Versión PDF - Anestesia en México
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Informe de Casos Anestesia para Glosectomía en un Lactante con Síndrome de Beckwith-Wiedemann Dr. Víctor Whizar-Lugo,1 Dra. Alicia Sigler-Moreno,2 Dra. Patricia Ontiveros-Morales,3 Dra. Angélica Gómez-Ramírez,4 Dr. Francisco Anzrena-Vallarino,3 John Domínguez,5 Dr. Marte López-Gómez,6 Josué Torres-Chávez4 Anestesiólogo-Intensivista Hospital General de Tijuana, ISESALUD Tijuana B.C., México 2 Cirujano Plástico Clínica de Cirugía Craneofacial Hospital Infantil de Las Californias Tijuana B.C., México 3 Servicio de Anestesiología Hospital Infantil de Las Californias Tijuana B.C., México 4 Residente de Anestesiología Hospital General de Tijuana, ISESALUD Tijuana B.C., México 5 Estudiante de Medicina Facultad de Medicina Universidad Autónoma de Baja California Tijuana B.C., México 6 Cirujano Pediatra Hospital General de Tijuana, ISESALUD Tijuana B.C., México Dirección del primer autor: Unidad de Cuidados Intensivos Hospital General de Tijuana, ISESALUD Avenida Centenario 10851 Tijuana B.C., México [email protected] 1 Este artículo se acompaña de un videoclip Resumen El síndrome de Beckwith-Wiedemann se caracteriza por onfalocele, macroglosia, visceromegalias e hipoglucemia neonatal, además de una gran variedad de anomalías clínicas y de laboratorio. Esta entidad también se conoce como síndrome de onfalocele, macroglosia y gigantismo. Los problemas anestesiológicos más importantes derivan de la hipoglicemia y de la macroglosia. Es obligatorio realizar una evaluación preanestésica muy cuidadosa con escrutinio del corazón, sistema urinario al igual que de la vía aérea. Los niños con síndrome de Beckwith-Wiedemann pueden requerir diferentes procedimientos quirúrgicos. Se debe de anticipar un manejo difícil de la vía aérea © Anestesia en México 2006;18(2): 158-164 158 vital monitorizar la glicemia perioperatoria para evitar secuelas neurológicas secundarias a hipoglicemia no diagnosticada. Se reporta el manejo perianestesiológico de un infante Mexicano de nueve meses de edad con síndrome de BeckwithWiedemann que requirió una resección parcial de lengua. Después de una evaluación meticulosa, se realizó intubación nasotraqueal con un tubo 4.5 armado, el cual se introdujo con facilidad bajo inducción con propofol-vecuronio. La anestesia la unidad de cuidados intensivos pediátricos. Los niveles perioperatorios de glucosa fueron normales. Todos los pacientes con síndrome de Beckwith-Wiedemann deben de ser considerados como vía aérea difícil. Palabras clave: Síndrome de Beckwith-Wiedemann, manejo anestésico. Abstract Beckwith-Wiedemann syndrome is characterized by exomphalos, macroglosia, visceromegaly and neonatal hypoglycemia as well a myriad of other clinical and laboratories features. This syndromatic entity is also known as exomphalos, macroglosia, and gigantism syndrome. Main anesthesia management problems associated with Beckwith-Wiedemann syndrome are hypoglycemia and tongue enlargement. Careful preanesthesia evaluation is mandatory including a full assessment of the heart, urinary system as well as the airway patency. Child with Beckwith-Wiedemann syndrome may require different type secondary to unrecognized hypoglycemia. We report the perianesthetic management of a nine months old Mexican infant who required a tongue reduction. After a careful evaluation, a 4.5 armed nasotracheal intubation was easily performed under propofol-vecuronium induction. prolonged for 24 hours in the pediatric intensive care unit. Perioperative glucose levels were normal. Key words: Beckwith-Wiedemann syndrome, anesthesia management. Introducción E l manejo de la vía aérea en los niños con anomalías craneofaciales es un reto con muchas variables. Los anestesiólogos debemos de conocer las craneofaciales como son el labio y paladar hendido, con y sin Pierre-Robin, disostosis mandibulofacial, microsomia hemifacial, disostosis craneofacial, síndrome de Down, de Klippel-Feil, de Beckwith-Wiedemann, entre otras.1 El Síndrome de Beckwith-Wiedemann (SBW) es una alteración con crecimiento exagerado, que fue descrita en 1963 por J. Bruce Beckwith en Los Angeles California quien informó tres casos postmortem, y año después por Wiedemann en Kiel Alemania que reportó tres casos de hermanos.2,3 Ambos investigadores describieron características similares en sus pacientes que no correspondían a ninguno de los síndromes craneofaciales hasta entonces descritos. También se le conoce como Síndrome de Onfalocele-MacroglosiaGigantismo o EMG. Este síndrome es esporádico, pero puede tener un carácter hereditario autosómico dominante, con características clínicas muy variables. Tiene una incidencia de 1:15,000 nacimientos, aunque estas cifras son aproximadas ya que las formas leves no son diagnosticadas. Se considera que este síndrome se debe a una alteración genética, ya sea por una mutación nueva o por transmisión familiar en forma autosómica dominante.3,4,5 Las características diagnósticas más comunes son macrosomia unilateral, macroglosia y onfalocele. Otras alteraciones que acompañan a este síndrome son hipoglucemia neonatal o infantil, alteraciones metabólicas, visceromegalias, exoftalmos, tumores embrionarios, retraso psicomotor, microcefalia, cardiopatías congénitas, hipoventilación alveolar, hipotiroidismo, policitemia y malformaciones óseas, entre otras. Por lo general no se encuentran cambios en el cariotipo y solo en el 1% hay anomalías en el cromosoma 11p15.5, 11p15.5, 11p15.5, 5q35.6 El diagnóstico diferencial debe de establecerse con el síndrome de Simpson-GolabiBehmel, síndrome de Perlman, síndrome de Costello y con la hemihiperplasia aislada que puede asociarse con el síndrome de Proteus y de Klippel-Trenauny-Weber. Los pacientes con SBW pueden requerir procedimientos quirúrgicos desde su nacimiento, o en cualquier etapa de su vida, si bien la mayoría de los casos reportados han sido intervenidos antes de los tres años de edad. Las correcciones más frecuentemente reportadas son por el onfalocele, hernias inguinales y macroglosia. Otra cirugía de menor frecuencia son las correcciones del labio y paladar hendido,7,8,9 Más del 50% de estos pacientes nacen prematuros, lo cual incrementa su riesgo anestésico debido a las enfermedades propias de la prematurez como membrana hialina.10,11 Se describe un lactante menor con SBW al que se le hizo resección parcial de lengua para facilitar su alimentación al seno materno. Descripción del paciente Se trata de un niño mexicano de 9 meses de edad, con peso de 10.7 kg, signos vitales normales. Con padres sanos, sin antecedentes familiares SBW. Los datos más relevantes izquierdo, macroglosia extrema, hernia umbilical gigante y microcefalia leve. El laboratorio mostró anemia leve, © Federación Mexicana de Anestesiología, A.C. 159 con glucosa preoperatoria de 65 mg/dL. La radiografía del tórax reveló una silueta cardiaca normal, timo crecido y se visualizó el húmero izquierdo más voluminoso que el derecho. La radiografía lateral de cabeza y cuello para visualizar la columna de aire de la vía aérea naso traqueal fue normal, excepto el crecimiento lingual y la reducción de la columna de aire entre la lengua y el paladar secundaria a la macroglosia.(Figuras 1,2,3) El ecocardiograma y ultrasonido renal y hepático fueron normales. Figura 2. Note el mayor crecimiento del húmero izquierdo, timo aumentado de tamaño y la silueta cardiaca normal. Figura 1. Se muestran las características morfológicas de mayor importancia. A) Macroglosia, hernia umbilical y microcefalia leve. B) Macroglosia, hernia umbilical gigante y aumento de volumen del hemicuerpo izquierdo. C) La lengua macroglósica anticipa intubación difícil. Manejo anestésico Se diseñó un plan de manejo de la vía aérea que incluyó: y naso traqueales, mascarillas faciales de varios tamaños, hojas curvas y rectas. Se medicó con 0.5 mg de lorazepam oral y 0.3 mg de atropina intramuscular una hora antes de iniciar la anestesia. Una vez en el quirófano se canalizó una vena periférica con solución mixta, se monitorizó con presión arterial no invasiva, cardioscopio y oximetría digital. Antes del inicio de la inducción se probó una mascarilla facial de un tamaño que permitiera que la lengua protruida no fuera problema para acomodarla durante la ventilación manual al inicio de la inducción anestésica. Se inició la inducción con propofol 4 mg/kg y 0.08 mg/kg de vecuronio. Acto seguido, posible visualizar con facilidad la cuerdas vocales, y por ser un hospital de enseñanza, el primer intento de intubación nasal se le dejó al residente de tercer año quien no pudo colocar 160 © Anestesia en México 2006;18(2): 158-164 Figura 3. Note la sombra lingual crecida que favorece disminución de la columna de aire en la cavidad oral. La vía aérea superior se aprecia normal. el tubo endotraqueal, mismo que fue insertado al segundo intento por el anestesiólogo con asistencia de dos colegas para facilitar la ventilación y jalar la lengua hacia fuera y a la derecha, con el objeto facilitar la laringoscopía e intubación. Se colocó una sonda naso traqueal armada del 4.5 con globo. nitroso y se le infundieron soluciones mixtas. Las glicemias la secuencia seguida durante la intubación nasotraqueal. Se 000 con el objetivo de disminuir el sangrado quirúrgico. Se resecaron 40 g de la porción anterior de la lengua (Figura 6) y posteriormente se realizó la hernioplastía umbilical. La cirugía trascurrió sin accidentes y no hubo incidentes trans anestésicos. Figura 4. Secuencia de intubación endotraqueal. La imagen superior muestra la lengua contenida dentro del hueco de una mascarilla facial, lo cual facilita la ventilación espontánea inicial. En la imagen intermedia se aprecia el tubo endotraqueal armado insertado a través de la narina derecha, y en la imagen inferior se aprecian las cuerdas vocales bajo visión directa facilitada con un laringoscopio con hoja recta. Figura 5. Se ilustra la secuencia de intubación nasotraqueal asistida. La imagen superior muestra el momento crítico de laringoscopía con intubación nasotraqueal. Note 5 manos durante la maniobra. La imagen intermedia muestra el tubo nasotraqueal muy avanzado, nasotraqueal armada, conectada a un circuito Bain. Discusión El manejo anestesiológico de los pacientes con SBW se considera como un reto. La historia natural de los pacientes con SBW es muy variable y se han reportado diversos hallazgos; el 50% se asocia con polihidramnios, prematurez y macrosomía fetal, cordón umbilical muy largo y placenta aumentada de tamaño.4,5 La prematurez favorece una mortalidad hasta del 20%, en especial relacionada con hipoglucemia neonatal, cardiopatía y la macroglosia.6 La macroglosia y la macrosomia habitualmente se presentan desde el nacimiento, aunque se han visto que ambas se pueden desarrollar en el período postnatal,12 y la mayoría de los pacientes crecen rápidamente en los primeros años de su vida, aceleramiento que disminuye alrededor de los 8 años de edad. Otras alteraciones comunes en estos individuos son el onfalocele, hernia umbilical, diastásis de rectos. El aumento volumétrico del hemicuerpo o hemihiperplasia © Federación Mexicana de Anestesiología, A.C. 161 Tabla 2. Alteraciones del medio interno en el SBW. Hipoglucemia Hipotiroidismo Policitemia Pérdida de la metilación Hipercalciuria Hiperlipidemia, hipercolesterolemia con alteraciones renales como displasia medular, sistema colector duplicado, nefrocalcinosis, quistes, medula renal en esponja, divertículos, nefromegalia y tumor de Wilms.16,17 Otros tumores asociados al SBW son el hepatoblastoma, neuroblastoma, rabdomiosarcoma , gonadoblastoma y carcinoma de suprarrenales.18 Se han descrito anormalidades Figura 6. La imagen superior muestra el corte lingual en W de la glosectomía parcial. La imagen inferior deja ver el edema lingual postquirúrgico inmediato que obligó la prolongación de la intubación nasotraqueal y manejo en la unidad de cuidados intensivos pediátricos por 24 horas. usualmente se presenta desde el nacimiento y se hace más evidente durante su crecimiento (Figura 1); puede afectar solo algunos segmentos corporales, tejidos y órganos. Cuando se afectan varios segmentos la macrosomia puede ser unilateral o involucrar segmentos en forma contralateral.13 Los pacientes con cardiomegalia idiopática son detectados en la infancia, hallazgo que se resuelve sin tratamiento. Las anomalías anatómicas cardiacas son infrecuentes,3 aunque una serie de 13 infantes con SBW mostró que 12 tuvieron anomalías cardiovasculares; siete con cardiopatías congénitas (defectos septales interauriculares y ventriculares, persistencia del conducto arterioso, tetralogía de Fallot, hipoplasia ventricular izquierda), y cinco con cardiomegalia idiopática.14 Tubbs y Oakes15 describieron un caso con malformación Chiare I. Estos niños con SBW pueden cursar pabellones auriculares, pliegues en el reborde posterior del hélix, hemangiomas, hipoplasia mediofacial, diastasis de rectos anteriores del abdomen, edad ósea avanzada. Los gemelos monozigotos con SBW suelen ser mujeres y discordantes; sin embargo, se han reportado gemelos monozigotos hombre y mujer concordantes para SBW, al igual que gemelos discordantes.19,20 La hipoglucemia ha sido mencionada como uno de los factores determinantes en la evolución de estos pacientes, aunque la mayoría de los niños que la presentan, esta es leve y transitoria. Se ha atribuido a nesidioblastosis que en ocasiones hace necesaria la resección parcial del páncreas.21 En los casos con hipoglucemia severa pueden tener secuelas neurológicas persistentes. Otras alteraciones metabólicas menos frecuentes incluyen hipotiroidismo, hiperlipidemia, hipercolesterolemia, policitemia e hipercalciuria.22 Las tablas 1 y 2 muestran la anomalías morfológicas y metabólicas del SBW. El diagnóstico de SBW se puede sospechar antes del nacimiento; las embarazadas con historia familiar de este síndrome, ó en aquellas con polihidramnios el ultrasonido puede demostrar onfalocele, macrosomia, macroglosia y engrosamiento placentario con quistes.23,24 El desarrollo de los niños con SBW suele ser normal, excepto en los que tienen anomalías cromosómicas,25,26 historia de la infancia las complicaciones son raras y el pronóstico es favorable. La evaluación pediátrica extensiva, preanestésica y pre quirúrgica en los pacientes con SBW son la clave del éxito. Nuestro paciente fue consultado por primera ocasión alimentarse al seno materno. Se hizo el estudio habitual en estos casos y se decidió postponer su cirugía hasta lograr un mejor estado nutricional y efectuar una valoración completa, Tabla 1. Características morfológicas del síndrome de Beckwith-Wiedemann Gigantismo Cardiopatía congénita, cardiomegalia Criptorquidia Macroglosia Tumores embrionarios Exoftalmos Visceromegalias Microcefalia, occipucio prominente Hoyuelos y pliegues auriculares Onfalocele o hernia umbilical Diastasis de rectos Paladar hendido Hernia inguinal Edad ósea avanzada Polidactilia 162 © Anestesia en México 2006;18(2): 158-164 incluyendo el sistema cardiovascular y urinario.27 Los principales problemas en el manejo anestésico del síndrome de Beckwith-Wiedemann son la hipoglucemia y la macroglosia.7,8,9,10,11,21,27 en el periodo perioperatorio y se debe realizar monitoreo frecuente de glicemias periférica y central,8 vigilancia que debe extenderse hasta que el paciente es dado de alta del hospital. En ocasiones los incrementos paulatinos del aporte de glucosa son inadecuados ya que estimulan la producción de insulina por las células beta del páncreas que están El crecimiento lingual de estos infantes propicia severos cambios psicológicos y funcionales; obstrucción de la vía aérea, limitación a la alimentación, sialorrea, articulación de sonidos, deformaciones dentoesqueléticas, cambios 28,29,30 bajo anestesia general. manejo de la vía aérea por lo que es mandatorio establecer un protocolo preanestésico de estudio y evaluación meticulosa de la vía aérea. En nuestro paciente la radiografía lateral mostró disminución de la columna aérea de la cavidad oral debida a la macroglosia, mientras que la vía nasotraqueal fue normal. Este dato, el tipo de cirugía planeada y las recomendaciones de la literatura consultada nos orientaron para realizar intubación nasotraqueal después de que la laringoscopía mostraba las cuerdas vocales normales y anestesia, es mandatorio tener listos todos los dispositivos cricotiroidotomía y traqueotomía, ya que estos pacientes se consideran siempre como portadores de vía aérea de difícil. El manejo de la vía aérea dependerá de dos factores; el tamaño de la lengua y el tipo de cirugías que se tengan planeadas en cada enfermo. Si la lengua es enorme como en nuestro paciente, es recomendable la intubación naso traqueal de primer intento. Los pacientes con lenguas no tan grandes se pueden manejar con mascarilla laríngea, si la intubación endotraqueal no es posible. Cuando la cirugía es oral, se recomienda que la intubación sea naso traqueal para evitar extubaciones accidentales en el transoperatorio. Si la cirugía no involucra la cavidad oral, la vía aérea se puede asegurar con mascarilla laríngea,31 tubo orotraqueal o bien, con intubación naso traqueal. Una vez que se ha valorado la vía aérea y se cuenta con recomendable realizar una laringoscopía con el paciente despierto para evaluar la posibilidad real de intubación endotraqueal, ya sea oral o nasotraqueal. Si se trata de un paciente muy combativo se puede iniciar una inducción con mascarilla facial uno o dos números más grande para que dé cabida a la lengua protruida, o bien, con dosis subanestésicas de propofol o tiopental. Esto facilita la laringoscopía y la valoración de intubación. Es conveniente no administrar relajantes musculares hasta tener una laringoscopía diagnóstica, o hasta después de haber intubado al paciente. Asegurada la vía aérea, el mantenimiento de la anestesia puede realizarse con halogenados, agentes endovenosos, con o sin relajantes musculares dependiendo de cada caso y el plan quirúrgico.21,32,33 Cuando la cirugía involucra la cavidad oral es recomendable trasladar al paciente a terapia intensiva y extubarlo al día disminuir. Esto evitará problemas obstructivos de la vía aérea por edema o sangrado. Celiker y cols.9 describieron un caso de 3 meses de edad al cual se le realizaron broncoscopía sin incidentes transanestésicos pero que no pudieron extubar de inmediato por traqueomalacia. Thomas y McEwan34 describieron un paciente de 13 meses de edad que además de tener síndrome de Beckwith-Wiedemann cursaba con enfermedad de Kawasaki; este niño que ingería warfarina y aspirina para prevenir la extensión de una trombosis coronaria, tuvo lesión traumática de su lengua con sangrado y edema de la misma que requirió cirugía urgente. El manejo de los pacientes con SBW y sus familias debe de ser integral y multidisciplinario, incluyendo la orientación genética y el seguimiento a largo plazo en la rehabilitación y búsqueda de neoplasias hasta los 8 años de edad ya que el 4 al 7% desarrollaran una neoplasia, 60% de las cuales será un tumor de Wilms.18,35,36 Existen grupos de apoyo en Internet para pacientes con SBW y sus familiares que deben de ser recomendados como sitios de consulta.37,38 Desde el punto de vista anestesiológico todos los pacientes con síndrome de Beckwith-Wiedemann deben de ser considerados como de alto riesgo debido a que son portadores de una vía aérea potencialmente difícil, además de todas las anomalías mencionadas, en especial la prematurez, la hipoglucemia refractaria y las cardiopatías. Referencias 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. Nargozian C. The airway in patients with craniofacial abnormalities. Paediatr Anaesth 2004;14:53-59. Beckwith JB. 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