Venciendo las tentaciones como Jesús

Transcripción

Venciendo las tentaciones como Jesús
VENCIENDO LAS TENTACIONES COMO JESÚS
Duración 35 min.
1 Timoteo 6:9, Lucas 4:1-13, Filipenses 2:5-8, Santiago 1:12, Santiago 1:13, 1 Corintios 10:13,
Lucas 4:4, Salmos 132:15, Lucas 4:8, Lucas 4:12, Marcos 14:38, 2 Pedro 2:9
Objetivo: Que el creyente pueda vencer las tentaciones con las enseñanzas que Jesús dejo a cerca
de ello.
Introducción.
Muchas veces que nos hablan de Dios y de su santidad, no queremos aceptar la palabra debido a
que nosotros nos sentimos señalados, perseguidos, sucios y culpables, y esto es porque no hemos
dejado el pecado o estamos viviendo en circunstancias que no nos convienen y que no le agradan a
Dios.
Por estas razones hay mucha gente que dice que Dios no es para ellos, porque no pueden dejar de
pecar ni quieren dejar su vida de pecado por la debilidad de su carne, y hay quienes han querido
dejar de pecar y se han esforzado pero no saben como alejarse de las circunstancias que los tienen
atados una vida de culpabilidad. Es porque no saben como hacer frente a las tentaciones, hay
quienes han salido de un problema con trabajo cuando ya se están metiendo en otro, y estos
problemas son con su moral, con corrupción, avaricia, pecados sexuales, vicios, traiciones, robos,
altivez, chismes, griterías etc. (1 Timoteo 6:9).
Hay salida
Jesús fue tentado en el desierto por Satanás (Lucas 4:1-13), y venció toda tentación. Mucha gente
pone como pretexto que “Jesús era Dios” pero la Biblia dice que no quiso ser como Dios, con el
propósito de hacernos ver que también nosotros podemos vencer. (Filipenses 2:5-8).
VENCIENDO LA TENTACIÓN.
Para vencer las tentaciones, antes debemos tener esto en mente:
•
•
•
Dios bendice y premia al que soporta la tentación.
Santiago 1:12
Dios no es el que tienta.
Santiago 1:13
Dios no permitirá que seamos tentados más de lo que podamos resistir, y Él nos dará la
salida.
1 Corintios 10:13
Jesús nos muestra como vencer.
• No solo de pan vivirá el hombre (Lucas 4:4).
Cuando venga a ti algún pensamiento de
retar a Dios, o cuando estés necesitado de dinero, cuando te ofrezcan un trato deshonesto o
ilegal, cuando te sientes desesperado piensa Dios proveerá (Salmos 132:15).
•
Viviré de la palabra de Dios (Lucas 4:4). Cuando te encuentres rodeado de malas noticias
y perjurios, cuando los médicos te desahucien, o te digan que te va a ir muy mal, cuando
estén diciendo que te van a correr de tu trabajo, o que no vas a poder realizar tus sueños,
cuando te traten con injusticia y te abandonen, cuando no tienes apoyo de nadie, Lo que
Dios te dice es diferente.
•
Vete de mi Satanás (Lucas 4:8). Cuando estés siendo tentado para pecar; sexualmente, o
decir mentiras, hacer algo indebido, actuar violentamente, si vas a decir maldiciones o
palabras hirientes, blasfemar, cuando quieres tomar alcohol, fumar o drogarte, cuando
tengas deseos suicidas u homicidas, cuando estés pensando en venganzas o estés deprimido,
cuando por enojo vas a tomar un mala decisión y cosas semejantes, echa fuera a Satanás.
•
Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás (Lucas 4:8). Cuando te inciten o desees
hacer algo para alguien que no sea Dios, o cuando estés pensando derrumbar tus principios
por agradar a alguna persona, cuando te invitan a tomar o fumar u otra cosa que no es
correcta para entrar a algún círculo social o para ser aceptado.
•
No tentarás al Señor tu Dios (Lucas 4:12). Cuando quieras que Dios responda a tu
manera, cuando vengan a tu mente ideas de lucrar con las cosas de Dios; ya sean sanidades,
milagros, profecías etc. Cuando quieras revelarte con tus autoridades porque te sientes
respaldado por Dios (la rebelión no viene de Dios), cuando te enfermas y el médico te dice
que descanses y que te cuides, y no lo haces porque dices que Dios te sanará, pero en
realidad más que fe es que no te gusta obedecer instrucciones.
•
Escrito está (Lucas 4:8). Cuando está claudicando tu fe.
Conclusión.
Debemos estar en oración velando por no caer (Marcos 14:38), ser piadosos con los que caen para
que Dios nos libre de tentación (2 Pedro 2:9), podemos vencer, debemos ser fuertes, valientes,
violentos con el enemigo (Satanás y sus demonios), no dejarnos vencer, siempre estamos siendo
tentados así que siempre tenemos la oportunidad de vencer y ganar la batalla de la cual Dios ya nos
ha dado la victoria.

Documentos relacionados