La Legión Cóndor

ATLAS DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA
La Legión Cóndor
Jordi Barra
Introducción de
José Luis Martín Ramos
Diseño cartográfico
Marc Ancochea
Índice
La intervención alemana en la guerra de España 4
José Luis Martín Ramos
Nota sobre la cartografía 9
Jordi Barra
Jaén: aviones alemanes, tripulación española 41
El incidente del Deutschland 42
Ataque a Almería 43
Brunete: un rápido cambio de frente 44
Simbología 11
De Teruel al Ebro 46
ATLAS
Antecedentes y creación 12
Stukas en Teruel 48
Ofensiva de Aragón 49
En el Mediterráneo 50
Petición de ayuda a Alemania 14
Hidroaviones en Pollença 51
Envíos clandestinos 15
Comité de No Intervención 16
Patrullas de control naval 17
El Ebro desde el aire 52
Ln/88: unidad de transmisiones 53
Cataluña 54
El paso del estrecho de Gibraltar 18
El primer puente aéreo de la historia 19
Alemanes en todos los frentes 20
Rudolf von Moreau, as de la aviación 21
Rescate fallido de José Antonio Primo de Rivera 22
Instrucción legionaria 55
La despedida 56
Llegan los tanques 23
Homenajes en España y en Alemania 58
Adiós oficial en León 59
Barajas y Madrid 61
Creación de la Legión Cóndor 24
Legionarios alemanes muertos en la Guerra Civil 62
El despliegue 26
II Guerra Mundial: el combate continúa 66
Operación Úrsula 27
La visita de Himmler 68
Cartagena y Alicante 28
Una ciudad bajo las bombas 29
De Gernika a Brunete 30
Aliados de Hitler 70
La División Azul y otros apoyos 70
Campos de concentración 71
La Kriegsmarine 72
La Campaña del Norte 32
Gernika 34
El largo viaje de un cuadro 37
English abstract 73
Fuentes y bibliografía 77
La carretera de Málaga 38
Albacete: las veintitrés pasadas 40
La intervención alemana en la guerra de España
Antes de la sublevación
Antes de que se produjera la sublevación militar del 17-18 de
julio de 1936, España no formaba parte de las preocupaciones prioritarias de Hitler ni del Partido Nazi. Existía un intercambio económico limitado más importante para España que
para Alemania. En 1935 se enviaba a Alemania el 44 % de las
exportaciones de mineral de hierro y el 55 % de las de piritas,
pero solo las de piritas tenían alguna importancia para la economía alemana, ya que representaban en torno a la mitad de
sus importaciones de dicho mineral; la inversión de capitales alemanes en España era menor, por debajo del 10 % del
total de capitales extranjeros a comienzos de los treinta. En
los años veinte se habían producido algunos contactos entre
políticos, empresarios y militares alemanes que respondían
a las necesidades del discreto rearme alemán de la época
en tiempos de la República de Weimar, lo que propició algunas relaciones personales y la frecuente presencia en España de Canaris, jefe de los servicios secretos alemanes, pero
apenas intercambios importantes en el ámbito de la producción militar. Esa línea de relación se vio interrumpida durante el primer bienio republicano por la nueva política militar
impulsada por Azaña y no tuvo una reactivación suficiente durante la etapa de Gil-Robles como ministro de la Guerra por
más que este se interesara por ello. El interés entre la derecha española y Alemania se proyectó en una sola dirección y
la actuación de los agentes de la Gestapo o de la inteligencia militar que visitaron España proporcionó una información
tan generalista que tampoco podía suscitar entre sus jefes
mayor atención. Gil-Robles y Herrera Oria habían hecho breves viajes a Berlín en 1933 y 1934 sin llegar a tener ningún
encuentro con algún responsable, gubernamental o político,
de primera fila; sí, al parecer, lo había conseguido fugazmente con Hitler José Antonio Primo de Rivera en la primavera de
1934, aunque sin derivarse de ello nada concreto. Tampoco obtuvo ningún resultado el propio Sanjurjo, que en marzo de 1936 viajó a su vez a Alemania para comprar armas,
también infructuosamente. Por otra parte, la colonia alemana en España no tenía ni dimensiones cuantitativas ni presencias cualitativas para atraer la atención de su metrópoli. Antes de 1933 se cifraba en torno a los catorce o quince
4 La Legión Cóndor
mil individuos, casi todos ellos repartidos a partes iguales
entre las dos grandes ciudades, Madrid y Barcelona. A partir
de esa fecha, la represión nazi contra las fuerzas de izquierda y la población judía propició un brusco aumento de la inmigración que, según el jefe de extranjería de la ciudad de Barcelona, había producido entre 1933 y comienzos de 1934 la
afluencia de más de cuatro mil alemanes más, una cifra que
parece excesiva. Esa inmigración nueva se dispersó y en muchos casos pudo ser meramente de tránsito. En cualquier
caso, no alteró la fisonomía política de la colonia existente,
que se orientó de manera muy mayoritaria, pero también pasiva, en favor del nacionalsocialismo; en la votación efectuada en el consulado alemán de Barcelona durante las elecciones de marzo de 1933, el Partido Nazi obtuvo dos tercios de
los votos, mientras que socialistas y comunistas apenas sumaron el 6 % del total. Eso no se traducía, empero, en ninguna organización particularmente potente del partido en España, que reunía en 1933 un escaso centenar de afiliados,
incluido el territorio del Protectorado de Marruecos, y ninguna figura de relieve. En 1936 el grupo más importante era el
de Barcelona, dirigido por el gerente de la casa Miele en esa
ciudad, Hans Wilhemi, que pudo estar en relaciones con grupos civiles adheridos a la sublevación y también con algún
sector separatista catalán, pero en todo ello hay más rumor
que prueba documentada y lo que pudiera haber tuvo escasa
trascendencia. En definitiva, una colonia discreta en número
y actuaciones que se identificaba en su mayoría con el nuevo régimen, aunque sin réditos particularmente remarcables
y tampoco sin proporcionar ningún problema de importancia
por parte de los huidos.
La decisión del 25 de julio de 1936
Como no existía ninguna línea de relación efectiva entre
los conspiradores —militares o civiles— y la Alemania nazi, aquellos no la tuvieron presente de manera activa en sus
preparativos. Las miradas para recabar apoyo material a la
sublevación se dirigieron hacia Italia, donde Mussolini desde 1932 no había dejado de seguir la evolución interna de la
República española y de apoyar algunas peripecias de sus
 Rudolf von Moreau, as de la aviación (agosto de 1936)
En las primeras semanas de la guerra sobresale la figura del capitán bávaro Rudolf
Freiherr von Moreau. Tiene un papel destacado en las primeras jornadas del puente
aéreo entre África y la Península. Posteriormente, es el artífice del ataque al acorazado
Jaime I, acción que obliga a modificar parte
de los Junkers-52 de transporte enviados a
España para reconvertirlos en bombarderos.
Antes de que su unidad se traslade desde
el aeródromo de Tablada (Sevilla) al de San
Fernando (Salamanca), su fama se acrecienta con dos acciones que realiza a finales de
agosto: el arrojo que demuestra en el abastecimiento a los sitiados de Toledo y el bombardeo del centro de Madrid.
En el Alcázar de Toledo, rodeados por las
tropas republicanas, se refugian desde los
primeros días de la guerra, entre civiles y militares, unas 1800 personas bajo el mando
del coronel José Moscardó. Von Moreau realiza un primer intento de lanzar víveres en-
«Hace una media hora pasó avión
enemigo que ha arrojado unas
latas de viandas sobre el Alcázar».
Suministro del Alcázar de Toledo
(22 de agosto de 1936)
Parte del Gobierno Civil republicano de
Toledo, a las 19 h del 22 de agosto de 1936.
«28. Von Morro. Bombardeo
nocturno del Ministerio de la
Guerra y Estación del Norte,
a 500 metros». Anotación en el diario
vueltos en lonas sobre la fortaleza. Falla y
estos caen fuera del recinto. Vuelve a cargar
más suministros, esta vez alojados en el interior de bidones metálicos. En el segundo
intento, entra por el este desde la zona republicana y vuela más bajo. Para alegría de los
defensores del Alcázar, esta vez lo consigue.
Hospital
Santa Cruz
1
Von Moreau
Gobierno
Militar
Suministros
Cerco republicano
2
Alcázar
Ta j o
Catedral
de Joaquín García Morato.
-
José Moscardó
Río
Ayuntamiento
1236 militares
550 civiles
Plaza de
San Bernardo
Plaza de
Alonso Martínez
Pa
seo
Co
Cuartel de
la Montaña
Embajada
alemana
Un ministerio bombardeado
(28 y 29 de agosto de 1936)
ron
el
Von Moreau
Mo
nte
Tripulación del Ju-52
Rudolf von Moreau
Joaquín García Morato
sin
os
Bombardeo
Ministerio
de la Guerra
Bengala
Estación
del Norte
Plaza de
Castelar
Palacio Nacional
Dirección General
de Seguridad
Palacio de Santa Cruz
(Ministerio de Asuntos Exteriores)
Museo del Prado
Von Moreau contó como copiloto
en su ataque a Madrid con el
que será el futuro mito de la
aviación franquista: el capitán
Joaquín García Morato. Demostró su
osadía con el bombardeo nocturno
del palacio de Bellavista. Tras lanzar
dos bengalas para iluminar su objetivo
en la zona de la fuente de Cibeles, arrojó
las bombas sobre la mismísima sede del
Ministerio de la Guerra republicano, que
causó la muerte de un cabo.
21
 Una ciudad bajo las bombas (25 de noviembre de 1936)
Antes de los ataques se fotografiaron

los objetivos. El día 23, un He-70 de
3 Bombardeo de Cartagena: «las cuatro horas»
(de 17.30 a 21 h)
0
reconocimiento de largo alcance evitó el
fuego antiaéreo y realizó dos pasadas sobre
las defensas artilleras, la flota y el puerto
de Cartagena. El día 28, en Alicante, un
buque de guerra fotografió los depósitos
de CAMPSA horas antes del bombardeo.
250 m
Plaza Puerta
de Madrid
.
Bomba junto al tren
de La Unión. Varios muertos.
Estación
La Concepción
Plaza
Castellini
Arsena
Reconstruido desde sus
cenizas como Garaje Fénix.
l
Hospital
Militar
Garage
Hudson
Plaza
del Rey
Castillo de
los Moros
Santa Lucía
Muelle Alfonso XII
.
Los primeros aviones
lanzan bengalas que marcan
la ruta y los objetivos.
.
2
.
5 minut
os
25 de noviembre
a las 16.30 h Al partir una hora
antes, 13 barcos de la escuadra
se libran del bombardeo.
. 2. K/88
Reconocimiento
fotográfico de un
He-70.
Dársena
Muelle de
Rolandi
Muelle de
Figueroa
20 min
utos
17.30-17.45 h
Bombardeo de
10 Junkers-52/3M.
2. A/88
23 de noviembre
a las 15.15 h
Castillo
de Galeras
Dique de la Curra
Apostolado
Algameca
Chica
San Fulgencio
General Fajardo 1
San Leandro
Fuerte de Navidad
. 3. K/88
General Fajardo 3
18.03-21.00 h
Bombardeo de
10 Junkers-52/3M.
«Cartageneros, os acordaréis
General Fajardo 2
de mi nombre. Correréis como
conejos a vuestras madrigueras».
Queipo de Llano, Radio Sevilla.
La Podadera
Santa Florentina
Santa Ana
29
a Lumo
Kosnoaga
(273 m)
.
1
Sistema de alerta aérea
1 Detección aviones, aviso
con banderas.
2 Visión banderas, toque
de campanas.
3 Oída de campanas,
activación sirenas.
Santa Clara
Batallón Loiola
Árbol de Gernika
Casa
de Juntas
Paseo de la Unión
2
Parroquia
de Santa María
Escuela Pública
Hundido 24 muertos.
Ayuntamiento
Calle
Calle
del As
ilo Ca
Mercado
lzada
Hundido 45 muertos.
Batzoki
(PNV)
Indus
Plaza de
los Fueros
tria
Santa María
Sociedad
Guerniquesa
El Ferial
Paseo de los Til
Hermanos Carmelitas
(Hospital de Sangre)
os
Casa Loizaga
Solidaridad
de Obreros Vascos
(Sindical PNV)
San Juan
Frontón
Sociedad
Tradicionalista
Cal
Calle 8 de enero
le d
eS
Talleres
de Guernica
stac
la E
e de
Call
Casa del Pueblo
(Sindical socialista)
Call
eD
n
Estación
Jua
ión
an
Iparraguirre
on T
ello
.K/88 6 Junkers-52
.
Hans Henning von Beust
3000 incendiarias de 1 kg
96 de 50 kg
Burgos
Instituto de 2ª Enseñanza
Batallón Gernikako Arbola
Puente de Rentería
El humo impide la visión
a las últimas escuadrillas.
Ametrallan a la gente que huye
Aviación Legionaria 26a
5 Fiat CR-32
.
Mario Viola
a
Vitoria
R
ío
5 Messerschmitt Bf-109 B
Günther Lützow
end
iet
a
Vitoria
aM
.
Oc
2.J/88
Cataluña (del 23 de diciembre de 1938 al 10 de febrero de 1939)
Tras la batalla del Ebro, el ejército republicano está muy desgastado. Antes de acabar el año, las tropas
franquistas se marcan como objetivo la toma de Barcelona —importante puerto de la zona republicana­—
y de toda Cataluña hasta la frontera, por donde aun llegan, aunque escasos, suministros soviéticos.
«Casi todos los días, hubo
combates sobre el mar a la vista
de los habitantes de Barcelona».
donde ya están asignados los antiaéreos del
F/88 y los tanques de von Thoma.
Se atacan poblaciones, aeródromos,
puertos, barcos y carreteras. Es tal la cantidad de munición utilizada que llega a producirse desabastecimiento. Desde Palma,
llega un buque con miles de bombas para
paliarlo. En el avance, el A/88 y J/88 se trasladan al aeródromo de Sabadell, y el K/88
Informe del J/88.
Inicialmente, la Legión Cóndor, con cada vez
más pilotos españoles en sus unidades, da
apoyo a los Cuerpos de Ejército de Navarra
y Marroquí. Desde 1939, solo al de Navarra,
al de Lérida. La ofensiva provoca la huida
de las autoridades, soldados y miles de personas que colapsan las carreteras hacia la
frontera. Allí son atacados por la aviación. En
la retirada, prisioneros alemanes son ajusticiados. Otros pasan a Francia y son asistidos por el Aero Club de France y repatriados.
El 21 de febrero, en Barcelona, los alemanes
participan en el desfile de la victoria.
Arreau
.
7/2 Liberados 10 prisioneros alemanes
que pasan a Francia con los republicanos.
Aviones Legión Cóndor 12/38 2/39
. 1.K/88 25/1
He-111 choca
con montaña.
4 muertos.
Sanjurjo
K/88
Tauste
A/88
Bf-109 B C y D
37
22
He-111
40
31
Ju-87 (Stuka)
4
0
Do-17
5
4
Hs-126
0
1
He-45
5
3
He-59
8
7
He-60
0
1
. J/88
7/2 Asesinado
por milicianos comunistas.
Retirada republicana
Banyoles
Gerona
Cubells
Maials
Cervià
L’Espluga
de Francolí
. 3.K/88 5/2 He-111 choca
con montaña. 3 muertos.
Vilafranca
La Granadella
Reus
. Ln/88
Mollet
J/88
28/1 3 muertos en prisión.
29/1 Cae por antiaéreo. 1 muerto.
Pollença
AS/88
Sabadell
Barcelona
Villa Madrid 29/1
Tarragona
El Vendrell
Enero 80 ataques.
Arrojadas 7000 t
de bombas.
.
7/2 Suministro:
10 000 de 50 kg.
de s
4/1
Cabo Cullera
de
P a lm
. AS/88 31/12 He-59 derribado
por antiaéreo. 5 muertos.
A/88
J/88
El Prat
Valls
. 4.F/88 11/1 Alcanzado
por tanque. 3 muertos.
Sant Feliu
de Guixols
gat
CG
K/88
Llardecans
Palamós
bre
Cervera
Lérida
Zaidin
J/88
. 5.F/88 4/2 Fusilado.
Llo
CG
Vilajuïga
Figueres
Artesa de Segre
Almacelles
El Port de la Selva
Pont de
Molins
Roda de Ter
. Ln/88 3/1 Impacto
de artillería. 3 muertos.
. J/88
6/2 27 aparatos
destruidos en tierra.
Bf-109 capota. 1 muerto.
a
. 2.K/88
.
16/2 Tupolevs SB-2 destruyen
2 Bf-109 en tierra y pierden 2
aviones en el ataque.
La Sénia
J/88
54 De Teruel al Ebro
K/88
4/1 Cae He-111. 1 muerto.
5/2 Muerto en accidente de automóvil.
. Ln/88
Diciembre Ofensiva
simulada con emisiones de radio.
0
50 km
English abstract
Before the Uprising
(page 4)
Before the military uprising of July 17-18th 1936, Spain was
not among the main concerns of Hitler and the Nazi Party.
The limited economic exchange was more important for Spain
than for Germany. In 1935 44% of iron and 55% of pyrite were
exported to Germany. The German capital investment in Spain
was smaller: under 10% from the total foreign capital at the
beginning of the 1930s. The action of the Gestapo officers or
the military intelligence that came to Spain provided so general information it could not spark much interest among their
leaders. Gil-Robles and Herrera Oria made short trips to Berlin in 1933 and 1934 but they did not have any meeting with
any important government or political officer. Apparently José Antonio Primo de Rivera did meet with Hitler briefly in the
spring of 1934, although nothing specific was derived from it.
Sanjurjo himself did not get any result either. In March 1936,
he travelled to Germany in order to buy weapons, also unsuccessfully. On the other hand, the German colony in Spain had
no quantitative dimensions or qualitative presences in order
to draw attention of its metropolis. Before 1933, there were
about 14,000 and 15,000 people, and practically all of them
were equally spread out between the two big cities: Madrid
and Barcelona. The existing colony positioned itself mainly but
also passively in favour of National Socialism. In the voting
carried out in the German consulate of Barcelona during the
elections of March 1933, the Nazi Party obtained two thirds of
the votes. However, this did not result in any especially powerful organization of the party in Spain, which in 1933 barely had
a hundred of members, including the protectorate in Morocco,
and no prominent figure either.
Background and Creation
From July to December 1936
(pages 12-29)
As there was not any effective relationship between the conspirators and the Nazi Germany, they did not actively bear
the German country in mind for the preparations for the coup
d’état. That situation changed shortly after the uprising broke
out. It was essential to move the most professional and bestequipped contingent of the Spanish Army from the protectorate of Morocco to the Iberian Peninsula so that the coup could
finally succeed. Franco was determined but he had no resources. This is why on July 23rd 1936 he sent a personal message
to Hitler, who agreed to do the requested shipment and even
something else (page 14). Within a period of two weeks, Germany sent transport aircrafts Junkers 52, fighter planes Heinkel 51, anti-aircraft artillery pieces and support staff, as well
as the pocket battleships Admiral Scheer and Deutschland,
some destroyers and submarines (page 15).
Those shipments completely changed the war situation.
This decision gave the rebels new hopes and especially made
the mass movement of the Army of Africa possible. It was initiated on August 5th by sea and from August 10th it was accelerated with an intensive airlift (pages 18-19).
At the end of September, the German supplies opened a
new chapter by including tanks with two companies of support soldiers, one signal corps and campaign artillery pieces.
Some officers had to act as training instructors too (page 23).
Afterwards, Hitler took a new and important decision: he
added an exclusively German closed air-combat unit with its
own logistic and defence supports that would be under the
German command and would have direct contact with Franco. As a last resort, it would respond to the instructions of
the German government. This unit would be known as Condor Legion. Its material components and members arrived in
Spain between November 7th and 29th. It was an extraordinary contingent that also meant a quantitative leap since it
was made up of hundreds of planes and 4,000 men from the
start (pages 24-26).
In this first stage of the conflict, Operation Ursula can be
highlighted. It was a secret pact between Italy and Germany that was signed by the German captains Heye and Lange
and the Italian admirals Pini and Di Giamberino on November
17th. By means of this pact, it was agreed to relieve the submarine surveillance of the Spanish Mediterranean coast from
Cape Nao to the west with the intention of sinking Republican
ships (page 27). It was also agreed the bombings of Cartagena and Almería, cities with important military installations and
73