Ruta 8: Cavernas y bosques pintados


Cavernas
y bosques
pintados
Kortezubi
Gautegiz de Arteaga
Ibarrangelu
Elantxobe
Cavernas y bosques pintados
Va la excursión por las BI 2238, BI 4244,
BI 3234 y BI 2237, bordeando la ría
de Gernika por la ribera derecha, y llega
al puerto pesquero de Elantxobe por
un territorio abrupto y calizo, lugar de
bosques y cavernas donde el hombre
primitivo –y el actual– han dejado
impronta de su genio creador.

Página anterior:
Kortezubi. Bosque de Oma. En los troncos
vivos del pinar de Oma ha pintado Agustín
Ibarrola diversos motivos figurados y abstractos.
En estos, siluetas humanas.
Esta página:
Kortezubi. Vista valle de Oma. El hábitat
disperso de casas de labranza aisladas rodeadas
de prados y bosques, es el tópico de todo el área
cantábrica vasca.
Página 85:
Kortezubi. Bosque de Oma. Motivos abstractos
de vivos colores en la intervención del artista en
la naturaleza.
Kortezubi
Anteiglesia rural de labradores tendida
entre la pantanosa orilla derecha de la
ría y el calizo monte costero de Ereñozar.
En cavernas sitas en parajes escondidos,
custodia alguno de los mayores encantos
culturales de Bizkaia.
manchas abstractas de colores muy vivos,
de gran resultado plástico. La tendencia
de intervenir en la naturaleza ha sido la
pretensión del artista. No debe de ser
casual el encuentro en Oma del permanente arte prehistórico con el efímero
«land art» actual.
Cueva de Santimamiñe
El viajero que se desvíe hacia la derecha,
ya a vista de Kortezubi, podrá visitar
las Cuevas de Santimamiñe y el valle de
Oma, aledaños entre sí.
El primero, el más famoso santuario
prehistórico vizcaíno con pinturas,
adentra sus galerías en las entrañas calcáreas del monte Ereñozar, que culmina
una ermita vigía, la de San Miguel.
Santimamiñe viene de San Mamés, una
ermita gótica próxima.
Este conjunto se articula en torno a
una larga galería principal de gran belleza
natural, por las estalactitas coloreadas
debidas a las filtraciones ferruginosas,
sucesión de pasos estrechos, cámaras y
divertículos. Al fondo de la galería principal y en varias cámaras diferentes lejos de
la luz solar, hay pinturas rupestres y grabados que representan animales: bisonte,
caballo, oso pardo, cabra, etc., siempre
perfilados en color negro. Se trata de un
«santuario profundo» de la época del
magdaleniense, muy estudiado y valorado
desde hace más de setenta años.
La Diputación de Bizkaia ha acondicionado la cueva con escaleras y pasarelas, a
efectos de que pueda visitarse con comodidad, pero, al ser las pinturas muy
sensibles al ambiente, se dosifica el acceso.
Iglesia de Santiago
Otra vez en la carretera general, la
parroquia de Kortezubi está prácticamente sitiada por los carrizales de la marisma
de Urdaibai. Consta de una sola nave
rectangular con cabecera poligonal, lo
único que se cubre con bóveda. El resto
lo hace a la manera popular: techumbre
de madera a dos aguas con cerchas que
calzan sobre pies derechos asociados a los
muros. Esta estructura lígnea aparece al
descubierto salvo en la parte axial, donde
se embebe en un cielo raso.
La torre, que a la vez es estribo, tiene
planta prismático-cuadrangular de dos
cuerpos y se ubica a los pies. Al pórtico se
acoge la capilla de Santiago, un muy modesto humilladero de planta cuadrada.
El templo actual debe de datar del
s. xvi; y la torre, de comienzos del siglo
siguiente pues desde 1602 la llevaba Pedro
Ruiz de Aboitiz.
Retablo mayor. Salomónico churrigueresco, de hacia el año 1735. Se excluye
el titular, Santiago Peregrino, formidable
talla de estilo hispanoflamenco de hacia
el año 1500.
Otro Santiago – Santiago Matamoros –
se venera en su humilladero; talla rococó
atribuible a Gerónimo de Argos o a
Manuel Azebo.
Valle de Oma: el bosque pintado
El pequeño paraíso humanizado de viejos
caseríos, ermitas y bosques pintados
que es Oma, se encuentra un poco más
adelante de Santimamiñe. Agustín
Ibarrola vive en una de estas casas de
labranza y cerca de su morada pintó en
el año 1984 un bosque. Su soporte es
un pinar, en cuyos troncos, a diferentes
alturas y profundidades ha ejecutado
Gautegiz de Arteaga
Lugar de buen nivel ambiental, con casas
burguesas ubicadas en un territorio, por
una parte calizo y plantado de encinas
atlánticas en cuyas entrañas se tallan
viejas canteras de jaspe, y, por otra, de
marismas que encharcan las mareas.
Ese paraje de orillas pantanosas constituye el corazón de Urdaibai, Reserva
de la Biosfera desde el año 1984, donde
Guía turística de monumentos y arte de Bizkaia | 85
Ruta 08 | Cavernas y bosques pintados
Esta página, arriba, izquierda:
Arteaga. Iglesia de Santa María. Los canteros
vascos del renacimiento fueron muy hábiles
en diseñar y ejecutar complejas bóvedas de
nervios, a la manera gótica.
Esta página, arriba, derecha:
Iglesia de Santa María. En el optimista s. xvi
se programa a veces por encima de las
necesidades de la feligresía; aquí una amplia
iglesia columnaria.
Esta página, abajo:
Arteaga. Castillo de Arteaga. Primer elemento
de estilo neogótico en Bizkaia, obra programada en la corte de Francia para inmortalizar el
solar del linaje más rancio del entorno.
Página 87:
Kortezubi. Talla de Santiago Peregrino.
De estilo bajomedieval o hispanoflamenco, de
las más hermosas de Bizkaia en su caracterización; además, inscribe a este entorno en los
caminos de peregrinación jacobea.
bandadas de aves migratorias reposan
y alimentan en sus largos viajes, y
pintoresco paisaje de bosquecillos,
praderas, casas de labranza y anteiglesias.
Al considerarlo así la unesco debió
de apreciar el alto valor ecológico y
paisajístico de estas marismas. Lo vigilan
desde lo alto dos ermitas sobre los
montes cónicos de Ereñozar y Atxerre.
Iglesia de Santa María
Se sitúa a la derecha de la carretera y en
su entorno no se ha constituido un
núcleo de anteiglesia. Es edificio considerable de tres naves de cuatro tramos
– el zaguero muy corto – más cabecera
ochavada, entendidos a la misma altura.
Las «capillas» se techan con bóvedas de
nervios de diferentes diseños que cargan
sobre columnas; el resultado es una
iglesia columnaria del renacimiento.
A los pies está el acceso principal, de
piedra jaspe rosa, con diseño en forma
de retablo a base de pilastras con un
ático que enjuga con «eses» el escarpe.
Otra puerta hay al flanco derecho,
reaprovechada de un edificio anterior, de
veta románica de inercia.
A mediados del s. xvi ya estaría hecho
lo esencial del edificio, que se describe
como perfectamente acabado en 1616,
fecha en que se alaba su amplitud
espacial. En 1630 se comenzó la portada
clasicista de los pies, del tracista local
Juan Ortiz de Olaeta.
El retablo mayor es neoclásico, dístilo
de madera marmoreada con una historia
central de la Asunción-Coronación. Lo
diseñó en 1810 Juan Bautista Belaunzaran,
y Juan Bautista Mendizábal II se encargó
de la parte escultórica.
En el zócalo de la cancela del presbiterio se localizan dos escudos de armas
de la casa y solar de Arteaga.
El órgano data del año 1884 y es de la
casa Walcker.
Castillo de Arteaga
A escasa distancia de la iglesia, hacia la
marisma, se encuentra el solar de
Arteaga, hoy castillo famoso. Lo mandaron construir, sobre la torre fuerte
antigua, Napoleón III y su esposa Eugenia
de Montijo, dueña a la sazón del solar.
El responsable fue el francés Couvrechet,
año 1856, arquitecto de los Sitios
Imperiales, sustituido luego por Ancelet.
Newman, encargado de los jardines
reales de Francia, trazó el complemento
ajardinado de parterres y alamedas que
hubo en Arteaga.
El resultado fue un castillo de estilo
neogótico que consiste en un alto cuerpo
central almenado que lleva adosado un
husillo prismático, aún más alto, rodeado
de muralla exterior con cubos en las
esquinas.
Copiado de la fortaleza del Midi
francés de Beaucaire, el espíritu historicista de Viollet le Duc es patente.
Es uno de los edificios primeros de
Bizkaia en ese estilo. Muy malparado,
hace pocos años que se ha recuperado
para usos hosteleros.
Si sigue por Kanala, con su modesta
iglesia de Santa María de Legendika – del
s. xvi, muy intervenida, y con hermoso
asentamiento – y su santutxu junto a la
carretera, el viajero podrá gozar del
espléndido paisaje de la boca de la ría con
Mundaka, Bermeo e Ízaro, y de los
arenales de Laida y Laga, reconocidos
lugares balnearios.
Ibarrangelu
Alejada anteiglesia rural con cuidado
núcleo presidido por la iglesia de San
Andrés.
Iglesia de San Andrés
Dentro del panorama artístico vizcaíno
se considera casi un «unicum», un caso
singular de iglesia con techos de madera
pintados. El templo consta de una amplia
nave rectangular, doble de larga que de
ancha, repartida en cinco tramos y a
nivel de bóvedas en quince «capillas».
Las bóvedas son de complejos diseños
estrellados de nervios combados a
la manera gótica. En fin, una gigantesca
Guía turística de monumentos y arte de Bizkaia | 87
Ruta 08 | Cavernas y bosques pintados
techumbre de madera dispuesta a
tablajunta con arcos diafragmas, claves y
nervaduras lígneas, pintados al temple.
El programa pictórico es amplio y de
aroma humanista renacentista completado con lo de intención religiosa: putti,
amores, memento mortis, niños con
calaveras, pájaros fantásticos, hombres
grotescos, etc., (alegorías neoplatónicas
del Amor, la Fama, la Vanidad y la
Muerte) más tondos con apóstoles, María
con el Niño, Santa Lucía, Santa Bárbara,
San Gabriel, escudos con las cinco llagas
y Santiago en Clavijo, etc.
La pintura está fechada en cartelas
(1559), y el estilo cuadra bien con esa
data, de maestro manierista inédito, no
excesivamente diestro pero sí informado.
Como «capilla sixtina» de la pintura
vizcaína es entendido este extenso programa pictórico, y como «labrado y pintado curiosamente», fue descrito en 1616,
favorable apreciación que habrá preservado la obra, restaurada hace unos años.
Plano 08 | Ruta 08
Su visita es muy recomendable para los
amantes de la pintura.
Retablo mayor. En madera policromada, es una estructura salomónica cargada
de decoración. Datable hacia el año 1735,
en los prolegómenos del rococó.
Hay también una Andra Mari, talla
gótica del s. xiv; pieza de calidad.
Página 88:
Ibarrangelu. Detalle bóveda pintada.
La iglesia de San Andrés se techa con bóveda
fingida, una opción de nervios y plementería
lígneos y pintados; en este caso con motivos
de aroma humanista renacentista (1559).
Esta página:
Elantxobe. Vista panorámica. Pueblo
topográfico sobre pendiente abrupta, que recoge
bien el tipismo de la actividad pesquera.
Elantxobe
Hasta el s. xviii constituyó el barrio de
pescadores de la anteiglesia de
Ibarrangelu. Hoy es un puerto pesquero
urbano y pintoresco tendido hacia el
océano en pronunciada pendiente,
debajo mismo del colosal acantilado
calizo de Ogoño. Este pequeño rincón de
Elantxobe es uno de los puntos con más
encanto de la accidentada costa vizcaína,
donde huele profundamente a mar.
Por la geografía de sus calles se suceden casas y caserones, los más neoclásicos
del s. xix, dispuestos en un apretado
caserío.
En una plazuela de la parte más alta
está la iglesia de San Nicolás, advocación
marinera, edificio modesto promovido
en 1799 por la gente del mar. Lleva adosado un elemental frontón para jugar a la
pelota, deporte ampliamente arraigado
en Bizkaia.
Bermeo
MAR CANTÁBRICO / BIZK AIKO GOLKOA
Mundaka
Laida
ELANTXOBE
IBARRANGELU
Sukarrieta
BI 3234
Busturia
Kanala
BI 2237
Urdaibai
Natxitua
Ea
ARTEAGA
GAUTEGIZ DE ARTEAGA
Murueta
Basondo
KORTEZUBI
Forua
Bedaroa
Ispaster
SANTIMAMIÑE
BI 4244
OMA
BI 2238
Okamika
Barrutia
Nabarniz
Gernika
Marmiz
Derio
Sondika
Morga
Aulesti
Muxika
Zamudio
Ibartxu
Lezama
Deusto
BILBAO / BILBO
Indautxu
Rekalde
Larrabetzu
Begoña
Munitibar
Albiz
Zugaztieta
Bolibar
Etxebarri
N
Leyenda
Lugares de visita de la actual ruta
Autopista
O
Carretera de interés preferente
Carretera de red básica
E
San Juan de Gaztelugatxe
Carretera comarcal
S
Carretera local
Bermeo
Plentzia
Lekeitio
Mungia
Getxo
Ondarroa
Gernika
Sondika
Muskiz
Munitibar
BILBAO
Amorebieta
Lanestosa
Balmaseda
Durango
Ugao-Miraballes
Areatza
Otxandio
Orduña
Guía turística de monumentos y arte de Bizkaia | 89
Largas_364x250.indd 15
Cavernas y bosques pintados
03.03.2006 11:53:32 Uhr