1 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4 OTRAS

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1 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4 OTRAS
 TEMA 4: Otras clasificaciones TEMA 4 OTRAS CLASIFICACIÓNES (I) Introducción La clasificación de Dewey La clasificación facetada de Ranganathan 1. Introducción Una clasificación documental de bibliotecas (San Segundo, 1996) es la agrupación u orden de libros y otro tipo de documentos según su contenido, formando grupos dentro de los campos del conocimiento humanos en que estos campos resultan ser compartimentos conceptuales. El objetivo principal de la organización del conocimiento es la agrupación por conjuntos temáticos de fondos bibliográficos y la elaboración de catálogos que faciliten el acceso al documento. Así la practicidad de las clasificaciones documentales conlleva características o criterios que determinan la adecuación y utilidad del sistema. Por tanto una buena clasificación documental debe reunir los requisitos y estructuración siguientes: l. Clases generales: Ha de abarcar todos los ámbitos temáticos en toda su extensión; en ellos se han de circunscribir los libros a las distintas ramas del conocimiento. Deben ser flexibles y expansivas, es decir que supongan la inclusión de nuevos conceptos. 2. Subdivisiones o facetas: Donde se han de ajustar los libros en otras clases o aspectos de menor extensión. Ha de tener un orden sistemático, es decir, una estructura que proceda de lo general a lo particular, es decir, deberá ser lógica, con carácter comprensible y razonable. 3. Divisiones de forma, lugar, tiempo, etc.: han de permitir una sistematización según la forma, la presentación de los libros, el lugar sobre el que tratan, el tiempo que acotan, u otros aspectos. 4. Notación: Se trata de pequeños símbolos ya sean números, letras, colores, u otros, que representan los nombres de las distintas clases, subdivisiones y otros aspectos; debe de tratarse de una notación sencilla y manejable. 5. Signos de relación: deben permitir la combinación e interrelación de sus distintos ámbitos conceptuales, por lo que las distintas clasificaciones documentales interrelacionan clases, lugares, puntos de vista, etc., y siendo representadas estas relaciones por diversos signos de puntuación como + / , . : ; etc. 6. Índice: debe tener un índice alfabético que facilite su uso para poder localizar con rapidez una materia dentro del esquema clasificatorio sistematizado; estos índices alfabéticos remitirán a la notación en la estructura clasificatoria. 1 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones 7. Aplicación del sistema: debe registrar indicaciones sobre el uso y manejo de la clasificación e indicaciones sobre el alcance y enlace de las materias, esto es, deberá incluir una breve explicación de la aplicación práctica del sistema clasificatorio. Deberá presentarse, en su conjunto, de forma que facilite la consulta de las materias. Estas características las presentan las clasificaciones que vamos a estudiar: 2. Clasificación Decimal de Dewey (DDC o DC) Melville Louis Kossuth Dewey (San Segundo, 1996), quien abreviaría su nombre por el de Melvil Dewey (1851‐1931), bibliotecario del Amherst College, formuló en 1873 la Clasificación Decimal cuando sólo tenía la edad de 22 años. Trató de hacer una clasificación eminentemente práctica para el Arnherst College. Esta era una institución media y poco conocida, cuya biblioteca se asemejaba a las bibliotecas municipales europeas, con un carácter de bibliotecas públicas y escolares. A pesar de ello los «colleges» son una institución típicamente americana que condicionó al joven Dewey, muy imbuido en la cultura americana, en su sistema clasificatorio. Eric de Grolier (Grolier, 1976, p 356) pone estos aspectos de manifiesto para corroborar las múltiples controversias que ha suscitado la implantación de este sistema que se extendió en la mayoría de las bibliotecas públicas y escolares, a pesar según asevera De Grolier, «de todas las críticas (Perkius, Cutter y otros muchos más tarde) que, teóricamente justificadas, pero en la práctica inoperantes, denunciaban sus múltiples defectos; entre ellos destacamos: ‐ Nacionalismo manifiesto, debido al lugar preponderante asignado a los temas relativos a los Estados Unidos de América. ‐ Carácter arbitrario de ciertas separaciones (Lingüística y Literatura, Historia y Ciencias sociales, Lenguas, y otras.) ‐ Falta de idoneidad de la sistematización con respecto al estado de los conocimientos científicos. Este sistema (San Segundo, 1996) se caracteriza por dar respuesta a las necesidades prácticas de un tipo específico de biblioteca, donde los libros eran de libre acceso para los usuarios. Por tanto en ningún momento se pretendió hacer una clasificación científica, tan sólo se pretendía dar respuesta a una serie de cuestiones prácticas. Melvin Dewey, inicia su trabajo partiendo de la clasificación creada por el director de la escuela pública de St. Louis: Harris, y la clasificación del catálogo de Natale Battezati de Milán el Nuovo Sistema di Catalogo Bibliografico Generale. La influencia del norteamericano William Torrey Harris y del italiano Natale Battezani es manifestada en el prólogo de la primera edición, en 1876, de las tablas de la Clasificación Decimal de Dewey que aparecieron bajo el título A classification and Subject index for cataloguing and arranging books and pamphlets of a library. Harris, era el autor del sistema implantado en las bibliotecas públicas de St. Louis, concibió su clasificación en relación a su trabajo y cargo. Publicó su sistema original en 1870 en el Journal of Speculative Philosophy y, según se desprende de la correspondencia entre Harris y 2 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones Dewey, éste nunca negó que la procedencia de su sistema se encontrara en Harris. Willian Torrey Harris tenía una formación filosófica y tomó como base de su sistema la clasificación de las ciencias que había propuesto F. Bacon. Hizo corresponder las subdivisiones de la ciencia a las tres facultades del espíritu: la historia a la memoria, la poesía a la imaginación y la filosofía a la razón. Harris invierte la clasificación de Bacon en Ciencia, Arte e Historia con un apéndice de miscelánea y, además, incluye nuevas subdivisiones y añade una notación numérica. Leidecker considera, desde el punto de vista lógico, que la clasificación de Harris es superior a la de Dewey, puesto que es más simple y hace más concesiones a los números decimales y, además, atribuye a Harris la paternidad de la primera creación, pero reconoce a Dewey su contribución por posibilitar la viabilidad de la clasificación de Harris en bibliotecas generales. La similitud entre ambas clasificaciones es evidente, y queda expresada en las tablas generales de la clasificación de Dewey que comprendían las disciplinas y notación decimal. 2.1. Principios de la DC División racional. Notación decimal Según los autores, las Siglas son: bien DDC, Dewey Decimal Classification, o bien DC, Dewey Classification; esta es la que utilizaremos. La gran innovación del sistema de Dewey (Maniez, 1992) es la de abarcar el conjunto del saber con la ayuda de una división jerárquica constante en base diez, en la cual el número de cifras corresponde al nivel de división: 646 costura1 646.4 confección de ropa 646.42 confección de ropa interior Hasta entonces, muchas bibliotecas se contentaban con repartir los libros en un pequeño número de categorías, en cuyo interior cada obra ocupaba un lugar fijo según su fecha de adquisición. Con este nuevo modo de distribución, el lugar de una obra se hace relativo y significativo. De todas formas, esta apuesta sobre la expresividad de la notación decimal uniforme no estaba desprovista de riesgos: ‐ La numeración en base diez, que poco a poco se había impuesto desde la Antigüedad, se estableció para contar, no para ordenar, y no es cierto que se corresponda con los hábitos espontáneos de la división en clases: la retórica antigua proponía para todas las materias la división en tres partes. ‐ El árbol de Porfirio propone un modelo dicotómico (división de cada clase en dos) y las clasificaciones de Aristóteles y Bacon no llegan hasta diez. Por otra parte, se puede demostrar matemáticamente que una división uniforme en base 3 sería la más 1
Cuando se escriben con minúsculas hacen referencia a la edición de la clasificación utilizada por Jacques Maniez en su libro Los lenguajes documentales y de clasificación. 3 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones ‐
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económica, en cuanto que procuraría el camino más corto para llegar a una clase del nivel más bajo. La rigidez del sistema numérico condena al clasificador que quiera hacer coincidir las divisiones de este sistema con las de una fragmentación de la realidad, bien a multiplicar el número de divisiones y a alargar los índices cuando el número de subclases es superior a 10, bien a dejar lugares vacíos en el caso inverso. Este inconveniente aparece claramente al comparar el reparto de las 1.000 clases del tercer nivel entre los grandes dominios del saber en Dewey y en uno de sus predecesores en el Amherst College, W.T. Harris. El último había adoptado una división de base diez y una notación decimal, pero se había cuidado bien de no hacer un reparto uniforme, con el fin de tener en cuenta el desarrollo desigual de las diferentes disciplinas. Así en la clasificación de Harris, sobre un total de mil clases, la filosofía ocupa 40 de ellas, las Bellas Artes 20, las ciencias 180 y las ciencias sociales 150, mientras que en el caso de Dewey cada disciplina tiene derecho uniformemente a 100 lugares. Melvil Dewey tenía conciencia de estos inconvenientes; supo paliarlos ingeniosamente y sacar provecho de las ventajas de su elección: ‐ En el plano lógico, una subdivisión uniforme confiere todo su significado al sistema de notación: así, 723 significa Arquitectura egipcia dentro del cuadro Arquitectura (73) y en el contexto Bellas Artes (7). ‐ En el plano técnico de la notación, el sistema decimal ofrece un cuadro dispuesto de tal forma que facilita su uso y una serie de símbolos universales en su grafismo. ‐ En el plano psicológico del usuario, la numeración en base diez forma parte de su universo familiar. No tendremos dificultad para enunciar oralmente los índices que trataremos como números enteros, o como continuaciones de números de tres cifras. Por otra parte, la base 10 engendra con pocas cifras un stock considerable de números diferentes: con seis cifras, disponemos teóricamente de un millón de materias posibles. Ahora bien, la psicología experimental nos enseña que una sucesión de siete elementos es el límite más allá del cual comienzan las dificultades de memorización. 2.1.1 Las clases principales Dentro de una clasificación monojerárquica la importancia de las clases principales es considerable. Dewey divide el conjunto de los conocimientos en 10 campos del saber, con nueve disciplinas básicas y la clase cero queda reservada para las obras generales tales como enciclopedias, diccionarios o teorías generales e informática. En el anexo 1 se muestra un sumario de las clases y subclases correspondiente a la 22ª edición de la DC, recuperada en línea del web site de la Online Computer Library Center, organismo encargado de la actualización y mantenimiento de la clasificación de Dewey. Las 10 clases principales son: 20ª Clasificación de Dewey (Béthery, 1993)
22ª Clasificación de Dewey (OCLC) 4 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones 000 generalidades 100 filosofía, parapsicología y ocultismo, psicología 200 religión 300 ciencias sociales 400 lenguas 500 ciencias de la naturaleza y matemáticas
600 técnicas (ciencias aplicadas) 700 arte 800 literatura 900 historia, geografía
000 Computers, information & general reference 100 Philosophy & psychology 200 Religion
300 Social sciences
400 Language 500 Science 600 Technology 700 Arts & recreation 800 Literature 900 History & geography
Esta división según disciplinas es comprensible, puesto que el fin de la DC es ordenar los libros y la literatura científica y técnica es de por sí tributaria de la organización del saber oficialmente reconocida. Pero veremos que esta elección fundamental de la base jerárquica está cargada de consecuencias. 2.1.2 Subdivisión de las clases en materias Si estas nueve clases principales están en la base de la división en materias, no son materias propiamente dichas. Para Dewey, la enumeración de materias no comienza de hecho hasta el segundo o incluso hasta el tercer nivel: los índices de la DC son normalmente de tres cifras seguidas a veces de un punto y de cifras suplementarias; se dirá clase 600 y no 6; clase370 y no la clase 37. El segundo nivel es el de las divisiones (según la terminología de Dewey). Citemos a modo de ejemplo, las divisiones de la clase 3: 300 Ciencias Sociales 310 estadística 320 ciencias políticas 330 economía 340 derecho 350 administración pública 360 bienestar social y movimientos sociales 370 educación 380 comercio 390 costumbres y folclore El tercer nivel crea un millar de secciones que podrán, por supuesto, engendrar subsecciones, etc. y que constituyen de hecho las materias básicas de la DC. Ejemplo: 371 escuela 372 enseñanza primaria 373 enseñanza secundaria 374 educación de adultos 375 programas de estudios 5 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones 376 educación femenina 377 escuela y religión 378 enseñanza superior 379 inspección y financiación de la instrucción por el Estado Constatamos que, en cada nivel, el cero queda en reserva para las materias generales del dominio considerado, por ejemplo 370 para los problemas generales de la enseñanza. Otra particularidad de la DC es la de dividir simétricamente las clases 400 (filología) y 800 (literatura); así, a 440 (filología francesa) corresponde 840 (literatura francesa). El paralelismo de los índices, que tiene un valor mnemotécnico incontestable, se vuelve a dar en varios dominios. A los niveles de especificidad más profundos (más allá de 3 cifras), los índices no se utilizan en su totalidad, dejando aparecer huecos en la notación, lo que puede revelarse como útil si aparecen nuevas rúbricas. Así, en el 4º nivel de división derivado de 370 (enseñanza), 371, 372 y 373 están ocupados por completo. En cambio 376 (educación femenina) únicamente comprende las subclases 5, 6, 8 y 9. En el conjunto de las tablas, muchos índices específicos no van más allá del 5º nivel y otros ‐ menos numerosos – comprenden 6 cifras. Por supuesto, no hay límite teórico, pero es raro que un índice supere las 9 cifras, excepto en la clase de las ciencias aplicadas (600) que fue subdimensionada en el momento de la creación del sistema (ej.: 621.381.512.2 = diodos). Globalmente, las tablas de la DC suman aproximadamente 20.000 rúbricas, mientras que la utilización de todos los índices del 5º nivel daría teóricamente, por si sola, un total de 100.000. Esencialmente, se trata de una estructura clásica de tipo monojerárquico; en cuanto a los principios de división, parecen provenir a la vez de la lógica, de la tradición y de contingencias prácticas. Así, la clase 370 parece dividida según los niveles de enseñanza, pero se encuentran en el mismo plano Enseñanza secundaria, programas de estudios y escuela y religión. 3. Los instrumentos de trabajo de la DC 3.1 Las tablas Actualmente, está vigente la vigésima tercera edición de las tablas de la DC. Independientemente de la edición completa de las tablas, existen también versiones abreviadas en diferentes lenguas. 3.1.1 Tablas principales La edición completa cuenta con más de 20.000 rúbricas; la edición abreviada alrededor de 6.000, lo cual es suficiente para una pequeña biblioteca general. De esta forma, las tablas de la DC constituyen una herramienta de trabajo fácil de utilizar, muy legible y documentada por notas abundantes (muchas más que en la mayoría de los tesauros). Cada nivel de especificidad se indica claramente por un sangrado a la derecha de los índices y las rúbricas. 3.1.1.2 Las notas explicativas 6 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones Al ser el pragmatismo uno de los rasgos de la DC, el autor, consciente de los riesgos de confusión derivados de la misma, introdujo ingeniosamente en sus tablas notas explicativas que facilitan su empleo: ‐ Las rúbricas centrales (distinguidas por el símbolo > señalan reagrupamientos de rúbricas consecutivas superpuestas al esquema general. Así > Producción de cultivos específico, corresponde a 633‐635 que reagrupa bajo una misma clase las rúbricas 633(grandes cultivos), 634 (arboricultura frutícola, silvicultura) y 635 (horticultura) subordinadas formalmente a la clase 630 (agricultura). ‐ las notas de agrupamiento mencionan materias un poco descentradas en relación con la rúbrica a la cual deben ser ligadas. Así 362.2 (medidas en favor de los enfermos mentales) es comentada por la nota (comprende también el trabajo psiquiátrico). ‐ Los reenvíos de orientación dirigen desde una clase de materias hacia la rúbrica adecuada para las materias que deberían normalmente estar subordinadas a la clase en cuestión. Ejemplo: 385 transportes por ferrocarril => para las redes de transporte por ferrocarril ver 388.4. Ocurre lo mismo para las materias que podrían ligarse lógicamente a dos rúbricas. Ejemplo: 551.1 para el magnetismo terrestre ver 538.7. ‐ Las notas de inclusión mencionan materias específicas de una rúbrica pero demasiado poco abundantes en obras como para que se les atribuya un índice particular. Ejemplo: 301.428 desorganizaciones, disolución, adaptación de la familia => comprendidas la muerte y la separación 301.428.4 divorcio. En este ejemplo, la materia muerte no dispone (provisionalmente) de índice propio. 3.1.2 Las tablas auxiliares Aunque la DC sea globalmente de tipo monojerárquica, trata de forma particular algunas nociones aplicables a todos los elementos de una clase, o incluso a todas las clases: este es el objeto de las tablas auxiliares. Progresivamente, las tablas auxiliares han ganado en importancia y la última edición de la Dewey contiene siete: T1‐subdivisiones comunes, T2‐
notaciones geográficas, T4‐subdivisiones de lenguas (válidas para los índices 420‐499), T5‐
notación de grupos étnicos, T6‐notación de lenguas, T3‐notación de literaturas (índices 810‐
890) y T7‐ notación de personas. A modo de ejemplo, veamos las subdivisiones comunes. Estas se refieren, bien a tipos de obras (noción completamente independiente de las materias), o bien al punto de vista intelectual (filosófico, histórico... ) adoptado en la exposición de una materia. ‐01 filosofía ‐02 obras diversas ‐03 enciclopedias, diccionarios ‐05 publicaciones en serie, publicaciones periódicas ‐06 organizaciones ‐07 estudios y enseñanza ‐08 la materia entre di versos grupos de personas 7 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones ‐09 historia y geografía Con el fin de facilitar la memorización, Dewey retoma astutamente para los índices auxiliares algunos de los índices principales de la clase 000 (por ejemplo 09 = historia y geografía). Estos índices auxiliares deben figurar obligatoriamente como sufijos. Pero se añaden libremente a los índices principales sin marca de separación (como el sufijo adverbial ‐mente se añade en español a los adjetivos calificativos). Ejemplo: 61 = medicina 610.9 historia de la medicina 331 = trabajo 331.09 historia del trabajo 3.1.3 El índice Uno de los puntos fuertes de la DC es la importancia atribuida al índice alfabético de materias, complemento indispensable de las tablas. En la edición completa, el mismo consta de casi 100.000 entradas. En principio, sirve de guía de orientación a los usuarios que no estén familiarizados con las tablas. Pero, además, resulta indispensable por la propia concepción de base de la DC. En efecto, vimos que dentro de la cuestión fundamental de la división de primer nivel, la elección de Dewey se sustenta sobre una subdivisión por disciplinas. En consecuencia, las clases principales, que determinan todas las subclases de nivel inferior, parten de una fragmentación del saber comúnmente admitida por los especialistas de la época, y no de una fragmentación natural de la realidad, tal como se nos aparece (los elementos terrestres, los astros, los animales, los vegetales, el hombre, la familia, los instrumentos ... ). Las disciplinas son puntos de vista particulares sobre el universo, provistos de un método riguroso de investigación y de teorización. Observemos que no son por lo tanto facetas, en la medida en que no se aplican al conjunto de la realidad: las ciencias sociales (clase 300) no se aplican a los minerales, lo mismo que las ciencias exactas (clase 5) tienen pocas relaciones con la religión. Por otra parte, las materias son focos de interés para un elemento cualquiera de la realidad, sea percibido naturalmente o de forma más elaborada. Así, el agua (visión natural) es una materia, tanto como las ecuaciones diferenciales (ciencia matemática). De aquí se deduce que en la DC: ‐ Las disciplinas se distinguen claramente de las materias (hemos visto que, de hecho, la enumeración de las materias no comienza hasta el tercer nivel). ‐ Las rúbricas de las tablas no incluyen las materias generales que responden a una visión natural (no científica) del universo. Así, la mujer, el fuego, la fiesta, el perro... no son tenidos en cuenta por un índice particular, sino esparcidos en tantos índices como disciplinas se interesan por ellos. Ejemplo extraído del índice de la DC: MUJER ‐ derecho 346.013 8 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones ‐educación 376 ‐ psicología 155.633 ‐ sociología 305.4 ‐ trabajo 331.4 Puede parecer lamentable que la DC no haya previsto el caso de las obras que enfoquen una realidad sobre un aspecto global o pluridisciplinar. Las últimas ediciones llenan un poco esta laguna. Así 260 se aconseja para las obras que traten sobre la Iglesia Cristiana en general. En su conjunto, el índice de la DC es un buen útil de trabajo. Aparte de los términos esparcidos que acabamos de mencionar, indica también los términos genéricos o específicos que presenta claramente gracias al sangrado; sin hablar de los numerosos reenvíos a términos preferenciales o a nociones vecinas (véase además). Ejemplos: ABSTINENCIA alcohol moral véase: bebidas alcohólicas. moral MOLDEADO (fundición) técn. de fabr. 671.25 metales férreos 672.25 v.a. los otros diferentes metales 4. Utilización de la DC 4.1 Por el clasificador Estos útiles de trabajo están ante todo destinados al bibliotecario. Después de haber analizado el libro y de haber formulado mentalmente la materia dominante, el clasificador determinará tan precisamente como sea posible el punto de vista desde el que es tratado: una obra sobre el matrimonio. ¿se interesa más por la ceremonia, por la psicología de la pareja, por las implicaciones jurídicas o por las relaciones sexuales de los esposos? Se comprende, en función de las páginas precedentes, cómo estas preguntas preparan la elección de un índice adecuado: si el clasificador es inexperto, utilizará en primer lugar el índice y después las tablas: pero, en la medida de lo posible, se esforzará en retener las cien divisiones de la DC y acceder directamente a las tablas. En cuanto a las dificultades de elección de la materia principal inherentes a toda clasificación, y que ya hemos mencionado, la de Dewey ofrece los paliativos siguientes: ‐ Si la obra trata dos materias de igual importancia, elegir el que venga el primero en la tabla. Así para Música sinfónica y música de cámara, se elegirá música sinfónica (785.1) y no música de cámara (785.7). ‐ Si varias materias vecinas del mismo rango jerárquico se reparten una obra, dispondremos del recurso de la rúbrica genérica cuando exista. Un libro sobre la geometría euclidiana (516.2), la geometría analítica (516.3) y las geometrías no euclidianas (5 16.9) se clasificará en el índice 516 (geometría). 9 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones ‐
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Las obras interdisciplinares presentan, como hemos visto, un problema difícil: la mayor parte de las veces, deberemos elegir la disciplina que parezca reflejar la óptica preferida por el autor. En ciertos casos, las últimas versiones prevén un índice de reagrupamiento: 304.2 para la polución en general, 00 1.64 para los ordenadores en general. Si alguna rúbrica no corresponde a la materia tratada (por ejemplo, porque se trate de un concepto nuevo), se escogerá la materia más próxima. Así, la sistémica podría ligarse a sistemas (003) o a cibernética (001.53). 4.2 Por el lector Para el usuario, el principal atractivo de la DC es el de poder elegir sobre ejemplares recorriendo las estanterías. En todo caso, el índice es de consulta fácil; puede completar llegado el caso el catálogo alfabético de materias. 5. Conclusión La DC es ya centenaria. Desde la publicación (anónima) en 1876 de un primer esquema por Melvil Dewey, su éxito no ha dejado de afirmarse, primeramente en los EEUU y en los otros países de lengua inglesa, y después en toda Europa y los demás continentes. Las tablas abreviadas han sido traducidas a numerosas lenguas (árabe, turco, japonés, portugués...). Hoy, el 90 % de las bibliotecas americanas la han adoptado, y desde 1930 ‐suprema consagración‐ la Biblioteca del Congreso dobla su propio sistema de clasificación estableciendo para cada nueva ficha el índice DC además del índice LC (Library of Congress). En Francia, la Dirección de Bibliotecas Públicas recomienda su uso. Independientemente de su utilización en las bibliotecas, también se emplea como instrumento de clasificación en los organismos bibliográficos que publican catálogos e índices (British National Bibliography, Indian National Bibliography…). Finalmente la CDU está fuertemente inspirada por la DC. Ciertamente, la DC no está desprovista de defectos, muchas veces destacados: falta la lógica de numerosas subdivisiones, inconveniente de la división por disciplinas, carácter obsoleto de las diez clases principales, complejidad de la sintaxis de los índices auxiliares, predominio de la ideología norteamericana (religiosa, cristiana, liberal, capitalista), que sostiene la organización de los conocimientos y limita su universalidad. Pero estas debilidades son de poco peso frente a las ventajas prácticas de la DC: 
Desde su creación, presentaba avances considerables: ‐ Localización relativa fundada sobre una clasificación jerárquica por materias. ‐ Método decimal de ordenación fácil de manipular y de memorizar. ‐ Índice práctico y copioso. 
Después de un siglo la DC ha evolucionado de manera pragmática y realista, gracias a su autor, que elaboró doce ediciones sucesivas, y después de la muerte de éste (1931), por los cuidados de la fundación encargada de asegurar su explotación (el Lake Placid club – EEUU‐ que además se beneficia del sostenimiento de la Biblioteca del Congreso). En razón de los potentes apoyos de los que es beneficiaria, la DC puede proceder regularmente a las necesarias revisiones. De una edición a otra, las anomalías se corrigen: 10 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey TEMA 4: Otras clasificaciones algunas clases se revisan fundamentalmente (llamadas secciones Phoenix). Por supuesto que estas revisiones sucesivas no dejan de presentar inconvenientes para los bibliotecarios, pero la supervivencia de una clasificación tiene este precio. Encuestas recientes realizadas a usuarios de la DC muestran que, pese a sus defectos, esta clasificación continúa siendo popular gracias a su facilidad de empleo. Lo que probaría, si todavía fuese necesario, que en el dominio de las aplicaciones profesionales, el ajuste de los fundamentos teóricos y el rigor lógico cuentan menos que la eficacia y la simplicidad de la puesta en práctica. 11 Lección 1: Clasificación Decimal de Dewey 

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