Actividad B: Actualmente no estoy ejerciendo como profesora de
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Actividad B: Actualmente no estoy ejerciendo como profesora de
Actividad B: Actualmente no estoy ejerciendo como profesora de francés pero tengo en mis manos el libro que utilizaba en mis clases particulares (que dejé de dar cuando regresé de México a Barcelona ahora hace dos meses). El libro de texto es “Latitudes. A1/A2”, el nuevo ejemplar de la editorial Didier para alumnos que empiezan a aprender la lengua francesa como lengua extranjera. El libro se autovende argumentando que sigue la corriente de la ‘methodologie actionnelle’, la nueva corriente para la enseñanza de lenguas, donde se prioriza la comunicación y los actos de habla. Un paso más allá de la llamada ‘metodología comunicativa’. Vamos a ver si realmente cumple con los requisitos de una enseñanza basada en el enfoque del comportamiento verbal. Hablando de la estructura y la presentación del libro y tan solo ojeándolo nos damos cuenta que ninguna unidad empieza con un apartado de gramática. De hecho, es un libro donde la gramática queda en segundo término, en pequeños recuadros y no hay explicaciones explícitas de reglas gramaticales, todo es a través de ejemplos. Le toca entonces al alumno (guiado por el profesor) de jugar a ser detective, razonar y sacar por si solo y durante la unidad las reglas de la lengua. Otra cosa que llama la atención en cuanto a la presentación de las unidades es que en el índice de objetivos y temas nunca aparece la palabra ‘gramática’ sino que aparecen las ‘acciones’ o también llamados actos de habla que se van a aprender (como por ejemplo, aprender a saludarse, entrar en contacto con alguien, expresar sus gustos, etc) . Aparece como prioritario las llamadas ‘Tareas’ y ‘Descubrimientos socioculturales’: dos secciones en cada unidad que comentaré más adelante pero que dejan entrever que ‘Latitudes’ intenta incorporar al máximo las características del comportamiento verbal en su manera de presentar los ejercicios y que definitivamente está muy lejos de ser un libro con una concepción tradicional de la gramática. Hasta aquí hemos hablado del esqueleto y presentación del libro. Vamos a entrar en él y vamos a demostrar con ejemplos que desarrolla la teoría del comportamiento verbal humano. ¿Dónde encontramos características del comportamiento verbal como actividad de comunicación? Todas las unidades empiezan siempre con un ejercicio de audio (a veces acompañado de una foto, a veces solo). Desde la primera lección el alumno, que desconoce por completo el francés (no conoce el código) recibe un mensaje para que vaya aprendiendo a identificar la lengua y sus tonalidades. El alumno está expuesto a un mensaje que deberá descodificar con los (pocos) medios que tiene. Gracias a las imágenes y fotos del libro (para contextualizar) podrá llegar a entender dicho mensaje. En los libros tradicionales no había audio o estaba en la última parte de la unidad, después de aprenderse toda la gramática. Otra de la características que me gustó de trabajar con este libro es que no deja de lado la función fática y emotiva de la lengua francesa. En los diálogos y textos siempre aparecen expresiones francesas que a nivel gramatical no son muy importantes pero que a la hora de comunicar son vitales para llegar a expresar lo que uno quiere e integrarse realmente en la lengua. (ejemplo: ohlala! Ah!merci! Euh...c’est sympa! C’est nul!) Desde la primera unidad incorporan ejercicios de entonación. Estos enseñan a diferenciar que una misma frase según la entonación que le des cambia completamente de significado (ejemplo: Excuse-moi? Excuse moi! ) ¿Dónde encontramos características del comportamiento verbal derivadas de la naturaleza del lenguaje humano y del código lingüístico? Cada unidad tiene ejercicios de fonética donde queda claro que un pequeño cambio en la pronunciación puede dar significados muy distintos a una misma palabra. Pero que en cambio palabras de familias comunes pueden tener pronunciaciones muy distintas (discontinuidad). Notemos también que la estructura de la lengua se aprende de manera inductiva. A través de los ejercicios (y con muy poca explicación gramatical) los alumnos por si solos van viendo como se construye la lengua y adoptan mejor la gramática ya que la han tenido que observar y razonar. Hay también muchos ejercicios en el libro donde se hace trabajar la creatividad y la productividad. Actividades donde los alumnos deben jugar un rol e interpretar papeles incorporando lo que se ha ido aprendiendo. Imágenes sin diálogos donde el alumno tienes que crear un diálogo y darle coherencia a las fotos. Y la máxima expresión de creatividad y producción de este libro es lo que antes he nombrado como ‘Tarea’. Casi al final de cada unidad encontramos un ejercicio donde se les propone crear y producir una tarea completa utilizando todos los conocimientos adquiridos. Este tipo de actividad lo podríamos también clasificar dentro de las interactivo-sociales. ¿Dónde encontramos características del comportamiento verbal como actividad interactivo-social? La parte de la unidad nombrada ‘tarea’ es la actividad que diferencia las metodologías comunicativas de las accionales. En ellas se refleja el trabajo de toda la unidad y la integración de los conocimientos lingüísticos, culturales y sociales que el alumno ha adquirido. Las actividades interactivo-sociales son las que más abundan en el libro. De hecho hay una sección en cada unidad llamada ‘Découvertes socioculturelles’ donde se habla, se trabaja y se debate sobre las culturas, maneras de hacer, de vivir, de pensar, las gastronomías, la geografía de los sitios de habla francesa (y por fin, no solo Francia). Pero además de esta sección todo el libro se impregna de una voluntad de llevar la clase de francés en un ambiente realmente francófono y actual. No todas pero casi todas las actividades están envueltas en un contexto para que el alumno asocie el tipo de comunicación al tipo de situación y poder producir no solo un grupo de frases correctas sino verdaderos actos de habla. Las situaciones que se exponen son bastante reales, aunque ya se sabe…nunca se va a aprender una lengua como viviendo inmerso en la cultura de la misma. Para mi ‘Latitudes’ es un buen método no solo para enseñar “La langue française” sino todo lo que envuelve esta lengua (cultura, maneras de pensar, expresiones únicas, contextos sociales). Es un enfoque lejos de ser tradicional, incluso hay que decir que a veces los alumnos pedían una explicación más explícita de la gramática o yo sentía que debía darla (y lo hacía). Los ejercicios son bastante acertados y con un poco de imaginación siempre se pueden retocar y adaptarlos a cada público. Pero en general es un libro que se basa en el desarrollo del comportamiento verbal. Elvira Villegas Serra