Visita S.A.R. LA Princesa de Asturias

VISITA DE S.A.R. LA PRINCESA DE ASTURIAS
3 de noviembre 2009
Alteza.
Presidente de la Junta de Castilla y León
Excelentísimas e Ilustrísimas Autoridades.
Señoras y Señores
Para una Alcaldesa es siempre un privilegio representar a
su ciudad, pero en esta ocasión, me siento especialmente
orgullosa de ejercer el papel de anfitriona. Es un inmenso
honor, Alteza, daros la bienvenida a la ciudad de Zamora
en vuestra primera visita oficial como Princesa de
Asturias.
Zamora os recibe con todo su afecto y admiración. Y con
Usted a la Corona como la Institución que nos une, nos
fortalece y nos representa a todas y a todos los españoles.
La nuestra es una ciudad profundamente ligada a la
unidad de España, noble y leal a la Corona: “La muy
Noble y leal ciudad de Zamora”, título otorgado por el
Rey Enrique IV de Castilla.
En nuestra bandera, sobre las ocho tiras encarnadas que
simbolizan las ocho victorias de Viriato, ondea una cinta
verde, entregada por los Reyes Católicos como
reconocimiento a esa lealtad.
La nuestra, Señora, es una ciudad llena de pasiones, de
grandes gestas y hazañas. Ciudad de romancero, rica en
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patrimonio artístico y cultural que se ha consolidado a lo
largo de muchos siglos de fascinante historia.
Hemos sabido conservar y recuperar ese acervo cultural
como una parte fundamental de nuestra memoria, de
nuestra identidad y de nuestro futuro.
Ese legado pervive en las iglesias románicas, en las
fachadas modernistas, en palacios, calles y plazas, y,
ahora, también en nuestro Castillo.
El Castillo, que hoy habéis inaugurado, se ha convertido
en un referente de primer orden en la historia de la
ciudad. Un tesoro arqueológico y arquitectónico del
que, a partir de hoy, nos sentiremos más orgullosos los
zamoranos.
Su recuperación simboliza nuestra permanente vocación
de conservar el pasado y comprometernos con el futuro.
Nuestra voluntad de dar vida al inmenso patrimonio
monumental del que somos depositarios.
Queremos realzarlo y revalorizarlo, cuidarlo….
y difundirlo para unir a él una parte importante de
nuestro progreso y de nuestra fuerza de futuro.
Por eso, Alteza, Zamora se siente hoy premiada con su
presencia. Con usted, Señora, hoy se ha dado un paso más
en este camino. Gracias.
Pero sobre todo, Alteza, es un gran honor, para mí, y para
todas y cada una de las mujeres de esta sala, que su
primera visita oficial a la ciudad de Zamora sea para
encontrarse con nosotras: las mujeres, las mujeres de
Zamora, las mujeres de Castilla y León.
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Su presencia en este foro nos alienta y nos anima a seguir
ganando el futuro.
Vd. Señora, ya ha entrado en la Historia, pero sólo con su
esfuerzo ha encontrado su lugar en ella .
Por su sencillez y su grandeza, la sentimos cerca. Por su
espíritu de superación y de lucha, nos sentimos
representadas, y también
reflejadas en usted. Es la
princesa de Asturias, es nuestra Princesa, y a la vez, es una
mujer de alma sencilla porque lleva una vida real en su
memoria. En su trayectoria, un bagaje de esfuerzo, de
coraje, profesionalidad e iniciativa, y, en su corazón, una
experiencia vital cargada de sensibilidad y cercanía.
Hoy, Alteza nos sabemos comprendidas por la capacidad
que demuestra, desde su posición en la Casa Real, de tener
una visión del mundo auténtica, humana y sobre todo
comprometida.
Y como decíamos, Alteza, forma ya parte de nuestra
Historia con mayúsculas, de nuestra historia como país;
pero también forma parte de la intrahistoria de la igualdad,
de la historia en femenino
Las mujeres hemos sido siempre, una parte fundamental
en la vida de nuestra sociedad, de nuestros pueblos, y de
nuestras ciudades. Somos el elemento esencial en el
progreso, en la agricultura, en la ganadería, en el interior
de los hogares, en la trasmisión de valores y en la cultura.
Y hoy, Señora, no es posible hablar de desarrollo y de
futuro sin contar con nosotras, sin nuestro espíritu
emprendedor, sin nuestra perseverancia y nuestra
vocación de progreso. Porque las mujeres seguimos
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también esa máxima de Unamuno “procuramos más ser
padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado”
Han sido muchos los reconocimientos y logros
conseguidos. Pero lo hecho, aun siendo mucho, sigue
siendo insuficiente en la igualdad , en el empleo, en la
lucha contra la violencia de género, en la conciliación real
de la vida laboral, familiar y personal, en una mayor
participación en la toma de decisiones, y en la consecución
de un medio rural mas vivo, dinámico y emprendedor.
Somos iguales en derechos, pero el ordenamiento jurídico
no constituye un cambio en sí mismo, es sólo el medio del
que nos valemos para desarrollar iniciativas. Queremos
vivir la auténtica igualdad en el
campo
de las
oportunidades para todos, la que nos permitirá poner en
valor
nuestra
formación, nuestra profesionalidad,
nuestras empresas, nuestros proyectos en fin… nuestra
voluntad de seguir trabajando por un mundo mejor,
Nosotras Alteza seguiremos trabajando, mostrando con
orgullo nuestra condición de mujeres comprometidas con
la sociedad, nuestra condición de madres, compañeras,
maestras, ganaderas, artesanas o empresarias...
Y allá donde todavía sea necesario, seguiremos luchando
para que nadie tenga repetir el lamento de nuestra reina
más emblemática, el lamento de Dña Urraca
“y a mi, porque soi mujer, dejáisme desheredada”.
Nuestra reina resistió 7 meses sitiada, aquí, en Zamora “
Zamora la bien cercada”.
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Su presencia hoy aquí nos ayuda a derribar ese cerco
de cristal, para que de invisible pase a ser sólo parte de la
memoria.
Ahora y siempre, Alteza, sea bienvenida, y muchas
gracias.
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