Solo coreográfico (35 mn) Coreografía y danza : Pablo Esbert

Transcripción

Solo coreográfico (35 mn) Coreografía y danza : Pablo Esbert
pablo madrid
esbert berlin
lilienfeld
www.pabloesbertlilienfeld.com
EDIT
Solo coreográfico (35 mn)
Instalación multimedia (20 à 30 mn)
Coreografía y danza : Pablo Esbert Lilienfeld
Iluminación y técnico : Daniel R. Boto
Voz : Mehdi Dehbi
EDIT ha recibido el apoyo del programa Artistas en Residencia de La Casa Encendida, del Aula de Danza de Alcalá
de Henares y de Tanzfabrik Berlin.
Gracias a Lucía Carballal, Daniel Abreu, Román Torre y Yoann Trellu.
“Cuando era pequeño y veía una película, me fijaba en el pestañeo de mis ojos, el de mi
padre o el de mis amigos. Entre 7 y 8 años, un día le dije a mi padre: “tú nunca has visto
una película entera; debido al pestañeo de tus ojos, pierdes obligatoriamente algunas
imágenes...”
Esta percepción prematura me llevó a construir, de niño, pequeños proyectores de
imágenes con sombras. Intenté animarlos haciendo pasar las figuras para crear la ilusión de movimiento, siempre sin éxito. EDIT es un guiño a ese comportamiento infantil
que se convirtió como en una obsesión”
Pablo Esbert Lilienfeld
Pablo Esbert Lilienfeld - EDIT
De esta comprobación infantil, Pablo va a intentar comprender la ilusión del movimiento en la
televisión y el cine... que el movimiento continuo no es más que una gran ilusión creada por el
montaje sucesivo de imágenes y de zonas negras.
Así, como un performer loco, se lanza a la creación de EDIT. En directo y en una coreografía prisionera de un timing insoportable, con un pequeño auricular conectado a un cronómetro, ante cinco
cámaras y con un sistema informático que le ha llevado varios meses programar, va a intentar
reconstituir el montaje de cinco escenas audiovisuales.
EDIT parece durante los primeros minutos un embrollo de acciones desordenadas y poco a poco
comenzamos a comprender que Pablo nos ofrece, en directo, el montaje de una película, o mejor
dicho de cinco corto-metrajes, en una danza milimetrada.
Ante su micrófono nos explica esta esquizofrenia que le invade. Sus frases se cortan, las palabras
se rasgan para ser retomadas algunos segundos más tarde. Su texto es hermoso, poético, por lo
que no podemos evitar seguir su recorrido gestual, mirar su cuerpo agotarse y escuchar como se
acelera su respiración.
Tras treinta y cinco minutos de carreras frenéticas, la performance escénica se transforma en instalación de video. El público desciende al
escenario y deambula libremente por la escenografía para desubrir
cinco pantallas de televisión. El sistema informático a reconstruido las
acciones diferenciadas de la performance de Pablo. Sus carreras cronometradas (entre las diferentes escenografías) han sido suprimidas.
EDIT nos cuestiona sobre la falsa realidad y la verdadera mentira de
los medios audiovisuales. Pero sobre todo sobre la forma de percibir el
mundo de hoy: desconectado, entrecortado, cortado al infinito. Es así
como percibimos nuestra realidad.
Incluso si el parpadeo de nuestros ojos nos ha hecho perder algunos
mili-segundos de este espectáculo/performance/multimedia, la carrera coreográfica demente de Pablo Esbert Lilienfeld nos invita a la
reflexión.
¿No está nuestra percepción del mundo irremediablemente influenciada por la forma audiovisual? ¿Vemos la realidad a través del prisma
del producto audiovisual?
El cine es la mentira de la vida y al mismo tiempo una gran verdad.
Pablo Esbert Lilienfeld - EDIT
EDIT
Mi narración escénica
Hola. Mi nombre es Pablo. El 2012 fue un año muy especial para mí. Estaba muy motivado así que empecé a escribir un
proyecto. Ha pasado ya tiempo y ahora puedo hablar de él, pero necesité tomar la distancia suficiente para no echarme a
llorar al nombrarlo.
Bueno, aquel año comencé mi proyecto inacabado EDIT. EDIT. En él utilizaba mi cuerpo y el espacio que me rodeaba como
si se trataran de un video. Quería pensar el teatro en términos pertenecientes a lo audiovisual. De ese modo me empeñé en
editar ese cuerpo y ese espacio reales, en editar la realidad cortándola y montándola igual que una película. Para lograrlo
traté cinco secuencias de movimiento y acciones como si fueran pistas de video y audio en un programa de edición. Asigné
cada una de estas cinco pistas a un lugar específico del estudio. Al ocupar cada uno de estos espacios reproducía su pista
y al abandonarlo esta quedaba en pausa, para retomarla después en el lugar en el que la había dejado. Este sistema me
permitía, al moverme ente los diferentes espacios o pistas, editar su contenido creando un discurso fragmentado como
ocurre en una película. Probé múltiples combinaciones, cortes con mayor o menor frecuencia, y experimenté reproduciendo
las pistas en bucle para que nunca se terminaran. El principal problema al que me enfrenté fue la imposibilidad de hacer
cortes perfectos. La realidad inmediata es continua, así que siempre quedaba algo entre una acción y otra; como un residuo,
un espacio neutro que era tierra de nadie. Me volví loco intentando reducir al mínimo ese residuo, ese espacio y tiempo de
corte entre las acciones. Finalmente decidí eliminarlo desplazándome de una pista a otra lo más rápido posible. Así pasaba
los ensayos corriendo ahogadamente mientras pensaba en la posición en la que tenía que retomar cada pista. Poco a poco,
esas carreras eufóricas entre unas acciones y otras, con mi cabeza en total alerta y concentración, se me empezó a revelar
como un nuevo estado de conciencia. Precisamente lo que ocurría entre una pista y otra, ese tiempo y espacio teóricamente
vacíos, se llenaban de un personaje indefinido que corría y cuya mente estaba totalmente desplazada hacia el lugar de las
acciones. Ese estado de ausencia empezó a obsesionarme. Pensaba en qué se escondía en los cortes perfectos del cine,
los fantasmas que habitan siempre invisibles entre un fotograma y otro. Empecé a soñar con pantallas grises y luminosas,
llenas de una nada elástica. Me preguntaba qué había entre un sueño y el siguiente, entre un pensamiento y otro, y esa
búsqueda rizada era como un guante dado la vuelta. Los espacios vacíos comenzaron a llenarse de seres vacíos que me
rodeaban y me observaban desde lejos, todos ellos invasores sin nombre que se paseaban a mi alrededor. Esa masa deforme brotaba cada vez más abundante entre los ladrillos con los que construimos la realidad, hasta que me fue ahogando
poco a poco, y el mundo matemático y lógico que estaba tratando de construir con EDIT se hundió en el lodo espeso.
Finalmente cancelé el proyecto, aterrado ante ese mundo irracional que surgía por entre las grietas de la materia. Decidí
volver al mundo ordinario de la realidad continua, en el que no hay fisuras y en el que vivo encerrado y seguro. Cada noche
sueño que me observan desde el otro lado cientos de ojos vagabundos, como si fueran los espectadores que EDIT nunca
llegó a tener. Quemé todos los documentos, excepto los vídeos
La Pieza
El juego con los objetos y los conceptos de continuidad y discontinuidad se van desarrollando a lo largo de
la pieza y se convierten en el discurso interno de EDIT.
La falta de continuidad (raccord) es un error que en cine se intenta evitar. En la realidad física, inmediata,
no tiene sentido hablar de continuidad ya que la realidad no mediada es continua por sí sola. EDIT es mi
pelea personal contra el continuidad. Una pelea en la que soy siempre el perdedor: la realidad vive, de algún
modo, en un continuo e infinito raccord.
La pieza es un viaje desde un mundo matemático y luminoso a otro más orgánico y oscuro. El mundo lógico
se desmorona y va surgiendo otro que es una gran incógnita, un misterio.
Acabé soñando en qué se escondía dentro de los cortes perfectos del cine, los fantasmas que habitan
siempre invisibles entre un fotograma y otro. Me preguntaba qué había entre un sueño y el siguiente, entre
un pensamiento y otro, y esa búsqueda rizada era como un guante dado la vuelta.
La instalación
El proyecto se compone de dos partes: una performance y una instalación. En cada representación cinco
video-cámaras graban las acciones, una cámara por cada acción y espacio. Al final de la performance los
espectadores/visitantes pueden bajar a escena y mirar en cinco televisiones una versión reconstruida de
las acciones que han tenido lugar esa misma noche. Si, en la performance, mi objetivo era fragmentar las
acciones, en la instalación el video reconstruye esas acciones devolviéndoles la continuidad.
En este camino de ida y vuelta el video tiene una función inversa a la habitual: en vez de fragmentar la
realidad continua de la cual es una copia, aquí lo utilizo para reconstruir una realidad discontinua, ya fragmentada de antemano de forma artificial.
Critica
En la velada del singular y prometedor Pablo Esbert Lilienfeld vamos, a capas, hacia la validación exponencial ritmada, justificada y creíble que le hace aparecer como aquellos artistas fundacionales de los
años setenta neoyorkinos. Hay un sentido crítico incluso en el material de baile propiamente dicho, aún
estimulándolo hacia fuera del ámbito dancístico acotado.
Esa excentricidad que afecta el equilibrio del cuerpo fragua estilo; es un camino abierto a explorar.
Roger Salas. El País 24 Abril 2011
Es una obra completa. Distinta, diferente. Magnífica.
...
Obra de un nivel intelectual extremo y que, sin embargo, expresa su dificultad conceptual con movimiento,
palabra y música con extrema claridad... Esta obra es un discurso de una enorme inteligencia. Una inteligencia que asume el arte como vía exploratoria del conocimiento y como un proceso abierto.
Emilio Porta.
Vicesecretario de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles,
crítico literario, de cine y de teatro, y colaborador habitual de la revista Mirador.
Lo interesante, además del análisis del diseño y la realización, es el planteamiento filosófico del trabajo.
Un tema muy interesante, muy bien diseñado y ejecutado, que tiene su secreto a la hora de la puesta en
escena, del que se aprovecha su intérprete.
Se nota que le gusta desafiarse a sí mismo, al igual que está clara la influencia de sus dos líneas formativas,
dividido entre la imagen y la danza.
Julio Castro. LaRepúblicaCultural.es 1 de Mayo 2011
EL AUTOR
Pablo Esbert Lilienfeld nació en Madrid. Estudia Comunicación Audiovisual
en la Universidad Complutense de Madrid, danza contemporánea en el Real
Conservatorio de Danza de Madrid y música en la Escuela de Música Creativa
de Madrid.
Combina el trabajo como bailarín y actor freelance con compañías europeas
con su trabajo creativo tanto audiovisual como para la escena. Ha trabajado
con coreógrafos y compañías como ALIAS y Philippe Saire en Suiza, Christoph Winkler en Berlín o Pedro Berdayes, Carmen Werner y SUDHUM en
Madrid.
En 2005 crea Can’t keep all this laughter to myself anymore, su primera pieza,
por la que recibe dos segundos premios en ADAE (Alcobendas, Madrid) y
en DanSalt (Gerona), y una residencia artística en La Caldera (Barcelona)
otorgada por el XIX Certamen Coreográfico de Madrid. Durante esa residencia rueda su primer video-danza, Ojos en glosa. Este fue proyectado en el
contexto del XX Certamen Coreográfico de Madrid, en el Teatro Fernando de
Rojas, y en el festival IDN, Barcelona.
En el 2006 crea su segunda pieza, PLAY, estrenada en el Teatro Pradillo. En
el 2009 recibe una residencia artística de La Casa Encendida para realizar su
última creación, EDIT, presentada en La Casa Encendida en el 2010y en el
Teatro Pradillo en el 2011. En 2010 rueda The Wrong Band, video creado para
el libro 50 creadores de la escena madrileña se equivocan publicado por La
Casa Encendida, y el cortometraje Les tètes ouvertes con Laura Ramos. En
2011 participa en Choreoroam, proyecto de investigación coreográfica organizado por The Place en Londres y que viajará a Operaestate Festival Veneto
en Italia, Dansateliers en Netherlands, Dancescenen en Dinamarca, Zagreb
Dance Center en Croacia y Certámen Coreográfico de Madrid.
Desarrolla paralelamente una labor de creación e investigación musical,
diseñando el sonido para casi todas sus piezas y vídeos además de colaborar
musicalmente para las creaciones de otros artistas.
RIDER TÉCNICO
ILUMINACIÓN
6 PC 1000w.
3 PC 1000W.
5 Recortes 25-50.
3 Quarzos.
24 canales de DIMMER.
Mesa de regulacion 24 canales
SONIDO
Amplificación
Mesa de sonido.
Micro con pie
OTRAS NECESIDADES
5 monitores, televisiones o pantallas para la instalación.
Dos o tres mesas de alrededor de un metro de largo.
Una silla sin apoya-brazos.
La pared del fondo desnuda para poder pegar un papel de 3x1 metros, o en su defecto un panel colgante
o uno con un pie.
CONTACTO
Didier MICHEL
Productor
Pablo ESBERT LILIENFELD
+ 41 7873932 (Suiza)
Coreógrafo
mail : [email protected]
+34 625504088 (Móvil español)
+49 15775123547 (Móvil alemán)
mail : [email protected]
www.pabloesbertlilienfeld.com
www.pabloesbertlilienfeld.com
clave : accesoPEL
Entrevista, fragmentos de la pieza o video de la pieza al completo

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