Los estragos del paludismo ( PDF , 838 Ko)
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Los estragos del paludismo ( PDF , 838 Ko)
estragos Los del paludismo El paludismo causa estragos en Asia, Latinoamérica y, sobre todo, en África donde el cómputo de muertes alcanza un 90% de las causadas por el paludismo a nivel mundial, principalmente de niños pequeños. En este continente, la enfermedad no es sólo una catástrofe sanitria, sino que constituye también un freno sustancial para el desarrollo económico y social. África en primera línea El Plasmodium falciparum es el parásito responsable de las formas más graves del paludismo y está presente en toda la zona tropical. Si la enfermedad está mucho más extendida por el continente africano, es debido principalmente a la eficacia de sus vectores, en particular los mosquitos Anopheles gambiae, los cuales viven durante más tiempo, pican con más frecuencia y se alimentan casi exclusivamente del ser humano, mientras que otros prefieren alimentarse de los animales. Comercio de medicamentos en un mercado en Senegal. La lucha contra el paludismo ocupa la primera partida de gastos de salud pública en muchos países de África subsahariana. Conscientes de la carga que esto representa para sus economías, los gobiernos de África han empezado ya a dedicar más recursos a la lucha antipalúdica, de conformidad con las resoluciones de la Cumbre de Abuja en 2000. En otras partes del mundo El Sureste asiático, América del Sur (en particular la región amazónica) y Oceania (Papuasia-Nueva Guinea, islas Salomón, Vanuatu) registran un 10% de las muertes causadas por el paludismo a nivel mundial. La importante urbanización ha contribuido ampliamente al retroceso del paludismo en estas regiones, donde se mantienen brotes simples de la enfermedad. Las zonas endémicas del paludismo son relativamente poco numerosas en esos continentes. Los adultos, al no estar expuestos permanentemente a los parásitos, no desarrollan ninguna inmunidad y contraen a menudo la enfermedad tras haber sido infectados por los parásitos. Consulta médica en una región rural en Bangladesh. Una carga económica El paludismo es un gran obstáculo para el desarrollo socioeconómico. La enfermedad obstaculiza la escolarización de los niños y reduce sus capacidades futuras. Es fuente de un alto absentismo laboral que conlleva una pérdida de productividad nada despreciable. Según la OMS, el paludismo ralentiza un 1,3% al año el crecimiento de África. El paludismo es, a la vez, una causa y una consecuencia de la pobreza. La diferencia económica se agudiza a lo largo del tiempo entre los países afectados por el paludismo y los países que no lo están. Los medios de lucha puestos en práctica contra esta enfermedad parecen entonces insignificantes con respeto al coste humano y económico de la enfermedad, cuyo costo estimado es de más de 10.000 millones de euros. El paludismo, un freno para la escolarización (Camerún). El paludismo, un obstáculo para el crecimiento económico de los países más pobres del planeta.