Nuestro Diario, un caso paradigmático
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Nuestro Diario, un caso paradigmático
www.saladeredaccion.com Agosto de 2008 • Año 5 Número 64 Nuestro Diario, un caso paradigmático Un asunto de naturaleza legal mercantil es batallado en el área laboral, donde se sientan precedentes cuestionables, sin que los trabajadores vean beneficios de fondo Reporteros sindicalizados de Nuestro Diario son enfáticos: “No apoyamos a ningún grupo de accionistas” Editores de ese matutino, temporalmente en otra sede, aseguran: “Mantenemos nuestra neutralidad en el conflicto” Sin libre acceso a toda la información, no se puede lograr una total transparencia Centro Civitas: 0 calle “A” 30-05, zona 7, Utatlán I, Ciudad de Guatemala, Centroamérica. Teléfonos y fax: (502) 24 346 655 y 24 347 694 [email protected] y [email protected] www.saladeredaccion.com [email protected] [email protected] www.centrocivitas.org 15 4Editor: Miguel González Moraga 4Editoras adjuntas: Odeth Alvarado Yecenia Enriquez La agudización del conflicto por el control de Nuestro Diario obliga a la Oficina del Procurador de los Derechos Humanos (PDH) a una intervención más activa. Caricaturas: Alfredo Morales José Manuel Chacón Jota Ce 04 19 21 22 23 24 4Centro Civitas: Odeth Alvarado Comunicación Social Silvia Trujillo Observación de Medios Yecenia Enriquez Programa permanente de atención a periodistas Miguel González Moraga Capacitación a periodistas y fuentes informativas Carlos Morales Monzón Derechos relacionados con libertad de emisión del pensamiento Claudia Navas Dangel Cultura Victoria Tubín Racismo y discriminación Mirza Colindres Responsabilidad Social Empresarial Evelyn Blanck Medio ambiente 4Diseño Editorial: 16 Con voz de versado Alejandro Argueta, abogado, sostiene que pocos eventos que afectan al movimiento laboral son explicados, valorados y juzgados por los medios. www.saladeredaccion.com Directorio Editorial: DEFICIENTE INVESTIGACIÓN DEL MP La Ley de acceso y su aplicación en México Pulso latino El disfraz en la relación laboral Más que mil palabras: Dermin Revolorio Periodismo: una profesión en harapos El cartero Lo publicado sobre el asunto de Nuestro Diario fue muy pertinente y sirvió para entenderlo. Aunque su origen es entre grupos empresariales, ya se convirtió en asunto público. Olvidaron mencionar que el abogado José Quesada, asesor de Prensa Libre, es magistrado suplente de la Corte de Constitucionalidad. Carina Gallardo, Quetzaltenango, Guatemala. Comunicación Ilimitada Centro Cívitas Envíe sus cartas y comentarios por correo, correo electrónico o fax. 0 calle “A” 30-05 zona 7, Utatlán I, Guatemala. Teléfonos: (502) 24 346 655 y (502) 24 347 694 www.saladeredaccion.com [email protected] [email protected] [email protected] Excelente artículo acerca de la realidad de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Usac (Sala de Redacción 63). La falta de presupuesto es la excusa de la mediocridad. La Universidad posee una radio, un canal de televisión y un periódico interno, pero los alumnos de la escuela apenas si tienen oportunidad. Esos medios debieran ser parte integral de la formación. La Escuela necesita una revolución interna. Edgar L. Arana Paredes, asesor del Despacho, Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia de la República. Guatemala, ciudad. Esta publicación es posible gracias al patrocinio de Contenido Me interesa lo que acontece en Nuestro Diario, por aquello de la ética, la libertad, la independencia y otros. Percy Méndez Guatemala, ciudad. 3 El ojo del editor www.saladeredaccion.com Editorial 4 Sala de Redacción Agosto 2008 No. 64 Deficiente investigación del MP En Guatemala, contrario a la repetida opinión de las autoridades, los índices de violencia crecen y no se reducen, lo cual puede ser demostrado con las mismas estadísticas de las fuerzas de seguridad. Los periodistas, como el resto de la población guatemalteca, no se escapan de esa ola criminal. Muestra de ello es que en lo que va del año se han conocido más de 70 hechos delictivos en contra de trabajadores de medios informativos, los cuales han sido deficientemente investigados por la Fiscalía Especial de Delitos contra Periodistas, del Ministerio Público (MP). En esa larga lista se incluye el asesinato del reportero coatepecano Jorge de Jesús Mérida Pérez, abatido a balazos el 10 de mayo pasado. Recién el 21 y 22 de agosto, elPeriódico denunció el secuestro y la posterior liberación de su presidente, Jose Rubén Zamora, y las intimidaciones en contra de Óscar Ismatul, uno de sus reporteros. Después de dos días de condenas y muestras de solidaridad —incluso, hubo rumores enfocados a descalificar esa denuncia pública—, el asunto pasó a segundo plano. Como en otros casos de violencia contra periodistas, no hubo autoridad gubernamental que se refiriera a los hechos divulgados. Resulta paradójico que la Unidad de Protección de Defensoras y Defensores de Derechos Humanos, una ONG independiente, tenga más y completos informes que el MP en casos como los mencionados. Eso, en la práctica, abona a favor de quienes, desde las sombras, se saben con la impunidad garantizada. El MP debe investigar la veracidad de las denuncias, a la vez de divulgar las que no tengan sustento y que podrían derivar en la pérdida de credibilidad del gremio periodístico. Eso contribuirá a revertir el sentimiento de indefensión de los comunicadores sociales, en particular, de quienes ejercen en los departamentos, los que prefieren guardar silencio antes de exponerse a que las amenazas se conviertan en hechos. Su opinión nos interesa. ¿Qué temas le gustaría que abordáramos? Envíenos sus respuestas a [email protected] E n lo que va del año, Radio Televisión Guatemala, S.A., y Televisiete, S.A., —canales 3 y 7— han ganado cuatro licitaciones de la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia por casi Q8.5 millones. Además, el Congreso aprobó el 3 de septiembre una rebaja del ISR a los canales de la televisión abierta y a empresas vinculadas con ésta, lo que les reportará beneficios millonarios. No se requiere mucho seso para interpretar ambos hechos como un pago a los favores políticos durante la campaña electoral de 2007. Durante el gobierno de Oscar Berger, el monopolio de hecho de la televisión facturó de dependencias oficiales más de Q70 millones, de acuerdo con datos que pueden ser consultados en el sitio web Guatecompras. www.saladeredaccion.com Dichosos ¿Se va el Siglo? l diario Siglo Veintiuno parece tener los días contados. De ser ciertos los datos que circulan en el gremio periodístico, en los próximos meses su administración será liquidada, por acuerdos entre accionistas de Corporación de Noticias y Aldea Global, casas editoras de ese diario y de elPeriódico, respectivamente. Todo apunta a fortalecer a elPeriódico y a Al Día, al mismo tiempo de prescindir de Siglo Veintiuno. El ojo del editor E 5 www.saladeredaccion.com www.saladeredaccion.com A Primera título P personal lana 6 Nuestro Diario, un caso paradigmático Un asunto de naturaleza legal mercantil es batallado en el área laboral, donde se sientan precedentes cuestionables, sin que los trabajadores vean beneficios de fondo. El de Nuestro Diario se convierte en un caso paradigmático, que refleja cómo comúnmente en Guatemala los empleados se ven afectados por los conflictos entre empresarios, cómo el sistema no funciona en protección de los primeros y cómo las influencias de grupos con poder impactan los procesos judiciales. De la Redacción E l caso de Nuestro Diario es bastante complejo, más de lo que parece a simple vista, pues englobaría actuaciones de cuatro grupos independientes. Eso es, por lo menos, lo que asegura la mayoría de involucrados. Por un lado, está el equipo donde la cabeza visible es Jorge Springmühl, accionista minoritario de las empresas del Grupo Prensa Libre y quien hasta los primeros meses de este año era el gerente general de Diarios Modernos, S. A., casa editora de Nuestro Diario. También es muy visible en la arena legal el equipo conformado alrededor de los accionistas mayoritarios, empeñados en retirar a Springmühl de su cargo. Los otros grupos protagonistas están conformados por empleados, quienes aseguran actuar en defensa de sus derechos. Cada uno por separado, tanto el conformado por periodistas como el integrado por trabajadores administrativos, buscan la formación de sindicatos y enfrentan acciones legales de los accionistas mayoritarios de Prensa Libre, quienes desean impedirlo. Entre todos han armado una maraña legal, que sentará precedentes jurídicos en un campo, el laboral, que, en opinión de expertos, quizá no debió haber sido la arena de batalla. Versiones de los antecedentes En una página colgada en internet, Springmühl señala que el caso se remonta a febrero de 2007, cuando él, Édgar Contreras y Gonzalo Marroquín se convirtieron en accionistas de algunas de las empresas, al adquirir entre todos un 27.27% de las acciones. Según ellos, un mes después la asamblea de accionistas acordó que serían distribuidos dividendos entre los socios, un hecho de importancia, pues en apariencia éstos les facilitarían el pago de la deuda bancaria. Luego, se indica, en mayo de ese mismo año, Prensa Libre La opinión de la minoría En lo que va del conflicto, los accionistas minoritarios han publicado tres desplegados de prensa. El primero fue utilizado para explicar, desde su punto de vista, el origen del conflicto. Su representante legal, Jorge Springmühl, denunció haber sido “objeto de amenazas”. El más notable de todos —el 2 de septiembre— fue encabezado con el logotipo de Prensa Libre. Aclara una noticia publicada por ese medio el 29 de agosto, donde los mayoritarios rechazan la intervención financiera y descalifican a la jueza que ordenó la misma. En el tercero, fechado 3 de septiembre, el “grupo de abogados de los socios minoritarios”, entre otras cosas, insisten en sus puntos de vista, además de criticar al vicepresidente de Prensa Libre, Mario Antonio Sandoval. “Las demandas y denuncias planteadas (…) fueron consecuencia de las infames, cobardes y prepotentes acciones que los accionistas mayoritarios planificaron (…)”. www.saladeredaccion.com www.saladeredaccion.com Postura A Primera título P personal lana presentó a los accionistas varios planes para la compra de una nueva rotativa, los cuales fueron cuestionados por los minoritarios. Alegando la existencia de errores técnicos y sobrevaloración en las ofertas, éstos solicitaron nuevos estudios para la compra de una máquina. Entre tanto, según alegan Springmühl y su equipo, se abre un nuevo espacio de discordia, pues en julio de 2007 otros accionistas minoritarios, los hermanos Zarco, reclamaron por impago de dividendos de una de las empresas y exigieron un informe de la firma Price Waterhouse Coopers. Aseguran que sólo recibieron la amenaza de que les serían recortados más sus ingresos. Por su parte, los accionistas mayoritarios indican que no son ciertas las afirmaciones de los minoristas en cuanto a los orígenes del conflicto y a otras acusaciones, sino que las actuaciones de éstos, de alegatos por la compra de la rotativa e impago de dividendos, obedecen a sus deseos de saldar cuentas añejas (Sala de Redacción, No. 53). Lo cierto es que las acusaciones entre uno y otro grupo subieron de tono, hasta que el 27 de marzo estallaron los conflictos entre los accionistas. Ese día se resuelve, en asamblea general, que cualquier diferencia entre ellas y ellos sería resuelta por medio de arbitraje. El acuerdo prácticamente habría significado, a juicio de un grupo de trabajado- 7 Nrimera P oticias P para lanalos medios Los primeros rounds 8 El 30 de abril de 2008, un grupo de trabajadores coaligados de Nuestro Diario, la mayoría administrativos, emplaza a Diarios Modernos, S. A., en el Juzgado Sexto de Trabajo y Previsión Social, de la Primera Zona Económica. Uno de sus representantes indica que realizaron dicha acción porque en octubre de 2007 Prensa Libre había propuesto absorber el departamento financiero de Nuestro Diario, lo cual, para ellos, significaba reorganización y despidos. Para Springmühl, que los socios mayoritarios buscaban tener control sobre el 35% de la facturación total del grupo. Uno de los representantes del grupo coaligado informa que Foto: René Ruano www.saladeredaccion.com res administrativos de Nuestro Diario, que las asambleas de accionistas quedaban suspendidas. Por eso, opinan que el acta de asamblea del 25 de abril, por medio de la cual se le revoca su mandato a Jorge Springmühl como gerente general, “es falsa”, pues no se convocó a todos los socios y socias. “Es más, las reuniones siempre se hacían en nuestras oficinas, pero esa vez la efectuaron en el edificio Géminis y no estaban allí ni el secretario del Consejo de Administración, Rodrigo Castillo, ni los abogados que normalmente asisten al grupo”, cuentan. El hecho es que, a partir de entonces, se da inicio a una batalla legal por la permanencia de Springmühl al frente de Nuestro Diario, pero también para evitar perjuicios a los trabajadores. Agentes de una empresa privada de seguridad resguardan el ingreso a Nuestro Diario. Todas las personas que entran son registradas por hombres armados. escogieron esa figura jurídica, y no la de un sindicato, porque la empresa, como había sido dirigida por Springmühl, “era muy buena”. Otro grupo de trabajadores de ese medio indica que se decidió utilizar la figura del grupo coaligado, para amparar también al gerente como uno más de los trabajadores, algo que no permite la figura del sindicato. En su alegato de emplazamiento, 22 empleados solicitaron nueve puntos: estabilidad laboral, cumplimiento de los contratos de trabajo, cese de prácticas intimidatorias, aumento de Q1,500 mensuales a partir de enero para todas y todos los trabajadores, garantía de permanencia de las ventajas económicas logradas, un bono anual para compensar el alza de los combustibles, un bono escolar, un bono de aguinaldo y la conformación de una junta mixta para dirimir controversias, integrada por tres representantes de la parte patronal y tres de los laborantes. Consultados respecto de las prácticas intimidatorias que alegaron, indican que constantemente eran presionados por auditores de Prensa Libre, más las amenazas constantes de despidos de personal. Sobre el resto de reivindicaciones solicitadas, informaron que la finalidad era equiparar al personal de Nuestro Diario con el de Prensa Libre, además de que los primeros ya gozan de algunas ventajas, como opciones para compra de vehículos para algunos y un bono anual. El caso es que cuando los accionistas mayoritarios llegaron a la empresa para destituir a Springmühl, el 9 de mayo, sólo pudieron permanecer una semana en el lugar, porque el 12 de mayo, al estar emplazada la empresa, el juez sexto de Trabajo, Carlos Osvaldo Reyes González, ordena la reinstalación del gerente general. En su resolución, el juez sexto ordena a los mayoritarios cancelar una multa equivalente a 25 salarios mínimos Qué dicen los mayoritarios A través de algunos editoriales, notas informativas y un desplegado de una página, los socios mayoritarios han fijado su posición. El viernes 29 de agosto, se reportó: “Juez ordena intervención ilegal de Prensa Libre”. En la nota, entre otras cosas, se rasalta que la medida judicial, según los abogados de los mayoritarios, era ilegal y sería revertida “muy rápidamente”, lo cual ocurrió a la semana siguiente. En un desplegado de una página, el 1 de septiembre, los mayoritarios aseguraron que “se ha recurrido a campañas negras impulsadas por la televisión abierta”. A la vez, solicitaron a los lectores de ese diario “comprensión”, pues no podían callar “ante las agresiones”. “Es imperioso denunciar las prácticas corruptas que se han ejecutado por la via judicial”, puntualizaron. www.saladeredaccion.com Postura P lanalos medios Nrimera oticias P para para actividades no agrícolas (Q36,880.29) e indica que de no cumplirse la orden se abrirá un proceso por delito de desobediencia. A partir de entonces, en vez de iniciar un incidente de cancelación del contrato del gerente, como correspondía en ese ámbito, apelaron la decisión del juez sexto en la Corte de Constitucionalidad (CC) y respondieron tratando de invalidar el emplazamiento. En acción realizada el 6 mayo, el grupo de los mayoritarios argumentó que la medida no correspondía, ya que el grupo solicitante no agotó los procesos establecidos en el Código de Trabajo para dirimir el conflicto y negociar un convenio colectivo. Han argumentado que según esta herramienta legal sólo las “instituciones reguladas”, como los sindicatos, podrían haber actuado directamente en los tribunales, sin agotar un proceso de negociación con los patronos. Asimismo, los socios mayoritarios esgrimieron que la orden de reinstalación de Springmühl fue ejecutada ilegalmente, porque la notificadora le dio posesión de su cargo en la calle. Además, que la reinstalación no correspondía, porque un Conflicto de Jurisdicción presentado por ellos, el 13, debió haberla suspendido. Alegaron también que la reinstalación “provoca un estado de indefensión notorio y una violación flagrante al Derecho de Defensa”, al constituir a Springmühl en parte y contraparte. Es decir, 9 www.saladeredaccion.com www.saladeredaccion.com Noticias Primerapara Plana los medios 10 10 en demandante y representante legal de la demandada. Los mayoritarios también han alegado, hasta el cansancio, que no hay juzgado de trabajo que invalide la decisión de la asamblea de accionistas de remover al gerente de su cargo, en tanto éste es un empleado de confianza. Hay analistas del derecho laboral que no comparten dicha apreciación, pues estiman que todos los empleados, incluyendo los de confianza, deben estar amparados por la ley. En el ínterin de estas acciones, el Juzgado Sexto inició una acción de enmienda del procedimiento, ya que el notificador del Juzgado Segundo de Trabajo no había realizado la notificación del emplazamiento a los trabajadores conforme lo indica la ley, lo cual podría afectar el proceso. De manera insólita, los trabajadores han buscado suspender el proceso de enmienda cuya finalidad sería favorecerlos. El 5 de julio, con orden judicial en mano, los accionistas mayoritarios llegaron de nuevo a tomar posesión de la gerencia. Springmühl hace un recorrido por varios juzgados de la ciudad, en busca de uno que acceda a reinstalarlo en su puesto. Como sus acciones resultan infructuosas, acude a un juzgado de lo Económico Coactivo en Cobán, Alta Verapaz, y éste ordena su reinstalación. Una de las incógnitas mayores de este proceso es por qué este juez ordena la intervención de un contingente de agentes de la Policía Nacional Civil, cuando el trámite a observar para la reinstalación es meramente administrativo y no se necesita de fuerza Voz de los trabajadores El 3 de septiembre, en la página 23 de Nuestro Diario, los trabajadores se quejaron, entre otras cosas, de que por el conflicto entre los accionistas no les habían pagado. Además, denunciaron ser víctimas de acoso para que abandonaran sus puestos. Aprovecharon el espacio para instar a los bandos en pugna a dialogar. pública alguna. Los socios mayoritarios apelan la resolución en la CC y esgrimen que el juzgado de Cobán carece de jurisdicción sobre el caso. Los abogados de Springmühl indican que sí, porque hay una agencia de Nuestro Diario en la localidad. El gerente y sus asesores también inician acciones en otras localidades del país. El 14 de agosto, los socios mayoritarios logran un tanto a su favor, pues provisionalmente la CC deja sin efecto la resolución del juez de Cobán, lo cual dicen que les garantiza retomar el control del periódico. ¿Laboral? Lo notorio en el caso es que el alegato de un grupo de trabajadores a favor de su estabilidad laboral y de algunas reivindicaciones parece haberse desvanecido ante las acciones desarrolladas para mantener o retirar a Springmühl de la gerencia general. De hecho, en el proceso no ha habido prácticamente esfuerzos para discutir aspectos fundamentales en el campo de los derechos laborales. Los mayores argumentos de las acciones emprendidas provienen, en realidad, del ámbito mercantil. Los dos grupos de trabajadores organizados, fincados ambos en la sede de Nuestro Diario, explican que su tiempo se ha visto consumido por la inestabilidad que provoca la entrada y salida de Springmühl, la llegada y retirada de Prensa Libre y la urgencia de evitar que el periódico deje de ser producido. Aseguran que continúan con el esfuerzo de impulsar la organización sindical y las reivindicaciones laborales. Dentro del proceso también han sido notorias las actuaciones extrañas, por no decir irregulares, de actores del sistema legal, que han favorecido a los empresarios, al permitir dilaciones en el proceso. “Es un caso donde se observa cómo las élites tienen el poder de tomar un proceso y hacer lo que se les da la gana, algo común en el país y que pone en entredicho al sistema de justicia”, opina un analista. De momento, no puede darse por cerrado el caso legal de Nuestro Diario, los folios continúan apilándose en un expediente que ya es voluminoso. Sobre los grupos de laborantes penden graves amenazas y sus derechos no dejan de verse constantemente afectados, pero lo único que mantiene activo al sistema de justicia no es eso, sino el conflicto entre los empresarios. www.saladeredaccion.com www.saladeredaccion.com Foto: René Ruano Reporteros: “No apoyamos a ningún grupo de accionistas” Por Evelyn Blanck y Miguel González Moraga, periodistas E n la redacción de Nuestro Diario, zona 13 capitalina, las labores prosiguen con un grupo reducido —la mayoría se trasladó a un local de zona 12 junto con el director— completado con refuerzos llegados de afuera. Abajo se resume una entrevista colectiva con Pilar Bagur, Álex Maldonado, Luis Mazariegos, Estuardo Pintos y Elías Salazar, dirigentes del Sindicato de Trabajadores de Diarios Modernos, S.A., casa editora de Nuestro Diario. Que el periódico siga en las calles es, en buena parte, responsabilidad de ella y ellos, aunque han tenido problemas para cobrar sus sueldos, producto de la disputa entre los propietarios. Previo a que se anunciara la destitución del gerente general, Jorge Springmühl, ¿tenían intensiones de formar un sindicato? No. El 30 de abril la empresa fue emplazada en un juzgado, a solicitud de un grupo de empleados administrativos, incluido Springmühl. Como el emplazamiento impide los despidos, 21 trabajadores aprovechamos la coyuntura y comenzamos a formar el sindicato. Para entonces, ya sabíamos de la pugna entre dos grupos de accionistas, cuyos efectos en algún momento nos llegarían, pese a que la redacción había declarado su neutralidad. A nosotros no nos interesaba qué grupo controlara el periódico, pero queríamos protección como trabajadores y defender nuestros derechos. ¿Cuál ha sido la vía para obtener su reconocimiento? El 24 de mayo efectuamos una asamblea general y dos días después entregamos nuestra papelería en el Ministerio de Trabajo. Al director del diario, Noticias Primerapara Plana los medios Aunque con personal reducido, Nuestro Diario ha logrado que se mantega su circulación. 11 11 www.saladeredaccion.com Rodolfo Móbil, se lo informamos el 28 de mayo y como respuesta fuimos suspendidos. Nos acusó de subversivos y guerrilleros, pero a los dos días, por medio de los tres subdirectores, se disculpó con nosotros. Sin embargo, nos pidió que diéramos marcha atrás con lo del sindicato. Pero ustedes siguieron… El 9 de julio la Dirección General de Trabajo determinó inscribir al Sindicato de Trabajadores de Diarios Modernos, S.A, y el 10 quedó legalmente inscrito, luego de resolverse dos impugnaciones de parte del Grupo Prensa Libre. (La publicación oficial en el Diario de Centro América fue el 5 de septiembre). Primera Plana ¿A qué se opuso Prensa Libre? Quisieron impedir nuestra organización como sindicato, pues creían que éramos parte del grupo coaligado donde está incluido Springmühl. Cuando surgimos, la gente de Springmühl creyó que estábamos siendo organizados por Prensa Libre. Sin embargo, no tenemos relación con ningún grupo de accionistas, pues somos periodistas. 12 Hay gente que sí los identifica con Springmühl. Nosotros nos quedamos en Nuestro Diario por principios. Cuando es destituido Springmühl, algunos de sus afines nos pidieron que paralizáramos labores, pero no lo hicimos, en atención a la solicitud del director. Sin embargo, cuando Springmühl retoma la gerencia general, Móbil le dice a su gente que paralice. Como nosotros no creíamos que Legalizado La autorización del Sindicato de Trabajadores de Diarios Modernos, S.A. (Sitradimo) fue publicada, el 5 de septiembre, en el Diario de Centro América, al cumplirse “debidamente con todas las formalidades de ley”. Esa organización gremial y la de Prensa Libre y Empresas Afines son las únicas de su tipo que existen en el país. eso era correcto ni ético, nos quedamos en Nuestro Diario. No obstante, otro grupo se fue a un local de la zona 12 junto con el director. Ellos aseguran que se fueron porque Springmühl decidió suspender a Móbil y porque redactaría un editorial donde describiría el conflicto. Nosotros le dijimos a Springmühl que no debía tocar la parte editorial ni suspender a nadie, incluido el director. Sin embargo, nuestros jefes tomaron la decisión de irse y los acompañaron otros miembros de la redacción: editores, diseñadores, fotógrafos, redactores deportivos, la mitad de los corresponsales... ¿Hablaron con los que se fueron? Le pedimos a Móbil que regresara, pero nos respondió que no. Incluso, nos dijo que si nosotros nos quedábamos en Nuestro Diario ya no tendríamos cabida en el grupo que se fue a la zona 12. La redacción, en la práctica, se dividió en dos en ese momento. Desafortunadamente, lograron separarnos. Eso no quiere decir que no deseemos trabajar con los otros compañeros, aunque con algunos no queremos relacionarnos. Algunos de ellos tampoco quieren relacionarse con ustedes, pues dicen que no respetaron el acuerdo de neutralidad en el conflicto. Nosotros asumimos el liderazgo, no sólo del sindicato, sino del diario. Después de que los jefes se fueron, alguien tenía que dirigir el periódico. ¿Es cierto que algunos editores maltrataban a los reporteros? Sí, nosotros somos algunos de los que más fuimos ofendidos por algunos de ellos. Otros gozaban de ciertos beneficios, autorizados por el director, como poder trabajar en otros medios, pero a nosotros se nos pedía exclusividad. Eso lo sabe mucha gente del gremio periodístico. Ahora su principal reto, como sindicato, es tratar de restablecer relaciones con el resto de la redacción. Estamos conscientes de eso, pero recuperar a la mayoría de los compañeros que se fueron es casi imposible. De momento, estamos en impasse, pues la reorganización del diario nos ha absorbido. Nosotros hemos contribuido a que se mantenga su publicación. www.saladeredaccion.com Foto: Deccio Lizzardy Serrano Editores: “Mantenemos la neutralidad en el conflicto” Por Miguel González Moraga, periodista E n “el otro Nuestro Diario”, como se conoce a la sede adonde se trasladaron más de 80 miembros de la redacción desde hace más de un mes, casi todo sigue igual: los editores coordinan con periodistas, fotógrafos y corresponsales, se proponen enfoques de notas y se revisa la labor diaria de los reporteros. Lo único que falta es ver impreso el trabajo de la jornada, algo que no se descarta que ocurra pronto. Las líneas siguientes sinteti- zan una plática con el director de Nuestro Diario, Rodolfo Móbil, y los subdirectores del matutino, Francisco Aguilar Chang, José Elías Tárano y Tulio Juárez. Al retirarse de la sede de Nuestro Diario, ¿no toman partido, pese a que se habían declarado neutrales? Desde el inicio del conflicto entre los accionistas del Grupo Prensa Libre, a su vez dueños de Diarios Modernos, casa editora de Nuestro Diario, la redacción asumió una política de neutralidad. Nosotros mantuvimos esa política, la mantenemos y esperaríamos que se mantuviera en el futuro. Sin embargo, la redacción se vio afectada por las irrupciones violentas de ambos grupos, y temimos por nuestra seguridad. Cuando el ex gerente general, Jorge Springmühl, fue reinstalado anómalamente por orden de un juez de Cobán, dijo que iba a controlar editorialmente el periódico. Ese día les entrega a los subdirectores un editorial y les dice que debe ser publicado al siguiente. ¿Y cuál fue su reacción? Reunimos a todos los editores y les planteamos la situación, Primera Plana En un sector de bodegas, en la zona 12, más de 80 trabajadores de Nuestro Diario llevan a cabo sus labores. 13 Primera rimera Plana lana ¿Qué les dicen? Les presentamos un plan de cuatro puntos, el cual debía aprobar la redacción antes de ser presentado a los grupos de accionistas: garantizar la seguridad laboral y física, garantizar la independencia editorial y económica, traslado físico de la redacción a otro lado —o la gerencia a otra sede— y unidad del grupo de la redacción. Mencionamos que si alguno era destituido, actuaríamos como grupo y paralizaríamos labores. 14 14 Casi de inmediato, por mensajes telefónicos de texto, Springmühl anuncia que no publicará el editorial y que da marcha atrás en la destitución del director. Sin embargo, la redacción se fractura, pues algunos no atienden el llamado de ustedes. Los compañeros del sindicato, que se quedaron en las oficinas de Nuestro Diario, nos principal meta es la estabilidad laboral de los 140 miembros de la redacción, en particular de los 86 que tenemos cerca. Hemos tenido el respaldo del consejo de administración de la empresa y se nos ha pagado puntualmente. Como existe una resolución provisional de la Corte de Constitucionalidad —de la cual esperamos el fallo definitivo—, estamos cerca de retomar el control de Nuestro Diario. Foto: Deccio Lizzardy Serrano www.saladeredaccion.com www.saladeredaccion.com para que se la comunicaran a los redactores. Decidimos conformar una comisión, integrada por los tres subdirectores, para que hablaran con Springmühl, quien en ese momento estaba entrando violentamente a las instalaciones del diario. Queríamos que recapacitara y nos dejara trabajar, como había ocurrido desde nuestra fundación, hace más de 10 años. No sólo no accede, sino que les anuncia a los subdirectores la destitución del director. En ese momento, los editores acordamos abandonar las instalaciones de Nuestro Diario, como medida de protesta, y les planteamos a los trabajadores la situación. Rodolfo Móbil piden que regresemos. Les respondemos que estamos defendiendo los intereses de todo el grupo y les recordamos los cuatro puntos mencionados. Hemos visto que ellos no simpatizan con Springmühl, pero se quedaron en las oficinas del periódico, incumpliendo la decisión de todo el grupo. Pero son la mayoría de redactores de la sección nacional. De los 130 miembros de la redacción, 44 se quedaron en Nuestro Diario y 86 se vinieron con nosotros. ¿Por qué se dividió el grupo? Los que se quedaron no atendieron nuestro llamado a paralizar labores uno o dos días. Eso provoca la ruptura definitiva. ¿Definitiva? El asunto es que los compañeros no respetaron el acuerdo de parar labores cuando destituyeran a alguno. En este momento, nuestra Si llegaran a un entendido los accionistas, ¿es posible que toda la redacción regrese a sus puestos? Nuestro sueño es que se produzca la reconciliación de la redacción, pues fuimos arrastrados a una situación donde no teníamos nada que ver. Sin embargo, reconocemos que hay fracturas, pues hemos sido amenazados, insultados y coaccionados por algunos de quienes se quedaron en la sede central. Ellos se quejan de lo mismo. Los retaríamos a que nos demuestren una sola acción deshonesta de nuestra parte. ¿Es posible abandonar el proyecto de Nuestro Diario y comenzar otro? Es algo que se analiza, pero no tenemos prisa. Nuestro objetivo fundamental es retomar el control de la redacción. Tenemos el talento y el recurso humano, demostrado con éxito durante 10 años. ¿Tendrían cabida en ese proyecto algunos de quienes se quedaron en Nuestro Diario? Ninguno. “ Foto: Aury Rodríguez, PDH nuestra labor es de acompañamiento, mediación y observación, para tratar de resolver el problema in situ”, resume Luis Rolando Yoc Pérez, director de Incidencia en Políticas Públicas y Mediación en Conflictos, de la PDH, sobre el rol de esa oficina en el caso. Según su criterio, durante las primeras etapas del conflicto, en las oficinas de Nuestro Diario los niveles de emotividad y de colisión entre los grupos en liza fueron en aumento. Sin embargo, a pesar de las agresiones verbales, los bandos en pugna pudieron manejarse y decidieron dirimir la situación en los tribunales. Yoc resalta “la comprensión y colaboración” de las partes. En una situación de este tipo, comenta que Rolando Yoc casi siempre el trabajador se queda en medio de las peleas empresariales y se ve obligado a tomar posición por alguna de las partes que pugnan. La misión de la PDH es procurar que los empleados no sean afectados por alguno de los bandos de accionistas, a la vez de evitar que los grupos armados que resguardan las instalaciones del periódico actúen al margen de la ley. Sin despidos El interventor de la Procuraduría agrega que cuando comenzaron el proceso de observación se encontró un listado de 46 personas en riesgo de perder su trabajo. Ellos no podían ingresar a las oficinas de Nuestro Diario, pues uno de los grupos de accionistas consideraba que “tenían conflicto de interés”. Debido a eso, la PDH requirió la presencia de delegados del Ministerio de Trabajo y las partes acordaron garantizar la estabilidad laboral de esas personas. “Nuestro papel como PDH es siempre velar y evitar que ese conflicto degenere en situaciones de las que no queremos lamentarnos. Por ejemplo, un acto ilegal, una bala perdida, un despido injustificado, agredir o arremeter contra los medios de trabajo allí resguardados”, asegura. Hasta el momento, Yoc dice que los dos grupos de accionistas han respetado las resoluciones de la PDH y han decidido dirimir sus diferencias en los tribunales. “Es una actividad privada que no está vinculada con la libre emisión del pensamiento; es un conflicto de intereses económicos”. Lo más importante en este problema, según Yoc, es que los trabajadores tienen aseguradas sus plazas, pues debido a que existe un emplazamiento nadie puede ser despedido. “En caso de que existiera una amenaza, nosotros haríamos inspección y, de alguna manera, apelaríamos a los acuerdos no escritos que se dieron de respeto hacia los trabajadores”, puntualiza. Una de las acciones más recientes de la PDH ocurrió el 1 de septiembre, cuando en su sede un grupo trabajadores de Nuestro Diario denunció que sus sueldos de agosto no habían sido pagados. www.saladeredaccion.com La agudización del conflicto por el control de Nuestro Diario obliga a la Oficina del Procurador de los Derechos Humanos (PDH) a una intervención más activa. www.saladeredaccion.com y su papel mediador Primera Plana Noticias de los medios La PDH Por Yecenia Enriquez, periodista 1515 www.saladeredaccion.com un conflicto laboral que logró ser noticia Por Alejandro Argueta R., director ejecutivo de Consultorías & Negociaciones Jurídicas (C&N) Con voz de versado Pocos eventos que afectan al movimiento laboral son explicados, valorados y juzgados por los medios de comunicación. Para beneficio de las élites, la mejor política en los medios, en este punto, ha sido el silencio. 16 D e todos los Estados miembros de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Guatemala es el segundo con más audiencias en la Comisión de Normas —apenas dos abajo de Colombia—, debido a que existen graves violaciones a los derechos de libertad sindical y de negociación colectiva. La Comisión de Normas de la OIT controla el cumplimiento de convenios y recomendaciones, y realiza audiencias cuando sus miembros consideran que un país presenta graves incumplimientos. En el caso de Guatemala, las audiencias vienen desde 1999, principalmente por hechos de violencia, como amenazas y asesinatos contra sindicalistas. Si una audiencia es grave, tenerlas una década consecutiva refleja el grado de indiferencia por parte del Gobierno en el cumplimiento de las normas internacionales de trabajo y de las observaciones de los órganos de control. Conflictos y medios Violencia, corruptela, impunidad y confrontación política e ideológica emergen y subsisten cuando empleados deciden organizarse para reclamar sus derechos. En un contexto como éste cualquier situación vinculada a la conflictividad laboral podría ser excelente noticia, aunque no en Guatemala. Son pocos los eventos que afectan al movimiento laboral explicados, valorados y juzgados por los medios. Sin embargo, para beneficio de las élites, en ese aspecto, la mejor política en los medios ha sido el silencio. Este año un conflicto laboral rompió ese muro de silencio: el de Nuestro Diario. La noticia acaparó titulares, campos pagados y amplia cobertura en la TV, donde los presentadores, con aparente indignación, narraban que era “un ataque contra la libertad de prensa” o que “intereses monopólicos atentaban contra la estabilidad laboral de los comunicadores”. Sin dejar de lado el indiscutible derecho que tiene cualquier trabajador para acceder a la justicia laboral, es evidente que el conflicto ha sido utilizado para reivindicar derechos de los accionistas. Este conflicto es entre propietarios, pero los empleados se ven arrastrados o seducidos por los intereses de los dueños. En lo que va del proceso, se puede mencionar una serie de contradicciones fantásticas: empresarios que reclaman contra empresarios que son sus propios trabajadores; empleados que renuncian para tomar partido por accionistas, poniendo en riesgo su plaza y sus prestaciones laborales; abogados que suspenden los procedimientos al plantear recursos y conflictos de jurisdicción inexistentes, sin preocuparse de que se cuestione su ética, pues en lugar de promover la justicia la Alejandro Argueta obstaculizan. También se ha notado a jueces disminuidos en su voluntad para defender la independencia judicial, achicándose ante el inmenso temor que les provocan las represalias institucionales y las presiones en los medios. Es de destacar que la principal solicitud de reinstalación en el proceso colectivo es del propio gerente de Nuestro Diario. Él comparece, en el mismo proceso, como representante del empleador y solicita aval judicial para dar por terminada la relación de trabajo de sus propios compañeros. Después, el presidente del consejo de administración de la entidad empleadora comparece para desistir de las acciones iniciadas por el gerente general, manifestando una serie de consideraciones empresariales en su contra. Mientras, la coalición de trabajadores ha apelado resoluciones que no le producen daño inminente y solicita que el proceso colectivo se suspen- www.saladeredaccion.com da, cuando uno de los principales problemas de la justicia es que los jueces suspenden arbitrariamente los procesos en beneficio de los empleadores. Por eso, los trabajadores siempre luchan para que los procesos no sean suspendidos, aunque en este caso actúan al revés. Por su parte, la empresa no ha dudado en interponer todo tipo de acciones dilatorias: amparos, conflictos de jurisdicción, recursos. Sus abogados, abusando temerariamente de los procedimientos, con altisonantes argumentos niegan que haya existido una relación de trabajo con el gerente que solicita ser reinstalado. No obstante, éste sube a Internet una copia de la carta de despido, emitida por la entidad empleadora, en donde literalmente se reconoce la existencia de la relación laboral que luego intentan negar. Los empresarios en conflicto utilizan fuerzas de seguridad privada para impedir diligencias judiciales de reinstalación, y ponen en riesgo la integridad física y la vida de muchas personas. Un abogado y representante legal de la empresa plantea un amparo que es copia exacta de otro que fue presentado en otro tribunal días antes. Lo hace para ver si obtiene un fallo favorable, pues su primer intento fue declarado sin lugar. Unos trabajadores renuncian y abandonan la empresa para irse a otra que es propiedad del mismo consorcio. Pero dejan de lado que, según acta de socios fechada 4 de marzo de 2008, todas son un mismo patrono. Por ejemplo, Prensa Libre y Nuestro Diario conforman Con voz de versado Hechos notables Foto: Odeth Alvarado En notas televisadas, de hasta seis minutos, se acusaba de tráfico de influencia en los tribunales y se destacaba los problemas entre dos “bandos” de accionistas que, con ejércitos particulares y poderosos bufetes de abogados, se enfrentaban para controlar la empresa más lucrativa de medios en Guatemala. Existen muchas formas para debilitar la estructura institucional que sustenta al estado de Derecho y a la democracia. Una de las más efectivas es cuando las élites económicas utilizan los procedimientos laborales para discutir asuntos empresariales. 17 www.saladeredaccion.com Con voz de versado 18 una misma compañía para efectos laborales, ya que así lo han declarado los accionistas. Entonces, para pasar de un lugar de trabajo a otro no es necesario “renunciar”, debido a que no se está cambiando de patrono, sólo de lugar. ¿Litigio por los medios? El problema para el estado de Derecho y la democracia es que las élites han forzado hasta el extremo las instituciones de la justicia para discutir asuntos que no corresponden a genuinas pretensiones laborales. En un comunicado, publicado en Nuestro Diario el 4 de agosto, se explica el conflicto y en ningún momento se indica que sea laboral. La incorrecta utilización del sistema de justicia contribuye a su debilitamiento y falta de credibilidad. Los jueces se encuentran presionados por una excesiva campaña mediática en donde se confunde el conflicto entre empresarios. El 1 de septiembre Prensa Libre, en su página 19, califica de corrupta a una jueza que emitió una resolución que no les pareció adecuada a sus intereses. Es cierto, el propio Gobierno ha aceptado que existen alegaciones de corruptela en tribunales (Libro Blanco, La dimensión laboral en Centroamérica. 2005, Pág. 48), pero cada denuncia merece una investigación del Organismo Judicial (OJ) y del Ministerio Público (MP). En este caso no se plantean denuncias formales y sólo se difama la legitimidad y transparencia de los funcionarios judiciales a través de los medios. Lo más impresionante es que ni la jueza difamada ni las autoridades del OJ ni el jefe del MP toman acciones para defender la legitimidad e integridad del sistema de justicia. Simplemente, son indiferentes a la potente opinión de las élites propietarias de los medios. Con esta campaña de “información”, se convierte en ejemplo lo incorrecto. Si los medios publicaran la verdadera noticia, ésta sería cómo los empresarios utilizan incorrectamente el sistema de justicia para repartirse la propiedad de sus empresas, presionando y litigando en forma incorrecta. También, cómo los trabajadores quedan desprotegidos al no ser tomada en cuenta su verdadera situación laboral y cómo el sistema de justicia pierde credibilidad. Dudas y respuestas Si los empresarios utilizan de esta forma el sistema de justicia para debatir sus problemas de propiedad, ¿qué pueden esperar los trabajadores cuando se trata de genuinos conflictos laborales? El caso de Nuestro Diario da las respuestas. Todas las personas que trabajan en Nuestro Diario corren un grave riesgo laboral de seguir utilizándose el conflicto colectivo como se ha hecho. La falta de información ha generado actitudes en donde prevalece el interés de a qué “bando” de empresarios se va a apoyar, cuando lo más importante podría ser identificar con claridad su situación de trabajadores y vigilar que sus derechos no sean lesionados. La confusión y el desconocimiento de sus derechos y de los mecanismos institucionales para defenderlos han rayado en el extremo. Por ejemplo, el 2 de septiembre el Diario de Centro América publicó que trabajadores de Nuestro Diario pidieron que se resuelva el conflicto entre dueños porque no les han pagado el salario de agosto, ven como propia la obligación de distribuir los ejemplares para no afectar a los clientes de la empresa y solicitan la “intermediación” de instituciones nacionales e internacionales. ¿Acaso los problemas entre accionistas justifican el incumplimiento de obligaciones laborales por parte del empleador? ¿Desde cuándo corresponde a los trabajadores asumir los riesgos que son propios del empresario? La confusión es enorme. En los medios se labora en condiciones degradantes, en muchos casos. A muchos se les disfraza su relación de trabajo con contratos de servicios profesionales para justificar el incumplimiento del pago de horas extra, aguinaldo, bonificación anual, vacaciones, indemnización por despido, protección de la maternidad y seguridad social en general. Mantener el falso ejemplo de Nuestro Diario como un conflicto laboral de relevancia, sin informar adecuadamente, sólo contribuye a mantener la ceguera de los empleados de los medios sobre la reivindicación de mejores condiciones de trabajo y debilita enormemente el sistema de justicia laboral. El conflicto de Nuestro Diario es entre propietarios. El verdadero conflicto laboral empezará cuando los trabajadores se consideren un solo bando y reivindiquen legítimamente sus derechos frente al consorcio de empresas que conforman el Grupo Prensa Libre. Ley de acceso y su aplicación en México U na norma de este tipo se debe apegar a la exigencia democrática que se asienta, primero, en la imprescindible obligación del Estado de hacer público sus gastos y, segundo, en el respeto absoluto de sus enunciados. No garantiza la pulcritud del servicio público cuando, teniendo la ley, se abdica a ésta por la fuerza de la costumbre o por la de intereses ajenos a los de la sociedad. Tampoco garantiza nitidez oficial cuando la normativa acusa debilidades que en el fondo, curiosamente, fortalecen aspectos propios de un régimen de sistemas que se niega a ser revisado en su conducta. En México, el marco jurídico que tutela dicha ley puede catalogarse como uno de los más avanzados en materia de transparencia, rendición de cuentas y control de los recursos públicos. Sin embargo, el marco normativo y el espíritu de la propia ley chocan con la exigencia generalizada de conocer con efectividad, prontitud y limpieza, el destino que el Gobierno da a recursos considerados inauditables, como los utilizados en las emergencias por desastres naturales y, lo que es peor, el uso que los partidos políticos dan al financiamiento que reciben del Instituto Federal Electoral (IFE). Aunque en la ley existe la obligatoriedad de proporcionar a los solicitantes la información que requieran, existe una cláusula que permite a las instituciones cuestionadas determinar la viabilidad de entregar o reservar lo que a su derecho convenga. En dicha disposición se establece como información reservada aquella que pudiera poner en riesgo la seguridad nacional, la conducción de negociaciones o relaciones internacionales, la estabilidad financiera, económica o monetaria del país. Además, la vida, la seguridad o la salud de cualquier persona (entiéndase aquí como el sujeto obligado, es decir, el funcionario público) o causar un serio perjuicio a las actividades de verificación del cumplimiento de las leyes. Asimismo, la prevención o persecución de los delitos, la impartición de la justicia, la recaudación de las contribuciones, las operaciones de www.saladeredaccion.com Por Ángel Mario Ksheratto, periodista mexicano (*) A título personal Es definitivo: una Ley de Acceso a la Información Pública sólo garantiza la transparencia plena en el ejercicio de la administración pública cuando cumple con objetivos de forma y fondo. 19 www.saladeredaccion.com control migratorio, las estrategias procesales en procesos judiciales o administrativos, en tanto las resoluciones no estén firmes. A título personal ¿Clasificado? 20 Un colega del Distrito Federal contó durante una asamblea de periodistas cómo se utilizó ese apartado para negarle información relacionada con un fraude en la Secretaría de Educación. El argumento que la dependencia involucrada ofreció al Instituto Federal de Acceso a la Información (Ifai, órgano rector de la ley) y que fue transmitido de manera oficial al reportero, es que el implicado en la estafa padece diabetes y, por tanto, para no causar un quebrantamiento en su salud y no poner en riesgo su vida, la información se había clasificado como reservada. En algunos estados de México los órganos regentes de la Ley de Acceso a la Información Pública suelen advertir al beneficiario de una solicitud, en la parte inferior del documento, que los datos proporcionados no pueden ser divulgados por ningún medio de comunicación, so pena de ser llevado a los tribunales. Son, en síntesis, algunas de las inconsistencias llamadas “técnicas” que hacen de la información pública un tema de obligado análisis que permita una discusión responsable sobre lo que en materia de transparencia deba aprobarse. Indudablemente, una primera fase de la ley es un gran avance para el control del presupuesto gubernamental, como incuestionable es el hecho que toda legislación es perfectible. Es también inocultable que habrá quienes se opongan, abierta o encubiertamente, a una normativa de esa naturaleza, pues ésta viene no sólo a revolucionar el sistema de rendición de cuentas, sino a poner un cepo a la corrupción y un cascabel a los corruptos. Ello explica la reticencia de algunos que no alcanzan a entender que la auténtica democracia tiene sus propias exigencias. Para evaluar Conocer cómo y en qué gasta la clase gobernante el dinero de las contribuciones públicas, es un derecho inalienable de la población. No hay mejor forma de evaluar a un Gobierno que conociendo el destino de los recursos y sus resultados. En cuestión de transparencia, México todavía no puede considerarse un país con reglas de excepción para terminar con la larga historia de corruptela. No obstante, la Ley de Acceso a la Información Pública y la creación de su órgano rector son saltos cualitativos en el orden democrático. La democracia no sólo es útil y visible en las urnas electorales, sino en toda acción de Gobierno y toda reacción de los gobernados. Debo insistir que dicha ley no es la deseable. Sin embargo, al menos, apunta hacia mecanismos de perfección que obligarán a las instituciones que se sostienen con fondos públicos a someterse al escrutinio general de una sociedad, en cuya agenda la democratización de los órganos de Gobierno es necesaria y obligatoria. * Escribe para los periódicos Cuarto Poder y El Orbe, de Chiapas, México. Asesinato E l periodista Normando García fue asesinado a balazos el jueves 7 en Santiago, al norte de la capital de República Dominicana. García, de 38 años y reportero del programa diario “Detrás de la Noticia” y productor del show musical “Pachanga Mix” en Teleunión, estacionaba su automóvil cuando se efectuaron múltiples disparos de armas de fuego desde un vehículo en movimiento. García, quien murió de inmediato, recibió cinco impactos de bala en la cabeza, cuatro en el tórax y uno en la pierna, Normando señaló EsteGarcía ban Rosario, conductor de “Detrás de la Noticia”. Rosario afirmó que él cree que García fue asesinado en represalia por su trabajo, pues cubría narcotráfico y crimen. Venezuela Ataque D os sujetos a bordo de una motocicleta dispararon en la madrugada del 15 contra la sede del grupo Corporación RR, en la que funcionan Auténtica 107.5 FM, el canal de televisión TRV y el portal digital Enfoque Regional, en la ciudad de Maracay, al centro de Venezuela. El gerente de Auténtica 107.5, Francisco Javier Martínez, denunció que los periodistas que participan en el programa “Primera Hora”, que se transmite de forma simultánea por Auténtica 107.5 FM y TRV, han recibido amenazas de muerte vía mensajes de texto. Supone que éstos se deban a las denuncias y críticas hechas en el programa sobre la situación de inseguridad ciudadana y la indiferencia de las autoridades locales para resolver el problema. Ecuador Prohibición L as autoridades ecuatorianas han prohibido por decreto la difusión en los medios de comunicación de imágenes y fotografías de hechos de violencia —tales como accidentes, crímenes y muertes— con el fin de cumplir con el derecho constitucional de las personas a la privacidad. Según la misma nota, divulgada el 18, una fuente del Ministerio de Gobierno dijo que otro objetivo de la resolución es bajar la percepción de inseguridad y el “morbo social que generan este tipo de informaciones”. No se precisó si el decreto incluye lugares privados o sólo públicos, como morgues u hospitales. La disposición fue comunicada a la Policía Nacional, que deberá velar por su cumplimiento. Los uniformados que dejen filmar o tomar fotografías de eventos violentos serán “drásticamente sancionados”. Paraguay Gobierno E nuevo presidente de Paraguay, Fernando Lugo, ha avanzado la deci- sión de crear una agencia de noticias del Estado en un encuentro en el Palacio de Fernando Gobierno con Lugo periodistas y dueños de medios de prensa a los que ha asegurado el libre acceso a la información pública durante su Gobierno, se supo el 20. “Queremos construir un Paraguay diferente y los medios de comunicación constituyen la herramienta para concretar ese propósito”, destaca un comunicado la Presidencia sobre las declaraciones de Lugo, quien garantizó, además, que se respetará la libertad de expresión y practicará la transparencia informativa de ministerios y organismos estatales. Nicaragua Presiones E l periodista de la televisión nicaragüense Jaime Arellano denunció ser víctima de persecución de parte del Jaime presidente Daniel Arellano Ortega debido a su posición crítica contra el Gobierno. Arellano denunció que el cierre, el 22 de agosto, de su programa de opinión “El 2 en la Nación”, transmitido por Televicentro Canal 2, obedece a las presiones que recibieron los propietarios del canal, cuya licencia operativa está en proceso de renovación. El periodista dijo también que recibió amenazas contra su vida y que someterá los hechos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Guía para periodistas Dominicana www.saladeredaccion.com Pulso Latino 21 www.saladeredaccion.com Catálogo El disfraz de la relación de trabajo en Guatemala “ permitir la evasión del cumplimiento de la ley es una de las primeras satisfacciones que algunos empresarios reciben de funcionarios públicos complacientes. Enorme es la satisfacción, para los empleadores, si esta omisión se refiere al incumplimiento de las leyes laborales”, sostiene Alejandro Ramírez Argueta, laboralista guatemalteco y autor de libro. Aunque el contenido de la obra es general, ésta se constituye en importante instrumento para los periodistas, pues muchos se ven sometidos a desempeñar sus labores sin vacaciones, cobrando un salario menor al establecido legalmente, con largas jornadas de trabajo y, cuando son despedidos, sin cobrar sus prestaciones. “Esos incumplimientos producen más y más fáciles ganancias a los empleadores y más sufrimiento a los trabajadores”, sostiene Argueta. En el libro, recalca que “las élites económicas realizan los más poderosos esfuerzos para lograr que sus actividades económicas se realicen sin cumplir la normativa social mínima. En este contexto, la reducción o la anulación del ámbito de la relación de trabajo constituyen una de las principales causas de la desprotección de los trabajadores en la actualidad”. Copia del libro se puede descargar de www. saladeredaccion.com/el_disfraz_argueta.pdf Argueta, Alejandro. El disfraz de la relación de trabajo en Guatemala. Diciembre de 2007. Novedades en la Red http://www.periodistas-es.org Guía para periodistas E 22 ste site español, que es actualizado constantemente, incluye información variada de interés periodístico. Por ejemplo, convocatorias a congresos y concursos para trabajadores de medios informativos, becas para estudiantes de periodismo y ofertas de trabajo. Asimismo, divulga informes sobre libertad de prensa, sociedad de la información, uso de nuevas tecnologías y denuncias de acoso a periodistas de cualquier parte del mundo. También actualiza datos sobre cámaras fotográficas y de exposiciones de periodistas, caricaturistas y escritores. El sitio está a cargo de Rafael Jiménez Claudín, secretario general de la sección española de Reporteros Sin Fronteras, y miembro de la Agrupación General de Periodistas de Madrid y de la Asociación de la Prensa de Madrid. Los interesados pueden recibir boletines, por la vía electrónica, sin costo. www.saladeredaccion.com Caída de sol El Manchón Guamuchal Calzada Las Palmas Dermin Alexander Revolorio Velásquez (Retalhuleu, 1981) Se dedica desde hace seis años al fotoperiodismo. Es corresponsal de Nuestro Diario en Retalhuleu. Las fotografías de esta serie fueron tomadas en Retalhuleu. [email protected] Para publicar sus fotografías en este espacio, llame al 24 346 655 o escriba a [email protected] Más que mil palabras Vista del parque 23 Foto: Internet Por Marta Caravantes (*) Periodismo: una profesión en harapos Considerada una profesión apasionante y de cierto estatus social, el periodismo esconde tras las paredes de sus redacciones una realidad que poco o nada tiene que ver con esa imagen idealizada en la que aún sigue creyendo la mayor parte de la sociedad. Sin contratos laborales, con sueldos de miseria y jornadas de trabajo desmesuradas, los periodistas del siglo XXI conforman una profesión pauperizada. Portavoz en muchas ocasiones de causas loables y solidarias, el periodista, sin embargo, ha sido incapaz de saber defender sus propios derechos laborales y profesionales. El miedo, la resignación y la ignorancia son algunas de las causas pero, sobre todo, el autoengaño de creer formar parte de una profesión liberal de élite, cuando se es, sencillamente, un trabajador. La situación ha degenerado de tal forma que el periodismo es hoy en día una de las profesiones donde se producen más atropellos laborales. Su desregularización y la falta de convenios abonan una coyuntura ya de por sí favorable para que grupos empresariales se crean con las manos libres para practicar abusos a discreción, aprovechándose de la oleada de periodistas en desempleo y de aquellos que tratan de medrar o de publicar a toda costa, incluso trabajando gratis. (…) A pesar de la tradicional incapacidad de los periodistas para defender sus derechos, están surgiendo cada vez más sindicatos y organizaciones profesionales para intentar revertir el deterioro de una profesión que aunque admirada es cada vez más insufrible. Sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos para denunciar esta precariedad, los periodistas se ven incapaces de llegar a la opinión pública a la hora de dar a conocer su situación. ¿Qué es lo que falla? La respuesta es paradójica: los propios profesionales de la comunicación no pueden trascender la censura que imponen sus empresas. Los medios, supuestos portavoces de otras explotaciones laborales, guardan en secreto sus miserias. Como si fuera un ‘pacto entre caballeros’, las empresas mediáticas no publican ni una sola línea sobre abusos laborales periodísticos, ni siquiera los de la competencia. (…) Recuperar la pasión por la búsqueda de la verdad también empieza por luchar por unas condiciones laborales que permitan ejercer el periodismo con profesionalidad, honestidad y compromiso social. (*) El texto completo está disponible en www.lainsignia.org/2003/mayo/cul_006.htm