario quieto de miedo y de penumbra,
cargaremos las cruces de voces y palabras
unidas en un grito de pura libertad.
¡Ay, Miguel!
¡Qué limpio y te ensuciaron de injusticia y de luto,
mientras, tan inocente, murmuraba tu boca
balbuceos de nanas, con sabor a cebolla!
SOLO QUISISTE SER POETA
Huele hoy a calostros, heno, lumbre,
borbollón de jofaina, alumbramiento,
a generosa vega del Segura,
a esperanza infinita sin redil.
La guerra trajo luego la sentina
de carne delatada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 339
Mil poemas a Miguel Hernández
Mancebía pujante seccionaron
en gajos de hombre muerto en cada cárcel,
y El rayo que no cesa perpetúa
el amor hecho nido entre las ingles.
Miguel, solo quisiste ser poeta
desde el huerto, las cabras y la casa;
hacer un memorándum de la vida
agarrado a la espuela primeriza
del amigo Sijé y El Gallo Crisis.
Apacentar estrofas, verso a verso,
al fuego de Maruja -en el Madrid
de la generación del veintisiete-;
al amor de tu tierra y Josefina,
del Hijo de la luz y de la sombra,
o al que anhelas con nanas de cebolla,
pero acechaba el hombre munición,
y te colmó las uñas de paredes.
Qué ruta penitente hasta morir,
en franco vía crucis de prisiones
por Sevilla, Torrijos y Palencia,
Ocaña y Alicante, donde expiras.
Quiero rememorar, junto a otros mil poetas,
La pena de tus ojos, tan abiertos,
estáticos los párpados, no fueron
cerrados o vencidos, ni aún de muerto,
repletos de memoria se marcharon,
lo mismo que tu voz, no tus poemas.
Matilde Peláez, Rep. Dominicana /USA
Homenaje: Mil poemas a Miguel Hernández
¡Como duele!
Miguel Hernández, luz y ejemplo de Orihuela,
demostró su valor y su gran entereza,
de niño fue pastor con poca escuela
que se auto educó, leyendo con firmeza.
Leyó a Gabriel, a Galán, Miro y Zorrilla
y se inicio al crear poesías sencillas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 340
Mil poemas a Miguel Hernández
Levantino, sutil, capaz de cumplir metas,
se unió a los amigos más dotados
Ramón Sijé, Neruda, Alberti, otros poetas
aunque en ideologías divorciados
bien le ayudaron en su lirica faceta.
Ya de jovenzuelo, entregado a leer
a poetas del siglo de oro: Góngora, Garcilaso,
Lope, Cervantes y otras glorias del parnaso,
cultivando el saber,
logrando asi sus sueños tras los años correr.
Con sus bellos poemas conquisto un universo
de personas que aman
sus sinceros mensajes para un mundo mejor.
Libre de absolutismo, resistiendo al profano
Cantándole a la patria, predicando el amor.
Causa dolor ver lo triste de su vida
que fue muy breve, y también muy brava.
¡Oh, poeta soldado, luchador incansable,
Ilustraste en tus prosas tú piadoso pensar
por la soberanía de tu suelo querido
por un mundo más justo, para el desprotegido
que con sabia paciencia lograste demostrar!
Combatiste en la guerra; prisionero sin causa
victima de maltrato que te lleva morir.
¡Como duele, como duele que en la flor de tu vida
tuviste que partir!
!Eres estrella, historia de Orihuela tu pueblo.
Inspiración del mundo que ama la verdad!
!Y esto es amor que crece, que en el corazón crece
y crece, y no se detendrá!
fin
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 341
Mil poemas a Miguel Hernández
Nieves Merino Guerra, España
TU VIDA FUE UN SUSPIRO, MIGUEL
Tu vida fue un suspiro
en la eternidad que te esperaba
y comenzaste al nacer.
La fragua del amor te acercaba más
a esa dimensión maravillosa desde entonces.
Comprometido y sencillo poeta soñador
encontraste la muerte y la tristeza.
No existe alegría sin dolor.
Ni ausencia sin existir antes la presencia.
El frío en tu alma era la ausencia del calor.
La oscuridad, la ausencia de luz.
El vacío, la ausencia de contenido.
En Frentes fratricidas vergonzosos
sangraste los versos más amados
gritando tu inocencia y libertad
aferrado a la esperanza en el ocaso
que al fin te llevó en brazos a las estrellas..
Nada es real en lo negativo.
Como el Mal es la ausencia del Bien.
Y el egoísmo la ausencia de Amor.
La enfermedad, ausencia de salud.
Fuiste.
Y eres.
Exististe.
Y existes.
Amaste y amas.
Encarcelado, fuiste libre.
De tu padecer, descansas…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 342
Mil poemas a Miguel Hernández
En soledad, ausencia de compañía
tan deseada con tu amada y tu hijo
las fronteras fueron solo trazos imaginarios
con el tiralíneas de algún loco en su ambición
disparando a hermano contra hermano.
Fanatismo.
Caos.
Confusión.
Pánico.
Hambre.
Miseria.
Convicciones.
Ideales…
Guerra que desarmó e hirió profundamente
a todo un Pueblo que se resiente aun
en cada latido, en cada hogar.
Y huele a sangre de Abel
en dramáticas heridas que supuran.
Tu alma y la de quienes te amaron tanto
siguen vivas. Son infinitas
las voces que te claman día y noche.
Luchaste con la pluma por puñal
hasta ajar tu joven cuerpo enfebrecido
vomitando la sangre en tus entrañas.
Nada fue, nada es, y Todo existe.
¿Cómo describir el AMOR,
la PAZ, la JUSTICIA, LA LIBERTAD
si en su autenticidad
era y es lo único real y verdadero ?.
Poco ha cambiado el Mundo, Miguel.
Muy poco. Demasiado poco.
Solo cambio tu lápiz por un teclado.
Y el papel por tecnología “avanzada”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 343
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus poemas releo como míos
porque saben a “Ahoras”.
A presentes estúpidos y genocidas.
¿Cómo explicar tu sufrimiento
--Y el nuestro todavía -con las ausencias de quienes amaste,
por quienes luchaste,
pastor poeta del pueblo
si te han adelantado precozmente?.
¿Cómo aceptar y expresar
ése sentimiento tan hondo
que te sumía en la melancolía
más terrible y desesperante
ante la fatídica pérdida
de tu libertad, familia, vida,
dignidad, valores, ética,
sin ser capaz de sentir siquiera
porque la impotencia te embargaba
--y nos embarga -adormeciendo los sentidos,
acallando esos besos que nunca diste
--nunca hemos dado -y que nunca recibiste
--ni recibimos -cuando más necesitabas
--y necesitamos--?.
Poeta noble, de casta valiente.
Soñador de ilusiones.
Genio.
Sencillo.
Latente en ti estaba la muerte
desde que la oscura y húmeda pared
absurda e intransigente te ahogó
aprisionando tu cuerpo. Jamás tu alma
ni tu mente.
¡Miguel…!
(Gritaban…)
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 344
Mil poemas a Miguel Hernández
¡MIGUEL HERNÁNDEZ!
¡MIGUEL!
Lloraba tu mujer,
tus amigos, tu gente.
Miguel, aguanta…no te caigas…
Mira a tu hijito.
Hambre silente le amamantaba.
Tormento absurdo.
Absurda guerra.
Absurdo dolor en tu consciente
que con un trozo de carbón
escribías sin desmayo
hasta tu último suspiro.
Ahora, quemamos los teclados de un ordenador
con la misma esperanza y utópica lucha.
¿Será vana también, como la tuya?
El pecado es la ausencia de AMOR.
El pecado es la ausencia de PAZ.
El pecado, ausencia de LIBERTAD.
El pecado, ausencia de RAZÓN.
El fanatismo de cada “VERDAD”
Y LA AMARGURA DE LA TRAICIÓN.
Nada ha cambiado mucho, poeta.
Hay más obtusos con su ambición
asesinando en fanáticas guerras
alimentadas por la avaricia
miseria y hambre que matan.
Quiebran al pueblo.
Y el pueblo, a ciegas…
Se desespera. Y grita.
Llanto amargo que es nuestra agua
sin calmar la sed.
Ni siquiera cebollas, Miguel.
Ni siquiera cebollas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 345
Mil poemas a Miguel Hernández
Ni pan.
Hambre fratricida
en continuos genocidios.
Miguel…Miguel Hernández
Dulce poeta. Joven amante.
Conquistador, venciste.
Después de todo, nada fue en vano.
O quizá sí. Poco ha cambiado.
Cantan tus versos en lunas blancas
junto a las cunas y en grandes fiestas.
En las lagunas. En costas. Montes. Campos…
En los desiertos del alma
los oasis son lágrimas amargas.
¿Cómo expresaste tanto dolor?
Dime, poeta. Mi gran poeta.
LIBRE
Libre al fin ante la muerte
fuiste la luz en tu destino.
Siempre porta, en el camino
cierro mis ojos para verte.
Haces los versos con mis manos:
Es tu herramienta constructiva.
Sanas la fiebre posesiva
buscando paz en los hermanos.
Cuánto comprendo, poeta mío
a quien rebela y retrocede
cuando con el corazón se puede
dejar el alma en aquél frío.
Enfundas tu arma al enemigo
Aunque te digan que estás muerto.
Tú conociste ese desierto:
Como vergel siembras conmigo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 346
Mil poemas a Miguel Hernández
LUNA DE PLATA
Soneto a Miguel Hernández
Luna de plata filtraba tu sueño
e iluminaba noches desesperadas.
Imaginas gorriones. Las heladas
del frío invierno que se hace dueño.
Primavera y amor ésos momentos:
Angustia postrera. Aroma de lirios
¿No sabes acaso que en tus delirios
bebemos todos en tus sufrimientos?
Hueles la sangre agria. Y en tu memoria
Los azahares bañaban tus penas.
Y con ésas “lunas”, hiciste Historia
El carcelero no tose contigo.
Alzas la vista. Tus débiles piernas
ya no te sostienen: él es testigo.
EL POETA BUSCA PAZ
Noche silenciosa
y cálida.
Solitaria y triste.
Tu alma necesita aspirar paz,
serenidad, belleza,
calma...
Dejar atrás sufrimientos
y angustias del día que ahogan.
Orar entre susurros junto al río
en sombras.
Gris también
con luces de plata.
El poeta sueña...
Aunque teme soñar.
En la profundidad de sus pensamientos
huye del dolor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 347
Mil poemas a Miguel Hernández
y se esconde
en el rincón más secreto de su alma
donde nadie pueda herirlo.
A veces
queda una chispa de esperanza
que lanza al aire sin darse cuenta
intentando crear versos
con lágrimas amargas
y una sonrisa en el rostro.
El poeta
hasta cuando calla
habla.
JOSEFINA Y MIGUEL
Asías sus manos con dulzura
entrelazando dedos con firmeza.
Tu mirada y la suya se encontraron
latiendo el corazón en precipicio.
Descargas de amor en las miradas
un poco asustadas y anhelantes
de besos robados en la noche
cuajada de estrellas y misterios.
No estaba previsto enamorarse.
Había algo en ella que sedujo
cambiando razón por sentimientos.
Deseos de entrega y de pasiones.
Fue mucho más que aquél instante.
Fraguándose la magia prohibitiva
llegaron al encuentro deseado
uniendo vuestros cuerpos temblorosos.
La luna fue testigo silenciosa
de aquellos susurros casi ahogados.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 348
Mil poemas a Miguel Hernández
Amor que nació sin daros cuenta
cambiando el destino bruscamente.
Ya nada importó. Todo giraba
en torno al amor que profesaban
jurando promesas eternales
de vidas y sueños compartidos.
JOSEFINA, ¿DÓNDE ESTÁS…?
Necesito decirte lo que he visto,
quiero contarte lo que ha sucedido.
Necesito tus brazos, mi amada
porque quiero quedarme encerrado entre ellos.
Necesito tus ojos
porque quiero encontrar el brillo de los míos.
Necesito tu sonrisa
porque quiero oír nuevamente el sonido de la brisa
Necesito tus cabellos
para enredar mis dedos en ellos dulcemente.
Necesito tu boca para aplacar mi sed con besos.
Necesito tu cuerpo para que le de calor al mío.
Necesito tu corazón para embriagarlo de amor.
Te necesito porque tengo tanto amor para darte...
Te doy el sol para que ilumine tus días,
Y las estrellas para que te sirvan de guía.
Te doy mi vida para llenarte de alegría.
¡Te amo, te necesito!
¡Tengo tanto para darte!
¿¿¿Dónde estás mi amor...que no te encuentro???
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 349
Mil poemas a Miguel Hernández
24 DE JUNIO 2012.
NOCHE DE SAN JUAN.
SUPLICIO ENTRE REJAS
Lo suplico con las entrañas sangrantes en mis últimos suspiros.
Que me vista de fiesta el alma.
Me cante y acompañe el gorrión de rama en rama.
De flor en flor...
o en mi ventanuco, el búho.
Que se rían de mí los niños por las calles...
y me llamen loco.
Y si mi razón se rebela, la encierro de nuevo
para que no salga con siete llaves
Donde no la encuentre nadie, ni Dante,
buscando en sus siete cielos, infiernos y purgatorios.
Seré como hasta ahora: una sombra.
Pero más siniestra para quienes no comprendan...que son casi todos.
No te quepa duda.
Aunque divaguen. Imaginen, inventen...
No tendrán ni idea. Solo yo lo sé.
Lo siento y conozco-reconozco.
Me vestiré de fiesta con cálidos colores.
Descalzo en la tierra.
No deshojaré sueños aferrados....no soñaré.
Eso me enferma y hace temblar
Nada.
Mejor la nada absoluta
Si...mucho mejor así.
Feliz en la ignorancia y abandono.
Tirado en un rincón.
En algún lecho carcelario.
Posición fetal.
Observando cómo pasa la vida.
Las horas muertas.
Paseando en el río...en el monte.
En el campo.
Solo. Por las aceras de cualquier pueblo o ciudad
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 350
Mil poemas a Miguel Hernández
donde me lleven en el absurdo devenir de éste momento.
¿ Que mas da el lugar?
Todo es encierro.
España sangra. Se vuelca.
Y siento en mis adentros
que toda la Tierra es mi tierra.
Andando caminos vagabundo.
Incierto.
Sin saber detalles.
Sin saber de nadie.
Y en mi soledad,
mi propia indiferencia.
Si...ser feliz no debe estar tan mal.
Aunque solo sea unas horas.
Unos días.
Engañado en mi mismo.
Esperando el absurdo...y desengañado de nuevo.
¿Es mi sino éste deambular por cárceles?.
Amargura que se mece en el alma como en casa.
Ni la soledad me quiere
pero no me siento solo.
No me cantará un gorrión.
Quizá con suerte,
los habitantes de la noche
en los campos y acequias.
No soy adicto a la melancolía
pero me tiene atrapado,
encarcelado a cadena perpetua
junto con mi alegría.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 351
Mil poemas a Miguel Hernández
Ilusiones.
Mis sueños robados.
Salud. Familia.
Alimento. Agua.
Vida.
No temer más.
Nunca más.
Maldito miedo.
¡Maldito!.
No quiero. No puedo.
Ya estoy destrozado.
Conmigo mismo estoy bien
aunque acampe la amargura
en mis entrañas dolientes.
Pero nadie me hiere
sencillamente no esperando nada.
Deseo aun menos que ser feliz.
Sí.
Con mucho menos me conformo.
Solo necesito paz.
Un poco.
Y algo de pan si, mendigando
alguien me ofrece un mendrugo tierno y caliente
para enviarlo a mi amor.
El asco y la impotencia me revuelcan y empapan.
Vomito las palabras y la sangre con arcadas de dolor...
Quiero estar loco del todo.
No solo medio loco.
Ya he perdido la razón por razón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 352
Mil poemas a Miguel Hernández
Pierdo la partida, aunque tenga todas las fichas
dispuestas, vendiendo mi alma al diablo,
en todos los números de ésta ruleta azul y roja.
Solo deseo la ruleta rusa, con el cargador lleno y balas de plata
Que explotan por dentro dejando esquirlas clavadas
sin agujeros limpios.
No hay nada limpio
en éste peregrinar fratricida y agonizante.
Sin vivir...ni recibir.
¡Y es tan poco lo que necesito!.
El aire se me niega.
No respiro.
Me ahogo.
Y no resisto.
Me apunto a la locura indiferente.
A la rebeldía de la razón y al canto del ruiseñor.
Ser feliz unos segundos
antes de morir.
No necesito de Creonte ni Hades.
Nadie me rescatará.
Sólo Dios me abre sus brazos
sollozando conmigo.
Me dejaría hundir en la ciénaga profunda
sin usar su barca hasta el inframundo.
Tornaría mis días y noches de pesadillas en la nada.
En el vacío silencioso y oscuro.
Cuanto antes.
Ahora mismo.
Ya.
Sin más delirios...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 353
Mil poemas a Miguel Hernández
Acallando a la razón, como muñeca de trapo que se cose y recose
hasta romper y gastar su tejido urdido en ruecas de amor.
Sí:
¡Me anoto, me apunto!
Pero a la locura completa de las noches de luna.
O sin ella.
No me asusta la negrura. Veo así también.
¿Qué más da?
Vivir con razón sí es una locura.
Constante infelicidad.
Harto estoy de mi cordura.
Ambición. Fama.
Ideales...
Sentirme solo.
Ajado. Abandonado. Despreciado.
¿Para qué luchar, para que vivir ?...
El nihilismo absurdo no es tan absurdo.
Beberé el agua del pozo de Zaratustra.
Solo ser feliz un momento.
¡Tan solo un pequeño momento!
Y después morir.
Con la sonrisa perdida
bien dibujada en el rostro
para mi amada
y nuestro hijo muerto
que me llama entre llantos
de hambre y soledad.
Allí le cantaré nuevas nanas.
Serán mis versos la única descendencia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 354
Mil poemas a Miguel Hernández
ENREDADA EN TU TERNURA,
MIGUEL HERNÁNDEZ
Enredada en la ternura de tus versos,
tu romántico ser de alma en amores
sueñan muchos como tú con esos besos
que se cuelan sin querer con ilusiones.
Ése gozo que alimenta el corazón
con cariño en la distancia compartido
y se asienta dulcemente con pasión,
es la esencia de la vida con sentido.
Esperanza que atenúa la tristeza
aún siendo si lo fuese, imaginaria
la sonrisa de su utópica belleza
Desterrando desamores y añoranza
que lacera con temores esa Aria
a la hermosa ilusión que les alcanza.
SOÑAR OTROS SONIDOS
(Miguel en Madrid, añorando Orihuela, escribiendo a su amada Josefina)
Intento versificar
los gritos que dejas en tu alma
cada noche
con la sabia lechuza que ulula a la luna.
Los cantores de tu tierra se acurrucan
en sus nidos cálidos de amor.
Tus trinos se escucharán mañana...
Al alba
el primer rayo de sol alentará sus gargantas
y entonarán melodías en tu nombre.
Yo solo las imagino aquí:
las tuyas , Miguel, y las mías.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 355
Mil poemas a Miguel Hernández
Mágica luz...
Sueños.
Sonidos.
Aves que danzan en la naturaleza
con la esperanza.
Oxígeno de Orihuela.
Polución de Madrid.
Huyen de la ciudad donde habitas.
Aquí tampoco escucho al canario.
NI al ruiseñor.
Tampoco a la lechuza
en éstas largas noches de olvidos.
Recuerdos.
Temores.
Calma.
Frío.
Ausencias.
¿Silencio...?
Ojalá.
Sólo ruidos...ruidos...ruidos...
Con suerte el ladrar de algún perro
en balcones olvidado
que acallarán pronto.
¡¡¡Prisas, prisas...!!!
Soledad.
Añoranzas.
Es tu mente quien se apaga
cerrando los oídos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 356
Mil poemas a Miguel Hernández
para escucharte a ti mismo
en los cerros y en tu río
...y soñar otros sonidos.
DESCIFRANDO TUS SENTIR,
MIGUEL HERNÁNDEZ
La emoción da la mano a la ilusión
en lo que no se ve y se imagina.
Sensaciones inefables de armonía,
equilibrio que traspasa lo evidente.
Perderte en ese eterno instante inerte
absorbiendo la luz que escondes
en tu mirada y retiene lo infinito.
No se agota el sueño permanente de utopías
donde el mar es "la mar "...fuente fecunda
de horizontes y caminos que te invitan
a adentrarte en otros mundos fascinantes
encontrando paraísos que circundan
con plácida oración el Universo
pisando ese campo tan angosto.
Tierra fértil como agua en el desierto.
Oasis de paz y de esperanzas
tu Orihuela amada
donde nada está muerto aunque parezca
que su aliento quizá no se perciba.
Tan viva como tú, aunque respires
sintiendo la existencia como yerta.
La caricia de la vida se te acerca
y lo que siempre ha sido, es y será.
Anudas la esperanza en los ocasos
y es sonrisa en cada amanecer.
Cumplen los ciclos de Perséfone y Gea
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 357
Mil poemas a Miguel Hernández
aromando la cintura de colores
sabores, melodías
que entrelazan entre sí cualquier con-tacto.
Siendo así, es verdad: vas descubriendo
ése génesis creado eternamente
culminando lo divino con lo humano.
IMAGINO…
TUS DULCES VERSOS DE AMOR
Miguel a Josefina
(Soneto polimétrico
Dulces versos de amor. Plácida calma
donde escapan ilusiones que veneras
con ternura que desborda las riberas
más recónditas, sagradas, de tu alma
Tantas noches de sueños compartidos.
Distancia. Vivencias y amor tan deseado
a pesar de las derrotas que han marcado
confluyendo la esperanza en los latidos
Hombre bueno que romántico le atraes
con señuelos de pasión, gozo, alegría…
Idealizas con tus sueños. Le retraes
Asustada, con alas rotas abrazada
encerrando aun más su melodía
en la dura realidad que es tu cruzada.
Antonio Oxte León, México
A Orihuela, España!
Abrase visto tierra sabia;
Tan sabia como mi abuela,
que cada mañana entre leños, humo y pan,
decía tejiendo palabras con ternura y acariciando mi oído,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 358
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Sendero más suave, entre la agreste geografía de Levante
No hay, que el camino de regreso a Orihuela!
aún huelen los cerezos maduros en abril que,
pintan las mejillas sonrosadas de la joven que te espera.
Escucha Miguel! cada día se renace,
y en tu corazón amante deja abrir una página de vida nueva,
que canten alegres los pájaros, sobre la colina verde!
Recuerda a los ancianos y su piel marchita;
mañana te despedirás de la pertinaz frescura de tus labios,
rechinarán los dientes y colmillos
de los llamados en la cima del macho cabrío,
que regocijan la nevada montaña, al eco de tu voz bravía.
Hoy la leche quedó sin manos que la surta entre nuestra gente,
entumidos los recuerdos de ayeres fríos;
garrotes del destino, de ti me separan, te has ido!
días idos todos, corran, sigan corriendo!
Como corren las aguas del río teñidas de roja vida que se lleva la corriente!
Madre de las soledades, clamando en la tormentosa noche
de ayes y aullidos!
por la inocente sangre derramada de los hijos;
gritó la madre en su infinita congoja!
Y medio muertos y medio vivos luchamos inconformes por Justicia?
Injusta vida vestida del silencio de amarillentas hojas de otoño
que cubren mi lecho y me dejan sin verte en el frío invierno
que ya te envuelve, pero a grito de batalla abro mi pecho!
Porque quiero verte con los ojos de cielo que me miran desde arriba
porque ahora soy piel de la misma tierra
bañada con tañidos sonoros de campanas.
La ignorancia oscura se ensaña, recluyendo
lo que queda de tus besos en mi boca,
tratando de encerrar mi voz tras las rejas del olvido,
letras que hablarán por mí; poemas en voz mía,
que habla el propio viento y la luna llena,
escuchen valles, mares, selvas y montañas!
El viento mensajero del espíritu entra al río de aguas de fuego!
que ya nunca se detiene y bogando por mares de esperanza
de llegar al lago calmo y sereno de tu alma!
¿Te bañas aún en él?, ¿puedo abrazarte y llenarte de besos?
Todo se mueve incesante, el tiempo es un beso,
besa sin prisa alguna, fluye dando besos a la vida,
así ha sido siempre!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 359
Mil poemas a Miguel Hernández
En mi último y primer suspiro; despierta el ojo que dormía,
que sin fatiga ve la luz eterna de infinito sol que cae en marzo,
dejando perenne corona de azahares y laureles sobre tu amplia frente!
Viva la libertad y el saber que aquí estoy,! Aquí estamos contigo!
saber que saboreas mieles de mis devotos labios,
que recuerdas los más dulces besos que en vida diste,
Y que seguirás dando besos y poemas.
Enarbola la sonrisa!
Respetamos a la madre y a la abuela!
como tú quisiste que fuera el amor a la mujer de Orihuela!
Mujer mártir, incólume, fuerte, risueña y a veces triste!
Haz de mi viaje poético y turístico de cárceles y dolor contrito;
sacro camino hacia las estrellas!
Y de la efímera prisión de pasiones por añorados y níveos pechos!
¡liberados estamos para siempre, la cruel guerra ha terminado!
Sólo quedan besos puros, vírgenes angelicales, de juvenil primavera.
Vuela y canta el gorrión a la luz mañanera.
Y dejo ante el altar de la patria nuestra!
Este poema como firma de amor fraterno!
Hermanos!, sea la Paz y la Libertad por siempre en sus corazones!
Dejo la huella de mi paso entre ustedes, mi amada familia; su familia,
nuestra familia de todos los credos. Cual tronco milenario de olivos!
Del árbol matriz!, Orihuela!, Levante!, España!
mis hijos y mi amor, por ti son testigo!
Celia Benfer, Paraguay
A Miguel Hernández
En su recuerdo.
Se estremecieron las verdes montañas de verbos
cuando llegaste y el eco de los cantos ennobleció
enseguida una pira inmortal para tu nombre que
dignificaría tu recuerdo, elevando el prestigio de
tus pasos por la historia en este breve verso para ti.
¿Qué te hicieron poeta? ¡Tan pronto te fuiste!
Tus coplas célebres, hoy resuenan en todo el universo
yo te nombro aquí y siento que en cada obra tuya
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 360
Mil poemas a Miguel Hernández
vives simplemente, que palpitas en cada tiempo
con tus honorables e inmortales estrellas azuladas.
Tu vida fue un racimo de enjoyados renacimientos
el retorno veraz de encumbrados sentimientos
fama por doquier, la libertad sonora, crepita y aúlla
en las celdas injuriadas de misterios y apetencias
que no doblegaron a tus musas ni tus repertorios.
Ensalzo tu nombre, ¡tan poco fue tu peregrinar!
Tan largo el sufrimiento, tan doloroso el destino
que desgarró tu ser, la luna te recoge en su cuna
el sol te dedica agasajos, tus aires se esparcen en
libertad y Dios te tiene a su lado con serenidad.
Vertida de calvario tus pasos fueron, venciste la muerte
porque hoy vives, en la mañana y siempre, vivirás
eternamente en las páginas henchidas de versos que
dejaste cubierta de la tinta más sólida, que ganará este
estandarte, en honor a tu vida y letras, poeta eterno.
EN HOMENAJE DESDE PARAGUAY
POR LA CULTURA INTERNACIONAL.
A MIGUEL HERNÁNDEZ, POETA ESPAÑOL.
Miguel,
He caminado sobre tus letras,
observé tu estrella
una rutilante luna y un amor cumplido
pasaron los años
vives en nuestros corazones
se pasan los céfiros acariciando tu presencia
con tu historia que plasman tus escrituras
hoy los recojo en mi silencio
un ramo de versos bien sinceros para
ensalzar tu memoria.
He mirado tu trayectoria
desde las ventanas de mis retinas
Pesadumbres y congojas
que no acallaron tu ciencia
aun en las celdas oscuras donde te cubrieron
paredes de sombras
en silencio has llevado la constancia.
Te alabamos en afecto este respeto sincero
a merced de la mansión divina tan lejana
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 361
Mil poemas a Miguel Hernández
donde moras con los ángeles que cubre
tu mirada, en donde tú reposas en eternidad.
¿Por qué la muerte te ha llevado?
¿Por qué a los poetas se lleva Dios?
¡Dios! ¿Por qué te llevas a los poetas?
¿Será que tus planes están escritos
para que todo cantor, ruiseñor del alma
vaya a tu Mansión de calma a cantarte a Ti?
Mis plegarias hoy saltan de mi esencia
para que llegue junto a Miguel Hernández
un romancero sincero que vivió su cruz.
Mis plegarias:
Señor, gracias por la vida
Por todo lo bello, por la naturaleza
por aquellos poetas
que ya se fueron y están contigo.
Gracias por tus planes selectos y divinos
que nos llevan a tu Celestial Mansión
por darnos la lámpara y las palabras
que salen gozosos del corazón.
Gracias por esta oportunidad
De conocer a Miguel en sus letras
Un poeta valiente que jamás cambió.
Te pido Señor, que le tengas siempre
que todo lo bello él se llevó, su alma buena
que canta y suena hoy junto a Ti
Nos dejó su recuerdo como prenda bizarra
diamantes que en vida venerable lo imprimó.
Isaida Viart Dihigo, La Habana Cuba
CORCEL ENARDECIDO
Al ver aquel fulgor,
Orihuela se estremece,
pues siente la presencia
de un corcel enardecido.
Eras tú, Miguel,
venido del Olimpo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 362
Mil poemas a Miguel Hernández
que te antepones al marasmo
y circundas la esperanza.
Una esperanza lejana y monótona,
donde el dolor esparce resonancias
en tu figura vital de campesino.
Niño de tormentos y maltratos,
después la guerra de encierro e impotencia
donde quedaron sumidos sueños e ilusiones.
Tomas la fe por los moños,
te despides de los trigos y del sol
cuando el fulgor se vuelve aureola
para seguir alumbrando tu camino.
IMPACIENTE LATIR
A Miguel Hernández
Horadando la vida
tu mirada se extiende
y lloras lobregueces de caminos
caminos trillados de agonías.
En boca ansiosa se expelen juramentos
de garganta atiborrada de quejas
que suben del alma y se ensanchan.
Y más abajo, con el corazón entre las manos
ofreces tu verdad lastimera, arañada, cabizbaja
en un rincón de tanto grito y agudo dolor.
También allí en el pecho,
el impaciente latir, por todo y por todos,
pues la indolente serpiente se acerca y morderá
hasta dejar devastados los destinos.
Iván R. Gutiérrez Rojas Ceballos, Cuba
SALUTACIÓN AL POETA
«Abierto estoy, mirad, como una herida.»
MH
Salud pastor, cantor de las trincheras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 363
Mil poemas a Miguel Hernández
dejad mi verso , luz agradecida
decir de la tuya noble y fiera
como una canción sin despedida.
En tus manos pintó la primavera
la sangre arrancada en cada vida
y en el verde ondear de tus banderas
cruzaste verso y plomo en las batidas.
Salud comisario, porque eterna
se empeña la contienda que aguerrida
siempre pedirá que un poeta
venga con su luz, y en la caída
del enemigo su voz quede yerta
al sangrar en combate sus heridas.
COMO UN HAZ
No podía tu voz quedarse oculta,
dejaste la palabra grabada en cada árbol que
cuajó tus sudores y tu sangre,
todo grabado en el torso de la tierra. Quedaron
grietas a llenar desde tu vuelo.
Te repiten los cantores y tu arrojo se labra en
acordes sobre la huella de las sombras que hiciste se perdieran contigo.
Ah, amigo, estás, como una estrella espaciosa
para salvar las raíces de tu suelo,
como un denso anillo para seguir uniendo saetas
hasta la llegada del próximo combate.
Antonio García Castro, Perú
LUZ EN EL CIELO DE ORIHUELA
Desde los tiempos fuiste llamado
Llamado para vida eterna.
Tu cuerpo yace dormido en una tumba
pero tu pluma, tu verso y espíritu,
recorre el mundo entero
para deleite de los sin frontera.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 364
Mil poemas a Miguel Hernández
Pastor de cabras en tu niñez.
Pastor de letras en tiempos venideros.
Lucero de Anael en el cielo de Orihuela
Anuncia la venida de un egregio poeta
La yerba se inclina alegremente
y las cabras saltan de contento.
Se escuchan trompetas
pidiendo silencio en el Universo.
Es día de gala y los invitados
llegando a la tertulia están.
Neruda, Vallejo y Miguel Hernández
¡Si, Miguel Hernández, el poeta- cabrero!
Se escuchan ovaciones en el cielo.
¿Que se traerán entre manos este trio de bardos?,
que hasta las carcajadas nos llegan como un trueno
Habrá que preguntarle a Asís, -el incansable viajerode que están tratando estos ilustres caballeros.
Que hasta el cielo sonríe
y las estrellas coquetas nos envían besos.
De seguro que Miguel Hernández
esta hablando de su Perito en lunas
El Rayo que no Cesa,
Cancionero y Romancero de ausencias
Neruda sobre memorias de la Isla Negra
Vallejo sobre los Heraldos Negros.
Este es el canto de un poeta caminante
a Miguel Hernández el poeta cabrero.
Lilian Viacava, Uruguay
PASTORCITO DE ORIHUELA
Por las sierras luminosas
de su tierra de Orihuela
pastoreaba las cabritas
sabiendo que era poeta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 365
Mil poemas a Miguel Hernández
De la luna se bajaban
los versos hasta su vera
y el sol por las mañanas
resplandecía a su espera.
Luchando con su palabra
en una maldita guerra
que lo llevó en soledades
a una desierta celda.
Y allí cantando sus coplas
al hambre y a la miseria
a la cebolla y al pan
uniéronse sin vergüenza
en sus cantos lapidarios
desde una fría celda,
donde se iba enfermando
el poeta de Orihuela.
Cantaba en noches bajito
a su amor en dura espera
mientras la luna plañía
en su llanto y su quimera.
Sus pasiones fue dejando
muy quedo el joven poeta
mientras se iba enfermando
en la solitaria celda...
Los versos le acompañaron
buscando paz y sin la guerra
y así se fue en silencio
el poeta de Orihuela.
Elisabetta Errani Emaldi, Italia
Miguel Hernández
el Príncipe de la naturaleza
Tu que con la magnificencia de tu
mente enamorada de la naturaleza has sabido
recoger las emociones recónditas de Dios.
Tu, que en cada temblor del corazón
has llenado de pensamientos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 366
Mil poemas a Miguel Hernández
preciosos tu mente sedienta de misterio.
Tu que con confianza y dulzura haz hablado del
Todopoderoso, y por lo que haz iluminado
de oro y plata el pueblo.
Tu el Príncipe de la naturaleza, que has recogido
las maravillas de miradas preciosas,
encantadas por sus perlas de sabiduría.
Tu, ángel de la palabra, que con tus
ojos atentos has sabido recoger los instantes
huidizos del explorador que descubrió
los secretos de la naturaleza
Tu mago del sonido has contemplado
sorprendido la luna, las estrellas, el dorado sol,
la lluvia, la niebla, las propiedades de diversas hierbas,
los ritos de la fecundación de los animales;
toda la grandeza del Divino,
Miguel, alma de luz que danza entre
las praderas del cielo, con su diamantes
de rocío, líricas misteriosas
que cantan la omnipotencia de Dios
Miguel, ruiseñor de la poesía
Poeta que te forjó entre el cielo y
los verdes páramos, acariciado por los rayos
de un sol dorado que iluminó tu imaginación.
Miguel, ruiseñor de la poesía
que el destino te llevó a los pastos
y te enseñó a amar la magnificencia
y belleza de la naturaleza.
Alma que volaste en el cielo
en la flor de tu juventud
tras sufrimiento y encarcelamiento,
condenado por las injusticias de la guerra.
De tiempo tu forma de luz danza
en los pueblos del universo,
entre los brazos del Padre Celestial.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 367
Mil poemas a Miguel Hernández
Amalia Lateano, Argentina
A MIGUEL HERNÁNDEZ
(Orihuela, 30 de octubre de 1910 – Alicante, 28 de marzo de 1942)
Por ser dura tu muerte
latió la cárcel para ser Poeta.
Fue Don Miguel Hernández la saeta
esplendor diamantino de regalada suerte.
Llanto de solitario sin nada que ofrecerte
la vida amalgamó su flaca grieta,
en cebollas de leche por su meta
el querube a beberte.
Sin sagrario vate eres el ejemplo
por tu heroica gran marca para todo hombre entero
y más en estos días de labranza.
Para sonar tu canto cual hierático templo
ilumina la fragua de lo austero
al retribuir quedo con señas de esperanza.
Patricia Araya, Chile
VERSOS CAUTIVOS
A Miguel Hernández
Para poetar ¡Qué hierros te contuvieron,
que humedad, que frío
que muros construyeron,
para opacar y enfermar la luz de tu poesía
contenido y castigado;
sin ver el sol ni la luna!
Hubo murmuraciones, de germen malicioso
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 368
Mil poemas a Miguel Hernández
dentro de la prisión, absorbido
trancas en los pies, encadenadas manos,
puertas y ventanas selladas
alambres de púas, muros altos,
sombríos obstáculos, distancias
pero nadie pudo acallar tu voz humanitaria.
En este aquí, tu alma encarcelada
derribaste y destruiste el tiempo perdido
ganaste y sembraste poesía libre,
vocación como castillo soberano
en este aquí, armadura pacifista,
enajenados tus pasos
estigmatizados tus versos
hecho y acto,
tu dentro, ellos afuera
pudo más tu poesía que sus cadenas.
clausuraron tu cuerpo,
pero no así tus pensamientos aves
el lenguaje era tu mano escriba
liberando la rencarnada sospecha
en tu universo carcelario,
jerarquía impenetrable
comunicación inasequible,
extrañeza para los que están dentro
lejanía de los que están afuera.
Tus versos nacieron lagrimosos,
formaron sonrisas con peces de colores
escurrieron por los muros,
salieron de la mazmorra como ríos enamorados
hoy están tus versos en la playa embelesados,
salpicando el tiempo que no muere
están como estrellas en el gran firmamento
libres, no cautivos
porque Dios así lo quiso.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 369
Mil poemas a Miguel Hernández
VERSOS ABSUELTOS
A Miguel Hernández
Te llamaste barro por nombre,
barro tu inspiración miguelina
mancillado el poeta,
triste destino,
instrumento bondadoso
tu lengua prisionera;
venero tus ojos la luz solar,
palmeras, flores, abejas, allá afuera,
te cansaste de llorar por dentro
no te conformaste, desesperaste,
como un ave sin alas
y las rejas del insomnio
no borraron el aroma de las rosas
creíste ser enterrado vivo,
el llanto ahogado
abrumado tu canto.
Cavaste el alma tuya,
con hondo pesar
fatigado, extenuado
de pelear las sombras...
trovador apesadumbrado,
sombras de cardos en el horizonte
huesos atrapados,
huesos fracturados
vivo muerto, pero
trivio tu canto
cantizal y gorjeos
encarcelados de zarza, cardo, muerte
pregoneros hasta el fin;
absueltos volaron tus versos.
AVE MÍTICA
A Miguel Hernández Gilabert.
La palabra fue tu ave mítica
fuego que entibió la noche,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 370
Mil poemas a Miguel Hernández
faro, destello en la oscuridad,
ave resurrecta
aunque engrilletado tuvieras el espíritu.
Ella en tu nido libre,
en misteriosa concomitancia,
en misteriosa concordancia
desposada al poeta,
a tu poesía prometida
enfrenta el desconsuelo,
destruye el desaliento
anexa el gesto a la mirada,
la voz al sonido,
tan pronto consumido por el dolor,
abre puertas a la tolerancia
une el tedio a la ilusión,
ángel en tu vesania
ella es tu cordura
mitiga al desahuciado
milagrosa pócima,
trena medicinal,
apósito a los huesos,
vendaje a tu canto
cantar a la desidia;
tesonera siempre
aplaca el miedo, el llanto,
esclarece el camino
para luego…
acicalar la tumba
donde tu hontanar ha de tenderse
luminosa ave mítica;
cenizas esparcidas
sobre un brazal infinito
donde el manantial renace libre.
MIL POEMAS: POEMAS QUE VUELAN
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Que tu espíritu vuele tan alto,
el sonido de sus aleteos sea de una flauta
en resonancia en un día calmo.
El ave vuele hacia la montaña,
cubra los cielos y el infinito.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 371
Mil poemas a Miguel Hernández
Toda bruma pasada y dolorosa se disipe,
genere un paisaje de comprensión,
perdón y hermandad.
Haya conjunción de luz, sol, estrellas, círculo de amor,
alineamiento poético,
y tu ave esté en el centro de esta galaxia de amor.
hato de cabras que estuvieron cuidadas por tu atenta mirada,
sean ellas quienes nos contemplen agradecidas desde el cielo,
una a una enlosadas en ternura, su mirada atenta,
cuidando que esté toda tu poesía generando pastar
inconmensurable en tu nombre.
Que nuestra madre poesía, todo lo abarque,
en genuino amor fraternal, sanando,
santera sus aguas sanadoras,
y deje libre tu poesía, vaya saltarina por los ríos,
enmarcada por un paisaje verde esperanza,
fluya como una vertiente, provoque una unción de creaciones,
unidas en hermandad de poetas,
formen un poemario de mil poemas,
todos cantando el mismo canto,
nuestras letras cascadas, cataratas, que baje la montaña,
poemas a raudales, naden por todos los ríos del mundo,
generando un mar de solidaridad,
pendón de la hermandad, en estos momentos de crisis,
violencia e inestabilidad económica en tantos países hermanos,
llegue y ondee la bandera de la humildad.
Poesía generadora lumbre, poesía amante de la belleza genuina,
numen creador, flauta en su boca, armonizando al hombre,
poesía que va levantando arboles caídos,
y en este espíritu germinador vaya Miguel Hernández,
sobre un caballo blanco, loco de alegría,
su ave sobrevolando los cielos de cada escritor participante
en esta ofrenda de señorío y confraternidad
Vuela águila, halcón, ave mítica,
vamos todos los poetas corriendo tras sus huellas,
palafrén, lobo, energía del universo, fortaleza en un solo corazón,
latiendo al unísono, en aras de un solo ideal,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 372
Mil poemas a Miguel Hernández
la paz del mundo.
Ella, tu poesía, va vestida de pieles,
joyas, luz solar, madre loba,
y en su aullido nos reúne a todos sus hijos,
en un paisaje de escritura sagrada,
cabalgando por la inmensidad,
no hay guerrero más fuerte que el que ofrenda la paz.
Aquí quedan mis letras con mi corazón
adosado al boyuno españolado de tu poesía;
unidas las manos a otros escritores
que como yo hacemos justicia con el alma,
con el arma de nuestras letras,
en calma, en razón de vivir, dando,
lo mejor, escribiendo a otra alma que nos troca e inspira…
¡Vamos poetas de mundo!,
Miguel reverbera, arcoíris en nuestras letras,
un mar de letras, un bosque de letras,
un árbol llamado Miguel Hernández,
plantado en su pueblo Orihuela, verde paz,
luz de luna, ave en un baño de amor…
¡Que absoluto portento debe sentir Miguel,
que total su dicha!, vernos abrazados,
nuestras miradas hacia lo alto, él mirándonos hacia abajo,
no moriremos en vano,
nuestras letras como un sol
y nosotros proyectados mas allá de la simiente de la vida
y un Alfred Asís, como un predestinado,
un hortelano de la paz, señalándonos el camino.
“Solo quien ama vuela” dijo: Miguel Hernández.
Gracias a mil poemas a Miguel Hernández…
mis letras son aves y vuelan para siempre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 373
Mil poemas a Miguel Hernández
Ramón María Vadillo, Bizkaia, País Vasco
A Miguel Hernández
En su sangre se envuelva la victoria.
Terminaba Miguel, canto a Teruel
ignorando este canto en vida, en él.
Melodía llamada a ser memoria.
Memoria de aquellos que un día fueron.
Siendo hoy llamados, tan solo recuerdo,
mas vivo, que muerto, siendo el cuerdo
palpito, de una tierra que quisieron.
¿Cómo morir Miguel, amigo mío?
Si entre los olivares aparecéis,
siendo en la mañana, fresco rocío.
Tantos como tú Miguel, ¡tantos miles!
Lucías, Pedros, Albertos y cientos
de nombres llamados por tí, sentires.
Sentir, brillando en la noche y el día,
pues vuestra luz es y será la guía
del eterno sueño, nuestra alegría.
A Miguel Hernández
¡Ay Miguel! ¿Lo escuchas Miguel?
De nuevo en la serranía,
aquellos versos clamados,
que desde la cercanía
y en tú nombre, hoy son cantados.
¿Escuchas Miguel, escuchas?
Como aquel hermoso día,
la vez, que de ella manaron
pastoreando el pastor poeta,
las letras a ti te hallaron.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 374
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Ay Miguel! ¿Lo escuchas Miguel?
Nuevamente y en los vientos
letras de plata en la noche,
palabras de sentimientos
surcan libres, sin reproche.
Escucha Miguel, escucha.
El alboroto en el trinar
alegre, y en tú recuerdo.
Dilercy Adler, Brasil
HERNÁNDEZ MIGUEL
Hernández Miguel
Miguel Hernández
gritaste a dor em versos
e lutaste por liberdade!
carnívoro punhal
encravado em tuas veias
sangraram o sol da tua alma
por tua vida inteira...
nem punhal, nem ferro ou fogo
conseguiram libertar a dor
exterminar o desejo
ou apagar a luz
a luz que em tua vida...
-breve vida terrenaintensamente brilhou
e brilhará para sempre
para todo o sempre!!!
A HERNÁNDEZ MIGUEL
“Nasci só para o luto”
...dizes
mas nascestes também para o amor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 375
Mil poemas a Miguel Hernández
amor da amada Josefina
amor à Pátria
amor a todos
adultos, meninos e meninas
que viviam ao teu redor!
“Aonde irei que não vá
A perdição me buscar?”
- a muitos lugaresonde foste a luz
onde foste força
onde foste coração
onde deste amor
- o teu irrefutável amoronde foste salvação!
Yurimia Boscán, Venezuela
A Miguel Hernández
Quien te ha visto y quien te ve
en Orihuela
La sombra de lo que eras
perito de la luna
viento de pueblo
En Orihuela
Labrador de aire
luz en la oscurana
y toda tu poesía
En Orihuela
rayo que no cesa
en medio de la guerra
Un romancero de ausencias
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 376
Mil poemas a Miguel Hernández
y el hombre acecha
En Orihuela
Salta la luz del mediterráneo
y refulge tu palabra
no importan los años-calavera
siempre se vuelve al beso enamorado
En Orihuela
Mary Paz Hernández Sánchez, España
HOMENAJE A MIGUEL HERNANDEZ - 15-8-2012
CITA DE MIGUEL HERNANDEZ, de su poema,
VIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVAN:
“Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta”.
Con la cabeza bien alta
puedes estar donde estés,
que allí donde se te nombra,
homenajes te han rendido.
A ti, testigo de historia
de las penas de la gente,
que percibiste la luz
en las huertas de Orihuela.
A ti, poeta entre las cabras
que soñaste por los montes,
y declamaste a la luna
bajo viejos olivares.
A ti, compañero noble,
que deshiciste terruños,
para desterrar la sombra
con el golpe de tus versos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 377
Mil poemas a Miguel Hernández
Persiguiendo las estrellas
olvidaste los fusiles,
cincelando la poética
sin la atadura del yugo.
Cautivaste por sencillez,
expresándote con pasión.
Ahora, las letras del mundo
lloran por siempre tu ausencia.
Placido Lorenzo Bruno, Argentina
Miguelillo
Querido Chaval de Orihuela
No te dormiste en el olvido
Hoy tu luz nos ilumina
y danza al compás de una zarzuela.
Asomaste al mundo escribiendo
con las auroras boreales,
eres un poeta que perduras en las mentes,
para tus lectores, sigues existiendo.
Mientras cuidabas el rebaño
el gran deleite era el paisaje
todo a tu rededor te inspiraba,
nunca hacías las tareas con regaño.
Tu nombre es signo de admiración
nos legaste muchos escritos
con maestría de educador,
el mundo admira esa bella creación.
ALMA DE POETA
Ya llevabas en el canal de tus venas
las poesías y prosas intrínsecas
Tenías el alma de compositor,
para escribir, no te sujetaban cadenas.
Un canónigo abre el universo de lecturas
Nace en ti un deseo de crecimiento
Y con el contagio de grandes maestros,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 378
Mil poemas a Miguel Hernández
muy joven te sumas a las aventuras.
Ya en la juventud tenías el don de líder
y el valor de mancebo estaba al frente
formaste grupos con linda gente
Todos ellos con ganas de aprender.
Viviste orgulloso con tus conocimientos
Luchaste contra las adversidades.
A los 20 años te gratificaron,
fue un premio a tus emprendimientos.
Carrusel de letras
Tu canto sale al viento
desde el aroma de azahares
no estás platicando con nosotros
pero tu voz traspasa fronteras
agrandándose en las distancias.
No sólo el bronce habla de ti
y tus escritos, se asemejan a bellas melodías
que se embriagan con el vino de tu tierra.
Chiquillo de Orihuela,
trashumante del tiempo,
recorriste valles montañas y prados
montado en tu carrusel de letras
y el bagaje de inspiraciones
siempre como compañero iba,
dejando en cada rincón de España
los versos con sabor a enseñanza
que invitan a la ensoñación
Hoy quienes te siguen
en el derrotero que nos trazaste
anhelamos que descanses
en el regazo del Señor
a sabiendas que el ideal literario
baila al compas de tus notas.
Miguel Hernández
Miguel, trovador de tiempo
Influyente y carismático
Ganaste a las parcas con letras con
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 379
Mil poemas a Miguel Hernández
Una condición sobresaliente.
Esa cualidad es nata en los grandes y
Las letras del mundo hoy te encumbran.
Hijo predilecto de la provincia de Alicante
Eras adoptivo de la ciudad de Murcia
Recordar tus obras nos regodea
Naciste con la pluma en la mano
Aleluya hermano poeta
Nuestro cántico vaga contigo.
Destino triste al juzgarte mal
Eligieron apresuradamente y
Zanjaron tu vida sin piedad.
DESCANSA ESCRITOR
Poeta y dramaturgo incansable
compositor de sueños y realidades
donde las fantasías infaltables
juegan en el vocablo de esas verdades.
Los trazos que nos legaste
hoy ruedan en paginas históricas
porque con tu escritos nos flechaste,
dejando la maestría de las retoricas.
Cuantas noches te disparaste de tu lecho
para darle forma a esa idea que se
cruzaba anidándolas en tu pecho,
plasmándola en un papel y al aire la soltaba.
Fuiste y eres crisol de semillas
nos dejaste el hombre acecha
lamentablemente caíste en Sevilla
pero tu ideal escrito abrió la brecha.
Descansa tranquilo escritor
tu nombre no será olvidado.
Para los que te siguen, eres el mentor
y en cada libro serás recordado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 380
Mil poemas a Miguel Hernández
Lina de Feria, Santiago de Cuba
El hombre de Majadahonda.
Si Miguel Hernández no tuviera ojos de ciervo
sería la manipulación de la noche.
él era un rey especial
requería de grandes afectos en su prisión
y el mundo lo recordaría
como el fantasma de Acapulco.
tiene incruenta la mirada
pero en el lecho que no tuvo de muerte
transgrede los avatares de la vida
y hoy ilumina los grandes escenarios
donde el pájaro abre su cola
y sube como un astro fugaz al árbol.
Ivelisse Castillo Maldonado, Guayanilla, Puerto Rico
Así
A Miguel Hernández de España
Así como tus rumiantes lecheras
fueron productoras andantes
para alimentar los cuerpos;
así, tus neuronas silentes,
fuertes y combatientes
lactaron los cerebros
con tus calostros de ideas.
Así, las hierbas clorofiladas
nacieron en tus azuladas venas.
A un héroe encarcelado
la libertad no se le veta;
tus armas parlanchinas
de un lirismo en defensa
crearon un férreo escudo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 381
Mil poemas a Miguel Hernández
que vida tiene en tierra;
ah… y un devocionario
que deslumbra y enmienda.
Así, Miguel, te hiciste ángel;
Así, tallaste tus huellas.
Liliana S. Doyle, Argentina
"Homenaje a Miguel Hernández"
Pastor errante en las constelaciones.
Junto a las nubes, pastoreando versos
entre la fría luz de las estrellas.
Sobre la arena del amor tus huellas.
Tu piel de luz, tu boca apasionada.
Como un toro bravío de coraje
luchaste por tu fe en el ser humano.
Sufriste tu pasión entre las rejas
de la fría prisión donde morías
triste de ver el hambre de tus hijos
que comían
sólo pan y cebolla.
Estás apacentando tus ganados
en las constelaciones de los cielos
escribiendo poemas verso a verso.
Pastor errante en hambre de infinito.
Cometa de pasión.
Maestro luminoso para tantos
poetas de otros lados y otros tiempos.
Desde Orihuela vienen las palabras
aladas de tus versos
que gritan tu verdad
y permanecen
en el eco del viento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 382
Mil poemas a Miguel Hernández
Francisca Alfonso Bazán, La Habana, Cuba
Poema a Miguel Hernández
Cantor de la tierra
tu voz la metralla petrifica
una queja ronda la herida de tu niñez
Hay un silbido peregrino
que aviva los latidos en los montes
Aguas mansas prodigaste
La hispana lengua sublimas
Haces sucumbir la conciencia del exterminio
Tu lanza de campesino
azuzó la embestida
de truhanes desalmados
Pastor de Orihuela
Arriero de sabanas
Labrador de cordilleras
Fulguraste los bríos
animando con tu lira
Arado comprometido
Manantial de poesía
Tu garganta perfila
aplacando el torrencial
que sentenciaba a muerte
La fibra de tu sentir
entona el himno de los difuntos
verdea la espiga
arrasa la guerra
Prosa a Miguel Hernández
La extensión de tu herida germinó en brote de luz. El niño acorralado se alzó a poeta,
de su canto la sinfonía justiciera, el rayo que sepultó la imagen enemiga, este canto
en el claro de luna alcanzó la aurora; transgredió a otras dimensiones.
El temor de la guerra a punta de estridencia, de bombas, muerte. Los obreros en
ritmo uniforme hacinan a las hienas, los toros les embisten el abuso, los robos, la
necedad. Llora la campiña de tanto plomo tirano, las ciudades, las casas, las escuelas,
también lloran: cuentas de lágrimas derramadas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 383
Mil poemas a Miguel Hernández
España avanza en tu aliento, tu voz invade cada rincón; aviva los trigales, protege,
salva, trasciende fronteras, llena de virilidad; embravece los destellos del manto
libertario. Eco transfundido en los montes y sabanas.
Esculpido a golpe de hierro, tu verso detiene el estallido invasor, lo revierte al
fulgor de campanadas que despiertan la gallardía de los humildes, los hacedores del
pan impregnados en tu lanza de palabras, aguardan la señal definitoria, desde
Orihuela hasta el universo.
María Luisa Benedicto Gil, Castellón de la Plana – España
¡¡¡MIGUEL VIVE!!!
Cuando el poeta se muere
algo enmudece por dentro,
descalabro del silencio
del cerrojo fiero y triste,
cárcel, hambre, fiebre, tos,
todo se junto por él,
para acabar con sus huesos
quebrados por su sentir.
A este poeta tan grande
que en Orihuela nació,
perito en lunas creció
volando el alma hacia el viento,
cuyo rostro alguien pinto
entre rejas, sin aliento,
suspirando por su amada
por su hijo y por su pueblo.
Su cara desdibujo
una mueca de tristeza
por la piel de la cebolla
que era el único sustento
de su pequeño del alma,
mientras él amamantaba
una ilusión que quebrada
se convirtió en duro infierno,
del que ya nunca salió.
Solo nos queda el consuelo
de leer todos sus versos
dedicados a la vida,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 384
Mil poemas a Miguel Hernández
a la higuera, al amigo,
o al terrible desconsuelo
que fue su estigma de olvido
en unos años marcados
por el fuego del escarnio
por ser solo él perdedor.
Al hermano y a su lucha,
o al niño que con la yunta
trabaja de sol a sol,
a los hombres y mujeres
que soñaron libertad,
a esos cantaba Miguel
con letras de humanidad,
que hoy sencillas alientan
para con ellas soñar.
Lasana Lukata, Brasil
A Miguel Hernández
é Miguel, o príncipe,
que derrubou Satã do céu de palavras
com um lirismo a costurar estrela-estrela
e um brilhante tapete de garças fez-nos ver
na escuridade do inalcançável amor
mais perto a flor, alfabetizando o nariz
a olor e sol e cicatriz
derreteu em desejos, em correntezas
as ideias de Platão tão indefesas
e se puseram às margens das belezas
que um homem sempre sonha em tocar...
é Miguel, o que andou beijando
orquídeas dos prados, relvados secos,
postulando: mulher me deixa apenas
beijar orquídeas dos teus becos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 385
Mil poemas a Miguel Hernández
Carlos Segundo Quiroz Quintero, Colombia
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Miguel Hernández
Tus pasos por el Parnaso
son y serán por siempre
la huella indeleble que poeta alguno,
romancero de ausencias,
ha dejado en el sendero luminoso
de las letras castellanas
desde Orihuela hasta Alicante.
Tu condena a muerte
no melló tu risa,
volaste con las alas líricas de la libertad
te quitó soledades
y te arrancó cárceles.
¿Qué infame tormenta arrastró tu vida
a oscuros abismos aquella lúgubre mañana de marzo?
¿Qué estigma dejaste marcado en las cenizas del olvido?
Sólo sé que tu niño dormía en la cuna del hambre
y con sangre de cebolla se alimentaba.
Facundo Leylaf Ona, Chile
Correteabas por la orilla del segura abrevando el piño de cabras
silbando por el Orihuela del tremedal orlado de montañas
buscando en las serranías calicientas las oquedades y cuevas tu refugio
alejando tu piño del artero gato montés y de la Gineta
alimentándote de cocos del palmeral de san Antón
o quizás de olivos de los secanos, cítricos y almendras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 386
Mil poemas a Miguel Hernández
corres hacia la biblioteca del pueblo en busca de Virgilio,
y los grandes de Europa
te tropiezas con Neruda quién más tarde te salva de la horca
La gota fría de septiembre te traiciona en el calabozo
las pedanías cercanas buscan tu refugio más te delatan
en la noria de los desamparados calmas tu sed de saber
abrevas la libertad de los menesterosos rompiendo cadenas
Más las aldabas te aprisionan en un cadalso sin fin
La oropéndola vuela libre junto a tu alma orillando los palmares
Murcia y Alicante la vega inundada de tus versos empalaga con tu miel
allí en el cerro del Oriolet haces un alto refrescando tus alas
vuela, vuela hacia la cala de la mosca relampagueando tu pluma
trazo a trazo en el blanco papel inconcluso allí en el calabozo
querido y recordado poeta Miguel Hernández
Mara Pérez Fernández, España
A Miguel Hernández
HEME AQUÍ, MIGUEL, MIGUEL
Heme aquí, Miguel, Miguel ...
tus momentos en las plazas,
entre falsos mercaderes
y nobles de pura raza,
cruzando sus avenidas
y callejuelas en calma,
desoyendo la opinión
de escapar de tantas balas.
Pero mal quiso la historia
hay Miguel de rota lanza,
que en tu alma luchadora
el fusil se camuflara.
De allí saliste con versos
célebres, para la historia
cantando verdades vivas
en el hoy que nos abraza.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 387
Mil poemas a Miguel Hernández
Heme aquí, Miguel Miguel...
si vieras el mundo ahora
tan cantarín de farsantes
tantas esperanzas rotas,
volverías a escribir
tus versos con tinta roja.
ORIHUELA, VUESTRO PUEBLO
A Miguel Hernández
En las tardes de agosto la serranía canta
tu Miguel pastoreas junto a las cabras
en bello atardecer feliz regresas
sonriente entre noches de madreselvas.
Llegando al horno junto al pan tierno
brotan ideas, crecen los sueños ,
mientras se tiñe de rojo el monte
idealista que forjas letras en bronce.
Contempla el cielo cauto, bien despacito,
los hermanos Sijé y algún pitillo,
seudónimos valientes tornan poemas,
te sientes panteísta...que todos sepan.
Jóvenes y nobles, mal hace el caso
políticos y clérigos cortan tus pasos,
y tu resumes temprano el vuelo
espían a tu espalda, verdugos fatuos.
Vienen diciendo, se va gestando
una guerra entre hermanos, error macabro,
Cruz de la Muela, grillos sin amo.
se cierne el cetro hiriente, muertes y salmos.
Allá perpetuas Miguel Hernández,
Carlos y Efrén Fenoll entre olivares
te van diciendo: escribe amigo
que tú eres poeta de gran espíritu.
No se equivoca quien hoy te apoya,
en tu Orihuela se alza tu mente ahora;
tu amor lo clama a los cuatro vientos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 388
Mil poemas a Miguel Hernández
ser leal al ideal, cumples tu tiempo.
No te mataron aquellas balas,
que fueron sin dudar unas palabras,
y al pronunciarlas crean sentencia,
las tuyas sin embargo de amor repletas.
BENDITO EPISTOLARIO
A Miguel Hernández
“Querida Josefina” su canto canta
en este amor que enaltece, alma con alma,
bendecidos ambos y siempre cercanos
manteniendo ideales epistolarios.
Tu Miguel todavía sigues amando
entre versos que nacen, tardes de salmos
ella ora y cose, calla , ríe y perfila
para encumbrar sus cantos al son de rimas.
Es el poeta que en lápiz sigue riendo,
amores cantarinos, alma de niño,
viento canela, versos sabor de olvido,
descanso de caricias llenas de espinos.
Bendito epistolario, paisaje abrupto
reflejado en poemas con piel de luto,
y no me llores mujer, dice la muerte...
que vino un dios a verte y quedó contigo.
Sal del olvido Miguel, no tengas miedo,
abre ya las ventanas allá en el cielo.
SENRYUS A MIGUEL HERNANDEZ
AMANECIENDO
I
Sal de tu nube
poeta enamorado
que el sol te alumbre.
II
Y ven despacio
desgranando tus versos,
pasito a paso.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 389
Mil poemas a Miguel Hernández
III
No tengas miedo
que tu Miguel Hernández
eres el cielo.
IV
Camino al monte
y hoy vamos siguiendo
tu fiel reflejo.
V
Y me descalzo
llegando al río
de tu Orihuela.
VI
Es noche entrada
y se escuchan las Nanas,
el mundo calla.
VII
Canto y no olvido
en éste tu homenaje
mi noble amigo.
MECIENDO SUEÑOS
A Miguel Hernández
Es tu canto sonoro
lleno de vida,
acunando miserias
día tras día.
Poeta al tiempo,
que presentas batalla
de amor eterno.
Entre nanas hoy duerme
tu niño amado,
es hambre de miseria
libre y callado.
Que lo mantiene.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 390
Mil poemas a Miguel Hernández
Amor es la palabra,
padres dolientes.
Esa madre serena
envuelta en brumas,
esparce hora tras hora
besos de luna.
Amado niño,
te regala sentires
con su cariño.
Es tu alegría puerta
derecha al cielo,
que susurra caricias
tras de los cerros.
Iris de sol.
Amado cancionero
lleno de amor.
Cascabel es tu risa
nada te asombra,
huracán de sus días
canto en la sombra.
Es manantial.
Descubriendo trigales
con tu candor.
Anunciador de vida
quédate siempre,
en la vida iracunda
tu no lo entiendes.
Lugar de dos,
recibiendo el abrazo
triunfo de amor.
Son ocho perlas niño
de alegre cuna.
Tus cinco malabares
que una a una,
ríen felices
tras la noche maldita
que siempre acuna.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 391
Mil poemas a Miguel Hernández
No cuentes los desmanes
ni los rastrojos,
cuando en tus arrabales
muera el antojo.
Niño de flor,
charrasqueando la vida
luna de amor.
Nubes son tus pupilas
nácar tu anhelo,
manantial de azahares
insatisfecho.
Suelta tu aroma.
Hoy nace una nanita
meciendo sueños.
Cristina Villanueva, Argentina
Lector un día poblado
Leer es una gracia, habitarse de lo lejano, lo distinto.
Leer es una forma de escribir, jugar con el texto.
Pasión en la belleza de leer con otros.
Compromiso, en la lectura interior también estamos acompañados.
El lenguaje es de todos, un legado que recibimos y que damos.
El lenguaje que es vivo y cambia, regalo del tiempo,
que seguirá andando sin nosotros.
En el placer de leer están las ciudades, los paisajes, los hombres,
las mujeres, los niños, las guerras, lo maravilloso y lo nefasto.
Es el poema, los sentidos, los pensamientos.
Leer es el silencio, cuando hay un blanco en la página,
cuando levantamos la mirada al cielo,
cuando la imaginación perfora los techos y surgen las complejidades,
lo brumoso, lo cálido. Si tenemos el libro en la mano
o adentrado no necesitamos, el permanente ruido de los medios
que nos quieren robots.
Leer es complejizar, es la vida, el eros.
La muerte, tánatos, desanda , desarma, simplifica.
Leer es un abrigo, el calor de saber que lo que leemos y recordamos estará salvado
para siempre de las hogueras de todas las dictaduras.
Los libros son compañeros del alma recordar a Miguel Hernández,
la guerra civil española, la Lengua de las Mariposas y llorar, llorar, llorar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 392
Mil poemas a Miguel Hernández
Lucero Balcazar, México
I
Yo también tuve dos hermanos compañero Miguel:
Manuel, Miguel
Manuel y yo éramos como dos gotas de agua
Pero Manuel murió, lo mataron
y desde entonces las capas de la cebolla
siguen desvistiendo de sus crinolinas
a las otrora niñas de mis ojos
II
Hoy se rompió la olla de barro de mi madre
y era el penúltimo concreto
que aun calentaba tanto abstracto
que me camina por dentro
Recuerdo que me dijo:
Me llaman Ángela aunque ni alas tenga
así que sólo barro y tepocates tengo para dejarte, mi Luz...
Llena de rabia la acabo de estrellar
y algo me estalla por dentro
Eran tiempos de guerra del otro lado del mundo
cuando sus veinte años atizaban y tejían
las fotos sepias de los futuros hijos que le nacieron
tantos y muertos
Ahora a flor de piel tus poemas Miguel
se niegan a cerrarle los ojos
a mi madre que tanto te leía...
mientras hímenes
y más hímenes
de cebollas nos llovían hacía dentro...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 393
Mil poemas a Miguel Hernández
Esther Trujillo García, Cuba
Su vida.Y al sol, el ojo abrí por primera vez.
M.H.
Quizás porque en el “Levante”
Español, surgió su vida,
Lo humano, que el pecho anida
Le dijo al hombre: ADELANTE.
La provincia de Alicante
Lo parió con patriotismo.
Sol, coraje. Centro mismo
De quién no dio marcha atrás,
Una Estrella, que jamás
Acepto el anexionismo.
La luz de su pensamiento
Humilde y grande a la vez,
Enarbolo su honradez
Gigante en cada momento.
Gloria. Gloria. Sentimiento.
Gritos de ¡! Patria querida,!
Bandera de lucha erguida
La que tanto amor encierra.
“Si hay muertos que en una guerra
Han perpetuado su vida”.
Cuan elevada costumbre
Puso oro a su garganta.
Quiero inclinarme ante tanta
Polifacética lumbre.
Su sencillez fue su cumbre
En su hacer de campesino.
Y desde el amor al trino
Aun sus grandezas exhibe,
En el lugar donde aun vive
Bajo el cielo alabastrino.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 394
Mil poemas a Miguel Hernández
Su vida en prisión? un reto
Para el hombre visionario.
Que opresión, el, presidiario
A cuatro rejas sujeto.
Campo. Tierra. Vericueto.
Sueño. Amor y poesía.
Separarlo no podría
Nada de su corta andanza.
¡! Como matan la confianza
Que su corazón traía!
Firme. Inquieto. Decidido.
Seguro. Capaz .Honrado.
Exigente. Hombre. Soldado.
Humilde. Pobre. Atrevido.
Entusiasta. Sorprendido.
¡!que inquietud de colibrí!
Verso a verso conocí
Su más grande pensamiento.
“Siento que un árbol sediento
Llevo incorporado en mi” *
Que brevedad. Treinta y dos
años. ¡!Que largo sufrir!
que grandeza de vivir
de su corto sueño en pos.
Agradecido de Dios
Por su pureza y su vida.
Junto asu esposa querida
Del brazo de la adultez
Y con esa madurez
Que el honor le consolida.
Dos prisiones diferentes.
Cuando aun crece, ante el trabajo.
Luego esa cárcel, que trajo
Su muerte... cuantas simientes
Y cuantos golpes hirientes
Hacen que el mundo se asombre... ...
Me prosterno. Beso el nombre
Que nos lego su confianza.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 395
Mil poemas a Miguel Hernández
Un regalo. Una esperanza
Como holocausto del hombre.
Esta es la vida de aquel
Niño cuidador de cabras.
Que entre montes riscos, y abras
Se hizo poeta. Es Miguel
Hernández, que para él
Fue la libertad, su grito.
Y su verso, casi mito
O protesta lo hizo un hombre
Que por pensamiento y nombre
Lo llaman un “Erudito”
“Ante Pablo, los días se abstienen y no andan
No temáis que se extinga su sangre sin objeto
Porque es de los muertos que crecen y se agrandan
Aunque el tiempo devaste su gigante esqueleto”
Miguel Hernández.
Su Obra...
... Divina Pavesa.
Por fuerte. Por casi cruda.
Si hasta el alma se desnuda
En “el Rayo que no Cesa”.
En sus cortos años pesa
Romances. Sonetos. Rima.
Que octosílaba enracima
“Epitafio para Herrera”
Y “Elegía” Sementera
A Ramón Sijé. ¡! Que cima!
Verso, que es como jardín
De estrellas que perfumaba,
Y a los mismos se asomaba
La pureza del jazmín.
Cortaba el yerbajo ruin
Con sus palabras sonoras,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 396
Mil poemas a Miguel Hernández
Iluminadas de auroras.
Era de paz y sosiego.
Y arrasaba como el fuego
Sabandijas trepadoras.
Igual que un hacha filosa
Talaba piedras y montes,
Necesitaba horizontes...
Pide alas... ¡! Que mariposa
Mas parecida a la rosa
Llenando su pensamiento!
Verso que en cada momento
Se multiplica. Es herida
Y crece con la mordida
Del paramo... furia del viento.
Verso, que dijo de amor
Único, cuando no sobra.
Para cuajarlo en la Obra
Que le llena el interior.
Verso dulce. Superior
Que con cada letra besa.
Verso de luz, de promesa
Cuando el amor lo provoca.
Y se hace miel en la boca
De Josefina Manresa.
Es el verso que destila
Zumo, de dolor amargo,
Hijo transitando el largo
Trillo que su voz perfila.
Verso fuerte. Clorofila
Que de imponente se atreve,
Roca. (Paradoja) Nieve.
Relámpago y Universo.
Un verso como su verso.
Surco. Manantial. Relieve.
Ardiente. Locuaz. Convencido.
Maravilloso. Ejemplar.
Sueño. Licor. Azahar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 397
Mil poemas a Miguel Hernández
Libertad. Arpegio. Nido.
Español. Sustancia. Ruido.
Elocuente Historia. Escuela.
Sentimiento donde riela
Perfume. Cultura hispánica..
¡! Nadie, con tanta dinámica
Como el Pastor de Orihuela!.
Su Obra. Es donde retrata
Amor y dolor y guerra.
“Perito en Luna”, que encierra
Igual blancura que plata.
“Viento de pueblo”, sonata
En el tiempo, a su manera.
Entusiasta primavera
Valor en que siembra y cobra.
Y la fuerza de su Obra
“Rosario Dinamitera”.
Vientos del pueblo me llevan
Vientos del pueblo me arrastran.
M.H.
En Miguel Hernández... La pureza de lo natural...y su vigente trascendencia”.
Nació hombre y amó la naturaleza tanto como a su pueblo, a su familia, a su poesía,
al amor, al verdadero amor que para el fue el único?. Y claro que si, como no
hacerlo, si es Miguel todo amor y realidad de la naturaleza que lo rodea.
Contemplar los campos le dio el conocimiento suficiente para adquirir ciertas
posibilidades de auto-estudio y de crecimiento natural.
En la soledad, era capaz de pensar en la profundidad de su vida. Aprendió tanto, que
supo como hacer de su espíritu una arcilla moldeable. Llego a conclusiones tales
sobre cada cosa, que hasta de la tierra guardo experiencias finitas. Supo que en la
feracidad de su huerta nacía una ley sustancialmente inocente y pura. El campo, los
animales, la naturaleza misma, lo llevan a conocer que no es pecaminoso el sexo,
sino, que tiene una importancia incalculable, porque de el, nace la vida. Es, la vida
que amaría sin pudrir el amor y su poesía, cantaría ese feliz acuerdo con la más
radical pureza;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 398
Mil poemas a Miguel Hernández
LA PUREZA DE LO NATURAL.
Se sabe que de su noviazgo con Josefina Manresa, nace una historia para él, pero
una historia de amor definitivo, verdadero, apasionado y único. Entregado a sus
satisfacciones de hombre correspondido. Ante la necesaria separación en busca de
posibles mejorías personales y económicas, desde Madrid, existen cartas que hablan
de esa ardorosa pasión, real, cruda, y delirante, por la carne, por el sexo, por la vida:
“Te gastaré la boca y los ojos y la frente y toda a fuerza de besos” M.H.
Se alimenta de recuerdos pero además sufre esa separación cual si fuera impuesta por
cánones de la vida, y le duele hasta los tuétanos. Su amor lo considera totalmente
sexual, atento a la conjugación de la carne de un realismo cósmico que nada tiene
que ver de grosería materialista. Es amor, es pureza de lo natural. Mas sorprendente
es aun ese natural equilibrio en Miguel, si se considera que el siglo en que él vive,
esta lo suficientemente viciado como para que el logre salir ileso de extremos vicios.
Podemos concluir que el hombre, que es hombre, nace para serlo y para
demostrarlo. Así fue Miguel Hernández, puro para amar, Poeta de pueblo y para el
amor, no tenemos absolutamente ninguna duda y sabemos que sus trascendencias
están junto a nosotros desde los jóvenes que admirando y respetando su Obra,
respetan aun su vida.
Como podría no ser así, cuando se sabe que fue un hombre que sufrió en carne propia
el dolor de su pueblo y colocó en cada palabra --ya dicha en verso o en prosa,-- el
propio sufrimiento del pueblo indefenso, haciéndolo suyo, expresándolo en su verso.
Su impronta vive aun en los jóvenes actuales y que hacen de su obra y de su vida un
combate al lado de su pueblo. La palabra, a veces arma en defensa de la razón. Ese es
el caso del peruano Javier Heraud. De Roque Dalton, salvadoreño, cuya expresiva
obra es un reflejo de su actitud ante la vida. Juan Gelman, en él también se aprecia,
como en Miguel su preocupación por los hombres de pueblo lastrados por
inquietudes, derechos y necesidades. Por el reflejo de las raíces autóctonas, la
posición comprometida, la fuerza de su voz, la agudeza y el fino lirismo de su
poesía, decimos que hay grandes huellas de Miguel en la Obra de la chilena Violeta
Parra.
Tanta vigencia hay en su palabra, que desde Machado a Blas de Otero, lo prueba una
vieja verdad, (muchas veces olvidada) y cito: “El gran decir lirico conquista sus
mejores logros cuando recoge con hondura y lealtad, la voz del pueblo en que nace,
siempre que la virtud creadora ande a nivel del sentir colectivo” fin de la cita...
(La guerra civil española, ofreció por su calado histórico una muestra cabal de esta
afirmación.)
Machado, Lorca, Alberti, León Felipe, Pedro Galfi, Rejano, y Miguel Hernández,
son testimonios pugnaces de lo español, reconociéndose a Miguel, como un poeta,
encarnizadamente español. Validos ejemplos patentizan lo dicho.
Su Obra “Nanas de la Cebolla” El niño Yuntero” que han sido musicalizados y
difundidos ampliamente ya por cantantes españoles de la talla de Ana Belén, Juan
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 399
Mil poemas a Miguel Hernández
Manuel Serrat, y otros muchos cantantes de otras tierras, conservan su autentica y
extraordinaria vigencia por constituir un grito redentor en la vida del hombre y a
favor de su integridad social.
Cerramos con la vigencia en la palabra de Miguel, cuando expresaba a Neruda su
criterio sobre la actitud de un poeta veamos cuando decía: “Te recuerdo en esa
tierra tuya, luchando con tu voz” M.H.
O cuando definiera a Vicente Aleixandre: “Los poetas somos viento de pueblo,
nacemos para pasar soplando a través de sus poros, y conducir sus ojos y
sentimientos hacia las cumbres mas altas”. M.H.
“Para El Encuentro Con Dios”
¿Digo José Marín? ¡! Diría.
De quien hablo? ¡! No lo sé!
Mejor digo: Ramón Sijé
Su mentor, amigo y guía.
De este hombre, aprendería
De letras. –Su verso en pos
de luz, miraba por los
trillos y el sol levantino--.
Y Sijé, trazo el camino
“Para el Encuentro con Dios”
Su escritor nació tan fuerte.
-dijerase, que de pie—
Y luego Ramón Sijé.
Supo enseñarle la suerte.
La poesía divierte
Su corazón a tal sino,
Que lo enmarca hacia el destino
Que además providencial
Logra su completo aval
Para el futuro hernandino.
Viaja a Madrid, balbuciente
su poema, le marca el paso,
Aunque miraba un fracaso
Para su sueño naciente.
Permanece allí, consciente
De su manantial sonoro.
Pero aquel brillo de oro
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 400
Mil poemas a Miguel Hernández
Intelectual ve frustrado,
Y vuelve para el poblado
natal, su amado tesoro.
¡! Ay Orihuela, Orihuela
Es tu poeta. El regreso
Habrá de ser como un beso
Que su espíritu modela!
El desencanto flagela
A tan tierno corazón,
Aunque sigue esa ilusión
De escritor que le atenaza,
Y es entonces que se abraza
Con Dios, y a su religión.
Un nuevo Virgilio. Un Dante
Fueron Ramón y Miguel.
Ya la vida para él
No era extraña ni distante.
Desde ahora en lo adelante
El futuro determina.
Con firmes pasos camina
Enseñando el corazón
Que llega al último hondón
De su sangre alicantina.
Epilogo...
¡!Tanto hacer y tantas penas!.
Tu voz fuerte habla denuncia
Mientras Tu salud anuncia
El colapso de Tus venas.
En prisión te desordenas
¡! Oh, Miguel, con tanto Mundo!.
Y es tu dolor tan profundo
Tan oscuro. Tan final
Que vas quedándote igual
Que un adiós triste, rotundo.
Se que aun moras desde allí
Bajo el cielo alicantino,
A veces, noto tu trino
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 401
Mil poemas a Miguel Hernández
Volar, como un colibrí.
Ojos abiertos, así
Como los hombres honrados.
Abiertos y deslumbrados
Por lo inmenso de tu gloria,
Y por la grandiosa historia
De tus versos no cantados.
¡! Tus ojos miran al cielo.
A la luz, a las estrellas,
Quizás buscando las huellas
Más distantes de tu anhelo!
Tu enfermedad, fue el flagelo
Que te aniquilo la vida.
La que aun sigue retenida
E inmersa entre tus escritos
Porque entre los eruditos
Aun tu esqueleto se anida.
Elaine Vilar Madruga, Cuba
Aquello que llevabas escrito
“No perdono a la muerte enamorada, /
no perdono a la vida desatenta,/
no perdono a la tierra ni a la nada”.
Miguel Hernández.
Llevabas la muerte atada a la mano izquierda;
la vida atada a la derecha.
Un cordel de hierro había escrito en tus espaldas
la palabra:
Poeta.
Un cordel de vidrio había escrito en tus ojos
la palabra:
Hombre.
Un cordel de niebla había escrito en tu garganta:
Árbol.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 402
Mil poemas a Miguel Hernández
En la pared de la cárcel,
-todavíatus manos desnudas:
el signo transfigurado de la tierra.
En el eje del mundo tejí tu nombre
“Porque soy como el árbol talado, que retoño:
porque aún tengo la vida.”
Miguel Hernández
Miguel:
sobre tu nombre duerme la vía láctea,
la cárcel reducida a cero,
la espuela degollada.
Nadie pudo entender seis letras unidas,
la pirotecnia del tiempo
que se acunaba entre ellas
para engendrar diluvios.
Nadie supo entender el motín del espacio,
las dimensiones abriéndose en ti como mandíbulas de acero,
maquinaria de dios,
axis mundi.
Las crines del alfa y el omega fueron peinadas con tu nombre:
el ojo incansable de la lluvia.
Pradma
“La sangre me ha parido y me ha hecho preso(…)/un edificio soy de carne y yeso
que se derriba él mismo y se levanta/ sobre andamios de huesos.”
Miguel Hernández
Sobre andamios de huesos respiras todavía.
Tu cuerpo dentro de los espacios,
la muerte roja, la asfixia de los pulmones
ante la cárcel que silba como una manada.
En el centro de todo: tu cuerpo.
Tu cuerpo: flor. Tu cuerpo: nombre. Tu cuerpo: as de vidrio.
Encima de ti, la muerte había sembrado su nido,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 403
Mil poemas a Miguel Hernández
e incubaba el huevo caliente en tu garganta.
La sangre que te pare es un adiós a la tierra,
olvido remoto,
la última barca entre fusiles y cañones.
Un árbol quiso crecer en tus costillas,
anhelante de tuétano,
y tú le ofreciste tu pulmón, el tajo rojo, la frontera,
cortaste para él la poesía como ramilletes de espadas.
Dentro de ti se cerraba el círculo,
la rueda del Aleph,
el géiser intangible de las dimensiones.
Dentro de ti se cerraba el imán del mundo,
el diente ensangrentado del silencio.
Javier Catalán, Orihuela, Alicante, España
CANCIÓN PASTORIL
A Miguel Hernández
en el centenario de su nacimiento (1910-2010)
Se levantaba a las cuatro de la mañana –comenta su hermana
Encarnación-, y yo, todos los días, le ponía delante el tazón de leche, le
metía el enorme bocadillo en el zurrón y le dejaba luego
Miguel Hernández: Pasiones, cárcel y muerte de un poeta
José Luis Ferris
Envuelto de silencio el nuevo día
desierta transitaba la noche de luna
mas un niño con esmero emprendía
sobre una sierra de luz desnuda
su fiel jornada de pastoreo.
El zurrón acotando su delgada figura
y en su mano de leche una rama de olivo
cercado el firmamento de luminares anhelos
su alma le guiaba presta entre la bruma
redimiendo el frío y de sombras el camino.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 404
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Es la hora de asistir al nacimiento!
-cantaba el alegre pastorcillo-.
La imagen última de la noche relamiendo el alba
justo en aquel instante, cuando la aurora comenzaba
a barnizar con su delicada luz la montaña
y una leyenda de trinos impacientes anunciaba
una nueva eclosión de la mañana
al joven pastorcillo transportaba
al origen mismo de la creación.
¡Es la hora de asistir al nacimiento!
-cantaba el alegre pastorcillo-.
Cautivados todos sus sentidos
embebecido por aquella sublime
arquitectura de imágenes y sonidos
entregado ya y fundido con el majestuoso
acontecer que se revelaba ante sus ojos...
Comenzaban entonces a germinar palabras
que eran como suspiros musicalmente impregnados
por el verde frescor de la mañana.
¡Es la hora de asistir al nacimiento!
-sentía el alegre pastorcillo-.
Y se adentraba en un mar de claridades
bañada de plata y oro la serranía
izando sueños que no entendían de obligaciones
sobre la anchura infinita del nuevo día.
Y de su raído cuaderno ya se elevaban azahares
hacia las cumbres más hermosas
desprendiendo pétalos de mil colores
sobre una tierra complacida y generosa.
¡Es la hora de asistir al nacimiento!
-sentía el alegre pastorcillo-.
Sumido en la armonía de una verdad traviesa
su rebaño se alejaba y se alejaba
hacia terrenos ajenos vedados al pastoreo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 405
Mil poemas a Miguel Hernández
La certeza del viento inundaba la mañana
y el joven pastorcillo, mientras tanto, soñaba
distraído sobre un lecho de amapolas
ungido por la luz del mediodía que llegaba
... Y soñaba.
Y un día soñó que era niño y raíz
de la tierra que con sueños abonaba.
ENTRE REJAS
A Miguel Hernández
Trece rejas fueron de tu cuerpo carceleras
y de tu alma raigambre de su grandeza
forjadas por manos del martillo prisioneras
manos sin esperanza consumidas en su pobreza.
Fuerte y decidida crece la parra entre rejas
enraizada en la tierra que alumbró su vida.
Así se alza de la tierra tu palabra comprometida
y entre rejas se quebró la luz en tus pupilas.
Se ahoga una luz, abierta la noche entre rejas
HABLEN LAS PIEDRAS
A Miguel Hernández
Nunca floreció la razón sobre la piedra
sepultada en el dolor de sus cadenas
malherida por la ignorancia yerma.
De las entrañas de una piedra
se levantan clamores de justicia
enterrada bajo tierra.
Amanecerá un día y la piedra
alzará su frente esculpida de bravura
y dejará de llorar su rocosa amargura.
Florecerá un día la justicia sobre la piedra
regada con el sudor de la esperanza
y beberá sus lágrimas la tierra.
Cuando hablen las piedras
llorarán tus palabras perdidas.
Cuando hablen las piedras
silenciará la oración de la lucha
y gritarán tu nombre sobre la nueva hierba...
cuando hablen las piedras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 406
Mil poemas a Miguel Hernández
Armiris Trujillo Álvarez, Chile
“ YO SOY ”
(a Miguel Hernández)
Si el viento hablara
te diría: “Yo soy el aire
…por quien vives, por quien lloras”
Si la Tierra hablara
te diría: “Tú te mueves donde yo me muevo,
donde yo te acojo, donde tú te meces”
Si el arte hablara
te diría: “Yo soy el paisaje que tú pintas,
la escultura que tú formas,
la poesía que te dicto”
Si te aquietas un instante
escucharás a tu alma decir:
“Yo soy el aire que respiras”
“Yo soy la Tierra que hoya tus pies”
“Yo soy el cuadro que tú plasmas”
”Yo soy el pintor”
“Yo soy el poeta”
“Yo soy el artista”
“Yo soy quien critica”
“Yo soy el mendigo”
… “YO SOY”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 407
Mil poemas a Miguel Hernández
Jack Landes, España
(Sabres, Francia, 1950)
EL OMBLIGO DE EVA OROZCO
Abrazado a tu vientre, ¿quién me lo quitará,
si su fondo titánico da principio a mi carne?
abrazado a tu vientre, que es mi perpetua casa...
Miguel Hernandez.
Dedicado a Miguel y Claudia.
¿Qué es la carne, Miguel, sino tierra o toro?
¿Qué es la carne, Eva, sino pierna o pecado?
Maldije tus piernas, tu vientre y tu vida, pero no pude más que rendirme a la palabra
prohibida. Puse un espejo en tu abdomen, porque todo es confuso menos tu vientre
de plata y presente. Puse un charco de semen en tu ombligo y creció la orquídea de
Venus junto con el coral de tu cerebro y ya nunca fuiste igual a la muchacha
sofocada por el sexo. Puse hielo en tu piel húmeda y el miedo se congeló en la cripta
de tu cuerpo. Tus axilas exhalan un aroma a incienso y los animales se detienen
cuando pasas. Y yo, ebrio de aire, atado a la cola de un equidna, sueño la ebriedad
vertiginosa de un enorme seno que oscurece el cielo y riega el suelo de piedras de
colores negros y amarillos. Antes de entrar en la casa del dolor, sólo una cosa pido:
que florezca la flor blanca del ónice que nunca escribimos. Antes de morir, sólo una
cosa pido: que habite tu vientre la flor del ombligo, porque todo es incierto, baldío y
turbio, menos tu vientre claro y profundo.
Santiago Aguaded Landero, España
VOZ DE LUCIA
A un ángel pelirrojo con perfil de psiquiatra
Y por supuesto a Miguel Hernández
Tener tu mismo sueño.
No te TIERRA seca; no de AIRE frío si se respira; no de FUEGO helado si abrasa,
sino de AGUA fresca. As de la intuición, con la VOZ genital de la mies me
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 408
Mil poemas a Miguel Hernández
desrecomiendas el ingreso en el pabellón del silencio. No reclamo porque me faltan
palabras. Las palabras no saben de ellas misma ni por qué están hechas. Acaso
químicas órficas o fármacos de otras flores consigan sosegar los ínfimos infartos de
mi alma. Fuiste luz/piel en mi lengua no nacido. Eres VOZ del pueblo que ofrece a la
TIERRA su sacudida copa. Y yo no enuncio más que teorías para mendigos
fugitivos. Teorías así deben ser tan inútiles como la más osada cosmología, deben
burlar el imperio de la observación. Pero no tamborilean nuestros ventrículos al
unísono: no tienes forma ni color: sólo un fondo de perfume a etanol.
Extraído del libro “Voz Vencida, 2009”. Ayto de Valdepeñas.
Georgina Herrera, Cuba
Señor Miguel, poeta siempre
Pastor ahora de tantas constelaciones
descarriadas,
conduzca algunas por esa
oscuridad en la que el mundo
muere y cree que vive
Mientras
construyo barcos y convoco
a todos a lo mismo,
Seamos armadores de amor (tanto escasea)
Navegaremos,
ascenderemos
(que se yo) hacia Usted
hasta llenarle el corazón como merece
Ana Mari Madrid, España
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Fueron a parirte entre cabras, bañándote con agua de estrellas arropado en el manto
de prados de verde hierba.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 409
Mil poemas a Miguel Hernández
Que buena maestra es la naturaleza que te llenó de sabiduría, experto en su materia y
entre hojas… que no eran verdes ni amarillas que fueron nacidas blancas y bien
teñidas por… Galán, Miró, Gabriel o zorrilla, alimentaste tu alma con poesía.
Semilla que crece y crece día a día siendo árbol de tu vida, Cervantes, Lope,
Calderón… ramas que guían inspirando al tallo que se enfila en palabras del alma
que tu pluma atrapa en negra tinta, que es la savia que paren benditas líneas entre
versos que son poemas que es poesía.
Frutos primeros que no dudaste lanzarlos al viento, abrazado por la gente de tu
pueblo.
Ilustre en tus años de Ave Maria, joven mozalbete de salmos y cleros quisieron los
Dioses de todos los cielos abrirte caminos, moldeando tus pasos y con rayos de luz te
revelaron buenos maestros, grandes hermanos.
Quien dijera que no fueren amigos si entre críticas estilizaron la textura de tu
pluma…
Alberti, Cernuda y hasta Pablo Neruda, horneando a fuego lento, el pavimento, a
más caminos y senderos. Que fueron malos tiempos aquellos, que estalló en guerra…
cruel tormento.
Republicano y buen soldado apresando la angustia del llanto que no se rinde al látigo
del ego ni al yugo del más perverso.
Cuantas páginas leídas de vida, de dolor, con la espalda pegada al paredón, que fue
tu boca de versos que no se dejó sellar ni con tus más deseados besos… la que te
llevó preso, que fueron muchas las cárceles de España las que vieron desfilar tus
huesos, que fueron sus frías paredes las que lloraron tu tormento.
Te fuiste joven, alma de poeta-cabrero, sin quebrar las alas del pensamiento, volaste
entre espasmos que son muerte… arrancando lágrimas forjadas al yunque de los
lamentos.
Cabeza alta, orgullo bien puesto, te ganaste las alas del coraje… entre las rejas de
tanta cárcel.
VUELA… a tu verde sierra, a tu pueblo…a tu amada, a tu Orihuela, VUELA…
Miguel Hernández, poeta y cabrero, VUELA... a tu cielo que es mi cielo.
Nora Tessier, Uruguay
Para Miguel Poeta
Amante de la vida
jardinero de nardos
y azucenas,
sembrador de palabras,
Miguel, qué lindo nombre el tuyo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 410
Mil poemas a Miguel Hernández
sale de la garganta con suavidad de pluma
mentas los dolores,
también ideales y buenas nuevas.
Cantaste penitas
pero también amores,
un amor tan grande el tuyo,
por el hombre de manos rudas,
por la mujer cazo y semilla,
por el niño brote y arrullo.
Miguel hombre de lucha,
Miguel Hernández
visionario de grito al viento,
poseedor de mil voces
que están ahí, en arenados senderos,
en aventados cultivos,
en manuscritos, en cantos,
en libros de amarillentas hojas
sobadas por mil manos
de nuevos o arrugados ceños,
llorado por mil ojos, soñado
por mí, de ojos abiertos.
Que tus palabras nunca mueran
maestro señero del amor y la cultura.
Mª del Pino Marrero Berbel, España
“…con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello…”
(Miguel Hernández).
Yo no sabía Miguel, yo no sabía.
¡Tanto niño yuntero amarrado a mis páginas!
Mis aparceros todos, mis cabreros,
tus recuerdos, los mío,
nuestras desgracias.
Todo.
Aquella plaza arrastrada de sol,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 411
Mil poemas a Miguel Hernández
aquel hijo –que dicen que era tuyo-,
un hombre ya, mucho mayor que yo
y otras poesías que no tenían sus ojos.
Todo.
Sus ojos ni mis nanas
soñando un arrorró
desde tan lejos,
desde tan lejos.
La camisilla blanca de aquel niño,
el corazón escapado cazando ranas
en las acequias perdidas de las tristezas.
Miguel de mis silencios,
Miguel de mis arterias,
Todo y tanto esparcido y sembrado.
Todo.
Beatriz Belfiore, Argentina
Los poetas
A Miguel Hernández
Cómo imaginar tus largas noches
en penumbras, sin soltar una lágrima.
Cómo concebir la humedad de tus muros,
sin impregnarnos.
Cómo comprender tu lenta agonía,
sin hacer carne el sudor.
Cómo percibir el encierro, sin asfixiarnos.
Cómo no sufrir contigo cada despedida.
Ser parte de tu soledad también
es soportar el hambre y el desamparo.
Hoy queremos acompañarte
en tu negra celda,
cortar los mil barrotes que te cercaron,
entibiarte el alma con poemas…
porque tus palabras, que gritan por libertad,
sobreviven en la prisión
de nuestros propios muros.
Al dejar tu sangre en el papel,
transformaste en victoria las heridas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 412
Mil poemas a Miguel Hernández
Cada vez que el corazón deja de latir,
vive tu poesía.
Allí, dónde no podemos ver la luz,
habitan tus versos.
Cuando las fuerzas amainan,
encontramos tu legado.
Somos hijos de tus letras,
tus lazos, tu descendencia.
Norberto Pannone, Argentina
EL ADIOS DE MIGUEL HERNÁNDEZ
Abriste la ventana para ver los caminos…
Partían amarillas las hojas desclavadas,
y el frío del otoño cargado en negros sinos
te hizo inclinar el rostro de sombras acopladas.
Volviste la mirada…Toda la humana angustia
bañaba tus pupilas de lágrimas ardientes
y aunque la boca estaba de exhalaciones mustia,
sufriste los recuerdos que llegan inclementes.
Y por no abrir los ojos de nuevo hacia el pasado,
ni contemplar las ruinas de tu esperanza muerta,
por ofrecer descanso al pecho atormentado
sacrificado siempre a la ilusión incierta,
dijiste adiós a todo. Con las manos tendidas,
como el símbolo triste de tu triste presencia,
con las manos alzadas, temblantes, doloridas,
pusiste en tu presente el signo de la ausencia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 413
Mil poemas a Miguel Hernández
Coralia Solano Chavarría, Costa Rica
EL PASTORCILLO MIGUEL
Al despertar el alba,
se oye el cortejo de cabras
y el paso seguro
del pastorcillo Miguel
sobre el pasto como alfombra mojada,
por el rocío de la fría madrugada
de la hermosa sierra oriolana.
El tiempo pasa lento
sobre el monte dormido
y la sombra de un árbol
lo encuentra sentado
embelleciendo su alma
con la magia que le dan los libros
de Galán, Miró, Rubén Darío y Zorrilla.
¡Ya escribe como ellos sin ningún problema!
Por la noche al llegar a casa
escondidos en los bolsillos de su pantalón
están escritas sobre un papel
las letras que en el día escribía
el pastorcillo Miguel.
A su padre le disgusta tanta “tontería”,
pero él no sabe todavía,
que el destino de su hijo está escrito
para siempre entre versos de poesía.
EL NICHO NÚMERO MIL NUEVE
En el nicho número mil nueve
del cementerio Nuestra Señora de Alicante,
yace el cadáver del poeta del pueblo,
así lo llamaban quienes lo admiraban.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 414
Mil poemas a Miguel Hernández
A la tumba sin querer se fue
y sus abiertos ojos,
nadie pudo cerrarlos,
extraña rebeldía macabra
por su incomprendida vida.
¡Eran las cinco y veinte de la mañana,
cuando murió Miguel Hernández!
La tuberculosis no le tuvo piedad
y el mundo perdió al muchachón de Orihuela.
Cuentan que exhumaron su cuerpo,
ante la muerte de su hijo
y a la tumba del poeta llegaron sus seguidores ansiosos
a robar su calavera y besar todos sus huesos.
¿Qué misterioso embrujo tenía Miguel y sus letras
que la muchedumbre su esqueleto quería?
Sería acaso la forma hermosa en que el escribía
al amor, a la muerte y la vida.
Letras que entre rejas dejaron en su cuerpo un día,
su mancillada libertad para siempre escondida.
Ana María Sanchis, Argentina
¡AY, MIGUEL!...
¡ Cómo orada profundo, tu verso mi costado!
Y desgarran mi carne, los ecos de tu rima…
Cómo flagela mi alma tu grito desolado,
dejando en mis pesares, las huellas de tu estigma.
Cómo de mis raíces, el dolor enquistado,
hace que al recordar, tus poemas, tu vida,
renazca con más fuerza el bramar de mis genes,
de dignidad, honor y de cabeza altiva.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 415
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Cómo expande su fuego, latiendo en mis entrañas,
toda esa fuerza tuya, de valerosa hombría!
Y el dolor en tus “Nanas” de dientes apretados,
donde a pesar de todo, rescataste armonías.
Cómo golpea mi pecho el yugo de tu “ Niño”
su hambre, su trabajo, y su pena aceptada.
Cómo expande mi alma, tu esperanza que tiñe,
las umbrías paredes de tu casa pintada.
Cómo admiro tu fuerza, tu férrea voluntad,
tus lágrimas, tu grito, tu ternura infinita...
Cómo elevo a los vientos tu estandarte de luz
donde la “ Libertad”, fue tu consigna y guía.
¡No morirá tu esencia, poeta libertario!...
Nuevos miembros crecieron en los troncos talados.
Renacen en tus letras, huellas de tus heridas,
con ejemplos de soles, a pleno, enarbolados.
¡ Ay, Miguel!... Es la historia, la que tu nombre grita,
proclamando a los vientos, tu honrosa valentía.
Mas, que premonitorias tus palabras, “Maestro”,
¡Somos…esas dos piedras, en las cuencas vacías!...
Fidel Hernández Jorge, España
Brisa de vida, viento del pueblo
Las letras de tu puño
se transformaban
en puños combativos,
en pacíficas armas…
Naciste para el dolor,
hombre del pueblo llano.
De palabras, pastor;
a veces, también soldado
con voces que aventaron
tu belicosa garganta,
voces que ilusiones alimentaban
en tan difíciles años…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 416
Mil poemas a Miguel Hernández
Soñaste ser
liberador de yugos,
tal vez, una nueva luna naciente,
en aquella guerra cruel
que enfrentó a dos Españas;
febril noche en que la muerte
arrasó los campos
con una oxidada guadaña.
Fue con gritos
como el corazón escribía
lo que tu pluma resistía.
Fueron carámbanos
tus rabiosas lágrimas,
arrullos encerrados,
flores amargas
en cárceles de palabras.
También la muerte
se enamoró de ti
cuando por tus letras preso
escribías bellos versos
con sabor a hambre,
con alimento de cebolla
para aquel infante,
carne de tu carne.
No pudo la tuberculosis
poner yunta a tu alma,
alma virgen como la de un niño,
potente como la de un joven
que, sin importarle el peligro,
irresponsable se lanza
al descubrir nuevos amores,
tras las nuevas sensaciones
recién estrenadas…
Así eres tú, compañero,…
hoy noble calavera,
ayer, alma de rosa de almendro;
o quizás, sea así como yo te veo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 417
Mil poemas a Miguel Hernández
cuando doy paso del sentimiento
a este dolido recuerdo:
tu vida, brisa delicada;
tu voz, viento del pueblo,
cálida y afable…
Tú, poeta comprometido en la lucha diaria,
tú, el poeta esposo, poeta amante;
tú, poeta en mis entrañas,
Tú, mi poeta,
poeta Miguel Hernández.
Alexander Zosa Cano, Nicaragua
RAPSODIA ANGELICAL
a:Miguel de Hernández.
alguien me llamará
a través de la música
de espíritus celestes
que jerarquía angelical
querube de belleza singular
trozos de vidas
escritas en melodías
querube, querubín
protector celestial
vestido de alazán
de albino traslucido
pero tu aliciente alma
pura
blanca
de cristalizada santidad
bailan los vientos alisios
de olor amapolas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 418
Mil poemas a Miguel Hernández
recién cortadas en invierno
victorioso eterno
escritas en anales de oro
las melodías ojos perdidos
encendidos encuentran sus caminos
leen y escuchan la melodía angelical
sin palabras, imágenes heladas
el misterio de la música
está en la simplicidad
de la eternidad.
danzan las almas
exhalan de su aroma
brillan refulgentes
eternas voces humildes
se escuchan…
oigo esa voz eterna
canto melodía
me llaman las notas
en acordes mayores
garzón iluminado
extraordinario incienso
mirra oro y pan traeré
a tu altar exaltado
coristas que se alzan
al aire jubiloso
poetas que escriben canciones
que son propicios al altar.
pálidas corcheas
zodiacales corren a mí
me atrapan
rapsodia musical
vengo a escuchar
para poder entender
el significado de eternidad.
escarlata la alfombra
donde todos pasaran
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 419
Mil poemas a Miguel Hernández
a encontrar la eternidad
ya estoy yo aquí
¿quién más vendrá donde mi?
la música está en todas partes
escuchar depende solo de ti
escoge tu destino
ven por este camino.
Julio Cuesta Rodríguez, Cuba
A Miguel Hernández
De sangre en sangre vengo
como el mar de ola en ola….
Miguel Hernández
Olas de hierro partieron
tus pedazos de sangre
en trozos de luz
Olas de fuego inyectan
la savia
que nos dejaste al nacer
camino al trago eterno.
Sabe el poema
cuanto hay en el poeta
igual que la amargura
cuanto hay ….
Aquí estoy para vivir
mientras el alma me suene …
palabras tuyas
cociendo las mías
en ti
Y así
como tú
seguiré descongelando brazos
con mis piernas de pueblo
mientras intento
abrir el pecho a rebaños
donde el dolor no sea pan
ni la alegría un desván
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 420
Mil poemas a Miguel Hernández
que se olvida con los anos
ni una costumbre los daños
causados por mal silencio.
Hermano en ti me sentencio
con la armadura de tierra
de tu verso que no entierra
las lágrimas de tu piel
que hoy bebemos como miel
para sanar Nuestra Sierra.
A Miguel desde los Huertos de mi pastoril Gibara
Ondearé luceshuertas
En espacios que no hay nada
Con el fuego de tu espada
Que renace rosas muertas.
Con la gracia de otras puertas
La coraza de tus bríos
Y tu alma forjada en ríos
Vivo en dolores eternos
Libre de males externos
Y cautivo de los míos.
Inmaculada García Haro, España
CONTRADICTORIO SINO
A Miguel Hernández
El rayo no cesó
en su deseo
de camino infinito
sin grilletes.
Contradictorio sino
el que del barro
hizo nombre
y destino carcelario.
Dúo, Alfred Asís, Chile- Nelson Urra, Suecia
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 421
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís
Miguel Hernández
Caminabas por los campos
entre cabras montañesas
Encerrado en la cárcel
te llenabas de extrañezas...
Acudía a ti tu aroma de praderas
de flores imperecederas
y en tu cárcel nauseabunda
tiempos en espera...
Nelson Urra
Vives en la prosa de mis días, tan presente como ayer
Siempre unido al pueblo, poeta pastor, hermano del campo.
Deambulo en las entrañas de la Europa nórdica, y
Tus rastros son eternos mas allá de los Pirineos.
Andalucía tierra mágica me ha dado esperanzas
Y he caminado en sus praderas, buscando tus mensajes.
Querido Hermano, buen Miguel...
Adolfo Ortiz Rodríguez, Ecuador
CANTO A MIGUEL
Hay cierto paralelismo
en nuestras vidas, Miguel,
tú fuiste pastor de cabras
yo campesino también.
Tú aprendiste a escribir
para cantarle a tu pueblo,
mientras que yo, a canturrear
para estar cerca a mi gente.
Antemuro de la nada
la vida te parecía,
en tanto yo, a Dios, le clamo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 422
Mil poemas a Miguel Hernández
para que tumbe los muros
que no nos dejan ver nada.
Si tú naciste de un vientre
desdichado y con pobreza,
yo en cambio, a mi desdicha
la traje antes de nacer.
Luchaste contra el fascismo
que destruyó a tu país,
yo enfrento al imperialismo
que me arrebata el maíz.
Si estando aquí no nos vimos
no fue por falta de tiempo,
sino porque los franquistas
te condenaron a muerte.
Por eso sé que muy pronto
nuestras almas se unirán.
De ese modo lucharemos,
para a este mundo salvar.
Paola Castaño, Colombia
Infancia
El amanecer sorprende
al niño con manos de arena.
Con el corazón intenso
grabado en el papel.
Sorprende el cielo del poema,
la voz derretida.
El amanecer sorprende al cerro,
la lluvia en la piel.
Se desnuda en olas de tristeza,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 423
Mil poemas a Miguel Hernández
en cantos de pincel.
El amanecer sorprende al niño
con manos de arena,
agoniza al cruzar la frontera portuguesa,
se destiñe entre líneas de fuego.
Ma Gloria Carreón Zapata, México
ODA AL POETA DE ORIHUELA
La noche negra te abrazó en su ceno
gélido fue tu destino que careció de luz
mientras como fontana
la Gaya a modo de manantial
fluyó de tu altruista alma.
Hoy, los Eólos de tu pueblo
claman tu bendita presencia
rociados de tu espíritu divino
y como lanzas escupen tus versos
que en su vuelo penetraron
en mi humilde alma de poeta
esparciéndose por todo el planeta.
En lo que Isla Negra, México
y todos tus hermanos los poetas
hacen de tu recuerdo la Oda más perfecta
unidos todos tomados de la mano aun en la distancia.
No nos fue posible alcanzarte,
tal vez en otras lunas
en otros cielos
en otros vuelos el rayo cese
y nuestras almas se unan
a los viejos vientos de nuestros pueblos
y al fin cantemos juntos todos como hermanos
el romancero de nuestras ausencias.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 424
Mil poemas a Miguel Hernández
Iris Miranda, Puerto Rico
Ala violeta
Suya ha sido en la alquimia, la violeta
de un adiós sin abrazo ni aguacero,
un perfumado amor de cometa,
mariposa inadvertida de un sendero
desamor que transmuta
lumbre serena de intensos fuegos
el ácido rocío
en verso de piedras y de olas.
Despierta, ala de los púrpuras,
tallo de cielo, vuelo inesperado
suelo de alas en los labios del amado
y sueñe el pétalo que viaja
y que se posa
y el ala sienta su raíz besada
que es solo un sueño que se aleja
que es solo distancia.
Montserrat Fillol Ferrin, España
Aire
El aire me falta cuando te pienso
exhalando en el monte
el único aliento a hierba y a vida.
Veo la mañana y el lomo plateado de las cosas
y me asalta el recuerdo de tu palabra
caliente y llana para dar cobijo.
El aire me falta desde tu celda de olvido
cuando tu mano quieta no llegaba
ni atisbar la crueldad del animal dormido
que en su extrañeza piso la amapola más bella.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 425
Mil poemas a Miguel Hernández
El aire me falta cuando llegada la tarde
y el día se ha ido sin ti,
y mi amor se queda posado en las manos
a la intemperie y la tormenta de la sinrazón.
El aire me falta cuando te leo
y tan sólo tu recuerdo vuelve como una ola
a llenar el viento y todas las cosas.
Amelia Prieto Piñol, España
A Miguel
¿Dónde quedó aquel pastor?
¿Adónde fueron sus cabras?
Por el monte vagan penando
la ausencia de quien les guiaba.
Dicen que se fue a Madrid,
para mostrar su palabra
para escribirle a la luna
y al compañero del alma.
Escribe, Miguel, escribe
que aún no llega el alba
que marzo jamás llegará
mientras balemos tus cabras.
¡Tanto hay por denunciar!
Tantos "Niños Yunteros"
Tantos hombres de poder.
Llora la huerta tu marcha
gime el mundo entero
la cultura está de duelo
y también la libertad
¡Vuelve, Miguel, vuelve ya!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 426
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Ángel Muñoz, España
MIGUEL HERNÁNDEZ
Del yunque de la tierra naciste
Pastor tragándose la pobreza,
de Orihuela fueron tus suspiros
castrados de culminada escuela.
Los libros fabricaron tu vientre
penetrando letras en tus venas,
por fiebre de la fama poseído
el vado llenó el morral de ideas.
Marchó con sudor de frente esquiva
frágil sueño de conquista deja,
en seca entraña de la memoria
en un Madrid de cultura añeja.
Tus versos de sangre joven
esperaba el martirio en tus letras,
rumiando tú calavera con odio
renaciendo en tumba de la tierra.
Humillados campos reventados
con balas y vil saliva negra,
gritan impotentes en sus rabias
la sangre incurada del poeta.
Quien se negó a doblar sus versos
alimentados en hambre ciega,
en la cárcel su huella mortal yace
en la sombra de la España muerta.
Antonio Ortuño Aguilar, España
EL CENTENARIO DE MIGUEL HERNÁNDEZ
“Mañana no seré yo:
otro será el verdadero…”
Volvía la golondrina a su nido
y reparó en tus ojos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 427
Mil poemas a Miguel Hernández
profundos como el lecho del río,
y abiertos como el mar
donde marzo aventaba tu alma.
“El mar que también elige
puertos donde morir.”
Miguel, aquel día, yo era un bebé de un mes;
y hoy, ya tengo cumplidos -te los traigolos años que te faltaban para cien.
Yo, que he visto tu nombre crecer
y extenderse tus heridas por el orbe.
¡Que, si querían cercarla, tu voz crecía,
se alzaba como un árbol hacia el sol!
Y ahora que el mar ha vuelto al campo donde estuvo,
y en tu fotografía el tiempo está amarillo,
van tus versos camino de la luna.
Y sigues siendo el mismo, aquél, ‘el verdadero’.
Y tu amor se propaga,
pues el poema abierto derrama la savia.
Y es verdad: que “no hay muertos”;
que “todo vive”;
que “todo late y avanza”;
que “no es posible perdernos”;
que “somos plena simiente”;
y que “la muerte ha quedado fecundada”.
Ibas ‘con tres heridas’.
‘La del amor’, sangraba.
‘La de la muerte’, dolía.
Mas, en ‘la de la vida’,
¡crecía la sonrisa!
Sed del mañana tenías,
¡del mañana que alumbra
para saciarla!
Tu ‘corona’ fue ‘querer’;
la mía, también.
Miguel, por el horizonte,
¿tu frente o el alba,
tus ojos o el mar,
tus manos o el viento?
Miguel, en el horizonte,
cada vez más presentes,
el alba, tu frente,
tus ojos, el mar,
tus manos, el viento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 428
Mil poemas a Miguel Hernández
Natalia Lasca, Argentina
Palabras al Viento
De niño andas los campos sembrados, corres y arrías tus cabras.
Quieres crecer impávidamente, y por eso tomas pluma y papel… Y vuelas…
Viajas a tierras lejanas y extrañas, donde tu piel se impregna de elogios,
de frustraciones. Esos tatuajes marcan a fuego tu destino y sellan,
sin querer, tu camino.
Tú sólo recorres tus calles. Sólo y totalmente sólo,
comienzas a amar los libros. En ellos encuentras amigos,
quienes te acompañarán en silencio.
Son tu único refugio, y entre los fríos muros que te albergan,
la noche acecha y se vuelve más oscura y trémula.
Eres el Viento del Pueblo, aire que se derrama como un velo sobre tus hijos.
Tu amor se torna profundo y lejano,
pero envuelve en brasas a tu existencia…
Con tus palabras al viento inspiras poetas que cantan tus versos.
José Amador Ponce Vicencio, Bruselas – Bélgica
Fuerza y almíbar
A: Miguel Hernández
Hermano Miguel luchador intrépido
curioso monarca de los acantilados
cabrero sublime cuidando la noche
arriando las estrellas por parajes luminosos
creciste como yo en medio de la pradera
luciste tus trajes de campesino en los caminos de la vida
escuchaste el canto de las cabras con sus leche de estrellas
tuviste fuerza y combatividad de un campesino divino
tú que arengabas las batallas en plena guerra
fuiste soldado reportero y poeta
mientras sufrías viendo tanta miseria
escuchaste el quejido último de la muerte
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 429
Mil poemas a Miguel Hernández
tú que esquivaste el fuego como espejo sangriento
el invierno era una sombra mojada en medio del miedo
los fuegos de artillería enloquecidos
y tú le cantabas a la tierra sufrida
y el soldado estaba con hambre con sueño y tú le dabas vida
tú fuiste uno de esos valientes que le ganaron a la guerra
seguro que hubieron relámpagos
que alumbraban la devastada tierra
y que ahí caían como rayos de luces los bravos soldados
y tú como un emperador ordenabas las letras
que narraría el fatal relato
en ese vasto rocío tú fuiste una estrella
tu esposa amada luchaba en parajes de soledades por la vida
solo en la mesa pan y cebolla y el canto del hambre
en un doloroso momento perdiste a tu hijo al niño amado
que dejo la triste tierra y a ti te dejo huérfano
no te falto estatura para llegar al edén donde llegan los grandes
y en cada verso que cantaste salieron las golondrinas
que perdieron sus vuelos por amor y las flores se encendieron
cuando estuviste en la cárcel por defender tus ideas
El leñador
A : Miguel Hernández
Para ir en busca de la leña para el hogar amado
debía subir montañas interminables llenas de colores y magia
ahí estaba al lado de una nube sosegada tierna tranquila
respirando aire devorando naturaleza llenándome de cielo
ahí estaba cerca muy cerca del vuelo de los cóndores
que hacían sus nidos en esos roquerías inmensos
en donde su vejez se leía
ahí estaban esos enormes pájaros de pechos negros y su collar dorado
con sus enormes alas de abanico de colores
con el machete en la mano la leña venía mansa
infinitos pájaros me observaban y me cantaban
conejos y liebres me hacían la guardia
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 430
Mil poemas a Miguel Hernández
el follaje de los arbustos invadidos de flores adornaban la faena
los perros escuchan un intruso y están inquietos
ladraban aullaban dolorosos pensativos
el intruso forastero no se mostraba daba pasos sigilosos
y yo preparé mi arma una onda con una piedra ciega
tal vez era un puma o un monstruo por el gemir de los perros
yo le espero armado y sereno
todos mirábamos a los alrededores pájaros perros y cielo
la fiera surge desde las sombras
el cieno que habita en su hocico hierve
pero el felino prefirió partir derrotado con gruñidos ajenos
ya lejos lo vimos asustado y vergonzoso
la faena no la había terminado la leña esperaba
los perros contentos y felices me acarician y me lamen
habíamos pasado todos una prueba de muerte
los pájaros como en una gran fiesta un concierto desataban
el cielo nos pareció más azul y hermoso
un reposo nos merecíamos
un hermoso molle nos brindó acogida
y busqué entre mis aperos mi harina tostada con azúcar
el festín era fabuloso y le dije a los perros
que fueran a buscar un precioso conejo para ellos
el sol nos observaba entre el follaje inmenso de ese gran árbol
un rebaño de cabras y ovejas cantaban a lo lejos
adornando lomas y peñascos un pastor divino las cuidaba
y las ordenaba junto a su perro fiel y maestro
mi aldea estaba allá abajo minúscula como un pequeño cuadro
hermosas y tranquilas vacas de infinitos colores parecían rumiar
los campesinos hurgueteando la tierra encuentran papas y zanahorias
las casitas con su bandera de humo flamean tranquilas
después de entretener el vientre di la orden de partida
los perros en un círculo cerrado cuidaban al amo
los pájaros en alerta nos indicaban los peligros
y una brisa suave nos acompañó a nuestra morada
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 431
Mil poemas a Miguel Hernández
en esos infinitos y angostos caminos
había que ser experto y tomar el correcto
la bajada deliciosa ondulante no nos hacía la vida fácil
y la carga con mis leños muy aferrada a mi espalda
mi madre miraba el cielo
y veía un fino humo de tierra
que cabalgaba montaña abajo
su corazoncito se contentaba
muy pronto sudados y cansados
todos llegamos a las manos de mi madre
que nos esperaba con la mesa servida
unos fríjoles de colores adornan los platos.
Adela Corporaal, Argentina
La imagen que no cesa.
La estridencia de las balas te quitó del camino de regreso,
de la agreste sombra donde tus versos claros
iluminaban el espacio de Orihuela.
Fue el silbo vulnerado
por la imagen de una huella que no era la esperada,
cobardes arremetieron con la paz de tu pueblo,
y fue nana la cebolla del esposo soldado...
Se inclinó la vida en el suspiro sangrante
de tu boca sin palabras, y aun así tu pluma,
la pared de la cárcel,
el papel sucio de alguna envoltura,
tuvieron ese don de ser los bendecidos
con la esa luminaria de cada letra tuya,
de las pequeñas letras que encendían tu ocaso,
sabiendo que te ibas de un mundo atomizado
por balas y cañones, asesinos del pueblo.
Eras simple pastor,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 432
Mil poemas a Miguel Hernández
erudito en las letras,
experto perito en lunas que dio su luz al mundo,
un niño que encontró sus abarcas desiertas cada día seis de enero,
vacías en las ventanas, por donde no pasaba la magia de los reyes,
porque no había otro rey que el infame asesino,
ese que te buscó hasta llevarte a las rejas,
pero no encarcelarte porque tú bien decías,
que no iban a poder encerrar una idea...
Y poblaste su vientre de amor y sementera
y tus hijos murieron,
y murió Josefina, la esposa del poeta,
el trago de tu vida, tan corta, tan escasa, tan llena de futuro,
la vida se apagaba bañándote en tu sangre,
la sangre que esta España reclama todavía,
que reclaman vehementes los poetas del orbe,
porque quien es capaz de matar a un poeta,
se condena al infierno, maldito eternamente,
mientras tu alma, hoy libre, nos inspira inquietante,
y se funde en el verso que a tu memoria se alza,
pues ya no existe olvido que te sepulte, Hernández!.
Perito en lunas, no vayas!
Dónde vas, pastor moreno
si Orihuela es tu camino?
No sabes que atrás dejaste
tus días de campo y cabras,
la paz que tiene la noche
serena cuando le hablas?
Qué es lo que allá te aguarda
para que apures el paso,
para que cambies el verde
de estos hermosos campos,
por el olor a la sangre
donde mueren los soldados?
Qué turbia llega la noche,
el aire te está anunciando
que viene dando la muerte
en tu corazón, su horario,
y que no habrás de eludirla
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 433
Mil poemas a Miguel Hernández
porque te muerde los pasos.
Perito en lunas, no vayas,
quédate junto a los campos
que las estrellas se encienden
para iluminarte acaso,
porque el poeta del pueblo
no debe ser atrapado.
Morirás, Miguel, moreno,
y lo sabes, te ha llamado
ese grito de tu sangre
que no quiere ser esclavo...
Darás todo por España
y España te está llorando
porque sabe que su hijo
sufrirá martirizado.
Luis Weinstein, Chile
Miguel Hernández, pastor del mar.
Pastor Miguel de Orihuela,
Pastor de ovejas y de cabras
Con ondas y silbidos.
Pastor Miguelito,
Pastor del antes ,de Lope .de Cervantes de Rubén,
Pastor de tu entonces ahora , de Juan Ramón y de Miró.,
Pastor del conversarlos con amigos , con Sijé.
Pastor poeta en Madrid,
Pastor poeta con poetas, con Vicente, con Pablo y Federico,
Pastor Poeta en las trincheras.
Pastor poeta en la cárcel.
Pastor poeta ante la muerte.
Pastor perito en lunas adolescentes,
Pastor de la vida de la muerte y del amor,
Pastor del rayo de la integridad que no cesa,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 434
Mil poemas a Miguel Hernández
Pastor que acecha el sentido del ser,
Pastor del viento del compromiso,
Pastor que empuña el alma …
Miguel, Miguelillo, Visenterre , de Orihuela
Poeta de la vida, de la muerte, del amor,
Escribiste en el mar,
Aquel amigo de la arena,
EL pastor que cuida tu amor por Josefina,
Tu dolor por la orfandad de las cebollas de tu hijo.
El mar ,pastor del pueblo de tu ser y de tu ejemplo.
Norma Estuard, Argentina
A TU CANTO INMORTAL -
MIGUEL HERNÁNDEZ
Merodea en la espesa plenitud de la hora
donde amanece el campo con su traje de lirio
tu espíritu cabrero sin dolor ni martirio,
sin prisiones sombrías destejiendo la aurora.
En Orihuela cantan sobre piedra desnuda
tus liricos enjambres de metáfora y rima
porque tu sangre clama engolada y sublima
la venganza del siglo..., que en plenitud...acuda.
¿Que maldición de tiempo, que tiempo y que hora
atrapaba en sus muros a tu lengua sonora
denunciatoria y brava prepotente y oscura..?
Se apagaron los ecos pero en tu pecho aflora
cual guirnalda de luces donde el sol atesora
tu inmortal canto agreste de pastoril bravura.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 435
Mil poemas a Miguel Hernández
Alex Minaya Martínez, Perú
Poemas a Miguel Hernández
Nació Miguel Hernández
Treinta de Octubre de 1910,
un día majestuoso donde la naturaleza
se rinde a los pies del poeta del pueblo.
Cubierto por el resplandor del sol naciente.
Cuna enriquecida por el sendero vestido de arbustos
y animales deslumbrantes que adornan Orihuela.
Una mina de esmeraldas más preciadas que al interior
refugia al grandioso poeta Miguel Hernández.
Creció impactado por la belleza innata de la naturaleza.
Convivió con el alumbrado de los relámpagos
que anunciaban una pronta llovizna.
Con el sonido de los truenos que retumbaba
asustando a los mas débiles.
Corría tras las cabras en medio de las neblinas húmedas.
Oh.. poeta del pueblo del mas allá.
Miguel Hernández de la madre patria.
Que a pesar de las adversidades mostraste
la luz del sendero al mundo.
Con tus mágicos escritos deslumbraste a la naturaleza.
Con tintas de sabiduría y sentimientos del corazón
plasmaste frases en versos extraordinarios.
Sumergido de delirio y ternura cautivaste al soberbio.
Domaste al potro chúcaro
y enamoraste a la doncella más bella
susurrándole al oído poemas de tu inspiración.
El horizonte del Orihuela.
Mina frondosa de perlas de pastizales verdosas.
Cuna de animales melódicos.
Con panorama de cielo cubierto de neblinas
que amenazan con una pronta mangada.
Sitio privilegiado por el nacimiento
de Miguel Hernández icono de la poesía.
Invadido por aroma de hierbas exquisitas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 436
Mil poemas a Miguel Hernández
Amenizado por la música melancólica del atardecer
y amanecer de pajaritos cantores.
Bajo el resplandor de la luna te inspiraste.
Maravillado por el paisaje te hiciste poeta.
El brillo codiciado de las estrellas fue fuente de tu sentir.
Las caídas hondas de lluvias te empaparon de dulzura.
Solo bastó de unos cuantos mágicos años
en el colegio para pulir tu abrumador talento.
Surgiste empapándote de sabiduría de otros escritores.
Cerca a tu jardín de palabras diamantadas recitabas versos.
Nadie podía ocultar, ni callar de la maravilla de tus poemas.
Por lo que comenzaste a adornar semanarios,
diarios, revistas con tus versos.
El eco de tu nombre ya retumbaba,
viajaba a la velocidad del viento con el mismo silbido.
Un tropiezo en la vida
Oh.. Miguel Hernández, ser divino.
Maravilla del mundo de la poesía.
Maestro privilegiado de los adornos literarios.
Hombre de constante lucha en la batalla.
Con la confianza innata impregnada en el ser,
partiste de tu tierra natal Orihuela a Madrid.
Poseído por la fiebre de la fama,
te aventuraste a la conquista de Madrid con un puñado de poemas.
El apoyo de tus paisanos Oriolanos
y el ramo de poemas no vasto para hechizar a los madrileños.
Ahí la valoración y el reconocimiento fueron mezquinos a tu virtud.
La caída del potente rayo en forma de fuego en tu camino,
debilito tus anhelos. Tras la caída,
tus ilusiones quedaron heridas.
Tus sueños a medio camino.
Más no te desboronaste como un cerro frágil y deslizante.
Mantuviste intacto tu travesía.
Solo fue un tropiezo en la vida
por lo que tuviste que retornar a tu tierra natal.
Te internaste en la prodigiosidad de Orihuela.
Cuna que te vio nacer en su resplandor.
Te dio calor cuando tiritabas de frio.
Te proporciono sombrillas de sauces
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 437
Mil poemas a Miguel Hernández
cuando los rayos del sol te impactaban.
Fue fuente de inspiración para tus poemas.
Con la mirada puesta al infinito, al cielo azulino.
Nuevamente iniciaste escribir lluvias de poemas.
Quienes más tarde hipnotizaron a la multitud.
No retornaste con el éxito que soñabas.
Pero llegaste empapado de nuevas ideas.
De experiencias que fortaleció tu semiento de poeta.
Retornaste con la ilusión recargada.
Con más ganas de brillar como las luciérnagas en peligro.
Tras tu viaje aventurera a Madrid.
Tu esfuerzo como poeta esta forjado.
Logrando hacer de las palabras tu fiel compañero.
Tu instrumento de atracción y defensa.
Miguel Hernández el mundo llora tu partida
Caminas vestido de nubes.
El cielo azulino se oscurece.
El rey astro se opaca.
La luna brilla sin cesar.
La brisa del mar se siente cerca.
La neblina se ve nítida.
Los huanchacos corean tu nombre.
Las mariposas adornan tu rostro.
Las rosas esparcen su aroma sobre ti.
La multitud te aclama.
Así la naturaleza se rinde a tus pies. Oh gran poeta.
Pasaste muchas penurias.
Entregaste tu cuerpo en la lucha.
De cuartel en cuartel explorabas el riesgo.
Sufriste por motivos de la vida.
La cárcel fue testigo de tu agonía.
La guerra tu martirio.
Por la fuerza del amor Corriste hacia el altar
de brazos de tu amada Josefina Manresa.
Sin importarte la adversidad.
Poeta,
Como tu mismo disertas lleno de amargura.
Durante el conflicto bélico.
Sigues haciendo turismo por las cárceles con gallardía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 438
Mil poemas a Miguel Hernández
Pero siempre retornaste a tu querido Orihuela,
con libros de poemas como tu fiel compañero.
Al parecer el ser divino.
Te invoco para que le susurres al oído con tus poemas.
Para que cada amanecer sea de júbilo.
Cada atardecer de ternura.
Orihuela te vio nacer también te vio subir al cielo.
En ese momento la naturaleza se silencio.
Por un instante se oscureció.
Con intensos truenos y relámpagos cayeron gotas de lluvia.
Los Oriolanos lloraron sin resignación tu partida.
El mundo te aclamaba en acción de agradecimiento.
Ahora Hernández nos deleitaras con tus poemas desde el cielo.
Alex Castillo, Perú
A MIGUEL HERNANDEZ
“IN MEMORIAN”
El Jarama reflejaba
Tu luminoso canto
Como de Garcilaso
El caudaloso tajo
De tu sonrisa blanca
Perlada
Bullía la ira de
Tu verbo
Tu voz ladraba por
Tus ojos
Como rio surtías
La cavidad y rostro
De tu sed vertida
En el mapa de tu España
Con cruces en el fondo
No hubo mar mas grande
Que tu lloro
Ni cielo tan extenso
Que tu pecho en cinto
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 439
Mil poemas a Miguel Hernández
En el cabía la noche
Estrellada
El poseía tu destino
Muralla y muerte amada
Fueron Garcilaso
Aleixandre Neruda
Faros acendrados
De imponente figura
Tú…Pastor de Orihuela
Combinando talento
Y furia
Te redondeaste
Al maestro superaste
Miguel..
En tener y perder
Resumiste viril
La química del vivir
Sed del número
Rey del universo
Aritmética plena
Que une y destierra
Así suman las horas
Su larga espera
Duermen su noche
Sin mas arenga
Que el tono pálido
De tu muda entrega
Miguel… Hoy duermes
Quién diría que sueñas
Que dormido amenas
El duende de tus penas
Miguel… Y duermes!
Tus párpados vuelan
Besan una alondra
Dibujan el tiempo
Tu angustia
Sin piel ni forma
De tu vaga sombra
Eres polvareda de
Rondas
Descuajas al viento
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 440
Mil poemas a Miguel Hernández
Candente
Tu dentellada mirada
Es súplica alucinada
Al redondo celeste
Lumínico sonido
Azalón
Tu sangre salpicada
Punzó mi arteria
De fría faz terrea
Aleteante fiera
Dióle vida…vida
¡y mas ella fluía!
Mirando las estrellas
Postrado en barro santo
Arrullado de balidos
Concebiste el verbo
De un mundo nuevo
Luego la guerra..
La prisión… su miseria
Violenta
Mataron tu muerte
Sobreviviste una muerte
Ausente
Miguel… No moriste
Tu cadáver fue cadáver
De una vida
Que nunca viviste
La muerte no vino por ti
Ella aprendió a
Vivir en ti
La venciste para
Volver y renacer
En roca y sangre lila
A tu Orihuela querida
Estigma de tu vivir
Sangrar hasta morir
Tu alma yace aun sangrando
¡Eterno miguel!
La muerte quitó
Los grilletes de
Tus brazos…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 441
Mil poemas a Miguel Hernández
Siboney del Rey, Venezuela
MIGUEL EL INDIGNADO
Miguel:
Camarada, hermano, compañero, poeta...
La España que soñaste
con vientos de paz y de libertad,
con soles de justicia y esperanzas,
con estrellas fraternas y solidarias...
¡Ahora un estallido de dolor que embarga!
Ni reyes,
ni gobernantes,
ni políticos,
ni religiosos,
ni don nadie...
¡No hacen nada para salvarla!
Crisis,
miseria,
desempleo,
injusticias,
impotencias...
¡Hacen de las suyas con tu pueblo!
Miguel:
Camarada, hermano, compañero, poeta...
¿Dónde estás, pregunto yo?
¡Un estallido hecho pueblo,
hacen revolución!
¡La revolución de los indignados!
¡Estás ahí, hecho millones
quienes sufren las desgracias de la crisis,
que llevan a tu pueblo a la miseria!
En cada indignado,
veo tu rostro,
veo tu lucha,
veo tus sueños,
veo tu poesía,
siento tu rabia,
siento tu dolor,
siento tu impotencia...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 442
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Porque han hecho del destino de tu pueblo,
una mala jugada!
Miguel:
Camarada, hermano, compañero, poeta...
¡Cuando un pueblo se alza,
la justicia tiembla!
Tu lucha siempre fue buena
y los enemigos de tu patria,
la silenciaron.
¡Tu lucha es la de millones de indignados,
y jamás la acallarán,
porque no se puede jugar con el hambre del pueblo!
Miguel:
Camarada, hermano, compañero, poeta...
¡Los que luchan y mueren por la vida,
no pueden llamarse muertos!
Mónica Siabato, Colombia
Llama de Orihuela
En el rescoldo de otoño
llama nace en Orihuela,
chispa de yunta y arado
avivada con la tierra.
Pastor de ojos abiertos
pobre, de pies al suelo
niño cabras, joven versos
alimentado de sueños.
Diestra sombra extintora
de alas y de poetas
lo alcanza, su voz no calla
aunque su cuerpo encierra.
Desde el negro calabozo
junta letras y deseos
patria libre, digna y justa
destelló en el firmamento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 443
Mil poemas a Miguel Hernández
Teresa Alzate Sanders, Colombia
I
Al poeta Miguel Hernández
Sabías, que a veces en la noche
un diablo de risas y aflicción - invento
de saudades- escarba la piel, nos saca
de un slip y sube hasta un pontífice
a oírle sus celajes, el oscuro amasa
locos aires, graznidos de luna, nube,
diáfanas paredes del orbe.
Sus espadas recorren carne y huesos
por despejar el sendero, al crepúsculo,
en cada poro hibernan frescores
a la intemperie, beben la cicuta de un
texto, su doctrina del adiós irrevocable
devolviéndose como perro al aullido
liebre a la guarida, el salmón en saltos
por rocas, a su pozo de origen y un sol
que lame somnoliento, lunas del corazón
su cofre abierto y cupidos en ansias
de un reposo que no existe.
*
II
Al poeta Miguel Hernández
Te era conocido ese ayer,
marcando una senda inexplicable,
su arco y flecha antojados del
habitual sabor a tierra, sangre
vino, su ejército de agonías,
el agridulce bálsamo al jardín,
encorvando un crujir de esencias,
para que retoñen, cuando
el huracán y tijeras trocen hasta
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 444
Mil poemas a Miguel Hernández
la medula de sus vástagos.
Conocías el ayer que sella al pecho
fucsias del silencio y enciende
la piedra bajo la cual, hormigueros
apilan su banquete invernal y el
espejismo de naranjas en la soga azul
del pendular ayer… labra-raíces
*
III
Al poeta Miguel Hernández
Del lirio florecido
Eras la canción de albas, su afán
al maternal oscuro y el caliente
sueño que gobierna un caos, rojez
ansiosa de vivir continuamente
apagando respiros que definen
o ensucian el paso, la mirada
sin aquello tan cerca y lejano;
reinante ¡todo! en el nada, pleno
de aves, cadenas, fulgor y olvido.
Eras el trigo y piedra de albas
su valor en ascenso al granizo
y losas donde el oriente anuda
tañidos, a la mudez de un Sahara
con una sed del silbo y línea
que bordan el pétreo plumaje
de cuanto sostiene
y desata un orbe; albor
irisando incógnitas
en el relampagueante
abrazo, de su viva efigie
*
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 445
Mil poemas a Miguel Hernández
IV
Al poeta Miguel Hernández
Te ibas entregando el blanco aliciente
al agrio venir y despedida, singular
hombre del sabor a uva, sierpe, acero
encarando múltiples círculos que
nunca envejecían y perdidos
en tan frágiles cosas: la duda del
soslayo, el rielar de espadas,
la hierba del regreso, ataúd, centella
su roce abrasador y entrañable
de líquida claridad, hasta un
nunca jamás, inundado de
agonía y adioses.
V
Al poeta Miguel Hernández
Todo quería ser lo que fue siempre:
alba noche luna, madre de honduras
el suave hermafrodismo de esencia
levedad sumiéndose en la generosa
exaltación de una luz e inspiración
en pausado alear y libres ansias
agigantando el edén del primer
aire, en cabeceos de luna y el
corazón, al sol de su gacela;
¡todo! quería ser lo que fue siempre,
agua madero, yerba que se pierde
y regresa, la simiente redonda
en arrebatos y distancias,
de pulso en pulso descubriendo
su rincón azul al envés de la vida
fundiéndose en nidos de niebla
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 446
Mil poemas a Miguel Hernández
carne, enarenándose por
desplegar del corazón
ese mirar de llanto
siempre a solas
*
VI
Al poeta Miguel Hernández
Cuando ríe la tristeza, de cuanto
inventabas –Miguel del fuego y la nievesubías por un graderío de éter
a desafiar la cumbre enardecida
de innumerables ojos sin alas y la
añoranza de un cielo que teje
augures al cierzo estival
de madreselva, su incansable
brote, rasgando el ámbito
y bandejas de pantano donde
un brillo fugaz, doraba el sucio
herbaje, de ríos y la tierra
*
VII
Al poeta Miguel Hernández
Con un velo de aguasal asciendo
a tu palabra del indómito rubio
su harina y sable desangrados
“netineti “…” tao” el “ainsoph” como
arpas de río, inimaginable ¡UNO!.
La mente alucina de incognitos,
polaridades se fusionan hasta vencer
el desbocado andar al “ nadie sabe ”
que enaltece la paradoja: en la nada
el plétora, corpúsculo y onda de luz
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 447
Mil poemas a Miguel Hernández
que sin ser onda ni corpúsculo ¡ondea!
se hace acceso y salida, bipolar magín
en contemplación, sucediéndose en el
“infinitus continnum” en el cual, tu…yo…
!todo! viene, desde una voz ambivalente,
a ensoñaciones que evitan se decapite, al
insufrible centinela del venado, su arábica
proeza, tras un desfiladero de muertes,
urdiendo la corona del humano i n f i n i r
Juan Salvador Guevara, Bayamo, Cuba
Para saldar deudas
A Miguel Hernández
Sólo esparce más la miseria
esa cruenta guerra, civil dicen
donde no hubo botín alguno
porque España toda perdió
y sobre todo a ti, Miguel
Pastor de tierras altas y duras
poeta de verso áspero
soldado de causa noble
mártir de mazmorra injusta
hombre de eternidad ganada
Apenas 31 años, y te nos vas
poca edad para partir así
¡no!, ni siquiera…
a reunirte con los justos
y asegurarnos la redención
Serrat tendió el puente sólido
por donde pasas más fácil
hecho canción universal
que propicia mayor cercanía
mejor atención, menos olvido
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 448
Mil poemas a Miguel Hernández
De esa manera te conocí
antes de leerte como se debe
buceando a pulmón limpio
en lo más profundo de tu verbo
hasta encontrar las perlas
Ese día contraje deudas contigo
y aunque no llegue a alcanzarte
espero empezar a saldarlas
con estas breves palabras
humildes como tu propia vida
José Miguel Junco Ezquerra, España
ISLAS CANARIAS. ESPAÑA.
CARTA IMAGINADA DE NAZIM HIKMET, EL TURCO,
A MIGUEL HERNÁNDEZ, EL ESPAÑOL.
Camarada Miguel: ¿Qué bálsamo desprenden los álamos de España?
¿Cuál es la dimensión de sus raíces?, ¿Te deja sin resuello su fragancia?
¿Cómo es la historia en las calles de España? ¿Se presume, Miguel?
¿Puede uno comprenderla cuando pasea al mediodía?
Y los niños, Miguel, ¿sonríen acaso? ¿Dan un beso a sus padres
antes de anochecer y luego se divierten en sus sueños?
¿Cómo lloran las esposas de los combatientes en tu tierra?
¿Lloran con esperanza, les nace un arco iris detrás de la tristeza?
¿Se escabullen del tedio y del horror y vuelan lejos
como las mariposas de alas verdes que imaginan el aire?
¿Qué gemidos exhala la tierra humedecida de tu patria?
¿Lo recuerdas Miguel, te asomas más allá de los barrotes?
¿Cómo cantan los pájaros de España? ¿esperan a posarse,
o simplemente en vuelo ejercitan las cuerdas para luego?
Si tu hijo y el mío se encuentran una tarde aquí en Turquía
o allí, en tu hermosa patria, ¿sabrán por qué no viven ya sus padres?
¿Se abrazarán, Miguel, sin conocerse, porque tira la sangre de poeta?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 449
Mil poemas a Miguel Hernández
Buena suerte Miguel, mi hermano en la desdicha y en los sueños.
No olvides referirme la textura que tienen las hojas de los álamos,
los sueños de los niños españoles, las alas verdes de las mariposas,
el canto de los pájaros, y cómo va la historia por la calle.
Cuídate de esa tos que yo me cubro de noche el corazón.
Isabel Diez Serrano, España
DE NANAS Y SOLDADOS
A Miguel Hernández
De pastor empezaste en la cañada
con tus rimas, cual silbo vulnerado
ignorando el final que te esperaba,
que un hombre, solo sabe del pasado.
Aprendiste de nanas y soldados,
de hambre, de locura y poesía
y andabas con tus versos al costado
lejos, en la trinchera muda y fría.
Un amor te esperaba y a tu hijo
acunabas dolor en los papeles
y ese amor, y esa madre, en su cobijo
la cebolla trocaba en cascabeles.
Te esperábamos todos mas no pudo
el destino fatal, torcer su espada,
te quedaste, Miguel y España anduvo
con su camisa yerma, desgajada.
No te inquietes, soldado, tu palabra
queda escrita en las venas de la historia
y poetas que somos, nuestra entraña
te ha esculpido por siempre en la memoria.
Para Miguel Hernández
Desde Monte Abantos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 450
Mil poemas a Miguel Hernández
EL ECO DE TU VOZ
Porque fuiste, Miguel, fiel a ti mismo
buscabas el saber y, en Orihuela
te faltaba el espacio y compañía
de grandes de las letras, - los que amabas-.
Llegaste como nube con tus versos al aire
para tocar el cielo la yema de tus dedos
y darnos tus canciones de “silbo vulnerado”.
Le cantabas al pueblo, le cantabas
y un rayo te partió de parte a parte
en plena juventud, maduro el verso.
Adónde fue tu Poesía, amigo
tus amores, tus nanas y tus hijos
si en la trinchera solo había muerte
tan helados tus huesos, tus pulmones
de sangre de hombre bueno y amoroso
presto para los dioses con tu salinidad.
Ese mar y ese fuego que traías
lo volcaste mas te cortaron alas
siendo la cárcel el último castillo
que vieron ya tus ojos maniatados.
La tierra sigue igual y el espacio es el mismo,
los poetas cantamos para sobrevivir
y luchamos por dentro con el sable envainado
porque somos pacíficos y amamos nuestro polen.
Nuestra espada es la pluma y a veces se nos hiela
de tanto picoteo en los jardines del alma.
Recordamos Miguel, tu fiel hombría,
tu palabra encendida y elocuente
y hasta el Abantos ha llegado el eco
de tu voz que no acaba
y aún cabalgas a lomos de la patria.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 451
Mil poemas a Miguel Hernández
Eloísa Echeverría. Chile
Tu fértil tierra
De Orihuela fértil tierra que cobijó tu mirada despierta y ágil
es tu materia natural que crece de vida repleta cada vez más.
Corren tus letras y se cobijan en el semblante alegre
de tu preñez de versos, preparados para eternizarse
en las semblanzas de los tiempos que te elevan,
llueven plácidas entre los campos fecundos de tu tierra.
Del cielo fulguroso que te abrazó, te recreo, en mi visión lejana,
en este presente en que te encuentro y descubro
declamando tus versos al aire que te envolvía para crear.
Tierra y viento de Alicante tus senderos tapizaron para volar...
Miguel, en la joya que dejaste, inmortal es tu versar,
Miguel Hernández, ahora tus ojos habitan el universo,
ojos elípticos, desarmando las constelaciones,
no se confunden en otras miradas,
son tus ojos señeros coloreando tu ingenio.
En el fugaz instante de tu paso por la vida
quedó plasmada en la palabra que pastoreaste como a tus cabras,
como a tus lunas, como a tus rayos enquistados hasta en el alma.
Que del barro que te sentiste han brotado flores fragantes de alquimia perfecta.
No sé las vertientes cristalinas en la que estás sentado ahora versando
sólo sé que por acá no hay silencio de tus estrofas,
no hay olvido rastrero viviendo entre tus hijos que prosperan ...
No llueve en los senderos que dejaste para recordarte
sólo hay mensajes fértiles que acompañan.
Prematuro vuelo de tu cuerpo a la eternidad
que te regaló a cambio inmortalidad en tu viajar bravío
y que no se cerraron al partir tus ojos ni tu pluma que navegan,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 452
Mil poemas a Miguel Hernández
que se hacen tus ojos faros en las palabras,
que se duplican en cada verso dejado,
en cada estrofa tallada por tu estilo verás
y de tu lucha genuina de poeta del pueblo.
Viento nortino en tus sandalias,
frescas tierras que dejaron en ti tiempos de inspiración eterna.
Semilla.
Tus versos encadenados de tierra y pueblo
de amor y desdicha en tu caminar
surgieron con hambre de quedarse vivos eternamente
amarrados al tiempo para poder danzar
con la melodía del cosmos;
Versos verbales que florecieron
en medio de los entes que veías a tu lado circular…
En esos cuatro años de encierro en que confinaron,
tu cuerpo más no tus versos,
en esos besos alados volaron eternos
para plasmarse vida, amaneceres tersos,
en esos años Miguel se gestó la médula de tu huracán..
La lejanía en ti es brisa que se queda
y penetra firme en la cimiente,
quédate en medio, entre los vientos
sandalias de tus pies versátiles, de buena corriente,
céfiros que circunvalan tu ausencia
que es presencia en tu palabra dibujada a fuego
en los valles que cobijaron tu cuerpo cuando se durmió
como quien despertará luego
del sueño que las quebradas te tejieron de naturaleza única..
Tus versos enlazados en la retina de la tierra
en el vaivén de tu Alicante que meció tus quimeras
montaña, mar fervoroso de ilusiones y esperas,
quieto en tu pasear, gigante en tu versar,
Miguel, en este punto aislado tu voz canta en mis esferas
que se nutren de tu lucha y entrega.
Tu semilla germina como ciclón de palabras navegantes.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 453
Mil poemas a Miguel Hernández
Descubrirte.
Descubrirte en el viento de Alicante dibujando versos en tu vuelo
muy lejos del suelo que cobijó tu semblante de garboso talante.
Que de oscuridad fue tu canto revestido pero ahora en luz has renacido
cultivador del terruño que almidonó tus juegos infantiles,
que fermentó tus sueños gentiles de mejores días para vivir.
Descubrirte, descubrirte tierra, descubrirte llanto, viento, canto,
descubrirte vida, engendrando ilusión, cabalgando el verso que la aurora sopla
fustigando la copla, eclosionando en luminiscencia tus pasos vehementes.
Miguel, Miguel, descubrirte noble pedazo de encanto,
de tapiz prolífico es tu glosa, de frondosa aureola se cubre tu arenga.
Descubrirte palabra, luz, bríos nuevos en la marcha
que nadie la llene de escarcha del cemento pueril de los endiosados
que se queden callados esta noche, que la luna de tu nombre
todo hombre la observe y el silencio te llame, ¡Grande Poeta!
Miguel Hernández Gilabert
María Isabel Galván Rocha, México
Pastoril
De niño llevaba, en su corazón, sublime verso,
en la campiña, audaz escritor de silencio bucólico,
miraba con profunda emoción, su amado universo.
“Adelante Miguel lleva las ovejas al encierro”
en uno y otro instante, declamaba “Volverán
las oscuras golondrinas” en su propio destierro.
Miró angelical, el poema que llevaba el principio
de su estancia, del aquel labrador en su esencia,
y del toro sombrío que daría, un día, su trapío.
“Ve adelante Miguel, no proscribas tu palabra”
parecía decirle, su padre, en la memoria,
“No esperes de aquel poeta que te encumbra”
Arquitecto sutil de copla en su dolor,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 454
Mil poemas a Miguel Hernández
deslizaba, augusto y perenne su pluma,
el tintero quedaba vacío, pleno de valor.
Joven como eras, llegó tu destino fallido,
sombra y cruces, plétora de tu vida,
y devolviste tu verso, grande y vivido.
Ángel
Parece escucharse tu voz, y sutil exclamo
palabra escondida, se incendia el ocaso
como si irrumpieras pleno el amanecer,
cuando en mis labios se apropia tu verso.
Y llegaste desde el alcázar de la montaña,
relámpago era doncella, el árbol aquel
la figura de trono, briznas del césped
eran suavidad en las coplas de tu hechura.
Cuando mirabas lejos, la estrella vespertina
acercaba su luz, el viento dejaba su hálito,
en las claridades, tu puño entonaba poesía,
nunca frugal, y sí, colmado de sentimiento
Fuiste paladín de tu encomio, joven postura,
pero llegó temprano la hora de tu partida,
el ángel sin alas en los designios de tu vida
y el arcángel de los cielos, en tu tinta y papel.
A MIGUEL HERNÁNDEZ.
A trasluz
Cual soñadores de metamorfosis,
como crisálidas en la indefensión
somos caminantes de nuestra época,
a trasluz, se revela una ventana, millones,
allí liberados de extravíos, y sin miedos.
Ocultos, en la oscuridad propia,
las paredes son muros de abrigo,
de las sombras de la noche, requiebra
a trasluz, apenas luz tenue de luna,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 455
Mil poemas a Miguel Hernández
entre las marismas de la tormenta.
A la lluvia, socorre nuestro techo,
de la fría aspereza se mira a trasluz,
fugitivos de la entonación del trueno,
los murmullos disímiles de la jungla,
corren al parejo del oído, y sobresaltan.
Temerosos, a trasluz, de los sofocos,
andantes del sendero, entre las rejas,
en los linderos acechan cazadores,
la cruel fiera en desbandada delante,
a la mirada furtiva, desespera el acoso.
Una sombrilla se presta, a seguir en trasluz,
así escondemos el cuerpo de las caricias,
de los brillos de sol, de las gotas y suspiros,
de otras miradas, de nuestras premuras,
liviana sensación, revelada complejidad.
Walter J. Navas, EE.UU
Mi Luz
(El Poeta Libre)
Mi luz siempre estará por encima de cualquier sombra
Vuelo alto como un águila con la nobleza de una alondra
Soy más que un simple reflejo de una juventud que nunca me dejo ser viejo
Por ser más fuerte que esos malos pensamientos que agobian
No fueron mis sombras las que me encerraron en aquella prisión
Los necios no soportaban tanta luz que cayó desde lo más alto del cielo
Aterricé el 30 de Octubre en Orihuela, un alicante, valenciano,
Español de corazón.
Nací conociendo los azules del cielo y los verdes del campo
Recorrí tantos lugares buscando sueños como si estuviese descalzo
Busque nortes con ilusiones grandes siendo un noble pastor
Conocí de cerca lo salado del mar como probar la sal de mi sudor.
Camine libre junto a esa libertad que andan los vientos de montaña
Conocí tantos lugares remotos que desde lejos se extraña
Ese aliento, ese silencio, esa calma, esa paz que de día y noche descansa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 456
Mil poemas a Miguel Hernández
Todo por buscar un sueño por alcanzar esa luna que tanto amo y amaba.
Así como conocí mi luz, conocí las tempestades que amargan
Aquellas que quisieron tumbarme y a mi luz apagarla
Por eso fui de corazón muy noble, muy honesto un tanto sincero, un guerrero
No necesite mascaras en mi cara porque siempre la lave con aguas de cascadas
Mi luz fuerte como el sol iluminada como la luna
Y libre como el viento hecho una fortuna.
Mi Luz
(El poeta en la cárcel)
Tantos caminos que recorrí ahora conozco son solo cuatro paredes
Una iglesia la cual yo rezaba ahora mi templo es un infierno
Trato de ver la luna cada vez que me trasladan, mi sol es un invierno
Busco el aire que respiraba esas dulces brisas de montaña
Mis pulmones respiran solo el olor de la pólvora y madera quemada.
El sol que aun puede entrar por la ventana ya no me quema
Me mantengo con mis poesías viviendo solo fantasías
Fantasías que me mantienen vivo como soñador enamoradizo
De esta vida tan bella y a veces tan ingrata pero a la final es vida
Esa vida que muchas veces me sonreía.
Mi luz no es como la de un bombillo cualquiera, es tenaz
Por eso no me quito la vida la fuerza de un fal
Cuando me fui no cerré los ojos porque seguí viendo esa luz
Mi luz es verdad aquella que siempre se quiere mostrar así el sol quieran tapar.
La vida me hizo ser un poeta para escribir lo bello que puede ser la vida
Escribir lo que siente mi alma de noche y a veces de día
De tantos vientos de pueblo que me trajeron, hoy me llevan
Hoy sigo volando como buen soñador así sea encerrado entre rejas
Enamoradizo donde todo era y podrá seguir siendo azul
Donde volaran las aves hasta donde estas tu.
Oh amada mía! hoy descansas junto a nuestros hijos a mi lado
Luz más fuerte que el de las estrellas junto a la luna
A tu lado juntos lo dos brillaremos como estrellas ningunas
Nuestras almas más livianas que una pluma y suaves como la ceda
Mi luz infinita aunque en vida tocarte yo no pueda
Interactuamos con el viento como bellas luciérnagas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 457
Mil poemas a Miguel Hernández
Salma Hassan (Sandra Gutiérrez Alvez) Uruguay
Como tu poesía
A Miguel Hernández
Amplia como los campos de tu mente,
en tu niñez, plena a cielo abierto,
sobre las escabrosas sierras
surgió tu libertad y es tu memoria.
Curtido el pensamiento al aire puro,
entre las injusticias vistas y vividas,
la música del canto de los pájaros,
el andar de las cabras, los cencerros…
Los libros , los poetas,
el paso de las páginas cóncavas de luz,
convexas y lejanas,
guiadoras como estrellas en cielo de verano,
concibieron las rimas de tus versos primos.
Y se fundió tu voz con sangre nueva,
en los amaneceres de Orihuela.
Hoy, rendida ante tu poesía,
para florecer de ti, abierta, vasta, liberada,
e izar tu nombre en la lejanía, cóncava de luz,
convexa y plana del tiempo geográficamente muerto…
leo tu voz: Miguel Hernández.
Poeta del pueblo, hombre, pastor y mártir.
Grande entre los grandes.
De libertad perenne…sin rejas en los labios.
De mente vasta como el cielo abierto
y limpia como manantial profundo…
como las alas que burlaron tu muerte,
eterna, como tu poesía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 458
Mil poemas a Miguel Hernández
Homero Carvalho Oliva, Bolivia
Preguntas
¿Qué se camina cuando se camina?
¿Se camina el sendero o lo que imaginamos del camino?
¿No será el camino que desanda nuestros pasos?
¿El azar también se llama camino?
¿El camino de Antonio Machado será la distancia entre el alma y el cuerpo?
¿Sería el camino el rayo que habitaba al poeta Miguel Hernández?
¿Será cierto que en el camino la conversación resucita a los muertos?
¿Nos llevaremos los caminos cuando partamos al mundo otro?
Abelardo Venegas, Chile
Al Poeta del pueblo.
Me embarqué contigo
en la aventura de Isla Negra,
en busca de la esencia
del gran capitán,
mi querido Alfred
Escalé contigo las altas cumbres
del macizo cordillerano
tras el cóndor de los Andes,
más allá de Trujillo
y ahora sigo tus pasos
por lóbregas cárceles hispanas,
intentando encontrar
al hijo de Orihuela
y sacarlo a la luz universal.
Tu peregrinaje es el mío,
vecino de Pablo y Nicanor,
pues, me considero
un moderno Sancho Panza
a la diestra de un Quijote soñador.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 459
Mil poemas a Miguel Hernández
LAS 4 ESTACIONES DEL VIENTO DE ORIHUELA
En primavera
una suave brisa ,
bucólica, pletórica
de reminiscencias poéticas
se deja sentir
a través de la
inmensidad del Levante
y bajando desde Orihuela
baja por sierras y confines
hasta rebotar,
entusiasta, en Alicante.
Es un vientecillo
agradable, Impregnado
de estrellas
y con un fuerte aroma,
a naturaleza.
Es un aire incisivo,
inquieto,
ávido de conocimientos,
que vuela por bibliotecas
y se cala en los conventos,
que juega con machos cabríos
y despeina, a los borregos.
En verano,
este airecillo
con ínfulas de viento
se abate con frenesí ,
dejando caer ráfagas
de sentimientos poéticos
sobre el viejo Madrid.
Allí,
adquiere el conocimiento
que prodigan otros vientos
y recorre sus murallas
aprendiendo
y comprendiendo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 460
Mil poemas a Miguel Hernández
El Otoño lo ve pasar
por las estrechas callejuelas
del vetusto Madrid,
por las que convergen
vientos nerudianos
que contribuyen a forjar
su espíritu huracanado.
Ya no es aquel airecillo clásico
el que arremete
sin salirse de su pentagrama.
Es todo un señor torbellino
que se mete donde no lo llaman,
con ímpetu surrealista.
El invierno lo sorprende
nutriéndose con aires de tormenta
y se desplaza con soberbia
por frentes de odio,
pero,
la estructura de este huracán,
no es tan fuerte como su esencia.
Sus arremetidas van minando
la vorágine de su espíritu
y el otrora, bucólico airecillo,
viento clásico
y remolino surrealista,
se desarma abatido
en lóbregos rincones,
destruido casi por completo.
Digo casi, porque,
por la campiña del Levante
y por los muros del viejo Madrid,
aun se percibe
el intento de levantarse,
de una ráfaga
de viento de pueblo
con reminiscencias de lunas.
Quien lo ha visto y quien lo ve,
dice que es el viento de Orihuela,
que va a morir en Alicante.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 461
Mil poemas a Miguel Hernández
Sara Suejen, Cuba
OLVIDO
Nos olvidaron,
estamos en deriva,
ya vivimos el futuro,
maratón de locos,
desafió al universo.
¿Es que esta programado así?
como la vida en la noria,
No nos dejan aprender del pasado,
atados en este presente,
de incertidumbre y miedo,
despegue de lo natural,
confusión,
entre,
lo bello y lo feo,
lo bueno y lo malo,
en el aquí y el allá,
en lo que paso
y pasara
entre un Dios y yo.
Los ojos solo lloran
lo que al corazón
le oprime
Y mi espíritu, ¿por qué llora?
Porque…….(lea de nuevo la primera estrofa)
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 462
Mil poemas a Miguel Hernández
Nina Reis, Brasil
Los cristales de su ausencia
Dedicado a Miguel Hernández
Vino la noche con sus estrellas blancas
para iluminar la casa
mientras parió la mujer
y pálida canta
gime gozosa de dar al mundo
sus entrañas
Por mi culpa
mi culpa
mi grandísima culpa
Le bautizaron Miguel, el arcano
el que habla con los vegetales
con el fuego ardiente de las sonrisas
con el cuerpo y sus pecados e irradia entre los cristales de su ausencia
Lo señores destruyeron el aire
se fortalecieron con sus murallas
arrasaron la tierra de los hombres
y no hubo descanso
Está sólo en la frontera
camaleónica la palabra
desde el vientre de los poemas
Alicante de las palmas
grillos y sapos
luna apolillada
ocaso de espanto
la cerradura en la puerta
la muerte en la puerta
el niño en la muerte:
Manuel Miguel el profanador de las cebollas
Miguel con sus heridas ya no iba a regresar
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 463
Mil poemas a Miguel Hernández
Dúo, Alfred Asís, Chile-Adela Corporaal, Argentina
A Miguel Hernández
Alfred Asís
¡Miguel!
Despierta Miguel...
Ya los gallos han cantado
te esperan los sembrados
las cabras ya se anuncian
y está despejado...
¡Miguel!
Alumbra el sol
la brisa trae el rumor
de una espesa neblina
que asolará tu nación...
¡Miguel!
Siento tu aliento
en esperanzas del pueblo
que claman verdades
en clamores universales,
que atraviesan arrabales
y desde murmullos
se transforman en gritos ancestrales.
Adela Corporaal
Miguel,
que ya viene el tren
con los heridos rugiendo,
y camino al hospital
serás tú parte de ellos...
Miguel,
que vas a morir,
se ha vulnerado tu silbo,
sé que no temes y quiero
que no pierdas el camino.
Miguel!
Allí en los vientos del pueblo
una copla se adelanta:
"ha de morir el poeta, pero su voz no se calla!"
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 464
Mil poemas a Miguel Hernández
Ana Muela Sopeña, España
ESPEJOS DE LA SOMBRA
A Miguel Hernández
Los astros son espejos de la sombra
y la luz sumergida en la memoria
de la niebla ancestral de la galaxia.
Un acento de bruma
cabalga los caballos de la noche
y los hijos del agua
se beben en la arena del desierto
el vino en la casida del amor.
Hay una estrella errante
que busca la canción de terciopelo,
más allá de los límites del mar.
Los labios de la amada
conjugan en las horas melancólicas
la belleza de un mundo de papel,
con el enigma en letras silenciadas.
He de abrigar los libros
en la biblioteca de los pájaros
donde Miguel leía,
en medio de lloviznas interiores,
las palabras urgentes
de libertad desnuda y necesaria.
Quiero ascender a cumbres primigenias,
para rescatar con los poetas
el fuego prometeico del romance
y encontrar en los nombres de las cosas
los símbolos dormidos
que nos lleven por rutas escondidas
junto a Miguel, ya niño,
y sus visiones.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 465
Mil poemas a Miguel Hernández
Nilda Baliño, Argentina
A Miguel Hernández
Intensidad que roza la bravura
de ruiseñor en agónico destello.
No llora, no gime
ni un lamento
sólo duele de amor con alma y canto.
Por qué tanta figura se adormece
y las raíces retuercen las entrañas
del hombre que muriendo clama vida
y desde su tumba
se agiganta.
No lugar para el débil que destila cobardía
ni un verso o elegía en póstumo homenaje.
No guarda la memoria oscuras voces
ni huracanado viento “ceniciento”.
Es un himno al amor entre mil luchas:
la de los hombres, la que carcome los días
por venir, el desarraigo
la huída de un poeta hacia otros valles
donde la herencia enaltece a la montaña.
Y estás allí tú, pastor
yo…mínimo redil
con el cíclico polvo entre mis manos
y el “ lento, rayo lento”
mutando tus palabras
en encanto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 466
Mil poemas a Miguel Hernández
Marlene Denis, Cuba
MIGUEL
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
Miguel Hernández
te llamo Miguel desde la sombra
te llamo Miguel desde el martillo
te llamo en cebollas
y adoquines
cuesta abajo y cuesta arriba
en nanas y réquiem
en manifestación indignada
en trincheras y gloria.
traigo la tos de nicotina y mazmorra
en los pulmones
nuestro aliño verbal en osamentas
sentado sobre los muertos
que empuñan su trozo de alma
hasta el monte del no-olvido.
te llamo Miguel en cada verso
en cada uno Orihuela me descalza
habaneándome
con destreza
planetariamente
entre mirlos y yuntas
-que no soy bueyhembra de toro embisto en romerías y pancartas
desde la diáspora terrible
y te escribo un poema:
mil poemas Miguel
que te incorporan a la tropa del pueblo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 467
Mil poemas a Miguel Hernández
Nadir Silveira Dias, Brasil
DE PASTOR A POETA
Para Miguel Hernández
Nascido no povoado de
Orihuela, em Alicante,
Valencia, na moura Espanha
Viu-se logo o pastor de ovelhas
Envolvido com a lírica de seus versos.
Ouvindo, lendo, atento, estudando
Tornou-se o Poeta do Povo
Captando e traduzindo anseios
A que tantos aturdia e aturde hoje
Em suas andanças e devaneios.
A lua, estrelas, a chuva, esforço e
Mais esforços lhe fazem autodidata
E deixa-se tomar pelo encanto da
Reluzente Madrid em sua ascensão
Para o estrelato dos poetas.
Republicano depois prisioneiro
Por debacle da frente republicana
Vai circulando pelas prisões
Até ver-se consumido entre
Dores, dores, hemorragias e dores.
Sua lírica permanece como
Herança de todo ser poético
Sentimental, desde quando
Tudo era azul, ou quando
Sorria com ofegante tristeza.
Teus alvores, Miguel Hernández,
Fazem Luz, fazem esperança,
Fazem luzir a certeza de que tudo
Que se faz com empenho, esforço,
Gera resultados, gera bem-querença!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 468
Mil poemas a Miguel Hernández
Gera Amor! Nesta singela lembrança!
O POETA E OS DISCURSOS
Para Miguel Hernández
No caminho não esqueço
De quem já fez seu andar
Seu conquistado trabalho
Na ânsia de progredir.
Nessas horas vem a mente
Os poetas que ainda hoje
São usados nos discursos
Mais lindos e exitosos.
Por que representam luz
A quem antes não as viu
Sirva-nos, pois, também
A luz de Miguel Hernández!
01.09.2012 - 17h43min
INSPIRE-SE NO POETA!
Para Miguel Hernández
Tenho dito, tenho dito,
Que poeta não é mago
Mas não fica desobrigado
De bem fazer a verdade.
E praticar coisas boas
Para bem forrar as bases
Que fazem o seu andar
Na jornada a que se sujeita.
Fique firme, fique firme,
Poeta, e nunca pratique o mal
O mal faz insanidade somente
Nunca conduz ao que é bom.
Caso alguma dúvida tiver,
Não tenha medo, recorra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 469
Mil poemas a Miguel Hernández
À memória de quem já fez bem
E fará igual ou melhor.
Entre tantos e tantos, lembre
Miguel Hernández, o Poeta do Povo,
Que tanto por ele lutou,
Inspira ainda hoje e inspirará amanhã!
01.09.2012 - 18h00min
LUTA É PERCURSO
Para Miguel Hernández
Ao espargir a sua luz
No caminhante luzir
Miguel Hernández nos mostra
A importância de viver
Com determinação e firmeza
No cultivo das ideias
No seu constante fazer
Para nunca perecer
Esquecido no caminho
Pois o caminho é percurso
A que ninguém é permitido
Não ir adiante na luta
Do que é preciso fazer
Siga, pois, Miguel Hernández!
Luzindo, fazendo-se de
Farol para mostrar o caminho
Para quem procura fazer
E perseguir ideais!
01.09.2012 - 17h38min
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 470
Mil poemas a Miguel Hernández
Julian Marcos Coello Cabrera, España
Murmuran que hablo muy poco
alma los que nada saben
de nuestros largos coloquios.
M. Hernández
Dedicado:
a Miguel, a tu luz clara
a tus versos puros
a tu infinito pensar
a tu humanidad
a tu eterna libertad.
…el campesino y yo
tenemos por reloj:
la aguja es la gran sombra
de un peñasco que brota con pasión;
la esfera todo el monte,
el tic-tac, la canción
de las cigarras bárbaras,
y la cuerda la luz… ¡Espléndido reloj!
¡Pero solo señala puntualmente
las horas, en los días que hace sol!
M. Hernández
Publicado en 2003 fue mi primer homenaje al viento de su aliento, aventando un
poema inacabado.
CABRERO POETA
En Orihuela, tu pueblo que no es el mío,
nació un aliento puro y sincero,
una voz renovadora,
un hombre de manantial fresco,
versos claros y temas humanos.
Cabrero poeta,
entre olivos y almendros
pasabas tu tiempo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 471
Mil poemas a Miguel Hernández
Pequeño hidalgo de lo natural,
juglar de nuestro tiempo.
Embriagados de tus perfumes
de acacia, jazmines y azahar
Ya te buscabas.
Vida, católica y Ramón Sigé.
Neruda, Alexander, revolución.
Balanza de la libertad.
Simplemente admiración por una poesía nuestra, de la tierra,
del viento que yergue el tronco
de nuestro olivo que ensancha la lengua castellana
y de sentimientos nada falto.
Elevando la presencia de lo bello,
palabras y versos.
Historias de un encuentro,
teatro y cuentos.
Tus cartas, puro estremecimiento,
tu vida y tus versos.
I
Aventuras del pasado recorren mil líneas del viento,
rozo la diversidad pero el sentir siempre vivo.
Un pequeño ser empieza a descubrir palabras que, juntas, podían expresar esas
cataratas de versos que nadie veía, pegándolas, encadenadas, besándose,
acariciándose, soñadas, sentidas…
Tu vida, tu Amor, tu Muerte.
Tu cuerpo y alma saltan, de tus ojos manan gotas de lluvia venidas del país de los
sentimientos.
Estremecerse, arrugarse, locura, pasiones abrazadas a la tristeza llegará al más
involuntario descubrir de sensaciones de expresividad y sentir.
Junto con la melancolía disgregaba absorto en trances, sentir dolor, placer, pena,
pasión.
Descubriendo a cada día un sentir ahogado por la opresión de la vida. Descubriendo
la lucha por canciones y versos,
llamada de libertad.
El sueño de la lucha solidaria
del igualdad del vivir
del ideal libertario.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 472
Mil poemas a Miguel Hernández
Viendo como tu inagotable legado se apagaba, tu luz clara del amanecer, tus versos
de montaña, tus poemas de llamada.
La injusticia te hizo amar la libertad, llamamiento a la humanidad con tus poemas
aventando la tierra, el trigo, los campos.
Olores de lo natural hechos sensibilidad.
Lenguaje innato nacido de tu ser. Tus pasiones.
La lectura tu primera `pasión,
el lenguaje tu razón
el amor te hizo soñador,
la vida te hizo poeta.
Tu primer viaje con corazón
con tus versos y ardor.
La libertad te hizo gritar.
II
Conociste plumas con honor, pocos te dieron una flor,
leyendo tus versos con admiración de un sencillo cabrero
con voz del campo y alma de poeta.
Poco dinero y mucha ilusión, Madrid se abre ante ti.
Escritores, poetas, gentes de letras y cambios.
¡Quieres estar!
Suspiras en cada encuentro, quieres absorber como aprendiz
La sabiduría, ideas y poemas de hombres letrados,
¡tú admirando, ellos con admiración!
Algunos apoyaron tus versos dieron convicción a tu persona,
dijeron, escribieron animándote a continuar.
Tu afán de aprendizaje te hizo conocedor de clásicos y
contemporáneos. A una generación les escribes cartas
con admiración, algunas sin contestación.
Tus manos frías siguen desflorando paisajes de poesía,
alimentando con caldo de esperanza.
Tus cartas sufridas de pasión, tus amigos, tu amor, tu tierra,
tu sol, tu higuera, tu almendro en flor.
Tu esencia de gladiador hace emerger bellos poemas de la tierra
y el pueblo.
Las manos, el sudor, la humildad de los más frágiles,
(en tus propias carnes sentida)
estallan en tu cuerpo de poeta.
Descubriste la solidaridad, compartiste el compañerismo,
hombro con hombro, mano con mano.
Ideologías distintas pero juntas por la misma razón,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 473
Mil poemas a Miguel Hernández
un pensar, un fin todos a uno.
Hermanados por la misma voluntad, por el libre albedrío
luchando por la libertad.
Defendiendo a tu mujer, tu hijo, la voluntad del pueblo.
Con tus versos, implicándote con tu trabajo, tú presencia.
Tu destino es ser poeta del pueblo y de la tierra.
¡Tú ser!
III
Cavaste zanjas aventando con una radio y tu voz, leyendo
tus poemas en alto a la camaradería abrazadas de roció,
defendiendo la voluntad llamada ilusión (anhelo).
Preservar la elección libre del pueblo.
Sin olvidar tus amigos, tu familia, tus nuevos compañeros
De otros países, otras regiones.
Camaradas que vienen y van. ¡Tristes almas! Que regresan
de la batalla (mañana) de uno y otro lado. ¡La desesperanza!
Proteger la libertad democráticamente ganada
Siendo lícita la voluntad y honrada la intención.
Aunque el entendimiento pocas veces se lleva la palma.
Noche reveladora que intuías al alba que tu persona estaba
amenazada, al mediodía te prendieron por tu reloj al venderlo.
Empezó tu tránsito en Portugal, de prisión en prisión siendo el
aliento para tu corazón las cartas de tu amor.
Entre visitas y apelaciones de esperanza los meses pasan,
sigues emocionando con palabras y versos, los barrotes no cercaron
tu alma de poeta. Callada, silenciosa la enfermedad te acecha.
Tu vida talada, tu amor y tu hijo separados. ¡Tu flanco herido!
Expresando enalteciendo la vida, el amor y al dolor, a veces con
papel de letrinas escribiendo algunas de las mejores poesías.
Con más dulzura, que melodía. ¡Lirismo pura algarabía!
Agravándose tu enfermedad sigue tu autenticidad
aunque la muerte te aguarde, a su espacio con honor saldrás.
Incompleto queda tu legado, ¡Puro sentimiento!
No era tu momento y tus ojos quedaron abiertos.
Un arco iris de metáforas
Envuelta en la luz de la ausencia,
que disperse tu presencia
que se esparzan los olores, que alimenten la esperanza
en los valles, en los campos, en las ciudades,
quedan tus palabras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 474
Mil poemas a Miguel Hernández
IV
ENERO
Enero, blanco gélido,
con tu calzado cabrero
dejas libre tú pluma,
extendiendo tu mano encallada,
miras la vereda junto al limón de siesta.
La tinta huele a azahar,
y tu mirada rompe en flor.
El alma evadida por las letras.
Tu presencia estalla en el rebaño.
Sin darte cuenta alguna oveja se escapa.
Escribías un poema
empiezas a escribir
empiezas a sentir
Vida, Amor y Muerte.
Delirios de pasión
pensamientos en flor.
Tu natural, tu libre emoción,
descargando en las gentes pasión.
Alma libre, vuelo hermoso.
Encerrado y enfermo, sigues escribiendo,
emoción que traspasa barrotes.
Versos lleno de vida.
Poemas llenos de amor,
dejando en el aire pasión.
V
FEBRERO
Febrero, puro invierno
con su relente y tus versos,
salías cabrero poeta
pastor de palabras,
cabrero de versos,
rebaño a rebaño,
hacías un verso.
Sentías un poema.
tiernas caricias
de tus montes,
elevados tus olores:
azahar, jazmín,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 475
Mil poemas a Miguel Hernández
expresión de colores.
Enaltecen tus hermosas palabras.
Por encima de tus montañas,
más voz que tus cabras,
miras al alba.
¡ Ya te buscabas¡
Dulce vida, naciste
eternas caricias, amaste
aliento sin viento, muerte.
Este rústico reloj que marca
tus versos con el Sol,
llenos de Vida y Amor.
VI
MARZO
Marzo, dulce marzo,
barbecho en los campos
flor en los almendros
y en tus manos versos.
Vienes y vas por los montes,
por los prados, libros y un cuaderno.
Embriagados sueños de amor,
dulce deseo de pasión.
Tu eres la noche, esposa.
Yo soy el mediodía.
Mujer amada, mujer soñada,
negro pelo, blanca piel.
Ojos de garza, alma de mar.
Morena de altas torres.
Unión del naranjo en flor,
perfume de amor.
Marzo con su guadaña, tiene prisa,
enamorada de tus débiles huesos,
de tu herida alma de tu alma herida.
Con toda su honradez,
con toda su tristeza,
con todo su amor
con toda su poesía.
Marzo, viene marzo engalanado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 476
Mil poemas a Miguel Hernández
VII
ABRIL
Abril, lloroso abril
mes de amor, eterna pasión.
Color, olor, sabor,
abril lleno de gusto y dolor (amor),
abril, me llamo abril
como las lluvias, con el trigo
con el Sol, el limonero en flor.
Llamándote a gritos van los versos,
sientes y describes tu vida, tu tierra.
Sueñas con escribir y escribes.
Devoras en las noches oscuras,
libros de clásicos y poetas.
Hueles la belleza del alma,
sientes la fragancia de las palabras.
Verdad y Luna despejas.
Andas por los montes con esperanza,
por que tus versos lo causan.
Pueblo y Poeta dieron fe a tu existencia.
Pueblo como viento que alimenta,
poeta tu forma de vivir,
pueblo, poeta, viento.
Vida, Amor y Muerte.
Poeta del viento.
VIII
MAYO
Mayo oloroso, mayo florido
mayo lluvioso, tormentoso
granizo, Sol y arco iris.
Montañas llenas de luz.
Reverdece el campo y el amor.
El día más corto,
romance más intenso
Sol brilla, encarnando tu piel
dulce rosada de pasión.
Mayo, exquisita noche estrellada,
liberaste el néctar de la luna,
aventaste la brisa de la noche,
gritabas al alba
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 477
Mil poemas a Miguel Hernández
tu afán de poesía (poeta).
Tu melancolía es alimento y agonía
para tu alma de poeta,
enalteciendo la vida
tierra a tierra, viento a viento.
Orgía de sentimientos descifras,
tormenta de versos, ciego y loco,
rebosan poemas por tus poros,
estallando en la punta de tus dedos,
descansando en tu cuaderno,
de cabrero.
IX
JUNIO
Junio, templado estival,
dulce Sol, tierno de noche,
en medio te encuentras,
en las cimas de tu pueblo
ordeñas una cabra,
escribes un sueño.
Junio de tormentas
nubes y lluvia,
desciendes por la ladera
de tu trashumar en la montaña.
Junio y la noche,
fuego y tierra
dulce noche de danza,
sortilegio y alabanzas.
Noche de San Juan
saltan y bailan, noche de fuego
junto a la higuera lujuria.
Estruendo de luz llena el cielo,
colores y formas, iluminan junio
al final un trueno se pierde en la noche.
Solsticio de verano, noche lunar
noche que llama al tiempo,
viento que llama a tus versos,
recorren nuestro tiempo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 478
Mil poemas a Miguel Hernández
X
JULIO
Julio veraniego, sudor
recorres metro a metro,
transitas palmo a palmo,
tierra, hierba, parcela.
Julio bajo el Sol
cielo azul y despejado.
Sudas la desigualdad,
tu piel se vuelve morena,
tus manos surcos de labor,
tu alma en la vereda.
Deja que tu semilla se esparza.
Deja que el color,
olor de tu tierra,
troten por nuestros campos,
anidando la esperanza de tus versos,
entre montañas y vientos,
entre surcos y lamentos.
Llevas al pueblo
comedias y versos,
esperanza y arte
a los cuatro vientos,
a la eterna libertad,
y haz camino, a otra tierra y cuenta,
elevando la libertad a cada paso. (en cada arado)
XI
AGOSTO
Agosto, calurosa noche,
tierna mirada.
Mirando a la luna
me despejó el alma.
Dormir una noche estrellada,
sinfonía nocturna,
vergel de sueños,
esperanza de luna llena.
Me desperté en un estallido
de colores de lluvia,
esparcido por las flores,
en los árboles un arco de luz
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 479
Mil poemas a Miguel Hernández
y entre las hojas rayos de vida.
Me estremece tu voz.
Lloro por dentro,
al llamamiento de tus versos,
por no saber
expresar toda tu pasión
a la vida, al amor y muerte.
Absorto y admirado,
tus letras me encojen
un llamamiento en el alma.
Palabra a palabra, encadenadas
Rompes el molde.
XII
SEPTIEMBRE
Septiembre, brisa del Norte.
Eres viento del pueblo,
como Poeta y Hombre.
Cabalgando por el sendero de la vida,
indescifrable y cautivo.
Caminas por el despertar de la savia
transitas por el vértice del sufrimiento
encorvado, despliegas alas al viento
entonas la música de la tierra,
árboles centenarios, seres del campo.
Embriagado por tus olores
resbalas por el vértice del sentimiento,
escuchando hojas y lamentos.
Provisto de metáforas
dispones de ternura llevada por la bruma
de la fuerza de tus versos.
Como lecho el viento
balada de libertad,
como tentempié tú esperanza,
intensa como tu prosa,
caricias de un cuento.
Ternura del viento, reduce la amargura
de tu Vida, tu Amor y tu Muerte.
Eres viento, lluvia tierra mojada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 480
Mil poemas a Miguel Hernández
XIII
OCTUBRE
Octubre, triste octubre.
De qué surco germinó tu simiente.
Qué semilla de lirismo
creció en tu mente
natural, tierna, humilde.
De pena de tristeza nostálgico deseo.
Versos de sueños, versos del despertar,
versos de amor, versos de verdad.
Que entiende una flor llamas al amor.
Que oyendo el viento creas un verso,
bautizas a los poetas
que son y siempre serán
vientos del pueblo.
Para recorrer sus calles, sus caminos.
Para hablar de valles, de destinos,
de Poesía, de esperanza,
con un pan en la mano
y libertad en la otra.
Octubre, sus ojos solares
se apagaron, llegó el otoño.
Turbó las mañanas
contra vuestras ventanas.
Se apagó tu simiente,
desgarrado escribió tu alma
lloraron tus manos.
XIV
NOVIEMBRE
Noviembre, frío.
Qué libertad contemplan tus versos
en las montañas detenidas del tiempo.
Destellos de tu alma, envuelta en grama,
cobijado por rocas, la vista en el cielo,
la esperanza en tus versos.
Resonaban en las montañas
tus albarcas desiertas,
tu zurrón pesado de libros,
el cuadernillo lleno de estrofas.
Corriendo al alba
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 481
Mil poemas a Miguel Hernández
degustando los olores del campo.
Alimentado por el viento,
humilde como tu lamento.
Roto, disuelto,
envuelto en sueños,
por tus versos, por tus letras.
Resonaran en las montañas
tu tierra hermana, defiende
la libertad del mañana.
Con tus versos, cuerpo, corazón.
que nostalgia que se extinguiera
la transparencia de tus nuevas palabras
la dignidad a tu persona.
XV
DICIEMBRE
Diciembre, triste diciembre,
tu compañero de tertulias.
Muerte enamorada,
versos de llamada.
Compañero del alma, compañero.
Maestro de sentimientos,
eterno de poesía.
Diciembre, hermano me encontré
como ser humano.
Olor de versos recién hechos
viendo el pan saliendo.
Diciembre, tu y el
Hermanos escribiendo.
Discurre la libertad, viento agazapado
lluvia temprana, llega la mañana.
Se levantan tus brazos
el sol les da en la cara
tus brazos se levantan al cielo
como olivo que crece y crece
madurando tú fruto con el tiempo.
Surco a surco, sol a sol,
verso a verso,
poema a poema
levantas la tierra.
*
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 482
Mil poemas a Miguel Hernández
Me llamo barro aunque Miguel me llame.
Barro es mi profesión y mi destino
que mancha con su lengua cuanto lame.
Soy un triste instrumento del camino.
Soy una lengua dulcemente infame
A los pies que idolatro desplegada.
M. Hernández
Quisiera llegarte siquiera a tus albarcas desiertas
dignificar me con tu entusiasmo, untarme de tu dolor impávido,
tu lenguaje de bosques, tus rimas al campo, tus poemas a la vida.
Leerte es convicción de los sentidos es alboroto del alma.
¡Es gritar en la tierra! ¡Es sentir tus poemas!
MARCOS ARRATS
***********************************
Mario O. Luengo, Chile
“Lo ajusticiaron lentamente”
No disponía de armamento, no.
Solo la pluma y las estrellas.
Enfermo de tuberculosis
Vomitaba versos, escupía metáforas.
Ser libre para morir hacinado
en una celda de Alicante
Una letrina para doscientos,
un vaso de agua cada tres días.
Agua insalubre, servida.
Alimentación casi inexistente.
Dormían unos sobre otros
y al despertar...!OH Dios!
Descubrir que habían dormido
Sobre el cadáver
de algún compañero de celda...
No lo fusilaron...Dijo Neruda
“lo ajusticiaron lentamente”,
Cobardemente...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 483
Mil poemas a Miguel Hernández
Lo mató entre otras enfermedades
la tuberculosis, la represión.
El mismo Hernández lo cuenta:
“Apenas se podía dormir,
Las ratas pasaban sobre nuestros cuerpos
Incluso cagaban sobre nuestras cabezas”
Hacinamiento, padecimientos morales,
Espacio cerrado y hambruna,
le dejaron sin defensas hasta morir
sin necesidad de fusilarlo.
¡ Qué grande España, Mierda, lo mataron
a pausas por ser rojo y los rojos se van al infierno,
pero se equivocaron lo asesinaron
y lo hicieron inmortal”
Poeta de “Dos orígenes”
En los campos de Culimo
Entre valles y montañas
vi. a tu padre pastorear
Silencioso y taciturno
Y a tus sobrinos correr
Cerro arriba, cerro abajo
Con gritos muy guturales
difíciles de entender.
Hijos de campesinos,
Nietos de campesinos
Generación tras generación
por casi siete mil años
pastoreando cabras
Cerro arriba, cerro abajo
Como lo hiciera Miguel
en su Orihuela querida.
Allí nació la leyenda
Humilde, moreno
Curtido por los soles
que dejaba el pastoreo.
Autodidacta guerrero
Poeta “de dos orígenes”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 484
Mil poemas a Miguel Hernández
“Un antes de la leche en su cabeza
Y un presente de ubres en sus manos”.
“Odio la pobreza en que he nacido»-dijo.
Y de esa pobreza se nutrió su prosa,
Sus manos de pastor humilde
Se empaparon de la leche creadora de sus cabras
“Todo era azul delante de aquellos ojos y era
Verde hasta lo entrañable, dorado hasta muy lejos.
Porque el color hallaba su encarnación.
primera dentro de aquellos ojos de frágiles reflejos”.
A Miguel Hernández,
(Recordarlo un deber de la Humanidad.)
De Orihuela vino la prosa,
olor a queso de cabra,
y del penal de Alicante la muerte, hecha canción,
en la voz del pueblo encadenado
¡Cavernarios, el pensamiento no se censura ni se encarcela ni se calla con la cárcel,
ni se mutila con la tortura...
Miguel Hernández desapareció en las mazmorras de Franco
Como muchos de los nuestros en las de Pinochet.
Desde la prisión escribe a la Libertad, escribes a su hijo,
A su Josefina adorada. No quiebran su espíritu los fascistas.
Y en lo peor de su larga agonía, escribe al amor
Tiene bellas palabras para tu primogénito.
–“Bebe indefenso” -le llama.
Dijo Neruda; que recordar a Hernández a plena luz
es un deber de España...yo digo ¡No ...No es un deber
solo España... es un deber de la Humanidad!...
Recordar el asesinato de García Lorca, es un deber de la Humanidad!
Recordar el asesinato de nuestro Víctor Jara, muerto en el Estadio Chile,
Es un deber de la Humanidad!
Recordar a plena luz el asesinato de Jorge Peña Hem,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 485
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Es un deber de la Humanidad!
Estabas Miguel condenado a la sombra
Es nuestro el deber de sacarlo del destierro a que te condenó el fascismo
¡Por su valentía y su martirio, por su prosa y por su ejemplo!...
“Vientos del pueblo me llaman, vientos del pueblo me arrastran me esparcen el
corazón y me avientan la garganta”
Humilde pastor de cabras, nos traes el olor a sal, a suero, a cuajada de queso
fresco...a pasto tierno de tu Orihuela nativa...
En nuestro corazón por siempre!
José Rueda Ardila. Colombia
POEMA A: MIGUEL HERNANDEZ.
PASTORCILLO DE ORIHUELA,
HIJO EJEMPLAR Y POETA,
NACISTE UN TREINTA DE OCTUBRE
DE MIL NOVECIENTOS DIEZ,
TE HIICISTE PASTOR DE CABRAS,
Y CON TU CANTO A VALENCIA,
PREMIARON TU ARTE Y VALOR,
ARTISTA, BARDO Y CANTOR.
INQUIETO, AUDAZ, TEMERARIO,
TE QUERIAS COMER EL TIEMPO,
ERAS LLAMADO TAMBIEN:
“EL HOMBRE QUE DESTERRO
A LAS SOMBRAS” Y TE VIERON,
CRUZAR RAUDO POR CAMINOS,
POR CALLES Y POR SENDEROS,
CON TUS POEMAS SUFRIENDO.
LE PERSIGUEN, COMO A LORCA,
LE SENTENCIAN, POR SER MIEMBRO,
DEL MOVIMIENTO ESCRITOR
DE POETAS DE AQUEL TIEMPO,
Y LE LLEVAN A LA CARCEL,
CON INJUSTICIAS E INCIERTOS,
LE CONDENARON A MUERTE,
INJUSTAMENTE, ESO ES CIERTO.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 486
Mil poemas a Miguel Hernández
DESDE LA CARCEL COMPONE
“LAS NANAS DE LAS CEBOLLAS”
EN ESOS VERSOS LE ENVIA
VALOR Y ALIENTO A SU ESPOSA,
ELLOS SE MUEREN DE HAMBRE,
EL ESTA SOLO Y LE ASOMBRA,
LA INDIFERENCIA Y CRUELDAD
DE LA JUSTICIA QUE ACOSA.
LE CONDENAN FINALMENTE,
A MORIR EN LA MAZMORRA,
EL TIFUS HACE SU AGOSTO,
MANUEL, SE ACERCA LA HORA,
DE BAJAR HASTA LA TUMBA,
CINCO Y TREINTA, ES DE MAÑANA,
EL BARDO MUERE EN LA CARCEL,
LA JUSTICIA LO DECLARA:
YA POST MORTEN…¡¡INOCENTE!!!.
Ernestina Ramírez Escobar, México
Cuando el corazón te sobraba
Hoy sólo tengo ansias
de arrancarme de cuajo el corazón
y ponerlo debajo de un zapato.
Miguel Hernández
Ya no recuerdas Miguel
cuando el corazón te sobraba,
que no estabas para amigos
y sentías solo ansias.
Reverdecía la espina seca
cuando lloraba tu reino
y se descargaba en tu pecho
el desaliento.
No podías con tu estrella
y a la muerte indagabas
en el brillo de navajas
y en el filo de tu hacha.
No encontrabas las tijeras
que con afán rebuscabas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 487
Mil poemas a Miguel Hernández
para cortar el dolor
de lo profundo del alma.
El corazón te sobraba
rebosando en amargura
y querías pisotearlo
con la suela del zapato.
Te sobraba el corazón
cuando escuchabas el llanto
de tu pueblo moribundo,
cuando desfallecientes cantaban
apocalípticos pájaros
y buscando el precipicio
a la vida perdonabas.
¿Ya no recuerdas Miguel
cuando el corazón te sobraba?
Cuando te sientas sobre la muerte
Cuando le cantas al pueblo
sentado sobre la muerte
tu voz retumba en la tierra
y el puño se alza valiente,
cuando le cantas al hambre
el alma se te estremece
con el nudo en la garganta
por la gente que te duele.
La tristeza te ha sentado
sobre la muerte callada
y desfilan a tus ojos
como fondo de batalla
como marchando los huesos
que aún sostienen las entrañas
y que en sus fusiles cargan
la rabia que no les falta,
Cuando le cantas al pueblo
con esa voz enlutada
por héroes que se han ido,
porque no te queda nada,
la muerte te hace la silla
y es el eco en tu tonada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 488
Mil poemas a Miguel Hernández
María Oreto Martínez Sanchis, España
FANTASMAS DEL PASADO
Tus ojos siguen abiertos,
tus ojos están mirando
los fantasmas de este pueblo
hecho cenizas y fango.
Al alborear el día,
se mueven bajo sudarios
que marchan, sin hidalguía,
destino al monte Calvario.
Herederos de un pasado
que vive causando grima
caminan hacia el ocaso
desnudos de bizarría.
Pisotean la memoria
de los hijos que lucharon
por un presente de gloria
y murieron fusilados.
Esbirros son del ayer
que pervive en el recuerdo,
que no tardará en volver
aunque nos infundan miedo.
El pueblo busca un respeto
que no encuentra por doquier
con su cayado derecho
batallará por su ser.
SEGUIDILLA GITANA O REAL EN HONOR DE MIGUEL HERNÁNDEZ
Consejos de hombre ilustre
para la fe
que necesita un pueblo
para crecer.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 489
Mil poemas a Miguel Hernández
Escritor de conciencias,
dibuja un orbe
sereno y satisfecho,
sin un recorte.
Poeta de Orihuela,
salta del nicho.
Batuta de silencios
es tu quejido.
Ármate de paciencia,
poeta ardiente,
para que tu guitarra
no sermonee.
Que no huelan a cura
tus argumentos
para que el pueblo se alce
entre los muertos.
Un pañuelo de enigmas
es este mundo
que gime telarañas
en su conjunto.
Embajador de letras,
pinta poemas
que apaguen el dolor
de nuestras penas.
MIGUEL HERNÁNDEZ: CONDENADO AYER, HÉROE HOY
Miguel Hernández Gilabert nació el 30 de Octubre de 1910 en la hermosa ciudad de
Orihuela (actual Comunidad Valenciana). Fue un niño inquieto, deseoso de saber,
que estudió en el colegio de Santo Domingo, regentado por los jesuitas. Nunca amó
esta escuela, demasiado dictatorial para su gusto, excesivamente rígida. Siempre
prefirió el colegio en el que aprendió sus primeras letras y al que acudió durante
mucho tiempo.
En 1925 abandonó los estudios, ya que el padre prefería que se dedicara a otras
labores como el pastoreo. A pesar de contar con una beca para cursar sus estudios de
Bachillerato, por imposición paterna, tuvo que ser pastor. Ello no impidió, sin
embargo, soñar a Miguel. Entre las ovejas, leía ávidamente y aprendía de los
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 490
Mil poemas a Miguel Hernández
maestros, gracias a los libros prestados por sus amigos. También en la montaña,
mientras ejercía sus labores como pastor, escribió sus primeros poemas basados en el
paisaje que lo rodea: el patio, las cabras, la montaña. Su formación puede
considerarse prácticamente autodidacta.
Llevado por su deseo de triunfar como poeta, viajó a Madrid. En la segunda ocasión
que visitó la capital de España conoció poetas tan importantes como Vicente
Aleixandre y Pablo Neruda, que influiría directamente en su ideología, en su manera
de concebir el mundo, tan diferente de la de su padre.
Miguel Hernández tomó parte activa en la Guerra Civil fraticida que incendió las
tierras de España desde 1936 a 1939. Apoyó al gobierno de la República de
izquierdas, elegido en referéndum por la mayoría del pueblo español. Combatió por
sus ideas, vio morir al primer hijo habido de su matrimonio con Josefina Manresa, su
gran amor. Y, al acabar la guerra, fue encarcelado por sus ideas como muchos de los
españoles. No era él el traidor sino los generales sublevados contra el gobierno
legítimamente elegido. Fue juzgado y condenado a muerte, sentencia que le fue
conmutada por la de treinta años de cárcel. Pero Miguel no era fuerte, había sufrido y
sufría mucho, la comida era muy escasa y acabó enfermando de tuberculosis. Murió
en el penal de Alicante en 1942.
Miguel Hernández nunca fue un traidor, ni a su patria ni a sus ideas. Luchó por ellas
al lado del gobierno legítimo, murió por no someterse.
Fueron muchos los asesinados por sus ideales y porque eran personas de prestigio.
Los intelectuales que apoyaron la República de izquierdas, como Miguel, el médico
Juan Peset Alexandre, fueron condenados a muerte no por ser unos asesinos sino por
ser personas con prestigio, envidiadas por muchos y delatadas por otros, como en el
caso del doctor Peset Alexandre.
Cuando el padre de Miguel Hernández conoció la muerte de su hijo, sólo supo decir:
“Él se lo ha buscado”.
VIDA DE MIGUEL
Entre palmeras y olivos,
entre montañas y cabras,
entre escuelas y colegios
se formó tu justa sombra.
Creció tu corazón libre
entre un rebaño de cabras,
que acompañaba tu estudio
y tu fantasía clara.
Entre pesares vivías
porque tu progenitor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 491
Mil poemas a Miguel Hernández
no daba importancia al credo:
poesía es religión.
Te sentiste abandonado
pero luchó tu tesón
que obtuvo su recompensa
con tus primeros poemas.
*********
Tu vida, mi gran poeta,
me recuerda a mi Miguel,
un gran hombre y mejor padre
que luchó por obtener
el respeto de mi abuelo,
sin saber ¡pobre Miguel!
que la ignorancia del necio
le impediría estudiar.
Con una correa doble
marcaron a mi Miguel
para que nunca insistiera
en lo que nunca iba a ser.
Mi padre cerró la boca
-solo tenía diez años-,
y ya no volvió a la escuela.
Fue un honrado labrador,
pero nunca un ignorante.
Supe que el conocimiento
perfora todas las puertas.
Su mente sabia lo dijo
y yo sigo sus creencias.
********
Para ti, Miguel Hernández,
compongo este poema.
Me recuerdas a mi padre
y a su valiente conciencia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 492
Mil poemas a Miguel Hernández
María Puig Mompart, Perú
INSPIRACIÓN
Hoy me inspiro en tu honor Miguel Hernández
Tú que fuiste hombre luchador
Que anduviste entre rejas diciendo que eras un simple turista
Soy niño y vivo en un cerro,( cerro candela) sueño en un mundo mejor
Me inspiro en tal sueño que en vez de rejas
o en mi caso polvo lo convierto en lindas montañas…
no son de polvos ni piedras ni de simple tierra…
es una bella ladera verde.
Fíjate bien, hombre sin fe
fíjate que el viento que sopla en lo alto de un arenal es virgen,
tiene aroma, tiene vida.
Mundo lleno de diferencias y de clasismo.
Mira bien mundo, yo también veo bello mi hogar
Vivo en lo alto de un cerro, donde ni carros pueden subir
Que lujo, porque no nos puedes intoxicar
Mientras camino entre rocas, me inspiro en ti poeta de buen corazón.
Querido Miguel,
puedo ver el mejor de los paisajes entre las esteras y silos
Veo el mejor de los jardines, entre basura y escombros
Veo lo mejor de las personas
No tengo nada y todo lo comparto
Mi pobreza es mi riqueza y todo lo comparto
No tengo nada y tu me inspiras
Tus poemas me trasladan al mejor de los paraísos
Querido Miguel,
buen Español, como amigos tengo aquí
Desde Catalunya llegaron a mi cerro y conmigo compartieron
El amor entre pobreza es como el turismo entre rejas, lleno de esperanza
Soy niño y también tengo derecho a mi inspiración
y hoy, es un honor compartir contigo
Mi querido Miguel Hernández
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 493
Mil poemas a Miguel Hernández
BARROTES
Barrotes, Cárcel, Oscuridad
Cuerpo y mente presa en vida
No podrás quitarme la vida
Porque la vida es de uno
y cada cual la tiene en su interior
Golpes, insultos, degradación
No importa porque en mi.. Esta la vida
Barrotes oxidados quieres mi vida
No!!!!!! podrás quitármela luchare
Luchare con fuerza y con honor
Me duermo viendo tu sombra
Despierto viendo tu barrera
No importa sigo luchado
Barrotes helados, sin virtud sin vida
Se que pierdo fuerza y tu sigues siempre al frente
Barrotes malditos, apártate, déjame salir
Barrotes helados no importa no me vencerás
Porque el amor y mi fe no dejara de luchar
Enfermo estoy la tuberculosis me mandaste
No!!!!!!! Podrás quitarme la vida
Porque en mi..Esta la vida
Porque el amor y mi fe no dejara de luchar
Blanca Garnica, Cochabamba/Bolivia
ROTURADAS SUS ORILLAS
La luna se hunde
sin auxilio :
miramos de frente
Al volver nos
emergen ríos
de luz
Ay Hernández, ay Miguel
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 494
Mil poemas a Miguel Hernández
Con el alambique
de su garganta
filtran conciertos
los pájaros
la lluvia
Miguel Hernández
La sombra del ave
cruza como una flecha
el mediodía
La sombra del molle
sombrilla quieta:
roturadas sus orillas
las costura temblorosa
Ay Hernández, ay Miguel
Cristales de El Retiro
añejado Alcalá
Las calles
colmenares colmados
Van o retornan
ruedas, rostros y ruegos
Miguel Hernández
Bajo el asfalto de México
no cuaja el lodo
a pesar de los fuegos
y los huesos
Bajo el asfalto de España
cimbran las voces
y a pesar de aquellas botas
se abren ranuras
Ay Hernández, ay Miguel.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 495
Mil poemas a Miguel Hernández
ORIHUELA DESPOJADA
Y los cencerros sangraron
por la boca
del aprisco
El agua
de su garganta
partió el suelo
Orihuela despojada
por los cuchillos
sin mar
Ni las cebollas
ni el hijo
ni la morena colmaron
el hambre seca
Ni la sombra
de un olivo
rajó los muros
Treinta denarios por Cristo
treinta y dos años por él
bajo las botas
Orihuela despojada
de su sol
y tan temprano.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 496
Mil poemas a Miguel Hernández
Ximena Gautier Greve, Chile-Francia
MIGUEL HERNÁNDEZ, POETA MÁRTIR DE ESPAÑA
Eras como mil almas de a un tiempo
Ofrendadas al tiempo de España Republicana,
Cientos de versos atados a la cintura
Gestados en granadas y muertes posibles
Desde el alba del amor ingrato
al deseo de la cúpula injusta.
Miguel Hernández de la agraria
Tierra española dura, seca, despierta,
Castizo canto del duende antiguo
Encerrado en la garganta roja.
En los bordes del tajo del río
Ve, danzan versos como balaceras
Canta el humo de la metralla
Cuelga las vidas de los caídos
Como en guirnaldas despiadadas.
Como mil almas de un solo tiempo eras
Miguel Hernández, de la huerta oroliana
Flor del pasado abierto en la piel
Del ánfora angosta y la voz suave :
En la mirada tu pregunta por la vida
¿Aún te abres verde y perfumado vergel
o te han cubierto las hojas de la muerte ?
La del fusilamiento al que te han destinado
tus esbirros, lacra de tu España amada,
La santa huesuda se inclina y te besa.
Herido de muerte, hermano
Condenado antes del último combate
Poema de la libertad es el hombre,
Insurgente custodio de ley y esperanzas
Corazón gallardo, vírgen de las sierras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 497
Mil poemas a Miguel Hernández
Llegando la noche será la despedida
De Miguel poeta de los pueblos,
Como lágrima triste en la trinchera.
Rabiosa la injusta y dedicada
Al llano señorial acaudalado.
Miguel de la sonrisa desnuda,
Desnudo amor sin tienda ni luna
Sin noche de frío ni goce ardiente
Como parcela prohibida del misterio.
Ximena Gautier Greve
Compuesto en Paris, 18 Agosto 2012.
Brenda Marques Pena, Brasil
Vida de amor al pueblo
Cabrero-poeta, perito en lunas
Tan temprano se convirtió en estrella
Como tantos poetas del siglo pasado
Rompió su vida, a los treinta y uno
La edad de esta poeta que le escribe.
Donde estás no podrás leer estas líneas
Pero niños y niñas respirarán la poesía
De tantos poetas del mundo en tu nombre
Reunidos para hacerte este homenaje.
Cuantos van a conocerte, tantos años después
Amigo de Pablo Neruda en la capital madrileña
Que introdujo en tu vena la poética política.
Donde estás no escucharás nuestras voces
Pero tu poesía siempre será un rayo que no cesa.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 498
Mil poemas a Miguel Hernández
Myriam T. Mena, Argentina
EL MUCHACHO DE ORIHUELA
Epígrafe:
Miguel Hernández Gilabert, nació el 30 de octubre de 1910, en Orihuela, España;
fue segundo hijo de pastores, y escolarizado en Nuestra Sra. De Monserrat, y la
educación primaria en las Escuela del Amor de Dios y el bachillerato en el colegio
Sto. Domingo de Orihuela regentado por los Jesuitas, quienes otorgan una beca que
el padre rechaza cursa después derecho y literatura, y cuidando el rebaño lee y
escribe sus primeros poemas.
El muchacho de Orihuela
segundo de un vientre de madre
las cabras improvisaron calendarios
donde la niñez pastoril
encumbro esa alma de poeta,
de los cantos de la tierra prometida
utopía revertida entre sueños de crianzas
de ganado que impávido e inocente
admiraba la vida
El “ Amor de Dios “ le hendía el camino
puso espíritu jesuita regenteando el destino
más, el progenitor como tronco seco de invierno
rechazo la tibieza de la hojas, y empujo el trozo de
cielo nuevamente hacia el pasto reiterado que
el ganado escueza lentamente
Visito libros y le coloco alas
se escudo en silencio entre prosas,
versos, metáforas y dilemas
libros forjadores de un gran autodidacta
que marcando rumbos signados por la
conciencia cuando la misma comienza a
cortar cadenas inmortales
hacia la libertad de su intrínseca expresión.
***
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 499
Mil poemas a Miguel Hernández
Epígrafe:
En la Biblioteca Pública, la cuál frecuenta muy seguido y forma un improvisado
grupo literario en Orihuelo; a partir de allí, los libros son su principal fuente de
educación convirtiéndose enuna persona totalmente autodidacta. A los 20 años
obtuvo su primer y único premio literario. Realiza distintos trabajos literarios por lo
que conoce a Pablo Neruda. Su poesía se hace más social, mostrando un
compromiso político con los más pobres y desheredados.
EL AUTODIDACTA
Hecho hombre resaltó entre las letras
a costa de capa y espada
de finales interminables de noches desveladas
de juicios dignatarios, disconformes,
recorriendo las calles, y azorando el alma
Fue el austero demócrata de la soledad
donde pájaros internos buscaron la luz
dentro de la oscuridad
doblego incomprensiones y dolores
bautizó inteligencias de maestros de letras
y el entendimiento llegaba a la hora
precisa……
y fue “ Perito en lunas “ porque la
vuelta a la tierra natal sembró el conocimiento
del peregrino que no anda por andar.
Hecho el hombre en su devenir justiciero
pluma, tintero y martillo
la poesía reina autonomía entre toda sociedad
adversa, se nutre de los elementos de la tierra
escupe tinta sobre las huestes de las hojas,
y resucita el cristo, el mesías cargando una cruz
de luces, tal vez en un sombrío alfabeto no reconocido
por esa sociedad que no le extiende su mano,.. tal vez,
por su silvestre condición de poeta iletrado.
***
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 500
Mil poemas a Miguel Hernández
Epígrafe:
Al estallar la guerra civil se alista en el Bando Republicano, pero logra escapar
para casarse con Josefina Manresa, tiene con ella dos hijos; el primero Manuel
Ramón muere a los seis meses, y dedica el poema “ Hijo de la luz y de la sombra “;
el segundo hijo Manuel Miguel a quien dedica las famosas “ Las Nanas de la
Cebolla “. Terminada la guerra y queriendo cruzar la frontera lo intercepta la
policía ,y lo llevan a prisión, y gracias a Pablo Neruda sale de allí sin ser
procesado, pero lo delatan y lo vuelven a aprender, fue juzgado y condenado a
muerte. El obispo de León intercedió para cambiarle la pena de muerte a treinta
años. Allí enfermó de bronquitis, luego de tifus, y se complica con tuberculosis.
Falleció el 28 de marzo de 1942 con 31 años de edad.
CON LOS OJOS ABIERTOS
Con los ojos abiertos miro la vida
con todos los sentidos lo llamó la guerra
cruzo siluetas de vientos y viejas ilusiones
y se cayó trastabillando sus quimeras
cuando “ El hijo de la luz y de las sombras “
detuvo sus pasos por el mundo
y ella; la amada Josefina cobijando al
segundo destino de sangre
tras las rejas impertérritas coartando los
pasos sigilosos de aventuras de libertad
puso en sus manos a las “ Nanas de la Cebolla “,
cuando el hambre le reclamó.
Otro poeta de ojos abiertos…ese que
duerme tras la montaña del oeste
trazó un salvoconducto portador de
esperanzas inconclusas, y el latido se
hizo más fuerte….
sin embargo,……las insistentes rejas
comulgaron con la intolerancia y la
muerte estiró sus garras
y puso la venda en sus ojos sin cerrarlos
para siempre
Su espíritu recorre las aristas de la libertad
se hace puente en la conciencia
donde los ojos podrán ver a su corazón llegar
más allá de su propia muerte cansada de andar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 501
Mil poemas a Miguel Hernández
Denny Noeriht Peñalver Pérez, Venezuela
Sublime y Dócil Dennoe
“ … Ya sabes, hijo mío, cuánto no pude hacer,
ya sabes que para mí, de toda la poesía,
tú eras el fuego azul.
Hoy sobre la tierra pongo mi rostro y te escucho,
te escucho, sangre, música, panal agonizante.
No he visto deslumbradora raza como la tuya,
ni raíces tan duras, ni manos de soldado,
ni he visto nada vivo como tu corazón
quemándose en la púrpura de mi propia bandera…”
Fragmento del poema.
A Miguel Hernández, asesinado en los presidios de España
Autor: Pablo Neruda
Eterno y Excelso Miguel Hernández.
(Poeta y dramaturgo)
1910 - 1942
Naciste un día de otoño, en la humilde y hermosa tierra de Orihuela,
recibiéndote con premura cuando se entero que vendrías.
El cielo se ilumino con su mejor sonrisa,
la tarde te cobijó dedicándote mil caricias,
la noche te festejó con perpetuas estrellas
bajo el hermoso fulgor de una luz de luna llena.
Durante tu hermosa niñez al pastoreo te dedicaste
y a medidas que crecías a tu padre ayudaste.
No es difícil imaginarte corriendo por las colinas
siendo un verdadero festín de alegrías,
seguidos de largos reposos en la fresca hierba,
regocijando toda tu existencia
con los delicados aromas de las flores y el viento de la sierra.
Te imagino en el más sutil de los silencios,
contemplando el inmenso cielo,
recreando en tu impetuoso espíritu un raudal de fantásticos versos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 502
Mil poemas a Miguel Hernández
–¡¡¡Quien pudiese imaginar que en tu corazón indómito
latía una inexplorado mundo de sueños!!!
Sueños, sí señor; sueños que con el pasar del tiempo
se convertirían en la más sublime poesía.
Mil rincones recorriste en tu incesante búsqueda
por los exquisitos libros de los poetas
de tu maravillosa época tales como los que aquí se asoman;
desde San Juan de la Cruz, Gabriel Miro y Virgilio.
Y que podríamos decir de los gozosos días enteros
que pasabas deleitándote con las excelentes letras de grandes autores, quienes sin
hacer presencia física,
se convirtieron en los maestros de tus anhelos;
Miguel de Cervantes, Lope de Vega, Pedro Calderón,
Luis de Góngora y Garcilaso de la Vega,
las extensas lecturas te convirtieron en un excelente poeta.
Como podríamos olvidar una de tus musas,
la pintora Maruja Mallo, fuente de tu plectro
para la creación de tan hermosos sonetos “El rayo que no cesa”,
en tus primaveras en el universo de las letras,
seguidos muchos otros tan perfectos como “Pastoril”,
tu primer poema publicado,
siendo el punto de partida para la fiel amistad
que iniciarías con Pablo Neruda, quien cariñosamente te bautizó
como “El Muchacho de Orihuela” dedicándote un majestuoso poema.
Sin embargo, un día inesperado el infortunio tocó a tu puerta,
por tu irrevocable apasionamiento a la poesía socialista
vislumbrando tu deber hacia las causas de los pobres
y desabrigados de tu patria,
te condujeron a una persecución intensa
donde fuiste cruelmente atrapado y condenado,
pasando de cárcel en cárcel,
desde la ciudad de Sevilla hasta Madrid llegaste.
Aunque estabas tras las rejas jamás tus letras cesaste
y con mayor fervor las afloraste.
De una prisión a otra de Toledo hasta Alicante,
donde la mas cruel enfermedad de aquella época
con tus trágicos días acabasen.
A pesar que la muerte a tan corta edad
arrebató hasta la última gota de tu existencia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 503
Mil poemas a Miguel Hernández
las hermosas creaciones que dejaste
hoy día subsisten manteniéndose en la historias,
aquí nos encontramos conmemorando
tu excelsa e impetuosa vida en el extraordinario mundo de las letras.
Nela Rio, Argentina – Canadá
Homenaje a Miguel Hernández
2012
ZAPATOS VACÍOS
SENTADO SOBRE LOS MUERTOS
Que mi voz suba a los montes
y baje a la tierra y truene,
eso pide mi garganta
desde ahora y desde siempre.
Miguel Hernández – (Viento del pueblo)
Los zapatos vacíos
ya no ríen ni hablan ni sueñan.
Escuché tu propia voz en el lamento,
que sube a los montes y truena
dándole vida a lo zapatos que caminan de tu mano.
La luna redonda de noches apagadas
va quebrando historias, pedacitos de tu voz, Miguel,
y das vida, no olvides, das vida,
ruiseñor de las desdichas,
en la resonante fuerza de tus letras.
DÉJAME DECIRTE, MIGUEL
De pronto, siempre de pronto, una y otra vez
entre tu escritura y mi lectura
el recuerdo está de pie
rayando el horizonte cercado por los troncos,
un ayer interminable, muralla que no enmudece,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 504
Mil poemas a Miguel Hernández
arpa velera,
tus versos rompen el tiempo con verdades.
No habrá silencio, Miguel, que calle tu voz.
Imposible apagar el amanecer de tu letra
poblando la historia con cuerpos clamorosos.
Me pregunto a veces cuál es la orilla de las cosas,
la vida de las hojas, la vagabunda vida de las estaciones,
el original punto del universo,
la historia que hacemos, deshacemos,
me pregunto quién puede perpetuar
todos los minutos de sombras, de miradas,
de buscar letras que se llenen de vida con un verbo
y vuelvo a tus poemas, Miguel.
A TUS ABARCAS, MIGUEL
Por el cinco de enero,
cada enero ponía
mi calzado cabrero
a la ventana fría.
…………………..
Por el cinco de enero,
para el seis, yo quería
que fuera el mundo entero
una juguetería.
Las desiertas abarcas.
Miguel Hernández
Por el cinco de enero, que el cinco de enero
los niños corren,
corren, corren a las ventanas
con sueños de regalos
juguetes veraces.
Y tú, niño Miguel, cada cinco de enero
cada cinco de enero
corriendo a poner tu calzado cabrero
a la ventana
a la ventana
esperanza de niño que tiembla que tiembla
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 505
Mil poemas a Miguel Hernández
mojada de un sol escapando desnudo.
Por el seis de enero, que el seis de enero
los niños corren, corren que corren
los ojos en la mano a buscar a buscar
zapatos nutridos de amor y esperanza.
Por el seis de enero, triste seis de enero
tus abarcas vacías, ¡ah, Miguel, tus abarcas vacías!
niño pobre, pobre niño
ventana olvidada sin siquiera palabras
sin un solo regalo.
¿Sabes que quiero, niño Miguel?
Dejarte un poema, no, mil,
en tus abarcas desiertas, abarcas heladas
por el seis de enero.
Susy Morales Coz, Perú
POEMA INEDITO EN HOMENAJE A MIGUEL HERNANDEZ
Miguel Hernández
trasciende las fronteras
y sus versos llegan a las estrellas
en sus itinerarios a Madrid
un sinfín de sílabas y palabras
hacen hermosos poemas para la eternidad.
Miguel Hernández
tus sonetos y poemas
desfilan entre la bondad
de la verde naturaleza
y la verde esperanza
como un rayo de luz.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 506
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Isla Negra-Chile
“VERSASÍS”
Miguel
luchador incansable
vas al cuartel
con letras y sable
Dejas tu bella tierra
el pan caliente
te espera
muerte.
***
Orihuela
a caballo
hundiendo la espuela
en letras tu ensayo
Cabalgaste cerros y sembrados
huellas y caminos
estaban gastados
amigos.
***
Higuera
fruto maduro
estaba en espera
del pan un mendrugo
Cosecha de las primaveras
explosivas en flores
eran primeras
dolores.
***
Madrid
cárcel espera
después del ardid
se muere tu primavera
Suenan los tenues tambores
cantan los pájaros
tus amores
ácaros.
***
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 507
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel
Neruda amigo
estas con él
dijo, yo te bendigo
En tiempos de guerra
de poetas estelares
la tierra
males.
***
Sonia Nogueira, Brasil
*A Miguel Hernández
Pastor de cabras foi sua infância
No leite a escuma, branco em sabor,
Viveu Hernández em concordância
Entre estrelas, luas, chuva e vigor.
A leitura chegou cedo a suas mãos,
No espírito, a fome inata da poesia,
Embelezou sua vida feita corrimãos,
Ganhou emoção enfeitou a fantasia.
Viveu os clássicos canto e louvor,
A letra deitou na poesia religiosa,
Recita seus versos, anseio de autor.
Em várias revistas deixou sua história.
Na solidão do oásis, teu semblante,
Cobria-se de anseios e nas palavras,
Surgiram versos ao som inebriante,
No sussurro do vento veio e lavras.
* Hernández a fome do Saber
As letras corriam nas veias,
Levando consigo seu calor.
A poesia em Madrid semeia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 508
Mil poemas a Miguel Hernández
A Gazeta Literária com vigor,
Acusa sua presença discreta,
Indiferente os amigos renegam,
Mas a palavra não se descerra,
“Perito em lunas” as letras regam.
No Livro, pela força do prazer,
Nascia sua obra, seu universo,
E vai singrando história e viver,
Lendo poemas moldando o verso.
A fome literária lhe domina
Ao expor “Elegía media del toro”
Sentiu-se celebridade qual sina,
Vivendo toda ânsia em Álvoro.
*Hernández e seu Amor
Nos sonetos o canto a amada,
Lirismo e encanto fazem o canto,
Nos versos todo aurora enraizada,
Revendo emoções e desencanto.
Longe a solidão fez moradia,
Nos versos em desabafo que corrói,
Perturba o momento que fluía,
Talvez um ódio, mito que constrói.
A guerra não podou o seu pensar,
Na luta silenciosa a luz, os versos,
Passando nas batalhas vem casar
Com a amada Josefina seu imerso.
Entre lutas e batalhas incansáveis,
Viveu Hernández lirismo e poema,
Angústia e solidão, dias incansáveis,
O corpo indefeso rendeu-se ao dilema.
Trinta e um anos rápidos em lutas,
Mas infinito na grandeza da leitura,
Deixou nos versos, rimas e disputas
A herança literária força que perdura.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 509
Mil poemas a Miguel Hernández
Joaquín González Sospedra, España
(Una picuda y deslumbrante pena) Miguel Hernández 1910/1942.
A los amores de Miguel Hernández
(Una picuda y deslumbrante pena)
ha cegado mis ojos y mi vida
al conocer segura tu partida
y borrarse tus huellas en la arena.
Oscuridad que aflige mi condena
y acrecienta el dolor de mi alma herida;
que busca en tu recuerdo vana huida
pues toda está por ti de amores llena.
Deja en mí al partir, como consuelo,
el sabor de tu piel y de tu boca
que mitigue mi angustia y mi desvelo.
Y que mi corazón, ígnea roca,
derrita los cristales de ese hielo
Que fueron el sentir de mi alma loca.
Enrique Godoy Durán, Guatemala
A Miguel Hernández
Entre sombras de misterio
por las calles de Orihuela
se escuchan los rezos tristes
y los cantos gregorianos
Miguel Hernández se asoma
desde su cárcel de penas
y al paso de sus quimeras
voces de amor lleva el viento
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 510
Mil poemas a Miguel Hernández
Millares de mariposas
azucenas y gardenias
brotaron del camposanto
cuando escucharon su nombre
Pastor de ovejas y sueños
estás tan cerca y tan lejos
Miguel Hernández, hermano
mil alondras te cantaron
Por las calles de Orihuela
se escuchan los versos tristes
las campanas de los templos
en dobles cantan sus penas
Miguel Hernández, poeta
de brisas y tempestades
te encontramos en el llanto
y en el frescor de la aurora
Miguel Hernández, detente
que el tiempo se ha detenido
en el refugio de un verso
que nos salva del olvido...
Blanca Lilia Mendoza Hidalgo, Guatemala
Sensitivo
A: Miguel Hernández
La naturaleza de seda y diamante
construyó tu alma sensible y audaz
el campo, la vida, la luna brillante
llevaron tu vida en la ruta fugaz
Idilio fragante de luna y ensueño
Azahares puros frente a tu destino
inspiras caminos de los que eres dueño
vive tu presencia y sella tu sino
Palabras el viento recogen tu vida
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 511
Mil poemas a Miguel Hernández
Historia marcada de amargo dolor
Dejaste una huella profunda y herida
Palabras marcadas lluvia de color
Existencia plena de amor a la vida
Inspira tu savia breve honra gentil
Tuyo es el recuerdo huella revivida
En el cielo vive sonrisa sutil.
Olga Lucía Florio, Uruguay
Entre rejas y llanto (a Miguel Hernández)
Despacio, lenta, lentamente
se ha apagado tu voz y tu mirada.
Un desgarro de dolor en tu frente
cayendo una lágrima al polvo llama.
La tristeza ha tocado tu rostro
bajo sombras de rejas y desdichas.
Tu piel y tus manos agrietadas
han clamado en pesada agonía.
Acechando la muerte en tu celda
cual serpiente se arrastra cautelosa
va trepando entre tus pétalos ya marchitos
rodeándote con mirada sigilosa.
Armas, sangre, injusticia y llanto
han cegado el manantial de tu sonrisa.
Más, no han acallado tus versos
que perduran para toda la vida.
Tus letras ascienden libremente
traspasando el tiempo y las fronteras.
Avanzan desplegadas como alas
relumbrando sobre toda la Tierra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 512
Mil poemas a Miguel Hernández
Dúo, Alfred Asís, Chile-José Rueda A. Colombia
Alfred Asís
Miguel
Aspereza de la tierra
¡de tu tierra!
que un día te vio nacer...
Sinfonías en tus campos
transformadas en angustias
elevaron las plegarias
por ti, mi poeta amado...
Eras siembra generosa
de tus letras en estrofas
Niñez estampada en la claridad de la luna
De sol a sol, la frente mojada
De pronto, en sangre bañada
en charcos púrpuras
de hermanos y amada...
José Rueda A.
Grito huracanado,
España no lo escuchó,
su voz se ahogó en el llanto,
sus sueños así volaron,
atrás se quedó el rebaño,
su hogar, amigos y versos,
la justicia llega tarde,
porque dizque ella cojea.
Miguel, Miguel,
alguien te sigue esperando,
bajo este cielo estrellado,
se oye el balar a lo lejos,
y gritos que lleva el viento,
es que Miguel se ha marchado,
y ahora lo llora su pueblo,
y los poetas cantamos
a Miguel en estos versos...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 513
Mil poemas a Miguel Hernández
Mara L. García, Perú
Miguel Hernández
En tus versos descifro tu vida
vate genial,
pastor poeta.
Padeciste con Josefina Manresa
por los hijos queridos,
cuando la muerte y el hambre,
los cubrió de dolor.
De Orihuela viajaste a Madrid
prosiguiendo tus sueños
que te guiarían a la fama,
Junto a Neruda y Aleixandre.
Valiente poeta y soldado,
escribías sin cesar la elegía al
poeta asesinado, García Lorca
y sin importarte las barras
de las prisiones insulsas,
seguías creando tus estrofas,
hasta que te agravaste.
Alicante te recibió en sus brazos
y te arrulló en su lecho,
ese 28 de enero de 1942,
llevaste contigo
el amor de tu amada,
Josefina Manresa,
y dejaste El Rayo que no cesa,
como testimonio de ese amor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 514
Mil poemas a Miguel Hernández
Alpidio Alonso-Grau, Cuba
TONADA SEXTA
Un carnívoro cuchillo
de ala dulce y homicida.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Un carnívoro cuchillo
es lo que han puesto en mi voz.
Crezco en su tajo; soy dos
muertes, su solo estribillo.
Hoja que sostiene el brillo
de hacer más bella mi herida:
del tiempo rotas las bridas,
debe hasta en mi muerte arder
el vuelo que habré de ser
de ala dulce y homicida.
Para encontrar la razón
que guarda mi laberinto
síganme por el instinto:
yo soy mi propia canción.
Tómenme del corazón
que mi corazón no miente.
Júzguenme como el que siente
que casi todo está hecho
si afirmo que de mi pecho
a los hombres hay un puente.
Álvaro Iván Ortegón González, Colombia
MIGUEL HERNÁNDEZ
Pastor de cabras, cantor de rebaños,
de oblonga miseria y profundos versos,
poetizaste el dolor, el amor, el sufrimiento humano
mientras tu alma buscaba la techumbre del cielo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 515
Mil poemas a Miguel Hernández
Con la frágil musa en tus manos de Orihuela,
tomaste rumbo hacia una aurora dulce, inédita,
con la huella de humilde senda en tu voz serena
y el ondulante aroma que perfumó tu incienso.
Antes del odio: vástago del amor y la sencillez.
Antes de la muerte: aventurero del trino campestre.
Poeta de lira estival con partitura signada en verso.
Aún clamas al mundo con tu sombra sempiterna,
y él, escucha tu eco de otrora juventud cegada,
bajo una tarde de abril, con tus cabras ordeñadas.
R. Ascensión Reyes-Elgueta, Chile
EL NIÑO CABRERO.
Meditar junto a su hato de cabras
Invade la quietud del mediodía
Grato se escucha... concierto de cigarras
Una suave brisa refresca sus versos
El pasto seco se ha vuelto dulce
La sombra del árbol cobija su mente.
Hermosa flor distrae su pensamiento
Él la percibe en su mente fecunda
Renace la fe de un horizonte
No teme enfrentar imposibles
Aparta la grosera pereza
Nada lo desviará de las palabras
Donde quiera esté, aprenderá.
El amigo más fiel, un libro en sus manos
Zampoña del niño cabrero, cruel desventura le espera.
LOS MAESTROS DEL SILENCIO.
San Juan de la Cruz, Gabriel Miró,
Paul Verlaine, y Virgilo,
sólidos troncos de savia poética.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 516
Mil poemas a Miguel Hernández
Firme apoyo y el mejor modelo
para aquel muchacho de sueños...
humilde cabrero de Orihuela.
El Canónigo Almarza le abre puertas
de aquel reino de palabras,
santuario de la letras.
Su mente se ha fugado del monte
sus amigos... los libros,
en su interior...los maestros.
Su célebre Elegía a Ramón Sijé
es el inicio de aquel vuelo.
Las musas lo han tomado de su mano
y en el Siglo de Oro encuentra respuesta,
Luis de Góngora la sombra maestra.
Fiel a sus ideales enarbola bandera
por las huestes republicanas.
Su incansable mente trabaja,
escribe...aún en el campo de batalla.
Elije como fiel compañera a Josefina Manresa
y la felicidad lo convierte en padre.
Pero un sino trágico lo persigue...
su primer sueño, Manuel Ramón...
se esfuma en el silencio.
El segundo retoño, Manuel Miguel...
nace en la pobreza,
para él compone “Nanas de la Cebolla”.
Miguel Hernández, aún a destiempo
los poetas reclaman tus inolvidables versos,
en ellos la simpleza denuncia el arte
y el sentimiento hace su propio cause.
CLAVEL DE ESPAÑA
Cautivo y abatido
yace el clavel de España
fríos muros de amargura lo sostienen
su fortaleza se desgrana
En su mente...
aún en desdicha
sus versos esperan la gloria.
Fue un 28 de Marzo
cuando las musas sus ojos cierran
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 517
Mil poemas a Miguel Hernández
y el hálito de sus colinas
llega a darle cordial despedida.
Mientras sus versos
como huérfanos
tras aquellos muros...gimen de dolor.
Gloria del recuerdo....
¡Viva el clavel de España!
que reclamó infatigable
que sostuvo anhelos de justicia.
Sus versos serán un himno
recordando su nombre
y cantarán en su memoria.
Dulce niño de Orihuela
que tan sólo vio la luz
por cortos 31 años
enseñoreado por la tragedia.
Elsa Claro, Cuba
EVOCANDO A MIGUEL HERNÁNDEZ
No hay abarcas oreándose en la ventana.
Tampoco maduraron este año las viñas,
excepto las de la ira, Miguel.
Es tiempo de indignados y suicidas
y hasta el amor, si hay,
se queda, celoso y tristón
encerrado en peligrosas soledades.
Pese a días desamparados, andrajosos,
el viento cruza entre los barrancos,
afilado y certero,
las rosas siguen teniendo espinas
y ese olor a tierra y luna que hechiza.
Es que no hay calma en las almas de pueblo,
mineros erguidos, jóvenes desafiantes,
un nadie sabe cuánto y qué vendrá,
desde donde mismo llegó tu definitivo silencio.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 518
Mil poemas a Miguel Hernández
Sebensuí A.Sánchez, España
Alimentando lluvias
¿Qué más da si del 36 o del 27
si no pudieron cerrar tus ojos después de muerto
para poder seguir observando la injusticia de este viejo,
nuevo y políticamente incorrecto mundo?
Tus libros ardían por los señores de la muerte
pero los pudo salvar el tiempo
y tu vida fue la cárcel de la palabra que se llama Libre.
Hace un año cambiaron la ley que te dejó morir en la prisión.
La rapidez de la justicia es una carretilla cadavérica
y carcomida llevando inocentes muertos
con pasos marciales de buitres dirigiéndola.
Besaron tu cráneo tus admiradores para poder absorber tus ideas,
robaron tus huesos para santuarios particulares
de la poesía cual Monroe de la literatura libertaria.
No sé que decir ante tu muerte:
Alimentaste lluvias y ellos la estercolaron.
Autodidacta, la pobreza no deja estudiar…
cuidando del rebaño, nuestro rebaño.
Agnus Dei
Se reían de ti en los cafés literarios,
esos hombres cultos y supuestamente progresistas….
¡Mirad un cabrero en alpargatas!
Los estiercoliteratos…
Eso sí….El rayo no cesa porque El hombre acecha
En la sombra de lo que eras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 519
Mil poemas a Miguel Hernández
Zhivka Baltadzhieva, Bulgaria/ España
CANCIÓN ÚLTIMA
A Miguel Hernández
¡El hombre, oh, el hombre! La divina criatura.
Qué mísero, y triste, y hermoso, y único, qué mío.
Me traspasa como si fuera la convulsión febril del Universo,
la incertidumbre en persona,
la asfixia de la felicidad, el último adiós de la vida,
un infinito día soleado con los tobillos voladores
de sal y de arena. Irreparablemente frívolo e impostor, y doliente,
peligroso, devoto como perro labrador,
su propio cuerpo atraviesa y no se da cuenta. No se da cuenta.
Y todo él herida sigue hiriendo. Estoy sangrando yo
y te desangro, mi amor, te hiero, seas quien seas en el latido este,
este pulso, esta muerte, gruñido, chapoteo y hervor,
mudez, en donde yo te amo y en sus tormentas
el ensueño me voltea.
¿Dónde termina, me pregunto, este soplo, este respiro
tan inmenso, tan imperceptible?
¿Tan frívola y razonable, tan impostora y sangrante,
peligrosa, la única salvación,
a quien vivo y me arrodillo ante él, de bruces caigo y lo miro
más altiva que la alta nube? ¿Quién es él,
quién soy yo en el azul de las arterias hinchadas?
El ser humano, la cabeza agachada,
en la orilla de las constelaciones raedizas, hecho un ovillo,
un embrión en la matriz de una lágrima escueta,
el que muere, el que aman,
de quien pasan, pasan, pasan. El alucinado.
Bajo el látigo de las ortigas del vacío.
Mortal, enamorado y confuso…
El infinito que irradia ternura
entre estrellas carcomidas y la indolencia acelerada,
entre las rozas, las gramíneas, los limoneros florecidos,
y las higueras, el tomillo, la bardana, los laureles,
entre los tamarindos y las lilas,
que van y vuelven, van y vuelven.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 520
Mil poemas a Miguel Hernández
Mortal, enamorado y confuso…
Y mi amor
se queda sin
vocablos.
***
Живка Балтаджиева
ПОСЛЕДНА ПЕСЕН
На Мигел Ернандес
Човекът, о, човекът!
Колко жалък и колко тъжен и прекрасен, мой единствен,
минава като тръпка, като тъмната тревога на всемира
през кръвта ми,
като задъхване от щастие, като последно сбогом от живота,
един безкраен слънчев ден с летящи глезени от сол и пясък.
Непоправимо лекомислен и измамен, болящ,
опасен, предан като куче,
минава той през собствената си вселена
и не забелязва, не, не забелязва. И целият е изранен,
а продължава да нанася рани.
И изранена съм,
a те ранявам, мили, ти, който и да си, в това туптене, пулсиране,
умиране, ръмжене, рокот
и немота, където те обичам и мечтата в свойта буря ме подмята.
Къде пресеква, питам, тоя дъх, това излъхване
огромно и несетно?
Такава лекомислена и разсъдлива, измамна и кървяща,
и опасна, единствено спасение
и жалка
кого живея и пред него коленича, и падам ничком
и го гледам отвисоко?
Той кой е и коя съм в синевата на набъбналите вени?
Човекът
на брега на ронещите се съзвездия глава отпуснал,
свит на кълбо, свит като ембрион в утробата на своята сълза,
умиращ и възлюбен, и отминат. Лъган, лъган.
сияещ дни и нежност, безконечен
сред ябълките, розите и троскота, цъфтящите лимони
и смокините, и мащерката, репеите, лобода,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 521
Mil poemas a Miguel Hernández
житата, къклиците гъсти, лавъра,
помежду люляци и тамаринти,
които си отиват
и се връщат.
Умиращ и възлюбен и зачеван...
И чувството ми
вече няма
думи.
María Helena Giraldo González, Colombia
Tierra que se abre a la vida
Es Miguel Hernández
Silvestre en su ser de grandeza
En su timidez de campesino
Su escritura terrestre
Retrata los horizontes de su ciudad natal
Orihuela
Sus ojos hijos de España
Retratan memorias que lo suceden
Memorias
Que evocan en suspiros poéticos
La piel sangrante de los suyos
Auroras y ocasos
Vividos en la pequeña Orihuela
Y en la España de los tiempos de guerra
Los ojos de España
Para la desnuda muerte
Que salpicó tus ojos
Con un beso oscuro
Solo queda Miguel
Un verso que te nombra
En tus poros creció Orihuela
Entre rebaños de cabras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 522
Mil poemas a Miguel Hernández
Y lectura de los clásicos
Ella acarició tus sueños
De hombre
Águila
Y poeta
Besaste con tus labios mustios
La amada España
Llena de amores
Pero la otra España
La oscura
La de la guerra
El hambre y la miseria
Consumió tus huesos
Lúgubre encierro
Temporal incierto
El grito del verdugo
Siempre te siguió los pasos
Hasta enmudecerte todo
Sin embargo tu voz vuelve
En los gélidos vientos
Cortaron tus alas
Pero la libertad en los ojos
Que miran a toda España
Sigue estando en los tuyos Miguel
Edgardo Palacios, Argentina
POEMA A MIGUEL HERNANDEZ
ESE DIA EN ORIHUELA
Un 30 de Octubre de 1910
nacía un poeta
Miguel te llamaron tus padres
y la sierra de Orihuela te acunaba
Allí te criaste
entre arboles y pájaros
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 523
Mil poemas a Miguel Hernández
allí empezó tu obra
casi esa fue tu escuela
Tenias que cuidar el rebaño
pero tus dedos escribían versos
debajo de cualquier árbol
aventajando tu sabiduría con los libros de la biblioteca
Ayyy Miguel Hernández
engendrado poeta antes de nacer
que bella obra dejaste Miguel
Garcilaso, Cervantes, compañeros de tu preparación
Ellos te dieron sabiduría
los poetas del siglo de oro
y otros muchos, como machado
así, así empezó tu obra...
ALPARGATAS Y PANTALON DE PANA
Miguel Hernández
pluma de oro
manos curtidas
alpargatas y pantalón de pana
amigo de los grandes
Federico Rafael
tú, nacido de la naturaleza pura
hombre de raza
Tejedor de versos en el monte
a tu rebaño
manos sabias
tu recuerdo huele a tierra
Tus versos la maravilla
semilla para poetas
tus premios
al hombre de ojos enormes
un simple cabrero
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 524
Mil poemas a Miguel Hernández
Iris Mable Giaconia, Argentina
Oda a Miguel Hernández
Hecho de pueblo y campiña,
hecho de pena y sangre
hecho de esfuerzo y lágrima.
…digo Orihuela, hablo de él
…digo Elegía, hablo de él
…digo poeta, hablo de él,
Elevo tu nombre en las
Marquesinas,
amo de derrotas y encierros,
trovador del dolor y verdades.
Floreciendo tus poemas,
diseminados,
entre las sangre y el ímpetu.
Miguel. Soñaste en tu encierro
con tu niño que nunca acunaste
rompiendo la canción en llanto
Y “ las nanas de la cebolla”
se oyeron en la absurda prisión.
Anunciaste en el silencio de la guerra
tus poemas esparcidos de coraje,
guerrero de ideales.
Escribiste al amigo, al amor
al niño, y a la flor. Cantaste en letras
las trovas de albedrio, al toro de España
al huerto , la tierra.
Miguel, en tu elegía, romance y sonetos
está tu alma, cántaro inagotable de poesía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 525
Mil poemas a Miguel Hernández
Marisa Aragón Willner, Argentina
HOMENAJE A MIGUEL HERNÁNDEZ
Muros y rejas de Alicante
Prisiones de Alicante
Muros y rejas tienen
La imagen de tu huella de poeta
Indoblegable ante los postulados libertarios
Magma nativo y cierto
En tu poético y sensible sentimiento.
Prisiones de Alicante
Lunas mezquinas y ocultas
Negadas a tu sueño
A cuántas fases debiste desconocer
Su quebradero de cristal hueco
Agonizando con la mano en tu pecho.
Prisiones de Alicante
Horrorosamente célebre ante los pueblos
El talismán de su brasa de poeta guerrero
Supo fundirse de voces exaltadas
Que vibraban su grito en concierto
Aún en el encierro.
El prisionero de Alicante
En tu interior de fuego vivo
Aún desprovisto de fácticas metrallas
Tu palabra fue la lanza de luz
Que como antorcha perdura en el tiempo
Con la persistencia del legado sobre piedra
Con la dureza de las caras de un acero.
Prisiones de Alicante
Tus ojos afiebrados de fuego
Sin intento de apagarlos ni remedio
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 526
Mil poemas a Miguel Hernández
En los lóbregos palacios confinado
Aún así tus huesos eludieron el vil cerco
Y volaste como ave de Universo
Prisiones de Alicante
Garras de infierno para el hombre de pueblo
¿Por qué no condenasteis al verdugo
Si Miguel solo tenía sus dos fieles fusiles
De su voz y su sangre inocente?
Defensor de los pobres porque vivió su suerte
Del descalzo, el mal vestido, el hambriento
Su voz de fuerza inquebrantable no cejó
Y elevó el bastión intacto de su verso.
Ofreció a su pueblo su pecho generoso
A las balas de la ignominia y la sentencia
Inmerecida condena, pena y muerte
Que dejó amurada a la boca del destino.
Al hijo de Orihuela
Para beberse en luz ese atropello
Del indigno maestro, el de la sombra
Que lo condujo sin honor, desposeído
Él, que tenía el tesoro de sus versos.
Lloró Orihuela la muerte de su hijo
De su dilecto poeta autodidacta
Como lloraban los reales de su pueblo
Esos que hunden las manos en la tierra
Para arrancarle el alma de su entrega
Y hacer el pan que llevan a su mesa
Pan de canto y cebolla
Rebanada pobre
Devorada con hambre
En la fría noche
En un manto de escarcha
En la luna llena de presagios
Cuando el hombre transita
Sorda pena a caballo de la tristeza.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 527
Mil poemas a Miguel Hernández
Altos amores
Prisiones de Alicante
Un salitral de entierro hasta lo profundo
Fuertes hombros de hombre
que no portan fusil y sí, palabra
Hombros de envergadura cantando al hijo
Y a la mujer del alma
Desde las altas torres a su alta mirada
Huesos que dan su vida en muerte
Para que el hijo tenga la paz del día
Como signo de lunas sobre su frente
Para que un cinco de enero no se estrelle
Su vida mirando desposeído sus abarcas vacías.
Había un pueblo
Prisiones de Alicante
Último torreón para que la piel entera
Tocara el frío piso de la desigualdad
Y un dedo silenciara el aliento
Y se llevara en un viento, en la boca de un ave
Sus postreros poemas.
A sus pueblos de mineros
A sus pueblos de labranza
Que como bueyes el yugo
Quisieron poner apátridas
A sus pueblos de fuerza gallarda
Aún cuando el vil amo las espaldas les doblara
Para ellos son sus versos que andan la piel del alma
En los siglos que la noche se empecinó
En dar batalla.
La vida en tragos
Sabedor que la vida son muchos tragos
Su amada el más alto trago
El más enternecido, el más amado,
Que le escribe en las trincheras
Y la muerte un trago tan solo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 528
Mil poemas a Miguel Hernández
Libra su duelo, garganta de un luchador
Itinerante entre la tierra, la sangre, la cantera
La mano triste del artesano
Morir ansiando Libertad
Himno que rasga la pluma
En la bandera de su último aliento
El magro honor
Prisiones de Alicante
Qué magro honor ante la historia
Qué verdugo sin alma así pusiera
Tanta prisión a quien la Vida
Se le hiciera de zumo de naranjo
Con azúcar de estrellas en cada entrega
Último trago que implacable
Por siglos
De esta España madre y descalza
Derrama de su noche, el gusto amargo.
Madrid, Ocaña, Alicante
Lloren porque ha cesado el aire
Lleno el morral de poesía de denuncia
Y su lucha estridente toma el tono
De una paz desoladora. ¡España
El último rincón de ti, la Castellana
Lleva el honroso escudo de su lema
Y prendido va del alma de su pueblo,
Esos que en la batalla de la Vida son poetas!
Después del amor, la tierra.
Después de la tierra, nadie.
María de los Ángeles Roccato, Argentina
IMPREGNADA DE SILENTES AROMAS
La noche transcurría demasiado lenta alterada levemente y solo a intervalos por
algún que otro crujir de las hojas al caer .En la casa un susurro quedo y cómplice
contrastaba con las voces metálicas de algunos de los treinta y tantos campanarios de
Orihuela. La mujer entre níveas sábanas perfumadas a jazmines musitaba y sus dedos
amorosamente recorrían las cuentas del exquisito rosario que reposaba en su abultado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 529
Mil poemas a Miguel Hernández
abdomen, la matrona a los pies de la cama seguía con atención cada movimiento o
alteración de la misma. Afuera el hombre caminaba balanceándose, en espera. El
aroma fresco de hierbas del monte y el halo de penumbra convertía casi en mágico el
lugar. En otra habitación se sentía el acompasado respirar de los querubines de la
casa colaborando a festonear de ternura a la atmósfera que ya de por si se presentaba
particular. El parto se avecinaba. Algún que otro grillo parecía empecinado en que su
canto fuera de seda, el sendero de agua del cercano río agregaba una fibra más de
encanto a la madrugada. Pocas estrellas pero destellantes en guiños resaltaban
jubilosamente lúdicas sobre el manto el azul prusiano que la ventana permitía
visualizar y dejando al descubierto la similitud con una que otra luciérnaga rezagada.
Ritualidad, manifestación conjugada entre el cielo y la tierra en cada nacimiento.
Misterio, milagro, sortilegio de la naturaleza y el infinito.
Seis campanadas expandieron sus cristalinas voces claras, vibrantes dilatadas…
¡Miguel nacía…¡ Era el domingo treinta de octubre de mil novecientos diez.
Cercanos a la ventana, en el borde de mármol de la preciosa jofaina de porcelana,
tres ángeles cuchicheaban mecidos por la dulce gracia del acontecimiento y que los
silfos mensajeros recibieron y con trémula premura partieron a esparcirla... sus
aladas figuras estaban cinceladas por los dorados destellos del sol.
VISION
Creo verte Miguel trepando por la ladera de la cerrilladla o vadeando el arroyo al
compás del tintineo argentado del cencerro de la cabra madrina. Inquietud y
búsqueda desbordando por la preciosura de tus enormes ojos. Jugando,
descubriendo, oliendo a pasto y sequía de tierra. Sonriente, expectante, escudriñador
.Pequeño casi como ellas, descubriendo la textura y el dibujo de sus pelambres en el
trajinar del día. Te descubro confuso y anhelante, mirando sin ver, bailando tu
lengua en la boca tratado de humedecer los labios, ante el primer parto constatando
el misterio de la vida. Tejiendo sueños en la brisa y el papel al ritmo de las ondinas
del río, mientras pasta con paciente el rebaño de preciosas cabras y tu alma de
golondrina sobrevolando las nubes oscuras y densas que anuncian algún temporal.
Sueñas pequeño pastor errante y lirico. Te fotografío en mi mente candoroso
buscando entre las hierbas y piedras el mensaje eterno de la madre tierra que emana
del canto de las chicharras o del largo sendero de las hormigas solo interrumpido por
el paso zigzagueante de alguna culebra. Sensible buceando los símbolos que el
viento y el agua traen. Oteando el horizonte, observando el aletear de las mariposas,
la sombra del sol detenida en el faldón de la ladera, disfrutando del color que se
desborda generosamente estando en multicolor paleta al florecer el campo, Saltando,
trepando, con los sentidos a flor de piel, bebiendo los signos de las estaciones,
ensayando comunicarte con la luna y entender el manto del sol cuando se detiene tras
los campanarios en el pedregal. Descubriendo la magia de lo cotidiano y bebiendo la
savia fecunda que trae el sonido de la labranza y el amor fecundo…la libertad y
solidaridad humana que serán permanentes nutrientes de tu exquisita poética.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 530
Mil poemas a Miguel Hernández
SEMBRADOR DE LUZ
Pluma exquisita que a las puertas de la sensibilidad toca cual adiestrada mano de
artesanal belleza .Traes desde la espesura del tiempo el destello de la ternura y del
compromiso .Lo descubriste en la extensión del paisaje de tu Orihuela natal y lo
bebiste en el diamantina fuente de los maestros del siglo de oro español. Inteligente,
sensible y sabio anclaste ímpetu y pensamiento en la poética haciendo de ella una
herramienta para la sensibilidad y la reflexión. Bálsamo para tus horas de encierro y
enfermedad permitiéndote sobrevolar con dignidad el hambre, la suciedad, la locura
y la violencia.
Guerrero de lápiz y papel
Guerrero de la paz que usaste la pluma en detrimento de las armas. Ungido por el
olimpo como sembrador de luz .
FUGAZ ALETEO
Miguel vives latiendo en cada rincón de la tierra donde los olivares mecen sus
cabelleras son castañuelas verdiplata. En la brisa que besa y trae en su aroma el canto
de los cencerros, donde el amor florece y queda entre aromáticas sábanas que tanto te
emocionaban de tu amada Josefina. Estás en cada niño que nace con su puño
apretado apostando a la vida y a la libertad de las victorias futuras de un hombre más
pleno y universal. Donde un hombre dialoga con su par, donde no existe el fusil para
amedrentar sino la creatividad y la belleza para acercar. Este es el ámbito que creaste
con tu significativa poética, comprometida sin perder belleza, alentadora, cálida,
fuerte, luminosa. Pasaste como pasan las cosas importantes, tanto como el vuelo
efímero pero certero de un colibrí cuya profundidad y belleza de su labor, es
vivenciada cuando en vital vuelo se integra a los dorados del atardecer.
MISTERIOS DEL ALMA
Vagan tus letras Miguel entre las sombras de los olivares en esta noche misteriosa,
cuajada de murmurantes ranas. Regresas despacio a la casa paterna y que hoy en
museo se ha transformado. Reconoces las blancas y gruesas paredes pintadas de
blanco. Los cuadros, la luz, solo la palangana ha quedado original más casi tocas las
voces nítidas de tu familia que allí atrapadas han quedado. Abres la ventana y el aire
conocido te trae el susurro de los grillos, La inquietud de los caprinos, el mugido de
los vacunos y el aroma de las hierbas. Reconoces el pedregullo, los campanarios que
te dieron la bienvenida al nacer y el candor del río que aun juguetea entre las piedras.
De vez en cuando regresas tratando de encontrar los bueyes amarrados a los carros y
los campesinos cantando al atardecer. Sonriente en la ventana, tu mirada pasea por el
retazo de cielo que deja verse y descubres entre el encaje de las nubes, las estrellas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 531
Mil poemas a Miguel Hernández
que juegan a esconderse en él y en la espesura de las calle confundidas con los
bichitos de luz. Fuertes se alzan las molduras de la iglesia mayor y los otras un
hermoso escenarios le configuran. Doce campanadas toca el reloj de la casa y un
concierto de campanas le contestan…cierras la ventana…y te diriges a la entrada,
abres la puerta de salida y silencioso te integras a la callejuela…volverás… es tu
visita preferida…
Carlos Egisto Antinori Ascoy, Perú
“PARA TI MIGUEL”
Miguel, saboreaste el amargo de la hiel
escribiendo dulces y enérgicos versos
que plasmaste en las páginas del tiempo
tus ojos se iluminaron en tu Orihuela querida
convirtiendo tu mágica pluma
en “el rayo que no cesa”
tus letras generosas y luminosas
encandilaron a la generación del 36
otros dicen a la generación del 27
sea como fuere mi querido Miguel
fuiste y sigues siendo el poeta del pueblo
por eso hoy estamos sacando de la cárcel
tus versos prisioneros, para que sean siempre libres
y vuelen por el mundo hasta llegar al cielo
de pastor de cabras y letras
pasaste a pastor de versos
Miguel, todos saben que escribiste desde joven
por eso las musas te llevaron
en lo mejor de tu vida, al mundo del descanso
poeta genial ,sencillo y humilde
hiciste del hambre familiar
un poema gastronómico
al convertir en exótica comida
tus “panes y cebollas”
siendo el maná soñado por tu prolífica inspiración
recuerdas Miguel, cuando ganaste tu único premio
y de puro contento alquilaste un moderno auto Ford
prestando dinero para llegar al lugar de la entrega
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 532
Mil poemas a Miguel Hernández
pero ¡oh¡ sorpresa poeta genial
el premio fue tan solo un simple objeto plateado
producto de la mezquindad humana
que te dejó descorazonado,
tus ideales patrióticos te llevaron a defenderlos
a sangre y fuego en la Guerra Civil
a los 32 años volaste desde Alicante
para estar cante que te cante
en la mansión de los dioses
compartiendo, mesa, pan, cebollas ,vino y libertad
hoy más de cien años después
tus ojos siguen abiertos
contemplando absorto la maldad de la gente
pero también contemplas feliz a tu amada Orihuela
querido hermano Miguel ya puedes descansar en paz.
María del Mar Estrella, Argentina
ROMANCE A MIGUEL HERNANDEZ, PASTOR EMBRUJADO
Ayer soñé que soñaba
un sueño color de guinda
lleno de copos turquesas
y anaranjadas espigas.
Ayer soñé que soñaba
un sueño bajo la vida.
Soñaba que entre mis brazos
la luna se me dormía.
Soñé que todo mi cuerpo
de plata se me volvía,
que mi aliento era de plata
de plata la sangre mía
y que un olor a jazmines
sobre la piel me crecía.
Soñé que amaba a la luna,
que la luna era una niña
y que al calor de mis besos
despertábase encendida
de rubores y suspiros
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 533
Mil poemas a Miguel Hernández
y pasión de agua clarísima.
Ah, sueño, mi sueño blanco
qué pronto te tornarías
en un clavel rojo sangre
abierto entre mis encías.
Rojo clavel en mis dientes
beso de roja mantilla...
Diez bravos toros miura
subiendo por mis rodillas
como diez chorros de sangre
por diez rojas banderillas.
Los brazos se me volvieron
dos hogueras amarillas
y entre mis brazos, la luna
desnuda se me ofrecía.
Ah, sueño que yo soñara
cuando pastor me sabía
y ordeñaba yo mis versos
junto a la lecha más tibia
de mis cabras, por los montes
de Orihuela a Andalucía.
Sueño que soñé muriendo
sin saber si florecía.
Soñé que amaba a la luna
y la luna… me quería,
bajo mis manos la plata
de sus senos relucía,
en su boca yo era un beso
con olor a rebeldía
y cuando extendió la noche
su capote de agonía
nuestros muslos estallaron
de palomas y de viñas.
Ayer, fue ayer que soñaba
un sueño color de guinda
entre nanas de cebolla
y vellones de alegría.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 534
Mil poemas a Miguel Hernández
Soñé que amaba a la luna,
y que la luna era mía.
¡Y que la luna era España!
Mi España mujer y niña!..
Ah sueño de los pastores
que ninguna muerte quita.
¡Sueño que muere soñando
para crecer en semillas!
Marta Zabaleta, Chile, Inglaterra
LA LLAVE
Inspirado por aquel libro de Miguel Hernández
que me quemaron durante la dictadura chilena
No batía el viento
ni la soledad ni el tiempo.
No había patrullas en el
camino de Concepción a Tomé.
Era el 12 de septiembre.
Paró la camioneta y
del zapato izquierdo
sacó una llave.
La arrojó lejos, musitando
me la dio Alberto.
Y seguimos huyendo.
Bajo el sol radiante
sus hijos más pequeños
como si fuéramos de picnic
cantaban. Y el osito de peluche
danzaba la libertad de la nieta.
Tic Toc Tic Toc Tic
La mirada de la abuela
nos abrazó largo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 535
Mil poemas a Miguel Hernández
No sabremos nunca
el misterio de esa llave.
El hijo mayor ya lo ha olvidado.
Orlando Ordóñez Santos, Jesús María-Lima-Perú.
JARAMA O MANTARO
Siempre contigo Miguel Hernández,
piedra blindada.
Pajonales a la deriva, van y retornan
tan sólo
para recrear frenética al hato bravío
cubierto de destellos cimbreantes
anunciando la danza taurina.
Alicante peñón flameante dentro
tu lítico pastizal
aún florece el Viento del pueblo
despabilando a cuanta maleza intrusa
intente colmatar al libre céfiro.
Ahora Miguel, yo quiero ser llorando el hortelano
de tierra y piedra,
piedra blanca donde lates erupcionando luces
aquellas que incendian las praderas estercoleras
que jamás pudieron sangrar a tus versos resplandores.
Sigues vigilante en los desfiladeros de águilas
oteando senderos
si alguien trata de echar yugos sobre
los huracanes, o a los rayos enjaularlos
en la cárcel de cristal subterráneo.
Desde el crepúsculo andino, extenso
relincha la montaña
en su yunque y fragua de fuego incásico
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 536
Mil poemas a Miguel Hernández
aquel que no sabe de retrocesos cuando
el aluvión trata de ahogar a las palabras.
Vibrantes torrentes de embestida gemela
Jarama o Mantaro
siempre sus aguas tendrán suficientes
bravura para descorrer el graznido carroñero,
puede más el trinar de ruiseñores y pichiuzas.
Leomária Mendes Sobrinho, Brasil
Uma Paixão
Miguel Hernández gritou desesperado a lutar
Criações líricas silenciosas como uma arma
Que deflagra bala de integridade a doar
Contribuições para a Civil Guerra onde Cuba não cala.
Trabalhou à exaustão,
Pois usou tanto a sua razão
Quanto sentiu em seu coração
O empenho de sua determinação.
Foi voluntário, adoeceu e foi preso.
Valente, ideólogo, político e poeta.
Serviu à Espanha, ao seu ego confesso.
Mais teve a paixão pela poesia como principal meta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 537
Mil poemas a Miguel Hernández
Beatriz Martín, España
HAIKUS DESDE MI ALMOHADA… ( IV ) TU LUNA
(HONOR A MAIGUEL HERNÁNDEZ)
I
En Verde ordeña
germina un gran Poeta
brillantemente
II
Cómplice luna
alumbrando sus versos
magistralmente
III
Tus melancolías
derramando lágrimas
valientemente
IV
Tus Octavillas
recorren por el mundo
están a sus pies
V
Oda a Miguel
Oda a tus poesías
Oda a tu Luna.
Nieves Mª Merino Guerra, España
LLUEVE EN TUS CAMPOS, MIGUEL
Llueve....
Y me ha parecido estar mojándome bajo el rumor
de ése canto en ésta ciudad también, aunque sea verano.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 538
Mil poemas a Miguel Hernández
La descripción es tan fuerte, intimista y perfecta,
que puede trasladarse a cualquier lugar.
Todas son similares y las sensaciones, las mismas cuando....llueve.
El viento, arrasa también cuando se une a la lluvia que rompe los cristales.
O los estores de las ventanas que, descuidadas, quedaron abiertas.
Empapan el suelo de las terrazas y balcones llenas del hollín que se respira.
Y se agradece....
(¡¡ Menos polución en el aire, gracias al cielo!!)...
Llueve...
Si...
Y donde antes corrían barrancos y acequias,
ahora se inundan calles y plazas de garajes, pisos bajos...
La luna, tímidamente creciente,
quiere asomar sus cuernos iluminando las nubes.
Llueve...
No solo en todas las ciudades fantasmas,
aparecidas de la nada en donde antes había campos....o el mar.
Que también se enfurece y se rebela rompiendo los diques
que le han impuesto como si fuesen de papel.
Siguen viéndose refugiados en los portales. Bajo alguna esquina....
si...esperando a que escampe o amaine el viento
en la soledad de las ciudades vacías. Como la tuya y la mía.
Con el rumor de los autos que salpican mas
las aguas empantanadas donde antes corrían libremente hacia el mar...
Pero no hay nieve en la cumbre. Es verano.
Y un calor pegajoso hace sudar. Invita a la ducha constantemente...
a pesar de que llueve.
El aire huele diferente. No como en los campos,
donde los perfumes de los árboles,
hierbas y flores, parecen embriagar el ambiente.
No con ése olor a tierra mojada y fresca, que oxigena y se aspira con ansia...
No...
Se respira otro aire. Pero electrizante. Con menos humo.
Menos denso. Pero sin perfumes a flores.
A MIGUEL HERNÁNDEZ, POETA ESPAÑOL
Con " Nanas de la cebolla
ilustraba su lamento,
y aquél febril sufrimiento
de miseria y amargura...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 539
Mil poemas a Miguel Hernández
Ni alimentar su criatura,
no tener la libertad
de expresar su pensamiento.
ni de poder trabajar.
Fue quebrantado su cuerpo,
pero jamás su creación
ni su noble sentimiento
por mejorar su Nación.
Así escribió su tormento
como legado tangible.
No habrá ni un sólo momento
en que las letras le olviden.
Ni las letras ni la Historia
por su lucha en la justicia
de los obreros esclavos
por caciques y fascistas.
Su canto a la libertad,
al amor y a su retoño
sigue sonando en el aire
como el viento en el otoño.
Miguel Hernández, poeta
de campiñas y olivares,
de amores y primaveras,
de esperanzas familiares.
Garrote vil : Vil mil veces
fue tu enfermedad sangrienta.
Sesgó tu joven conciencia.
Tu vida, ilusión, sapiencia
Tu familia, tu destino.
No hubo peor desatino
para España, que tu muerte
junto a Lorca -fusiladosólo por ser diferente.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 540
Mil poemas a Miguel Hernández
Quedan mártires autores
de poetas desterrados
y otros tantos, mutilados
en su más íntima esencia.
La " Nana de la cebolla"
que canto siempre a mis hijos
para honrarte en tu memoria
junto al "Verde “en Federico.
NO ES MI POEMA UNA “NANA“
No es mi poema una nana.
Si acaso, canto de cebollas
poeta, que fuiste aurora
comprometido y valiente
defendiendo y escribiendo
a la injusticia.
Decadente
ciega y muda en fanatismos
destruyendo y encerrando
con opresión desmedida
a víctimas inocentes
en la España enloquecida.
Doliente…
Se oyen disparos…No corres.
Son hermanos contra hermanos.
Vecinos contra vecinos.
Bestial. Cruel el despotismo
conjugando lo inhumano.
No…
Yo no te canto otra nana.
Ni cebollas…ni a tus campos…
Pero sí honrar tu memoria
y acunarte en mi regazo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 541
Mil poemas a Miguel Hernández
¡GRITA, POETA!
Grita, poeta.
No calles ni callas nunca.
Eres el clamor del pueblo.
Su lamento. Su ternura.
Su dolor.
Asediado de injusticias,
hambre, dolor, miseria
por guerras que le destrozan.
Como a ti.
Grita, poeta.
Por la vida.
Por la cuna.
Por la dicha
Por la tumba.
Y mientras miras la luna
se estremecen tus entrañas.
En la tétrica mañana
tu débil cuerpo se nubla.
Susurros de libertad
apenas vuelcan tus labios:
fiebre que abrasa y consume.
Piensas en Josefina
y en tu bebé deseado.
En todos tus compañeros
En tu pueblo…en el fracaso.
¿ Fue acaso así, mi poeta..?...
No.
Tus escritos han quedado
como arengas por la paz.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 542
Mil poemas a Miguel Hernández
Canto triste a Libertad
de un pueblo ya enajenado.
Gritos, dolor.
Lamentos.
Sangre en tus ojos...
El pecho, espasmódico, se queja
despidiendo tu existencia
casi niño. Nunca muerto.
Entre rejas
frío helado…
Allí sembraste tus letras
que florecen en nosotros
admirando tus proezas.
Allí tu alma se muestra.
Historia hiciste.
Creaste esencia
de eternidad…
Miguel Hernández, poeta.
REBELDÍA DE MIGUEL
Tú, Miguel, tan impulsivo.
rebeldía de juventud
en momentos revulsivos
ciego a temores arriesgas
sin calmar ésa inquietud.
Tu propia vida la sesgas
de “turista carcelario”.
Enfermo ya. Muy enfermo
trocas amor por sudario.
Quiebra tu voz y vomitas
toda la sangre. Valiente
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 543
Mil poemas a Miguel Hernández
fiebre y sudor…. Ves la muerte
de frente. Temerario
sigues tu andar con la gente.
Miguel, joven niño enarbolando
banderas de libertad en tu frente.
SUEÑAS TU LIBERTAD
Sueñas tu libertad enjaulado
como un ruiseñor que pena.
Clavas tus versos a diario
a pesar de tu condena.
Neruda, Alberti…te cantan
como otros grandes poetas.
García Lorca se adelanta
acribillado una noche
cuando tú, “ Perito en lunas “
versabas con más derroche.
Lástima de luna llena
que contigo se ensalzaba
llevando en ti su reflejo
con tu profunda mirada.
Ojos negros. Negros ojos…
Como la noche cerrada
que iluminabas de estrellas
pensando siempre en tu amada.
Ya no eres su “perito”.
Ahora eres su “arquitecto”
en claras noches bañadas
por la luna y sus misterios.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 544
Mil poemas a Miguel Hernández
Juanita Conejero, Cuba
En el río inmenso de tus néctares
Al poeta Miguel Hernández
Vienes con la fuerza del viento
ese viento tenaz que no fallece.
Miguel de todas las zozobras nervio rudo
que rompe los barrotes y en noble pastoreo
de metáforas crujientes
derramas el grito que no cesa.
Cuando tu luz se diluye en aromas
llegan tus palabras previsoras a mi huerto
danzan con el verde despertar de cada hora
y cubren de versos mis sabanas.
Los siglos seguirán con tu voz que no descansa
que repite de dolor la sangre nueva
y vuelve con la pasión de mis erguidas palmas
a defender en el ocaso la rabia que no olvida.
Subyuga al rayo avista lo imposible
y en la audiencia final de un conciliábulo
imprimes al opresor viril ternura
porque tú radiante de infinito
entre las nanas de cebolla en paz supremo
se vuelven de zumos las estrellas
y en cascada sobre el río inmenso de tus néctares
vienes elegido una y otra vez
para sembrar de mágicas simillas
la eterna vastedad que te sostiene.
SONETO A MIGUEL HERNÁNDEZ
Canta el hombre su muerte cotidiana
la mano al corazón el pie seguro
y en franca dimensión vibra el futuro
aunque el giro fustigue la mañana.
Miguel de arcángeles sin paz bendito
con tu sabor de tierra en la mejilla
en andares conquistas milla a milla
lo que nadie conquista con su grito.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 545
Mil poemas a Miguel Hernández
Cae la noche. El viento es reclamado
y en el febril concierto de tus flores
arrebatas al viento claridades
y aunque parezcas un triste infortunado
la rabia y el ardor de tus dolores
cosechan de luces tus verdades.
MÚSICA DE ALAS
Al poeta Miguel Hernández
Con tu fusil de nardos
en la diana del mundo
fijaste tu presencia
y has quedado atrapado
entre cantos azules
que arrullaban mis sueños.
Miguel que te descubres
día día en mis cielos
que haces sones de lunas
taconear de luceros
ese sol que florece
en la entraña del pueblo.
Miguel no me abandones
en mis alas tu viento.
Nuria González (Dama Del Sur) España
Con Miguel Hernández
Desgarro, eso me hizo sentí al leerlo aun siendo niña.
Quedó para siempre a chorros corriendo en mis manos al escribir,
en sentirme singular cuando fui una perdedora.
Ese perder solo lo saben experimentar unos pocos.
Triunfó por encima de la muerte, cruel su gloria,
enorme derrota del hombre saltándole por encima al poeta.
Aun muriendo en una celda miserable, de hambre y frío como una bestia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 546
Mil poemas a Miguel Hernández
para la historia venció.
Sus verdugos lanzaron sus palabras al mundo y contribuyeron como solo los
enemigos y los envidiosos saben hacerlo, a su gloria.
En vida inmenso. En medio de una guerra civil, en el bando perdedor, eso se paga
con la muerte… sentí su pena cuando pensaba en su hijo… no podía hacer nada por
él. Cuando me hice grande, tuve una hija…miré a mi niña,
se quedó tan solita y yo a su lado y entonces volví a pensar.
Sentí su impotencia descrita en una nana, de cebolla,
lo que comían en esa España y tal vez pronto en esta,
tras una guerra entre hermanos.
A diferencia de él,
mis letras se destiñeron de tanto llorar,
pasando quince años de mi vida sin poder escribir,
sin poder expresar el torbellino de luto, de llanto frío, llevado dentro.
Una fotografía suya, vista a los once años, con las milicias republicanas,
aparecía arengándolas, leyéndoles versos.
Quedó impresa con tinta mágica en mi retina,
traspasando mi piel y las hojas del libro.
Innato, se engendró, como si fuera un alma antigua llena de regalos de palabras.
Un hombre capaz de escribir de esa manera, salido del campo, los demás venían de
una buena formación, incluso de buenas familias.
Mis palabras se desconciertan tiritando, queriendo ser coherentes, cuando para mi
representa la máxima pureza artística de un poeta y a un hombre humilde, una
humildad que solo los grandes son capaces de ostentar. Por encima de todo, hijo de
su tiempo y sus circunstancias, leal a si mismo y a sus ideas artísticas y humanas.
Entreveo un hombre bueno, valiente, no por falta de miedo, sino precisamente por él.
Su vida fue un gran compromiso con sus ideas. Pienso, en quienes empuñamos las
palabras en estos momentos, que como el poeta de Orihuela, deberíamos llevar
nuestras palabras a una sociedad en profunda crisis. Su figura hoy tiene más valor y
vigencia que nunca. Por eso estoy escribiendo estas letras, en este agosto algo
ilegítimo, caluroso y roto, algo cansada, nunca rota y algo enferma. Nunca rendido,
jamás, Miguel Hernández, te salvó la muerte.
Yrasema Esther López, Buenos Aires Argentina
Hola Miguel
Tus pupilas prendidas fuego
no le temen al olivar y a su cosecha
ni a la sombra cautiva de tu vuelo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 547
Mil poemas a Miguel Hernández
están tus orejas agazapadas al planeta
tu piel envuelve la noche desbordada de injusticia
y al amanecer no podrán demorar
el porvenir que alienta tu memoria
la fuerza de tu mirada y las huellas de tus pasos
serán los faros que iluminen el sendero
aunque borren todos nuestros rastros
tu recuerdo es ahora tan inmenso
como el de todos nuestros muertos
Déjame en el aire
la vibración de tu sonrisa
y que la voces de los poetas del mundo
vayan tomando el eco de tu voz
Camilo Cortés, Chile
MANOS CHILENAS
CUAL LICURGO DE LA PLUMA,
SIMILAR AL SOLDADO CON SU ARMA Y
LLEVANDO LA LOCURA CON MUCHA RAZON,
ES MI DESEO DE LIDIAR Y JUNTAR
EL CIELO CON EL INFIERNO, SIMPLEMENTE
COMO UNA LECCION DE VIDA.
CON MI CONCEPCION DE PERSONA EN
UNA ANTROPOLOGIA NEGATIVA Y
HASTA QUIZAS, MUY MAQUIAVELICA,
QUE QUERIENDO SER PACIFISTA, CON LA FORMA
DE RESOLVER LAS COSAS EN VIOLENCIA Y DESTROZOS;
EVIDENCIA QUE CREA MÁS AUTODETRUCCION.
DE REVIVIR MIS RAICES GALLARDAS Y BELICOSAS,
LA PASION Y MODERACION DE MADUREZ,
QUE POR FEO QUE SUENE… DONDE LAS COSAS,
LLEVAN UN CIERTO ORDEN….QUE UN LIDER,
NO ES UN DELICUENTE CON CORBATA………..
QUE LOS TIEMPOS CAMBIAN Y LA GENTE TAMBIEN.
VER COMO SE DESPERDICIAN LOS TALENTOS……
VER COMO LA UNION NO ES LA FUERZA, SOLO
POR EXISTIR UNA LUCHA DE CLASES Y QUE LA
LIBERTAD POLITICA, NO ES LA MISMA QUE
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 548
Mil poemas a Miguel Hernández
LA LIBERTAD CIVIL, QUE EL LIBERADOR DE ELLO
NO ES UNA DISCAPACIDAD PERMANENTE.
QUE EL ALTISIMO NOS AYUDE POR SIEMPRE,
QUE SU GRAN AMOR Y BONDAD NOS BENDIGA,
QUE MI LIRIA NO SEA UN LUCTUOSO….
PARA QUIENES CON SU LIMPIDO TRABAJO,
CONSTRUYEN SUS SUEÑOS DE HOY Y MAÑANA,
SIN BISAR SUS LLANTOS… DE SENECA POPULAR.
QUE SI HOY LOS MUERTOS HABLARAN,
COMO SE LE ESCUCHARIA, QUE NO EN VANO
SU MARCHA DE ESTE MUNDO FUE SIEMPRE,
CON LA CABEZA EN ALTO, MUY ALTO.
CON SUS MANOS ENCALLECIDAS, NUNCA
DIJERON: “NO HAY MISION CUMPLIDA”
ABRIL SELEROSO
Maria Cristina Fervier, Argentina
A Miguel Hérnandez
“Quien te ha visto y quien te ve
sombra de lo que eras,”
“el rayo que no cesa,”
Hernández Gilabert Miguel.
Abatido en la oscuridad,
en tu cárcel mortal,
lleno de luz en el martirio.
“ Labrador de más aire”
“en el teatro de la guerra,”
lleno de” cancionero y
romancero de ausencias.”
“Hombre que acecha con su palabra”
y siendo” perito en lunas,” clamará
a la luna venidera
por las “nanas de cebollas”
y aunque prisionero en una jaula
demostrará que hay
ruiseñores que aún cantan.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 549
Mil poemas a Miguel Hernández
Sixto Cabrera González, México
Poeta náhuatl Soledad Atzompa, Veracruz, México
Nechkokoua nin chokotsin apismiktok
kemi se uitstli ueytik
Miguel Hernández
Inon moxijxikoua telpochtli
nemi ojpan iuan elnamikilistij,
kimajtia,
tlamajtilistli sanyolik
tlampa tentsonkuitlatl,
tlakuakuanuijkej,
tlen kuakuajpitsauak
kimelauiliaj non amixmachtli,
kitontij yaoyotl
tlen kinkajkauas non tlajyouiaj.
Inon telpochtli, iikxipan,
tlen ueymokimiloua,
moixpolojtij intech kaltlatepacholyomej
iuan kinchijcha youak estlakuepaltij,
ijkuak yojyolik
iyolilistli mopolojtij.
Saniman.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina
Miguel Hernández
El joven sombrío
camina entre veredas y recuerdos,
ahuyenta,
lentamente el miedo
bajo estiércol de cabras,
de vacas,
que afilados sus cuernos
apuntan al extraño,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 550
Mil poemas a Miguel Hernández
desencadenando la guerra
que al fin podrá hacer libre a los oprimidos.
Ese joven, descalzo,
que se viste de gloria,
se hunde en las cárceles
y escupe hemorragias nocturnas,
cuando a cuenta gotas
su vida se consume.
Prematuro.
Julia del Prado, Perú
EL mar también elige
puertos donde morir.
Como los marineros.
(Miguel Hernández)
DE ORIHUELA A ALICANTE
El mar también elige
a los hombres de hoy
que dejaron la palabra escrita
entre nostalgias de guerra y
cruces de paz
en esos campos de
las guaguas yunteras.
El mar siempre está con su
rugido abierto para recibir al sol
en su doble vuelta hacia
los campos en desconcierto
del poeta de Orihuela y a su
niño de azahares y de rosa libre.
El mar acoge en Alicante
a ese muchacho de escarcha y de cebolla
cuando su espíritu ríe abrazado a su yunta
como en una vieja alegoría de noche
de lluvia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 551
Mil poemas a Miguel Hernández
Fernando António Garrido - Rio Tinto, Portugal
Em homenagem ao poeta Miguel Hernández
pela sua passagem por Portugal.
Portugal chora por ti poeta
Fugiste, tu Miguel Hernández!
Da escuridão da tua pátria.
Na tua luta poeta,
Que muitos queriam silenciar.
Procuraste caminhos de mudança;
Em Portugal vieste parar.
As sombras esperavam-te…
A alcateia chamara,
As mãos te amarraram,
A boca te fechara,
Os poetas por ti choravam.
Os lobos para longe levaram-te.
A tua luta é uma chama,
Nas tuas linhas reclamas
Para sempre na imortalidade.
Hilda Irene Villa, Argentina
A Miguel Hernández
Poeta
Cuando pequeños seres
perforaban tu interior,
Los enanos de la incomprensión
acosaban en rededor.
Tu lucha y la utopía
soñaba un mundo mejor.
Cual capas de la cebolla,
era tu intención.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 552
Mil poemas a Miguel Hernández
Sacarlas una por una
y llegar al corazón,
ver la luz y tu gente,
sin el brillo del tiro traidor.
Que tu hijo y otros hijos
puedan dormir bajo el sol
con el canto de las nanas,
en un nido blanco de amor.
¡Ay… Miguel, Miguelito!
Qué iluso. ¡Qué pretensión!
No sabes, que a los poetas
no se le tiene consideración.
Tras los muros
Hombre,
misterio en bolsa doliente.
Saliendo de su envoltura,
el grito avasallante de la carne
crispa el reloj sin tiempo.
Sed de reclamos
agita su mirada,
camina con los dedos y la palabra
sin detenerse tras los muros.
Aunque su destino esté ya escrito
y afuera el cielo sea más celeste,
en soledad de su cubículo
comulga con la tristeza,
para no oír el llanto de su sangre
que está fértil todavía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 553
Mil poemas a Miguel Hernández
Claudio Schudeck Pérez, Chile
Orihuela de Miguel.
Orihuela está de fiesta, Orihuela, Orihuela
Porque ha nacido un niño que será poeta.
Lo ve crecer con sus famélicos brazos,
los ojos hundidos por el hambre de los campos.
Pastorcillo de cabras, lector insaciable.
Ya joven lo ve alejarse, pleno de ilusiones,
orillando caminos y caminos
serpenteando árboles y árboles
durmiendo noches y noches,
susurrando poemas bajo las estrellas.
En el andar por el mundo, son los poemas
fieles compañeros de su vida errante.
A la cumbre de tus ambiciones llegaste
te reverenciaron poetas del mundo entero
y admiraron tus tropos y sentidos versos.
Pero llegó la peste desde Marruecos, furiosa,
mató alondras, jilgueros y sus bellos cantares.
La pluma y el fusil fueron tus fieles amigos,
Sufriste penosas prisiones con tus iguales,
poetas auténticos, sin dobleces ni vanidades.
Orihuela está de duelo, Orihuela está triste
El puñal de la tisis sesgó tu valiosa vida,
el bandido fascista escondió su mano,
quisieron acallar tu canto y no lo lograron
aún vives en nosotros, compañero,
Tu poesía se hizo canto para el mundo entero,
en cada primavera tus versos florecen
como finas flores de la alborada,
y cada palabra tuya cobra vida, compañero,
Compañero del alma, compañero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 554
Mil poemas a Miguel Hernández
Mario Ozny Rosa, Brasil
LOUCURA DE UM POETA
MOR
De tantas encruzilhadas
Saber qual irá tomar.
Com todas as poetadas
Sem já no mar afogar.
Com este enredo poético
Já tentei todo remendo.
Num mundo bem patético
Continuo remexendo.
Ora enrolado na lama
Para a atenção chamar.
Por socorro logo clama
Ninguém está a escutar.
Um quadro ali pintar
Meu verso nele escrever.
Quando o mesmo secar
Quem logo ali vai ler.
Vale a pena publicar
Para fazerem a leitura.
Ou por ora abdicar
Sem sofrer a amargura.
O DESTINO DE UM POETA
MOR
Subindo naquele patíbulo
Era a forca seu destino.
Tinha perdido o estimulo
Da poesia o desatino.
Em sua poética contestadora
Consciente em seu trabalho.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 555
Mil poemas a Miguel Hernández
Foi a grande obra imoladora
Da guilhotina o malho.
Autoridade eminente
Fala para o poeta.
Da sentença ciente
Algum protesto lhe resta.
Com a morte do poeta
A minha poesia viverá.
Como a maior meta
Guilhotina não matará.
O carrasco enobrecido
Cumprindo a sua missão.
A cabeça guarnecida
Guilhotina entra em ação.
POETA NO CATIVEIRO
MOR
No calabouço preso
Tinha perdido a memória.
Seus amigos surpresos
Ninguém sabia a história.
Sua mente estava vazia
Porque ali o prendera.
Ai ninguém explicaria
Qual crime cometera.
Nem atinava escrever
Sua mão tremulava.
Seus dedos sem firmeza
Logo a caneta saltava.
Sua bela poética
Ali silenciava.
Que imagem patética
O momento sentenciava.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 556
Mil poemas a Miguel Hernández
Poeta no calabouço
Ali mesmo feneceu.
No fundo daquele poço
Sua poesia morreu.
A GRANDE DECISÃO
MOR
Seu amor pela pátria
Herança familiar.
Como um bom filho
Nada tem a humilhar.
Com a guerra a começar
Toma a grande decisão.
Como voluntário incorporar
A defender sua nação.
Volta para sua terra
Despede-se de seus parentes.
Sem pensar em quimera
Da guerra nem era temente.
Numa escapada
A terra natal voltar
A ali logo casar
E sua retornada
De doença acometida
Medico recomenda internar.
Para de a mesma ser tratada
Para a saúde recuperar.
O seu legado deixar
Como poeta escritor.
Com a poesia relatar
O brioso Miguel Hernández.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 557
Mil poemas a Miguel Hernández
CRONOLOGIA DE UM LEGADO
Miguel Hernández
MOR
Em colégio a estudar
Abandona.
Das cabras volta cuidar
Mas sonha.
Torna se leitor
De grandes autores.
Auto didata
São os instrutores.
Em seus novos labores
Naquela colina.
Dos grandes pensadores
O mundo o ensina.
Começa sua obra prima
Legado há humanidade.
Da literatura sua estima
Hoje será comemorado.
UM MENINO UMA ESPERANÇA
Miguel Hernández
MOR
Daquele trabalho diário
Distribuir leite a vizinhança.
Um trabalho missionário
Da família era a perseverança.
Da leitura veio à alegria
Na busca da esperança.
Quebrou a monotonia
Encontrar a nova herança.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 558
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández o grande poeta
Dele ficou a marca.
Em seu tempo atingiu sua meta
Na antologia se destaca.
Tudo fica registrado
De uma bela comovida história.
Daquele tempo passado
Mil poemas na grande memória.
DA JUVENTUDE A POÉTICA
Miguel Hernández
MOR
Voltar a tua juventude
Enfrentaste toda a vida.
Com toda a plenitude
Como ela foi vivida.
Ajudaste a família
Na fauna de cada dia.
O trabalho não humilha
Na folga sempre escrevia.
Na tua imaginação
Só girava a poesia.
Era grande a criação
Pela bela melodia.
No teu destaque poético
Tudo logo fluía.
Da canção ao ético
Numa bela cantoria.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 559
Mil poemas a Miguel Hernández
VIDA E MORTE DE UM POETA ESCRITOR
Miguel Hernández
MOR
No final da guerra
Com a derrota republicana.
Procura outra terra
Fugir para Portugal fica em cana.
Devolvido para a Espanha.
Sofre todas as crueldades
De prisão em prisão apanha.
Volta a sua terra
Sofre nova prisão.
No mais longo turismo
Pelos cárceres da Espanha.
Contrai a tuberculose
Entre dores dos duros golpes.
Suas forças esgotando
No sanatório chega o dia da morte.
28 de março de 1942
Inspira aos trinta e um anos.
Parte para eternidade
Miguel Hernández.
A UM GRANDE POETA
Miguel Hernández
MOR
Voluntário por sua terra
Da poesia ele vivia.
Lutou na grande guerra
Por ela até morria
Da guerra veio à doença.
Que na vida enfrentou
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 560
Mil poemas a Miguel Hernández
Seria a triste sentença
Que sua já vida o levou.
Que partida dolorosa
De um grande poeta.
Que emoção amorosa
No mundo já desperta.
Nesta bela Antologia
Expressando sua bravura.
Com a mais pura magia
A mostrar a geração futura.
Susana Zazzetti, Argentina
poema:
a miguel hernandez
un hombre vive
al filo de la espada,
se le cae el cuerpo
entre vocales y ovejas.
sueña
con salir del barro.
encontrarse con la ternura
del hermano, de la rosa.
y respira.
respira
como si los suyos
no fueron pulmones heridos
y él no se llamara miguel.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 561
Mil poemas a Miguel Hernández
Emna Codepi, Colombia
GRAN LEGADO.
Los vivos conmemoran tu existencia
cuando yaces descansando en camposanto,
gran hijo de luz y de las sombras
insigne poeta Miguel Hernández.
Tu voz y tu pluma callados con violencia
al escribir con valor sobre injusticias
que van desangrando a los humildes,
manchando el suelo con las gotas
que emanan de su pecho cual rocío
cuando son en la muerte abatidos.
Tu vivir no fue bálsamo de rosas
tuviste que afrontar tan duras pruebas
los dulces granos de tu arena amarga
cual pagano está con su condena.
He aprendido de tu obra insigne
saber que el mundo te aplasta y te cohíbe
se hincha contra ti como un villano,
te arruina la vida en un instante;
Pero el amor a las letras y al arte
te hacen revivir glorioso en ese barco.
Aun estando cohibido de tus letras
escribías a expensas en tu celda
dejando en el mundo bellas huellas
gran ejemplo para todos los poetas.
Tus versos son arte perdurable
en ellos vives después de la muerte
en el tren de los heridos
en el vagón de tus sueños
en la canción del esposo soldado.
Gran maestro de maestros
nos dejaste un tesoro de legado.
FRUTO DE LA TIERRA
Como las aves del campo
cantan al amanecer
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 562
Mil poemas a Miguel Hernández
a las rejas de tu celda
cerrábanlas al atardecer.
Fuiste fruto de la tierra
labrador de gran madera
poemas de gran cosecha
nos dejaste de legado
gran poeta de poetas.
Insigne Miguel Hernández
sin razón te ajusticiaron
en condena de inocentes
a la pila de la muerte
cual inocente cordero
injustamente te llevaron.
Pero tu amor a las letras
adormecían tu exilio
donde en versos entregabas
de tu alma su gran brillo.
Con fortaleza y paciencia
supiste afrontar las penas
la guerra, la gran condena
y el amor hacia tu tierra
plasmando tus bellos versos
con letras tan amargas
como el sentir de las rejas.
Tu cantar al pueblo humilde
te engrandeció ante la gente
porque tú sigues viviendo
aún después de la muerte…
Rosa Lía Cuello, Argentina
A Miguel Hernández
“Solo quien ama vuela
Pero ¿quién ama tanto?
…y un nido de libertad
le sostiene el cuerpo
sangre en soledad
que se aglutina
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 563
Mil poemas a Miguel Hernández
ojos que no ven
pero entienden
ciudades que duermen
silencio/ hombre/ cielo.
Tal vez como aquél
de tu poema
vueles alto ahora
y en tu pecho dormido
una alondra
rescate la luz
para emprender su vuelo.
Danitza Elfi Montalvo Apolín, Perú
Una fiesta de tu vida…
Y pudiera parecer que estoy contigo Miguel,
en esos años de danzas y tertulias ingenuas
de tu vida en el campo...
En una fiesta que tiene olor y sabor…
con la magnificencia salvaje de la natura…
disfrutando los aromas y bendiciones de la flora…
de la brisa olor a leche, a pasto tierno…
comprendiendo la fauna y sus bemoles…
cual amigo inseparable…
Tus sentidos por la vida agudizaron tus escritos…
hay calma, hay premura, hay aliento, hay dolor…
La fiesta de tu vida fue válida y sonora hasta hoy…
la noche asintió un día… y tuviste que dormir… obligado…
Te pienso…
y… participo de tu vida en mi dulce letargo,
te acompaño entre las sombras para regalar albura…
gozo… saciedad… pero tú me percibes y me propones…
…hacer una fiesta de versos… para no olvidarte…
Un día
Un día te fuiste…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 564
Mil poemas a Miguel Hernández
a cambiar las inspiraciones de tus versos,
a buscar la poesía en otras experiencias…
Y es que la vida de un libre poeta
es la búsqueda constante de ese clímax para componer
para expresar, para sentir, para compartir…como tú…
Tu mente estaba llena, lista, segura para volcar belleza
para desparramar florilegios…
pero tu cuerpo necesitaba el pan
para seguir viviendo… y no te dejaron…
¡Cuánto se perdió España…!
¡Cuánto se perdió el mundo de tu pluma…!
aun cuando no dejaste migajas sino virtuales joyas…
Miguel, me he sorprendido
porque hasta en prisión paseabas cual “turista”
dejando impregnada tu voz en los pasillos…
tu voz de niño, tu voz de joven, tu voz ansiosa de libertad
Un día te fuiste, pero seguro que volverás a las praderas
para mitigar tu hambre, tu hambre de pan y poesía…
Cecilia Ortiz, Argentina
A Miguel Hernández
Bajo este cielo desvelado
repican las voces que gritaron
el temblor de un crepúsculo
porque tu nombre
fue despojado de vida
y nuestra memoria entera
vuela muy alto
para no despedirte.
Este lenguaje mío
que no logra retener
espigas
se vuelve relámpago
y
te otorga inmortalidad
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 565
Mil poemas a Miguel Hernández
para ser
pájaro y cosecha
en este universo que dejaron
tus palabras
tu esencia
tu voluntad.
Eres espejo de mis alas
-no da vértigo seguirteme impulsas y siembro
(llanura abajo
pendiente arriba)
Tuve que vencer el dolor sumergido
hacerlo verter sobre la tierra
vender lágrimas estoicas.
Quedarme en silencio
y fundar el grito
ignorando que la muerte
no es latido.
Celebro
el lenguaje de tus manos.
Celebro la voz
que no descansa (la tuya)
Celebro que naciste
bajo el sol de octubre.
A plena luz tus poemas
en mi cuerpo se hacen bandera
y tu sangre Miguel
tu sangre
reescribe lo inalcanzable.
Mara Pérez Fernández, España
QUE...
A Miguel Hernández
Que no me llame ya el viento en la mañana
que voy y vengo naciendo en mis latidos
que tengo amor en el tiempo arrebolado
voy tañen-do cual sarmiento renacido.
Que supliquen las raíces de mi trigo
que siento hambre desde ayer, poeta yermo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 566
Mil poemas a Miguel Hernández
que en el hoy se desvanecen las palabras
escribiendo así mi vida...enmudecido.
Que mi llanto no se pierda en el olvido
que tu voz hoy no se apague en el silencio
que yo bese con mis versos las conciencias
de potencias y creyentes sin prejuicios.
---0--DESAGRAVIO PÍO
Alegoría
A Miguel Hernández
Acompaño desliz su figura desahuciada
girando lúgubres tangentes desacuerdos
limando fríos entuertos en la enmienda.
reparo idílico ramaje entre tinteros.
Desagravio pío...querido hermano del pueblo;
Y no mires atrás, grita este alma herida
que somos uno enraizados en el tiempo
lamiendo pupilas en el desierto arado
envainando la espada en tu sutil caída.
Es fervoroso ese látigo que fustiga...
Ya no es reparación lo que en el mundo asoma
que somos dualidad tronando en abandono
gemir y recibir la sangre que domina
esa manera exacta de completar el todo
---0--A PESAR DE TODO
Homenaje
a Miguel Hernández
Epistolario a Josefina, en presente.
A pesar de todo, siento la esencia fluvial
recorrer por todos los canales de mi cuerpo,
regando de amor la cosecha de agosto, amor mio...
no contaré las horas vividas entre suspiros,
ni parlotearé los silencios que nos damos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 567
Mil poemas a Miguel Hernández
Todo seguirá igual, como hasta ahora está siendo
para no disuadir ese recóndito abrazo
y que no se escabulla tu sonrisa entre suspiros, auspicios
quiero sentir tu corazón en el mio en esta aurora
saliendo airosos de toda tempestad o conflicto.
Beligerante aroma renace en mi conciencia
sentir que tu me abrazas en acautelado olvido
purpúreo atardecer, irónica creencia,
y a pesar de todo nos une en este alivio.
---0--ME CONTAGIO DE TU RISA
A Miguel Hernández
Mano a mano me contagio de tu risa
y resisto a males todos sin permiso,
secuestrando mis nostalgias en la noche
renaciendo a cada paso con la brisa.
Y estás en mis latidos, Miguel Hernández...
No te esfumes poeta del pueblo
y mano a mano
resguardemos los latidos que resuenan,
no encasillo la fluidez al descubrirlos
en mas versos de penumbras cada noche.
Haz que se esfumen los temores de perderte...
Mano a mano me contagio de tus versos
y el momento se transforma en poesía,
tan hermoso es conocerte desprendido
que no quiero ya perderte en esta vida.
Por tanto
Ven, celebremos nuestro encuentro...
Y no describo lamentos enmohecidos
solo qué-date en este homenaje y recuerda
que tanto eres como somos...enamorados
en el latente fluir del nuevo día.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 568
Mil poemas a Miguel Hernández
REFERENCIA
A Miguel Hernández
Se me acerca este presente al sentirte cercano
este sahumerio ya cumple su trino redentor
explorando a mi paso tu mirada iracunda
se desnudan las almas al linaje de escritor.
Poeta Miguel, naciste en verso...
Y se duerme el ocaso al seguir tu sendero
por la arena dichosa que conforman luceros
y ese adorno sentido con aromas de cielos
es sabor sensitivo de saberse perfecto.
Y sigues cautivando ahora...
Soy de amor que se asoma a tu esencia
ese paso que abrazo aunque sigas ausente
con el beso del tiempo se suavizan las formas
esas que tu describes mas allá de tu muerte.
Y de allá vienes tú...aquí presente.
---0--DESPEDIDA
Carta que Miguel nunca envió a su esposa Josefina.
A Miguel Hernández
Esta mañana hace frío...está nevando...saberte enamorada de mi me ha dado fuerzas
para saber esperar tantos días aquí en la cárcel, se me hace largo sin tu presencia y
me lloran las palabras.
No se puede expresar tanto dolor y guardarlo sin más en el corazón, el cielo ahora
también llora desgarradores sentimientos perdidos más allá de incomprensibles
espacios vacíos, de nada sirven largos momentos de dialogo...de discusiones...si
cada ser tiene sus recursos para ser feliz a su manera...
O quizá ser desgraciado a pesar de todo...pues de nada sirven las buenas
intenciones, de nada los años compartidos, los silencios, los vacíos,
de nada sirven si no son expresados.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 569
Mil poemas a Miguel Hernández
Todo se pierde en un mundo incoloro, alejado de las buenas vibraciones, doy paso
hacia lo inevitable. Oscuro presente, plagado de sinsabores...Y cada cual con su
razón a cuestas enfundará la espada en la ironía, palabra a palabra, paso a paso,
casi siempre hiriente-mente cruel, capaz de partir en dos las buenas intenciones por
un camino solitario. Alejamiento total...
¡Seremos esposos, amantes, amigos, eso no lo dudes!
Miguel Hernández
--Al final, sus miradas resignadas, recuerdan un amor que nunca tuvo que
desaparecer, aunque lo cuidaron y mimaron a su manera. Destinaron sus mejores
horas a otros intereses, sin descubrir que la ciénaga del tedio lentamente se acoplaba
a sus vidas...ya nunca buscaron momentos de dialogo ni guardarán sus oscuros
pensamientos, ya no.
Pero renovaran sus ideas cada uno por su lado y no se darán la espalda cuando
comiencen de nuevo su andadura, recordando un amor medio naufragado por
descuidar una cubierta agrietada, desgastada, débil...
Medianoche en sus días, solo un llanto...y sale el sol.
Anna Lazo, Uruguay
Miguel…
Hombre de espíritu de papel,
manos de raíces,
corazón de tinta y de tierra,
fortaleza de olivo.
Tu palabras tienen textura de papa soterrada,
tibieza de pan, candidez de nido.
Para los más despojados
tu poesía porfiada y callosa,
se torna voz que nutre el alma,
tibia leche de cabra que se desparrama ….
se precipita y sustenta
Miguel poeta…
Pastor de palabras y metáforas,
cayado de tinta y chaleco de navajas,
te apuñalaron el alma,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 570
Mil poemas a Miguel Hernández
tantos dolores,
tantas desgracias
Miguel Hernández…
Poeta de sonrisa grande
y tristeza inmensa.
Naces en cada octubre,
floreces en los almendros
de tu tierra Orihuela,
te esparces en el verdor fresco
de las olivares altivos…
Y en cada libro,
dónde habitan tus palabras
y aletea tu alma,
llega tu voz renovada como un grito.
Anhelos
Anhelé conocer tu cara,
tus ojos de almendro florecido,
tu piel bruñida de sol en los olivos,
tu sonrisa vasta.
Busqué tu nombre,
tu silueta de hombre
inclinado en la cuna,
tu manos ásperas, tu voz y tu ternura.
Pretendí apoderarme de tus lunas,
de tu mano en la cintura de una mujer amada,
de tu rebaño y de tu cayado
Y sólo encontré tus palabras…
Y ellas tenían murmullo
de hojas de higuera al viento,
y aroma a leche tibia,
y me hablaron:
del sabor de naranjas amargas
de tu pena infinita,
de tu dolor, de tu rebeldía.
Tus versos me contaron de tu tierra,
de tu pueblo despojado, de tu amor,
de tu porfiado ardor por la vida,
de tus manos removiendo en sueños
el hueco preñado de tu dolor…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 571
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus poemas me dejaron tu fundamento,
como un pájaro dormido entre las manos…
Y los acaricio, cual si acariciara plumas y trinos.
Y cada día te descubro, poeta de cabras y estrellas,
cada día, renacido.
Lucina Medina de Barry, Australia, Paraguay
A Miguel Hernández
Mil poetas estrechando sus brazos a tu encuentro,
para abrazarte Miguel Hernández.
Un Millar de poetas sembrando flores para
que tu eterno jardín,
sea siempre primavera.
Hoy mil voces gritan tu nombre,
Miguel Hernández.
Voces que se elevan sobre la cumbre de la muerte,
para decirte que hoy,
¡estás vivo!
Como los mares,
como la brisa,
como el azul cielo.
Tu canto de paz y de amor,
resonantes,
unisonantes, por el universo entero
perennes,
como el poeta.
Un millar de voces de poetas del mundo,
Al unísono, cantando,
tu canto de paz.
Orbitando unidos en armonía,
como un halo de luz.
Quisiéramos brillar para ti,
en eterno fulgor,
colmados de amor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 572
Mil poemas a Miguel Hernández
To Miguel Hernández
A thousand poets with open arms to meet you,
to embrace you Miguel Hernández.
A thousand poets spreading flowers
for your eternal garden,
to be always in spring.
Today ten hundredth voices out crying your name,
Miguel Hernández.
Voices rising above the summits of death,
to tell you that today! You are alive!
As the seas,
as the breeze,
as the blue sky.
Your song of peace and love,
resonate,
unisonous, across the universe
perennial
as the poet.
A thousand voices of poets of the world,
In unison, singing,
your song of peace.Orbiting together in harmony,
like a halo of light.
We would like to shine for you,
in radiance eternally,
filled with love.
Julio César Benavides Parra, Perú
Entre un rebaño, poesía
De prisión en prisión
en sus oídos lacerados
se repetía como eco
que castiga el alma
“se te va la vida”.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 573
Mil poemas a Miguel Hernández
En Madrid, Ocaña y Alicante
el cuerpo se iba minando
ahí mientras luchaba contra la tos
recordaba su pasado en las tertulias
con Altolaaguirre, Alberti, Cernuda
Delia del Carril, María Zambrano,
Vicente Alexaindre y Pablo Neruda.
quienes acompañaban con alientos de literatura
y compañía fraterna.
En el espejo del tiempo
en espacios de intensas lecturas
la poesía fluye
desde sus poros
para llenar varias hojas
él, joven pastor
devoraba libros.
Cuidando cabras y
repartiendo leche
en cada casa
Calderón de la Barca
en su memoria
lo llenaba de contento
por el deleite de la literatura.
En Madrid al
ir por primera vez
vio disminuido su orgullo
y luego regresar a Orihuela
su añorada tierra.
Antes del último minuto
sus fuerzas se menguaban
y volaba su espíritu.
Fuertes dolores, hemorragias agudas
golpes de tos
Miguel Hernández así abandona
el mundo terreno
sembrando poesía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 574
Mil poemas a Miguel Hernández
José Pablo Quevedo, Perú
Dónde el latir del corazón irrumpe
1
Fantasía intuyente del sueño justo
hecho cuerpo de la tierra, hecha viento,
no construiste artificios Miguel Hernández,
sino la esperanza te llevó junto
a su nave permanente.
En donde la flecha halla el blanco certero
está el verso hecho voz sobre la colina,
y pasa por las calles de los pueblos,
brota sonora de los puquios,
sale por la ventanas de los graneros,
y levanta la yerba a su espiga alta.
Donde el latir del corazón irrumpe
tu rayo no cesa por la Tierra.
2
Como ola regresiva despunta el verso con el viento,
para todas las lenguas atentas y receptivas.
Pues siendo el poeta el hacedor del verso,
tiene el rayo, y el rayo es la palabra
en un sol levantado y tierno
que deja elevarse a las palomas a los cielos.
3
Poeta hacedor del verso que anima
a rotar hasta la misma Luna
en nuestros pensamientos,
el ideal es el segmento de una estrella
que se lleva en la sangre como brasa
y que pasa por el alma.
Tu proeza queda detenida
en la poesía hecha coraje,
galvanizadora del rayo que no cesa.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 575
Mil poemas a Miguel Hernández
4
El tiempo del ingenio
es constructor de lo duradero,
que lleva en su boca los vientos de los pueblos.
Poeta, siendo uno fuiste cien y fuiste mil
en el canto
que aún cantan los pueblos en la lucha.
5
La razón discurre
para hallar en la palabra el fundamento,
oero el corazón que no es diletante,
sabe lo que tiene una y otra orilla,
sabe lo que nace y lo que emerge,
sabe donde está la energía incesante,
y ella intuye la dimensión del amor
y se lo entrega a los que otros necesitan.
6
Tu República era la higuera, el limonero,
las aceitunas y las granadas
nacientes de la tierra compartida,
de la tierra solidaria.
El canto aldeano es mas fuerte
El canto aldeano es más fuerte
cuando tiene luz y cuando tiene viento.
Poeta tú los recogiste de las colinas
cuando niño pastor de Orihuela fuiste.
En noches consteladas, los labriegos
celebran sus penas con guitarras,
hablan de sus necesidades cotidianas,
de lo que nace y de lo que muere
Hay en los hombres un resplandor en los ojos
y en las mujeres un aire soberano,
ellos los fusiles levantan y condenan al tirano.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 576
Mil poemas a Miguel Hernández
Pues cuando se rasgan las guitarras
llega el mensaje del hermano
y se hace el viento más huracanado.
Dos poetas van de la mano
Cause de dos ríos,
fiesta aldeana en Orihuela,
Sevilla y Andalucía.
García Lorca y Miguel Hernández
ante la noche estrellada
las guitarras nos conmueven
el fuego no se apaga,
En los dos vuelve
la nube hecha viento
y corre al río sobre lo verde.
En el verde está el querer y el amor
y está el padecimiento,
pero en el viento corre el canto del pueblo.
García Lorca y Miguel Hernández,
en uno el ingenio y no lo vano,
y en el otro, lo sabio y lo abnegado,
dos poetas van de la mano
y el tiempo se hace tiempo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 577
Mil poemas a Miguel Hernández
Luisa Oneida Landin Ramos, La Habana, Cuba
ELEGÍA
Al poeta Miguel Hernández de España
El hombre no reposa: quien reposa es su traje
cuando, colgado, mece su soledad con viento.
Mas, una vida incógnita como un vago tatuaje
mueve bajo las ropas dejadas un aliento.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Un manotazo duro, un golpe helado
quemando las mejillas con su aliento.
Desprovisto de todo, asido al viento
la vida que retorna de un costado.
Porque el hombre va sujeto al arado
rendido a la dimensión de la tierra.
No hay reposo para su propia guerra.
En la llaga queda su amor tatuado.
Gris reminiscencia, inflamada vela.
Bajo la lluvia estridente va el jinete
dejando su rumor de piedra. Espuela
sobre las ancas que lo han derribado.
Se levanta el poeta y su voz promete
cantar al universo, desde Orihuela.
Felipe Oliva, Cuba
MIGUEL DEL ALMA
Miguel libertario
Republicano por convicción
Aeda de los pobres de esta tierra
Militante de España y del futuro
Tú que además de hombre fuiste
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 578
Mil poemas a Miguel Hernández
Viento de Pueblo
danos un Sur para saber
con qué verbo
con qué estrofas viriles
con cuántas azadas latinoamericanas
podemos arar
este presente convulso
en el que la ternura parece
una mala palabra
Miguel labriego
Ovejero de poetas
Tú que abogabas porque tuviéramos
cojones en el alma
dinos qué hacer
con esta cebolla mundial
que en la cuna del presente
no cabe en ninguna nana
Filemon Zacarías García, México
POETA DE LA LUZ…Y LA VERDAD.
Poeta tierra…poeta verdad, poeta de campo y vida
de sangre y flor.
Que exprimió a la guerra…
su mies de amor.
Alondras y cebollas…geranio y muerte
la vena de tu ideal
mamó en la fuente de cabra y arte
y sembró la idea…{de libertad}.
Tu hijo de la luz y de la sombra
es ave fénix…que troca en calma
al desgarro de tu obra
que es fiesta y magia y es acto y alma.
Miguel Hernández hombre
El poeta antifascista
el que trastoca el hambre
el artífice de pájaros que cantan
y siembran en la tierra
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 579
Mil poemas a Miguel Hernández
Las letras que levantan…con ansias de verdad
¡Un eco que retumba!¡Poesía y humanidad!
SONETO A MIGUEL HERNÁNDEZ.
Hijo y soldado de la luz eterno
fértil milagro del hacer fecundo
nos diste un Lázaro que vuelve al mundo
dando al dolor reminiscencia tierna.
Y al fin venciste al hambre sempiterna
con esa pluma de sentir profundo
legaste al mundo tu grito iracundo
de ¡Humanidad! Y de propuesta alterna.
Actuando siempre con gran heroísmo
mas de una vez burlaste tan cruel suerte
y escribiste para la libertad.
La cárcel no detuvo tu idealismo
ni tu hacer se detuvo con la muerte
¡Sos poeta para la eternidad!
Edna I. Díaz Resto, Puerto Rico
Pido permiso y perdón a Miguel por escribir estos versos
sencillos que nacen a la luz de mi alma.
Obrero, pastor, poeta,
visionario fuiste acción donde empeñaste las palabras
y soñaste con un mundo mejor para los tuyos de la Hispania,
pobre, olvidada y atormentada por guerra fratricida de ideales
que fueron truncos por las bayonenses tormentosas
como truenos y lluvias en la primavera.
Morenillo feroz soñador soñaste
la liberación del pueblo a través de tus versos ingentes.
Con voz clara y audible reclamaste la justicia que el pueblo aclamaba para sí.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 580
Mil poemas a Miguel Hernández
Eres el rayo que no cesa,
Miguel en tu frente azahares
te coronaran las musas
y desde un reino mejor te llamaran: ¡Poeta!
María Rosa Rodríguez Araya, Chile
CUANDO MUERE EL SOÑADOR.
“Cuando muere alguien que nos sueña muere una parte de nosotros”
Miguel de Unamuno
¿Qué haremos sin ti, Miguel?
amado hijo del olivo
alma sensible
tifón eterno de versos
toro de espíritu libertario
vendaval de matiz sonoro
aura predilecta de Orihuela.
Cuando el soñador muere no lleva consigo:
todas las lágrimas derramadas color sangre,
que recorrieron España entera.
La voz lírica del pueblo sufriente
con olor a tomillo y olivo en las venas,
el desconsuelo de los niños yunteros y explotados
de esta sufrida y atribulada tierra
y a los que se alimentan con sangre de cebolla
por la insensible y ciega codicia ajena.
Esos inolvidables versos quedan
muchas veces expresados en ocultos mensajes,
guardados como tesoros en modestos sacos
hasta que se liberan
sólo cuando sepan volar a buen resguardo:
a las dominios de Jaén,
el de los aceituneros altivos,
que curvarán sus paternales ramas para acogerlos,
por fin, en buena tierra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 581
Mil poemas a Miguel Hernández
Ofelia Nancy Aguiar Rodríguez, Michigan, USA.
A TU HONRA
M etáfora profunda talló tu vida,
I nocencia fraternal pulsó tu alma,
G allardo y valeroso rostro en calma,
U n símbolo enriquecedor al que te admira.
E locuente letra impresa...
Llena de dolor con añoranza.
H onda melancolía entre barrotes,
E xistencia fugaz desde la cuna,
R omántico volcán, cual luz de luna.
N aturaleza y amor, vital locura.
A pasionado y pastoril, gozo perpetuo,
N ecesidad de plasmar con ágil pluma
D esalientos, sollozos, remembranzas...
E scenarios mitológicos divinos, en el
Z énit de inmortal literatura.
Grace Fares, Brasil
1º)
Pastoril em Poesias
Prosa poética
_Quem é aquele rapaz distraído
em pura leitura?
É algum profeta?
_ Não!
É o pastor daquelas ovelhas soltas e tranqüilas no campo,
Miguel Hernandez que, sentado na sombra da árvore, em
grande arbusto, arfa seu busto suspirando com a poesia
de Pablo Neruda, seu futuro amigo, sem par.
Em igualdade de versos, juntos viajarão, por um mundo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 582
Mil poemas a Miguel Hernández
onde, o sonhar com o teatro e o social faz-se morada.
Em meio da natureza, observa sua beleza, simplicidade e mistérios.
Sonha com um mundo melhor e com a fama de seus versos,
a espalharem-se pelo mundo, a lerem suas palavras com aficionamento.
A meio dos lírios e jasmim, põe-se a compor FEBRILMENTE;
O poeta de costumes simples e alma de menino;
Mas, homem de caráter firme no saber, adquirido às duras penas;
E no sofrer para sobreviver brevemente, nesta terra e vertentes.
El Rayo Que No Cesa
Rondel
Miguel Hernández El Poeta!
El Rayo que no cesa.
Sus bellos versos encanta la más bruta mente, decreta...
Recuerdome de su gran amor por Josefina Manresa.
Soñador y lo más bravo soldado de la tierra esa;
Oh! España, abraza su valiente hijo, que lo pueblo respeta.
Miguel Hernández El Poeta!
El Rayo que no cesa.
La guierra, el desespero de la vida humana, se esqueleta.
En su bondad, su alma y corazón muertase.
El Rayo que no cesa.
Miguel Hernández El Poeta!
Jaula
Poetrix
Rayo de metal crispado
Fiebre, tos, sangre
Un poeta cae...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 583
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
DUO
Aphostrofe
M i corazón lati cuando estúdio sus obras.
I dealista fervoroso!
G anador de la gran sensibilidad y humildad;
U niu lo mondo en su alrededor;
E bullición del emoción en nuestro pecho hace ahora;
L as suyas palabras son golpes certeros de lo amor incondicional.
H ambrientos, quedamos por más y más palabras suyas;
E llas tienen la frescura y sabor cítrico frugal de los campos;
R aciocínio de lo racial deseo de la mente humana.
N adie comparase en su manera ardiente de lo escribir;
A hora hacemos saludos y honor en su homenaje;
N acientes nácar con inmenso placer, mucho justo!
D ar bienvenidos, saludos en la pelegrinación a lo mondo en su honor y gloria;
E n cada jornada;
Z afiros, diamantes y brillantes rojos, sandalo y inciensos con lo aroma de naranjas
frescas para nuestro delicado hombre-gusano de seda pura...
Granada
cuadra
La España cubierta en lo manto del sangre,
de las inocentes personas muertas y heridas.
El dolor hace habitación en las carnes de la parentela
de los afectados por granadas lanzadas locamente en los aires.
Constraste
Poesia minimalista
Lo Sol y la luna dan vida en sus versos
de amor, y brillan los versos de la naturaleza,
su madre, a lo enseñar primeramente
sus pasos de la admiración de su belleza ímpar.
La noche sin estrellas, oscuras, hablan sus versos
del vida vivida en la soledad, sin pan, sin dinero.
Aunque tenia en su vientre lo sufrir de las dolores hondas del pueblo.
Cuando la muerte llegó en su puerta; muriu lo poeta,
Los versos pálidos, expiraran, toda la naturaleza sufriu.
Y desconsolada quedóse la poesia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 584
Mil poemas a Miguel Hernández
Vientos Del Pueblo Me llevan
Poesia Libre
Vientos acercan y me llevan en su tempestad incontrolable
lluvia de sal en las heridas del pueblo,
del mismo modo, un volcano de sangre hace arriba
en la tierra, donde los muertos con sus fusiles fieles
en sus lados, acechan la hora de recoger los restos
que aún expuestos hacen la paisage que asusta lo dia.
Hambre, pavor, miséria, muerte, sufrimiento, peste
y lo helado de la guerra, para en lo aire
hediondo, hacendo lo viento entrar en las fosas nasales
del pueblo desesperado, en la dolor por el cual ningún
consuelo viene por sus torrenciales lágrimas.
Y yo, estoy a sufrir con mia cabeza baja,
Cono un buey adelante del abate, detenado,
ante la impotencia, ser solo uno a ver ahora,
que vais de la vida a la muerte por nada, sino,
por la maldad de los pensamientos que tiene
lo poder en sus manos.
Sacrifican lo pueblo por casi de los propios
Intereses...deseo ardiente del poder.
Y asi, vais de la nada a la nada.
Pero, yo estoy aqui...
pegando fuerza, lleno de la coraje,
pero murriendo...
Ah, España!
Vientos del pueblo me llevan creer,
que aun pobre, sereis libre y feliz.
Botica Del Miguel Hernández
Poesia Libre
Vai Morena, vai...
Para adónde la lechuza duerme,
en los dias pacíficos en los campos de Orhuela.
Puedes bañarse en lo rio de las tierras del pastor.
Miguel Hernández tiene gran noción del benefícios
del leche de cabra, baño del rainha;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 585
Mil poemas a Miguel Hernández
de los herbários y flores para sus perfumes y colonias, suave buque.
Te vá querdarse en hermosura.
Tiene también granos maravillosos,
preparados com genialidad de la alquimia
para su buena salud, retardandose lo envejecimiento.
Siente lo aroma del pan em lo horno creptandose.
Mira la sombra debajo del pie de naranjas,
fresca y bella, adónde puedes desfrutar la
buena lectura de las poesias hechas por el,
para lo deleite de su alma.
Las manzanas són más rojas, mayores de dulce
sabor, te vá gustar.
Las mañanas, los rayos del sol calientan su cuerpo;
Los verdes del campo dan color a sus ojos e,
las margaritas blancas, adornaran sus cabellos.
Puedes beber a tragos la água del cascada de la mina.
Y asi admirar los peces que viene en las orillas del rio,
Para nutrirse, resollar y saltar alegres uns con los otros.
Pero no olvide de desfrutar de la árbo,
cultivada con mucho cariño y desvelo
por Miguel Hernández...
La arbol del amistad, amor incondicional, fidelidad,
humildad, lealdad, fuerza de voluntad, ganas de triunfar y
todas las cosas, y buenos sentimientos, enseñeados por el.
En la botica de Miguel Hernández!
Vai morena, vai... Las rúbias... Muchachas... niñas...
Toda la humanidad sin discriminación...
Y usted, vamos?
El Toro
Cuadra
Levantate toro, no retrocede, uni todas sus fuerzas;
Vien con toda suya fúria en la arena, hace golpes
sangrientos en todos enemigos de la paz.
Los toros dientro de nosostros, salváte y salva la humanidad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 586
Mil poemas a Miguel Hernández
Vals de los Enamorados Y Unidos Hasta Siempre
Poesia Libre - Amor
Dientro de sus piernas,
a danzar Choppin estoy.
En cada vuelta de esa danza,
abrazado en su cuerpo,
siento su aroma de la rosa en flor abierta,
que me llama, que me saluda,
como um rayo caliente eclipsado,
por nuestros amor y deseos em esa vals.
Su boca roza mi piel,
Invitandome en un beso
com ganas, como fuese lo ultimo.
Quedome a besarte locamente como se me fuera a murir hoy
En esa noche fresca y bella he dejado la luna y las estrellas,
como nuestras testemuños, cunplice del nuestro desvello.
En nuestra danza, ascienden nuestros sentidos,
Y dos lobos sedientos, eléctramente en las águas
vibrantes, matan su sede de lo amor .
En la mañana...
El sol, la rosa y un niño, en lo vientre;
Gera!
Con todo el furor, danza la muzica de la vida,
fructo del nuestro amor..
Nuestros corazónes són águas
que se acarician y cantán:
Unidos hasta siempre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 587
Mil poemas a Miguel Hernández
RECOGED ESTA VOZ
Acróstico
A R riba mondo
E scuchame naciones
C ancioneros, gitanos, todos los pueblos...
L O tiempo urge;
Re G oged este viento;
Yo Clamo p E la paz en lo universo;
D ios, mira nuestras dolores.
E stes pueblos, pobres, com males governos;
Ya S in esperanzas de dias mejores
Es T os pueblos a sufrir y morir, por casi de guerra
A plicad la hermosura del amor incondicional;
In V encible por su passión a la vida,
Esto és mi clam O r a ti padre mio, del cielo.
De lo hondo del mi cora Z ón. Amen!
Comentário (Grace Fares):
Dos livros que li de Miguel Hernández, suas prosas e poesias, duas citadas acima,
nos itens 12 e 12.1;
LOS COBARDES;
CENICIENTO MUSSOLIN;
EUZKADI;
Entre outros, de igual emoção e pujança, temos um homem de grande caráter,
destemido, corajoso, sem fazer convenções aos maus sistemas de governo, de
injustiças de todas espécies, que lutou bravamente, inclusive com as palavras,
simplesmente, por não ter medo delas e nem de quem iria lê-las.
Visceral, enquanto não externava toda sua revolta e ódio para o papel, não largava a
pena, mesmo que escrevesse mais de 100 estrofes.
Suas escritas tinham remetentes diretos, não deixando dúvidas de quem poderiam
ser.
Miguel dava nomes aos bois.
Também gosto da sinceridade e da verdade, por mais que venham a doer, machucar,
prefiro-as, e também digo-as, sem nenhum constrangimento.
Bravo Miguel Hernández!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 588
Mil poemas a Miguel Hernández
Entretanto, era um escritor de um lirismo fantástico...
Miguel Hernández não tinha problemas com as palavras e, muito menos, com as
Interpretações de cada um dos leitores da época.
Homem sincero demais.
Adorei ler Miguel, e aqui segue algumas poesias em uma pequena e modesta
homenagem, que faço, despretenciosamente, com alguns títulos do magnífico Miguel
Hernández.
Como também, não tenho problemas com as palavras, em igual causa de Miguel
Hernández, responderei aqui, as poesias dos itens 12 e 12.1.
Porém, mais concisa, dando apenas uma resposta às duas poesias, parafraseando
Miguel e também fazendo meus versos e, meus pensamentos em palavras, mais um
misto poético, ou talvez um dueto em humor negro..
Vamos ver no que vai dar?
Adelante mi pueblo poeta!
Miguel Hernández y Grace Fares
Los Hombres Vejos Mando a Don Gil de Las Calzas de Ceda
Humor Negro
Nacen en una perilla obscena de culo de bellota,
y calvos, caducos, esos hombres vejos.
Venís de la Edad Media donde no habéis nacido,
Trapos, ruindade, polvos, momia, defuntos, cornisas malas paridas.
Nunca fuisteis muchachos, hijos de puta.
Se llevan la barba de goma a la cintura, casi no te gustan los baños.
Putanas los parien contra gusto.
Mejor que la naturalleza en recuersos propios
no dejace nacir esas senis almas del inferno,
que terrorisan y mandan a la muerte inocientes,
del pueblo de la poca suerte y ninguna culpa;
En sus sentenzas sin causa y nin estudio, solo por el placer de hacer sentenzas
aborgados y jueces, filósofos de mierda que solamente hacen caca.
Salen de la sus casas con dignidad del asno;
En su portón, se quitán la careta, y un aire del
aliento en largo sonrisa por seres libres de sus mujeres,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 589
Mil poemas a Miguel Hernández
abrem sus caras como una acordeone.
y ellas de vosotros, donde sus amantes adentran
en la puerta del hondos.
las putas de la sociedad, putonas de importancia, trapos también.
las veces son marquesas vejas con sus nuevos amantes, niños
que gustan del diñero de ellas.
Otras, muchachas, que cambian información por lo sexo y joyas.
Gallinas…
Disimuláis ambos cuernos con lata del pece podre
Vosotros enojan!
Los hombres vejos mando a Don Gil de la calzas de sedas.
adheridos a varios ministerios,
a varias oficinas por el ocio amuebladas.
Con el sexo en la boca canosa, van muy serios,
trucosos, maniobreros, persiguiendo embajadas,
hacen trama como las mariquitas que nadie tiene que hacer en sus casas,
en la baja alcova del Don Gil de las calzas de ceda.
Todos exhombres estón, esos carniceros, hijos de puta.
Pedos con barbacana, ceremoniosos pedos,
de sus senis anos verruquicidos, y lenguas callosas,
a saludaren el ano hambriento del Don Gil de las calzas de ceda,
gusano del zapatos altos, tieso la devolver los robles
que los mandaran en la espada del todos sus soldados
en su espalda de las nalgas hinchadas horribles, de cullo arrombado, como lo de
vosotros.
Vosotros són todos iguais en sus actos desumanos, ruindade e ignomia;
Sus porcos y prehistóricas desgracias mentecata!
Cuanto a usted, Don Gil de las calzas de ceda,
Con su mal aroma de cebolla debajo del brazos,
Gil, gilipolla, carnicero hijo de puta;
Mandote des milliones de veces al carajo;
Seo cara de culo, pues tanto pus episcopal apoya.
En sua alcova e fuera dela, esos demoneos
pedófilos que acercan los niños, con sus garras
del gusano del diablo, su amigo.
Esas personas (personas?) aun mucho más males hacen en lo mondo hoy,
como en la inquisición… Tratan del sus bienes materiales,
aunque sea las penas del sangre del sus fiéis, y instigan las guerras.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 590
Mil poemas a Miguel Hernández
Lo infierno eres sus morada, han de ser quemados,
más que mandaran personas al fuego, bestas hediondas.
La vida es otra cosa señores, seos hijos de puta.
La vida es:
Sin guerras, dignidad, con pan, con respecto a la naturaleza y su totalidad.
Los Rayos Que Los Partan
Poetrix
Tristes Guerras, el aire de la muerte
Hediondo tratado maldito
Benito Mussolini y Hitler.
Todo Era Azul
Poesía Libre
En su cuerpo desnudo,
Venia en la su piel la color,
del cielo y mar diurnos.
Color de las mañanas frescas
Y cálidas de las montañas en lo verano.
Su precioso sonriso blanco,
Cono lo algodón me saludaba
En dulce harmonia con los pasaros a volar.
Sus ojos dorados ahora hasta muy lejos.
Dantes eran como un solar de espejos.
Espejos de los bellos reflejos en todo radiaba a mi cerca.
Mis ojos dorados en la sombra, y entrañable verdes en lo sol,
hablaba a ti mis sentimientos del mi amor.
Su cuerpo, su piel, sus ojos… Azules… relucientes…
Ojos como nacientes de las mansas aguas,
Hacia mi cuerpo tremer cuando yo venia la sentir
aquella mirada inundadora hallaba, me devoraba.
En sus rayos azules toda la claridad brotaba de
su directo roce, yo me vivificaba.
Todo era azul delante de ti;
en los nuestros días y noches,
en la horas que juramos ser amor por siempre.
Pero devoraran nosotros y lo azul diurno quedose
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 591
Mil poemas a Miguel Hernández
en rojo vejo del días y noches sin brillo.
Como la muerte… Y las luces…
Frágiles luces de un amor adormecido;
Por ti muerto!
Del color azul noche, sin luna…
No soy feliz, condenada por la agonia,
De la mi muerte por amor a ti.
Cantar
Poesia Minimalista
Tu herramienta és tu risa,
que mi corazón alienta.
Sobre la grama nuestros cuerpos yuntos, rie.
Seguimos asi nuestras vidas, enamorando.
Y entre el clamor de los nuestros risos.
Ponemos a cantar nuestras passiones
por nosotros, cantar la canción de la lluvia,
y de las rosas y jazmines que danzan,
la canción del nuestro amor.
Casida Del Sediento
Poesia minimalista
Deserto del arena,
Deserto de sed
Yo soy sediento,
Tu boca és oasis.
Dame de beber de la tu boca.
Tu cuerpo és un pozo.
Deja me mojar en ti,
en tu amor.
Aun és un placer amarte, mujer
Yo No Quiero Más luz Que Tu Cuerpo Ante El Mio
Poesia Libre
Eres claridad absoluta que quiero
Abrazar, besarte mi rayto de sol.
Tu transparencia és la luce del dia,
mañanas llena de las flores del primavera.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 592
Mil poemas a Miguel Hernández
Tu pecho tiene la profundidad de las aguas
de lo rio límpido, done se ve lo hondo de la
tu belleza ímpar de la suma esencia,
del tu boca.
Tu fulgor acercando los otros astros,
más estos son lejos del tu lumbre.
Quiero tu cuerpo claro de los pelos fecundantes
de la clara sombra azul.
Mi aroma del cielo;
Solamente yo no quiero más que tu cuerpo ante el mio.
La Mirada Distante
Poetrix
Sombra clara suma esencia
Día azul
Noche que vienes.
Astros
Triplix
Vienes / la Luna / Llena de amor
lo sol / calienta / tu cuerpo
en la tierra / tus ojos/ dorado del fulgor
19 DE DICIEMBRE DE 1937
Cuadra
Tal cual la luna llena, brilla más;
Eres más terna, eres más suave, eres más clara.
Deslumbrante, rie y llora com ella, com su complicidad.
Eres Madre!
Suma Esencia
Poetrix
Calor fecundante
Noche clara
Acercando los astros…
El Hombre No Reposa
Poetrix
Un tatuaje
Ropas al aliento
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 593
Mil poemas a Miguel Hernández
Todo late y avanza.
Lleno de Luz
Poetrix
Existe el dia brillante
Un hombre
Miguel Hernández
Vuelo
poetrix
Volar, amar
Un ser ardiente
Doce caos…
Espada Devorada
Poetrix
Triste instrumento
llega el uso constante
No más claramás!
Sepultura de la imaginación
Cuadra
Piedra tras piedra.
Era piedra su gente.
Donde estás ahora?
En su velorio de la imaginación.
Eterna Sombra
Cuadra
La luz era mia, agua solar,
sideral luz de deseo.
La mia luz se fuera.
Hedionda granada, sólo sangre, sombra… Eterna…
Sabes?
Poesia Minimalista
No puedo vivir longe de ti;
De su piel morena clara, esposa amada,
del su aroma de lo jasminero, del rubio de su boca.
Siento que sólo la sombra me alumbra;
Maldita lucha, maldita guerra, malditas muertes...
Siento gran soledad de ti.
Te necesito, amor de mi vida!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 594
Mil poemas a Miguel Hernández
Sabes?
El Soldado Y La Neve
Poetrix
Donde el caballo pisa larga ruína
El soldado se derrama…
Es una soledad y un galopante luto.
Aratan Julio Piovesan, Brasil
MIGUEL HERNÁNDEZ – O POETA
Aphóstrofe
M iguel Hernandez, sua vida
I nda que em sua infância vivida e passada entre suas ovelhas
G arantindo a subsistência da familia, mas mesmo assim
U m sonho a acalentar, ser alguém na vida, ser poeta
E , sonhando alto, mente aberta, entre arvores, natureza
L idavas com sua maestria de poeta resolvido e acreditado
H ouvera de ser alguém na vida, e para tanto
E staria sim, de igual a igual com os melhores
R evolvido, resoluto, e assim, tentaria por força do querer
N ada o impediria, nenhum obstáculo o faria desistir do sonho
A o qual o destino o obsequiara...o de ser poeta...
N em mesmo as portas que se fecharam
D esde que assim resolvera partir a procura de seu destino
É s, Miguel, sonho e meta de muitos, um digno exemplo
Z eloso com as palavras, sua vida passada, sufrida e finalmente por...
muitos reconhecida
ACERCA DE UM POETA
Tive acesso á vida deste grande poeta, relendo suas obras, sua vida, seu sofrimento, e
considerando o que falar de um grande poeta, Miguel Hernandez, para mim, foi um
marco de exemplo a que se deve seguir os adeptos da poesia. Suas obras, de enorme
caráter solidário, naturalmente se envolvem com seus contemporâneos, sua luta pela
liberdade de expressão, e sua afiadíssima cultura natural, o fizeram crescer entre sua
ideologia, e as dificuldades que encontrou, para difundir suas obras, me fizeram dar
sonoras gargalhadas, principalmente nos capítulos em que falam de suas
correspondências.
São pérolas escritas. Seu vernáculo é insofismável, único e pessoal.
Seu caráter, moldado entre sua liberdade entre as planícies, onde tangia suas cabras,
seu contato direto com a natureza, o fizeram rude, mas de um coração extremamente
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 595
Mil poemas a Miguel Hernández
bondoso e poético. Suas obras falam por si. Não há nada nele, que se possa dizer
desfavorável, apenas que a vida foi cruel demais para um poeta de seu quilate e o
levou cedo demais para junto do criador. Não há mesmo mais nada que se falar,
apenas que a literatura mundial perdeu um digno representante.
MIGUEL HERNANDEZ
Comentário – Homenagem
Sei-me pequeno, apenas tenho nas palavras o ensejo de saber-me capaz de prestar
justa homenagem a quem foi um marco de abnegação e vontade, como Miguel
Hernández, sua férrea vontade do aprendizado, a lapidar um humilde pastor, que
embevecido pelas letras o conduziram pela curta vida, mas que deixa à posteridade
obras geniais. Muito desejaria em dias de hoje, haver-me espelhado em seu exemplo
de vida e dedicação às letras.
Tenho diante de mim, a grandiosidade de suas obras, e deleito-me a saborear
verdadeiras pérolas da literatura ao ler sua vida e obras.
Não poderia ser uma simples homenagem a tão ilustre poeta, como foi Miguel
Hernandez, mas tentarei prestar minha admiração a pessoa em si, pela vida,
abnegação e dedicação sem par deste grande homem.
Desde a infância, Miguel Hernández teria contato com o que, de mais nobre em sua
vida: sua infância, vivida nos verdes campos aos arredores de sua cidade natal
Orihuella, a pastorear cabras, seu interesse natural pela liberdade de expressão, seu
interesse pelas letras, o levam a criar poesias cheias de aspirações e emoções, que o
conduzem ao mais alto escalão da literatura mundial. Suas obras o distinguem dos
mais renomados poetas, pela beleza natural, pela humilde forma em que se baseia,
quando já tendo mais de mil escritas, corresponde-se com outros poetas de sua época,
para que lhe recebam em suas residências e tomem conhecimento de suas obras.
Queria com isto, granjear conhecimentos até então ainda sonhados, época de grandes
obras por si escritas, em baixo de arvores, enquanto a suas cabras pastoreava.
Suas primeiras escritas, desde sua infância o conduz ao encontro de grandes e
afamados nomes, e pensa o jovem Miguel, em conhecer e tentar sua vida,
aprendendo e enriquecendo o seu já invejável gosto pela literatura. Aos 31 anos,
vitima de doenças adquiridas durante seu período vivido em cárceres, vem a falecer.
Deixa obras magníficas entre as quais Image de tu Ruella escrito aos anos de 1934.
Movido por despretencioso desejo, quero prestar mais esta homenagem a este grande
poeta.
Sei-me pequeno, apenas tenho nas palavras, o ensejo de saber-me capaz de prestar
justa homenagem, a quem foi um marco de abnegação e vontade, como Miguel
Hernández.
Sua férrea vontade do aprendizado, a lapidar um humilde pastor, que
embevecido pelas letras o conduziram pela curta vida; mas, que deixa á posteridade
obras geniais.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 596
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
Aphóstrofe
M iguel Hernandez, suas obras são pérolas que leio
I nteiramente maravilhado a curtir com sofreguidão
G entil homem, sábias palavras as tem e transmitem-me
U ma sabedoria sem igual, modesta, simples
E motivo, ás vezes triste, e também satírico
L eal, porém aos seus princípios e origen
H ás de, meu bom homem, ser lembrado
E m sua dura caminhada pela vida
R azões de ser o que fostes, meu bom,
N o afã de aprenderes, nada mais, fostes ensinar
A quem em horas mil, o ensinava e educava
N ada mais que amar o próximo, e sentir
D entro de seu coração, o amor a vida.
E este, Miguél, é simplesmente , você
Z agal e, mestre dos mestres
Jorge Quintanar, México
VIENTO SOY
Viento soy. Viento que por prados y montañas corre
viento que juega con las hojas del limonero
con la libertad de viajar ligero sin esfuerzo
sin apenas levantar el polvo
y así llegar hasta ti
sentirte y que me sientas
dibujar tu silueta en arena
acaricio tu reflejo en el lago
cuando tu belleza calla al sol
y desnuda me brindas húmedos rincones
viento soy que mueve tus rizos
cuando distraída caminas
y sin que lo notes ciño tu cintura
antes de alejarme con mi pena.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 597
Mil poemas a Miguel Hernández
LA MÁSCARA CAYÓ
La máscara calló
tras el destello gris
ligera en el carnaval
distinta a la muchedumbre
iba vestida de blanco
con su eterna sonrisa de navegante cansado
pasó junto a mi
sin detenerse
sin mirar a nadie
ausente de si misma
no tiene noción el tiempo
en las salas de hospital
rompe gemidos largos
en la guerra
yerma territorios de noche roja
vaga por el Universo
la encantan lugares de oscuro pasado
de superstición zurcida a las costumbres
donde el frío humedece las cobijas.
Se que vendrá
me enseñará su magia
sus cavernas ancestrales
secretos ocultos en el polvo
se irán con la luz de mis ojos
seré un punto más en su manto
asumiré la verdad
dormida
desnuda junto a mi
será
mi última dueña.
UN RAYO PARA MIGUEL
Un rayo absurdo como lluvia quema
solitaria serpiente en la montaña
mordió mi rostro que la luna baña
un salto hace que por mi vida tema.
Insólito suceso casi mata
eléctrica corriente cruza todo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 598
Mil poemas a Miguel Hernández
dejó mi corazón parte en el lodo
pude asir el hilo que mi vida ata.
Será que su furia insano invoco
para atormentar insolentes nubes
corren por mi sangre oscuros entes.
Tu rayo terco clavó en las mentes
como esencia encontrada alto subes
quizá pienso escalar la muerte un poco.
Eugenio Ernesto González Aguilera, Cuba
Poeta de la humanidad.
Miguel,
Aún sostienes el rayo que no cesa
entre arcos y puertas quebrantadas.
El grito del amor y de la muerte
perdura en el cuerpo descarnado del tiempo
y una multitud confusa
desafía la vasta soledad y la injusticia
en un presente incierto
de violenta soberbia y clamores sepultados.
Poeta de la humanidad,
Allí, donde el genio de los hombres
renueva el gemido de los pueblos
pregonando la guerra
te yergues con ímpetu ilimitado
invocando tus compañeros de batalla,
tu amante esposa, tu Patria, tu Dios,
para vencer sortilegios y designios
con la luz que procede
de la intensa desnudez de tus palabras.
A Miguel Hernández.
Por combatir soberbias de hombres vanos
enfrentaste tu pecho a la injusticia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 599
Mil poemas a Miguel Hernández
plantaste la esperanza en la avaricia,
brotó amor de la muerte entre tus manos.
Te anudaste al dolor de tus hermanos
en la suerte fatal que al hombre enjuicia,
viste el morir que infame desperdicia
la vida de inocentes y villanos.
Cantor de primaveras y veranos,
tu voz aúna, vibra y acaricia
entre montes y mar; cumbres y llanos.
La luz del pensamiento en los humanos
buscará entre tus versos su primicia
multiplicando sueños de paisanos.
Ana Romeo Madero, Argentina
Para Miguel Hernández
“Para la Libertad”...
Contigo no han podido ni pueden ni podrán
tampoco te callaron encerrándote
ahora en libertad lo dices Todo
diluvio iluminado es tu palabra
que descubre escondites
seguirás destapando muy negros agujeros
miserias
cobardía
disimulos
enredos
repugnantes tramperas con fuerte olor a muerte
celadas perpetradas por los gobiernos sucios
que diste a conocer al mundo entero
no te han perdonado ni lo harán:
las Colonias son muchas
- por ahora la esclavitud pulula entre sus Calles
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 600
Mil poemas a Miguel Hernández
aceitunas y miel sólo mentiras
estiércol - podredumbre realidades
derribaste fronteras
marcaste a “poderosos”
sin embargo
tu lucha ni tu sangre alcanzaron
alejemos de una vez por todas
herencias de dolor
ayúdanos
Miguel
desde la LUZ
¡ahuyentemos las penas!
Vivianne Layseca, Perú
A Miguel Hernández
PASTOREO DE AMOR DICHOSO
Miguel Hernández poeta y cantor
nos ha dejado una guirnalda de soledad y
desde los montes una vida sosegada
Hijos suyos somos en el mismo cantar
aunque en la brasa del morir en su dolor
tengamos un arduo trabajo
Llegó junto a la esperanza de una rosa que
se hizo espina cuando murió el gorrión y
consuelo de ajena sombra eterna
EN TI UNIDOS
Somos gloria desde tu morada venida del cielo
Amor y cuerpo desatado
Porque en este corto amarte en vida
tu llama nos persigue sin medida
para ser en ti vivo y entrañable gozo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 601
Mil poemas a Miguel Hernández
COPLAS EN TU PENA
Los cantos de la noche brillan sobre tu imagen
Cuánto amor cuánto hay que cantar para alcanzarte
si llenos están de muerte nuestros días, y sin vida
el amor que nos dejaste como un solo Sacramento
¿ Hay en tu penar alivio para nuestro canto enajenado?
Porque lo que es, será, y si así fue es porque todo prevalece
Eres el espíritu de una hermosa flor de rojo amor encendido,
trascendiendo fuerza al dolor, y hondura al gemido.
Inés María Guzmán, España
VUELO
Solo quien ama
vuela
Miguel Hernández
Vuelo, voy suspendida,
entre el recuerdo inmersa.
Vuelo, porque mis pies
no pisan absurdas realidades.
Y así, camino eterna,
elevada en el sueño.
Y pues me das la mano
no caigo de esta altura
en que bailo la danza
envidiable del agua.
Qué libertad sonora
de ave sin plumajes.
Yo misma escribo y canto
la canción con que danzo
y la música suena
con el mismo estribillo
-Canción pura y desnuda
de artificios ajenosAlfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 602
Mil poemas a Miguel Hernández
Ay, río inagotable
hasta su misma orilla.
Me sustento en el aire
y me esparzo en el viento.
Mar de aire sin costa,
agua tibia de ausencia.
Lágrimas que sustentan
las olas que me elevan.
Lidia Alba Gaviña Cendoya, Argentina
TRABAJO SOBRE MIGUEL HERNANDEZ-ENSAYO
He hallado una carta, extensa y muy interesante, entre el poeta, Miguel Hernández a
su amigo David Vigodsky -Leningrado, que transcribiré, en parte, pues su extensión,
ocuparía demasiado espacio:”…mi querido y lejano amigo, con retraso a su amable
carta del 25 de enero, que habría contestado a vuelta de correo, sin mis achaques
habituales no se hubiesen complicado con una enfermedad en los ojos, que me ha
impedido escribir durante varios días…” soy viejo y enfermo, aunque usted por su
mucha bondad no quiera creerlo :viejo, porque paso de los sesenta, que son muchos
años para un español;
Enfermo porque las vísceras, mas importantes de mi organismo, se han puesto de
acuerdo para no cumplir exactamente su función…”,” en España lo mejor es el
pueblo .Por eso la heroica y abnegada defensa de Madrid, que ha asombrado al
mundo, a mi me conmueve, pero no me sorprende…””…de todos modos, mi querido
Vigodsky, me tiene usted del lado de la España joven y sana, de todo corazón al lado
del pueblo, también enfrente de esas fuerzas negras-y tan negras!- a que usted alude
en su carta””…en los trances duros, los señoritos-nuestros barinas- invocan la patria
y la venden…el pueblo no la nombra siquiera, pero la compra con su sangre y la
salva…””…la muerte de García Lorca me ha entristecido mucho Era Federico uno
de los dos grandes poetas jóvenes andaluces. El otro es Rafael Alberti. Ambos , a mi
juicio, se complementaban como expresión de dos aspectos de la patria andaluza: la
oriental y la atlántica” “…un crimen estúpido apagó para siempre la vos de
Federico…Rafael visita los frentes de combate y, acompañado de su brava esposa
María Teresa León, se expone a los más graves riesgos…”…”Miguel: PD: le envío a
usted esos dibujos de mi hermano para que vea algunos auténticos aspectos gráficos
de nuestra España…”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 603
Mil poemas a Miguel Hernández
MADRID BALUARTE DE NUESTRA GUERRA DE INDEPENDENCIA
Madrid:
A la memoria de Emiliano Barral
I
¡Madrid, Madrid!! Qué bien tu nombre suena,
¡Rompeolas de todas las Españas!
La tierra se desgarra, el cielo truena,
Tú sonríes con plomo en las entrañas.
Madrid, 7 de noviembre de 1936
SOBRE LA GUERRA
Autógrafo para la HISPANIC SOCIETY OF AMERICA:
Si vis pacem, para bellum, dice un concejo latino un tanto superfluo; porque el
hombre es por naturaleza peleón, y para guerrear está siempre sobradamente propicio
.De todos modos el latín proverbial solo conduce sobradamente propicio. De todos
modos, el latín proverbial solo conduce, como tantos otros latines más o menos,
acreditados, a callejones sin salida, en ese caso a la carrera de los armamentos, cuya
meta es –como todos sabemos- la guerra y la ruina.
Más discreto sería, inducir a los pueblos a preparar la paz, a apercibirse para ella
y, antes que nada, a quererla, usando de consejos menos paradójicos .Ejemplo: si
quieres la paz procura que tus enemigos no deseen la guerra; dicho de otro modo:
procura no tener enemigos o, lo que es igual: procura tratar a tus vecinos con amor y
justicia”
Pero esto sería sacar el Cristo a relucir, lo cual, después de Nietzsche, parece cosa
de mal gusto, propia de sacristanes o de filisteos, a muchos sabihondos, que no han
reparado todavía en que los filisteos y los sacristanes no acostumbran a sacar el
Cristo, en función amorosa, sino para bendecir los cañones, las bombas incendiarias
y los gases deletéreos.
El sentimiento artístico, tan increíblemente cerca está de lo sexual, de su dolor y su
placer, que ambos fenómenos no son, en rigor sino diferentes formas de una misma
ansia y ventura.
RAINE MARIA RILKE
POESIA SEXUAL- CAPITULO DENOMINADO:”CUERPO DE MUJER”
Miguel Hernández , en él se confirma lo que dices Salinas: ”no hay poeta entero sin
el don de la sensualidad” .Y se habría notado, en toda su poética, que este gran
escritor Español, vivía en función del sexo, pero no era un “prostituto” de la carne
.Podría decirse que su amor, dice el biógrafo Guerrero Zamora, es espiritualmente
sexual, o sexualmente espiritual-vaya usted a saber ,me digo- como relatora de este
trabajo, carácter determinado por la clara comprensión, que tiene el poeta, de la
gloria del sexo, de la gloria de los cuerpos humanos, fundada en la unión sustancial
de alma y carne, unión que hace absurdo hablar del cuerpo o del espíritu por
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 604
Mil poemas a Miguel Hernández
separado y atribuirles funciones independientes, en aquellos lejanos tiempo, menos
aún en estos cercanos, del siglo XXI,
Para él, y para todo el que no sea un pudibundo- exagerando ,un poco, nada mas- o
eufemista, el amor es básicamente sexo y hay que recordar, que el poeta fue un
“diferenciado absoluto” es decir, que :no buscaba a través de las mujeres el sexo,
sino a través del sexo LA MUJER.
Recordemos pues, que consecuente con lo dicho, en este extenso ensayo, amó
únicamente a su esposa, para comprender, que la consideración suya de que el
AMOR es sexo, no encierra tendencias viciosas, de ninguna forma.
ORILLAS DE TU VIENTRE
¿qué exaltaré en la tierra que no sea algo tuyo?
A mi lecho ausente me echo como una cruz
De solitarias lunas del deseo, y exalto
La orilla de tu vientre.
Clavellina del valle que provocan tus piernas
Granada que ha rasgado de plenitud su boca.
Trémula zarzamora suavemente dentada
Donde vivo arrojado.
Arrojado y fugaz como el pez generoso,
Ansioso de que el agua, la lenta acción del agua
Lo devaste: sepulte su decisión eléctrica
De fértiles relámpagos….
YO NO QUIERO MAS LUZ QUE TU CUERPO
Yo no quiero más luz que tu cuerpo ante el mío,
Claridad absoluta. Transparencia redonda.
Limpidez cuya entraña, como el fondo del río
Con el tiempo se afirma, con la sangre se ahonda.
¡Que lucientes materias duraderas te han hecho!
¡Corazón de alborada, carnación matutina!
Yo no quiero más día que el que exhala tu pecho
Tu sangre es la mañana que jamás termina.
No hay más luz que tu cuerpo: no hay más sol .Todo ocaso… (Continúa)
CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS
El amor ascendía entre nosotros
Como la luna entre las dos palmeras
Que nunca se abrazaron.
El íntimo rumor de los dos cuerpos
Hacia el arrullo un oleaje trajo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 605
Mil poemas a Miguel Hernández
Pero la ronca voz fue atenazada.
Fueron pétreos los labios.
El ansia de ceñir movió la carne,
Esclareció los huesos inflamados,
Pero los brazos al querer tenderse
Murieron en los brazos.
Pasó el amor, la luna, entre nosotros
Y devoró los cuerpos solitarios,
Y somos dos fantasmas que se buscan
Y se encuentran lejanos.
40
Menos tu vientre
Todo es confuso.
Menos tu vientre
Todo es futuro
Fugaz, pasado,
Baldío, turbio.
Menos tu vientre
Todo es oculto,
Menos tu vientre
Todo inseguro,
Todo postrero
Polvo sin mundo.
Menos tu vientre
Todo es oscuro
Menos tu vientre
Claro y profundo.
Siento, que la presencia de este poeta, intangible, audaz, comprometido, hace setenta
años de su muerte, ha dejado el legado mas poderoso, mas moderno, mas imprevisto,
de muchos otros poetas de su época, conocido, por las letras acompañadas de la
música y el decir de SERRAT, IBAÑEZ, quien mas sino? ¿Quien más?
¡Adoré hacer este ensayo, con el corazón batiente de una escriba!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 606
Mil poemas a Miguel Hernández
Amelia Arellano, San Luis, Argentina
AVENTANDO PALABRAS EN LOS VIENTOS
“Vientos del pueblo me llevan, /vientos del pueblo me arrastran, /me esparcen el
corazón/y me aventan la garganta…”
MIGUEL HERNÁNDEZ
No, no escribas palabras en el viento.
Se convierten en cuervos.
Picotean sin piedad mis intensos girasoles.
Luego dices que no se atraparlas.
A veces se transforman en sal.
Descienden por mis hombros.
Mueren en la curva de mi espalda. Giro.
Luego dices que mi nombre es Edith.
No escribas palabras en el aire.
El viento es un tristísimo extranjero.
No me condenes a ser mujer de piedra.
A ser ángel de arena.
Borra la fecha, el lugar, la hora.
Quita septiembre de tu calendario.
Sé, una vez más, mi casa.
Mi puente derribado, mi lirio blanco.
No digas que mi puerta está cerrada.
No digas que no sé atrapar palabras en el aire.
La puerta de mi alcoba abierta está.
El aliento del viento, tan cercano.
Tan ardiente, tan ebrio, tan febril.
Y tú, tan lejos.
Sin aldea, sin pueblo, sin villorrio.
Solo esta realidad que nos acerca.
Solo esta realidad que nos aleja.
Que no me toca. Que no me huele. Que me duele.
Tan lejos y aventando palabras en el viento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 607
Mil poemas a Miguel Hernández
LETRAS, EN EL COSTADO IZQUIERDO
Mis ojos sin tus ojos, no son ojos, / que son dos hormigueros solitarios, /y son mis
manos sin las tuyas varios intratables espinos a manojos.
MANUEL HERNANDEZ
Cuando era niña era mala para las abstracciones.
Lo soy aun.
Una manzana, más una manzana eran dos manzanas.
Un padre más una madre, eran dos padres.
Santo Tomás me decían.
Yo creía que era porque mi padre se llamaba Tomás.
No entendía las matemáticas, tan exactas, tan certeras.
Y seguía probando…
Y las cuentas no me daban…
Un padre más una madre:
El resultado era, dos mujeres, menos un hombre.
Tampoco entendía, no las entiendo aun, a las metáforas.
Metá: igual a más allá, fora: pasar, llevar.
Y cuando me leyeron el poema de Hernández.
Me metí en tus ojos moros y sentí el aguijón de las hormigas.
Y tomé tu mano buscando la caricia y me atravesó la espina.
Y metí mi corazón en el tuyo, y solo encontré vacío.
Y me dijeron, intenta escribir, entonces.
Y no podía…
Piensa en manos, dijeron.
Y pensaba en las manos de mi padre y escribía tinta y tango.
Y pensaba en las manos de mi madre y me salía, amor ausencia.
Y pensaba en las manos de mi abuela y me salía vellón y rosario.
Y pensaba en mí, y escribía lágrima.
Y las letras se borraban… y quedaba un papel blanco.
El papel blanco, como ahora.
Quizás las letras deba buscarlas en la herida del costado izquierdo.
BARRO
Dedicado con afecto y agradecimiento a Nela Río y Marta Zabaleta.
“Me llamo barro aunque Miguel me llame.
Barro es mi profesión y mi destino, que mancha con su lengua cuanto lame...”
MIGUEL HERNÁNDEZ
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 608
Mil poemas a Miguel Hernández
De barro soy, y de hojarasca. Y lluvia.
Agua, tierra y aire. Alud de fuego.
Panal de oro en la piel de mi madre.
Aguijón obstinado de mi padre.
Barro, sobre barro derramado.
Barro. Aunque mi nombre sea Mesalina o Lisia.
Aurora o George Sand. Safo, Juana de Arco.
Cántaro que se llena y se vacía.
Y se derrama en los villorrios pobres.
En los ojos de los muertos.
En los adobes tristes, cuna y ataúd
En los nardos de los cementerios
En las nudosas manos de los viejos
En las castas manos de los niños.
En los muros noctámbulos del día.
En los valles de luna y rosedales.
En el furor del viento en tu mirada.
En los arenales de tu boca y la mía.
En la plenitud de pechos impolutos.
En el círculo del cordón umbilical.
En la placenta de la piedra.
En la vida, en la muerte de este barro.
Barro que toma la forma que soy y me contiene.
BESO DE TIERRA
El amor ascendía entre nosotros
Como la luna entre las dos palmeras
Que nunca se abrazaron…
MIGUEL HERNÁNDEZ
Éramos dos cipreses de pantanos.
Siempre lo supimos, siempre.
No obstante nuestros brazos, nuestros cuerpos.
Desesperadamente se buscaban.
Incesantemente moríamos.
Uno hacia el otro íbamos.
Buscando, ciegos, sordos, mudos.
Creciendo para arriba.
Creciendo para abajo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 609
Mil poemas a Miguel Hernández
Bufando, como un toro a la luna.
Enterrando la boca en nuestra ausencia.
Los ojos en las ciénagas.
En los charcos, el sexo.
Empantanada carne moribunda.
Amor, empantanado en barro.
Amor de tierra, quizás un día…
Solo un día, quizás, se besen nuestras bocas.
CINCO DE ENERO
"Por el cinco de enero, cada enero ponía
mi calzado cabrero en la ventana fría…."
MIGUEL HERNÄNDEZ
En ese 5 de enero que mal ángel reinaría.
Madre y pajonal desierto.Un grito sordo, una niña.
Padre ausente, sangre fría.
Noche de Reyes vacía.
Y siguieron los eneros, como corría la vida.
Mi cuerpo estaba vestido con ropa de porcelana.
Y mi corazón desnudo como pájaro en la rama.
Ay la niña con zapatos, sin raíces y sin magia.
En cada 5 de enero sigo poniendo zapatos.
En puertas y ventanales.
Y mi corazón desnudo, deambula en desnudos pasos.
No he visto reyes ni padre.
Solo una niña llorando.
Llorando siempre la niña.
Era 5 y era enero.
Que mal ángel reinaría.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 610
Mil poemas a Miguel Hernández
María Eugenia Fontecilla Camps, Chile
PLEGARIA DE UNA MUJER AL POETA:
Y los dormidos, siempre mudos, peces,
en los lechos lamosos
de sus oscuros senos cavernosos,
mudos eran dos veces
SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ
I
Dios de las Aguas, el amor y los peces
Me atrapaste temprano
En opulencias de coral creando
profundidades místicas.
Simulador de riberas,
Ola que se deshace
En la inmediatez impostergable derramada.
Dónde estabas cuando las lágrimas.
Cuando el desasosiego.
Cuando las algas enredadas en mis pies
Me detuvieron aterida.
Sola en el trepidar de tus corrientes.
Húmeda,
Escurrida por tus venas evasivas.
Poeta , simulacro de acogida,
¿Quién te hizo dios?
Cuando me descubrí extraviada
En la extensión de tus aguas y tus versos
En el seno de la ola y la palabra
Erosionada en la resaca del verbo
¿A quién pude acudir?
Poeta negligente, descuidado
¿Cuándo fue que miramos juntos las gaviotas?
Antes del cabrilleo, la ondulación, la espuma,
Cuando en el verso complacías las inmensidades de mis vientos alisios
Promesa de placeres profundos, mar rendido en la playa.
Poseidón de Urano disfrazado
En tierra poseído, y posesivo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 611
Mil poemas a Miguel Hernández
A la saga de lo que hubo en mí de náyade,
De ninfa,
Para ilustrar el verso.
Narciso reflejado en pupilas de agua y peces
El sol bañó mi cuerpo de abandono.
Quedé y te fuiste,
Yo, en bajamar,
Secos de sal los ojos, tú, displicente.
II
“Mi corazón lo diga
que en padrones eternos
inextinguibles guarda
testimonios del fuego”
Sor Juana Inés de la Cruz
Su corazón lo diga
De gaviota a albatros, de estrella de mar a medusa,
Anduvo disfrazando sus desdichas
Su cuerpo desolado cubierto ya de escamas
Trémulo flotaba a la deriva.
Muda en desiertos acuáticos
Buscándolo, peatón alucinado de poesía
De elementos desatados, de tormentas.
Para encontrarlo y no encontrarlo,
Deshizo los caminos recorridos
Anduvo navegando entre arrecifes
Odiando, amando,
Ondulando en el lomo de delfines oníricos
Fue calamar y pulpo
Y se dejó atrapar en las mareas de aguas muertas.
Volvió en su desventura los ojos a la tierra,
Lejos del mar, de sus inmensidades.
A la montaña Antigua fue a buscarlo
Entre piedras pretéritas
Senderos inquietantes
Laderas agresivas de abrupta geografía
Nómade, gitana, peregrina evadida
Huyendo de la brisa, prófuga del fuego
Ausente del poeta
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 612
Mil poemas a Miguel Hernández
Escuchó entonces
El lamento de los enamorados
De los abandonados de la tierra
De Febo, de Saturno, de Mercurio
Con sigilo, con máxima cautela
Se asomó a los abismos insondables
Inescrutable sino de las ignoradas
Cifrado en laberintos clandestinos
Ahíto de furtivos disimulos
Recónditos e impenetrables
Pero su voz la perseguía
Se hacía susurro y manos
Su verso amado
Intrigando a sus espaldas en el sueño
En la vigilia llamándola sin nombre
Clamor, apóstrofe, imprecación
Nacida de él hacia ella, de ella hacia él
Rostro sin rostro.
Invocación ociosa
Dedicatoria absurda, remedo de epitafio
III
Su voz,
Modulación, latido, arrullo a ratos.
Graznido de cuervo a ratos
Azote a ratos
Silbido de serpiente arrepentida
En la catástrofe del alma
Artificio vano, latente, enamorado.
Para acallar las voces emuladas fingió la luz de la mañana.
Fingió el amor, la codicia del abrazo,
La enunciación del placer pretendido.
El otro nunca el Otro
Siempre el mismo que habita en su memoria
Andar, recuerdo desgarrado, restos de naufragio.
Y sin embargo…
Menguaba el día cuando fue el silencio.
De la sal a su alma,
y en la ausencia,
Aquel que ya no busca
El poeta más bello,
Se ha quedado dormido.
Para siempre, dormido.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 613
Mil poemas a Miguel Hernández
SEGUNDA VOZ
Este amoroso tormento
Que en mi corazón se ve,
Sé lo que siento, y no sé
La causa porque lo siento.
SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ
En busca del Hijo del Hombre
Dónde estás tú, el Otro que imagino,
Domador de leones, poeta empecinado,
Adversario del odio, emulador de mago.
En qué pliegue del tiempo te quedaste
Qué dimensión te alberga
Qué borrasca te borra de la tierra
Quién te quitó el escudo y la sonrisa,
El blasón del orgullo, el testudo, pelta y Parma
del pecho roto.
Te descubrí en mi América Latina, entre Mayas y Aztecas
De Guatemala al Norte y al Sudeste
Te extrañé en el desierto de Atacama, en el Valle del Elqui
Y en mi casa.
He gastado pies y alma en el camino.
He subido y bajado las montañas
Recorrido los ríos tumultuosos,
Las City’s con sus gentes y sus bares, los cines, las tabernas.
En Orihuela hablé con los juglares
Con los predicadores, los hipnotizadores
Los borrachos.
De todo vagabundo me hice amiga,
y amiga de mujeres de la calle.
Nadie supo decirme dónde estabas.
Pero todos sabían y callaban.
Me enteré, por astucia. por porfía,
Que también te buscaban.
Luchador tesonero y vehemente
Arrimador de gentes, escudero.
Eco en la noche, silencio en la campana
Musgo en la piedra, nube en la ensenada
¿Cómo fue que vestías aquél día cuando la multitud te desnudaba?
¿En qué esquina del viento, arrasado, vencido, te ocultabas?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 614
Mil poemas a Miguel Hernández
IV
Madrid, los altos rascacielos
Las vitrinas ociosas de la pompa
El neón, su racimo de colores
El tumulto, la gente solitaria
La gente triste
La triste caravana
Deambulando en virtuales avenidas
Donde obscuros deseos la acorralan
Todo al unísono, vida y muerte confundidas
En la visión fractal de la opulencia que al amor hizo trizas
Lanzando al vuelo sus astillas, atravesando pechos, manos, ojos
El amor hecho trizas
V
Las fuentes se quedaron detenidas en cristales de formas caprichosas
Los ascensores deshicieron su camino
Los faroles, sus párpados cerrados,
Se robaron las sombras de los cuerpos
Las sirenas ahogaron su garganta
Y entonces fue el silencio,
La noche ya sin hora
El hombre nuevo, El que buscabas Tú y no era
Se desperezará algún día
Al fin,
Amanecido
Y un canto tuyo alumbrará la aurora
Yasmín Sierra Montes, Cuba
Poema para Miguel donde lamento la suerte
de haberme quedado en el umbral de las cosas más sencillas.
el poema parece un desatino:
lo justo es apagar el hambre, encumbrar la casa,
manosear el pan, blanquear la ropa.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 615
Mil poemas a Miguel Hernández
no es favorable que una mujer
distraiga el ocio construyendo parábolas.
inmovilice su vida para emboscar al tiempo.
no es prudente que descubra sus miserias.
una mujer debe enmudecer feliz.
aquietar su tormento y su torpeza.
no escandalizar al mundo con sus confesiones.
una mujer jamás será la vencedora.
sino la que malgastó su tiempo.
pero así y todo persiste.
con ese loco vicio de escabullirse al fondo.
también yo tuve que soportar la risa.
Osvaldo de la Caridad Padrón Guás, Cuba
Décima a Miguel Hernández
Más que de carne, de yugo
donde encumbrar la osamenta,
nace el tropo y se aposenta
en la roña del mendrugo.
En su tarima el verdugo
bruñe los tajos de hierro,
ante las rejas un perro
despliega sus mordeduras…,
en vano las cerraduras:
el verso no acata encierro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 616
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio Escobar Mendivez, Perú
VIGIA DEL AMOR (Para
Miguel Hernández)
Tu ternura de niño se encabrita,
el puño en alto, la verdad desnuda
y tu fuerza vital canta y saluda
tu poesía vibra, canta y grita.
Huellas de luz, tu alma no se marchita
y a paso largo tu grandeza suda
en el cielo, tu grito no se escuda;
eres la lluvia dulce e infinita.
Tus manos son las páginas floridas
desparramando eternas primaveras
en el cauce del tiempo. Eres clavel
luminoso, camino en tantas vidas
vigía del amor en las riberas
del paisaje. Pureza eres Miguel.
VOZ DE RUISEÑOR (Para
Miguel Hernández)
El camino eterno. Tus pies de seda
dibujaban la noche con sus huellas,
en los surcos del amor las estrellas
están todas cantando. Allí se queda
tu voz de ruiseñor, Pastor, Aeda
luchador constante. Con tu voz sellas
un camino de luz. Cantos destellas
sobre la dura vida. Todo rueda
luminoso y terrible. Es poesía
si la brizna la tocas. Nada es ensayo.
Tu realidad perenne: canto y miel.
La lluvia que nos moja es ambrosía
del cielo de tu alma, como un rayo
iluminas al mundo de ternura Miguel.
SU PARTIDA (Para
Miguel Hernández)
El cielo se oscurece, su partida
fue quedarse en nosotros. Fue también
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 617
Mil poemas a Miguel Hernández
un nuevo río rugiendo por la vida,
con sus aguas cantando para decirnos ¡Ven!
Así quedó en nosotros su alma florecida
como ese mar bravío en eterno vaivén.
Somos playa esperando de luz encendida
como espuma encantada, como dulce sostén.
No es un adiós quedarse, mucho menos tristeza,
porque la despedida es sendero que empieza
y tú poeta hermano, te has quedado a cantar.
¡MigueL, Miguel! se escucha. Tu poesía es un nido
de luces, de banderas, porque nunca te has ido
y el mundo por tus cantos jamás te ha de olvidar.
Ángela M. García Lencina, Cuba
"Para Miguel Hernández"
Gracias.
Porque penetrar en ti,
en tu obra,
es sentir un canto por la vida.
Compartir tu sacrificio,
tu dolor,
es también vida.
Hoy, inmersa en tu poesía,
percibo tu fe y me llenas de vida.
"Para Miguel"
Mueres cuando,
aún, yo no había nacido.
No importa el tiempo transcurrido,
tu obra es imperecedera.
Tocas con tu magia a una generación tras otra.
Tu ejemplo y tu obra
siguen siendo pilares de voluntad,
amor y aliento para continuar.
Estás ahí, siempre vivo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 618
Mil poemas a Miguel Hernández
Elsa López, España
CANCIÓN DE CUNA PARA DORMIR BAJO TIERRA A MIGUEL HERNÁNDEZ
“Aunque bajo la tierra
mi amante cuerpo esté,
escríbeme a la tierra
que yo te escribiré".
Y allí te escribo y te cuento del alma
y de las penas de aquí arriba,
y del mar y sus extrañas costumbres,
y de cómo te añoro, a veces,
cuando te recuerdo y escribo
sobre asuntos diversos de amigos y tristezas
que ya no me acompañan.
Y de la alegría que siento al recobrar tus versos.
Que sólo he conseguido memorizar los tuyos.
Que he dormido a mis hijos y a los hijos ajenos
con la ternura a capas de tu vieja cebolla.
Que he enseñado a mis hijos y ahora enseño
a mis nietos esos mismos poemas.
Y no te olvido, Miguel. Nunca te olvido.
Como si volvieras a estar entre nosotros
y tuvieras un sueño y una pena tan honda
que debo remediarla. Y por eso los versos
para acunarte, vivo, en la cuna de hierbas
que ocupas y estercolas, compañero del alma.
Y por eso esta rabia que me vuelve a la sangre
como si no hubieras muerto y yo fuera de fiesta
con tus viejos poemas bajo el brazo
a leerte de frente, de batalla en batalla,
acosada y herida por quienes te ocultaron
la tarde, las llanuras, el verde de las ramas,
y todo lo que un día abarcaron tus ojos.
Y por eso, Miguel, me he sentado en silencio
al pie de tu ventana, esa que da a la tierra
donde reposan bocas, estrellas y miradas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 619
Mil poemas a Miguel Hernández
que un día te cubrieron la frente y las tormentas
y te dieron su luz para alumbrarte el alma
y aplacarte las noches de oscuridad cercado.
Y me he quedado quieta para escuchar de nuevo
el rumor de tus pasos al compás de los míos.
La tierra ya no es tierra. Es una manta tibia
que te acoge en sus pliegues y te da la ternura
y te devuelve el rostro y la voz y la risa
que un día te robaron. Y, mientras tanto,
escucha, nosotros, aquí estamos.
Voces de papel Instituto Cervantes, Lyon-Málaga 2010
EL QUINTO TORO
Nos debatíamos en las sombras y pasillos
de aquella casa que ya no era tu casa ni la nuestra.
Aquellos eran tiempos de oscuridad cercados.
Eran otros tiempos distintos a los tuyos.
Era el mundo sin ti. Y nosotros, altivos y al acecho,
leíamos tus versos en aquel bar del Madrid Centro.
Quinto Toro, se llamaba el bar.
Y nosotros, sin nombre aún,
recostados en las mesas de madera brillante,
rezábamos tus versos con la boca apretada
y los dientes al filo de la sangre.
Yo leía siempre los mismos poemas.
El niño yuntero eran mis versos.
El puño en alto los leía. Madrid, años sesenta.
Éramos muchos a decirte y a mi me dejaban la voz.
A pesar de la niebla y del corazón hecho a pedazos
a mi me dejaban decirte en voz muy alta.
Como un grito. Como un ensalmo tu voz en la mía.
Nada era mejor que esa costumbre nuestra
de hablar sobre tus pasos en la tierra,
de la sombra de tus pasos y tu muerte.
Allí juntos. Apretados los hombros.
Marcados y nacidos para el luto
y como el toro tuyo marcados
por un hierro infernal en el costado.
Pero a pesar de todo había luz. Te lo juro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 620
Mil poemas a Miguel Hernández
Un rayo de esperanza se filtraba en los sótanos
y nos abría caminos como renglones blancos
donde escribirte un día. Donde recuperarte.
"El quinto toro": Elegías últimas a Miguel Hernández.
Poesía desde Canarias
(Fundación Canaria Archipiélago MMXXI / Dirección General del Libro. Gobierno
de Canarias, Islas Canarias, 2010)
[pp: 147-150]. Edición y compilación: Javier Cabrera.
Jesús Rojas Ramírez Moa, Holguín, Cuba
A VECES PIENSO
A veces pienso que el mundo debería de ser otro
La búsqueda de la felicidad de los alumnos chilenos
Españoles que ya no desean ser más vagabundos
Que buscan un sustento para mantener a sus familias
Paraguayos intranquilos por el futuro que no esperaban
Niños durmiendo en las calles por no tener abrigo de nadie
Niñas violadas por criminales drogadictos
Un medioambiente contaminado por las irresponsables acciones del hombre
Gente de toda clase pidiendo limosnas
Mientras ricos se gastan sumas incalculables para alimentar a sus perros
Cuántos libios desearían vivir en el polo norte
Cuántos haitianos desearían un catre para dormir tranquilos
Cuántos africanos tomarse un vaso de agua potable
Cuántos ciegos esperando por la “Operación Milagro”
Un niño desde la ventana viendo aviones contaminando la atmósfera
Petardos que continúan cayendo en bibliotecas
Destruyendo la literatura de Cervantes y los poemas de Miguel Hernández
Cuántos poetas muertos que no culminaron sus versos
Por las viles operaciones de la OTAN
Ancianos en sillas de ruedas por perder sus piernas
Cuando compraban alimentos a sus hijos
El mundo ha dado un cambio rotundo
Casi trescientos sesenta grados atrás
Las agujas de las brújulas siguen inclinadas hacia el retroceso
Alimentos usados para producir combustible
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 621
Mil poemas a Miguel Hernández
Combustible utilizado para bombardear pueblos enteros
Hasta cuándo Dios mío, hasta cuándo
Sigo recordando la frase de mi amigo
Quién te viera vivo Che
Para que vieras los desastres de esta humanidad
A veces pienso que estamos en el siglo IV
Nadie quiere la tercera guerra mundial
Alguien tendrá que frenar a los esquizofrénicos
El siglo veintiuno merece más respeto al hombre
Sólo por darle unos años más de vida
Es digno de cuando el hombre se mire en el espejo
Pueda mantener sus ansias vivas
Que es la única forma
De que viva la esperanza
Como en el canto eterno de Silvio.
Yabel René Guadarrama Rivera, México
Rapsodia inconclusa para Miguel Hernández
A menudo tu recuerdo emerge
en las notas melancólicas
del canto que se desgrana
en la voz de Serrat.
En otras aparece cuando
se habla de Orihuela
sus olivos, sus almendros
y su paisaje que se refleja
en los márgenes del río Segura.
A menudo te recuerdo
y enciendo mis labios
con tu canto libertario.
¡Que arda la palabra
transfigurada en poema;
que arda y no calle
hasta que los desprivilegiados
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 622
Mil poemas a Miguel Hernández
sean emancipados!
Mira Miguel, mira
la sangre derramada
que enjuga el sufrimiento
de los desposeídos.
Mira Miguel, mira
pasar el tiempo
y lo que ha sucedido:
Un golpe,
las heridas,
la sangre que
g
o
t
e
a
de la boca
hasta el suelo.
Te encarcelan,
te apalean,
te escupen…
Quieren silenciar
tu voz encerrándote
entre una reja y tres paredes.
No habrán de lograrlo
tu palabra se enciende
y flamea aires de libertad;
rompe el silencio
también el vacío,
se convierte en relámpago
también en verso,
destrenza en el aire un secreto:
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 623
Mil poemas a Miguel Hernández
Para alcanzar la libertad
hay que luchar, sangrar y vencer;
después vendrá la muerte
y tus ojos no se podrán cerrar,
¿Acaso porque en ti hay un pendiente?
El pobrecito de tu hijo y tu esposa
alimentándose de hambre, cebolla y pan.
Miguel Hernández
ya no te duele el mundo
pero si vivieras
cada día te dolería más.
La lucha por el respeto
a los derechos de los pobres
no ha cesado;
el neoliberalismo
se ha robado la paz.
A menudo
tu recuerdo emerge
y con él llega la nostalgia.
Miguel Hernández;
tu muerte, tu vida,
tu recuerdo por siempre…
MIGUEL HERNÁNDEZ
Imagino tu cadáver
desnudo tras las rejas
inmutable en el silencio
y sin recelo en los ojos.
Imagino tu cadáver
desterrado en esa cárcel
donde quisieron exiliar tu voz
y llenar de olvido tu recuerdo.
¡Como te vejaron
Poeta republicano!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 624
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Cuanto te injuriaron
poeta libertario!
¡Como de ti se burlaron!
Pero por mas que quisieron
no lograron robar a tu pluma
el compromiso social
que trenzaste con el pueblo.
Poeta y compañero
España llora tu ausencia,
México llora tu ausencia.
Porque de todos los muertos
de la cruenta Guerra Civil
eres en la memoria
el que a diario retoña
como el árbol talado
Hernán Cisternas, Chile
A Miguel Hernandez
“Después de vaciar profundo en la historia
voy a evocar en lo perfecto
Ver tu figura gigante
de constructor de la dignidad. “
Ahora que las migajas de la historia, y las pancartas
quedaron azuzadas por el paso de ésta
Cuando las barricadas quedaron en Orihuela apiñadas de nostalgia.
Cuando en el patio de las hortensias brillan de polvo,
y las heladas tras los años te dejan las huellas de la nostalgia.
Aclaro en tu sello mortuorio, de tus vivencias que de la postre
quedaron en el seño de los que
con tu ejemplo se convirtieron en tus versos.
Compañero tu ejemplo de valor me convierte en alimento,
para llamar a tu tumba y pedir que voltees a la muerte,
para estrechar tu mano invisible, y des a mi hambruna
un pequeño preludio de honor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 625
Mil poemas a Miguel Hernández
Que me vuelvas tras los pasos
de los, que quedaron al olvido de los ausentes.
Campesino letrado tus versos olvidados son la siembra
de los que con tu ejemplo cosechan tus frutos y desprendan
el dolor de los que, ahora siguen aferrados a la vida,
solo con efímeras migajas de cebollas,
mientras los otros se revuelcan en sus azahares de grandeza
y la patria es de otoño invernal en el presente
sin los que dignificaron el pasado ya ausente.
Yamile Aisa Quiroz, Colombia
MIGUEL HERNÁNDEZ
Del viejo continente,
Con nuevas ideas,
Movimientos guerreros, España se convulsiona,
del pueblo emerge sencillo hombre,
sencillo cabrero…
cuándo decidiste volverte poeta?
Acaso cuando la injusticia conociste,
cuando de la mar por Neruda las olas del lejano mar sentiste?
Tu propia sed de justicia,
con lágrimas se escribió bajo cada hoja de cebolla…
Lágrimas inocentes de todo lo vivido,
Y aunque modelo fuiste,
de letras y valor civil,
solo te dieron una escribanía de plata…
Ni esa tuviste en tu forzada soledad de treinta años,
tus versos, en canciones de ausencias se escribieron,
gracias a tus carceleros.
Ideales tan grandes, que no cabían en tu alma,
compartir quisiste, mas no entendieron
la profundidad de tus sentimientos.
Y solo aquel que siendo militar fascista, Juan B,
atrevióse a mostrar tu alma blanca.
Llamáronte epígono de la generación del 27,
hoy hito de cantos sociales eres…
Miguel Hernández, cantor de la justicia,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 626
Mil poemas a Miguel Hernández
como aquél pío-pío que te cantó
en tu jaula,
viajas hoy en un vuelo eterno…
Matilde Peláez, República Dominicana
Diamante de Orihuela
Bellos los amaneceres
en tu Orihuela natal,
donde pasaste niñez
y tímida adolescencia,
en el pastoreo de cabras
que tu padre dio a cuidar,
y no observo que tu alma
entristecía
por los estudios parar.
Mas, la naturaleza es sabia
enfría tus rojas mejillas
con el rocío bendito
para no verte llorar.
Y en descanso bajo sombra
con tus cabras a la espera
lecho de hojas te alfombra
con el cayado a la vera.
Lees los prestados libros
de poetas conocidos
Rubén Darío, Zorrilla
Galán, Gabriel y Miró
y creas tu primer verso
en la sierra oriolana,
que te hace sentir dios.
El fiel amigo Sijes,
tu apoyo, tu confidente,
compañero en las tertulias
de aficionados a las letras,
en tu autoeducación es guía
te lleva a estudiar los clásicos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 627
Mil poemas a Miguel Hernández
Góngora, cervantes, Lope
Garcilaso, y otros de gran valía.
En revistas, folletos, diarios
se publican tus escritos, y
escribes Perito en Lunas,
tu primer libro, en Madrid,
que te lanza hacia la fama.
Pero siempre hay una piedra
que en el camino se cuela,
desavenencias, nostalgias
te hacen volver a Orihuela.
Así entre ir y venir, el amor
toca a tu puerta,
y es josefina Manresa
dama de tu preferencia.
Pero, la guerra civil estalla,
por deber patrio te enrolas
y, es tu lirica instrumento
de críticas y denuncias,
de testimonio de lucha,
y vas por diversos frentes
animando a los soldados
con poemas y teatro
para alegrar el ambiente.
En una pausa y te escapas
realizas la ansiada boda
boda en fueron felices
aun sea por pocas horas.
Nace el crio, luego muere,
y sigues de crisis en crisis.
Vence el poder en la guerra,
la oposición desbandada,
peregrinas en las cárceles,
y ya, muy enfermo escribes:
Viento del Pueblo y
también El hombre acecha
evidencias de tu bélica lucha.
Relatos de tus vivencias,
de los míseros que sufren,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 628
Mil poemas a Miguel Hernández
la tierna madre que espera,
la madre patria ultrajada
por la injustica que impera.
¡Décadas han pasado,
y para siempre te has ido,
pero los poetas del mundo
sentimos que no has partido,
es porque brilla tu nombre
cual duro diamante brilla,
y brillará cada día,
cada dia mas brillara!
TODO POR TI
Miguel Hernández
Poeta del pueblo.
Muy breve fue tu vida
magnánima tu historia
que hizo de Orihuela
un centro de atracción,
donde ha tomado auge
hasta la humilde escuela
que te acogió en sus aulas
y aprendiste la primera lección.
De niño fuiste pastor de cabras,
tarea que restó tiempo
a tus ansias de estudiar,
mas no anuló tus sueños,
a leer te entregaste
obras de famosos poetas
y el autoaprendizaje
fue tu vía de avanzar.
¡Meritorios trofeos
Brillan, entre tantos honores
que reconoce el mundo,
y tu Orihuela natal!
Miguel, pastor, poeta,
hijo obediente, cariñoso padre,
apasionado esposo,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 629
Mil poemas a Miguel Hernández
defensor del humilde,
el bélico poeta, en la guerra civil.
Enfrentas el poder en bien de la república
y caes en presidio y enfermas a morir
¡vibrantes episodios pasaron en tu vida
Manifestaste en todos tu lucha por la paz
por las desigualdades que afectan a la gente
injusticas, desamor, indiferencia,
por los pobres que sufren de abstinencia.
¡Cantos y aplausos a tu vida sincera
llueve flores, sobre tu cuerpo ausente!
¡Oh poeta del mundo
con humildad de mártir!
Te involucraste en compartir con todos.
¡Le diste apoyo al niño,
al marginado, al triste,
a la madre en su derecho pisoteado!
¡Tu estas presente, porque en espíritu vives
Para el mundo literario y sus poetas!
Recibe estas simbólicas ofrendas
por tus hazañas, por tu sistema
de cívica lucha. Tu heroísmo
ante injusto final de vil condena
que ha repudiado el mundo,
y sus poetas! POR Ti estas plegarias
¡TODO POR TI!
Alfredo Calzada Liens, Cuba
Pensamientos que se esfuman en las letras blandas
Sobre tu juventud plena de vigor tan puro
De un verbo implacable, de lo tirano oscuro
Encuentran la luz en renovados versos y cantas
Suele tu canción de hombre sereno y ufano
Ganarse multitudes en siglos de batallas
Y al paso de cada letra de tus murallas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 630
Mil poemas a Miguel Hernández
de versos, caen en gran estrépito los villanos
En el tiempo histórico de tu estampa viril
No hubo tras pies en la tragedia shesperiana
Mas, resurgió la gran comedia del terror
Intentando solapar tu denuncia gentil
Pero quedó cuajada en risa gitana
Y calló su antifaz en el fragor
Un gran brindis por la hora en que naciste
Mas las gracias porque a tiempo lo anunciaste
El engendro del terror que rechazaste
Con las armas del amor que nos trajiste
Por hermanos, tu ideario ha transcurrido
Desde cárceles mil voces en denuncia
De que el odio se incrementa y no renuncia
Sumir a tu odisea en lo prohibido
A pesar que tanto y tanto han oprimido
Tus quehaceres galopan en generaciones
Que han sabido derrotar a tus verdugos
Te perciben como un ente, bien dormido
Y has resucitado en mil revoluciones
Para deshacer en fin, sus viles yugos
Presencia de Miguel Hernández en Cuba…
Una antología esperada
http://www.cubaliteraria.cu/articulo.php?idarticulo=11850&idseccion=48
Leonardo Depestre Catony, 11 de agosto de 2010
El próximo 30 de octubre se cumplirán cien años del natalicio de Miguel Hernández,
el poeta y pastor de Orihuela, cuya obra tiene un reconocimiento creciente cada día.
La fecha se conmemorará debidamente en España, en todo el mundo hispanohablante
y en cada rincón del planeta donde Miguel tenga un lector.
Cuba, como es lógico, se ha sumado al jubileo. Y ya tiene una obra para mostrar:
Presencia de Miguel Hernández en Cuba – Antología de textos 1937-2008,
preparada por Concepción Allende Vasallo y Aitor L. Larrabide, cubana ella y él
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 631
Mil poemas a Miguel Hernández
español, presentado en febrero pasado, durante la más reciente Feria Internacional
del Libro de La Habana.
Como obra necesaria, además de como empresa bellamente lograda, debe verse esta
antología. Reúne 44 textos de autores cubanos y españoles, publicados todos en la
prensa nacional entre las fechas mencionadas, un periodo de nada menos que 71
años, lo cual implica un largo rastreo, página a página, en publicaciones periódicas
que la licenciada en Información Científica y Bibliotecología Concepción Allende,
Conchita, asumió con satisfacción.
Quien redacta estos apuntes conoce de la laboriosidad de Conchita, cuando era
especialista principal en la Biblioteca Nacional José Martí y también ahora, que lo es
de la Casa de la Poesía atendida por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La
Habana. Mucho polvo y muchas horas le ha constado este libro, realizado, como ella
afirma, porque
siento una gran admiración por Miguel Hernández y pienso que así contribuyo al
mejor conocimiento de la obra del poeta, pues pongo a disposición del público lector
una buena selección de artículos sobre él, algunos salvados totalmente del olvido, y
le presento además una muy completa bibliografía que puede servir al investigador
para la localización de otros trabajos sobre el tema.
Y Conchita nos abunda al respecto:
Quiero apuntar algo poco conocido: fue Cuba el primer país del mundo donde se
conmemoró públicamente el primer aniversario de la muerte de Miguel Hernández,
en un acto que tuvo lugar en el entonces Palacio Municipal de La Habana (hoy
Museo de la Ciudad) y al cual concurrieron, entre otros, Ángel Augier, José Antonio
Portuondo, Juan Marinello y Alejo Carpentier. De manera que a nosotros los cubanos
nos sobran motivos para rendir este homenaje al pastor de Orihuela.
También señala Conchita que el libro fue revisado por el Dr. Aitor L. Larrabide,
asesor y especialista principal de la Fundación Cultural Miguel Hernández, en
España, quien comparte con ella los créditos de la publicación.
Presencia de Miguel Hernández en Cuba… es un libro ameno, una muestra excelente
de periodismo y de crítica, en estilos diferentes, pues incluye, entre los autores
cubanos, a Nicolás Guillén, Alejo Carpentier, Ángel Augier, Enrique Serpa, Juan
Marinello, José Antonio Portuondo, Enrique Labrador Ruiz, Roberto Fernández
Retamar, Víctor Casaus, Luis Suardíaz, Mercedes Santos Moray, Waldo González
López y Roberto Méndez, y entre los españoles, a Juan Chabás, Manuel Altolaguirre
y José Manuel Caballero, por citar algunos.
La fecha de 1937 mencionada en el título del volumen tiene una explicación: fue el
año en que, durante las jornadas del II Congreso Internacional de Escritores para la
Defensa de la Cultura, celebrado en España, varios intelectuales cubanos —Alejo
Carpentier, Nicolás Guillén, Juan Marinello, Félix Pita Rodríguez y Leonardo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 632
Mil poemas a Miguel Hernández
Fernández Sánchez— tuvieron la ocasión de conocer a Miguel Hernández.
Curiosamente, fue Carpentier, al paso de ambos por París, quien grabó en la propia
voz de Miguel Hernández su poema “La canción del esposo soldado”, documento
sonoro único, de incalculable valor. Señalemos que había muerto ya en
Majadahonda, en diciembre de 1936, el comisario político Pablo de la Torriente
Brau, compañero de armas y amigo de Miguel Hernández. Todo ello ilustra al lector
acerca de cuán profundos fueron los lazos que unieron a Miguel Hernández con los
intelectuales cubanos, y cuán sincero es el homenaje de los del lado de acá del
Atlántico.
Presencia de Miguel Hernández en Cuba… tiene su génesis en las Jornadas
Hernandianas, coloquios celebrados en el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau
con la participación de otras instituciones culturales nacionales y españolas, donde se
gestó el proyecto para el cual se propuso a la investigadora Conchita Allende
Vasallo, quien para su realización hurgó en los fondos de la Biblioteca Nacional José
Martí, el Instituto de Literatura y Lingüística, la Casa de la Poesía y Casa de las
Américas.
Como apuntan los autores del volumen,
los textos que integran esta antología remiten a una relación intelectual no exenta de
debates y diferencias pero siempre celosa del respeto mutuo, para que continúen
generando interpretaciones diversas donde se encuentren diferentes ángulos que les
permitan a las nuevas generaciones acercarse más a su obra, con el aliciente del
centenario del nacimiento del escritor de Orihuela.
Y como un libro así se compone de muchos detalles, este se completa con la
sobriedad de su portada y las bondades de una tipografía que invita a leer. Presencia
de Miguel Hernández en Cuba – Antología de textos 1937-2008, editado por la
Fundación Cultural Miguel Hernández, tiene asegurada su presencia en el selecto
convite de los libros útiles.
Canto a Miguel Hernández
Neruda y Alberti a tu mano
Te abrieron ventanas nuevas
Y le moldearon las crestas
A tu verso provinciano
Tu verso comprometido
Como arma y denuncia en mano
Ya entusiasta, ya silencioso
Consumido, Desgarrado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 633
Mil poemas a Miguel Hernández
Como instrumento de lucha
Tus poemas han quedado
Cual ejemplo vigoroso
De tu esfuerzo libertario
¡Han crecido y no en vano!
Tengo tu sangre y tu nombre
Tus costumbres ancestrales
De las montañas y llanos
Nos vienen mañas de mares
Con mis sabios aborígenes
Y fuego de ardor africano
Se mezcló tu fiero orgullo
Que caló hondo en mis manos
Por su verbo firme, como el tuyo, a lo republicano
En el ajiaco que somos, con dios y todos los santos
A decir de Joan Manual
Con sus cantos en tu nombre
Un alma sin fronteras
Golpe a golpe, verso a verso
Es el destino del hombre
Vienen y van las sangres
Por el mundo destrozado
Cruzan los mares y los tiempos
Hasta que al fin te alcanzaron
Vibran en páramos de batallas
Almas y versos mezclados
Finalmente emerges, generoso en el poeta.
No siempre, ni en todos. Pero brotas
¡Sin mucha escuela. Pero saltas!
¡Te encumbras y gritas.
¡Tu llama oculta en ellos, se derrama!
¡Ese eres tu, mártir joven!
No escaparás a sus versos
Y es porque ellos ya te aman
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 634
Mil poemas a Miguel Hernández
Tu voz estalla. Con el verso sencillo, te agigantas
Defensor de humanidades
Que estas en sus huesos, incrustado hasta sus almas
Te introdujiste en Murallas
Para ganar tantas cumbres
Hiciste revoluciones
Hoy hasta Cinco te aclaman
Y recorres nuevas cárceles
Renaces en sus versos libres
¡Y luchas con mucha garra!
¿Quien no te ha visto en los carteles de las huelgas?
¿Quién no te asume ante el balazo en la espalda?
Muchos te escucharon en la quebrada, en el desierto
Hoy, en las calles de tu amada España
¡Animando guerrilleros, que tus versos levantaban!
Contra tus mismos verdugos, que retornan a la carga
Sigue adelante con tu firme estampa
A salvar el alma ungida, del amor en las batallas
¡Quedan muchas, pero al enemigo espantas!
¡Porque tu verso es gigante!
¡Porque siempre estas al alba!
Monika Nude, España
Ángulo Muerto
Arden las palabras en mi boca. El sueño incumplido forma parte de utopía.
Quise abrazar los ángulos que, al fin y al cabo, tú mismo detestabas.
Es jueves y llueven libros sin páginas.
El poema se escondió en la basura y el poeta
lloró su ausencia demasiado tarde.
Si te hubieras querido, te hubiera amado sin cárceles.
Las sogas se retuercen como serpientes buscando alguna victima.
No quiero ser cadáver ni enfermedad en la memoria.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 635
Mil poemas a Miguel Hernández
Los silencios pudren la carne y veo nacer larvas nauseabundas
carcomiendo mi cuerpo.
Ardo como el deseo de dos amantes en cualquier noche de verano.
Las llamas bifurcadas
hacen gigantes las dudas y en mi lomo hay grietas por las que descender.
La lluvia no es suficiente para dejarme en cenizas.
Es jueves y no concuerdan los tiempos.
Aún estás en una ciudad impronunciable donde nievan huesos
en vez de flores.
Allí los besos se cubren de óxido y dejan exiguas las palabras.
Un día sobre el otro se acostumbran a despedirse sin mirarse a los ojos hasta caer la
siguiente noche sin luna. Pasado sobre pasado,
futuro sobre futuro como letanías cromáticas.
Arden las palabras en mi boca derramando su belleza a vista de pájaro.
Y tú en ángulo muerto, y tú cerrando los ojos, y tú, labios sellados,
sin pronunciar mi nombre.
Vera Lúcia de Oliveira Silva, Brasil
EL CABRERO POETA
Luminosos dias
Nosso poeta cresce
nos campos férteis,
o odor do mato
campos verdes
entre as árvores o sol brinca.
A lua pudica aparece de mansinho.
O calor escaldante
a neve cobre o campo,
as estações se sucedem
Nosso poeta cresce
apascenta as cabras
nas entranhas uma voz
o lirismo, a poesia desponta,
" EL Poeta Cabrero ",
a poesia quer se expressar
quer ter voz.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 636
Mil poemas a Miguel Hernández
No peito , um coração, um nome
Josefina Manresa
A cidade grande
Madri, a capital, o chamado é forte
Novos amigos , novo ambiente
Ida e volta , Madri..
Mas a Espanha...
Terra sofrida... grandiosa terra
Invadida por mouros, franceses...
Terra sofrida, povo sofrido
Os campos se cobrem de mortos
O sangue inocente semeia os campos
Encharca as ruas
O caudilho impera
É a Guerra civil .
A palavra dos poetas
LIBERDADE!
A palavra
LIBERDADE!
é insuficiente
Às armas! ! !
LIBERDADE!
A PALAVRA - A POESIA - A ARMA - O SANGUE
Sua voz não cala, dispara
Sua arma não pára, dispara.
A batalha continua
Abaixo , Franco
Mas nosso poeta é um homem
Fraco - forte
Perecível,
Imortal poeta
A palavra não morre
LIBERDADE !
Tão jovem uma voz se cala
Se apaga uma vida na terra
Uma estrela no céu aparece
Dorme em paz poeta
LIBERDADE!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 637
Mil poemas a Miguel Hernández
Ana María Hernáez, Argentina
Caricia Del Viento, Viento Del Pueblo
Vio turbio su mañana
y se quedó en su ayer.
No quiso ser.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Poeta pastor de rebaños
soldado viento de pueblo
toro de fuego en la sangre
soplo tumultuoso en el correr universal
poro abierto en heridas sin cicatrizar.
Sentiste el amor como un destino trágico
brotaste del manantial surgido del terruño
y a él dejaste tu obra derramada en sangre
Fueron los traidores
los que se atrevieron a manchar
esa sangre escarlata derramada
y quedaron para siempre refregados en el lodo
Hacia la plebe tendiste tus raíces
y a ella quedó adherida
alimentando como savia nueva toda su vida
Gritaste al aire para que te oyeran
“Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta”.
Y esperaste la muerte con ruiseñores cantando
sobre los fusiles en batalla
y fuiste pura simiente
quedó la muerte fecundada
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 638
Mil poemas a Miguel Hernández
La gente te salió al encuentro con el alma tendida
como hoja en blanco
esperando
ser llenada de esperanza
Fuiste cumbre
encarnizado defensor de las masas
su dignidad y su libertad
“Llegó tan hondo el beso
que traspasó y emocionó los muertos”
se convirtió en nana escarcha de los días y las noches
forjó la paz para su hijo
aún debiendo matar para seguir viviendo
hasta lograr que . . .
“En su sangre se envuelva la victoria”.
Enis Montalbán, Venezuela
Poema a Miguel Hernández
Valiente
Valiente hombre de piel curtida por la prosa, con una mirada de horizontes lejanos
como quien mira el infinito sin encontrar respuesta.
Tu casa de la infancia fue testigo de tantos sueños cuajados en un libro
Pensando en los amores, en los sueños y en los sonidos tibios que hacía el verano
cuando rasga el aire en la ventana cercana de un limonero.
Valiente caballero que traspasó fronteras, que siguió caminos de nubes transparentes
con maestros especiales como lo fue Virgilio,
y los versos de San Juan de la Cruz inspirándole para escribir romancillos.
Miguel, Miguel, valiente caballero,
inspiración de muchos soñadores de otros tiempos
Que creen en el verso y en la prosa, como en aquella obra de tarde de domingo
Tu pluma es un legado de esperanza para todos los que nos dicen locos, porque
andamos susurrando canciones y estribillos, en el tren de la vida,
humana suerte de encontrase con alguien que sueñe lo mismo
y contagiar la valentía del poeta que tu brindas en tus hermosas obras,
y en cada romancillo, fruto de tu pasión por lo que ahora,
llamamos orgullosos hermosos libros.
Miguel, Miguel, valiente caballero de la sierra Orihuela,
con mirada de niño.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 639
Mil poemas a Miguel Hernández
Jorge Etcheverry, Canadá
Hasta luego amigos camaradas
Desde una celda en 1942
Con una aurícula surrealista
Un ventrículo comunista
Media materia gris demócrata
Miguel Hernández da sus últimos poemas
a sus carceleros
Pliega sus alas y se apresta a emprender
El Gran Vuelo
Sobre los tejados del mundo
Mientras otros nidos empollan
A Javier Heraud
Roque Dalton
Víctor Jara
Y los que vendrán
Rossibel Ipanaqué Madrid, Perú
BREVE VISITA
Heme aquí, Miguel,
Postrada a orillas de tu cárcel,
Pintando a rayos de luz
Tu sombrío encierro…
Realizando un viaje,
Cual pastor de la muerte,
Arriando mi vida
Con el negro manto,
Para dejar a tu alma
La feliz soltura
Del aura que cuece mi escritura…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 640
Mil poemas a Miguel Hernández
UN GRITO ELEGÍACO
Una elegía trotaba a caballo
Fluía dulce desde mi seso
Espumante trago a compás del fuego
Deslizábase por mi mano…
Tristes guerras trasuntaban,
Lúgubres, irradiaban a luz del día
Y yo que, del arma que la apagase,
Su existencia desconocía…
Ardía en tu pecho errante
Plañido del alma, un corazón henchido,
Un canto que cante tu Gloria, Miguel Hernández...
AMARGA CUNA
Necesité quizás
Una nana de las cebollas…
Una que me enseñe a dormir la pena,
La pena del hambre que nos carcome…
Nos carcome el alma y nos envenena…
Un bebé de amarga cuna
Bebió del zumo de la llorona
Mientras su padre cantaba nanas,
Por si el viento compadecido
A su oído las transportara
Asía el padre por el brazo a su destino,
La madre en vela
Sudaba rancio,
Seguía el zumo alimentando
Al pequeño que había nacido…
De fuertes padres,
Valientes hijos…
Y ahora descubro en mi madre santa,
Mamé yo misma
de la nana de las cebollas…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 641
Mil poemas a Miguel Hernández
Joaquín González Sospedra, España
Homenaje sencillo a Miguel Hernández
La sombra de aquella higuera
cubre del sol al chiquillo,
que juega con un cuchillo
que a España la parte entera.
Una mitad desespera;
la otra mitad ríe y canta
mientras la descarga espanta
pajarillos matutinos,
cuyos inefables trinos
se mueren en su garganta.
Horacio Femenia
VERSOS ETERNOS
Vi en tus sentires
entintados de nostalgia,
la firmeza de la pluma
que supo conquistar,
sensibilidades en la oscuridad
de los silencios ajenos,
emergen caricias
de almas ausentes;
En este rincón del espacio,
me devoran las emociones,
encendiendo flamas en mis venas,
que esgrimen soledad
en compañía de tus versos
...esos versos eternos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 642
Mil poemas a Miguel Hernández
Alicia Alastra, Argentina
LA RAÍZ DE UN POETA
Quisiera penetrar, hundirme
en el profundo espacio
y nadar entre los átomos
sin cuerpo y sin sombra.
Conectarme con la conciencia
infinita de vida a engendrar
en la canción que arrulla al tiempo
y tocar los colores de la aurora boreal.
Encontrar el secreto
de donde proviene el valor,
la fuerza a punto de irrumpir
o el vuelo del pétalo cayendo.
Pero, las manos tímidas se abren
junto a los párpados y labios,
de donde emerge el grito
del sentimiento más humano.
Daniela Guadalupe Godoy, Argentina
A Miguel Hernández
Allí él,
una pluma y palabras…
Con una hoja de otoño,
y fuego en el alma…
Manos maltratadas,
derriban la jaula
muros tristes y oscuros
no lo amurallan…
Más no aprisiona la esperanza,
ese medio ocre
lleno de nostalgias…
Resurge en la memoria
el recuerdo de aquel hombre
¡Libre!
Poeta ilustre de España,
nutrido de panes olvidados y cebollas agrias…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 643
Mil poemas a Miguel Hernández
María Eugenia Taltavull, Argentina
HOMENAJE A MIGUEL HERNÄNDEZ
E scucha, Miguel Hernández, de Orihuela
L as palabras enhebradas en poemas
R emontan vuelo eterno de los Grandes
A traviesan las fronteras más lejanas
Y regresan, permanecen en tus libros.
O ye el aplauso fervoroso
Q ue el tiempo trae y no se acaba.
U na generación lleva a la otra
E n la sangre por las venas, por el aire.
N eruda, Alberti, Sijé, y tantos otros,
O rihuela, toda entera, leyeron tus estrofas
C uando aún dudabas de tu sino.
E s el Siglo veintiuno quién te aplaude los
S onetos del Silbo Vulnerado en tu voz
A l amor, a la muerte, al amigo, al campesino.
Egle Edith Frattoni Romano, Argentina
HE PENSADO EN TI
He pensado en ti,
Miguel Hernández,
porque, como a ti,
se me ha muerto como el rayo,
en su pueblo y el mío.
el mejor amigo que he tenido,
Ha sido un accidente.
El empujón brutal los ha tumbado.
¿Sería su destino el irse así,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 644
Mil poemas a Miguel Hernández
o quizás será que los mataron,
viéndose obligados a morir?
He pensado en ti,
Miguel Hernández,
Porque, igual que tú,
no perdono a la temprana muerte,
ni perdono a la vida desatenta,
que ha dejado malheridos aletazos,
en nuestros agitados corazones.
Ha mojado nuestros rostros tanto llanto
que es posible que caiga diluviando,
y terminé rodando por el suelo.
Entonces, quizás, tú desde el tiempo y yo de mis días,
aunque el dolor, nos duela hasta el aliento,
logremos terminar con la sequía.
María Vilalta, Argentina
EL RAYO QUE NO CESA
¿ Dejará el agua de correr por la montaña ?
¿ Callarán los pájaros en la penosa sombra ?
Así de firme el amor
galopar endecasílabo tus versos
vueltos semillas, amapolas y pez.
Corazón desmesurado
de bravío toro la lengua
que enarbola el beso y el vacío.
Heridas hay de cuchillos
cuchillos sangrantes de luna
vueltos sobre la carne
como si pesara el mundo en cada estocada.
Sobre los besos de aire
tejieron vocales de fuego
y se amasó la harina
profana hostia convocada
en la tinta ilusa
de tus manos.
No verás arrugas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 645
Mil poemas a Miguel Hernández
ni verás las canas
todo quedó en un rayo
luz y estruendo
eco enceguecido.
Amarillos limones
rodarán las mesas
y entre las palabras
una y otra vez
el carnívoro cuchillo
atravesará de cuajo
la carne juvenil
osado corazón atrapado.
Nora Pellegrini, Argentina
CIELO SIN FRONTERAS
A Miguel Hernández, poeta
Llegó en silencio.
Inmune. Lapidario.
Imitador de un dios desconocido.
Devastó dignidades
con latigazo artero.
Acorraló los sueños
diseminando miedos.
Piensas en él
y un lento escalofrío te socava...
Ansías ser “el pájaro
más leve y fugitivo”.*
Borrar con tu memoria las tinieblas
sangre y árbol tu mano.
Erguirte al fin en tu columna rota
y resurgir luchando.
Cuando dibuje el viento
violines en tus ojos
embriagado de un cielo sin fronteras
acuciante de luz
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 646
Mil poemas a Miguel Hernández
la primavera
concebirá
tu corazón
como instrumento.
*Miguel Hernández: Vuelo
Yesica Olmos, Argentina
Hermano poeta
Dedicado a Miguel Hernández
Un octubre de 1910, nació un alma poeta, sin saber cuan alto sería su vuelo,
lo acobijó la tierra del pueblo. El pan se repartía en la mesa,
la mezquindad de la vida lo hizo hombre de repente, pastor con bien alta su frente.
Abandonó su saber sin darse cuenta de que la vida le enseñaría mucho más.
Su arte comienza a escaparse de sus dedos un 1930, fue trepando montañas,
fue esparciendo su maña.
Un uniforme y su armamento, lo convirtieron en guerrero,
llevó consigo las calles de su pueblo. Vio morir a sus hermanos,
vio correr la sangre sobre la tierra, calmó su sed de paz derramando sus versos.
Sonaban los disparos, él escribía metal, sangre, hombre, muerte.
Ser de luz, corazón generoso, pecho de acero, manos valientes… Amo a los pobres,
amo a su esposa, amo a sus hijos. En 1937 natura le dio la extensión de su cuerpo,
pocos meses después con ojos de cristal y alma desecha
dio despedida a lo que más amaba en su vida, pero ésta le arrancó el dolor del pecho
un 1939, su pequeño niño, su musa, la labor de sus manos, el orgullo de su frente…
Huía del pánico y la desesperación dedicando su escritura a su esposa Josefina,
pan y cebolla repetían sus ojos lectores.
El destino le reparó barrotes de hierro, hasta ver yacer en las prisiones
muerto su cuerpo, la pena se redujo a 30 inviernos, su cuerpo abatido
y surcado por metales y aceros fue enfermando.
Una mañana de 28 de marzo de 1942 las sombras negras se anunciaban en las calles
de Alicante, y en la prisión yace muerto un héroe, Miguel Hernández.
Cumplió su misión en la vida: beber todos los tragos, y beber uno de repente,
morir cantando, morir con la frente en alto.
Quedó con los ojos abiertos, tal como si siguiera cantando.
Y en esta noche de otoño de 2012, esta joven poeta de 20 años,
ve brillar en el cielo una estrella y crearse con las manos del viento
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 647
Mil poemas a Miguel Hernández
la melodía perfecta, y desprenderse del firmamento unos versos
anclando en lo hondo de su esencia, tal como si aquel gran poeta reinara
en lo alto del cielo, hallándose eterno en su canto y sus versos,
siendo el orgullo del pueblo, siendo aún aquel joven muchacho
que amaba a la vida y las letras, de rostro bello y pecho de acero,
de la tierra y del cielo.
Viviana Esther Maldonado, Argentina
POETA, “MIGUEL HERNANDEZ”
Naciste, el treinta de octubre
por el año, mil novecientos diez
Y fuiste elegido por Dios
para crear tus poesías
poesías que emocionan,
cada vez que escuchamos
cuando los leen.
y ¿Por que no?, en el canto.
El pecho, se me ensancha,
al mencionar, tu nombre
en mis labios.
Pues que…
a pesar de mis años
que no son muchos vividos
me emociono cuando digo
¡ Viva la Libertad!
Cuando en fogones
se juntan, a recitar
los orihuenses,
recuerdan tus escritos,
como el trinar
de los pájaros.
Fuiste un representante, cabal,
basado en la realidad social.
No solo en los medios rurales,
sino también, en la ciudad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 648
Mil poemas a Miguel Hernández
Pues jamás, he de olvidar
tu nombre, Miguel Hernandez,
quien nació en Orihuela
pueblo de pulcros aires.
¡Poeta, Dios grabó en tu memoria,
letras de oro, al nacer!.
Stella Maris Sandoval, Argentina
Poeta de luz, Miguel
Miguel de Orihuela,
Poeta.
Ávido de letras,
sembraste, el crujir de la luz,
entre versos eternos que el universo relee.
Con el sabor natural
elevaste el estandarte
de maestros prodigiosos.
El dolor de las ausencias,
tu “Hijo de luz y de sombras”,
y el dolor de la injusticia,
y entre tanto dolor “El hombre acecha.”
Tu compromiso fue con el hambre
y tu poesía con la guerra.
A veces no se puede gritar,
a veces no se puede ni siquiera escribir.
Trataron de cegarte con barrotes,
pero no te callaron la boca,
cantaste “las nanas...” y el mundo
te consagró.
El hombre de paz no muere,
el nombre del hombre
en este poema es luz, Miguel
Hernández, de España,
poeta de cabras y
corazón de tierra pedregosa.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 649
Mil poemas a Miguel Hernández
Ines Elena Goyenechea, Argentina
POEMA PARA MIGUEL HERNÁNDEZ
Poeta que nos dejaste tu impronta
tu rebeldía, tu corazón que emanaba
la sangre con su porfía,
evadiendo viejos esquemas
que arrullaban poesías.
Fuiste rayo que irrumpió
con una filosofía intrínseca
en tu ser, a lo largo de tu vida.
Con metáforas esparcidas
entre destellos vividos,
fue así que tu irrupción
explorando otros senderos
periféricos, entre amores
y desvelos con alegrías,
entre dejos de tristezas que
van devorando al tiempo.
Ella y tú engarzados van
como la hiedra al cemento,
verdor que zahuma el alma
y llegan al goce supremo,
es como el cielo y la tierra
que siempre germinarán,
fecundarán con su calor
nuevas pasiones y vidas,
esas que no las confesamos
y crepitan enardecidas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 650
Mil poemas a Miguel Hernández
Violeta Cerceau, Argentina
Nostalgia
Cuando a la antigua casona regreso
tras una ausencia obligada,
me reciben las glicinas
que a mi corazón exaltan.
En ese extenso sendero
donde descansan los ecos
de mi familia inmigrante,
aquellas voces fervientes,
aquellas risas vigentes.
Me inclino sobre el sillón de hierro
y mi espíritu se expande,
el aroma de las flores
va llevándome muy lejos,
hasta el roce de unas manos,
hasta besos sobre mi frente,
que laten como si fueran presente.
Las glicinas se deslizan
desde el cielo de la casa,
simulando ser cascada,
que cobijan en invierno,
y aliviando el verano
cuando el sol intenso, arrasa.
Y su perfume profundo culmina
en un paisaje perfecto.
Recuerdo aquellos encuentros
de fugaces amoríos,
los besos casi robados
dos seres que se entregaban,
sumergidos entre glicinas
tapices lilas del patio.
La nostalgia es casi un sueño
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 651
Mil poemas a Miguel Hernández
que oprime el alma,
que estalla en lágrimas,
es retornar a una época,
de felicidad sin límites.
Y la alegría se enlaza con la pena,
siendo la hermosa glicina la autora
de éste ¡tan bello milagro!
Ada Gil, Argentina
No te conocí, no me conociste
No te conocí, no me conociste…Sin embargo cuatro cifras nos unen.
Leyendo los escenarios de tu vida y tus escritos, pude vislumbrarte.
Recorrí tus pasos infantiles y adolescentes, esas huellas recónditas,
penetrantes, inquebrantables, que dejaste por los caminos de tu alicantina Orihuela,
mientras custodiabas el acompasado trote de tus cabras.
Soñabas orillando la rivera del río Segura, tejiendo historias,
hilvanando palabras, arrancando ramilletes de poemas de tu región,
de tu vergel, de tu lugar. Sí, tu lugar, porque allí fuiste hijo,
hermano, amigo, novio, condiscípulo y allí… floreció tu rima.
Eras muy joven, cuando España comienza a dividirse.
La derecha soñaba instaurar la Monarquía y la izquierda soñaba con:
“La España del cincel y de la masa…Una España implacable y redentora…
España de la rabia y de la idea”
Según lo describe el gran escritor Antonio Machado,
en “El mañana efímero”. Había llegado el momento del compromiso
y entonces te acercaste a los ideales de la República, como mi padre,
que orgulloso y apasionado, rememoraba a Neruda:
“España desgarró la tierra con sus uñas cuando Paris era la más hermosa.
España derramó su enorme árbol de sangre cuando Londres cuidaba su jardín
y su lago de cisnes.”
A Pablo lo fusilaron vilmente, esposado y por la espalda.
Su sangre fue envolviendo de púrpura los olivares de su amada Granada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 652
Mil poemas a Miguel Hernández
A vos, te permitieron vivir, pero padeciendo ignominias, oprobios, vergüenzas.
Amordazaron tu palabra, te arrastraron por cárceles de muchos rincones españoles;
jaulas, calabozos, celdas húmedas, oscuras, siniestras...
Ellas anochecieron tu vida y humedecieron para siempre
tus pulmones que debilitados dijeron ¡basta!
No te conocí, no me conociste, pero nos anuda, nos amarra una cifra,
cuatro dígitos. El año en que morías, yo nací.
Norma Elda Ygarza, Argentina
MIGUEL HERNANDEZ
En Orihuela pequeño pueblo español, nació Miguel Hernández
el treinta de Octubre de 1910, hijo de un contratante de ganado.
Su niñez y adolescencia transcurren tras un pequeño hato de cabras y aves de corral.
En medio de la naturaleza contempla maravillado, la luna,
las estrellas, la lluvia hierbas y animales.
Por las tardes ordeñas las vacas,
sólo hace un paréntesis de unos años para asistir a la escuela anexa
al colegio de Santo Domingo descollando por su extraordinario talento.
A los 15 años tiene que abandonar para volver a Orihuela.
En Orihuela lee numerosos libros entre ellos, Zorrilla y Rubén DaríoA veces se pone a escribir a la sombra de un árbol
sus primeros experimentos poéticos. Allí conoce a Ramón Sijé
que siempre sería su amigo, y a los hermanos Feroll,
cuya panadería se convierte en tertulia del pequeño grupo de aficionados a las letras.
Ramón Sijé le orienta en sus letras y lo alienta a seguir su actividad creadora.
El joven pastor con esfuerzo se va autoeducando con libros que consigue
en la biblioteca del pueblo.
Un canónigo de la Catedralle, lo orienta y le presta libros.
Poco a poco irá leyendo a los grandes del siglo de Oro:
Cervantes, Góngora, Gracilazo, y otros modernos como Juan Ramón,
Machado, etc. Desde 1930, Miguel Hernández publica poemas en el seminario
El Pueblo de Orihuela y en un diario de Alicante.
Poseído por la fiebre de la fama a los 21 años marcha a Madrid
con un puñado de poemas y unas recomendaciones que nada le sirven,
las semanas pasan y a pesar de la abnegada ayuda de unos amigos de Orihuela
tiene que volver a su pueblo fracasado.
En el año 1933 escribe su libro “PERITO DE LUNAS”.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 653
Mil poemas a Miguel Hernández
La prensa local se hace eco del acontecimiento alimentando en el joven poeta
el ansia y sed de celebridad –Un día al salir de una notaria de su ciudad
conoce a Josefina Manresa y se enamora de ella.
En 1936 o sea a los 26 años escribe un auto sacramental titulado
“QUIÉN TE HA VISTO Y QUIÉN TE VE” Y “SOMBRAS DE LO QUE ERAS”,
eso le abrirá las puertas en Madrid, allí mantendrá un empleo
para recoger datos y redactar historias de toreros.
Pero en Madrid se siente muy solo y le hace sentir nostalgia por Orihuela.
En las cartas a sus amigos abundan quejas por la pensión en que habita,
peleas con los otros escritores, intrigas, el ruido y el tráfico.
Así que apenas puede, vuelve a su pueblo, a charlar con sus amigos,
comer las frutas que le gustaban, y bañarse en el río.
En Madrid había conocido a Neruda y a Aleixandre quienes lo iniciaron
en el surrealismo y le sugirieron y le influyeron en la ideología social
y política del joven poeta provinciano..
Superada esta crisis Miguel Hernández es ya un poeta hecho
y comienza a crear lo más logrado y genial de su obra.
El estallido de la guerra civil, en Julio 1936, le obliga a tomar una decisiónLa toma con entusiasmo por la República, su creación lírica es un arma de lucha.
En plena guerra se escapa brevemente para casarse,
el 9 de Marzo de 1937 con Josefina Manresa.
Su vida agitada y descuidada le ocasiona una anemia cerebral aguda
que le obliga a retirarse a Cox para reponerse, pero igual sigue escribiendo.
En la primavera del 39, ante la desbandada general del frente republicano.
Miguel Hernández comienza su larga peregrinación por las cárceles.
Sevilla, Madrid, difícil imaginarnos la vida en las prisiones,
en los meses posteriores de la guerra. Inesperadamente
a mediados de setiembre del 39 es puesto en libertad.
Arrastrado por el amor a los suyo y se dirige a Orihuela
donde es encarcelado nuevamente. El poeta como dice lleno de amargura
“sigue haciendo turismo” por las cárceles de Madrid,
hasta que su indefenso organismo se declara una tuberculosis pulmonar aguda,
alcanzando proporciones tan dramáticas y alarmantes
que hasta el intento de trasladarlo al Sanatorio Penitenciario resulta imposible.
Entre dolores, hemorragias y ataques de tos Miguel Hernández
expira el 28 de Marzo del 42 a los 31 años de edad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 654
Mil poemas a Miguel Hernández
Liliana Silvia Morello, Argentina
MIGUEL DE ORIHUELA…
Querido amigo de las letras…
Por toda España y el planeta, siguen vivos tus versos
en los caminos de todos los poetas.
Naciste en un otoño europeo y te fuiste en un otoño latino,
que coincidencia amigo, dejaste el suelo del mundo plasmado
con tus hojas vestidas de letras.
Fuiste pastor de cabras y en escritor la vida te transformó.
Admiraste a Calderón de La Barca,
Cervantes, Lope de Vega, Garcilazo y a Góngora más que a otros.
Tus palabras eran la luz de tu tierra y te dieron una notable reputación…
“Canto a Valencia”, “Perito en Lunas”, demostraron tu gran luminosidad.
La pintora Maruja puso destellos de luz en tu pluma,
“El rayo que no cesa” quedó desde entonces, como estela en el cielo junto a la luna.
Torrencial fue tu aliento y tu inspiración, telúrica.
Defensor de ideales, tu compromiso político fue con los pobres y desheredados.
Eras como el viento en la tormenta que no puede dejar de soplar,
una fuerte ráfaga literaria tu estilo,
en medio de una España convulsionada y un mundo en crisis.
De la tinta que corría por tus venas nació el drama “Pastor de la muerte”.
“El hombre que acecha”, fue tu primer libro,
“El hijo de la luz y de la sombra” dedicaste a tu pequeño hijo
cuando te llenó de ausencia. Con la llegada de Manuel Miguel,
afloró “Nanas de la cebolla”… Y sopló en tu pluma “Viento del pueblo”.
Deshojándose tu vida, poemas de amor, poemas sociales,
de guerra y de muerte llenaron hojas blancas que vacías
esperaban el toque de tus sentimientos y de tus ideales latentes.
La oscuridad de una guerra absurda perpetuó tu luz literaria.
Tus enemigos no pudieron borrar tus huellas.
Te persiguieron, te acosaron, te alcanzaron, la prisión te abrazó,
y fue ella tu refugio frío y oscuro.
La muerte, te rondó como león en acecho, la bronquitis,
el tifus y la tuberculosis te arrancaron de este mundo.
Tus ojos quedaron abiertos, como leyendo tus versos y tus libros,
dejándonos en tu mirada la lucha por la vida, por todo y por nada.
Porque la vida es todo y todo es la vida por la que luchabas…
Pues viva como la sangre y dura como el oro permanece tu poesía,
como una antorcha encendida en la eternidad, imposible de apagar.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 655
Mil poemas a Miguel Hernández
Marcos Rodolfo Ortellao, Argentina
CUNA DE DICTADORES
Poeta sin vos, sin letra, poeta proscrito.
El dictador temía de tus palabras.
El, manso te quería. Tal vez haciendo un verso que lo santificara.
¿Qué encarceló de ti? ¿Acaso una cebolla?
Nunca supo el tirano, que aún hoy, suena en su cuna,
la risa de tu niño hambriento de esperanza.
Tampoco a de saber lo que tarda en secarse,
el amor de las madres, de esposo asesinado.
Nunca sabrá él, que hoy viajan por el mundo,
sus letras, sus palabras, hechas voces en canción.
No supo el dictador, que ha dictador enfrentaba.
Aquel, a sable y bala, matando el pensamiento,
la voz y la enseñanza. Y tú a poema y verso,
Matando el dolor, el hambre, la miseria, acaso, la ignorancia.
Impidiéndonos, alas a nuestros ideales, belleza a los sueños,
Fe al futuro.
Ah…pobre dictador, jamás pudo matarte,
trascendiste la vida, en amor, poesía y dolor.
Miguel Hernández, amigo, estás junto a mí pluma.
De pie, acompañando mis versos, por ello, ruego al señor,
descanso para tu alma, de loco y soñador.
Liliana Farah, Argentina
SUEÑO CONTIGO
Me invaden tus versos,
tu luz, tu prestancia.
Despierto en las noches,
asediada de ansias.
Tu imagen se arrulla,
en palabras aladas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 656
Mil poemas a Miguel Hernández
Inmolando poesías,
de amor y nostalgia.
La sierra oriolana
te busca, te extraña.
Dejaste en un árbol,
palabras forjadas.
Viajero del tiempo,
brote de una infancia.
Lámina de luna…
Estrella de plata…
Vives en mis sueños,
acaricias mi alma.
Pulcro mensajero,
de estrofas amadas.
Susana Fernández Vitale, Argentina
SILENCIO AMARGO
Tus manos jóvenes,
duras de trabajo,
llenas de misterio,
a las letras se volcaron.
Entre cabras, estrellas,
luces y un verde campo,
tu tinta se hizo eco
tus poemas cantados.
Retumba el universo de gozo literario!!!
Un gélido paréntesis
te arrebató los sueños,
la vida, el tiempo
en un silencio amargo.
Aquella mañana, en Orihuela,
el viento estaba calmo,
el sol quemo las ramas
que acariciaban el árbol.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 657
Mil poemas a Miguel Hernández
Norma Feliz Peralta, Rep. Dominicana
MENSAJERO DE AMOR
Miguel
Búscala.
Espérala.
No justifiques mis penas
Mis noches sin ojos
Dile que esta venganza inmaculada
espera sin traiciones.
Eres al único que le abrirá la puerta. Me lo ha dicho en sueños.
Miguel
Cuando la veas
Lee sus niñas. Observa su blancura. Tráeme su imagen en tus ojos.
No la entere de mis versos.
Solo observa su blancura. No le muestres ni una sola yarda de mis penas.
Observa su estatura...
Y cuando regreses me dirás cuales son los muros y nubes que nos separan.
Miguel
CONFIO EN TI PLENAMENTE
Y déjame tus pasos para ir a dejarle YO misma mis poemas
Cristina Ortega, Argentina
Te amo.
Lo juro, porque
te amo,
por el yugo de la carne
la pasión de este cuerpo.
Con el amor esclavo
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 658
Mil poemas a Miguel Hernández
te amaré hasta la muerte,
eterna y profundamente
mi corazón enamorado.
Te amo
lo juro porque
te amo.
El amor es inmortal
cuenta juntos los amantes
y las calles del olvido.
Te amo
lo juro porque
te amo.
Puedo salir de este mundo... y volar
como toro y paloma,
más allá reencontrarnos,
cual éxtasis serenamente
ódiame porque es verdad
lo juro porque "te amo"
María Cristina Coppari, Argentina
CORAZÓN POETA
Se atormenta la tarde
entre muros de oscuros barrotes
recogiendo recuerdos
una lágrima en gris se marchita.
Extravío…
Desidia…
Olvido…
aliento enmohecido
que avanza socavando paredes
y los anémicos poros de tu piel
huérfanos de esplendor
cegado de caricias
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 659
Mil poemas a Miguel Hernández
sedienta la boca de verdes y cielos.
“Para la libertad, sangro, lucho, pervivo”
¡Corazón poeta!
Donde quedó tu vuelo estremecido.
Donde la libertad…con piel de ave.
Aquellos, tus pasos ardientes de gloria.
Aquella tu España la que tanto amas…
Danza de guerra, de sangre y amapolas.
Alondra azul de amor…de vida…y muerte
¡Pájaro herido! ¡Corazón poeta!
El herido: “Miguel Hernández”
Nelli Garay, Argentina
MIGUEL HERNANDEZ
Orihuela fue tu cuna
fue tu musa y tu batalla;
tu inspiración fue su luna
con resplandor de metralla
y un final de angustia bruna.
Inhibido de tus letras,
detenidos en tu deseos,
nada logras cuando impetras
tus imposibles trofeos,
si en esa ilusión penetras.
Fue tu vida tan intensa
que no pudiste medir
la profundidad inmensa
de tu legado al partir...
¡el universo condensa!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 660
Mil poemas a Miguel Hernández
Lúcia Laborda, Brasil
Miguel Hernandez
Miguel Hernandez
que em Alicante nasceu,
foi um jovem trabalhador,
que da poesia viveu.
Contemplador da natureza,
sob a lua, a chuva e o sol
belas prosas e poemas,
esse jovem escreveu.
Mas no pouco tempo
em que na escola ficou,
despertou o seu talento
que a todos encantou.
E por esse belo conceito,
o inspirado rapaz se elevou
quando aos quinze anos
a sua terra retornou.
A primeira viagem a Madrid
pensando se tornar conhecido,
lançou a Conquista de Madrid
poesias feitas com maestria.
Assim começou a trajetória
dos seus poemas lendários;
fundou uma revista com Neruda:
Cavalo verde para poesia.
Entre poemas e prosas
participou da guerra civil,
movimentos sociais
e missões educativas.
Foi preso e condenado
morreu encarcerado,
enlutando não só a literatura,
mas, a sua veia produtiva.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 661
Mil poemas a Miguel Hernández
Ma Alicia Gómez de Balbuena, Argentina
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Guerrero que en polvorines le vas cantando a la lluvia
Adalid de la justicia que en palabras vanas, vuela
¡Ah Miguel el de Orihuela! El de incansables espuelas
Aquél que entre pastos vivos soñó con su ser poeta
Éste que vive, poeta, aún entre pastos, dormido.
Dame esa mano que tañe ¡Dame tus sueños Miguel!
Quiero captar en tus dedos, la magia total del SER
De aquél que sufriendo vive, para no morir después…
De quien transporta su cruz, pensando que volverá.
Y en la magia de las noches, que se pueblan con estrellas
le va cantando a su cielo, entremezclándose en ellas
Y en la magia de los días, entre renglones alados,
va contándole sus sueños de poeta dislocado
a todo niño que duerme… A todo poeta en ciernes…
A todo aquél que aún hoy piensa en sus palabras donadas
como granas confitadas de la gran fiesta vivida;
como cuentas de un rosario que acompañan tu partida.
Dame esa mano que tañe… ¡Dame tus sueños Miguel!
¡Quiero captar en tus dedos la magia total del SER!
No me dejes sin espuelas, ¡Oh Miguel! El de Orihuela…
Mario Alberto Manuel Vázquez, Argentina
(de “Al borde del silencio”)
a Miguel Hernández
Fue el silencio de siglos
de tu gente
el de sabor a piedra
en tu garganta
el del olor a yugo
en tus entrañas
sudores
tierra seca.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 662
Mil poemas a Miguel Hernández
En ti preñó tus manos
y las parió palabra
grito sementero
verbos agudos germinaron tus dedos
balidos de tus cabras en las palmas
la sangre endurecida
en adjetivo-sable por tus uñas.
No parece que hubiese silencio entre tus versos
en tu trinchera
en tu terrosa boca que combate.
Hay que desenterrarlo
como a un Ramón amado
evocarlo
como a una calavera
cortarlo
como un pan con aromas de almendro
y saborearlo…
Hoy que las hojas lloran
hoy que tu piel no toca
hoy que ya son silencio
aquellos que quisieron silenciarte.
Lúcia Helena Pereira, Brasil
ODE A MIGUEL HERNANDEZ
Canto louvores ao grande poeta espanhol
Que Alfred Asis homenageia e nós aplaudimos.
Oh! Poeta, eu lhe oferto uma rosa vermelha
Perfumada e bela.
Uma rosa com mil pétalas
Para bendizer a glória do teu viver
E a nobreza da tua morte.
Canto louvores ao grande poeta espanhol
Com as vozes orquestrais de muitos países.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 663
Mil poemas a Miguel Hernández
Oh! Poeta das belas palavras
Eu chego neste final da fila
Ansiosa e emocionada
Para erguer minha voz de poeta
E a música que os pássaros sabem cantar!
Luis Alberto Gontade Orsini, Uruguay
“Yo nací en mala luna.”
“Tengo la pena de una sola pena”
“Que vale más que toda alegría.”
Miguel Hernández
30 de octubre de 1901 - 28 de marzo de 1942
oooo
En un tiempo de petisos,
Francolinos y entripados,
renunció a la “Trinidad”
el hijo del carpintero.
Gritaba a pleno pulmón
sin mayor convencimiento
“Amaos… unos a los otros”
“No os cebéis con la sangre”…
“Sólo beneficiáis la carroña”
“Y el bolso del sepulturero.”
oooo
Dios Padre lo miró fijo,
confiándole en tono amable:
“¿Te has creído la novela?”
¿Se te escapó la tortuga?”
“Esos que ves… van matando”
-Le increpó severamente“Sean paganos o infieles…”
“y escupen con asco atroz”
“sobre la sangre vertida”
“por los pobres inocentes.”
oooo
“Invocan con fanatismo”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 664
Mil poemas a Miguel Hernández
“tu inaudito sacrificio.”
“Galopan en tolvaneras,”
“Veneran tu Virgen Madre”
“Violan vírgenes sin madre”
“Se cagan en escapularios.”
“Todo se ofrece en tu tributo”
“Hijo…”
“por tus llagas del Calvario”
oooo
Y así, rostro amoratado,
torturado hasta la muerte,
Miguel murió por su España.
¡Oigase bien¡: La Republicana.
El Hernández. Hombre,
si es que los hubo algún día.
Miguel lumbre, sentimiento
de un pueblo noble y fecundo,
el que aguarda esperanzado
que sus “migueles” renazcan.
Los “Hernández”. Fragua y pico,
Mancera,
sudor de los olivares. Causa.
Ave de luz libertaria.
Clavo cincelado en plata
Que algún día ciertamente
se incrustará con desprecio
en el sucio corazón
de quienes venden la patria.
Josefinas… muchas, lloran
En Jaen, en Horihuela.
Alberti y Cernuda inquietos,
con Neruda y tantos otros
en sus tumbas se refriegan:
“Siempre es el mismo enemigo”
“El huevo de la culebra.”
“A ése hay que aplastar.”
“o quemarlo en una hoguera.
0000
Vieja lucha…la del siempre
La que Miguel emprendiera
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 665
Mil poemas a Miguel Hernández
Atado a su pluma honrada
como su pueblo… ¡Valiente¡;
al que Unamuno enseñara…
a no confundir “señoritos”
con la dignidad de España.
Juan Carlos García Guridi, Cuba
AMIGO, DIJO EL CANTOR
–Amigo, dijo el cantor
y se quedó sin palabras
mientras con versos y cabras
signaba su alrededor.
El triste y el soñador
atados a un mismo nombre
sin más gloria ni renombre
que enseñar rota la piel
fueron un solo Miguel…
Miguel Hernández, ¡el hombre!
Dúo, Alfred Asís, Chile-Maiguálida Pérez, Venezuela
PARA MIGUEL…
Maiguálida Pérez
Y de repente la mirada
quedó fija en el horizonte
En aquel lugar donde la libertad se hace grande
Alfred Asís
Y vino un haz de luz, en donde revoloteaban mariposas
la tierra germinaba, se llenaban los campos de flores
y las balas perdidas, eran cercas de madera
para acoger el ganado y alimentar las heridas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 666
Mil poemas a Miguel Hernández
Norton Contreras Robledo, Chile, Suecia
Elegía a Miguel Hernández
De pastor a pastor,
de poeta a poeta
yo te canto compañero.
Poeta luminoso,
luz de la tierra
amaneceres de olor a madreselva
alfarero de manantiales diáfanos
alquimista dormido en los trigales.
Tú en Orihuela. Yo en Canela.
Tú en España. Yo en Chile.
Tras las cabras,
por montes, por valles, por sierras
se nos fue llenando el alma de poesía.
Bajo las sombras de algún árbol,
mientras las cabras pacían
comenzó a germinar tu poesía
tan tuya, tan de todos,
tan perdurable
tan eterna,
como estrellas silentes bajo el cielo infinito,
como la luna llena en los campos de España,
como racimos de uvas,
como pan y cebolla,
leche de cabra,
yunta y arado
hierbas y flores silvestre,
aire puro del campo,
y sol quemando la piel
Lluvias germinales,
pueblo pequeño
campanas de iglesia llamando a la misa.
En Madrid tu poesía es la tierra fértil,
Es el aire puro de tu pueblo pequeño
es poesía religiosa y teatro sacro
es el olor y el incienso de iglesia.
Pablo Neruda y Rafael Alberti
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 667
Mil poemas a Miguel Hernández
ponen en tu mirada de poeta provinciano
el rol social y político de la palabra escrita.
En tu alma se anuncian
caminos por andar
cantos a tu amada
nanas a tu hijo,
se impregna de pólvora,
de sangre de pueblo en lucha,
de denuncia, y testimonio,
de tormentas de rayos y de truenos.
No se ganó la guerra.
Peregrinación por cárceles
de Sevilla y Madrid
Ocaña y Alicante
Soledades, nostalgias
penas y hambre
la luna y las estrellas, tus noches
el sol, tus días.
tu mujer tu esperanza y tu consuelo,
tu hijo arrumado con la nanas de la cebolla
prolongación de tu vida,
más allá de tus días,
más allá de tu vuelo.
Miguel Hernández,
poeta insomne
poesía valiente y duradera,
manojos de claveles y primavera,
azahares de tu pueblo,
desterrador de sombras,
arquitecto de luminosidades,
pastor de luciérnagas estelares,
cantor insomne,
poeta de la España de ayer
poeta de la España de hoy
y de mañana,
que en sus despojos
sumida en penurias y pobreza
está despertando adolorida.
Junta toda la indignación y el coraje
porque la España de Alberti y de Machado
la España amada por Neruda
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 668
Mil poemas a Miguel Hernández
la España por la que tú luchaste,
por sobre la injusticia y el dolor
renacerá a la vida.
a la alegría.
Sebastiao Luis Alves, Brasil
Amigo Miguel
Amigo Miguel...
Espero llegar en palabras
Encontrar en el pensamiento
Imagina sus luchas
Cartas de Guerra
Sobrevivir el momento.
Nacido en humildad
El destino predicó piezas
Ganó todos
Una a una
Tener honestidad
Valor para enfrentar la verdad
En el camino de la vida.
A través de los años
Datos de determinar su destino
Más mal que bien
Algunos de tierra firme y otros en la cuerda floja
Tropezó, cayó en el barro
Amigo Miguel...
Levante, limpe y persista.
De pronto, Miguel...
Te detienes y analizar todo lo que quedó atrás
Lo que viene
Y ve que muchos esfuerzos fueron en vano
Siente el dolor de sorpresas
Corazón con alas
Pero otros sacrificios ganado la pena.
El sueño de que nazca
Un soñador
Ante el sufrimiento
Tormento de lo inesperado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 669
Mil poemas a Miguel Hernández
Y luchó Miguel...
Los débiles y los oprimidos
Como Neruda y Vicente
¡Libertad! ¡Justicia social!
Gritando consciente
Eterno Miguel.
Palabras de Miguel
El mensaje del poeta
Enojado con el hambre del pueblo
Ojo de la ambición
Cara hipócrita
Luchó en sangre
Palabras de Miguel.
Y tantos poetas
Busque la libertad
Siéntese en la carne
Hierros del dictador
Pero en verdad cree
Palabras de Miguel.
Persistió y no huyó de los combates
Habló de la esperanza
Soñaba...
A pesar de los gritos de guerra
Neurosis maldita
Tiene Miguel
En la vida y en las letras
Dar luz a los afligidos.
Miguel de la gente humilde
No se espera que ocurra
Lavó el alma
Ganó de la ignorancia del poder
Se asoció con grandes maestros
Inmortalizando en el tiempo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 670
Mil poemas a Miguel Hernández
Dyoz Dadho (Santiago de Chuco – Perú)
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Pastor de cabras en tu infancia,
y luego, pastor de versos a tus anchas.
Miguel Hernández, alma precoz
de Orihuela, aún la vida late,
en el Levante de la tierra.
Y vibran vibrando como
en el campo de batalla
tu corazón y tu verbo planetarios,
desfilando incólumes entre delirios
y luces y sombras primordiales.
Ruiseñor eterno de eternas primaveras,
oigo tu sangre latir en la milenaria gleba
y la veo elevarse púrpura como una bandera
de encendida miel, sobre
campos de trigo musicales.
Ay, muchacho, laurel desvelado en las majadas
junto al alba, tú siempre llevabas
la luna y el sol en tu mirada.
Por eso, los que quisieron mutilarte
mutilar el rayo de tu presencia,
prestos cayeron ante
la luz irreductible de tu canto.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 671
Mil poemas a Miguel Hernández
Helamán Roque Quezada, Perú
A Miguel Hernández
El hombre siempre tiende a buscar compañía escapando así de si mismo y
buscando en otros la felicidad que no pudo hallar, y la pide prestada hasta que
amargamente la tiene que devolver para regresar a su mundo real y así se dedica a
ver crecer a la humanidad mientras que él, se hace cada ves más pequeño.
Como un niño que corre a su madre cuando ve venir a lo lejos la oscuridad,
así el hombre también huye cuando ve acercarse la soledad. Y busca refugio entre
sus semejantes, mientras que ellos como gallinas a sus polluelos los cubren con sus
alas y nublan su vista, e impiden el crecimiento que la soledad trae consigo. Pero
la sensación de soledad no es la sensación del vacío, son dos cosas totalmente
distintas, aunque parezca que sus fibras se unan en algún punto. La soledad llega a
hacernos compañía cuando todos se han apartado, como un tímido ser se va
acercando mientras cada uno de nuestros amigos van menguando, mientras que el
vacío es cuando nada viene a visitarnos, cuando todos se han apartado.
Pero deberíamos desear estar solos aunque así sucederá en muchos momentos
de nuestra vida, irrumpiendo nuestra primavera y haciendo nevar, cerrando así todas
las flores pero a su vez cada copo de nieve, aunque imposible que parezca
encenderá la llama del alma y nos hará meditar, es en las celdas más oscuras o en
los bosques más lejanos donde la soledad nos invita a entrar y allí nadie va con luz
prestada, sino que debemos de caminar en la oscuridad hasta encontrar nuestra propia
luz, y al salir de esos calabozos que parecían aterradores y esas prisiones que nos
reprimían. ¡Oh que luz habremos conseguido acabando de esa forma el viaje más
largo de nuestra vida mortal que es hacia nuestro interior¡; entónces podremos estar
seguros que ya en parte estamos listos para partir.
Es en la soledad donde se pueden escribir las lágrimas y plasmar las sonrisas, es
en la soledad donde descorremos el velo y nos miramos a nosotros mismos. Ya que
la soledad hace vibrar el corazón, revive los recuerdos más profundos y nos hace
volver a la infancia o vislumbrar la vejez. Ese tipo de enseñanza, no se puede
extender en público entre todo el tumulto de gente que confunde el espíritu, más el
problema es que durante el proceso esto empieza a doler, causa nostalgia y un
sentimiento amargo de angustia nos embarga; y es allí cuando la mayoría de
nosotros escapa, pero agradezco con todo mi corazón a esas almas valerosas que no
escaparon sino que se hundieron más y más hasta traer a nosotros esas perlas de
sabiduría, arte y poesía que están prohibidas para la sociedad, porque ellos aún, en
la soledad jamás estuvieron vacíos y aún en el calabozo más oscuro encontraron el
recinto más sagrado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 672
Mil poemas a Miguel Hernández
Nieves María Merino, España
ROMANCE A MIGUEL HERNÁNDEZ.
¿DÓNDE ESTÁS, “PERITO EN LUNAS “?
Hoy la noche es tan oscura como ese pozo sin fondo.
¿Dónde estás, “Perito en lunas “en éste penar tan hondo?
Búscame a la luna llena. La de la cara plateada.
La de cantos de sirenas en esta noche callada.
Fuiste mártir desvalido en la guerra fratricida.
Cantas nanas de cebollas que no salvan a tu niño.
La angustia de Josefina suplicando en el camino
Que te llevaba a la muerte. Triste suerte tu destino.
Sola quedó. Viuda y seca porque tu niño del alma
te acompañó a las estrellas.
Nada tuyo en descendencia bajo su pobre corpiño.
Tus poemas son tu herencia. Su viudez, cruel desatino.
Colmaste toda paciencia deambulando sin descanso
con tu ardor y tu impaciencia. Bravo toro. Nada manso
que con astada decencia embestiste aquél remanso.
Miguel, joven poeta: aun sigo escuchando tu llanto.
Enjuga tus ojos tristes: Son tus versos nuestro canto.
AMANECE
Frío y escarcha hieren tus labios.
Se escucha al gallo.
Un perro ladra
y ulula ése viento helado
en la mañana de marzo.
Las nubes cubren el cielo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 673
Mil poemas a Miguel Hernández
Banco velo. Velo blanco…
Como un sudario que arropa
tu cuerpo gélido al alba.
Albo cielo. Cielo albo.
Blanca inocencia.
Blanca impaciencia.
Blanca conciencia
te derrotó en tu afán
Calvario.
Duro calvario
Sufres en “peregrinaje”
por los herrajes.
Te vas minando
fuerte muchacho: quebraste
cuando dejaste Orihuela
tu pueblecito añorado.
Duerme, Miguel.
Todos lloran.
Aún todos te lloramos.
Tus versos siguen candentes.
Hieren. Duelen.
Son testigos.
Los sentimos muy cercanos
al momento que vivimos.
VERSANDO A MIGUEL CON SUS VERSOS
“Todo era azul”…
Volaste.
Y en tu “Vuelo” de joven
“El hombre no reposa”.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 674
Mil poemas a Miguel Hernández
En tu “Muerte nupcial”
con “El inicio de la noche”
fuiste la “Eterna sombra”
que se mecen
lánguidos, como arrullando.
Sonriendo.
Sí…
“Sonreír con la alegre
tristeza del olvido “
que buscaste en los olivos.
La brisa acuna tu vientre
soñando con ésa luz
en tu oscuridad maldita.
“Desde que alba quiso ser alba”
todo era azul”.
Y en tus desvelos de muerte
Eterno eras.
Eterno eres
Miguel Hernández,
siempre.
ACRÓSTICO A MIGUEL HERNÁNDEZ
Mientras observas la luna
Iluminando tus campos
Guías tu luma e ingenio:
Utópico joven. Lozano
Entre olivos que se mecen
Lánguidos, como arrullando.
Hermosos poemas.Tiernos.
Elevados y profundos.
Renaces con ése mundo:
Naturaleza y encanto.
Avezado, inteligente, pastor de paz.
No sabes aún--inocente-Dónde acecha la maldad.
Escribes y te imaginas
Zalamerías sin quebrantos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 675
Mil poemas a Miguel Hernández
SONRÍES, MIGUEL…
Sonríes…
Rememoras.
Y en tu itinerar gozoso
por callejas de Madrid
sigues buscando proyectos
de ser más reconocido.
Rememoras…y sonríes
en “El Retiro” que late
como pulmón que refleja
a la Orihuela que añoras
con la osadía que nace
en tu alma de poeta.
Miguel que sueña paisajes
de libertad, compañía
en el terruño que te hace
ser más puro todavía.
Tu Orihuela
era el pecho que mamaste
y volviste, liberado…
Pero encontraste la muerte:
¿Seguías…o siguió tus pasos?...
Al menos entre tu gente
te concedió su regazo.
Obed Juan Vizcaíno Nájera, Venezuela
“Tu risa me hace libre, me pone alas.
Soledades me quita, cárcel me arranca.
Boca que vuela, corazón que en tus labios
relampaguea”. (Nanas De La Cebolla)
El fascismo quiso callar la conciencia de todo un pueblo,
tu muerte quisieron fraguarla en los cuarteles
¿Por qué las dictaduras asesinan a los poetas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 676
Mil poemas a Miguel Hernández
llevando entre las bayonetas lo mejor de las generaciones?
Alicante sintió tu último suspiro,
Orihuela lloró a su poeta,
de ojos grandes y risa franca,
que descansa en su suelo,
nutriendo azahares, Naranjales y olivos.
Fuiste para Neruda:
escritor salido de la naturaleza,
una piedra intacta,
con la virginidad selvática y arrolladora,
de la fuerza vital de tu pensamiento.
Pastor cabrero,
fuiste preso,
prisionero de la barbarie,
nunca pudieron dominar tu fiereza republicana.
Moriste Joven para que quedara tu recuerdo intacto.
Libros prestados y la vida misma fueron tu escuela,
tus maestros los campos de pastoreo.
Nunca mueren los poetas por voluntad de los tiranos,
viven en los recuerdos de su pueblo,
en la gloria eterna de la poesía.
Tus versos se escuchan en el rumor del rio Segura,
Haces eco entre limoneros, algodonales,
y almendros milenarios,
que guardan en sus sabias tu espíritu indómito.
Muchachón de Orihuela no has muerto,
hijo de comarca de la Vega Baja del Segura,
recorriste las cárceles españolas con la dignidad
y gallardía propia de tu estirpe.
Lo que no fusiló la monarquía y el fascismo,
lo mató la enfermedad.
No le diste el gusto a Franco ni a sus borbones,
te fuiste cuando se cumplió tu destino.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 677
Mil poemas a Miguel Hernández
Pastor de Campos y montañas,
hermano del vuelo y canto de los ruiseñores de tus lares.
Señor de la poesía terrenal y juvenil,
en ella se juntan todos los colores de tu suelo,
el perfume y la voz del Levante español,
sintiéndose entre las aguas del rio Segura,
que avanza indetenible al mar,
reviviendo el recuerdo de tu viva imaginación.
El gran Neruda admiró el destello y brío de tu poesía,
vio un aura telúrica en torno a tu grandeza,
para el gran americano tenías una cara de terrón,
que conserva la frescura de la tierra donde naciste.
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz” Guatemala, C.A.
“EL GRITO ORIOLANO”
I
Predecía su horizonte
pidiendo algo de consuelo
sus ojos mirando al cielo
cual maravilloso arconte.
Permíteme que remonte
a pensar en mi modelo
saludando con pañuelo
allá en lo alto de su monte …
No es ya pastor sin ovejas
no se borrara la sombra
de quien con honra se nombra
cantaba notas añejas
con figura de oriolano
tras las rejas da la mano.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 678
Mil poemas a Miguel Hernández
II
Cual un canto de sinsonte
su versar es un revuelo
pues aun cuando el es mozuelo
raudo emprende su desmonte .
Lleva oro su guardamonte
Orgulloso y sin recelo
enérgico deja el suelo
de la vida es polizonte.
Soñar Libertad no deja
Que su musa sea escombra
y de injusticia la alfombra
Mientras soñaba su queja
soñaba historia de hermano
¡Libertad! Grito Hernandiano
Javier Delgado Benites, Perú
LOA A MIGUEL HERNÁNDEZ
Naciste palpando la naturaleza
conversando con los pastos y alfalfares
silbando tras las vacas y las cabras
contemplando los miles de misterios
de los ríos, las lluvias, la luna y las estrellas
al cual dedicabas tus incipientes versos
ahí fue originando el filón poético
luego das los primeros fulgores en divulgar
va en ascenso la fama de lírico campesino
iba sonando cual tormenta en la capital ibérica
logrando codearse con los mejores bardos
tu poesía era comprometida socialmente
con el pueblo olvidado y desprotegido.
Poeta de estirpe provinciana
por tus venas pulsaban pureza rebelde
liándote en la Guerra Civil Española
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 679
Mil poemas a Miguel Hernández
alzando tu voz de crítica contra el fascismo
el odio se arremetió contra tu ternura
siendo encarcelado y masacrado
en las mazmorras falangistas
deteriorando tu salud psíquica y física
no siendo pretexto para seguir luchando
elevando con ahínco la voz a las conciencias
convirtiéndote en un turista de las cárceles
tu cuerpo ya no resistió las torturas infames
ni la soberbia del fascismo internacional
en la flor de la juventud sucumbiste de pena
el pueblo revolucionario aún exalta tu grandeza
te tiene presente en sus corazones abiertos
y no te deja morir ni un instante de gloria
poeta campesino oriolano inmortal.
José Iván Pinheiro, Brasil
POETA SOLDADO DE LUZ E LIBERDADE
Miguel Hernandez é luz no ar,
e ainda vive nos ideais sociais.
Sua voz soa na poesia da luta,
e para a Espanha livre aponta
o cantar do sol maior que há,
contra toda tirania que afronta.
Fez-se soldado, o poeta amado
na guerra civil contra opressão.
Levantou seu braço num brado:
A Liberdade une povo e nação.
Do pranto no chão vermelho
vem poesia luzindo espelhos
solares em primaveras azuis.
Na justiça livre da cruel tirania,
sua poesia será sempre luzes,
sem barcas desertas e cruzes.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 680
Mil poemas a Miguel Hernández
Raio que não cessa só conduz.
O soldado na poesia ainda faz
do bramido do povo, a ousadia
para sonhar um tempo de paz.
Jorge Azañedo Muñoz, Chile
CABALGADOR DE TIEMPOS
Miguel, conjunto de manos tiernas
Corazón guerrero al filo de la espada
Que reluce traspasando el túnel infinito del tiempo,
Miguel, doblemente Miguel y Hernández a la vez,
Te remontaste entre las montañas
entre el fragor de la batalla y el sabor de la pólvora
fue madriguera de tu pluma inspiración de vida,
constructor de otras vidas.
Miguel, levántate entre los siglos y mira el sol de cada día,
Miguel Hernández te esperamos,
danos a beber el agua de tus latidos
puedes demorarte un poco en regresar,
pero allí estaremos al filo de la aurora
debes ser cuidadoso, si hay nieve, si hay frio
si hay lluvia , serán tus compañeros,
ellos te reconocerán a través del tiempo
el viento de la tarde nos ha dicho de tu venida,
esfuérzate de dejar señales con tus versos
para que podamos seguirte, las generaciones que cabalgaran
en cada primavera. Sabemos que regresaras, montado sobre un rio.
Manuel no te rindas jamás, mira al cielo
Las miles de manos cargadas de voces
Encaminan sus pasos para rendirte homenaje, al gran guerrero.
Miguel, hermano, aquí estaremos
cargados de tiempo, siempre te estaremos esperando.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 681
Mil poemas a Miguel Hernández
Jorge Judah Cameron, España
AQUELLO QUE AMAMOS
Al estallar la Guerra Civil, Miguel Hernández se alista en el bando republicano.
Hernández figura en el 5º Regimiento y pasa a otras unidades en los frentes de la
batalla de Teruel, Andalucía y Extremadura. En plena guerra, logra escapar
brevemente a Orihuela para casarse el 9 de marzo de 1.937 con Josefina Manresa. A
los pocos días tiene que marchar al frente de Jaén. En el verano de 1937 asistió al II
Congreso Internacional de Escritores Antifascistas celebrado en Madrid y Valencia,
y más tarde viajó a la Unión Soviética en representación del gobierno de la
República, de donde regresó en octubre para escribir el drama Pastor de la muerte y
numerosos poemas recogidos más tarde en su obra El hombre acecha. (Wikipedia)
Este poema dedicado al gran poeta de Orihuela, habla de un gran amor entre un
hombre y una mujer… El mismo gran amor que seguramente latió en el corazón de
Miguel por su mujer y futura esposa, al lograr irse en forma temporal para unirse en
matrimonio con Josefina.
Sí, corre…
No detengas tu venturoso renacer,
aquel camino que emprendiste
hace ya tanto,
que ni el mismo tiempo pudo recordar.
Quedó tu fragancia envuelta entre las piedras,
entre los pastos húmedos de la gran colina,
aquella que te vio florecer un día
cual bella criatura de los siglos,
como el más venerado ramo de flores,
rocío de colores y aromas antiguos,
y de ángeles danzando
sobre los verdes líquenes
de la eternidad.
No desconozcas a tu inca,
aquel que un día sin querer partió,
y bajó lento la cumbre con sus guerreros a cuesta,
para librar su última batalla.
Aquel que viste ir,
con el sol reflejado en su espalda
anunciando su partida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 682
Mil poemas a Miguel Hernández
No te olvides de él,
pues habrá más vidas por vivir,
y recordarás la ciudad entre las nubes,
y tus trajes de piedras preciosas
relucientes como soles
en tus ojos reflejados,
y tu grácil caminar,
silente, etéreo,
feliz ave del paraíso
entre las sombras del tiempo,
para encontrarte otra vez con tu lejano amor,
aquel,
tu hombre,
que nunca más volvió.
Y te vio desde lo alto,
amándote tristemente
sin poder abrazarte.
Acarició tu cuerpo
2
en las noches sin olvido,
besó tus esquinas y montañas,
bebiendo las sales de tus ríos.
Y te cubrió con su manto
en los inviernos de hielo.
Custodió tu vida
colmada de suspiros,
y el llanto inagotable
de las horas que no cesan,
de ausencias,
sin olvido.
Y secó tus mejillas con la brisa de sus alas,
hasta ese instante cuando el cielo es su quebranto,
se partió en dos,
enamorado.
Un trueno estremeció el valle,
y fue un grito de dolor interminable
retumbando entre collados,
y el rey inca de angustia sintió que se moría...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 683
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Pero si ya muerto estaba! ¿Cómo podía?
Desgarrado de dolor en piedras de sangre,
en miles derramó sobre la tierra
sus lágrimas de espanto,
cuando en tu vejez quebrantada por la espera
te dormiste entre los pliegues de la luna,
y partiste hacia los claros remansos de Yahvéh.
¿Quién sabe si lo hallaste?
Erguido, fuerte, esperando tu venida.
Mas, después de varias vidas,
y otra vez mujer en esta vida,
si hoy lo reconoces,
entre la gente, entre los árboles,
entre las auras y las voces,
búscalo, ámalo,
no lo dejes ir.
Esta vez princesa inca,
3
no lo dejes ir.
Nelson Urra Silva, Chile, Suecia
Miguel Hernández.
Medito recorriendo los campos de Orihuela.
Imaginando, que custodias el rebaño en solitario.
Guiando en campo fecundo, tus primeros versos.
Universales y poéticos, ignorando tu amplitud cuando
Emergían las voces del descontento. Y solicitabas
Libertad, para huir de tu primer yugo. El paternal.
Hijo campesino, labrador de ensueños, pastor de cabras
Emprendiste un tumultuoso camino, sumando adeptos.
Recibiendo de tus amigos las primeras lecciones y libros.
Neruda, el espigado chileno,decía “ tu eres fuego azul “
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 684
Mil poemas a Miguel Hernández
Anunciando desde entonces, tu profundidad espiritual
Naciste para vivir en la eternidad, invitando a tu pueblo a
Despertar de la desigualdad reinante en tu España en general y
Zonas aledañas a Andalucia en particular, sin olvidar a Madrid.
Querido Amigo Buen Miguel...
Quién se atravería a mencionar tu nombre sin rendir honores ?
Universal poeta pastor, español y viajero místico. Viajas al
Encuentro, más allá del Atlántico, tu voz resuena en cada
Rincón de la América morena, donde la miseria está presente.
Invocan tus pensamientos en los cantos solidarios para
Dar paso a los nuevos cimientos, buscando salida al
Oscuro tunel de la desigualdad que aún sigue reinando.
Amplio de mirada, emprediste el vuelo y el silencio no falló.
Madrid te recibía a tus treinta y un años. Entre lamentos e
Infortunios lograste publicar tus primeros artículos de opinión.
Garabatos decían algunos, mientras otros te admiraban.
Ondulabas desde la capital, tus versos cantor del viento.
Bienvenida que no permitió sino medio vivir y medio publicar
Uniendo tus alas misericordiosas junto al necesitado.
Emprendiste el vuelo mágico de la mano de los grandes.
Neruda, Altolaguirre, Cernuda , Alberti y Aleixandre.
Mencionaron sugerencias para que abrieras tu mente.
Insinuaron cierto sarcasno que a la postre generó dividendos
Gallo Crisis, la revista de Ramón Sijé, permitió dar un salto y
Un compromiso más revolucionario, mostró tu poesía.
Entusiasta ahora llevarías en tus versos la denuncia,
Luego vendría, “ Ventos del pueblo “ Vigente por siempre.
Josefina Manresa...
Jaén dos de enero de mil novecientos dieciseis.
Orgullosa del compromiso con Miguel Hernández
Se dedicó a velar por el recuerdo y la difusión de su obra
En marzo de mil novecientos treinta y siete
Firmó el acta de matrimonio, en plena guerra civil.
Inspiró el primer libro de poemas “ El rayo que no cesa “
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 685
Mil poemas a Miguel Hernández
Nacieron de su vientre Manuel Ramón que vivió diez meses.
Además de Manuel Miguel, fallecido en el ochenta y cuatro.
Mantuvo celosamente los manuscritos de su enamorado.
Amada desde lejos por su viajero y revolucionario esposo
No dejó de guardarle aprecio sincero. Después de su partida.
Recuperó el valioso tesoro que aún está por leerse.
Esperamos todos ese gran día para saber más del poeta
Soñador, que cuidando cabras, visionó más allá de España, mostrando
Amor por quienes anhelan la libertad y huyen a la represión.
Ruega por nosotros...
Me pregunto. Cuántos pastores de Cabras ?
Transitan hoy en día en las calles de América.
Cuántos seres humildes elevan sus plegarias
A Miguel Hernández, en los campos del mundo.
Sabiendo que los mismos sinsabores
Que padeció el poeta de Orihuela
Se repiten en estas primeras décadas del siglo XXI
Solo que los pastores de hoy se visten de estudiantes
Son los habitantes de los pueblos originarios
Que se unen en un clamor internacional, solicitando
“ Justicia “ y respeto por los derechos fundamentales.
Hijos en el exilio...
Sanguinarios persiguiendo al poeta pastor
Violentando las humildes moradas
Pisotean la patria con olor a pueblo.
Le privaron de hospital, al negarle auxilio
Y jugaron con su ilusión en los claustros.
Húmedos, de tantas lágrimas derramadas
En la hora incierta, de una celda putrefacta.
Preñada de dolor...
España , lloró tu partida
Y en la América morena, Neruda
Levantó tu bandera, para izar tu nombre.
No hubo resignación en el espigado poeta austral
Hizo suyo el dolor ibérico y tendió su mano
A otros pastores, y los convirtió en panaderos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 686
Mil poemas a Miguel Hernández
Zapateros, hombres de campo que pronto
Sembrarían los hijos en el exilio,
Dividiendo de esta manera los sentimientos
Te recuerdo...
Dónde queda la memoria olvidada
Si de tí, solo guardo historias sociales...?
Aquellas que nos hablan de solidaridad
Que nos permiten percibir la importancia de la unidad
Y pasado, este transcurrir del tiempo, no olvidado...
Sigue tan vigente como ayer, tu legado, poeta del pueblo.
Solo que la avaricia de algunos, se mofa, de tus sueños
Destruyendo los cimientos de una patria por germinar
Olvidan su compromiso con el colectivo para
Llenar sus arcas con el erario público y jugar con
La necesidad de los más humildes... Suciedad.
Reviso y medito
escudriño los valles de tu Andalucía
Y tu nombre se multiplica en los campos fértiles,
Solo que en lugar de cabras, sumamos olivos, y muchos...
Pretendo ser centinela, frente al silencio entre ramas
Y solo puedo agradecer tu paso por esta vida...
Soñabas que un mundo más solidario era posible
Y la represión aturdió tu esperanza cuando apenas
Comenzabas a recorrer la península ibérica.
Quemando los libros
pretendieron silenciar tu pensamiento
Mas tu obra, había volado lejos, luego vendrían los amigos
Y darían vida a cada poema escrito en tu solitaria celda.
Serrat hizo suyo el legado y fue levantando su voz catalana.
Y desde la ciudad condal, entonaba tu obra e inmortalizaba
Cada párrafo de tus sentimientos solidarios... Serrat:
Viajero, embajador, voz errante - artista comprometido
Puso música en tus letras, y éstas dieron alas a los nuevos pastores
Solo que los rebaños estaban en las fábricas y en las poblaciones
Se unieron los estudiantes, y los campesinos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 687
Mil poemas a Miguel Hernández
bajó el minero con su piel tiznada y sus brillantes ojos...
Las amas de casa, tomaron sus escobas, para sumarse al canto.
El de la esperanza, aquel que nos agiganta ante la necesidad
De saber que lucharemos unidos, para siempre.
Se nos acabó la hora
y el sol apagó su luz para Miguel.
Un calabozo putrefacto, despidió a su alma luminosa.
Y nos quedó la herencia compartida de sus letras.
Lloraron las patris y tus amigos no pudieron asistir
Para cargar el féretro, dejando el sabor amargo,
De saber que te habías ido, centinela espiritual...
Vuelves cada día, en cada madrugada, en cada sol.
Y sigues vigente...
Esperamos dentro de poco leer más de tí...
Saber de tu herencia inédita que has dejado a tus seguidores
Entonces volverás a ser anto nuevo y oxígeno que da vida.
Y vendrán tus letras y tu poesía sembrará de auroras
Los nuevos amaneceres, esta vez,
para rendirte un homenaje póstumo
Más sentido, y más universal...
Ileana Mulet, Cuba
Pan y cebolla
Como mar entre dos mares
pan y cebolla
pólvora y amor
naranjo en flor
marabú entre dos sombras.
Duerme el tiempo en el ataúd
que inventaste
para despertar versos. Ríe
Miguel. El hambre duerme.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 688
Mil poemas a Miguel Hernández
Carmen Rosa Alemán Ruiz, España
POEMA A MIGUEL HERNÁNDEZ
Miguel, querido Miguel.
Al nacer tu se ilumino,
La entraña de la tierra que te
Vio crecer.
Germino en ti la palabra, la poesía,
Granada roja, pura en tu boca púrpura.
Roja tu sangre y tu letra.
Hambre, cárcel y muerte tu compañía.
Y subiste alto Miguel, muy alto, traspasaste fronteras
Y te hiciste infinito.
Hermoso poeta Universal de tu Orihuela natal.
Descansa en paz que tu palabra en el tiempo perdurara.
Con todo mi amor.
Amir Ibn Tawfik, Libano
A Miguel Hernandez
Te fuiste,
porque asi lo quisistes.
Muchos gritaron- ¡ es cobardía!
pero tu valentia fue alcanzar el limbo.
Donde solo los poetas,
saben de que el cielo, a todos alcanzara.
Pintaste,
como atrapar a la vejez.
Anunciaste,
lslas aladas, donde los duendes juegan con los versos y rimas.
Cantaste,
al río que con metáforas sublimes, diste a las letras, la entonación mágica.
Partiste,
seguro de ti mismo, porque este no era tu mundo.
El universo, te hizo astronauta de las letras,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 689
Mil poemas a Miguel Hernández
que hoy las galaxias recien entienden.
Corriste, en busca del calor del sol.
Mas, te atrapo la noche,
para quedarte para siempre en la memoria de los que aman ¡las letras!
Te saludo hermano,,
oro por ti, porque tu inspiración nos hacen mas humano.
Dúo, Alfred Asís, Chile-Nieves Merino, España
Nieves Merino
EL UNIVERSO ESTÁ ILUMINADO.
LA LUNA SE ENCUMBRA Y PASEA
COMO EMPERATRIZ
DIBUJÁNDOSE
EN TODO SU ESPLENDOR.
NO HAY OSCURIDAD.
SU LUZ ESTALLA
YA ERES SU ARQUITECTO,
"PERITO EN LUNAS".
OLIVOS SUEÑAN.
AZAHAR QUE AROMA
QUIZA , ORIHUELA
EL TIERRA ENTERA SE VUELCA EN TI.
Alfred Asís
MIENTRAS EL UNIVERSO TE RECIBE EN SUS BRAZOS
LOS POETAS TE AMAMOS
ALABAMOS
Y LUCHAMOS CON LA PALABRA
MIGUEL, TUS PALABRAS
FUERON PUESTAS EN NUESTRAS VIDAS
TUS OBRAS INVADIERON LOS SENTIDOS
Y JUNTOS EN ACTOS DE AMOR
SEMBRAMOS NUESTRAS LETRAS
PARA DAR VIDA A TU OBRA DE AMOR.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 690
Mil poemas a Miguel Hernández
Federico Landaeta, Venezuela
ACRÓSTICO A MIGUEL HERNÁNDEZ
M ágicas letras brotan, símbolo de Universo
I luminaste el mundo, pero tan poco tiempo.
G ustabas leer los grandes que volaron en verso
U n cabrero poeta, vida de contratiempo…
E mpezaste cantando, pero el mundo perverso
L egislando en tu contra termino tu concierto.
H ubo tiempos hermosos en esa corta vida
E nigmas de existencia rompieron el embrujo
R egresaste al Olimpo y en tu marcha sentida
N o olvidaste el poema que signo tu dibujo
A labanza continua… no experiencia perdida
N avegante sereno que no acepta al cartujo
D oblegarte no pudo libertad reprimida
E n los altos niveles que la conciencia indujo
Z umban todos tus versos… tu autoría es consentida…
Rigoberto Ipanaqué Gálvez, Perú
SUEÑOS EN EL INFINITO
Miguel… Miguel… Miguel Hernández
Los recuerdos de a pocos delinean tus abriles
La poesía, el amor, el valor, el sufrimiento…
La savia que agitaste se eleva, con olor de olivos, por el infinito
Soldado de los desheredados
Defendiste con ahínco tus ideales
El sueño de los pobres tanto tiempo postergado.
El ruido de las balas, los lacerantes gritos
La sangre de tu boca
Las agujas, de tu pecho, de tu espalda…
Cual Vallejo doloroso
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 691
Mil poemas a Miguel Hernández
Con el alma enriquecida
Pero con el estómago vacío
Luchaste por alivianar el dolor de los que nacieron sin voz
Peleaste sin cuartel hasta el ocaso
Pero las hienas concluyeron su misión
Así de terrible es el destino de los que sufren
Tarde o temprano fenecen sus sueños dorados.
UNA ESTRELLA EN EL FIRMAMENTO
¡Ha muerto Miguel Hernández!
Yace en silencio, inerte, con la cabeza bien alta
Ignorancia… Sólo brilla entre las estrellas
Es fuego que eterniza sus cenizas
Todo lo escudriña no cierra los ojos
Recorre el hades lo conoce
Tantas veces ha ido y ha vuelto
Sus labios cantan sacrosantos versos
Encandilan los fanales oscuros de la muerte
Los fusiles abren fuego pero no impactan
¿Puede morir un ser inmortal?
Su alma entre laureles baja entrelazada
Hay bullicio en los corrales
Vacas, caballos y niños…
El olivo impregna el aroma… La vida
Oteas a España querida
Escuchas el murmullo de sus huesos
Su imagen conquistadora enriquecida
Pero con la víscera sin nada
Todo… todo resplandeció…
Eres Soldado del mundo
Josefina hay una estrella en el firmamento.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 692
Mil poemas a Miguel Hernández
Olga Rojas, Canadá
I HAVE LOST YOU (Dedicated to
Miguel Hernandez)
My beloved poet Miguel Hernandez,
I have seen you during the day…
You, scanning the sun,
watching its mysteries,
greeting its warmth.
At nights, I see you hugging
the lifeless moon,
offering it verses,
to give it vitality.
And I have seen the mountains flowers
giving you its love in exchange of your caress.
I have seen your feverish hand
writing glamorous poems
dressed up with tulle, lilies and kisses.
From the beginning I have known you
when I read your poetry,
when I feel the sensitivity of a hurt poet like you,
when I walk through the path of oblivion.
Miguel Hernandez, I have irrevocably lost you,
the time you said good-bye to your first-born son,
when they imprisoned you, and sentenced you
and when the hunger made you succumb
before the presence of the death
and when I heard what your father said
when he received the news that you were gone:
“He deserves it!”
My beloved poet,
there will be no more poems
of yours that will delight my senses!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 693
Mil poemas a Miguel Hernández
Samuel Ronzón, México
LABIOS
¿Sin la luna entre dos palmeras, sin inflamados huesos,
sin brazos que se desploman en brazos con sabor a fruto
silvestre, qué sería de usted? ¿Qué sería de nosotros
sin espadas de ansiedad, sin los no recuerdos hablando
con el silencio? Ante el odio que se amortigua detrás
del cristal, su oficio es nuestro oficio.
Patricio Guzmán Cárdenas. Loja – Ecuador
DIME POETA…
¿Qué sentías
Cuando las miradas
De las constelaciones
Soñaron…
Con tus versos en paraísos prohibidos?
¿Qué palpabas
Cuando envejecías
En el tiempo
Revoloteado por las fauces
Del olvido?
¿Cuándo todo era inconcluso
Ante los ojos ciegos
De las noches
Que se olvidaron
De suspirar?
Dime…
¿qué creías
Cuando tus letras
En las horas ahuecadas
Se agrietaban
En sus caídas?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 694
Mil poemas a Miguel Hernández
Dime… poeta
¿Qué sentiste?
Cuando las balas
Destrozaron tus recuerdos de niño
Y fueron opacando
Tus inviernos de bolsillo
Cuando la sangre
Y el viento
Te sedujo
Y la boca del silencio
Te arropó.
Cuando tu amor
Se transformó
Es una acuarela
De los signos celestiales
En una astrología desbaratada.
¿Qué escribiste Miguel
Cuando los suicidios
De las noches
Mataron las frases
Dejándote huérfano
En el tiempo?
¿Qué sentiste
¿Cuándo en tu país
Los árboles
Emigraron sus vestidos
De arcos iris
Para mudarse con las tristezas
De aquellas tardes de franela?
¿Cuándo las lágrimas
Tus lágrimas
Se enterraron
En las arenas
De los versos
Transformándose en el funeral
Y en el adiós.
Dime… poeta donde busco esto en tus versos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 695
Mil poemas a Miguel Hernández
Teresa Improta Monnier, Brasil
MIGUEL HERNANDEZ
Um poeta espanhol de estimado valor
Mas em sua dura infância, foi um pobre lavrador
A vida não lhe sorria, e de muito lhe privava
E com grande inteligência, tornou-se autodidata
O tempo então foi passando,
em meio a pobreza e a dor
Mas Josefina entregou-lhe,
seus braços forrados de amor
Rapidamente a moça, entrou em seu coração
Trazendo-lhe muita alegria, aflorando-lhe a inspiração
Com ela o poeta casou-se, e seu filhinho nasceu
Mas não teve sorte grande, e o pequeno morreu
Foi tão grande a tristeza que a vida lhe oferecia
Em desabafo constante, narrava seu choro em poesia
O tempo seguiu o seu curso, e outro impasse surgiu
Hernandez viu-se em confronto, em meio a guerra civil
Começa então nova luta, do poeta cancioneiro
A força dos poderosos, o fizeram prisioneiro
Sofria com desespero, mas pouco podia fazer
Sabia que sua família, lutava pra sobreviver
Dentro da triste prisão, belas obras ele escreveu
E entre as paredes do cárcere, o grande poeta morreu.
Cecilia Nahuelquin Nahuelquin, Chile
De América del sur, un abrazo a Miguel Hernández
Poeta Miguel
Tus manos aun están abiertas
Los mensajes de tu lluvia y de tu tierra
Hoy se abrazan a América
Enredándose entre nubes y letras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 696
Mil poemas a Miguel Hernández
Como David el pastor
Niño juguetón, en la simpleza del favor
Junto a la hierba, pan y dolor
Enfrentaste a un Goliat
Quien tu hálito encerró.
Los versos te abrazaron
Como enredaderas que se lían
A los muros de tú Orihuela
Allí se fundaron tus letras coloridas
Para hacer frente a las armas de la guerra.
Me siento como tú, autodidacta de la tierra
Rebelde al sistema y sus dolencias
Viajero literario, amigo de campesinos
De la simpleza de la luna y las estrellas
Soñador de paz… de tu bella Orihuela.
Basilio Eduardo Romero Quinteros, Argentina
La Imagen de un Poeta, descubriéndolo, describiéndolo.
Caminaba por la calle luego del atardecer, y entre esas sombras
que se alargan me puse a pensar cómo era, que aspecto tenía,
cuales eran sus defectos y por supuesto,
poder encontrar sus virtudes en general.
Era todo un tema.
Lograr reconstruir con pinceladas de comentarios de otras personas,
la imagen de un poeta.
Cómo lograr que me pudieran decir con palabras,
sus modos de vivir y sentir, tantos años después de su deceso.
Hacer que a través de sus conocidos, pudieran dejarme sus impresiones de él,
en una forma particular de mostrarme una figura,
toda una personalidad.
Para ello, tuve que revisar la correspondencia
en la que habían logrado describirlo y de esa forma poder descubrirlo.
Luego sentir que había cobrado una forma tangible y personal
para luego quedarme con una imagen nítida y poderosa de su tránsito
por los lugares que frecuentaba en vida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 697
Mil poemas a Miguel Hernández
Pasaré a transcribir lo que decían de él,
algunas personas que lo conocieron, para seguir incorporando elementos a esa figura
que tenia en mi mente y que era una cáscara, solamente.
“Yo lo conocí cuando llegaba de alpargatas
y pantalón campesino de pana desde sus tierras,
en donde había sido pastor de cabras.”
“Era tan campesino que llevaba un aura de tierra en torno a él.
“Era ese escritor salido de la naturaleza como una piedra intacta,
con virginidad selvática y arrolladora fuerza vital.”
“Sus ojos quemantes, ardiendo dentro de esa superficie quemada
y endurecida al viento, eran dos rayos de fuerza y de ternura.”
“En mis años de poeta, y de poeta errante,
puedo afirmar que la vida no me ha dado contemplar
un fenómeno igual de vocación y de eléctrica sabiduría verbal.”
Estas palabras las encontré y comenzaron a dibujar parte de ese contenido
que debía construir en mi mente.
Que son las palabras dichas y testimoniadas por Pablo Neruda.
Luego un amigo cuenta otra faceta de él,
del individuo que quiero imaginar, visualizar, entender.
Y me lo cuenta así.
“Cuando recibe el telegrama salta materialmente de alegría,
y agitando el azul y leve papelito en su mano ruda,
como hecha de corteza de olivo,
con un fulgor de júbilo en sus ojos impresionantes me dice:
”¡Mira Carlos, me han dado el primer premio en Elche! ¡Viva la poesía, y yo, y tú!”
Este es el testimonio de Carlos Fenoll.
Y luego me hacen otra descripción.
“El cabrero rapado, de ojos grandes y risa franca.”
“¡Cuántas veces le veía ascender los peldaños que conducen a la
“habitación de los libros”!
“Escuchaba las preguntas -¡qué preguntón!, me dijey las respuestas de mi hermano.”
“También sus discusiones, hasta encolerizarse, y sus reconciliaciones repentinas.”
Estas fueron las palabras de María Dolores Sijé.
Con estas descripciones pude comenzar a delinear esa figura que era amorfa.
Así pude empezar a conocer quién era, a ese gran poeta español,
fallecido hace añares.
Estoy hablando de Miguel Hernández, con mucha admiración.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 698
Mil poemas a Miguel Hernández
Luciene Passos Pires, Brasil
SONATA À LIBERDADE
Onde estás, Pássaro Livre, de Orihuela,
De canto doce saído do coração,
Que espalhaste cor e perfume ao chão
Nos caminhos de Espanha, qual aquarela?
Pássaro de olhos queimantes, ardente...
Com força e ternura cantaste o amor.
Teu voo, resplendor selvagem, é clamor...
De Liberdade! Saber eloquente!
Onde te procuro, Miguel Hernandez?
Nos “ruisenõres”, que nos céus encantam...
Nos campos verdes onde as cabras pastam...
No verso triste, na poesia... translucidez...
“Desalentadas amapolas”, sob estrelas,
Choram orvalho de sangue, torrente...
Outras bailam ao vento, dolente...
Injustiças a ti, Pássaro Livre, de Orihuela!
Lua azul de agosto, linda e enamorada,
Estanca a saudade jogada ao vento,
Desolação da Espanha, lamento...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 699
Mil poemas a Miguel Hernández
Inebria com perfume a vida amargurada!
Lutaste pela Liberdade, Miguel!
Amaste o teu povo, tua terra amaste...
Josefina Manreso, as letras e a arte...
Ideais atrevidos, desfecho cruel!
Teus poemas soaram alto e forte.
É o grito abafado de um Pássaro voante
Calado na sombra negra, distante,
Na humilhante prisão em Alicante.
Mas não te foste, Pássaro de Orihuela!...
És imortal, MIGUEL HERNANDEZ GILABERT!
És canto de ninar... bálsamo que verte
Da Liberdade branca e tão bela!
Tino J. Prieto Aguilar, España
No habrá silencio amargo
Miguel
seis letritas distintas
como esperando construir una séptima vereda
Hernández
nueve sonidos
como tantas familias que arrastran la cuerda del tiempo
No habrá balas
Ni torturas
Ni amargos silencios
Ni garrotes
Ni desprecios
Ni miradas hacia otros lados
Ni labios callados
Ni sudores rancios
Ni manos caídas
Ni esperanzas con senderos al vacío
No, no y no
me niego ante la deshumanizante quietud
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 700
Mil poemas a Miguel Hernández
Sí, sí y sí
tu palabra nos pone en pie
Y habrá sonidos y calma
Y luz en la última estrella
Y sentido en las miradas
Y gota de amor que cae desde el árbol
Y una niña y un pueblo
Y colores de flores con tu nombre
Y viejitos de manos enlazadas
Y...
Y allá, donde tú corazón y tu mente habitan
nos seguirán lloviendo
trocitos de orihuelas y universales historias
que nos hacen poéticamente humanos.
Marta Prono, Argentina
Miguel Hernández
"Una interior cadena de suspiros al cuello llevo duramente atada"
Miguel Hernández
El pastor que conduce
a los lares del sueño
blancas cabras
nubes de cielo
comiendo pienso
verde pasto del ensueño
abrevando el verde
de la esperanza.
No pudieron encarcelar
su espíritu libertario
El amor estuvo siempre a su lado
amado por el pueblo
solidario en la inclemencia
Escribía y escribía
apacentando soledades
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 701
Mil poemas a Miguel Hernández
El amor lo amo
en todo lo que amaba
Las voces de los poetas se alzaron
Federico García Lorca
Rafael Alberti, Pablo Neruda
Tus carceleros te ajusticiaron
implacables
Nunca pudieron, ni podrán silenciarte
No contaron con el rebaño de palabras
pastando pienso libres
remontando nubes de cielo
Las cabras le dieron su merecido a esos cabrones
Mara Pérez Fernández, España
SOY MUCHO
A Miguel Hernandez
Soy mucho, soy nada,
soy ayer, soy mañana
el hoy solo deviene
cuando tu me amas.
Añado silencias
en mis madrugadas
seré tú, seré yo
en éstos momentos
en el silencio
sin tu calor
no soy nada.
Soy tiempo, soy danza
soy luz y añoranza
soy volcán, soy lava
bajando despacio
por tus valles de malvas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 702
Mil poemas a Miguel Hernández
EVAPORÁNDOSE
A Miguel Hernandez
Evaporándose lívido, tus ganancias fortuitas
palabras lubrican el devenir de modos turbios,
tu cuidas de buscar siempre el momentos adecuados
seducción a través de ventanas del olvido,
reventando sentimientos, naufragando sueños
austera en regalos salvando intrépidas dolientes,
galanteas con donaire tu devenir funesto druida
amalgamado funeral, naciente deseo mal nacido,
susurrante, cerveza en vano, tertulia trasnochada
melodiosa voz, conquistador experto en trance,
rebuscas incienso universal, letras que embelleces
hermosas palabras, regalando al mundo en tu principio,
dictas osadías, avanzas, conquista tras conquista
inocentes, poetas que tu abrigas, palabras, caricias,
no hay moralinas, ego del reino, bramas la verdad
dioses de los griegos, tu siempre inmortalizas,
de nada sirven los verbos, ni tu nada ni tu todo...
daña brutalmente el alma, sin pudor y sin decoro,
devenir alegre, de salir indemne de cualquier modo,
triste destino el del rey, que sin reino y sin corona
pregonando mentiras, aunque ya a nadie le importa,
a los ciegos, ignorantes de porfía, sin verlo
confían, pagan tu café, aunque quedes sin comer,
orgullo...tu osadía, haces que tienes, por tener,
más solitaria tu noche, más angustioso tu día.
Más allá de los planos existentes alucinas...expiras
REENCUENTRO
A Miguel Hernández
La puerta cruje, mi corazón se acelera,
entras tu sonriente, expectante,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 703
Mil poemas a Miguel Hernández
corazones inquietos ardiendo en deseo.
Mil besos por dar
comienza la danza de regalarnos lo que nos ofrecemos.
Tu cuello, mi nuca, me abrazas, te envuelvo,
segundo a segundo, sentidos...muy lentos,
memoria eterna de momentos tiernos.
Nos miramos a los ojos, si...nos vemos,
reconocemos emociones de muy dentro,
tu piel, mi olor, tu sabor,
mi suavidad para ti tan bien guardada en mis ancestros.
Me aseguro de amarte de nuevo
tu me amas, te me entregas por entero,
me recoges en caricias que yo invento,
somos uno, tu amor, mi deseo...
se saludan sin recato
para darse permiso de amarse de nuevo.
Todo el tiempo, despacito, lento...lento...
somos tu y yo amapolas pintadas de deseo,
nunca antes ni después, ahora
descargamos la pasión encerrada tanto tiempo.
Pasan las horas y juntos volamos de nuevo,
abrazados, desnudos almas y cuerpos,
descanso del soñador
que descubre hecho realidad su sueño
Y no dejas de mirarme, ni de besarnos luego,
y te bebes lentamente mis senos,
hay segundos que son años, abrazados en silencio.
Las palabras no hacen falta cuando hablan nuestros gestos,
cómplices del deseo: reencontrarnos de nuevo,
recreados yo en tu luz, tu en mi anhelo.
Susurramos el placer, somos amantes secretos,
es la hora de marchar, nos abrazamos de nuevo,
todo un siglo en ese abrazo, otro siglo en otro beso.
Y te alejas, me miras de soslayo,
regresas...me besas de nuevo,
tu te giras al partir, cómplices miradas de ensueño,
sonriente, vuelves a mirar de nuevo
para rescatar al aire nuestro penúltimo beso.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 704
Mil poemas a Miguel Hernández
¿QUE FUE DE TI?
Que está siendo de tus maravillas Miguel
y que de tus quebrantos, de tus miserias,
desgarradas cordilleras, montes, setos
esas voces que gimen entre tinieblas,
mientras, gentes estafadoras te golpean.
Que pasa con tus obras tan hermosas
papel y pluma que cinceló tu piel dorada
y tu sutil suspiro en noches oscuras
engendrando tu amor en la alborada.
Y en esta soledad te despojas...
Tu sabiduría, tu amor sereno,
hoy gritas tu orfandad de mil maneras
que no maten tus manantiales de luz,
tus elegías, tu genuina pureza,
cuando abrazas con lealtad todas las razas.
Basta ya de ser recibo de mil augurios
adentra tu inspiración a un ser más puro,
no dejes que se malgaste tu bella esencia Miguel
que nunca más pregunten
¿Que fue de ti?.
LA LUNA
Miguel a su esposa
Homenaje al Poeta
Miguel Hernandez
La luna me abrió sus brazos
cerré mis ojos, pensándote
más no éramos ni tu ni yo...
Mi corazón cansado de buscar
se arrebujó en tu recuerdo
vagamente sentí el hiriente
frenesí de locos encuentros
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 705
Mil poemas a Miguel Hernández
Hay...mi callado amor audaz
si tu supieras mi sentir...
bailarías mis susurros cimbreando tu cintura
sin despegar tus sienes de mi calor ingenuo
Así...
lentamente sin traumas que enloquecen
la luna abrirá sus brazos
bailando a nuestro compás
en su cuarto menguante
mientras yo beso su faz reflejado en tus senos
las sedas de irónicas sonrisas
tatuaron el ópalo naciente del Ser.
Dile a la luna que no nos abandone
en ésta noche sin brisa ni mar
dile que sienta mis desafíos y extravíos
dile que ambos nos encontramos en la arena de su risa
mis brazos son como águilas que adoran tu cintura
Sigue-me...
deja que te lleve por mis huellas andariegas
seguiré siendo el columpio añorado de tus risas
deja que culmine el deseo de sentirnos uno.
Y la luna abrirá de nuevo sus brazos
y nuestros deseos serán cumplidos
cerraré mis ojos acariciando tu aroma
mi nube me espera mientras la luna se escapa
cuando el sol desea besarla
Pregonaré al mundo tus besos en mi piel
no me lo impidas
seremos por una noche
amantes a solas, tu, yo y nuestra luna.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 706
Mil poemas a Miguel Hernández
Marga Mangione, Argentina
Miguel Hernández: ¡Poeta!
Miguel Hernández: ¡Poeta!
Tan joven perdió la vida...
Por ser un brillante asceta,
la humanidad no lo olvida.
La nana de la cebolla,
escritas a tu mujer,
en la oscuridad descolla
y hace el alma estremecer.
Miguel Hernández: ¡Poeta!
Cantaste a tu patria amada,
tu pluma firme e inquieta
fue brutalmente cegada.
Cantaste a los hospitales,
repletos por tanta guerra,
compadeciendo los males
de los hombres de tu tierra.
Miguel Hernández: ¡Poeta!
Envuelto en sucio ropaje
tu alma de amor repleta
se marchó sin equipaje.
Sin ver a tu hijo te fuiste
Sin besar más a tu esposa.
Solo la vida perdiste,
y hoy en el cielo reposa.
Miguel Hernández: ¡Poeta!
¡Nos dejaste un gran legado!
Pues tu poesía completa,
contigo no se ha marchado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 707
Mil poemas a Miguel Hernández
Cristina Validakis, Argentina
POEMA PARA “MIL POEMAS PARA MIGUEL HERNÁNDEZ”
Arcángel de Luz
Si el brillo de tu pluma, me trajera
claridad en las ideas,
musas inspiradoras
abriendo puertas de misteriosas
luminarias nuevas...
Si el raudo vuelo de tus versos
magistralmente me diera...
valor para buscar la gloria
y pensamientos puros abriendo las ventanas
a rojizas primaveras...
Si la plena fortaleza de tu alma
me brindara espadas triunfadoras
que luchen desde el grito o el silencio
por justicias vanas, tan sólo
con el poder de la palabra...
Si todo eso fuera posible
y renacieran de lo oscuro
metáforas e imágenes...
y resurgieras, de tu propia muerte
rodeado de coronas de azahares...
sería yo poeta, tal vez
aunque el intento de emular
tus versos sea una torpe utopía
inalcanzable…
como lo fue cerrar tus ojos,
ante la muerte, la tortura o el exilio.
Tal vez,
si un arcángel de luz me dé tu brillo
sería yo un poeta para al menos, inundarme
de la inspiración inalcanzable…
¡Oh, musa, que te fuiste,
detrás del último poema…
del genio sublime,
de Miguel Hernández!!!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 708
Mil poemas a Miguel Hernández
Iris del Valle Ponce P. Venezuela
A MIGUEL HERNÁNDEZ
Pregonaba que era inculto
por haber nacido pobre
era pastor de rebaños
pero lleno de ilusión,
leyendo hermosos poemas
de ilustres grandes poetas
pero queriendo emularlos
con todo su corazón.
Tenía al Mediterráneo
surcando el azul del cielo
hermosas verdes praderas
de cálida ensoñación,
que fue forjando la idea
de una musa que anhelaba
darse a conocer al mundo
como poeta y cantor.
Leía como él decía
a plena naturaleza,
en la soledad más queda
cuando amainaba el calor,
en su vena ardía la llama
su sangre era viva hoguera
sumergiéndose en el goce
que clamaba su pasión.
Su pasión fueron las letras
que le hicieron que marchara
a probarse en otras tierras
con gallardía y honor
dejó estampada su prosa
se conocieron sus letras
se reconoce al Poeta
en su máxima expresión.
Sus poemas se han leído
A lo largo del planeta
en todos los continentes
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 709
Mil poemas a Miguel Hernández
donde se hable el español,
y ha quedado enarbolada
en sus letras la bandera
de su rancia hermosa tierra
de la España en que vivió.
Gloria Rios Ayzú, México
El mimo y el poeta
Como aquel mimo que no habla
pretenden mi voz callar,
cual tronco de árbol truncar,
quieren mutilar palabra sembrada en bríos,
que labra la saeta de esperanza
del Cupido que la lanza…
y en amor, el germen abra.
He luchado con la espada
de los versos y la prosa,
¡Con el canto de la rosa, le he canturreado
a la muerte y a la vida!
Que con suerte,
la fe se enciende en la llama del fuego
antorcha que clama la paz que creo te concierte.
El mimo no callará
el latir de la verdad,
expresión de libertad sin reprimir un ¡Te quiero!
Verso al corazón sincero,
que en la poesía es un arte
sin que el hiel villano cuarte almas,
con vil arma de hierro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 710
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio Sánchez-Gil, España
“Desde que el alba quiso ser alba”
“Riéndose, burlándose con claridad del día”
Por esa razón hubo de producirse la “Elegía”
La que la “Canción última” calma
La “Sepultura de la imaginación”
La que produce la “Eterna sombra”
La “Muerte nupcial” que no se nombra
“Umbrío por la pena” su condición
Pero “Yo no quiero más luz
que tu cuerpo ante el mío”
“El pez más viejo del río”
Así soy para ti tu cruz.
“Te me mueres de casta y de sencilla”
“Una querencia tengo por tu acento”
Con “El silbo del dale” me lamento
“Por tu pie, la blancura” de arcilla.
“A mi hijo” quiero dedicar “Un cantar”
El “Hijo de la luz y la sombra”
Con “Nanas de cebolla” alimentar
Y leer esa “Carta” que me asombra.
En “El último rincón” me metí
Por huir de las “Tristes guerras”
“El tren de los heridos” yo vi
Aunque fui “El herido” de las tierras
Al “Sonreír con la alegre tristeza del olivo”
“Todo era azul delante de aquellos ojos”
“Silencio de metal triste y sonoro” efectivo
“El amor ascendía entre nosotros” sin enojos.
Aunque no fui “El ahogado del Tajo”
Escribí la “Oda entre arena y piedra”
Mi vida fue cruda y sufrí lo más bajo
Y de mi cuerpo maltratado nació la yedra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 711
Mil poemas a Miguel Hernández
Heydiz Mena Córdoba, Colombia
¿QUIÉN DIJO ADIÓS?
CUANDO LAS PALMERAS APENAS BAILABAN
ENTRE EL SONIDO REPICASTE
QUE TALVEZ DIFÍCIL DE CANTAR
QUIEN DICE CUANDO?
QUIEN DICE YA?
CUANDO LLORAN LA MELODÍAS,
CUANDO A TU PUERTA NO HAY PASOS
DE HUELLAS QUE SOLO MI MENTE DIBUJARÁ
SIN COLORES NI TRAZADOS,
SOLO LO POCO Y LO MUCHO
DE LO QUE UNA VEZ LINEASTE
HOY EN ESTA LUNA NO SOY MAS QUE
UNA CAMINANTE, DE LA MANO CON TUS
RECUERDOS, DE UNA LLEGADA
UNA PARTIDA Y UN ADIÓS ENTRE EL SILENCIO
tu, HOMBRE, AMIGO, POETA, Y TODO AQUELLO
QUE FLORECIÓ EN TU CAMINO,
BASTÓ PARA QUE NUNCA TU LUZ
SE APAGUE, PORQUE NADIE DIJO ADIÓS
Gloria Dávila Espinoza, Perú
El rostro de la muerte
Por el largo trecho
es conocida la muerte
entre amapolas se muestra
pasa a ser la voz de ti y de mí
torcaza circuncisa
plumaje en papeles
poema en cuatro albos.
Ahí viene
y va,
inerte,
es su húmedo bosque;
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 712
Mil poemas a Miguel Hernández
de sus labios
nace la tertulia de las noches,
no hay pastor de rostros
en su calle de espuma
ni sonetos en serena mirada.
Empuña su clamor
se lanza en ojos arrullados
y conquista su fuego aborrascado,
canta en cerezos
con su dentadura hambrienta
y el cerco es aliento de artesano
en vital aliento.
Ana María Galván Rocha, México
INMORTAL
Caíste con la espada de luz
en la oscuridad de la noche,
más tu poesía fue contraluz
dorada de infinito derroche.
Caíste dormido, dura sombra
te realzó poeta del tormento,
más añejo dolor te nombra,
como lágrimas con lamento.
Caíste fiel, eres gloria ausente,
lloraremos tu figura mortal,
más sutil es momento presente
¡Serás Miguel, brillo inmortal!
POETA DEL MAR AZUL
Prisionero no fuiste antes del odio,
fue cuando, entonces, llego el amor,
besabas las sombras de dolor agudo,
y perdonaste la cárcel de sus brazos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 713
Mil poemas a Miguel Hernández
Susurraste versos de muerte nupcial,
más no te rendiste, consumaste vida
a través del amor, tú grata simiente
entrego savia más allá de la muerte.
No has muerto, poeta del mar azul,
no caíste rendido a su inmensidad,
ni suplicaste cuando Dios se acercó,
ángel ilustre fuiste hacia su esplendor.
Liliana Marisa González Rodríguez, Paraguay
A Miguel hombre_niño
Amor, de niño loco de la loca sonrisa, viene a prisa
Amor de verano, caliente como el sol ardiente
Nadie
Pero nadie está a salvo, nadie, si el niño loco lanza al azar su flecha,
por divertirse un poco.
Así ocurre que un niño travieso se divierte,
y un hombre, un hombre triste, queda herido de muerte.
Ambos llevan el veneno secreto de una ilusión prohibida.
Su vida como su habitación esta pintada de diferentes tonos de olvido
Y parece que el amor se vistió del color del olvido
El niño ríe, su corazón llora
De a poco el hombre muere, y el niño
El niño llora como hombre
El hombre va muriendo de a poco, el niño va creciendo solo
El niño es hombre
El hombre se enamora
Y ya no sabe si es niño, si es hombre
Solo sabe que él ahora tiene
La edad de la mujer
Que ama
Ya no importa si es niño, si es hombre
Ya no esta solo, ahora sonríe…
Está enamorado, es feliz.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 714
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio L. Ros Soler, España
Miguel Hernández
En memoria del poeta del pueblo,
en el I Centenario de su nacimiento.
tormentas, rayos y truenos
y futura mirada.
Sombras grises del tiempo
trajeron la guerra a España
Poeta combatiente del quinto Regimiento.
Los vientos del pueblo llevan tu poesía
a los frentes de batalla,
De la tierra,
tu raíz materia,
fuerza en haz de mil retamas;
desde tus ojos altivos
de luz de amapolas hortelanas,
¡ trenzaste una lucha errante,
sincera y nuestra como la grama !
Del agua,
tu mirada preclara,
tus pasos decididos alzando una atalaya
sobre los hostiles campos y las brañas,
reducidos de viñedos y cebadas;
¡ frente al ultraje a la enseña tricolor,
herida de muerte: asesinada !
Del viento,
tu lealtad indeleble y tu entereza,
pastoreando un huracán de poesía;
junto a la cepa erguida y al rudo olivo,
aventando valor y un bancal de maestría,
¡ contra aquella asonada de fascistas,
y su criminal estilo !
Del cielo, Miguel,
nunca te hizo falta nada,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 715
Mil poemas a Miguel Hernández
¡ pese a aquella cruz que segara tu grandeza
de solidaridad humana y hortelana !
Todo nos lo dio tu amor a la tierra,
¡ Al agua, al viento, al hombre: yunque del verso;
hoz de la palabra, pluma y fusil
en las trincheras republicanas !
En memoria de Miguel Hernández Gilabert
Desde el principio de mi tiempo adolescente, como incipiente lector de
poesía, siempre fue Miguel Hernández (en lo sucesivo, MH) uno de mis poetas
favoritos. La fuerza y garra de sus versos, su expresiva verdad, la estética con que
sabe darnos sus mensajes y la ética y pureza del hombre entregado en sus poemas
resultaron los más efectivos imanes para los ferrosos/apellidos ‘ferroviarios’ del
campo magnético que yo era para aquel; y si a esto le añadimos la formal exactitud
en la preceptiva de sus octavas reales…,
(lanar, de amor salicio, Galatea
ordeña en porcelana cuanto albea…),
en el primero de sus libros, Perito en Lunas, donde queda claro (pero que muy claro)
que el culterano y barroco Góngora es la fuente más cercana y limpia donde le gusta
beber al oriolano, no podemos dejar de admirar al joven que levanta la torre de su
personal cultura leyendo con avidez a los clásicos españoles del Siglo de Oro y
cuantos libros de poemas llegan a sus manos por entonces.
Si bien antes de que apareciera Perito en Lunas, ya gravitaba en él el bracero
rural que despertara su adolescencia a la labranza de silbos, como afirmación del
pueblo…,
(Alto soy de mirar a las palmeras,
rudo de convivir con las montañas...),
en su bucólico y primitivo estado; el hombre puro que desde allí clavara en la tierra
su raíces, y se nos hiciera casi de pronto Rayo que no cesa, aquel que…,
(por difundir su alma en los metales,
por dar el fuego al hierro sus orientes,
al dolor de los yunques inclementes
lo arrastran los herreros torrenciales…);
no en vano, sabiéndose barro:
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 716
Mil poemas a Miguel Hernández
(teme un asalto de ofendida espuma
y teme un amoroso cataclismo).
Aquél primero y hasta entonces su mayor cataclismo espiritual cuando, como el
rayo, ese rayo que ya no cesaría, se muere Ramón Sijé, “a quien tanto quería”, cuya
muerte originó en el poeta dos de las más notables elegías que se hayan escrito en
lengua castellana, aunque la que dedica a “la panadera de pan más trabajado y
fino”, no se incluyera en la primera edición del libro.
Muy a menudo biográfica en sus más puras esencias o premonitoria de
realismos esenciales, aquellos versos de la poesía de MH nos cuentan su yo pasado,
presente y futuro del modo más estético y humano que lo haría el más sensible
hombre rural que hubiera bañado la inteligencia de su espíritu en las resplandecientes
aguas de sus maestros más admirados. Frecuente visitador de bibliotecas y de paladar
ambicioso-gozoso en libros, el MH juvenil, sin certificados que le acreditaran
estudios oficiales, pero sí con lecturas y sensibilidad suficiente para una formación
poéticamente clásica, con aquellas raíces que plantara en la tierra alicantina y el
tronco almendro-olivo que las mismas alimentaron, desde el principio supo imponer
en su poesía el don de los elegidos por la bella forma literaria.
Desde ahí, la obra de MH surge hacia un cambio radical de estilo. Aquellos
modos clásicos y aquel barroco y verso culto, que podemos pensar heredara de
Góngora y Quevedo, aportan una metamorfosis liberal, sin duda porque ‘liberales’,
se diría, comenzaban a ser también en España aquellos tiempos convulsos… El
ambiente cultural de una II República ganada a las fuerzas involucionistas desde las
urnas influyó, sin duda, en el verso y en la forma expresiva del joven hombre y poeta
de Orihuela; pero también lo hicieron sus viajes, y los que le llevaran a Madrid y el
empleo que, por otras amistades, le consiguiera José Mª De Cossío y, sobre todo, sus
contactos con poetas bastante alejados de clasicismos y estrofas con preceptivas
excesivas; poetas que buscaban nuevas formas expresivas, como fueron Vicente
Aleixandre y Pablo Neruda. Es de aquel tiempo republicano su libro Otros poemas
(1935-1936), donde aparecen Oda entre arena y piedra, dedicada al primero (Tu
padre, el mar, te condenó a la tierra / dándote un asesino manotazo), y Oda entre
sangre y vino, destinada a Pablo Neruda, el que sabe que llega: de corazón cargado,
no de espadas, / con una comitiva de sonrisas.
La subsiguiente y nefasta Guerra Incivil pondría en el poeta lo demás; porque
ya he escrito antes que la obra de MH es sobre todo una fuente de sentimientos
biográficos, y los bestiales efectos de aquellos hitos impuestos aportarían en el
escritor firmes huellas a través del hombre: MH cuenta lo que ve, lo que vive y lo
que siente; lo que tiene cercano, porque nada de ello le es ajeno, la realidad que
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 717
Mil poemas a Miguel Hernández
observa y el latido que percibe del mundo es su latido y su realidad más viva y
admirablemente desafiante. El libro Viento del pueblo resulta como un mosaico
existencial que refleja la circunstancia de aquellos años sufrida en sus propias carnes,
y cuanto viera y sintiera en las ajenas para aquellos y para venideros acaeceres…,
(Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta);
no en vano sigue fiel al hombre que lleva dentro y fuera, honrando al niño que fuera,
ya resultara éste El niño yuntero o no:
…y como raíz se hunde
en la tierra lentamente,
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Enfrentamientos sociales y políticos iniciales, y lo que aún fuera peor: los
años de lucha incivil por la asonada militar francista, marcarían hondamente sus
versos y reforzarían su predisposición para defender el usurpado sistema republicano.
Así, en su libro El hombre acecha (1939), hallamos su romance Carta, donde la
ternura se crece sobre el hombre/humanismo que es MH, mientras escribe y lee sus
cartas a los compañeros soldados analfabetos que no saben hacerlo; pero también nos
encontramos con poemas tan desgarrados y duros como El tren de los heridos:
Detened ese tren agonizante,
que nunca acaba de cruzar la noche…;
el poema Las cárceles: esas que se arrastran por la humedad del mundo…, y El
herido, cuya segunda parte origina en Joan Manuel Serrat una de las más hermosas,
humanas y combativas canciones icono a que el cantautor haya sabido ponerle
música:
Para la libertad
sangro, vivo, pervivo…
MH, apenas de pie en la existencia, y más desde que comienza a tener uso de
razón, comprende que…,
Llegó con tres heridas:
la del amor,
la de la muerte,
la de la vida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 718
Mil poemas a Miguel Hernández
Él lo sabe, porque lo vive, y nos lo deja meridianamente claro en Cancionero
y romancero de ausencias. Este libro, el de poesía más sencilla en MH, más
despojada de ornamentos metafóricos, la de poemas breves y directos, escritos en
tiempos ya de persecuciones y cárceles (1939-1941), pero donde rebosa la fuerza de
una juventud herida:
Troncos de soledad,
barrancos de tristeza
donde rompo a llorar.
En él se adivina, se vive, se goza y se sufre sabiendo de la paternidad que en
Josefina Manresa le aguarda: “Menos tu vientre / todo es confuso”. Fruto que se
daría en aquellos mismos años con Últimos poemas. Cuando al dirigirse el poeta a su
mujer, “hijo de la luz y de la sombra”, más sombras que luces, le diría que “Ya no
quiero más luz que tu cuerpo ante el mío”…, estaba convencido de que “sólo quien
ama vuela”; por eso nacería del amor de sus cuerpos y la ternura y la lucha de su
astro poético, más y mejor, más selectamente/popular, en Nanas de la cebolla,
viendo (sería más cierto escribir ‘adivinando’), porque las rejas carcelarias se
imponían a la libertad, como…,
En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba…;
aquél que, a sus ocho meses, sonreía y enseñaba “cinco jazmines adolescentes”,
mientras que el padre poeta, en una casa convertida en cárcel en el madrileño Barrio
de Salamanca, leería estos versos a sus compañeros reclusos presagiando cómo, esos
cinco blancos jazmines…,
…frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
tengas un arma”.
Arma que, metafóricamente, tres versos más abajo, él situaba en el “centro”, sin
duda no como instrumento hiriente, sino de paz y amor, pero combatiente, para el
entendimiento que fijaba su idea.
Porque ese ‘centro’ simbólico era para él el propio corazón del ser humano,
como víscera donde el amor puede fundirse socialmente. ¿O era el centro político
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 719
Mil poemas a Miguel Hernández
que, a la sazón, no supo convivir en una España donde se habían matado ‘unos’ a
‘otros’ y seguirían matando ‘unos’ a todos?...
Parece como si no lo pudiéramos saber nunca, al menos según corren estos
tiempos, después de más de siete décadas del golpe fascista.
…Y llegaríamos a no saberlo jamás porque, sin duda, las metáforas poéticas
tienen tantas ‘interpretaciones’ como lectores de poesía. Incluso, en la mayoría de las
ocasiones, como venimos comprobando cuando tratamos de acercarnos a la obra de
Miguel Hernández para ponerla sobre la mesa de cualquiera de los debates
esclarecedores, ni siquiera existe la intención de interpretarlas. Y esto sí que puede
encerrar un malévolo entresijo, un fatídico desenlace:
Sólo por amor odiado,
sólo por amor.
Antonio Ruiz Pascual, España
A Miguel
Queda la hierba despacio en la cuesta
heredero de caminos
seguir es inevitable
algo de teoría, cierta práctica terca
voluntad y reflexiones
así es Miguel.
Ya no eres el pastor,
sino el chivo expiatorio
el que busca sustantivos
evidencia de tardes muertas
sucesos no detectados a tiempo
sin querer cumplir lo estipulado
no sabes de fronteras
y el frío es extraño,
poeta
no se hace la historia con lirica
con literatura
donde los mensajeros tristes
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 720
Mil poemas a Miguel Hernández
no pueden soñar con la lluvia
te dicen cortando el vuelo de tus versos
y es por eso que te matan
entre metáforas y golpes de realidad
entre Dioses de piedras
rejas donde la palidez
se lleva la frescura del rostro.
A Miguel Hernández
Te oigo en el rojo temblor Miguel,
en la longitud triste cubierta de heridas
y caracoles muertos
respirando la distancia,
la nostalgia de un rostro
envuelto en el llanto de un niño
resuenan tus palabras graves
sobre el horizonte de escombros
los niños yunteros
gritan en el puñado de sal
en el naufragio
donde el hambre sabe de abrazos rotos
de nanas con cebollas regadas de lágrimas
libertad entre rejas, tiempo oxidado
un ave ronda tu muerte
y es el grito de sangre
viaje prematuro,
luz que taconea flageando las sombras
los ataúdes, se adueñas
del maléfico viento y
tu último gesto, fue flor de muerte
húmeda entre fiebres y fatigas
como ofrenda quedaste en la vieja luna
sin los pájaros jugando en el brillo de los ojos
no pudieron cerrar tus maletas
ni hacerte el equipaje
las palabras aprietan las manos
y el eco tambaleo los cimientos
tu voz,
ordenando los fragmentos letra a letra
sobre las calcinadas horas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 721
Mil poemas a Miguel Hernández
encalladas en el abismo
tus suspiros volverán entre las cenizas
a despertar el rescoldo entre las hogueras
nadie pudo apresarte, ser tu dueño
que el alma no se encierra entre cadenas
ya eres libre para siempre
con el grito en el costado
en la memoria de los hombres
volverás a sentir el latido
los versos de la carne entre los membrillos
tú nombre en la tierra
despertará los trigos
y un ruiseñor que no calla
limpiará las sangre de todos los eclipses
limpiará la sangre ya cicatrizada
del beso de los judas y sus alimañas ciegas
donde todos los muertos de la historia
romperán a llorar ya sin fronteras
Fuiste la desnudez del mundo
arañando el cielo entre los olivos
el hilo del polvo en la piel rebosa
en la gastada parábola
donde las palabras nunca fueron sumisas
poeta del pueblo
con la mano cortada
por cada muerte
por la carne arrancada
conquistada la fuerza
en la cueva del mundo
están las serpientes encubando sus nidos
la mirada mortal de los halcones
que dirán esas manos vacías del frío metal
del polvo sepultado en la memoria
oirán tu voz en el condenado silencio
y despertaran como Lázaro
para arrojar la piedra sobre
los Padres Nuestros que no están en los cielos
están en la tierra guardando el suelo
entre negros alambres,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 722
Mil poemas a Miguel Hernández
sedientos perros y latigazos de rabia
la sangre desborda los ríos
las vísceras en el desfile de púas
el sudor en los zapatos
llenos de barro y simientes
se volverá a gritar
a desalambrar en todos los campos
la tierra para quien la trabaje
en la tregua sin lucha
y los niños yunteros
más humillados que bellos
vendrán con los vientos del pueblo
mojados por la lluvia
a sonreír con la alegre tristeza de los olivos
Llegó con tres heridas
la de la vida, la del amor y la de la muerte
Miguel Hernández
Tres heridas sobre el corazón de estaño
morfina sobre la camisa rota
yace un pájaro sobre el peine del bolsillo
contemplo el hambre en esa esquina
la fiebre velándome en la noche
cavándome la carne
golpean los dientes sobre la rabia afilada
salta la sangre sobre las piedras furiosas
que me encierran
grito al animal furioso
donde reina el silencio
la soledad desgarra clavándome en las rejas
soy Miguel
con el minuto asesinado en la inocencia
pasen señores, aquí me espera la muerte.
Miguel,
nos llenamos de tu eternidad
nos fundimos en tu distancia
en el alma hambrienta
donde te desvaneciste
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 723
Mil poemas a Miguel Hernández
el adiós se quedó entre tus ojos infinitos
en las palabras graves que dejaron sus frutos
triste es el origen y el principio
de tus rotas cadenas
triste es tu destino, de tenues hilos
sentimos ganas de llorar
aguas serenas, caudal salino
te esperábamos con las manos abiertas
pero te dejaron sin pulso
para latir en las arenas
hoy tu recuerdo se llenó de versos
que azotan los vientos
y ya no estamos solos
tú dolor nos hizo hombres
para hacer de las ruinas
los mejores cimientos.
Miguel Hernández
hoy quieren regresarte de la robada memoria
entre las edades del tiempo y el vientre del mundo
preñado de luz, donde todas las mañanas son vientos
no te arrancaron la cárcel de hierro negro
donde te cegaron la vida, entre oscuridad y silencio
arrinconado en la pared
con las manos llenas de palabras
lamentándote del polvo y
del sabor de cebolla en las encías de tu hijo
fuiste el soldado sin guerra
con balas de tinta entre los frustrados dedos
hay que distraer el horror
las lágrimas de tu mujer en un mar de saciedades
esta tumba llorosa que nos duele
entre los arboles viejos
que detienen la tormenta
A Miguel
Miguel
te desnuda la noche
en el silencio perdido
en el tiempo de roncos ladridos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 724
Mil poemas a Miguel Hernández
los ritos marcaron los muros
donde tu rostro
no quedó en la arena
en tu nombre indomable
que venció la muerte
los asesinos
sangre sobre sangre
cortan la vida en filo
en la invisible verdad
de fértiles fermentos
no callaron tu voz de pueblo
tu pluma combatiente entregada
al azul verdugo
para desangrar cada hora
cada muerte
donde mujeres vestidas de negro
se sumergieron entre los huesos
alzaron tu voz
la voz de todos
entre los versos
olor de acero y balas
entre las sílabas
donde seguir luchando
entre la lluvia
enredada en los fragmentos
germinando entre las piedras
como raíz
al clamor de las campanas
porque serás como siempre
la semilla
donde todos los poetas
brillaran sin cicatrices
anidando en el verbo que se levanta
resucitando las palabras
hechas carne
donde los niños despiertan
llenando la ausencia
de todos los espejos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 725
Mil poemas a Miguel Hernández
Sonia Martin, Chile
Los Herederos
En la memoria
de los que no están
vibra
la fuerza
y el poder…
-de lo que sucedióEn la memoria
de los que vivimos
y actuamos
en guerras
y dictaduras
está la fuerza
y el poder
-de lo que nos sucedióSomos los vencidos
en las guerras
de los ideales
la justicia
y los
Derechos Humanos…
Somos los exiliados
del mundo…
Ustedes…
los jóvenes
que vienen…
son
los herederos
de
nuestra
memoria…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 726
Mil poemas a Miguel Hernández
Silvia Rodríguez, España
Destino Hernández
Sueño con la piel de los muertos
con tu piel roja,
tu Sentencia de Tuberculosis
y tu voz libre de enfermedad
sueño con tus palabras de pana
tus versos sin amortajar
y los taninos de tu boca
inalterable al rayo inclemente
no te soborna estiércol humano
tú correspondes a la Tierra
hasta la última carta
sueño con tus ojos
abiertos hasta la muerte.
Rosana Vera Vidal, Chile
Miguel Hernández
Amarga poesía en tu pecho habita
como un desafío en sangre poeta,
enflaquecido por la pena inquieta
fondo topaste, en tu vida es, escrita.
Hoy yace bajo la triste mesita
un puro linaje canta trompeta,
amante único de tierra violeta
pastor, tu memoria queda bendita
Miguel Hernández, de tu pecho brota
un gemir constante por insistencia
que éste inmovilice a tus detractores.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 727
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus lágrimas rieguen hasta la ojota
de la cebolla procuren prudencia
con orgullo clamen los escritores.
Mara Pérez Fernández, España
PENUMBRA
Y desde la penumbra alcancé a escuchar tu lamento,
descubriendo entre sauces el placer de su movimiento,
ese quejido tuyo anunciaba un nuevo cambio entre ambos,
pude comprender, ya no éramos uno, quejido alado.
¡Ni juntos...ni separados!
Mi amada Josefina, despierta en los rastrojos
y deja que las sombras negras te envuelvan.
Eres penumbra en mis noches, cuando desnudo mi cuerpo,
soy tu espejo nublado cuando tu buscas quererme,
¿no comprendes que he muerto para la vida que tu anhelas?
Solo diviso un cadáver de poeta y de nuevo un niño intenta florecer.
¡Cuanto nos queda por amar Josefina!
A VECES
A veces,
solo a veces...
El silencio es alma camuflada,
corazón oculto de lascivas miradas malolientes
como nubes de chocolate caliente.
Yo dibujo con ellas los silencios
mi perfil en tu memoria sombría,
perdidas sonrisas
llenas de melodías sin inventar todavía.
A veces,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 728
Mil poemas a Miguel Hernández
solo a veces...
El universo se cuela por mi ventana
el alma se descubre abandonada
felicidad oculta, nacida de la nada
recreada en la belleza exterior.
Esa que se toca
se besa
se acaricia
se huele
se abraza
se sueña.
En la riqueza interior
interior amada,
esa que no se ve
pero se siente
se desea
se atesora
se comparte.
A veces,
solo a veces...
Nos vemos reflejados
más allá de la ventana,
muro tras muro,
me invento horizontes
y me llevan a la nada.
En el camino paralelo
que soñamos juntos,
un minuto
muchas vidas.
A veces...
Solo a veces.
Miguel Hernández y Josefina
TERMINAL
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 729
Mil poemas a Miguel Hernández
Rasgué mis ropas y nos hundimos en la miseria,
caímos tan hondo que ni nosotros nos hayamos,
desnudamos misterios brutalmente escondidos,
y más allá de los dos los silencios destronamos.
Y al morir poco a poco desnudos cuerpo y alma
nos miramos sin mirar con quietud y con calma,
prometiéndonos amor mas allá de las estrellas
asimilando el misterio de no ser una de ellas.
Volví en mí más loco si cabe que nunca
y exploré tu cuerpo, vivo, blanco, sin parpadeo,
abracé tus senos firmes ahora de purpurina,
estrenando aquel placer que parecía eterno.
Heme aquí, muerto en vida ante tu templo
fui tu puñal de amor y tu fuiste mi enamorada,
te sembré con amor, descubrí tu belleza,
fui yo quien te llevó de la mano por la vida.
De Miguel Hernández a su esposa Josefina
TRIUNFO
Buscas
sin rendirte,
escribes hermosas obras,
te obsesiona otro ambiente
y descubres Madrid de lleno.
Hotel y tertulias,
después, desencanto.
Triunfo.
A Miguel Hernández.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 730
Mil poemas a Miguel Hernández
Gonzalo A Torres O, Chile
Khayamaoz
En el papel la voz de Hernández
Buscaba en un armario,
Buscaba en el vacío,
Solo un papel, una poesía;
La voz de Hernández,
En rima en verso.
Me decía oscura tarde la del jueves,
Oscura tarde me decía,
No fue de hazañas no fue mejor
El viento junto al arrebol.
La voz de Hernández arrullo.
Lo que mi sentimiento bajo, ese día amaneció,
Y hoy comenzando una semana,
Regresa la ilusión,
Sea el martes o miércoles,
Sea jueves como acaeció,
Es hazaña el valor.
Es la voz de Hernández y sus rimas
De metáfora que no me hacen ver,
El armario vacío como antes.
Y en este momento digo,
Que no ahí instante en mi existencia,
Donde no estés presente,
Sean los años y sus sueños,
Que hoy me tienen sin ti..
Se fortaleza la ilusión de volver a volver a vivir,
En una instancia el corazón nacerá,
Para llenar una tarde triste en una alegría
De vivir y de sentir…
Encontré en el papel de Hernández
Esos versos en el armario vacío
La voz del poeta que delira en los días
Y mi canto vaya al principio vaya al final
Busco tus besos y el cariño felicidad…
Que las circunstancias me han esquivado,
Y en tus labios juntos a los míos vivir y soñar…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 731
Mil poemas a Miguel Hernández
Julia Orozco, España
AQUELLA ESTRELLA.
Dicen que cuándo naciste, Miguel,
nació una estrella contigo,
comentan (de boca en boca),
que era estrella tan hermosa,
que el momento en que lucio
el cielo se torno prosa,en canto
de dulce amor.
Y que llegó hasta tu cuna,
y que te canto, mil versos
y te cubrió con su amor
y te enredo con sus besos,
y cuentan que cuando marchaste
(y de la forma que fue),
esa estrella oscureció
¡y ya no volvió a prender¡.
LA ROSA.
En el dia en que te fuiste,
nació una rosa roja,
esa rosa se preñó
de tus versos y tu prosa.
En la montaña más alta,
los recita el ruiseñor,
que cada dia recuerda
con su piar a los cielos,
que estas arriba con ellos,
y por siempre en los recuerdos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 732
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio García Castro, Perú
BALADA A MIGUEL HERNANDEZ
Del pueblo de Orihuela en Alicante,
un pastor de cabras ha nacido
Llevado de la mano de Ramón Sijé
en un gran bardo ha resultao
Así como la luna asciende entre dos palmeras
Su nombre se fue elevando
entre los grandes maestros
¡Y el amor ascendía entre nosotros!
Es uno de sus poemas.
O, ¡Besarse mujer al sol
es besarnos de toda la vida!
De su poema ¡Besarse!
De pastor de cabras a poeta
Así venía escrito desde el cielo
y siendo Orihuela un pueblo
Escogido para amamantar
a tan ilustre poeta.
Pues mujer viste tus mejores galas
que el hijo de tus entrañas,
que por nombre lleva Miguel Hernández,
de vuelta está en tu seno.
Hoy más grande y mucho más tierno
Es el Miguel Hernández
¡Si, el que fue pastor de cabras
Hoy hecho todo un hombre
y un nombre que resuena
a los cuatro vientos!
Ya no es pastor de cabras
hoy es pastor de letras y de los buenos.
Balada a Miguel Hernández
el poeta de Orihuela en Alicante.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 733
Mil poemas a Miguel Hernández
María Teresa Casas, Colombia
ECO INFINITO DE LA TIERRA
Miguel Hernández
fuente viva
hila palabras
escribe y prodiga
romancillos cada vez.
El torero fue en silencio
más valiente en el drama;
Miguel intelecto notable
dueño del rayo y de la luna
luchador incansable y glorioso.
La sangre hernandiana
dejó en el pueblo
camino de ausencias
amargas circunstancias
dolor y miseria
del hombre y su libertad.
Luchador con el verbo,
fecundo en su léxico
lo deslumbra la vida
Garcilaso, Neruda,
Quevedo y Neruda,
Miguel eco
infinito de la tierra.
Antonio David Pestoni, Argentina
DIÁLOGO ENTRE LA LUNA Y DON MIGUEL
La luna mostró su rostro
Y se notó avergonzada,
Muy sonriente, apasionada
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 734
Mil poemas a Miguel Hernández
Por reflejar su relato.
Quiso en su cara marcar
Lo insólito de este mundo
Cuyo fin tan infecundo
Es malo de transitar.
Parece que en vez de amar
Hoy se mata por doquier
Por robar o por poder
O por querer conquistar.
La droga y las armas mandan
Nadie respeta a su hermano
Todos se creen soberanos
Con total impunidad.
Al que trabaja, lo esquilman
Al que roba lo alimentan
Al que mata lo sustentan… Pero
Para el que sufre no hay pan.
Por eso que al reflejar
Hermoso rostro alunado
Hoy me encuentra acongojada:
Mi alegato es conversar.
Dice Hernández, al pasar
“Oasis de toda beldad a toda vela
Con gargantillas de oro en la garganta
Fundada en ti se iza la sierpe y canta…”
Es por eso, Don Miguel,
Que hoy estoy agradecida
Porque usted en arremetida
Dijo de mi compañía.
“Luna cómo gobiernas
Siempre en mudanzas, siempre dando vueltas
Domesticando van mimbres con ronces
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 735
Mil poemas a Miguel Hernández
Mas con las bridas de los osos saltas”.
O también de mí comentas:
“Esta blanca y cornuda soñolienta
Con la cabeza de otra en lo postrero
Dócil, más que a la honda, a la apariencia
Torna luna de música y sendero”.
Y ahora te digo a ti
Por compartir mi relato
Sólo fue bronca de un rato… mañana
Mañana será otro día.
Natalia Posso Guerrero, Colombia
SI YO FUERA…
Si fuera Josefina devolvería a la luz
el hijo de la sombra,
me encontraría contigo Miguel
y te diría ,
que las cebollas
no me hacer llorar.
Si fuera Josefina,
te amaría mil veces
y dejaría que tocaras
mi alma con tus versos.
Si fuera Josefina,
tocaría tus dedos entre las rejas
y besaría tus cejas.
Si fuera Josefina,
Invitaría a Joan Manuel
y te diría,
que por la boca
entono la canción ultima,
y que para la libertad
que ambos soñamos
está el cielo .
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 736
Mil poemas a Miguel Hernández
Juan Rodríguez Jara, Lima-Perú
DON MIGUEL HERNÁNDEZ
Naciste en felicidad de la naturaleza del edén español,
Orihuela, pequeño rincón de la tierra peninsular,
con su abundante flora y fauna paradisiaca te envolvió.
Tendiéndote el abecedario para crear palabras celestiales,
en noches de luna te iluminaron para arrancar encantos.
Dialogaste en los rediles nocturnos al amparo de las estrellas,
el silencio cifraba la música a las letras de tus odas amantes.
El agua corriendo en río como la maravilla del Amazonas,
cantaban los versos para convertirlos en libros universales.
Así nacieron y florecieron tus versos que fascinaron al mundo.
Los viajes por caminos sedientos y hambrientos
multiplicaron la tinta y el papel para que cantes a la vida,
para dibujar en versos a la amada patria algo distante
para guardar en el corazón a la musa amada y lejana
y llevar a las tertulias amicales versos y estrofas.
Pudiste recorrer legendarias páginas de los grandes,
ilustres escritores que dejaron huellas de libertad y gloria.
Recogiste sabores amargos y dulces de esta vida
en las grandes ciudades, contaminadas de egoísmo
retornando a tu natal querido: Orihuela de la dicha.
Cuatro paredes por compañeras te guardaron, por cierto,
para que por dentro te lastime la indiferencia humana
vestida de democracia y disfrazada de justicia
para entregarte al olvido tu fructífera existencia,
mas no lograron, por más que quisieron, enterrarlo.
Con los años tus odas hechas de versos de otoño,
ruedan por el mundo abriendo surcos de cultura,
sembrando admiración y eterna gratitud del hombre.
Eres paradigma, has crecido ante los enemigos
más tu silencio no crecerá, ante lo gigante de tu obra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 737
Mil poemas a Miguel Hernández
Llegaste a la América para subir a los montes
y bajar a la tierra peruana, como pediste.
Desde entonces y para siempre, así es maestro.
Ni la enfermedad, ni la injusticia te ausentara
de la memoria de los seres vivos del planeta.
A los treinta y un años de existencia nos dejaste
para marcharte a la inmortalidad del universo,
para reunirte con los doctores de las letras;
de allí seguirás alumbrándonos para siempre.
¡Gran abanderado del sacrificio de la literatura!
Thelvia Marín Mederos, Cuba
NOTICIA
LA VIDA EN JUEGO,
EL JUEGO DE LA VIDA.
ESA FUÉ LA NOTICIA
DEL JUEGO QUE ESE DÍA.,
TERMINÓ CON TU VIDA
DE SOÑADOR-POETA,.LUCHADOR
POR UNA ESPAÑA NUEVA:
ESA FUÉ LA NOTICIA QUE ESE DÍA
NINGÚN CRONISTA PUBLICÓ.
PUDO DECIRSE TODO EN UN ADIOS
DIRIGIDO A ESE DÍA
Y A AQUELLOS QUE PERDIERON , ESE DÍA
EL JUEGO DE LA VIDA.
HÉROES DE LAS SOMBRAS Y LA LUZ
!LA VIDA EN JUEGO!:
SIEMPRE JUGÁNDONOS LA VIDA.
LOS OJOS DE LOS NIÑOS PREGUNTANDO
¿QUÉ ES JUGARSE LA VIDA?
Y:.!A CALLAR! HAGAN JUEGO
"A LA RUEDA, RUEDA
DE PAN SIN CANELA"
MIENTRAS, ALLÁ EN LAS CALLES;
ALLÁ EN LOS CAMPOS DE BATALLA
Y AQUÍ, EN SILENCIO
LÁ VIDA EN JUEGO
SIEMPRE
EL JUEGO DE LA MUERTE .
FIN DE LA NOTICIA, QUE ESE DÍA,
NINGÚN CRONSTA PUBLICÓ…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 738
Mil poemas a Miguel Hernández
Nieves Merino Guerra, España
LUNA PREÑADA DE AGOSTO
La luna está preñada.
Plena de luz y ostentosa
se pasea en ésta noche
como una emperatriz.
Siente latir su matriz
llena de magia y embrujo.
Va a ser madre…
Y es por ti.
Hoy, 31 de agosto
son sus dolores de parto
los que de gozo la llenan.
Pare ya… ¡asoma el fruto
de tu antología fecunda!
En el momento preciso
para ti, “perito en lunas”.
SUEÑO CONTIGO, MIGUEL…
Sueño despierta contigo
A todas horas, sin pausa.
Sea de noche. Sea de día
siento tu esencia cercana.
Estás en mi pensamiento,
estás en mis fantasías.
En mis penas y tormentos.
Alegrías e ilusiones.
Eres, Miguel, mi aposento
en éstas noches calladas…
No eres “Perito en lunas”.
Su arquitecto sí.
Y diseñas la alborada.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 739
Mil poemas a Miguel Hernández
FUISTE LA SAL Y EL VINO
¿Sí...? no lo creas, Miguel.
Todos somos sal y vino.
Pan y agua.
El efecto mariposa.
La brisa que hace tormenta.
Siempre, siempre
quien es coherente consigo mismo
y escucha su voz interna
es auténtico
COMO TÚ, Miguel Hernández…
y lucha por lo que cree
no por lo que otros piensan.
Son las "causalidades"
las que marcan nuestros tiempos.
También, quizá, los momentos
en que flotan las verdades.
¡¡ En plural, sí, también !!...
Algunas, acribilladas.
Otras como recién nacidas.
Palabras que matan.
Que viven...que mueren.
Palabras que elevan
Palabras que enferman.
Palabras.
Verdades...
Verdades que mueren.
Verdades que atan.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 740
Mil poemas a Miguel Hernández
Solo tú sabes, Miguel
si fue un pronóstico...
Poco o nada ha cambiado.
Escribes al HOY.
Es posible, poeta:
es la magia de las letras.
Samuel Cavero Galimidi, Perú
¿A QUIÉN LE IMPORTAS?
¿A quién le importas, Miguel?
¿Si ayer nomás no te recordaban los cuervos?
¿Si enfermaste de tuberculosis,
entre barrotes y sombras humilladas?
¿Si tu mesa cruje de tristezas
en la cárcel de Alicante?
Ay, cayéndonos,
¿A quién le importas, Miguel?
Cuando tus yemas y caderas,
heridas de muerte,
recuestan sus dolores.
¿Y si tu cama tuvo la visita
de un mendrugo de pan diciéndonos: “Soy tu Ángel”?
¿Si las caries del alma dolían más que las balas,
a quién le importa?
¿Si el cura pervertido del pueblo
rezó unas plegarias
y si fuimos por ti
al cementerio?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 741
Mil poemas a Miguel Hernández
¿Y si la maestra nos pidió cantar Avemarías,
a quién le importas, Miguel?
Si aquel entonces éramos niños
no comprendiendo la soledad
del que no dice que se muere
y muriendo de eternidad estás
entre versos que hablan de ti.
¿A quién le importas ahora?
¿Si las ratas de la noche volverán a salir de sus escondrijos?
¿Si el ladrón que robó a la vieja usurera
volverá a salir libre?
¿Si siempre habrán balas matando
y niños que se ahogan
zozobrando en la pateras
tan cerca de España?
¿Si nuestro canto no es ya de gorrión campanero?
Si tú eres Viento del Pueblo,
que calma nuestro olvido demente:
¿A quién le importas, Miguel?
Hoy, entre versos, has vuelvo a la VIDA,
para olvidar que te fuisteis
besando la tierra santa
entre estertores de agonía,
murmurando:
“¡Ay, hermanos poetas,
mujeres y hombres del mundo,
aún no he muerto!”
¡Ay, de Olvidado!
A Felipe Oliva Alicea
Por: Samuel Cavero Galimidi, poeta peruano
Es hora de volver a la Bandada.
Hoy, cargado de libros y recuerdos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 742
Mil poemas a Miguel Hernández
el marinero barbado de insigne pluma
soplando velas
arrastrando maletas de libros y de sueños va
con los ojos de sal y arena, diciendo:
“No me olviden, que me llamo Olvidado”.
Y dicen, quienes todavía lo sueñan, fue, antes que gaviota, un pirata ciego
Sobreviviente de fragorosos combates
y de amores tempestuosos
en el gran mar Caribe.
Hoy, nuestros sueños, soñándonos
Ya sin él, son los de Miguel Hernández,
barcas de papel al viento andante
El corazón palpitando mariposas
Lágrimas,
rezos,
el telón del teatro universal que cae…
y, diablos, sí que cae.
Allí va, cargado de libros, hermano Miguel, recordándote
con el nuevo sol que pinta de oro
parte, con pasos cansinos, cual biblioteca andante
y es que a cuestas del mal del olvido lleva
el mal que nos hace olvidar que a CUB le falta la A
La A de nuestro amor, solidaridad y afectos
Ese mal que nos humaniza y eterniza en piedras cuando él pasa
¿Y quién no sufre el mal del olvido? ¿Quién, compañero, compañera?
Lo sufren las viejas usureras, los ministros barrigones,
Los diputados, los senadores, los concejales
y hasta los desmemoriados presidentes
Lo sufre el cura que olvidó las hostias, el misal, dar la limosna
y el perdonar nuestros pecados de siempre
También los niños de las escuelas que olvidaron el papel, el lápiz,
y la lección aprendida
Lo saben los combatientes del mañana que se olvidarán de matar
Y hete aquí, hermano Miguel, perdonando el olvido
porque yaces dulcemente dormido.
Y hete aquí, hermano Felipe, perdonando el olvido, porque sufres y sueñas
y porque al fin de cuentas quién no ha olvidado un violín
a la orilla del mar de la vida o en el hotel.
¿Y quién, una condecoración? ¿Un libro? ¿Un anillo? ¡Vamos!
Tú, olvidándote estás Oliva-do
Perdón: Olvidado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 743
Mil poemas a Miguel Hernández
Mientras otros siempre olvidan perdonar,
pagar deudas
y amar la vida, antes que la muerte.
¿Y conoces por qué?
¡Cómo pues podrías saberlo!
Si por algo te llaman aquí, allá, en la otra orilla: OLVIDADO
¡He allí tu estirpe!
La que, íntimamente, nos dice:
¡La gaviota, hermanos, nunca vuela en la oscuridad!
Isaida Viart, Cuba
LUCES DE VICTORIA
A Miguel Hernández
Gladiador de antigua historia.
que persiste en la justicia.
arengas a multitudes, resisten.
Así eres, buscador de batallas
con victoria de luces
y el fuego ancestral
de tu optimismo.
¿Qué haces Miguel?
Ingenuo niño campesino
rebelde y soñador,
desde tu ingenuidad atormentada,
hallas la fuerza radical
de tu palabra
nueva.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 744
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Chile
“VERSASÍS”
Letras
como sombras
pasan los cometas
como baile de rondas
Escribiendo luz de astros
en imagen oportuna
simples pasos
luna.
***
Comentario
serás siempre
en cualquier estrario
y en toda mente
Hombre de sangre sufrida
quien sanarte quisiera
tu herida
cualquiera.
***
Libro
del vergel
más que amigo
hojas blancas de papel
La madre tierra letrando
sembrando una huella
vamos buscando
estrella.
***
Mundo
esfera redonda
un golpe rotundo
sumergiéndose en tu onda
Tómalo en tu mano
es para ti
querido hermano
sufrí.
***
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 745
Mil poemas a Miguel Hernández
Orihuela
tu campo
el ave vuela
libre como tu canto
Arado surca la tierra
la palabra tuya
se encierra
bulla.
***
Madrid
tras barrotes
todo es ardid
tus letras son brotes
Nacen y germinan versos
desde tus manos
cóncavos, convexos
hermanos.
***
Alicante
pueblo imperecedero
se hace distante
no está el clero
Naces, vives y mueres
un día temprano
te quieres
humano.
***
Bombas
cambiaron campos
por grandes rotondas
sobre flores los mantos
Las letras se morían
alegrías se borraban
iban, venían
encumbraban.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 746
Mil poemas a Miguel Hernández
Yanelys Encinosa Cabrera, Cuba
Lugar común: riesgo clínico del caminante
Se hace camino al andar
Miguel Hernández
Cuando se ha caído antes
cuando se aprende a caer de nuevo
como si no doliera la resbaladura
una se yergue del lodo
con cierto desparpajo
chapolotea sostenida de la rama cercana
hasta equilibrar la verticalidad
con hieratismo
como si alguna frialdad
le concediera un don invulnerable a la caída
cuando una tropieza y se levanta
anda con la vista al frente y a lo alto
tropieza y cae ante otra piedra del camino
aprenderá quizás a zigzaguear
y a tornar la vista al suelo al frente y a lo alto
para conjurar todas las precauciones
pero nada garantiza la ausencia
de otra piedra ni de un mínimo descuido
nada garantiza que amén de la frialdad y el aprendizaje
la rótula maltrecha sobreviva al desgaste
Edda Ottonieri de Maggi, Argentina
POETA DEL SUFRIR
Los terruños de Orihuela lo vieron nacer entre ibéricas auroras…
Su sangre corrió entre peñas yermas en callosidades de pobreza
mas su corazón latía agitado, con lírica música calentado
y sus versos batían entre majadas y riscos…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 747
Mil poemas a Miguel Hernández
Su poesía es canto al amor, al sentimiento, la esperanza, la justicia
pero también al dolor,
cuando certero el estilete de la muerte
se hincó en la mortaja que cubrió a su retoño
entre la tempestad del destino.
Desde entonces, sus poemas desgarran el alma,
propia, y de quienes asoman a sus letras…
Bebió la prisión en países extraños;
la enfermedad socavó sus carnes
y el vendaval de las humanas miserias lo llevaron por los atajos
de la eternidad en plena lozanía…
Mas su lírica seguirá en resonancias de quienes aman la poesía…
donde él siempre estará.
Sara Vanégas Coveña, Ecuador
LA HERIDA
No hay extensión más grande que mi herida
Miguel Hernández
de tu casa a mi casa solo hay una herida
larga cansina sin brillo
una herida blanca como la luna en febrero
herida de sal y siemprevivas
tímida sin aroma y sin crepúsculo
húmeda como los ojos de las golondrinas
errantes
entre tu casa y mi casa
cada vez más lejanas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 748
Mil poemas a Miguel Hernández
Luciano dos Anjos, Brasil
Filho da liberdade
Pela relva miúda dos dias idos
Caminhava silente o nobre bardo
Sua vara e seu arado eram a pena
Em suas mãos fatigadas
Pastoreando os versos do porvir...
Suas retinas insones bebiam
As flores intangíveis da seara da poesia
Sua alma livre divagava alem
Das fronteiras do seu mundo habitável
As grades da noite não conseguiram
Toldar seus passos resolutos como de um guerreiro
E os versos dimanavam dos seus dedos
Como os pássaros silvestres da alma
Reverberando em toda a terra seu canto imortal
E seguiram pelo mundo
Acordando os encarcerados
Pelas grades da ignorância
E suas pegadas cravaram
Na seara da eternidade
E o porvir conheceu sua gloria
Em cada verbo da sua breve existência.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 749
Mil poemas a Miguel Hernández
Dúo Alfred Asís, Isla Negra-Chile-Francisco Catalán, España
Alfred Asís
Miguel,
Poeta, audaz, fugaz
¡Virtuoso alfarero de letras!
Tu campo imagino en sus frías mañanas
emergiendo con tus botas entre animales
Una higuera y el parrón
una fruta una canción
luego el desastre de una nación...
Francisco Catalán
Miguel,
pastor de lunas.
A la ribera del cielo levantino
un hombre alza su voz entre la grama
poderosa de metales, hambrienta de vida
generosa con la luz de la mañana
y en su renacida cumbre
sacrifica la torre de su mirada.
Juanita Conejero, Cuba
MÚSICA DE ALAS
Al poeta Miguel Hernández
Con tu fusil de nardos
en la diana del mundo
fijaste tu presencia
y has quedado atrapado
entre cantos azules
que arrullaban mis sueños.
Miguel que te descubres
día día en mis cielos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 750
Mil poemas a Miguel Hernández
que haces sones de lunas
taconear de luceros
ese sol que florece
en la entraña del pueblo.
Miguel no me abandones
en mis alas tu viento.
César Adolfo Alva Lescano, Trujillo Perú
AL POETA MIGUEL HERNANDEZ
España tiene grabado en su rostro
girones de tu alma generosa
líricos versos de sentidos sueños
que afloran de tus sentidas emociones.
Tus caminos recorridos por el tiempo
son testigos de tus férvidos anhelos,
confidentes de tu vida fatigada
por tus viajes, tus afanes y desvelos.
Poeta, de los ritmos silenciosos
que acompañan tus sueños y esperanzas,
palpitan en el hondón de tus pasiones
que se alejan por soñadas lontananzas.
Vas dejando marejadas y mensajes
en el ara donde posar tus desvelos,
ternura de tu corazón sincero
estremecido por amor que te cautiva.
En la tierra que inspira tu lirismo,
que recibe el clamor de tus desvelos,
que ofreces la plegaria de tus versos
en el área azulada de los cielos.
Los poetas y hermanos, en el viaje
admiran tu devota plegaria sin olvido
que canta con la voz de los mortales,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 751
Mil poemas a Miguel Hernández
no callada en el seno de la vida.
Poeta, sin rencor en la contienda
número singular en la tristeza,
caminante sin cansancio por el tiempo
que despierta silencios sin olvidos.
Pensamientos que derramas por el espacio
que escucha tu voz que nunca acaba,
por los áureos paralelos del recuerdo
donde moras, poeta, del tormento.
Que tus cantos produzcan ilusiones
que jamás se acaben en el tiempo
y florezcan cual ramos de esperanza
y recojan tus hermanos del silencio.
Beatriz Espósito, Argentina
A MIGUEL HERNANDEZ
No pudo la adversidad,
en aquellos tiempos tumultuosos,
acallar tu alma inquieta
en tu Orihuela querida.
Cuando tu juventud pasabas
entre guerras escondidas,
escribiendo tus poemas
de añoranza perdidas.
Fuiste caminante
de paisajes tan distintos,
y en cada uno dejaste
una bella poesía.
Época difícil
que te ha tocado transitar,
el poeta fue bebiendo,
el vino que huele a hiel.
Cuanto más se quiebra el alma,
más bella la prosa es.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 752
Mil poemas a Miguel Hernández
Eso ha pasado contigo,
Dios a escogido bien.
Los versos que del cielo mandas
vienen cargados de miel.
Stella Maris Taboro, Argentina
Te cantan los vientos del pueblo
A Miguel Hernández
Los vientos del pueblo te cantan
tu pusiste alas a tus versos
enseñando a no caer en los miedos
y salvarse de las jaulas.
Elevarse sobre la miseria que esclaviza
y levantar la frente bien alta
sobre los fusiles y las trampas.
Llevar en las manos cien olivos
floreciendo cada mañana
aunque el filo de la muerte
ruede y remueva las calles .
Encender un sol ardiente y bello
en la senda de los que siembran
la noche en su terror que aturde,
sin olvidar que las palabras no mueren
como fusilan a los cuerpos.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 753
Mil poemas a Miguel Hernández
Marisol Cristina Baier Seewald, Argentina
TU GRITO, MI GRITO
Hermano poeta:
Quiero cantar tu grito de dolor silenciado
guardado en tus versos de tinta y sangre
que te habitó, cada día,
cada día de tu sufrida vida.
Tus poemas quiero hoy
saciar de renovado gozo,
y que fluya en mi humilde pluma
la voz de un nuevo canto
que es tuyo, es mío
y hoy revive
en el fuego de tu eterna inspiración.
Muchos quisieron silenciar la llama
que arde apasionada en tu interior
pero ya ves, hermano poeta
¡Ya ves que no pudieron!
Vives en la inspiración,
en las letras,
¡de cada poeta que como tú espera!
que sueña... lucha
intentando proteger
la salvación misma de su existencia
porque la muerte de un poeta
es callar sus sentimientos
y la vida es poder...
liberarlos al viento.
¡Canto tu infinito grito,
y abro de nuevo tu lucha!
Cierro tus heridas con dulzura
infinita dulzura...
Y te beso...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 754
Mil poemas a Miguel Hernández
Adelfa Martín Hernández, México
El LEGADO
En la oscuridad que penetra las entrañas
queriendo cercenar de raíz los ideales
lucha por sobrevivir una luz en los chavales
aunque íntimamente, bien lo saben, son patrañas
Que difícil mantenerse esperanzados
a esos sueños de libres despertares
cuando solo se escuchan los quejares
de quienes sin piedad son torturados
Terribles noches de dormir sin un dormir
sabiendo que tal vez hoy toquen a su espalda
esos oscuros hombres sin rostro y sin alma
gritando: ¡arriba coño!...es tu día de partir
Cada noche a un compañero vemos ir
aunque luego nunca más lo mencionaron
todos dicen en baja voz… ¡lo fusilaron!
el juez, en cada caso, fue el fusil
En las cárceles franquistas el prisionero
años después de terminada la batalla
fue humillado sin piedad por la canalla
y sin aviso ni protesto, asesinado
Pero a pesar de los tiempos de maldad
del pensamiento en flor, pisoteado
Miguel Hernández supo dejar como legado
su estandarte con la palabra… ¡libertad!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 755
Mil poemas a Miguel Hernández
Patricio Portales Coya – Paporcoy, Chile
….No soy de un pueblo de bueyes,/que soy de un pueblo que embargan/ yacimientos
de leones,/
desfiladeros de águilas/ y cordilleras de toros / con el orgullo en el asta./Nunca
medraron los bueyes/
en los páramos de España….. MH
Miguel, hermano Miguel (A Miguel Hernández)
Allá en las cumbres del cielo
allá donde sólo van las nobles almas
con sus cuchillas de amor
siempre bien afiladas,
es seguro que has tenido
cálidas tertulias largas
con Ercilla y la Gabriela
con Vicente, con Neruda
y con la Violeta Parra.
Hijos de esta tierra indómita
cantera telúrica austral
de la última vastedad, frontera antártica,
suelo que a los pueblos dio pan y casa
y también forjó en sus bosques
los hombres más aguerridos y
temidos del planeta, esos hombres
que nunca dan la espalda.
Aquí Miguel, aquí se hizo a yunque
del tiempo, una magnífica fragua,
y crisol se hizo el cielo,
un nuevo pueblo nació
del encuentro mas brutal,
del acero de dos razas.
Los leones, toros hispanos y águilas
que en tus cantos retratabas
hallaron aquí al cóndor
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 756
Mil poemas a Miguel Hernández
al puma y al guanaco,
tan indómitos como aquellos
por pretéritas tiranías,
dos razas maltratadas.
Un pueblo, una flecha en el aire
que sólo la libertad ama,
nació de las aguas andinas
y las heridas de terribles batallas,
nació de nuestras sangres mezcladas.
Seguiremos Miguel, seguiremos
por la senda por ti labrada
con las palabras por balas
y la verdad como coraza.
¡Que viva Chile y que viva España!
Teodosio Olarte Espinoza, Perú
PARA IZAR ESTE VIENTO
Para izar este viento quiero decir
en prima de trino abierto
que nací entre la bruma de Hiroshima y Nagasaki;
miles de cadáveres y heridos atravesaron mi cuerpo
y el clamor de sus agonías
aún tañen en mi voz inútilmente.
Mi vida transcurrió, no sé si por algún designio
o porque me deslicé buscando pendientes,
entre ríos humanos, caudal de protestas,
huelgas, mítines, marchas de sacrificio,
despidos masivos, inanición e impotencia;
aquí, en el lado austral de la palpitación del mundo
donde estuve apacible como el agua
de un destino estancado tramitando su derecho a transcurrir.
Me habían vuelto triste
porque me intimidaron con el bramido de la muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 757
Mil poemas a Miguel Hernández
Y en vez de ser río, era piedra;
en vez de árbol, era palo
y a la primavera la veía crecer sólo en los cementerios.
Y así cantando mi yaraví adentro
encontré la voz para volverme rama, para crecerme trino:
Miguel Hernández viene con el viento,
Miguel Hernández se va con el viento,
Miguel Hernández queda con el viento;
aquí, en el pecho henchido del pueblo,
donde sentí su aliento abrazándome de compañero;
aquí, en los ríos de cascos con linternas,
de hoces con martillos en ritmo de pecho y cielo
que se elevan en regocijo de fervientes puños;
en las grandes avenidas donde el viento
se hace himno en novena sinfonía.
Es canto del pueblo donde ando lleno de Miguel,
camino de Hernández,
de Miguel Hernández el compañero.
Porque vientos del pueblo nos llaman,
vientos del pueblo nos protegen,
vientos del pueblo nos animan…
hasta la victoria final de nuestra caminata.
Blanca Garnica, Bolivia
MIGUEL
En Isla Negra
el agua come vientos
Boca ensanchada y cerrada :
enloquecidos vientos
Triza sus huesos
sobre la roca
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 758
Mil poemas a Miguel Hernández
Mientras el agua borda
espuma encabritada
Como siempre Miguel
La tierra
quema el pan
Surca ubres de petróleo
en el desierto y el mar
Y ordeña bajo fusiles
la leche negra
Mientras arde la casa
y el sol se enluta
Como nunca Miguel.
NIÑO MIGUEL
Cuando era niño
Miguel brincaba
con sus canillas de cordero
las cerranias
No de conejo los dientes
- paa su gusto dimintos masticaba el lechugar
del campo
Ni viejo ni abuelo fue
pero miraban sus bigotes bancos
por la leche bebida
de su taza.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 759
Mil poemas a Miguel Hernández
PASTOREO
A Miguelito Hernandez
Alto las nubes van
desaparecen
Bajo las nubes los corderos
pastan
Las nubes y los corderos
mansos
Como la tierra toda
con el árbol y el agua
La montaña callada
grande o abuela
Cerca las balas van
truenan y callan
Soldaditos de plomo
los enemigos
Con huesos,sangre y gorros
mueren mansos
Soldados y corderos
uniformados
Con balas o cuchillos
se desangran.
Nieves María Merino Guerra, España
AROMA A AZAHARES
Aromas a azahares y hierbabuena
naranjos y romeros curan tus penas.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 760
Mil poemas a Miguel Hernández
Y en tus delirios
sabores a aceitunas
de tus olivos.
Mira, poeta
La luna es grande.
La luna es buena.
Tanto le cantaste
enamorando
que la preñaste
con tu inocencia.
EL UNIVERSO ESTÁ ILUMINADO.
La luna se encumbra y pasea
como emperatriz
dibujándose
en todo su esplendor.
No hay oscuridad.
su luz estalla
Eres su arquitecto,
"Perito en lunas".
Olivos sueñan.
azahar que aroma
quizá, Orihuela
la Tierra entera se vuelca en ti.
DESDE LA SOMBRA
Desde la sombra de mi memoria
late el palpitar de tu agonía.
Doblan las campanas.
Doblan a muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 761
Mil poemas a Miguel Hernández
Caminar cansino y desesperado
en tu último suspiro
rezando suerte.
No sé si la hubo.
Tu alma de poeta viajó.
¿Ésa es tu muerte?
RUEDA LA NORIA
Rueda la noria del absurdo.
Se confabulan los desatinos.
Miguel poeta.
Miguel soldado.
Miguel que ama.
Miguel que enferma.
Miguel que lucha y Miguel que añora.
Miguel que encierran
y es liberado.
Vuelve a su casa.
Huele su tierra
y allí se asfixia
en la nueva cueva.
Rueda que rueda…
Rueda el absurdo.
Rueda el poeta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 762
Mil poemas a Miguel Hernández
ESPACIO DE ESCRITOR
Alfombras de pastos.
Y es hierba fresca
sillón de tu despacho
en donde versas
mirando al horizonte
de tus adentros.
La luna te ilumina.
El aire es recio.
Con mirada profunda
sueñan tus versos.
Canta, poeta…
Es grande el ruiseñor
que en tu alma intenta
gorjear los misterios
que te atormentan.
¡Bravo, Miguel!
Poeta mártir
en su Orihuela
y en la España triste
que le amortaja.
En el mundo entero
dejó su huella
TREINTA Y UN AÑOS
TREINTA Y UN VERSOS…
(A MIGUEL HERNÁNDEZ)
Cadencia de recuerdos que me desbordan.
Tu luz es el misterio de los aciagos vientos
que amordazaron tu voz cálida, ardiente
en la crueldad de tiempos yermos, rotos,
donde la locura tomó su asiento de reina
déspota y miserable contra la libertad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 763
Mil poemas a Miguel Hernández
No entiendes.
Asustas.
Rebelas.
Valiente vas en pos de tus sueños marcados
por el alba que acaricias en tu vida ilusionada.
Todo queda hecho añicos, como un espejo roto
en mil pedazos.
Lloras.
Aferras.
Espanto.
Absurdo.
Guerra sin nombre que te rodea y haces tuya.
Se reflejan tus ojos grandes en cada esquirla.
Con semblante serio, triste amargura te besa
las entrañas ajadas que te devoran feroces
en las trincheras malditas de guerra infame.
Apenas treinta…apenas tienes treinta años
cuando sucumbes en aquél bando de “suerte”
tomando el mando en una España rota, herida
con puñales rojos de sangre. Acampa la muerte
dejando su nauseabundo olor ácido en tu corazón.
Se enferma el alma. Se enferma el cuerpo.
Todo se enferma en cruel desatino injusto
Sólo treinta y un años,Miguel. Doblan a muerto.
TODO FLORECE Y FENECE
Florecen los naranjos.
Los azahares
perfuman el ambiente.
Y aquél olivo
que daba sombra,
amargas aceitunas
entre sus hojas
verdes. Espinos
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 764
Mil poemas a Miguel Hernández
duros en sus sarmientos.
Nada es lo mismo.
Nada, nada, nada…
Miseria, hambre y muerte
en los caminos que anduviste
Miguel Hernández. Poeta ausente.
A MIGUEL HERNÁNDEZ
DOBLAN LAS ESTRELLAS
Aterciopelada noche cuajada de estrellas
acogen tu llanto mirando a la luna.
No sabes de mares ni olas que enervan
su fuerte oleaje golpeando la cuna.
Tú sabes de ríos, montañas y valles.
De campos cuajados de sol y amapolas.
De almas que sufren. De pastos y olivos.
De humildes que lloran otras embestidas
de ésa “tierra adentro” que siempre te implora.
Poeta que cantas silente a la noche.
De duras batallas, de cárceles frías.
Poeta de luces. Poeta de sombras.
Como un toro bravo en las medianías
esperas al alba y a la estrella del norte.
Tu azul fue cegado con capas de escarcha
rondando la ascética y fiel melodía
desde tu pureza. Nobleza inocente
que enciende ese fuego de melancolía.
Y fuiste valiente, mi noble Miguel
Viviendo deprisa y sin pausa las horas.
Hoy doblan por ti todas las estrellas
penando tus penas la luna cautiva.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 765
Mil poemas a Miguel Hernández
¡MIRA, MIGUEL!
¡Mira, Miguel, mira!
Observa paciente.
Ocaso y aurora
aun siguen presentes.
Y mira…mira
mira…
La luna de plata
con astas de toro
se asoma creciente
segura y altiva.
Poco es diferente
si miras
y miras
la fe de la gente.
Sus luchas.
Sus iras.
Amores y cantos.
Pasiones vividas.
Sus risas, sus llantos
Si miras
y miras…
Promesas y encantos,
soberbias y envidias
relamen al pueblo
que sufre y que chilla
agónicos campos
en tierras marchitas
Si miras
y miras…
Hernández.
Veta de oro
en tierras baldías
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 766
Mil poemas a Miguel Hernández
bañadas de sangre.
Fieras jaurías
Matan.
EPOPEYA DE MIGUEL
Epopeya de Cid fue Miguel
ganando batallas después de su muerte.
Babieca su pluma
cantando a su gente
Su blanco corcel
cabalga en la luna
con bríos de nácar
con cinchas de luces.
Se fue una mañana
temida de marzo
conquistando reinos
de plebeyo ilustre.
NO FUE SUFICIENTE
Infancia de sueños,
poeta y pastor.
Cautivaste amor
sembrando simiente
de estelas y anhelos.
…no fue suficiente.
Codicias y engaños.
Traición y avaricia
en pueblos extraños
…no fue suficiente.
Mortaja. Sudario
con lenta agonía
sudaba tu escarnio.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 767
Mil poemas a Miguel Hernández
…no fue suficiente.
Ahora lo sabes,
observas y sientes
mi poeta amado…
No fue suficiente.
ARQUITECTO EN LUNAS
Te decías perito.
Te decían gorrión.
Luchaste y venciste
truncando tu vida
en martirio triste.
Ya no eres perito
Miguel, tan amado.
Eres arquitecto
de lunas que embrujan
a todo poeta
que te lleve adentro.
HUMO
Consumía tus días
el humo de fama.
Con famosos fuiste
a buscar renombre
de poeta ilustre.
Homo sus arengas.
Humo sus aplausos.
Humo que se queda
en ti impregnado.
Nuevos horizontes.
Países lejanos
Humo. Todo es humo
mi poeta hermano.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 768
Mil poemas a Miguel Hernández
Desgraciado encuentro
que aniquila al hombre
en guerra de humo,
fanatismo imbécil
de orgulloso humo.
Humo.
Todo es humo.
Humo que se esconde
cobarde y ladino
cuando honró tu nombre
ese cruel destino.
DULCE ENCUENTRO
Mirada profunda de amor añorado
en tu escala triste fuera de Orihuela.
Quieres a tu amada a tu lado. Espera
que se te hace eterna ya la madrugada.
Dulce encuentro.
Tierno.
Fuerte.
Apasionado
con tu amor soñado tantas…
tantas noches de desvelo oscuro.
Ensueños
que viste cumplidos en tanta locura.
Amores. Ternuras.
Caricias y entrega.
Dulce, dulce encuentro
con tu amada estrella.
ESTÁ TRISTE LA NOCHE.
La noche se viste de tristeza.
No desea galas ni luceros.
Soto oscuridad completa.
Luto cerrado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 769
Mil poemas a Miguel Hernández
Misterio.
Triste esta la luna.
Tristes los poetas.
Triste fue tu ocaso
en la noche cruenta.
Se cubrió de nubes.
Ya no quiere fiestas…
A Miguel acogen
con negrura a cuestas
de melancolía
y apagada brecha.
Ébano en tus ojos
y en la noche ébana.
Ébano en mi pecho
por tu marcha presta.
Y en la noche triste
Lloro mas tu ausencia.
SOLITARIO
Bebes, solitario la miel con canela
Es hiel con veneno de sangre y de guerra.
Miguel, que te mueres…
Miguel, no te mueras.
Sigue con tus versos en la oscura celda.
La pena te ahoga. Te agota. Te enferma.
Y en tus solitarias noches de poeta
Bebes la amargura.
Soledad inmensa.
TURISMO CARCELARIO
Con sorna rebelde
llamas la vergüenza
de tu andar cansino
en cárceles yertas.
Turismo en la España
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 770
Mil poemas a Miguel Hernández
desangrada y muerta
que te rinde culto
entre celda y celda.
Y Miguel se burla…
Ironía en venta
de rejas y andares
con hierros a cuestas.
Turismo en la España
Desangrada y muerta.
ALBA QUE ERES ALBA
Alba que es tu alba
esperanzado en ella.
Alba.
Amanecer
Con nuevas promesas.
Alba que regalas
a Miguel su apuesta
por la vida. Y lucha
por seguir en ella.
Alba que eres alba
de ilusiones yertas.
Alba enamorada
te llevó con ella.
Alba que redimes
con tu blanca esfera
al poeta ilustre
enamorado llevas.
CALMA
Todo está en calma.
Ni la brisa osa alterar la magia
de tu campo verde.
De tu azul espada
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 771
Mil poemas a Miguel Hernández
en tu cielo libre
se absorbe la calma.
Y versas, y sueñas…
Miguel, en tu alma.
LUCES Y SOMBRAS
Miguel Hernández, valiente
luceros en tu mirada
cultivas bondad ardiente
en el amor que encontrabas.
Luces y sombras tu vida
en frenesí desconcierto.
Luces las de tu amada.
Sombras fueron tu entierro.
Poeta del pueblo. Humilde
inteligente y sencillo.
Luchaste en lo que creíste
hasta el último suspiro.
Poeta del pueblo llaman
Ahora en tu recuerdo.
Luces y sombras tu vida
Miguel Hernández, venero.
MIGUEL, ME PREGUNTO…
Miguel, me pregunto
en tu soledad extrema
donde la vida se te iba
entre dolores y penas…
¿Qué pasaba por tu mente
y en tus versos no recoges?
Destrozado el corazón
por la impotente amargura
con traiciones que se mezclan
junto al amor que perdura.
Miguel Hernández, poeta
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 772
Mil poemas a Miguel Hernández
De lugares fantasiosos.
De azul. Verdes paisajes…
Responsable y generoso
que con tu pluma legaste
versos de muerte y gozo.
TE SIENTO EN MI, POETA
Siento tu andar cansino,
tus esperanzas muertas.
Ése horror en tu destino
como cruz que te despierta
del pánico hacia otro abismo.
Miguel, en mis entrañas
siento latir tu presencia.
CUANDO ARRECIA EL VIENTO
En tu alma y en tu andar
arrecia el viento con furia
en ese estado consciente
donde el verbo se hace arte
alimentando el cansino
y triste devenir creciente.
La luna, también presente
te acompaña en tu lamento.
Inefable sufrimiento. Asfixia.
Es lacerante.
Miguel Hernández, te rompes.
Cruel destino en tu inocencia
.
Y arrecia ése viento fuerte
gélido en tu alma yerta.
ADÍOS MIGEL. HASTA SIEMPRE.
Adiós o hasta la vista
Miguel Hernández, poeta.
Llevo en mi alma tu risa,
la luna y tu Orihuela.
Llevo el Levante en Canarias
incrustado en mi memoria.
Hiciste Historia, poeta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 773
Mil poemas a Miguel Hernández
Maikel Azaharez, Cuba
El salubre sol del prisionero.
Hermano del Quinto Regimiento
la cabra busca en la montaña un agorero
un santo con el rifle de guadaña
un verso un rayo justiciero
una alquimia de pétalo y sombrero
una piedra volcánica en la araña
una brisa en el guiso de la caña
una luna en el ojo del torero.
Busca una miga de pan en el sendero
el río que en el río se nos baña
una pluma un cuchillo en la campaña
un castillo en el naipe del herrero
una pena de naranja y limonero
una España que levante la otra España
una espiga de trigo en la cizaña
el salubre sol del prisionero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 774
Mil poemas a Miguel Hernández
Ramón Chávez García, Ecuador
ODA A MIGUEL HERNÁNDEZ
Poeta del viento y del camino
nacido en el llano con su fuego
despertado en la ruta de los soles
para entregarnos tu verso y tu bandera.
En Levante, España, se meció tu cuna
con el vaivén que dejan las espigas
con la clara línea de sus aguas
y con una luna cuajada de misterios.
Soñador con la palabra libertaria
enarbolando con coraje su bandera.
Sabiendo que siempre “el hombre acecha”
hiciste de tus líneas las promesas
de lucha hasta alcanzar la estrella.
Aquella que te brindaría más abrigo
sobre un Madrid solariego y tierno.
Quien como ti para entender al prado
al ir y venir de las aldabas
como queriendo partir para ser libre
y sólo encontrar puertas que no se abren.
Tu nombre es campana que nos cubre
con un sonido de fuerte encantamiento
y por las calles de Orihuela va tu verso
confundido en las plegarias de los astros.
Caminante del amor en todo espacio
la vida fue la del torero
con sus luces y capotas
victoriado con tus banderillas.
¡Poeta del ayer….Poeta del Pueblo
vivirás en los sueños matinales
en la pureza del alma campesina
en la abierta soledad de las campanas
y en la ternura de una recordada España.!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 775
Mil poemas a Miguel Hernández
Valeria P. Dalla Torre, Argentina
Injusto e Ilegítimo
a la memoria de Miguel Hernández
Injusto e Ilegítimo
así se denominó la causa
y el tiempo, y tu también,
con la Ley de Memoria Histórica
quedaron absueltos…tarde.
Ser libre, el mayor privilegio,
te quitaron por pensar,
por actuar, por escribir.
Pero valió tu pluma y tu preocupación,
tu angustia, tu tristeza y desesperación.
Pensar en la pobreza de tus amores,
y la ausencia de tu angelito.
No hubo misericordia,
ni nadie que lo mereciera
y la muerte te llevó antes de padecer
joven, muy joven.
Hoy calles, bibliotecas y escuelas
llevan tu nombre,
y hasta amaron tus huesos.
Ya sos libre, tarde
pero libre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 776
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Isla Negra-Chile
Amor intenso
Miguel, ya vez
te quieren a morir
Cuantos te alaban y bendicen
Cuantos versos del alma
Cuantos que no quisieron estar ausentes
Cuantos llenaros estas páginas
Cuantos te llegaron a conocer
Cuantos se acordaron de ti
Cuantos no pudieron o no quisieron
Cuantos imaginaron tu sed de vida
Cuanto verso tuyo descubrieron
Cuanta magia les mostraste
y cuanto dolor sin nosotros…
Hoy estamos Miguel,
hoy estamos aquí
para aplacar tu dolor
alabar tu obra y vida
y juntos, todos
sembrar esta obra de amor
esta sinfonía de poetas
para derramarla por el mundo
y llorar, si, llorar a cántaros
para que germine la semilla de la bondad
y el fruto de la humanidad
endulce el alma de los humanos…
Sinfonías
Y un día
un jilguero cantó en la higuera
Luego vino el chincol
la loyca herida y el zorzal
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 777
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus letras acompasaron la ilusión
y vertiste sobre la tierra tu esperanza…
Tus manos se pusieron a escribir
tomando un lápiz negro
como negra la noche
iluminado de plata
como de plata la luna…
Acalorado de fuego
como tornado del sol
Volado al viento
acariciado por la brisa
susurrando versos
en praderas
indefenso…
Sonaron al unísono
todas las aves
en ti imprimieron
el don de la lucha
y tu esperanza tardía
llegó aquel día
para alejarte de la tierra
y sembrar aquel espíritu imperecedero
que nos acompaña hoy por la vida
sintiéndote un buen guerrero.
María Oreto Martínez Sanchis, España
JOSEFINA
Enamorado de un ángel,
tu Josefina Manresa,
esa fuerza ilusionada
complemento de tu vida.
Fue la amada compañera
de un ferviente idealista,
el dulce tormento alegre
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 778
Mil poemas a Miguel Hernández
que te amó toda su vida.
Esposa de un gran poeta,
pero amante de un gran hombre,
mujer que por ti sufría
pues temía por tu vida.
Amargo designio el suyo
el poder de adivinar
la suerte del fiel amor:
en una tumba su vida.
Vistió su vida sudario,
cilicio de desconsuelo
hasta que encontró en el cielo
su más preciado lucero.
Elsa Solís Molina, Argentina-España
A "El último rincón"
"Qué hice para que pusieran
a mi vida tanta cárcel"
Miguel Hernandez
El BESO
Clama por el beso amado
del rincón más solitario
y ese beso ya ha volado
a los confines, alado...
Ya es... espuma de mar,
ya es luna bella de mayo
ya brisa que besará
como suspiro al amado
En noches de luna llena
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 779
Mil poemas a Miguel Hernández
su perfume arrullará
la soledad de la pena
que en su alma dormirá.
A su "Juramento de alegría"
"La alegría es un huerto del corazón que a los hombres invade con mares de
rugidos"
Miguel Hernandez
Por la alegría
El hombre de la vida más triste de este mundo
a su breve estadía glorifica en su verso
"Alegraos", exhorta, con acento profundo
y a salir de sus tumbas, alienta como un eco
La alegría, predice, derrumba las montañas
y el relámpago eriza, su piel enferma y breve
y hasta rompe el tejido sutil de las arañas
y la mujer acude, al llamado que pierde...
A "Vientos del pueblo me llevan"
"Los pueblos doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones se levantan"
Miguel Hernandez
Indómito
Muy desde dentro del alma, sale el grito de protesta
por un pueblo fiel que clama y no perdona la afrenta.
Sacude el yugo, impotente pero no ceja en la lucha
con la fuerza de alma y mente, a su sino fiel escucha
Y como el buey impaciente y como el león en su furia,
castiga el suelo, insolente y no cede ideal ni lucha .
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 780
Mil poemas a Miguel Hernández
Berta Lucía Estrada, Colombo-Francesa
1
PEÑASCOS DESOLADOS
en honor al Poeta del pueblo, Miguel Hernández de España.
Al pastor de cabras de Orihuela
Una horda de cuervos
sembró el fandango mortuorio
cruces plantadas hasta el infinito
desierto blanco
amarillo sin verdes
último paisaje de su delirante vuelo
La pálida dama
traspasó los muros de la celda
un velo ocultaba su rostro
en la mano, una trompeta,
su túnica restos de barro
Silenciados los ladridos de los perros
Silenciados los cantos de las lechuzas
Silenciados los balidos de las cabras
-Desolación perenne en los peñascos2
La pálida dama cantó jaque-mate
sus pies danzaron los pasos de la muerte
creyó haber ganado la guerra
sólo ganó una quimérica batalla
3
El ulular del viento se negó a la mudez
llevó a cada risco los cantos del poeta-pastor
el eco los repite desde entonces
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 781
Mil poemas a Miguel Hernández
4
La nana de las cebollas
moja los labios de aprendices de poetas,
van tras los pasos del pastor de Orihuela
5
Sus espaldas se niegan a ser cervices
rechazan los cayados
sus voces se unen
para no olvidar el legado del poeta-pastor de cabras
6
Los dueños del mundo
tiemblan detrás de sus mamparas
se creen poderosos
saben que son hojas
barridas por el huracán
saben que son los poetas
los que perduran en la voz del pueblo.
Beatriz Villacañas, España
PARA MIGUEL HERNÁNDEZ
VUELVO A MIGUEL
Vuelvo a Miguel, la sombra que atesora
es claridad abierta en el costado,
es una infinitud de lado a lado,
es una marcha audaz hacia la aurora.
Vuelvo a Miguel, a su canción sonora,
al territorio de lo no olvidado,
a su rayo fecundo no cesado
que alimenta mi voz en esta hora.
Así, con una fuerza y una pena
nacidas de esta tierra y esta vida,
la carne en el espíritu se vierte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 782
Mil poemas a Miguel Hernández
Peritaje de amor y luna llena,
vuelvo a Miguel, con la gozosa herida
que viene a rescatarme de la muerte.
Nora Medan, Argentina
RECORDANDO A MIGUEL HERNÁNDEZ
“ El odio se amortigua
detrás de la ventana.
Será la garra suave.
Dejadme la esperanza.”
de “El Hombre Acecha” (Miguel Hernández)
Lo descubrí una tarde
entre libros somnolientos,
me prendí de su mirada,
tenía los ojos abiertos.
Se entrelazó la tristeza
del poeta que aun muerto
cantaba sus emociones,
todo a través de sus versos.
Si quizás hubieses sido
solo pastor de tus cabras
y en el sueño de las letras
no te hubieras detenido,
no cantarían de goce
las olas del Mediterráneo
al escuchar tus estrofas
ni soplarían con fuerza
las ráfagas de tu viento.
Fue una senda gloriosa
que a tu paso dejaste,
desde Orihuela a Alicante
recorriste sus caminos
dejando huellas de azahares.
Quizás no pensaste nunca
bajo este cielo dorado
que de tu pluma exquisita
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 783
Mil poemas a Miguel Hernández
salieran tantos encantos.
Te condenaron a muerte,
pero ella no quiso llevarte
solo que tú te entregaste
cuando dijiste me marcho..
Y fuiste libre ese día
que resolviste andarte
dejando por mudo testigo
el dolor de tanta infamia.
Hoy te saludan los vientos
te recuerdan los paisajes
se pliegan a tu memoria
artistas y trovadores
que encontraron en tus rimas
la frescura de las sombras,
y te rinden con respeto
su más sincero homenaje.
Pepa Agüera Sánchez. (Bizkaia) España
A MIGUEL HERNÁNDEZ
No habrá carne que crezca en tus heridas,
ni mano que apaciente tu ganado.
Tus versos huirán por el sembrado,
cual cabras, de dolor despavoridas.
Tu pluma era una fábrica de vidas,
arrojadas al surco del arado.
Y una fuente de luz en tu costado
regó siembras de lunas encendidas.
No te quiero abrigar en el olvido.
Llevaré entre los pliegues de mi pecho
un incesante rayo, hermoso y fuerte
y un viento, libre ya y estremecido
que arrastre los fantasmas al acecho
del amor, de la vida, de la muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 784
Mil poemas a Miguel Hernández
Justina Cabral, Argentina
POETA
El mar azul no te borra,
el viento jamás te lleva,
y en mi corazón tatuada
tengo indeleble tu estela.
Te construí con cariño
con mi esperanza un planeta,
derribé muros de fierro,
moví montañas de arena.
Y te pinté con mis manos
en tu horizonte mi estrella
y en tus tinieblas Miguel,
enhebré cuentas de perlas.
MUCHACHITO
Aquel muchachito
pobre de Orihuela
leche... lechecita
vende por su tierra.
Junta en sus manitos
pizcas de dinero
pero solo quiere
en su frente un beso.
O será que quiere
escribir poemas
a las mariposas
y a la luna llena.
O será que el niño
se muere de amor
por alguna niña
de su corazón.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 785
Mil poemas a Miguel Hernández
Rosa Iglesias, Argentina
MÉRITOS del MUERTO SIN DESEO
A Miguel Hernández
Cuando el hambre de poder
de un sólo y ridículo hombre,
alfeñique en la nada,
cubre las calles y campos
de sangre ajena
se convierte en pecado mortal
la omisión de la memoria.
Hombres y mujeres,
florecidos de azul, florecidos de rojo,
se marchitaron al borde de los caminos.
Embelesó a muchos
con sus mentiras y con su terror
y a otros muchos machacó
con su garrote y con su intolerancia.
¿Cómo vamos a olvidar el horror que sufrieron
nuestros, niños y jóvenes, padres?
Nunca padeceré la enfermedad del olvido
por respeto, por amor
a todas las víctimas que lucharon
contra la injusticia y por la libertad,
fueran del bando que fueran
A los justos, a los ingenuos,
a los inocentes y a los desencantados
os recordaré cada día de mi vida
sin avergonzarme de ello.
“Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.”
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 786
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández
EL INICIO
I
Mediante la noche
perseguiré tu cara morena
y me atreveré a narrarte
la oscura mirada de mis ojos,
estréchame en tu luz universal
y dedícame el Norte de tu sentido.
Recoge el fruto que me desvela
y siembra al fin sus semillas
que la noche oscura se me adentra
para depositar en mí
el ocaso de su historia.
Una espada está abriendo
en mi corazón una herida,
me quisiera despertar de tanto sueño roto
y con tu piel vendarme esta hendidura
que se me resbala por ella
la alegría contenida,
con tanto caudal y hermosura,
que vacío de amor
mi corazón se queda.
Morenos tus ojos y tu pelo desgranado
oscuridad centrífuga que me cuaja la mirada
y sin esperar la muestra morena
de tus nocturnos ojos
resplandezco de luz almibarada.
II
Resentimientos se necesitan para amarte,
esperanza de corazón desentrañado…
universos de goces femeninos
reclutan mi alma de soldado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 787
Mil poemas a Miguel Hernández
Tuerce la vida la estrecha vereda,
morena de locos pesares
necesito de tus negros sentidos
la morena luz de tus labios.
Merezco, por femenina entrega,
la esposa de los muertos sin recuerdo.
Otras esposas me cortejaron
y ninguna tan amante.
Ondeando mi negrura sin estandarte,
océanos de turbias novedades
erigen los morenos ojos
de los muertos sin amarte.
III
Muerte loca y abandonada,
en mis entrañas forjaste
la negra bandera de tu inicio desangelado
y me amaste sin detenerte en mi costado
que derramaba sangre enfebrecida.
Uniste esta luz congelada
a mi pobre luz entristecida
y me robaste todo lo que anhelaba
sin darme tiempo a despedidas.
IV
Inicio, con este canto de dolor sin esperanza,
lo que me gustaría que fuera
una esperanza sin inicio.
Tú me devuelves con amor y con ternura
lo que yo perdí
sin encontrar en ello ninguna felicidad.
Tengo tanto que decirte
con este corazón desplomado...
que no fue suficiente
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 788
Mil poemas a Miguel Hernández
lo que escribí en ese mundo
de barrotes y ferocidad.
Ahora, con este encuentro desanimado
que me posibilita la expresión
hacia el mundo que tanto amé,
tengo la desbocada necesidad
de formar contigo
un nuevo medio de poesía viva
y no muerta como la he tenido hasta ahora.
Me encuentro muy a disgusto
en este estado de encarnación,
descarnada de la vida mortal,
que me dio la fuerza desenfrenada
de poner en mis palabras
la gran misión del sentimiento.
Me doy cuenta de que tengo
una gran oportunidad,
a través de tus manos y de tu forma
de sentir, lo que yo siento y he sentido.
EL NORTE
I
Norte que me persigue
desde la infancia
hasta la muerte prematura
Con la segura confianza,
de ser muerto para siempre,
me mataron los hombres
con su bravura
y con la convicción, equivocada,
de quien ama hasta la muerte
Ellos no saben cómo hirieron
mi corazón de águila enaltecida
y me obligaron a vomitar,
por mi boca desabrida,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 789
Mil poemas a Miguel Hernández
la sangre de mi corazón.
Nunca supieron lo que amaba
su deseo de ser hombres
porque yo también lo deseaba.
Lo tuve todo en mis pesadas manos
cuando tenía a mi novia enamorada.
Y reconocí la felicidad
sin tener miedo a perderla….
porque yo era un hombre
sin ganas de ser feliz.
No encontré en este mundo
otro dolor más grande
que el de perder la vida sin merecerlo
porque me di en cuerpo y alma
al gran sendero del vivir por vivir,
por derecho de hombre nacido.
Lo supe todo el día antes de mi muerte
y lo sentí tan fuerte en mi corazón de poeta
que me convertí del día a la noche
en un hombre envilecido.
Joven amante que era
y con la fuerza de tan amante corazón
se me quedó la alegría congelada
en ese mismo momento.
Morena, no comprendo
por qué, sólo yo,
fui tan amante de la vida para que ella,
tentada por la gente bella y enamorada,
me traicionara con tanto celo.
II
Norte condenado a muerte de hombre enamorado,
norte moribundo que me origina
la noche fecunda de morenos presagios,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 790
Mil poemas a Miguel Hernández
origen merecido por el borde
del frío gélido de tus labios.
Merezco por decreto, por motivos legales,
el noble nacimiento de los cerezos
moteados por la sangre
del enemigo deseado.
Tengo en la carne un antojo
fresco y joven como la bendita mañana,
un enorme fuego que rebosa
ligereza de nevadas victoriosas.
Otros fuegos me vieron merecer la muerte joven
por el joven muerto que me hicieron
derramo fuego de joven.
Obedezco al verano
que me incita a dar mucho hijo,
brota de mi vientre
la savia morena del hombre
que tiene justo los mechones
hechos noches del olvido.
III
Norte estrecho y moreno,
despiadada luz mortecina
que me robó la mujer y la vida
con rumbos desenfrenados.
Universo lejano y abatido
despoblado de presencias menudas.
Estoy sintiendo, en el centro de la muerte,
de la oscuridad su locura.
IV
Norte de grandes feminidades,
esposo de la luna poderosa,
juventud frustrada por la lucha
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 791
Mil poemas a Miguel Hernández
en la incitación de la noche desértica.
Opresiones desencadenadas
ocultan el rostro vencedor de los soldados
y resuelven a golpes sus dudas
manifestándose odios y nostalgias.
Morenos como la misma metralla
vencidos por la mirada del fuego,
tendidos sobre la arena encendida
a Dios proclaman su coraje.
Hombres deshechos a pedazos
despojos de corazones amantes
ocultos, sigilosos y valientes
frente a los gritos feroces.
Misceláneas de besos y abrazos.....
rocío de sangre femenina
dorada la noche se mete
entre la furia de los hombres.
Campo de batalla.....
jóvenes besos heridos,
edades de sombra masculina,
de regeneración inesperada.
Triste..., morena,
fiera del espacio esperada,
respuesta del sobrecogedor Titán :
tres hijos nocivos condenados.
V
Norte frenético.....lo real....
frenéticamente norteño,
regreso frenético
tréboles del barbecho.
Espacio querido,
querencia del cerezo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 792
Mil poemas a Miguel Hernández
Aquí..... verano frenético,
resaca del recuerdo,
norte del gramoso huerto.
VI
Norte grandilocuente,
motivos de novedades nocturnas
me llenan jocosas la fuente
para que yo beba a oscuras.
Méritos nocturnos,
jóvenes gozos perdidos,
en la noche de mis sentidos
me vuelvo viejo dichoso.
Joven morena
moreno joven
únete a nuestra hijada
de portentoso Norte.
Bendita noche muriente,
única nueva salida,
bendigo la muerte inocente
por las poderosas maneras
de hacerme padre en la vida.
LA LUZ
I
Morena de alta luz,
verano de delicada condena
estoy aquí
entre las ramas del árbol sin cobijo
que me deniega su sombra y su fruto.
Me revuelvo en este monte
de nubladas esperanzas
y me desdigo de mi mortal boca
desdichada y pesarosa.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 793
Mil poemas a Miguel Hernández
Únete conmigo al sentimiento fiel y digno
del que ama sin promesas...
¿por qué tener entre la vida y la muerte
una honra de puertas confinadas?
Lo noble fue desgajado
y lo moribundo fue joven...
Norte de jóvenes rojos....
fueron muchos los que murieron
y, ahora, Norte...horas de Norte
sin localizados senderos.
Únete morena
a mi novia y a mi huerto.
Lo que deseo es Norte
novedoso y sin venenos.
II
Morena,
frenética está la mañana....
unidos, como brezos en el monte
de este verano caliente,
brotes morenos de mi contento brezo marchito,
espigado en la morena pendiente.
Morena,
frenética está la mañana....
trópico de cáncer prominente,
nerviosos los prometidos brotes
agudizados y voraces
como bocas de serpientes.
Morena,
frenética está la mañana...
urbanizada la bondadosa junquera,
representan los grotescos bordes
ubres norteñas
Como yodosas tinturas
representan las junqueras
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 794
Mil poemas a Miguel Hernández
la elástica línea horizontal
de las frondosas novicias
de las eras.
No tienen virgo
las morenas juventudes,
los hijos de las novicias castas
erigen los castigados brotes
de su moreno brezo.
III
Morena....
tú eres frenéticamente colorada,
Tu risa...
fusil de corazones desplomados,
bodega del esposo breado.
Frenesí candente de mi exilio,
reo del agreste motivo,ternura incierta
del corazón victorioso que me dio
bosqueados fuegos del verano.
Has regresado
hija del bocado sereno...
regreso fervoroso de mi herida,
fisura ardiente sin tregua,
sarcástica luz despedida.
Furiosa fisura... gratifícame,
saquéame el corazón, despójame de joyas,
elige mi norte desdichado
y requisa de mi rosa de mayo
las hojas.
Negrura gigante de mis ojos.....
verde martirio asesino,
fiera de aspecto desconocido
se ensañó con mi pueblo torpe.
Eremita de los tiempos me siento
desde los pies a la boca.
Fermento en mi verano riguroso,
untado de efervescentes mantequillas,
reposando en incierto santuario.
No tengo ni ansío el virgo
de los condenados a muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 795
Mil poemas a Miguel Hernández
IV
Nervios escritos sobre los gozosos papeles,
serpientes robustas
escuchando mis pasiones
se deslizan como orugas venenosas
por mis venas.
Espero la luz colectiva,
la luz frenética y, morena
únete a mi muerte grandiosa
y hazme con tu luz una vela.
Permite mi loco fervor,
novedoso y meritorio,
fermentar como una hogaza de pan
moreno y sombrío
para hacer de estas migajas
un moreno pan bendito.
Tengo en la boca una fuente
que se derrama a caudales
y se resbala la muerte
entre sus visillos trenzados de mares.
Lo repito tantas veces
en mi cerrado corazón
que hasta los muertos me oyen
dándole gracias a Dios.
Me brota en el pecho
una herida fervorosa, llena de algas
y me dicen las nocturnas
morenas noches sin alba
que me tengo que morir
sin esperar a mañana.
No me importa, tengo suerte.
No sería muerto si lo fuese.
Muerto vivo, única muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 796
Mil poemas a Miguel Hernández
EL HUERTO
I
Mira cómo se ha encendido mi huerto,
mira esta portentosa llama Josefina
desde que la motearon los crecidos deseos
fresares se me hicieron los hijos.
Mírame sentado a la puerta de
esta casa, pintada y vacía,
festoneando mis sentimientos
con las frenéticas guirnaldas de mi corazón.
Atiende este corazón dadivoso
a nuestros bordados eternos,
tejidos...con los hilos de mi ausencia
enhebrados....en tu aguja sedienta de querer.
Resbalan deshilvanados mis sueños
entre tus manos hacendosas y morenas
y eclosionan nuestros besos en el aire
derramando la luz de tus penas.
Me has cosido el alma a tu pañuelo.
Festejando las noches en tu cama
somos los deshilachados versos
que platican sobre la almohada.
Escógeme de nuevo
y bendíceme con avaricia,
triste vengo desde la mañana
a ponerme familiarmente triste
Rescata de mis ojos tu imagen,
devuélvele a los tuyos el brillo.
Desojada tengo la camisa,
sedientos de botones los ojales.
Crecidos los mustios laureles,
de riego sudoroso y frío
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 797
Mil poemas a Miguel Hernández
en las hondonadas de mis sienes,
me quieren abrochar la muerte a la vida
sabiendo que no puedo verte.
II
Arpegios febriles
desfilaron por mi casa
y me dijeron los disonantes barbechos,
versados en jaras y amapolas,
que la nueva cosecha estaba lista,
a punto de desgranar....
¡Santísima Virgen...!
III
Feroces bordones, feroces.
Pórticos del Señor de los Cielos.
Haré con mi muerte un Norte
y con mi Norte mil huertos.
IV
Respóndeme risa de erguida garganta.
Arrestado por tu noche sin luna
estoy hermético, mi sal está jocosa.
Estoy hermético y feliz de nortes esperanzados...
ternura demostrada, verdadera y deseada.
Estoy fervoroso y constante...
viento fresco y grisáceos montes,
serpientes de noctámbulos nortes
frenan mi cauce de río.
Retrasadas noticias no tengo....
respóndeme a mi llamada,
fíate de mi faena de hombre
y destétame de los pezones gastados.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 798
Mil poemas a Miguel Hernández
Ondéame en tu vigoroso porte
depende de ti mi letargo enlutado,
que aspectos de místico orden
nacieron ante su vacío deseo.
Qué rastreados sentimientos,
cercados como grises sarmientos.....,
brisa fastuosa de Agosto
que me entretiene esquinado y confundido
Verano saqueado.......del hortelano sin corazón.
Rotos los lazos del tiempo,
fecundan estrepitosas en los pozos de mi alma
edades veraniegas con retoños y racimos.
EL MÉRITO
I
Escote del poema suelto,
desabrochado goce sin riendas,
estoy pidiendo, sin tregua y a gritos,
las desaforadas tentaciones
de los que renunciaron a la vida.
Amparado en el tibio renacer
de los que no tienen flores en su tumba
y con el precio pagado por la muerte sin deberes,
me desagravio del todo de los pesares terrestres.
Puesto en línea con los astros
me declaro insolvente...
y si me piden a deudas un meritorio pago
no debieran darme un clavo
para pagarles su afrenta
pues estoy en un redil
de hambrientos cascabeles.
Si supieran que los veo a mordiscos
en mi frente
se morirían de pena;
puestos todos en el suelo
con la cabeza sin dientes...
¡¡¡ajos todos sin remedio!!!
Y me pongo entre laureles
el mérito que me desvela de ser hombre
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 799
Mil poemas a Miguel Hernández
en el muerto, muerto, muerto
amparo de los malos hombres
que me vieron morir por la boca
y no se dignaron a rezarme.
Estoy triste
de tantos locos sueltos en mi casa
y no puedo más que deciros
que me quedan muy pocos amores
en este mundo.
Tengo la gran amante a mi favor
y ella me quiere sin desvergüenzas,
pues es como tener de verdad
en mi corazón de guitarra
una sola cuerda para hablaros.
Y esa cuerda
que se me pone tensa y enarbolada
me dice sin vibraciones ni poemas
que la vida me dejó de retirada en retirada....
y no cubrió mis espaldas
el ancho sentir de mi pueblo.
Fue muy doloroso
sentirme tan abatido
y mis puños se volvieron
semillas cuajadas de esterilidad.
Pude tener el amor, la grandeza y la alegría
de haber sido un hombre sencillo y alegre.
Pero tuve la mala fortuna
de los que nacen en un mal día.
Y recibí sin merecer, con el látigo de la tortura
desencajada y amanecida, en mi amor de hombre,
la amargura de ser un loco enamorado de la vida.
Me dieron muerte por enfermedad
y se lavaron las manos con mi sangre.
Es como pedirle al gran Dios
que perdone a los más crueles.
Sin derecho a perdonar me quedé
y no tuve en mi corazón,
tan cerrado por su odio,
la suerte de ser un Santo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 800
Mil poemas a Miguel Hernández
II
Amante del corazón herido,
me volvieron la espalda con el coraje
de los que no son amados por la vida.
Yo sí que tuve un gran amor
y fue tan imperioso en mí
el sentir que me daba corazón y boca
que me deshice en palabras y en amores.
Y no como esos hombres que se entregan
a pasiones de sueños sin esperanza.
Todos mis sueños pudieron ser realizados
pero nadie se impuso a mi fatal desenlace.
Y no es que los hombres
tuvieran prisa por acabar conmigo,
fue la muerte quien me dio nupcias
por su terrible embarazo.
Y ahora, yo, que no tengo hijos de la muerte
me siento muy engañado por ella.
Me siento muy solo en este cuerpo
sin amor de mujer que me negó la vida.
A muy tiempo amante
debo este encuentro
de dos almas que parecen
conocerse desde siempre.
Estoy muy emocionado de escribir de nuevo
en el papel que amé desde niño.
Ese es un buen regalo
para mi próximo sentimiento
que debe nacer desde tu cuerpo
para darle cauce al mío.
Amor de menuda proximidad es el nuestro
pero tan grande que no se puede describir;
estoy sintiendo tan bien tus entendimientos
que me convierto en mujer
a fuerza de abrazar tus manos.
Estoy entregado a este mundo del espíritu
y sé que algún día
me darán la fuerza de la carne
para escribir de nuevo
sin ninguna medida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 801
Mil poemas a Miguel Hernández
III
Querida, fui al recuerdo
de muchos cientos de personas en mi casa
y no me vieron unido a su deseo
de tenerme entre su querencia material.
Cuando me di cuenta
de que no era a mí a quien buscaban
sino a lo que fui en tiempos pasados,
sentí, sin buscarlo,
un estremecimiento frío en mi espíritu.
Supe enseguida
que no eran capaces de presentir
mi apariencia descarnada y me pregunté
a dónde creen que se hallan los muertos.
Estuve tantos días por aquellos andurriales...
Se astilló el resto de mi corazón,
rememoré los días que,
cansado de presenciar las calles,
viví entristecido,
y noté de nuevo en mi querido rincón
la cálida luz que iluminó mis poemas.
Abstúveme de decirles nada.
desde mi estado severo y desengañado.
Repetí,
en mi verano esperanzado,
soledades antiguas
reposando en mi anaquel
contento, quieto y callado.
EL REGRESO
I
Arsénico celeste que embadurna mi alma
cimentada entre los matorrales del campo verde y santo.
Con reservas me remito a los fríos tendidos
de mi plaza maloliente....
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 802
Mil poemas a Miguel Hernández
Centenares de notas tomadas al asalto
han trampeado mi vida y mi horizonte.
Cimentarán cesáreas de hombres sin garganta
y no sabrán apreciar el brillo de sus bocas
en sus plumas.
Recitarán sus versos a docenas
rescatando el viento de Marzo
que me enterró entre azucenas marchitas.
Centenario de mi nacimiento bordeado
de moribundas conclusiones sobre mi corazón
amante y destetado de la amargura
que me alimentó ungiéndome de noches.
Serenos mayorales vendrán ese día
a celebrar mi luna nueva en mi casa.
Recogeré las orejas y el rabo
del toro que me dio muerte,
quieto y manso, sin debatirme.
¡¡ Santo Cielo!!
qué mañana tan espaciada y abatida....
merodeó por mi celda la guadaña
que amortajó mi boca y mi herida.
II
Barriendo con ternura esta semana
las semillas que esparcí
engendrando tránsitos seculares…
ansiedades gestaron estas siembras
de santa simiente que repartí por mi boca.
Anécdotas de barbas ingeniosas,
heráclitos dentro de muchedumbre espontánea
verifican mi testamento y mi cementerio
sesgando mi verídica naturaleza.
Miguel Hernández me llamaba
y nadie sabe cómo me llamo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 803
Mil poemas a Miguel Hernández
Ancladas esmeraldas de sencillo porte
festonearon verdes como esperanzas
mi desnudo corazón.
Y me cambiaron el nombre
para llamarme en silencio
al otro lado del cementerio
que vosotros me pretendéis.
Todos llevamos dentro de nosotros la llama de Dios,
frenesí viviente que nos da la vida
sin pedirnos nada a cambio.
¿Cómo pretenden que esté tan muerto
como ellos están?
Vivo.
Buscadme entre las amapolas y los trigos
dejadme la esperanza que os pedí
no me enterréis por debajo del olivo
que tanto amé desde mi altura.
Resplandece mi geranio satisfecho
desmembrando con su risa mi amargura
y soy hombre de pie firme y altanero
desde que nací, os lo juro.
Estoy de novio junto a la higuera
que su blanca sombra me procuro.
Sin desdeñar necesariamente la junquera
me pongo afeminado varonilmente
para refrescarme con sus jugos.
III
Aspersión amarilla del sentido,
relojes esperanzados,
cereales del tiempo,
eras de poderosa suerte
.
frutos del mirador,
asteroides dichosos,
grillos de crecientes lunas,
agrestes noches cerradas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 804
Mil poemas a Miguel Hernández
astros de real compostura,
breas del casto verano,
sagrados bordones del alma:
Como querubines fragmentados,
en mi cántico nocturno
realzo la voz del mirlo enjaulado,
esperando, mi retorno al mundo.
Atanasio Die Marin, España
PENSAMIENTO DEL AMOR QUE RUEDA EN UNA MENA
Amor… por ti escribo.
Por ti tomo esas pastillas que ponen freno a este cuerpo,
que como tú sabes, tiende al desvarío.
Por ti, no dejaré que las fatigas de muerte me venzan.
Por ti, no dejaré que los miedos, ni las rutinas puedan conmigo.
Por ti, no desfalleceré.
Por ti, no dejaré de luchar.
¡ Ay amor!... por ti convertiré en realidad los sueños.
Por ti ayudaré a todo el mundo y haré posible los deseos de tanta gente.
Y para ello, mi amor…
Luces o nieblas, dios, el diablo, la naturaleza misma, puso en mis manos
la manivela de una mena, para que con sus vueltas y más vueltas
fuera forjando en mi cuerpo de niño el corazón de un poeta.
CANTO DE LIBERTAD
Luna, luna, luna… siempre sin desfallecer dando vueltas y más vueltas a la tierra
para que la podamos ver.
Desde esa libertad en la que nadie cree, te escribo.
Desde esa libertad, que la gente desconoce por barroca y por abstracta; desde esa
libertad repleta de burbujas de pasión; desde esa libertad individual con la que el
alma conspira, devora y destruye; desde esa libertad que es tuya y es de todos; desde
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 805
Mil poemas a Miguel Hernández
esa libertad que se respira en las noches y en donde todos los gatos son pardos, yo te
escribo y te envío, como hombre libre mis mensajes.
Desde esa libertad que tanto necesita de censos y consensos; desde esa libertad que
no tiene territorio, ni forma parte alguna de una administración; desde esa libertad
que no tiene leyes que la regulen; desde esa libertad que relampaguea en el corazón
por derecho propio; desde esa libertad que exige el derecho de autodeterminación de
las casas y los pueblos; desde esa libertad que permanece sola y sin dueño, ni señor
del lugar que la proteja; desde esa libertad en donde las ideas no se queman en las
hogueras y que son la senda por donde van y vienen los hortelanos, como Miguel
diría… desde esa libertad, yo procuro escribir cada línea y darle forma a los sueños.
Desde esa libertad que tú y yo conocemos; desde esa libertad que es pequeñita y que
huele a romero, a pimienta, a hierbabuena; desde esa libertad que está justo entre tú y
yo como una frontera: desde esa libertad de racimos y fraguas; desde esa libertad que
abre todas las puertas; desde esa libertad con la que los cautivos sueñan y que los
corruptos y los empresarios sin escrúpulos asesinan a diario; desde esa libertad que
los ecologistas persiguen y que los “grafiteros” cuelgan de las paredes; desde esa
libertad tan maltratada y tan amenazada, yo te declaro mi amor todos los días sobre
un cementerio de huesos y sobre un jardín de cavilaciones y de muerte.
Desde esa libertad, que no tiene nombre, ni apellidos; desde esa libertad tan
desvalida y que parece tan poca cosa; desde esa libertad tan desprotegida; desde esa
libertad que proclama al viento que no existe cárcel para el hombre; desde esa
libertad tan estúpida, tan lunática como el falso llanto de una arpía de ojos rojos y
habitante de las rocas que se describen en los relatos más ocultos por el tiempo y la
desgana; desde esa libertad que solo a mí, a ti y a todos ellos pertenece; desde esa
libertad que me acompaña cogida del brazo; desde esa libertad, yo dejaré un beso en
el desfiladero dulce de tu boca y en el páramo profundo de tu alma.
Desde esa libertad que me llega otorgada por los misteriosos habitantes del país de
los acuarios; desde esa libertad tan ultrajada por los soldados y por mercenarios que
vinieron de Marruecos; desde esa libertad tan olvidada por reyes y diablos; desde esa
libertad violentada tantas veces, yo me muero y le grito al mundo lo mucho que te
quiero y lo mucho que de ti espero.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 806
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonio J. Sánchez, España
Nombre
Me llamo escarcha, me llamo sangre,
me llamo lluvia y llanto y caracola;
tantos nombres para no ser nadie,
para ser sólo unas manos
en la azada, en la pluma o en el arma.
Me llamo pueblo, o trinchera, o qué sé yo;
que por el roto
que me abrió el rayo en el costado
me fui derramando
y ya no me quedan palabras,
a ninguna pertenezco.
Pero pronto se extinguirán los ecos,
los gritos;
germinarán nombres nuevos
no de voz
sino de luces, de tierra y de azucena,
y uno de esos
será mi nombre.
Malu Otero, Brasil
INDRISO A MIGUEL HERNÁNDEZ
La huerta, su patio y la montaña...
Eso tenía que ser el comienzo,
Pastoril, hoy, su gente, mañana.
La huerta, su patio y la montaña...
Luego se convierte en un profundo
Sentido por lo colectivo, futuro incierto,
Teatro y poesía que gana el mundo.
Madrid, la lucha por su gente, España...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 807
Mil poemas a Miguel Hernández
(POETRIX)
Ya lo decía el poeta...
"Tristes armas, si no son sus palabras."
Arma poderosa que supo utilizar,
Ni la muerte lo pudo callar.
EL POETA DENUNCIA
Malu Otero
El poeta denuncia que el hombre
Acecha al hombre
Y su denuncia es contundente
Vivir la miseria y el hambre del alma
Dolor que aniquila, que maltrata
Cuando falta la solidaridad
De forma mezquina
El hombre acecha al hombre y lo extermina
Ester Monke, Argentina
Como pétalos.
(a Miguel Hernández)
Vuela…
Y sus alas se elevan,
saetas ignoradas
de plumas grises
que el cielo oculta.
Llora…
Y su imaginación trae,
recuerdos de fusiles
de oscuras trincheras
que la tierra oculta.
Sonríe…
Y su cuerpo añora
calores de cocina,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 808
Mil poemas a Miguel Hernández
manos de madre
que desgajan cebollas
como pétalos.
Rolando Revagliatti, Argentina
A Miguel Hernández
Descienden de los silbos
unos rayos de agua
a los cometas
Ascienden de las décimas
y en ronda - ¿fríos? –
soles cenicientos.
Leticia Quemada Arriaga (Oropéndola)México
Versos de pan
De su seno brotó la espiga,
Orihuela la vio crecer,
el cielo claro en su mirada,
el suelo firme a sus pies.
Llega el tiempo de segar,
las hoces se ciernen sobre la mies,
han roto el grano,
lo han molido y tamizado.
El trigo nevó en tus manos,
con agua y sal de tu frente,
con agua y sal de tus ojos,
tu conciencia y razón amasaron.
Hay un horno carcelario,
de adobes de soledad,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 809
Mil poemas a Miguel Hernández
guijarros, ceniza y jirle,
de tristeza recubierto.
En el crepitar de la leña,
al rojo vivo en tus venas,
con ascuas en tus labios,
la hogaza de pan hornearon.
Con las migas de tus letras,
un mendrugo de tus versos,
el corazón se alimenta,
de tu pan se nutre el pueblo.
Miguel, tu poesía no está muerta.
Ester Ramos Sánchez, España
Próxima Parada
Viaje por la vida
miles de paradas
sueños, realidades
ilusiones y trampas.
Esencia de momentos
que a solas me acompañan,
evocando un pasado
de risas y lágrimas.
Horribles pesadillas
recuerdos de infancia,
tiempo de inocencia
de duendes y hadas.
Con cuanto sufrimiento,
dolor en el alma,
esta vida cruel
me regala.
En mi próxima parada
Buscaré en el silencio la palabra.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 810
Mil poemas a Miguel Hernández
Ángeles Garrido Garrido. España
Tú eres libertad
Tú eres libertad,
mi esperanza.
Tú eres libertad,
la fuente de agua fría
donde yo bebo,
cuando en el alma tengo
sed de fuego.
Tú eres libertad,
mi más hermoso consuelo.
Tú eres libertad,
el camino para ir
donde yo quiero.
Tú eres libertad
la razón de vivir entre rejas
y ser custodiado por hombres,
para que no vuelen contigo
y te lleven por el mundo entero.
Moribundo
Moribumdo quisiera yo estar,
para no ver lo que veo,
veo barrotes negros
y lágrimas sin consuelo.
Moribundo quisiera yo estar,
para ver solo el camino del cielo,
un camino ancho,
donde la libertad vuela
sin tro`pezar con nada terrenal.
Morribundo , quisiera yo estar
y en estos momentos,
que mis labios solo pronunciaran
las palabras de mi pensamiento.
Libertad, libertad.
Libertad para mi pueblo.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 811
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel entre aromas.
Miguel naciste entre aromas
de leche , queso y machos cabrios.
Tú traías tu aroma,
el aroma de poeta,
el aroma espiritual ,
que los poetas tienen
en toda su persona.
Tu hogar era humilde ,
era remanso de paz,
en el reinaba el amor,
y ese amor , se grabo en tu corazón,
del que brotarón ramas.
Ramas, de amor para tu familia,
ramas de amor para tu rebaño,
ramas de amor para las letras,
que corrian por la sangre de tus venas,
rama de amor para tu pueblo
para el que querias libertad
y por ello, perdiste la tuya.
La encontrastes después,
en tu enfermedad, ella en poco tiempo te libero,
de las cadenas, dandote alas para que volaras al mas allá,
con el aroma que naciste.
Aroma de leche, de queso de macho cabrio
y de poeta inmortalizado.
¿Donde vas Miguel?
¿Donde vas Miguel?
voy a por la libertad
una libertad hermosa
con alas blancas,
Para que todos volemos
en nuestro pueblo,
sin que nos ataje nada.
¿Adonde vas Miguel sin que yo vaya.?
Voy a quitar los barrotes,
para que la libertad no tropieze y vuele,
con sus alas blancas
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 812
Mil poemas a Miguel Hernández
y todos cantemos con alegría
una libertad sana.
¿Adonde vas Miguel sin que yo vaya?
Me voy al cielo cabalgando en mi libertad.
Cantando con voz trémula, libertad , libertad para todos.
Libertad con alas blancas.
Juan Pablo Goñi Capurro, Argentina
A MIGUEL
Cuántos recuerdos traes
de amor, vida y muerte.
Cuántas noches de rejas,
sueños ahogados en la corriente.
¡Cuántos vinos hemos gozado juntos
sin habernos enterado!
¡Cuánto hemos sufrido
al ser del mismo palo!
¿Qué tristezas aún aguardan
que las vayamos probando?
¿Qué mujeres aún persisten
en jugar a enamorarnos?
Tus recuerdos son de toros, huertos y herrerías,
los míos juegan fútbol, barajas y enredaderas.
Y se encuentran de pronto cantando
los versos lastimosos de un poema.
Nos conocimos tarde,
ocupando distintos hospedajes.
Desgarradora o gloriosa,
quién imagina tu suerte.
Yo sigo peregrinando
entre el amor, la vida y la muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 813
Mil poemas a Miguel Hernández
Olivier Herrera Marín, España-Francia
SOMOS LA VOZ
DE LOS HIJOS DE MIGUEL HERNÁNDEZ
Ante la tumba del Presidente Manuel Azaña
Y del maestro Miguel Hernández
El Poeta del Pueblo más comprometido
Y humano que dio la España del siglo XX
Vengo a proclamar solemnemente.
Somos la voz de los hijos de Miguel Hernández
Que se unen codo a codo mano a mano,
Para hacer huir espantados de sus diablos
A quienes aún hoy, siguen alabando al genocida,
Al Caudillo de España por la Gracia de Dios.
Somos la voz de los hijos de Miguel Hernández
Que se unen codo a codo mano a mano,
Para denunciar a todos los manipuladores
De la historia de España, que aún hoy, se niegan
A condenar los crímenes de lesa humanidad.
Somos las voces redivivas de Miguel Hernández
De Federico García Lorca y de Lluis Companys
De León Felipe y de Antonio Machado,
Que dieron su vida por el amor y la vida
Y claman desde su tumba pidiendo justicia.
Somos la voz de los hijos de Miguel Hernández
Presta a denunciar el régimen de terror e infamia
Asesino impúdico e impune de Las Trece Rosas,
De Miguel y Federico, del arte y de la poesía,
Del trino de los mirlos y los ruiseñores de España
Somos la buena gente de Valencia y Orihuela,
Galicia y Euskadi, Andalucía y Catalunya…
El norte y el sur de la España laboriosa y culta
Y unidos defendemos El SER de sus pueblos,
Sus lenguas y culturas, identidad y dignidad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 814
Mil poemas a Miguel Hernández
Somos la voz de los hijos de la lluvia y el sol,
La voz de los hijos del mar que murieron
Ejecutados en las tapias de los cementerios,
Arrojados a las cunetas y las fosas comunes
Por defender la paz, la tierra y la libertad.
Asesinados en las sucias y lúgubres mazmorras,
A la sombra alargada de las letrinas episcopales
Y las tronas tronantes de sus oscuras catedrales
En la España nacional-fascista cera y de sacristía
Alcahueta y timorata, hortera y mojigata.
Esa España cutre de charanga y pandereta
Negra y azul, necia, cobarde e hipócrita,
Esa inculta de alta cuna del PP de Aznar
Y la Botella, Esperancita y Rouco Varela
Que juzga y condena todo cuanto ignora.
Esa España beata, cavernícola y casposa,
Nacional fascista, imperial y excluyente
De Rajoy, el de los hilillos sin importancia,
Que le teme a la luz y a los taquígrafos,
Le teme a su sombra y miente más que habla
Esa España nacional-imperial y excluyente
Que aún anda buscando la piedra filosofal,
El Dorado y su destino en lo universal
Por los desiertos y los luceros del alba
Donde cabalga el hambre y la muerte.
Los Cien Mil Hijos de San Luis, sin cabeza
Y los nietos de Fernando VII, el vil Borbón
Sin alma, todos los nostálgicos de la falange,
Todos los descerebrados y fieles eunucos
De la momia del Valle de la Infamia.
Somos la voz de los hijos de Miguel Hernández
Que se unen codo a codo mano a mano,
Para hacer huir espantados de sus diablos
A quienes aún hoy, siguen alabando al genocida,
Al Caudillo de España por la Gracia de Dios.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 815
Mil poemas a Miguel Hernández
Somos las voces redivivas de Miguel Hernández
De Federico García Lorca y Lluis Companys
De León Felipe y Antonio Machado,
Que dieron su vida por el amor y la vida
Y claman desde su tumba pidiendo justicia.
María Ángeles Fernández Jordán, España
HOMENAJE A MIGUEL HERNANDEZ
EN EL CENTENARIO DE SU NACIMIENTO
POR UNA MUJER...
Toda la entrega es poca
a quien todo lo entrega,
todas las fuentes, rosas
y todas las esperas.
Todo lo que es finito,
todo lo que es verdad,
y todo lo infinito
que grita libertad.
Hermano, amigo,
quiero que resurjas
en lo vivo.
Hermano, hallado
en el trabajo y en
el verso amado.
Nada que te atestara
golpes con su poder,
nada que te llagara
ha de prevalecer.
Nada que sea la nada
sin barca que varar
flotará sobre aguas
vitales de la mar.
Poeta, Miguel,
todo lo que nos diste
no se fue.
Miguel, estás
encendido en mi frente
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 816
Mil poemas a Miguel Hernández
y en mi paz.
Toda la entrega es poca;
piel de toro y sudor,
en sueños que se agolpan
en ansia y en dolor.
Todo lo que ha ocurrido,
todo lo que ha de ser,
llevará tu latido
en cada amanecer.
Miguel, hermano,
de armas de versos de
puñal de nardos.
Hermano, Miguel,
alma que hospeda en almas
de mujer.
Isabel Ascensión Martínez Miralles, España
EN LOS RAMOS, MIGUEL…
En Los Ramos, Miguel, como del rayo,
también como del rayo se me ha ido
esa alma espléndida y grandiosa
con quien tanto quería: la madre mía.
Siento tu rabia y tu dolor cercanos
al oceánico abandono de mi vida
y aún no calibro la hondura de esta herida,
dilatada en los ecos más tempranos.
No reconozco al padre, a los hermanos,
todos parecen emprender la huida.
Por llamarlos familia soy suicida
y mi llanto empaña la voz de los arcanos.
De pronto me quedé sin las raíces,
navegando en una alma apuñalada
que pena por los tiempos más felices:
cuando la risa de mamá volaba
sanando los errores y deslices
de todo el que en su abrazo confiaba.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 817
Mil poemas a Miguel Hernández
Ángela María Valdes Guzman de Buga, Colombia
A MIGUEL HERNANDEZ
Traigo poemas, traigo semillas
de tu tristeza, verso y canción
y en el recuerdo traigo el rebaño
que apacentabas niño pastor
Niño yuntero llegó la guerra
y de la tierra, ella te arrancó
niño de miel, de juego y barro
tus ilusiones tambien robó
Fuíste juglar y en tu garganta
un canto libre ayer floreció
y, siendo niño, llevaste en hombros
de los guerreros la gran pasión
Fuiste vocero de los húmildes
cuando la guerra te salpicó
con sangre y fuego niño yuntero
la tiranía te condenó.
Sonia Nogueira, Brasil
*Hernández no Cárcere
Preso por ideias republicanas
Viveu Hernández sua história,
A palavra companheira das horas,
Deu-lhe ânimo sem vitória.
Trinta anos sua sentença,
A dor marcada no semblante
Fez do poeta simples, o gigante,
Marcando época e lembrança.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 818
Mil poemas a Miguel Hernández
Lembrança que o tempo revive
E no jovem a firmeza da luta,
Fazia versos sem mera disputa,
Para afagar a dor e não sobrevive.
Deixou sua herança e singeleza
Moldada nas folhas que rubrica,
Seu pensar, seu lema e fabrica,
Páginas simples com graça, beleza.
*Hernández Pai Afetivo
Manuel Ramon, o filho primeiro,
Pela força o destino o separou,
Foi-se aos cinco anos, não vingou,
A dor no peito tingiu angustiante.
Manuel Miguel o filho segundo
Distante seu coração em silêncio
Pedia a Deus proteção no exílio
Para a amada, cebola e pão fecundo.
No sangue a cebola para alimento,
Revela o desespero da mãe contrita,
E nasce o poema “Lullaby Cebola"
Narra à palavra, coração palpita.
*Homenagem a Hernández
Louvo-te jovem Hernández,
Pela luta e garra os teus ideais,
Ao poeta que lutou com honradez,
E vida breve entre os mortais.
Quis o destino, não sei de fato,
Tua ausência voa além-distante,
Mas tua presença vive como jato
Alcança lugar, brilho, diamante,
Nas páginas ecoo tua palavra
Dos livros, nos olhares virtuais.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 819
Mil poemas a Miguel Hernández
Mil Poemas de empate aos iguais.
Lá do alto teu sorriso é culto
Que esparrama sob teu indulto
Luz cintilante colhendo tuas lavras.
Gladys López Pianesi, Argentina
Vientos del Pueblo
Fue en Orihuela cuando los vientos,
abrevaron su luz, al poeta de la tierra.
Su cuna, las estrellas y la luna.
El pedregal, las cabras y la lluvia.
Su ermita, los libros y sus manos.
Y fueron naciendo “Perito en lunas.”
Su viaje a Madrid: “El rayo no cesa”.
Su ilusión y su amor, delirio, soneto…
Las Tertulias, Neruda, Alberti, Delia
Cernuda, Federico y más poetas.
Tú con el Teatro al pueblo como reto.
El hambre puñal sin razón ni corazón.
“Vientos del Pueblo” se hizo tú voz.
Allí los títeres movían sus hilos quietos.
Tú pluma testimonio y lucha del suelo.
“El hombre acecha”, tu rumbo y vuelo…
Te guió al 5° regimiento tu protesta…
Los vientos huracanados, tú prisión
De Orihuela, volaste a la luna en celo.
Tú canto, viento de paz, emocionado.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 820
Mil poemas a Miguel Hernández
Mariella Köhn, Perú
A MI AMANTE MIGUEL
Profunda tu mirada, tu valor, tu miedo y tu verso
Me reconozco en la pasión de tus poros por lo eterno
Te reconozco arcángel de luz para la vida y la historia
¡Miguel! que jugaba en las rejas, la rayuela
Que jugaba con dardos, lirios y azucenas.
Entraste en mis sueños sin aviso, fuiste mi amante
Sentí tu beso, tu mirada, me convertí en Mar para tu lucha.
Me inspiraste, fuiste fusil en el verso y desgarro en mi voz.
Me vestí de época para ti,
cuando aún mi espíritu volaba esperando mi cuerpo.
Cuando te condenaron a muerte, sufrí, sufrí mucho
Y mi alma sin cuerpo sacaba pancartas en el cielo para animarte.
En silencio curé tus heridas, en el dolor, se retorcía mi espectro
¡Ay Miguel, Miguel! Cuanto te amé.
Rossana Arellano Guirao, Chile
AUTORRETRATO DE UN POETA MUERTO
( a Miguel Hernández)
Yo que he visto y padecido sufrimiento
que los ojos han perdido hasta sus ejes
entre enfermos de ocasión y de los otros,
aún levanto mirada de impaciencia
y dibujo en lo impreciso de mi muerte
los contornos que entretejen mi pasado.
Así voy en lo indefinible de lo oscuro
como médium inclinando la pupila
que se abre a lo terreno desde el borde
revelando a la mirada en sus perfiles
lo que vemos o no vemos en detalle
al reflejo o al contraste de la vida.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 821
Mil poemas a Miguel Hernández
Fragmentaron el motivo de mi tiempo,
un señuelo despiadado fue la clave,
en esbozos visionarios superpuestos,
que en mariposas nocturnas se tornaron
como insectos que muerte simbolizan
capturando la vida entre sus alas.
Quien acecha el color de los asombros,
Quien apremia la luz del torbellino,
no merece evocar los horizontes
que trazaron sus líneas sobre el trigo
convergiendo en la fuga de los límites
porque en cruda realidad ha interferido.
Dejo aquí proyectado mi retrato
he dispuesto una aureola de misterio
por si yerra el ojo mas amado
y se encuadra recogiendo mi abandono.
Yo decoro la luz y su contraste
y mi azul va y resalta en pleno rojo.
Blanca Garnica, Bolivia
DICCIONARIO LAROUSSE
Notas escolares de Miguel
fRANCO
sin mayúscula inicial :
CORDIAL como don Pancho el peluquero
FAMILIAR,como mis tios y primos
ESPONTANEO,como los cacareos del corral
LEAL,como mi perro ovejero
CAMPECHANO,como mi padre,como yo
Franco
con mayúscula inicial
el apellido de Francisco :
alzado contra la República (enemigos)
en tiempos de guerra (Segunda Mundial)
militares,Marruecos,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 822
Mil poemas a Miguel Hernández
figura del GENERALISIMO
mirando al sesgo.
CONFESIÓN
Y en mis manos de niño
- ruecas de luz ovillaba las nubes de mi pueblo
pequeño y soleado
Manos ajenas
enlutaron mis ojos
con puerta y ventana mudas
sin el sol de la palabra.
EN LA CELDA
A Miguel Hernández
Volaba con el aire
hacia el amor del alba
y los muros latian
y las risas del niño
salpicaban de sol
los ángulos del cuarto
vértices de mis ingles y costados
Oh morado dolor
morada o negra celda
galera exangue
maullan los gatos lejos
las balas cerca vienen
para pezcarnos
con el temblor del pez.
VIA CRUCIS
Sin árbol ni río claro
ni tierra que acoja al trigo
ni techo que cubra el sueño
Como en Irak y Kabul
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 823
Mil poemas a Miguel Hernández
Sin temor al sol se quema
tejado y pan cenizados:
éxodos de la tierra
De Orihuela hasta Comala.
LA GUERRA Y LA PAZ
Para Miguel H.
Ah dolor, me decía,
se avinagra la naranja
de la tierra
Mientras la luna nueva
me miraba
con su sonrisa de agua.
Alfred Asís, Isla Negra-Chile
“VERSASÍS” a Miguel y su entorno
Higuera
como navegando
cual sútil galera
nos fuimos todos encontrando
Tu jardín más florido
aroma de azahar
es recorrido
gozar.
***
Esfera
el mundo
estuvo en espera
ese día fue inmundo
Te asolaron las batallas
no eran letras
fueron metrallas
tretas.
***
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 824
Mil poemas a Miguel Hernández
Pantanos
sombras anteriores
tomadas las manos
siempre unidas fueron mejores
mas, nacieron los afluentes
de ríos caudalosos
juntaron corrientes
trozos.
***
Mar
azul intenso
no para pelear
para hablar del silencio
Ampliando mas la mirada
se abrieron cerrojos
tu amada
ojos.
***
Miedo
la niñez
noche en desvelo
luego vino la preñez
Con Josefina tu amada
los hijos benditos
tu almohada
chiquitos.
***
Aves
del paraíso
aviones y ataques
como un placer enfermiso
Vinieron por el cielo
sembraron la muerte
era celo
inerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 825
Mil poemas a Miguel Hernández
Nadir Silveira Dias, Brasil
LUZEIRO POETA
Para Miguel Hernández
Com instâncias de luzir
Com seus dois grandes faróis
Teus caminhos são rastros
São rastros do sentir...
De um sentimento sublime
De quem compreende o viver
De consciente andador
Nos seus caminhos de luz.
Miguel Hernández,
Miguel Hernández,
Teus caminhos são rastros
São rastros do sentir...
Yanexi Matos Matos, Cuba
Poeta joven
Has derramado en mí la juventud de tus días,
has inspirado alegría en los poetas del mundo,
has logrado en lo profundo una hermosa melodía,
has alcanzado elogios en el tiempo que te guía,
y has desplomado el verso de una eterna sinfonía.
Es a esa juventud que le debes noche y día las miradas
que se fijan en el rostro del poeta, poeta joven,
que revives en cada letra la ilusión y la armonía,
de una patria que te guía y una amada que te espera,
has derrotado fronteras con los poemas de tus manos,
has destrozado el dolor de una noche sin estrellas,
y para que no se olvide tu huella has firmado en tus caminos
la sombra en todo el destino que es hermosura y poesía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 826
Mil poemas a Miguel Hernández
Has vencido al inhumano con la fuerza de tú genio,
has vencido todo imperio cobrando imagen y talento,
para demostrar al universo el poeta joven que se lleva dentro.
Alfred Asís, Isla Negra-Chile
¡Dejad al prisionero!
Dejad al prisionero de Orihuela
¡dejadle!...
que él no tiene mas arma
que la de la palabra
¡Y que aquella no mata!
pero si descubre...
¡Aquella no hiere!
pero llega a amar...
Dejadle que hable
y que desde su voz
sea la palabra no sea la metralla
con su grito desgarrado
aquella que daña...
Ya ven, es mejor la palabra
esta no mata el cuerpo como la bala
y llega al alma desconsolada...
¡Dejadle a Miguel...
que hable, que cante, que ame
que la palabra del poeta suene fuerte
y se entierre cual sable
hasta el fondo del alma!...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 827
Mil poemas a Miguel Hernández
Gloria Rios Ayzú, México
Kokul ‘al Quetzalcóatl.
Oda al poeta de la libertad
Desde niño fuiste pastorcito
y cuidando el rebaño solías leer
a los ilustrados de las letras;
ya desde esos años tu mente
volaba, soñaba en libertad.
¿Quién iba a decir que pronto poeta serías?
Escritor y defensor de los pobres.
¿Quién iba a decir que por tus ideales
fueras privado de tu libertad?
La libertad que siempre pregonó
en tu espíritu libre y de servicio.
Los años pasan y entre la España franquista
y la época actual
no ha cambiado mucho…
Aún se lucha por la falta de libertad,
aún hoy en día nos debatimos
por la falta de libertad de expresión
y por la imposición
de gobiernos anarquistas.
Latino América
unida y España son una misma raza.
¡La sangre corre y presos políticos
hay por montones!
Amado poeta;
sembraste en los corazones la semilla
de la libertad, tu obra y lucha
no ha sido en vano…Muchos
te recordamos como un gran ser humano
Poeta de poetas…grande entre grandes.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 828
Mil poemas a Miguel Hernández
Porque la vida sigue
Miguel Hernández, hoy te quiero
dedicar estos versos
por las calles desoladas
por el canto oprimido
por el vuelo de un jilguero
por la daga atravesada
por la calle ensangrentada
por un nudo en la garganta.
Y porque la vida sigue
proclamando advenimiento
y porque la vida sigue
a pesar del sufrimiento.
Amada silueta
Cantemos todos hermanos
por un mundo que sea de humanos
cantemos todos de la mano
por la libertad y por la poesía.
Miguel Hernández poeta de la
libertad;
hoy te recordamos
en alegoría a tu gran obra
que ha de perdurar.
Enseñando que el amor
es la base que nos une
como grades poetas
y en las buenas
y en las malas
la libertad es aquilatada.
Miguel Hernández poeta
tu fusil es la palabra alada
en la poesía amada silueta.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 829
Mil poemas a Miguel Hernández
César Tellería Oliva, Argentina
AL COMBATIENTE MIGUEL HERNÁNDEZ
Que más puedo yo decir que no hayan dicho;
Tus amigos, camaradas y seguidores;
Fuiste luz en la consciencia de los pueblos,
Y un ejemplo de coraje y de valor…
Que supisteis por tus ideas dar la vida,
Y también perdiste tu preciosa libertad:;
Sin lamentar tu derrota, ni tu encierro,
Enfrentaste al tirano, -sin claudicar.
Fue la brisa de los aires de Orihuela,
Que te hicieron combatiente y luchador;
Fuiste poeta, escritor y visionario,
Hasta ser un verdadero gladiador.
Combatiste como nadie al dictador,
Despojándolo ante el mundo de su careta;
De cristiano, bondadoso y neutral,
Mientra oprime y mata de hambre a todo su pueblo.
Arriesgando tu vida -hasta el final,
Les mostraste el camino a los españoles;
Que hay que luchar, para derrotar a cualquier tirano,
Y si uno quiere la libertad: -la tienes que ganar...
Gloria a ti oh, valeroso compañero,
de la pluma y del pensamiento universal;
desde el plata vegetal yo te saludo,
y te rindo mi homenaje por tu valor…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 830
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Valdés, México
El poeta Cabrero
Orihuela fue la cuna que te vio nacer
en el seno de una familia campirana
lugar al que en ese entonces tú sin saber
habrías luego hacer replicar todas sus campanas.
Es verdad que el campo orihuelano te vio sin maldad crecer
donde aparte supiste aspirar su transparente perfume
apreciar plenamente su límpido aroma de perenne libertad
al pastorear de niño tus cabras despuntando apenas el amanecer.
Fue ese lugar además en donde aprendiste a leer
abrevando en seguida como esponja de los mejores poetas
asimilando sapiencia de manera natural como quien va caminando
y así de esa forma diste vuelo a tus primeras letras.
Amigos y compañeros que encontraste en la vereda
de todos cono norma abrevaste lo que debiste abrevar
ni más, ni menos de cada uno de ellos todos hombres sin par
que junto a tus letras a veces podemos golosos también degustar.
Fuiste un hombre completo poeta cabrero enamorado del amor
amante de tu pueblo entero fuiste un silente clamor
amaste también tu historia encontrando con ello la gloria
viviste con valentía tus ideales y anduviste con pundonor.
Haciendo por eso turismo en las cárceles españolas
te arrastró la dictadura a Madrid, a Ocaña y además a Alicante
siniestros franquistas todos ellos cual más de oscuros y atorrantes
quienes desnudos por tus letras se ahogaban como en grandes olas.
Sumidos en su propio vómito y estiércol de mezquindad
dichos seres promotores y causantes de profunda inequidad
llenos de maldad ríen hoy de tu memoria más que ayer
pues nuevamente en España han asaltado el poder.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 831
Mil poemas a Miguel Hernández
Marisa Trejo Sirvent, México
LA REFUGIADA EN LA OSCURIDAD
A Miguel Hernández quien escribió
y defendió la libertad.
Mi abuela murió
atravesada por una bayoneta
mientras mi hermanito pequeño
cayó al suelo
y ahí se quedó sentado.
Mi pequeño poblado
fue incendiado mientras
yo me desgarraba los pies
atravesando ríos
espineros
matorrales
ciénegas
verdeagua
y pantanos donde dormía
entre las ramas como otra ave del trópico
huyendo hacia el Norte
El norte, siempre el Norte
en la punta de lengua
en la punta de mis pies
en lo más profundo de mi ser.
El Norte, siempre el Norte,
Mi dolor se atenuaba,
El Norte era mi ruta noche tras noche.
Cuando tenía sed,
pensaba en el Norte,
cuando tenía hambre,
soñaba con el Norte.
Seguí noches enteras con la mirada al norte
Alguna vez pensé que quizás
había nacido en el norte
y por algún capricho de la vida,
me había traído hacia el Sur.
Por fin, un día pude llegar por fin
al anhelado Norte,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 832
Mil poemas a Miguel Hernández
pero sólo vi un desierto,
unos maleantes, un pueblo maldito
donde es verdad,
estoy sana y salva
pero mi vida transcurre siempre
en la oscuridad
desde que soy vendida
día tras día
al mejor postor.
Orisel Gaspar, Cuba-España
Ahora que nadie te puede cortar las alas Miguel.
Poeta de España acude,
España te necesita.
A pie de calle contemplo del mendigo la pobreza,
mustio cuenta su riqueza, dádiva de algún indigno.
Cuántos me duelen los versos Miguel, cómo me duelen,
y es porque en los versos huele el dolor del universo.
Yo misma soy el mendigo subsistiendo en la estrechez
en desafío con la limosna que la opulencia me dé.
Migajas, sobras impuras que no han de calmar el hambre,
y el ser humano un enjambre pero sin orden ni vida.
Conmigo pan y cebolla, marchando filete humeante,
nada ha cambiado Miguel, en su menú el gobernante.
Mira como nos tienen Miguel, seguimos del mismo modo,
el creso en sábanas de cara miel, el pueblo duerme en el lodo.
Y mira como se burlan sus irónicas sonrisas,
sobre un sudar de camisas, ocurre esta farsa burda.
Promesas y más promesas, va y se repite el discurso,
mismo perro igual collar el gobernante de turno.
Lloro por la humanidad, Miguel, lloro por Martí,
porque perdiéndose vi el acuerdo y la humildad.
Lloro por el desatino que hoy oscurece a tu España,
imploro la íntegra maña que ha de limpiar el camino.
Lloro por la circunstancia del inocente rehén,
mientras se evidencia quién del acto saca ganancia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 833
Mil poemas a Miguel Hernández
Poeta de España acude, España te necesita,
reparte tu luz e incita, el polvo del mal sacude.
Miguel, Neruda, Vallejo, ¿qué le pasa al ser humano,
que en vez de darse la mano para servirse de espejo
escala sobre el reflejo hundiendo a su propio hermano?
Ahora que nadie te puede cortar las alas Miguel,
ahora que espíritu eres, y libre existes en él,
ahora que inmortal habitas imparable y poderoso,
ahora que no alcanza el vil a enterrar tu genio vasto
tu pensar y tu decir se desgrana en tanto verso
palabras que el universo se encarga de transcribir.
Ahora que eres energía, ángel y alma, presencia,
corazón de España esencia y en el mundo poesía;
reúnete con Martí, con Vallejo, con Neruda,
necesitada de ayuda para salvar la belleza
pide la naturaleza refuerzos a sus cimientos
desgarrada en sufrimientos, olvidada, triste y fría.
De Madrid hasta Orihuela llegue esta oración que grito
de Orihuela al infinito lleve mi canto su estela.
Vengan a tomar la tierra, poetas que ya partieron,
los que en su verso dijeron no a las armas y la guerra.
Tomarla con la esperanza, tomarla con el cariño,
y con la bondad de un niño poner centro a la balanza.
Cuando te pienso Miguel, cuando te pienso.
Desde Galicia,
untada de su verde encanto.
Pienso en ti, Miguel Hernández,
en el hambre, en el dolor, la pena,
pienso en la poesía tras la reja,
en el amor que espera,
pienso en las horas que no acaban,
en la desesperanza que a tu pueblo acosa,
en la patata hervida que no vuelva
cómo único plato de la abuela.
Pienso en el sudor del jornalero,
del hortelano que su frente inclina,
de sal bañado al marinero pienso,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 834
Mil poemas a Miguel Hernández
pienso en el olor de la cocina,
en el triste legado del dinero.
Desde Galicia, untada de su verde encanto,
me alzo con la pluma
como única insignia en mi trinchera.
Pienso claveles y una mesa humeante
rodeada de sonrisas y de juegos,
niños que de alegría la alegría llenan.
Pienso poetas en la puerta verde,
en todos los confines pienso a los poetas,
enhebrando almas con el mismo sueño,
haciendo el mundo familiar y limpio.
Cuando te pienso Miguel, cuando te pienso,
veo juglares en cada continente,
con los sueños atados a los versos
cabalgando en ellos,
contemplo a Asís desde isla Negra alzando
en nombre del amor la Humanidad,
en la armonía y la paz uniéndolos.
Susana Beatriz Guaglianone, Argentina
Dialéctica
Vientos del pueblo me llevan
a beber el licor de tu lírica de llaga y miel,
y me embriago de conciencia…
Mis manos son como aquellas
que brotan del corazón y tienen sonido.
Mi cuello suelta su yugo, me despierto, me embravezco…
No hay ausencia en lo que veo, en lo que escucho,
en lo que aspiro, en lo que toco, en lo que pruebo,
en lo que siento… mis ojos también desbordan
una ciudad espléndida de arañas, mecánicas jaurías…
Tampoco encuentro la plenitud del mundo en este centro.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 835
Mil poemas a Miguel Hernández
Aún siguen habiendo yertos en el ocio sin brazos
de los que oprimen y de los que son oprimidos por el margen…
Aún la sangre llueve boca arriba, hacia el cielo…
Aún la cebolla grita su escarcha cerrada y su pobreza…
y habita en mis ojos, caprichosamente, hasta convertirlos en agua …
Pero, no muere la esperanza en los tiempos que vendrán,
Aún en mis párpados bailan niños como nunca coloreados …
como soles y rosas de un eterno día nuevo…
Aún miles de bocas que vienen de lejos iluminan
con sus rayos que no cesan…
Aún de la injusticia de tu muerte brota la justicia de la vida…
Y espíritus revolucionarios ¡se apropian de tu palabra!
Higorca Gómez, España
CENTENARIO DE MIGUEL HERNANDEZ
En silencio, meditando…
Quiero escribir unas letras.
Decir a gritos …
¿Quién fue el poeta?
¡Ese que canta una nana!
¡Ese que ama su tierra!
¡Ese que un día cuido de sus cabras!
¡Ese que las llevaba,
despacio por una senda!
¡¡Miguel!! ¿Te fuiste?
¡Ca! ¡¡Me llevaron!!
¡¡Tenían miedo de mis letras!!
Tuve que morir en una celda
Porque no se muere ¡¡No!!
En una cama cualquiera
¡Te matan cuando te encierran!
Yo, he muerto con una bandera,
mi bandera no es otra
¡¡Qué la libertad del alma!!
y... también de la persona.
Por eso lloro ¡¡Lloro!!
¡En cada una de mis letras!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 836
Mil poemas a Miguel Hernández
Alfred Asís, Isla Negra-Chile
Josefina
Mi vida, mi amor
Recreo tu imagen en mi
mientras estoy rodeado de basura
en esta celda asquerosa…
Se llena la celda de flores
y tu aroma de mujer invade mis emociones
Se transforma en jardín
y tomas mi mano entre las tuyas
me acaricias
me das calor
en este frío inmundo
que irriga la desesperanza…
Amor mío… Estoy sintiendo tus besos
¡no, no estoy soñando!...
tus labios tan sedosos
se han posicionado en los míos
como la abeja en el panal…
Mi boca sangrante ahora es de miel
con tu dulzor infinito, amor mío…
Ya no siento frío, dolor, ni falta de ti
estoy contigo musa del alma
rodeo tu cintura vida mía
te apretó a mi cuerpo y tus ojos resplandecen de alegría…
Como no imprimirme
de tu magia absoluta
Mientras muero, vivo
y viviré para siempre
amor mío…
Déjame llorar Josefina
que mis lágrimas inunden tus mejillas
que al caer al suelo serán palabras
que se irán al cielo,
permanecerán entre la nube y la luna
alumbrarán tu destino
y sembrarán la semilla generosa
del entendimiento
la solidaridad
y seremos todos, todos y uno más
los alfareros de la palabra
por una mejor humanidad
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 837
Mil poemas a Miguel Hernández
Representación del autor Alfred Asís
De Miguel a su padre
Padre, me voy a la batalla
¿No querías que mi arma de batalla fueran las letras?
¿No esperabas que muriera por esa otra arma que era certera?
Padre,
como siento lo que no querías de mi…
¿Acaso mi aliento y lealtad
con tu campo y animales
no eran el tumulto deseado?
¿O la flor no germinó en el jardín de tu Orihuela?
Padre,
cuantas caricias me faltaron
cuantas angustias me sobraron…
Perseveré sollozando pero con firmeza
el camino que debía seguir.
Era una huella recta y propia
Un sendero de arrozales
entre invernales primaveras
Evidente consecuencia
que en realidad se mostraría postrera.
Padre,
prejuzgado me sentí
por mi idealismo y libertad
¿Acaso, la tierra no es libre
cuando una briza la levanta y eleva al cielo?
¿Acaso, el agua no es libre
cuando el afluente la deja partir?
¿Acaso, ese árbol que adorna el jardín
no creció libre de ataduras
y mas encima dio su fruto?
Es el ideal padre,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 838
Mil poemas a Miguel Hernández
es la esencia y convicción
que se irradia en nuestros manifiestos universales
que no desvanecen como la neblina
que despliega su grandeza…
¡Padre! ¿es que no vez el íntimo misterio?
¡Ven, abrázame padre!... elimina mi angustia
déjame quererte
Dialoga en mi alma con tus palabras sabias
no me dejes solo padre, entiéndeme, mi creador
Así como cuando tomaste mis manitas de niño
y comenzaste a llevarme al campo tempranamente
Padre,
estoy esperando tu palabra sabia
para sincronizar la fe y esperanza
y abrazarte, padre querido…
Volver a Orihuela
a la pradera cabrera
a la cebolla
a la tierra castigada
y transformarla en vergel
y en el júbilo y comparsa
bailar al son de los tambores,
no los tambores de guerra
si no, al palpito de corazones
¡en alabanza a la vida y no a la muerte!
¡al amor y no al odio!…
Padre, ¡ayúdame!... padre…
Justina Cabral, Argentina
LUCHADOR
Con el corcel de tu pecho,
de tu frente y corazón,
bajo zafiros dio lucha
un niño trabajador.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 839
Mil poemas a Miguel Hernández
Y de tu tinta nacieron
atados cantos de amor
y reclamos de justicia
voraces de compasión.
Y de tu boca bebieron
versos con miel y limón
la nobleza de tu tierra
y la mujer que te amó.
Eliana Flores Pineda, Colombia
Pastor de cabras.
¡Ho! Orihuela pequeño pueblo español
Regalaste de tus entrañas un letrado ser
Impetuoso bajo los atardeceres
Un pastor de cabras que sus letras, emprendía
Embellecidas con su propia luz.
Mientras enriquecía su alma entre lecturas
El espíritu del poeta se imponía en medio de los espesos henos
Y bajo los árboles, los versos inquietos de un alma joven
Quien lanzó su propia conquista al mundo retórico.
¡Ho! Orihuela pequeño pueblo español
Entre sonetos le regalaste el amor de Josefina
Tus letras hijas de la vida
Y sus hijos, hijos de Josefina.
Entre rejas
Incesante de dolor y de amargura e injusticia
Por luchar causas perdidas
Se marcho el poeta Miguel Hernández
Hijo de la madre patria
Con su hijo de la luz y de la sombra
Manuel Ramón
Y sus 31 velas en limbo y la discordia.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 840
Mil poemas a Miguel Hernández
APRENDIZ
Miguelito quiso
conocer la escuela,
viajar en un libro,
y contar estrellas.
Quiso conocer
un mundo violeta
donde no se ven
pueblos con pobreza.
Y en fugaces giros
de una mariposa
quiso Miguelito
llegar hasta Europa.
Y gracias a un hada
atrapó el piolín
de un globo naranja
y voló feliz.
Lucy Martínez Z. Perú
Para Miguel Hernández
Miguel, cruzaste en Orihuela
todos los caminos de juveniles instancias,
entre la austeridad plena
rodeado del oasis exuberante
de tus campos en Segura
llegaste a mí, cargando sueños.
Mi corazón tomaste, colocaste en él
la copa cristalina y delicada de tu vida
conjugando con la mía en prolongado eco,
bebimos hasta el fondo la amorosa entrega
de mi vientre de fuego y tu febril sementera,
el amor placentero, sus frutos nos regaló.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 841
Mil poemas a Miguel Hernández
Mas el acecho del infortunio ya estaba escrito,
se poblaron mis temores y como esposa
no pude reforzar tus venas ni sustentar tus alas
para defenderte en las trincheras de tu libertad
del enemigo feroz que sin comprender carcomía tu piel.
Amado mío, “es preciso matar para seguir viviendo”
fueron tus palabras y hoy estoy aquí
en mis intentos de matar el dolor y seguir
mirándote en mis espejos, sobre los mismos muertos
sin aplacar tu figura y con los puños cerrados
deseando besarte hasta en el polvo esposo mío.
Miguel, hoy sin ti, la tristeza es honda, turbia y daña,
es el rayo que no cesa en mí, de este sino sangriento,
se envuelve España, que en un clamor de victoria y guitarras
dejarán puertas abiertas sin colmillos ni garras
envueltos de tu nombre y mi soledad de explosiones.
Forjaste paz para la orfandad de nuestro hijo,
lo arropaste en libertad en un océano sin naufragios
y tu pecho fue tierra fértil donde floreció aquella hierva
de su ayer y su mañana asido de tu nombre
y tu herencia fecundando en su frente
con rayos de sol en su lucha sin sombra vencedora.
Mi canción de ausencia y soledad lleva tu nombre,
Miguel, nadie me salvará de este calvario
esta muerte nupcial no borrará la huella que has dejado,
mis ojos se encontrarán con los tuyos
en la mirada que va y vuelve descubriéndote
para tener la dicha de sentir tu amor a plenitud.
¡Quién te ha visto y quién te ve! amado mío,
quién sino yo, en esta intensa brevedad de nuestra vida.
fecundada con los dos hasta la muerte.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 842
Mil poemas a Miguel Hernández
Alberto Carrillo, Argentina
Acróstico a Miguel
M agnífico y combativo poeta de los sueños españoles.
I nteligente y sensible, fuiste para el dictador
G rano que, donde más duele,
U bicaste, sabiamente, en el centro de su cuerpo,
E nfermo del despotismo que lo condujo al infierno.
L ibertad…! Vos reclamaste, para tu España querida.
H echo de grava y avena, pastor de suaves ovejas,
E ncontraste en la poesía, el arma casi perfecta.
R anto escribiste, hermano, tus libelos y poemas,
N ada más que por decirle al dictador tus verdades
A compañadas de gritos con que el pueblo te siguió.
N adie acalló tu voz clara, como de manantial agua,
D esde tu humilde morada hasta el confín de tu tierra.
E ncontraste así el destino cruel, perverso y cercenante.
Z orro, hipócrita e injusto, en la cárcel te mató.
María Helena Giraldo González, Colombia
Josefina Manresa
“He regresado al tigre
Aparta o te destrozo”
Miguel Hernández
Solo quería un sol
Y alegres mañanas
Los campos floridos
Y dulce calor de cama
Pero solo veo correr sangre
Por los caminos de España
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 843
Mil poemas a Miguel Hernández
II
Calma esta furia
Que carcome mi entraña
Hay dolor en mis huesos
Y lamento en mi garganta
Pero nada puedes hacer
Por mi piel y por mis garras
III
Soy hierba seca que arde
Entre pecho y espalda
Ave canora
Que entristece de pronto
IV
Mécete en mis ojos heridos
Limpia mi ciego destino
Soy un hombre vencido
Y mi alma está sin bríos
V
No me abandones
En esta prisión de Alicante
Pocos amigos me quedan
Pocos como Neruda
Y como tú grano de trigo
VI
Para indultarme me imponen
Casorio como Dios manda
Contigo lo haría mil veces
Pero que callé mi canto
Sería renegar de España
VII
Ven a mis campos
De flores negras
Y bebe sedienta
Mi vana huella
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 844
Mil poemas a Miguel Hernández
VIII
No dejes que el sol
En mis ojos muera
Sé tú el candil
En mi oscuridad sin tregua
IX
La muerte roza mi oído
No la oyes
Viene por mí
Quiere beber de mi sangre
Respira en mis dos costados
X
No ves que tiemblo de frio
Tiemblo por mis dos amores
España mirada en ciernes
Y tú luna solitaria
XI
Soy de cuna humilde
Y de fiero no tengo nada
Pero verán a un tigre
Cuando se trata de España
XII
No llores mi niña
Hay llanto en tu mirada
Quién entiende los designios
Del azar o del destino
XIII
Con tus pechos en flor
Y con tus carnes rosadas
Aviva con tus besos amor
Ya luego de antorcha
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 845
Mil poemas a Miguel Hernández
XIV
El frio me sale de adentro
Y también toda la rabia
Hojarasca soy
Y el tiempo dirá
Cuánto yo amaba a España
XV
Hazme un ataúd
Con nardos en flor
Y azucenas blancas
Soy un barco que zarpa
XVI
Escóndeme
En tus negras pestañas
Me saben moribundo
Los que odian a España
XVII
Estoy muriendo
No dejes que me lleve
La muerte solitaria
Ámame a pesar de todo
Aunque oscurezca la fuente clara
XVIII
Que tus pasos vengan a mí
Dulce niña atormentada
Huérfano estoy
En este cadalso atroz
XIX
Beber de tu copa quiero
Vino blanco vino rojo
Para calmar la sed
De España soy la garganta
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 846
Mil poemas a Miguel Hernández
XX
Soy cadáver
Y en las noches
Mi semblante helado
Besa tu boca pálida rosa
XXI
Muerto estoy
Me asfixió entre los vivos
Solo tú amada
Me liberas del abismo
XXII
Fui colibrí y de ti bebí
El néctar que te dio España
Y por quererme sin miedo
Tendrás Josefina
Que amar a un muerto.
Silvia Noemí Occorso, Argentina
MILICIANO Y POETA
Ligada esta tu vida,
poeta y soldado de la civilización,
a la rosa Valenciana
y su hermosura.
Aquellos amigos de ideales y poesía,
-Antonio, Pablo, Guillénte vieron miliciano,
fusil al hombro,
acarreando libros
en tierras levantinas.
"Para cantar a Valencia....",
cobijo de la República,
tu palabra y tu vida
como amor y libertad
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 847
Mil poemas a Miguel Hernández
Nunca fuiste político,
emisario de la cultura,
para ser apenas
el "Viento del pueblo"...
que siembra su voz.
TE RECONOZCO MIGUEL
Tú y yo, hermanos de una misma tierra,
hortelanos que buscan en su entraña
las razones de vivir.
Compañero de alma escarchada
con tu pena,
con tu luna de pobreza
te reconozco, Miguel.
Yo sé de tus desazones,
de tus sufrimientos
como sé de tu triste hermana , la tristeza.
Que para la libertad diste tu vida
que por tu mundo ideal te hiciste poeta
que sangraron abiertas tus tres heridas
arrulladas por la muerte
con las nanas de cebolla y soledad.
Miguel,
no pudo la muerte enamorada
ni tampoco la vida desatenta
acallar la luz de tu palabra.
Porque como Árbol carnal,
generoso y cautivo
vas rebrotando insurrecto
arraigándote en la voz,
de cada poeta comprometido
que canta
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 848
Mil poemas a Miguel Hernández
Norma Escobedo de Driever, Perú-Alemania
Vientos de Orihuela
La infancia dejó sus huellas
en tu memoria
para que los recuerdos
de la tierra germinada
en gestación húmeda
puedan parir los frutos de la libertad,
alimento que nutrió tu corta vida
para convertirse en una voz gigante,
alzada, multiplicada y retumbante
en el corazón de tu pueblo.
Las colinas y pastizales de Orihuela
testigos de ternuras mañanas
hoy escuchan tu canto
la melodía del pastoreo,
la ausencia de las cabras
que parían a la luz de tu aliento
los mensajes de amor
de la vida en el campo
los versos que brotaban de tu piel bronceada
y se engatuzaban en sonetos.
Voz de la tierra
El trabajo vivió en tu nobleza
arando en tierras áridas,
cultivando la escritura en los surcos del tiempo,
abonando sementeras con las gotas del dolor,
recitando a las abejas en colmenas hacinadas
a los pájaros, a las plantas, al trigo,
bajo el sol ardiente de juventud
bajo la lluvia triste y llorosa
tras las rejas de una tenebrosa celda
bebiendo la tempestad y la agonía.
De la tierra naciste, de tu madre España,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 849
Mil poemas a Miguel Hernández
de sus entrañas nació tu poesía
una voz lírica,
la estrella en las tinieblas de lo injusto,
la luz de vida y esperanza,
el agua para la sed de los pueblos;
así, Miguel, tus ideales y convicciones
transparente y cristalina
fueron el diamante de tu alma
que brilló y alejó a los enemigos.
¡Miguel Hernández no ha muerto!
Desde Alicante vive tu poesía,
fluye como ríos cruzando las fronteras
y sembrando en los corazones sensibles.
Versos del hambre
“Tened presente el hambre: recordad su pasado...”
Miguel Hernández
Vestido de trapos y lágrimas
deambula el hambre en montañas y desiertos
con su rostro amarillo pálido
con su voz marchita, seca
undida en los hoyos del dolor.
Ese dolor fue tuyo, Miguel,
y sigue penetrando en las venas
de muchos niños explotados,
de hombres rebeldes que en la prisión
escriben a sus “Nanas de la cebolla”
Hoy, el hambre con calambres en el estómago
vomita el cianuro y respira moléculas de uranio
un aire agónico y mortal
en los pulmones de los pueblos,
el ensayo de robotes y proyectiles.
Miguel, El hambre repasa su historia
bebe gota a gota de la lluvia,
de la bondad de los manantiales,
comparte las migajas del pan
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 850
Mil poemas a Miguel Hernández
que se amazan con las manos de ternura
como Josefina, tu esposa,
amiga del hambre de luz y sombra.
Tu poesía, los versos del hambre,
los cereales, las legumbres no comidas
el jugo, la leche, el vino no bebidos
sólo una ilusión de ollas y vasos vacíos
en la cocina de la obrera,
en la mesa del campesino y el desempleado.
Y en esa tormenta con sangre “El hombre acecha”
y el mundo cesará el hambre con tus versos
una estruenda voz frutal de PAZ frente a la guerra.
Blanca Garnica, Bolivia
VOZ BLANCA
Para Miguel H.
Tendido sobre la arena
y el agua
de las palabras
con voz blanca
Palpa las cuerdas
él.
BAILAR CONTIGO
Para M.H.
Panderetas y quena
por el camino
indican a los pies
mas no los pasos
Con aceite o con leche
la sartén
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 851
Mil poemas a Miguel Hernández
sin ellos
se nos quema
El ave canta
y la guitarra le responde
el uno vuela
y ésta se calla sin el ala
Para bailar contigo
trajiste los pañuelos
con el aire
y mis pasos pasaron.
POR ALICANTE EL AVE
Riega su canto
el ave
rie largo
el geranio
Ay niño
de la esperanza
sin amarillo
ni verde
La guerra
graniza balas
caen hombres
caen flores
Alto
muy alto
la imagen militar
con alfileres de plata
Los campos
sin el trigal :
todas las amapolas
derribadas
Alicante
allí cantaban
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 852
Mil poemas a Miguel Hernández
alas del canto
Los aleros callaron
las alas buscan
azul.
EL POETA
A Miguel Hernández
Sorbo a sorbo
bebo el agua
y con él
por la garganta
se introduce el poeta
Aspiro a tientas
el aire
y sin más el poeta
resbala por las entrañas
de mi sangre
Yo sin labia
ni cabeza
guía la mano
el poeta.
Rafael Jorge Carballosa Batista, Cuba
Mientras tanto
¨…voy entre pena y pena sonriendo”
Miguel Hernández
Me sacuden al andar
señales buenas y malas.
Las buenas me hacen cantar;
las negras son como balas.
Aunque la cuenta es penosa,
una canción, tres heridas,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 853
Mil poemas a Miguel Hernández
me apuro y pinto una rosa
con mis venas divertidas.
Si es la condición mortal
tan fecunda en lo fatal,
tan estéril para el canto;
si no existe más asunto
que pasar y ser difunto:
mejor reír mientras tanto.
Dolors Alberola, España
Las hojas de la higuera
Iba tan alto a veces, que le resplandecía
sobre la piel el cielo, bajo la piel el ave.
Miguel Hernández
Miro hacia las palmeras y recuerdo tus versos. Más alto aún. Más alto que la higuera
que inunda de verdor los surcos térreos de tu pequeña huerta. Tan alto que los
pájaros son motas cuarteándose en el terrible suelo de la historia.
Volverás a mi huerto
la palabra, una soga tirando de mis pies
hasta sembrar mis plantas en tu tierra.
Y me traje unas hojas,
por no poder traerte a ti hasta la carne
y me traje la luz de las bombillas
y tu mesa y tu cama
y ese mantel de hule que, quizás,
te guarde en la memoria.
Todo eso me cabe en ese surco
de la voz aterida
donde vivo y me muero, donde nazco,
donde sueño y des-sueño, donde crecen las letras
como ese pelo oscuro que un día tú cantaste:
a la negrura primera
de tus ojos y tus padres,
al rincón de pelo denso
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 854
Mil poemas a Miguel Hernández
Cuánto tacto lanar hay en tus sienes,
cuánto rayo de luna entre tus párpados,
cuánto fragor de leche entre tus uñas,
cuánta cárcel hiriéndote, amamantándote,
bordándote en la tela de los siglos,
cosiéndote la música a los labios.
Orihuela de noche huele a ti
y huele a ti la peña que desciende a tus rosas
y huelen las raídas
piedras en que se apoyan las campanas,
por no querer tocar mientras la luna
te agradece los versos y pasea
sobre tu carne, abriéndola en negra sombra siempre,
como una muerte agria que, de luto, llevara
su sartén en la mano.
Orihuela de día huele a ti y las ovejas balan y te nombran y las crías resuellan
pidiéndote la sangre de esa cebolla dulce de tu nana y los pájaros son rectángulos
tangibles y enigmas por el aire y hasta tu niño muerto se regresa, con tal de sonreírte
y que tú vuelvas.
Pero por no poder traerte, de nuevo hasta la carne, yo me traje dos hojas de tu
higuera y un monte en las espaldas.
SOBRE MIGUEL HERNÁNDEZ
De Miguel quise yo verso yuntero,
nana y cebolla en verbo, cada instante,
tomar de sus asuntos el Levante,
la luz de los naranjos. Limonero
que amarillee el campo y, avispero,
le dé madera y agua a éste, mi cante,
y la flor del carbón, negra y feriante.
De Miguel, yo bien quise, aceitunero,
su silencio vital. Quise su llanto
vertido en la elegía, y, compañero,
quise su mano en mí de aguzadero
y la sombra marina de su espanto.
De Miguel, su gran voz, piedra cantera
y besar yo su hermosa calavera.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 855
Mil poemas a Miguel Hernández
Ana María Rodríguez, Argentina
“A MIGUEL HERNÁNDEZ, SU NOBLEZA Y SU DOLOR”
Aún suena el campanario del templo que fue prisión,
tiempos de injustos valores impuestos por la codicia
que venciste con honores, nobleza y gran valentía;
vaya tiempos que corrían entre armas y poesía…
para templar ideales, para forjar esperanzas,
…y aquellos sueños en ruina.
Naciste en Orihuela, un día treinta de Octubre
respirando el aire puro del oasis de tu vida,
mezclando lucha y poema como tributo al dolor,
…a la justicia, y la pena.
Y tu mensaje alcanzó, a golpear todas las puertas
defendiendo un ideal que pagaste con condenas
alejado de los tuyos, y amada naturaleza.
Siempre debías partir, soñando con que volvieras,
el mundo de aquellas urbes, ignoraron tu nobleza,
pero tu lucha seguía, como siguieron tus letras,
agotado y solitario, construiste tu gran obra…
nacida de tu experiencia.
Las reclusiones tan duras, como infinito el deseo
de volver a tu Orihuela, para correr hacia ella
en busca del gran amor, y el sino de una promesa.
Pero nada te fue fácil, perseguían tu bandera
que flameaba con honor, en el lugar que estuvieras.
¡Ah, Miguel, de tu dolor!, tu valentía sin tregua,
se reflejan en tus versos…,¡Orihuela, quién pudiera!
Cabalgando en tus proezas, hoy el mundo te recuerda,
como Poeta y Soldado, amante de “la palabra y de la naturaleza.
¡Oh, del dolor que sufriste por la presión de la guerra!
Cada prisión, cada celda, te fue apagando las fuerzas,
y tremenda enfermedad, tus ilusiones condena,
Josefina que te llora…,y entristece tu Orihuela,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 856
Mil poemas a Miguel Hernández
tu cuerpo se desvanece, volando en cóndor al cielo,
tu obra sigue presente…,y en el mástil de los sueños
Tu bandera…, ¡aún flamea!
Jean Marcell Gomes Albino, Brasil
Acróstico
M - Morada fez, em seu pensar
I - Incansável, o parnaso alcançou
G - Guerreiro cândido, alvura fulgurou
U - Uno-singular, pluralizou o amar
E - Exímio poetizar, da guerra o cantou
L - Letras generais, na batalha predicou
H - Honrou a farda da cultura
E - Esmerado poeta do povo
R - Rijamente preso figura
N - No ar de hoje, paira o inovo
Á - Água vermelha procura brancura
N - No seio poesia, nasce de novo
D - Dádiva presente, eterna doçura
E - Escrituras agentes no mundo todo; um corvo
Z - Zelado e recantado n'alma de toda criatura.
Nieves María Merino, España
PERDÍ MI SONRISA
Tu canto a la alegría se truncó, Miguel
perdiendo poco a poco tu sonrisa.
La mía va tras la tuya
como una sombra
siguiendo tus pasos,
encanecida y triste.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 857
Mil poemas a Miguel Hernández
Borraron tu sonrisa
y borraron la mía.
La tuya la encontraste
La mía…
no sabe a dónde irse.
LUNA ROJA EN SEPTIEMBRE
La luna se mengua tras su parto de fuego
en éste septiembre triste que te añora.
Luna roja de agosto sonriendo a la Tierra
bañaba nuestros versos en tu honra..
Con la luna de mayo, blanca y cercana
sellaste de magia nuestros poemas.
Es tu luna, Miguel.
Ahora es la nuestra
LÙA…A LÚA!
Lùa...a lúa...
Bela mulher com fogo e no queima.
Lùa do Miguel em Portugal
liverado a fim do tamta guerra.
Lúa, lúa que caminha a suo encontró
E faze suo sonho enamorado.
Lúa do “Perito” que eu adorei
Além do tempo.
Analia Patricia Vieyra, Argentina
INMORTAL
Desapareciste físicamente. No en nuestros corazones, no en la oscuridad.
Dejaste tus huellas de verdad. Luchaste en tu cárcel mortal,
y lograste ser inmortal y vencer sin maldad.
Tus letras con sangre y fervor, escribiste con pasión.
Tus ojos oscuros no fueron menos duros.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 858
Mil poemas a Miguel Hernández
La verdad y sabiduría impusiste, y eso fue lo que hiciste.
Años más tarde tu literatura fue herencia pura:
Dejaste huella en tus escritos, lo cual está dicho.
Tu esencia de letrado te hiso por siempre destacado.
Miguel fue un nombre fuerte como un corcel,
y para el saber fuiste siempre menester.
De gloria y orgullo llenaste tu país… ¡Eso te hizo feliz!
Pasaste largas horas en Orihuela donde naciste.
Luego con poesías y escritos llenaste tu adolescencia pura,
no por eso menos segura.
Luego de tus viajes a Madrid llegó la Guerra civil.
Tu estancia en la cárcel no te hiso menos heroico, y así patriótico.
Tu muerte a los treinta y dos estuvo cargada de adiós.
Y al escuchar tus poemas tristes, emotivos o felices se refleja toda tu alma,
emanada de tu grandeza clara, y también rara.
Tu obra, reflejo, autenticidad, valor y compromiso político.
Tú formación autodidacta, se nota en tu obra nata.
La separación de tu familia, y la feroz perdida de un hijo
te hicieron fuerte para poder sostenerte.
La política fue un medio de expresión, todo con pasión,
y la vida te pasó como un relato de ficción.
Algunas veces de pasión, otras con dolor.
Muchos te quisieron imitar. Más nadie te puede igualar, tamaño ejemplar…
¡Es para admirar! Y más que un poeta fuiste un artista con belleza.
Tu nombre y apellido son muy conocidos,
y por generaciones futuras seguirán y perdurarán…
Carlos M. Valenzuela Quintanar, México
NO SÉ QUÉ HABRÉ HECHO.
Ni en sueños ni despierto
Me acuerdo de haber
Sembrado ni cosechado
El mal.
Miguel Hernández.
¿Quién aliviará mis dolores
limón de huerta empobrecido,
sin las luces de tus halagos?
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 859
Mil poemas a Miguel Hernández
Es a destiempo cuando
ilusionan, no solo el espíritu
del viento, sino al hombre
de los bolsillos infinitos
llenos de vacíos.
Al hombre…
De los pies con sabor a campo,
sin tiempo.
No lo había, era indolente
¿se habrá quedado
en los lamentos de los muros
donde solo trinan los gorriones,
y donde las bellas ciudades
se olvidan de las
paredes frías, sucias, amargas?
Muros escondiendo
el grito de todos
los que juntan en la nada
sus sueños robados.
Solo en el firmamento
del poder importa
la zalamería y la mentira.
Los sueños “diferentes”
no interesan, es piel
ayer verdad hoy pasión sin fuego,
A su paso, ellos,
los poderosos
se vuelven ciegos de los
remendados, y les niegan
una mirada, una sonrisa.
Triste, no sé que habré hecho…,
los agravios llegan
bajo el viento, se ofrecen
en canciones de miel
…de esperanza.
y al final son olvido
en los campos de limoneros,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 860
Mil poemas a Miguel Hernández
incluso de las cabras
otrora ¡VIDA!
Vida de las piedras
al bañarse en las aguas
de los ríos,
ritmo y cadencia unidos
sabedores de la libertad
no la mía,
sin aire se ha perdido,
donde se pierden las mentiras
y los halagos.
¿Cómo remendar
la inocencia perdida
en la ignominia de tu desnudez
y tú trino en total
quietud? me pregunté un día.
Solamente, me dije,
en la encrucijada de
tu eterna libertad
y de mi eterna
necesidad de llenar
de poemas
tu inmaculada presencia
en mis noches de plena ensoñación
tú y yo…, bellas siluetas
acariciadas por la luna y las estrellas
y nuestras almas, Josefina,
inmersas en la eternidad de la
lluvia,
la tuya y la mía.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 861
Mil poemas a Miguel Hernández
Fernanda Lambri, Argentina
OTOÑO DE 1910.
(a Miguel Hernández)
Maravilloso reloj biológico
el de esa mujer de Orihuela,
universo, ramillete mágico,
dentro de su vientre prosperaba.Y un octubre, el día treinta
en pleno otoño floreció
incorporándose a la historia,
como Miguel, su segundo hijo varón.Pequeño niño pastor,
soñaba con otras metas
y va acopiando letras
para pintar a su sol.Y a las luminosas playas
que guardó en su corazón,
de su dorada Valencia,
“Río Segura” que no olvidó.Pluma dotada de genialidad
para disfrute de su prójimo
ideales colmados de nobleza,
nada amilanó su propósito.-
Soledad Benages Amorós, España
A Miguel Hernández, herido de poesía.
Y fluye, manantial suave, la muerte
para quien llega ahíto
al azul de Ítaca.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 862
Mil poemas a Miguel Hernández
Y sucede amarga la vida
para quien sólo roza
el orgásmico instante.
Y es dulce el amor
para quien anhelante
alimenta un sueño
Mayo de 2010,
En el Desierto del Sahara,
campamentos del pueblo saharaui, expulsado de su tierra,
Ceremonia del té en la jaima de Embarka
Soledad Benages Amorós
Fotografía con Josefina en la terraza
Hay rayos de sol que atravesaron nubes.
Miradas perdidas en la lontananza intuyen el paisaje del desposorio.
Quizá en esa terraza pudiera empezar la orgiástica placidez
que minimizara el dolor de ese camino de guijarros afilados.
Pero…
son miradas tristes, ausentes, fatigadas, dubitativas…
Su camino cambiaría los guijarros por cuchillos afilados:
incomprensión,
oscuros,
sangre,
silencios
y cebolla
…hasta la muerte,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 863
Mil poemas a Miguel Hernández
guadaña que cercenó el ansia de justicia, el amor a lo humano.
y dio cruel final al repto por la caverna
ideada por monstruos deshumanizados y ególatras.
Los ojos de Miguel no pudieron ser cerrados
siguió soñando eternamente
con la terraza de luz
abierta al horizonte obsesivamente buscado.
Dúo, Alfred Asís, Chile-Justina Cabral, Argentina
Alfred Asís
Miguel
Del pueblo
Miguel del amor, de la vida
Poeta de incursiones, desvanecido en las brisas
Cabrero, ofrendado a la tierra
Angustiado, entusiasmado
elevado al cielo...
Miguel, alfarero
de tus manos las prosas y los genios
idealismo invernal
de poeta y sombrero...
¡Ah! Miguel...
Poeta del pueblo...
Justina Cabral
poeta de la dulzura,
poeta de la humildad,
poeta de la ternura y de la sinceridad
poeta de la inocencia, de la justicia y la paz
Miguel, poeta Miguel
en mi alma siempre estas..
Alfred Asís
Impreso en las almas has quedado
así te rinden alabanzas
quienes de ti y obra han anunciado
que la magia tuya les ha tocado
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 864
Mil poemas a Miguel Hernández
Justina Cabral
Todos los pueblos te adoran,
todos Miguel te recuerdan,
todos te cantan Miguel,
bajo el sol y la arboleda
¡Hay Miguel... Miguel querido!
viviras entre poetas
y en mi alma entera.
Juana Robles Vidiaux, Cuba
….. Despedidme del sol y de los trigos.
Miguel Hernandez
AL POETA DE ORIHUELA
Hoy te levantas poeta
pugnaz desde cada flor
brindas miel para el dolor
en la timidez discreta.
Viento secular veleta
lira que pulsas la aurora
con ansias devoradora
roncas y catas la cima
la poesía se arracima
en tu soledad sonora.
Vienes del tiempo pulido
igual pero diferente.
Un temporal es tu frente
ira de pichón herido.
Para mutilar olvido
sereno quiebras cristales.
Emerges en manantiales
verso bajo piel curtida
soberbia cabeza erguida
desde el sol a los trigatales.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 865
Mil poemas a Miguel Hernández
Matilde Peláez, Rep. Dominicana
MIGUEL HERNÁNDEZ-POETA DEL Pueblo
Fue tu vida tan breve, intensa y sensiblera
amante de la lluvia, la luna, las estrellas, el sol.
Intenso fue tu amor por la natura bella
que matizo tu infancia con su aroma y color.
Quien lo diría, que de pastor de cabras
rebaño que de niño te indujeron guiar,
te inspiró el gran amor por las bellas palabras
escritas por Zorrilla, Miro ,Rubén Darío
entre tus favoritos poetas, a tratar.
Con tu autoeducación marchaste lejos,
hasta el siglo de oro, a conocer su mística,
a escudriñar los genios de ese ciclo inmortal,
de Góngora, Cervantes, Lope y Garcilaso,
cortejaste su estilo sin plagiar el tesoro
que enriqueció tu vida con tu mente tocar.
Esto te abrió la senda hacia el parnaso
y con brillante sapiencia, lograste avanzar.
En las gratas tertulias ¡que feliz te sentiste
actuando y declamando tus versos,
cosechando laureles en contagiosa alegría
y a todos, a tu paso, llegaste a cautivar!
Perito en Lunas, nace con entrañable esfuerzo.
Tu primer libro, al estilo Gongorino
lucha tenaz por mejorar tu léxico
que engalana con flores tu destino.
Amigos te rodearon, para abrirte camino,
allí Neruda, de socialismo liberal romántico,
Ramon Sije, de ética clerical, y fiel amigo
uno de ideal rebelde, otro con método divino,
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 866
Mil poemas a Miguel Hernández
distintos, pero firmes en deferir contigo.
Vino la guerra y cambió tu trayectoria,
en cumplimiento a tu deber te alistas
luchas por el pueblo, que mas te necesita
el marginado, el vejado en sus pobres conquistas
y contra el déspota que fabrica miseria y represión
y sufres, porque tu amada y tu crío están sufriendo.
Asi va tu joven vida trascurriendo.
salpicada tu historia de tristezas, triunfos,
alegrías, fracasos, que el tiempo va tejiendo
y enriquecen de realidad tus bellos versos
versos que sintetizan tu paso por la vida;
cabrero, amante esposo, romántico poeta
intrépido guerrero defensor del rendido,
tus sueños tan reales que no viste florecer.
Sembraste la simiente para generaciones
cosechar el rico fruto de tu buen proceder.
Verdes pastos, rebaños, rico aroma de flores
que enterneció tu alma y te inspiró a soñar.
Viviste el proceso de vida de tus cabras
bañadas por la lluvia, el olor de las hierbas,
de las flores silvestres,
el color de pintadas mariposas.
fuiste un amante fiel de la naturaleza,
le cantaste a la lluvia, a la luna, al sol,
sufriste injusticias, combatiste la pobreza,
todo quedo en tus obras; heterogéneo conjunto
que te inspiró a escribir, actuar y compartir.
¡Miguel Hernández, para el mundo y sus poetas
por siempre, en sus corazones, Miguel vas a vivir!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 867
Mil poemas a Miguel Hernández
José Ivam Pinheiro, Brasil
VIVAS AO POETA MIGUEL HERNANDEZ
Já desde pequeno o menino Miguel
sonha com livros e a poesia da vida.
Desvenda e recolhe letras – seu céu.
E cedo o teatro nasce e lhe convida.
No seu olhar brilho de ler livres livros.
Luz do “grupo de Orihuela” em poesia.
São frações de encanto de raro alvitre.
Altivez do tempo da emoção: ousadia.
Arde Hernandez feito “raio que não cessa”.
Drama e enciclopédia: é servo da cultura.
Espanha e guerra civil – povo em agruras.
E nos “teatros da guerra” germina o viver.
Pensar no bem comum e a paz florescer.
Joia poesia de amor ferido: Viva o Poeta!
Dúo, Alfred Asís, Chile-Nieves Merino, España
Miguel, del pueblo, de la vida y lucha constante
Alfred Asís
Avanza por los cerros
te siguen cabreros
Avanzas por los cerros
te siguen bayonetas
Avanzas en tus obras
te siguen las letras
Luego las penurias
Tu amada Josefina
Neruda, tu amigo
el exilio...
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 868
Mil poemas a Miguel Hernández
Tus campos, tu Padre insatisfecho...
¡Ah!... Miguel...
Cuanta pasión hermano ante tanto dolor
Cuanta ideología y fe en la misma
Cuanta muerte te acompañó
y cuanta vida se te quitó...
Nieves Merino
No ceja tu empeño.
Ardiente juventud
de hombre honesto
y alma pura.
Poeta de olivares,
pastizal y amores.
Versos de alegría
en dolores presos.
Alberti, Vallejo.
Lorca, Picasso...
Deslumbra tu mirada
profunda sus misterios
donándoles tu huella eterna
Pólvora mojada
negra en tu tintero,
roja en la batalla,
azul en tu cielo
y en blanco papel como tu alma
se desbroza y crece
con semilla fértil que en el mundo estalla.
Amor, ideales.
Sueños y esperanzas.
Fecundo en tus letras.
Rebelde con causa...
¡ Ay, hermano, Miguel, Poeta,
cuanto amor te acompañó,
cuánta vida dejaste en tus letras
cuánto fruto en tu dolor!.
Eterno y presente siempre.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 869
Mil poemas a Miguel Hernández
Yanni Mara Tugores Tajada, Uruguay
Pastorcillo de Orihuela
Pastorcillo de Orihuela,
niño, hombre, amor en guerra.
Exuberante huerta de Segura,
guió tu mano y tu pluma.
Quisieron callar tus versos,
en lo oscuro de una cárcel.
Y aún allí exaltaste,
la pasión más delirante.
Delirantes que han seguido,
todo tu peregrinaje.
aunque no te han conocido,
seguirán con tu mensaje.
Pastorcillo de Orihuela,
niño, hombre, amor en guerra.
Que triste verte partir,
dejando herida la tierra.
Celia Benfer, Paraguay
¡Oh poeta!A Miguel Hernández
La aureola del tiempo ha traído tu nombre en
mis manos recordando tu existencia con dolor
y tristeza.
En tu vida tan corta, dejaste un hito en el altillo
en este imperial mundo una vida con sabor a
himnos, voluntad y nobleza. Con tu muerte ¡vives!
Un comienzo de recuerdos y vivencia tuyas
marcan hoy tu presencia en este portal.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 870
Mil poemas a Miguel Hernández
En estas páginas de evocaciones con letras que
reviven tu camino por aquellas calles donde
dejaste tu distinguida esencia.
Vuelven tus pasos a florecer en mis verbos que
revoca el trayecto de tus sufrires ¡Tuviste fuerza!
bordaste con tu vida una frondosa alfombra de
virtudes que otorga tu entrada inmortal por esta
avenida de vidas latentes por el plano intacto
de tu huella.
¡Oh poeta!- tus hijos tu orgullo, el mundo tu
hogar, tu esencia inspira, tu presencia destina
a convocar tu nombre en esta historia inmortal.
Tu patria el cielo, Dios es tu padre, tus versos
son tus gritos y nuestro aprecio convoca a cantar
en tu recuerdo en este libro dedicado en tu honor
mil poemas para ti ¡Oh poeta admirable y eterno!
La luz que cubre tu camino en el infinito cielo en
donde tu alma notable descansa ya
estos honores que elevamos en tu memoria
quedarán en la gloria para un poeta superior.
Te recordamos con admiración y reverencia
honrando el camino, lo que sufriste entonces.
Tan trémulo y callado librando tus pesares
en cánticos y glosas, y nunca faltando el amor.
Félix Martin Franco, España
Espejo Poético
(En recuerdo y homenaje a Miguel Hernández)
Silenciosa huella de esparto
sobre un barbecho inhumano.
Manos de sangre y verso
esparciendo aromas de sentimiento.
Grito en puño cerrado
y rabias contenidas
que no han de volver
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 871
Mil poemas a Miguel Hernández
ni al regazo de tus musas
que siempre esperaron con miedo.
Miguel
hermano y compañero
vente a brindar
con licor de cebolla tierna
y lágrimas sin rebaño
con nosotros
los sedientos de paz y de justicia.
Nos enseñaste
a sembrar esperanza en cada casa
floreciendo los besos
huyendo de garras y desgracias.
Desde Ocaña a Orihuela
desde Madrid a Jaén
todos peregrinamos tus lares
encontrando a cada paso
nuestro poeta sincero
siempre en lucha
siempre amigo
siempre hermano.
Nuestro poeta…
nuestro rayo que no ha de cesar jamás
resurgiendo entre lunas y aceitunas
y vientres enamorados
fusionando ausencias con reencuentros
entre canciones sin fortuna.
Tus cartas de remite diluido
escritas en tinta y vino
busco por buzones y caminos
aviejando mi figura con arrugas cuán olivo.
(gracias por siempre Miguel)
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 872
Mil poemas a Miguel Hernández
Edy Luz Orrego, Perú
Al poeta pastor
La nana de la cebolla cantaba
en la cuna de los pobres
el manto de una noche fría sin luna
cubría las calles de tu pueblo, Miguel
España se quebraba en dos y quebraba
tu voz esperanzada...
Mil violines en la noche a tus musas despertaban
y tu canto de amor el alba anunciaba
el vientre de tus cabras susurraba
Tus caricias Miguel eran la caricia del sol y de la tierra
sonreías, soñabas, cantabas y escribías
versos con las manos de rocío cubiertas...
Tu canto era el canto de un pueblo libre
heroico y bondadoso que pedía pan
amor, paz y justicia.
Desgarrado por la guerra tu ser en dos se partió;
la mitad quedó en la aldea y la otra a la noche llegó
un rayo de esperanza te alumbraba...
Los tiranos que ahogaron en sangre a su pueblo
matarte quisieron pero no pudieron.
Nieves Merino Guerra, España
DON MIGUEL HERNÁNDEZ
Flamea tu verbo
en tu ardiente pluma
surcando los campos
de las almas nobles.
Cantas al amor.
Cantas a la Vida
que se te hace larga
en la espesa noche.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 873
Mil poemas a Miguel Hernández
Cantas al azul.
Cantas la alegría.
Cantas la esperanza.
Y tus melodías
amanecen tristes
con tu muerte arpía.
Cantas al amor.
Cantas a la vida
Cantas al azul.
Cantas la alegría.
Truncan tu esperanza
en trampa temida
en tu amado pueblo
con precoz partida.
David Henríquez, España
Estragos
Al "Poeta del pueblo" Miguel Hernández de España
Viene haciéndome estragos,
se va haciendo regalos,
y aunque vuelve otra vez me deja en paz
en mi dialéctica de amarrar los labios carnosos del quehacer.
Pero vuelve a la carga
desmoronando estampas
hasta que un día deje de volver
pues no encuentre asideros en mi ya férrea madurez.
Buenas noches, mercedes vuestras, intento recuperar
una reciente muestra de nuestra historia tan singular,
de esa historia omitida en el trabajo, el diario y el aula,
y con dolor del entorno familiar,
y de la que sabemos tanto como sabemos de Al-Qaeda.
Una iglesia católica, un ejército tradicional,
un señor de la tierra, un labrador y un pasado imperial.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 874
Mil poemas a Miguel Hernández
La segunda república apunto a equilibrar y, sin tacto,
derrocar la institucionalidad,
y las instituciones se alarmaron e hicieron un pacto...
Se volvió a las cruzadas
de exterminio en manadas
no sea que vuelvan a proliferar
e inquietar nuevamente la unidad tradicional.
Y de aquel movimiento
no quedó ni el intento.
Se perdió para siempre ese fervor,
revestido de luto exhausto, exilio y paredón.
El miedo y la miseria amedrentaron a la población.
Religiosa docencia de vuelta a la canonización.
El hombre un buen partido y la mujer virgen al matrimonio
segregada del mundo laboral.
Los hijos que dios quiera y sin mirar más hombre que a su Antonio...
Y esa fue la decencia
que dejaron de herencia.
Caudillo por una gracia de dios,
proclamado a si mismo salvador de una nación.
¡Después de la represión,
llega la generación
reina de la Transición!
¡Qué movida! ¡Qué eclosión!
Mayor de edad aún tengo que dilucidar
como alumbrar la cerradez de mis papás,
y esa distancia natural que existe escancia libertad
y me considera cual si fuera aún mi periodo de lactancia.
¡Cuánta laguna preside aún mi educación!
¡Cuántas vergüenzas! ¡Cuánta desinformación!
Y esa muchacha que me enciende me rechaza
¡Represión! cual si mi tan sola presencia la embaraza.
Me exilié voluntario en busca de alguna prioridad.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 875
Mil poemas a Miguel Hernández
Tanto revés diario ofusca y no hay que mirar hacia atrás.
Escabroso camino a decorar un futuro escenario,
tiempos de incertidumbre y antifaz.
Aprender un idioma y convertirme en un buen funcionario.
Mas la vida, muestrario sabio, proporcinó conclusión.
Y me erigí en propietario fundador de mi resolución.
Descubrí, planetario, investigar tipos de vocaciones,
creativa propuesta de limpiar
y hacer frente al destino, sus obstáculos y maratones.
Con el alma debajo
como un libro del brazo,
aspirando a llegar a algún rincón
que ennoblezca mi alcoba, mi despensa y profesión.
Y viajar por el mundo,
me perdonan si abundo,
desarrolla nuestra mentalidad
y nos aporta, sin duda, una valiosa libertad.
Ahora España ha cambiado, parece, de una forma sustancial,
pero dentro de la trastienda late aún esa realidad.
Nuestro tiempo habitado por tres generaciones dispares,
educados en su propia realidad.
Somos hoy el resultado de aquellos tremendos avatares.
Por mi parte, crecido, me proyecto con satisfacción,
y diseño, atrevido, mis proyectos con gran precisión.
Libre como un pecado absuelto en un tribunal de costumbres
maduradas y de mi propiedad,
y llevando a recado aquel dibujo atisbado en la lumbre.
Nuestra historia reciente
silenciada en la frente
ha sido erradicada e intento yo
refrescar la memoria anestesiada en el dolor.
Y mirar hacia el frente
cabalmente consciente,
removiendo el pasado cual terreno
de amor roturado que sembrado dará flor.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 876
Mil poemas a Miguel Hernández
Antonino Nieto Rodríguez, España
Qué traes, lluvia!
Qué vientre anida en tu pulso!
Hubo un tiempo…
Así comienzan las cuentas de la inútil rendición
Quien así se alimenta
Sabe de los sueños justamente lo que calla.
En ese solar de la barbarie
Hoy, precisamente hoy, 27 de abril del año 2010,
Recorro el deglutir del barro a palabra limpia
Cómo si no orientarse en este salón del mercado…
Podría no haber sucedido
-Qué sería de ti, entonces!Podría señalarte que la cebolla me la prohíbe el cuerpo
Y que la muerte es cosa rancia
-como el oxígeno, o la bolsa, invisibilidad al alza!Que a nadie interesarían tales pogromos
A no ser porque en ellos pace el germen que en todo se pronuncia:
Tu nombre, Miguel, o el mío,
O los muchos hartazgos que modelan los sueños…
En ese sueldo o insomnio
-qué traes, lluvia!
Qué cuento dibujan tus alas!La cal de la obediencia preña a la palabra
¿o es al inacabable aullido del dolor , a la risa,
A cuanto en el cristal del paso brota irrespirable?
Maribel Alonso, España
Lo más imprescindible,
Miguel, habla todavía
y en vano taparéis
lo que robasteis,
ceniza, la memoria del nombre
y apellido…
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 877
Mil poemas a Miguel Hernández
Aquí yace un hombre, dirán,
quemando de sí mismo la palabra
sangre y memoria,
boca roja y encendida.
Aquí vivió un hombre, dirán,
su terca independencia
frente a los olvidos
contra el fraude
eternamente digno y solitario
aún permanece en pie
con su palabra
dignificando con ella
la vileza de un tiempo
que a todos nos salpica.
Cuando seáis polvo
cuando seamos polvo
cuando seamos polvo, él…
¡Él hablará todavía!
Margarita Marta Yácamo, Argentina
MIGUEL SE LLAMA
¡Muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará
algún día entre los azahares de su dormida tierra!
PABLO NERUDA
Hijo hechizado de lunas de Orihuela.
Fiel hijo republicano y comunista,
desbordado de fuegos libertarios.
Ardiente telaraña de ideales.
De niño, de joven y de adulto
sumergido en el vértigo. En el vértigo
de la luminosa palabra liberada.
Y en el de la revolución
que desgarraba a la patria amada.
¡Pastor de la ubérrima pluma!
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 878
Mil poemas a Miguel Hernández
¡Soldado de la palabra fértil!
¡Ni siquiera la cárcel silenció su mensaje!
Crucificado en el dolor de tres heridas:
la de la vida
la del amor la de la muerte.
Para la libertad, con punzante
y genuino dolor en el alma aterida,
ofrendó su lucha y su coraje.
Amar fue para él una necesidad.
¡No una costumbre!
Amor de esposo, amor de padre,
amor de patriota enardecido.
Para su hijo amado y para todos
quiso forjar la paz ¡Tan necesaria!
Arracimó su corazón furias y penas.
Breve, breve su vida.
Larga, larga la angustia alimonada.
¡Tanto vivir circundado de penas y de cardos !
¡Tanto transitar la vida desatenta
para recibir (tan joven) a la muerte enamorada !
Como Dios o el destino, a veces, lo disponen. . .
¡Se consumió en su propio fuego libertario!
Clevane Pessoa, Brasil
Colóquio com Miguel Hernandes
Foste dado à luz a partir de Orihuela...
Sem jamais negar tuas raízes, traçaste outros caminhos
Por onde andaste nos meandros da Poesia,
E em todas as casas onde chegaste
Abriste cada janela
Para deixar que versos e rimas
Em rota de vôos impensados antes,
Alcançassem os segredos
De lograr alturas e perder todos os medos.
Amaste mulheres com a chama
da tua liberdade de ser, acesa
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 879
Mil poemas a Miguel Hernández
Na lareira de tua alma.
Teu espírito manteve vívida a chama votiva
Da luta necessária , a combater todo bom combate,
Corajosa/mente.
Foste retirado dessa luz neste Planeta
Depois das lutas
E das mazelas de um corpo ferido.
Mas entraste no túnel condutor
E lograste alcançar a Luz maior.
Por isso, Miguel Hernandez,
Teu nome reborda palavras de justiça
Em todas as gargantas.
E o som delas escreve
a tua história na História
e jamais serás esquecido,
porque enquanto Poeta,
enquanto combatente,
mantiveste a integridade necessária
aos heróis verazes.
Miguel Reinoso Cordoba, Perú
“Un Canto a Miguel Hernández”
Miguel Hernández Miguel
con tu verso en manantial
hiciste un cántico fiel
para un coro angelical.
Con la mas hermosa estela
un día treinta de octubre
un astro brillante cubre
el poblado de Orihuela.
Será que en esa parcela
en medio de algún vergel
cual pétalos de un clavel
tus tiernos ojos abriste ,
cuando dichoso naciste
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 880
Mil poemas a Miguel Hernández
Miguel Hernández Miguel
En ambiente chacarero
tu espíritu desarrolla
las “Nanas de la Cebolla”
que observa “El Niño Yuntero.”
Como todo buen trovero
abrazando un ideal
brindaste el mejor recital
a tus amigos queridos
en “El Tren de los Heridos”
con tu verso en manantial
Como “El Rayo que no cesa”
por ser Hijo de la Luz”
a pesar del arcabuz
tu númen de amor se expresa.
Como la Patria interesa
verseaste para “Teruel “
y hasta en la guerra mas cruel
siendo soldado a tu esposa
tomando la mejor rosa
hiciste un cántico fiel
El destino sin razón
quiso un día sin recelo
ofrecerte un final ”Vuelo”
en “El Ultimo Rincón.”
Hoy “Me sobra el Corazón””
para pensar siempre igual
que ante la “Muerte Nupcial”
como las preciosas gemas
harás cantos y poemas
para un coro angelical.
Alfred Asís Poetas del Mundo Isla Negra Chile
pág. 881
Mil poemas a Miguel Hernández
Mirian Estrada Medina, Cuba
EVOCACIÓN DE LA PÉRDIDA
Tristemente taconea
la muerte sobre la rosa, M

Documentos relacionados