La gente a la que no le ruge la panza puede protestar y votar
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La gente a la que no le ruge la panza puede protestar y votar
La gente a la que no le ruge la panza puede protestar y votar libremente. Migración transnacional y procesos de cambio político en el municipio de Tonatico, México (1995-2005) Omar López Gervacio Y me desmintió el camino lo que en la escuela aprendiera no era cierto que mi patria terminara en la frontera el cambio político, sin duda existe entre ellos una fuerte conexión que muestra una enorme complejidad que elude cualquier interpretación mecánica de su relación. Robert Darwin El problema de investigación Con base en información preliminar, se detectó que en Tonatico ha existido una importante votación por los partidos de izquierda –Partido Socialista Unificado de México (PSUM), Partido Mexicano Socialista (PMS) y Partido de la Revolución Democrática (PRD)– que registra un aumento gradual y constante durante toda la década de los ochenta y que se consolida con el arribo del primer gobierno perredista en 1996. Considerando la presencia simultánea de dos eventos: la migración y Por otra parte, se identificó que el constante ir y venir de los migrantes Introducción A continuación se presentan brevemente el problema de investigación, el objetivo y la hipótesis, así como la metodología y las técnicas de investigación empleadas en la elaboración de este trabajo. 19 transnacionales ha jugado un papel importante en los procesos político-electorales locales. Al menos se puede señalar una razón que denota su trascendencia. Los migrantes pertenecientes a El Club Social Tonatico de Waukegan mantienen una gran influencia en las actividades cívicas, religiosas, culturales y de apoyo a la comunidad. Este Club fue reconocido como un interlocutor privilegiado de los migrantes transnacionales en el gobierno municipal que encabezó el Dr. Arturo Hernández Tapia durante el periodo 1996-2000, por tal motivo en 1998 se inaugura una oficina de la Secretaría de Relaciones Exteriores en el municipio, posteriormente se crea la oficina municipal de atención del migrante y adicionalmente se instaura la celebración del día del tonatiquense ausente durante las celebraciones de la semana cultural de la feria anual, que se realiza durante el mes de febrero. Cabe resaltar que los gobiernos municipales de Tonatico mantienen permanente comunicación con los tonatiquenses radicados en Illinois, aun cuando han cambiado los partidos políticos que han llegado al gobierno municipal. De acuerdo con los datos obtenidos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), podemos señalar que a partir de 1980 20 se observa un importante cambio demográfico en el municipio de Tonatico. Si bien, durante las décadas de 1950, 1960, 1970 y 1980 la población total registra una tasa de crecimiento positiva, es justamente entre el censo de 1980 y 1990 cuando se observan los cambios más drásticos: primero, se registra un aumento significativo de la población (1984), y después (1990) se registra una tasa de crecimiento negativa, en el censo inmediato (2000) se muestra una vez más, una tasa de crecimiento positiva. Lo anterior nos estaría planteando que durante el periodo de 1980 a 2000 se registra el mayor nivel de movilidad horizontal de la población tonatiquense. Que justamente coincide a nivel nacional con la crisis estructural de la década de 1980 y con una mayor apertura del sistema político mexicano. La migración es uno de los grandes fenómenos globales de nuestros días, en el mundo actual es cada vez mayor la movilidad de personas, que cruzan límites regionales, estatales e internacionales. Con la globalización se incrementa la integración de bloques económicos regionales, que están contribuyendo a debilitar muchos de los obstáculos que en otras épocas se interponían al movimiento de personas a través de las fronteras internacionales. Hoy en día ningún país o región escapa a la dinámica de las migraciones o a sus consecuencias. Aún cuando las causas de la migración son diversas, no hay duda de que para millones de familias este movimiento ha constituido una de las estrategias para allegarse de recursos económicos, por otro lado, estos movimientos han contribuido a la realización de profundas transformaciones en los ámbitos municipal, estatal, nacional e internacional. Los procesos migratorios ofrecen un panorama amplio de novedosas prácticas culturales, religiosas, educativas, sociales y políticas, creadas y reinventadas por el sujeto social migrante (Mummert, 1999). “Los mexicanos de afuera” están transformando los sistemas políticos y gobiernos de México y de Estados Unidos dando lugar a despertares ciudadanos y movimientos de democratización. En el caso de México destacan la creación de instancias gubernamentales de atención a migrantes y la presentación de iniciativas de ley en materia de doble nacionalidad y participación en procesos electorales en Mexico de compatriotas radicados en el extranjero. Diversos estudios realizados en torno a los procesos migratorios sugieren repensar categorías y conceptos claves de las ciencias so- ciales. La ciudadanía es una de las más importantes. Los fenómenos transnacionales (incluidas las migraciones) han alcanzado una intensidad y complejidad sin precedentes en nuestro mundo. Ponen de relieve las múltiples aristas de las diversas experiencias migratorias, enfatizando su vinculación estrecha con la construcción de identidades y prácticas transnacionales, formas de sociabilidad, símbolos de identidad, así como con maneras de vincularse con la comunidad de origen y otras comunidades de pertenencia (Mummert, 1999). Los procesos migratorios permiten (e invitan) el paso de personas, ideas, bienes, mensajes, imágenes, etc. Una de dichas expresiones es el consumo, la transmisión y venta de objetos culturales. La cultura material contribuye a la creación de formas sociales transnacionales. Al asociarse en la conciencia con personas y lugares geográficamente distantes, objetos como una cinta musical, un video de una fiesta familiar o la bandera nacional adquieren significados que los individuos les atribuyen para entender e interpretar su mundo. Símbolos de identidades múltiples, estos objetos han viajado con los migrantes desde siempre, haciendo más soportable la dolorosa separación 21 física de las familias y del terruño y contribuyendo a la creación de espacios sociales transnacionales. Desde luego, el traslado físico de algunos de estos objetos se ha constituido en actividad económica frecuentemente dentro de la economía informal, las remesas (dinero y especie) son transportadas y entregadas algunas veces por empresas transnacionales y otras por migrantes mexicanos (Mummert, 1999). Además, los medios de comunicación modernos: telefonía celular e Internet juegan un papel importante para “sentir a los familiares más cerca”. Todos los autores relacionados con los temas migratorios coinciden en su interés por escudriñar los conflictos que viven los migrantes al ser cuestionados sus valores, costumbres, idioma, lealtades e identidades; al perder ciertos anclajes en redes de apoyo familiar, se entrelazan realidades y utopías de “aquí y allá”. La mayoría de los trabajos sobre migración se han quedado en un nivel descriptivo de perfiles de migrantes mexicanos, tipos de inserción en mercados de trabajos estadounidenses, impactos socioculturales de los flujos, e intentos de cuantificación 1 de volúmenes para explorar las muy diversas formas de vida en espacios sociales transnacionales (Mummert, 1999). Por tal motivo en la presente investigación se plantea que el voto, el comportamiento electoral, la cultura política y la alternancia política en Tonatico tienen una estrecha relación con los agentes de cambio y socialización representados por el Club Social Tonatico y en general por la comunidad migrante que se mueve entre Tonatico, México y Tonatico, Illinois (Andrade, 2002). Un argumento central es que en este proceso de cambio político las remesas sociales desempeñan un papel transformador destacado. El concepto de cultura política nace en los años sesenta con los trabajos pioneros de Almond y Verba (1963)1 y Almond y Powell (1972), desde entonces su contenido ha venido variando en muy diversos grados, generando un arduo y a veces infructuoso debate entre politólogos, sociólogos, antropólogos y comunicólogos, por sólo mencionar algunos de los científicos sociales. Para efectos de esta investigación se entenderá a la cultura política desde la perspectiva de Varela (1996), La obra original fue publicada en idioma inglés en la fecha referida, aunque la fuente consultada en este documento corresponde a una versión en español de 1970. 22 quien ha desarrollado un sugerente modelo para analizar el ámbito de la cultura política y la define como una matriz tanto consciente como inconsciente, que da significación a las creencias y al comportamiento social; esto es, se refiere a la cultura como a un conjunto de símbolos y signos, considera que los símbolos y los signos transmiten conocimientos e información, portan valores, suscitan sentimientos y emociones, y expresan ilusiones y utopías. En la presente investigación se trata de realizar un estudio que recupere metodológicamente el estudio de la cultura política, sobre la base de un conjunto de perspectivas más abiertas y menos restringidas a la hora de tratar la cultura política por medio del uso de herramientas metodológicas como las entrevistas semiestructuradas, también se utiliza información político-electoral de fuentes oficiales. Objetivo e hipótesis de trabajo El objetivo general de la presente investigación es responder la siguiente pregunta: ¿Por qué los migrantes transnacionales sirven como agentes de cambio y construcción de un sistema de alternancia política y emergencia de ciudadanía? Durante la última década (19952005) en el municipio de Tonatico se observa una intensificación de la migración, asimismo se observa que en los tres últimos procesos electorales (1996-2000), (2000-2003) y (2003-2006) en la renovación del H. Ayuntamiento, se ha registrado la alternancia política. Estos dos fenómenos: migración y alternancia política se ven entrelazados por una emergencia de ciudadanía que se materializa en niveles de abstencionismo menores a la media internacional, nacional y estatal; mayor participación en las obras del gobierno municipal; gran exigencia de la ciudadanía de un gobierno de transparencia y rendición de cuentas, y con amplia participación ciudadana en la gestión pública, así como una amplia participación político-electoral en los procesos de renovación de ayuntamientos. En suma, se trata de un proceso de empoderamiento de la ciudadanía. En este espacio geográfico es posible observar la recreación de una comunidad local sin límites territoriales en el que los migrantes han sido el vehículo para la socialización de diversas prácticas ciudadanas y políticas que son creadas, experimentadas, representadas, algunas veces sostenidas y otras cuestionadas, que conviven con 23 algunas prácticas tradicionales y al mismo tiempo cambian de forma a través del tiempo y generan transformaciones políticas en el municipio. Metodología y técnicas de investigación Este trabajo trata de identificar la cultura política de los tonatiquenses, resaltando aproximaciones cualitativas, histórico-contextuales, interpretativas y simbólicas (que se obtuvieron por entrevistas semiestructuradas) y, en su caso, por informaciones estáticas (extraídas de la estadística oficial). Se trata de un ejercicio intelectual que recupera en diversos momentos los métodos histórico, comparativo, cualitativo y cuantitativo. Las técnicas que se emplearon en la presente investigación fueron las siguientes: trabajo de campo en el municipio de Tonatico, entrevistas semiestructuradas y consultas en bibliotecas y centros de información y documentación. Desde el punto de vista metodológico se realizaron las siguientes actividades: 1) Análisis de las elecciones locales para la integración del H. Ayuntamiento de Tonatico (1995-2005) en cada sección electoral que nos 24 permitirá visualizar la reconfiguración de la geografía electoral del municipio. 2) Análisis del nivel de abstencionismo y participación, con información disponible en el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM). 3) Aplicación de entrevistas semies tructuradas, a diversos actores políticos y sociales del municipio (miembros del cuerpo edilicio – actual y anteriores–, candidatos participantes en las distintas elecciones constitucionales y migrantes transnacionales), con la finalidad de identificar los cambios en la cultura política. 4) Comparar los resultados de la presente investigación con la hipótesis del Instituto Federal Electoral (IFE) que señala que “mientras las autoridades electorales han alcanzado un mayor nivel de profesionalización, la ciudadanía se ha vuelto más apática y por lo tanto se han elevado los niveles de abstencionismo”. Teniendo en cuenta que el IFE plantea una correlación como la siguiente: a mayor profesionalización de las autoridades electorales mayor abstencionismo. A lo largo de la historia, los migrantes internacionales siempre han tendido a mantener conexiones económicas, sociales y políticas con sus sociedades de origen. Recientemente, sin embargo, esas conexiones han alcanzado niveles inusitados no sólo por su volumen e intensidad, sino por su poder de transformación. En efecto, estas relaciones transnacionales se han convertido en puentes que conectan estados-nación y comunidades a través de fronteras nacionales en un proceso que se ha denominado Transnacionalización. La migración transnacional en Tonatico, México y Tonatico, Illinois es un fenómeno complejo. Profundamente arraigado, que tiene repercusiones visibles en la esfera económica, política, social y demográfica. En esta investigación colocamos el centro del análisis en la relación migración y política. Reconocemos que una gran cantidad de hogares depende en mayor o menor medida de los recursos de la migración laboral, cuyas remesas constituyen el principal generador de ingresos incluso más que el sector terciario en el municipio, que aunque en expansión es insuficiente para la atención e incorporación de nueva mano de obra. La tradición migratoria en Tonatico es muy antigua y generó una añeja costumbre que está profundamente interiorizada en los individuos y en sus comunidades. Sin embargo, la explicación de la relación migración y alternancia política no puede encontrarse en causas sencillas y unívocas. Hacia la relación migración y política es que la presente investigación pretende contribuir, por tal motivo, el documento se ha denominado “La gente a la que no le ruge la panza puede protestar y votar libremente. Migración transnacional y procesos de cambio político en el municipio de Tonatico, México (1995-2005)”. Se ha optado por este título, porque en la primera frase se recupera una expresión coloquial que refleja de forma sencilla la cultura política de los tonatiquenses. Los resultados de la investigación se han articulado de la siguiente manera: el capítulo 1 denominado “Cultura política y ciudadanía: el debate teórico continúa”, contiene aspectos relacionados con el estado del arte de la cultura política y la ciudadanía, ejes temáticos importantes para el desarrollo de este estudio. En el mismo capítulo, se reconoce la importancia de obras clásicas y su influencia hasta nuestros días, se destacan principalmente los aportes que se han generado en diversas disciplinas de las ciencias sociales. Un aspecto que se enfatiza tiene que ver con la ciudadanía extraterritorial. 25 El capítulo 2 lleva por título “Migración transnacional y sus efectos transformadores”, en éste se aclara la pertinencia de adoptar la perspectiva transnacional en esta investigación. Además en este capítulo se presenta a Tonatico como una comunidad transnacional, en el cual sobresalen temas tales como: la migración y la población de Tonatico, el papel del Club Social de Tonatico y sobre todo generalidades respecto a religión, política, diversión, economía y cultura, que permiten caracterizar a Tonatico como una comunidad transnacional; cabe mencionar que en este capítulo de la investigación se plasma una parte importante del trabajo de campo. de Tonatico, México (1995-2005)”, puntualiza los procesos de cambio político en el municipio de Tonatico que se registran en una década. En esta sección se destaca el comportamiento político-electoral por medio del análisis de la estadística oficial, se explica el fenómeno de la alternancia política en Tonatico, por medio de gráficas, cuadros comparativos y mapas, así como parte de las entrevistas semiestructuradas que dan cuenta del comportamiento y geografía electoral. En la última parte de este capítulo se presentan un modelo y un esquema para el análisis de la relación entre migración y política que puede ser de utilidad para los estudiosos del tema. El capítulo 3 intitulado “Transnacionalismo y remesas sociales: procesos de cambio político en el municipio Al final se presentan las conclusiones y la bibliografía que se consultó a lo largo de esta investigación. 26 The idea of citizenship acquires a dual significance in the present conjuncture... the exercise of rights from the state and the self-governance and autonomy of society Sergio Gregorio Baiere Capítulo 1. Cultura política y ciudadanía: el debate teórico continúa En este capítulo se realiza una aproximación a dos debates teóricos que han sido parte fundamental para el desarrollo de las ciencias sociales en las últimas décadas. Esta revisión conceptual obedece a la importancia y relación que adquieren en el desarrollo de la investigación. 1.1. Cultura política: varias disciplinas, un mismo concepto y múltiples resultados El primer debate teórico se refiere al concepto de cultura política, cuyo origen normalmente se ubica en 1963, con la aparición de la obra The Civic Culture: Political Attitudes and Democracy in Five Nations, de Almond y Verba. Es pertinente aclarar que aunque aquí se presenta la discusión desde distintas disciplinas de las ciencias sociales, se reconoce que la realidad social no es disciplinaria, la realidad es más compleja. En la realidad las disciplinas se tocan, a veces se apoyan y otras se contradicen, no hay resultados para siempre, el conocimiento de la realidad social es un proceso, sobre el cual se registran avances e incluso retrocesos, pero nunca se llega a conclusiones o verdades absolutas. La idea básica de este apartado es que si bien el concepto de cultura política nace en los años sesenta, su contenido se ha venido alterando en múltiples grados, generando una gran discusión entre politólogos, sociólogos, antropólogos, comunicólogos, lingüistas y hasta economistas. El propósito de este apartado es plantear justamente cómo se ha venido dando este debate y más que asumir una actitud pesimista (aunque se señalan algunas limitaciones de las perspectivas), principalmente se reconocen y se destacan los aportes y contribuciones. 27 El punto de partida: The Civic Culture Al realizar una revisión de la corriente inicial de la cultura política, el primer referente lo ubicamos con la aparición en 1963 del libro The Civic Culture: Political Attitudes and Democracy in Five Nations, de Gabriel Almond y Sidney Verba, esta línea de investigación fue continuada por los partidarios de la política comparada. La sugerente idea de analizar el comportamiento político en grandes núcleos de la población, utilizando técnicas cuantitativas, enraizó en buena parte de las escuelas dominantes de ciencia política de los años sesenta y setenta, llegando a formar todo un programa de investigación especialmente en los Estados Unidos. Tanto los críticos como los apologistas de The Civic Culture: Political Attitudes and Democracy in Five Nations dedicaron varios volúmenes a analizar una que fue, sin duda, la obra pionera de la política comparada, que ha sido catalogada como la obra clásica y más influyente en el tratamiento de la cultura política (Chilcote, 1994). Sin embargo, cuarenta años más tarde ha sido ampliamente superada. Conviene detenerse un poco en esta obra para sustentar mejor el análisis. 28 La idea que guía la obra clásica de Almond y Verba es buscar en qué medida la cultura cívica-política posibilita el desarrollo de la democracia en un país, pero sobre todo tiende a procurar su estabilidad. De este modo, la obra presenta tres tipos de cultura política: parroquial, de súbdito y participativa, e incluyen su posible combinación. Finalmente entienden que el mantenimiento del sistema político democrático está soportado en el desarrollo concreto de la cultura cívica. En otras palabras, la cultura cívica era considerada como aquella que exige de los ciudadanos una participación activa dentro del sistema político, basándose en un cálculo pragmático, racional e informado. Almond y Verba, al trabajar los conceptos tuvieron que especificar sus contenidos, dentro de los cuales se presenta la variable educativa como la de mayor importancia para la formación de la cultura política. Así llegan a la siguiente definición de cultura política: “la cultura política de una nación consiste en la particular distribución de las pautas de orientación hacia los objetos políticos entre los miembros de dicha nación” (1970: 31). Años más tarde Almond y otros autores llevan a cabo una revisión de la investigación inicial. En The Political Culture Revisited (1980) se reconocen algunas de las debilidades de la primera, pero concluye que lo importante fue el comienzo de una metodología de investigación en el ámbito de la ciencia política, en particular el desarrollo de la técnica de encuestas. Lo cual es cierto. A partir de esta obra, se difundieron ampliamente las posibilidades de aplicación de dicho método a la investigación de los fenómenos políticos, cuya creciente complejidad rebasaba las teorías existentes. A propósito, Almond afirmaba que “era ya posible establecer si existían marcas nacionales distintivas y caracteres nacionales, si, y en que medida y grado, se dividían las naciones en subculturas distintivas, si las clases sociales, los grupos funcionales y las élites específicas tenían orientaciones distintivas hacia la política y la política pública y el papel que jugaban los agentes de socialización en el desarrollo de estas orientaciones” (1990: 27). Sin embargo, y a pesar de un importante desarrollo ulterior en esta línea metodológica, no se llegó a tanto. Lo que debe reconocerse a Almond y Verba es que su obra fue punto de partida de la preocupa- ción sobre la cultura política, no solamente dentro del campo de la ciencia política sino desde el más amplio de las ciencias sociales. En la primera encuesta comparativa sistemática a nivel micro de actitudes y conductas políticas, en la revolucionaria obra de Almond y Verba (1970), se consideró a México como un país que combinaba aspiraciones y marginación. Este estudio encontró que muchos mexicanos expresaban orgullo sobre su sistema político y aspiraciones de participar en la política, además de confianza en su capacidad de hacerlo. Sin embargo, al mismo tiempo, los mexicanos mostraron los niveles más bajos de actividad política, participación en asociaciones de afiliación voluntaria e información política. Cuatro décadas más tarde, un estudio empírico de Pippa Norris (2004) siguiendo a Ronald Inglehart, que combina los resultados de las comparaciones de México con otros países latinoamericanos con niveles de desarrollo similares, plantea las evidencias que dibujan un panorama más complejo. Las tendencias a largo plazo en la posguerra muestran que México, al igual que muchas naciones de América Latina, ha experimentado niveles crecientes de participación electoral, aunque al 29 mismo tiempo las pautas durante los últimos treinta años muestran fluctuaciones sin tendencia definida. México manifiesta también un promedio relativamente bajo de participación electoral (votos/población en edad de votar) durante los años noventa en comparación con otros países de América Latina. En términos de su capital social, los mexicanos son moderadamente activos en las asociaciones de afiliación voluntaria y organizaciones comunitarias (con un nivel superior al promedio en América Latina), pero también muestran un nivel bastante bajo de confianza social (aunque ésta ha aumentado en años recientes). Y México presenta niveles bajos de participación en la política de protesta y las manifestaciones, además de poca fe en los ideales democráticos, baja aprobación del funcionamiento de la democracia y confianza moderada en las instituciones políticas. Resulta difícil llevar a cabo una comparación estricta con la línea de base en Almond y Verba dadas las diferencias en las medidas y los marcos comparativos. No obstante, el estudio más amplio de distintas naciones sugiere que algunos de los elementos más antiguos de la cultura política mexicana persisten, mientras que otros indicadores, como el activismo en asociaciones parece plantear un panorama distinto de la 30 situación de hace cuatro décadas. Sólo puede esperarse que las actitudes culturales básicas y las pautas de comportamiento político que se adquieren en el hogar y la familia, el lugar de trabajo y la comunidad durante los años formativos de la juventud y la adolescencia se modifiquen gradualmente, por lo que mostrarán un marcado retraso con respecto a las reformas institucionales. Queda por verse qué tanta capacidad tienen los importantes cambios institucionales que se han experimentado en los últimos años en México como parte del proceso de consolidación democrática —en especial la competencia genuina de confrontación entre partidos, la alternancia del gobierno y la oposición en el poder, que facilitará la responsabilidad ante el electorado, una presidencia más limitada y contiendas electorales más cerradas, así como las tendencias más amplias a largo plazo del desarrollo humano— para generar una renovación de la participación ciudadana y de la confianza en el proceso político, particularmente en las generaciones más jóvenes, en las décadas por venir. Siguiendo la tradición establecida por Sidney Verba y sus colegas, los estudios sobre la cultura política se han concentrado desde hace mucho en la comparación de modalidades alternas, como la votación, la organización comunitaria y las actividades de contacto, cada una con demandas y recompensas diferenciadas. La mayoría de los trabajos realizados bajo la influencia de esta tradición se concentran en el estudio de tres tipos distintos: la participación electoral, entendida como la acción más extendida que experimenta la mayoría de los ciudadanos, el activismo ciudadano dentro de asociaciones comunitarias y organizaciones de afiliación voluntaria, debido al interés que se ha generado en este tema por las teorías del capital social y, por último, las experiencias del activismo de protesta, entendido como ejemplo de formas menos ortodoxas de expresión y movilización política. Las teorías de la modernización son una propuesta novedosa y alterna a los estudios de Almond y Verba, estas teorías se han forjado a partir de la labor de Ronald Inglehart (1976) y Russell Dalton (2000), entre otros. Las teorías de la modernización son atractivas por su afirmación de que los cambios económicos, culturales y políticos van juntos en formas predecibles, de manera que existen trayectorias que en líneas generales son similares y que integran patrones coherentes. Las teorías de la modernización sugieren que los cambios económicos en los procesos de producción subyacen a los cambios en el Estado; en particular, que el aumento en los niveles de educación, alfabetización y riqueza en la transición de las economías agrícolas de subsistencia a naciones industrializadas genera condiciones que favorecen una mayor participación ciudadana. Cuando los ciudadanos tienen la oportunidad de expresar sus preferencias políticas a través de las urnas, entonces puede esperarse que el aumento en los niveles educativos durante la primera etapa de la industrialización fomenten la participación electoral, además de impulsar otros aspectos más amplios de participación ciudadana, como el crecimiento de las organizaciones partidistas y sindicales en las áreas urbanas e industriales. Sin embargo, podemos esperar un efecto de tope por el impacto del desarrollo humano. En particular, una vez que la educación primaria y secundaria se generalizan entre la población y producen las habilidades cognoscitivas básicas que facilitan la conciencia ciudadana y el acceso a los medios masivos de comunicación en las sociedades industriales, entonces los mayores avances en la proporción de la población que 31 asiste a las universidades y los niveles en constante crecimiento de la riqueza personal, los ingresos y el tiempo de ocio en las sociedades postindustriales no producen por sí mismos mayores aumentos en la participación electoral. Inglehart (1976 y 1988) sugiere que la modernización de la sociedad conduce a que se sustituya la participación tradicional en actividades como la participación en las elecciones y la afiliación partidista por nuevas formas de actividad más exigentes, como la participación en los nuevos movimientos sociales y las campañas de apoyo a referéndums, en un juego de suma cero. Pero podría ser preferible considerar que este proceso complementa más que desplazar los canales tradicionales de la expresión y la movilización política, de manera que los otros canales de expresión política coexistan en las democracias representativas. Según este punto de vista, muchos activistas de las corrientes dominantes se dirigirán estratégicamente a cualquier modalidad o forma de organización política que consideren más eficiente, ya sea las campañas en partidos y elecciones, el trabajo a través de organizaciones de grupos de interés tradicionales como los sindicatos y las asociaciones civiles, o la difusión de sus inquietudes a 32 través de manifestaciones y protestas en las calles. La contrapartida: visiones alternas a The Civic Culture Una visión alterna a la política comparada se ubica dentro de la sociología comprensiva que casi desde la aparición de The Civic Culture: Political Attitudes and Democracy in Five Nations cuestionó ampliamente esta perspectiva, argumentando sobre todo que se trataba de un modelo occidental de orientación norteamericana capitalista y democrático-liberal e insistieron en reubicar el estudio de la cultura política dentro del amplio campo de los valores, significados e instituciones de la cultura general. Este segundo desarrollo teórico sobre la cultura política “hace uso de las pruebas de plausibilidad y construye la cultura política como significado, es evidentemente omnívora, al contener una definición comprensiva de cultura política” (Welch, 1993: 6). En el uso sociológico, la comparación de la cultura política no se puede dar en virtud del grado de profundidad y detalle al cual se puede llegar por los significados culturales propios de una colectividad. Bajo este esquema, no es posible comparar, pero tam- poco es el objetivo, lo importante es la comprensión e interpretación. La sociología interpretativa “intenta conocer los significados, símbolos, códigos de la acción social (la acción política incluida), pero no aspira a una comparación entre culturas, ya que entre más detallado y complejo sea el acercamiento a la cultura política, menos comparable puede ser” (Welch, 1993: 7). Para la sociología interpretativa, la definición conceptual es muy importante. La sociedad no es la suma de individuos, sino las relaciones invisibles que los individuos establecen entre sí a lo largo del tiempo, forman estructuras e instituciones, cuya sedimentación da significado a la acción social, en lo que podríamos llamar una rápida síntesis de la teoría (Ritzer, 1993). De manera que aquí la cultura política forma parte de esa sedimentación y se expresa a través de la acción política. Se puede decir, según esta teoría, que la cultura política no es muy diferente de la cultura general, no se tiene una y no la otra, no hay pueblos que tengan cultura política sin tener cultura. Para esta corriente teórica no tiene sentido conceptual la cultura política tal y como está definida en el esquema comparatista. La crítica más aguda de esta teoría a la política comparada es que la obra de Almond niega el papel de las élites dominantes en la difusión de los mitos democráticos, argumentando que la cultura cívica y otros estudios de civismo sirven para describir los valores dominantes y por lo tanto, la teoría finalmente no llega a explicar la estabilidad de los sistemas sociales (Welch, 1993). Casi al mismo tiempo la antropología se unió al cuestionamiento de la sociología comprensiva de los trabajos de cultura política desde la perspectiva de la política comparada, de la misma forma insistieron en reubicar el estudio de la cultura política dentro del amplio campo de la cultura general. Una de las aproximaciones más interesantes al concepto de cultura política ha sido propuesta por los antropólogos sociales Francisco Cruces y Ángel Díaz de Rada. Desde una sensibilidad antropológica muy atenta a las articulaciones entre política y vida cotidiana, y desde un interés por los escenarios locales de la política, han mostrado cómo los sentidos de la política construidos desde los espacios locales, “no siempre van en la misma dirección que las concepciones formales, institucionales, racionalistas y universalistas que presiden frecuentemente la formulación y aplicación de las políticas públicas de modernización, participa- 33 ción e integración política” (Cruces y Díaz, 1995a: 15). Estos autores sugieren la pertinencia de poner en diálogo un concepto de Cultura Política, con mayúsculas y un concepto antropológico, más plural y localizado, de ‘culturas políticas’, viendo sus relaciones posibles, y, más allá, sus quiebras y desencuentros. Otra aproximación interesante a la cultura política desde la antropología social la integran los trabajos sobre redes sociales y la forma en que éstas se articulan con la cultura, construyendo simultáneamente un tejido de relaciones de poder. Las investigaciones de Larissa Adler de Lomnitz (1994a), intentan mostrar distintos estratos sociales y grupos ocupacionales, las maneras como se construyen relaciones de reciprocidad, solidaridad, lealtad, ayuda mutua, confianza, redes de conexiones sociales y familiares, ya de tipo horizontal (intraclase) o de tipo vertical (interclase). La sensibilidad antropológica de Adler le da la posibilidad de un modo similar asumido por Cruces y Díaz (1995b), de observar aquellas expresiones de la cultura política presentes en la sociedad, que escapan a los modelos occidentalistas y racionalistas de construcción de la moderna institucionalidad capitalista y que no logran ser dominados totalmente por su lógica individualista, competitiva e instrumental. 34 Al estudiar el compadrazgo a nivel de las clases medias urbanas chilenas, Adler (1994b) muestra cómo las actitudes y los valores propios del compadrazgo revelan un conflicto subyacente entre la ideología liberal de competencia y progreso basados en el mérito individual, (el espíritu de la ley) y la ideología de solidaridad de grupo. La idea de cultura política de esta autora es que “la cultura política vendría a ser la gramática de las relaciones de dominación / subordinación / cooperación”; es decir, la gramática del control social, del poder y su forma de expresarse, “mi propuesta” dice Adler, “es definir la cultura política sobre la base de la estructura de las redes sociales que tienen relación con el poder; y la del sistema simbólico que la legitima, la cultura política así entendida sería un elemento central de lo que constituye la identidad nacional” (1994a: 333). Por otro lado, Roberto Varela (1996) ha desarrollado un interesante modelo para analizar el ámbito de la cultura política y la define como una matriz tanto consciente como inconsciente, que da significación a las creencias y al comportamiento social; esto es, se refiere a la cultura como a un conjunto de símbolos y signos, considera que los símbolos y los signos transmiten conocimientos e información, portan valores, suscitan sentimientos y emociones, y expresan ilusiones y utopías. Desde la lingüística y la semiología y, particularmente desde el análisis del discurso político, se han desarrollado también aproximaciones a la noción de cultura política. Estas disciplinas han abordado el estudio del discurso político y de sus distintos géneros (panfleto, ensayo, manifiesto, afiche político, discurso político de prensa, discurso político televisivo) es decir, de las maneras como una sociedad se dice o se representa a sí misma según el punto de vista político discursivo: cómo representa a los trabajadores, a la nación, a los políticos profesionales, a las instituciones, la historia y las tradiciones políticas nacionales, etcétera. Parece importante transcribir la argumentación que construye Oscar Landi (1992: 44-45) acerca del modo en que las culturas políticas pueden observarse también, en cuanto combinaciones de géneros discursivos y estéticos: Las culturas políticas están compuestas por paquetes de géneros discursivos y estéticos muy cambiantes y sin centro en el clásico discurso político. Las culturas políticas suelen verse bajo el ángulo de las diferentes ideologías que las tiñen, pero también definen su perfil por el conjunto de géneros que engloban en un momento dado. Las investigaciones de Jesús MartínBarbero (1991) y, en particular su trabajo “De los medios a las mediaciones”, significó en su momento, y podríamos decir que sigue significando en nuestros días, un quiebre teórico muy importante en la visión del papel político de los medios de comunicación en la sociedad, un desplazamiento de la mirada desde ópticas instrumentales de la relación medios-sociedad, hacia comprensiones mucho más complejas y problematizantes, capaces de ver las distintas mediaciones sociales (de género, etnia, clase social, regionales, locales, nacionales, etéreas, etc.), a través de las cuales se producen las influencias e incidencias sociales de los medios de comunicación de masas. Es importante señalar el aporte de Néstor García-Canclini (1990), en su texto “Culturas híbridas” ya que abrió en América Latina nuevas perspectivas para pensar las transformaciones culturales y políticas contemporáneas, asociadas a la configuración en la región de actitudes y contextos posmodernos, inició el debate sobre lo que hoy denomina- 35 mos con más claridad, recogiendo las contribuciones y matices introducidos posteriormente por Beatriz Sarló (1994) y otros analistas en el tratamiento de la cuestión, como la incidencia de los medios masivos de comunicación en la desestructuración de las viejas culturas populares y de élite, (es decir, en la transformación de las viejas culturas sociales asociadas a la clase obrera, la cultura campesina, la cultura de clases medias de base escolarizada o las culturas de élite ligadas a la cultura letrada y al culto de las bellas artes), y en la conformación de nuevas formas híbridas de culturas sociales. Al cuestionar “Culturas híbridas” los distintos dualismos desde los cuales se ha pensado durante muchas décadas el desarrollo político y social latinoamericano (las oposiciones moderno-tradicional, extranjero-local, culto-popular, hegemónico-subalterno), y a sugerir visiones más abiertas al reconocimiento de los posibles cruces o hibridaciones que históricamente se establecieron o se dan hoy entre los polos de esas dualidades, nos brinda nuevas posibilidades para repensar los procesos de modernización de América Latina (para pensar la naturaleza y los componentes culturales tradicionales del moderno clientelismo político, por ejemplo, y no reducirlo a un problema moral), así como para examinar 36 de manera creativa nuevas alternativas de desarrollo. Otro analista que nos provee de aportes importantes para el estudio de las formas contemporáneas de la cultura política, en el contexto del nuevo espacio audiovisual es Oscar Landi (1993). Sus investigaciones en torno a las relaciones entre televisión y política, por ejemplo, sobre la influencia de la política televisiva o videopolítica en la morfología del sistema político a través de la promoción televisiva de candidaturas por fuera de los mecanismos de elección interna de los partidos, aportan valiosos elementos de análisis para la comprensión de funcionamiento del espacio público contemporáneo, al que algunos estudios han denominado la nueva escena pública electrónica, o el “ágora electrónica”. Es importante destacar también los aportes a la comprensión del funcionamiento de la cultura política, en particular de los procesos de producción, circulación y consumo de significaciones sociales y políticas en una determinada sociedad realizados desde la teoría de la recepción o investigación crítica de audiencias y los trabajos empíricos de la etnografía de la recepción televisiva o etnografía de las audiencias televisivas. En particular nos parece que resultan de especial interés para los estudiosos de la cultura política las investigaciones etnográficas sobre recepción de noticias (que en buena parte se cruzan, metodológicamente hablando, con los análisis del discurso político en noticieros de televisión). Revisaremos una última perspectiva: la teoría de la elección racional (rational choice), que asume que todos los individuos llevan a cabo sus decisiones en forma racional, incluidas sus decisiones o elecciones sobre el mundo político. Esta teoría tiene sus raíces en una obra de Gordon Tullock (Chilcote, 1994), cuya línea es en cierta medida continuada por James Buchanan dentro de la economía y por Anthony Downs por el lado de la sociología y la ciencia política. En ambos, el argumento central es que un análisis del mercado debería estar basado en el individuo racional que persigue sus propios intereses y elige en consecuencia. En este sentido, la preocupación central es la eficiencia de las instituciones gubernamentales en el diseño de las preferencias individuales sobre los bienes y políticas públicas. La obra que marca la entrada de the rational choice a la teoría política es de Marcur Olson, “La teoría de la acción colectiva” (1992). Así, hacia los años sesenta y setenta esta teoría intentó, basándose en la economía y los modelos formales, describir el ambiente político, incluidas las actitudes hacia la política. Almond fue un crítico acérrimo de esta teoría, la calificaba de reduccionista y en cierto modo lo era... el análisis de la elección racional puede conducir a distorsiones empíricas y normativas, si no es utilizado en combinación con las ciencias históricas, sociológicas, antropológicas y psicológicas, las cuales consideran los valores y servicios de la gente, los intercambios culturales y nacionales, a través de los estratos sociales, y en un espacio temporal dado (Almond, 1990: 121). La teoría de la elección racional tiene una relativa utilidad si tratamos de buscar significados sobre lo político. Es poco factible, de acuerdo con todo lo dicho, que un individuo actúe frente al mundo político, basado solamente en un cálculo racional individual. Es posible aplicar la teoría con ciertas reservas, si pensamos en la fase última de la acción política, como podría ser el sufragio; pero la elección racional, para ser considerada en términos culturales, tendría que adentrarse en otros ámbitos diferentes a los que sus estudiosos lo concibieron. La historia, la ideología y la religión son factores no abordados por esta teoría. Todos, sin duda, explican mucho de la cultura política de los pueblos. 37 De todas maneras, es importante mencionar dicha aproximación teórica, porque el impacto del mercado en la dinámica social contemporánea es tal que ha removido el ámbito político en amplia medida. Un mínimo acuerdo Existe un acuerdo bastante generalizado en cuanto a que los códigos valorativos se modifican muy lentamente, es decir, que hay cierta inercia en los marcos axiológicos que se resisten a cambiar al ritmo que lo hacen las prácticas y las instituciones políticas. Sin embargo, y paradójicamente, la cultura política puede ser la fuerza que sustente el desarrollo y la evolución de una sociedad. Es casi un lugar común entre los estudiosos de la cultura política afirmar que hay un círculo cerrado de relaciones entre cultura y estructura políticas, de suerte que si bien las experiencias de los individuos acerca de los procesos e instituciones políticas ayudan a configurar cierta cultura, ésta define a su vez la dirección de aquellos. No obstante, sus esquemas de análisis revelan la primacía que otorgan a los factores culturales sobre los estructurales, justamente porque lo cultural tiene un mayor grado de penetración y de persistencia. 38 No cabe duda que los distintos componentes de la realidad social son interdependientes y que la estructura política impacta a la vez que es impactada por las creencias, actitudes y expectativas de los ciudadanos. Dado que las democracias más estables se asentaron en sociedades caracterizadas por un alto nivel de industrialización y, en general, de desarrollo económico, esto se consideró un prerrequisito para la implantación cabal de las instituciones democráticas. No cabe duda de que el desarrollo industrial ayuda a debilitar las tradiciones, y de que los niveles altos de vida pueden incrementar la confianza interpersonal que es un componente de la cultura democrática. También se ha probado que los niveles elevados de escolaridad y un mayor acceso a la información son elementos que impulsan la participación política de los ciudadanos. Sin embargo, algunos estudiosos, que como Ronald Inglehart (1976 y 1988) han realizado en años recientes y desde una perspectiva de reivindicación de los modelos culturalistas trabajos empíricos sobre cultura política en diferentes naciones desarrolladas del mundo occidental, han demostrado que el desarrollo económico por sí mismo no necesariamente conduce a la democracia; solamente puede hacerlo si lleva consigo, en forma paralela, cambios en la estructura social y en la cultura política. teóricos que se han señalado, para que con esta perspectiva se realice el análisis. Es más, Inglehart sostiene que la cultura no es una simple expresión derivada de las estructuras económicas, sino que es un conjunto de elementos con autonomía suficiente como para poder contribuir a conformar elementos económicos y no solamente a ser conformada por éstos. De tal manera, y desde esta óptica, la cultura política es más bien una variable decisiva ligada al desarrollo económico y a la democracia moderna. No se afirma tajantemente que las estructuras determinan la cultura o que la cultura determina la estructura, tampoco se resalta totalmente la preeminencia de los actores sobre las estructuras. Más bien estamos atentos cuando aumenta la intensidad de un factor o de otro de acuerdo con las cambiantes circunstancias. Independientemente del peso específico que se otorgue a la cultura política como variable que influye en la construcción y consolidación de una sociedad democrática está claro que, si de lo que se trata es de contribuir a ello, es indispensable fomentar un patrón de orientaciones y actitudes propicias a la democracia, y para lo cual es necesario considerar los agentes y procesos de transmisión de valores y referentes democráticos, es decir, explorar el tema de la socialización. El segundo debate teórico sobre el que se realiza un breve análisis está vinculado al concepto de ciudadanía, que inicia con la publicación del libro Class, citizenship and social development, de T. H. Marshall publicado en 1979. Por tal motivo, en esta investigación tomaremos como referente central la propuesta de Roberto Varela (1996) por sobre los demás marcos 1.2. Ciudadanía: diversos significados en contextos cambiantes A continuación se revisan algunas modificaciones que ha registrado el concepto de ciudadanía y su descripción más general en el contexto actual, se ejemplifica la manera cómo se adecua y adquiere un nuevo significado en situaciones culturales específicas. Es importante no perder de vista que esta breve revisión tiene la finalidad permitir la articulación del concepto ciudadanía con 39 los conceptos de cultura política, migración, comunidad transnacional y alternancia política. Las nociones de ciudadanía y ciudadano se remontan varios siglos atrás y se vinculan estrechamente con el desarrollo del pensamiento y cultura moderna de occidente. El reconocimiento de esta historia bien puede remontarse en su definición clásica a los griegos y la exclusión que la noción de ciudadanía conllevaba. Pero como no se intenta reconstruir el proceso de su génesis y paulatina evolución a lo largo de los siglos en la cultura de occidente, nos detendremos alrededor del siglo XIX, cuando conjuntamente con el fortalecimiento del Estado-Nación se estructura una moderna sociedad civil y por consiguiente una ciudadanía y un ciudadano característico. T. H. Marshall (1979) en un libro que es ya un clásico Class, citizenship and social development afirma que es en el siglo XIX y parte del siglo XX cuando podemos reconocer el desarrollo de la concepción moderna de ciudadanía y diferenciar por lo menos tres etapas o fases distintivas en el reconocimiento de los derechos y las instituciones creadas. Una primera etapa es cuando se constituye una “ciudadanía civil” (civil citizenship) que se origina a consecuencia de las 40 revoluciones francesa y norteamericana de fines del siglo XVIII y que llegaron a establecer los derechos necesarios para la libertad individual; derechos de propiedad y libertad personal, pero particularmente el derecho a la justicia y el acceso a tribunales. Un segundo desarrollo característico es el de la “ciudadanía política” (political citizenship), construida durante el siglo XIX y que abarcaba el derecho a participar en el ejercicio del poder político, ya sea mediante el voto o por el acceso a cargos públicos. La tercera fase, la “ciudadanía social” (social citizenship) Marshall la ubica en el contexto del siglo XX y que se manifiesta en el desarrollo e instituciones del “estado de bienestar” (welfare state). Es una ciudadanía que enfatiza los derechos de hombres y mujeres a la seguridad económica y social. Los derechos sociales de esta tercera fase significan que le otorgan al estatus ‘formal’ de la ciudadanía, los fundamentos ‘materiales’ para hacer valer tales derechos, es decir, en esta fase, con sus bases materiales de soporte, permite a la ciudadanía ejercitar sus derechos para la plena participación de la comunidad. De ninguna manera esta etapa de la “ciudadanía social” es el fin del desarrollo histórico de la ciudadanía, tal como parece lo sugería Marshall, por el contrario, asistimos a nuevos tipos de ciudadanía que se han desarrollado en torno a nuevos problemas y procesos sociales. Particularmente desde la década de los ochenta, estos fenómenos son más evidentes y permiten identificar la pluralización de las formas y contenidos de la ciudadanía que van más allá de las fases y los aspectos cívicos, políticos y sociales que propuso Marshall, no obstante, la contribución de este sociólogo inglés tiene aún influencia y utilidad, y es la base para el desarrollo de nuevas conceptualizaciones, tales como la “ciudadanía cultural”, o la “ciudadanía global”. La ciudadanía, en términos culturales, incluye la noción de una cultura común en donde los ciudadanos pueden participar igualitariamente, de modo ideal el ciudadano es activo en la vida pública y tiene la voluntad de someter sus intereses particulares a los intereses de la sociedad. En el contexto actual, la ciudadanía aparece como una unidad cuando en realidad es una diversidad de posiciones e intereses. El ciudadano es parte de una entidad (el Estado-nación) que ‘desde arriba’ está siendo erosionado en su soberanía y como entidad autocontenida por la globalización, pero también el Estado-nación, es afectado por el surgimiento y exacerbación de nacionalismos, regionalismos y localismos que lo socavan desde dentro y abajo. Por lo tanto surge inevitablemente la pregunta ¿los derechos ciudadanos se especifican y definen sólo respecto de la entidad política del Estadonación? Esta investigación plantea que en el contexto contemporáneo ya no es posible, por la emergencia de nuevas realidades macrosociales y supranacionales. Por ello se plantea que los conceptos de Estadonación y ciudadanía tienen que ser revisados continuamente o se corre el riesgo de ser rebasados. Así, la gestación de nuevos derechos debe corresponder con sus nuevas responsabilidades; por lo que la política ciudadana a nuevas escalas de carácter más extensivo e inclusivo, demanda de nuevos medios y recursos institucionales, con la finalidad de que los nuevos derechos ciudadanos puedan procurarse en las nuevas condiciones para su realización. Existen al menos dos aspectos centrales al tratar la noción de ciudadanía, el de la inclusión/exclusión y el de los procesos de extensión e internalización del propio concepto. La cuestión de la inclusión/exclusión es tratada al considerar las calidades o tipos de ciudadanía: ciudadanos de primera y de segunda categoría. 41 Hall y Held (1990) se plantean de manera relevante la siguiente pregunta ¿hay varias clases de ciudadanía que dependen de las personas y sus posiciones sociales, culturales, étnicas, etc.? La ciudadanía conlleva la discusión y la lucha por el sentido y los fines de la ‘membresía’ de la comunidad donde se vive. Es central conocer quién y cómo se pertenece, y qué significa esa pertenencia en la práctica real. Ya que la membresía implica derechos y obligaciones hacia la comunidad de pertenencia. El problema de la inclusión/exclusión no es nuevo, pero en las últimas décadas ha ganado relevancia por la emergencia de nuevas minorías socioeconómicas, por la lucha emancipadora de grupos minoritarios, por el ataque en contra del estado de bienestar y en general por los asuntos que conciernen a la participación ciudadana y los procesos de marginalización en la sociedad moderna del siglo XXI, en donde la mayor parte de la población pertenece a las clases bajas. Tanto por las condiciones de vida y existencias de estas poblaciones, como por el escaso poder económico y político que representan, están excluidas de la participación ciudadana plena, lo que evidencia un enorme reto a los valores básicos 42 que plantea la ciudadanía moderna. En este sentido Aihwa Ong (2003) en su obra denominada Buddha is hiding. Refugees, citizenship, the new America, aborda la historia de camboyanos-americanos que tienen la ciudadanía americana y que sin embargo son considerados ciudadanos de segunda, para ello realiza un extenso trabajo de campo en Oakland y San Francisco, este estudio coloca la mirada sobre el impacto de aquellos refugiados en Estados Unidos y que están negociando una cultura peculiar que cuestiona las instituciones médicas, de bienestar social, judicial, religioso y económico de ese país. Ong nos dice que lo que está en juego es el replanteamiento radical de las condiciones de vida, el significado de lo humano y de una concepción de poder más allá de los confines de la soberanía tradicional. Ong en su obra nos muestra las fuerzas brutales que reconfiguran la ciudadanía en el contexto de la globalización del mundo. Por ello, con fidelidad sigue cada vida de los refugiados camboyanos en California, y trata de mostrarnos cómo ellos luchan por “tener sentido de”, por la “selectividad para aprovecharse de”, y replicar las demandas americanas de autonomía personal, narcisismo, codicia y materialismo, las cuales se enfrentan a los valores camboyanos de compasión, comunidad y reciprocidad. De cualquier manera el ciudadano activo tiene que adecuarse a las formas del poder en su relación con el Estado. El ciudadano activo, por lo tanto, es definido de manera diversa, y no es unívoca su caracterización. Explican Hall y Held (1990), que el concepto de ciudadanía no tiene pertenencia política ya que puede ser apropiado, usado y articulado políticamente por distintas posiciones y actitudes políticas, ya que tiene cabida en todo discurso, por lo que no existe un contenido ‘esencial’ para la ciudadanía. Ese es el riesgo que corren los conceptos de las ciencias sociales en la actualidad, y el que hay que evitar porque actualmente su uso se ha extendido a otras esferas como los medios de comunicación masivos y por ello se ha convertido en concepto residual, se utiliza en todos lados y no dice nada. Es así que los derechos ciudadanos deben ser enunciados específicamente y definidos, para poder identificar su ausencia, amenazas, desaparición, etc. Pero no es suficiente la mera formalidad, ya que para preservarlos, se requiere la participación en y de la comunidad. En cuanto a los procesos de extensión e internalización del propio concepto, la ciudadanía gira por tanto en tres factores claves: la cuestión de la membresía, la formulación de derechos y responsabilidades recíprocas, y la participación real en la práctica. Así, la ciudadanía tiene que ver con derechos y con obligaciones, por un lado frente al Estado, y por otro, su responsabilidad frente y para la comunidad. Los asuntos sobre la membresía —quiénes sí y cuáles no pertenecen— es donde la ‘política’ de la ciudadanía inicia. Aquí aparecen nuevamente los procesos de selección, exclusión, restricción, condicionamientos, discriminación, segregación, distinción, etc. Es claro que a lo largo de la historia se hayan dado luchas en contra de la “exclusión” (p. e. de la propiedad, la riqueza, los privilegios, la educación, la salud, etc.) cuestiones que son de “clase”, ya que ésta ha sido un mecanismo de exclusión a la membresía y a la participación. Pero la ciudadanía no puede reducirse al problema de la política de clase, o exclusivamente en los términos de la sociedad capitalista. La ‘política ciudadana’ contemporánea argumentan Hall y Held (1990) debería tender a ser más ‘inclusiva’ respecto a los movimientos sociales, ya que ellos han ‘expandido’ la demanda sobre derechos y reclamos en nuevos campos y áreas de interés social. La ‘política ciudadana’ debería con- 43 siderar cuestiones no sólo de clase y desigualdad, sino también de las membresías surgidas por el feminismo, los movimientos étnico y negro, el ecologismo, las minorías religiosas, las minorías sexuales y grupos vulnerables, etc. Lo que debería resultar evidente es la diversidad de arenas donde la ciudadanía es reclamada y confrontada. Es claro el riesgo de que a mayor inclusión de demandas, derechos, membresías, etc. pueda terminarse con la diversidad y tender hacia la homogeneización del ente ciudadano, haciendo universal un estatus que esconde y no expresa la pluralidad. El sujeto político moderno se inscribe en la aceptación de la ‘universalidad’ y la ‘igualdad’, pero también en la ‘inclusión’ de las necesidades específicas, diversas, de lugares diferentes, de prácticas plurales, etc. La cuestión central es que la noción de ciudadano no reduzca, no elimine las distintas particularidades; por lo que se reconoce una tensión en el concepto de ciudadano expresado, ya que incluye “lo compartido-común”, pero no necesariamente las membresías particulares. En este sentido estudios como el de Sonia Álvarez, Evelina Dagnino y Arturo Escobar (1998) plantean e investigan las complejas relaciones entre cultura y política en un amplio 44 campo de los movimientos sociales en Latinoamérica, su estudio denominado Cultures of politics. Politics of cultures. Revesioning latinamerican social movements, se centra en las culturas políticas representadas por los movimientos sociales y cómo éstos luchan por nuevas visiones y prácticas de ciudadanía, democracia, relaciones sociales y desarrollo. El volumen de Álvarez, Dagnino y Escobar (1998) explora el potencial de estas culturas políticas para generar y producir nuevas alternativas de la cultura política y que impacten en las transformaciones sociales. Teórica y empíricamente estos autores evalúan y construyen una nueva concepción de cultura y política desde una variedad de disciplinas y profesiones –particularmente antropología, ciencia política, sociología, teoría feminista y estudios culturales. Un importante teórico plantea que el término ciudadanía es “una condición de pertenencia o cualidad de miembro de la comunidad política, que supone la titularidad de la soberanía y la atribución de derechos que van más allá de los derechos humanos fundamentales de carácter civil, los ligados directamente a la persona. Dicho de otra manera, la atribución, de un lado, de derechos políticos y, de otro de derechos económicos, sociales y culturales” (De Lucas, 2002, 218). Como ha escrito Añón (2000) éste es uno de los puntos cruciales del debate, la relación entre ciudadanía y derechos sociales, que adquiere particular relevancia por lo que se refiere al régimen jurídico de los inmigrantes extracomunitarios. En definitiva, es el debate acerca de la <ciudadanía social>, que supera la vieja ecuación de identidad entre ciudadanía y derechos políticos. En efecto, esa identificación exclusiva que se refuerza con las revoluciones americana y sobre todo francesa, nace a su vez de la identificación de la comunidad nacional con la ciudadanía, que recupera la frente a sus depositarios en el antiguo régimen, el monarca absoluto, los estamentos privilegiados. Pero, como destacara Marshall, esa revolución ciudadana deja intacto el mecanismo de exclusión del mercado, un poderoso factor de desigualdad frente al cual se alzara la reivindicación de la ciudadanía social. Los ciudadanos no lo son plenamente sin el reconocimiento de la titularidad de los derechos sociales, económicos y culturales, obra en gran medida del Estado de bienestar, porque, como se ha insistido (sin demasiado éxito a juzgar las perspectivas actuales), estos derechos son la condición real de extensión de los derechos políticos. De forma que difícilmente se apuesta por la integra- ción de los inmigrantes (menos aún se apuesta por abrirles el camino a la ciudadanía) si no se les reconocen esos derechos sociales. El debate sobre inmigración y política, como se viene insistiendo desde un sector aún minoritario, no puede ser minimizado, pero no porque constituya el gran riesgo, la gran amenaza para la subsistencia del modelo de democracias acomodadas, sino porque es el escenario más claro en el que se dirime hoy la vieja cuestión de la democracia, el acceso y la distribución del poder, sobre todo por parte de quienes aparecen como diferentes o, para ser más exactos, para aquellos cuya presencia entre nosotros nos hace comprender que no hemos tomado en serio la condición de la diferencia, que es constitutiva de nuestra propia realidad social a la que aún queremos seguir viendo como homogénea (De Lucas, 2002). “Ahora se trata de <tratarlos bien>, de respetar los derechos que tienen como seres humanos (un enorme gesto de progresía éste de tomar en serio lo que venimos proclamando como obvio), incluso de reconocerles algunos derechos en los mismos términos de los ciudadanos, pero, por supuesto, dentro de un orden: porque si reconocemos que pueden tener los 45 mismos derechos que los ciudadanos plenos, ¿cómo vamos a mantener la distinción?” (De Lucas, 2002: 222). En la visión dominante de la inmigración prima una concepción instrumental, funcional a su vez para una concepción monista de la política, arcaica pero muy arraigada, la propia del Estado-nación (y del sistema de mercado), que escinde el mundo en la dicotomía comunidad política nacional versus todos los demás, ciudadanos (nosotros, los miembros de la comunidad nacional que lo somos por ello de la comunidad política) frente a extranjeros o nuestros vapuleados conciudadanos que están en el <otro laredo> –y a los que en ocasiones injustamente tachamos de <malinchistas>. Claudio Lomnitz (2000) desarrolla una discusión histórica de la dinámica cultural de la ciudadanía mexicana. En el trabajo titulado “La construcción de la ciudadanía en México” sostiene que la ciudadanía es el grado cero de las relaciones y que deber ser complementada con una visión histórica de los cambios en la definición y situación política de la ciudadanía. Lomnitz sostiene que han existido dos periodos en los que las discusiones sobre la ciudadanía han sido centrales en el discurso político –el primer periodo es el que 46 sigue a la Independencia, el segundo corresponde a la crisis económica de 1982–, enfatiza que la ciudadanía en México en el periodo posrevolucionario es de una ciudadanía masificada y sectorial, pues los obreros y los campesinos pudieron recibir beneficios a causa de su ‘ciudadanía’ pero carecieron de independencia respecto del estado, en este sentido afirma que “La imagen del ciudadano con voz contrasta con la del ciudadano masificado” (Lomnitz, 2000: 146). En los últimos años la contracción del Estado ha propiciado movimientos sociales masivos y un impulso muy fuerte hacia la democratización y hacia la categoría de ciudadano, “pero el énfasis actual en los derechos electorales conlleva el riesgo de vaciar esta categoría una vez más” (Lomnitz, 2000: 149), por ello el autor impugna las interpretaciones de la modernidad mexicana que describen la historia contemporánea simplemente como “transición a la democracia”. En suma, la modificación que se ha dado de la ciudadanía clásica o liberal hasta la ciudadanía de nuestros días da como resultado plantear un tipo diferente de ciudadanía. Particularmente en esta investigación se argumenta a favor de ciudadanía extraterritorial fundamentalmente por- que al analizar de manera conjunta migración y política en el siglo XXI, es necesario un nuevo concepto y modelo de ciudadanía, las condiciones del contexto actual así lo exigen. La ciudadanía extraterritorial Este tipo de ciudadanía implica que es ineludible poner en tela de juicio la trinidad Estado-nación-territorio para el análisis de aspectos políticos de una comunidad determinada. Esta noción sugiere en primer lugar que a pesar de que los tradicionalmente llamados Estados nacionales están separados por fronteras conforme al derecho internacional, es posible imaginar dos o más comunidades políticas instaladas en un mismo territorio. En otro sentido, el concepto implica el reconocimiento explícito de la doble nacionalidad y el reconocimiento de que la residencia está en dos territorios, que por lo tanto esta noción convoca a rediscutir conceptos como nacionalidad, membresía, ciudadanía y participación política más allá del contexto geográfico del Estado Nación. Esto significa un paso adelante respecto de la discusión a favor o en contra del voto extraterritorial. Se trata de abrir el debate y avanzar de lo simbólico hacia las prácticas sociales de los sujetos sociales extraterritoriales. Federico Besserer (1999) señala que la ciudadanía transnacional o extraterritorial reclama el derecho a ser considerados ciudadanos de “primera” y poder ejercer derechos políticos en los varios países y localidades por donde se extiende la comunidad y su identidad. Es decir, la ciudadanía extraterritorial requiere una ciudadanía que salga del borderland (o frontera en palabras de Gloria Anzaldúa) para situarse en el complejo espacio de la vida comunitaria transnacional, esta perspectiva propone que la pertenencia a la comunidad o nación y la residencia no deben ser una limitante para el goce de plenos derechos dentro de su condición transnacional. Bajo esta perspectiva se reconocen las añejas demandas de la legalización de esta práctica para que los miembros de las comunidades transnacionales puedan votar a favor o en contra de leyes o candidatos en sus lugares de residencia (EU) y a la vez puedan elegir y ser electos en su comunidad de origen (México). Adicionalmente, el concepto de ciudadanía extraterritorial en este documento se entiende como un tipo de ciudadanía en permanente construcción y negociación. Este tipo de ciudadanía no está exento de contradicciones, por un lado los tonatiquenses en Estados Unidos apelan a valores como la solidaridad y la cooperación 47 y el respaldo del grupo (esto se explica porque en ese espacio son más vulnerables y de esta forma logran enfrentar las adversidades que el contexto les impone). Mientras tanto en México invocan valores como la calidad de vida y el individualismo (aparentemente esto se explica porque en territorio mexicano los migrantes transnacionales de Tonatico quieren marcar su <superioridad material>, que en ocasiones es una válvula de escape que permite sobrellevar la frustración, el coraje y los sacrificios que tienen que enfrentar en territorio norteamericano). En nuestro país, el estado que primero legisló en materia extraterritorial fue Zacatecas. Este caso no es producto del azar, porque como bien apunta Mestries (2002) en su libro El rancho se nos llenó de viejos. Crisis del agro y migración internacional en Zacatecas, Zacatecas es un estado con una añeja tradición migratoria hacia Estados Unidos que tiene sus orígenes históricos en el siglo XIX, continúa su expansión en la “bracerada” de los años de guerra y posguerra, hasta registrar grandes flujos en las décadas ochenta y noventa. Mestries (2002) señala que las raíces de los migrantes zacatecanos siguen fuertemente apegadas al terruño, y los hacen regresar periódicamente 48 a su pueblo, organizarse en el Norte en clubes según su lugar de origen, canalizar por su intermedio recursos para mejorar las condiciones de vida de sus lugares de origen, participar en sus fiestas y eventos deportivos, invertir en algunas empresas para preparar su regreso, e incluso tratar de influir directamente en la política local, como se vio en las elecciones municipales de 2001 en Jerez. En Zacatecas como tierra de migrantes que es, se sigue luchando para lograr escaños de elección popular, hoy por hoy, hay diputados migrantes, alcaldes migrantes, regidores migrantes y fue el primer estado Binacional de la República mexicana. Un problema importante que se desprende al plantear la ciudadanía extraterritorial, es que los conceptos de comunidad, ciudadanía, residencia y otros que consagran las leyes primarias y reglamentarias, tanto federales como estatales, son casi geográficos. Por ello, en este enfoque alternativo, se reconoce que las comunidades de los migrantes son socialmente construidas por sus propios miembros y que ello no se circunscribe a un solo espacio físico. En efecto, la comunidad de migrantes se integra con lo que ellos comparten entre sí. Sin embargo, lo que los migrantes construyen como comunidad en Estados Unidos tiene dos fuentes culturales. La parte medular proviene de lo que han socializado y compartido en la comunidad de origen, y su complemento deviene de aquello que logran asimilar de la sociedad de destino (proceso de socialización primaria y secundaria). Por tanto, reconocer en la legislación los conceptos de membresía comunitaria, participación social y participación política requiere no ignorar sus fuentes y el multiespacio donde se generan. Si la comunidad es el conjunto de prácticas sociales en donde se reproduce la vida social de una población, y si estas prácticas son creadas, recreadas y reestructuradas más allá del espacio inmediato, entonces será imprescindible incorporar un nuevo concepto de “ciudadanía” que recoja simultáneamente esas prácticas. Por esta vía es fácil argumentar que los migrantes, sin residir en la comunidad de origen, actúan como miembros de ella. Es decir, que más allá de lo que reconoce la ley electoral de cualquier estado en México, los migrantes viven su membresía involucrados en iniciativas comunitarias tanto en el país como en Estados Unidos, y esto debe ser reconocido como una residencia binacional o simultánea (Moctezuma, 2003). En cuanto a las organizaciones de los migrantes mexicanos de varios estados, particularmente de aquellos que se han organizado en clubes, aunque en general mantienen la idea de que sus organizaciones no son de naturaleza política, lo cierto es que inciden en muchas de las decisiones que se toman sobre los destinos de sus comunidades, llegando incluso a convertirse en organismos sociales con capacidad de negociación ante los distintos niveles de gobierno, lo cual, desde la participación extraterritorial, resulta interesante por su correspondencia con los vientos democratizadores en México, cuyo basamento se alimenta de la sociedad civil. Si esto es ya importante, resulta serlo más cuando se descubre que los migrantes –y sus descendientes– han adquirido mayor compromiso para involucrarse en los programas y actividades comunitarias impulsadas por sus clubes (Rouse, 1994; Itzigsohn, 2000). Parte de esta apuesta se basa en la experiencia que está adquiriendo el sector de población joven y en la formación política y cultural de las nuevas generaciones (Moctezuma, 2004). Hoy, ante la presión que produce la globalización económica neoliberal 49 y las políticas desmembradoras de lo regional/local, los migrantes han percibido extraterritorialmente la necesidad de redoblar sus esfuerzos organizativos y asumir una denominación que aluda a sus comunidades de origen. Obviamente, en estas experiencias resurgen aspectos sobre la identidad, el desarrollo de las redes sociales, la participación política, el impulso a lo regional, etcétera, ya que, ante la globalización y la vivencia en el extranjero, se requiere de una mayor dosis de energía y creatividad para afirmar la identidad nacional mexicana. Por ello, aun cuando muchos nacieron en Estados Unidos, la identidad menos anónima y más próxima es la que se reconstruye a partir de su patria o comunidad de origen. Dicho en términos culturales, para los migrantes resulta vital la reconfiguración de la identidad basada en la pertenencia comunitaria (Giménez, 1993), porque desde el extranjero esta identidad facilita las relaciones a partir del espacio social más inmediato, como el pueblo, la colonia o, incluso, la calle en donde adquiere sentido simbolizado la cotidianidad. Por tanto, se requiere abordar sin prejuicios la necesidad de la ciudadanía y el voto extraterritorial a partir de la 50 correspondencia que existe entre la nacionalidad, la membresía, la ciudadanía y la participación política. Eso fue lo que se desprendió de la reforma al artículo 36 constitucional, fracción III, en 1996, misma que tiene como intención explícita la viabilidad del voto de los mexicanos residentes en el extranjero, que en la actualidad presenta algunos avances. En síntesis, plantear la ciudadanía extraterritorial tiene sus ventajas, así el concepto, de entrada, permite cuestionar las nociones de Estado, nación y territorio. Esta categoría permite replantear y reformular las categorías jurídico-políticas tradicionales, al mismo tiempo permite entrever las formas y los límites de la comunidad política del porvenir. Es posible incluso que si en verdad pretendemos estar a la altura de las nuevas circunstancias tengamos que decidirnos a abandonar sin reservas los conceptos fundamentales con los que hasta ahora hemos representado los sujetos de lo político (el hombre y el ciudadano con sus derechos, pero también el pueblo soberano, el trabajador, etc.,) y a reconstruir nuestro pensamiento político. La idea de ciudadanía extraterritorial contribuye a replantear la identidad entre hombre y ciudadano, entre nacimiento y nacionalidad, pone en crisis la ficción originaria de la sobe- ranía. Naturalmente habían existido siempre excepciones singulares a este principio: la novedad de nuestro tiempo, que amenaza al Estado-nación en sus fundamentos mismos, es que cada vez son más las porciones de la humanidad que ya no son representables dentro de él. Por esta razón, se afirma, quebranta la vieja trinidad Estado-nación-territorio como la figura central de nuestra historia política. La ciudadanía extraterritorial es un concepto límite que amplía las posibilidades de una renovación categorial que ya no admite demoras. 51 Frecuentemente, al preguntar a algún muchacho en Arvin, California, recibimos una respuesta como la siguiente: ¿De dónde eres? De Mixtepec ¿Dónde naciste? En el campo Las Pulgas en San Quintín ¿Cuántas veces has ido al pueblo en Oaxaca? Ninguna. Federico Besserer If you don’t see someone in Tonatico Mexico, they’re not dead or disappeared, they’re just allá,”meaning they’re in Tonatico Illinois”. Migrante transnacional, 2005 Capítulo 2. Migración transnacional y sus efectos transformadores Este capítulo reconoce que es pertinente ubicar la relación migración y política, en términos generales dentro de la perspectiva del transnacionalismo, pues se considera que el uso de este concepto aplicado a las comunidades de inmigrantes es muy valioso para explicar y comprender a aquellos actores que buscan influir en más de un espacio estatal-nacional. El transnacionalis- 52 mo es un fenómeno relacionado con la globalización, la cual es entendida como un proceso dicotómico, pues no sólo mundializa los procesos políticos, económicos, sociales y culturales, sino que también los glocaliza, desterritorializa y reterritorializa (Monedero, 2003), a través de espacios como los enclaves étnicos territoriales de los inmigrantes Otavaleños y Cubanos en California y Miami, o el enclave turco en Berlín (Portes, 2003). El modo en que la inmigración cambia la ciudadanía depende en gran medida de cómo los estados y sus ciudadanos perciben a los inmigrantes y cómo construyen el significado de ciudadanía. “La inmigración se ve a través de lentes de concepciones nacionales particulares de ciudadanía, y esta percepción de los inmigrantes retroalimenta a su vez nuestras ideas acerca de la ciudadanía” (Bauböck, 2002: 177). En esta investigación se parte del supuesto de que la inmigración a través de las fronteras internacionales se comprende mejor como un fenómeno transnacional, y que esta interpretación se corresponde con una concepción pluralista de ciudadanía y la refuerza. Es muy importante precisar el concepto de “transnacional”, debido a que la rápida expansión del campo de estudios transnacionales emergentes se ha acompañado por una creciente ambigüedad en el significado, uso y utilidad del término. Este capítulo intenta contribuir en algo a la clarificación teórica del concepto como a la reformulación metodológica del transnacionalismo. nos permite distinguir tres combinaciones: 1) Estado y gobierno pueden coincidir, 2) varias comunidades políticas pueden estar dentro de un gran Estado, o 3) Varias comunidades políticas pueden solaparse entre estados separados. 2.1. La perspectiva transnacional Existen varios autores que han desarrollado diferentes argumentos en torno al transnacionalismo y sus vertientes. Por ejemplo, Bauböck ha escrito sobre <ciudadanía transnacional> (1991, 1992, 1994a, 1994b, 1998a, 1998b, 2001). En tanto existe una literatura que plantea el transnacionalismo inmigrante desde una visión sociológica y antropológica (Basch et al., 1994; Appadurai, 1996; Portes, 1999; Portes et al., 1999; Vertovec, 1999, Faist, 2000a; Levitt, 2001; Portes, 2001). Sin embargo, es muy importante precisar y contrastar el concepto con otros que describen fenómenos similares o relacionados, tales como: internacionalismo y multinacionalismo. Las tres perspectivas contienen el término “nacional”, que tiene un doble significado: es un atributo de los estados soberanos, así como de las comunidades históricas que aspiran a un amplio autogobierno o lo ejercitan. Este doble significado Hacia finales de la década de los cincuenta y principios de la década de los sesenta, dos clásicos internacionalistas —Wolfers y Aron— reconocían la existencia de actores diferentes al Estado en el sistema internacional. Estos actores se relacionaban transnacionalmente, es decir, por fuera de los límites del estado-nación. Aron, específicamente, reconoció la existencia de una “sociedad transnacional”; ésta “se manifiesta por los intercambios comerciales, las migraciones de individuos, las creencias comunes, las organizaciones que trascienden más allá de las fronteras” (Wilhemy, 1988: 199). Estas ideas fueron recogidas por Keohane y Nye, en su obra Transnational Relations and World Politics, de 1971, en la cual demuestran que en la medida en que se aceleran los intercambios de todo tipo, el Estado pierde su papel como el actor más relevante del sistema y a éste se le agregan un sinnúmero de 53 relaciones intersocietales, las cuales tienen una gran importancia política (Keohane y Nye, 1971: X). En resumen, y de acuerdo con Del Arenal (1984: 274), “la concepción transnacional se caracteriza principalmente por la afirmación de la necesidad de cambiar el clásico paradigma del Estado como centro de la teoría internacional, incapaz de aprehender hoy día la realidad internacional, por un paradigma más comprensivo, como es el paradigma de la política mundial o política transnacional”. De acuerdo con Held et. al. (1999), el proceso de globalización, en el que se enmarca el transnacionalismo, debe entenderse como un conjunto de procesos, no como una condición única. Este proceso refleja la emergencia de redes interregionales y sistema de interacción e intercambio. Así, el alcance y densidad de su interconectividad global y transnacional construye complejas redes de relaciones entre comunidades, estados, instituciones internacionales, organizaciones no gubernamentales y corporaciones multinacionales que constituyen el orden mundial. Esta interconectividad corta a través de las fronteras políticas de los estados, por lo que se le ha asociado a cambios en la composición territorial de los espacios socioeconómicos y 54 políticos. Reformando las concepciones de lo local, lo nacional, incluso de lo continental. De esta forma se pueden considerar cuatro tipos de interacciones en el ámbito global. Estas son las relacionadas con la comunicación, los transportes, los flujos financieros y el movimiento de las personas (Keohane y Nye, 1971: xii). Las interacciones mencionadas por Keohane y Nye, son sólo una parte de la teoría sobre los actores transnacionales de estos autores. Estas “interacciones globales” se refieren a “movimientos de información, dinero, objetos físicos, personas u otros elementos tangibles e intangibles a través de las fronteras estatales” (Wilhemly, 1988: 198). La otra parte es la de las “relaciones transnacionales”, entendidas como “contactos, coaliciones e interacciones a través de fronteras estatales que no son controladas por los organismos centrales de política exterior gubernamentales” (Keohane y Nye, 1971: xi). La propuesta de estos autores parte de la necesidad de reformar los paradigmas que consideran al Estado como el único actor relevante en la política interestatal. El “encogimiento” del mundo (Wilhemly, 1988: 215) ha llevado a que las relaciones entre los estados se acercan cada vez más a la interdependencia entre éstos, lo que se caracteriza por situaciones complejas que tienen efectos recíprocos entre los países, o entre éstos y los distintos actores internacionales (Keohane y Nye, 1987). De esta forma, se estarían produciendo cambios en el sistema internacional que “socavan profundamente la idea del estado ‘impermeable’ del modelo tradicional” de la política (Wilhemly, 1988: 215). De acuerdo con Keohane y Nye, citados por Wilhemly (1988: 215), las relaciones transnacionales tienen cinco efectos en la política interestatal. En primer lugar, las políticas exteriores de los estados son afectadas por diferentes actores y grupos sociales y el conocimiento ganado por ellos mediante el acceso a redes de información globales. En segundo lugar, las mencionadas relaciones han fomentado el pluralismo internacional que han desarrollado los actores al vincularse con otros similares a ellos. El tercer efecto tiene que ver con la creación de dependencia e interdependencia. En otro sentido, como cuarto factor, los estados estarían adquiriendo nuevos instrumentos de influencia que afectan el desarrollo de las posiciones relativas de los estados en el sistema internacional. Finalmente, los actores no estatales estarían adquiriendo un dinamismo propio, lo que los autores definirían como interdependencia compleja. En resumen, el mundo puede conceptualizarse como un campo global de interacciones sociales estructuradas por procesos demográficos, culturales, económicos y políticos que ocurren dentro y entre las sociedades. Cada uno de estos procesos simultáneamente contribuye a formarse a sí mismos y, a su vez, a auto-condicionarse. Estas interacciones han configurado los actuales movimientos poblacionales de tal forma que en la actualidad se puede hablar de una época migratoria (Mitchell, 1989: 703; Castles y Miller, 1993). Las interacciones mencionadas han generado una nueva tendencia en la migración internacional, llamada movimientos transnacionales, la que surge de manera paralela a los cambios que se dan en la lógica misma del capitalismo, y su análisis como fenómeno transnacional; así como de la globalización y de la revolución tecnológica asociada a ésta (Portes, 1999; Pries, 1999). Estos movimientos pueden definirse como “el proceso por el cual los inmigrantes crean y sostienen relaciones que unen a sus sociedades de origen con las de llegada. Se les llama a estos procesos transnacionalismo para en- 55 fatizar que muchos migrantes construyen campos sociales que cruzan fronteras geográficas, culturales y políticas… Un elemento esencial es la multiplicidad de relaciones que los transmigrantes sostienen en ambas sociedades” (Portes, 1999: 812-813; 1998: 4; Pries, 1999: 62). Estas relaciones se sostienen mediante el traslado físico continuo de los individuos entre sus áreas de origen y de destino; sin embargo, no todos los inmigrantes son transmigrantes; sólo lo son aquellos inmigrantes que llevan una vida doble: comparten dos culturas, tienen hogares en dos países y construyen su vida por medio de intercambios continuos a través de fronteras nacionales. Las actividades en los espacios transnacionales comprenden una enorme gama de iniciativas políticas económicas y culturales, que van desde negocios informales de exportación e importación, hasta campañas realizadas por políticos o movimientos sociales de la comunidad de origen para lograr apoyo entre los residentes en el país de acogida (Pries, 1999; Portes 2001). La configuración de enclaves migratorios ha sido muy importante para el surgimiento de movimientos y comunidades transnacionales; ya que son los primeros en participar del intercambio de bienes desde y hacia sus sociedades de origen. 56 Las comunidades transnacionales que se forman a partir de los movimientos transnacionales se caracterizan por ser una situación en la cual los migrantes, aquellos que se quedan en el país de origen y los nacionales de los países anfitriones están conectados por lazos sociales y simbólicos densos y fuertes, los que a través del tiempo y del espacio configuran redes y circuitos en los países de origen y de destino, teniendo como base la solidaridad (Faist, 2000b: 10). De esta manera, al vivir “a través” de las fronteras, los transmigrantes forman parte de los procesos de construcción societal de dos o más naciones. Se da así una confrontación entre los migrantes y las características hegemónicas —como raza y etnicidad— de la sociedad de acogida, las cuales son intrínsecas a ésta y forman parte de los mencionados procesos de construcción societal (Gledhill, 1998). Esto convierte a los transmigrantes en actores relevantes en todos los cambios por los que pasan desde las comunidades al estado-nación. La configuración de los transmigrantes en un actor del sistema internacional, parte de las propuestas teóricas presentadas anteriormente. Ahora bien, de qué forma este actor sobrepasa las relaciones entre los estados y se constituye en un actor en sí. Se ha mencionado que es condición necesaria su participación “en varios lugares a la vez”. En la literatura especializada los casos estudiados empíricamente abundan. Como se observa a continuación; tres son los ejemplos típicos de transmigrantes y que se forman a través de la configuración de espacios sociales transnacionales. El primer caso, que se puede analizar a partir de la migración mexicana a los Estados Unidos (Canales y Zloniski, 2001: 239), tiene como principio la formación de “clubes” de nacionales. Estos surgen con el fin de mantener a sus asociados en un ambiente de comunidad. Con el paso del tiempo, las remesas enviadas a los lugares de origen dejan de ser utilizadas para el consumo privado solamente, ya que al ayudar estas remesas a solucionar problemas de vulnerabilidad económica, han logrado una mejora en el nivel socioeconómico de sus familias. El paso siguiente es el envío de ayuda económica con fines filantrópicos para solucionar problemas estructurales en las comunidades de origen. Éstos se relacionan generalmente con la ayuda en la construcción de obras públicas como plazas, iglesias y escuelas. También puede otorgarse para ayudar a aquellos grupos más vulnerables —en todo sentido— como lo son jóvenes en riesgo social — drogas, delincuencia, entre otras—, o para el cuidado de ancianos. Como resultado anexo, fortalece los nexos intra comunidad de transmigrantes y acrecienta su poder político, al realizar uniones entre gremios particulares y la ciudad o poblado de origen. En un sentido análogo Robert C. Smith (1999) sostiene que las primeras y más comunes formas y conceptos transnacionales incluyen dos diferentes focos y niveles de análisis. En primer lugar se encuentran las formas sociales transnacionales de inmigrantes transnacionales y sus familias, y las formas colectivas organizadas a nivel de la población, poblado o barrio de migrantes. Los estudios de estas formas tienden a concentrarse en las relaciones entre quienes migran y quienes se quedan, así como en aquellos que migran circularmente entre dos o más lugares. Las formas de actividad en este nivel incluyen clubes o comités en la comunidad de origen, la vuelta regular y no organizada de los migrantes y sus hijos a su pueblo de origen, o su comunicación e interacción regular, sin volver, a través de envíos de dinero, cartas, llamadas telefónicas y similares, y la interpenetración en los ámbitos económicos, políticos y culturales / sociales que vinculan a personas y lugares en los países de procedencia con sus correspondientes personas y lugares en los países de destino. A menudo se conocen con el nombre de comunidades transnacio- 57 nales o binacionales y con frecuencia se analizan dentro de los espacios sociales transnacionales o un campo social transnacional (Glick Schiller et al, 1992; Basch et al, 1994; Mines, 1981; Massey, 1986; Rouse, 1989; Goldring, 1992 y 1995; Smith, 1993 y 1995; Guarnizo, 1994). El segundo ejemplo de espacio social transnacional (Portes, 1999; Faist, 2000a) se relaciona con el surgimiento de economías de migrantes. Casos de estudio han sido los dominicanos en Nueva York o los asiáticos en la Costa Este de los Estados Unidos. Estos <emprendedores> mantienen una ‘representación’ en su país de origen, lo que facilita el envío de mercaderías y remesas que les permiten mantener su negocio. Al mismo tiempo, en muchos casos actúan como el nexo de unión entre las comunidades y el país de origen, al tiempo que ayudan a la integración de los recién llegados (Smith, 1999). Las diásporas son la forma más antigua de construcción de espacios sociales transnacionales. Las Comunidades Judías alrededor del mundo, por ejemplo, participaron activamente de la creación del Estado de Israel. No hay que olvidar que el movimiento Sionista nació fuera de Israel. Otro grupo relevante son los Kurdos (Faist, 2000a) quienes 58 desde Alemania envían ayuda a sus comunidades de origen e intentan y promueven políticamente ante las autoridades locales la creación de un estado Kurdo. En el mismo sentido, Smith (1999) dice que otra forma social transnacional y concepto para su análisis es la diáspora. La palabra <diáspora> se deriva del término griego <dispersión> y tiene una encarnación después en la palabra hebrea gal. ut que significa <exilio>. Diáspora generalmente se refiere a un <pueblo disperso> de personas que se conciben a sí mismas como “pueblo” o “nación” a pesar de estar dispersas (Safran, 1994; Sheppersonm, 1993; Sheffer, 1986). Este término a menudo se usa para describir la situación de un pueblo que en algún momento estuvo reunido en su propio territorio y después se dispersó, muchas veces por la fuerza, los judíos son el prototipo de este fenómeno y con frecuencia se cita a los armenios y palestinos como otros ejemplos. La noción clásica de una diáspora incluye el deseo de volver al terruño y una fuerte percepción de la propia ausencia de ese terruño incluso a varias generaciones de distancia (Safran, 1994). El uso más reciente de este término es más amplio, “diáspora” se utiliza para describir el estado de dispersión y conexión entre los migrantes y sus lugares de origen, en particular den- tro del contexto de pueblos minoritarios dispersos en países occidentales mayoritariamente blancos. país anfitrión, además de promover los envíos de dinero y las visitas de regreso al país de procedencia. Robert C. Smith (1999) plantea la existencia de otro tipo de vida transnacional que se refiere a las formas de asociación e institucionales en cuya creación los Estados desempeñan un papel central o que intentan capturar y desarrollar. Estas formas pueden categorizarse para propósitos heurísticos en dos, según los tipos de políticas que persiguen los Estados con respecto a sus ciudadanos residentes en el extranjero: políticas diaspóricas y políticas de circulación y repatriación. Las políticas de circulación y repatriación (Miller, 1981) son intentos por parte de los Estados de crear instituciones que orienten a los migrantes temporales hacia las sociedades de sus lugares de procedencia y faciliten su regreso. Las políticas diaspóricas son intentos por parte de los Estados de origen de desarrollar vínculos entre el Estado de origen y los inmigrantes y sus hijos nacidos en el extranjero que se han establecido permanentemente en el extranjero, o que migran de forma regular de ida y vuelta. La idea no es alentarlos a volver definitivamente, sino más bien fomentar el éxito en su asentamiento y que adquieran facultades y derechos en el Finalmente, Robert C. Smith (1999) señala adicionalmente otra forma de vida transnacional que cabe destacar con el nombre de “membresía postnacional”, analizada ingeniosamente por Soysal (1994). Este autor sugiere que los Estados soberanos ya no son la única fuente de derechos —es decir, que los derechos sólo existen en tanto el Estado los otorga— sino que el principio de los derechos humanos, que ahora goza de respeto universal, plantea derechos inherentes en la “persona moderna”. El nuevo régimen de derechos se institucionaliza a través de las acciones y declaraciones de una variedad de actores internacionales y transnacionales, como las Naciones Unidas, y acuerdos, como los tratados. El autor plantea que varios derechos y privilegios que antes estaban estrictamente vinculados con la ciudadanía se han extendido ahora a los migrantes, su argumento es que la membresía más decisiva para los inmigrantes en Europa occidental es postnacional y no nacional. Muchos han criticado el análisis del Soysal, sin embargo sus propuestas de análisis han dado origen a discusiones muy interesantes sobre el tema. 59 El transnacionalismo, según (Mayans, 1998) privilegia el sentido político e ideológico del fenómeno de la mundialización, hasta el punto de hacer que la pertenencia nacional sea (prácticamente) imposible de identificar. Ligado a este concepto aparece la idea de desterritorialización, que a su vez, conllevaría una noción de pérdida de referentes territoriales (identidades tradicionales, supeditadas a los parámetros físicos, territorializados, del estado-nación) y enfocados de forma más concreta aspectos identitarios y culturales. El carácter transnacional del tejido social, se deriva del hecho que ha sido construido con base en prácticas, actividades e intercambios que traspasan continuamente las fronteras políticas, geográficas y culturales, que tradicionalmente habían enmarcado y separado a las comunidades de origen y las de asentamiento de los migrantes. De esta forma, el “transnacionalismo” es definido como el proceso por el cual los migrantes construyen estos campos sociales que unen sus propias comunidades y sociedades de origen con las de asentamiento (Glick Schiller, Basch y Blanc-Szanton, 1992). Robert C. Smith (1999) afirma que existen por lo menos dos perspectivas sobre el Estado, la membresía en 60 la comunidad política y la vida transnacional. La primera señala que el Estado está siendo transcendido por la migración transnacional y los procesos de formación de identidades (por ejemplo, Kearney, 1995); o que no sólo la ciudadanía de un estado soberano, sino la membresía postnacional garantiza ahora a la persona sus derechos (Soysal, 1994). En otro sentido, Brubaker (1989) pasa por alto la cuestión de la vida transnacional al concentrarse en el sistema de dos niveles de membresía que ha surgido en países anfitriones del hemisferio norte, el cual describe como una situación de “membresía sin ciudadanía”. Luis Eduardo Guarnizo y Michel Peter Smith (1998) sostienen que el transnacionalismo claramente está en boga. Se considera que el Estadonación se ve debilitado “desde arriba” por el capital transnacional, los medios de comunicación globales y las emergentes instituciones políticas supranacionales. “Desde abajo” se enfrenta a las resistencias descentralizadoras “locales” de la economía informal. Para otros crean circunstancias conducentes a la generación de nuevas prácticas y espacios liberadores “desde abajo”, como la migración transnacional y la consecuente hibridación cultural. Ambos autores plantean que el concepto de transna- cionalismo es adoptado y consumido por antropólogos, sociólogos, geógrafos, estudiosos de ciencias políticas y otros académicos. La repentina prominencia de este concepto se ha visto acompañada por una creciente ambigüedad. Así, el transnacionalismo corre el riesgo de convertirse en una vasija conceptual. Luis Eduardo Guarnizo y Michel Peter Smith (1998) apuntan que la convergencia de varios factores históricamente específicos ayuda a explicar la complejidad del transnacionalismo. Se trata de una nueva complejidad, no sólo en cuanto a su escala, sino también por la gama de efectos que tienen flujos transnacionales contemporáneos sobre las sociedades implicadas. Entre estos factores se incluyen: 1) la globalización del capitalismo, con sus efectos desestabilizadores en los países menos industrializados, 2) la revolución tecnológica en los medios de transporte y comunicación, 3) transformaciones políticas globales, como la descolonización y la universalización de los derechos humanos y 4) la expansión de redes sociales que facilitan la reproducción de la migración transnacional, la organización económica y la política. El transnacionalismo es un proceso multifacético y multilocal. Una de las principales preocupaciones en que se basa la obra Transnationalism from Below (Smith y Guarnizo, 1998) es discernir cómo afecta este proceso las relaciones de poder, los constructos culturales, las interacciones económicas y, más en general, la organización social a nivel de la localidad. Tratan de desglosar el engañoso binomio global-local que domina un significativo segmento del discurso económico actual. Esta tarea exige construir una óptica analítica para ver el transnacionalismo y para explorar los métodos más útiles para investigar las prácticas y procesos transnacionales “desde abajo”. Alejandro Portes et al. (1999: 219) sostienen que para que se hable de transnacionalismo al menos tres condiciones son necesarias: a) el proceso implica una significativa proporción de personas en el universo pertinente (en este caso, inmigrantes y su país de origen y sus partes contrarias), b) las actividades de los interesados no son efímeras o excepcionales, poseen cierto grado de estabilidad y elasticidad en el tiempo, c) el contenido de estas actividades no es capturado por algún concepto preexistente, se trata de un nuevo término para una nueva realidad. Alejandro Portes et al (1999) proponen una tipología del transna- 61 Económico Político bajo Comercio informal a través del país. Pequeños negocios creados por los inmigrantes de retorno en el país de origen. Migración laboral circular a larga distancia. Comités cívicos del pueblo creados por inmigrantes. Alianzas de comités de inmigrantes con partidos políticos del país de origen. Recaudación de fondos para elección de candidatos en el país de origen. Competencias deportivas transnacionales. Grupos de música popular realizando presentaciones en los centros de inmigrantes. Sacerdotes del pueblo de origen que visitan y organizan a sus parroquianos en el extranjero. Inversiones multinacionales en países del tercer mundo. Desarrollo del turismo para el mercado extranjero. Bancos y agencias del país de origen en los centros de inmigrantes. Oficiales consulares y representantes de los partidos políticos de la nación en el extranjero. Doble nacionalidad garantizada por los gobiernos del país de origen. Exposiciones internacionales de arte nacional. Nivel de institucionalización Sector adelante para el análisis de la comunidad transnacional de Tonatico. alto cionalismo que a continuación se reproduce y que retomaremos más Elección de inmigrantes en los congresos del país de origen. Sociocultural Espectáculos en el extranjero de artistas importantes del país de origen. Actividades culturales organizadas por las embajadas en el extranjero. Fuente: Tomado de Alejandro Portes, Luis E. Guarnizo y Patricia Landolt (1999), “The study of transnatioanalism: pitfalls and promise of an emergent research field” en Ethnic and Racial Studies, Volume 22, Number 2 March 1999. page 222. En este sentido, un primer aporte de esta investigación es establecer en un estudio de caso, el papel de los migrantes transnacionales y/o sus redes sociales, así como el papel de las organizaciones de inmigrantes en el desarrollo del transnacionalismo político, aquí el énfasis se realiza en torno al Club Social Tonatico que se mueve entre Illinois y el Estado de México, desde esta perspectiva 62 se asume que la concreción del transnacionalismo es un fenómeno acotado en el que sólo participan algunos actores concretos y que se transforma en un hecho que involucra significativamente a una buena parte de los inmigrantes mexicanos en situaciones concretas, como las elecciones presidenciales o locales en Estados Unidos o en las elecciones municipales de Tonatico, México que dan como resultado un contexto de alternancia política que poco a poco van contribuyendo a la normalidad democrática. Este enfoque reconoce la existencia de instituciones y prácticas que trascienden los límites de los estados-nación, que pueden denominarse transnacionales si comportan afiliaciones simultáneas de personas a gobiernos separados geográficamente. El transnacionalismo no tiene una larga tradición en la teoría política, probablemente porque cuestiona las presunciones de cerramiento exterior y de homogeneidad interna de las comunidades políticas que no han sido cuestionadas hasta hace muy poco tiempo. Alejandro Portes (2001) manifiesta que las actividades transnacionales se inician y sostienen con actores no institucionales a través de fronteras nacionales. Bauböck señala que una diferencia que tiene con Portes es que él está principalmente interesado en actividades sociales, culturales, económicas y políticas a través de fronteras, “mientras que yo me centro en concepciones de ciudadanía y relaciones entre comunidades políticas. Utilizo <transnacional> no sólo como atributo de actividades y redes inmigrantes, sino también para describir cambios de instituciones e identidades políticas en las comunidades políticas más grandes que dejan o en las que entran” (2002: 185). Desde una perspectiva transnacional, la inmigración conecta a las sociedades de origen y receptoras, no sólo a través de los flujos económicos y el intercambio cultural, sino generando límites solapados de pertenencia. Esta condición de pertenecer simultáneamente a dos sociedades organizadas como estados independientes se refleja en experiencias subjetivas de inmigrantes y crea oportunidades, pero también cargas. Las oportunidades se restringirán y las cargas serán pesadas si los estados implicados no las reconocen (Bauböck, 2002). Parafraseando a Bauböck diremos que la tipología ofrecida pretende ser una herramienta, más que una relación con definiciones canónicas, y con Portes señalaremos que no hay nada sacrosanto en estas definiciones. 63 2.2. La migración transnacional y su importancia: una aproximación a la comunidad de Tonatico, México y Tonatico, Illinois En esta sección se rastrea el origen de la tradición migratoria de Tonatico y enseguida se destaca la importancia de los procesos migratorios. La migración transnacional de Tonatico El municipio de Tonatico, México, cuenta con una tradición migratoria que por lo menos lleva cinco décadas. La migración de tonatiquenses a Estados Unidos se remonta a mediados de la década de 1950; las primeras personas que salieron a trabajar a los Estados Unidos se vieron beneficiadas por el programa bracero. Las motivaciones que los llevaron a migrar se han ido modificando a través de los años. En un principio, la gente salía animada por el auge de la contratación de trabajadores a Estados Unidos, mucha de la gente que salió en esos años tenía condiciones económicas distintas a las actuales. Los trabajadores eran contratados en los estados del norte del país, donde eran llevados a laborar al sur de Estados Unidos. En la década de 1950, los destinos comunes a donde iban los trabajadores tonatiquenses 64 eran los estados de California, Texas y Arizona. La cosecha de jitomate, algodón, espárrago, pepino, ejote, uva, manzana y naranja figuraba en las principales actividades agrícolas que realizaban. Los salarios a los cuales estaban sujetos oscilaban entre los 50 y 75 centavos de dólar por hora (Andrade, 2002). Algunos patrones ofrecieron arreglar la residencia para aquellos trabajadores que habían participado con ellos por varias temporadas, esto permitió que la gente comenzara a arreglar papeles para sus familiares y de esta forma, obtener su residencia, incrementando el número de tonatiquenses en Estados Unidos (Andrade, 2002). Por otro lado, hubo gente que no pudo o no le quisieron arreglar la residencia, esta situación orilló a que permaneciera de forma ilegal. Durante las décadas de 1950 y 1960, la migración de tonatiquenses a Estados Unidos era de menor escala, pero al transcurrir los años se fue acrecentando poco a poco, inclusive, los lugares de destino también cambiaron al mismo tiempo que la gente seguía saliendo al país del norte. Se pueden mencionar tres factores que se conjuntaron para que la gente de Tonatico saliera a trabajar hacia los Estados Unidos; la primera tiene que ver con la necesidad de brazos mexicanos para trabajar en los campos de Estados Unidos, la segunda derivó de las crisis económicas que se dieron en el país por lo menos en las últimas tres décadas, vinculadas a la falta de apoyo al sector agrícola; la tercera, se da cuando las redes sociales (familiares y de amistad) que utilizan los migrantes para llegar al lugar de destino se refuerzan a través de la gente que ya residía en aquel país, esto permitió un incremento considerable de gente que salía del municipio en busca del american way of life (Andrade, 2002). comunidad migrante como con la no migrante. Los trabajadores emigrantes no parten de cero, llegan, de hecho, con un conocimiento bastante preciso de las tareas y obligaciones que deben cumplir y desempeñar. De acuerdo con Durand (1994: 297), existe un proceso de socialización previo a nivel familiar y local, lo que le confiere un bagaje cultural suficiente para posibilitar una adecuación rápida y eficaz en el mercado laboral estadounidense. Cuenta además con asesoría directa de paisanos, parientes y amigos que lo orientan y apoyan. El incremento de los residentes tonatiquenses en Estados Unidos ayudó a que las redes migratorias se reforzaran, por lo cual la migración en el municipio ha pasado a formar parte de la vida cotidiana de la comunidad, esto permite al nuevo migrante tener acceso a información que le ayuda a enfrentarse a un mundo “relativamente nuevo”. El migrante de alguna manera ya ha conocido Estados Unidos a través de pláticas, videos y fotografías de amigos y familiares, aunque físicamente nunca hayan ido a los Estados Unidos (Andrade, 2002). Los miles de mexicanos que han cruzado la frontera de México con Estados Unidos a través de los años, han creado con el tiempo redes familiares y de amistad que les permitieron tener mejores medios para alcanzar lo que se conoce como el american way of life. Los motivos iniciales y que hoy en día siguen teniendo una relevancia importante, es el de mejorar sus condiciones de vida a través de la búsqueda de mejores salarios y oportunidades laborales. Con los años, esta tendencia ha tenido algunas modificaciones y ahora es más notorio que en aquellas comunidades o regiones en donde el fenómeno migratorio tiene una fuerte tradición, las generaciones recientes migran pero ya no con un fin netamente La información a la que accede el migrante, le permite reforzar vínculos de solidaridad tanto con la 65 económico, sino que lo hacen por otro tipo de motivaciones como lo son el simple hecho de conocer el lugar en donde radican o han radicado aquellas personas que forman parte de su entorno social y familiar. En 1999, Tempel News publicó “Further research showed that there are about 3,000 former Tonatico residents who now reside in Waukegan, Illinois, and that total population of Tonatico is about 10,000” (VIII). A través de estos continuos flujos de personas, se fortalecen las relaciones entre la comunidad de origen y de llegada, más allá de los límites geográficos y espaciales que existen entre ellas. Además, los migrantes, al realizar periódicamente sus viajes entre los dos países, son portadores de toda una carga de relaciones, símbolos y prácticas cotidianas que permiten la reproducción y reconfiguración de patrones culturales en ambos lados de la frontera. Los elementos que permiten una relación estrecha entre las comunidades responde a diferentes actividades sociales e individuales, que en algunos casos, están condicionadas por fechas establecidas, tanto en la comunidad de origen como de llegada. Por ejemplo, los migrantes residentes en Estados Unidos adecuan sus fechas de visita a sus 66 lugares de origen de acuerdo con la calendarización de las fiestas cívicas y patronales –estas últimas difícilmente movibles– lo que les permite tener una participación activa en las fiestas de sus pueblos. El municipio de Tonatico se encuentra enclavado en el sureste del Estado de México. Las principales actividades económicas que se desarrollan en el lugar son la agricultura, el comercio y el turismo. Este último rubro, se encuentra favorecido gracias a los lugares turísticos con los que cuenta el municipio. Las grutas de La Estrella, el parque ecológico “El Salto”, el balneario de aguas termales y la iglesia, son el deleite de los turistas nacionales y extranjeros que visitan el lugar. La dinámica migratoria que se vive hace una diferencia entre Tonatico y los demás municipios de la región, pero a la vez, también hace que tengan similitudes con otras regiones de México que se encuentran insertas en el mismo fenómeno. Las redes migratorias que se han formado a través del flujo permanente de personas durante cincuenta años, han permitido que los vínculos entre los tonatiquenses radicados en Estados Unidos y los que viven en México, se encuentren estrechamente re- lacionados. De hecho, desde 1999, cada año el alcalde de Tonatico visita a los tonatiquenses radicados en Waukegan, Illinois. “On Saturday, September 11, 1999, Arturo Hernandez Tapia, the Mayor of Tonatico, Mexico, paid Tempel Steel’s Transformer Division in Libertyville a visit” (Tempel News; 1999: VIII). En los últimos dos años se han realizado cursos de verano, en Waukegan con amplia participación. En todas las actividades que se realizan en Tonatico –familiar o comunitario– se encuentra presente el elemento de la migración. Las relaciones sociales, familiares, económicas, políticas y de amistad, se han reforzado a través de los vínculos que existen entre los tonatiquenses en ambos lados de la frontera. Cada vez es más frecuente y activa la participación de la comunidad migrante en las actividades que se desarrollan en Tonatico. Las fiestas cívicas y religiosas son un espacio en donde los tonatiquenses radicados en Estados Unidos, tienen la oportunidad de fortalecer su arraigo hacia su lugar de origen, que a la vez, reproducen patrones culturales propios de Tonatico en Estados Unidos. La utilización de las nuevas tecnologías de comunicación (telefonía celu- lar, Internet), ayudan a que exista un permanente flujo de información entre los que están en Estados Unidos y los que están en Tonatico. De esta forma, amigos y familiares están enterados de las cosas que suceden en sus respectivos lugares de residencia, aminorando la nostalgia que se tiene por el terruño. Este tipo de comunicación permite que las nuevas generaciones de jóvenes nacidos en Estados Unidos, conozcan Tonatico y a su gente sin haber salido nunca de sus lugares de nacimiento. A su vez, ayuda que a las personas que viven en Tonatico, les sea familiar el condado de Waukegan, ya que a través de la utilización de nuevas tecnologías de comunicación, las distancias son acortadas, permitiendo la simultaneidad entre los dos lugares de residencia. Por otro lado, uno de los papeles importantes en las relaciones entre la comunidad migrante y la de Tonatico, es a través de las actividades realizadas por el club social. La participación del club se ha visto encaminada principalmente en apoyar algunos proyectos dentro del municipio, ya sea con las escuelas o con las festividades cívico-religiosas. Pero cada vez su participación está siendo más activa. Los integrantes de la mesa directiva han comenzado a ser tomados en cuenta por las autoridades muni- 67 cipales y estatales, que saben de la importancia de mantener relaciones estrechas con las comunidades migrantes, principalmente por la fuerza económica que representan. Las características que presenta Tonatico son una gran veta para futuras investigaciones acerca de la migración de mexicanos a Estados Unidos 2.3. Las prácticas transnacionales de los tonatiquenses En esta parte del trabajo se argumenta por qué Tonatico es una comunidad transnacional, a través de la información que da cuenta de las prácticas transnacionales y que se obtuvo en campo durante el mes de febrero de 2005. Siguiendo a Portes, Guarnizo y Landolt (2003), limitamos la discusión a las actividades transnacionales definidas como aquellas que se realizan en forma habitual a través de las fronteras nacionales y que requieren de un compromiso de tiempo significativo por parte de los participantes, que pueden ser iniciadas por individuos comunes y ordinarios, como los inmigrantes y sus parientes y amigos en el país de origen (transnacionalismo desde abajo), estas actividades abarcan cuestiones políticas, económicas, sociales, culturales y religiosas y 68 además que requieren una serie de innovaciones tecnológicas que comprimen tiempo y espacios. Para ello se utiliza la tipología que se presenta al final de la sección 2. 1. de este mismo capítulo y que alude al transnacionalismo económico, el transnacionalismo político y al transnacionalismo sociocultural y a sus diversos niveles de institucionalización. Es importante precisar que la tipología propuesta nos ayuda a identificar de manera más o menos precisa las actividades transnacionales, aunque en este trabajo se reconoce que en la narrativa de los migrantes, se cruzan relatos de actividades y experiencias que corresponden a veces a más de un tipo de transnacionalismo, como se verá a continuación. Es pertinente señalar que como dictan las normas de la sociología y la antropología, algunos nombres han sido cambiados a petición de los entrevistados. Todas ellas significan lo mismo, pero tengo más fe en ella (Transnacionalismo sociocultural con bajo nivel de institucionalización) Cuenta el señor Salomón Guadarrama que en 1970 se fue de Tonatico para buscar trabajo en Waukegan, por eso comenta “le pedí a la virgen- cita Nuestra Señora de Tonatico, que me ayudara a llegar sin percances y ganar suficiente dinero para enviarle algo a mi familia”. Por tal motivo Don Salomón casi cada año regresa para darle gracias a la virgen por el trabajo que consiguió y todavía conserva, en una fábrica de Waukegan y también para dar gracias por el éxito de sus tres hijos. A él, al igual que muchas personas oriundas de Tonatico no les importa viajar alrededor de 2,000 millas con tal de participar en la peregrinación anual de Waukegan a Tonatico. “Antes de salir rumbo a los Estados Unidos todos venimos aquí –al santuario– a decir adiós porque no sabemos si vamos a regresar”. Después con el tiempo seguimos viniendo y ahora el principal motivo es que “estamos aquí para dar gracias por lo que logramos en los Estados Unidos”. La peregrinación comúnmente se realiza el primer sábado del mes de febrero y el festejo comienza desde muy temprano, comienza con el estruendo de los “cuetes” y las tradicionales “mañanitas” en la iglesia a cargo de los migrantes, quienes se hacen acompañar de un grupo de mariachi. El mariachi ameniza la festividad con música y canciones vernáculas. En seguida se unen en el atrio de la iglesia de Nuestra Señora de Tonatico una o dos bandas musicales de la región –dos para el caso de este año–, mientras, las oraciones y plegarias de fe se realizan al interior, en silencio. En tanto los pájaros trinan y vuelan alrededor del techo de la iglesia. Después, afuera con el aire fresco de la mañana, los migrantes comparten el pan y el café, en tanto las bandas musicales siguen tocando. Más tarde, pero antes del medio día, se realiza una “procesión” que inicia en un paraje denominado “El jagüey” que se encuentra a la entrada del pueblo viniendo de Ixtapan de la Sal, este recorrido avanza por la calle principal, los participantes van cargando “coronas” y arreglos florales. Los residentes de Tonatico y los visitantes permanecen de pie en los marcos de las puertas de sus hogares y en las banquetas, mientras el grupo de peregrinos de Waukegan, con la música del mariachi, caminan y se abren paso por las angostas calles del pueblo, que a esa hora se encuentran saturadas por los vendedores de los más disímiles productos. Finalmente llegan a la iglesia para la misa, en tanto las campanas de la iglesia no dejan de tañer, el confeti cae y se esparce por encima de los peregrinos, al tiempo que el párroco los bendice. 69 El año pasado, Uriel González de Waukegan pudo hacer realidad el sueño de volver a visitar Tonatico, ya que desde hacía 20 años no había podido regresar. Por ello comenta que “Lo primero que hice a mi regreso fue visitar a la virgen y darle gracias”. Este año manejó cerca de 40 horas de Waukegan a Tonatico con su esposa Ernestina. Ella había inmigrado a Estados Unidos en 1973 a la edad de 18 años y le pidió al sacerdote en Tonatico la bendijera antes de empezar una nueva vida. Después de trabajar en campos de fresa y viveros botánicos en California se mudó a Waukegan en 1984 y actualmente trabaja en una imprenta. Le pidió a la virgen regresar a Tonatico algún día. “10 años más y me voy a regresar aquí”, aseguró Ernestina. “Aquí es muy tranquilo y hay libertad. No te sientes estresada”. Lucy Domínguez, de 22 años, nació en Waukegan y trabaja allá como cajera, pero se siente particularmente encariñada con el pueblo y su patrona: Nuestra Señora de Tonatico. A propósito de las “distintas vírgenes” comenta que aunque “Todas ellas significan lo mismo, tengo más fe en ella. Mi familia me trajo con ella y siempre me hablaron de ella”, Lucy agrega que “Venimos cada año por la tradición y también a visitar la tumba de mis abuelos y a traerles algunas flores”. 70 Para su prima Azalia Ferrer, de 13 años de edad, esta fue la primera vez que asiste a la fiesta anual en honor a Nuestra Señora de Tonatico. Azalia nació en Waukegan de padres procedentes de Tonatico y está pasando un año en este poblado para relacionarse con sus raíces. “Mi mamá quería que yo viera otro tipo de vida”, comenta Azalia, sin embargo señala que “Me gusta aquí, pero me gusta más allá, porque estoy acostumbrada a eso”. Dijo que “el día que tenga a sus hijos, probablemente también les enseñará Tonatico y posiblemente hasta venga en cada una de las vacaciones”. ¡Waukegan ra-ra-ra! y carnitas en el balneario (Transnacionalismo político y sociocultural con bajo nivel de institucionalización) El gobierno municipal ha instituido el día del “Tonatiquense ausente”, en el 2005 se celebró el día jueves 3 de febrero. Ese día un “vochito” blanco, modelo clásico recorrió todo Tonatico, para invitar a través del equipo de perifoneo a que los vecinos del lugar se unieran al festejo que llevaría el gobierno municipal para reconocer el esfuerzo y sacrificio que realizan los migrantes, por ayudar a sus familias que en muchas ocasiones se quedan “acá”. Poco más de un centenar de tonatiquenses que viven en Waukegan y California se congregaron en el edificio que alberga las instalaciones del teatro del pueblo “Tonatiuhco”, en el cual se dieron cita funcionarios y autoridades de los gobiernos estatal y municipal, así como los líderes de los dos Clubes Sociales que existen en Estados Unidos y que tienen como referente el municipio de Tonatico. En el presidium destacaban los integrantes del H. Ayuntamiento encabezado por el Dr. Arturo Hernández Tapia, Presidente Municipal Constitucional de Tonatico, la Lic. Rocío González Orihuela, Directora General del Programa de Apoyo a Migrantes, que acudió con la representación del Lic. Arturo Montiel Rojas, Gobernador Constitucional del Estado de México, el Sr. Gerardo Popoca, Presidente del Club Social Tonatico en Waukegan, Illinois; y la asistencia del Sr. Francisco Villegas que acudió con la representación del Presidente del Club Social Tonatico en Oceanside, California. Durante el evento, primero se realizaron honores a la bandera y posteriormente un pequeño programa social con la participación de los estudiantes de la casa de cultura de la localidad. Destacó el hecho de que la “rondalla” interpretó una canción que aludía al sufrimiento de los habitantes de México, quienes dejan sus hogares en busca de mejores oportunidades para trabajar en los empleos que la mayoría de los americanos no quieren. En la ceremonia hicieron uso de la palabra las autoridades del gobierno estatal y municipal, así como los representantes de los Clubes de Waukegan y Oceanside. Los representantes del gobierno agradecieron a sus paisanos por su contribución económica y los líderes en Waukegan y California hablaron de lo orgullosos que están de su pueblo. En la parte exterior del teatro “Tonatiuhco” se exhibía una galería de fotos tomadas en Waukegan de tonatiquenses dueños de negocios, equipos de fútbol y algunas fotos de personas paleando la nieve, algunas mostraban cómo se festejan las fiestas patrias por aquellos “lares”. Al concluir la ceremonia cívico-social, todos se fueron a la unidad deportiva para que en el campo de fútbol se realizara un “encuentro deportivo” entre emigrantes que viven en Waukegan en contra de los habitantes de Tonatico. Los jugadores de Waukegan vistieron los colores del equipo con los que juegan en Waukegan. Sobresale el hecho de que antes de comenzar el juego se amontona- 71 ron y gritaron “¡Waukegan ra-ra-ra!” El partido terminó con triunfo de los de Tonatico, México, sobre los de Tonatico, Illinois (Waukegan) en serie de “penaltis”, después de que en término reglamentario empataran 1-1. Todos tenían una historia diferente sobre quién ganó el juego el año pasado. Los espectadores y las “porras” se agruparon dependiendo en qué parte de los Estados Unidos trabajan. Se podían observar los grupos tanto de Waukegan como los de California, así como inmigrantes del noreste de Chicago mezclados entre los dos. Al concluir el partido amistoso, la gente se trasladó al Balneario Municipal, allí el gobierno municipal “agasajó” a los migrantes y sus familias con “carnitas”, arroz y frijoles, mientras tanto, un sonido tocaba música de banda al fondo. Entre los visitantes comentaban que no se habían visto entre ellos desde la primaria. Arianna Montes de Oca, de 18 años de edad quien nació en Waukegan, viene a Tonatico cada año, aunque ésta fue la primera vez que vino en febrero. Dijo que “disfruto mucho la temperatura y la conveniencia de un pequeño poblado donde todo está a la mano sin tener que caminar lejos”. “Es un estilo de vida 72 diferente... más relajante... la gente de aquí es más amistosa”, también comentó. “Me podría quedar aquí durante seis meses, pero no podría vivir aquí. Estoy acostumbrada al lujo que tenemos concedido por vivir en los Estados Unidos”. Señaló que como mexico-americana tiene lo mejor de los dos mundos y planea continuar visitando Tonatico después de que tenga sus hijos. “Voy a hacer esa una prioridad para hacerles saber a mis hijos de dónde vienen”. Este año, también es la primera vez que Alex Domínguez, de 14 años, viene a Tonatico durante la feria anual. Él nació en Waukegan y normalmente viene con su familia en diciembre para visitar a sus parientes, montar a caballo e ir al balneario. Sus abuelos querían que conociera su herencia, por lo tanto cursó un año en la primaria viviendo en Tonatico. Aseguró que prefiere Waukegan a pesar del clima. Señaló que “allá hay más oportunidad de conseguir un trabajo”. Entre todos los tonatiquenses, José Luis Cervantes, “El michoacano” de 48 años, habla abiertamente sobre su orgullo de sentirse de Tonatico, aunque nació en La Luz, Michoacán, comunidad mexicana con el segundo número más grande de inmigrantes en Waukegan. Se volvió tonatiquense y planea mudarse a Tonatico después que se retire como supervisor en los Laboratorios Abbott. Se enamoró del pueblo, cuando fue entrenador de un equipo de Tonatico en la Liga de Fútbol de Waukegan en los 80. “Tonatico ha tenido a los mejores jugadores y siempre está en las finales”, aseguró Cervantes. “Soy cien por ciento tonatiquense y mi familia lo sabe”. Comenta que las rivalidades amistosas entre Tonatico y La Luz en Waukegan están desapareciendo. Las personas de ambas comunidades han estado contrayendo matrimonio entre ellas. Él tiene tres sobrinos que se han casado con gente de Tonatico en Waukegan y lo visitan cada año, “El michoacano” manifestó que “para mí Tonatico es mi casa y quiero vivir aquí”. Saben cuánto dinero ganan... pero no saben cuánto han sufrido (Transnacionalismo económico y sociocultural con bajo nivel de institucionalización) Algunos jóvenes se imaginan que Waukegan es un lugar repleto de fábricas y “yardas” grandes. Algunos han visto fotografías de la ciudad, pero generalmente las fotos son retratos de familiares, más no de las calles o de los edificios. A menudo su única percepción de Waukegan es aquella de los emigrantes jóvenes quienes regresan llevando ropa de marca, collares de oro y coches nuevos con música muy alta (un emigrante regresó en diciembre con una Hummer y todavía hay gente que sigue hablando de eso). Actualmente, los migrantes se están yendo de mayor edad, esperan hasta por lo menos terminar la preparatoria. Hasta hace dos años, Tonatico no tenía una preparatoria, sólo una secundaria. Para continuar sus estudios tenían que ir a Ixtapan de la Sal. Ricardo Gama, el director de la secundaria en El Terrero, una ranchería del municipio de Tonatico, dijo que el número de estudiantes ha aumentado de 27 en 1992 a 105 hoy en día. “Hace 10 años la mayoría de los jóvenes en edad escolar se iba para allá... la mejor opción para ellos era irse... ahora son pocos los que se van”. A los estudiantes se les fomenta seguir estudiando la preparatoria y tratar de asistir a una universidad pública. El profesor Ricardo Gama comentó que “a veces siento que se está engañando a los jóvenes estudiantes porque a pesar de todo lo que estudien, en el pueblo no hay suficientes fuentes de trabajo para ellos después de graduarse... 73 hemos tenido estudiantes que han egresado de la preparatoria y no han encontrado trabajo, por lo tanto ellos emigran”. La influencia más grande para los de acá, es la juventud que regresa y da la impresión de que el dinero se obtiene fácilmente en Estados Unidos. “En diciembre muchos jóvenes de entre los 20 años y 30 años de edad regresan y se llevan a otros”, comenta el profesor Ricardo Gama. “Nuestros jóvenes saben cuánto dinero ganan en Estados Unidos, pero no saben cuándo han sufrido, mal comido y mal dormido”. Jesús Galeana Domínguez, de 16 años, piensa emigrar a Waukegan para vivir con su hermano cuando cumpla 18 años de edad. Él se mantiene económicamente con el dinero que su hermano envía. “No tengo nada que hacer aquí”, nos platica. Aunque en México es un requisito que los alumnos estudien tres años de lengua extranjera —predomina el idioma inglés—, la mayoría de ellos se ríen de sus habilidades en el habla inglesa y no se sienten preparados. Joel Quintana, de 16 años, declaró que 10 compañeros estudiantes de su clase en la preparatoria en Ixtapan de la Sal ya se fueron a Estados Unidos. Él está pensando emigrar a 74 Waukegan para vivir con sus familiares cuando se gradúe si no aprueba los exámenes para entrar a una universidad. El dice que no conoce a Waukegan ni en foto, “Yo no tengo la menor idea de cómo es... todo lo que sé, es que me tomará cerca de un mes para encontrar trabajo”. Un emigrante se ahogó... y otro murió en el desierto (Transnacionalismo económico con bajo nivel de institucionalización) Muchos emigrantes jóvenes entran a Estados Unidos ilegalmente, a menos que algún miembro de su familia pueda arreglar sus papeles o pueda conseguirle un trabajo por contrato para venir a los Estados Unidos legalmente de forma inmediata. Quienes inmigran a Waukegan ilegalmente usan a los llamados “polleros” para cruzar la frontera. Hay algunos en Tonatico quienes lo llevarán directamente a una dirección específica en Waukegan por aproximadamente US $2,000 dólares. La alternativa más barata es buscar un pollero en la frontera, pero se arriesgan a ser estafados. Un “pollero” jubilado de 45 años de edad de Tonatico, quién no quiso dar su nombre, reveló que los emigrantes están cruzando en las áreas más desoladas del desierto de Arizona desde que se incrementó la vigilancia de la frontera después de los atentados terroristas del 11 de septiembre. “Por lo menos son ocho días de Tonatico a Waukegan... hace algunos años sólo tomaba dos días... si viajabas en avión a la frontera, cruzabas y te subías a otro avión en Estados Unidos con rumbo a Chicago, el viaje podía durar tan solo 24 horas”. Cuando era más fácil cruzar, los trabajadores indocumentados viajaban a Tonatico cada año. Ahora la mayoría de los trabajadores indocumentados no quieren arriesgarse a cruzar la frontera nuevamente. Él estima que hasta un máximo de 40 personas dejan Tonatico cada mes. Pasan de dos a tres días caminando por la noche para cruzar la frontera, llevando sólo 3 ó 4 galones de agua, pan y una muda de ropa. Después son recogidos en una camioneta. Ellos no pagan hasta que llegan a su destino, el cual generalmente es la casa de algún pariente o amigo. A menudo los familiares son los que pagan o el emigrante queda endeudado y va liquidando su cuenta mensualmente una vez que ha obtenido algún empleo. La gente comenta que hace aproximadamente 10 años un emigrante de Tonatico se ahogó cuando un río pequeño se lo llevó y otro hombre de mayor edad murió de un infarto en el desierto. Entonces ante el peligro ¿Por qué se arriesgan? “Aquí no hay dinero. No hay trabajo” comenta el “pollero”. Aquí hay tristeza (Transnacionalismo económico con bajo nivel de institucionalización) Los rostros más visibles de la emigración en algunas comunidades del municipio de Tonatico, son las casas abandonadas y las aulas vacías en las escuelas primarias. La escuela en El Ojo de Agua cerró hace diez años por falta de estudiantes, seguida por la escuela en San Miguel, el año pasado. Ahora todo parece indicar que la escuela en La Vega, una pequeña comunidad de agricultores de cebolla, maíz y jitomate, podría ser la próxima. Pedro Onofre Dorantes, Instructor Comunitario del Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE) en la comunidad de La Vega tiene la ardua y harto difícil tarea de enseñar a 16 estudiantes de cursos comunitarios (esta modalidad educativa atiende desde el primero hasta el sexto grado, por lo que los alumnos son agrupados en tres niveles, y con los cuales se trabaja en la misma aula, al mismo tiempo). “Aquí hay 75 muchas casas, pero no hay niños... hay muchas casas abandonadas... aquí hay tristeza... no hay trabajo”. Hace cinco años “la escuela contaba con 30 estudiantes... por eso si el número de estudiantes disminuye por debajo de los 12 probablemente la escuela cerrará y los estudiantes serán enviados a otra escuela... creo que el cincuenta por ciento se fueron a Estados Unidos”. La migración ha causado una reacción en cadena en la comunidad. Mientras más gente se va, menos personas desean quedarse. El gobierno postergó la pavimentación del camino de tierra al pueblo durante años a causa de la disminución del número de habitantes en la comunidad. Ahora que finalmente se pavimentó, quedan muy pocos autos que lo utilizan. “Aquí ves la realidad... esto afecta a todos... aquí ya no es lo mismo”. La mayoría viaja por avión (Transnacionalismo sociocultural, económico y político con bajo nivel de institucionalización) Facundo Hurtado, el dueño de Mega Flor en Waukegan, dijo haber vendido más de 300 pasajes de avión a los paisanos de Tonatico en los últimos meses. “Más personas viajan durante 76 esta temporada que en la Navidad... la mayoría viajan por avión y permanecen allá una o dos semanas”. Facundo nos comenta que “la semana de celebraciones se caracteriza por ser una feria con paseos, música y vendedores de artesanías. Los fieles llevan en procesión por todo el pueblo a la virgen Nuestra Señora de Tonatico, tradición que tiene más de 300 años de antigüedad cuando la iglesia adquirió la imagen”. Agrega que “hay un día dedicado especialmente para los emigrantes que viven en Waukegan. Ellos gastan entre US $6,000 y $10,000 dólares para comprar los “castillos” que queman en estas fechas para tener el espectáculo más grande en contra de sus rivales amistosos, los tonatiquenses radicados en California... durante los últimos años California ha ganado”. Facundo Hurtado emigró de Tonatico en 1987 y en 1999 abrió su negocio donde también vende CD’s y flores. “Vine como todos los demás... vine en busca de mejores oportunidades y una mejor vida... yo trabajaba en las yardas y en fábricas”. Ángel Zavala, de 37 años de edad, ha regresado a Tonatico casi todos los años desde que migró a Waukegan en 1986 cuando tenía 19 años de edad. “Tengo varios años viniendo anualmente... es una obligación o tradición; no sé cómo llamarle... por un lado vengo a visitar a mis familiares y por el otro vengo a visitar a la Virgen... también regreso año tras año por el clima bueno, los amigos y las tradiciones... mi esposa y mi hija más pequeña me acompañan estas dos semanas, mis otras dos hijas se quedaron allá por motivos de la escuela”. Gerardo Popoca, de 55 años de edad y presidente del Club Social Tonatico en Waukegan, estima que cerca de 500 inmigrantes en Waukegan vinieron a Tonatico. Este año viajó en avión con su esposa y sus tres hijos. Una de sus hijas va a manejar 40 horas desde Waukegan hasta llegar a Tonatico. El presidente del Club Social Tonatico comenta que “el gobernador del Estado de México próximamente les ofrecerá una cena para todos los tonatiquenses radicados en Waukegan como una muestra de agradecimiento a su apoyo económico, ya que el gobierno reconoce que los emigrantes envían más de $2 millones de pesos a sus familiares en Tonatico, los cuales equivalen a la mitad de los ingresos anuales del pueblo”. También comentó que “el gobierno del Estado de México pagó cinco autobuses para transportar a los inmigrantes de Waukegan del aeropuerto de la Ciudad de México a Tonatico. Esto se debe a que las personas quienes regresan a sus pueblos de origen, a menudo traen regalos y dinero para sus familiares y son un blanco perfecto para los ladrones situados en las orillas de la carretera. Al viajar en compañía de la policía, los inmigrantes se sienten fuera de peligro... por eso estamos agradecidos con el gobernador”. La generación de jóvenes crece viendo a los emigrantes que viven en Estados Unidos y que regresan con coches nuevos y que pueden construir casas (Transnacionalismo económico y político con bajo nivel de institucionalización) Los tonatiquenses empezaron a emigrar a Waukegan desde la década de los 60. Allá podían ganar más en un día, comparado a lo que podían ganar en una semana de trabajo en los campos de cebolla de Tonatico, donde la agricultura era la actividad económica más importante. Waukegan también tiene muchas viviendas asequibles en el Condado de Lake para aquellos que vienen a trabajar en las yardas y en las fábricas en otras partes del condado. 77 Aunque las dos ciudades no tienen una relación de hermandad formal (legal) –la ciudad hermana de Waukegan es Kiyotake-cho, Japón– las dos comunidades se han mantenido relacionadas. El ex alcalde de Waukegan, Bill Durkin, visitó Tonatico en 1998 y el alcalde de Tonatico ha visitado Waukegan cuatro veces, la última ocasión fue en septiembre. El gobierno municipal de Tonatico, con la ayuda de la Ciudad de Waukegan, impartió en el mes de julio un curso de verano en el que se impartieron clases de historia y cultura mexicana, con duración de dos semanas, a los niños con raíces en Tonatico. Susana Figueroa, la enlace comunitaria para la ciudad de Waukegan, nació en Ixtapan de la Sal, su padre consiguió un empleo en Abbott Laboratories y trajo a su familia a Waukegan en 1979. Ella visitó Tonatico en 1999 mientras visitaba su pueblo natal. “Nosotros no queremos ver a la gente dejar el pueblo. Desearíamos que las personas se quedaran aquí aunque tuvieran que luchar y trabajar arduamente para ganarse la vida”. El éxodo de inmigrantes de Tonatico se debe a que “los niveles de vida no son comparables, la generación de jóvenes crece viendo a los emigrantes que viven en Estados Unidos 78 y que regresan con coches nuevos y que pueden construir casas”. “La impresión de los jóvenes es que... si voy a Estados Unidos puedo tener un coche nuevo, construir una casa y mandar dinero a mis familiares. Pero no es tan fácil”. Para Susana Figueroa “algunos inmigrantes cruzan la frontera ilegalmente, le pagan a un pollero alrededor de US $2,300 dólares para el viaje a Waukegan que dura dos días”. Afirma, además, que “por lo menos un residente de Tonatico murió al cruzar la frontera de los Estados Unidos hace casi diez años, su cuerpo fue encontrado en la frontera con Texas después de haber sido golpeado hasta causarle la muerte”. Susana opina que “aunque es difícil saber el número de inmigrantes indocumentados procedentes de Tonatico viviendo en Waukegan, los tonatiquenses estiman que el 20 por ciento o más son indocumentados”. Por ello crees que “vivir ilegalmente en los Estados Unidos hace más difícil para ellos el regreso a Tonatico, a menos que quieran arriesgarse nuevamente a cruzar la frontera”. Sin embargo, la mayoría de los tonatiquenses son residentes o ciudadanos naturalizados de EE.UU, situación que les ha permitido abrir varios negocios en Waukegan, inclu- yendo los restaurantes Taquería Toluca y Antojitos Tonatico... creo que están comenzando a despertar y a convertirse en empresarios”. Es verdad todo viene de allá... pero mi vida está aquí (Transnacionalismo económico y transnacionalismo político con bajo nivel de institucionalización) Héctor Morales Reynosa cree que “Tonatico depende de manera importante de los dólares ganados en Waukegan” pues afirma que “los dos millones de dólares que los emigrantes radicados en Estados Unidos mandan a Tonatico superan el presupuesto de este poblado. Además de las remesas mensuales de unos cientos de dólares a familiares, los 4,000 tonatiquenses que viven en Waukegan invierten en el pueblo en empresas pequeñas, invernaderos y proyectos públicos para la comunidad”. Héctor Morales Reynosa es un granjero de 61 años de edad originario de Tonatico, que sembraba cebollas y estaba a merced de la caída de los precios bajos y la escasez de la lluvia. Entonces, su hijo quien vive en Waukegan le mandó fotos de cómo construir un invernadero y cómo hacer crecer jitomates, que él mismo aprendió mientras trabajaba en invernaderos en el Condado de Lake. Con la inversión de su hijo, Morales construyó un invernadero grande en medio de su terreno de cebolla hace más de un año. Ahora en vez de cosechar cebollas sólo una vez por año, sus tomates maduran tres veces por año con ganancias de $2,000 a $7,000 cada cosecha, las cuales triplican sus ingresos anuales. “En tres meses las plantas tocan el techo y se llenan de jitomates”. Hay cerca de 20 invernaderos en Tonatico y sus rancherías, los cuales fueron construidos en los últimos tres años, la mayoría de ellos, con la ayuda de familiares de Estados Unidos. “Es verdad, todo viene de allá”, reconoció Morales. Él maneja un automóvil Nissan que su hijo de 31 años de edad trajo a Tonatico hace nueve años. En el retrovisor cuelgan fotos de los nietos de Héctor Morales a los que nunca ha visto en persona. Su hijo no ha tenido la posibilidad de regresar a Tonatico desde entonces y a Morales se le ha negado la visa cada vez que ha tratado de obtenerla para visitar los Estados Unidos. “He tratado de obtener una visa cuatro veces”, aseguró Morales. “Ellos piensan que voy a permanecer en Estados Unidos, pero mi vida está aquí”. 79 Uno de los proyectos más visibles financiado por emigrantes es un puente peatonal sobre la carretera en la entrada del pueblo. El Club Social Tonatico en Waukegan pagó parcialmente por ello en el 2003 a través de un programa donde cada dólar de los emigrantes es igualado con tres dólares por parte del gobierno mexicano. El proyecto se inició después de que un auto atropelló a una niña quien intentaba cruzar la carretera para ir a la escuela. El Club Social Tonatico también recauda entre US $6,000 y $10,000 cada año para pagar los castillos de fuegos artificiales y las bandas de música para la fiesta anual del pueblo en febrero. Una mujer en Waukegan pagó el vestido de Nuestra Señora de Tonatico. La ayuda va en ambas direcciones. El Ayuntamiento y la casa de cultura de Tonatico han realizado por segunda vez consecutiva (se pretende institucionalizar) un curso de verano, con duración de dos semanas dirigido a la juventud en Waukegan, en el mes de julio, donde la segunda generación de tonatiquenses pueden aprender sobre historia y cultura mexicana. Hasta hace tres años había pocos lugares para los turistas mexicanos 80 donde se podían hospedar en Tonatico para disfrutar de las fiestas, las aguas termales, el balneario y la cascada conocida como “El salto”. La mayoría de los visitantes permanecían durante el día y se iban al atardecer. Ahora hay cerca de 30 posadas familiares para mantener a los turistas en el pueblo gastando su dinero. Cerca de la tercera parte de las posadas son financiadas por emigrantes radicados en Waukegan para darles a los familiares en Tonatico otra fuente de ingresos y un negocio que puedan manejar si se jubilan en Tonatico. La administración municipal proporcionó muchos de los materiales de construcción. Refugio Gómez, un obrero de construcción de 56 años de edad en Waukegan, está en Tonatico este mes (febrero 2005) para supervisar la construcción de su posada que espera abrir en diciembre. Trajo algunos materiales de construcción de Estados Unidos, tales como puertas, las cuales son más baratas allá que en México, manda cerca de US $500 cada dos semanas a Tonatico para continuar con la construcción mientras trabaja en los Estados Unidos. “Poco a poco voy pagándola... todavía tengo que pagar algunos materiales... más dinero de Waukegan está moviéndose aquí”. Su esposa planea atender la posada, mientras Gómez trabaja algunos años más en Waukegan hasta que pueda recibir una pensión. Después planea volver a Tonatico y construir su futura casa sobre el área de recepción de la posada. de desarrollar el turismo de aventura en las Grutas de la Estrella donde los turistas pueden descender a las cavernas y caminar por túneles llenos de agua. Ángel Medina Arizmendi también ha usado el dinero que ganó en el Condado de Lake para abrir su propio negocio en Tonatico. Se fue en busca de mejores oportunidades a Estados Unidos, en 1983, cuando tenía 23 años de edad. Abrió un club de música en Round Lake con algunos amigos. En 1999 regresó a Tonatico con sus ahorros para abrir una fuente de sodas para los jóvenes. Igualmente abrió una posada con ocho habitaciones en abril del año pasado. Admite que probablemente nunca va a ver tantas ganancias en comparación con lo que hizo en los Estados Unidos. “Ganas más en los Estados Unidos, pero es mejor aquí... ganas menos, pero disfrutas más”. Su esposa y sus hijas todavía están en Waukegan y las visita cada tres meses. Sus hijas se fueron a vivir con él un año, pero ellas reconocen que tienen más oportunidades en las escuelas de los Estados Unidos. “Por ese motivo no las presiono para que vengan aquí”. El presidente municipal de Tonatico, Arturo Hernández Tapia, dice que “ahora los ingresos del turismo son equiparables a los ingresos de la agricultura, ayudando a estabilizar la emigración que alcanzó el máximo en la década de los 80 y la década de los 90... ahora los números son fijos porque algunos van y otros vienen”. El presidente municipal piensa que a pesar de que hay más empleos, la emigración continuará a causa de la comunidad transnacional de Tonatico y la red establecida en ambos lados de la frontera. “Es parte de la cultura...está en sus mentes irse... han empezado a llegar y a establecerse ellos mismos en los Estados Unidos”. Con la ayuda de las posadas, el turismo ha aumentado constantemente en Tonatico. El pueblo también trata El papel del Club Social Tonatico (Transnacionalismo político con bajo nivel de institucionalización) “La formación de clubes, asociaciones o casas de migrantes constituye una nueva forma de organización de las comunidades de migrantes mexicanos que trabajan y/o residen en los Estados Unidos. Generalmente están formados por grupos de ciuda- 81 danos que comparten el mismo origen en México y que tienen entre sus principales objetivos maximizar recursos económicos para la puesta en marcha de una serie de actividades y/o proyectos que beneficien tanto a los migrantes como sus comunidades de origen y, por lo tanto, a sus familias. Estas acciones o proyectos generalmente se dan en dos formas 1) actividades de apoyo al migrante en los Estados Unidos, tales como soporte logístico, orientación, capacitación e integración de grupos de familiares y amigos alrededor de actividades culturales y deportivas; y 2) apoyo al desarrollo de las comunidades de origen, en coordinación con las autoridades locales y estatales, en actividades como el mejoramiento de infraestructura, reparación y construcción de escuelas y jardines infantiles, generación de fuentes de empleo” (Vega, 2004: 315). Antes de abordar el caso del Club Social Tonatico es pertinente señalar que “las organizaciones de ayuda mutua de mexicanos migrantes en los Estados Unidos surgen en forma notoria con la inmigración de los últimos 25 años (Alatorre y Aguilar, 1994; González Gutiérrez, 1995; Zabin y Escala, 2002). La formación de asociaciones o clubes de migrantes comienza a prin- 82 cipios de los años setenta a través de la agrupación de migrantes previamente organizados en clubes de fútbol y por región de origen (Zabin y Escala, 2002). En 1972 se registra la formación de una de las primeras asociaciones que agrupó a varios clubes de zacatecanos. A mediados de los años ochenta, inmigrantes provenientes de estados con menor índice de expulsión como Oaxaca, conformaron la “Asociación Cívica Benito Juárez”, concebida con dos objetivos primordiales: 1) el de proporcionar información sobre los derechos laborales de los trabajadores agrícolas de California; y 2) para generar cambios de mayor participación comunitaria en las decisiones del lugar de origen de los integrantes (caso de San Juan Mixtepec). Otros estados como Guanajuato formaron organizaciones a partir de esquemas de organizaciones deportivas como el Club de fútbol León del este de los Ángeles, fundado en 1945; las organizaciones de Yucatán se originaron desde la Liga Yucateca de Softbol de Pasadena, creada desde 1979 en los Ángeles (Daza, 2001). En el caso concreto del Estado de México, se puede afirmar que los clubes han registrado un crecimiento bastante acelerado, pues en 2002 se tienen seis registrados y en 2003 se tienen once clubes reconocidos. “Al respecto se cuenta con información acerca de seis, éstos son: Club Alas con sede en la ciudad de Cicero, Illinois; Club de Bejucos con sede en Austin, Texas; Club de Luvianos con sede en Austin, Texas; Club de Tejupilco con sede en Austin, Texas; Club Oriundos de Toluca con sede en Reading, Pennsylvania; Club Tonatico con sede en Waukegan, Illinois” (Vega, 2004: 326). En la actualidad, Tonatico tiene un Club más y éste tiene su sede en Oceanside, California. Actualmente, el Gobierno del Estado de México tiene la Casa de Atención al Migrante en Austin, Texas que ha venido operando desde 2003 y cuyos titulares han sido Guillermo Santín (de Tejupilco) y Mario Rivera Tapia (de Ixtapan de la Sal). El origen y creación de los clubes, asociaciones o casas de migrantes es más o menos similar; “inicialmente los migrantes mexicanos tienden a visualizar su presencia en festividades (individuales o colectivas) de índole religioso o civil y en actividades deportivas. La etapa que le sigue es la formación de comités que representan las comunidades de origen, a los que integran miembros que inician los trabajos de discusión sobre los temas y proyectos a tratar, reproduciendo en muchos casos las mismas prácticas que se desarrollan en reuniones de discusión similares al pueblo de origen. Posteriormente los clubes se agrupan en asociaciones de clubes por regiones, para generar campos de acción más amplios” (Vega, 2004: 318). Lo interesante es que la mayoría de los clubes pertenecen a los municipios del sur del Estado de México, región que constituye la zona de mayor tradición migratoria internacional en el Estado, y en particular en el municipio de Tejupilco. “Hoy en día prácticamente sólo el Club de Bejucos y el Club Tonatico son los que están trabajando” (Vega, 2004: 326). El Club Tonatico de Oceanside California también esta funcionando adecuadamente. El Club social Tonatico surgió de manera formal en 1983 y su primer presidente fue el Señor Gerardo Popoca, quien en entrevista nos comenta: “Vivíamos muchos de por acá de Tonatico en unos departamentos que rentábamos allá, un día nos reunimos y platicamos sobre lo conveniente de que cada uno de nosotros tuviera su propia casa y ya no pagar renta, así que nos organizamos para crear nuestro club y poder ayudarnos” 83 Aunque el Club Tonatico data de 1983, sus primeros antecedentes los encontramos en el año de 1979 cuando se forma el Club Deportivo Tonatico que de acuerdo con varios migrantes del lugar tuvo en José Luis Cervantes “El michoacano” un fuerte impulsor. “En el año de 1979 Tonatico ya tenía equipo de fútbol, y me invitaron para ser integrante de su equipo, pero La Luz (Michoacán) también ya tenía su equipo así que no acepté”. 84 En este capítulo se han mostrado diversos ejemplos que ilustran cómo los migrantes transnacionales siempre han tendido a mantener conexiones económicas, sociales y políticas con sus sociedades de origen. En efecto, estas relaciones transnacionales se han convertido en puentes que conectan estadosnación y comunidades a través de fronteras nacionales. La gente a la que no le ruge la panza puede protestar y votar libremente 3.1. Las remesas sociales y su impacto en el ámbito local Vecino de Tonatico, 2005 Las remesas sociales se refieren a las estructuras normativas (ideas, valores y creencias), sistemas de prácticas y capital social. Bajo esta perspectiva se reconoce que los emigrantes no absorben todos los aspectos culturales de su nueva vida. Se reconoce que los remitentes adoptan algunas nuevas ideas y prácticas, que pasan por diversos filtros y además existen elementos que se ignoran totalmente y es así como les llegan a los no migrantes (Levitt, 1998). Capítulo 3. Transnacionalismo y remesas sociales: procesos de cambio político en el municipio de Tonatico (1995-2005) En este capítulo se presenta una aproximación al transnacionalismo político que da cuenta de las transformaciones que en la esfera política se han registrado en Tonatico, México: la emergencia de una nueva ciudadanía, los cambios en la cultura política y en el comportamiento electoral, así como en la construcción de un sistema de alternancia política. En capítulos previos se han esbozado ideas básicas del transnacionalismo, en este capítulo se incluye una herramienta teórica adicional, que permita explicar los procesos de cambio político que se observan en el municipio de Tonatico, la herramienta conceptual la tomamos de Peggy Levitt (1998), quien ha desarrollado una idea novedosa y que es de bastante utilidad para abordar la difusión cultural a nivel local; se trata de las remesas sociales. Esta herramienta teórica realiza un acercamiento a cómo se lleva a cabo la transmisión de las remesas sociales, incluyendo las características de los sistemas organizacionales transnacionales y las redes a través de las cuales circulan estos flujos, reconoce las diferencias entre los individuos y las personas que envían y reciben este tipo de remesas, que involucran a los estados nación y el espacio local donde se observa claramente el impacto de las remesas sociales, pues es precisamente en espacios concretos donde existe una probable adopción de las remesas y que tenga sus efectos en la vida social y política. Esta in- 85 vestigación sostiene que las remesas sociales que envían los residentes de Tonatico, Illinois han tenido un impacto importante en la esfera política de Tonatico, México. remesas económicas, en la transformación del municipio de Tonatico. La comunidad transnacional de Tonatico involucra la migración rural y urbana a zonas urbanas, altas concentraciones de migrantes que continúan migrando, se registra una fuerte dependencia de las remesas económicas de los miembros de las comunidades no migrantes, además de una interdependencia social y política; son algunos de los rasgos más característicos de la mayoría de las comunidades transnacionales (ver Smith, 2003; Goldring, 1992; Mountz y Wrigth, 1997). En este capítulo se estudia específicamente el aspecto político de las denominadas remesas sociales. Un tema muy importante que se aborda es la relación entre migración y ciudadanía. La relación entre migración transnacional y ciudadanía es uno de los ejes temáticos de la investigación, donde se destaca la importancia de los recursos económicos, sociales, políticos y culturales que la migración transnacional aporta a los migrantes y a sus comunidades de origen y que van contribuyendo a construir nuevas condiciones materiales y no materiales propias del ejercicio de la ciudadanía. En el capítulo 2 se apuntaron diversos mecanismos mediante los cuales incorporan, rechazan o transforman elementos culturales en las prácticas que realizan en el país receptor, y la manera en que esto repercute en sus relaciones comunitarias en sus lugares de origen. Como se observa en ese capítulo, existen y juegan un papel importante en la transformación local; los sistemas de prácticas, estructuras normativas y capital social, es decir, las remesas sociales son igual o más importantes que las El ejercicio de derechos y los procesos de construcción de estrategias que los migrantes elaboran, se relacionan íntimamente con los procesos de construcción de las comunidades de migrantes mexicanos en la sociedad de destino. El ejercicio ciudadano, entonces, adquiere una dimensión transnacional, la cual es problematizada. Interesa de manera particular la dimensión de la participación político electoral, la cultura política y la emergencia de una nueva ciudadanía. 86 3.2. Comportamiento político-electoral y alternancia política en Tonatico, México (1995-2005) que dicho cambio perduraba luego durante un largo periodo (Pacheco, 2003: 49). Precisemos antes de iniciar tres conceptos relativos al reacomodo del electorado y su relación con el campo político-electoral. c) Desalineamiento: alude a aquellas situaciones de inestabilidad en las tendencias electorales, caracterizadas por el alejamiento de los electores respecto de los partidos (aumenta la abstención, especialmente en comicios importantes) y el debilitamiento de la identificación y lealtad hacia un mismo partido (el elector vota por un partido) (Pacheco, 2003: 49). El desalineamiento electoral es un proceso que se manifiesta de diversas maneras: en un decremento de la parte del electorado identificada con algún partido, en patrones de voto muy variables o inestables, en la aparición de nuevos pero fugaces partidos, en cambios hacia la participación política por fuera de los partidos y/o en la fractura del apoyo a los partidos entre los grupos sociales clave (Pacheco, 2003: 49). Este tipo de reacomodo electoral es el que parece que caracteriza a Tonatico en la última década con excepción del aumento de la abstención, precisamente por ello más adelante se aborda brevemente este importante tema. a) Alineamiento: se refiere a aquellos periodos largos en que los que, aun cuando se registraban movimientos de electores (cambios en la participación y en las preferencias partidarias) éstos no afectaban la continuidad de la estructura de los resultados electorales, lo cual se expresa en el mantenimiento del mismo formato en el sistema de partidos y de un grado elevado de lealtad e identificación partidarias de los ciudadanos en el partido de su preferencia (Pacheco, 2003: 48-49). b) Realineamiento o elección crítica: alude a un cambio duradero en las preferencias partidarias, es decir, se trata de una reestructuración del apoyo que los grupos sociales dan a los partidos y que es provocado por un desplazamiento del principal eje de clivaje social y/o político... ocurría un cambio mayor en la distribución del voto entre los partidos y 87 Huntington (1990) plantea que la principal fuente de presiones a favor del cambio político tiende a situarse en las grandes ciudades, donde se concentran más los efectos de la modernización económica y social mientras que el campo mantiene una actitud más tradicional. La evidencia empírica en México nos indica que esto no necesariamente es cierto pues aunque las presiones del cambio se registran en las ciudades, también se han presentado en el campo mexicano y en espacios intermedios. Otro modelo para la explicación del cambio político y democrático en México sólo se centra en los sistemas de partidos ya que esta perspectiva registra que “los mayores cambios en el sistema de partidos desde 1929 ocurrieron durante la última década del siglo veinte” (Pa- 88 checo, 2003: 58-59). Es decir, al aumentar el número de partidos políticos y al aumentar la competencia entre los partidos, hay una mayor presión a favor del cambio político. Este modelo explicativo que atribuye el proceso de cambio, a los sistemas de partidos, “al ascenso y ocaso de los clivajes sociales, también plantea que los factores institucionales y las decisiones tomadas por las élites políticas influyen sobre el modo en cómo son integrados los clivajes sociales al sistema de partidos” (Pacheco, 2003: 66). Los teóricos de la modernización plantearían que el cambio político se da en dos sentidos: 1) el cambio de sociedades agrícolas a industriales y 2) el cambio de sociedades industriales a postindustriales. Etapas de modernización de las sociedades De sociedades agrícolas De sociedades industriales a industriales a postindustriales Gobierno La expansión del derecho al voto, el crecimiento de la burocratización weberiana y el uso de la autoridad legal y racional en el gobierno. Aumento de las formas estratificadas de gobierno, a niveles globales y locales, y expansión del sector sin fines de lucro. Valores culturales Seguridad material, autoridad tradicional y obligaciones comunitarias. Cuestiones de calidad de vida, autoexpresión, individualismo y postmaterialismo. Participación ciudadana Expansión de la participación electoral y de la afiliación a organizaciones civiles tradicionales, como partidos y sindicatos. Estabilidad en las formas tradicionales de asociación civil y expansión de formas más exigentes de activismo político, incluyendo nuevos movimientos sociales y política de protesta. Fuente: Elaboración propia con base en las teorías de la modernización de Ronald Inglehart y Russell Dalton. Aunque cada uno de los modelos teóricos planteados nos permite un acercamiento a los procesos de cambio político, en este capítulo utilizaremos la perspectiva de las remesas sociales. Argumentaremos que las remesas sociales han contribuido sustancialmente en el proceso de cambio político (cultura política, emergencia de ciudadanía y alternancia política) que se observa en Tonatico a lo largo de una década. Por ello, primero se revisan los “datos duros” electorales desde 1996 y hasta el 2005 que se han registrado en Tonatico (se analiza la votación por partido político y el grado de participación electoral, la alternancia entre el PRI y el PRD, el cambio de la geografía electoral). Luego se completa este tipo de información con las entrevistas recabadas en campo en Tonatico, México (donde se plasman ideas sobre el cambio en los modos de hacer política, la emergencia de la ciudadanía, la democratización en los procesos de selección de candidatos, la incorporación de la opinión de la gente en la toma de decisiones, etc.). Algunos estudiosos destacan la aparición de nuevos actores políticos y 89 el fortalecimiento de interlocutores antaño débiles, que participan en la configuración del contexto novedoso de la alternancia del país (Arenas, 2000). El escenario político mexicano está marcado por la competitividad, observable en la reducción al mínimo de los márgenes de victoria, entre los partidos políticos, y la alternancia es posibilitada entre otros factores, por la presencia de más partidos (López, 2003), y aunque reconocemos esta aseveración agregamos que no es la única vía, a favor de ello argumentaremos más adelante. Los procesos electorales celebrados en Tonatico de 1980 a 2003, nos presentan una serie de datos muy interesantes que mostraremos a continuación. Es pertinente señalar que la información utilizada para las elecciones que van desde 1981 y hasta 1996 fue tomada del Banco de datos electorales a nivel munici- 90 pal 1980-1999, disponible en CDROM, 2000, de Alain de Remes, del Centro de Investigación y Docencia Económicas. El resto de la información se obtuvo de la Memoria Estadística Electoral. Ayuntamientos 2000 y de la Memoria Electoral de Ayuntamientos. Procesos Electorales 2002-2003, ambas de la autoría y edición del Instituto Electoral del Estado de México. Desde el inicio de los 80, los procesos electorales a nivel municipal han ido cobrando una gran importancia para entender el desarrollo político del país. De hecho una de las principales características de la transición mexicana ha sido que el cambio, la competitividad y la pluralidad política comenzaron a nivel municipal, para luego irse expandiendo paulatinamente a las elecciones de las entidades federativas, hasta que en el año 2000 alcanzó por primera vez al gobierno federal. 3080 3473 2079 2395 3932 4146 3451 4520 4979 100 % 91 3503 32.76 2509 32.90 2279 47.52 3197 28.42 1684 20.94 1100 57.36 3325 59.96 3113 24.84 1169 25.37 1128 56.35 4350 67.24 5149 67.10 4648 52.48 3530 71.58 4242 79.06 4154 42.62 2472 40.04 2079 75.16 3538 74.63 3318 4522 100 7658 100 6927 100 6727 100 5926 100 5254 100 5797 100 5192 100 4707 100 4446 8025 2005 % 2003 % 2000 % 1999 % 1996 % 1993 % 1990 % 1987 % 1984 % 1981 43.65 2893 40.01 2060 40.94 1903 58.90 2079 46.53 1974 48.27 2005 78.28 1935 66.91 1391 84.05 3002 92.83 3080 63.98 655 11.85 610 6.67 310 15.13 534 1.63 69 0.72 30 0 0 1.06 22 0 0 0 0 Año Lista Votación Votación Abstencio- PRI PAN Nominal total efectiva nismo 14.48 887 44.36 2284 26.44 1229 25.68 836 48.40 2053 41.07 1706 13.19 326 22.17 461 13.31 471 0 0 238 65 0 77 222 87 79 128 168 19.02 0 0 85 0.49 25 23.17 1077 0 0 1.25 53 4.6 191 5.42 134 9.86 205 0 0 0 0 PSUM Otros Nulos PMS PRD 2 9 0 2 0 0 0 0 0 0 No Reg. Análisis de la estadística de la elección de ayuntamientos (1981-2003) y elección de gobernador (1999-2005) en Tonatico, México La información que se ha presentado en la tabla anterior puede ser analizada de múltiples formas. Enseguida se realiza un análisis de la elección de ayuntamientos de 1981 a 1993. Luego continúa el análisis con las elecciones de ayuntamien- tos de 1996 a 2003. Finalmente, se presenta una comparación con dos procesos de elección de gobernador 1999 y 2005. Algunas observaciones importantes que se desprenden son las siguientes: Elección de ayuntamientos en Tonatico (1981-1993) Año Lista Nominal Votación total Abstencio- nismo % de votación total % de abstencionismo 1981 4446 3318 1128 74.63 25.37 1984 4707 3538 1169 75.16 24.84 1987 5192 2079 3113 40.04 59.96 1990 5797 2472 3325 42.64 57.36 1993 5254 4154 1100 79.06 20.94 Durante este periodo, en términos generales podemos observar que el abstencionismo registra un comportamiento irregular. Porque mientras en los procesos electorales de 1981, 1984 y 1993, registra un bajo nivel; hubo dos procesos en los cuales el abstencionismo es mayor al 50%. Algunas posibles razones que pueden explicar este comportamiento tienen que ver con que 1) los bajos niveles de abstencionismo a principios de la década de los años ochenta, coinciden con profundas crisis económicas a nivel nacional y con el inicio de la apertura del sistema político mexicano, además en el espacio local, 92 emergen con relativa fuerza los partidos políticos de izquierda, PSUM y PMS fundamentalmente. El bajo abstencionismo del proceso electoral de 1993, se explica por una situación de coyuntura a nivel local, que tiene que ver con la postulación de un candidato carismático por el PRD, que aunque no ganó estuvo muy cerca del triunfo electoral que conseguiría en el siguiente proceso electoral. 2) Los altos niveles de abstencionismo, que en 1987 alcanza el 59.96%, coincide con la elección de gobernador y a nivel federal con las primeras escisiones al interior del PRI, probablemente estos hechos propiciaron una escasa participación electoral y por otra parte el alto nivel de abstencionismo de 1990 que alcanza el 57.36%, posiblemente se explique por la desconfianza del electorado en los órganos encargados de las elecciones, toda vez que una parte importante de la población consideró que no se respetó la voluntad ciudadana en el proceso federal electoral de 1988. Elección de ayuntamientos en Tonatico (1996-2003) Año Lista Nominal Votación total Abstencio- nismo % de votación total 1996 5926 4242 1684 71.58 28.42 2000 6927 4648 2279 67.10 32.90 2003 7658 5149 2509 67.24 32.76 Durante los tres últimos procesos electorales celebrados para la renovación de ayuntamientos en Tonatico se registra un nivel de abstencionismo que comparado con la media estatal, resulta muy bajo, pues el promedio de abstencionismo del Estado de México en los tres procesos electorales de referencia es de 48.55%. Los argumentos que se tienen para explicar este hecho son 1) en este periodo el bajo nivel de abstencionismo coincide con el aumento de la competitividad electoral, con la diversificación de las opciones políticas (partidos y candidatos) y con la gradual profesionalización de los responsables de los comicios locales y 2) un aspecto que aquí se % de abstencionismo considera igual o más importante que los anteriores, es el papel de los migrantes transnacionales tanto de manera individual como organizados en Clubes de Oriundos –se registra la existencia del Club Social Tonatico de Waukegan y el Club Social Tonatico de Oceanside–, su trascendencia se hace patente por medio de las remesas económicas y las remesas sociales que poco a poco han ido transformando el escenario político local. Basta mencionar que es un secreto a voces que varios migrantes transnacionales han aportado dinero para la promoción y difusión de los candidatos a los diversos cargos del ayuntamiento. Adicionalmente, los migrantes transnacionales al enviar las remesas sociales han pro- 93 piciado cambios en los sistemas de prácticas, estructuras normativas y capital social que se reflejan en la modificación de la cultura política de los no migrantes y en la emergencia de una nueva ciudadanía. Así como en la consolidación de un sistema de alternancia. Elección de gobernador del Estado de México en el municipio de Tonatico (1999-2005) Año Lista Nominal Votación total Abstencio- nismo % de votación total 1999 6727 3530 3197 52.48 47.52 2005 8025 4522 3503 56.35 43.65 Aunque el análisis de los procesos electorales de gobernador no es objetivo de la investigación, se presenta sólo para fines comparativos este tipo de elecciones y como se puede observar en la tabla el nivel de abstencionismo que alcanza la elección de gobernador en Tonatico es más alto que los registros a nivel municipal. Contrario al lugar común, que sostiene que la gente participa más en los procesos federales y estatales, porque se cree que los cambios más importantes y trascendentes sólo pueden venir del contexto más amplio, es decir, a nivel de país o entidad federativa, este argumento parece no tener cabida en este espa- 94 % de abstencionismo cio local. Aquí se sostiene que una posible explicación tiene relación con el vital papel de la migración transnacional. Y esto es así, porque las remesas sociales modifican la cultura política en Tonatico, México. La gente que intenta elevar su nivel de escolaridad tiene acceso a información de medios electrónicos tales como televisión, radio e Internet. Además, se incrementa la importancia del individuo y empiezan a predominar valores posmaterialistas. Aunque están presentes sentimientos de cooperación y solidaridad, éstos se mezclan con fuertes dosis de pragmatismo. En suma, la cultura política de este municipio más que tener la esperanza fincada en un mejor futuro, está sostenida en un mejor presente (importan bastante el aquí y el ahora, donde el espacio más inmediato no es precisamente la entidad federativa, sino la comunidad o el barrio en el municipio de Tonatico, por ello es que votan y participan más a nivel local). Votación por partido político para la renovación de ayuntamientos en Tonatico, México (1981-1993) Votos Año V.T.* PRI 1981 3318 3080 1984 3538 1987 2079 1990 2472 1935 1993 4154 2005 PAN Porcentaje PRD Otros PP 0 PRI PAN PRD Otros PP 92.83 0.00 0.00 0.00 0 0 3002 0 471 0 84.85 0.00 13.31 0.00 1391 22 461 205 66.91 1.06 22.17 9.86 0 326 134 78.28 0.00 13.19 5.42 30 1706 191 48.27 0.72 41.07 4.60 * Votación Total. En esta tabla se observa cómo la votación más alta en números absolutos para el PRI se registró por última vez en 1981 (3080 votos), y posteriormente en cada proceso electoral fue disminuyendo, 1984 (3002 votos) alcanzando su nivel más bajo en el año de 1987 (apenas alcanzó 1391 sufragios). En los dos procesos electorales siguientes poco a poco fue recuperando votos, 1935 votos en el año de 1990 y 2005 votos en el año de 1993. Sin embargo, si analizamos los votos en números relativos observamos que la votación por el PRI fue disminuyendo en los procesos de 1984 (de 92.83% pasó a 84.85%), 1987 (de 84.85% disminuyó a 66.91%). En 1990 se observa una recuperación importante (de 66.91% incrementó a 78.28%), pero en el proceso electoral de 1993 registra un fuerte deceso ya que de 78.28% redujo su votación hasta 48.27%. En el tabulado también es posible observar la votación absoluta que registraron los partidos de izquierda, que fueron el antecedente inmediato del PRD. Se observa que el PSUM obtuvo 471 sufragios en el proceso electoral de 1984. El PMS (que se formó de la fusión de PSUM, PCM, PRT) obtuvo 461 votos en el año de 1987. Una vez constituido el PRD, en 1990 obtuvo apenas 326 votos. 95 Este hecho contrasta fuertemente con la votación que el PRD obtuvo en 1993, que quintuplicó su votación absoluta; respecto el proceso anterior, alcanzando una votación de 1706 sufragios. En números relativos se observa que el PSUM, uno de los partidos ante- cedentes del PRD, alcanza 13.31% de la votación en 1984. Posteriormente, el PMS logra obtener el 22.17% de la votación en 1987. En 1990 el PRD obtiene el 13.19%. Hasta alcanzar su nivel más alto de este periodo en 1993 cuando obtuvo 41.07% de la votación. Votación por partido político para la renovación de ayuntamientos en Tonatico, México (1996-2003) Votos Porcentaje Año V.T. PRI PAN PRD PRI PAN PRD 1996 4242 1974 69 2053 Otros PP 53 46.53 1.63 48.40 1.25 2000 4648 1903 310 1229 1077 40.94 6.67 26.44 23.17 2003 5149 2060 610 2284 25 40.01 11.85 44.36 0.49 Esta tabla de resultados electorales es muy interesante por las lecturas que ofrece. Primero en lo que respecta al PRI, si se considera que en 1993 había obtenido una votación de 2005 votos, se aprecia que en el proceso electoral de 1996 disminuyó su votación a 1974 votos (en este año pierde por primera vez las elecciones municipales) y en 2000 a pesar de la recuperación del ayuntamiento que estaba en manos del PRD, registró una votación de 1903 votos. En el proceso electoral de 2003 obtuvo 2060 sufragios que no le fueron su- 96 Otros PP ficientes para mantener la alcaldía y volver a perder nuevamente ante el candidato del PRD que curiosamente era el mismo que triunfó en 1996 y que se había aproximado peligrosamente al triunfo desde el proceso electoral de 1993. La tabla nos permite observar que la votación por el PRD ha sido bastante irregular, si se considera que en 1993 obtuvo 1706 votos, que representaron el 41.07% de la votación de ese proceso, que significó la votación más alta registrada por un partido de oposición al PRI en el municipio. En 1996 por primera vez el PRD obtiene el triunfo en las elecciones municipales para la renovación del ayuntamiento, aunque es importante señalar que obtuvo 48.40% de los sufragios contra 46.53% de votos para el PRI, es decir, el margen de victoria fue de apenas 1.87%. En el proceso electoral de 2000 el PRD disminuye su votación a 1229 votos, que significaron apenas el 26.44% de la votación total. Mientras que el PRI obtuvo 40.94% y los otros partidos políticos 23.17%. Es importante destacar que el margen de victoria del PRI sobre el PRD fue de 14.5%. Sin embargo, los partidos de oposición juntos alcanzaron una votación de 56.18%. En el proceso electoral de 2003 el PRD nuevamente gana la presidencia municipal con 2284 votos que representaban el 44.36% de la votación, contra el 40.01% de votos por el PRI, el margen de victoria del PRD sobre el PRI en esta ocasión fue de 4.35%. Desde el inicio de la década de los noventa la disputa electoral en el municipio de Tonatico se centró en dos partidos políticos: PRI y PRD. Sin embargo, en el año 2000 se presenta una situación atípica. Resulta que en ese proceso electoral, partidos como el PAN, el PVEM y Convergencia postularon candidatos populares que contribuyeron a la dispersión de la votación y a la recuperación del ayuntamiento por el PRI. Votación por partido político para la elección de gobernador en el municipio de Tonatico, México (1999-2005) Votos Porcentaje Año V.T. PRI PAN PRD Otros PP PRI PAN PRD Otros PP 1999 3530 2079 534 836 0 58.90 15.13 23.68 0.00 2005 4522 2893 655 887 0 63.98 14.48 19.62 0.00 97 En el municipio de Tonatico en la elección de gobernador del Estado los porcentajes que el PRI ha obtenido han sido más altos que en la elección de ayuntamientos. En el proceso de 1999 obtuvo 58.90% de los votos contra 15.13% del PAN y 23.68% del PRD. Mientras que en 2005 obtuvo 63.98% contra 14.48% del PAN y 19.62% del PRD. El PRI en el proceso electoral para gobernador del Estado de México alcanzó la cifra de 2893 sufragios, esta cifra es la más alta desde 1984 que alcanzó una votación de 3002. Esta situación se puede atribuir al candidato más que al partido. Este tipo de datos sugieren que la alternancia política del municipio o de forma más simple los cambios en el comportamiento electoral están siendo influidos por factores de coyuntura local y que tienen que ver con 1) la migración transnacional, por la atención de que han sido objeto por parte del gobierno estatal de Arturo Montiel Rojas y también del gobierno municipal de Arturo Hernández Tapia y 2) por el papel que han desempeñado los candidatos en cada proceso 98 electoral (la alternancia política en México parece que se ha centrado en la personalidad del candidato, en municipio de Tonatico no ha estado ajeno a este hecho, el Dr. Arturo Hernández Tapia ha sido tres veces candidato a presidente municipal y desde su primera postulación estuvo cerca del triunfo electoral, las dos veces posteriores ha triunfado). Una aproximación al abstencionismo en Tonatico, México (1995-2005) Un objetivo de la investigación es comparar los resultados de la presente investigación con la hipótesis del IFE que señala que “mientras las autoridades electorales han alcanzado un mayor nivel de profesionalización, la ciudadanía se ha vuelto más apática y por lo tanto se han elevado los niveles de abstencionismo”. La correlación es la siguiente: a mayor profesionalización de las autoridades electorales mayor abstencionismo. En el caso de Tonatico no aplica ya que el abstencionismo en este espacio territorial es más bajo que la media nacional y estatal. Tal como lo muestran los siguientes datos: Promedio de abstencionismo a nivel nacional Periodo Porcentaje de abstencionismo 1973-1979 43.67% 1990-1997 42.20% El abstencionismo a nivel estatal Año 1996 Lista Nominal Votación Total Participación Abstencionismo 6,161,196 2,853,737 46.32 53.68 2000 7,547,729 2003 8,147,617 4,941,522 65.47 34.53 3,468,254 42.57 57.43 El abstencionismo a nivel municipal Año Lista Nominal Votación Total Participación Abstencionismo 1996 5,925 4,242 71.59 28.41 2000 6,977 4,648 66.62 33.38 2003 7,658 5,149 67.24 32.76 ¿Cómo explicar el bajo nivel abstencionismo en Tonatico? Explicar el abstencionismo a cualquier nivel es un problema muy complejo, basta con tomar algunos datos del Voter Turnout from 1945 to 1997 para darnos una idea. 99 Norteamérica y el Caribe País Europa del Este y Ex URSS % País Asia y Oceanía % 7.6 Indonesia 12.4 15.6 Australia 17.3 52.4 Pakistán 47.8 Singapur 60.6 Trinidad y Tobago 35.4 Albania Canadá 36.1 República Checa Polonia Bosnia y Herzegovina 53.9 Estados Unidos 55.9 Haití 59.4 Promedio (6 países) 49.41 Promedio (21 países) Europa Occidental País 33.06 % País 33.10 % 14.8 Uruguay Bélgica 15.9 Chile 18.1 Luxemburgo 39.5 Colombia 68.4 Suiza 62.3 Guatemala 70.4 27.13 Promedio (17 países) 38.16 Con los datos anteriores ¿podríamos afirmar tajantemente que Estados Unidos y Suiza son menos democráticos que Trinidad y Tobago y Albania basándonos exclusivamente en sus porcentajes de abstencionismo? ¿Cómo explicar los altos niveles de abstencionismo que registran Nor- 100 Promedio (15 países) % América Latina Italia Promedio (18 países) País 8.6 teamérica y el Caribe? ¿Cómo explicar la gran participación electoral en Albania, Indonesia, Uruguay, República Checa, Bélgica, Australia y Chile? ¿Qué sucede si tomamos el grupo de los 7 (es decir, a los países más ricos y poderosos del orbe)? País Porcentaje de abstencionismo Reino Unido 24.6 Francia 38.7 Alemania 27.3 Italia 14.8 Japón 43.4 Estados Unidos 55.9 Canadá 36.1 Promedio de los 7 países 34.4 En el tabulado anterior, encontramos tendencias pero no nos dicen mucho, quizás la única forma de explicar la participación o el abstencionismo se encuentra de una manera más real cuando se analiza el espacio concreto. Esto es así porque no estamos frente a comportamientos generalizados, sino por el contrario se trata de fenómenos políticos que encuentran expresiones distintas, según los factores que intervienen. Se reconoce que el abstencionismo puede ser un factor altamente negativo para el desarrollo democrático, se apunta que las razones que motivan su aparición y crecimiento difieren en cada país, y que no se trata de dimensiones cuantitativas fijas que muestran por sí mismas la debilidad de un sistema, pues su peso real varía en consideración a su historia, la cultura política y las coyunturas específicas que vive cada país. Enseguida retomo el caso de otras realidades nacionales, para establecer un punto mínimo de comparación y tratar de inferir si hay un comportamiento generalizado. Por ejemplo, el alto nivel de participación en Chile probablemente se debe a la apertura de su sistema político, y a que los chilenos no quieren volver a padecer un régimen militar y autoritario. Quizás el alto nivel de participación en Italia se explica por una crisis de los partidos italianos en la década de los noventa y por una fuerte presencia mediática de Berlusconi, quien es dueño de los medios de comunicación más importantes de Italia (quien llegó a ser primer ministro “de la nada”). Tal vez el alto nivel de abstencionismo en los Estados Unidos y Suiza 101 tiene que ver con su tradición institucional. A nivel mundial la explicación del abstencionismo también tiene que ver con el cambio de valores materiales a posmateriales. Otro ejemplo es la situación que se registra en la mayoría de los países de América Latina. En ese contexto, el abstencionismo muchas ocasiones se explica porque los ciudadanos se han dado cuenta que un sistema democrático no resuelve sus problemas más apremiantes, hay un cuestionamiento severo al Estado y sus instituciones. La democracia generó en Latinoamérica muchas expectativas que al final convirtió en grandes decepciones. Como ejemplo adicional presentamos el caso mexicano, entre muchos otros factores que ayudan a explicar el abstencionismo tenemos 1) los rasgos propios del sistema electoral, por ejemplo, las bases de datos no son muy confiables y eso contribuye de alguna manera a incrementar el abstencionismo. 2) Se presentan casos de saturación y sobreexposición de partidos políticos y candidatos, por ejemplo, en el Estado de México en marzo de 2003 se realizó la elección de ayuntamientos y diputados locales, en el 2004 se inició el proceso de elección interna de los partidos políticos para postular candidatos a Gobernador del Estado 102 de México, sin embargo, la elección constitucional fue el 3 julio de 2005, enseguida se desatan nuevamente las precampañas por 125 ayuntamientos y 75 diputaciones locales, el 12 de marzo serán las elecciones constitucionales, solamente 4 meses más tarde se elegirán en todo el país al Presidente de la República, 128 senadores y 500 diputados federales. Creando ante la ciudadanía un clima de hartazgo que se traduce en baja participación electoral. Los ejemplos mencionados ilustran una parte importante de la herencia institucional a través del abstencionismo, es decir, tienen mucho que explicar el tipo de sistemas de partidos, los sistemas electorales que en esos países existen, el tipo de régimen que predomina, sea éste presidencialista, parlamentario, semiparlamentario o totalitario. En los países donde se ha consolidado la democracia, la ciudadanía participe o no participe, no existe la amenaza de un retorno a sistemas autoritarios. Por otra parte, un caso de excepción son los regímenes totalitarios donde la amplia participación no es reflejo de consolidación democrática. Un grado determinado de abstencionismo, e incluso ciertos incrementos en la participación electoral, pueden resultar irrelevantes en unos casos, y ser especialmente graves y significativos en otros, atendiendo a la tradición institucional y al valor cultural del voto. Ciertamente fenómenos sociales irrelevantes para el comportamiento político en una sociedad, pueden ser determinantes en otras, y así sucesivamente. La respuesta no es unívoca. poran patrones y experiencias de fuentes disímiles. En el caso concreto de Tonatico el bajo nivel de abstencionismo comparado con la media nacional y estatal, se explica porque en el ámbito local han desempeñado un papel importante en este hecho, una situación histórica y una situación de coyuntura. El CST tiene una participación ligth en la comunidad pues aparentemente sólo interviene en festividades cívicas y religiosas. Lo cierto es que también participa en decisiones que son fundamentales para la vida local. Por ejemplo, el CST es un interlocutor importante entre el gobierno y la ciudadanía. Existen rumores de que “un pollero” económicamente fuerte trata de influir en la selección de los candidatos a la alcaldía y que los partidos lo han llegado a consultar. Por otra parte, se registra un importante cabildeo entre los miembros del CST y el alcalde de Tonatico (desde 1998 los alcaldes han realizado visitas oficiales a Waukegan, Illinois, ininterrumpidamente). En la primera, se incluye una fuerte tradición migratoria y un crecimiento gradual de los partidos de izquierda, que han posibilitado una mayor participación electoral y un cambio en la cultura política. En la segunda, intervienen factores como la personalidad y las expectativas que logran generar los candidatos, que permean y modifican en cada elección, el comportamiento electoral. En el caso de Tonatico, los migrantes transnacionales son personas que regresan a Tonatico, México a socializar prácticas y valores. Por tal motivo los no migrantes incor- En este contexto, el Club Social Tonatico (CST) es parte de ese aprendizaje, ya que los migrantes en Waukegan interiorizan nuevos valores y conocimientos y cuando regresan a México, poco a poco los hacen explícitos en la práctica. El CST actúa como transmisor de nuevas enseñanzas, por ejemplo, los migrantes transnacionales se han dado cuenta que ante entornos de fuerte presión, de manera individual se vuelven sumamente vul- 103 nerables, por esa sencilla razón se organizan y encuentran fortaleza en el grupo. En México esta experiencia se traduce en una recuperación de la organización que aquí se pone al servicio de todos. El CST es el más organizado del Estado de México, porque sus actividades se realizan continuamente desde hace más de 10 años. Como ellos mismos lo reconocen “nosotros podemos abrir la boca y cuestionar al estilo gringo”. El bajo nivel de abstencionismo de Tonatico se explica así en gran medida porque el CST es un referente de organiza- ción, de poder económico y político. Los bajos niveles de abstención también se explican porque predominan las relaciones horizontales sobre las verticales. Estos procesos, entonces, recrean una ciudadanía extraterritorial. Es así como la misma comunidad transnacional genera un sistema de alternancia electoral. La renovación de ayuntamientos en México, durante varias décadas, presentó una situación muy parecida a la que muestra el siguiente gráfico, que corresponde a la elección del ayuntamiento de Tonatico, 1981. Elección del H. Ayuntamiento de Tonatico, 1981 3,000 2,500 2,000 1,500 1,000 500 PRI 104 PAN PSUM, PMS, PRD Otros En este gráfico se puede apreciar la hegemonía del PRI en las elecciones municipales, la imagen da cuenta de la nula votación por otros partidos políticos a pesar de su existencia. La competencia electoral emerge poco a poco en México a lo largo de la década de los ochenta, dicha etapa se caracteriza por profundas y recurrentes crisis económicas y por la apertura gradual del sistema político mexicano. La competitividad electoral es un hecho a lo largo y ancho del país desde 1990. En Tonatico, México, por ejemplo en la elección de ayuntamiento de 1993 el PRD se aproximó al triunfo electoral, tal como se observa en el siguiente gráfico. Elección del H. Ayuntamiento de Tonatico, 1993 3,000 2,500 2,000 1,500 1,000 500 PRI PAN Desde el año de 1993, la competencia electoral en el municipio de Tonatico ha sido una constante, que con el tiempo ha llegado a consolidar un sistema de alternancia política. PSUM, PMS, PRD Otros Durante los últimos años del siglo pasado y los primeros de éste, la competitividad electoral se concentró en tres fuerzas políticas que hasta la fecha disputan las preferencias 105 del electorado, llegando a la consolidación de un sistema tripartidista a nivel nacional, aunque en algunas ocasiones a nivel estatal y municipal se centre sólo en dos fuerzas políticas: PRI-PAN, PRI-PRD (como es el caso de Tonatico), destaca el hecho que la referencia invariablemente y hasta la fecha es el PRI. En 1996 por primera vez en la historia política del municipio de Tonatico arriba al gobierno municipal un alcalde de extracción perredista. El candidato es un médico de profesión que ya había sido candidato por el PRD en 1993. Obsérvese en el gráfico que el margen de victoria es muy reducido. Elección del H. Ayuntamiento de Tonatico, 1996 3,000 2,500 2,000 1,500 1,000 500 PRI PAN En la actualidad podemos afirmar que la competitividad electoral ha sido uno de los factores más importantes que han facilitado la alternancia en los tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal. En el municipio de Tonatico en la elección de 2000 se registra una 106 PSUM, PMS, PRD Otros vuelta del electorado al PRI, a pesar de que la gente comentaba que el gobierno perredista había hecho un buen trabajo en la administración pública municipal. ¿Entonces qué factor explica este comportamiento electoral? 1) El descontento por la selección interna en el PRD y el hecho de que partidos como Convergencia, Acción Nacional y Verde Ecologista registraron candidatos con arraigo popular y 2) la existencia de una ciudadanía más plural y politizada que mantiene fuertes vínculos con los migrantes transnacionales Elección del H. Ayuntamiento de Tonatico, 2000 3,000 2,500 2,000 1,500 1,000 500 PRI PAN En lo que respecta al PRD podemos señalar que su permanencia en la preferencia de los electores del país y en el municipio de Tonatico ha sido irregular. De tal manera que los resultados obtenidos marcan el derrotero perredista de una trayectoria cuyos avances y retrocesos han sido innegables. PSUM, PMS, PRD Otros La elección del 9 de marzo de 2003 nuevamente permitiría al PRD obtener el triunfo en esta demarcación. Este hecho demuestra que la lealtad o voto duro han perdido vigencia en el municipio de Tonatico. Los partidos políticos en el municipio de hecho son conscientes que una elección no se gana con el voto duro, el triunfo está más vinculado a la popularidad y reconocimiento de los candidatos. 107 Elección del H. Ayuntamiento de Tonatico, 2003 3,000 2,500 2,000 1,500 1,000 500 PRI PAN Esta gráfica permite observar que en el municipio de Tonatico el Partido Acción Nacional viene incrementando su votación de manera lenta pero visible, lo cual nos permite plantear que en un futuro no muy lejano la disputa electoral en el ámbito local podría ser como a ni- 108 PSUM, PMS, PRD Otros vel nacional entre las tres mayores fuerzas políticas. La estadística que presentamos a continuación tiene la finalidad de mostrar si algún partido político ha logrado penetrar realmente entre la ciudadanía o el voto se mantiene volátil. 109 111 1974 14 7 2 6 8 3 5 12 69 5444 5445 5446 5447 5448 5449 5450 5451 2053 80 190 196 80 273 267 298 307 362 PRD Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. 258 156 153 190 232 344 261 269 12 5443 PRI PAN Sección 11 0 2 2 1 1 3 1 0 1 PT 18 2 2 1 0 2 3 1 4 3 PC 17 0 4 0 1 2 2 1 1 6 PV 2 0 0 0 0 1 1 0 0 0 PPS 1 1 0 0 0 0 0 0 0 0 PDM 1 0 0 0 0 0 1 0 0 0 PPM 9 0 3 3 0 0 2 0 1 0 Otros 87 6 1 18 3 18 18 0 12 11 Nulos 4242 212 465 379 246 493 531 652 600 664 Total Resultados 1996-2000 (seccionales ganados por partido político) 4155 206 464 361 243 475 513 652 588 653 Válidos Derivado de este análisis podemos afirmar que en la elección de 1996 el PRD obtuvo la victoria en 5 de los 9 seccionales que integran el municipio y el PRI en 4 de ellos. Cabe mencionar que la distancia entre el partido ganador de la sección electoral en la mayoría de los casos fue considerable, situación que habla de una fuerte identificación con el candidato de aquella elección, pero que no permite plantear la consolidación del voto duro de manera definitiva. El siguiente mapa ilustra en qué seccionales se concentra la votación por partido político. Es importante señalar que algunos seccionales en el mapa son extensos lo cual no significa que necesariamente concentren un gran número de electores. Por ejemplo nótese que los 4 seccionales de la cabecera aparecen muy pequeños y que en 3 de ellos el triunfo fue para el PRD y sólo 1 fue ganado por el PRI. Por lo que la elección de 1996 se definió en la cabecera del municipio. Geografía Electoral de Tonatico (1996-2000) Secciones ganadas 5443 5444 5445 5446 5447 5448 5449 5450 5451 Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. El siguiente cuadro con la estadística electoral nos muestra qué seccionales se mantuvieron leales a los partidos políticos. Destaca el 110 hecho de que sólo 2 seccionales de la cabecera municipal mantuvieron sus preferencias por el partido del sol azteca. 111 39 60 47 38 33 40 15 24 14 310 5443 5444 5445 5446 5447 5448 5449 5450 5451 PRI 1903 88 292 170 155 239 228 301 205 225 1229 42 133 89 51 138 135 190 208 243 PRD Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. PAN Sección 14 1 0 1 0 2 4 1 3 2 PT 829 25 74 107 20 91 106 125 122 159 CD 214 14 7 5 4 31 31 48 49 25 PV 8 1 2 0 0 0 1 1 3 0 PCD 6 0 1 1 0 0 2 2 0 0 PSN 1 0 0 1 0 0 0 0 0 1 PAS 9 0 3 3 0 0 2 0 1 0 Otros 87 6 1 18 3 18 18 0 12 11 Nulos Resultados 2000-2003 (seccionales ganados por partido político) 4242 212 465 379 246 493 531 652 600 664 Total 4155 206 464 361 243 475 513 652 588 653 Válidos Este tabulado refleja una situación que nos permite afirmar que ningún partido político en Tonatico gana una elección municipal con el denominado voto duro. Si se considera la elección precedente, se tiene que el voto duro del PRI en 2000 se concentraba en la cabecera municipal en los seccionales 5443 y 5444. Geografía Electoral de Tonatico (2000-2003) Secciones ganadas 5443 5444 5445 5446 5447 5448 5449 5450 5451 Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. La figura nos sirve para mostrar cómo en ocasiones los partidos políticos tergiversan los resultados con gráficos y mapas, a simple vista parece que la presencia electoral del PRD en este proceso electoral fue mínima, lo cual no es totalmente cierto si consideramos la cantidad de votos obtenidos en las otras secciones electorales. 112 Si se considera la elección anterior, el voto duro del PRI se concentra en 3 seccionales, de los cuales 2 pertenecen a la cabecera del municipio. Pero si se agrega la penúltima elección se tiene que el voto duro del PRI históricamente se ha ubicado en las secciones electorales 5445, 5448 y 5451. Resultados 2003-2006 (seccionales ganados por partido político) Sección PAN PRI PRD PT PSN Otros Nulos Total Válidos 5443 88 265 404 2 1 2 34 796 762 5444 109 266 358 4 1 0 18 756 738 5445 99 323 321 1 0 0 20 764 744 5446 106 233 237 2 0 0 35 613 578 5447 56 265 277 2 0 0 13 613 600 5448 28 175 128 1 0 0 9 341 332 5449 32 192 213 2 0 0 8 447 439 5450 75 243 259 5 0 0 19 601 582 5451 17 98 87 3 1 0 12 218 206 610 2060 2284 22 3 2 168 5149 4981 Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. El siguiente mapa destaca los seccionales que fueron ganados por partido político en la elección de 2003. Este mapa nos muestra dónde se ha concentrado históricamente el voto duro del PRI. Geografía Electoral de Tonatico (2003-2006) Secciones ganadas 5443 5444 5445 5446 5447 5448 5449 5450 5451 Fuente: Elaboración propia con datos del IEEM. 113 Con base en los gráficos, cuadros y mapas que hemos presentado podemos observar cuáles secciones se Sección pueden catalogar como el voto duro del PRI y del PRD y es como se detalla a continuación: 1996-2000 2000-2003 2003-2006 5443 PRD PRD PRD 5444 PRD PRD PRD 5445 PRI PRI PRI 5446 PRD PRI PRD 5447 PRD PRI PRD 5448 PRI PRI PRI 5449 PRD PRI PRD 5450 PRI PRI PRD 5451 PRI PRI PRI De tal suerte que el PRD ha concentrado su voto duro en la última década en los seccionales 5443 y 5444 que corresponden a la cabecera municipal. En tanto que el PRI ha concentrado la lealtad de sus seguidores en los seccionales 5445, 5448 y 5451, uno corresponde a la cabecera y otros 2 a la zona rural del municipio que presenta los menores niveles en la calidad de vida de sus habitantes. Destaca el hecho de que los seccionales que han seguido la misma dinámica de alternancia electoral son el 5446, 5447 y el 5449. Mientras que el seccional 5450 ha sido ganado dos veces consecutivas por el PRI y una por el PRD. 114 3.3. Los cambios más significativos en la cultura política en los últimos 10 años en Tonatico A continuación presentaremos algunos de los cambios más importantes que se registran en la cultura política, es decir, la transformación del conjunto de símbolos y signos, que transmiten conocimientos e información, portan valores, suscitan sentimientos y emociones, y expresan ilusiones y utopías. La cultura política se ha transformado según dan cuenta las entrevistas realizadas en campo durante el año 2005. Entre los aspectos que llaman la atención y a decir de la propia gente se registran modificaciones en los modos de hacer política, en la participación ciudadana, la democratización de los procesos de selección de candidatos de los partidos políticos, la incorporación de la opinión de la gente en la toma de decisiones, los asuntos políticos como parte fundamental de las conversaciones con los migrantes transnacionales. En este mismo apartado se incluyen características importantes en torno al papel del Club Social Tonatico, sus relaciones con el gobierno local y estatal, así como con la población en general, sus actividades y su organización. También se aborda brevemente el nivel de confianza que la gente tiene en los partidos políticos, la imagen del gobierno estatal y municipal y el papel de las remesas económicas en el ámbito político, por mencionar algunos aspectos. Los modos de hacer política han cambiado y la ciudadanía se transforma La mayoría de la gente comparte una idea: “La participación de la gente en los procesos electorales municipales es el aspecto más importante”, así lo afirma Victorino Barrios. Otros como Juan de la Cruz sostienen que un cambio importante tiene que ver con el hecho de que “desde el primer gobierno perredista la rendición de cuentas cobró forma, a través de los informes mensuales que se publicaban en la gaceta municipal. Mes a mes el presidente, el síndico, los regidores, los directores de área y en general los servidores públicos comunicaban todas y cada de las actividades, programas, reuniones de trabajo y obras públicas que se habían realizado durante el periodo que se informaba”. Algunos como José Luis Ávila sostienen que actualmente se observa “una mayor responsabilidad de los servidores públicos y en general de todos los funcionarios y esto es así por la competencia entre los partidos”, una idea similar la manifiesta Rosa María Villegas, quien dice que “la competencia de los partidos políticos genera más participación ciudadana, la gente está más interesada en la problemática que la aqueja y en la búsqueda de sus soluciones”. Por su parte Roberto Hernández señala que el cambio más significativo “es la pluralidad política en el municipio, la mayor parte de los ciudadanos valora el hecho de participar y manifestar sus preferencias políticas”. Para la mayoría de las personas entrevistadas es un hecho que realmente han cambiado los <modos o estilos de hacer política>, y son más visibles estas nuevas formas en el PRD, ya que según Victorino “el PRD 115 en el municipio de Tonatico es un partido que no se basa en el asistencialismo y en el paternalismo, más bien se fundamenta en la capacitación que se otorga a los militantes y simpatizantes del partido”. Para Juan <la forma de hacer política> se ha ido haciendo más compleja, él sostiene que “la gente del municipio históricamente ha sido participativa, siempre han existido segmentos de la población que públicamente han manifestado sus inconformidades. Pero al mismo tiempo estas inconformidades con los modos y formas de hacer política orillaba a la gente también a no participar porque veía que no la tomaban en cuenta”. Juan ofrece más argumentos en este sentido y agrega que “desde la década de los ochenta con los partidos de izquierda, la gente poco a poco se fue concientizando por familiares y amigos. Poco a poco la gente se fue haciendo más exigente con sus autoridades, hasta que de la exigencia se hizo un hábito. Con la aparición del PSUM a nivel municipal la gente perdió el temor y hasta la gente que militaba en el PRI se volvió más contestataria... cuando llegó al gobierno por primera vez el PRD, la ciudadanía estuvo siempre a la expectativa, exigió resultados, reclamaba abiertamente y si tenía argumentos reprochaban a la autori- 116 dad, antes en los gobiernos priístas sólo unos pocos se animaban a increpar a las autoridades”. En un sentido análogo José Luis nos dice que “un aspecto que valora mucho la gente es que los integrantes del ayuntamiento de Tonatico, dieron a conocer sus salarios y el de los demás funcionarios públicos. La gente sabe que la presidenta del DIF Municipal no percibe salario alguno. También el pueblo sabe y está atento a que los vehículos del ayuntamiento sólo se utilicen para uso oficial y no para cuestiones particulares de los servidores públicos. La gente está contenta porque de manera periódica y regular se dan a conocer los avances de las obras y programas, se da a conocer la relación de ingresos-egresos”. Rosa María dice que “el partido más democrático es el PRD, porque en el PRD los militantes deciden, en el PRI deciden unos cuantos, no respetan la decisión de todos”. Roberto señala que “los modos de hacer política han cambiado porque la competencia obliga a todos a buscar nuevas estrategias y mayor cercanía con la gente”. La gente ha cambiado radicalmente su comportamiento frente a la política y los políticos. Por ejemplo, Victorino comenta que “la gente hoy en día, lo mismo milita en el PRI que en el PRD o en ningún partido, pero siempre participa”. Juan expresa que “en 1984 hubo un movimiento del que mucha gente todavía se acuerda, la gente se molestó porque el ayuntamiento quería concesionar el Balneario. La gente del mismo PRI quiso tomar la presidencia que encabezaba Enrique Fuentes. Era un grupo pequeño del pueblo. El rumor que sirvió para encontrar adeptos al movimiento, era que se iba a vender el balneario”. Juan indica que “la gente poco a poco aprendió a manifestar sus opiniones con cartas y de manera verbal, organizó y participó en pequeñas movilizaciones para presionar y exigir resultados a las autoridades”. Rosa María en entrevista expone que “la gente hace llegar al ayuntamiento las obras prioritarias para que se realicen en el periodo de gobierno de la administración en turno”. Roberto señala que “la gente participa porque sabe y tiene la certeza de que emite su voto y que se respeta, por ello si pierde el partido de su preferencia acepta la derrota, debido a que la gente aprende a ganar y también a perder, ya no existe la violencia después de un proceso electoral”. Visiones más pesimistas son idénticas a las de José Luis, quien explica que “la gente es madura y exige más, pero a la vez también se pueden observar que a veces realizan peticiones que no están dentro de las funciones del ayuntamiento, la gente no ha desterrado totalmente de su mente la idea de asistencialismo, a veces la gente se junta para ir al ayuntamiento a solicitar apoyo con materiales para beneficio personal, se olvidan que el ayuntamiento está para dar respuestas de beneficio colectivo”. En lo que se refiere a la selección de candidatos la gente considera que actualmente es más democrática, por ejemplo, Victorino apunta que “en el PRD el proceso de selección interna es tradicionalmente democrático, existe la posibilidad que por cada sección electoral se designe a un candidato a regidor en asambleas del pueblo, por ello como caso inédito en esta región del Estado de México, el PRD siempre ha presentado planillas de unidad que el pueblo ya ha legitimado previamente”. Juan comenta que “yo sé que las planillas del PRD casi siempre han sido de unidad, solo en el 2000 se realizó una consulta interna. Aunque la tentación del dedazo no está desterrada totalmente y los jaloneos entre los grupos está a la orden del día.” 117 José Luis dice que “en el PRI el candidato se designa desde Toluca, sin escuchar a las bases”. Rosa María y Roberto coinciden al expresar que “en la izquierda se respeta la normatividad, a veces se buscan planillas de unidad, pero si no se logra el acuerdo se va a elección interna y se acatan los resultados”. La opinión de la gente se incorpora en la toma de decisiones Victorino explica que “el gobierno perredista reparte los recursos por igual y atiende a la gente sin distingos, muchas veces los propios perredistas se enojan y se inconforman porque creen que los beneficios sólo deben ser exclusivamente para los perredistas”. Para Juan “los gobiernos priístas siempre han sido autoritarios y poco transparentes en el municipio. Por ejemplo, la administración del 94-96 fue un caos, tuvimos dos presidentes municipales, uno constitucional y otro interino. La administración municipal 2000-20003 aunque registra fuerte inversión pública estatal, el gasto y la inversión nunca consideraron la opinión de la población. En los gobiernos priístas los planes de desarrollo siempre se presentaron por puro requisito, por- 118 que los planes de desarrollo no se respetaban. No había asambleas, ni reuniones, la gente no tenía derecho a proponer obras”. Juan, José Luis y Rosa María comparten la idea de que el PRD sí toma en cuenta la opinión de la gente ya que desde las campañas el PRD recoge las demandas más sentidas, pero una vez que ganan la elección, regresan a las localidades para asegurarse que efectivamente su demanda prioritaria era esa y no otra, para que se incluyera en el plan de desarrollo municipal. Hoy la mayoría de la población siente y piensa que es una obligación del gobierno venir a las comunidades a dialogar y consensar. Hay que darle oportunidad a que el pueblo se equivoque y aprenda, se trata de una responsabilidad compartida. Antes el presidente mandaba y punto. Hoy ya le faltan el respeto en el buen sentido. Roberto dice que “la ciudadanía ejerce su derecho a participar en la toma de decisiones en todas las asambleas comunitarias. Además cuando se implementan otro tipo de obras o programas, éstos se dan a conocer en la Televisora y en la radio locales y este tipo de programas son con teléfono abierto y la gente llama y da a conocer sus puntos de vista, es decir, sigue participando en la ejecución con opiniones, con trabajo o con cooperaciones”. ¿Por qué migra la gente? Para algunos, como Victorino, “la migración ya no es tan sólo una cuestión económica, es también una cuestión cultural. La gente podría o puede vivir mejor aquí, pero tiene ganas de ir a Estados Unidos a conocer y punto”. Para otros como señala Juan “es fundamental que exista primero la necesidad económica, social o cultural, que no tenga ningún tipo de oportunidad económica o responsabilidad social que lo ate al pueblo y después lo importante es tener contactos”. Juan dice “yo por ejemplo soy profesionista y hace años traté de convencer a un primo más o menos de mi edad de que estudiara conmigo en Toluca, él por su parte quería que me fuera con él a Estados Unidos. Total él se fue y yo me quedé aquí. En 1986 les tocó la amnistía y adquirió al igual que muchos la ciudadanía. Con el tiempo a los familiares que se quedaron aquí les arreglaron sus papeles por diversos programas que implantó el gobierno norteamericano, los beneficios alcanzaron a esposas, padres, hijos y ahora mu- chos de ellos son residentes legales y por ello tienen la oportunidad de trabajar, ahora muchos de ellos ya no sufren todo el proceso que enfrentaban antes los indocumentados, ahora son beneficiarios de algo que poco o nada les costó y por eso a veces ven las cosas muy fáciles”. José Luis dice que la migración se da más porque “todavía existe la idea generalizada de que es más fácil hacer dinero y siempre tienen la esperanza de poder regresar e invertir aquí”. Para algunas personas como Rosa María la migración es un fenómeno que se da por inercia pues afirma que “la migración es un fenómeno muy arraigado en el municipio”. Roberto concluye que “la migración es un fenómeno muy complejo que abarca aspectos económicos y culturales”. Los asuntos políticos son parte de sus conversaciones La conversación que se establece entre “los de aquí y los de allá” se basa fundamentalmente en asuntos personales y familiares, pero lo interesante es que algunas veces se tocan temas relacionados con aspectos políticos, tal es el caso de Victorino quien señala “a mi familia 119 le pido que platique con los paisanos de allá, para que a su vez ellos platiquen con sus familiares de acá y los convenzan para que apoyen a los candidatos de aquí”. Otros como Juan dicen que “hablamos más de la familia que de política pero a veces sí están interesados y platicamos temas muy generales de la situación en el país”. José Luis también está en esa línea al afirmar “platicamos de la política en general, pero más de la familia”, al igual Rosa María dice “de política hablamos poco, en realidad hablamos más de asuntos familiares”. Roberto dice “la gente de allá se interesa mucho por la política del país, del estado y municipio, cuando platicamos, claro que la política también es un tema de importancia e interés para ellos”. El Club Social Tonatico (CST): relaciones y actividades Victorino afirma que “me han invitado varias veces para que los visite, pero no voy porque los Estados Unidos no me gustan. De hecho el actual vicepresidente del club trabajó aquí conmigo en la elaboración del pan, hace algunos años”. Juan asevera que “conozco y he convivido con varios dirigentes, con algu- 120 nos de los integrantes del club estudié en la primaria o secundaria”. Juan atestigua que “el CST siempre ha tenido relación con las autoridades del municipio, por ejemplo, el presidente Arturo Hernández Tapia (AHT) desde el inicio de su gobierno quiso establecer una relación más estrecha y cercana, con los integrantes del club... desde antes de que el presidente AHT viajara a Estados Unidos, en el municipio ya se tenía registro de la visita de otro presidente que era priísta, esa primera visita fue informal, el presidente visitó a un amigo y éste meneó a la gente para que lo recibieran... ahora las visitas son de carácter oficial... la relación es muy estrecha entre el CST y el Ayuntamiento para organizar eventos de carácter cívico-social que ya son tradicionales como el desfile en el mes de septiembre, la feria en el mes de febrero”. José Luis dice que la relación entre los de Tonatico y el CST “es más bien una relación institucional, de colaboración... el CST es el enlace entre las autoridades de aquí y los residentes de allá”. Rosa María por su parte sostiene “conozco a varios integrantes porque también son amigos y conocidos y con ellos me llevo muy bien”. Ro- berto dice “existe una comunicación muy respetuosa”. Victorino, José Luis y Rosa María expresan que la mayoría de las actividades del CST tienen que ver con eventos cívicos y festividades religiosas principalmente”. Juan y Roberto agregan que el CST se organiza “para celebraciones de carácter social, cultural y deportivo”. La organización del Club Social Tonatico La mayoría de los entrevistados considera que la organización del CST es buena pero que podría ser mejor. Por ejemplo, Victorino cree que “no tienen una buena organización, porque tienen una demanda añeja (la construcción de un centro de reunión social en Waukegan) que los ha llevado a pedir apoyo al gobierno estatal, éste les ha prometido recursos pero nunca se los han dado, lo curioso es que piden dinero, cuando ellos mandan fuertes cantidades para los de acá”. Juan sostiene que “la organización no es grande porque a los dirigentes del CST, les faltan más estudios para que su organización sea más fuerte. Faltan personas que se dediquen de tiempo completo a la atención de las demandas de los migrantes de Tonatico establecidos en Waukegan. Falta que haya gente que se dedique a la dirección, los dirigentes se dedican a trabajar y por eso no atienden adecuadamente”. José Luis dice que “en el CST han tratado de organizarse para otras cosas que no sean las fiestas, como por ejemplo apoyar obras y nomás en el intento han quedado... del puente que está a la entrada se dice que se construyó con las aportaciones de los migrantes, lo cierto es que el ayuntamiento puso casi 2/3 de la obra y el GEM 1/3, los migrantes aportaron muy poco”. En tanto para Roberto está claro que “más que tener buena organización, lo que observo es que tienen buenas intenciones. Tienen muchas ganas de mejorar, pero carecen de un liderazgo fuerte, de establecer metas claras y posibles, algo que pesa es su bajo nivel de educación... aunque de hecho hay muchos profesionistas, pero ellos no son quienes dirigen el Club... son muy solidarios y cooperativos pero sus logros son menores porque su organización tiene una profesionalización limitada”. Roberto agrega “entre ellos también hay mucha desconfianza, allá su mentalidad cambia, el dinero 121 los hace ser más egoístas. Se han registrado malas conductas, y por eso existe recelo y desconfianza, la gente ya no confía del todo. Yo creo que aquí y allá estaríamos mejor si trabajamos en la recuperación de la confianza y hablamos con la verdad para generar algo en un futuro no muy lejano, hay que superar esta crisis de desconfianza, no permitir el acoso de las autoridades y dejar que las organizaciones <se organicen> con total libertad”. La alternancia política en el municipio de Tonatico Algunos factores que propiciaron la alternancia política en el municipio en el año 2000, según los entrevistados, son “el factor cultural del machismo (mucha gente no estuvo de acuerdo en la postulación de una mujer para presidenta municipal) permitió el retorno del PRI al gobierno”, apunta Victorino. Juan dice “que la alternancia en el municipio la propició el voto de los jóvenes, porque los jóvenes le pegan fuerte y duro al PRD. ¿Por qué? Porque a los jóvenes les pega la cuestión económica, porque ya se perdió la tradición de trabajar en el campo y al comercio a la que se dedican pocos. Antes la mayoría trabajaba 122 en el campo en el cultivo de maíz, de cebolla, de cacahuate. Después con la modernización del campo (tecnología y maquinaria) la gente ya no tuvo cabida en el campo. El campo expulsó mano de obra que orilló al ocio, y afectó principalmente a los jóvenes. Los jóvenes no tienen opciones para estudiar y los que tienen luego no encuentran oportunidades para trabajar. Tenemos una juventud que no acude a la escuela, que no tiene conciencia social ni política, le hacen más caso a la mercadotecnia y a la televisión. Los jóvenes quieren ser <rebeldes> (por aquello de la telenovela de moda). Quieren imitar los estilos de vida de <la gente del canal de las estrellas>, es decir, quieren tener buen vestido, lujos, carros, ven a la escuela no como un espacio para el aprendizaje sino como un espacio para el cotorreo, la fiesta, el noviazgo. La televisión permite realizar el fraude moderno, la mercadotecnia sabe llegar muy bien a los jóvenes y a las mujeres y en general a todo el público. A los jóvenes les interesa el dinero en la bolsa, venden su voto al mejor postor, los jóvenes no tienen esperanza en el futuro y no quieren pensar en él, porque si el presente es difícil ¿qué será el día de mañana?” Para Rosa María la alternancia se explica “porque se registraron 5 pla- nillas y todos tenían buenos candidatos. El proceso de 2000 como todos los que se han dado en Tonatico desde 1994 se guían más por la persona que por los partidos políticos”. Roberto encuentra como explicación de la alternancia “el hecho de que en el año 2000 el candidato del PRI era más popular y de buena reputación y eso le sirvió mucho”. estudian los fenómenos políticos. Muchos factores entrarán en juego. El gobierno estatal, hábilmente retrasó los recursos para la obra pública y la gente eso lo ve y se lo cobra en las urnas al gobierno local. Por otra parte la gente se acostumbró al Dr. Arturo Hernández Tapia, y él ya dio todo lo que tenía que dar. Falta ver quién puede asumir su lugar”. Rosa María es contundente “la gente confía más en las personas que en los partidos”. La confianza en los partidos Victorino dice “la gente de Tonatico confía en el PRD porque sabe que aquí se gobierna de cara a toda la sociedad”. Juan en cambio opina “la gente tiene un concepto muy distinto de la lealtad, aquí la gente va a respaldar a la persona que inspire confianza y garantice resultados por eso la gente que a veces se muestra abiertamente a favor del PRD en otros momentos se opone de manera rotunda. Unos van y otros vienen, no hay lealtad absoluta. Buscan oportunidades y apoyos en el PRI, en el PAN, en el PRD o en el partido que sea”. José Luis dice “para las elecciones municipales de 2006 vemos un escenario muy complejo para el PRD pero muy interesante para los que Roberto dice “el voto duro no asegura el triunfo a ningún partido, la gente no pertenece a un partido, la ciudadanía se vuelca en torno de una persona, el voto se reorienta en cada elección, sea federal, estatal o municipal; y este fenómeno ha sido una constante durante los últimos 10 años. Los partidos políticos en el municipio necesitan buscar en cada elección una figura que convenza al voto duro de los partidos contrincantes. Aunque a decir verdad no es adecuado que un partido político obtenga sus triunfos a expensas de una persona, en una persona no puede caer toda la responsabilidad partidista, yo creo que los gobiernos perredistas se han abierto para que más gente joven tenga la oportunidad de repuntar y encabezar los destinos del municipio. En el municipio el PRD ha dependido mucho de la figura del Dr. Arturo 123 Hernández, y eso obviamente no es lo ideal en la democracia, porque se supone que hay mucha gente valiosa y deseosa de participar en el proceso democrático”. ¿Cómo evalúan la imagen y los programas que implementó el ex gobernador Arturo Montiel Rojas entre los migrantes? Victorino dice “en general el gobierno estatal priísta tiene una buena imagen porque la gente ve en Arturo Montiel al primer gobernador que se interesó en los migrantes”. Juan dice “el gobierno del Estado de México ha apoyado bastante a los migrantes, sobre todo trasladándolos del aeropuerto a Tonatico y eso los migrantes se lo reconocen y agradecen”. José Luis dice “una minoría está muy contenta con los apoyos del gobernador y digo minoría porque de alrededor de 5000 personas allá, sólo pueden venir unas trescientas. A estas trescientas el gobernador las apoya con el traslado del aeropuerto de la Ciudad de México a Tonatico. Esta minoría está legalmente en Estados Unidos por eso pueden ir y venir cuando quieran. El gobernador se les ha acercado y les ha ofrecido apoyos. Pero yo pienso que la mayoría quiere 124 tener empleo aquí y obviamente vivir aquí de manera permanente”. Rosa María dice “la imagen del ex gobernador Montiel no creo que sea buena, porque yo pienso que a la gente le gustaría más estar aquí, pero aquí los empleos son escasos y los salarios son de miseria”. Roberto señala “la opinión sobre el ex gobernador es buena, porque Montiel para bien o para mal fue el primero que los tomó en cuenta, aunque sólo haya sido en su discurso. Aparte los migrantes han sido favorecidos porque su gobierno les ha hecho visitas, les manda autobuses al aeropuerto, está presente en ceremonias del tonatiquense ausente. Mantiene comunicación con ellos a través de la Oficina de Atención de Migrantes”. Victorino sostiene “los programas del gobernador Montiel en el diseño han sido buenos pero en su ejecución presentan algunos problemas”. Juan señala que “el actual presidente perredista al inicio de su primer gobierno en 1996 mandó una solicitud al entonces gobernador César Camacho Quiroz para que se abriera una Oficina de Atención a los Migrantes en Estados Unidos pero no hubo respuesta favorable. Años más tarde el gobernador Montiel abrió una oficina en Houston Texas y luego una más en Waukegan, Illinois. En esta última hubo problemas porque la demanda era tener un Centro de Reunión Social (salón de usos múltiples) y esa oficina era más de asuntos “diplomáticos” y los tonatiquenses querían un millón de pesos para la construcción del centro. También hubo inconformidades porque la Oficina de Atención a Migrantes atendía asuntos de varios estados de la república e incluso de otros países como Venezuela y El Salvador. Los tonatiquenses querían atención exclusiva” José Luis dice “El GEM ofrece proyectos para los migrantes pero el problema es que a los migrantes no se les hacen atractivos. Lo que veo es que el gobierno no escucha o acepta las propuestas de los migrantes. A lo mejor el problema está en los recursos porque creo que el gobierno ofrece muy poco, y los negocios necesitan mucho dinero tal vez si se asociaran seis personas o más resolverían sus problemas pero realmente no sé”. Roberto dice “los programas para atender a migrantes del gobierno de Montiel no han dado resultado, estos programas lo que se proponen es atraer el dinero de los migrantes para que contribuyan al desarrollo local, sin embargo esto no se ha alcanzado porque hay varias deficiencias y errores que se pueden corregir”. La imagen de los alcaldes de Tonatico entre los migrantes Todos los entrevistados coinciden en que desde el primer gobierno perredista en el municipio, el alcalde Arturo Hernández Tapia generó muy buena imagen, sobre todo con la apertura de la Oficina de Enlace de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la celebración del tonatiquense ausente y en años más recientes con el curso de verano (donde se imparten clases de historia, danza regional, deportes, tradiciones, cultura, etc.) que cada año se imparte en Illinois. También destacan las visitas periódicas que el alcalde realiza a Waukegan y que los migrantes ven con agrado, porque las autoridades reconocen su importancia. Las remesas económicas y su incorporación a las actividades políticas en el ámbito local Victorino, Juan y José Luis sostienen que las remesas tradicionalmente han contribuido a mejorar la calidad de vida de la gente. En Tonatico incluso superan al gasto público del 125 ayuntamiento. En suma, las remesas son muy importantes para la vida social, económica y política del municipio”. Por su parte, Rosa María y Roberto coinciden al señalar el municipio se mantiene vivo y pujante gracias a los recursos que mandan los migrantes a Tonatico”. Victorino afirma tajante que el partido en el cual milita, no ha recibido dinero que entre directamente al partido. Pero las remesas claro que directamente inciden en la política porque “la gente a la que no le ruge la panza puede votar y protestar libremente, si así lo desea sin temor a castigos o represalias”. Juan dice que “quizás algunos migrantes han mandado algo de dinero para apoyar a sus familiares o amigos que han logrado ser candidatos en las planillas que conforman el ayuntamiento”. José Luis argumenta que “no se sabe o no se ha presentado el caso de que las remesas sean directamente canalizadas a los partidos políticos. La gente de aquí manda boletos para algunas rifas porque a los de allá no se les hace caro y así se obtienen recursos para financiar actividades políticas (autofinanciamiento), pero de manera directa no se mandan remesas para la política. Aunque en 126 1996 la gente contaba que Abdón Montes de Oca invirtió dinero, no sé si en calidad de préstamo o en qué, era una persona muy allegada al candidato del PRI en aquella ocasión. También se rumoraba que en el 2003 el Sr. Jorge Lagunas que es una persona muy fuerte económicamente invirtió mucho dinero en el candidato del PRI pero no sé si en calidad de préstamo o cómo”. Que los partidos políticos han recibido <remesas> para la promoción de sus respectivos candidatos es un “secreto a voces”, como lo señala Rosa María “se rumora que en el PRI sí pero sólo son rumores”. De igual forma Roberto dice “se rumora que en el PRI se han recibido fuertes cantidades de dinero de migrantes que son fuertes económicamente, pero son sólo eso rumores. En el caso del PRD lo que sí han hecho es realizar rifas, se hacen los boletos y se mandan para que se vendan y compren allá, porque a ellos les resultan baratos y los compran”. 3.4. Modelo de etapas de incremento de la migración transnacional y cambio político Una revisión detallada y meticulosa de la revisión teórica y el trabajo de campo plasmado en el desarrollo de esta investigación nos llevan a plantear un modelo básico de las etapas de incremento de migración transnacional y su relación con el cambio político. Modelo de etapas de incremento de la emigración y el cambio político Contexto de bajos niveles de emigración de México a Estados Unidos y pocos cambios en el ámbito político local Contexto de altos niveles de emigración de México a Estados Unidos y presencia de profundos cambios en la esfera política local Periodización 1940-1995 1995-a la fecha Población y migración Escasa migración interna y aumento paulatino de la migración transnacional. Aumento visible de la migración transnacional. Causas de la migración Causas económicas. Causas económicas y socioculturales. Perfil del migrante Hombre, maduro, casado, baja escolaridad. Todos sin excepción son potenciales migrantes. Situación económica del país Relativa estabilidad económica. Profundas y recurrentes crisis económicas. Situación de los migrantes que intervienen en la esfera local Migrantes ilegales. Migrantes con residencia legal y/o doble nacionalidad. Población y actividad económica Población dedicada a las actividades agrícolas. Población dedicada a actividades industriales y actividades del sector servicios. Condiciones de vida Estándares bajos de calidad de vida. Incremento de los estándares de calidad de vida, mayor longevidad, salud y tiempo de ocio. Estructura familiar Familia extensa. Familia nuclear y aumento de hogares no tradicionales. Religión Hegemonía de la iglesia católica. Procesos de secularización que debilitan la autoridad religiosa. Diversificación de sectas religiosas. Medios de Comunicación Acceso a medios impresos. Acceso a medios electrónicos. 127 Contexto de bajos niveles de emigración de México a Estados Unidos y pocos cambios en el ámbito político local Contexto de altos niveles de emigración de México a Estados Unidos y presencia de profundos cambios en la esfera política local Gobierno Gobiernos emanados del PRI. Gobiernos emanados del PRI con alternancia de otros gobiernos emanados de diversos partidos. Valores culturales Seguridad material, autoridad tradicional y obligaciones comunitarias. Cuestiones de calidad de vida, individualismo y posmaterialismo. Participación ciudadana Escasa participación ciudadana en la toma de decisiones y baja participación electoral. Mayor participación electoral. Mayor exigencia de rendición de cuentas y transparencia en la toma de decisiones y destino de los recursos públicos. Organizaciones sociales Afiliación a organizaciones sociales tradicionales: partidos, iglesias, clubes deportivos. Afiliación a organizaciones emergentes de la sociedad civil. Mayor activismo político, incremento de las protestas y nuevos movimientos sociales. En este trabajo se encontró que en Tonatico, México de 1940 a 1995 se presentaba un contexto con bajos niveles de emigración de México a Estados Unidos y que se registraban pocos cambios en el ámbito político. Durante el periodo en referencia existía escasa migración interna y un aumento gradual y paulatino de la migración transnacional, el trabajo de campo arroja que las causas de la migración en esta etapa respondían más a causas de tipo económico, que el perfil del migrante era el de un hombre maduro, casado y con bajos niveles de escolaridad, que los migrantes que llegaban a intervenir en los asuntos locales en la mayoría 128 de las ocasiones presentaban un estatus de ilegales. También destaca que la población del municipio se dedicaba principalmente a actividades agrícolas, que las condiciones de vida de los habitantes del municipio presentaban estándares bajos de calidad de vida y con familia extensa, se encuentra un papel importantísimo de la iglesia católica en la vida de las personas, además la gente tiene acceso a información a través de escasos medios impresos, este periodo se caracteriza porque los gobiernos municipales emanan de las filas del PRI, por la preeminencia de valores como la seguridad material, la autoridad tradicional y las obligaciones comunitarias. En esta etapa existe una escasa participación ciudadana y electoral, además los ciudadanos se afilian a organizaciones sociales tradicionales tales como partidos políticos, iglesias y clubes deportivos principalmente. Esta investigación nos presenta a Tonatico como un espacio con altos niveles de migración transnacional durante el periodo (1995-2005), con una presencia de profundos cambios en la esfera política local. En este lapso de tiempo las causas de la migración se explican por aspectos económicos y también por aspectos socioculturales. Todos los sujetos sin excepción son potenciales migrantes, la situación económica del país presenta profundas y recurrentes crisis. Esta etapa se caracteriza porque en Tonatico, México hay más migrantes transnacionales con residencia legal y/o con doble nacionalidad. La población del municipio está dedicada principalmente a actividades industriales y actividades del sector servicios. Se presenta un incremento gradual de los estándares de calidad de vida, mayor longevidad, salud y tiempo de ocio. La estructura familiar que caracteriza a Tonatico, México es la familiar nuclear, aunque se registra un ligero aumento de hogares no tradicionales. En este periodo se presentan procesos de secularización que debilitan la autoridad religiosa, además se extiende la diversificación de las sectas religiosas. Los habitantes acceden a información a través de los medios electrónicos. Al ayuntamiento arriban gobiernos emanados del PRI con alternancia de gobiernos emanados de diversos partidos políticos. Los valores culturales que dominan la escena son las cuestiones de calidad de vida, el individualismo y el posmaterialismo. Existe una mayor participación electoral, una mayor exigencia de rendición de cuentas y transparencia en la toma de decisiones y destino de los recursos públicos. La afiliación de los ciudadanos es en dirección a organizaciones emergentes de la sociedad civil. Existe un mayor activismo político e incremento de protestas y nuevos movimientos sociales. 3.5. Esquema para el análisis de la migración transnacional y procesos de cambio político De igual manera después de una revisión de nuestro material teórico y el trabajo de campo que se ha recopilado, se está en posibilidad de plantear un esquema para el análisis de la migración transnacional y proceso de cambio político. 129 Esquema para el análisis de la migración transnacional y procesos de cambio político Bajos niveles de migración de Tonatico, México a Tonatico, Illinois y pocos cambios en el ámbito político local (1940-1995) Altos niveles de migración de Tonatico, México a Tonatico, Illinois y presencia de profundos cambios en la esfera política local (1995 a la fecha) Cultura política Bajos niveles de escolaridad. Intercambio de información cara a cara. Importancia del grupo. Valores materialistas. Sentimientos de cooperación y solidaridad. La esperanza de un mejor futuro. Altos niveles de escolaridad. Obtención de información por medios impresos y electrónicos. Importancia del individuo. Valores posmaterialistas. Sentimientos combinados con pragmatismo. La esperanza de un mejor presente. Ciudadanía Corporativista o grupal. Extraterritorial. Transnacionalismo político Bajo nivel de institucionalización. Incremento en el nivel de institucionalización. Remesas sociales Bajo impacto y visibilidad en la esfera política local. Alto impacto y mayor visibilidad en la esfera política local. Comportamiento político electoral Lealtad a un partido político (voto duro consolidado). Lealtad política cambiante en cada proceso electoral (primacía del voto volátil y blando). Alternancia política Nula. Consolidada. Tomando como referencia el anterior esquema se observa que los bajos niveles de migración de Tonatico, México a Tonatico, Illinois se corresponden con pocos cambios en el ámbito político local durante el periodo que va de 1940 a 1995, al cual podemos caracterizar con una cultura política con bajos niveles de escolaridad, la información se obtiene por intercambio cara a 130 cara, la importancia del grupo es fundamental, predominan los valores materialistas y los sentimientos de cooperación y solidaridad. En la mente del individuo está presente la esperanza y promesa de un mejor futuro. El tipo de ciudadanía al cual se apela es a la ciudadanía corporativa o de grupo, se observa un tipo de transnacionalismo político de bajo nivel de institucionalización, en cuanto a las remesas sociales, éstas tienen un bajo impacto y visibilidad en la esfera política local. El comportamiento político electoral se mantiene leal a un partido político (el PRI) el cual nos plantea un voto duro consolidado. En este sentido la alternancia política es nula. Por otro lado, los niveles de migración de Tonatico, México a Tonatico, Illinois se corresponden con una presencia de profundos cambios en la esfera política local que van de 1995 a la fecha. Es así como encontramos una cultura política que se caracteriza por altos niveles de escolaridad, la obtención de la información es a través de medios impresos y electrónicos, destaca la importancia del individuo más que la del grupo, predominan los valores posmaterialistas y los sentimientos combinados con pragmatismo, en la psique de las personas domina la esperanza de un mejor presente. El tipo de ciudadanía que está en construcción es la ciudadanía extraterritorial. Además encontramos un tipo de transnacionalismo político con incremento gradual en el nivel de institucionalización. Las remesas sociales presentan un alto impacto y mayor visibilidad en la esfera política local. El comportamiento político-electoral registra una lealtad política cambiante en cada proceso electoral que da como resultado la consolidación de la alternancia política. 131 En el mundo todos migran: en el ciclo de vida migramos de la infancia a la adolescencia, migramos de estados de ánimo depresivos a eufóricos, migramos de una ideología a otra, migramos y migramos. La vida es movimiento, la migración es movimiento, y más allá de nuestros ojos, en cada punto de la tierra un hombre está a punto de partir. acción de las instituciones estatales y también es resultado de las prácticas y comportamientos sociales en la vida cotidiana. Las relaciones entre migración y política pueden variar sensiblemente de un país a otro, de una ciudad a otra, de una época a otra. Este trabajo centra su argumento en el aspecto positivo de esta relación, que se presenta en Tonatico. Juan Carlos Narváez Gutiérrez Más que conclusiones tajantes se presentan algunas ideas intuitivas surgidas de la reflexión teórica y la observación empírica. La reflexión y observación han generado más dudas que respuestas. Sin embargo, la búsqueda sin término del conocimiento, es un camino que no podemos evadir. La dimensión política de la migración puede ser analizada desde distintas perspectivas. Esta investigación explora algunos elementos que dan cuenta del cambio de la cultura política, el surgimiento de una nueva ciudadanía, el papel de las remesas sociales en el cambio político en el entorno de una comunidad transnacional en el Estado de México. Es decir, se rescata la experiencia de migrar y sus efectos transformadores en el espacio político. En la actualidad, la migración transnacional está firmemente asentada en el orden del día político y social. La relación migración y política se inscribe en un debate global de sociedad en torno a la necesaria renovación de la democracia y justicia social. La construcción de la democracia y la justicia social es asunto de todos. Es resultado de la Este documento lejos de ser exhaustivo, apenas ilustra un pequeño espacio de la compleja realidad social, si bien es cierto, también aporta a ver algunas de las múltiples aristas que encierra el fenómeno migración transnacional y procesos de cambio político. Se contribuye en la reflexión de la migración como un tema que es vital en el nuevo contexto mundial, Conclusiones 132 nacional y local. Se llama la atención al igual que en trabajos previos, en la urgencia de repensar y replantear algunas categorías con las que trabajan los estudiantes y estudiosos de las ciencias sociales. En la investigación se ha insistido de manera explícita e implícita en la imperiosa necesidad de reconstruir las categorías e instrumentos para manejar los conflictos y tensiones provocados por la presencia cada vez más numerosa de inmigrantes, se plantea que una alternativa posible es empezar por cambiar las categorías de análisis y por lo tanto los sistemas políticos tradicionales, con consecuencias potencialmente impredecibles. Es necesario cuestionar nuestra tradición liberal y democrática y no tener miedo hacer frente a situaciones conflictivas con más de un argumento congruente que no puede resolverse con nuestros valores democráticos de una visión occidental, ilustrada, universalista y moderna. Aunque tal situación pueda conducirnos a paradojas y círculos viciosos. La mayoría de los valores que encierran la cultura política democrática y la ciudadanía liberal, desde el punto de vista de un inmigrante, equivalen a pura hipocresía. Es comprensible la resistencia de nuestras estructuras políticas a las presiones resultantes de sociedades de inmigrantes, dado que se sabe que cualquier modificación tendrá efectos directos en nuestra forma de vida y en nuestros paradigmas mentales. Con todo, los partidarios de la línea asimilacionista y reacia al cambio estructural, no hacen más que retrasar algo que por lógica histórica, deberá ocurrir indefectiblemente. A los grandes arquitectos y pensadores políticos del moderno EstadoNación, no les pasó por la cabeza la posibilidad de la coexistencia en un mismo territorio de diferentes tradiciones y prácticas culturales. Por eso nuestras estructuras políticas tienen serias dificultades al afrontar el fenómeno de la migración transnacional, sin caer en profundas contradicciones y en problemáticos círculos. Debido al hecho de que es en el seno de nuestra tradición política donde se produce la relación entre Estado y Nación, entre ciudadanía y nacionalidad, es allí donde la inmigración presenta unos retos que llevan a la necesidad de fracturar tan histórico vínculo y para ello hay que buscar alternativas. Aquí se retoman y aplican enfoques y propuestas de análisis novedosas, que permiten 133 un acercamiento a una realidad que presenta cambios vertiginosos, todavía hay mucho que explorar a través de la perspectiva transnacional, la ciudadanía extraterritorial y las remesas sociales. Cabe apuntar que si bien el periodo que se analiza, muestra numerosos avances, es importante no olvidar que la relación migración y política es un proceso y como tal puede haber lugar para retrocesos. A medida que avanzó la investigación surgieron tópicos muy interesantes, como por ejemplo las lealtades múltiples, los arraigos transitorios, los compromisos coyunturales, que representan otros puntos de partida para explicar e interpretar los procesos sociales y políticos dentro de la migración transnacional. La relación migración transnacional y procesos de cambio político permite el reacomodo de visiones y prácticas de lo político que realizan los migrantes en sociedades dinámicas, que se retroalimentan a su vez de los propios cambios que el sistema político más amplio experimenta. Nociones respecto a la autoridad, la pluralidad, los partidos políticos, la rendición de cuentas, el orden, la ciudadanía, la democracia son algunas 134 de las elaboraciones que se confrontan cotidianamente, y ante las cuales los migrantes y los no migrantes van reacomodándose para, en algún momento, ser incorporadas a sus propias visiones y sobre todo, traducirse en actitudes que asumen no sólo frente a las instituciones políticas, sino ante el conjunto de la sociedad en sus múltiples formas, familia, escuela, trabajo, etcétera. A nivel cotidiano, cada espacio local es escenario de construcción y negociación, e invención de comportamientos políticos y culturales que van configurando, reproduciendo y produciendo otra fisonomía de la esfera política. Tonatico es un espacio que refleja hasta cierto punto una situación atípica en el Estado de México, porque observamos cómo las remesas económicas y sociales favorecen una mayor participación política electoral y en general el empoderamiento de la ciudadanía, En ese espacio concreto hemos dado cuenta de la relación positiva entre migración transnacional y política, con lo cual no se evade o ignora que los migrantes transnacionales en Waukegan no enfrenten problemas y conflictos en aquella esfera política, simplemente que su abordaje no estaba dentro de los objetivos de la investigación. Mucho se ha escrito sobre la presencia económica de los migrantes en sus regiones de origen (por el análisis del papel de las remesas económicas), poco es lo que se ha abordado de su protagonismo en el ámbito político (por la reflexión del papel que desempeñan las remesas sociales), esa sería indudablemente la principal contribución de esta investigación, la tesis ha dado cuenta del interés creciente de los migrantes transnacionales de participar en la vida política de su región de origen, algunas veces de forma indirecta, velada u oculta, otras abierta y franca para incidir con sus inversiones en el desarrollo local. la frontera la transformación de la cultura política y el empoderamiento ciudadano y posibilitando en el otro <borderland> la existencia de una ciudadanía extraterritorial. Es por tanto urgente seguir abriendo canales de participación política a los migrantes, independientemente de su lugar de residencia e incluso de su nacionalidad, más allá de la ley de doble nacionalidad, avanzar hacia el verdadero y pleno reconocimiento de sus derechos políticos de votar y ser votados. El papel de los migrantes transnacionales en el cambio político del municipio ha sido muy importante, primero, porque entre los tonatiquenses de México y los tonatiquenses de Illinois a pesar de las adversidades y contrariedades se han mantenido y recreado las relaciones económicas, sociales y políticas entre sus comunidades. Segundo, porque las comunidades de Tonatico, México y Tonatico, Illinois son comunidades complementarias, se trata pues de comunidades más complejas, pero a la vez más flexibles y en constante ajuste, transformación, adaptación, recreación y reproducción. Tercero, las relaciones entre Tonatico, Illinois Se observa que en Tonatico, México y Tonatico, Illinois se construyen día a día comunidades transnacionales que mezclan estratégicamente prácticas de mejoramiento individual, con patrones colectivos de identidad cultural con fuertes significados simbólicos, permitiendo en un lado de Tonatico, México es el escenario en que ubicamos nuevas prácticas, ejercicios políticos novedosos, redefinición de valores abstractos, como puede ser la idea de democracia, por ejemplo, que se vuelcan hacia nuevas actitudes cristalizadas en un bajo nivel de abstencionismo y altos niveles de participación ciudadana, pero lo más importante, en una nueva forma de concebirse frente al poder. Votar, participar y criticar libremente. 135 y Tonatico, México en la actualidad, presentan grandes niveles en volumen e intensidad, que han incidido en la transformación en la esfera política en Tonatico, México. Se ha dado cuenta de los efectos transformadores de la migración transnacional, se registran cambios en los conocimientos, la información, los valores, los sentimientos, las emociones e ilusiones de los migrantes y los no migrantes. Las remesas sociales y económicas en la transformación política de Tonatico, México, han desempeñado un papel medular, los tonatiquenses de Illinois envían recursos económicos que permiten a los ciudadanos de Tonatico, México, mayor libertad y capacidad de elección, protesta y crítica. De igual forma los tonatiquenses de Illinois envían remesas sociales, es decir, estructuras normativas (ideas, valores y creencias), sistemas de prácticas y capital social, que a lo largo del tiempo generan profundos cambios. Obviamente se reconoce que los no migrantes no absorben todos los aspectos culturales de migrantes transnacionales. Se reconoce que los no migrantes adoptan algunas nuevas ideas y prácticas, que pasan por diversos filtros y además existen elementos que se ignoran totalmente, 136 este trabajo ha tratado de sostener que la gente de Tonatico, México está consciente de esa transformación, tal como la misma gente lo reconoce y lo percibe en los argumentos que esgrime cuando se le interroga sobre política y migración, que adicionalmente se respalda con la estadística electoral de fuentes oficiales. El sistema de alternancia política que se presenta en el municipio de Tonatico, tiene alguna parte de su base en el papel que los migrantes transnacionales han desempeñado en esta transformación política, si bien es parcialmente cierto que hay otros factores coyunturales que inciden en ella, como la personalidad de los candidatos (as) que se presentan en cada proceso electoral. Es imposible sostener abiertamente que la migración ha sido el único medio para la transformación de la cultura política, del comportamiento electoral, de la emergencia de ciudadanía y la consolidación de un sistema de alternancia política en Tonatico, es innegable que existe esta relación positiva pero no es la única, aunque quizá sí la más importante. Incumbe a cada país, a cada espacio local inventar y construir una ciudadanía, una cultura política y en general su esfera política en fun- ción de su historia, su población y sus reivindicaciones. Sin embargo, es necesario que todos estemos atentos a la persistencia de “mundos paralelos”, que indudablemente provocarán divisiones en la sociedad e inestabilidad política, lo que provocará a su vez efectos indeseables como el racismo social (basta examinar un poco el contexto actual y ver ejemplos como el que ilustra las situaciones de conflicto que ha generado la publicación de una caricatura del profeta Mahoma en un diario danés y las repercusiones que ha generado por el cuestionamiento a las nociones de respeto a la libertad de expresión y el respeto a las creencias religiosas), la reorientación de los partidos políticos hacia la retórica opuesta a la inmigración (basta analizar un poco los discursos de l movimiento “Renovación de América”, los discursos del Minuteman Proyect, los discursos de políticos como el ex senador Jesse Helms y recientemente el diputado Tom Tancredo, del Grupo Congresional para las Reformas de Inmigración, fuertes impulsores de la construc- ción del “nuevo muro de Berlín” o también denominado “el muro de la vergüenza”) y la consolidación de movimientos antagónicos al sistema (no hay que olvidar la exacerbación y resurgimiento de los nacionalismos), por nombrar algunos escenarios mundiales que ya se vislumbran. La relación migración y política hoy en día está más vigente que nunca, se trata de una preocupación que reclama análisis y respuestas inmediatas. Es un imperativo generar más estudios, debates y reflexiones. Para finalizar, diremos parafraseando a Leticia Calderón que la migración es tal vez la mejor experiencia del tiempo de dualidad que estamos constatando, de multiplicidad de opciones donde no hay caminos únicos y definitivos, sino simples rutas por andar, con regresos posibles y formas de reinventarse la vida cada vez que hay que comenzar en otro lugar. Es por tanto la esencia que muestra que no hay decisiones sin retorno y que es posible volver y partir de nuevo y seguir siendo sin perderse. 137 Fuentes de consulta • • Adler de Lomnitz, L. 1994a. “Identidad nacional / cultura política: los casos de Chile y México”. Redes sociales, cultura y poder: ensayos de antropología latinoamericana. México: Miguel Ángel Porrúa-FLACSO-México. 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