La caída de Constantinopla La caída de Constantinopla
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La caída de Constantinopla La caída de Constantinopla
Bitácora Categoría: Bitácora Publicado el Lunes, 04 Febrero 2013 09:00 Escrito por Roberto Alonso Tajadura Visitas: 1790 La caída de Constantinopla Roberto Alonso Tajadura Heredera de la majestad y el título imperial de Roma, Constantinopla atesoró, hasta su caída a manos del Imperio otomano, sendos siglos de historia y poder que hicieron de ella una urbe fastuosa y magnífica. Su cronología oficial se remonta al año 395 d. C. cuando muere Teodosio I y se divide su legado entre el Imperio de Occidente, que conserva la capitalidad en Roma, y el Imperio de Oriente que, con Constantinopla como capital, integra los Balcanes, Asia Menor, Mesopotamia, Siria, Palestina y Egipto. El nombre de la ciudad fue puesto en honor a Constantino el Grande, quien refundó en 324 d. C. la antigua colonia griega de Byzantium, cuyo emplazamiento, a orillas del Bósforo, entre el mar de Mármara y el mar Negro, hizo de ella una ineludible encrucijada comercial. La caída de Constantinopla Roberto Alonso Tajadura 1/4 Phoca PDF Bitácora Categoría: Bitácora Publicado el Lunes, 04 Febrero 2013 09:00 Escrito por Roberto Alonso Tajadura Visitas: 1790 Heredera de la majestad y el título imperial de Roma, Constantinopla atesoró, hasta su caída a manos del Imperio otomano, sendos siglos de historia y poder que hicieron de ella una urbe fastuosa y magnífica. Su cronología oficial se remonta al año 395 d. C. cuando muere Teodosio I y se divide su legado entre el Imperio de Occidente, que conserva la capitalidad en Roma, y el Imperio de Oriente que, con Constantinopla como capital, integra los Balcanes, Asia Menor, Mesopotamia, Siria, Palestina y Egipto. El nombre de la ciudad fue puesto en honor a Constantino el Grande, quien refundó en 324 d. C. la antigua colonia griega de Byzantium, cuyo emplazamiento, a orillas del Bósforo, entre el mar de Mármara y el mar Negro, hizo de ella una ineludible encrucijada comercial. En relación con la antigua Roma, sus destinos no pudieron ser más divergentes. Mientras la primera, víctima de una ingobernable crisis económica, cayó bajo el empuje de los germánicos; la "Segunda Roma" sorteó las pueblos invasiones bárbaras, y fue capaz, con el emperador Justiniano, de restaurar la gloria romana en el Mediterráneo. Para ello, Bizancio se apoyó en un disciplinado ejército del que destacaban su caballería pesada o catafracta, y una eficaz marina que no dudaba en aplicar contra sus enemigos el temido "fuego griego", una sustancia inflamable elaborada a base de nafta, azufre, cal viva y resinas que ardía incluso sobre el agua. Por lo demás, la firmeza religiosa en torno al cristianismo y la helenización de su Corte actuaron como sólidos elementos de cohesión que marcaron el proyecto imperial hasta su desdichado final en 1453. 2/4 Phoca PDF Bitácora Categoría: Bitácora Publicado el Lunes, 04 Febrero 2013 09:00 Escrito por Roberto Alonso Tajadura Visitas: 1790 Hasta entonces, todo tipo de avatares moldearon indefectiblemente su personalidad: la efervescencia mercantil de los años de esplendor, el cisma religioso y la ruptura con el Papado, el saqueo perpetrado por los cruzados a comienzos del siglo XIII, la configuración del fascinante e influyente arte bizantino, etc. De todos ellos, sin embargo, ninguno sería tan determinante como la ascensión del Imperio otomano, el cual, habría de engullir entre los siglos XIV y XV la totalidad de los territorios bizantinos en Asia Menor y los Balcanes; y a la postre, la propia capital, a la que taimadamente los turcos consentían que ejerciera, a cambio de oro, una simbólica potestad sobre sus menguantes dominios. Así, a principios del quince, cuando apenas tenía nada que ofrecer para conservar su status, al anacrónico Imperio bizantino, aislado por tierra y reducido prácticamente a Constantinopla, sólo le restaba esperar el último envite. El asedio se inició a comienzos de 1452. Para entonces, quienes no habían huido de la ciudad, difícilmente podrían hacerlo. Del millón de almas con que había contado la ciudad un par de siglos antes, se pasó a una escueta décima parte. Sin ayuda exterior, y frente al formidable ejército que había desplegado el sultán Mehmet II, cuya principal fuerza de choque la representaban los temibles jenízaros, Bizancio fue a su suerte. De nada sirvieron, en esta abandonada ocasión, las impresionantes murallas del siglo V que levantó Teodosio II, ni la gruesa cadena que cerraba por mar al otrora transitado "Cuerno de Oro", impidiendo el acceso al puerto. La inagotable fuerza militar turca, apoyada por la artillería, y su estratagema de eludir dicha cadena arrastrando los barcos por tierra, condujeron a los defensores, acosados por todos sus flancos, a una inapelable derrota. El asalto definitivo se produjo la noche del 27 de mayo de 1453. Tras sucesivas oleadas, los 3/4 Phoca PDF Bitácora Categoría: Bitácora Publicado el Lunes, 04 Febrero 2013 09:00 Escrito por Roberto Alonso Tajadura Visitas: 1790 turcos rompieron las bizarras defensas de la ciudad y penetraron en ella. A la desesperada, Constantino XI y su guardia cargaron contra los atacantes cayendo éste herido de muerte. Sin mando efectivo, la ciudad sucumbió y los constantinopolitanos fueron pasados a cuchillo o reducidos a la esclavitud, la gran basílica de Santa Sofía se transformó en mezquita y, por último, la ciudad se rebautizó como Estambul. Pasado un tiempo, y en un intento de preservar la tradición imperial, Iván III, reunificador de Rusia y casado con una sobrina de Constantino XI, adoptaría el título de Zar - César en ruso -, incorporaría a su divisa el águila bicéfala de Bizancio, se proclamaría protector de la Iglesia ortodoxa y establecería la capital del Imperio ruso en Moscú, la ciudad que, por el influjo artístico y arquitectónico de Bizancio, se convirtió con todo merecimiento en la "Tercera Roma". Sin embargo, esta es ya otra historia. 4/4 Phoca PDF Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)