Texto completo - Centro de Estudios Andaluces

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Texto completo - Centro de Estudios Andaluces
ANDALUCÍA
Redacción y Administración, en el domicilio social
del Centro Andaluz, Azofaifo núm. 2.—Toda la
•
correspondencia al Administrador
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AÑO I
Noviembre, 1916
Precios de suscripción: En España, un año, 1*50 pesetas—Extranjero, 2'50 pesetas.—Anuncios a precios convencionales.—Número suelto, 10 céntimos
REVISTA MENSUAL, EDITADA POR EL CENTRO ANDALUZ DE SEVILLA
DEL CENTRO ANDALUZ
NUESTRO PROGRAMA Y NUESTRO HOGAR
E
L domingo 22 de octubre se Inauguró el domicilio social del Centro Andaluz, instalado en el número 2 de la calle Azofaifo. El local se vio
muy concurrido.
Presidió la sesión don Blas Infante. Comenzó el acto con unas breves
palabras de don Rafael Ochoa, en las que ofreció a los socios el local que se
inauguraba, que si no era al presente lo espacioso que precisaba, más adelante, cuando las sanas ideas del regionalismo andaluz fueran arraigando en la
opinión, como es de esperar ocurra, y la Sociedad se nutra con mayor numero de individuos, los regionalistas contarán con un Centro cual les corresponde.
A continuación el señor Infante dio lectura a un extracto del programa
del Centro Andaluz y formas prácticas que lo contienen.
I
Orden nacional (reformas de la Constitución)
I. Heterogeneidad en la organización interregional. —Las regiones
cuyas provincias se mancomunen previamente, conforme a la vigente legalidad, podrán solicitar y obtendrán de los Poderes nacionales, la autonomía
que solicite la Mancomunidad en los órdenes siguientes: Hacienda; Instrucción; Beneficencia y Obras públicas regionales; Creaciones jurídicas de orden
privado; Organización de las funciones y funcionarios encargados de su aplicación. Así llegará a constituirse ordenadamente la federación de las regiones
españolas.
II. El Poder nacional tendrá siempre a su cargo: - Relaciones internacionales y de comercio; Moneda; Correos; Obras públicas. Instrucción y be-
NÚM.
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neficencia generales. (En los presupuestos generales se consÍ£;nará una cantidad igual para cada región, sin perjuicio de créditos extraordinarios que necesitara cualquiera de ellas.) Los presupuestos generales se nutrirán principalmente por concierto entre las reglones. Ejército y Armada; Policía de seguridad general; Decisión de las diferencias entre las regiones; Derecho Penal
y funcionarios encargados de su aplicación. Las funciones que deben integrar la autonomía regional, hasta que se llegase a reclamar por las provincias mancomunadas de una región.
III. Independencia del Poder judicial, a cargo del Tribunal Supremo.—
Supresión del ministerio de Gracia y Justicia; Ley de incompatibilidades que
imposibilite el patronato, consejo o defensa de las empresas o entidades, con
los hombres encargados de la gestión de los negocios públicos; Ley especial
de represión del caciquismo, que defina y castigue este delito y el de oligarquía.
IV. Servicios autónomos de Instrucción, Agricultura y Obras públicas, con supresión de estos ministerios; y Caja especial de Hacienda para
reformas de este orden, con especial presupuesto.
V . Librecambio en la política comercial.
V I . Atracción de Portugal a una Federación ibérica, comenzando por
defender la abolición de fronteras aduaneras con este país; unificación de
tarifas postales; validez de estudios sin previa reválida; unidad monetaria; intercambio intelectual, organizando excursiones y conferencias a la región hermana, etc.
Orden regional
I. Constitución de la Mancomunidad Andaluza, y una vez constituida, reclamación de facultades autonómicas en los órdenes que se expresan
en el número I del apartado anterior.
ANDALUCÍA
II. Mientras los Poderes re jalónales vinculan conforme al número antecedente, facultades suficientes de los nacionales, se pedirá por los representantes:
a) Obras públicas, de Instrucción y Beneficencia favorables para la
región, atendiendo principalmente la instrucción y la cultura, por el establecimiento de Escuelas oficiales de Agricultura, Industria y Artes, con todas
las poblaciones andaluzas, cabezas de partido o comarca; conversión de los
Institutos en Escuelas prácticas de ingeniería, reduciendo el bachillerato a
asignaturas enciclopédicas; sanciones indirectas contra los analfabetos; escuelas y maestros especiales de adultos, etc.
h) Establecimiento de un Banco Agrícola Regional, con sucursales en
todos los distritos y cuentas corrientes de todos los pueblos, a base de sus
respectivos Pósitos, subvenciones del Estado, etc.
Defensa de la abolición de todas las leyes que perjudiquen el desenvolvimiento de las instituciones de crédito industrial y agrario.
c) Defensa de una medida legislativa que implante el principio "La
tierra andaluza para el cultivador o explotador", absorbiendo la renta económica o valor social del suelo, satisfaciendo con ella las necesidades públicas
hasta donde aquellos recursos alcanzaren, respetando rigurosamente a los poseedores la propiedad de los cultivos y edificaciones en sus tierras, desgravándolos en un tanto igual, así como a las demás manifestaciones del trabajo
y del consumo, e indemnizando a los actuales propietarios con el importe
mismo de la renta futura.
d) Toda medida jurídica o financiera que tienda a favorecer al agricultor, industrial o comerciante.
III
Orden intermunicipal (reforma en la Constitución)
I. Heterogeneidad en la organización municipal.
II. Autonomía de los Municipios en Hacienda, Obras públicas, Instrucción, Beneficencia municipal y Policía urbana y rural, siendo necesario
para obtener esta autonomía: que la solicite el 60 por 100 de los vecinos,
con la obligación general del "referendum" en los asuntos municipales; cuentas detalladas mensuales de la gestión, por impresos repartidos al vecindario;
discusión de los presupuestos en lugares públicos, con turnos a los vecinos,
etcétera.
III. Cuando se constituyan los Poderes regionales vincularán del na-
cional el derecho de conceder estas facultades autonómicas. Mientras tanto,
se defenderán y solicitarán directamente de los nacionales.
IV
Plan de acción
Constitución de Secciones de esta institución Centro Jlndaluz, en todas
las localidades, con sus órganos ordenados, según detalla el Reglamento, a la
defensa en la localidad de estos ideales; definición de conocimientos industriales y agrícolas y del crédito de este orden; educación de los adultos; obras
de ornato e higiene; cumplimiento de leyes cultas, hoy en desuSo, etc.; do
todo cuanto conduce a la creación de un pueblo soberano en Andalucía.
Éstos organismos desarrollarán su acción de propaganda en mítines, conferencias, veladas, impresos, etc., considerando como perteneciente a la Asociación, esté o no en ella inscripto, a todo el que labore el bien de la patria
regional.
Cada Sección recogerá las quejas contra los desmanes caciquiles que
entorpezcan su acción, y además de las denuncias y represalias de todo
orden que contra ellos acuerden, en las cuales serán apoyadas por las Secciones todas, se transmitirán a una Sección, que se creará en Madrid, a fin de
que cerca de los Poderes públicos pueda pedirse su castigo y represión.
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*
* *
El señor Infante, a medida que iba leyendo los enunciados del programa, daba las más claras y elocuentes explicaciones de los mismos.
Glosó el lema del Centro Jlndaluz: "Andalucía para sí, para España y
para la humanidad", en relación con el reglamento de la Sociedad y el manifiesto publicado a raíz de constituirse.
Se acordó que para tener presentes nuestros ideales se reprodujesen de
vez en cuando algunos fragmentos de uno y de otro.
Terminada la lectura comentada del Programa, el mismo señor Infante
dio cuenta de lo adelantados que se hallan los trabajos encaminados a la celebración en Ronda de una Asamblea regional, para la cual se han recibido
numerosas adhesiones y se ha entablado la consiguiente correspondencia co.i
los correligionarios de las demás capitales andaluzas. Esta Asamblea será el
primer acto de afirmación regionalista que organizará el Centro recientemente
inaugurado.
ANDALUCÍA
A continuación propuso que todos los sábados se den conferencias en el
domicilio social, a las que esperaba habría de concurrir buen número de
socios.
El señor Infante terminó exhortando a los presentes, y muy principalmente a los señores que componen la Directiva del Centro, a que practiquen
en todo momento los ideales del regionalismo andaluz.
El señor Infante fué muy felicitado al terminar.
Asimismo hablaron otros señores, que nos vemos obligados a omitir por
falta de espacio.
Nuevamente hizo uso de la palabra el señor Ochoa, excitando a los
socios a que asistan al Centro y haciendo otras elocuentes manifestaciones.
Dio cuenta de varias cartas de adhesión recibidas, y de un telegrama de don
Luis Ramajo, tesorero del Centro, que se hallaba en San Sebastián, saludando
a los reunidos y expresándoles su sentimiento por no poder estar presente en
el acto que se celebraba.
La reunión, que se deslizó dentro de la mayor animación, terminó próximamente fí las doce de la noche, haciéndose votos por todos los reunidos por
que el Centro logre vida próspera.
El regionalismo andaluz nace impelido por diversas causas que justifican y
reclamaban su aparición; pero entre ellas se destaca esa de la esclavitud proletaria, que en la conciencia de los hombres que tienen vivo el sentimiento de la
justicia, pesa con la fuerza de una afrenta insoportable o de una suciedad bochornosa, de la que es preciso limpiarse cuanto antes.
Por eso soy regionalista de este regionalismo que surge respondiendo a un
clamor de justicia; que no pregunta a nadie si va por la derecha o por la izquierda; que llama solamente a los hombres de buena voluntad, que amen de
verdad a su patria y quieran dignificarla y elevarla; que ensalza, sobre todas las
cosas, el culto al trabajo; que sostiene que la honradez es algo más que cumplir
los ordinarios deberes sociales; que inscribe en su programa las más grandes
aspiraciones, y que, finalmente, se dispone a trabajar por la implantación de los
principios sustentados por el inmortal Henry George como remedios eficaces
para extirpar la miseria.
Luis Ramajo.
MEMORANDA & DESIDERATA
CONTESTACIÓN A UN EPÍLOGO FACETO
Señor Director de ANDALUCÍA:
ADHESIONES A NUESTRA CAUSA
POR QUÉ SOY REOIONALISTA
D
ON Baldomero Argente finaliza su obra titulada «La esclavitud proletaria»
ditiendo que al frente de los libros del profeta Henry George, pondría estas
palabras: Hombres de conciencia y de corazón, deteneos: aquí está la verdad.
La verdad que esos redentores libros demuestran, es que, á pesar de las libertades políticas y de los grandes progresos materiales alcanzados por las sociedades tpodernas, la actual organización económica, impidiendo cada día más
el libre acceso al uso de la tierra y de los medios naturales, permite a unos cuantos privilegiados acumular asombrosas fortunas y hace que se ahonde la miseria
y se aumente eí dolor de la mayoría de los hombres.
Adonde quiera que se mire, el valor del suelo y la pesadez de los tributos
agobian a los que con su trabajo producen; pero en ninguna parte como sobre
los campos andaluces se manifiestan los amargos frutos de esa organización que
consiente a unos pocos detentar la tierra para absorber sin esfuerzo todo su
jugo, y obliga a las muchedumbres trabajadoras a alquilar sus brazos a cambio
de jornales irrisorios, que no bastan ni para engañar el hambre ni para disimular la desnudez.
ADRIANO, 37 • A R A D O S
Mi querido amigo;
I^ROTESTO con todas mis energías de las palabras que, con pretensiones
de hacer un artículo y escritas por un tal Riaño, pequeñito por únicas
señas, publicó esa Revista en su último número.
No he de discutir lo que Juan Zumbón dice en su intento de artículo;
ello equivaldría a darle una importancia que no tiene, por falta de autoridad
en quien lo dice.
Solamente, sí, lamento que una revista seria como ANDALUCÍA, que no
ha querido tener una sección de desahogos, haya insertado los de un señor
que no debe conocer ni de vista a doña Corrección.
Tengo muchos motivos para conocer al doctor Salvat, y, como discípulo
suyo, lo considero digno de toda clase de respetos y de la más fervorosa devoción; como amigo, merecedor del más profundo cariño; como médico, indiscutible aun por los más sabios de nuestra ciencia, y como sevillano, dueño
de nuestra eterna gratitud; quienes como yo sean sevillanos, médicos, discípulos o amigos suyo, quienes como yo lo conocen, no me dejarán mentir.
Es, para quien tanto merece y para Sevilla entera, a quien tanto también
BALLETO
•
SON LOS MEJORES

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