concejo municipal aprueba por unanimidad propuesta

 CONCEJO MUNICIPAL DE SAN MIGUEL APRUEBA POR UNANIMIDAD PROPUESTA DE MODIFICACIÓN AL PLAN REGULADOR COMUNAL
En esta semana el Concejo Comunal de San Miguel aprobó por unanimidad la modificación del Plan Regulador Comunal que propone una nueva forma de entender el desarrollo urbano del territorio. Lo primero es agradecer al Concejo por sus aportes y compromiso y a los vecinos y sus organizaciones por sus consultas, sugerencias e incluso críticas, las que nos permitieron desde una etapa de Participación Temprana, comprender y priorizar los aspectos que debían considerarse en una modificación urbana de esta envergadura. Ahora corresponde el envío del proyecto de modificación del Plan Regulador a la Secretaría Ministerial de Vivienda y Urbanismo de la Región Metropolitana y esperamos su resolución favorable a nuestra propuesta.
San Miguel es una más de las 32 comunas del Gran Santiago y como tal, está sometida a los procesos urbanos que nuestra ciudad sufre: crecimiento poblacional desmedido, segregación económica que crea barrios para ricos y barrios para pobres, un enorme falta de áreas verdes, problemas viales y de tránsito, colapso en las redes sanitarias, falta de infraestructura y equipamiento que acoja servicios básicos, pérdidas patrimoniales invaluables (como la que afectó a nuestra comuna en la demolición de una de las casa donde se construye la nueva Corte de Apelaciones y algunas de las edificaciones de las bodegas de la Viña Concha y Toro, donde el municipio pudo salvaguardar las valiosas cavas subterráneas) y finalmente una ciudad cuyo crecimiento queda más en manos del mercado y las plusvalías que afectan a los terrenos.
Así vimos como San Miguel desde los años noventa hasta la fecha, fue cambiando su fisonomía. De la comuna habitacional próxima al centro pasamos a los flujos de Gran Avenida, a las construcciones de 20 pisos en la mayoría de nuestros barrios y a las consecuencias que todos los días apreciamos y ya mencionamos anteriormente, pero que en concreto, se traducen en una pérdida de la calidad de vida de sus habitantes, que desean avanzar hacia la modernidad, pero con respeto a una historia y modos de vida que nos han caracterizado.
Por ello nos dimos la tarea de repensar nuestra comuna.
Este nuevo Plan Regulador avanza en dos temas relevantes: primero pone límites a la altura máxima de las edificaciones estableciendo zonas de 10, 8 y 5 pisos como máximo, eliminando la altura máxima de edificación sólo limitada por la aplicación de la rasante, hoy vigente. Por otra parte se establecen densidades máximas, cambiando la normativa actual, la que sólo define un mínimo de habitantes por terreno. Con estas dos medidas, sumadas a la definición de zonas patrimoniales y nuevas áreas verdes y equipamientos entre otras cuestiones relevantes, esperamos como Comuna absorber de manera armónica el crecimiento poblacional, mantener el carácter de nuestros barrios, modernizar el espacio urbano y sobre todo, generar un espacio de diálogo que nos permita entrar en una segunda fase en la planificación urbana participativa, en donde, junto a los vecinos y las organizaciones y sin la presión inmobiliaria desmedida, podamos pensar en detalle qué otras normas o acciones se requieren para que San Miguel siga siendo un espacio del barrio, inserto en una ciudad que ya camina en el siglo XXI.
JULIO PALESTRO VELÁSQUEZ ALCALDE MUNICIPALIDAD DE SAN MIGUEL