ideas para rodar - Memoria Centroamericana

Transcripción

ideas para rodar - Memoria Centroamericana
IDEAS PARA RODAR
(Aforismos bicornes)
a BERNARDO SELLES,
con can't() y con claridad
Por JOSE DE JESUS MARTINEZ
Sobre In Integridad en el Amor y en In Politico.
Llamamos "hombre fraccionado o quebrado" a quien,
no pudiendo consigo mismo, tiene que dividirse para vencerse.
Llamomos "hombre entero o integro" a quien tiene el
ser hecho de una solo pieza.
Este ensayo tiene coma objetivo al hombre integro o
entero, y coma objeto al hombre fraccion o quebrado.
En un principio, la naturaleza hostil, el trabajo fuerte,
dividio a los hombres en dos closes: la de los que trabajan
y sufren y la de los que no trabajan y piensan.
El que trabaja, sufre. El que ve trabajar, comprende.
El, que sufre mucho, no comprende nada. El que To cornprende todo, no sufre en absoluto.
El que sufre termina por especializarse en el sentimiento y en To lamentacion. El que comprende termina por especializarse en la inteligencia y en la explotacion.
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El que trobajo y sufre, se resiente. El que ve trobajar y
comprende, reflexiono.
La reflexiOn de la close que no trabaja hizo la ciencia.
El resentimiento de la close que trabaja hace lo revolucion.
La reflexion es to toma de conciencio del pensamiento:
pensamiento del pensamiento. El resentimiento es la toma
de conciencia del sentimiento: sentimiento del sentimiento.
El pensamiento ref lexivo termina por olvidorse del objeto que le intereso. El sentimiento resentido comienza per
incrustorse el objeto que le golpea.
Al idealismo burgues se le ha perdido el mundo y el
sentido de lo real. El moterialismo del pueblo los ha encontrado debajo de la miseria.
Encimo del pensamiento hay solo ideas, muy belles, pero
que no existen. Debajo del sentimiento solo hay materia, tal
vez tea, pero realisima.
El camino que predica el rico es el de la reflexion; el
que proclama el pobre, el del resentimiento.
La reflexien (solipsismo) conduce a la seguridad cobarde
del mundo interior: masturbacion; el resentimiento (socialismo), a las barricodas del mundo exterior: revolution.
Dios: pensamiento del pensamiento, (noesis noeseos).
Luzbel: sentimiento del sentimiento, (rebelion).
Cuando Dios, con el progreso de las ciencias, se convirtio en una hipotesis innecesaria para la explication racional del mundo (Laplace), los ricos se lo regalaron al pueblo.
A ellos no Ms servia ya, pero si el que los pobres se consolaran.
Version sentimental de la religion: misticismo. Version
racional de la religion: teologia. Misticismo y teologio, dos
fo rmas de masturbarse.
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Ir en contra de la razor', par seguir at corazon, o ir en
contra del canner), par seguir a la razein, es una forma de
masturbarse, de frotarse, de tocarse, entrondo en choque con
uno mismo par dentro. Lo honhado y limpio es golpear, to-.
car, embestir el mundo y sus problemos, no uno mismo.
Ir en contra de la razor', par seguir at corazon, o en
contra del corazon, por seguir a la razor', es recomendable
solo para los impotentes de corazon o inteligencia, que necesitan afrodisiocos intelectuales o cordiales, respectivamente.
En todo conflicto, o uno de sus terminos es el mundo,
o es un conflicto indecente.
La mono del pueblo, que es ciega y torpe, nunca ha podido coger de veras la realidad. La inteligencia del rico, demasiado sutil y vacia, nunca ha podido ni siquiera tocarlo.
Hay dos cominos solamente: el de la izquierda, que et
pueblo se haga inteligente y elimine a los ricos, y el de to
derecha, que los ricos se conmuevan y eliminen at pueblo_
Pero esto no puede ser, y par dos razones: porque es formalmente conteadictorio y porque el rico necesita del pobre para.
ser rico. Luego, hay un camino solo.
El corozon esta a la izquierda, pero to inteligencia
Nunca sera verdaderamente apasionado un sentimienta
tonto, ni verdaderamente inteligente una rozOn fria.
El hombre que siente (vive) en un mundo, y piensa en
otro (idealismo), este roto par dentro, froccionado, quebrado. Tiene dos corm y es, par definition, hipocrita.
La sociedod burguesa es una sociedad quebrada e hip6-crita.
En la sociedad burguesa, el pueblo vive en un mundo y
los ricos en otro.
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Lo sociedod burguesa tiene los pies (pobres) hundidos en
el fang° y la cobezo (ricos) envuelta en nubes, (humo).
La sociedad del futuro ho de ser una sociedod integra
en !a qu.s se sienta y piense en el mismo mundo.
En !o sociedod burgueso hay dos closes de hip/Scram: el
que lo es porque tiene dos cares (dos mundos, dos mujeres,
etc ), y el qua to es par conveniencia y vococion. Es decir,
el que, teniendo una solo cora (un solo mundo, una solo mujer, etc ), de todos conocida, se present° como falso e hipoorito pans hocer creer que su otra cora (su otro mundo,
su otro muier, etc.....), que no tienen, es la hermosa y verdodera A este seguntio hipocrita se le puede Homer "hipohipacrita. Los hipo-hipacritas son ospirantes a oligarcos-garcos.
Los oligarcas-garcos son los que, no teniendo los defectos (ni el dinero) de los oligarcos, tienen el defect° (y la ambicion) de querer tenerlos.
Lo mob que tienen los oligarcas es que hacen bien el
Lo bueno que tienen los oligarcas-garcos es que hacen
-nal el mai.
Los oligarcas son mobs. Los oligorcas-garcos quieren
ser mobs, es deck, °demos de mobs, son impotentes, luego,
dos veces mobs.
Pensor, sentir y hacer son tercios de ser.
El hombre enter°, integro, piens° con coririo, ama con
inteligencia y hace las cases con omor y con corduro.
La meta de la revolucion no es lo de unir a los ricos con
los pcbres, sino la desoparicion de ambos, cora dor lugar o
una sociedod sin closes quo traboje y piense conjuntomente.
La meta de la educacion no es la de unir at sentimiento
con el pensomiento, sino la desaparicion de ombos, para der
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lugar a lo que puede Ilamarse tanto sentimiento inteligente
comb pensamiento carifioso.
Es absurdo, formalmente contradictorio, integror In sociedad a base de unir —por muy estrecho, autentico y legitimo que sea el acuerdo-- ol pueblo con los ricos.
Por lo dicho anteriormente, se comprende que en la sociedad quebrada (burguesa), la inteligencia haya denigrado
los placeres del cuerpo y el cuerpo despreciodo los de la
inteligencia.
Es de esperarse que en In sociedod Integra, la del hornbre entero y total, el coito sea un acto tanto de la inteligencia como la poesia un movimiento del cuerpo.
En el omor integro, se conoce con el cuerpo y se aprieta
con el alma.
En el amor quebrado, cuando los cuerpos se unen las
inteligencias se apagan. Y cuando las inteligencios se adoran (amor plat6nico, idealista, cristiano), los cuerpos no participan.
El primero (amor de cuerpos), es intenso, apasionado,
breve, porque los cuerpos tocan y por lo tonto gaston lo que
usan. El segundo (amor de almas), es extenso, frio y duradero, porque la inteligencia ve (teorio), pero no toca ni, por
consiguiente, gasta.
El amor integro, en el que los cuerpos se con-funden y
las inteligencias se con-penetran, es intenso, apasionado, extenso, comprensivo.
El hombre integro no puede amar lo que no conoce, ni
conocer lo que no ama.
El corazon del hombre integro no tiene "razones que lo
raz6n no conoce", ni su inteligencia ninguna posion propia
que no comparto el sentimiento.
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El hombre integro no es un inteligente ni un apasionador
un apasionado inteligente o un inteligente aposionado. sino
Pensar y querer no deben ser dos momentos —par may
de acuercio que estOn—. Ho de ser un acto Celia) e indivisible, emotivo-inteligente.
El tocto es pasion; el ojo, inteligencio.
El que ve, piensa; el que toca, siente.
El pobre siente to vida; el rico, piens° en ella.
El tacto no se equivcco nunca. No hay ilusiones o fantasmagorias para el tacto.
El pueblo no se equivoco nunca. Puede no tener razon,
pero tiene hombre. Y el hombre es mil veces la razor'.
La vida es un esaectOculo pore el rico y un garrote (vii)
para el pobre.
El rico, que solo conoce la realidad vista, nunco ha estado muy seguro de si existe. El pobre, que sabe que existe,
no la conoce.
Lo realidcd es materia para el pobre y espiritu para el
rico.
La realidad es dura paro el pcbre y una ilusion pora el
rico.
El rico se pasa la vida mirando; el pobre, tanteando.
El pobre quiere recibir materia; el rico, que dice despreciarla, solo of rece ideas sin embargo.
La idea del pan puede oplocar solo a la idea del hombre,.
no al hombre misma. (Kant, parOfrasis).
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Los pobres tienen, por lo menos, hombre. Los ricos tienen, a lo sumo, uno idea del hombre.
El pobre pide pan y le clan espiritu. Pide ropa pero le
don razones. Pide tierra y le of recen el cielo.
Los ricos le echan la culpa a Dios.
La religion, que en si misma es folso, en los ricos es
un instrumento perverso, y en los pobres un consuelo bien
cruel.
Eta feo creer en Dios.
Dios se va a condenar.
El facto do la existencia; el ojo, la esencia (eidos).
El ojo da la teoria; el tacto, la practico.
Cuando el entendimiento taco (palpa), interroga par la
existencia. Cuando el entendinilento ye (teoria), interrogo
por la esencia.
Lo que se ye, pero no se taco, es una ilusion. Lo que nos
tom, pero no vemos, un misterio.
Dios es uno ilusion; to muerte, un misterio.
Las ilusiones no tienen peso. Los misterios no tienen
rembre.
Los ilusiones son abstractas; los misterios, concretos.
En to sociedad Integra se desyaneceran ilusiones y se
desyelothn misterios.
Dios, abstraccion de obstracciones. Hombre, concrecion
de cancreciones. En la sociedad Integra no habro Dios ni
hombre.
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II
Sabre la Compasion.
Se le llama "compasion" al sentir o padecer mental con
-otro persona.
Los dolores pensados no duelen.
La compasion es un dolor de mentiro.
La compasitin es mentira y, por to tanto, inmoral.
Compadecer es a:mod°, pero inmoral.
Apropiarse del dolor ajeno, mediante la accion necesariamente, es podecerlo, no compadecerlo.
La (mica forma de padecer con otra persona es padeciendo de to mismo.
Compadecer a un muerto es absurd°, compadecer a sus
familiares, inmoral. Lo onico honrado es padecer Ja muerte.
Una coso es padecer la muerte del hijo (per ejemplo), y
otra compadecer al hijo muerto. Lo primero es honrado; lo
segundo, ruin.
El pobre padece, el rico compadece.
La compasion ho sido una mentira pare °cellar la conciencia del burgues. El dolor del mundo es tel y tel el remordimiento del burgues, que pare justificar la compasion no
ha yacilado este ante el sacrificio.
De igual modo que puede padecerse y con-padecerse el
dolor, puede sentirse 'y con-sentirse la dicha.
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Compadecer la dicha es comodo y mucho m6s barata
que la dicha misma, pero es mentira, y °demos, triste.
El burgues justifica su culpa con la composion ante el
dolor, y su miserio humano con la comp:mid:in ante la dicha,
(octitud burguesa frente al arte, el cine, los boleros, las novelas, etc....).
Ni la alegria del burgues rie, ni.su dolor Dora. El burgues
es lois° por delonte y par detras. La (mica realidad suya es
su culpa y su miseria humana.
Para el burgues el arte es vida de mentira, ma forma
economic° y no comprometida de vivir los grondes pasiones
desde su segurisimo despacho.
Imaginarse que se es otro, que se sufre y gaze con el dolor y dicho ajenos, es una forma-sutil, perversa y delicada de
explotacion que el burgues ha ideado para robar al pobre y
ol artist°.
Compadecer es una vulgar forma de enajenocion.
Las almas compasivas (burguesas y cristionos) son como
los sanguijuelas: parasitos que buscan en el pueblo y el arte
ese dolor y eso olegrio que son incapaces de padecer directemente.
El burgues quiere la dicha gratis y el dolor que no duele.
El burgues quiere robarle al pobre hasta la pena.
El burgues es falso y malo hasta cuando es bueno.
La revolucion le traer6 at burgues Ilanto verdodero pero
tambien dicha de la buena.
Antes, sin embargo, ha de eliminarse la posiifin del pobre que la compasion del rico, porque esta es de mentira y
°quell° de verdad.
El rico compadece al pobre, el pobre padece al rico.
En la sociedad Integra no habra pasion innoble ni comp:mien inmoral.
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Ill
Sabre la Caridad.
"Justicia" es dar a coda cual lo suyo.
"Caridad" es que coda cual de de lo suyo.
La justicio se la exige, la caridad se la mendiga.
Es justo quien restituye lo ojeno. Es caritotivo quien distribuye lo propio.
La caridad se funda en la compasien de uno; to justicia,
en el derecho del otro.
La justicia satisface; la caridad humilla.
Selo puede hober caridad si hay a quienes les sabre y a
quienes les falte.
La caridad supone lo injusticia.
El hombre justo toma lo suyo y restituye lo ajeno. El
burgues caritativo toma to ojeno y lo do coma suyo.
Justicia o caridad, pero no ambos.
Mientras haya caridad no habra justicio, porque la caridad supone que lo que el rico do le pertenece.
La caridad es to justificacien de la injusticia.
La caridad es tres veces mak": porque es de suyo male,
porque hace oparecer bueno at mot y porque es un obsteculo
paro el bien.
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La caridad es mala, hipocrita y perverse.
Podemos ser sujetos de caridad solo si lo que domos nos
pertenece. Podemos ser objetos de caridad solo si reconocemos que to que se nos da no nos pertenece.
El rico do, par caridad, pant que el pobre reconozca püblicamente que la explotacion del rico es justa.
La caridad es un intento perverso de legalizar pUblicamente el robo y la sobreabundancia.
La caridad es una forma sutil y perverso de justificor
el robo.
Hasta la bondad del rico es perverso.
La perversidad m6s soil de la caridad es que hace at
pobre besar la mono que le roba.
La propaganda del rico ha estado tan bien organizada
que yo hasta los pobres son caritativos.
La caridaa, coma institucion, es la justificacion del robo
organizado en gran escala, justamente, como institucion.
La coridad es la moral hipocrita, perverse y cinica del
rico.
La burguesia aprecia tanto la virtud de la caridaa que,
para pccler ejercerla, fomenta,la pobreza.
Consuelo del cristiono caritativo: siempre habrO pobres
en quienes ejercer la coridad.
Terror del cristiano caritativo: que el mundo se haga
justo.
El rico no solamente no pago para entrar al cielo, sino
que cobra par ello.
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Lo caridad se pide con cortesia y humildad. La justicia
se exige con decision y hasta con violencia.
El rico quiere dar caridad. El pobre quiere recibir justicia.
El rico prefiere dar un poco, por caridad, pow que el
pobre no se lo exija todo, por justicia.
Los burgueses ban entendido el amor como caridad par
dos rozones: Primero, porque el amor caritotivo, es decir,
composivo, es uno forma pada, feminoide pero comoda y
segura, de sentir y padecer el amor. Segundo, porque el rico
tenia que crear a Dios a su imagen y semejanza, y tin Dios
rico no pide cuando ama (Eros), sino que do por sobreabundancia (Charitas).
La revolucion no tendr6 compasi6n ni caridad para los
compasivos y caritativos.
La sociedad Integra es una sociedad justa, no caritativa.
IV
Sabre la Felicidad y la Alegrio.
"Felicidad" es el estodo de quien ha cumplido sus deseos.
"Alegria" es el estodo de quien va en camino de lograr
sus deseos.
El hombre feliz no tiene nada que hocer, el hombre alegre lo tiene todo par hocer.
La felicidad es para los ricos; la alegria, en cambia, es
del pueblo.
La felicidad es una manero de ver las cows hechas; la
olegria, una manero de hacerlas.
La felicidad es tebrica; la alegria, proctica.
La felicidad es repose; la alegria, trabajo.
La felicidad supone; la olegria propane.
La felicidad recuerda, la alegrla proyecta.
La felicidad es para los viejos; to olegria, en cambia, es
de los jovenes.
La felicidad se rumia, to olegria se canto.
El hombre feliz este, content° consigo mismo, el hombre
olegre, con algo del mundo.
La felicidad es subjetiva; to °legit!, objetiva.
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La felicidad es una forma de masturbarse; la alegria,
una forma de amar el mundo.
La felicidad no pide nada mos. Felicidad es conformidad
y, por tont°, sometimiento. La religion que predico la fellcidad, predica el sometimiento y, por tanto, la explotacion.
Lo sociedad Integra es una sociedad alegre, no feliz.
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V
Sobre el Amor Cult*.
Proponerse amor es como proponerse proponerse.
El amor no es joya que se luce, es herramienta que produce.
Amar el amor es cosa ruin.
Lo importante no es el amor sino lo que con el se hoce.
El amor hace, no se hoce.
Siente, no se siente.
Tiene, posee; no se tiene, no se posee.
Piens°, no se piensa.
No se tiene amor, se lo es.
El amor es sujeto, no objeto.
Amar es una manera de ser.
El amor no es una coso, sine una manero de hacer los
cosas.
El amor es un metodo.
El amor no es algo que se ye, sine mos bien conic un
ojo con el cud l se ye. V al mismo tiempo, come una mono,
que toca tocandose.
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El amor nos vuelca sabre el objeto amado anicamente
la mono sobre el objeto palpodo: a base de tomar conciencia de nosotros mismos.
COMO
El omor, por abajo, es coma el tacto: necesita que su
objeto se le resista.
El amor, par arriba, es como el ojo: necesita que su
objeto sea clam.
No se amo lo fofo, lo blando, lo inconsistente.
No se ama lo turbio, lo oscuro, lo mentiroso.
El amor de almas (ojo puro) es idealismo vulgar.
El amor de cuerpos (puro tacto) es materialismo grosero.
El amor integro y culto no tiene piezas: es una solo mirada que toca y oprieta, o una solo mono que ve e inspecciono.
El amor no tiene principio ni fin. Cuando !leg°, es coma
si hubiese estado all( desde siempre. Cuando se vo, corno Si
nunca hubiese sido.
La grondeza del amor se mide hacia abajo, no hada
arriba.
Lo altura, en el amor, se llama profundidad.
El amor es obsoluto o no es en absoluto.
Si el hombre existe y amo, no queda sitio paro Dios. Y
el hombre existe y ama.
Si Dios existiero y amara, no sobroria sitio en donde
pudiera el hombre existir y amar. Y la tierra es un sitio donde el hombre puede existir y amar.
Dios o el hombre, pero no ambos.
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Aun cuando Dios existiera, no tendria sentido omarlo
o pensar en el. Y ni siquiera existe.
A Dice hobria que negarlo oun cuando existiera. Sabre
todo Si existiera.
Dios no es necesario ni siquiera pare la religion.
En la sociedad integre se fundiron o integraran la erotica, la politico, la etico, la legica, la poetic°, la noetica y
la teolegica.
No vale la pena hablar del amor, pero si hablor enamorado.
El amor no se expone, se impone.
Estas ideas son hijas del amor. James querrian ser madres de el. Fueron descubiertas y rodadas, y empiricamente
comprobadas, desde el, teniendolo de supuesto o setano, de
luz, balcon, razor) o motodo.
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Fichte: el Idealismo Subjetivo
Dr. HUMBERTO ZARATE
Kant concibi6 un universo preformado por la roz6n, no
obstante aun admitio ese dualism° naumeno-fenomeno, que
le permitia sostener un pie en el estribo de la reolidad extrocognoscitiva. Esta especie de equilibrio, de posicion equidistonte del realism° y del idealism° que trota de sostener
Kant con su Critica de la Roz6n se rompe por su mos destacodo discipulo, Juan Te6filo Fichte, a quien el propio Kant
di6 loudes en principio. Empero, Fichte se declare seguidor
de la filosofia kontiono, advirtiendo que este, convencido "de
que a este gran hombre le ha fracosado totalmente su prop&
sito de transformor de raiz el modo de pensar de su epoca
en mated° de filosofia y con ello en todo la ciencia, puesto
que ni uno solo entre sus numerosos seguidores advierte de
que se habfa propiamente. El autor ha creido saber esto
Ultimo, ha resuelto dedicar su vida a hocer una exposicion
del gran descubrimiento totalmente independiente de Kant
y no cejar6 en esta resolucion" (1).
be ohi que, a pesar de encontrarse las raices del idealismo subjetivista fichteono en la Critica de Kant, nos encontramos ante uno radical innovacion dentro del desarrollo
logico-historico del ideolismo. CL.u51 es el punto de arranque
de esta nueva direcci6n? earn° interpret° Fichte la filosofia trascendental? He aqui las preguntas a las que nos
proponemos dar respuesto coma exposicion de las nuevas
estructuras que aporta el idealism° al proceso historic° de
lo cosmovision del 'hombre.
(1) Fichte, Juan T.—"Introduccion a la Teorio de lo Ciencia", Revisto
de Occidente, Madrid, 1934. Advertencia prpliminor. p. 4.
22
Panto de arranque de la filosofia fichteana
Todavia Fichte nos debe otra advertencio, en la que nos
pone de manifiesto que su filosofio "no se trate pare ml —lo
dire en este ocasion francqmente-- de corregir ni completer
los conceptos filosoficos que estan en circulacien, Ilamense
antikantionos o kantianos, se trata pare ml de extirparlos
totalmente y de invertir par complete el modo de pensar sabre estos puntos de la meditacion filos6fica, de suerte que
con toda formalidad, y no meramente por decirlo asi, el objeto este puesto y determinado por la facultad de conocimiento y n9 la focultad de conocimienta par el objeto" (2)
Pero at buscar el origen del pensamiento fichteano es
absolutomente necesorio distinguir el metodo de replanteor
el problema del conocimiento, de los motivos de este replanteamiento. En cuanto a los motives, dire que Fichte se propuso tender un puente entre el neumeno y ci fen6meno kenhones a fin de poder elaborar la metofisica kantiana. Yo
hemos vista coma, segon la teorio del conocimiento kantiano,
el sujeto preformaba el mundo; pero siendo este sujeto la unidad de lo conciencia trascendental, el resulted° de ese mundo preformado y de ese sujeto era puro fen6meno. Por consiguiente, en el sistema kantiano es imposible una metafisica en cuanto sober absoluto.
Par otra parte, Fichte observe que Kant descubre a troves del yo moral urra nueva via pare poder entrar en la region
del naumeno. Kant, tras la Critica de la razor, practice, nos
escribe uno metafisica de las costumbres. La actividad moral
parece ester fuera de las formes "a priori" del conocimiento y, par consiguiente abre un portillo a la case en si. Sin
embargo, Kant no aprovech6 las posibilidades de su propio
descubriiniento. Par el contrario, Fichte intuye que la actividad moral justifIca la existencia de un yo moral que puede, a su vez, ser el sustrato de la conciencia trascendental.
Entonces, esa unidad de conciencia no es un principio "a
priori", el primer principio que, segan Kant, posibilita el conocimiento, sino que este fundada sabre ese sujeto de la cccion moral. Ademas, la actividad de ese yo moral estaria
en relacion con el conocimiento. Tante las formes "a priori" del conocimiento como los "imperatives categoricos" de
la accion moral tendrian una raiz comon, un sustrato que
(2) Cf. Op. cit.—Advertencia preliminar, p. 6-7.
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los fundomentase, el yo moral. Y oqui se produce el cambio
radical de la filosof io troscendental critic°, a una filosofia
trascendental metafisica.
El noumeno kantiano quedoba desde este momenta descubierto a la intuicion. Na se trata de un ser ni de una
sustancia sino de un yo activo; un yo activo que Fichte entiende coma "sujeto trascendentol". Kant nos hobla de "mien trascendental" en el sentido que las leyes o principios a
priori del conocimiento no se referian solo y exclusivamente
a ml razon individual, sino a la razon considerada como esencia universal de todo conocimiento. Pues bien, Fichte no entiende este sujeto total kantiano como sujeto individual, sino
,como esencia de todo posible subjetividad, y par eso se transforma en un "yo trascendental". (°)
Para aclarar plenamente el sentido de este "yo trascendental" podriamos servirnos de un ejemplo: cuando en la teologia decimos que en Cristo hay dos noturolezos, pero un solo
sujeto, que es la Segundo Persona de la Trinidad, estamos
haciendo referencia a una distincien entre el Yo de Cristo y
su reolidad natural (para.Fichte, fenomenologica). Supongamos ahora (y metaforicamente es legitima la suposicion), que
todos los seres humanos fuesen otros tantos Cristos; esto es,
que tuviesen por sujeto comUn ese sujeto que deciamos Segundo Persona de la Trinidad. Entonces ocurririo que la Segundo Persona de la Trinidad seria verdadero sujeto trascendental. Y pongo este ejemplo con el onimo de hacer ver que
pora Fichte no se trato de un sujeto mental, coma puede
ser la esencia de la circunferencia referida a todos sus inferiores (porticulares) sino de un sujeto real coma to es la Segundo Persona de la Trinidad, en el ejemplo propuesto.
(c) Mes de una vez se ha puesto de relieve la problemoticidad de semejante concepciem; el concepto del "yo" fichteano trasmuta con
frecuencia y un tonto arbitrariamente. Hay una radical pretension
en Fichte —y esto es ciertamente clam— de reelaborar la decks°.
den trascendental de Kant haste convertirla en un total y pure
formolismo inmanente del espiritu. Es innegable, edemas, que el
decurso dialectic° tricot6mico —tesls: yo soy yo; antitesis: el yo
pone el no-yo; sintesis: el yo pone el yo y el no-yo— representa
un esfuerzo genial en orden a un acercarse a lo forrno y funcion
del espiritu en su mas Intim sir.
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El metodo que sigue Fichte en el replanteo del problemo
es de tipo introspectivo. Esto es, comienza par un examen de
la conciencia. En realidad, Fichte lo que tenia o la vista era
relacionor los fenemenos, en cuanto contenidos de conciencia con el fundamento de los mismos, que para el ha de set
siempre el noumeno. En dicho examen, Fichte distingue dos
tipos de representaciones o determinaciones de la concientio: aquellas que van acompariadas del sentimiento de libertad y oquellas otras acompariadas del sentimiento de necesidad. Asi, Fichte nos dice: "Mn en el caso de la mos
fugaz auto-observacien, percibire cualquiera una notable diferencia entre las varias determinaciones inmediatas de su
conciencia, las cuales podemos Ilamar tambien representaciones. Unas, nos parecen dependientes par completo de
nuestra libertad, siendonos imposible creer que les corresponda algo fuera de nosotros, sin nuestra intervencien. Otras
las referimos, coma a su modelo, a una verdad que debe existir independientemente de nosotros... Podemos decir, en sumo: olgunas de nuestras representaciones van acomponadas
par el sentimiento de la libertad, otras par el sentimiento de
la necesidad" (3)
Para Fichte no tiene sentido preguntar par el fundamento
de las determinaciones de la conciencia acompariadas del sentimiento de la libertad, pues la respuesta seria nuestra voluntad, sin embargo, tiene pleno sentido hacer la pregunta acerca del fundamento del sistema de las representaciones acornpartiadas par el sentimiento de necesidad y de este mismo sentimiento.
SegOn Fichte, desde el momento que tiene sentido preguntar por el fundamento de tales representaciones estamos
hociendo uno clara distincion entre lo fundado en este coma
las represenociones acompartiadas del sentimiento de necesidad, y el fundament° de dichas representaciones que las trasciende.
"Todo °quell° de que soy consciente se llama objeto
de la conciencia. Hay tres closes de relaciones de este objeto can el que se lo representa: 0 bien aparece el objeto
coma producido anicamente par la representacion de la inteligencia, o bien como presente sin intervencion de la misma,
y en este ultimo caso, o bien coma determinado tambien en
0/ Cf. Op. cit. - p. 10.
25
cuanto a su constituci6n, o bien como presente simplemente
en cuanto a su existencia, pero en cuanto a la naturolezo,
determinable por la inteligencia libre", dice Fichte (4)
Para Fichte, la primera relacion viene a parer en algo
simplemente inventado; la segunda se trate de objetos de la
experiencio, y la tercero solo es un objeto anico que vomos
a indicar ahora mismo. "El que yo me aporezca a ml mismo
determinado justamente de tol modo y no de otro, justamente como pensante, y, entre todos los pensantes posibles —dice
Fichte (5)— justamente como pensante en to cosa en sí, debe
depender, a mi juicio, de ml dutodeterminaciOn..." "pero o
ml mismo, "en si", no me he hecho sino que estoy obligado
a pensarme por anticipado como aquello que debe ser determined° por la outodeterminacion. Yo mismo soy, pore ml,
un objeto cuya constitucion depende, en ciertas condiciones,
simplemente de la inteligencia, pero cuya existencia hay que
suponer siempre".
Todo el °fen de Fichte se polarize en poder explicar la
experiencia. La experiencia es entendida como el conjunto
de todas las representaciones acompariadas del sentimiento
de necesidad. Ahoro bien, Fichte admite, dl igual que Kant,
que la realidad es el resultado de la actividad del pensamiento; pero difiere de este en que la realidad, en cuonto a resultodo de materia y forma, segun to tesis kantiana, depende integramente de la mon, mejor dicho, del Yo. El Yo y
to representacion, o el Yo y sus determinaciones se nos dan
simultaneamente en una unidad de conciencia. Segtin Fichte, es necesario interrogarnos sobre cual de los dos es el
fundamento y cuel de los dos lo fundado. Si la eleccien recae sobre el objeto, esto es, sobre los determinaciones del sujeto, entonces estoremos ante el realismo; si par el controrio,
la eleccien recoe sobre el sujeto coma fundamento de las determinaciones, estamos entonces frente at idealismo.
Para Fichte la eleccion de realismo o ideolismo solo depende de to close de hombre clue es. Todo el que ama la
libertad tendra que polarizarse en el idealismo, esto es, en
to supremacia del yo sobre las determinaciones del mismo.
(4)
Cf. Op. cit. p. 17-18.
(5)
Cf. Op. cit. p. 18-19.
26
Por el contrario, el que se polarize en Las determinaciones
del yo, como raiz ontologica de toda realidad, se puede decir
que es un esclavo.
Asi nos dice: "La discusi6n entre el idealist° y el dogmatic° es propiamente esta: si debe ser sacrificada a la
independencia del yo la independencia de to coso, o a la inversa, a la independencia de la cosa la del yo" (6)
Pero el dogmatism° o realism° es incopaz de explicar lo
que se propane explicar: representacion. Por el contrario
el idealismo tiene a su favor el hecho de que la conciencia, en cuanto. se intuye a si. misma, une conocimiento y
realidad en una indisoluble unidad, pues en eso consiste la
conciencia, sin salir de Si, sin lanzar la hipetesis de la cow
en si como fundament° de nuestra representaciOn, ,ya que la
cosa en si no es percibida por nuestros sentidos, sino por la
inteligencia, y,,segan Kant, como una forma "a priori", resulfa clue solo por un acto de fe podremos suponer que hay
cosas en si fuer° de nosotros. Luego la posicion idealist° en
su origen se funda edemas en las ventajos que report° el sistema paw resolver el problma dee la posibilidad de la experiencia. Segan' Fichte, el idealismo progresa incesantemente
de lo condiiconodo a la condicion. Por lo tonto, se ha de Ilegar a un resultado ultimo que sea el conjunto de todos las
condiciones y, a su vez constituya el sistema de toda la experiencia.
En un idealismo integral, pora Fichte lo "a priori" y to
"a posteriori" no son dos cosas distintas, sino una solamente. Textualmente nos dice: "son una solo cosa considerada
solo par dos lados y se diferencian solo por el modo de Ilegar
a ellos". Tomando un ejemplo Fichte anode: "a posteriori
es el noumeno en cuanto se le considera coma dodo. A priori, el mismo noumeno, en cuanto se le obtiene como producto de los factores" (7)
Interpretacion de la filosofia trascendental
Fichte, a su ve; intenta hacer ver corn°, en las propias
condiciones de toda posible experiencia, estO presente el yo.
Esto es, el yo es precisamente la condicion. Fichte dice que
(6)
Cf. Op. cite - p. 26-27.
(7)
Cf. Op. cit. - p. 53-54.
27
si del texto kantiono no sacamos otra canclusian que to que
oparentemente ofrece, entonces Kant seria un charlatan.. El
argumento de Fichte es este: se trata de que a primer°
vista ,Kant parece decir que siendo la condicion Ultima de
todo conocimiento, de toda percepcion la unidad de conciencia, entonces resulta que para poder Begot - a esa unidod
de conciencio es necesario un pensamiento de lo que se piensa. Ahora bien, pensando nosotros A, B. C... en distintos
momentos siempre necesitaremos de un Ultimo pensamiento
integrador, y segan Fichte, en tal case To incondicionado no
podria alcanzarse jamas.
Lo contrario resulta Si nos otenemos at principio kantiano
de que la posibilidad de la percepcion descanse en un yo puesto a un tü opuesto, de modo que existo una conciencia superior e integradora de ambos polos. Pero, ecomo se origina esa conciencia? Segan Kant, mediante un pensamiento integrador. Esto no se puede confundir con el yo. Una
cosa es el yo, condici6n de toda percepcion, y otra cosa es
la conciencio en la que el yo y sus determinaciones se producen. El pensamiento radical, absoluto que posibilita todo
conciencia es el principio de identidad. Mejor dicho, en la
rabic] de -las categorias konttanas hay tres que son fundamentales; a saber: .categoria de •realidad, categoric de negocion
y categoria de limitacion.
La categoric de realidod se funda sobre el principio de
identidad. Es este principio el mos absoluto que pensar se
puede, segun Fichte. Ahora bien, el principio de identidad
tiene como verdadero content& el yo. Siendo el yo la condician de toda percepci6n, la realidad radical es el yo. El
yo se encuentra siempre identico a Si mismo. Se podria pensar que cualquier coso, el ejemplo que antes citamos de A,
significando un objeto general, podria cumplir esto condiciOn
de identidad; sin embargo Fichte alega que la proposicion
A=A tiene un sentido - un tanto abstracto. Asi, dice Fichte:
"yo soy yo, tiene una significacion muy distinta de la proposicion A es A. Puesto que est° ultimo no tiene contenido
mos que en cierta condician. Si A esti] puesto ciertamente
como "a", con el predicado de "a". Pero esta proposiciem
no determina todavia si "A" esta puesto de uno manero general, y por consiguiente est6 puesto con un predicado cualquiera. Al contrario, la proposici6n yo soy yo, tiene un valor incondicional y absoluto, puesto que es identica a lo ley
equis. Tiene valor no solo en cuonto a su forma sino tam-- 28 —
bien en cuanto a su contenido. El yo este puesto en ello, no
bajo condicien, pero absolutamente con el predicodo de la
identidad consigo misma; asi, est° puesto y la proposici6n
puede expresarse asi: Yo soy" (8)
De ocuerdo con este primer principio el yo se pone a si
mismo en un actcr de libertad absolute, y o su vez este yo
se constituye come realidad tambien absolute. A esta posicion del yo llama Fichte "tesis", y en relacien con ella encontramos un segundo principio; el principio de contradicdon. Segan este principio al yo se opone un no-yo. El principio de contradiccion do come resultado la categoric de negation, antitesis de la categoria de realidad. En rigor, el
yo cuando se pone, necesariamente ha de oponer el no-yo.
Si el yo es una realidad, lo ha de ser en virtud de uno determinacion tautologica, pero que a su vez queda circunscrita, por asi decirlo, por to que no es 61. No podemos interpretar el dualismo yo, no-yo de Fichte en el sentido de
la dialectic° hegeliana. En realidad el no-yo deriva del propie yo. El no-yo es el resultodo de la octividad del yo sabre
si mismo. Es decir, el no-yo es el propio yo objetivizodo per
la actividad del yo.
Esta rotura de la realidod en un yo y en un no-yo tiene
que ser sintetizada en una categoric superior que corresponde, a su vez, a lo tercero categoria kantiana; la limitacien.
La categorio de limitocion se fundo en el tercer principio.
Este tercer principio nos explico el Paso de la unidad a la
pluralidad, quedando ambos reducidas en una especie de categoric superior que podriamos denominar, de acuerdo con
la nomenclatura kantiana, come totalidad. Se trot° de uno
aspiracien infinita, de una especie de °fon ilimitado que el
yo tiene sabre si mismo.
Hasta el memento, toda la filosofia habia considerado
unilateral el valor y significacien de estos primeros principios
logicos-metafisicos. En efecto, todo tesis nos neva, gracias
al concepto de causalidad que implica, al realismo; per el
contrario, la ontitesis ha side interpretacion unilateral del
idealismo. SegOn Fichte debe haber una sintesis de estos dos
posiciones, de estas dos considerociones uniloterales que nos
(8) Fichte, "Doctrine de lo Science", troduccian de P. Grimblot, p. 5.
29
explique a la vez que el proceso ontologico del universo, el
proceso del saber filosofico. Toda filosofia nate en el primer° de estos principios y termino en la sintesis; se hate de
tine especie de ciclo; de una especie de renacer constante.
Segan Fichte, "sin la infinitud del yo, sin uno facultad
productora cuya tendencia sea ilimitado e ilimitable, no podrfamos explicar la posibilidad de la representation. Esto
facultad de production est6 deducida y sinteticamente demostrada del postulado segun el cual tiene que hober una
representation, postulado contenido en la proposition: el yo
se pone come determinado per el no-yo. Pero podemos prever que en la parte practica de nuestra ciencia, tel facultad
est6 reducida a uric facultad superior" (9). Tenemos que
tener en cuento, par otra parte, que toda actividad que determina en general un objeto esti, a su vez determinada par
una actividad que no tiene objeto. Se tram, pues, de saber
coma puede ser puesto y opuesta a la objetiva. Para aclorar est°, tenemos que recordar que segan Fichte todo concepto positivo implica un concepto negativo. Nada seria
lo que es si no estuviese determinado par lo que no es. Todo
concepto positive encierro una especie de limitaci6n. La limitation es lo que hoce posible que algo sea. Es decir, la
realidad para ser tiene que ester determinado par un limite.
De ahi que el yo ha de estar determinado per el no-yo y
el no-yd per el yo. De esto limitation reciproca se deriva
La pluralidad de todas las cases; pluralidad que serf una especie de fenomenologia de espiritu.
"Mediante la limitation el que siente puede primero
ester relacionado con el yo, o en otros terminos, el que siente
es el yo y puede ester puesto como yo, en tanto que estO
limitado en y par la sensation. Per poder ester puesto come limitado, es coma el que siente es el yo y el yo es el
que siente. Si no estuviera limitado per algo que le est6
opuesto, la sensaci6n no podrfa ester atribufda al yo" (10)
dCuol serio la nueva conception del mundo que de esta interpretation se derive? Serb a asunto de jugosas elucubraciones a Los que de memento no nos lanzamos.
(5) Cf. Op. cit. - p. 152.
(10) Cf. Op. cit. - p. 134.
30
"Las Luchas Sociales en el Istino",
de Alfredo Castillero, y su Significacion
en la Historiografia Panarnena.r)
Par RICAURTE SOLER
En laTacultad de Humanidades de la Universidad de Pa.
nam6, a pesar de sus estructuras petrificodas, se observe esporadicamente la aparicion de una obra de investigacian
cientifica. Es par elle un deber, que siempre implica uno incorned° denuncia, consignor los epodes reales al conocimiento que nos ofrecen los paces profesores y estudiantes que en
su obra —y en su actitud— desentendiendose de todos los
irracionalismos onticientificos y los misticismos a que conducen, don prueba de su confianza en la eficacia, tearica y
practice, del analisis, de la investigacion y de la critica.
Contra lo que puede supanerse, la anterior consideracion no obedece al deseo elemental, y sin embergo justo, de
serialar el hecho de encontrarnos frente a una obra de investigacian que ofrece aportes reales, concretes, al conocimiento de nuestra historic. Se trate edemas —y esto es significative— de la obra de un universitario que ha sido escrito a pesar, y en contra, de muchas de las ideas "universitarias" que inspiran la actitud de algunos de sus profesores.
Consignemos una: "La funcion de la Universidad radica en
• De este obra se han publicaclo en Tare.. algunos copitulos en los
Nos. 1, 4 y 5. Estos lineas fueron escritos pare servirle de "Pro
logo".
-
34
lo trasmision a las nuevas generaciones del legado cultural
de las generociones pasadas". 0, para decirlo m6s explicitamente, con el Dr. Diego Dominguez C., "La Universidad.._
tiene una precis° funci6n conservadora: mantener la tradicion. La gran tradicion, representada en la obra de los pensadores y artistas clasicos, y la tradicion nacional". **Esta es
la concepcion, conservadora y esterilizante, que de la Universidad tienen algunos de sus profesores. Concepcion que
formulan en la "teoria", y sobre todo, realizan en la practica. De creerles, la Universidad no es creaci6n, no es investigacion, no es critico, no es wells's: la Universidad es
"trasmision de conocimientos", es decir, conservacion, petrificacion, esclerosis. La solo presencia de una obra de investigacion, y por tanto la solo presencia de Las Luchas So-.
dales en el Istmo es ya significativa. Tiene, por lo pronto, la
significacion cabal de hacer autenticamente academic° —en
el mejor sentjdo del termino-- nuestro ambiente universitano.
II
Pero obra que nos ocupa no es solo una investigacion
que, come to!, desenmascara teorias y actitudes que en el
media rocionalizan, encubren y justifican la esterilid6d de
la producciOn y el marasmo del conocimiento. Se trata de
una obra que, por encima de todo r abunda en interpretaciones Iricidas de la historia panameria. Lamentable es sanatoria, pero tambien desde esta perspectiva el hecho elemental
S que nos encontramos frente a una obra de investigacion
historica adquiere un relieve particular. Para comprenderlo
bast° consignor otra tesis dudosa, frente a la cual la apariclan de Las Luchas Sociales en el Istmo revela aim mos nitidamente su importancia: "En Panama la labor historiografica est6 en sus prodromos; el esfuerzo heuristico y erudito
es previa al hermeneutic°. Aun no se han dodo en Panamcl
las condiciones cientificas pora la interpretaciOn historica".
'• NOTA: El Decano Bernardo Lombardo, en reciente Discurso, se
opone a este visinn conservadora de la Universidad.
"Con el impacto de la civilizacion —of irma— la funci6n de la educacion ha
cambiado. Antes se consideraba que su finolidad era anicamente
mantener y poser de generation a generaciOn las tradiciones de
una culture. La educaciOn es ahora dire:mica; es cambia continuo,
nuevos conocimientos, nuevas normas, un nuevo orden de cases".
35
Aunque respetamos este tesis, tante mos cuonto pareciera orientor la obra de C. M. Gasteozoro, que por la promocion de nuestra historiografia y por sus -logros heuristicos
es indiscutible, it podemos, sin embargo, suscribirlo. La divergencia obedece d uno diferente inteligencia de la significacion 'del quehacer historic°, y mas aCin, a una diferente
comprensi6n del origen y de la funcien social del conocimiento. Heuristic° y hermeneutic°, creemos, no son sino aspectos, momentos, de un quehacer cientifico indiviso. Toda
ciencia —entre ellas la historia— en cuonto tiende a ref lejar correct° aunque aproximadamente los procesos reales,
objetivos, requiere una precision metodologica y un aparoto
conceptual especifico. En la labor historiognifica esto precis* y este operate se alcanza, haste cierto punto, en cuanto
Id interpretocion de los fuentes implica un control sobre to
interpretacien hist6rico en general. Precise no olvidor, sin
embargo, que la interpretacion de las fuentes no gorantiza
por si solo la correccion de to interpretacion historic° general. (En ese cos° si seria aceptable lo tesis de que precis°
acometer el esfuerzo heuristico pare despues intentar la ii-iterpretacion histerica). La subjetividad, la arbitrariedad, no
son insolitas en Jas,obras historicas. Este subjetividod hay
que combatirla, pew tambien hay que explicarla. Situados
yo en este rtivel, Ia explicacion trasciende el ambito puramente metodologico, tecnico, historiografico y heuristicohermeneutic° paro comprometerse con una determined°
gnoseologio que explique el conocimiento false tenth coma
el correcto. El outer de estos lineos, como el outer mismo de
la obra, se hon comprometido con el postukido-de la genesis
social del pensamiento que explica el conocimiento correcto
como el prbducto de una praxis social en incesonte proceso
de reflejo y apropiacion de to realidad, y que explico el
pensamiento incorrecto —la false conciencia, ciertos ideologies— en funcion de to misma praxis social pero enajenada,
aliened° por los grupos'ontagonicos que ella mismo engendro
en el proceso historic°.
Ill
Las anteriores consideraciones sugieren que el outer de
esta obra, en to medida en que supone una gnoseologfo realist° —y lo cosmovision materialist° que contleva— oriento
conscientemente su investigacion en el sentido de la interpretacion materialist° de la historia. En nuestro medio, los
36
precedentes existen. En el ensayo, en el articulo, en la conferencio, y clan, en cortos estudios monograficos, la perspective materialista-historica ha sido utilized°. Incluse se ha
iniciodo, en diverse medida, su discusion teorica y su confrontacion con los metodos idealistas de interpretacien historic°. No obstante est° obra, por la amplitud de sus temas
y por e? rigor sistematico que evidencia es la primera que
orgenicomente inyestiga, desde la perspective materialist°,
el proceso historic° penmen°.
No ban faltado quienes, de antemano, han condenado al
fracas° un intento como el presente. Hern6n Porras, en su
"Papel historic° de los grupos humonos en Panama", serial°
que "La explicacien a base de clases sociales resulta inehcoz
por el hecho de que importantes sectores de la poblacion del
istmo no ban estado integrodos econornicamente entre si
duronte largos period° de tiempo y porque, adem6s, su octuacion histerice ho obedecido a menudo a reacciones psicologicas y de otra indole, sin parer mientes en los consideraciones de tipo econornico".
Esta observocion odolece de una incorrecta inteligencio
de los postulados y rnetodos del materialism° historic°. En
primer lugar, el proceso de integracion —y de desintegraciOn— economic° de los grupos orronca .de las fuerzas y
relaciones de produccion,•de la division social del trabojo y,
en particular, de la propiedad privada. Estos fenomenos se
flan dad° en la sociecfad ponamefia de igual manero que se
ban dada en todas las demos sociedades. Si se tiene otro
concepto de lo que es "la integraciOn economic° de los grupos" habrie que sehalarlo, pero en modo alguno es admisible uno critic° que, como la de Porros, a mos de interpreter
incorrectamente —rnutiladamente— el concepto de lo economic° en el materialism° historic° parece oponerle otro,
que por lo demos no define. En segundo lugar, Porros su9iere
que puesto que los "grupos humanos" no han actuado siempre en razOn de motivaciones econOmicas, tales grupos no
son identificables con las clases sociales. Todo esto implica,
nuevamente, una mutilado interpretacion del materialismo
historic°, pues a excepcion de ciertos "marxistas vulgores"
ningan materialism ho identificado la mere conciencia economic° con la conciencia social de un grupo dada.
Las anteriores precisiones poreclan necesarios por cuanto Las Luchas Sociales en el Istmo constituye, como afirmabamos, el primer intent° sisternotico de interpreter nuestro
37
posed° a troves de los postulados y metados del materialism° historic°. Su contenido revela, ampliamente, to fecundidad teOrica y la eficacio cientifica del metodo. En este sentido constituye una revision de todos aquellos planteamientos que a priori postulaban la imposibilidad de oprehender
nuestra especifico realidad historica y social a traves de
perspectives material istas.
IV
No es de extrariar que el empleo del meted° materialista- historic() en cuanto al estudio del proceso hist -twice-social panamerio conduzca a conclusiones inesperadas, en pugna muchos veces con las concepciones estereotipadas de la
historiagrafia tradicional. Esta obra nos lo revel° concretemente a troves de las categories empleadas para comprender
el movimiento de independencia de Panama de Espana. El
punto de vista del autor .--arriesgamos esquematizarlo en la
sintesis-- se expresa en la tesis de que este movimiento es
la proyeccien politico de una formaciein econornico-social
burguesa (comercictn„ La genesis mediata de esta formacian
la encontrariamos en la diverse peripecia historic() —azarosa, incoercible—.del transitismo panameno de la epoca colonial; six genesis inmediata en la estructuracien de una-clase comercial, a principios del siglo XIX, conformada a troves de un active comercio con las antillas y a traves de una
actividad economic° tronsitista formidable y paradojicamente propiciadd par las guerros de independencia suramericanas. El movimiento liberador, la independencia de Panama de Espaiia es, pues, un acontecimiento anti-feudal y
anti-colonial que expresa en lo politico y en lo ideologic°
(liberalism°, librecambismo) la preerninencia economic° y
social de aquella close de comerciantes. De ahi arranca el
orden por ella establecido. Pero este, lejos de conciliar todos
los intereses, ha suscitado, y suscita, nuevos antagonismos
cuya concelacion estamos aOn lejos de vislumbrar.
La tesis expresada, si bien no de una manera explicita,
supone una especifica concepci6n filosof ice de la libertad,
y mos concretomente, una determinada teoria sabre la historicidad de la misma. Desde el punto de vista del materialism° historic° la humanizacion del hombre, la determinecion de su esencicf, la produccion de Si mismo a troves de la
praxis, se manifiesta en un proceso ininterrumpido en el
38
cud la conciencia y la libertad del hombre expreson las condiciones y posibilidades de su ser social. Asi entendidos, conciencia y libertad no son abstrocciones divorciados de la vido
y de la historia, menos °On, determinaciones de un espiritu
que se "eleva" por encima de To real y To legisla soberano-.
mente desde las posiciones obsolutas de To inespacialidad y
de la intemporalidad. Muy por el controrio, conciencia y libertad surgen del movimiento de lo real, de la vido, de lo
historio, pare proyectarse a su vez sobre el movimiento de lo
real, sobre el movimiento de la vida, sobre el movimiento de
lo historic. Es la unidod de la conciencia y de la materia, de
la libertad y de la necesidad. Unidad dialectic°, y material,
no metafisica identidod idealist° y formal.
Tales son los lineamientos generoles de la teoria y del
metodo. Su oplicacion concreta a la historia social del Istmo
en la obra de Alfredo CaStiller° conduce a una comprensi6n
de los movimientos libertarios panamerios que se compagina
poco —lo que implica un merito-- con los enfoques meremente narrativos y apologeticos de la historiografia tradicional. Es asf que del movimiento de 1821 no se nos ofrece una
interpretacion puramente formal sobre su significacion juridico-politica ni, menos clan, una exaltacion "patriotica" de
su sentido historic°. El movimiento de 1821 es un movimiento de close, pero de una close que en su epoca desemperiabo
urta funcion historic° progresisto. Desde este mirador la libertad que se alcanza en 1821 es una libertad que se concibe directamente en funci6n de su condicionalidad historico-social y que a haves de ella se define. La libertad, pues,
no es ninguna entidad obstracta que se alcanza o no se alcanza, que se tiene o no se tiene. La libertad se hace, se
reoliza historica y socialmente. Como la conciencia. Es por
ello que el seaside y expresiOn de la libertad es un sentido y
una expresion historic° y social. No obstante el mal ejerhplo,
en la obra de Castillero no encontromos quo una mera declamacien en torno a la libertad se identifique con la busqueda de su sentido. Menos clan encontramos que la investigacion de su expresien se identifique con la narracion de
sus "momentos estelares". El proceso historic° de la libertod
en el Istmo es inseparable —en el Istmo y fuera de el— del
proceso historic° de sus luchas sociales, drameticas, reales,
concretas. Ignorar esas luchas sociales, es ignorar la historic.... y la libertad.
39
La obra que nos ocupa constituye la primera investigacion en torno a la historia social del Istmo. Esto circunstancia explica la abundancia de enfoques novedasos y de correcciones concretas que se hacen a la historiogrofia tradicional. Resumir sus aportes es torea dificil: son muchos y
fundamentoles. No obstante, porece conveniente senalar olgunos, pues no seri° de extrafiar que estas lineas introductorias Sean las anicas que se escriban en Panama sabre este
libro (No olvidamos los comentorios de Humberto Ricord
oparecidos en Tareas, N° 2, Enero-Febrero, 1961. Estos se
referian al Cap. I, ("mica publicado host° ese entonces). No
seria de extranar tampoco que una mayor ponderacion critica provenga del extranjero. No seria el primer caso. Nuestras actuales oligarquias academicas y universitarias %then
muy bien que el silencio es arma contundente. Y que hablar
en torno a la producciOn ajena es decir mucho en torno a la
ausencia de la produccion propia.
Las tesis novedosa y los aportes concretos de Las Luchas
Sociales en el lstmo, deciamos, son numerosos y fundamentales. Consignemos algunos: A). Enfoque del movimiento independentista de 1821 en funcion de la actividad politicosocial de la burguesia criolla en ascenso. Sehalamiento del
cuadro economic° condicionante y de las configuraciones
ideologicas correlativos. B). Explicacion del anseatismo de
1826 y su consideracion como primera tentativa autonomist°
despues de la anexion a Colombia. C). Explicacion a troves
de las luchas sociales istmerias del significado social y politico de la polarizacion pueblo y ConstituciOn Boliviana — ohgarquia y politico anti-bolivariana. D). Interpretacion del
movimiento de 1830 como expresion del primer levontamiento de las mosas populares urbanos contra la preeminencia
social y politico de to naciente burguesio comercial. Estas
son solo algunas de la tesis que implican profundas novedades y decididos contribuciones a la historiogrofia panamena.
nada hemos dicho sabre las abundantes fuentes editas e
ineditas que a troves de este libro par primera vez son utilizadas en nuestra historiografia.
Memos intentado destacor la significacion teorica y,
m6s especificamente, el valor historiogrefico de Las Luchas
Sociales en el lama, de Alfredo Castillero. No podemos concluir sin senalor que en la medido en que la teorio es uno
guia para la prectica esta obra alcanza tambien una proyec40
dein en la acci6n, en la practice. M6s concretamente, en la
accion y en la practice social y politica. Las Luchas Sociales
en el Istmo constituye, hoy par hoy, el instrumento mas calificado pare el conocimiento de nuestra praxis social del
posit Es elemental afirmar que la del presente no se cornprende sin la del pasado. En este sentido Las Luchas Sociales
en el Istmo es tambien un instrumento pare la comprensiein
de la praxis social del presente. Para la comprension y pare
la accion. Pues solo es accion eficoz la que se base en la
comprensien profunda, en el conocimiento autentico y ver&der° de lo reel, de la materia del desarrollo, de los determinaciones fecundos de to concreto.
Panama, Mayo, 1962.
41
Sonam6nles
OBRA EN UN CUADRO ORIGINAL DE
CatiOS
/le RUM frath
Personajes:
Miguel
Jaime
Luis
Viejo
Profesor
Guardia
Mujer baratisima
Ella
tin solar sucio y oscurecido. De una forma lejana e intemiltente se percibe ruido de
trafico ocomporiado de leve iluminacion.
Entron MIGUEL, JAIME y LUIS, descuidodos en el vestir y suspendidos en la vida
como burbujas en uno emulsion. Un globo
pendiente de un Folio siente mas que
to otraccion de la gravedad hocia la tierra.
MIGUEL, Estoy consado de bust& un sitio son° y libre. jMierdo de set!
JAIME.,-- No to encormareroos, ate ploneto esta todo cercado. Rejos en
tos ventanas, en las puertas, en los bancos, en las alcontarillas.
45
MIGUEL.— Sentemonos.
JAIME.— (Con las manes en los bolsillos do una patada a una piedra
como si se la diem a si mismo) Para ocabar sentendome en el suelo no he andado tantos minutos de mi vida.
MIGUEL.— Mistifica; es foci!. Me gusto esto; es necesario sour al camp° pow respirar aire puro. MI, vives sin tiempo, fuera de 61. El
rehab como el suburbono, para las cludades.
LUIS.— Eso es cierto. Aqui puedes gritar lo clue quieras: "Viva el rey",
o "Abojo el rey". Nadie te hare caso. Prueba a gritar: "Al asesino". Te asesinaren sin ninguna prise.
JAIME.— Como en la ciudad, todo igual que en In ciudad. No me gusto
el campo. Hay una vida quo consumir. No es este el sitio. Habria
que ir mos lejos.
MIGUEL.— 2Que sabes to de este o ague!, basura?
JAIME.— Poca cow, que entre uno y otro, siempre hay un tercero, sea
Dios o el diablo. Siempre el vocio este Ileno.
LUIS.— Quiz& Ahora yo estoy entre Miguel y Jaime.
JAIME.— No, yo estoy entre Miguel y Luis. Formamos triongulo. Todos
estomos entre todos.
Pause.
MIGUEL, Quiz6 venga hay.
JAIME.— iQuien o que ha de venir?
LUIS.— 2Para que esperar? Siempre vo y viene y nunca este presente.
JAIME.— Ese me ha gustado a mi ser. Pero siempre tuve quo ester presente. No sabeis la tragedia de no sot ye pasado.
MIGUEL, Mierda, desvarios.
LUIS.— Conozco la trogedia de ser presente. De ester aqui sin &Air de
mi tiempo.
MIGUEL.— Creo quo no sabeis node. 0 solo subvertir.
JAIME.— Una vez despierto said quo habit] dejado de ser. Flotaba, luego
me &luta como uno nube pero siempre alegremente, dulcemente.
46
MIGUEL.— iQuieres decir que a la vida no le encuentras ningtin valor?
MIME.— Quiero decir que la vido no existe, porque no e.xisto como una
vida.
MIGUEL.— Eso lo puedo negar. Yo no se si existire, pero la vida sf, en
no no cedo.
JAIME.—Pues si existe, tremmela, quiero tocarla los pechos pora que me
hog° gozar, o sus osperezos y fibs hasto hocerme does:).
MIGUEL.— La mancharias.
MIME.— Me redimiria.
Entra VIEJA, enlutoda, encorvada y viscose.
LUIS, Mirar., Viene del rosario.
MIME.— Y corre ligera al cotilleo.
LUIS.— Viejo empecatada, arder6 como uno tea recordando lo que goz6
en su juventud.
JAIME.— ;Bruja!
VIEJA--. iJests bendito! Qui susto. Granujas, canallas.
JAIME.— Largo de aqui, puerto, no robes nuestra soledad.
Sale VIEJA.
MIGUEL.— Necesiteis lea, mucha lena que os huge order las costillas
y el alma. Vuestra redencien estarfo en un compo de concentration. Yo me escape de uno. Cuando vieron que no podiamos traWar, todos los sObados empezaron a Ilevamos comiones de mujeres procedentes de otros campos. Eron voluntorias. A los tres meses de aguontarnos los ponion en libertod. A las que no habian
muerto, claro. ;Que ojos hacienda el amor! iQue miradas subian
a los camiones! Vuestro vida sin valor me repugno.
LUIS.— Hay olgo agrodoble? &by algo desagradable? Hay alga?
JAIME.— No preguntes. Para que Qt.te mos te da?
LUIS.— Ese alga es tan inmenso como tado lo que no existe.
MIGUEL, Tan inmenso como todo b que puede existir.
Entro PROFESOR, viejo, estirado y pedante.
47
LUIS.— lAh! Viejo chivo, te conozco. TO has sido mi profesor Me ensehobos quimica y que ignoronte eras, par cierto. Llevabas los formulas opuntadas en on panel y los releios mos que Si fueran cartes de amor. Eras el ombligo del mundo y tu atedro lo creios el
Faro de Alejandria.
MIGUEL.— Yo tombien le conozco. Es don Rafael. Queria enseriarnos literature, pare nunco ley6 a Faulkner ni supo de sus burdeles.
JAIME.— jEli, 16! iAdonde vas? Otra noche que pasares en casa de tu
amiguita. Es a H , don Jesus, el que me ensefiabas moral y me
hablabos de Dios y so justicia.
LUIS.— Por lo que veo todos le conocemos.
JAIME.— Todos conocemos al genero humono. Formamos parte de el.
PROFESOR. Miralos. Que cuadro. TO Raid.
MIGUEL.— Te habla a ti, Jaime.
JAIME._ liable, viejo vompiro.
PROFESOR._ La onotomia to pudo.
JAIME.— Me repugnan los muertos, no to ocerques. No era came caliente de mujer.
PROFESOR.— Y Rafael, je, je.
MIGUEL.— Es a ti , Luis.
LUIS.— Al fin me reconociste forsante,
FROFESOR.— El nifio Nen, el hijo del diplometico, quo no fue copo -z
de ingresor en la universidod.
MIGUEL.— jV de ml, no to ocuerdos? Soy Miguel.
PROFESOR._ Mucho, me acuerdo mocha. To eres Javier, Te hiciste poeta. iPobre neciol Pero la culpa era de los profesores. 0 no eron
oteos, o no eran creyentes.
MIGUEL, Largo, no gostes ml paciencia. 'Largo he dicho! Vete o oho.
esterallero, este es nuestro.
Sale PROFESOR
Sueno tristemente lejano el pitido de
un tren.
48
JAIME.— Ahi van elbs
LUIS.— Quienes?
MIME.— Los otros, los que.no somas nosotros ni podiemos serlo nunca.
Todos con sit billete y su destino comprodo. Todo en reglo.
LUIS— Me siento verde y resinoso. Me siento motorral.
JAIME.— Yo siento todo la ongustio de sentirme hombre.
MIGUEL.— No se cue' es poor, si lo de tener tocb un cuerpo a consumir
o lo de tener espero'nzo quo nunco Ilegar6.
JAIME.— Path el tren y seguimos aqui solos.
LUIS.— En el otro vendr6.
MIGUEL, Quien tiene clue venir?
LUIS.— Elio.
MIGUEL.— iQuien es elk!?
JAIME', Es coma uno mujer.
Entra GUARDIA.
De cornedieta antigun , o vodevil trances.
Cosco, espadon, bigotes destenidos y
mostachudos y comma a sahibs.
MIGUEL.— eLe conoceis?
LUIS.
vol sr. Le sobome el dio que atropelle a una embarazoda. De
resultas de ello no pudo coger ml motritula ni identificorme. as
conocido como un escrupuloso funcionario.
JAIME.— Yo tambien le conozco. En una manifestpcien le di una pedrado. Como sangroba. Pobrecillo, parecia un lech6n. Creo qua perdi6
el ofo. Mientros se record6 awel ojo fui lider politico.
GUARDIA.— Oir, gatillos. No me gusto yams par aqui. Low a unq cafeteria. Buscaros unos mujeres, tomer unas copas, y en f in, barer
algo de provecho, pero largo de pout.
LUIS.— jCana esbirrol
49
GUARDIA.
fAh, mamoncete! Con los petioles malolientes todavfa y yo
difamando el regimen. Pero en
si vuelvo y os pillo aquf, yo
podeis pedir tobaco a case pora una temporada. En el penal se
fume mucho.
Sole GUARDIA.
JAIME.— (A Miguel) ere ti i no le conoces?
MIGUEL.— Mucho. Es un tipico ejemplar de hija de auto y de cobra.%
Producen, cuondo se citizen, ejemplares come este.
MIGUEL.— Espereis una mujer y yo he pasado atios viendo solo sus sombras descemodos bajando de comiones polvorientos.
JAIME.— Te compedezco.
LUIS.— To envidio.
MIGUEL.— No me compadezcas, Jaime. Si chore entre nosotros, vier°
una mujer, creeria que era one vide. Y buscaria donde comienzan
los elambres de espino.
JAIME.— Tombien podries penser en una vida donde se arna, se engendra, se pore, se cobra un sueldo y se revienta.
LUIS.— No te sobra con una vido?
JAIME.— A ml, si.
LUIS.— Y si ella viene, 2que nos ofrecerd? Todo eso, antes de reventar?
JAIME.— No comprender6 que todavio hay esclavos.
MIGUEL.— Vendre o convenceros que todavfa existis y no debeis Imp.dirselo.
JAIME.— Deberio venir mejor pare barremos de este solar de inmundicia.
MIGUEL, No dira nada. No lo oirois. Solo se oye nuestros propias palabros en boca de otro.
LUIS.— Y si nos barre; en que bosurero nos arrojart?
MIGUEL.— eFumamos?
Hay tobaco?
JAIME.— No, me voy.
Entro MUJER BARATISIMA.
50
MIGUEL, 1:1ci donde vienes?
JAIME.— De rodeor la tierra y ander por ella.
LUIS.— Dijo Satan a lehov6.
MUJER B.— iTienes alga paw corner, Antonio?
JUAN.— No, amor mio.
MUJER B.— iSigues pensando abandonarme? cTanto me adios?
JUAN.— Ni te odio ni te ama. Ya 'no siento nada par tr. Ya solo eres
pans ml un poisaje eternamente vista.
MUJER B.— (A luisi 4Ya aporeciste, granuja? Todavia estoy esperando
lo que me debes. Sigues igual, Enrique.
LUIS.— La 6Itima vex que nos vimos no eras la misma, Mercedes, por
eso no te pague, no te lo ganaste.
MUJER B.— Vamps a tomor un trago, Enrique.
LUIS.— Acabares coma uno rata en un barril; vete, borracha asquerosa.
MIGUEL.— eQue haces par aqui, Luisa?
MUJER B.— Buscarte, Diego, eTe vienes, coraz6n?
MIGUEL.— No puedo. Solo deseo (shore luz y mar. Mucha luz y mucho
mar que me !oven y vuelvan transporente.
MUJER B.— Dejate de esas cosas ahora, Diego. Conozco un sift) nuevo.
Saionas limpios, buena cosi; ogua, cerrojo en la puerto. Se este
muy bien, vente.
MIGUEL.— Si me ofrecieras una mujer nueva, tal vex iria. Y dela, y mar.
MUJER B.— Yo te los dare. Tan azules coma t6 quieras.
MIGUEL.— Tan caul
COMO
la inocencia?
MUJER B. —Mies mujerzueIa. Piensa en tu mar y tu cielo y tu mujer
nueva.
Sale MUER BARATISIMA.
JAIME.— (Da tres posos hada la derecha y de espaldas a sus compafieros se asienta) Decidldamente me voy.
51
MIGUEL.— Por nada del mundo volyeria a serrtorme en el sueto.
LUIS.— eTemes manchor el peeve del suelo con tu borne?
MIGUEL.— Creo que en nosotros est6 ser tierro o marmot. Haulms estatuas duraderos o polyo de Los commas.
MIME ocupa su puesto anterior.
MIGUEL.— eVuelyes?
LUIS.— eDe donde vienes?
JAIME.— Hada much° color all'. Estaba demoslado proximo del infierno.
Prefiero vuestra puerce compare's:.
MIGUEL.—,Llegas a tiempo. Ahi viene Ella. Me do Western°. Viene confled° come bestia al sacrifice°.
JAIME.— 9e orrepientes?
MIGUEL.— No, no es eso. Me portare como vosotros, no tames. Pero,
servir6 de alga? eLavar6 su songre nuestros pecados? ePodemos
escoger on redentor a yoluntad?
JAIME.— No preguntes, nedie te contester° y menos Dios. Elige y sacrifice.
MIGUEL.— Por que debo yo elegir y no ser elegido?
JAIME.— No pienses en Dios. Dios se ho suiciddclo. Ur ha preferido osi.
MIGUEL.— Dios no puede morir.
JAIME.— Abendoniendones, abandoned° a su °bra, se mate a sl mismo
en nosotros.
MIGUEL.— Sc mate lo que verdaderamente se orna. Lo demos se ignore.
LUIS.— Ca!taros, pudiera oiros. Su venganza es sitenciosa pero potente come el mar.
Entre ELLA. Viste un solo color. Tel vez
amoral°. Si, tel yez sea amoral°.
ELLA.— Que cores m6s tristes y fees. eTenels alga colgando en lo memoria que retuerze vuestras comes?
JAIME.— Serb ° una peno que estuvieras alegre.
52
LUIS.— Es mejor que este &sure, que disfrute.
ELLA, Nunca me gusto desentonat, Luis.
JAIME.— Si, 6sto es compes, o ritmo de la vida.
LUIS.— 4Me conoces?
ELLA..— Siempre te conoci. Un alma solitaria. Un peso tremendamente
aphistante con la sensociOn de ester de mes e y nada hecho paro
poder decir: "Esto es mio porque lo hice yo".•
JAIME.— Canto, He, Hero en buena hora.
LUIS.— Es 'armonia.
MIGUEL.— Oigo graznar on cuervo.
ELLA.— No seas tonto Miguel. Es on tren.
MIGUEL, g1/4 mi tambien me conoces?
ELLA.— SI, a ti tombien. Antes de la guerra on hogar, uno familia, y
uno novio puro comp el agua o la Juno lejono. Luego, una cicatriz
en el pecho, un monton de cenizas y algunas fotos de unos muertos.
JAIME.— Manifiestos on optimisto conocimiento insultonte.
ELLA, Y a ti Jaime.
JAIME.— Claro yo soy Jaime.
ELLA, Una vida podrIcto per dentro, aunque conserve una sano apariencio como los frutos en sozon.
MIGUEL.—IQue bella eres y que joven!
ELLA.— No os habeis fijado? Han puesto en la toile de at lado orboles
y flares. iPor quo no os reunis olli? En lugar de este solar inmundo.
JAIME.— Alegria insensate. iTerminomos con la olegrio o es pronto?
ELLA.— iQue vois a terminor con to olegria? Quo mal os hizo?
MIGUEL, Est6 ton lejos la otra cane. No tenemos fuerzas para llegar.
53
ELLA, Yo os ayudarf, Miguel, si es preciso. No os desanimeis. Ando,
decidiros. Uno a uno os ire Ilevando. ri ton pequefia vuestra crux
en mis espaldos, que nos sentiremos todos resucitados al tercelviaje.
JAIME.— ;Quo cerco y que lejos este la otra collet Como si hubiero uno.
reja.
LUIS.— Un abismo.
MIGUEL, Si iremos, pew por otro comma.
ELLA.— Por el que querois pew vamos. Alegror esos cams, la ha este
cerco.
MIGUEL.— Vamonos.
LUIS.— eYo?
JAIME.— Quire, si tardamos, manchemos su piel blenca con nuestra
tristeza.
LUIS.— SI, Miguel, chisel° a Jaime.
JAIME, Darnel°, Miguel.
MIGUEL.— (Le entrega un cuchillo a Luis) Tomo, Luis.
LUIS.— (Recoge el cuchillo y so to entrega a Jaime) Tome, Jaime. Es ton
sensible. Que tu golpe sea tan suave como el crepUsculo cuando
desciende.
JAIME.— 4Tendr6 la songre blanca?
LUIS.— Sc dijera una flor que no recibi6 el beso del recto.
JAIME.— iQue fue uno flor sino polen?
MIGUEL.— Mi!ogres de to naturaleza.
JAIME.— Magias de la naturaleza que convierten lo repulsivo y hediondo
en objetos de nuestra ridicule odmirocion.
ELLA.— Alegraos. Vuestro vida con ml venido, ha cambiodo.
MIME.— Veinte coballos pateon mi cerebra y °Oen mis pensamientos.
MIGUEL.— Cuando esten desponzurrados, avisa es la bora de partir.
54
JAIME.
No me ayudareis? Tendre que beberme el cOliz de toda ml
vido y opurarlo, duronte toda ml vida, en este momenta.
MIGUEL, A ml nadie me ayud6 sino fue a golpes.
ELLA.— eQue necesitas? Yo te ayuclore.
MIGUEL, A H.
JAIME.— ;Dios! Me foltobos y ohara quo te tengo, me sobros.
ELLA-- Miguel, eserias capaz de manchor nuestro amistad? Calla, no
digos eso.
LUIS.— Maio intencien dos a sus palabros. No pens6 prostituirte.
MIGUEL.— Yetnamos el contagio.
ELLA.—
No ois to meisica? Levantoros y caminar.
LUIS.— De quedarnos tendriomos quo esperor demosiado tiempo.
MIGUEL.— Tal vez atm. Y es dificil que vuelva alguien que nos permit°
vernos come en un espejo,
LUIS.— Tel vez more.
MIGUEL.—Y no podriamos ir a la colic de al lodo que este ton cerca.
LUIS.— El medico visite a los opestados.
MIME.— Y Sc contagia.
LUIS.— 0 los aleja.
ELLA, Los medicos no mueren. Tienen que curer. Es su obligacien y
Dios cuida de ellos. Dios cuida de su vida par el bien de los demos.
JAIME.— Sc suicide. Lo ha preferido.
ELLA.— No me crehis?
LUIS.— No sit. Tab vez te lo digo luego.
ELLA.— iCutindo te decidir6s o hablor?
JAIME.— Pronto, no tertgas prisa.
55
ELLA.—Atin ast Dios ha resucitodo muertos.
JAIME.—Los muertos que mato la peste, no resucita. Esos no sirven.
ELLA.— Pera de qua feiblais, no os entiendo? locks dejan de ser codaveres. Si yo muriera chore mismo, inmedicitamente, sin tronsiclan, empezorio o vivir.
JAIME.— 6.o crees tan deliciosamente como lo dices?
MIGUEL.— &los pecodo olguna vex?
ELLA.— SI, muchos. Mi perfeccien viene de reconocer mis debIlidades.
Me conozco.
LUIS.—Lastima, su piel no es blanca.
ELLA.— Estoy perdonada. Mi alma es pura coma la de un nano.
JAIME.- A los nines no hubo qua perdonorlos.
MIGUEL.— Y contra la came ihas pecado?
ELLA.— No, nunco.
JAIME.— Pues qua. No te atralo? Su voz no era lo suficientemente
fuerte como pore dejorte Ilevar? e.) te quedabas fria coma desplies de oir un discurso del partido redentoristomaniqueo o del
socia Icristiono.
ELLA.—Calle, Jaime, no digas barbaridades.
LUIS.— Es uno virgen. Este enfermo.
JAIME.— El reloj del destine mecca la horn exacta. No ois sus companodes? Son de ploto y suenan o one nuevo. Hoblo que e decidan.
MIGUEL, Si, suenan a blanco.
ELLA.— Grades, Miguel, que bueno eras, los Iles, los tres, qua huenos
sois.
Suena lejana una masica per breves mementos.
zOts a mtisico? En la colle de al lodo hay much° luz. Vemonos
olli, esto es triste y feo. ,No lo notois, tal vez?
LUIS.— No podemos. Hay muchas calles que nunca se pisaren.
ELLA se levant° y se dlrige hocia la derecha.
Ellos hacia la izquierda.
56
JAIME.— tste es tu comino InMatulode.
ELLA.— Par Gaul Ilegamos antes.
JAIME.— T6, sl. Nosotros no. 56Io tenernos un comma.
ELLA, Como querais. Accedere una vez mos o otro capricho.
JAIME.— Si, comma, ser6 el ultimo. La redenci6n se acerca. Todo Sc
consumar6.
JAIME se detiene en el sitio que se sent6.
en otra vista me gusto este sitio.
Se detierte.
Yo era otro. ACm estobo limpio. Lo etbontre tibio y hut de el. Si,
creo que sirve, no busquemos mem. (A ELLA) Sin micula, acercate
a mi. Despidomonos antes de sour de aqui comma de otra vido
muy distinto.
MIGUEL, Na manches su piel. Es pecado menthe, una piel blanca,
aunque sea de ',atom°. Ten sumo cuidodo. Obro meticulosamente.
Una mancha sole, solo una moncha de sangre no nos concederia
la redencion.
LUIS.— No to cuides de las manchas Ellos serer) los que !oven las tuyas.
MIGUEL.— Ni una mancha, ni una mancha
JAIME.— Inmaculada, contempla el comma de nuestro redenci6n. Pide
con fe perd6n por los que no soben in quo halcen, porque este es
el momenta.
ELLA comma hada los brozos ottendidos
de JAIME.
JAIME, con lento y povorosa insistencia,
Se hunde el cuchillo en las enriches, quo se
&sporran coma una fbr socuclida par los
vientos que sop/an lanzados por los posiones
humanas..
ELLA, resbala sobre el cuerpo de JAIME, haste el suelo donde es reposada par
MIGUEL y LUIS.
57
MIGUEL.— Ni una month°, ni uric 'rancho.-JAIME, MIGUEL y LUIS, se ocuclillon
alrededor contemplandola rigidos en su encogimiento.
MIGUEL.— Se ha conseguido.
JAIME.— La obra este consumada.
Cruzan, acechando en sigilo un largo silencio,
Entra GUARDIA.
GUARDIA.— Pero aim, seguis aqui, bribonzuelos. La patria necesita brazos y la juventud de boy solo le do posoderas. 4No me ors? Os he
dicho que largo de aqui. Pero quo veo. ,jA quiet, adorais? ;Como,
un muerto! Ya sabia yo que nada bueno me pasaila hoy. Raz servicio pora esto. Granujas, desconsiderados. Apufialando jovencitos
en los onocheceres como si fueran mariposas.
Entra PROFESOR.
GUARDIA.— Profesor, Degas en buen momenta. Al menos eres oportuno.
C.antempla la °bra de tus alumnos. Es esto lo que ensefias? Resolver problemas es b tuyo, 6no? Yo solo soy guardio. Cuondo
path estobon estos granufillos, guise borrachos, aqui reunidos.
reunion de tres y en un solar: nada bueno. Los disperse como era
mandado y de ml obligacibn. Nada de concentraciones, se me ha
dicho. Crei el campo despejado. Vuelvo a posar y me los encuentro cod un fiambre.
Entra VIEJA.
VIEJA.— &then habl6 de fiambre? !Dios mio y padre mio! Llevo siete
dias sin comer ni caliente ni trio.
Entro MUJER BARATISIMA.
MUJER B.— Ando con la vieja. Si tuvieras ml cuerpo yo comerias,
desgraciada.
ya,
PROFESOR.— Calle la quo se apart6 del comino de lo pureza y deje
hoblar a la autoridad. ate decias, guardia?
GUARDIA.— Un muerto
58
MUJER B.— jRecristo! jHo dicho un muerto!
VIEJA.— iDios bendito, bendito!
PROFESOR.— jAh! Juventud insane, oyuna de apoyo cultural, hombriento y carente de libertad, obocais a una esquizofrenio que as hace
escaper de vuestro ruin mundo presente, mezquino, pobre e insulso.
MUJER B.— Carajo, que tio. Gime habit
GUARDIA, Mos respeto a las instituciones peblicas y pablico saber.
PROFESOR.— Bueno, bueno, pablico saber, no ad precisamente; es todo
privado. Trosciendo culture, ciencia al mundo. Este juventud no
quiere oirme y asI le va; yo soy la fur que alumbra pew no quieren
oirme.
ELLA queda ilumineda. La luz asciende
del suelo a bs cielos.
JAIME.— ;La redencion! La inmolacion de Inmaculado alumbra al mundo.
VIEJA.— Se Ilomaba Inmoculada, como la Virgen, come la Virgen. pios
bendito, bendito!
LUIS.— El sacrificio no ha sido en vane. El holocausto ha sido grata a
los ojos del Desconocido. El misterio se consurn6 en el era del
sacrificio por redimir a lo humaniclad que yace perdida en el vacio.
MIGUEL, Puro fantasmagoria. La luz luciernago, inanidad y vacuidad
absolute.
La luz se omega.
JAIME.— He oqui el sacrificio inetil. La estupidez humane nos sigue
ahogando en la miseria del pecado de la vono y estepido.
GUARDIA.— Que dice ese loco. iQue cree usted que dice, profesor? gsun anarquisfo?
PROFESOR.— No, este ayuno de culture solamente. No asisti6 a ml c6tedra, pare desgracia suya.
GUARDIA, Yo lo prendo.
VIEJA.— Si lo prende, oler6 a ozufre seg6n habla el condenodo.
59
MUJER B.— No habra colentado couches sobanog ajenas. Eso es lo que
le poso. Si me hubiera conocido otra cosa seria.
JAIME.— ePero ser6 vane el sacrifice° con uno piel ton blonca?
MIGUEL.— Ya tenia yo mis dudes. Tenio el pecado de lo debilidad.
Busquemos otra. Corramos.
LUIS.— No era demasiodo fuerte. Era material. Se necesitaba par° redimernos de la nada, la nada mismo.
MIGUEL.— No, busquemos, atn queda una esperanza.
JAIME.— Una—.
LUIS.— N inguna.
VIEJA— Que hace, guardia, que no los detiene? A que punto hemos
Ilegodo con estos anarquistos. ej es flue la autoridad se desentiende?
MUJER B.— Estos son de los clue tienen bur°. Ya Io vett. Una trobaja
honrodamente y el dice menos pensodo to encuentras con un gronuja de estos que te pone ponzo °nib°, pero no pora echorse encima,.que vo, no senor, sino pare abrirte otro ogujero. Conallos.
Ni °mar soben.
VIEJA.— jJesUs bendifo! Quo monera de hablar, flue horror.
GUARDIA.— Calle el pueblo y no involucre y deje actuor a la autoridad.
PROFESOR.— Yo creo que la autoridod en esta situacien presente y delicado, en que la juventud este perdida, debe con todo cuidado
acabor con ella eliminandola, pare evitar uno posible infeccien,
peligrosisima si Ilegara el case.
GUARDIA.— Callese, Profesor, quo ohoro as la Autoridod queen entre
en funciones. Nada de prlenderlos sin orden de un Juez, estomos
en tin pals libre. Vosotros, granujos, en pie.
JAIME, MIGUEL y LUIS se ponen en
pie, mecanicomente, ignorando a GIJARDIA.
Quedais presos por orden irrevocable de lo Autoridad. Vamos, uno
al lado de otro.
Se junton coda con codo y de cora al
60
En file a la prisi6n. Vuestra sentencia ya esti' dictada. Izquierda_
llocen izquierdo. La mirado al frente come iluminados.
Vomos, en mamba.
Salen andondo rigidos, hiereticos, ignorondo tOdo rnenos su propio ander ocompasado.
GUARDIA, detr6s de ellos, march° en un
trotrecillo jadeante, dando saltitos.
Venga....
vengo.... vamos.... vamos.... vamos.... vengo.
Salen por to derecha.
MUJER 13.—Te conserves profesor. Te conserves con tonto saber.
PROFESOR.— jAh; insanos que quereis buscar la verdod par cominos
descarriados. Si mi vox que nunca fue oida por ivosotros.... mi voz
pedegdgica.... oficiol.... verdad fnfalible e indiscutible que emaSe dirige a la derecha, pero MUJER BARATISIMA, le coge del braze y lo arrostra
suavemente hacia la izquierdo a reposor su.
verborreo en lo coma de %%anus casi limPies.
MUJER 8.—Vamos, Profe, cuenta.... cuentamelo todo a
PROFESOR.—(Dejandose Raver/ Pero ellos decian; nada de latin, no sirve, huele a muerte. Nada de griego, as perder el tiempo....
MUJER B.— Claw, precioso. Vamos a demos prisita que se te hard tarde.
VIEJA saca del pecho un rosario monstrues° de gronde, con cventas coma huevos
y se arrodilla a razor en un murmullo piadoso su rosorio de letanias. Su lengua macilenta
se troba.
VIEJA.— El pan nuestro de coda dia.... el pan nuestro de coda_ el pan
nuestro de.... at pan nuestro.... el pan.... pan..., pan..,. pan.... pan....
FIN
61
et
410e
Por URRIOLA MARCUCCI
En un pueblo cualquiera de to Republica de Panama; en donde haya
terratenientes, y campesinos sin tierra, exprozilado por la Ovando de
los lotifundistas....
Penonajes:
El Maestro
Campesino 3
Leonickss
Mujer de Camp. 3
Aura (mujer de Leonidas)
Compesino 4
Gene roso
Mujer de Comp. 4
Leonora (hija de Generoso)
Campesino 5
Sefora de la Pension
Campesino 6
Compesino 1
Chiquillo (no apprece)
Campesino 2
Los policias.
Mensaje a todos los campesinos de ml potria.
Homenaje a los que mueren de hombre.
Esperanza para los que tuvieron que venir
a Loma de la Pave y Son Miguelito.
Honor para los que se pudren en las airceles
por el delito de enterrar la coo en el
seno de la tierro.
63
ACTO I
Un rancho tipico del interior con "coiclizo", en el centro del escenorio contra el tondo. El rancho esta dividido en dos secciones.
Lo primer* secci6n, gut es lo del tondo, is
supone que es el darmitorio (est& forrode), lo
otra parte anterior, no esti) forrada.
La escena Sc desarrolla en el "caidizo".
Hay un fog6n de tres pledros. Uno mesa, un
tinojero, una especie de tablillero donde hay
totumas y demos enseres de cocina.
Al levantarse el felon, Aura este sirvien•
do la comido sabre to mesa. Leonidas Raga
consado. Descuelgo la balsa del hombro y la
cuelga en un clavo que hay en uno de los
horcones del rancho. Igualmente hace con el
machete y la voino. Se dirige a on rincifin y
dejo el hacha. Silenciosamente Sc siento en
un banco y comienza a comer. Son los 5 de
la torde.
AURA.— (/Wrangle Noisier*, a Leonidas. La mules operant" preocupasiert) ...... Leona, ea, mai?
LEONO.— (hialhumerado) jNo!
AURA.— (Insistiondo) Tel raro....
LEONO.— Si._ (trans) el tono mos apacible.... Tomblin yo lo noto!
AURA.— (Penland°le log manes sabre el hombre)._ Leono.... toi entermo!
LEON0.—(Con la mired* fija en el cantina) No Aura.... No estoy entermo.... (Mayland° la cabala. Pousa) Tol !two._ roro.... eso es..
64
AURA.— (In s i ss ienda) Creo que ml enfermo!
LEONO.— (Un tame disgustado) No.... te digo que no (Pause) Vos eres
una
se te ho metido que....
AURA.— (Cortandolo) No Leono.... No Sc me ha metido no! (Preecupoda)
Es que se me hoce que tai mol.._
El hombre se levonta malhumorodo de
to mesa y cantina hada la banquet° que se
encuentro fuera del volodo o caidizo. Escudripia el camino con onsiedad, como Si esperase a &Queen. Lo mujer lo sigue sin mercerse, recostada a un homer, mire con desconalert°. Dentro del rancho, en la parte inferior que hoce de dormitorio, un chiquillo lose.
El hombre se we've hocia la mujer con enfado.
LEONO.— Auraa
Carajol se ahoga el muchacho!
AURA.—(Asustada) Si!.... lo estoy oyendo!
La mujer entra. El hombre se levant° de
la banquet°. Saco la pip° y se dirige hocia
el fogen. Tomo un tizon y regresa oteando
el comma. Luego ya hada el homer', con la
pipe humeando, descuelga 4a vaino, soca el
machete, distraidamente le pulso el filo;
mientras medita en voz alto.
LEONO.— El asunto Sc este poniendo feo.... jmm (Trans) Aura no as
tonta no.... porece que el diablo le °visor° a las mujeres.... Aura
huele los cosas en el °ire.—
(El hombre Sc encamina otro vez hacia
el portal. Tomo la banquet° y la Ileva bade
donde hay uno piedra de ofilar. Maquinolmente Sc pone a °filar).
LEONO.— No este bien.... los mujeres no deben oler naa!
A los lejos se oye una saloma. Leone escucha con onsiedod y riposte con entusiosrno.
Luego llama a la mujer.
LEONO.— Aurae!
65
AURA.— (Dentro del rancho) Qua pow?
LEON0:— Oiste?
AURA.— La saloma
SL... creo que es el maestro!
LEONO.— Tan seguro, como saber que Dios pint6 a Pertco. (Trans) hate
un poco de. café!
Mientras el hombre habla sin dejar su
tareo, la mujer sale un momento, hacienda
visera con las manos escruta el camino, Sc
voltea y comienzo o revolver cacharros en la
cocina.
AURA.— (Para ella) Vann
LEON°, Aura!
AURA.— (Dentro del rancho) A ver? (Se asoma).
LEONO.— (VoIteandose, la mire, carraspea un poco y luego)..„ per quo
dijiste enantes que estoy mob?.... Due se me ve?
AURA.—•(Indecisa) No, no pues (pausa)._ Pero; yo noto alga, (baja la
vista mientras revuelve alga en el suelo con el dedo porde del pie)
(Ago; mas, no 54 quo sera....
LEONO.— (Convencido) Tal vez, sea verdad!
AURA.— (Inclincindose y rninindole a los ojos) Quo te sentis vos?
LEON0.—No
pero ,
estoy como apretoo.... como cogio per el pescuezo, ahogandome!
AURA.— (Tocandole la frente) No teneis calenturo._. (trans) Sera el paludismo?
LEONO.— (Moviendo to cohere) No Aura__ no es maide per juera..E's coma, como si algo.._
AURA.— (Impaciente) Antonces, qu6 es Leone?
LEON0.—(Aburrido) 'Pa Dios.... (trans) TU no sentii, como si uno no pudiero moverse?
AURA.— (Movie/dose) Bueno, no.... vei que me muevo....
que no te movei voz?
66
(trans) Y es
LEONO.— (Enloe:lido) NO
No es eso.... Es coma si tuviera opretao__
(mirando el cielo) Vei el cielo?.... Mire el cielo Aura!! (admirado).
AURA.— (Mirondo el deb) Santo Fuerte!
LEONO.— No to parece quo 'sto pesao?.... No vei quo el cielo, 'to, como
pa venirse encima de uno?.— No lo vei?
AURA.— (Terror supersticoso en el ambient.) Santo Puerto.... clue to
pasa Leono?
LEONO.— SF, eso, no
(Nand's. on Aura) Aura, t tambidn t6s 'arc!
(tram) No to dais cuenta?
AURA.— (Asustada), Creo quo si, creo quo si
LEON°, Tendis miedo Aura?
AURA.— (Con la vista flit, en el suck) No se Leona—. (trans) TO crei
qua yo tengo?
LEONO.—
Algo feo se nos va a caer encima!
AURA.— (Preocupada) Qua es lo quo to vel?
LEONO.— No se.— pero toitos nos vamos a poner osL.. rams, corno too!!
AURA.— (Extraiiado) Toiticos?
LEONO.—
toos, Aura, toos!
AURA.— Por quo toitos, Leono?
LEONO.— Si, toitos los quo nos damos cuento....
AURA.— (Con as manes en lo caeca) Por omor a Dios Leono.._ que
cosos se to hace metio a vos en la cabeza?
LEONO.— Nos pondremos raros (la vista perdida en el vocio) Todos los
quo veamos los cosas....
AURA.— Pero que cosas Leono.... qu6 es to quo nos va a poner asi?
LEONO.— Los quo nos sentimos mos cows.— todos nos ponemos raros!
AURA.— (Estremechindolo) Leone! tai perdio de la cabeza.... Por qu6
hablais asi?_. Quien se va a morir?
67
LEONO.— (Levantendose y mirando a la caro, mientras is pone una mono sobre el bombs°. Suspira hondo y ye paternalnrente) Uds., no
entienden.... Uds., huelen las cosas.... na met, y, eso es mob. Mal&
AURA.— (Donde unos pesos basic atras) Por que es mob.— Leono?....
por que?
LEONO.— No los entienden y se atorantan.... y se confunden!
AURA.— (Crespechoda) Vos tai creyendo quo los mujeres no servimos nee
LEONO.— (Cenciliador) No, eso no es asi Aura!
AURA.— (Disgusted& Si, eso es lo quo vos toi diciendo!
LEONO.— (Tana sorbs) No digais tonterios!
AURA.— Nol
no es tonteria.... eso es lo quo pensai de las mujeresl
y si pensai, quo uno es pa no moj quo.... pa clue me tenei?
LEONO.— (Perdiendo to paciencio) Jot
y la mujercita terco.... No sei
capaz de entender.... (trans) Las mujeres sirven; pero pare otros
voinas!
(El hombre se levanta y escadrille el camino, mientros tante° el fib del machete).
Miro quo liege el hombre y no hobei preparoo el trago de cafe!
AURA.— Alobool
Si ohi vienen
enseguidito lo tengo
(Vase Aura, Leono con el machete en la
mono, se adelanto, el Maestro oporece. Los
hombre se miron. Leono con ansiedad y preocupocign, el Maestro con rostro de cansoncio y decepci6n. El Maestro bastonte joven,
aparenta de 19 a 21 alias de edad. Viste
ropo kaki y calza boto. Denote regresar de
un vioje largo. En be mono troe un moletin
y popeles).
LEONO.— (Forzando ester alert) Como le fue, mestro? (Se don las mantis).
MAESTRO.— No rnuy bien.... (desabrido) (trans)._ y par ace.
LEONO.— (Ofreciandole una banquets()
(llama a la major)._ Aurae!
68
Sin noved6.... pero asientese....
AURA.— (Dentro del rancho) Ace 'toy!
LEONG.— El café? (trans) aqui. 'to el mestro!
AURA.— (Sale, soluda al maestro) C6mo 'st6 mestro?.... Como le jue?
MAESTRO.— (Sonrisa
do) Todavia no se!
AURA.— Ahorito sta el café._ yo voy a colarl
(se va).
LEONO.— (En actitud de conversocion) Tiene cora de haber hecho mol
viaje.
MAESTRO.— Ah.... si, en eso inspection todo el mundo onda enredado!
LEONID.— (Admired*) Ud. lo dice....!
MAESTRO.— Como no.... pare lo Unico que since es porn Ilenarlo a uno
de papeles, notes, circulores, y rozones pendejos.
LEONO.— Y el dienero pal zinc?
MAESTRO.— (Geste negative con In cabeza).
LEONO.— Entonces.... no hay zinc?
MAESTRO.— No, no hoy
podamos....
I.
(trans) Tenernos que conseguirlo con lo que
LEONO.— (Dudando) Ud., cree eso posible?
MAESTRO
ido) No hay plota para zinc.... y porece que 0116
IC
a nadie le importa que no haya pore eso!
LEONO.— (Hacienda gesto ame nnnnn te con lot manes).
MAESTRO.— (Burk& Que le posa comp*?
LEONO.— Eso es raro.
MAESTRO.— Que es raro?
LEONO.— Eso!
MAESTRO.— No le entiendo.
LEONO.— El Diputao Tancredo, duo que si le dabomos el voto, el zinc,
taiga segurito!
69
MAESTRO.— (flerlon) Ah
I
pero eso fue en dies de politico....
LEONO.— $0, eso fue en politico._ y ahora?
MAESTRO.— Dicen quo eso corresponde a Obras PUblicas..- (trans) En
fin.
LEONO.— Yo 'to oyendo
Aurae!
(Per el camino se escuchan salomes) Aurae...!
AURA.— (Protestando en vox =jo) Ya voy.... jo!
LEONO.— Cuela mos café.... (hada el maestro) Viene la gente.... (por
Aura) Bostante café, que viene to gente,
AURA.— (Desconcertada) Y qua es lo quo pose?
LEONG.— Vos no entendeis desto!
(Aura mire inquisidora al maestro. Este
la mira y se encoge de hombros).
AURA.—(Medio disgustada) Aharo, hosto el maestro tá raro, (se va)
LEONO.— Trae chic= y collate!
MAESTRO.— (ROpiclo) No
II
eso no
Chicho no, Compel
LEONO — Por que?
MAESTRO.— Esto no se arreglo con chicho.... y menos eso gente!
LEONG.— Si tan disgust= es con taxon mestro!
MAESTRO.— Y Ud. quiere meterles mos candela ol fuego?
AURA.— (Desde el rancho) Ya vei lo quo ej saber.... (trans) Si el mestro
fuera la autoridad
LEONO.— (Disgustado) Na me gusto
l
No me gusto achicarme!
(Entran dos compesinos, machete en mono y lintemas, uno viene acompoiiado de su
mujer).
CAMPESINOS.— Noches.... To' las mono; mestro
I
Compri!
MAESTRO y LEONO.— Buenos noches.
(Los campesinos don la mono a uno y
a otro ligeramente).
70
MUJER CAMP.— (Pot Aura) Y la comodre....?
LEONO.— (Alivia) Pose pa tante__ (antra la mauler. Leone antra y sale
con dos boncos pare lot reei6n Ilegados. Demo& Leono Jigs la
mach:in).._ El mestro, plies, que toba diciendo quo no hay ni
pizca de zinc....
CAMP. I.— Y los libros mentaos?
MAESTRO.— Envionin olgunos.
(Entro Aura trayendo café, la oyuda mujet de Camp.
AURA.— (Par el maestro) A ver si le gusto asino de dulce....
LEONO.— Al mestro le gusto apenitas....
AURA.— Quo lo pruebe, pue.
CAMP. 2.— (Cortando) Y de lo dem6s
MAESTRO.— Ah.... sl....! plies, fui a la gobernaci6n....
CAMP. I.— Tompoco hay no!
MAESTRO.— Nada!
LEON0.— Si eso to clarito_.. el mentoo gobemador es primo del Roc*
Generoso!
CAMP. 2.— Tan apersogaos en la politico!
LEONO.— Qua puede uno esperar por estos montes de esos dos?
CAMP. 1.— Que s hoce ontonce?
CAMP. 2.— Ah, pues, chorine° tenemos oqui a los otros y hay que deckles toitica la verde!
MAESTRO.— Yo le puse un telegram° al Presidente de la Republica....
(Asombrado) Al Presidente?
MAESTRO.— (Con naturalidod) Si!
CAMP. 2.— Y lid., conoce al Presidente?
MAESTRO.— Na!, quo va.... Ni tengo por quo conocerlo....
71
CAMP.
(Esperanzado) Y Lid., cree que ese hombre, mina ensillao
coma isto nos oyude, compo?
MAESTRO.— Eso es su obligation!
LEONO.— Jo; pero ese hombre
lid., sobe lo que to diciendo mestro?
MAESTRO.— Si Leono.... el Presidente es el hombre....
CAMP. I.— Y quien es ese cristiano pa que se ocupe de los que tomos
deste loo?
CAMP. 2.— Jo 1 compa..! ese es el hombre que to sentoo en la sillaI
(trans) Es el t;("opo que es como el amo de tot pals....
CAMP. I.— Jo compo. ... l; osina si puede jondior algo path!
CAMP. 2. — Lo que peso, es que es un Row de pueblo grande y no nos
conoce!
MAESTRO.— (Intercediendo) No; yea Ud....; el Presidente, el Presidente
de la Republica__ es, es un empleado de Lids., (pause) de todos
nosotros!
CAMP. 1.— Empleoo
Como empleao
7 Un peon?
LEONO.— (Alga nervioso) El mestro esta hacienda talla!
CAMP. I — Ah!; ya to decio yo.... son Mlle pue?
MAESTRO.— No, hablo en serio!
LEONO.— (Confuse) Pero, antonces, mestro?
MAESTRO.— El Presidente es un hombre coma cualquiera de nosotros....
Un hombre coma el resto del pueblo.... Se le ha dodo la misi6n de
dirigir el gobiemo..,. Le pagamos pore eso.... porn que dirlja; y
pore que haga cumplir las !eyes__
CAMP. I.— Eso nos to, no de clorito, no!
MAESTRO.— Es sencillo.... durante las elecciones, nosotros, al votar....
LEONO.— Al voter per los candidatos?
MAESTRO.— Si, el que mos voto tiene, ese sera el Presidente....
LEONO.— Ah, antonces si es verda, que to empleoo el hombre....
72
MAESTRO, El pueblo lo elige con el veto. Por lo tante, el Presidente es
un empleado del pueblo; y el recibe una page pare que gobierne
de acuerdo a to ley.
CAMP. 2.— Joe!, lo que es tar estudiao....
CAMP. 1.— Se oprenden cosas bonitos, verde!
CAMP. 2.— Jo
mestro.
t Lo que son mis hijos bs pongo a estudiar como el
CAMP.— La vaina, es la plata que cuesto.
LEON0.— Y Ud., aprendie eso en la escuelo, mestro....
MAESTRO.— SF, en la escuelo. Ese modo de elegir al Presidente es lo
que Sc Home Democracia!
CAMP. 1.— To buena lo veinal
MAESTRO.—,Muy bonito.... Si!; pero eso, este en el popel....
CAMP. 2.— Alt, bonca, result° que ahem too era trisca del mestro!
MAESTRO.— No, no es trisca, ni toile, lo que pasa es que no se ponen
en practice
CAMP. 1.— No se pone en practice?
MAESTRO.— Cosi nunco....
CAMP. 1.— Antonces, no sirve?
MAESTRO.— No
Asi debe ser.... Pero no es.... Creo que Ilegard el die
en que sere asi....
CAMP. 2.— Antonces, esa vaina del gobierno ondo mall
LEONO.— Clam que undo mal....
CAMP. 2.— Antonces, que se nos diga cemo es....
MAESTRO.— Si; porque todo anda mal.... no tenemos zinc; porque ando
mal.... (ids. no saben leer ni escribir, porque anda mall
(Sc escuchon murmullos ofuera),
73
LEONO.— (Levantendose y regresondo de inmediato).._ Viene la otra
gente, mestro!
(Aparecen cinco campeslnos mos. Vienen
en to misma farina qua los anteriores. Los
acompanan dos mujeres).
CAMP. 2.— (Al oido de Leone)._ Quo les va o did,, compa?
LEONO.— La verda!
(Entran los otros. Leono se levant°. Enna y regreso con bonquillos. Los recien Ilegodos don to mono, se saludan, y se von sentondo. Alguno permanecer6 en pie).
CAMP. 3.-- Mestro.... y coma le jue de viaje?
MAESTRO.— Regular.... y.ustedes cam° ban pasado?
CAMP, 4.— Aliviaitos.... oliviaitos.
CAMP. 5.— Como oste ye—. en espero de oste....
CAMP. 6.— Mestro, el glow Generoso, ha mandao to disposicion que
solgamos....
CAMP. 5.— El tunes entrante, compa, dice que boy que desocuparle too!
CAMP.
Qua le ,porece mestro?
LEONO.— Buena pensendolo bien.._
(Entrando con café) Aqui to el café._ (A arm de lee mujeres)._
Comadre ayademe o reportirle o los hombres....
CAMP. 5.— (A la mujer) Andaa Crescendo.— (La mujer va. Andras re wren café).
MAESTRO.— (P
do las palabros).... Senores.... (Silencio de los hombres).... Uds., me han encomendado una tarea muy dificil....
CAMP. 4.— lid. es el hombre, mestro!
CAMP. 1.— As[mesmo es!
CAMP. 5.— Jo, mestro, eso es a;ino (A lot compaiieros) Como sl la order) del Aopo; juera pa bebe en totuma!
CAMP. 1.— Si compa, pero dejemos que el metro eche su convers6....
74
MAESTRO.— Lo qua tengo que decir es poco__ Senores, no hay zinc, ni
libros, ni nada pato nosotros..(Murmullo de descontento entre los cornpesinos, atropellan los bocadillos....)
CAMP. 1.— Dicen que no hay plata pa la escuela....
CAMP. 4.-- Ni pal techo?
CAMP. 5.— Por que?
LEONO.— Porque eso es de Obras
CAMP. 3.— Antonces, corm diablos von a dor close los muchochos?
CAMP. 4.— Yo no mando a mis hijos!
CAMP. 2.— Tompoco yo.... esa cobijo es una coladero!
LEONO.— La pore se 'to cayendo....
CAMP.
Antonces, que hay que joce, mestro....
MAESTRO.— Todos aqui winos pobres._. pero, no podemos cruzarnos de
brazos.... las cosas se pondrian peores....
CAMP. 1.— Pior, claro....
LEONID.— El mestro piensa que nosotros....
CAMP. 3.— Que nosotros quo compo-CAMP. 5.— Socrificarse compa
7 No mestro....! No, asina no!!
CAMP. 1.— Si no ha de onde!
CAMP. 6.— Tomos jodios con las siembros que no don y pa colmo el
Nopo Generoso qulere sacamos de las huertos..CAMP. 2.— Pal diablo.... Yo no me socrifico m6s de lo que 'stay!
MAESTRO.— Yo comprendo.... (trans) No estoy obligando a nadie....
LEONO.— Noide to diciendo.._
MAESTRO.— Senores, par favor, senores, colmo
estamos oqui para. conversor__
75
Por favor colmo..-
CAMP. 7.— Antonces Ltd. qui propane mestro?
(Sc levant° de nuevo el barullo de protestes).
CAMP. 4.— De onde mestro?
CAMP. 6.— Que lo de el presidente!
CAMP. 1.— Ni media hoja senores
I
MAESTRO.— (Inmutable) Senores, de mi primer sueldo, dare diez hojas
de zinc....
CAMP. 2.— Asina, no es to coso mestro.... no sinor....
CAMP. 5.— Asina, no es cosa.... Nosotros que somos dueflos de los hijos
mestro....
MAESTRO.— No senora...l es problem° de todos.... todos tenemos que
resolverlo.... Nunco un problema es de alguien en particular.... Los
olumnos son los hijos de Uds,; pero tambien son mis alumnos....
El problemo es de todos, de ellas, (senalando a las mujeres) que
son las madres. De Uds., que son los padres._ Mb, que soy el
maestro.... Es a nosotros a quienes dude el problema.... a quienes
interesa que se resuelvo.... y podemos, par lo menos comenzar a
resolverlo....
CAMP. 1.— Si oste, lo dice mestio, se hare, asina como oste lo dice!
MAESTRO.— No es que si yo lo digo.... No I No quiero que lids. piensen a se diga que el maestro impone.... lids., son hombres, tienen
cabeta y deben usarlo.... Uds., tienen experiencias, que yo no tengo.... yo solo say un maestro recien graduado; pero Uds, son hombres que hen vtvido, het-ten u mekor escuelal.
CAMP. 4.— Nosotros no hemos idp a la escuelo mestro....
MAESTRO.— A la eseuela de la vide._ si, senores!
(Silencio absoluto.... Cierta vergLienza del
grupo).
CAMP. 3.— El mestro no es un chiquillo.... no!
AURA.— (Entrench) No
I Es un hombre mesmo!
CAMP. 4.— Buena, pues.... coma dicta el mestro....
76
LE-ONO.— (Reproche).... Compoa....
' dose de la banqueta).... Bien.... (basic el gnmo)....
CAMP. 4.
(Le
queremos que nos diga toitico lo que p056 en to gobernacirm con
lo del Popo Generoso....
MAESTRO.— (Encendiendo on cigartille y commando haste recostarse on
un horc6n) El gobernodor alega quo Uds., no tienen titulo de
propiedad!
CAMP. 2.— Y esa trete quo es mestro!
LEONO.— Un popel que do el gobierno donde dice que coda uno es dueFlo de la tierra que tultivo....
CAMP. 4.— Pero si el gobierno sabe como me nom° yo....
MAESTRO.— Uds., no hen registrado estas tierras como de propiedod
de Uds....
CAMP. 5.— Mestro, esas tierras toos los anos las registromos nosotros
con el mechete y la coo....
LEONO.— Esos eran de mi tatarabuelo....
MAESTRO.— SL...! Yo les entiendo, pero la ley es la ley....
CAMP. 3.— Bueno, antonces, la ley debe sober eso....
MAESTRO.— Si, yo les entiende senores; pero la cow es as': Cuando
ustedes les noce un nino.... un hijo, ustedes to registran, lo inscriben, lo denuncion en la olcoldia, como hijos de Uds....
CAMP. 6.— Eso es asina!
MAESTRO.— Pues bien, los tierros que uno cultivo tambien hay que
denunciarlos, registrarlas, porque si no se hace, esas tierras pertenecen o lo naci6n.... y como Uds., no lo hicieron un senor llamado Generoso, los registr6 como suyas.... El ocaba de compror
estas tierros a la naci6n y las ha registrodo coma de so propiedod...
LEONO.— Pero cemo ho podio ese viejo ambicioso....
CAMP. 6.— Bueno, y quit, dice que asina es lo vaina?
MAESTRO.— Lo dice la ley..., no yo senores!
77
CAMP. 4.— Y quien es la ley.... quien es pa que venga a dicirnos que
estas tierras no son de nos.... o quo nos tenemos que dir de aqui?
CAMP. 2.— Lo rnesmo digo yo.... Quien es la ley?
CAMP.-4.—Nosotros tames aqui, desde el dia del difunto mi tata abuelo.... C6mo es que rtio Generoso, pue ser el duefio?
CAMP. 5.— (Lev aaa n dose violento) Vea mestro I Estas tierras son de
nosotros, pot encima de too ley y toos los Flopos del pueblo._
CAMP. 6.—,(Levantandose
par el maestro) Digole mestro
! Son de
nosotros estas tierras verdo?
MAESTRO.— Estoy de ocuerdo con Uds.... La tierra es de quien la tra-
CAMPESINOS.— (A core) La tierra es del que lo trabaja....!!
(So !even-
tan).
CAMP. 2.— Atalayemelo ahi.... Antonces ques lo quo quieren
uno.to demaa!
?
Aqui
CAMP. 1.— to Generoso!!
CAMPESINOS.— (A core second* de sus voinas los machetes) Muera el
nopo!
CAMP. 4.— A cbrtar los alombres del Flopo!
CAMP. 6.— No hay mos no que esperar.
(La exaltacien de los 6nimos Dego a su
climax, el maestro y Leono se sienten Incapaces de detenerlos.... Ante ellos, los compesinos esgrimen amenazantes sus machetes,
gritando mueras a Generoso.... Sale Aura._ Un
compesino lanzo un grito de rabia y de te-
CAMP. 4.— Ayyy.... Carajo I Mi cam, carajo.... (A Ia lejos se escuchan
lamentos de mujeres.... maldiciones y carajos....) Sc quema mi ranchoo.... (El campesino se Ionia en carter° en direccian a su rancho.... Los otros lo siguen)
LEONO.— Mestro.... A116, fuego
1 Aura!
MAESTRO.— La .caso de Juan....
78
LEONO.— Y in de Pablo....
(Aterrado de rodillas implorando al Cielo).
Alobado sea el Santisimo!
LEONO.— (Conmovido por Aura, la imita. Se arrodilla) Ampdranos Senor!
MAESTRO.— (Con la mirada pardida en el horizontal Otra caso mos.—
La de Pedro._ Se ha colmado In copa Leona.... El Nudo esta apretondo.--
TELON
Fin del ler. ado.
79
EL NUDO - II ACTO
Unos dies despuds en uno pensi6n del
pueblo: una pequeno habitacian con una yentone contra el fondo suponiendo que do a lo
cane. Una puerto a la derecha. Par to yentone se cuela el bulled° de la gente que paso par lo colic. Dentro de lo habitaci6n, uric
coma, una corned° vieja con su espejo. Sobre
la corrode una !ampere de kerosene. Encima
de la coma, una pequeria maleto de ',joie
abierto. El maestro acabo de Ilegar y comienzo a desyestirse. En el instante de comenzar
la escena, se encuentra en pantalones y comiseta. Tocon o la puerto....
MAESTRO.— Adelante!
(Entre la senora de to pensi6n. Mujer de
mediano edad propenso a la obesidod. Facclones yulgares.... Nado en especial).
SEKIORA.— Lo buscon.
MAESTRO.— (Volyiendose) Quinn es?
SEPORA.— (Gene de complicidad) Leonora.... (trans) La hija de don Generoso!
MAESTRO.— (Confuse) Que pose.... (Se orrepiente) No I par favor.... digale que estoy dormido.... Si, eso es.... que di orden de no despertarme....
(Vase lo senora. El maestro lute preocupada. Sc sienta en lo came y enciende un
cigarrillo.... Regresa lo senora).
SERORA.— Insiste....
MAESTRO.— Esta bien.... que pose....
(Entro Leonora. Estotura media, mos bien
alto. Piel bronceoda, yiste traje sencillo pero•
distinguido).
80
LEONORA.— (Burka. y coquette Dormido.... ehh?
MAESTRO.— No quiero que Ia gente....
LEONORA.— No me import° la gente....
MAESTRO.— Es peligroso
LEONORA.— Bahh!
MAESTRO.— Claro.... puedes compror todo....
LEONORA.— No es eso.-.
(Afuera relincho un cobalt°. Murmullos
imprecisos entran por la ventonc).
LEONORA, No hay un cuarto ruOs tranquilo....
MAESTRO.—Me gusto este.... (trans) Decias?
LEONORA.— Tonterios....
MAESTRO.— (Commando per la pine) Qua buscas?
LEONORA.— (Jugueton0 A un tonto.... (Hack, el maestro. Le Neva de
I. mono haste la coma. Se sientan. Le tome el rostra. Lo beta)._
Al tonto mos encontodor del mundo....
SEF4ORA.— (Entrando bruscomente e interrurnpiendo la eta de Leonora....
En sus ojos se serrate el tomer)._ La senorita
to seriorita....
MAESTRO.— Qud sucede?
SEPORA, (Moviendo los brasos y °semantics° a to ventana).... Su pope,
su pap6 quo le ando buscando-LEONORA.— Y le dijo que yo....
SERORA.— Libreme el cielo.... No me llamado C.ormela....
(El maestro se levant° y va hocia la ventono)..._
SERORA.— Un peon, un pe6n la vi6.... (trans. eon las manes en Is calmzal.... Dios mi.... me cerrorti lo (pause) Dios mio! (A
Leonora) por qud vino?
LEONORA.— (Tranquilisadoro) No posor6 node....
81
SMORA.— Ese hombre es el diablo (trans) Perdone pero....
MAESTRO.— No se preocupe.... Ud. no sabe noaa....
(Vase la senora.— Maestro se vuelve y
enciende un cigarrillo).
LEONORA.— ....y bien....?
MAESTRO.— No re.... (aspire intensamente)._ ves coma__
SDIORA.— (Aterrada) El mismo.... viene.... viene pure oca 61 mismo.... Virgencita del Carmen que no suba.... (Se arrodilla).
MAESTRO.— (Tranquilizador) No subird.._ (La mire a as ojos) Se to
aseguro.... (pause) Vaya tranquila._
SERORA.— Pero los peones....
LEONORA.—. Mejor me voy....(Arreglandose los pliegues del vestido).
SEAORA.— (Deteniendola pot lot brazes) No, pot auricled, No
go chore._
I
No sal-
MAESTRO.— Quedate.... Comp!Maras la cuestiOn....
(Afuera resuenan cascos de caballo.... Se
oye la voz de Generoso).
GENEROSO.— Leonora!
(El maestro se asoma a la ventona distra
GENEROSO.— Miserable
I
Donde esta mi hija?
MAESTRO.— Su hija....? y no es Ud. su padre?
GENEROSO.— Atrevido.-.1 Me las paw& Comunista! (Hacia el public.
quo se ha reunido debajo de la ventana).... Ese es el sinvergUenza
que ha levontado o los cholos para qua destruyon el pueblo!
(La peonada de Generoso, grita epitetos
contra el maestro. Este cierra la puerto).
GENEROSO.— (En segundo plane) Me las pagarts....! Leonora condenoda.... to espero en caul!
(Afuera se perciben los murmullos del
pueblo en segundo piano, el maestro se vattea y se dingo hacia la coma donde est6 Leo82
flora boca abajo. Este la hace levantorse. La
sefiora que habfa permanecido en oracion
tambien se incorpora.,.. El maestro acaricia a
Leonora este to sonde y)
LEONORA, Me voy....
MAESTRO.— No.... todavia no....
LEONORA, Tlenes mledo?
MAESTRO.— Por la senora.... No quiero que sufra las consecuencias....
SERORA, Tine roz6n.... (trans) Esperese un rata.... la sacare par la
talanquera de amis....
LEONORA, Crei que iba a subir....
MAESTRO.— Perdona, pew creo quo to padre es....
LEONORA.— (Ma!este) Lo sL.. (Se tient° on ono silk).
MAESTRO.— Lo sabres?
LEONORA.— Hablemos de otra
SEItiORA.— Me ire pues.... (trans) Comer6 alga maestro?
MAESTRO.— Café solo.... si, eso es.... (Se sienta en la coma).
SEtIORA.— (En el umbral de la puerto) Y la Woe?
(Leonora no contesta, se mina en el espejo
de la cernoda).
MAESTRO.— Cafe tambien....
(La set-lora, se ye.... El maestro contemplando a Leonora).
No se a que has venido!
LEONORA, A verte.... A minute.— (Con coqueteria) Te pierdes en esa
selva.... trans) pope es
MAESTRO.— Cierto.... (pause) Aunque.... aunque por rezones diferentes!
LEONORA.— No entiendo....
83
MAESTRO.— Este ocaparando los tierros de los compesinos..LEONORA.— Que le puede importer esos tIerras?
MAESTRO.— Lo carretera.... y el cafe que to zone esa produce
LEONORA.— Crees que lo logre?
MAESTRO.— Lo este consiguiendo....
LEONORA.— (Sentendose en la coma) Y tus intereses o116-..? (Le amide
I. espolda).
MAESTRO.— Ese es mi trabajo..LEONORA.— Es todo....? (trans) No sere &gum__
MAESTRO.— No seas tonta!
LEONORA, Conozco tu temperomento (trans) Adenvis, la selvo en los
temperamentos como los nuestros....
MAESTRO.— Es infontil....
LEONORA.— Una vez fui pot uric semano y pare no enloquecer tuve....
MAESTRO.— Que hiciste?
LEONORA.—Nado del otro mundo.... Me entregue a un mozo
Y
MAESTRO.— Olvidolo!
LEONORA.— Ayuda mutua.... Ven a mi!
MAESTRO.— (Se I eeeee a y abre In ventana).
LEONORA.— (Endemic, un eigarrillo) Of decir a pap6 que tus protegidos
le cortaron los olambres y.... le machetearon el gonado....
MAESTRO.— ,No dijo que orden6 a la peonado quemarle (as ranchos a
Juan y Pablo?
SEtZIORA.— (Entre). Aqui tienen.... fuerte y calientito.... (Se we apresurade).
MAESTRO.— POT que est& aqui....? que buscos?
LEONORA.— Tengo deseos....
84
MAESTRO.— Lo siento, hoy no!
LEONORA.— (Tristan& de besarlo).... Amor
I
(Mimosa).
MAESTRO.— No puedo.... ores la hija de Generoso.
LEONORA.— Olvidolo
que tiene quo ver lo uno con lo otro?
MAESTRO(Sacudionclose la caricia) Sebes pot quo estoy aqui
LEONORA.— No....! To vi posar en el coballo y....
MAESTRO.— A la Alcoldia.... citado pot tu padre.—
LEONORA.— Por qu6
de qu6 to ocuso?
MAESTRO.— De agitador.... y de incitar a los campesinos a la violencio...
LEONORA.— Agitador
7
MAESTRO.— Agitodor comunista
LEONORA.— Pero, pop6 esta loco!
MAESTRO.— (romondola por lot hombros) No creas.... el viejo sabe lo
quo quiere!
LEONORA.— (Levantandose) Voy a hablar con 61....
MAESTRO.—Hacia la ventana) Para quo?
LEONORA— Quion sobe?
(Golpe Doman& a lo puerto).
MAESTRO.— Si
I
Ade!ante!
SNORA.— (Entra con telegram. en la mono)._ Poro Ud. (Lo entre.a y
se vie).
MAESTRO.— (Abriendo el telegram° cerca de la ventana).... Aqui puede
estar la solucian del asunto.... (trans) Es de la Inspeccian (law
en voz alto).
"Orden Ministerio, atengase funciones de maestro... Asunto tierros,
manos outoridades".
(Se queda parado con la mirada perdido. El desoliento se moral con fuerzo en el
semblante)....
85
Enseriar a leer y escribir.... Que pobre mision k de un maestro
Es absurdo! (Souris con amargura) Educacian de bestias.... Si, educocitan de bestios, para bestias.... V yo quo tenlo esperanzo! Es
Esperanza en unos miserables imbeciles quo dirigen la
tonto
educacian de este desgraciado pals....
LEONORA, (En un momenta de arrebato, se Is echo encima, ducked,
con los elks flies on los de el, y se aferra a sus rodillas, mientros
le suplica).... Es horrible....! Vamonos de aqui.... esto no to deja
cuento
MAESTRO.— No es asunto de poser los gonancias....
LEONORA, Por lo quo mos quieras.... (trans) Quieres quo consigo tu
traslado?
MAESTRO.— Dejame.... estoy dentro del low.... es inatil.... el nudo cado •
dia Gorier° mas.
LEONOFtA.— Hogamos el intento!
MAESTRO.— Donde quiera quo voyamos, el lozo nos alconzar6..- (trans)
Uno puede huir de los otros; pero no de uno mismo.... (Pause) Parece mentira....
LEONORA.— (Levantendose) Que?
MAESTRO.— Es triste nuestrq Democrocio (Rio coo omargura) Uno se
muere coda dio un poco mos dentro del nudo.... Coda dia el nudo
se hinco m6s en nuestro Solo resto luchar.... luchar Leo-
LEONORA.— Estds viendo fantosmos!
MAESTRO.— No son fantasmos.... son hombres de come y hueso los quo
nos maton....
LEONORA.— Entonces
?
MAESTRO.— Ojala fueran fontasmas..... Desgrociadomente es verdod....
No sientes el Nudo....? No lo vet...? No sientes la tempestod quo
ruge?
LEONORA.— Quo esperamos?
MAESTRO.— (Paseandose por la pieza) No se trek de huir....
86
LEONORA.— (Hacia 61 apoyandose contra su gecko) Yo no entiendo....
Miro a tus ojos.... oigo en tu pecho.... (Manes tnimulas) Todo est6
oscuro.... todo es negro.... inc6mprensible_ (Implorando al Cielo).
Por qu6 Dios? Por qua no puedo entender los conflictos de los
hombres?
MAESTRO.— Esters dormido!
LEONORA.— Dormida vo?
MAESTRO.— No has abierto los ojos a la realidad....
SEAORA.— (Entra) Shh
rita se vaya....
l No hay nadie °how_ Es mejor quo la seno-
LEONORA.— Todovia no!
MAESTRO.— Veto.... es suficiente!
SEE1ORA.— Pot coridad niiia.... No busque mos lies....
LEONORA.— No los busco!
MAESTRO.— Que buscas?
SERORA.— (Con las manos en el cuadril en un gesto de impaciencia).
Que se hace tcrrde
LEONORA.— Busco °Igo quo no encuentro....
(La senora se pone a orreglor lo coma.
El maestro soca una ormanica y comienza o
tocar algo.... Leonora se va a un lado de la
ventana).
LEONORA.— No me ire__ debo encontrar To verdad....
I Viniste a buscor un hombre!
MAESTRO.— (Interrumpiendose) Necia
SEAORA.— Jesus alabado....! la senorito.
LEONORA.— Es clench necesitaba un hombre....
SERORA.— (Persignondose) Alabodo
los cases que dice la senorita....
MAESTRO.— (in marido pqro sus opetitos de burgueso ociosa....
LEONORA.— Ahoro busco la verdad
ojos....
87
(Mem ver.... despertar.... obrir los
SEFJORA.— Pot Dios quo no entiendo....
MAESTRO.— No se preocupe....
SEFIORA.— Dice quo quiere ver
quo quiere obrir los ojos....
MAESTRO.— Lo necesito....
LEONORA.— (Abondonando so puesto ol 'ado de la ventana y dirigiendose al espejo mientras con las memos se abre los ojos y sin volreorse).... Lo ve! lo dice No puedo irme.
(La senora enciende lo lempora de kerosene. Afuero se oyen voces y olguien ensoyo
a un pie de la coplo lo gran rinsed° humona).
"Colavera clue infeliz.... Mira lo Juno de plata Di par quo to encuentros note, Si era
largo tu
SEFiORA.— Ave Maria Purisimo!!
(El maestro enciende un cigorrillo, aspira y se Ilevo uno mono at bolsillo del que
extroe uno mocha pistola).... Veto Leonora....
(Mientros exomino distrcidomente el ormo)....
LEONORA.— (Sin voltearse) Necesito ver
SEFIORA.— (Golpeando el piso con el pie en on gesto de impaciencia).... y welt° con quo necesita vet.... Y con quo necesita
obrir los ojos (trans) Acaso, esto quo esta obi.... lo que posb
y lo quo paso a coda instonte, no es real Es mentiro entonces?
MAESTRO.— (Guordando el orma en el bolsillo). Es distinto.... LW.
no es como ello.... Ud. natio como todos los pobres, con los
oios obiertos....
(Leonora se voltea distroido, le quito el
cigarrillo ol maestro de In boco y comienzo
o fumorlo ello).
SENORA.— (Sorprendida) Entonces qui es verclod?
MAESTRO.— Lo que Leonora ve, es oporiencia..., es fantasia como las
joyos quo venden on el olmocen de su padre.... Fantasia coma
ciertos flores, como ello
88
SEKIORA.— (Levantandose) Ahora vuelvo.... pew aptirese, par omor a
Dios.
LEONORA.— (Meconicamente repitiendo la Ultima frese de la seriora)....
Por Amor a Dios....
MAESTRO.— Acuerdate de Dios Leonora.... Lids., jamas lo bacon.... Creo
que si se ocordoran de Dios, no sedan todo lo conallo que son....
(Pause) Levantate y busco a Dios Leonora....
SEIZIORA.— (Entre con mas café) Esto me gusto._ (se sienta) A ver si
entiendo, deck' que.
MAESTRO.— Los padres ricos, crean un mundo artificial paw sus hijos....
un mundo donde brilla el ow.... un mundo de fantasia.... Pero el
mundo no es (Tornandole las manes a Leonora) lids., jamas
hon luchado par nada.... Ni siquiero par el hombre tongue se
acuestan.... lids., los hijos de los ricos, piensan que nocieron para
ser los °mos._ y qua los otros, los miserobles, seen sus esclavos....
Lids., son pulpos insaciobles.... selo soben monejar sus tentaculos
porn succionar toda presa que les reporte beneficio.... Tu padre es
osi Leonora.... y tO eres su hija.... TO seras asi.... Asi to han educoda, no podr6s ser otra cosa.... Seas una inmundo y desprecioble
burgueso, tendras un vientre inmundo y grasoso_.. Eso es to realldad.... Ver el mundo asi, es tenor los ojos obiertos, eso es despertar y asomarse par la yentana poro ver to otra caro de In humanidad; pew lids. son demosiado cobardes para obrir los °jos__
(Pause) TO enloquecerias Si Ilegaros a despertar
1 Vote sortiando
Leonora.... Vote.... (trans) Sabes quo nodie hace dorio a los sondmbolos 7 Ando querida.... vote soilando.... Dejome, yo no soy de
los tuyos, yo soy de otra close, de otra manera.._ Yo estoy despierto y me day cuenta Leonora.
LEONORA.— Na sin ti....
MAESTRO.— Es 'nail....
LEONORA.— Tengo el deber de rescatarte....
MAESTRO.— El compromiso de todo hombre es elegir un puesto!
LEONORA.— TO elegiste este?
MAESTRO.— Si....
SEKIORA.— (Quo escuchaba en liked° con la boca ablate) Que no yengo Generoso.... (trans) Mejor day una oguaitado.... (se ye).
89
LEONORA.—Elegiste
MAESTRO.— Nunca deg' mejor.... (trans) Viste el cieb de esto tarde?
LEONORA.— No le day importancia.
MAESTRO.— Lo vi desde el coballo.... era un cielo gris.... de un_gris
cruel Leonora_ (pause) Era un gris quo acuchillabo los ojos.... un
gris pesado, dense, triste.... No sabria expresorte toda lo vivencio
que senti al miror el cielo.... f
De pronto, el dela se fee 14fiend° de manchones rojos.... acento febril) rojos, Leonora.... (pause
large, inmost_ Despues con as manos crispadqs y la mireda fija
en los ojos de la muchacha)._ y esos manchones rojos eron son-
are.... Sangre Leonora El dolor de los hombres ha puesto su
huella de sangre contra el cielo....
LEONORA.— (Al horde de la histeria).... Por que
asl? Dime....I Por quee?
2 Per quo me tablas
MAESTRO.— (MU calmado
con acento profundo/.... Es el pueblo el
quo asi habla Leonora— No soy yo— La fuerza de un pueblo en
march° esta bullendo en ml pecho.... Hoy alga quo esta gritando
en ml gorganta y quo yo no puedo, ni quiero collar.... (Pause
largo)._ Vornos comma del abisrno.... Moriremos muchos, muchos,
Leonora....; pero moiiona sera distinto....
LEONORA.— (Ab r
dose al maestro) T6 no!!
MAESTRO.— (Abrazado a Le 00000 , con la mirada en el m
lejanial.... Monona ser6 otro dia....
SENORA.— Mariano ser6 otro dia.... (se vo).
Fin del II acto.
90
, en lo
EL NUDO - Ill ACTO
Una ttistica escuelita de campo, contra
un fondo de atmdsfera y de selva.... Al frente
un asta rudimentaria en la flamea con movimientos tristes, una vieja bondera panamefia.... El maestro, at portal, escribe sobre una
desvencijado mesa. Vista rope kaki y botas
oscuras.... El cielo est6 preado de nubes negras en un intento por devorar la salvo. A to
lejos, retumba el trueno quo se reparte en los
=nos del viento. Haciendole eco al trueno,
de improviso se escuchan disporos de fusiles y
roncas descargas de escopetas.
El maestro se incorpora, colocandose a la
sombra de to bandera esforzandose en orienterse__ Muy de cerca se escuchan los gritos
de una mujer que se acerco o to carrero.
Aparece Aura, con los cabellos sueltos, el
vestido desgarrado por la maleza....
AURA.— Maestrao 11 Todos muerms....! (Aura ale exhausta al suelo, a
lo lejos, el trueno continia retumbendo..... El maestro troth de leventer a la mujer.... Esta continua su !lento)._ Muertos.... Muertos todos!!!
MAESTRO.— Quienes
7 Quo suced16....? Aura, que pasd?!!
AURA.— Muertos.... Muertos maestro
11 (Sonar del trueno. A la lejos un
MAESTRO.— (Dondale ague a Aura) Donde este Leonidas....? Donde esta?
AURA.— Ayy Maestro ....Muertos.... Todos muertos!!
MAESTRO.—(Desesperadc).... Quienes?
AURA, (Selia!cede hada be salve) Al16 1 Alba.... Al16 Maestro....
Ahorcados and__
(Pause._ Interruinpe Ines historical Ahorcados
Todos....! Todos muertos.... Ayyy Leonidas....
91
MAESTRO.— Ahorcodos....? Ahorcados dices?
Ahorcados!! Con un nudo en el pescuezo como puercos!!
AURA.— SI
Ahorcados coma puercos....Ahorcados maestro!!!
(Un piquete de policia marchando apresuradomente, paw frente al portal de la escuelo.... Van con sus fusiles en la mono._ A
lo lejos, se oyen nuevas detonaciones).
MAESTRO.— (A log policies)._ Qui bacon....? Es un crimen t! Por qui
lo hacen ? Detinganseee!!!
SARGENTO.— (Dondose vuelta y apuntondo con el hail al maestro)._
Collate!! [rabid! II Collate I (Los policies se van.... Aura este
de pie, con log ojos perdidos en is distancia can sus vestidos desgarrados, dada busca alga en la distancia. De pronto rornpe
nuevamente en sus lomentos).
AURA.— Se mob!) todo maestro, todo Par qui maestro
(trans) Todos muertos!!!
MAESTRO.— iNo Aura, todo no termino aqui
hoMbros).
?
por qui
7
(La sujeta por los
AURA.— Es el fin de todo.... (El maestro la estremece par los hombres._
mientras....)
MAESTRO.— Es or comienzo.... Es el comienzo!
11 Ahi
Vienen ye!
AURA.— (Reanudondo su !Panto • gritos) Vienen
....Ya vienen Dios mfo .... !!! Muertos! Muertos todos.... Tacks muertos coma puercos.... con un Nudo!!
(Aparece Leonidas.... Trayendo en los brazos a Leonora de cuyo cuello pende un pedazo de soga.... Att.& viene campesino 1 y campesino 2.... El uno orrostra a Generoso y el
otro a un peon.... Antos igualmente ahorcodos).
MAESTRO.— (So!tondo a Aura qua se aferra al asta de la bandera,
mientras se dobla sabre sus rodillas on un lianto sordo)..... Leonidas!!
(Dando unos pesos hada alias con la mane en la cam herrorisado
al reconocer a Leonora).... pero coma 7 " Como ? Leonoraa!!!
92
I (El maestro contempla el cadaver con miracle
MAESTRO.— Leonora
serene y dolorido mientras se acerca lentamente.... El terror se endive de lot °los de Leono.... El ma estro tomando el amount de Leonora lo deposita silencioso sobre una mesa.... Los otros campesinos,
deism lot otros cadaveres al lado del asta de la Winders._ El
maestro • Leonidas).
....Leonidas.... coma ha sido....? Como?!!
LEONIDAS, ....Esteban desesperodos.
MAESTRO.— Si
I
Cuando lo dispusieron?
LEONIDAS.— Esta monana...,. (Trans. Limpiandose el sudor con el dors*
de la mono....) Mono Juan ovis6 quo toban en la finca!!
MAESTRO.— Pero.... y los policies, c6mo
LEONIDAS.— Sobiamos que venion!
CAMP. 1.— Si I Tencho baj6 al pueblo y se enter6 de que los policias
venion a socamos!!
MAESTRO.— (Tociturno) Entonces aproboron colgarlos?
CAMP. 2.— Si II pa 'tar colgando de un deo.... mejor es dejorse coer
par entero!
AURA.— Si
I
Hundirnos.... hundirnos mdis
Morirnos, morirnos todos!
LEONO.— (Horrorizado, mientros se cubre el roars con los manos) Hemos
ido demosiado lejos....
AURA.— (Como un eco) S
todos muertos!
demosiado lejos!
(trans) Leono
todos,
LEONIDAS.— Aura!! (Como &inclose cuenta de lo existencia de su major).
AURA.--(Como un eco) Si Leono.... Muy lejos.... muy lejos!
LEONO.— Nuestros hijos.... Nuestros hijos, maestro.... (Como un lamento).
MAESTRO.— (Dolor) No Leono I No hernos ido lejos.... (trans, sombric)....
Este, es apenas el comienzo!
AURA.—fincorporandose enloquecidol.... El comienzo? Y dice qua es
el comienzo?
LEONO.— (Como despertando eeeee mente).... y nuestros hijos?
93
MAESTRO.— (Poniendole Is mane sobre el hombre) Si luchomos hey.—
Las luchas de nuestros hijos, seran otros.... muy otros maiiona.
(Los dos campesinos que contemploban la
esceno en silencio se van retirando con sus
muertos).
LEON°, Entonces.... entonces, cu61 ser6 el fin?
MAESTRO.— (Moviendo la cabeza con expresien dolorous en el semblante).... Nedie lo sobe.._ (A is muerte)._ Poi' que tuviste quo ser de
los primeros?'
LEON0.— Ella no era culpable, maestro!
MAESTRO.— Todos somos culpobles— Todos somos culpables....! (Hacia
el cadaver) Pobre Duerme pare siempre no tuvo le dicha de
ver lo otra corn de los hombres....
LEONO.— Quo este diciendo?
MAESTRO.— (Sin hear case a Leone._ Peso la mono aaaaa mate pot Is
trente de la muchacha).... Hoy duerme pare siempre.... (trans) Stempre estuvo dormida.... (exhale) Path par el mundo coma las flores
del campo.._ No di6 nada de su perfume efimero; pero hizo daft°
con sus espinas.... (Pausa)._ Asi a, Leone! (Haste el cadaver) Pense quo era taco.... Ahora veo que se Ileve en su sue& alga de ml
mismo
(Truena. Llegan dos policies ermados con
SARGENTO.— Sigonme! (El maestro tome el cadaver de Leonora en sus
brazes).
I (Leono suelta el
MAESTRO.— Sue!tele el nudo del cuello, por favor
nude con movimientos torpes, y el maestro comienza a seminar
llevando en los brazes a Leonora._ A su lade comma Leone....
mientras los policies marchan denies rozandoles las *spelt, con la
boa de sus fusiles.... Cerca so oyen di:pares._ El cielo Sc quiebro
en nanos y Is torments se bate con feria contra Is pequetlez del
grupo. Aura cornpletamente loco..., grits desde el salt_
AURA.— MaIditos....! Cerdos malditos.... MaIiiitos....! Molditos!
LEONIDAS.— (Sellando bruscamente, cone an auxilio do su rattier)._ Aurae I Espera..-1 (1.1n policia giro, apunto, disponi y Leonidas cue
ahogando un grits, care* al mend de la benders).
FIN
CUNA COMUN
Par ROGELIO SINAN
n--Cierro la puerto Ulan's; que no te vean los clientes acuriendolo.
Bien sobes que ellos no deben enterers°. Te prefieren porque aun pareces
una nifia. Cuondo termines, vuelve al bar".
Sin embargo....
Mos a gusto se siente olli con su hijo; por eso se entretiene meciendo
la cunito oun convencido de que, tins un ruidoso y torrenciol rio de !Agrimas, chore el nil% repose en un remanso de suenos pespunteado par
burbulltos de hipo.
A la patron° no le hacion muclxi cocci° los frecuentes lloriqueos del
Esos berrinches no estabon muy de acuerdo con el prestigio de
la case.
Lo cuipo de qua el chichi Itorara lo tenion log muchachas. Remordidos acaso par frustrados onhelos motemales, pelethonse los tumos par el
simple prurito de besuquecnlo y arrullarlo, de monera qua todo el santo
die se to pasoban zangoloteendolo. Con tonto mime, claro, lo tenian consentido. Lo grave del osunto sucedia par las noches, pues atareadas como
estaban y no dondose o basto para atender a la clientele, tenia qua ser
Ulalia quien soportase los rnarrumancias del mucosa. NI pare qui decir
que solomente con elk Sc calmabo sin dude par aquello de clue coda
temero conoce la ubre de su mom.
Desde olli Sc distrae viendo el ir y venir de los que suben con los
clientes de tumo; tombien aye Ia mesica del cabaret de enfrente, a cuyo
ritmo vuelve a afligirsele Ia entralio, yo qua le tree recuerdas de ague!
primer omor, "fruta temprano desprendida a destiempo de la roma" —coma el deck—.
De ese fruto le quede lo semilla cuyo retotio, dormido °bora en la
cuna, crecera coma un arbol se hart5 hombre y tendre qua pelear cuondo
los otros intenten denigrorlo llomandolo bile de tol par cud. Memos mot
97
quo es rollizo, grande y sane. Viendolo tan enorme, at nacer, las otras
se hocfan cruces y no querian creerlo. De lo robust° quo era cosi estuvo
en peligro al darlo a luz. Culp° de ellas, pues se excedieron al nutrirla.
Sf, sefior. La cebaron talrnente coma lo hizo su tote, 0116 en el campo,
con la chanchita que le merc6 a no Hilario. Can todo y eso, mucho ha
de agradecerles sus bondades, pero m6s que a ninguna p la potrona •pot
el merecimiento de recogerla caritativamente en una case de tan reconacido prestigio como la suya.
Lo cual fue una gran suerte, seam dice La Fula, .pues asi encinta
coma estoba, inotilmente hubiera insistido en colocarse. Las familias pudientes no la habrfan oceptado. La Fula, quo es leida, se la posa ensartondo jeringonzos. Par ohi and° diciendo que es la patrona quien debe
ogrodecer puesto que Ulalia le result6 mas Util quo la gallino quo ponia
huevos de oro. (De las tres quo tenion olla en el camp° ninguna hubo
jamas tan ponedora coma aquIa carata que se volvia una furia cuando
andobo culeca o con sus pollos. Por, eso la mate el gavilan. Era destino).
Tambien dice La Fula quo fue el destine quien dispuso que su chichi nodose en una cuna coman (contropartida de la fosa com(in y coma esta
prIvilegio de pobres) to cual es to de menos, pues no hay bicho viviente
quo no nazca con su estrello de Pascua ya lo haga en cuna de oro o en
un pesebre. La prueba de ello es que oun la misma Virgen tuvo al Hijo
de Dios sabre pajos entre un buoy y un asno.
Mejor hubiera sido —piensa
tenor a su chichi one en el
campo, no entre un burro y un buey (ya quo eran pobres y no tenian mos
bestia quo to chancha que le mercaron a Ac Hilario), pew si entre los
suyos y entre las garrapatas, los plojos y las niguos. Asf al menos podria
tenor el gusto de roscarse.
Destino hubo de ser porque parece quo todo se junto aquella marlana
para quo le ocurriera la desgrocia. Y ni oun Inc pues lo acertodo hubiera
sido quedorse para ayudar al hermanito; pore en cambia, de pure miedo
de qua su tote la matara, no hizo m6s que correr hasto Ilegor al pobloclo
ya bien oscuro. Menos mal quo a aquella buena seibra QC6mo es quo
se Ilamoba? Fla Nadia/, quo vendfo sus Miuras en el portal, compadecido
de verb olli pegada a un horcen Dora quo Dora, se le abland6 la entratio
(jBendito sea el Santisimo!) y le dio de comer cafe y tortillas.
Prefirie no decirle ni uno solo palabra de su percance. Eso nacho
freg6 bs trastos y se pose contento cuando Ac blade ‘la invite a acornpariarlo. Como perra calunga fue siguiendo tros ella hasta un ranchito
enclenque e ingrimo al otro lad° del Ilano. La humedad de la hierba to
refresce los pies. lba a Hover. La tuna se nuble. Habra luciemagas.
Los &as siguientes se mostra servicial on el negocio y supo atender
a la clientela con tal esmero, quo Ac Inacia to merce muda nueva y la
98
enser16 a ester aseada y peinadito, con las patitas limpias y su flor on el
polo "pare quo no dijeran".
Los hombres la encontraban bonito y, par sl acaso, &Oben el onzuelo, pidiendo esto y aquello: "Otro presita, mi °more'. "Un cafecito". !Bien
quo se relomfon!
Una noche, terminodo el trojin, UlaHa se disponi° a fregar los trastos cuando escuch6 el rasguear de una guitarra y un penco de cancion
que se ocercabo clovondo angustios en el Bono.
Na Ionia par6 el ofdo y duo:
— Es Bib Mayo, el de la radio. Canto la mar de bien. Es como un
6ngel.
A Ulan° yo le era familiar aquello voz, pues la ofa coda noche cuondo ponian la radio de la cantina.
Se °proximo a to fond° con su guitorra. Lo acompa6aba uno gordito.
— iQue to', Hermenegildo? — dijo Rn mad.
El oludido les anunci6 orgulloso:
— jAqui les traigo al famoso Bib Mayo!
El angel, quo estaba bien jumado, se apoy6 en un horc6n y, sin dejar de mirorla, sigui6 taco quo taco quo doba gusto ofrlo.
Hermenegildo se sent6 a la jineta en un toburete y orden6 pare ambos café y tortillas.
Aun hortos de eso y otras pastas querion seguir chupando, Pero Ya
hobian cerrodo la cantina. Na (nada, quo estabo vuelta dengues Con el
gordito, les confio muy a to chito callando, quo elle tonic en su rancho
una botella de seco cimarthn.
Esa noche la tuna estaba alegre y no tan triste coma lo quo brillaba
cuando cruz6 par vez primer° aquel Bono.
A medida quo el soca se odentroba en la sangre, jrnisericordial
A Hermenegildo y o lIe Nada dej6 de verbs y oun de ofrlos, pues
se fueron al rancho y opagaron las rises.
La embriag6, m6s quo el guaro, la hamaca de canciones en quo la
iba arrullando Bib Mayo.
Huerfano de carifio, se le aguaron los °jos y se deshizo en 16grimas.
99
Le tuvo que explicor a Silo Mayo que si lloroba era porque le habrio
gustado ser para 61 uno ni5a, pero.—
(jVey° suerte mangoja lo de los pobres!).
Fue entonces cuando le oy6 decir oquello de "la fruto temprana desprendida a destiempo de lo roma".
Y clam, el muy Iodine no dej6 ni los cascaras.
Un dia le fue saliendo can ague& de que debio volver o su trobajo.
Desde entonces solo sigui6 escuchando su vox noche tros noche a haves de lo radio de la cantina. Sentirlo asl, sin verb y sin tocorlo, era
para ello como besar el aire.
Sentiase ton enfermo, que al explicorle Ao 'nada lo del Mao, se le
ofloj6 a cuerda de la esperanza y se fue en Uanto.
—Pero no te preocupes —le dijo ell°, animandola--. Yo hare que
Hermenegildo le escritto o Bib Mayo. Cuando 61 sepa qua vas a ser la
madre de su hijo, vendr6 a buscarte; si es que no se hoce el no-nos-deje.
Las cartes no surtieron efecto.
Hermenegildo [ogre comunicarse telefemicamente con la emisora. Le
dijeron que Silo Mayo se habits dado a la farm cuando supo que iba a
tener un hijo.
Una moriona, mientras regaba Ulalie uno hortaliza que tenion tros
el rancho, se le acerc6 Ac boccie en actitud misterioso:
__Te busco un policia. Seguramente es que tu tato ha sabido que
estis encinta, y a lo mejor puso el denuncio. Ahora, ewe hacemos?
Ulalia mir6 hocia todos lados dispuesto a huir. Frente a ella se extendia el Dane inmenso. No se sinti6 con fuerzos para cruzorlo tan de
prise coma pare que el noco no la olconzase.
— Lc que me extratio —dijo Ac mad— es que este pond° no me
porece de los de cal Nunco lo he visto.
— 6C6mo es?
—Bien zambo y grande. Puede que sea de la ciudad. Vendr6 o
buscarte por cuento del carttante? iQue tiene pie asi sea?
--t-No, Re Inocia —le contest6 asustodo, al ver qua el tipo avanzabo
hada ellas-- Este es el hombre quo me periudic6.
100
Cualquier ligero Intent° de fuga habria side in6til. El vent° acer.
condos. a troves de la huerta, pisando los sembrodos, sin importarle un
pito, con los enormes boticones de cuero crude. Sus espuelas iban marcondo el tiempo.
—Vengo a buscorte —dito de rnodo autoritario-- porque he sobido
que estas encinta y yo no quiero quo un hijo mlo none sin padre.
Awn =blend° que el hijo era del otro, qued6 sin habla y temblequeondo coma uno hojita al viento.
So lead° se encore con el hombre.
eCon quo derecho dice qua ese hijo is suyo?
Los ojos del mulct° brillaron. Ulalia le vio en lo mono el long° y
pens& "Si se entire de lo de Bib o Mayo, me intro a foetazos y me
mate".
—rnintie—. Ude as el tato; pero ansina nom6s y ton o
priesa no pueo dirme.
—Bueno —ocepte—. Esta noche vengo per ti. eEntendido?
Ulolia recline la cabezo.
—To giieno.
Al poco rato lo vio que dm a golope cruzondo el Ilano.
Bla !nada se habia quedado coma en oscuas. Ulalia le explice punto
per punto lo que le hobla ocurrido "con ese zambo del demonio".
Esa monana se hobia tenido que quedar en el rancho cuidando a su
hermanito que estoba muy enfermo con unas calenturos que to tentan sedlento y sofocado. Pedia mas y mos agua. Sane a buscorla al pozo y alll
estoba sentado it policio. Ella, ol verb, se must& pues era enorme, y los
ojos los tenia coma brosas. Le dijo haber estado rostreando toda la noche
en busca de un osesino. Se babies bebido mas de un litro de guar°, y
estaba can la sangre hecha un fogen. Tent° sed. Le die aguo. La bebi6.
Pidi6 rn6s. Mientras ella se disponi° a servirselo, le pregunte:
—eV tu gente?
De pure ingenue; Ulalia be informe que tu tote y su mama y su otro
hermano se hobion ido a recoger to cosecha quo en total ni era mucha.
El pregunte si estaba lejos el monte.
—Si —dijo ella—. Bien olejao. Par ac6 hon de escor6 cuondo
curezca.
101
Volvi6 a Ilenorle la totuma.
El insisti6:
—eit
par estos contornos vivo alguien mos?
Ella, de gran babosa, vo y to confieso:
—Naide.
Sc levant6. Le dijo:
— De manera quo si est& en peligro, ninguno oye tus gritos no es
asi?
Ulalia, at verb e los ojos se dio cuenta de lo qua 61 pretendia y ech6
a correr, pero (joky, momita0 no pudo defenderse. Aquel conalla satisfizo
at ontojo, se socudi6 coma las bestias y se larg6 a coballo. Su hermanito
gritaba pidiendo (nu°. Sc to dio. Fue calms:inclose. Ella debifi haberse quodada junto a 61 paro cuidorb, porn pens6 on quo el tab a la matorio at
saberlo y tuvo-miedo. Por eso echo a correr collo alma que Ileva el diablo
hosto Ilegor al portal donde Na !nada le dio café y tortillas.
—eY dime, Bilo Mayo esta enterado de todo? —le pregunt6
!nada.
Na
deamo no to iba o estor? Precisamente fue la sinceridad de Ulatio lb
quo mas lo sedujo. Decks qui estaba asqueodo de los mujeres insinceros
de la urbe. Queria un hijo nocido de lo tierra, del vientre de uno cholo
con sangre vegetal en las venas, un hijo sono, fuerte, con sobor y olor
de barro y compo. Por eso Ulalia necesitabo escapar del ponds; de lo
contrario ecdmo salvor a su hijo? Debia juir, juir. (jBendito Dios!) Pero,
iamb? iD6nde holler el dinero para su viaje?
Los polobros se le enredan en los dientes y las echabo ofuera escupiendolos.
La ahogoba el 'lento.
— jZombo der dioblo, pufietero!
NaInacia la obraz6.
— No seas sonsa.
Y esa misma mafiono la embarc6 on la primero camioneto qua hada
vioje a lo capital.
Todo el trayecto to hizo a bmos del cuando-llegaremos, mientras
bebta paisajes en oleadas de alambres, postes, &boles._ reses, puentes,
102
nubes, pojaros, flores.... Y sorlaba despierta, mezclondo a esos
imagenes to voz de Bile Mayo, la luna, los luciernagas, el seco cimorron,
las condones, y el hijo, el hijo, el hijo..Mos tarde, en lo chided, qued6 oterrada frente al ciclon de lutes y
de ruidos. (Ave Marla Purisimo!)
----Llegarnos?
—iCuidate bien, cholita!
Y anduvo, otando coles con las paths al suelo, buscondo uno esperanza con su ingenue onsiedod a flor de labio.
— Pregunta en la emisora — le decian.
4C6mo ir?
Alguien, compadecido, consult6 por telefono y le dio un date exacto:
— Dicen que dioriomente vo a un nite-club, aqui cerca. Tienes quo
ondor buen trecho, por este misma acera, haste que encuentres un gran
letrero luminoso.
Ni se habio dado cuento de quo yo °stabs( oscureciendo (113ios del
Cielo!)
A pie y a polo coma lo garropoto se fue acercando al rlo de luces;
pero cuando Ileg6 a la orilla opuesta qued6 en suspenso y sin resuello.
Ni por el diablo que se atrevi6 a cruzarlo. Con tanto corro suelto, ni Dios
lo quiera. Fue entonces cuando son6 en el cabaret oquella mosica quo
paretic) de radio. Ella, onimada par la ingenue sospecha de qua °Ili estabo su angel, se persign6 osustada y, de una solo estompido, cruz6 la
colic entre un infiemo de bocinozos e improperios.
Hizo el intento de penetrar en el recinto del bar, pero, descalza come ondoba y con su ospecto de chiquilla inocente, despert6 los escrispulos
de uno de los meseros:
— osidonde vas, cholito? Tt ores aun menor de edad. dAcaso quieres
buscarnos has con la policia?
Ella arguy6 que andoba en busco de Bib Mayo poro darle una raz6n
de su familia.
—A cado rate le envion mensojes; pero el con ese cuento de quo ha
tenido un hijo....
--piZtue va, serlorl iNo es cierto!
-
no! 4Y entonces?
103
—Todavia folto mucho.
—De monera quo silo par saber quo yrs a ser padre se emborracha
cosi todas las noches y hasto arma escondolos desde hace unos semonas....
!Qui idiom! Yo n1 Ilevo la cuento de los hijos quo tengo.... Bueno, basta
de charlo.... Si quieres esperorlo, 0116 t121; pero eso si, ponte bien lejos de
esta puerto. No nos busques problemas con los radiopatrullos. Quedate
and on lo acera de entrente.
Hizo como le dijo el comarero.
Atraves6 de nuevo to bolumba de ruedos, y openas puso el pie en
la otra orilla, sinti6 quo se le °brio el opetito. Su olfato le him notar,
olli en la esquina, uno tondo quo ni la de Po mcci.. Wendion faturos
y una porcian de cosas quo eron corno para chuparse los dedos! Una
mujer freia en ese momenta pescado. Los presas fritas than saliendo de
to polio chisporroteantes y olorosos. (iModre del Verbo!) En todo el dia
no habia probodo ni jota. iCon qui plata? Tat era su gozuzo, quo se
vela a si misma devorondo todos las postas. Un muchachlto, de esos quo
venden los periedicos, compro uno presa y to meti6 el diente con tat gano
que a ello se le hizo agua la boco. (jUno presito, ml omor! jUn cafecito!).
Fue entonces cuando, de pronto vi6, a su 'ado ague, agente del orden. (iQue querria?) Mostroba un ceno de muy pocos amigos y era m6s
prieto quo Mondinga.
--eQue haces to por aqui?
Tenio unos ojos quo no indicaban nada bueno. Ulan*, at verselos,
record6 at otro zambo. (wirgen de los Dolores!) Le entr6 tai tembladera
quo no pudo ni articular palabro. Mirandolo, osustoda, haste los nervios
le dieron par reirse.
— jCholita sinverguenza! —le dijo, remeciindola par un brazo--.
Bien sates quo iste es el barrio de las mujeres maim. Una menor como
tO ho debe ander de noche par estos lodos. jYo te voy a ensenar!
lo hizo entror en un zaguin bien oscuro.
Lo quo intent6 enseriorle, ya Ulalia lo sabia; lo habia oprendido con
el otro zopenco; par eso corcove6 con tal brio quo echo par tierras unos
tinacos. La pestilencia de la bosun) derramoda be provoc6 enseguida
nouseos.
— !Dejo tranquilo a la muchocha! — dijo uno voz de trueno.
El obnegado custodio de lo Ley sotto su presa.
Liberoda de su brutal presittn, UMW se limpi6 con el brazo el unto
de su sudor hediondo y pegajoso.
104
Not6 entre el centelleo de sus Idgrimas, que su liberadora era uno
onujerona bien gordo con un tabaco entre los labios.
El ogente del orden qued6 confuso, se rata° que frente a aquella
garde no las tenia todos conslgo.
—iGue pretendras hocer con la chiquilla? jQuieres que te denuncie
por eatiro? No yes quo es una nine?
— Por eso mismo no debe ander de noche por este barrio. Le dije que
se fuera y no hizo m6s que reirse.
— Con todo y eso, tu manera de alejarla del vicio no pared° la m6s
adecuada. iCrees quo no te conozco? Ten cuidado, porque si te denuncio
no s6/o hago quo to quiten to place sino quo haste te metan en la reja.
Si este* ton opurodo, ando olio odentro y regodeote a tus anchas. Si to
opetece, puedes echarte un trogo. Yo corro con la cuento.
El ogente respire a pulmen Memo; mire hacia un lode y otro por si
alguien to observaba, y entre en to case.
Tranquilizada por la garde, Ulalia le habld de Pilo Mayo.
to conozco hien —dijo esta—. Es cliente asiduo de ese bar de
olli enfrente. Yo no debe tordar. No te preocupes. Liege slempre contend°.
on tal habilidad fue sonsocandole sus intimos secretos, quo Ulalia
confi6 to del hijo cuyo onunciado advenimiento era la cause de las
continuos forras de Pilo Mayo.
—Yo no quiero quo te desilusiones —le oconsej6 to garde--; pero
mejor es que te olvides de tu cantante. Eros muy joven y est& desamporade en este ciudad Ilene de vicios y tentaciones. Lo m6s sensato es que
te quedes conmigo. Tendnis de todo: came, cornida, rope. Lo quo 1 .6
quieras. Como ores todovia menor de edad, simularemos que ores ahijado
mid o sobrina. De esa manera no habrd ning6n trastono con los autoridades. Vero% que dinerol ganaremos cuondo mis crientes sepan que en
la case tenemos uno chiquilla tan grociosa.
(Re lnacia le hablo dicho quo tuviera cuidado; que James se mercer° a ciertos sitios, pues a ver b s muchochitas del Pueblo, engatusandolos,
las habian convertido en mujeres de la vide.)
La Gorda la tenia apersogada qua ni a novilla erotica e iba norteandola con rumba hocia to case, cuondo de pronto, comb cosa del cielo,
oy6 en el oire la voz de Bib Moyo.
—Es 61! —746, zafendosele—. I;
105
(Es 61!!!
Pero la Gorda, sin dorse par vencido, logr6 aside de nuevo con rapidez de boa y, acariciendola, le dijo tiernamente:
—No te alteres, chiquilla, que 61 no se va a escaper. Mejor esc6chtame lo qua voy a decirte. Si ocaso tienes una desilusbn con ese tipo;
si de pronto te encuentras sin amparo, sin comida y sin coma en que dormir, no te olvides qua aqui sigo esperandote. Recuerda bien el sitio. Es
en la esquina donde venden frituras.
Libre de su presi6n, Ulalia cruz6 de reguilete la cone y entr6 de un
solo envier' en la cantina, gritando coma loco:
—j13ilo Mayo! ;MI angel!
El, extraiiado, la apart6 can desgano, frunciendo el entrecejo. 4Seria
por los efectos del guaro o porque ya no la recordaba?
Mos inter& mostraron dos perencejos futres que bebfan con el angel.
El rn63 triguefio dijo:
— ;Que cholita m6s lindo! zDe deride la sacaste?
El otro, que era un pecoso de polo amelcochado, la tented con los
ojos e hizo una mueca.
Bib Mayo entendb, pues la condujo del brazo haste la puerto, dicieridoles
— T6 eres menor de edad. Major esperame aqui afuera.
Como Ulalia no los perdia de vista, note que cuchicheaban y hacion
gulfios que sin lugor a dudes se referion a ella.
Pagaron y salieron.
Ulalia imaginaba qua su angel despediria a los otros pare quedarse
el plan
o solos conversando de tenses cosas y de tantos recuerdos, pero
era otro pues la hicieron subir en un auto qua estaba alli junto a la acero.
Desde la esquina donde vendian frituras, la gorda le hacia series.
Ulalia hubiera dodo su vide par evitar que Bib Mayo se diera cuenta de
qua habia estado en trotos con eso tipa; pero al f in y al cabo sentiase
tan feliz, que le hizo un saludito a be gorda por pure educcician y a escondidas de su angel. El diablo del pecoso 51 se di6 cuenta y se sonri6
maliciosomente. iPor clue?
Arrancoron. Ulalia iba dents can su hombre; los otros dos, delonte.
Manejaba el pecoso. (Despues supo qua era el duetio del auto.)
106
A Bib Mayo le di6 la borrachero por abrazarla delonte de los dos
perencejos. Menos mal que, aun con la juma que cargobo, Sc mantuvo en
to linea, sin propasarse. iQue habrian dicho los otros!
Se sentla tan segura junto a el y estoba tan consoda, que se qued6
dormida en sus brazos.
Lo despert6 de pronto el gran silencio que se produjo ol detenerse
el motor del automOvil, pew era tol su agotorniento, que no logr6 despabilarse del todo. Bib Mayo y los otros dos bajaron del carro dizque
porque than a tomorse el arranque. Por la brisa y los !Amos, Ulalia se
di6 cuenta de que ya amonecio y de que estaban lejos de to ciudod, en
el monte, en un rinc6n solitorio sombreodo de &boles.
Bib Mayo se be arrim6 mimosa y le dio un beso; le dijo qua 61 lo
querio muchisimo, que estaba muy contento con ella, qua le pondrfa uno
casa en la ciudad y potatin potation; pero qua todo eso requeria harto
dinero y que esos tipos eran hijos de politicos influyentes qua le dorfan
sepa Dios que contratos y sepa Dios qui puestos; 61 ibo a ser muy rico
y patatin patabn.... En fin de cuentas, que Wane tenio que ester un
rato alli en el monte con los dos perentejos,
A Ulalia se le estop& un sollozo.
ponerlo a tales cows?
eCemo,
si 61 la querio, podia ex-
Bib Mayo insitia:
—Tienes qua hocerlo pot lo dicha que nos espera en nuestro cosa
donde seremos muy felices con vorios hijos. Tienes qua comprender que
es necesarb; no hay otra solution, pues si te niegos, estos canallas te
forzarian a nacerlo de todos modos y me seria dificil defenderte yo que
estamos en un paroje solitario. Si en combio accedes, me rendiras el mos
enorme servIcio.
No tuvo ribs remedio que someterse.
Camino de regreso, el sal les puso tres mascaras biliosos.
Nadie chistabo uno polobra.
Bilo Mayo paretic, fastidiado. Ulalia crey6 verb en el rostro at enorme osco que le causoba todo aquello. Sin embargo, se preguntaba a si
mismo si le era posible seguir queriendo a un miserable coma 61. Dentro
de ella chocaban los min contradictorios impulsos. Sable que todo buena
mujer debe sacrificarse pot su hombre y par sin hijos, mOxime oun si lo
ocurrido fue con la aprobotion de Bib Mayo. Por quo angustiarse, pun,
Si desde olli en adelante ibo a sentirse feliz en la casita qua 61 =babo
de ofrecerle?
107
Sc le oguaron los ojos, de la temura; pero sentiase tan consada que
se qued6 domida.
La despert6 el frenazo del auto at detenerse frente a un pequetio
restourante de chinos.
— Comomos olgo — duo el pecoso.
Ton intenso era so hombre, que aquello invitacion fue pare Ulalia
lo mas groto que liable escuchado en toda su vida. Lleno de jObilo se
disponia a sour del auto, cuando el triguefict la detuvo groseramente:
— II-0 no! Major no bojes. Agochate pans que no te vean can
nosotros. Eres menor de Sad, y si la prenso de oposicion se enter° podria
formamos un bochinche.
Ulalia obedeci6 sin chistar, que iba a hocer? Bib Mayo ni di6 sehales de protesto. Sus rezones tendria. jPobrecito! Tel vez la falta de
dinero._ Prefirio'conformorse con la idea de que so angel le traeria uno
presito.
Pero atm esto esperonzo result6 vane.
Regresoron limpiondose los dientes.
Para elle, ni los huesos.
Arrancaron de nuevo muy sotisfechos y orondos.
El pecoso, que iba al volante coma siempre, dijo de pronto:
—Ahoro que el auto pose junto a ese cabaret donde la hallamos,
hay que echarlo. No la podemos lucir par la ciudad. Serb un escondolo.
Ulalia se le qued6 mirando o Bilo Mayo sin comprender exactamente
to que aquel hombre habio querido indicar.
Bib hizo un gesto vogo coma diciendo: "Yo no puedo hacer node.
El carro as de 61".
Ufalia crey6 at fin cornprender que lo que el tipo imaginoba era que
par haberla vista saludor a la garde.... ;Clam!
eComo explicarles la verdad? 2Carno advertiries que ella no era uno
de lies? Tol vez par ello la ultrojoron. Todo hacia suponer qua Bib Mayo
no los habia puesto al corriente de la verdod. Ulalia no lo podia creer
No era posible. Sentodo alli a su lado, Bib Mayo paretic, indiferente. Tenio que haber olguna fuerte razon para que II, aun estando ton contento
con lo de so hijo, se comportara de una monero tan indigna. Todo su
mundo de ilusiones ya comenzobo a derrumbarse, cuando at mirarlo de
108
reojo, le mato en el semblante tot angustio, que resolvi6 solvarlo del
trance:
— No to preacupes —le dijo—. Si el no quiere Ilevornos, no importa.
Podemos seguir a pie o en otro auto.
El la oferr6 poi antes hombros v enfrentanclose con ella le declare.
clnicamente:
—Lo major es que no signs haciondote Ilusiones y vayas comenzondo
• olvidorte de °quell° quo sucedi6 en el Ilano bajo la luna.
`fa estaban acerc6ndose al enorme letrero del cabaret.
—Que se prepare a bojor —duo el pease—. Le dare solo el tiempo.
necesario.
Silo Mayo sigui6 mortificandolo:
— Mejor es que regreses ol compo. Yo aqui no puedo mantenerte.
— ter nuestro hijo? — dijo elle.
seas iluso! —repuso el—. Todo eso, olvidolo. Puros castillos
en el oire. No pienses en el hijo que pudimos hober tenido. No tenerlo
es lo mejor porn ti.
— iPor que? —dijo ello, sollozondo..
—Porque hace unos semanos —contest6 el—. ml esposa, ml verdadera esposa, a quien venero y respeto, me di6 un hijo que es un primor. Por
lo olegrio que me ha caused° al tenerlo, Ilevo vorias semanas parrandeando. Par eso es preferible quo regreses a tu compo. No pienses mos en
mi. No seas tonta.
Ulalia sinti6 que el aire to faltoba. Se estabo ahogando. Sc le vino
• Jo boco la emoci6n como un golpe de sangre.
Quiso gritar y el grito se le enred6 en los dientes vuelto sollozo.
Ya el auto deteniase. Abri6 la puerto dispuesta a echarse abajo.
Frenaron el motor lo imprescindible pans que descendiese, y arrancaron de nuevo tan bruscomente que ello cay6 de bruces en el suelo.
Se qued6 alit sentado sobre sus propios pantorrillos y se neve a la
cora borlana en 16grimas sus manos sucios del polvo de la colic.
Seguramente pintorrojease todo como una mascara, pues oy6 unas
risitos sarcasticos. Eron vorios chiquillos que par creerlo loco o borrocha,
yo comenzabon o burlarse.
109
Sc levant6. Echo a ondar. 2136nde ir ahora? iC6mo iba a regresor a
su pueblo si no tenia ni medio en to foldriquera? Y Gun pudiendo volver,
no la esperabon olio el policla a su tata pore matarla a palos?
De repente, todos los poros de su cuerpo, como Los de una perm hornbriento, sintieron el olor del pescado. Vio que aun seguia en la esquina
la mujer frente a su olla. Record6 to promesa que le habia hecho la
gorda: "Tendres coma y comida. Comer6s lo que quieros". Corner, era
preciso corner a toda costa, pues alga en lo m6s hondo de su ser le deck)
que, ante todo y por todo, lo imperioso era su hombre, porque su hombre
lo era tombien del Milo que, dentro de ella, se rebelaba exigiendo su
derecho a to vida. Por eso echo a correr coma uno loco, porn caer cuanto
antes en brazos de la garde, yo que ello le ofrecia to que la vido le habla
negado avarci.
La cora de la garde fue paw Ulan@ coma un omoble osilo de redencion donde encontr6 no solo poz y bienestar sino °dem& to cuna com6n
en clue su nitio duerme plocidamente, no como Tata Dios entre uno mula
y un buey, pero si entre conciones y burbujitas de hipo.
Panom6, Febrero, 1963.
110
expetiencia ?enema(
Por MARTINEZ ORTEGA *
Transcurrido cierto tiempo de mi orribo al mundo
dijeron un die
"oficia Imente
te concedemos el uso de lo cozen;
Id al temple del saber".
Desde ese entonces
of hoblor de la libertad.
"Ante node
aprenderes e toncerlo impreso".
Socaron varies letros.del abecedario
y aplostandolos como acordeen
vi exactamente lo que deseobon mostrarme:
Libertod.
Avance remolcado como los borcos que cruzan Panama
o otros niveles del sober
donde se engordo con fechos y teorlos In libertad.
"Considerate afortunodo
vives en el hemisferio de In libertad.
Naci6 a °Hiles del Sena;
octuolmente reside en Nuevo York
contemplando Wall .Street
y dando la espaldo al Sur".
Decidi conocerla con no menos obseslen
que los embarcodos o lo Atlentida.
• Publicamos dos poernos del libro inedito de Aristides Martinez Ortega: A Menem de protests. Esto obra fue premiada en Chile en el
concurso "Arte y Universidad", organizado per la Sociedad de Escritores de Chile y lo Sociedod Notional de egresodos de In Universidod de Chile.
113
Poi a un edificio de puertas cenudas
cuyos planchados naturales dijeron llamorse funcionarios.
Condecorados de !apices ararlaban furiosamente las moquinas
mientros sus ojos rodoban por el pupitre como bolas aceitodas.
Deseo conocer la libertod! exclame.
Note con osombro que me ensefiaban los dientes
mientros porn otros movieron repetidas veces el trosero.
Uno que giroba en la silks
—majestuoso como un sistema plonetarlohizo las preguntas siguientes:
Se interesa par lo poz?
Cierra el pufb cuondo saluda?
Hoy en su familia terroristas?
Sobe Ud. confeccionar bombas?
Por que oporece en fotograf los de concentraciones pablicas?
Suele conocersele con otros nombres?
Tiene serlas particulates?
Se propane motor al Presidente Constitutional de in Reptilalica?
A sontinuacion exigieron
horror de ml propio mopamundi
poises quo apareclan en todos los manuoles de geografia.
De pupitre a oficina
peregrin6 gastando huellas digitnles;
confesando hasta los mos sonrojantes secretos de familia;
entregando fotos coma si mi proposito fuera el estrellato;
concelando impuestos qua sumaron mos de b ahorrado poro el Wale.
El primer impulso fu6 recordarles el templo del saber,
citar fechos, exponer teorfas:
cal en cuento quo habfa sido una broma.
La libertad no es mos quo una estatua en Nueva York
contemplondo Wall Street y dondo In espakia al Sur.
114
?aim° ?t7 Ant Agitate
Los objetos, ninnies, las personas
est*, vinculodos a los presogios
a tal extremo, quo una moneda antigua
o uno luciernaga infoliblemente atroen buenas nuevos.
Por el controrio, un mandatorio luciendo charretera
troe no moms de din arios fotales.
Todo lo quo vuela
ho estodo como ningEn otro ser, sea Este
onimado o inanimado, fuertemente vinculado a los presagios.
Ejemplo:
lo Ultimo quo ho olconzado el cielo
antes que los rusos
pero muy posterior a las alms de les difuntos qua resultan premiados
es el cohete,
ha sido registrado por la demoniologia
junto con los siguientes presogios
Goto negro cruzondo nuestra sombra
Sal derramodo en piso habitado
Pie izquierdo anticipado al sour de cosa con difunto
Cornejo dos veces a lo siniestra
Trebol arroncado con luna eclipsodo
Canto de buho o lechuza
Murcialago girondo frente a una ventano blonco
Gallino negro cocareando de noche
Violeta quo al caer consenn un piton
Moriposa negro en una esquino
Colmillo de culebra a la orilla del camino
Mufieca sin cobezo on una coma
Espejo quebrado en siete portes.
Agreguemos a manor° de epilogo
ue con anterioridad a los runs
pero muy posterior a los &mos de los difuntos quo resultan premiados
el cohete alcanz6 el cielo,
fud registrodo par la dernoniologio
coma pajoro de mai °oiler°.
115
POEMAS A ELLA
DE
Jose
de jesia MartCnez
Grabados de IVAN A. ZACHRISSON
PANAMA, 1963
I-IACE VA TANTO YO
How ya tanto yo que no to veo
quo st me vier° chore no podrio
quizas reconocerme. 1:l6nde he estado?
iQu6 he hecho yo durante tantas cows,
durante tanto yo, perdido y solo,
lejos de nil, viviondome en secret°,
resentido quiz6s, seguramente odiandome,
y sin decirme nod's?
118
He vuelto a ml, me oigo
respirar, collar, cosi me rozo,
estoy a mis espoldas.
Na puedo verme, pero t lo ves.
Me mires y lo ves,
est& mirandolo, me yes,
y no me dices nada.
iC6rno estoy?
Viejo, supongo. Feo.
Pregontale que quiere,
si ha vuelto solo a verte
o si to mondan a buscarme.
Pregantale quo a &ride.
No. No le preguntes eso.
No le preguntes nada.
Y hi, se me olvidaba,
jogrno esti:is?
To pareces a ti. Quieh eres?
119
PONTE AQU I
Pont. aqui, frente a ref.
Erns el cebo.
Aiwa sonrie.
Cuando yo venga, cyan& pose
por ml, besalo, corks,
quo no se escape, quiero verb.
Es una trompa que me pongo.
Collo. Cobb. Yo to oigo.
Sonde. Disimula.
Esto VOZ it lo vomos a coger.
120
AQU I ME QU I ERO
Aqui me puler° ahoro.
A ml, todo lo que soy,
todo lo que he sido, a ml,
esto en peligro vuestro padre, vuestro hijo,
ml, corriendo,
soltondo, levontondo
los tapes del recuerdo
Que nadie quede cards, quiero que todos
est& aqui cuondo arne a esta mujer.
Rodeodme, protepedme, Ilenodme todos,
asi, hinchadrne, hinchodme, el pecho sobre todo.
Mirodrne, soy voliente, doy un peso hocio ellp,
It sonrio.
121
Maadme, le sonrio,
me desnudo.
To, Jose, su boco,
y tO, Jose, °gentle los brazos.
El resto lo hare yo, pero mas, mos genre,
mes yo, cue est& tucks oqui,
quiero arriesgorme todo,
gonarme, perderme todo,
cansorrne, agotarme, collorme todc,
sotisfocerme todo, quedor ebre
de todo yo, completamente ojeno c mi que tonto odio.
Si, tit tomblen, muchocho, nine.
Mire, sus pechos
Vomos.
122
ed111
""
Art
DETRAS DE TI
Detres de ti est& tá. Eso to se
porque to no de lejos, timid°, escondiendote,
cuando te day un beso con los °jos cerrados.
Pero, eqUien mos existe? Par *mato,
den& de esto piedra come un corazdn duro,
testarudo, resentido,
deft& de esto piedra frla quo levanto del suelo,
que pregunto, quo beso...._
Frio.
Nada.
Ni sombre de la piedra.
Luego, estamos solos.
Nos han dejado afros, obandonados,
sobre este inmenso cascordn %facto.
Se han olvidado de destniimos.
No. No te muevos, no vengas hacia ml,
no pises esta tierra, ni este pIedro,
quo todo es falso, hueco, peligroso.
Agerrate fuerte de los huesos
y espera a quo yo Ilegue para quo colgamos juntos.
123
VOY A BUSCARTE DONDE TI
Voy a buscarte donde 11 y no est6s,
te busco entonces socudiendote, besandote con rabic!,
te digo cosas, te suelto mis palabros
como perros,
porque quiero una palabra que te muerda, que te ladre,
que te acose y te persiga a ml, uno palobro cruel,
una palabra sucia, of lade, terminado en i como colmillo,
una ferqz palabra hambriento que te ha olfoteado el alma,
porn qua te haga huir, venir corriendo a ml,
a esta soledod en donde se te °guard°
y donde tan dulcemente se te quiere, amada.
124
AMOR, COMO A TRAVES
Amor, can° a troves de tin agujero,
asomado a mis ojos todo el die,
me espi6 los pesos y la vide mks,
la voz y el corazen con quo to quiero.
Qulse saber que folso derrotero
me ho trofclo o ate estodo de agonfo,
y con mirarme cuando to vela
me baste pare ver por quien me muero.
Conspirers' en ml corazen quo to amo;
cerrore el ojo flue me pida voile
y pateare mi pie quo husmee tu huello.
Me mordere la lengua si te llama
y huire de ti, de hl omorosa muerte,
asi pada lo vida al irme de ella.
125
MI CORAZON ME EMBISTE
Mi corazon me embiste los pulmones
y por irse de ml y hosto tu pecho
me muerde todo en su recinto estrecho,
cumin tu nombre y broma sus posiones.
Amenozondo o mi alma sus pitones
y consodo de hoblorme sin provecho,
yo te lo suelto, pues, y te lo echo
y cedo co sus violentos empujones.
&telt° tu cuerpo, omor, y sal corriendo,
clue a desbocodo trote, echondo humo,
y hombriento, pero fuerte, pero flaco,
golopo a ti mi corozon mugiendo;
busco lamer tu piel, chuporte el zumo,
pastor en ti y dormir en tu soboco.
126
ve
nZaammulS
•Mar "ZS
ta”1191
INS.1104
.
HECHO DE PURA PIEL
Hectic de pura piel, parado afuera,
no me desprecies por buscor ml alma,
no me abandones par buscarme adentro,
no exIste node adentro, era mentiro,
odentro existe solomente un hueco
par donde pueden verse las estrellas
aun en piano die, par donde entre
un silencio que suena como
un ensordecedor, un gran silencio.
Tdcame. Este soy yo. No to sables?
Esto bien. To lo perdono.
!He estodo solo durante tanto tiempol
Este soy yo,'mirendote, aqui, afuero.
Na exists nadie tras de mis ojos.
Yo soy mis ojos.
Lo so. Na lo sables.
Pero mho, lo que he hecho mientras tanto,
todo b que desde antiguo lie hecho
amindote de lejos mientras buscabas ml alma.
Sf. Yo existlo. DIsimulabo solamente. Par vergilenzo.
Pero hoy o tierra es mia, y to la day. Te omo.
127
TU, FRENTE DE LA VIDA._
Td, frente de la vida, amor mojado, tir e
yo,espaldmurt,cenizasol
cuando te toque yo se habre cerrado,
nervio con nervio, un gran circuito electric°,
de manero qua al fin podnin los dngeles
llama, a los infiernos por telefono.
Vestida, td, acortinada puerto de la vide,
desnudo brozo, yo, mortal pato cerrado.
Voy a Waldo a media cloche, urgente,
host° qua chirrien gozne y hueso y te abros,
porque detrds de ti, huerfano
Moro bajo el umbral un nirlo exposit°.
128
SUPONGO QUE VENDRAN MARANA
Supongo que vendren mationa o recogernos.
(Mora estomos ocostados).
Que no nos von a dejor, que tit misma
vas a despertarte y llevarte, quo yo mismo
me obrith to puerto y me vere solar sin decirme nada.
A menos quo to y yo nos fuggsemos por el suer%
a motion°, a ayer, a nunca, a ayer, a ayer,
al tiempo en donde yo no vive nadie,
donde son los dios como cuortos desocupodos,
donde el sol no se pone ni coliento.
129
Quo divertido fuera
venir million° a despertarnos y yo no egor,
y olvidarnos de nosotros, no amarte mos,
no vernos més, rehuimos,
en tont° que to y yo, desde aqui,
desde ayer, cogidos de la mano r sonreidos,
estariamos mirandonos, buriOndonos
de coma envejeces tO, de coma trabajo yo,
de c6mo no nos amamos, de como ni siquiero
se han dado cuenta de que nos fugamos.
No voy a cederte al tiempo.
Ahora es en serio que te lo digo.
No voy a cederte a ti. Ni siquiera a ml te voy a dor.
Vomos a sa I irnos del desf lie,
vamos a doblar por una esquina del tiempo.
Nos vamos a quedar aqui,
a ver qu6 pnsa.
130
ttA
•
CUANDO ANTES DE DORMIR
Cuando ontes de dormir depositamos
a los pies de la tarde el mutuo afecto
con qua en el dia nos miramos, cuando
abondonamos en el tiempo los recuerdos
seguros de las prozimas venturos,
to explicark lo ciue con ello hacemos:
Qua aqui en la vie° se amo todavlo
par nosotros to schen los muertos.
Qua la gente se miro y se sonde
par nosotros lo soben los muertos.
Quo el pan, la sopa, los zapatos nuevos,
par nosotros lo schen los muertos.
Quo hay sal Gun y hierba y eine y aire
par nosotros lo soben los muertos.
Los muertos
todos los noches salen a encontrar
los dies quo mandamos de regreso
y lo qua an ellos va de nuestro vida,
to qua de ella olvidamos, lo qua de alto nos sobro,
131
que o los muertos les sirve de alimento
con que se mutt-en pora pot- to menos
presentorse con cierto decoro
en to memoria de los vivos.
Es per nosotros quo recuerda el mundo
por otros iguales 0 nosotros.
Amarne dulcemente, proveedoro,
con generoso, alegre despilforro,
con nuevo amor todos los dios,
pore ir dejando en los viajeras tordes
cosi no usodos besos,
cosi no usodo omor,
que aNgtin die tis y yo
comeremos nuestro propio ofecto.
132
NUESTRO RECUERDO NOS RECUERDA
Nuestro recuerdo nos recuerda y mire
y se pregunto por lo que hemos hecho
con aquello tan dulce quo nos dieron.
Los recuerdos recuerdan,
bien quo al reeds, hocio adelonte,
y tU y yo, los dos oquellos de aquello noche tibia y fresco,
giron on poco In cabeza y nos yen como somos ohoro.
Y quiz& nos esperen, generosos,
pare quo con &los comportomos
esa dicho de ser, de ester ahi
el urvo frente al otro.
Nos esperan. Estoy seguro de ello.
133
eQue vomos a decirles el die en que muramos,
el die en que tengomos quo ir a recogerlos
paw Ilevarnolos de alll a lo muerte?
&adder a encontrornos de la mono,
muy obiertos los ojos perm poder reconocemos,
y con esos ojos miraran los nuestros,
con esos ojos grandes, llovidos, iaocentes.
No posoremos por chi. Tendremos vergOenza.
Daremos la vuelto, moriremos
pensondo en algo lejos de esa noche.
Y ellos se quedoran. Nodie ira a recogerlos.
Men solos coda vez. Llegaran a buscar a otros recuerdos,
y a ellos nodie. Creer6n que hemos olvidodo
y no podran creed°. Creeran entonces que nb existen,
que no hen existido nunca, quo son sueno.
!legman rambler', la genre recien muerte,
a buscor sus sueries hermosos pora aparecer mas buenos.
Y a ellos nodie. Creeran que son milagro.
Tendran seguramente miedo.
Pero sonrelran, se opretaran las manos.
Y asi, quo queden pore Dios, o pore perfumer,
hechos fontasrnas ye, oire tibio, respirodo,
las noches frescos de verano.
Porque fue una noche de verano, si mol no b recuerdo.
Pero no, yo no los quiero recorder. Podrion yams.
134
ACUERDATE DE MI
Acuerdate de ml cuando te acuestes.
Quiero hobitor tu pensamiento entonces
pore porarme rigido en su entrodo
y guardarte ty suerio y tu reposo
libre de pesodillas y fantasmas.
LI6mome sin temor al pensamiento
que yo saldre a rondar tu dulce frente
apagando tin tiltimos recuerdos
y a vigilar tu plcicido abandon°.
Si desde el suerlo entonces se me coe
o tu mejilla uno anti; urn beso,
lo espantares, creyendolo uno mosco,
y seguir6s durmiendo sin sentirme.
Toda la noche en vela, contempldndote
desde tu sueño , =or, que sere mio,
estar6 m6s tranquil° y satisfecho
ml curio° sin limite y mis celos.
Oh, suefia, piensa en ml cuondo te ocuestes.
135
EL MOMENTO MAS GRAVE
El moment° mos grave de mi vida
es cuando en la colic Ilueve y poreciera
que alga regreso arrepentido;
cuando Ilueve en la calle, cuondo el tiempo
que antes se iba de prisa, se guarece
en nuestra hobitacien y nos vicia el aire de misterio;
cuondo Ilueve, cuando (Amos
caer ese sonido sabre la pie! que entonces
sabemos es tombien la nuestra
y a ti te do tin escolofrio
y yo sonrio porque sé que ahora
no te podros yo ir hasta que escampe;
amada, cuondo llueve y el tiernpo se detiene
o esperor que escampe
y Ie hurgarnos los haws, recordando,
pora ver que contrabando se Ilevabo,
y nos besamos largo, entrecortado, suave,
como si les chupasemos los huesitos a los minutos
y de pronto hay un minuto grave
que resulto que tenia ganos de Iloror,
y Dora,
136
y Mora y se consuela an nuestro beso;
cuando a lo lejos cae un trueno y sonretmos
porque nos buscan pero no podrifin hollamos;
cuando te amo, cuando estes desnuda, cuando flints
cuando el pecho se nos mojo de temuro,
cuondo estomos solos, cuando suena el telefono
y nos acucia el p6nico de clue nos hayan encontrado,
de que sea Dios, la muerte, el funcionario del orden,
pero no contestomos y quedamos serios
y Ilueve serio y fornicamos
coma buenos hermanitos,
como muriendonos o encontr6ndonos
o como despidiendonos, golpeendonos,
dando albadonazos....Y me duermo despues, y t6 despues,
y despierto a tu lado y ha escampado,
y me hundo, escondo entre tus brazes,
y t6, amantisima, sondes
y to duos amar.....
131
COMENTARIO AL ESTUDIO SOBRE MARIANO OTERO
REALIZADO POR EL PROFESOR RICAURTE SOLER
Par GREGORIO CARRILLO
Con el Mule de EL PENSAMIENTO SOCIOLOGICO DE MARIANO OTERO, aporece en el n6mere uno de la Revista Cuadernos Americanos
(enek-febrero,
comprencler, sino transformer a
base de un liberalismo efectivo.
La labor de transformacion la asigna Otero c lo naciente burguesra qua luchabo por superer
at estrecho marco de la estructura
casi feudal heredada de la colonic. Ese prop6sito de transformodon demoliberal era la preocupocion de cosi todas las figuros
mos representatives del liberalismo hispanoomericano de la epoco.
1960) un estudio quo sabre este
socielogo hispanoamericano de la
primera mitad del siglo XIX ho
publicada el Profesor Ricaurte Soler.
Apenos asoma el lector a ins
primeras Ifneas de este escrito,
note In manifiesta intencien del
autor de demostrar c6mo en el
siglo XIX, a pesar de la regateada originalidad de que han sido
victimas los pensadores hisponoamericanos, hay pensamientos come el de Otero qua coinciden en
olgunos °species baslcos con las
mos prominentes doctrines contemporaneas.
Otero toma coma fundomento
de su posicion saciolOgica las relacionss econamicosociales, come
las determinantes de la estructura
politico y moral de cualquier noden, incluyendo a la mexicana.
Seg6n 61, las relaciones de orden
material son: lo distribucien demografica, las condiciones de la
agriculture, del comercio y de la
industr1a. Para hablor mos claramente, esas relaciones constituten
to estructura de to propiedad. Pero el estedo politico no derive
estaticamente de In distribucion
de la propiedad, sino clue es la
distribucion de la propiedad la
que angina to divisi6n de la sociedad en closes. Estes closes entran en pugna par la defense de
sus intereses.
Sintesis del pensamiento de Otero.— En una sintesis, muy apreteda par cierto, trataremos de
hacer resoltar to modular del pensamiento de Otero, expuesto en at
Ensayo del Profesor Soler.
SegOn Soler, to obra de Otero
aparece como consecuencia de bodes los circunstancias negatives
imperantes en la epoca (caudillisrno, dictadura, anarquia), situaci6n qua no solo era necesario
140
cone, es valioso. Sus ideas tienen
el merit° de ser onteriores a otros
pensomientos con los cuoles coincide en puntos balms, y quo son
pensamientos quo hay ocupon lugar prominente on el °terve cultural universal.
Luego hoce Otero uno estrotificacien social muy numerosa. No
obstante la proliferacien de closes
bosquejadas por Otero se puede
Ilegor a una clasificacen generica de dos grondes grupos: las
closes propietorias y Oros no proDietaries o proletariodo. A ellos
agree°, pot ciertas rezones, a la
close militor y a lo extranjera comerciol.
Creernos quo no hay node extraiio en la coincidencia quo puede posenterse en un momenta
dodo en el pensomiento de algunos pensadores realistas. Elio es
explicable or lo sencilla mien
de quo la reolidad plantee problemas quo no of recen mayor dificultod de coptacen par° las
monies ogees avezados en la interpretacion de la dinemico social.
Otero consider° quo la (mica
close con selidos fundomentos en
cuanto a los relociones materiales es la close media y es por eso
por lo quo todos las demos esbin
condenados, sew:in el, a desoperecer histericomente del escenorio
politico.
En opinion de Soler, Otero utilize on su aporte sociologic° uno
serie de conceptos cientificos, en
un grado de desarrollo no °Iconzado haste entonces on Europa.
Sin embargo, no descarta la posibilided de quo la close no propietaria puede °seiner al poder
politico, pero son sus condiciones
de miserio, ignorancia, etc., los
clue le vedan la posibilidod de influir en el progreso y la libertad.
A esos grupos solo les queda el
comino de ser redimidos.
ApreciaciOn personal.— Americo ho side calificada de esteril
pore lo germinocen de los ideas
par olgunos pensadores europeos.
Con el proposito de dor un mentis
o ese criterio despectivo, un grupo de intelectuales hisponoamericanes se ha dodo a la torea de
desentrorlor To quo de original
hay on el pensamiento hispanoameripano y de explicar edemas,
la razOm de par que este Densemiento se aleja de la metofisica.
En cuanto a las closes comerciente y militar °firma qye la
primer°, par set improductiva, y
la otra par constituir una °menace, contribuyeron al atroso economic° y politico de la nacen.
Como yo dijimos, la closificocher' closisto de Otero fovorece
a la close media. Considero el,
quo la sociedod deberla set transformed° y quo lo Unica quo estaba en condiciones de hacerlo,
medionte el desorrollo del capitalism° y desde el poder politico,
era la close media. El poder politico en manes de la close media
favorecerio al proletariado, y al
ospecto espiritual de lo sociedad.
Al grupo de intelectuoles aludidos, pertenece Ricourte Soler
quien desde sus °lies de estudionte se inice on esto foena; prueba
de elle es el contenido de su tesis porn obtener el grade de profesor.
Creemos pues, quo la rozon counted° prim6 sobre otros, porn
quo se °Heiner° lo investigocion,
y luego la publicocien del estudio
sobre Otero.
Importooeio del Pensonsiento de
Otero, El °eerie realizado pot
Otero a la cultura hispanoarneri-
141
Aunque sabemos que Soler no
intentoba estoblecer relaciones y
diferencias entre el pensamiento
de Otero y el marxismo, censemiento este Oltimo i con el cual las
ideas de Otero guordon gran relation, si intent/5 Soler, y esto lo
pruebo el final de su ensayo, demostror como tombien en Hisaonoomerica se dabon pensamientos
a tono con otros de reconocido
merit° universal, sin que medians
influencia tontine° olguna.
clusiones ontiteticos no son prpductos de la subietividad. Par el
contrario, la tonic° sigue siendo
la concepcion realista de in saseeded. concepcion realistic a lo
que Marx denominO Concepcion
Materialism ° de la Historic.
Sabemos quo mientros en cosi
rode Europa la close burguesa
surgia coma close revolucionaria,
transformando o la sociedad en
sus diferentes manifestaciones pot
medio de nuevos tecnicas y formes de producci6n, en Espana la
neo•escoldtica predominoba; as
decir Espolia preferia refugiorse
en los cosas puramente espirituales delando muy atres el aspect°
material, como olgo secundario.
Esto situacien se hizo extensiva o
los colonies hispanoamericanas de
tal forma quo cuando en casi todo Europa la burguesio jugoba
papel importante despues de la
Revolucien Industrial, en America
esta burguesia °penes si comenzabo a despertar.
Con todo, consideramos quo haber explicodo el por que de olgunas diferencios entre Marx y
Otero, hubiera contribuido a reso ltor ins cualidades peculiares
quo ubican a Otero entre los socitSlogos mos serlos y respetables.
Hoy en el pensamiento de Otero un principio quo es uno de los
pilares de su pensamiento s y quo
Soler resalta consciente de clue
tambien es uno de los principoles pilares del marxismo: "Las relaciones materiales determinan el
proceso social, porn el hombre determine a su vex esas relaciones
maser's:les".
Asi pues, mientras la burguesio
en Europa pretendia mantener inmumbles sus principios para defender sus interests,. en Americo
ella puede romper los moldes imperantes; de °Ili quo Otero considerara a lo nociente burguesio,
came close revolucionorio y estuviero analizondo o la sociedoct
de su epoca en la forma quo verdaderamente le correspondio.
Estoblecidas las similitudes, fattaron los diferencias. Pensamos
quo vole in pena considerarlass
porque ellas explicon, a ml Melo,
los rezones por las cuoles en America no Sc die un pensomiento
de riles actualidad s anterior ol
que pocos ems despues se pest'sria en Europa, y porque estas
mismas rezones explican dam
Otero sabre recoger las manifestoclones social's de so tiernpo.
Tai no, y lo subrayamos, si en
las colonias hispancomericonos el
desarrollo social hubiera sido
al de Europa, podriamos
deck con Silva Herzog, quo si
Otero hubiera escrito en Londres
o on Paris, su nombre habria alconzado hace tiernpo fame universal.
Otero abogo par el desorrollo
de lo close media coma close
revolucionoria. Marx abogo par el
desplazamiento de esto close del
poder politico, par son reaccionasic/. lie aqui la diferencia fundamental entre dos pensadores quo
poseen en muchos aspectos ideas
similores. Sin embargo, estas con-
Con todo, vole deck, quo Otero, no obstante ser liberal, trospas6, en ospectos importantes, las
fronteros de ese pensamiento pa-
142
Criticas a "EL AHOGADO" de Tristan Solarte
Volume!' de la coleccion Anaquel de la Compaiiia General
Fabril Editor°. 170 Sines.
De LA RAZON, Buenos Aires Argentina
El aislamiento, la desconexien
en quo viven los poises de America Latina alcanza, en gran
medida, a la literature. Este puede explicar la sorpresa con que
el lector descubre la existencio de
un escritor de la Jerarquia de
Tristan Soforte, poeta y novelist°
de Panama, a troves de esto novela "desgorradoro, intense y duicc", come la califico apropiadamente Luis Alberto Sanchez. El
libro gira en torno de la investigation realized° por un medico
paw descubrir al osesino de un
joven poeta. El episodio — quo
no es explotado en su naturalezo
policiol-- es utilized° par el no velist° pow realizar un lento,
minucioso, vioje por el peso& (el
suyo, el de Rafael, el muerte, el
de los vecinos, el del pals); para
intentar una explication lirica sabre el mecanismo de la creation
poetic° y el amor y pare hurgar
en las entretelas de los posiones
nobles y de las otras. Todo elle
envuelto, o inmerso, en un clime
tropical de mar y de selva, saliendo, a veces, de la realidad
pare entrar a la leyendo, tratando con identica fomiliaridad a los
&webs y demonios, a la historio
de los navegontes como a la de
los financlstas descubridores o
explotadores de tan generoso
geografia. "El chogado" es, en
sumo, un testimonio antiguo y
reciente, escrito con pasien y
sorprendente habilidad literaria.
De SERALES, Revista de los intelectuales cat6licos
argentinos. W 138, Septiembre, 1962.
Toda obra literaria debt ref lejar apropiodamente el media en
quo se sitaa el autor y °donde
se propene desarrollar lo action
y ubicar a bs personales fruto
de su imagination; en lo posible
Estes no hem de ciporecer desf
gurados o demasiado ideolizodos,
sino naturales. En su tiempo nuestro Horatio Quiroga reuni6 come
escritor eso doble condition; nunca dej6 de expresar en sus cuentos la esencio de la colored° tierra misionera, presentandones personales con dimension humane,
yo fueran normales o pn5ximos a
I 43
o per los caminos en pos de una
esperanza.
Despuis de leer El ahogado,
pensomos que...sobron motives pore consideror o Tristan Solorte
coma un novelista capacitada pare el goner° y justificamos se lo
consider° come a uno de los yelores nuevos de las Ultimas promociones de Latinearnerica, A la
distancia sigue las huellas dejados par Rernulo Golieges, Ciro
Alegria o Jorge Amado, lo que
constituye w personal acierto.
Manuel Rojas en w libro. El Orb& siempre verde ha dicho quo
"la buena prow no necesito odornos y la male queda poor si se
la adoma". Tristan Soled° posee
la buena prose a quo se refiere
la cita del escritor argentine-chileno, razors valedera pora quo in
el alW 1953 El cloned° mereclew el premio Ricardo Miro.
la muerte. En este sentido la novela Jo Tristan Solorte El chessdo confirm° lo antedicho, se Ilona lograda. Se of inn° en uno
realidad y reconoce sin lugar.
Coincide plenamente con lo dada
por cierto par los preceptistas. Es
sine narracian desgorrodora en la
quo se palpo el pueblo rudo de
Beces del Toro, olvidado rincon
de Panama, menos que pueblo aldeo, par dortde.tronsitan los hombres y mujeres de Tristan Solarte
hosta traspasarse de mar, viento
stir y estrecheces, terminando
par consubstonciarse con la bravia naturaleza. Son predestinodos
wyos gestos y costumbres de alguna monera se asocian o protonden osociarse al poisaje. El novelist°, con austere prose que no
sabe de amaneramientos, los ha
recortado a conciencia bojo la
luz de los foroles o en los cows
HORACIO S. BARCELO.
III
De LA PRENSA, Buenos Aires, 2 de Septiembre de 1962.
ohogado", coma el paisoje.
De
una poesio acre, penetrante, quo
hace pensar en las fermentociones de la vicioso tierra tropical,
donde la belleza es con frecuencia °mato de la podredumbre y
donde la muerte este °gouged°
alli donde la vide of rece sus mos
exhuberantes frutos. Ese paisaje,
es° poesla, encore° on el protogonista de esta novela, un poeto
adolescente, de la estirpe de los
poetos malditos, en el cuel las
condiciones artisticas se revelan
prematuromente, al iguol que sus
impulses vitales, conviviendo en
su interior los Jimmies del ensueno y los demonios del instinto.
No nos dice el outer si Rafael,
protagonist° de la novela, es un
poeto wrrealista. Por lo quo sebemos de sus versos, podembs
conjeturar que no; pore, coma los
[doles de los surrealistas —Rim-
Volioso oporte a la noyelistico
hispanoomericana, quo se va integrando bojo el signo de la diversided. Diversidad de poisojes,
diyersidad de gentes. Esta vez es
la America tropical le quo se mete on lo literature con esta obra
de Tristan Solorte, cuya occion se
desorrolla en la isla de Bocas del
Toro, a cuyos castes fabulosas arrib6 Colon un die en busco del
sehado y onhelado peso de las
Indies, perdiendose entre los marovillas de aguel enorme orchipielogo, situado al norte de Poname, cuya privilegiado situacion
geograf ice le *Merged° singular
popel en la historic del continente, y quo conserve su caracter
de paisaje excepcional, gravitondo, con su belllezo y su horror y
su misted°, en sus habitantes.
Poesia y !eyelid°
Novel° inquietante asto de "El
144
baud, Lautreamont—, es un poeto nirlo, y olgo osi coma un vaho
surrealist° flora en "El ahogado",
pose a su enfoque de novel° policial, qua se inicio con el misterioso asesinato de Rafael. Pero en
la bOsquedo del asesino lo quo
en reolidad busco el color, por
media de un medico amigo del
poet° quo toma pora 51 la pesquiso, es lo recendito del espiritu de
aquel poeto net* entregado, en
una especie de liberocien de extranas fuerzas ocultos de su noturoleza, a la poesio m6s pure a
la vez quo al mes turbio sensualismo. De ahi quo se inteme en
zones de misted() y de sombre en
las que vo descubriendo, ya que
no el asesino, lo verdodero personalidad del juvenil poet° asesinado.
En el material onirico quo el
autor emplea en la construccion
de su relato, se ocentao su matiz
surrealist°, coma rambler, en algunas de sus oudaces imegenes,
mos podriamos decir quo ello va
par dentro, contribuyendo a dor
a sus peginas un oire de modernidad, sin aspirar a romper los
inoldes tradicionales de la novel°.
Adernas, Tristan Solorte enroiza
so dramatic° —y en ocosiones
olucinante historio, no solo en el
poisaje sino rambler) en la leyendo, que es fobula del paisaje: la
leyenda de "La Tuliviejo", donde
radio:, el titulo de la novel°. Rafael, el poeto asesinodo, se sontic identificodo con un personaje
de °quell° leyenda cuando deck,:
"Yo soy el engendrado a orillo
del rio, el Ahogado....".
V. de P.
IV
EL AHOGADO HACE SEAAS
(Tornado de tetras, W 2,
Montevideo, Uruguay - Diciembre 1962)
Pot CARLOS MARTINEZ M.
Tristan Solorte, el autor de El
Abogado (Fabril Editor°, Bs. As.,
1962, 163 pp.) es panameno y
se llama, en la vida real, Guillermo Sanchez. En el encuentro de
escritores de Concepcion (Chile,
1960) jug6 con esa doble identided osi coma con lo doble vertiente de so vida —alga de esteticismo coma escritor, mucho de
rnilitancia coma latinoamericono— pore sostener lo fundamental esquizofrenio del creador Iitereria.
Garcia Lorca y, en muchos sentidos de fascinacion ejercida dodivosamente, so emulo. La invesflaccid') quo propane su muerte
se obre sabre obismos mucho menos prometedores. La novel° indoor, esa doble far quo hace el
embaucamiento personal, desde lo
juglaresco en primer piano haste
as aberrociones oscuras y subyocentes del ser. Nano& segan sucesivos testimonios de parte, el
libro se excede en una unidad
(la de estilo literario) que no deberio hober tenido tan cerradamente; y decoe en otras, dejondo
cabos sueltos y abismandose, on
la Ultima cecina, sabre un final
enigmatic° quo da la idea de quo
podrio orrancar alli mismo una
segunda historic, la del poeto y
sus relaciones con el norrador
trasvisible que clousuro la prime-
El Owned° ilustra —y no autobiogretficamente— un coso paretic° y a rotos tenebroso de esquizofrenia en otro creador intolectuol. El protagonist° del libro,
sabre cuyo muerte a fojas ono se
obre In novel°, es un joven poeto
superdotodo, sutil, coutivonte, arrebarador, exquisito; devoto de
145
y contiene fuerfes poderes de solicitacidn tendidos hada el lector. Hoy en 61 temperature fisica,
un paisaje geognifico y onimico
realmente febril, coliglne, pathos.
Algunos de sus momentos, en quo
el estib del novelist° se distiende
a todo fuerza, son brillantes, come el episodio de Bocas del Brago y Auntie Rose (p. 65) quo hocc pensor en libros tan ilustres coma A high wind Jamaica; o como la estupenda prose de narrodor que puede leerse a peiginos
154 y 155.
Solade es un hombre cluieto;
sigiloso, profundo, contemplative
haste la holgazaneria, descuidado
de si y de la fame, fatalist°, remote. Su lector, sin embargo, querria de el luego de El shooed°,
est° minima perseverancicc la
que lo !lever° a escribir, ye hay
en SU modurez, el libro pleno quo
justificara el buen, use de fades
los dones quo andan sueltos, trajinados y a rnenudo cootizados en
este novel° de juventud.
Hoy ma zone no resuelta, y
es to de los compromisos de to
novel° con la verosimilitud, punt°
que su carectir de encuesta suscito y no cumple; y punto, par lo
denies, que est6 insito en todo la
novelo, vistos los ligemenes del
genero con la estetica del naturalism°. Una escrituro colorido y
prepotente homogenize demasiado
a los personales en torno de Rafael --Unita inconfundible, solitario de puro imperioso y singular— y olgunos de ellos, come
el equivoco Orlando, resulton Inapresobles a troves de un operate de percepciones y de imaginaciert que indudablemente son
los de Solarte y se le sobreaplican, no los que El tendria pare
explicorse y vivir.
Mos alio de estos reparos, y el
quo genericamente puede hocerse o 0 lgunos momentos en quo la
prow se deja inficionor de lo poemalice no estrictamente novelesco, El ahogado se lee con avidez
•*
SOLER, RICAURTE: [studios sobre Historia de Is Ideas en America,
Imprenta Nacional Panama, 1961. 177 Pass.
(Tornado de to "Revista de Filosofia de la Universidad de Costa Rica", Vol. III, Wm. 10,
San Jose, Costa Rica, Julio-Diciembre 1961).
Por CONSTANTINO LASCARIS C.
ricono; El Pensamiento Socio1691co de Mariano Otero; Premises
porn una interpretacion del Pensamiento Files6fico de Hostos.
Bien trabados y expuestos con
rigor muestron dominio y hondo
retie:den. Quisiera aprovechar esto noto pare inciter al autor o to
preparacien de una obro de conjunto sabre la Filosofia en America, que fuer° at mismo tiempa
de gran amplitud erudite y de
vision sintetica, par consideror quo
ha probed° ser un estudioso copacitado pare realized°.
Ricaurte Soler se ha mostrodo
par sus estudios come uno de los
mos destacados conacedores del
pensamiento filos6fico en America; de algunos yo se ha hoblado
en este revisto, y por supuesto en
muchas otros. Aber° ha recogido
en un volume) cinco estudios quo
son: Criterio historiografico poro
una Historia del Pensamiento
Americano; Presencio de la America Latina en la Conciencia Europea; Justo Arosemena y el Positivism° Autectono Hispancome146

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