Las calles de Alcoy conservan un importante legado modernista

Transcripción

Las calles de Alcoy conservan un importante legado modernista
El Dominical
DOMINGO, 11 DE MAYO, 2008
J.LL.A./M.V.
A
caballo entre finales del siglo XIX y
principios del XX, Alcoy fue escenario de una irrepetible conjunción de
elementos. La combinación entre la
estabilidad política y el «boom» industrial generó un periodo de insólita prosperidad, que ha dejado como
principal legado un patrimonio arquitectónico irrepetible: el modernismo alcoyano. Una burguesía emergente e ilustrada llenó la ciudad de
piezas de gran valor artístico, que recogían las influencias del modernismo catalán, en una época en la que
Alcoy y Barcelona mantenían una relación constante a causa de la industria textil. Las calles del centro de la
ciudad son actualmente una completa exposición de un estilo, que igual
se refleja en los grandes edificios institucionales, que en las casas dedicadas a viviendas particulares. Casi
desconocido para los grandes ➜
La edad
de oro
JUANI RUZ
◆ Las calles de Alcoy
conservan un
importante legado
modernista, que es
fruto de una época
en la que la ciudad
vivió momentos
de gran pujanza
industrial
Elisa García, propietaria de la Casa del
Pavo y nieta del pintor Fernando Cabrera,
en la escalera de este edificio modernista
Entrevista
Y además
Economía
Vivienda
JULIO FEO ZARANDIETA
Cuándo se come aquí
Ex secretario general de la Presidencia del Gobierno
MIGUEL ÁNGEL DE GREGORIO
PRESENTA SUS VINOS
EN EL RESTAURANTE
MIRAMAR DE VILLAJOYOSA
LAS EMPRESAS MÁS POTENTES DE
ALICANTE SALEN «EN AYUDA» DE LA
BANCA Y MANTIENEN DEPÓSITOS
QUE FACILITAN SU SOLVENCIA
TRES DE CADA DIEZ PERSONAS
DE LA COMUNIDAD QUE
COMPRAN UNA CASA LA
PAGAN EN EFECTIVO
«HABRÍA QUE HACER UN GRAN
PACTO DE ESTADO CON EL
AGUA Y DEJARSE DE BATALLITAS
ENTRE COMUNIDADES»
La semana
Bolsa y mercados
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2 El Dominical
Domingo, 11 de mayo, 2008
➜ LA EDAD DE ORO DE ALCOY
◆
➜
circuitos turísticos, el modernismo
alcoyano es una joya oculta, un mundo en el que se combinan los conjuntos espectaculares con los pequeños detalles aislados de diseños muy
elaborados, que pasan casi inadvertidos.
Tras los sucesos revolucionarios
de «El Petrolio», en 1873, la ciudad
inició lo que algunos historiadores
definen como una auténtica reconstrucción. Este tramo final del siglo
XIX coincide con un despegue industrial, protagonizado por un sector textil que se beneficia de la apertura del mercado de Cuba y de la incorporación de nuevos sistemas productivos que aumentan la rentabilidad. Simultáneamente, va ganando
peso la industria papelera, que adopta los últimos avances tecnológicos y
gana espacio en el escenario nacional. Surgen en Alcoy grandes fortunas, una nueva burguesía quiere hacer patente y público su estatus y para ello, recurre a la construcción de
nuevas viviendas o a
Una burguesía
realizar grandes reformas
emergente dejó su
en casas ya
huella en edificios
existentes. Simultáneasingulares a principios
mente, esta
del siglo XX
sociedad
próspera genera nuevas instituciones y clubs sociales, cuyas sedes son también el reflejo de estos tiempos de abundancia
y de renovación estética.
Este fenómeno estrictamente local
coincide con el arranque del modernismo catalán. Dos arquitectos, el
contestano Timoteo Briet y el alcoyano Vicente Pascual, harán de correa
de transmisión entre la capital catalana y Alcoy y se encargarán de traer
este arte nuevo. Sin estas dos figuras
resulta incomprensible el modernismo alcoyano. Los dos estudian con
los grandes maestros catalanes, entre
los que figura Doménech i Montaner, arquitecto del Palau de la Música Catalana y gran teórico de este
movimiento.
De la unión de todos estos elementos surge una auténtica explo-
sión de creatividad. En poco más de
diez años -entre 1905 y 1915- la ciudad es escenario de un gran boom
urbanístico y arquitectónico, que
además se concentra en un número
muy reducido de calles de su casco
histórico. Los alcoyanos enriquecidos
por la industria quieren que sus nuevas casas estén en las calles más importantes y vías urbanas como San
Nicolás y San Lorenzo se convierten
en el reflejo del nuevo poder.
Resulta técnicamente imposible
hacer un catálogo completo del patrimonio modernista alcoyano. Aunque esta arquitectura tiene un grupo
selecto de obras emblemáticas, este
estilo impregna a centenares de inmuebles del centro y del casco antiguo, que con menor o mayor fortuna, incorporan elementos característicos, desde una verja de un balcón a
un modesto zaguán, en el que una
escalera o una lámpara sorprenden
al visitante.
La Casa del Pavo es, sin ningún
genero de dudas, la obra más representantiva y conocida del modernismo alcoyano. Este edificio, situado
en la calle San Nicolás, es un ejemplo de lo que aquel movimiento definió como «diseño total». En este inmueble, cuya construcción se terminó en 1908 se da tanto valor al proyecto arquitectónico como a la ornamentación. Metales, maderas, mosaicos y piedra se unen hasta crear
un conjunto sorprendente con las
inevitables y continuadas referencias
a la naturaleza, Esta obra, realizada
por el omnipresente Vicente Pascual, trae al centro urbano de Alcoy
la inevitable referencia del modernismo catalán. En el diseño definitivo
de este inmueble jugó un papel importante el pintor Fernando Cabrera,
yerno del propietario, que instaló en
la casa su estudio. La nieta del artista, Elisa García, es a sus 80 años la
propietaria del edificio, y la que ha
tenido la iniciativa de colocar una
pancarta recordando el centenario de
la construcción. Afirma sentirse
«muy orgullosa» de la casa, al tiempo que elogia a los arquitectos de antaño, «que competían por ver quien
hacía un edificio más bonito», asegu-
En la primera fotografía, un detalle del antiguo parque
de bomberos. En la segunda, la figura del pavo que da
nombre a una casa. En la tercera, jardín del Círculo
➜ Cuatro joyas arquitectónicas
◆
CASA DEL PAVO
Ubicada en la calle San Nicolás, esta casa
tiene la mejor y más variada ornamentación
modernista de Alcoy. El inmueble, diseñado
por el arquitecto Vicente Pascual, cumple
este año su primer siglo de vida. En este
edificiotuvo su estudio el pintor Fernando
Cabrera, que intervino en el diseño.
PALACIO JUAN CANTÓ
Actualmente está ocupado por el
Conservatorio de Música y Danza. Se trata
de uno de los ejemplos más representativos
de este estilo arquitectónico. Su
construcción terminó en 1906 y tiene como
signo original que el mismo edificio estaba
destinado a fábrica y vivienda.
Entre la protección
la totalidad de los edificios
Teóricamente,
modernistas de Alcoy figuran dentro
del catálogo de inmuebles protegidos.
Además, sobre ellos pesan las restricciones de la declaración de Bien de Interés Cultural que tiene todo el casco
histórico de la ciudad. Sin embargo, en
la práctica este patrimonio ha sufrido
numerosas agresiones y, con el pasó
del tiempo, se han perdido piezas de
gran valor. Especialmente significativo
resulta el caso de la sede de la Sociedad
El Trabajo, un edificio de 1906 construido por el arquitecto Timoteo Briet.
Hace siete años, este inmueble fue demolido para construir un bloque de viviendas, sin que se tuviera en cuenta
que sobre él pesaba el máximo grado de
protección. Esta misma situación estu-
vo a punto de reproducirse en dos casas
situadas en la Avinguda del Pais Valencià, que iban a derribarse para construir
pisos. Las denuncias del grupo municipal del Bloc, cuyo portavoz es el historiador Paco Blay, lograron que la empresa constructora conservara las fachadas. Sin embargo, sí se han perdido entradas y escaleras que contenían valiosos elementos de interiorismo Art Nouveau, tanto en madera como en hierro
forjado.
Junto a la protección, el otro gran reto que afronta el modernismo alcoyano
es el de su explotación turística. Hay
que señalar que actualmente los edificios más emblemáticos están cerrados
al público y se destinan a usos particulares o institucionales. Unicamente se
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JUANI RUZ
En la primera foto, un detalle de una fachada. En la
segunda, escalera del palacete Cantó. En la tercera, la
gruta del Círculo Industrial
JUANI RUZ
CÍRCULO INDUSTRIAL
Aunque la sede de este club social remonta
sus orígenes a finales del XIX, a principios
del XX incorporó destacados elementos
modernistas de la mano del arquitecto
Timoteo Briet. Destaca la biblioteca, que
conserva diferentes elementos del mobiliario
Arte Nouveau.
EDIFICIO DE LA CAM
Este inmueble de cuatro plantas está
directamente relacionado con el auge
industrial de la ciudad, que hizo posible la
creación de una caja de ahorros local.
Construido en 1909, ocupa toda una
manzana, y en el acceso principal tiene una
magnífica escalera.
y las agresiones
efectúan programas esporádicos de visi- ada en Cataluña, que promueve los vatas, organizados desde el Ayuntamiento lores y la conservación de este patrimoo por otros colectivos.
nio arquitectónico. A esta organización
El actual gobierno municipal de Al- también pertenece el municipio alicancoy está desarrollando
tino de Novelda.
un intenso plan de
Mientras el moderpromoción turística, El Ayuntamiento
nismo ha convertido a
en el que el patrimo- quiere potenciar el uso
Barcelona en una aunio modernista jugará
téntica potencia turísun importante papel. de este patrimonio
tica mundial, Alcoy toEn la oferta de la ciu- como atractivo
davía está lejos de esdad al visitante ya se
tos niveles de explotapropone una ruta mo- turístico
ción. Sin embargo, la
dernista por diferentes
ciudad quiere convercalles de la ciudad, que conservan algu- tir este legado arquitectónico en un elenos de los edificios más destacados. mento más para abrir una nueva vía de
Asimismo, Alcoy ha quedado incluida desarrollo económico. A esta oferta
dentro de la denominada Ruta Europea añadiría el importante patrimonio en
del Modernismo, una organización cre- arqueología industrial.
ra. La Casa del Pavo resume a la perfección todas las líneas estéticas del
movimiento modernista. Su fachada
es un universo en el que se entrecruzan elementos vegetales y representaciones estilizadas de animales, sin
olvidar las obligadas referencias modernistas a la figura femenina. En el
interior del recinto, se ofrece al visitante todo un catálogo del Art Nouveau, desde la majestuosa escalera, pasando por el mueble más modesto.
Si la Casa del Pavo es el edificio
más popular, el palacete de Juan
Cantó es el inmueble más valorado
por los expertos. Se trata de un conjunto, también diseñado por Vicente
Pascual, que se construyó íntegramente en 1906, por lo que no tenía
ningún tipo de condicionamieto previo. Simboliza como ningún otro la
unión entre la industria y la arquitectura, ya que en un mismo bloque se
reunía la fábrica y la vivienda de sus
propietarios. Todo el edificio es de
piedra, como era habitual en la arquitectura alcoyana de la época. En
las fachadas que dan a la calle destacan los remates curvos, las esquinas
reforzadas con chaflanes y los miradores metálicos. Hay que señalar
que este edificio fue objeto en la década de los 80 de una completa restauración con el fin de convertirlo en
la sede del Conservatorio Municipal
de Música y Danza. Fue una reforma
muy respetuosa, que ha permitido
conservar elementos de gran valor,
como los suelos, la escalera central y
las pinturas modernistas de las paredes.
Junto a las casas burguesas, en las
que se perfilaba un nuevo concepto
de la vivienda, el modernismo alcoyano también dejó un legado de edificios institucionales, en el que destaca la actual sede de la Caja de Ahorros del Mediterráneo. Datado en
1909 y realizado por Vicente Pascual,
este inmueble nació para acoger la
primera caja de ahorros de la ciudad.
En el diseño de este gran bloque de
cuatro plantas se reprimieron voluntariamente las veleidades estéticas
modernistas, para darle un toque de
mayor seriedad oficial. Se trata de un
contundente volumen prismático de
líneas muy ordenadas. En el interior
destaca la gran escalinata central. A
punto de cumplir su primer siglo de
vida, esta obra arquitectónica iniciará
en breve una nueva etapa, ya que se
convertirá en un complejo, que albergará un museo de arte contemporáneo, un centro de investigación del
campus alcoyano de la Universidad
Politécnica de Valencia y un salón
para la celebración de congresos.
El Círculo Industrial es otro de los
legados de esta época de pujanza
económica que han tenido continuidad a través del tiempo. Este club social, al estilo de los clásicos clubs ingleses, es además un buen ejemplo
de modernismo alcoyano. El proyecto inicial es de Timoteo Briet, que es
también el responsable de la fachada. El otro gran arquitecto modernista, Vicente Pascual, diseña la primera planta. La geometría y las referencias a temas vegatales se combinan
en este inmueble, que repite el motivo escultórico de la abeja, como
ejemplo de
laboriosidad,
en
unos La marca de este estilo
tiempos en arquitectónico ha
los que existía una au- quedado repartida por
téntica divini- centenares de edificios
zación del valor del traba- del casco histórico
jo. En el interior del recinto, destacan la escalera y
la biblioteca, que conserva lámparas
y mobiliario originales. El Círculo
también conserva frescos realizados
por el pintor Fernando Cabrera y un
jardín.
Junto a estas obras emblemáticas,
el modernismo alcoyano ofrece una
inacabable lista de creaciones, que
llenan el centro de la ciudad. Este estilo arquitectónico dejó su huella en
la actual sede de la Unión Alcoyana,
construida como parque de bomberos. En las calles San Lorenzo, Avinguda del País Valencià y San José se
suceden inmuebles en los que se refleja este estilo caracterizado por la
libertad estética. Es un catálogo vivo
sobre un arte y una época muy especial, en la que Alcoy estaba en
vanguardia.

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