CAMAWA - Plan de Vida - Observatorio Étnico Cecoin
Transcripción
CAMAWA - Plan de Vida - Observatorio Étnico Cecoin
2 PLAN DE VIDA DEL PUEBLO WOUNAAN Y SIEPIEN DEL BAJO SAN JUAN “ M A A CH THUMAANKHUN DURR” EL TERRITORIO DE TODOS NOSOTROS ASOCIACION DE AUTORIDADES WOUNAAN DEL PACIFICO -CAMAWAORGANIZACION REGIONAL EMBERA WOUNAAN -OREWA- INFORME FINAL DEL PROYECTO DEL PLAN DE VIDA DE LAS COMUNIDADES INDIGENAS DEL BAJO SAN JUAN ASOCIACION DE AUTORIDADES WOUNAAN DEL PACIFICO -CAMAWA- ORGANIZACION REGIONAL EMBERA WOUNAAN -OREWA- Presentado a BID-PLAN PACIFICO Comunidad de Papayo, Bajo San Juan Diciembre de 2000 AGRADECIMIENTOS Al BID-PLAN PACIFICO, en especial al Dr. RONALD PRADO, por su importante gestión frente al Proyecto del Plan de Vida. A la OREWA, especialmente a su Asesora ESPERANZA PACHECO y a LINO MEMBORA, por su apoyo durante la realización del Proyecto. A todas y cada una de las comunidades Wounaan y /Siepien/ de la zona del Bajo San Juan por su importante participación. A las Fundaciones Hablaescribe y Norte Sur –Turismo Social, en especial a la Doctora Olga L. Herrera por el apoyo logístico brindado. A la Bióloga y Amiga Clara Ines Henao ( Coordinadora del Convenio FES-Artesanías de Coombia) por su permanente asesoría y apoyo. A todas y cada una de las personas e instituciones que apoyaron este Proyecto. TABLA DE CONTENIDO PRESENTACION 1.DIAGNOSTICO GENERAL 1.1 Localización General 1.2. Territorios y límites 1.3. División Actual de los Resguardos Indígenas del Bajo San Juan 2. PLAN DE VIDA DE LAS COMUNIDADES DEL BAJO SAN JUAN 2.1. El origen de los Wounaan y los /Siepien/ 2.2. Los mundos del universo Wounaan y /Siepien/ 2.3. Los territorios ancestrales de los Wounaan y los /Siepien/ (ver Mapa) 2.4. Otros relatos de la tradición oral Wounaan y /Siepien/ 2.5. Rogativas de la creencia religiosa Wounaan y /Siepien/ 2.6. Las fiestas y bailes tradicionales de los Wounaan 2.7. Otros cantos de la tradición Wounaan y /Siepien/ 2.8. El vestido de los Wounaan y /Siepien/ 2.9. Pintura facial y corporal 2.10. Adornos personales 2.11. Lo que dice la prehistoria y la historia sobre el territorio tradicional de los Wounaan y los /Siepien/ 2.12. PROBLEMAS SOCIOCULTURALES 3. EL DESARROLLO PARA LOS WOUNAAN Y SIEPIEN. 4. MISION, POLITICAS Y PRINCIPIOS OBJETIVOS Y METAS ESTRATEGIAS 5. PROGRAMAS 6. ACCIONES Y PROYECTOS 7. PLAN DE INVERSIONES PRESENTACION DIAGNOSTICO GENERAL DEL TERRITORIO WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN 1 1. DIAGNOSTICO GENERAL DEL TERRITORIO WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN 1.1 Localización General Actualmente, los territorios de mayor poblamiento de la etnia indígena Wounaan, se localizan en las zonas centrales de la región del Pacífico de Colombia; en las cuencas baja y media del río San Juan (Municipio Litoral del San Juan), hasta la Serranía Wounaan al norte y Bahía Málaga al sur (Mipio. de Buenaventura) (Mapa 1) Algunas comunidades Wounaan habitan en el bajo río Atrato y en otras zonas cercanas a los límites entre Colombia y Panamá. En el país, los Wounaan alcanzan una población cercana a 11.000 habitantes, y en la República de Panamá se aproximan a los 2.000 habitantes - entre las generaciones que migraron desde Colombia a mediados del siglo XX y sus descendientes-. En las últimas dos décadas, los territorios de las comunidades Wounaan del centro Pacífico de Colombia, mediante su propia gestión organizativa y de la OREWA Organización Regional Embera Wounaan-, se han dividido en las zonas de jurisdicción de sus correspondientes Cabildo Mayores: Zona del Bajo San Juan, Zona del Medio San Juan, Zona de Serranía Wounaan. Los territorios de mayor poblamiento de la etnia /Siepien/, se localizan en los ríos del sur del Pacífico, en los Departamentos del Valle del Cauca, Cauca y Nariño; con mayor población en los ríos Micay, Saija y Sanquianga. Sin embargo, durante el siglo XX, hombres y familias /Siepien/ migraron y se establecieron en el Bajo San Juan. 1.2. Territorios y límites La Zona del Cabildo Mayor Wounaan del Bajo San Juan (CAMAWA) -Asociación de Autoridades Wounaan del Pacífico, desde enero del 2000 -, cubre la totalidad de Resguardos Indígenas y territorios tradicionales Wounaan y /Siepien/ del Delta del río San Juan y el resto de la cuenca baja hasta sus afluentes Copomá y Tordó, y hasta el río Pichimá al norte y Bahía Málaga al sur del Delta. La zona del bajo río San Juan está actualmente poblada por 24 comunidades pertenecientes la mayoría (20) a la etnia Wounaan pura y una minoría (4) a la etnia Wounaan con mezcla /Siepien/; distribuidas en 14 Resguardos Indígenas constituidos por el Estado colombiano a través del INCORA, que suman una extensión de 93.405 hectáreas (Mapa 2). Sin embargo, los territorios ancestrales de las comunidades Wounaan y /Siepien/, se extienden mucho más allá de los Resguardos, por lo que el área de influencia de CAMAWA incluye otros territorios indígenas ancestrales, algunos de los cuales están actualmente en solicitud de constitución y ampliación. 2 3 4 Los Resguardos Indígenas y otras áreas de los territorios ancestrales en solicitud de constitución y ampliación, colindan entre sí. De esta manera, los territorios indígenas del Bajo San Juan, conforman un continuo geográfico de aproximadamente 100.000 hectáreas. A su vez, estos territorios continuos de los Wounaan y Siepien, colindan y se intercalan con los territorios tradicionales de las comunidades negras o afrocolombianas que actualmente están en proceso de titulación colectiva; proceso liderado por sus Consejos Comunitarios y organizaciones de base: ACADESAN en el Bajo y Medio San Juan, ONCAPROTECA en el río Calima y los Consejos Comunitarios de Bahía Málaga. Los territorios Wounaan y /Siepien/ de la zona del Bajo San Juan limitan: • • • • Al occidente con el océano Pacífico. Al nor-occidente con los territorios indígenas y negros de la Serranía Wounaan, en jurisdicción del municipio del Bajo Baudó (Dpto. del Chocó). Al nor-oriente con los territorios indígenas y negros del medio San Juan, en jurisdicción del municipio de Istmina (Depto. del Chocó). Al sur con los territorios negros del Bajo San Juan, Bajo Calima y Bahía Málaga, y con los terrenos de la Base Naval, en jurisdicción del municipio de Buenaventura (Depto. del Valle del Cauca). 1.3. División Actual de los Resguardos Indígenas del Bajo San Juan Los Resguardos Indígenas han sido constituidos desde 1981 a una comunidad, pero dos factores han dividido a algunas comunidades en dos o tres, varios años después de la constitución de sus Resguardos (Tabla 1): • Los límites político-administrativos entre los municipios del Litoral del San Juan y Buenaventura, como es el caso de la comunidad de Pitalito, de la cual se separó Chamapuro en el Resguardo de Nuevo Pitalito, por tener mayor acceso a recursos y apoyo del departamento del Valle del Cauca. • Los problemas socio-culturales ocasionados por personas foráneas que involucraron a algunas comunidades en una religión evangélica, como es el caso de: Burujón, San Bernardo y Guarataco en el Resguardo Burujón Unión San Bernardo; Chagpién, Durrapdur y Chagpién Tordó en el Resguardo de ChagpiénTordó; y Pángala y Unión Guaimía en el Resguardo de Santa María de Pángala. A cada comunidad le corresponde un Cabildo Indígena local, que dirige y gobierna a las familias y personas pertenecientes a la comunidad. 5 Tabla 1. Comunidades y Resguardos Indígenas del Bajo San Juan COMUNIDADES RESGUARDOS Extensión (hectáreas) Jurisdicción Departamental Chagpién – Tordó 22.460 Chocó ZONA NO DELTAICA Chagpién, Chagpién Tordó y Durrapdurr Pángala y Unión Guaimía Taparalito y San José Guayacán Valledupar Pitalito Santa María de Pángala 9.500 Chocó Taparal Santa Rosa de Guayacán En solicitud Nuevo Pitalito 14.212 Chocó Valle del Cauca Valle del Cauca Chocó y Valle del Cauca ZONA DELTAICA Puerto Pizario Puerto Pizario Chachajo Chachajo Papayo Papayo Burujón, San Bernardo y Guarataco Cerrito Bongo Buenavista Tiocilirio Balsalito Togoromá Pichimá Burujón Unión Bernardo En solicitud Buenavista Tiosilirio Unión Balsalito Togoromá Pichimá 2.478 3.381 San 6.960 2.469 4.560 4.325 8.640 9.024 Chocó y Valle del Chocó y Valle del Chocó y Valle del Chocó y Valle del Valle del Chocó Chocó Chocó Chocó Chocó Cauca Cauca Cauca Cauca Cauca 6 1.4. Suelos, cultivos e inundaciones Pese a que los suelos del Bajo San Juan, presentan baja fertilidad debido a las altas precipitaciones y la escorrentía (Mapa 3), brindan suficientes nutrientes a los sistemas agroforestales que desde tiempos ancestrales han manejado las comunidades indígenas de la zona. Mediante la técnica de tumba y pudre, las familias cultivan uno o más terrenos de varias hectáreas de extensión. Las comunidades indígenas del Bajo San Juan tienen en la agricultura su principal fuente de alimentos energéticos y reguladores. Los cultivos de papachina, banano, caña de azúcar, maíz, yuca, arroz, piña y otros frutales, aportan carbohidratos y vitaminas esenciales en la nutrición del pueblo Wounaan. Las precipitaciones sucedidas en la última década debido a los cambios climáticos globales y los fenómenos continentales llamados “El Niño” y “La Niña”, causaron graves y largas inundaciones en las cuencas de la región del Pacífico colombiano. Los pobladores del río San Juan San Juan sufrieron los efectos de las inundaciones sobre sus cultivos, los cuales ocasionaron pérdidas reflejadas en la disminución de áreas, enfermedades de las plantas y escasez en las cosechas de papachina, banano, caña de azúcar, yuca, entre otros cultivos de orilla del río y quebradas. La más grave consecuencia de las inundaciones en las comunidades Wounaan es la falta de alimentos que los hace más dependientes de los productos alimenticios industrializados, cada vez más costosos y fuera del poder adquisitivo de las comunidades. No obstante, este no es el único riesgo que corren las comunidades con la inundaciones, también pueden perder sus viviendas (Mapa 4). En esta realidad, es urgente recuperar la producción agrícola Wounaan en la zona del Bajo San Juan, mediante un proceso que se debe iniciar con proyectos que aporten soluciones inmediatas a la agricultura y nutrición de las comunidades más necesitadas de la zona. Se deben plantear la capacitación y participación activa de las comunidades en los procedimientos de selección de semillas, adecuación de terrenos, siembra, control, mantenimiento y cosecha de importantes especies de cultivos, mediante una adecuada y permanente asistencia técnica. Es necesario brindar capacitación a agricultores y líderes de las comunidades en la implementación de especies de cultivos importantes en la zona; seleccionar semillas y adecuar terrenos para la siembra de papachina, banano, caña de azúcar, yuca, maíz, arroz, piña, borojó, limón y coco. Igualmente, es importante hacer control y mantenimiento apropiado de terrenos y cultivos al nivel de las familias más necesitadas de las comunidades, desde la siembra hasta la cosecha. 7 8 9 1.5. Aspectos generales de la Vegetación de la zona del Bajo San Juan La zona del Bajo San Juan se encuentra entre los 0 y los 100 m de altitud, presenta una precipitación media anual de 6.900 mm y una temperatura media anual de 25.5oC, la humedad relativa está entre el 90 y 100% (IDEAM, 1998) (Mapa No. 5). Según el sistema de clasificación de Holdridge, esta zona de vida corresponde a bosque muy húmedo tropical (bmh-T), y en ella se encuentran diferentes tipos de cobertura vegetal, desde los ecosistemas estuarinos en las desembocaduras del río San Juan, hasta el piedemonte de la coordillera occidental en las cuencas medias de los mayores quebradas o ríos afluentes del San Juan (Mapa No. 6). El Delta del río San Juan tiene aproximadamente 800 Km2 de extensión y una línea costera cercana a 44 Km de longitud, incluyendo las áreas de agua del río, sus brazos, esteros y bahías estuarinas (Sánchez y Alvarez, 1997). Las unidades fisiográficas descritas por Restrepo y Correa (1995) en el Delta del San Juan son: playas traseras, cordones litorales, planos intermareales, bancos de canales de marea y pantanos de condiciones dulces. En los ecosistemas estuarinos crecen manglares de borde en los que domina el mangle (Rizophora spp.) y el árbol Nato (Mora oleifera), con asociaciones de mangles (Pelliciera rhizophorae) y Avicennia germinans (Sánchez y Alvarez, 1997). Entre los poblados negros de Charambirá y Cacagual, el sector interno de los esteros está dominado por manglares en asociación con árbol Nato y el helecho Chigua Macho (Acrostrichium aureum), y más al interior por el árbol Palo Loro (Rubiaceae) y la gramínea Cortadera (Bravo et al., 1998). En las playas intermareales de Boca San Juan, donde ha muerto el manglar, invaden el arbusto Majagua (Hibiscus tiliaceus) y gramíneas entre las que se encuentra la Caña Brava (Gynereum sagittatum) (Sánchez y Alvarez,1997). En los ecosistemas terrrestres, sobre terrazas y colinas bajas, crecen bosques de Guandal o Mangual. Este bosque es definido como una comunidad edafohídrica sobre suelos aluviales, periódicamente inundados por aguas dulces y ligeramente influidos por aguas salobres (Martínez, 1996). Esta comunidad vegetal presenta cierto grado de homogeneidad debida a la abundancia de árboles de algunas especies de la Familia Myristicaceae (ej. Cuángares) y de Sajo (Camnosperma panamensis), Sande (Brosimun utile) y Guina (Carapa guianensis) (Martínez, 1996). 10 11 12 13 1.6. Caracterización de hábitats de cultivos y de aprovechamiento de plantas y animales Las comunidades concentran las actividades de recolección de plantas, la pesca y la cacería a las áreas de Resguardo, sin embargo sus pobladores también cubren áreas aledañas o alejadas a la zona de resguardo en la consecución de sus recursos (Tablas 2 a 9). Las áreas de recolección se extienden sobre diferentes formaciones geomorfológicas y coberturas vegetales, las cuales son definidas por las comunidad como los diferentes tipos de hábitats en los que se encuentran las especies de flora y fauna silvestres. Bajos: ocupan la mayor extensión de las áreas dentro y fuera de los Resguardos. Corresponden a las vegas o terrenos planos localizados a orillas del río, quebradas y esteros, y en tierra firme alejados de las orillas de estos cursos de agua. En los ecosistemas estuarinos los bajos están cubiertos por Manglares y Natales. En los terrestres están cubiertos por cultivos, rastrojos y bosques llamados Guandales que son dominados por árboles Cuángare, Machare y por la Palma Naidí. Los cultivos más comunes encontrados en los bajos son Papachina, banano, caña de azúcar y piña. Rastrojos: corresponden a las áreas de cultivo abandonadas que originalmente estaban cubiertas por Guandales. Firmes: son bajos ubicados en zonas no inundables la mayor parte del año, sin embargo se pueden inundar por acción de lluvias, crecientes y mareas. En los firmes se han establecido las comunidades indígenas y negras de la zona con sus cultivos. Manguales o Chambatales: son bajos en terrenos pantanosos que permanecen inundados o muy húmedos la mayor parte del año debido a los mismos factores. Lomas: son colinas bajas de aproximados 20 metros de altitud sobre el nivel del mar, cubiertas por Guandales y localizadas cerca del río, algunos esteros y las partes baja y media de las quebradas. Estas lomas se encuentran cubiertas por monte explotado correspondiente a bosques muy intervenidos por la explotación maderera, que se encuentran en un estado de suceción de aproximadamente 20 años. Montañas: son las colinas de mayor altitud, entre 35 y 100 metros sobre el nivel del mar, localizadas en las cuencas altas de los ríos y quebradas más extensas. Están cubiertas por Monte Recuperado que corresponden a bosques llamados Sajales y Sandales en los cuales dominan respectivamente los árboles Sajo, Sande y la palma Milpesos. 14 Playas: corresponden a las playas arenosas y fangosas de las desembocaduras del río San Juan. Están cubiertas por manglares, Cuángariales, palmas de Naidí, Jicra y otras especies herbáceas como la Caña Brava. Algunas comunidades negras han establecido sus caseríos y cultivos en las playas traseras, por encima de la línea de pleamar. Tabla 2. Especies silvestres alimenticias utilizadas por las comunidades y su estado de abundancia (A) o Escasez (E). Nombre común Bareo Caimito del monte Castaño Chigua Chocolate de monte Churima – Dokichó Coronillo Enchijo Granadillo Guamo – Ooiphethój Hobo – Kijobú Lulo Madroño – Bodachó Níspero - Konjó Pepa de pan- Pambú Rabo de puerco- Porpopomierjoj Rosalia – Nenjobú Sande – Leschbú Surunjo Uva – Phitó Palmas Amargo – Achok Cabecita Chacarra Chontra – Chorbú Don pedrito Jicra Mil pesos – Sokarjhó Naidí Táparo Familia Sterculiaceae Sapotaceae Myristicaceae Cycadaceae Sterculiaceae Mimosacea Melastomataceae Passifloraceae Mimosacea Anacardiaceae Solanaceae Clusiaceae Sapotaceae Moraceae Mimosacea Especie Theobroma sp. Chrysophyllum sp. Compsoneura atopa Zamia chigua Herrania cf purpurea Inga cf thibaudiana Bellucia auxinanthera Passiflora vitifolia Inga sp. Spondias mombin Solanum sp. Garcinia madrunno Chrysophyllum sp. Artocarpus communis Inga sp. Estado E E A A E E E A A E E E A E E A Mimosacea Moraceae Passifloraceae Moraceae Inga sp. Brosimun utile Pourouma chocoana A E A A Arecaceae “ “ “ “ “ “ “ “ Welfia georgii Ammandra decasperma Bactris sigmoidea Aiphanes simplex Oenocarpus mapora Manicaria saccifera Oenocarpus bataua Euterpe cuatrecasana Attalea cuatrecasana A A E A A A A E A Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 15 Tabla 3. Especies maderables utilizadas por la comunidades y su estado de Abundancia (A) o Escasez (E). Nombre común – nombre Familia Especie Estado Wounaan Aceite Agua miel Ají Algarrobo – Mephorpá Aliso Amargo – Achok Anime Balso – Phothab Barbasquillo – Doiupa Burilico Caimito – Thujó Calbón Camarón – Carampá Carrá – Jenimbú Caraño Castaño – Mejoibú Cauchillo – Kauschphá Ceibo o lana brujo – Ierbú Chachajo Chachajillo Chalde Chanul – Chanó Chaquiro Charambirá Chimbusa Chispero o docín – Simbú Chocolatillo Chontra – Chorbú Churima – Dokichó Color – Colorphá Costillo – Kasphá Cuangare Dinde Dormilón – Machebú Encibe Errechichi Garrapatillo – Karpajõ Genené Guamo de monte – Ooiphethój Guamo querré Guasca Güina Guayacán amarillo–Chicuará Guayacán negro –Jurbupusch Hobo – Kijobú Clusiaceae Combretaceae Fabaceae Caesalpinaceae Tilaceae Arecaceae Burseraceae Bombacaeae Mimosaceae Annonaceae Sapotaceae Calophyllum longifolius Terminalia sp. Andira sp. Hymenaea palustris Belotia panamensis Welfia georgii Protium sp. Ochroma lagopus Pithecellobium jupumba Xylopia sp. Chrysophyllum sp. Bombacaceae Burseraceae Myristicaceae Euphorbiaceae Bombacaceae Lauraceae Lauraceae Meliaceae Humiriaceae Celastraceae Magnoliaceae Lauraceae Mimosaceae Sterculiaceae Arecaceae Mimosaceae Huberodendrom patinoi Trattinickia aspera Compsoneura atopa Sapium sp. Apocynaceae Myristicaceae Moraceae Mimosaceae Lachmellea speciosa Iryanthera sp. Chlorophora tinctoria Pentaclethra macroloba Chrysobalanaceae Caryocaraceae Mimosaceae Mimosaceae Lecytidaceae Meliaceae Fabaceae Olacaceae Anacardiaceae Hirtella triandra Caryocar amygdaliferum Inga sp. Inga sp. Eschweilera pittierii Carapa guianensis Centrolobium paraense Minguartia guianensis Spondias mombin E Jaboncillo – Jabonphá Jigua comino Jigua negro Lana Machare Rubiaceae Lauraceae Lauraceae Bombacaceae Clusiaceae Isertia pittieri Nectandra sp. Ocotea cernua Pseudobombax squamigerum Symphonia globulifera A E E E E Aniba perutilis Ocotea sp. Guarea sp. Saccoglotis procera Goupia glabra Dugandiodendron sp. Ocotea oblonga Pithecellobium sp. Theobroma sp. Aiphanes simplex Inga cf. Thibaudiana E E E E A A E A E A E A A E E A E E E E A E E E E A E A E E A E E A E E E E A E A E E E 16 Meliaceae Clusiaceae Hypericaceae Clusiaceae Flacourtiaceae Moraceae Moraceae Bignoniaceae Guarea mancharra Rheedia madrunno Vismia cf obtusifolia Chrysochlamys floribunda Laetia procera Brosimun rubescens Ficus sp. Arecaceae Sapotaceae Oenocarpus bataua Chrysophyllum sp. Ochnaceae Euphorbiaceae Lauraceae Moraceae Anacardiaceae Cespedesia spatulatha Hieronyma chocoensis Nectandra sp. Poulsenia armata Tapirira guianensis Tiliaceae Moraceae Lauraceae Mimosaceae Meliaceae Apocynaceae Apocynaceae Simaroubaceae Mimosaceae Annonaceae Mimosaceae Anacardiaceae Lecythidaceae Moraceae Bombacaeae Myristicaceae Vochysiorceae Sterculiaceae Lauraceae Flacourtiaceae Moraceae Apeiba membranacea Artocarpus communis Macharro Madroño – Bodachó Mancha mancha Manglecillo Marcelo Mare Matapalo Matecillo Mecerré Mil pesos – Sokarjhó Níspero – Konjó Ocharjo – Nenjorbú Pacó Pantano Palo Blanco – Pabau Palo Damagua – Therijubú Palo jabón ó Cedro macho Palo Paletón Palo Loco Palo Tortuga–Koodpha Peinemono–Phokabú Pepa de pan – Pambú Perena Pichindé – Hurbú Piyalde o pialde Plátano – Thaschpá Popa Purga Rabo de puerco – Porpopomierjõj Rayado Rosalía – Nenjobú Sajo Salero – Takarpá Sande – leschbú Sapotolongo –Noceibú Sebo Sorogá Teta vieja Toabe Tortolero–Torcaspha Uva – Phitó Vaina Weguer –Wigirbú Yarumo – Osirbú Bombacaeae Arecaceae Cecropiaceae Pithecellobium longifolium Trichilia sp. Himalanthus articulatus Couma macrocarpa Simarouba amara Inga sp. Xylopia sp. Inga sp. Campnosperma panamense Lecythis ampla Brosimun utile Pachira acuatica Virola sebifera Vochysia ferruginea Sterculia aerisperma. Aniba sp. Lacistema sp. Pourouma discolor var chocoana Matisia sp. Astrocaryum standleyanum Cecropia sp. Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). E A A E A E A A A A E A A E E E A A E A E E E A A E E A A A A E E E A E E E E A A E E A 17 Tabla 4. Principales especies artesanales utilizadas por las comunidades Nombre común y Wounaan Fibras Amargo – Achok Cabecita – Opuajó Cargadero Chocolatillo Damagua – Therijubú Iraca Jicra o Jicara Matamba Piquigua Pita Potré Quitasol Tetera Weguer –Wigirbú Tintes Achiote – Bija Jagua Mangle Nato Puchicama Uva- Phitó Maderables Aceite Balso – Phothab Carrá – Jenimbú Chachajo Chachajillo Chanul – Chanó Charambirá Chimbusa Costillo – Kasphá Dinde Encibe Guayacán amarillo Güina Jigua comino Jigua negro Lana Machare Mare Níspero – Konjó Palo Blanco – Pabau Plátano – Thaschpá Popa Salero – Takarpá Taná Toabe Familia Especie ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) Arecaceae Arecaceae Annonaceae Marantaceae Moraceae Arecaceae Arecaceae Arecaceae Welfia georgii Ammandra decasperma Xylopia guateria Ischnosiphon arouma Poulsenia armata Carludovica palmata Manicaria saccifera Desmoncus sp. Bromeliaceae Cyclantaceae Arecaceae Maranthaceae Arecaceae Aechmea magdalenae Thoracocarpus bissectus Mauritiella pacifica Stromanthe lutea Astrocaryum standleyanum A A A A E E A E E A A A E E Bixaceae Rubiaceae Rhizophoraceae Caesalpinaceae Bignoniaceae Moraceae Bixa orellana Genipa americana Rizophora mangle Mora oleifera Arrabidea chica Pourouma discolor var. chocoana A E E E E A Clusiaceae Bombacaeae Bombacaceae Lauraceae Lauraceae Humiriaceae Magnoliaceae Lauraceae Apocynaceae Moraceae Calophyllum longifolius Ochroma lagopus Huberodendrom patinoi Aniba perutilis Ocotea sp. Saccoglotis procera Dugandiodendron sp. Ocotea oblonga Lachmellea speciosa Chlorophora tinctorea Fabaceae Meliaceae Lauraceae Lauraceae Bombacaceae Clusiaceae Moraceae Sapotaceae Lauraceae Apocynaceae Apocynaceae Lecythidaceae Verbenaceae Lauraceae Centrolobium paraense Carapa guianensis Nectandra sp. Ocotea cernua Pseudobombax squamigerum Symphonia globulifera Brosimun rubescens Chrysophyllum sp. Nectandra sp. Himalanthus articulatus Couma macrocarpa Lecythis ampla Vitex sp. Aniba sp. E A E E E E E E A E E E E E E E E E E E E E E E E Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 18 Tabla 5. Principales especies de peces marinos y estuarinos, crustáceos y moluscos aprovechados por las comunidades. FAMILIA GÉNERO ESPECIE ELOPIDAE Elops affinis NOMBRES COMUNES LOCALES EN ESPAÑOL Y WOUNAAN ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) Sábalo /Baaur/ E Carduma A Canchimalo Ñato A E Pejesapo /Meuchit/ A Gualajo Machetajo Curruco A E A Corvina E Lisa E Bocón A Lenguada A Cangrejo Azul, Hipar E ENGRAULIDAE Centegraulis mysticetus ARIIDAE Arius seemani Arius troschelii BATRACHOIDIDAE Batracoides pacifici CENTROPOMIDAE Centropomus armatus Centropomus. Pectinatus A. pacifici SCIANIDAE Cynoscion stolzmanni MUGILIDAE Mugil cephalus GOBIIDAE Awous trasandeanus BOTHIDAE Citharichthys gilberti CRUSTACEOS GECARCINIDAE Cardisoma crassum PALAEMONIDAE Macrobrachium americanum Camarón Munchillá, Kharam E PENAEIDAE Penaeus sp. MOLUSCOS A LITTORINIDAE Littorina spp. Camarón, Phismier Piaquil A MELONGENIDAE Melongena patula Caracol, Cocon Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). E 19 TABLA 6. Principales especies de peces dulceacuícolas aprovechados por las comunidades FAMILIA GÉNERO ESPECIE STERNOPYGIDAE Sternophygus macrurus NOMBRES COMUNES LOCALES EN ESPAÑOL Y WOUNAAN ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) Viringo, /Birik/ A Guagabina E Aguja, /Themie/ E Saltón Corcobado E A Quícharo, /Kichir/ E Timburo E Barbudo, /Surum/ Micuro Capitán A A E Corromá Guacuco Pachulí, /Cuchulap/ A E A Mojarra Pemá Chacuver E E A Jojorro E CURIMATIDAE Pseudocurimata lineopunctata CTENOLUCIIDAE Ctenolucius hujeta CHARACIDAE Brycon henni Roeboides hildebrandi ERYTHRINIDAE Hoplias malabaricus ARIIDAE Arius multiradiatus PIMELODIDAE Rhamdia wagnieri Pimellodela grisea Pimellodela eutaenia LORICARIIDAE Plecostomus panamensis Chaetostoma sp. Sturisoma leightoni CICHLIDAE Petenia sp. Petenia sp. Aequidens sp. POMADASYIDAE Pomadasys sp. Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 20 TABLA 7. Principales especies de mamíferos aprovechados por las comunidades ORDEN NOMBRE COMÚN ESPAÑOL NOMBRE WOUNAAN NOMBRE CIENTÍFICO ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) TARDIGRADA Bradypus variegatus Choloepus hoffmannii Perico Perico Colorado Perik baw Perik pur E E Cova Muerto Armadillo, Gurre Pichorma Ephur E A Oso Jos A Cusumbí Cusumbí poman A Tatabro Beruch E Ardilla Guatín Guagua, Conejo RatónEspino Colorado Ardit Echkum Eur Bichkier A A A A CINGULATA Cabassous centralis Dasypus novemcintus VERMILINGUA Tamandua mexicana CARNIVORA Potos flavus ARTIODACTYLA Tayassu tajacu RODENTIA Sciurus granatensis Dasyprocta punctata Agouti paca Proechimys semispinosus Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 21 TABLA 8. Especies de aves aprovechadas por las comunidades. ORDEN NOMBRE COMÚN ESPAÑOL NOMBRE WOUNAAN NOMBRE CIENTÍFICO ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) TINAMIDAE Tinamus major Crypturellus berlepschi Perdíz Cincocaldos Bekhor Phium E E Garza Tigre Oho E Patilla Do patia E Pava Dormilona Bamseu chicau E Pollo Antiguo Cucol A Choclín Choclí A Torcaza Uaichocó Torcaz A Panchana Loro Frentiblanco Periquita Curphim Lorit chidauembau Sisimí A A A Lechuza Bukbuk E Pichil Paletón Diostelé Bisierrín Palitón chiperm A A ARDEIDAE Tigrisoma fasciatum ANATIDAE Oxiura dominica CRACIDAE Penelope ortoni PHASEANIDAE Odontophorus erythrops RALLIDAE Aramides wolfi COLUMBIDAE Columba cayennensis PSITTACIDAE Pionus menstruus Amazona farinosa Pinopsitta pulchra STRIGIDAE Ciccaba virgata RAMPHASTIDAE Pteroglossus sanguineus Ramphastos swainsonii Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 22 TABLA 9. Reptiles aprovechados por las comunidades. CLASE ORDEN (SUBORDEN) FAMILIA NOMBRE COMÚN ESPAÑOL NOMBRE WOUNAAN NOMBRE CIENTÍFICO ESTADO ABUNDANTE (A), ESCASO (E) REPTILIA TESTUDINATA KINOSTERNIDAE Kinosternon leucostomum Kinosternon dunni Tortuga Tapacula Tortuga Tapacula Tapacul Beberr A E Tortuga Fina Tortuga Siejé Khood Siejé A E Tortuga Bache Bach E Babilla, Tulisio Tulis E Iguana Ochoro Ophog Ochor E A EMYDIDAE Rhynoclemmys melanosterna Rhynoclemmys annulata CHELYDRIDAE Chelydra serpentina acutirostris CROCODYLIA ALLIGATORIDAE Caiman crocodylus chiapasius SQUAMATA (LACERTILIA) IGUANIDAE Iguana iguana Basiliscus basiliscus Fuente: Comunidad Wounaan San Bernardo, Usma y Ruiz Palma (1999). 23 1.7. Las comunidaddes indígenas y el municipio Litoral del San Juan El municipio fue creado en el año 1993, cuando se dividió de la jurisdicción del antiguo municipio de Istmina. Tiene aproximadamente 425.000 hectáreas de extensión, de las cuales cerca de 85.000 hectáreas son Resguardos Indígenas de comunidades Wounaan. De una población municipal aproximada a 13.000 habitantes, el 45% (6.000) son indígenas. Docordó, es la cabecera municipal y los otros 9 corregimientos del municipio son Pichimá, Togoromá, Charamabirá, García Gómez, Palestina, Taparal, Munguidó, Copomá y Cucurrupí. Los Resguardos Indígenas se traslapan con grandes áreas de estos corregimientos y sin embargo, ninguna comunidad indígena es cabecera de corregimental. Relaciones de Producción. Las principales vías de comunicación de las comunidades Wounaan con las cabeceras municipal y de corregimientos del municipio Litoral del San Juan, son el curso del río San Juan y las quebradas en la zona no deltáica y los brazos y esteros en la zona del Delta (Mapa 7). Algunos miembros de las comunidades Wounaan (principalmente hombres adultos) van y permanecen durante uno o varios días en Docordó y las cabeceras de los corregimientos, una o más veces cada mes, sosteniendo relaciones de tipo productivo y comercial los pobladores negros; ellos, también van y permanecen, aunque menos tiempo, en las comunidades indígenas a establecer el mismo tipo de relaciones. Las relaciones de producción más frecuentes entre los Wounaan y los demás pobladores del municipio son: la explotación de madera, la venta e intercambio de productos agrícolas, forestales y pesqueros, el comercio de abarrotes y otros artículos de consumo en las tiendas comunitarias. Aunque la explotación de madera para aserrar ha disminuido sustancialmente en las comunidades indígenas del bajo San Juan en la última década, algunos pobladores Wounaan aún extraen pequeños volúmenes (aproximadamente entre 100 y 200 trozas) de madera de diferentes especies (principalmente Sajo, Machare, Chanú y Sande), para venderla una o dos veces al año, en aserríos de pobladores negros y de colonos ubicados en la cabecera municipal y en los corregimientos de García Gómez, Togoromá, Palestina, Munguidó, Copomá y Cucurrupí. En los aserríos de las comunidades indígenas de Pángala y Burujón, los Wounaan, han disminuido su actividad maderera, al punto de parar su funcionamiento o de alquilar los aserríos a aserradores negros de la zona. Las comunidades Wounaan llevan a vender a las cabeceras municipal y de corregimientos, sus productos agrícolas (principalmente papachina, variedades de banano, piña y limón), carne de animales silvestres y eventualmente artesanías. 24 25 Es más frecuente que los Wounaan lleven a vender canoas y canaletes a las pobladores negros, que estos lleguen a las comunidades indígenas a comprar o a vender estos productos de fabricación artesanal. Algunos pescadores y cazadores de comunidades negras, llevan a vender e intercambiar pescado, carne de monte y coco por otros productos agrícolas a las comunidades Wounaan. Este comercio es más común en los corregimientos de zona estuarina como son García Gómez, Charambirá, Togoromá y Pichimá, donde las comunidades negras tienen más acceso que los indígenas a la pesca en los estuarios y las desembocaduras, por su cercanía a estos sitios y por su experiencia y dotación de equipos en este tipo de pesca. Otros productos de las comunidades indígenas que venden a e intercambian con las comunidades negras de Docordó y los corregimientos, son derivados de la caña de azúcar: la miel y el Viche, un licor destilado de manera artesanal en algunas comunidades Wounaan. En las tiendas de la cabecera municipal (Docordó) y del corregimiento de Togoromá, algunas familias de las comunidades indígenas de Balsalito y Togoromá, compran con frecuencia abarrotes (principalmente arroz, sal, azúcar, pastas y café) y pan. Las demás comunidades se abastecen más de los abarrotes en sus propias tiendas particulares o comunitarias que surten de remesa y otros artículos en el puerto de Buenaventura. Pobladores de las otras comunidades indígenas, compran eventualmente estos artículos en la cabeceras municipal o de corregimientos, cuando llegan o van de paso en un desplazamiento a hacer alguna diligencia o un trabajo. Este caso es más frecuente entre los líderes de las comunidades que permanecen varios días en comisiones de trabajo fuera de su comunidad. En las comunidades de San Bernardo y Burujón, es más común que pescadores y agricultores de las veredas negras de Cacagual y el Choncho, compren abarrotes en la tiendas comunitarias locales, cuando llegan a vender e intercambiar pescado y carne silvestre por libras. Los indígenas se hospedan gratuitamente en casas de amigos y allegados en las comunidades negras, al igual los pobladores negros se alojan en las casas de sus amigos en las comunidades indígenas. Sin embargo, en Docordó, algunos indígenas que trabajan en dependencias de la Alcaldía, pagan alquileres mensuales y por días de piezas en algunas casas de alojamiento de propietarios negros. También pagan servicios de alimentación en estas casas o en algunos restaurantes locales. Relaciones sociales. Las actuales dependencias de la Alcaldía Municipal son Concejo, Personería, Despacho del Alcalde, Secretaría General, Tesorería, Planeación y Obras Públicas, Secretaría de Asuntos Indígenas, Educación, Salud, Desarrollo Institucional y UMATA. 26 Sin contar los cargos nombrados y contratados en Educación (76) y Salud (19), donde la gran mayoría son trabajadores no indígenas, en los 41 cargos de las demás dependencias, los Wounaan solo ocupan 3 cargos de la Secretaría de Asuntos Indígenas y recientemente la Secretaría General por que renunció el anterior Secretario no indígena. Esto significa que la promoción del empleo en la administración municipal es inequitativa y parcializada a la población no indígena. Actualmente, existen más maestros y promotores de salud indígenas remunerados por el departamento del Chocó y por el propio presupuesto de Transferencia de las de los Resguardos, que por la misma alcaldía del Litoral del San Juan. Los cinco Concejales indígenas principales, nombrados por elección popular, pertenecen a las comunidades de Togoromá (1), Papayo (2), San Bernardo (1) y Buenavista (1). Los 3 empleados indígenas de Asuntos Indígenas, pertenecen a las comunidades de Burujón (2) y Balsalito (1). Como se hace notar, de las 17 comunidades indígenas del municipio, sólo 6 tienen relación laboral directa con la administración municipal, mientras que de las otras 10 comunidades, tan solo existen algunos contratos de prestación de servicios de algunos maestros y promotores de salud indígenas. Los Wounaan han participado democráticamente con sus votos en las elecciones populares de la alcaldes de 1995 y 1998, y sin embargo, no ha sido equitativa su participación en las dos administraciones municipales. La mayoría de los proyectos de inversión en vivienda e infraestructura de salud y educación en las comunidades Wounaan, se han hecho con los presupuestos de Transferencia. En 1998 y 1999, las comunidades presentaron a la Alcaldía sus propios planes de inversión para los siguientes años, los cuales no pasaban de ser el 40% de los Ingresos Corrientes de la Nación para el Municipio: $1.684.900 millones en 1998, que se han incrementado en $1.600.000 en el año 2000. Pero los planes de inversión de los indígenas no han sido bien considerados por la Alcaldía, a parte de lo que corresponde por Transferencia a los Resguardos. A esto, se suma la exagerada tramitología y demora en las gestiones de entrega de los presupuestos de Transferencia a las comunidades indígenas, sobre todo en el despacho de Tesorería de la Alcaldía. El consenso de los pobladores Wounaan, es que las dos administraciones municipales, han financiado muy pocos proyectos y obras a las comunidades Woounaan, del presupuesto del municipio, diferente al de Transferencia a los Resguardos Indígenas, con algunas excepciones que se explican a continuación. Debido a que la comunidad de Balsalito se ubica al frente de la cabecera municipal y a la campaña política de algunos de sus líderes en las pasadas elecciones, su 27 población ha logrado más participación en el sistema funcional del municipio. Actualmente, tiene contratados 3 maestros indígenas, cuenta con una escuela y su dotación, estudiantes de primaria y bachillerato en las escuelas y colegios del municipio, acueducto, planta y red eléctricas. Aunque menos cercana, la comunidad de Togoromá, también logró una articulación similar a la cabecera municipal por la campaña política de algunos de sus líderes en las pasadas elecciones. La mayoría de los niños de la comunidad son actualmente registrados en Docordó (Registro Civil), tienen cuatro maestros contratados de los cuales dos son indígenas, ampliación y dotación de la escuela, un motor de 40 H.P., acueducto, galpón de pollos, arreglo de cancha de fútbol, planta y red eléctricas. Pese a que otras comunidades Wounaan del municipio y sus líderes no hayan hecho campaña política en las pasadas elecciones, como ciudadanos y habitantes del municipio, tienen el derecho y la alcaldía el deber, de apoyo a proyectos de infraestructura y prestación de servicios educativos, en salud a través de la empresa solidaria Barrios Unidos de Quibdó, en electrificación mediante el ICEL, de asistencia técnica agropecuaria por medio de la UMATA, entre otros servicios. Algunas comunidades han logrado uno o varios de estos servicios, pero hace falta tener en todas las comunidades un cubrimiento satisfactorio. Chagpién está gestionando por Transferencia una escuela y un centro de salud; Chagpién Tordó paga un maestro; Pángala, la construcción de un acueducto, Unión Guaimía, el nombramiento de un maestro; Taparalito, la planta eléctrica; Guarataco, una asistencia técnica de la UMATA; Buenavista, la afiliación a la empresa solidaria de salud; Papayo, la contratación de los profesores del Colegio Agropecuario y un proyecto de saneamiento básico. Así como las anteriores, todas las comunidades Wounaan mandan comisiones de algunos líderes de sus Cabildos, durante varios días cada mes, a gestionar los proyectos de Transferencia y otras propuestas de apoyo a la solución de necesidades de prestación de servicios básicos ante la Alcaldía. La mayoría de los estudiantes indígenas de primaria y secundaria de las escuelas y el colegio de Docordó, pertenecen a la comunidad de Balsalito. Una minoría pertenece a otras comunidades. Aunque las comunidades no pudieron hacer el censo estudiantil para este trabajo de Ordenamiento Territorial, es notoria la baja población estudiantil indígena en la cabecera del municipio. La Secretaria de Asuntos Indígenas de la Alcaldía estuvo durante sus primeros dos años de funcionamiento, relativamente desarticulada de la dinámica organizativa y de gestión de los Cabildos locales y el Cabildo Mayor Wounaan del bajo San Juan. Sin embargo, a partir de enero del presente año, con el cambio del Cabildo Mayor a la Asociación de autoridades Wounaan del Pacífico – CAMAWA, Asuntos Indígenas, otras dependencias de la Alcaldía y especialmente el despacho del Alcalde, se han 28 articulado más a algunos procesos organizativos y de gestión indígena Wounaan a nivel zonal y local. Entre estos procesos, es destacable la consolidación del Ordenamiento Territorial Indígena y la gestión de proyectos de salud y saneamiento básico ante el Ministerio de Salud, promovidos por la visita a finales del año pasado, del Presidente de la República de Colombia y sus comitivas, a la comunidad indígena de Papayo (sede de CAMAWA) y a Docordó (Cabecera municipal). También es importante destacar que gracias a la gestión de CAMAWA, especialmente de su Presidente, y al apoyo de la misión de las religiosas Dominicas en Docordó, se logró el funcionamiento de la primera Universidad en el municipio; la Universidad Santo Tomás de Aquino, que a través de su Vicerrectoria de Universidad Abierta y a Distancia, logró que el primer semestre de este año, se matricularan 9 estudiantes Wounaan y 8 no indígenas en diferentes programas de Licenciaturas y Tecnologías. La Alcaldía, a través del INDER, ha dado apoyo a la adecuación de canchas de fútbol, la dotación de implementos y la realización de torneos municipales intercomunitarios de fútbol, entre equipos indígenas y negros (Foto X). Otros servicios directos de la cabecera municipal y de corregimientos a las indígenas Wounaan son: la atención en el Centro de Salud de Docordó y en las enfermerías de algunos corregimientos; el transporte fluvial-marítimo en la lancha pasajera; y el esparcimiento en juegos de billar y discotecas. En cuanto a la integración y convivencia social, históricamente, los habitantes Wounaan y negros del Bajo San Juan han sostenido relaciones Pacíficas de convivencia que son ejemplarizantes para la región del Pacífico colombiano. Sin embargo, la sobre-explotación y escasez de los recursos naturales y la falta de comprensión de las nuevas legislaciónes sobre territorios colectivos negros (Ley 70 de 1993) y territorios indígenas (Ley 60 de 1994), han avivado y ocasionado conflictos por la explotación de madera y la tenencia de tierras. Este es el caso de: las comunidades del Resguardo de Chagpién, con algunos pobladores de comunidades negras del corregimiento de Copomá; las comunidades del Resguardo Nuevo Pitalito, con pobladores negros de algunas veredas del corregimiento de Palestina; y la comunidad del Resguardo de Tiocilirio, con aserradores negros nativos y foráneos que trabajan permanentemente o por temporada en aserríos del corregimiento de García Gómez. En algunos de estos casos, los aserradores negros incumplen los acuerdos pactados sobre el respeto a los territorios entre las partes, ante las comisiones de verificación territorial del INCORA, OREWA, ACADESAN y CAMAWA. A veces se presentan por 29 parte de los negros, robos a los cultivos de los indígenas y amenazas si ellos reclaman por sus tierras. Pese a los problemas descritos anteriormente, la mayoría de las comunidades indígenas y negras de la zona, mantienen desde tiempos antiguos y hasta el presente, buenas relaciones de convivencia social. Desde la cabecera municipal, hasta las veredas más apartadas en las playas, en los ríos y quebradas, la gran mayoría de los Wounaan y los negros del bajo San Juan, se respetan y comparten su integridad cultural y personal. Actualmente, es común que entre pobladores negros e indígenas se establezcan relaciones de compadrazgo por los niños recién nacidos en las comunidades de la dos etnias. Lo que es hoy menos frecuente que en tiempos pasados, es el mestizaje en la zona por la unión conyugal entre indígenas y negros. Comunidades indígenas y negras vecinas, comparten la alegría de sus cantos, danzas y bailes en las fiestas tradicionales de la zona que son: Semana Santa en Abril, San Juan en junio, Virgen del Carmen en julio, Virgen de Las Mercedes en Septiembre, navidad y fin de año. Es más frecuente que los pobladores negros recurran a la medicina tradicional de los Jaibaná, Tongueros y yerbateros Wounaan, que los indígenas busquen los servicios de los curanderos negros. Sin embargo, el respeto por las dos medicinas tradicionales es recíproco entre las dos etnias. Varias veces al año, en las casas de los más reconocidos médicos tradicionales Wounaan, se encuentran pacientes de comunidades negras en tratamiento y recuperación. Las comunidades negras del municipio son más creyentes y practicantes de la religión Católica que los indígenas, por lo cual participan más de los servicios litúrgicos y los sacramentos impartidos por el Padre Párroco en la iglesia de Docordó. En la comunidad de Pángala viven algunas familias negras practicantes de la religión evangélica que introdujeron foráneos en 1985. 1.8. Las comunidades indígenas y el municipio de Buenaventura Las principal vía de comunicación con Buenaventura es fluvial-carreteable, desde el bajo San Juan por el bajo río Calima hasta los corregimientos de San Isidro o Bajo Calima, y de ahí en adelante en bus escalera o en camperos hasta Buenaventura. La principal relación de las comunidades Wounaan del municipio Litoral del San Juan con la ciudad de Buenaventura es de carácter comercial. La mayoría de las comunidades hacen cada mes o dos meses la remesa de las tiendas particulares o comunitarias, en graneros del barrio Pueblo Nuevo. Otra relación de tipo comercial de las comunidades Wounaan con Buenaventura es la compra de lanchas de fibra de vidrio, motores fuera de borda y repuestos. También la compra y reparación de 30 electrodomésticos entre los que son comunes los televisores, equipos de sonido y radiograbadoras. Algunos artesanos Wounaan (mujeres y hombres) venden y entregan en consignación sus artesanías en tejidos de fibra vegetales y tallas de madera a comerciantes de confianza su confianza en Buenaventura, con el fin de que ellos las vendan posteriormente turistas y otras personas interesadas. Algunos Wounaan compran de telas y ropas en Buenaventura para uso personal o para venderlas en la zona. La comunidad de Burujón posee una pequeña tienda cooperativa de ropa y telas que se abastece principalmente en Buenaventura. Algunas comunidades del Litoral del San Juan, que tienen un lote de Resguardo en jurisdicción de Buenaventura, han accedido a nombramiento y contratación de maestros por este municipio y al programa de hogares infantiles del ICBF con sede en Buenaventura. Por esta razón, algunos líderes tienen que ir en promedio una vez al mes a este puerto para tramitar los asuntos pertinentes. Las comunidades del Resguardo Burujón Unión San Bernardo, reciben la Transferencia Presupuestal de la alcaldía de Buenaventura, razón por la cual deben gestionar los proyectos y presupuestos en este Puerto. Debido a este tipo de relaciones comerciales e institucionales, todas las comunidades tienen cuentas particulares y/o comunitarias en bancos y/o corporaciones de ahorro en Buenaventura. Esto también se explica porque el municipio del Litoral del San Juan no tiene estos servicios financieros. Buenaventura es sitio obligado de paso para los Wounaan del bajo San Juan que viajan a Cali, Bogotá u otra ciudad del interior del país. Por lo general, los viajes de los Wounaan a otra ciudad, tienen una estación de uno o más días en Buenaventura, ya sea de ida o de regreso. En sus comisiones o viajes de paso por Buenaventura, los Wounaan se hospedan en hoteles del centro y de Pueblo Nuevo, emplean los servicios de transporte, restaurantes, cafeterías y rara vez de distracción en parques. Son muy pocas las familias Wounaan de la zona del bajo San Juan que viven en Buenaventura. Las que han logrado permanecer durante varios años en esta ciudad, tienen el sustento de un padre de familia asalariado por la CVC, el ICBF o por alguna otra institución. Los hijos de estas familias han logrado terminar la educación primaria y secundaria en Buenaventura. Muy pocos jóvenes (hombres y mujeres) Wounaan que han salido del San Juan a Buenaventura por cuenta propia o con el apoyo de sus familias que quedaron en el San Juan, estudian bachillerato o trabajan o se dedican a las dos actividades. Estos jóvenes viven donde familiares o amigos en Buenaventura. 31 EL PLAN DE VIDA DE LAS COMUNIDADES WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN 2.1. El origen de los Wounaan y los /Siepien/ 32 /Maach Aai Pomaam/ (literalmente quiere decir Nuestro Padre Mayor y puede entenderse que es Nuestro Dios), se originó en una laguna que antes lo era todo y se movía como el mar. /Maach Aai Pomaam/ era un espíritu que a medida que iba rotando tomaba su forma y se movía como un niño. Desde entonces, con su poder, hizo la tierra para caminar. La tierra se formó del mar y las olas quedaron como las montañas. /Maach Aai Pomaam/ se acercó a la resaca cuando la tierra estaba blanda. Con su poder la hizo endurecer y la tierra era solo pasto y después formó los árboles, pero todo estaba oscuro, entonces exigió estar en la claridad y así creó la luna, pero al no verse la luna tan clara, formó el sol. Así es que quedó claro, se veía todo. /Maach Aai Pomaam/ escogió un lugar, una playa grande llamada /Baaur Do Mos/ (Playa del río de Sábalo, hoy llamado Baudó). Estando en la Playa del Baudó, /Maach Aai Pomaam/ creó a su hijo /Êwandam/ y estaban los dos solos. /Maach Aai Pomaan/ vivía en la Playa del Baudó con su hijo /Êwandam/. El, al crecer se sentía tan solo que un día le preguntó a su padre porqué en la playa no había gente, y todos los días le preguntaba lo mismo. De tanto insistirle, /Maach Aai Pomaan/ contestó que le iba a hacer gente siempre y cuando él se comprometiera a que nunca los iba a abandonar. /Maach Aai Pomaam/ le dijo a /Êwandam/ que hiciera muñecos de la palma Chonta, pero no pudo porque la madera de la palma era muy dura, tanto que se lastimó los dedos tratando de labrarla. Luego cortó la madera del árbol Balso, empezó a labrar los muñecos, pero tampoco sirvió porque la madera era muy blanda y se podría rápido. Entonces el Hijo tomó barro y vio que era fácil de moldear, por eso moldeó millares de muñecos semejantes a él. Luego fue a colocarlos en filas por toda la Playa del Baudó. Al día siguiente, /Maach Aai Pomaam/ con su poder los convirtió en gente. Luego /Maach Aai Pomaam/ dijo a /Êwandam/: váyase a mirar la gente pero no se deje ver. Fue y vio que todas eran mujeres desnudas y no habían hombres. Entonces, él regresó y dijo al Padre que había mucha gente y no cabían en la playa. En la playa había un árbol que tenía un solo nudo en el tronco y con este todas las mujeres se satisfacían su sexo. Cuando /Êwandam/ las vio dijo: así no está bueno Padre, hay que buscarles pareja. El Padre mandó al hijo: vaya corte tallos de Caña Agria y póngalos de a uno en la vagina de cada mujer. Al día siguiente habían una gran cantidad de gente en la playa, la mitad eran mujeres y la otra mitad eran hombres. Es por eso, que los Wounaan llamamos /Maach Aai/ o Nuestro Padre a /Êwandam/, porque fuimos creados a petición de él. 33 Las mujeres y los hombres estaban desnudos, /Êwandam/ les aconsejó que no fueran a hacer nada sin su orden, sobre todo que no fueran a tener relaciones sexuales. Con su poder, él se fue en un barquito de oro a traer lienzos al otro lado del mar. Cuando regresó ya habían tenido relaciones sexuales, estaban penosos y se tapaban los genitales con las manos. Luego él les repartió los lienzos a cada uno para que se cubrieran, luego también emplearon la corteza del árbol Damagua para cubrirse. Cerca había una laguna de agua oscura, pero ahí había muchas fieras. La gente tenía miedo de bañarse, al ver esto /Êwandam/ les dijo a los tres grupos de gente que había creado que se bañaran en la laguna. Los primeros se tiraron con miedo y quedaron blancos; luego les dijo a los Wounaan que hicieran lo mismo, pero la laguna se estaba secando, por eso no quedaron blancos; los últimos que se tiraron solo alcanzaron a mojar la planta de sus pies y la palma de sus manos, es por esto que quedaron negros. /Mindalá/ es el nombre que /Êwandam/ le puso a los blancos, ellos eran más curiosos que los Wounaan. /Êwandam/ hizo correr a un caballo y dijo cójanlo del cuello con un laso, entonces /Mindalá/ lo cogió, los Wounaan no pudieron. Luego a los Wounaan les dijo /Êwandam/ que cogieran con un laso del cuello a un marrano, el que sí pudieron coger. También mandó /Êwandam/ a martillar un hierro, de allí salió una chispa que causó temor a los Wounaan. Al ver esto /Êwandam/ mandó a los /Mindalá/ a hacer lo mismo y ellos sí fueron capaces, por esto a ellos le dijo que sí podrían fabricar herramientas y que a los Wounaan les tocaría comprarlas. Además /Êwandam/ ordenó maniobrar un barco a los Wounaan, ellos salieron al mar pero habían olas muy grandes y como no pudieron, tuvieron que regresarse. Al ver esto /Êwandam/ mandó a los /Mindalá/ que manejaran el barco y ellos sí pudieron. /Êwandam/ dio plata en forma de hojas de árboles a los Wounaan, a los negros y a los blancos. /Êwandam/ preguntó a los Wounaan por la plata que les dio, ellos la habían gastado. Luego preguntó a los negros que respondieron que habían gastado una parte y que aún tenían el resto. Luego preguntó a los blancos y ellos tenían toda la plata que les había entregado. Al ver esto /Êwandam/ dijo a los blancos que podrían manejar mucha plata. Después /Êwandam/ mandó en barco a los blancos y los negros a otras tierras y países. De los apellidos de los Wounaan, se dice que fueron originados según los sitios donde nacía cada persona, si nacía cerca de un árbol de nombre Mare, se le llamaba Ismare; al nacer en un /durrkhu/ (peña), su apellido era el mismo (Peña); cuando nacía debajo de una palma /opua jõ/ (Cabecita) quedaba como Opúa; si nacía debajo de la palma /arr/ (Barrigona) se apedillaba Barrigón. El origen de los /Siepien/ es el mismo de los Wounaan. El nombre de dios /Ewandam/ se dice /Akore/ en lengua /Siepien/ y es el mismo dios o hijo de dios. 34 Figura 1. Dibujo por un niño del origen de los Wounaan y los /Siepien/ 35 2.2. Los mundos del universo Wounaan y /Siepien/ La cosmovisión de los Wounaan contempla cuatro mundos o niveles en su universo, los cuales están ordenados desde los mundos superiores donde permanecen sus dioses y llegan las almas de algunas personas, hasta los mundos inferiores donde viven los Wounaan, los animales del monte y del agua, los árboles, las palmas y otras plantas silvestres, los cultivos, otras gentes y seres entre los que están diferentes espíritus. A continuación se describen dichos mundos en el orden que les asigna la cultura Wounaan. /Maach Aai Pomaan Jeb/, el mundo de nuestro Padre Mayor o nuestro Dios Padre (primer mundo) En este mundo /Maach Aai Pomaan/ está siempre descansando en una hamaca y rodeado de las almas de los niños que llegan junto a él porque mueren aún estando en el vientre de sus madres y no alcanzaron a mamar leche de sus senos. Ellos se encargan de mecer la hamaca de /Maach Aai Pomaan/. /Êwandam Jeb/, el mundo de Dios Hijo (segundo mundo). A este mundo llegan las almas de todas las personas que han muerto, menos las que son muy malas. /Êwandam/ los recibe en este mundo y luego de un proceso de purificación con fuego, los que son malos son lanzados nuevamente a esta tierra, donde son transformados en peces, camarones, animales del monte y vacas que espantan y tienden a atrapar a los vivos para matarlos o comerlos. Las personas que estando en vida no cometieron faltas como tener relaciones sexuales con sus parientes ni con otra gente diferente a los indígenas, los que no hablaron mal de otras personas, los que no maldijeron a su propia gente, es decir los que tuvieron más o menos una vida buena ante los ojos de /Êwandam/, quedan viviendo en su mundo después del proceso de purificación con fuego. Para llegar a este mundo, el alma de las personas debe cruzar una quebrada llamada /Daucho dosĩg/ (quebrada de lágrimas) porque la persona se muere, los familiares lloran y las lágrimas hacen crecer esta quebrada. Antes de cruzar la quebrada, el alma de la persona tiene que esperar a que baje el nivel del agua, mientras espera llega /Dosat/ (el demonio o satanás) en figura de otra persona cualquiera y le dice: “mire amigo camine conmigo que yo lo llevo”. Algunas almas se dejan convencer y otras no. Se dice que al cruzar la quebrada hay dos caminos o senderos, el de la derecha que es el verdadero, tiene muchos sembrados de albahaca blanca y conduce hasta terminar donde se halla una luz en la escalera de la casa de /Êwandam/. El de la izquierda es el camino que conduce a la perdición, está adornado de oro puro y se encuentra perfumado con diferentes hierbas. 36 /Wounaan jeb/, el mundo o la tierra de los Wounaan (tercer mundo). En este mundo viven las personas que fueron creadas por Dios Padre a petición de /Êwandam/, entre los que estamos los Wounaan; también habitan los /Waspien/ (seres que viven en el agua) y que son las personas que conocen todos los beneficios de las plantas medicinales, es por eso que existe una planta que llaman /Waspien Pakher/ o planta de los /Waspien/. En este mundo también se encuentra /Dosãt/, el demonio. Cuentan los viejos que antiguamente habían personas de poca maldad en este mundo, quienes tenían revelaciones a través de sueños y estados de agonía, mediante los cuales llegaban al mundo de /Êwandam/ donde él les contaba todo lo que había pasado y lo que habría de suceder en el futuro. Les mostraba que los distintos grupos de gente estaban separados y que estos al morir iban con diferentes destinos; los Wounaan iban a una parte, los /Siepien/ (Eperara Siapidara) a otro lugar, lo mismo los blancos y los negros. También se dice que /Êwandam/ pasa por este mundo, pero como somos pecadores no lo podemos ver y por eso el Sol lo vemos más alto de lo que está. En este mundo también hay otro mundo denominado /khimiã durr/ donde tiene sus dominios /Dosãt/ y los /Mepeen/ (los diablos). Cuando la persona es mala y se le mueve la mano u otra parte de su cuerpo después de muerto, lo entierran boca abajo y el alma de esa persona se queda en /khimiã dur/ o se va a otro mundo, el de los /ãhãrmiã/. /Ãhãrmiã jeb/, el mundo de los /ãhãrmiã/ (cuarto mundo). Es el último mundo, donde habitan los seres llamados /ãhãrmiã/, personas que viven debajo de la tierra. Se dice que no son pecadores, cuando quieren procrearse ruegan a /Êwandam/ y forman sus hijos de su escupa. Los /ãhãrmiã/ se alimentan con el solo olor de los cultivos y las frutas que están en permanente cosecha, y de las carnes y pescados que son muy abundantes en su mundo. Los /ãhãrmiã/ hacen deposiciones de arena por los oídos, golpeándose las sienes con la mano. En este mundo también habitan los cangrejos /jêp/ que son liderados por /Iphaar/ (Cangrejo Azul) y son enemigos de los /ãhãrmiã/. Otra propiedad de estos seres, es que no pueden ver de día, pero sí de noche, ven a /Êwandam/ y hablan directamente con él. También en este mundo, es de donde provienen los diversos árboles frutales. 37 Figura 2. Dibujo por un niño de los diferentes mundos 38 2.3. Los territorios ancestrales de los Wounaan y los /Siepien/ Los Wounaan, una vez creados en la playa del Baudó, cruzaron caminando montañas, selvas y ríos, hasta llegar a Dokhãpdo (río Docampadó) y Êjõo (río Ijuá). De estos ríos pasaron a la cabecera de la quebrada Bicordó, afluente de la cuenca media río San Juan. Por esta ruta venían caminando en gran cantidad los Wounaan, cuando una bandada de loros hizo bulla, ellos pensaron que era un ataque de los /Jurannaan/ (indígenas Kunas), entonces se vieron obligados a regresar por donde vinieron. Luego, volvieron a hacer el recorrido por la misma ruta, fue allí que pasaron por un sitio donde las cabeceras de los ríos Ijuá y Bicordó, están tan próximas que casi se unen los cauces de los ríos. De esta manera, el transitar a pie de una multitud de gente Wounaan, formó un canal de varios metros de hondo, al cual le faltaron pocos metros de distancia para unir los dos ríos. Este canal se conoce como /Ujũg khud/. De esta manera, los Wounaan llegaron y poblaron /Phobor Jêb/ (hoy Noanamá) donde en alguna época fueron dirijidos por un jefe llamado /Nonaam/; de allí se dispersaron siguiendo el curso superior del río San Juan hasta las orillas de Remolino (un grande pozo), el río Sipí, las quebradas Minguimalo y Bebedó y /Guiniguini/, un sitio montañoso poblado por los indígenas Tules o Kunas, donde los Wounaan llegaban a combatirlos con el fin de liberar a sus niños y mujeres que eran raptados por estos indígenas; por último, los Wounaan llegaron a poblar territorios aledaños al lugar donde hoy se localiza la ciudad de Istmina. De Noanamá, siguiendo el curso inferior del río San Juan, los Wounaan se dispersaron y poblaron los alrededores de Durrapdurr, lugar sagrado donde fueron salvados de un fenómeno climático parecido al diluvio, según lo dicen sus mitos; también se establecieron en /Phĩdagdurr/ o /Kukuuidurr/, pueblo de las estrellas o de los cocuyos, localizado sobre una loma frente de la Isla de Munguidó, por lo cual de lejos y en la noche, las luces de las antorchas de las casas de los Wounaan eran semejantes a una multitud de estrellas o cocuyos brillando en la oscuridad. Los Wounaan también llegaron a poblar la loma de Palestina cerca de la desembocadura del río Calima al San Juan; finalmente poblaron /Jinguimiã Mos/ (playa Puerto España), en la desembocadura más al sur del río San Juan (Boca San Juan). En este sitio y en Isla Palma, al frente de Bahía Málaga, se enfrentaron por el dominio del territorio, los Wounaan al mando de un jefe llamado /Bûpur/, contra los indígenas /Siepien/ al mando de un jefe llamado /Jempod/. El río Docordó, afluente del río San Juan en su cuenca media, los ríos Cucurrupí, Tordó Copomá, Taparal, Calima y Docordó, afluentes del San Juan en su cuenca baja, y los ríos Togoromá, Pichimá, Orpúa, Ijuá y Docampadó, cuencas de serranía de la Costa Pacífica al norte del Delta del San Juan, fueron poblados por los Wounaan en la época de la conquista por los españoles. Luego, los Wounaan volvieron a poblar las riveras del medio y del bajo río San Juan. 39 2.4. Otros relatos de la tradición oral Wounaan y /Siepien/ En nuestra tradición oral, las historias se entrelazan con lo que la cultura occidental conceptualiza y define como mitos, leyendas y cuentos. Sin embargo, después de haber presentado las versiones de las historias del origen, los territorios ancestrales y los mundos de los universos Wounaan y /Siepien/, hacemos a continuación una clasificación preliminar de otros relatos de nuestra cultura, que así sean diferentes, algunos de ellos están relacionados entre sí y con las anteriores historias. A cada relato se le asigna su nombre en español y/o Wounaan y se le clasifica en un uno de los siguientes cuatro grupos de relación: Relatos relacionados con el origen de los Wounaan y los /Siepien/ y los mundos de sus Universos. Estas narraciones están ligadas a algún suceso donde interviene /Ewandam/, nuestro dios, ya sea desde los tiempos de nuestro origen y poblamiento ancestral en este mundo, hasta su paso por el mundo de los Ãhãrmia. A su vez, algunas narraciones están conectadas entre sí y tienen cierta secuencia, como se mencionan a continuación: • • • • • • La gran inundación en Durrapdurr y la Pareja que se pegó y convirtió en piedra /Durrapdurr maigmua Uui Emkhooi Dui Khaartarr/. La mujer que se volvió Pájaro Luna /Woun Jirakag Patarr/. Los gemelos que nacieron de la pantoriilla /Bu phurrsir ee thaabatarr khuun/. Los Chagpien y los Piraza /Chagpien Piraz nan dui/. Los seres de Waspien /Waspien igkhaa/. Los seres de /Ãhãrmia igkhaa/. Relatos relacionados con los territorios ancestrales Tienen algún nexo con fenómenos naturales y la formación y los cambios de elementos físicos de nuestros territorios, como son el agua, los ríos, el mar y las montañas. También tratan algunos acontecimientos en relación con nuestro paso y el de otros seres por diferentes lugares y épocas de nuestros territorios. • • • • • • • • Origen del agua /Ceibo pa do patarr/. Cambio de la cabecera del río y el mar. La tortuga que cambió el curso del río San Juan /Khoodau Dochaar ãsietarr/. El Armadillo que pasó del río San Juan al Baudó /Epur Baud gar obertarr/. El origen de la candela. El origen del terremoto /Daupeer uui jeb ee matarr/. El Woun que se convirtió en relámpago /Woun Pagthumag patarr/. El /Jerpod/. 40 Figura 3. Dibujo por un niño de la salvación en Durrapdur 41 Relatos relacionados con los cultivos y frutos silvestres Estas narraciones se centran en los retos que le hizo el diablo /Dosat/ a dios /Ewandam/, a cerca de la creación de diferentes cultivos, de los cuales quedaron existiendo algunos que son del diablo y otros que son de dios. Estas apuestas, también se hicieron sobre algunos frutos silvestres. • • • • • El El El El El origen origen origen origen origen del plátano /Maach Aai opod/. del maíz /Maach Aai pedau/. de la caña /Maach Aai chojo/. del chontaduro /Maach Aai chor/. del ñame /Maach Aay buquier/. Relatos relacionados con los animales En un principio de nuestros universos, la mayoría de los animales eran gente que luego se convirtió en animales. Las siguientes narraciones tratan cómo algunos animales se convirtieron en gente y llegaron a tener mujer o marido. • • • • • • • • • • • • • • • • • El mono que se convirtió en Woun y cogió mujer /Poor Wounag Patarr/. El guatín que se convirtió en Woun y cogió mujer – /Woun Echkhumag Patarr/. La garza que se convirtió en Woun y cogió mujer -/Õhõ Wounag Patarr/. El venado que se convirtió en Woun y cogió mujer /Sũrr Wounag Patarr/. El saíno que se convirtió en Woun y cogió mujer /Beer Wounag Patarr/. La rana que se convirtió en Woun y cogió mujer - /Babaumiê jaai wai sierr/. La nutria que cogió mujer - /Do ai uui wai sierr/. El ratón espina que se convirtió en mujer y cogió marido. La /Woun uui/ que se convirtió en el pajaro Teteumie. La Culebra que se convirtió en Woun y cogió mujer. El gringo que se convirtió en canario /khũrr/. La Guagua que se convirtió en mujer. La mujer y el sábalo - /Baaur uui dui/. Anteriormente la garza fue un Woun – /Warr Kokolot Woun atarr/. La culebra que tenía mujer - /Nemkhõr uui wai sierr/. La mujer que se convirtió en sirena. El origen de la piangua. 42 2.5. Rogativas de la creencia religiosa Wounaan y /Siepien/ Los Wounaan y /siepien/ rogamos a nuestro dios /Ewandam/ o /Akore/, desde los tiempos ancestrales hasta el presente, con la orientación de nuestros familiares mayores y de líderes religiosos que son hombres o mujeres de avanzada edad y de buen corazón, quienes enseñan mediante consejos para vivir en armonía y la práctica de las rogativas. Algunos de estos líderes tienen el poder de ir a través de sueños al mundo de dios, donde él les da a conocer su palabra y lo que va a suceder en el futuro, con el fin de que lo trasmitan a la gente /Wounaan/ y /Siepien/ que los rodea en este mundo. Tradicionalmente, nuestros ruegos se fundamentan en llevar una vida buena, conforme a los consejos de los mayores y en ser librados de los siguientes males: • • • • • • • • • • La gran inundación como la que ocurrió en Durrapdur. La destrucción del mundo en el que habitamos. Las tormentas, ventiscas y otras inundaciones. El extravío de la gente o de su alma en este o en otros mundos. Las diferentes enfermedades y maleficios. El diablo y los distintos demonios que existen en este mundo. La escasez y falta de alimentos, plantas, peces y otros animales. Las pestes que dañan los cultivos. Las guerras que tuvieron con los indios /Jurannaan/ (Cunas). Las guerras y otros males de los blancos. La principal forma de rogar de los Wounaan es la canoita /kuwiug/, un ritual que incluye diferentes cantos y danzas alrededor de una pequeña canoa, labrada preferiblemente de madera de Balso Macho /Thaik kierr/ (ver Figura 4). Una o más mujeres, con un armonioso y agudo tono de voz, son las que cantan tocando cadenciosamente, al unísono con dos palos de madera en distintas partes de la canoita, lo que genera diferentes ritmos y tonos de percusión. Uno o más hombres se encargan de tocar unos instrumentos de viento llamados /orsir/, elaborados del tallo de una planta similar al bambú que tiene el mismo nombre (/orsir/). Se tocan un /orsir/ largo y grueso que emite sonidos graves, y otro delgado y corto que genera sonidos agudos. Los hombres tocan el /orsir/ alrededor de la canoita o a parte, en pequeños grupos y rondas, en los que también danzan (ver Figura 4). El resto de mujeres y hombres y los niños, bailan y hacen coros a los cantos principales que corresponden a los ruegos hechos a /Ewandam/. Los pasos de las danzas del /kuwiug/ son pausados y suaves, y se hacen en forma circular, rodeando la canoita, aunque los hombres le imprimen más fuerza y rapidez a los pasos. 43 Figura 4. Rogativa de la canoita /Kuwiug/ En tiempos antiguos, la canoita no solo se tocaba para rogar, también era un medio de comunicación entre comunidades distantes, que según el mensaje enviado, acudían al llamado o lo duplicaban para que otras comunidades lo recibieran. Estos mensajes se enviaban en clave para preparar estrategias de guerra o para convocar a grandes rogativas o festividades. 44 La rogativa de la canoita se hace en un casa grande u otro lugar cerrado, inicia con la primera luz del día y se prolonga durante la mañana hasta antes del medio día. La canoita se ubica en el centro del recinto, colgada de bejucos e inclinada hacia el oriente, donde sale el sol. Otra forma de rogativa de los Wounaan es el aguacerito /Noseg Chain/, una serie de danzas al ritmo de diferentes cantos que se hacen con el toque de la tambora y la percusión de dos palos de madera sobre una batea en forma de canoa o una tabla también de madera (ver Figura 5). En el aguacerito, los adultos y niños que danzan, también responden en coro a los cantos principales, a cargo de una mujer o más mujeres de voz aguda y armoniosa, que corresponden a los ruegos que hacen a /Ewandam/. El aguacerito se danza en uno o más pares de filas en las que una persona se ubica frente a otra -por lo regular se hace una fila de hombres frente a una de mujeres-. Las mujeres se cogen de las manos y los hombres, aunque también lo hacen, prefieren pasarse los brazos sobre los hombros. La danza se hace en un vaivén de las filas hacia delante y hacia atrás, dando dos o tres pasos avanzando y los mismos pasos retrocediendo, como si las filas opuestas se estuvieran persiguiendo. Los hombres dan pasos más amplios y fuertes que las mujeres. Otra manera de danzar el aguacerito es en rondas, en las que se ponen las manos sobre los hombros de persona que va adelante. Estas rondas cambian de dirección cuando los hombres y niños emiten un silvido repetitivo. Los /Siepien/ tienen una forma de rogar llamada /Karichipari/, ritual que también consiste en una serie de danzas al ritmo de cantos hechos por una o más mujeres de voz aguda, acompañados de tambora. Estos cantos son las rogativas que se hacen a dios /Akore/. El /Karichipari/ difiere del aguacerito en los cantos y en los ritmos que se hacen solo con tambora, sin emplear la percusión de los dos palos sobre la batea o tabla de madera. El /Karichipari/ también se danza en pares de filas opuestas y en rondas, aunque hay mayor variedad en los ritmos y cantos que son coreados por las mujeres, hombres y niños que danzan. En el aguacerito y el /Karichipari/, cada canto y ritmo se prolonga aproximadamente media hora, hasta que se cambia a otro mediante un anuncio que hacen los hombres y los niños, silvando repetitivamente y golpeando el piso con más fuerza a cada paso de la danza. Estas rogativas se hacen en tambos o casas grandes, durante las horas de la tarde o de la noche. 45 Figura 5. Cruz y Santos, objeto de las oraciones antes de las danzas de la rogativa del /Karichipari/ La religión católica no es la única que ha generado factores de cambio cultural en las etnias /Siepien/ y Wounaan de la zona del bajo San Juan, también lo han hecho otras religiones de diferentes sectas evangélicas que se introdujeron a las comunidades en las últimas décadas del siglo XX. 46 En el presente, las rogativas se hacen por lo regular durante las fiestas tradicionales de la zona, que son Semana Santa, San Juan y las festividades de Diciembre; festividades propias de la cultura occidental que con el transcurso de varios siglos de colonización, se han hecho tradicionales entre las comunidades indígenas y negras de la zona. Es por esto que actualmente la mayoría de las rogativas se hacen y se confunden con estas fiestas, se realizan durante uno o dos días sin cumplir algunos de los reglamentos que tienen los rituales desde tiempos antiguos y que son: • • • • • • • Hacerlas dentro de un tambo /Dichardí/ o un rancho /Bujío/ que sea exclusivamente para las rogativas y que quede retirado. Los hombres deben vestir con guayuco y llevar corte de mate, corona de chaquira /poorsir/ y arete grande de plata /chirchir/. Las mujeres deben vestir con paruma, chaquiras y llevar /pajugdee/ - un adorno hecho de la rama de una planta perfumada. Hombres, mujeres y niños deben pintarse con Jagua /kipar/ y con /vija/ o achiote. No emborracharse con licores fuertes. Sí se puede tomar guarapo /nagchó/ y chicha de maíz /penaga/. Conseguir suficientes alimentos, pescado y carne de monte para consumirlos durante los días de las rogativas. No hacer bulla y guardar buen comportamiento durante los momentos en que se hacen las rogativas. En tiempos antiguos, las rogativas también se hacían durante las fiestas tradicionales, pero hasta no terminar los ruegos no se podía seguir con las festividades como lo eran la “jovenciada” de las niñas y otras fiestas donde se hacían cantos y bailes diferentes a los de las rogativas. Hoy, durante las rogativas en las fiestas, no se cumplen los reglamentos de las ritos tradicionales, ya que estos se transgreden de la siguiente manera: La mayoría de los hombres visten pantalón y camisa y calzan zapatos y no se pintan con jagua; solo algunos visten pantaloneta en vez de Guayuco para danzar. Se puede decir que es muy raro que un hombre ruegue sin camisa y con Guayuco, como lo manda la tradición. Algunas mujeres visten brasier y blusas, y aunque se pintan con jagua, también lo hacen con colorete y maquillaje occidental. Algunos hombres toman licores fuertes como el viche (destilado artesanalmente de la caña de azúcar), el aguardiente y el ron. Se oye a alto volumen la música occidental moderna (vallenato, salsa, merengue) que suena en otras casas donde no están rogando. No se consigue suficiente carne silvestre, pescado y otros alimentos para hacer la rogativa. Algunos jóvenes hacen bromas y bulla mientras la gente está rogando. 47 Otra diferencia del /Karichipari/, es que a veces le anteceden a los cantos y las danzas, unas oraciones que se hacen de rodillas o sentados frente a una cruz de madera y varias estatuillas de la Virgen y uno o más santos de la religión católica. Principalmente en Semana Santa, se danza parte del /Karichipari/, levantando una pesada cruz de madera adornada con cogollos de palmas y monedas antiguas, que es circulada entre los participantes de la rogativa. Lo anterior, hace evidente una influencia de la religión católica en las formas de rogativa /Siapien/ que no es tan visible en las rogativas Wounaan. Sin embargo, varias de las comunidades Wounaan practican la rogativa del /Karichipari/ debido a que los primeros hombres y mujeres /Siepien/ provenientes del río Saija enseñaron esta forma de rogar a sus familiares y descendientes de comunidades Wounaan. La influencia /Siepien/ en las creencias religiosas y rogativas de las comunidades Wounaan del bajo San Juan, se debe también a que los líderes religiosos de los /Siepien/ del río Saija, el /Tachiakore/ y la /Tachinave/, han llegado en diferentes épocas a ejercer y a impartir su liderazgo y creencias religiosas en la zona. Actualmente la /Tachinave/ (Nuestra Madre), es una mujer mayor de la etnia /Siepien/, originaria del río Saija, quien heredó de su padre /Tachiakore/ el liderazgo religioso que a su vez le fue legado de sus mayores. Ellos han llegado a las comunidades con más influencia /Siepien/, como lo son Papayo, Chachajo, Puerto Pizario y Tiocilirio, donde han permanecido durante varios meses orientando la religión y las formas de hacer las rogativas. Es así, que en estas comunidades hace muchos años no se ruega con canoita ni con aguacerito, sino con /Karichipari/ (Figura 6). Las comunidades no practican los ritos ni sacramentos de la religión católica, con excepción del bautismo que a veces es impartido por algunos sacerdotes presentes en la región. Sin embargo, esta religión introducida en la época de la Conquista española, ha seguido influenciando las creencias y cultura Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan, mediante el establecimiento de diferentes misiones que trajeron consigo la evangelización y la educación escolar occidental en el presente siglo. Un caso más reciente y traumático, es la secta evangélica y apocalíptica del autodenominado cristo negro, que sumió durante más de 10 años a cuatro comunidades de la zona en un culto que les prohibió muchas de sus creencias y costumbres, la educación escolar y la medicina tanto tradicional como occidental; además, les exigía varios diezmos en dinero al año y ocasionó su división en dos o tres comunidades, cuando se dividieron fracciones no creyentes de sus poblaciones. A pesar de la mortalidad que les ocasionó dicha secta, las poblaciones de estas comunidades sobrevivieron biológica y culturalmente. Hoy después de 12 años, solo tres comunidades continúan el culto aunque con menos prohibiciones. 48 Figura 6. Baile del Guatín /Echkhum jenkha/, propio de la etnia Wounaan. Durante la expedición del Plan de Vida, en ninguna de las comunidades /Siepien/ se presentó alguno de los bailes tradicionales Wounaan, tampoco se hizo alusión o representación de algún baile similar propio de la etnia /Siepien/. En estos bailes son diferentes a las danzas de las rogativas y la amplitud y fuerza de los pasos de los hombres no es mayor a la de las mujeres como sí lo es en los de las danzas de las rogativas aguacerito y /Karichipari/. 49 2.6. Las fiestas y bailes tradicionales de los Wounaan En las fiestas tradicionales, se bebía abundantemente chicha de maíz y se hacían bailes tradicionales que son diferentes a las danzas de las rogativas, ya que estos le pertenecen al diablo /Dosat/ y fueron enseñados por él desde tiempos muy antiguos. Los siguientes bailes son propios de la etnia Wounaan: Baile Baile Baile Baile Baile Baile Baile Baile del Canario (pelícano) /Cur jenkha/ del gallinazo /Acos jenkha/ del pájaro /Piskokhordit jenkha/ del Guatín /Echkhum jenkha/ del abejorro /Sasai jenkha/ de la mariposa /Aphep jenkha/ del /Jempod/ del Tigrecito /Khum chai jenkha/ En estos bailes participan las mujeres en un grupo y los hombres en otro. En la mayoría de los bailes estos grupos forman dos filas indias frente al sitio donde se ubican las personas que tocan los instrumentos musicales. Los bailes se hacen al ritmo de la tambora y del /phiphan/ o carrizo, un instrumento similar a una flauta dulce, que es tocado principalmente por hombres mayores quienes conocen todo el repertorio musical de los bailes. Las notas del /phiphan/ y la tambora varían con cada baile que dura entre 20 y 30 minutos. Los bailes del Canario (pelícano), el gallinazo, el /Piskokhordit/ y el Guatín, se hacen en filas e imitan algunos movimientos propios de estos animales, como son la forma de volar de las aves y la de saltar y silvar del Guatín; en este último, los hombres son los que silvan. Los bailes de la mariposa y el abejorro se hacen en grupos de cuatro, por parejas de una persona frente a otra en una pequeña ronda. Estas parejas imitan la forma de volar de estos grandes insectos desplazándose hacia el centro de la ronda. El baile del /Jempod/ (un cacique enemigo de los Wounaan quien robaba sus niños), también se hace en dos filas, una de mujeres y otra de hombres. Los bailes en fila india, dan el espacio y el tiempo para que cada una de los participantes encabece la fila bailando durante pocos minutos frente al sitio de donde proviene la música. Al terminar su turno, la persona que encabezaba la fila pasa a la cola dando los pasos propios del baile (Figura 7). El baile del Tigrecito es el único que se hace sin la música del /phiphan/; se baila al ritmo de la tambora y los cantos individuales o en grupo de mujeres y hombres, coreados por los adultos y niños que bailan. Este baile se hace en dos filas, una de hombres frente a una de mujeres haciendo desplazamientos laterales (Figura 7). 50 Figura 7. Ancianas entonando un canto tradicional Wounaan Al igual que los bailes, estos cantos son y provienen del diablo /Dosat/ quien los enseñó en tiempos de los primeros ancestros. El contenido de las letras de estos cantos hace alusión a circunstancias propias de la vida de la gente y de algunos animales. Su interpretación se hace con o sin consumo y efectos de bebidas alcohólicas. 51 2.7. Otros cantos de la tradición Wounaan y /Siepien/ Existen una serie de cantos diferentes a los que se hacen en las danzas de las rogativas y en los bailes tradicionales. Estos cantos son hechos sin instrumentación alguna y son entonados por mujeres y hombres en momentos de la vida cotidiana y durante las fiestas (Figura 8). Se hacen cantos a algunos animales como la tortuga, la garza, el Ochoro (un lagarto basilisco), en los que se alude a la vida y comportamiento de estos animales en relación con comportamientos propios de los humanos. También se hacen canciones para jóvenes /meukhar ewan dem/ y muchachas /meunkhar dauper dem/ enamorados y cantos a otros motivos de la vida cotidiana. Estas canciones son enseñadas de los familiares y allegados mayores a los menores, desde que son niños o jóvenes. Estos cantos se entonan en los quehaceres domésticos, durante la elaboración de artesanías y en las jornadas de trabajo fuera de las viviendas, cuando a bordo de canoas la gente se dirige a los cultivos, las faenas de pesca y cacería. Las canciones son interpretadas por personas solas o en presencia de más gente, incluso hay canciones que se cantan durante los trabajos agrícolas y en minga. Durante las fiestas, también se hacen cantos propios de mujeres y de hombres embriagados. Estos cantos son más de la inventiva de quienes los interpretan que de letras previamente compuestas. En algunas de estas canciones, los intérpretes se lamentan y compadecen de sí mismos por un quebranto de amor, repitiendo su nombre o apellido entre las notas. Esta modalidad de cantos, a veces se hacen a dúo, por parejas de mujeres o de hombres, que se abrazan, toman licor y cantan moviendo sus cuerpos mediante un suave y cadencioso baile. Esta manifestación cultural se ha venido olvidando en las últimas décadas debido a que las mujeres y hombres ancianos o mayores que saben los cantos, no los interpretan ni enseñan por evitar las burlas de las demás personas de la comunidades, sobre todo de los jóvenes e incluso de sus propios familiares quienes se han atrevido a prohibirles que canten. La mayoría de los niños y jóvenes no saben los cantos tradicionales, porque ya no los escuchan ni aprenden de sus mayores como en tiempos pasados. Hoy, oyen y aprenden más canciones de la música vallenata, salsa y merengue, en las radiograbadoras y equipos de sonido que poseen algunas personas en las comunidades. 52 Figura 8. Vestido actual de las mujeres Wounaan y /Siepien/ Es muy importante para las dos etnias, que las mujeres aún vistan de la forma tradicional -con paruma y torsidesnudas-, porque así ellas eventualmente lleven blusa y pantalón para ir a Buenaventura y otras ciudades del interior del país y permanezcan durante mucho años viviendo entre la cultura occidental, al regresar a sus comunidades vuelven a la forma de vestir propia de su cultura. Mientras que los Hombres han cambiado totalmente el vestido dentro y fuera de la zona porque la manera tradicional de vestir–el guayuco- en la práctica se ha venido perdiendo casi en su totalidad. 53 2.8. El vestido de los Wounaan y /Siepien/ Antes de llegar las telas de la cultura occidental como los lienzos y paños a la zona del bajo San Juan, los hombres vestían con guayuco y las mujeres con paruma, que elaboraban con la corteza del árbol Damagua (Poulsenia armata) o /therju/, que también se ha empleado hasta el presente para hacer tendidos de dormir. El guayuco era una banda de la corteza que los hombres se amarraban a la cintura con una cuerda o faja hecha de la fibra de bejuco o de otra planta silvestre. En la parte del frente la banda se colocaba más larga que en la parte posterior. La paruma era un corte largo y ancho de corteza que se envolvía a manera de una falda sobre la cintura y quedaba a la altura de las rodillas (Figura 9). Luego, cuando llegaron las telas de la cultura occidental al bajo San Juan, los guayucos y parumas no se hicieron más de Damagua si no de dichas telas. Actualmente, la mayoría de las mujeres visten con paruma de varios tipos de telas y muchos colores, las emplean solas en las actividades cotidianas de la comunidad y las viviendas. Cuando van a las actividades agrícolas, se visten con camisetas viejas para cubrirse del sol y de los insectos. En las fiestas, las mujeres visten con paruma nueva, blusa o brasier que emplean como blusa y no usan clazado. Algunas mujeres emplean calzado como chancletas, sandalias y eventualmente zapatos cerrados, cuando salen de la comunidad o de la zona, pero generalmente lo usan con pantalones y camiseta. A partir de que fueron introducidas las camisas de la cultura occidental a finales del siglo XIX, la mayoría de hombres que salían de la zona comenzaron a emplearlas con guayuco en sus viajes a Buenaventura y otros sitios de la región. Luego, las camisas no solo se emplearon para los viajes sino también para las fiestas y otras ocasiones en las comunidades. Actualmente, solo algunos ancianos y hombres mayores visten en la zona con guayuco y camisa o camiseta, y hace varias décadas no usan este atuendo para viajar, ya que en vez de guayuco emplean pantaloneta o pantalón y zapatos. Desde esta época, la mayoría de los hombres, desde muy jóvenes, comenzaron a vestirse en la forma de la cultura occidental, con pantalón y camisa o camisetas y zapatos o botines, no solo para ocasiones de viaje y fiestas sino en la vida cotidiana. Los niños y niñas permanecen desnudos o con ropa interior hasta aproximadamente los 6 o 7 años de edad, cuando inician la escuela y sus padres los visten con camiseta y pantaloneta a los niños y parumas a las niñas, con el fin de que no se presenten desnudos. Tanto niños, como jóvenes y mayores, calzan botas de caucho durante las labores agrícolas, de pesca, caza y recolección, para prevenir accidentes. 54 2.9. Pintura facial y corporal La pintura sobre el rostro y el cuerpo con las tintas de los frutos del árbol Jagua (Genipa americana) y del arbusto Vija o Achiote (Vixa orellana), es una práctica cultural tradicional de los Wounaan y /Siepien/. Desde tiempos ancestrales, la pintura facial y corporal reviste diferentes significados que van desde lo sagrado hasta lo lúdico. La pintura protege de malos espíritus, demonios, maleficios y enfermedades. Niños, mujeres y hombres se pintan en diferentes etapas de la vida. Como medida preventiva y curativa, a los niños pequeños se les pinta la cara y el cuerpo con Jagua antes y durante algunos tratamientos que hace el /Benkhun/ -Jaibaná o médico tradicional. Ciertos tratamientos de enfermedades de jóvenes y adultos por el Jaibaná, requieren de pinturas faciales y corporales con Jagua, que no tienen directamente un efecto terapéutico sino un carácter ritual. Los jóvenes que se inician como mujeres y como hombres, son pintados en su rostro y cuerpo con figuras y formas propias del ritual de iniciación. Los niños, jóvenes y mujeres que participan en las rogativas, deben pintar sus rostros y cuerpos de manera apropiada para rogar, con los dibujos de figuras que representan lo sagrado, lo relacionado con dios. También existen una serie de dibujos corporales con Jagua y Vija que se emplean en diferentes ocasiones de la vida como son el enamoramiento de los jóvenes y las diferentes fiestas. La pintura con Jagua y Vija ha venido desapareciendo entre las mujeres, principalmente debido a la introducción del colorete, cuya coloración roja es muy similar a la Vija, y de otros cosméticos de la cultura occidental. La pintura con Jagua, aunque no se ha reemplazado por algún cosmético occidental, ha declinado en su uso, principalmente entre los hombres que salen de la comunidad y de la zona durante largas o breves permanencias en la cabecera municipal del Litoral del San Juan, el Puerto de Buenaventura y otras ciudades del interior del Chocó y el interior del país. Esto se explica porque la Jagua, una vez aplicada sobre la piel, permanece durante varias semanas así se lave con agua y jabón. Durante este tiempo, los hombres tienden a salir de la comunidad y de la zona a sitios donde tendrán algún contacto con gente negra y mestiza, ante la cual se avergüenzan si los ven pintados con Jagua o con Bija; la curiosidad y burla de algunas personas negras y mestizas, son un factor de abandono de esta manifestación cultural entre los Wounaan y /Siepien/. 55 Figura 9. Pintura corporal y facial con tinta del fruto del árbol Jagua Esta pintura se extrae de la carnosidad del fruto y se aplica con palillos en forma de un pequeño tenedor. La tintura de color azul muy oscuro de la Jagua, permanece en la piel durante varias semanas. En la actualidad, las mujeres mantienen más esta manifestación cultural que los hombres. Las mujeres, desde muy jóvenes, aprenden y saben pintar los diferentes dibujos correspondientes a las ocasiones en que se llevan. 56 2.10. Adornos personales El vestido tradicional de los hombres y las mujeres, además de las pinturas corporales y faciales, principalmente en rituales y fiestas, se acompaña de una serie de adornos o accesorios que son también elaborados con materias primas naturales del medio o con materiales introducidos por la cultura occidental como son la plata y las cuentas o chaquiras de vidrio o de pasta. El hombre usaba guayuco nuevo, corte de pelo en forma de mate y se hacían grandes orificios en los las orejas, con el fin de ponerse los siguientes adornos: /Chirichiri/: grandes orejeras o zarcillos de figuras en laminillas de plata martillada y pulida, elaborados de monedas antiguas por algunos indígenas artesanos que se dedicaron a este oficio. /Poorsir/: diadema o corona que se usa a la altura de la frente fabricada de chaquiras o pequeñas cuentas de vidrio o de pasta de muchos colores. /Ursir/: cinturón o faja de chaquiras que se empleaba encima del guayuco. Collares de chaquiras y de plata: al igual que el /chirichiri/, los adornos de plata de hombres y mujeres incluyen figuras redondas, triangulares en forma de medialunas. Hasta el día de hoy, muy pocos artesanos siguen elaborando y vendiendo estos adornos. Sortijas y /juacó/ brazalete: se hacían martillando monedas antiguas de plata. /Pajudé/: adorno hecho con un trozo del tallo de plantas que tienen un perfumado olor. Se coloca en los grandes orificios hechos en los lóbulos de las orejas. Chaleco: esta prenda, preferiblemente de paño, era adornada con monedas antiguas de plata; la usaban durante las fiestas los jóvenes pretendientes de muchachas. Es sorprendente que las mujeres se adornaran menos que los hombres en tiempos antiguos; sólo llevaban parumas nuevas, collares de chaquiras y /pajudé/ o grandes flores en el cabello y el orificio del lóbulo de las orejas. Eventualmente, en algunas ocasiones especiales de rituales y fiestas, usaban diademas echas de chaquiras. Desde hace varias décadas, las mujeres también comenzaron a emplear zarcillos y collares de plata de moneda antigua, pulseras de chaquiras y nuevos aretes, ganchos y anillos de la cultura occidental. 57 Los niños, desde muy pequeños, son adornados con collares hechos de chaquiras, pequeñas conchas de moluscos y dientes de Tigrillo, Venado y animales silvestres. Estos collares también tienen una función protectora contra algunos males. Figura 10. Anciana con adorno de flores Ya son pocos los mayores y ancianos que guardan, y mucho menos los que emplean, los adornos tradicionales; esto se debe al cambio, escasez y carestía de las materias primas de los adornos. Los viejos dicen que en tiempos de los primeros ancestros, muchos de los adornos eran de oro, luego vinieron los españoles y agotaron este mineral de la región y trajeron las monedas de plata y las cuentas o chaquiras de vidrio. Hoy en día, los adornos de chaquiras de pasta son los más usados, sobre todo entre los jóvenes de ambos sexos. Son poco comunes los collares de conchas y dientes de animales, y los perfumes naturales extraídos de algunas plantas, se mezclan o reemplazan con perfumes baratos de la cultura occidental. 58 2.11. Lo que dice la prehistoria y la historia sobre el territorio tradicional de los Wounaan y los /Siepien/ Según Salgado López y Stemper (1995), la identificación de 20-25 sitios arqueológicos (cerámicos) entre la Bahía de Buenaventura, el bajo río Calima y el bajo San Juan, confirma la inferencia de los documentos históricos del siglo XVI que la densidad demográfica era baja, tanto en estas zonas como en todo el litoral Pacífico, en cualquier período prehispánico. Estos autores tienen la impresión que había más área residencial en el período prehispánico tardío (800 hasta 1500 D.C.) que en el temprano ((1.000-500 a.C. hasta 200-300 d.C.). La evidencia más antigua de plantas utilizadas por los habitantes prehispánicos de la ocupación más temprana que se ha podido documentar en el bajo San Juan (II milenio A.C.), son los macro-restos vegetales de palmas de chontaduro (Bactris gasipaes, Don Pedrito (Oenocarpus mapora), Táparo (Orbygnia cuatrecasana) y Zancona (Socratea exhorriza); también la presencia de dos granos de maíz que ratifican su cultivo para esta época en la región; todos los anteriores son restos hallados en estudios paleoetnobáticos en las cercanías de la confluencia del río Calima con el San Juan (Romero, 1994). Estudios palinológicos (de granos de polen) en la confluencia de la quebrada Ordoñez con el río Calima, permiten plantear la hipótesis de que en un período tardío, los antiguos pobladores hacían las unidades domésticas y cultivos, en la cima de una colina, a unos 15-20 metros de altura sobre dicha confluencia. Los granos de polen indicaron la presencia de frutales y la existencia de bosque al lado de las viviendas sugiere que los residentes de Ordoñez debieron practicar una agricultura forestal itinerante (Romero, 1994). El patrón de asentamiento del período tardío se distingue del temprano por más uso de terrazas, lomas y colinas como áreas residenciales. La escogencia de estos sitios altos parecen reflejar la necesidad de cultivar en terrenos no inundables y de tener cierto control sobre el tráfico fluvial al observar con menos dificultad aguas arriba o abajo desde los lugares elevados (Salgado López y Stemper, 1995). Probablemente la primera pista sobre los antiguos agricultores del Chocó, son los perfiles de las excavaciones que los antropólogos G. y A. Reichel-Dolmatoff (1962) describieron en el sitio Murillo, ubicado en un barranco del medio San Juan, con un metro de espesor de sedimentos arqueológicos grises (suelos pardos o antrópicos). Los instrumentos de piedra, las piezas de cerámica reconstruidas, las plantas carbonizadas, las huellas de pilotes, el barro quemado de fogones y las observaciones etno-arqueológicas de viviendas palafíticas de los Wounaan, fueron fundamentales para identificar áreas de actividad y unidades domésticas en el Bajo San Juan. Los probables suelos antrópicos (suelos pardos) demuestran una intensificación agrícola exitosa en un paisaje con supuestos límites medioambientales. 59 Asentamientos Tumaco-La Tolita (siglos IV a.C. y III D.C. sobre los firmes (bancos de arena) en los manglares cerca de Tumaco, el río Patía y la Bahía de Buenaventura (West, 1957; Patiño, 1990 y 1991), indican que los indígenas mineros-navegantes de hace 2.000 años escogieron para residir este medio ambiente, sin restricciones como crecimiento demográfico o vecinos belicosos que los obligaran a vivir en los manglares. Bouchard (1991), conceptualiza la expansión del arte Tumaco-La Tolita como un probable resultado de la búsqueda de oro aluvial por parte de indios navegantesmineros o colonizadores expandiendo el límite norte de las unidades políticas Tumaco-Tolita. Tal hipótesis crea más espacio en la reconstrucción de la conducta humana antigua, para inferir la voluntad e intención de la gente prehispánica. Al comienzo de la Conquista, entre 10 y 20 grupos culturales habitaban la región del Pacífico (Romoli 1976, Patiño 1988, Vargas 1990). Existe evidencia histórica de que los Wounaan habitaban el bajo San Juan en el siglo XVI (Romoli 1975, 1976). En 1525, el conquistador Pascual de Andagoya partió de Panamá para incursionar hacia el Pacífico llegando a la provincia de Birú (Cuna) -zona cercana al actual Cabo Corrientes- donde “pacificó” a gente que luego llevó con él hasta el río que llamó San Juan, donde naufragó y se vio enfermo. Andagoya regresó a Panamá y entregó su empresa a Diego de Almagro y Francisco Pizarro. Despúes de cuatro años de intentos fallidos, Pizarro viajó por el Litoral Pacífico hasta encontrar las provincias de los Capusigra y Tamasagra (posiblemente identificados con los indios Chocó), distinguidos por emplear flechas envenenadas y ser enemigos de los indios de Biru. Después de ser emboscado por los Capusigra y Tamasagra, Pizarro pasó a la Isla de Las Palmas y a la provincia de los Petres, adelante del río San Juan (Vargas, 1993). La Gobernación del San Juan surgió de las exploraciones de los españoles a lo largo de la Costa Pacífica. En 1538 le fue entregado el título de gobernador del San Juan a Andagoya mediante una Cédula Real que tenía como límites la punta de Garachine (norte) hasta el río San Juan de Micay al sur (sur). El ejército al mando de Andagoya salió de Panamá con el fin de conquistar y poblar de españoles las tierras de los Barbacoa, Waunana, Embera y Cuna que “le fueron adjudicadas” por el rey. El capitán Andagoya exploró la costa cerca del río de los Noanamá o actual río San Juan. Por un camino abierto por los nativos se internó y atravesó la coordillera. En la actual Buenaventura dejó al capitán Ladrilleros al mando de cincuenta soldados, con la orden de construir un puesto de frontera. Pocos días después de haber concluido los soldados su trabajo, los Chocó (Noanamá) atacaron el fuerte y lo quemaron. Por su parte Andagoya continuó hasta el valle del Lili, región en donde Sebastián de Belalcázar fundó la población española de Cali. El Gobierno del San Juan se disolvió rápidamente debido a los conflictos entre Belalcázar (gobernador de Popayán) y Andagoya, por la superposición de las Gobernación del Chocó con la de Popayán en la cuenca alta del Valle del Cauca, zona que ofrecía mayores incentivos para la explotación colonial (según la crónica de Andagoya (1514-1541), citado por Vargas, 1993). 60 Melchor Salazar, gobernador y capitán general desde 1591 de “las provincias de Chocó, Dabaibe y Valle de Baeza”, llegó a Toró y desde ahí envió a Simón Sánchez con doce soldados a hacer frente a los Chocó y a otra gente donde los Noanamá. En persecución de los Noanamá, los españoles recorrieron por primera vez el río San Juan, desde el río Sipí hasta sus desembocaduras. Melchor Salazar describe a los Noanamá como sigue: “Es gente de buena disposición y de buenos rostros. Así hombres como mujeres, traen las más oradadas la ventanas de las narices y en ellas unas perillas de oro fino, tienen oradada la ternilla de la nariz y de ella colgada una argolla de oro que llaman caracuri, traen oradado el labio inferior con cuatro agujeros y en ellos puestos unas tiras de oro de seis o siete dedos de largo a manera de barbas, traen oradadas las orejas y en ellas unos aretes de oro gordos como un cañón de ganzo, traen unas patenas en los pechos rodeadas de muchas conchas marítimas de las que crían las perlas. Es gente baliente, pelean con dardos que tiran flechos de palma, la tierra es sana y fértil y abundante de mayz y frutas y palmas, puercos de monte saynos y mucho pescado y coteas sal...alláronse en este río muchos peces espada viéronse abiertas en esta tierra muchas minas de oro que lanbran los naturales...” (Romoli, 1975). En 1590, un prisionero de guerra Noanamá explicó a los españoles que su nación tenía guerra con los Orocubiraes (Cunas), quienes vivían a cuatro días de navegación. Esta era gente vestida la mitad del cuerpo con mantas gordas, y tierra de sábanas y “questos tienen muchas perlas y se las ponen en el cuerpo” (Romoli, 1975, p. 29). En entrevista que le hizo Salazar, Aricum, nativo de Noanamá, respondió sobre la forma de obtener el oro que lo extraían en los diferentes ríos y quebradas y que la orfebrería la hacían poniendo el metal al fuego y golpeándolo con piedras. A cerca de la manera de obtener las perlas dijo que las sacaban sumergiéndose en el mar. Parece que los buscadores de perlas Noanamá, tuvieron combates con los Orocubiraes, que posiblemente eran los Cuna pertenecientes a la provincia de Birú (Vargas, 1993). Los españoles utilizaron el nombre de Chocó para referirse a los Embera, a partir de una expedición hacia el valle del río San Juan que los pobladores de Toro realizaron en 1573. Actualmente se distinguen cinco (5) grupos dialectales entre los Embera; cinco sociedades cuyos territorios eran contiguos entre el alto San Juan, el alto Atrato y los afluentes orientales del bajo Baudó conforman la nación de los Chocó. Arias de Silva, quien penetró al río San Juan a finales del siglo XVI, describe a los indios Zirambida, habitantes entre los ríos San Juan y Baudó, así: “...bien dispuestos y hermosos de rostro y horadados los labios, narices y orejas (como) muestra de gente rica...”. Luego, el nombre Chocó es extendido por los españoles a los Noanamá (Vargas, 1993). Los Wounaan narran batallas con los indígenas Cuna en los ríos Bebedó y Cajón. Ewandama creó el mundo y la gente en el Baudó y luegon migraron a Noanamá (Lotero Villa, 1977). 61 2.13. PROBLEMAS SOCIOCULTURALES Tabla 10. Problemas y posibles soluciones en la identidad cultural PROBLEMAS Cambio y debilidad de la cosmovisión y costumbres de la cultura Wounaan y /Siepien/. Cambio y debilidad de la identidad cultural tanto Wounaan como /Siepien/. (Figura 11) CAUSAS CONSECUENCIAS Contacto con europeos y criollos durante Olvido de las historias y relatos las épocas de Conquista y la Colonia. ancestrales por parte de mayores y Imposición de la religión católica colonial ancianos que los recordaban hasta hace que prohibió y cambió creencias y algunos años. costumbres ancestrales. Desconocimiento de las historias y relatos Introducción de negros de ancestro tradicionales por parte de adultos y africano en los territorios indígenas y jóvenes. contacto con su cultura occidentalizada. Una parte de la población adulta y joven Migración de los Wounaan y /Siepien/ no cree en algunas de los relatos y durante la Colonia al Pacífico centro-sur. creencias tradicionales. Migración de los Wounaan y /Siepien/ Una fracción de la población, sobre todos durante el siglo XX a Panamá. los hombres adultos y jóvenes, no Apertura de carreteras que llegan a los practican las rogativas ancestrales. territorios tradicionales indígenas. Una parte de la población, sobre todo los Colonización agrícola (paisa y negra) en jóvenes, no practican las rogativas. los territorios indígenas ancestrales. Introducción de sectas evangélicas que División político-administrativa de los prohibieron creencias y costumbres territorios tradicionales indígenas en tradicionales. Repúblicas, Departamentos y Municipios. Los mayores y ancianos que sabían los Introducción de nuevas misiones bailes y cantos tradicionales, los han católicas, que siguen impartiendo esta olvidado total o parcialmente. religión y la educación occidental en las Los jóvenes no conocen los bailes y comunidades. cantos tradicionales. Cambio del patrón de poblamiento Los mayores y ancianos que épocas indígena disperso en parentelas a pasadas usaron los vestidos y adornos concentrado en grandes comunidades. tradicionales, hoy no los emplean. Viajes y permanencia de los indígenas a Los jóvenes y adultos no conocen las Buenaventura, Itsmina, Quibdó, Cali, formas tradicionales de vestir. Bogotá y otras ciudades del interior. Falta de interés, valoración y respeto por Accionar de las organizaciones e la historia y relatos orales y por las instituciones Estatales y no formas tradicionales de rogar, bailar, gubernamentales en los territorios y vestir y adornarse; sobre todo de la comunidades indígenas. población joven. Introducción hace varias décadas de Prevención de los mayores y ancianos que saben las creencias y costumbres, a medios masivos de comunicación (radio y televisión) que llegan a toda practicarlas y enseñarlas, ante la burla la población y comunidades indígenas que les pueden hacer los jóvenes. donde posean dichos receptores. 62 ✸ ✸ ✸ ✸ POTENCIALIDADES Todos los grupos de la población se identifican en algún grado con su etnia y cosmovisión Wounaan o /Siepien/. Las comunidades quieren recuperar las creencias y costumbres que se han declinado y perdido. Los mayores aún mantienen en la memoria o practican las creencias y costumbres. Los jóvenes quieren aprender las creencias y costumbres que no saben. 63 Figura 11. Jóvenes vestidos a la moda. Uno de los factores de la debilidad de la cultura es el modelo de ser joven expuestas principalmente por los medios masivos de comunicación, especialmente la Televisión. En este caso los jóvenes (hombres) visten como los protagonistas del programa colombiano “Pandillas”, muy visto en la zona o como los raperos negros de Buenaventura. 64 GOBIERNO Y AUTORIDAD TRADICIONAL El poder y autoridad tradicional o de tiempos antiguos, es ejercido por los jefes de familias o parentelas extensas; por lo general son hombres y mujeres mayores o ancianos, padres y abuelos de muchos hijos y nietos, que a su vez pueden vivir junto a ellos con su propia familia nuclear - la compuesta por padre, madre e hijo(s). Esta autoridad se incrementa si él o la jefe de la parentela, poseen el dominio territorial sobre muchas áreas de cultivos y selvas para caza, pesca y recolección; un factor determinante para que sus hijos al conseguir cónyuges se queden a vivir junto ellos en la misma vivienda paterna o en una nueva que construyen al lado o muy cerca. Esta nueva familia nuclear trabajará en la tierra de sus padres o abuelos y será respetuosa de su autoridad. La autoridad es mayor si el jefe de familia extensa tiene un poder religioso o espiritual: El poder religioso lo tienen aquellos que son mediadores entre dios /Ewandam/ y la gente; ellos son los que más saben y orientan las rogativas y dan consejos a sus parientes y otras personas para que lleven una vida buena ante dios. Los guías religiosos tienen revelaciones de dios, mediante estados de sueño o agonía. El poder espiritual lo poseen los que median entre los espíritus de este y otros mundos -los /Benkhun/ o médicos tradicionales; ellos son los que controlan los espíritus buenos y malos, los que pueden curar o enfermar a la gente. A pesar de sus poderes, una vez fallecido, el /Benkhun/ llega ante dios /Ewandam/, y si ha sido malo en vida, dios le echa ají en los ojos y lo arroja a la tierra. La autoridad de estos jefes de parentelas extensas se ejerce mediante los consejos y los castigos; cuando se aconseja se previene la violación de alguna norma social, cuando se castiga se ejerce la justicia; así se hacía el control social, se socializaban las normas mediante los consejos y castigos. Los consejos y castigos de los jefes con poder religioso o espiritual son más atendidos y temidos por la gente, porque tienen un poder que va más allá de su autoridad de jefe de familia, por lo cual también son respetados y reconocidos fuera del ámbito de sus propias parentelas, en otras familias extensas y comunidades. Su poder se ejerce en la vida cotidiana, en las rogativas y las fiestas; cuando habían familias reunidas en grandes tambos /Dichardí/, mandaba el jefe más reconocido y respetado. Las familias que poseen estos jefes son más protegidas por ellos mismos. La historia oral Wounaan y /Siepien/ también recuerda que habían jefes de guerra en las batallas contra los indígenas Cuna. Ellos eran escogidos por su valentía y su puntería con el arco y flecha. En la época de la Conquista, Nonam -un jefe guerrero Wounaan al que los españoles llamaron cacique Noanamá-, gobernaba en las zonas del medio y bajo San Juan, desde el poblado /Phoborjreb/ - donde hoy se ubica el poblado negro de Noanamá. 65 Figura 12 Guía religioso realizando la rogativa de la “canoita” Los jefes de familias extensas representaban una forma de autoridad ligada a las creencias religiosas y espirituales, respectivamente representadas por los líderes religiosos y el médico tradicional /Benkhun/. En esta forma tradicional de gobierno y control social, se dieron alianzas entre familias para luchar por el dominio del territorio y defenderse de los maleficios. Estas autoridades tradicionales declinaron en el siglo XX con la introducción de nuevas formas de gobierno generadas por la cultura occidental como son los Cabildos Indígenas. 66 Después, cuando los Wounaan se dispersaron y poblaron el bajo San Juan, se formaron otros jefes guerreros que gobernaron los poblados de /Pidhagdurr/ -cerca de la confluencia del río Munguidó-, la loma de Palestina -cerca de la boca del río Calima- y /Hinguimía Mos/ -hoy playa de Puerto España- en la desembocadura más al sur del río San Juan. Estos jefes guerreros dirigían al pueblo Wounaan en la defensa de sus territorios y su población, frente a la invasión y los ataques de los indígenas Cuna y los españoles. Dichos jefes o caciques, planeaban y comandaban las emboscadas y otras acciones bélicas, desde los mayores poblados Wounaan que se ubicaban en sitios elevados y estratégicos, donde avistaban a lo lejos la aproximación de los invasores. Durante estas épocas de guerra, tanto los guías religiosos como los médicos tradicionales /Benkhuun/, tenían el poder de soñar los hechos que sucederían en el futuro; sobre todo si iban a ganar o a perder las batallas. Es entonces, cuando los líderes religiosos convocaban y orientaban las rogativas que duraban hasta varias semanas o meses que se contaban con las fases de la luna. Hemos visto tres figuras de autoridad y gobierno tradicional: el guía religioso, el /Benkhuun/ o medico tradicional y el jefe guerrero, a los cuales los españoles llamaron caciques; las tres formas de autoridad tradicional, ejercían una política organizativa y de control social y territorial; por lo tanto eran jefes políticos. A todos estos jefes se les llamaba /Maach Poor Poman/ que traduce nuestra cabeza mayor y significa jefe o cacique como lo llamaron los españoles. En algunos casos, el jefe tradicional cumplía la doble función de ser guía religioso y médico tradicional, y si era necesario cumplía con la tercera función de ser jefe o líder en la guerra. Cuando llegaron a su fin las guerras contra los Cuna y los españoles, la lucha por el territorio tradicional y otras necesidades de la población indígena del Bajo San Juan, comenzó a ser orientada y liderada por los jefes de familias extensas, fueran o no líderes religiosos o médicos tradicionales. Con el paso del tiempo los españoles, mestizos y negros, llamaron a estos jefes caciques; y los mismos Wounaan y /Siepien/ emplearon esta palabra del castellano para referirse a sus jefes o autoridades tradicionales. Las formas ancestrales de ejercer autoridad y justicia, eran más propias de las épocas en que existían los grandes poblados como /Phoborjeb/ y /Pidak Durr/; y posteriormente, en las épocas cuando vivían las familias o parentelas en viviendas dispersas, a orillas del río, sus brazos y afluentes. En el siglo XX, con el cambio del patrón de poblamiento disperso a concentrado en las comunidades modernas, estas formas de autoridad han declinado y han sido parcialmente desplazadas por otros formas modernas de autoridad y gobierno. 67 TRANSMISION DE CONOCIMIENTOS Y EDUCACION TRADICIONAL Desde tiempos ancestrales, la educación de los pueblos Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan, se ha dado por medio de la tradición oral y la experiencia; es decir que la transmisión del conocimiento se produce a través de relatos, conversaciones, consejos y la enseñanza práctica de las vivencias y los trabajos propios de estas culturas indígenas. No obstante que desde hace varias décadas se imparte la educación escolarizada de la cultura occidental en las comunidades indígenas de la zona y que esta ha reemplazado en buena parte la educación tradicional, aún se mantienen parcialmente los procesos ancestrales de enseñanza y aprendizaje. De esta manera, distinguiremos tres ámbitos en los cuales se desarrollan los procesos de enseñanza y aprendizaje, relacionados con la educación entendida como la expresión de la socialización de los mecanismos de funcionamiento de una sociedad. Socialización de las normas de convivencia como eje del control social La educación tradicional se daba principalmente en la familia, los padres eran como los profesores y los hijos sus alumnos. Los niños de antes obedecían más a sus padres y les tenían cierto temor, ya que si no lo hacían eran castigados por ellos. Desde la familia se socializaba a los niños y niñas en los roles tradicionales de sus géneros. A las niñas se las preparaba desde muy pequeñas principalmente para labores domésticas, el cuidado de los hermanos y otros niños de la familia, labores agrícolas destinadas a las mujeres, elaboración de cestería, cerámica y ornamentos corporales. En la pubertad, a las niñas se les educaba para llevar una vida familiar, acoger y respetar a su futuro marido. A los niños se les enseñaba desde muy chicos a pescar en el río y las quebradas cercanas, a cultivar, recolectar frutos, tallos y otros vegetales silvestres; y al llegar a la pubertad, a pescar y cazar en lugares lejanos y hacia el mar, reconocer maderas útiles, labrar canoas y construir casas. A los jóvenes se les preparaba para la manutención de la familia y las actividades de la vida pública en la comunidad. Se respetaban mucho a los mayores y ancianos, sobre todo a las autoridades tradicionales como los /Benkhun/ y los guías religiosos, fueran hombres o mujeres. Al pasar frente a un /Benkhun/ o de su casa, se debía guardar silencio y no se podía mirar directamente hacia él. Cuando un líder religioso se encontraba dirigiendo una rogativa, se guardaba silencio y respetaban las normas del ritual. Los consejos se daban más en la familia que en otras instituciones socializadoras como lo son la escuela y el Cabildo hoy en día. Los padres aconsejaban mucho a sus hijos y les daban a conocer a todos sus familiares con el fin de respetarse mutuamente. 68 Los principales consejos que se dan en al ámbito de la convivencia y el control social tradicional de las comunidades Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan, son los siguientes: ♦ Respetar a los ancianos y mayores: esta norma consiste en no burlarse de la forma de vivir y vestir de los ancianos (particularmente de los hombres), escuchar y obedecer sus consejos y órdenes; de la misma forma, no se pueden interrumpir las actividades de los ancianos, incluso se debe pasar despacio cuando ellos están durmiendo. ♦ Respetar a la familia: tanto en las familias nucleares (padres e hijos), como en las extensas (todos los parientes), se deben respetar a todos los mayores (abuelos, padres, tíos y primos mayores) y familiares. De esta manera, se deben evitar relaciones de pareja y alianzas matrimoniales con primos y otros parientes. ♦ Respetar a las mujeres y hombres ajenos. ♦ No tener relaciones de pareja y hacer alianzas matrimoniales con otras etnias, sobre todo con mestizos, blancos y negros. ♦ No se deben infringir las normas y leyes establecidas por la comunidad y no realizar acciones maldadosas. ♦ Ser cuidadoso y tener buen comportamiento al ingerir bebidas alcohólicas. ♦ Tanto los hombres como las mujeres deben tener un buen trato con sus parejas. ♦ No mezquinar los alimentos ni pertenencias que se puedan brindar y prestar a quienes las necesiten. ♦ No hacer mal uso de la medicina tradicional y los poderes espirituales. Enseñanza del trabajo y las actividades cotidianas El trabajo en las culturas indígenas Wounaan y /Siepien/, es un medio de enseñanza de las mayores a las menores generaciones. La observación y práctica de las actividades domésticas, agrícolas, forestales, de caza y pesca, es un libro abierto y lleno de conocimientos para todos los miembros de la familia en cada vivienda, comunidad y cualquier lugar de los territorios que habitan. Este aprendizaje empírico es constante desde los años de infancia hasta los últimos de la vida, y es en los mayores que reposa un extenso y profundo conocimiento del territorio y las técnicas y procedimientos del aprovechamiento (consecusión y uso) de los recursos naturales. Aún los abuelos y padres instruyen a sus nietos e hijos en la adecuación de terrenos y siembra de cultivos, extracción de madera y leña, construcción de viviendas y labrado de canoas, elaboración de implementos y tallas de madera, caza, pesca y recolección plantas silvestres alimenticias, artesanales o medicinales. Las abuelas y madres, adiestran a sus nietas e hijas en las labores domésticas como el cuidado de niños, la preparación de alimentos, algunas labores agrícolas (socolar, rozar caña, entre otras), ciertas técnicas de pesca, la recolección de plantas no maderables y la cestería (canastos, artesanías) y tejido de chaquiras. 69 También se enseña en la práctica a conocer y manejar el territorio, no solo en las actividades económicas antes mencionadas, sino en el ámbito ritual y simbólico, reconociendo y respetando los lugares habitados por diferentes espíritus y los sitios históricos y sagrados de nuestra cultura. Socialización de prácticas rituales y otras manifestaciones culturales Las prácticas rituales jaibanísticas y religiosas, se socializan mediante la participación directa o indirecta de los miembros de la comunidad en algunas de ellas, y a través de un proceso de enseñanza y aprendizaje entre los mayores y los niños y jóvenes. En la mayoría de las ceremonias curativas y religiosas, participan todos los miembros de las familia. Los médicos tradicionales, tongueros, hierbateros y parteras, en los espacios de atención a los mayores, adultos, jóvenes y niños, les enseñan las normas de los ritos, ceremonias y procedimientos de prevención y curación de enfermedades y maleficios. La enseñanza y el aprendizaje de la medicina tradicional por parte del /Benkhun/, los tongueros, hierbateros y parteras, se acompaña de la socialización de los requisitos y reglamentos que deben tener tanto los que enseñan como los que aprenden. Como se describió antes en la identidad cultural, las autoridades religiosas orientan a la población con sus revelaciones, consejos y rogativas, y es así como enseñan a todos los participantes con las oraciones, cantos y danzas. Otras prácticas rituales que no están orientadas por las autoridades religiosas y espirituales, como las ombligadas y los baños con hierbas, son guiadas por mayores quienes poseen el conocimiento y lo trasmiten a los demás miembros de las comunidades. Socialización y educación en la actualidad En la relación cada vez más estrecha de las culturas Wounaan y /Siepien/ con la occidental, encontramos que las formas de socialización y particularmente los modos de transmisión del conocimiento occidental, se han impuesto ante los ámbitos y mecanismos tradicionales de educación que anteriormente describimos. Esto no sería un problema si la institución escolar no representara riesgos para la identidad y cultura tradicional Wounaan y /Siepien/; sin embargo, la manera cómo se ha enclavado la escuela en esta sociedad indígena, ha generado problemas que repercuten en un debilitamiento cada vez más mayor de su cultura tradicional. En primer lugar, encontramos que una de las problemáticas de la educación, es que las familias han delegado buena parte de su papel socializador a la escuela; esto quiere decir que se fue construyendo la convicción de que la verdadera educación era la que se producía en la escuela. Así, las otras formas de enseñanza 70 paulatinamente fueron perdiendo valor ante la institución escolar en las comunidades. Si bien aún se considera necesario el aprendizaje en las labores tradicionales, encontramos hoy en día que se ha perdido mucho la enseñanza de las tradiciones y las trabajos cotidianos. Es así como muchos de los adultos, jóvenes y niños que han pasado por la escuela y el colegio ya no saben labrar canoa, construir casas, reconocer los árboles de madera más fina y duradera, entre otros oficios. La mayoría de las mujeres ya no saben hacer cerámicas y muchas mujeres jóvenes no saben elaborar la gama de cestería que elaboran las mayores y ancianas. Es así que el conocimiento ancestral se está perdiendo con los ancianos que se van muriendo poco a poco. Otra problemática que fue bastante sentida en el diagnóstico fue la pérdida de valores tradicionales, esto significa que la función socializadora de la familia se fue desplazando igualmente a la escuela y por lo tanto se espera que esta institución reproduzca los valores tradicionales, pero está reproduciendo más los valores occidentales. Finalmente, concluyen los mayores: "En la escuela no se dan consejos y por eso ya no se respetan a los mayores y ancianos”. Por otra parte, la escuela ha sido una de las instituciones que más ha debilitado la cultura tradicional con la introducción y enclavamiento de formas de vida y valores típicamente occidentales y poco o nada acordes con la cosmovisión indígena Wounaan y /Siepien/. Con la llegada de las misiones católicas, en algunas de las comunidades indígenas se construyeron escuelas donde las religiosas eran las que transmitían el conocimiento occidental. Su visión occidental y particular ante la vida hizo que en muchos casos obligaran a los estudiantes a cambiar su apariencia personal por ser “poco civilizada y moral"; por eso se obligó a las mujeres a cubrirse el torso y a los hombres a cortarse el cabello y ponerse zapatos; se les hablaba de una vida modelo que no era propiamente la de la cultura indígena y así se fue siguiendo esta forma de vida occidental. Luego, con la secularización de las escuelas y colegios fueron vinculados profesores afrocolombianos que en su mayoría comprendían la cultura indígena y quisieron igualmente imponer la cultura occidental ante la Wounaan y /Siepien/. Incluso, algunos de los profesores indígenas están reflejando en su docencia que la cultura la occidental es más valiosa que la indígena. Este desconocimiento de la cultura tradicional también se presenta en los currículos de las escuelas y colegios. Es así como, la institución escolar se ha convertido en un elemento que tiende cada vez más a anular la riqueza cultural de los pueblos Wounaan y Siapidara del Bajo San Juan, implantado así un sistema de valores que son propios de la cultura occidental. En este sentido, la OREWA y CAMAWA han implementado políticas que tienden a fortalecer la cultura tradicional de los pueblos indígenas mediante la elaboración de 71 políticas, programas y proyectos que apunten a una educación propia o etnoeducación. Sin embargo, son pocos docentes de los centros educativos en las comunidades indígenas, que tienen una claridad al respecto y se limitan a la traducción del conocimiento occidental a la lengua indígena. De esta manera, los esquemas de poder rígidos y anacrónicos de la institución educativa occidental son asumidos por los docentes indígenas, convirtiéndose en funcionarios inamovibles e intocables y desconociendo incluso las propias leyes indígenas, y lo que es más grave, la propia cultura. Otro de los problemas sentidos por las comunidades indígenas son los pocos recursos asignados por el Estado para el personal docente, la infraestructura y dotación educativa. La falta de espacios físicos adecuados para dictar clases, de cupos, de docentes preparados y materiales didácticos, hacen que la educación impartida en los centros escolares indígenas no sea la óptima. Si bien se encuentran muchos elementos que perjudican a la cultura, los indígenas no desconocen que la educación occidental es necesaria. Se llega a la conclusión que esta enseñanza básicamente les ha servido para aprender a hablar, leer y escribir español, y así relacionarse mejor con la sociedad mayoritaria, las instituciones estatales y no gubernamentales. En la educación de hoy se presenta una pérdida de la vocación agrícola y forestal; ejemplo de esto es que los jóvenes estudiantes no se saben distinguir los diferentes árboles en el monte Por lo general, los estudiantes no conocen las historias y otras narraciones orales de la tradición Wounaan y /Siepien/, ni los trabajos que se hacían antes; hoy están aprendiendo muchas cosas malas que se presentan en la televisión como la deshonestidad, agresividad y violencia. En las dos últimas décadas, muchos de los bachilleres que son contratados como maestros, ha sido egresados de colegios académicos y agropecuarios, y son pocos docentes normalistas que poseen una formación pedagógica. Muchas de las contrataciones de los maestros en los municipios se hacen por compromisos políticos electorales o por cuotas burocrácticas, sin considerar debidamente la formación que tengan los docentes. 72 73 SALUD Y MEDICINA TRADICIONAL Quienes ejercen la Medicina Tradicional Wounaan y /Siepien/ Ancestralmente, la salud de los pueblos Wounaan y /Siepien/ está ligada a la existencia y el poder de espíritus y demonios que habitan este y otros mundos de la cosmovisión de estas culturas. Los principales mediadores entre la gente y estos seres son los Jaibaná /Benkhun/ o médicos tradicionales; sin embargo, los tongueros o pildeceros, los hierbateros, las parteras, sobanderos y los que curan con “consejo”, ejercen sus propias funciones dentro de la medicina tradicional de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. El primer /Benkhun/ recibió el poder de curar y enfermar la gente, de manos del diablo /Dosat/ quien hizo retos con dios /Ewandam/; es por esto que el /Benkhun/ se encuentra entre el bien y el mal de los espíritus y demonios, y es él quien aprende y recibe el poder de controlarlos, de hacer maleficios o enfrentar los que mande otro jaibaná u otra persona que haya aprendido a hacerlo. Algunos /Benkhun/ también son pildeceros y/o hierbateros, es así como tienen mayor poder y conocimiento para hacer el bien y curar o para hacer el mal y enfermar. Los tongüeros o pildeceros aprenden y tienen el poder de ver -con o sin el efecto del pildé u otra planta alucinógena- las buenas y malas acciones de los espíritus y demonios, y de los mismos /Benkhun/, otros pildeceros, hierbateros y de la gente común, sobre una persona, animal, planta, quebrada o terreno que esté siendo afectado por algún maleficio o enfermedad. Los hierbateros han aprendido el conocimiento y poder sobre las plantas medicinales, dónde encontrarlas, cómo cogerlas y transportarlas sin que le vayan a hacer daño a él mismo y otras personas, animales y plantas que lo rodean. Es así que el hierbatero aprende a manejar las plantas en su hábitat silvestre, en siembras y en su casa o la de los enfermos, hasta llegar al tratamiento directo del paciente mediante baños, tomas y unciones. Las parteras adquieren el conocimiento por la experiencia de atender el embarazo y parto de muchas mujeres de sus propias parentelas y de otras familias allegadas. Ellas asisten la gestación y el alumbramiento con la sabiduría de sus consejos, remedios y conjuros para que lleguen a buen término y el recién nacido goce de buena salud. Los sobanderos alcanzan el conocimiento con la experiencia de tratar a muchas personas accidentadas o afectadas por alguna dolencia muscular y/o de las articulaciones y los huesos. Sus tratamientos se hacen con 74 imposición de manos y masajes con o sin hierbas y otras sustancias entre las que han empleado en las últimas décadas, pomadas y ungüentos analgésicos de la medicina occidental y popular campesina. Los que curan con consejo son personas que han aprendido uno o más “consejos”, frases a maneras de conjuros o rezos que se hacen con o sin hierbas para curar un mal, una enfermedad o cambiar la mala suerte. Hay quienes curan mordedura de culebras con este oficio de la medicina tradicional. Dentro de la medicina tradicional Wounaan y /Siepien/, también existen prácticas preventivas y curativas que son ejercidas por el común de la población, por mujeres, hombres y jóvenes que sin tener una especialidad, han adquirido conocimientos a través de la experiencia. De esta manera, estos miembros de las comunidades manejan algunas plantas medicinales de uso frecuente y generalizado; hacen “ombligadas” que consisten en poner cenizas de partes de plantas y animales en los ombligos de los niños recién nacidos con el fin de que ellos adquieran una habilidad o característica deseable; con hierbas, mejoran la habilidad para la caza y la pesca, y la suerte para conseguir dinero y en el amor. Los principales males y enfermedades tradicionales que afectan la salud Wounaan y /Siepien/ Los males y enfermedades tradicionales se originan en este mundo, principalmente en las selvas, las quebradas, comunidades y otros sitios donde habitan o llegan los espíritus y demonios que hacen daño. Estos males se somatizan o manifiestan en dolores de cabeza, fiebre, mareos, vómito, brotes en la piel, pérdida de apetito, de peso o en estados de nerviosismo. Estos males no llegan únicamente por sí mismos, sino también a través de la mediación de un Jaibaná u otra persona que los mande por hacer daño o en venganza por otro maleficio o por una ofensa. Entre los males y enfermedades tradicionales más comunes que cura la medicina tradicional Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan, se encuentran: • • • • • • Mal de ojo, ojo espanto, ojo malaire Sacada de cabello Sacada de rastro Tomas por maleficio Mordedura de culebras Envenenamiento con hierbas 75 Los males espirituales que cura exclusivamente el Jaibaná o /Benkhun/ son los siguientes: • • • • Cambio de espíritus Dar poder a otros Arreglar los espíritus malos que hay dentro de la comunidad Sacada de espíritus malos de una persona Salud y medicina tradicional en el presente La medicina tradicional se ha visto principalmente afectada por la falta de trasmisión de los conocimientos; la enseñanza y el aprendizaje de la medicina tradicional ha declinado porque los jóvenes no tienen vocación o tienen temor de aprender. La vocación ha venido perdiéndose por la influencia de la medicina occidental en la concepción cultural indígena de la salud y la enfermedad; el temor de aprender se debe principalmente a que la moderna justicia indígena juzga con escasos elementos de juicio y de manera diferente que en los tiempos antiguos, a los jaibaná, tongüeros y hierbateros sospechosos de un maleficio, razón por la cual hasta los mismos hijos de los jaibaná evitan aprender este oficio. Otro factor que afecta la medicina tradicional es la aparición de enfermedades no tradicionales que han venido aumentando entre la población indígena del Bajo San Juan, frente las cuales los médicos tradicionales tienen poco o nada que hacer; entre estas las más comunes son: • • • • • • • • • • Cólera Paludismo Tuberculosis Gripa Infecciones respiratorias Reumatismo Anemia Infecciones gastrointestinales Alergias respiratorias Enfermedades de la piel Las comunidades atribuyen estas enfermedades a tres factores principales: el contacto con los blancos, negros y mestizos que se ha dado desde la época de la conquista, la contaminación de las aguas y el cambio en las dietas y hábitos alimenticios tradicionales de las culturas Wounaan y /Siepien/. La medicina occidental ha llegado a las comunidades indígenas a través de los promotores de salud, de las brigadas de salud por instituciones 76 estatales y no gubernamentales, y en los últimos años mediante el régimen subsidiado de salud para indígenas. El trabajo de los promotores de salud indígenas en las comunidades, se limita a prestar atención preventiva y curativa de primero auxilios y a administrar algunos medicamentos sin formulación. Todas las comunidades de la zona, excepto Papayo, carecen de un puesto de salud; los promotores prestan su servicio en un su propia casa en la de los pacientes, con escasa dotación y medicamentos. Las brigadas de salud institucionales que llegan a las comunidades, se limitan a jornadas de vacunación, atención odontológica y curaciones durante uno o dos días en tan solo una o dos comunidades que visitan al año en la zona. El régimen subsidiado de salud, cubierto en la zona por le Empresa Barrios Unidos de Quibdó, ha venido prestando servicios de medicina preventiva, especialmente jornadas de vacunación y atención primaria en salud. PROBLEMÁTICAS DE LA SALUD DE HOY En las enfermedades simples no se recurre a la medicina tradicional. Se está perdiendo el conocimiento y las prácticas de las plantas medicinales. La medicina occidental no conoce la cosmovisión Wounaan. Hay enfermedades que son occidentales y que la medicina tradicional no la sabe tratar. Hay enfermedades que se han salido del control a la comunidad, ya que antes no había comunidad y el benkhuun podía controlar. Pero hoy en día en la comunidad cuando da una peste es más difícil de controlar por el benkhuun y el promotor no tiene todos los implementos. La contaminación del río y la alimentación des-balanceada baja las defensas de los niños y adultos y facilita las infecciones y tras enfermedades que no se han curado hoy. PROBLEMAS DE SALUD Significado cultural de la medicina y la salud. Propuesta que se relacione con el fortalecimiento de la cultura. Problema de salud y la medicina occidental Servicio básico, saneamiento y salud pública Propuesta frente al tema. 77 EL DESARROLLO PARA LOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN 81 3. QUÉ SIGNIFICA EL DESARROLLO PARA LOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN Con la palabra desarrollo se trata la proyección que pueda tener una sociedad hacia el futuro. En este sentido, son las acciones que se enfocan para mejorar las condiciones de vida de las comunidades en los tiempos venideros. Igualmente, el desarrollo se refiere a los modelos económicos que se aplican en las sociedades; en este caso, los modelos de desarrollo propios de nuestra cultura, verdaderamente alternativos y sostenibles. Con el desarrollo, estamos pensando en la forma de cómo la sociedad (cualquiera que sea) debe avanzar hacia el mañana, aprendiendo de su historia, sus experiencias y de las demás sociedades, sin negar el presente y las realidades que se están viviendo. Se le dice desarrollo alternativo al imperante de la sociedad occidental (este sistema capitalista plantea un desarrollo que se basa en las desigualdades económicas y sociales); es por esto que escogemos el camino de la equidad social y económica para las distintas sociedades, que tenga en cuenta las diferencias culturales de los pueblos, grupos y etnias, las diversidades de pensamiento, de género y de edad. También quiere decirnos que al ser sostenible debe darse una relación equilibrada entre las personas, sociedades y naturaleza. Estas ideas son parte de los principios del proyecto del Plan de Vida de las Comunidades indígenas del Bajo San Juan; un plan que quiere construir un modelo de desarrollo propio del pensamiento de los hombres y mujeres indígenas que habitan los territorios del Bajo San Juan. El principal objetivo es que el Plan de Vida se construya con la participación de cada uno de sus pobladores, que reconozca y valore la cultura y la historia que durante siglos han vivido los Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan, que sea realista frente a los retos que le impone el futuro y que no niegue lo que somos hoy en día. Al referirnos a un desarrollo alternativo, estamos pensando y soñando con los siguientes principios: ♦ Equidad en la diferencia: tener un equilibrio entre hombres y mujeres, y un equilibrio social, económico, cultural, político y ecológico; brindando la misma oportunidad a toda la población; respetando la diferencia cultural y étnica. ♦ Concertación: no podemos hablar de equidad si no hay una permanente concertación o negociación y tolerancia entre los diferentes pensamientos de las distintas personas y grupos sociales. ♦ Participación: este es un modelo que es posible en la medida en que cada uno de los niños, jóvenes, mujeres y hombres, proyecten lo que quieren ser como personas y como sociedad. Igualmente que todos trabajemos por nuestros sueños colectivos. 82 ♦ Planeación: para poder realizar nuestros sueños de vida, los debemos organizar. Es indispensable que las acciones que pretendemos llevar a cabo las ordenemos por metas y tiempos precisos; esto lo entendemos como planeación. Además de estos principios que hacen al desarrollo un modelo con justicia social, le debemos agregar otros principios que son particulares a las comunidades y pueblos indígenas: Cosmovisión de los pueblos indígenas: lo sagrado, las creencias y costumbres, son la vida de los pueblos indígenas; a partir de ellas se explica su existencia y las razones de ser de cada persona, animal, planta o cosa, que existen en este y en los otros mundos de nuestro universo. Por medio de las creencias se vive el territorio y se establecen las normas para la relación con la naturaleza y otros grupos sociales y étnicos; por tal motivo, sería un error inadmisible pasar por alto nuestra cosmovisión. Identidad y cultura: de los pensamientos anteriores se desprende la necesidad de valorar la identidad que por siglos se ha construido, reconstruido y recreado como pueblo indígena y sus diferentes expresiones simbólicas y materiales que constituyen lo que muchos han llamado cultura. Políticas de los pueblos indígenas: es igualmente indispensable pensar el Plan de Vida desde las ópticas de los derechos, la lucha y reivindicaciones que las organizaciones de los pueblos indígenas vienen defendiendo ante el Estado y otros actores de la sociedad colombiana. De ahí se desprenden tres palabras que tienen mucho significado para los pueblos indígenas colombianos: autonomía, territorio y unidad. El pensamiento de los pueblos indígenas del chocó sobre desarrollo Concepto Hablar de desarrollo para los pueblos indígenas es hacer mención a la vida, la cultura y su relación con la naturaleza, a través de los poderes vivos en todos y cada uno de los elementos que configuran la selva y los cuales son manejados por el benkhuun, quien es la máxima autoridad espiritual y que reafirma su papel definitivo en el control y manejo del medio ambiente. Para nosotros hablar de desarrollo es el /khõrr phoo num/, (ombligar) nuestras culturas en el presente para construir el futuro, teniendo en cuenta los elementos negativos para transformarlos, ayudando con ello a solucionar la crisis que tengamos y fortalecer la capacidad de resistir las adversidades que se vayan presentando, para poder así defender la identidad cultura de nuestros pueblos.Desarrollo es /daupeer dopi num/, la (jovenciada) permanente de la cultura, siguiendo la preparación y los procesos necesarios, elaborando paso a paso los medios, observando y 83 esperando los tiempos adecuados y recreando el sentido de unión desde el trabajo, la familia y la comunidad. Desarrollo es /dipor choonum/, (inaugurar un tambo) donde se preparan todas las condiciones para festejar día a día la reafirmación de la familia en la cual los niños, los jóvenes, los ancianos y en general hombres y mujeres hacemos mingas, donde todos somos igualmente importantes. Hablar de desarrollo es pertenecer a un territorio de manera integral, donde recreamos nuestras culturas. Hablar de desarrollo es recordar la historia, que nos muestra el camino que recorrieron nuestros antepasados y nos da la posibilidad de aprender de su experiencia. Desarrollo para nuestros pueblos es el respeto a la diferencia y que en los actuales momentos significa el respeto a la vida. Desarrollo es la oportunidad que tengamos de asumir sin tropiezos la autoridad y el gobierno en nuestras comunidades, para poder desarrollar nuestro derecho interno. El desarrollo, tiene que ver con tener claro los conceptos de participación comunitaria y toma de decisiones, para fortalecer cada vez más el sentido de democracia y la justicia social.1 De la misma manera para nosotros los habitantes del bajo San Juan, el desarrollo no se manifiesta en tener todos los bienes y comodidades que la sociedad occidental y de consumo nos ofrece por la televisión, la radio, el periódico y en algunos proyectos estatales (un desarrollo que mejore solamente la calidad de vida material). No es tener carreteras, fábricas, puentes, carros, motores fuera de borda, televisión por subscripción, entre otros. Es desarrollo para nosotros el mantener nuestra cultura tradicional viva, recuperar y practicar permanentemente nuestras creencias (rogativas, fiestas culturales y actos de la vida cotidiana). Desarrollo es tener las herramientas para cazar, pescar, cocinar, sembrar y tener los elementos para vivir nuestra cotidianidad, es morir dignamente de viejos en el lugar donde estamos ombligados, es decir en nuestro territorio... y no por gente perversa que día a día incursionan en nuestro territorio. Desarrollo es autonomía y el derecho de ejercer control social y político en nuestro territorio, que los otros pueblos reconozcan a los territorios indígenas como pueblos soberanos. Es forjar la unidad como pueblo indígena es hacer alianzas con otros pueblos indígenas, grupos étnicos para mejorar nuestra condición de vida y para mantener nuestro territorio, en otras palabras los principios políticos de nosotros y nuestras organizaciones. 1 Plan de desarrollo de los pueblos Indígenas del Chocó “Lo que queremos y pensamos hacer en nuestro territorio” organización OREWA pg16 84 Maach Thumaankhuu Durr (el territorio de todos nosotros): La relación Cultura y Territorio: para los Wounaan del Bajo San Juan el Territorio es: somos nosotros, es nuestra madre, de él vivimos, conocemos, crecemos, sentimos, construimos y reconstruimos cultura. En él vive nuestra historia, en él habita nuestro presente y soñamos nuestro futuro. El territorio es al agua, el aire, la tierra, las plantas, los árboles, los animales, los sembrados, nuestra medicina, los Benkhuun, la ombligada, los mie o espíritus, y los espacios sagrados, el sol, la luna; en ellos están nuestros muertos, es el territorio de Ewandam; en él están las comunidades y la familia de cada uno de los que lo habitamos. El territorio es unidad, es autonomía, es la esencia de nuestra política como pueblo indígena del Bajo San Juan Wounaan. Plan de Vida. El proyecto del Plan de Vida del pueblo Wounaan se presenta como la oportunidad de concertar con las diferentes comunidades y resguardos del Bajo San Juan, la forma más conveniente de desarrollo y de planear el futuro preservando y recuperando la cultura tradicional y la identidad del pueblo Wounaan. De ésta manera el equipo de trabajo y en sí la elaboración del documento del Plan de Vida pretende fortalecer el gobierno autónomo de cada resguardo y de CAMAWA, los lazos de solidaridad existentes entre las comunidades y la identidad como pueblo indígena. El plan de vida es pensar y soñar la vida propia, la vida que se da en el territorio, la vida que pretende mantener un equilibrio entre el ambiente que nos rodea. El plan de vida es la bitácora para navegar en las aguas del porvenir. Es para nosotros la forma de organizar lo que necesitamos y esperamos para el futuro, partiendo de las enseñanzas del pasado y las realidades del presente. La base del plan de vida es nuestra identidad cultural. Es la recuperación de nuestras tradiciones y el fortalecimiento de lo que somos en el territorio y de lo que somos en la vida diaria. Del fortalecimiento de la cultura tradicional podemos mejorar nuestra organización, la producción y las condiciones de vida que hacen a un desarrollo acorde a lo que somos y pensamos. El plan de vida nos va a orientar para construir un futuro que colectivamente hemos soñado. Es por eso que el plan de vida nos permite organizar por etapas y prioridades de lo que vamos hacer en el futuro. 85 MARCO LEGAL DEL PLAN DE VIDA DE LAS COMUNIDADES INDIGENAS DEL BAJO SAN JUAN Las disposiciones legales especiales que componen el fuero indígena en el sistema jurídico y las normas constitucionales de la República de Colombia, son el fundamento legal del Plan de Vida de las comunidades Wounaan y Siepien del Bajo San Juan, y les garantizan los siguientes derechos: Derecho a la Identidad Cultural. Es un derecho colectivo de los pueblos indígenas, entraña el derecho a seguir siendo culturalmente diferentes, a hablar distintas lenguas o idiomas, a tener formas de gobierno y relaciones sociales propias. Este derecho es fundamental de los pueblos indígenas, según la Constitución y las interpretaciones de la Corte Constitucional, y está ligado al territorio propio y particular donde existen, se relacionan y recrean las culturas indígenas. La Constitución Política de Colombia declara como uno de sus principios básicos el reconocimiento y protección de la diversidad étnica y cultural de la nación, la igualdad y dignidad de todas las culturas que conviven en el país y la integridad cultural, social y económica de las comunidades (Art. 7, 70, 330 de la C.P.). Derecho sobre el Territorio. Los pueblos indígenas tienen derecho de propiedad sobre los territorios que ocupan o utilizan ancestralmente para sus actividades económicas, sociales y culturales. El derecho de propiedad es sobre todos los territorios indígenas, estén o no titulados como Resguardo. Esta propiedad es comunitaria, goza de todas las garantías de la propiedad privada y tiene el carácter de inalienable, inembargable e imprescriptible; esto implica que los territorios indígenas no se pueden vender, no pueden ser sometidos a gravámenes, no son expropiables por el Estado y no pueden someterse a limitaciones de dominio (Art. 63 y 329 de la C.P., Ley 160 de 1994 y Decreto 2164 de 1995). Derecho a la Autonomía. Comprende el derecho de los pueblos indígenas a gobernarse por autoridades propias de acuerdo con sus usos y costumbres, la vigencia de sus formas propias de control social, el derecho a decidir las prioridades de su desarrollo y a participar en las decisiones que puedan afectarlos (Art. 7, 70, 46, 329, 330 de la C.P.; Convenio 169 de la OIT ratificado por la Ley 21 de 1991; Ley 89 de 1890; Decreto 1088 de 1993). Los Resguardos Indígenas como entes públicos de carácter especial, asimilados a los municipios por la Ley 99 de 1993 y por los Decretos 1386 de 1994 y 840 de 1995, gozan de autonomía para la planificación de su desarrollo y tienen plena competencia para ordenar su territorio, según la Ley 152 de 1994. Otros derechos que garantiza La Constitución Nacional a los pueblos indígenas son: • Al reconocimiento de las lenguas y dialectos como oficiales en su territorio y a la educación bilingüe en comunidades con tradiciones lingúísticas propias (Art. 10). • A tener sus autoridades indígenas y resolver los problemas y conflictos que se presenten dentro de sus territorios (Art. 264 y 330). 86 • A conformar sus territorios en Entidades Territoriales Indígenas y como tales gobernarse por autoridades propias y tener autonomía para administrar los recursos (Art. 286, 287). 87 Es lo escrito, el documento que nos permite dialogar con otras culturas y grupos étnicos. Es la guía de aprendizaje para las instituciones y grupos sociales no indígenas que se relacionan con nuestro pueblo; en él decimos qué es el desarrollo para nosotros. MISION, POLITICAS Y PRINCIPIOS 88 4. MISIÓN DEL PLAN DE VIDA Fortalecer la identidad cultural Wounaan y /Siepien/. Queremos rescatar elementos de nuestras culturas tradicionales que puedan mostrarnos el camino para reencontrarnos como pueblos indígenas y gestar una nueva identidad que esté acorde con las necesidades y expectativas actuales de las comunidades, las cuales están en permanente relación con la cultura occidental y por lo tanto en un diálogo cultural. Y así poder generar pautas para vivir y gobernar en nuestro territorio de una manera autónoma. 4.1 POLITICAS Y PRINCIPIOS Identidad Cultural: si bien este tema se ha planteado a lo largo del documento, es necesario esbozarlo como uno de los principios fundamentales que orienta el accionar que se vaya a desarrollar en el territorio y con las comunidades indígenas. El bienestar de nuestro pueblo no se puede pensar separado de la relación que existe históricamente entre los grupos sociales y territorio, los productos de esta relación es lo que le hemos llamado identidad cultural (bienes materiales y simbólicos, creencias y costumbres). De ahí se desprende la necesidad imperante de generar estrategias de defensa de la identidad cultural. Por esto, el Estado en su conjunto debe elaborar políticas concertadas con las comunidades indígenas, que apunten a un respeto por la cultura tradicional del pueblo Wounaan y /Siepien/, y la protección y promoción de las prácticas culturales que hacen a una identidad como pueblo indígena. Igualmente es un deber de las organizaciones locales y regionales, elaborar estrategias y programas que busquen el fortalecimiento de la cultura tradicional en cada una de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Sostenibilidad: definida en los mismos términos del desarrollo humano sostenible, cuyo énfasis está en el imperativo de armonizar las actividades humanas con la conservación del medio natural, como factor que incide en la calidad de vida de la sociedad. Integra las interacciones y efectos de los factores económicos, políticos y sociales en el proceso de transformación del espacio: bienestar social, calidad del hábitat, ambiente sano, seguridad física del entorno, infraestructura y servicios públicos, calidad y eficiencia del transporte, áreas verdes y espacio público. Justicia Social y Equidad: Cómo hemos dicho anteriormente al hablar de Desarrollo Alternativo, nos referimos a una forma de vivir en el futuro en donde todas las personas tengan las mismas oportunidades de vivir bien teniendo en cuenta la diversidad cultural y las perspectivas de género y poblacionales. Es decir que las organizaciones y en general el Plan de Vida debe trazar unas estrategias que permitan encontrar mecanismos de equidad social. Igualmente el Estado debe 89 garantizar los derechos fundamentales de los pueblos indígenas y los derechos humanos de primera y segunda generación, propiciando así, las condiciones de equidad ante otros grupos étnicos. Unidad: las organizaciones regionales, zonales y locales, deben concertar los mecanismos que construyan caminos hacia la unidad como pueblos indígenas, sin olvidar las diferencias que se tienen en el plano cultural. Es importante hablar de unidad como principio y política porque ello nos permite construir estrategias para la conservación del territorio y la ampliación de Resguardos. Así como la unificación de criterios y coordinación de las autoridades para la resolución de conflictos internos y la discusión de posiciones como grupo étnico ante los actores armados. Autonomía. El control social y del territorio lo deben tener los gobiernos locales de cada comunidad indígena. Ello implica que el Estado debe respetar los mecanismos e implementación de la justicia indígena, el control territorial, la educación, la salud tradicional y en general la cultura propia. Es decir que el estado y la sociedad deben reconocer a los pueblos indígenas cómo soberanos, con gobiernos, cultura y leyes propias. Un capítulo especial de la autonomía es el derecho del acceso a los recursos genéticos y la propiedad intelectual de los pueblos indígenas, que debe ser absolutamente respetado por los agentes externos. Territorio. Los territorios indígenas son espacios físicos y culturales en los cuales los Wounaan y /Siepien/ podemos desarrollar la vida según nuestra identidad, tradiciones, costumbres e intereses; son lugares destinados con preferencia a conservar y las instituciones y las costumbres de nuestros pueblos. Los territorios indígenas son para crecer, ampliarse, desarrollar sobre nuestras raíces la manera de ser de cada pueblo y poder enfrentar mejor los tiempos presente y futuro; deben contribuir a formular la política de recuperación cultural, social y económica de las poblaciones que viven en ellos. Lo que siempre está presente en los territorios es la vida de la gente, los animales, las plantas, los árboles, los ríos, las selvas; todo lo que existe en los territorios tiene vida y se relaciona en una dinámica permanente entre los diferentes mundos que conciben los pueblos indígenas. Las autoridades nacionales, departamentales y municipales, INCORA, MINAMBIENTE, las Corporaciones Regionales y la Dirección de Asuntos Indígenas, deben asumir la responsabilidad de reconocer y proteger los Territorios Indígenas adelantando programas de Titulación, Ampliación y Saneamiento de los Resguardos, ejerciendo acciones concretas para evitar la colonización y explotación de los recursos naturales por personas no indígenas. 90 Valoración de sistemas tradicionales de producción Los pueblos indígenas del Chocó mantienen sistemas de producción tradicionales que han demostrado su éxito adaptativo a los ambientes selváticos y costeros y la capacidad de cumplimiento de su condición de reproducción a largo plazo. Son sistemas productivos guiados por el principio de solidaridad para lograr objetivos comunes como garantizar la alimentación de la familia, en la cual el intercambio es un medio de conseguir los productos. Hay que asumir una posición de defensa de estos sistemas productivos, actualmente en una crítica situación de deterioro frente a los efectos de una economía capitalista. Es responsabilidad de las presentes generaciones acondicionar los sistemas productivos a sus descendientes, de tal modo que se consideren sus expectativas de vida, las únicas que asegurarán un buen futuro a las comunidades. Es por esto que la política debe encaminarse hacia el fortalecimiento y mejoramiento del sistema tradicional de producción para el autoabastecimiento familiar y la generación de excedentes para la comercialización. Las políticas dirigidas al mejoramiento de los sistemas de producción agrícola y pecuaria, deben fundamentarse en las técnicas desarrolladas por los pueblos indígenas, en especial las relacionadas con el manejo de plagas y enfermedades, mejoramiento genético, tratamientos postcosecha, bioindicadores, ciclos anuales y lunares, etc. En este contexto, es necesario hacer un estudio sobre las especies promisorias para la alimentación, a las cuales se les debe determinar su potencial para suplir demandas nutricionales de la población y conocer sus ciclos reproductivos como un paso fundamental para el mejoramiento de su producción. En la producción agrícola, la acciones deben estar dirigidas a superar los factores limitantes del recurso suelo, fomentando los cultivos con técnicas que propendan por la conservación y el mejoramiento de su fertilidad. La definición de ciclos rotacionales, el desarrollo de arreglos multiestratificados y poliespecíficos, así como el control del monocultivo y sus consecuencias, deben aportar al incremento de la producción agrícola con el fin de satisfacer las demandas de las familias indígenas. En la producción animal, se deben fomentar las especies menores (gallinas y cerdos preferiblemente) frente al impacto que ha causado el ganado vacuno en los ecosistemas y las culturas indígenas. La complementación de los sistemas agropecuarios indígenas con tecnologías modernas, tiene un gran potencial en la búsqueda de alternativas para solucionar los problemas en la producción, si se acogen a las condiciones de alta diversidad biológica y cultural de la región, a la estabilidad de los agroecosistemas y a la distribución socio-espacial y temporal del trabajo propio de los sistemas productivos de los pueblos indígenas. 91 En una política de reconocimiento, protección y recuperación del acceso a los recursos genéticos y del conocimiento tradicional de los pueblos indígenas, el Estado debe fijar una posición clara que asegure la protección de la riqueza genética y los conocimientos tradicionales asociados a la producción que constituye la base alimenticia de las comunidades y hace posible el mantenimiento de su cultura. Las instituciones estatales relacionadas con el fomento agropecuario, deben respetar y valorar los sistemas de producción agrícola y pecuaria propios de las comunidades indígenas, contribuyendo al fortalecimiento de sus prácticas y evitando la introducción de técnicas productivas que no sean apropiadas por las comunidades indígenas. Conservación de la biodiversidad La lucha por los derechos étnicos y la biodiversidad debe ser un reto y esfuerzo conjunto de los pueblos indígenas y la sociedad nacional, frente a los procesos de globalización y economía de mercado imperantes en el mundo que sobre todo en Latinoamérica- necesitan cambios sociales que satisfagan las distintas poblaciones. Las políticas sobre la Conservación y Protección de los Ecosistemas y la Biodiversidad, deben estar encaminadas a la recuperación y mejoramiento del estado de los ecosistemas terrestres y acuáticos; con este fin se deberán zonificar y evaluar los usos actuales y potenciales de los recursos naturales para darles una administración apropiada mediante la implementación de programas que permitan su conservación. Se debe hacer seguimiento a la implementación de los reglamentos y normas internas que controlen el aprovechamiento de los recursos naturales, a través de la evaluación y análisis de su funcionamiento en las condiciones y crisis ambientales que atraviesa la zona con el fin de darles un adecuado tratamiento. Es necesario considerar la reforestación y agroforestería con especies nativas, así como el adecuado manejo de la regeneración natural con el objeto de repoblar los diversos ecosistemas. Se debe dar el reconocimiento legal a todos los territorios indígenas para garantizar que las políticas de conservación de ecosistemas y biodiversidad se hagan realidad y brinden a las presentes y futuras generaciones de los pueblos indígenas, un espacio donde puedan perpetuar sus culturas ancestrales. Los procesos adaptativos desarrollados por los pueblos indígenas en sus territorios, se manifiestan en las relaciones establecidas entre sus culturas y los ecosistemas que habitan; el fundamento de los conocimientos ancestrales que han adquirido sobre los recursos naturales y las técnicas de manejo que les han permitido pervivir y mantener en buen estado los ecosistemas donde han habitado durante siglos. 92 Antes de ejecutar cualquier política o acción que afecte los territorios indígenas, se debe respetar su derecho a la autonomía. La participación del Estado en la conservación de los ecosistemas, debe partir de la reorientación de las políticas económicas extractivas de los recursos naturales para llegar a un aprovechamiento sostenible. Las autoridades ambientales estatales deben hacer cumplir la función de control y protección de flora y fauna. 93 OBJETIVOS DEL PLAN DE VIDA: OBJETIVOS Y METAS 94 4.2. OBJETIVO GENERAL Las comunidades indígenas del Bajo San Juan hemos trabajado mancomunadamente con nuestras autoridades y hemos recuperado y fortalecido la identidad cultural como pueblo indígena y construido políticas y estrategias sólidas para el ejercicio de la autonomía en nuestro territorio. 4.3. OBJETIVOS ESPECIFICOS DEL PLAN DE VIDA: • • • • • • • • • • • • • Promover las prácticas de las costumbres, los valores y creencias, que son parte constitutiva de la cultura tradicional Wounaan y Siepien. Continuar el proceso de constitución, saneamiento y ampliación de los Resguardos Indígenas con el fin de que se garanticen los derechos territoriales de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Incrementar la capacidad de gestión y control territorial de las comunidades, que les permita mayor conocimiento y vigilancia de sus territorios y la garantía de sus derechos. Detener los efectos nocivos de la intervención de agentes foráneos en las comunidades indígenas y sus territorios, mediante procesos de comunicación, formación y organización, que consoliden el respeto de los derechos indígenas. Construir una política de control social y territorial como la base de la autonomía del pueblo Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan. Generar políticas de entendimiento intercultural e interétnico, especialmente de los indígenas con las comunidades afrocolombianas Fortalecer las estructuras organizativas de las comunidades indígenas a nivel local, zonal y regional. Generar mecanismos para el mejor funcionamiento del fuero y la justicia indígena en los ámbitos locales, zonales y regionales. Diseñar políticas, estrategias y programas que mejoren la condición de vida material de los habitantes de los Resguardos en cuanto a la satisfacción de sus necesidades básicas. Crear políticas, estrategias y programas para mantener vivas las formas de producción tradicional y así mejorar las condiciones de existencia de las comunidades indígenas. Construir políticas, estrategias y programas de producción no tradicional que mantengan una relación armónica con los sistemas tradicionales de producción, la identidad cultural y los ecosistemas en los territorios indígenas. Generar estrategias para el seguimiento, evaluación y ajuste permanente del desarrollo del Plan de Vida. Consolidar políticas y estrategias de ordenamiento territorial propio de las comunidades indígenas. 95 4.4. METAS DEL PLAN DE VIDA Largo plazo (10 años) • • • • • • • • • • Los pobladores de las comunidades indígenas del Bajo San Juan han cambiado algunas actitudes y han reconocido y fortalecido los valores de su cultura propia. Las comunidades indígenas han reafirmado su identidad como pueblo indígena. Las autoridades han ejercido un control social y territorial fundamentado en su cosmovisión, usos y costumbres y en los principios democráticos de sus organizaciones. Se han titulado en gran parte los territorios que ancestralmente han pertenecido al pueblo Wounaan y Siepien del Bajo San Juan y que hoy están por fuera de los Resguardos Indígenas. Todas las comunidades cuentan con un puesto de salud bien dotado y sus respectivos promotores indígenas contratados por las entidades que apoyan los servicios de salud. Existen unas buenas relaciones interétnicas territoriales de los indígenas con otros grupos humanos de la zona y la región, sobre todo con las comunidades afrocolombianas. Las comunidades indígenas del Bajo San Juan tienen un sistema de comunicaciones y transporte que satisface las necesidades y se adapte a las condiciones físicas de la zona y la región. Los Cabildos locales gozan de apoyo y credibilidad por parte de las comunidades. Se han mejorado las condiciones de pervivencia de las comunidades indígenas en cuanto a: alimentación, vivienda, salud, educación y servicios básicos. Se han financiado la totalidad de los proyectos elaborados en este período del Plan de Vida. Mediano plazo (de 3 a 6 años) • • • • • • Los pueblos Wounaan y Siepien del Bajo San Juan han construido todas las bases para la conformación de una Entidad Territorial Indígena en sus territorios tradicionales, fundamentada en la relación territorio - cultura y el ejercicio de la autonomía. Se han adelantado los procesos de ampliación y saneamiento de todos los Resguardos Indígenas del Bajo San Juan. Los conflictos sociales y territoriales de las comunidades indígenas de la zona se resuelven de una manera creativa, con elementos y herramientas de resolución pacífica de conflictos. Existe una coherencia entre las formas tradicionales y modernas de impartir autoridad y justicia en las comunidades indígenas. Se han concertado y desarrollado en gran parte los componentes indígenas de los planes de ordenamiento territorial de los municipios Litoral del San Juan y Buenaventura. Se ha construido una política integral de etnoeducación para las comunidades indígenas del Bajo San Juan. 96 • • • • • • • • • • • Se ha recuperado y difundido la práctica y aprendizaje de la medicina tradicional en las comunidades indígenas de la zona. Se brinda una cobertura total de la población indígena por el sistema de educación básica primaria y secundaria. Existen convenios con universidades y otros centros de educación superior para la que los bachilleres indígenas puedan continuar su ciclo educativo. Los docentes se han profesionalizado y capacitado mediante educación continua para su actualización. La Asociación CAMAWA es una organización que orienta el accionar del gobierno de los Cabildos locales y otras organizaciones comunitarias. Se han elaborado propuestas de capacitación para los líderes y las diferentes áreas que el Plan de Vida cubre. Existe una coordinación entre las acciones y el personal que ejerce la medicina tradicional y el que ejerce la medicina occidental en las comunidades de la zona . Se han logrado posiciones frente a los actores armados para que se respete la autonomía y el control social de los indígenas en sus territorios. Se da continuidad en el tiempo a las gestiones de gobierno entre los periodos de los diferentes Cabildos locales de las comunidades. Se continúa con la capacitación y formación de antiguos y nuevos líderes que participan en los Cabildos locales y en las organizaciones a nivel zonal y regional. Las comunidades indígenas han implementado sistemas agroforestales en sus territorios. Corto plazo (primeros 3 años) • • • • • • • • • • Todos los pobladores de las comunidades indígenas del Bajo San Juan se han afiliado y carnetizado en una ARS que preste los servicios de un plan subsidiado de salud. Se ha reducido la tasa de analfabetismo de los adultos de las comunidades indígenas. Se ha implementado una política de salud pública adecuada para la zona. Existen organizaciones de mujeres que coordinan actividades en pro de la calidad de vida de toda la población en las comunidades indígenas. Funcionan organizaciones comunitarias que apoyan permanentemente el trabajo de las autoridades locales. Las comunidades han delimitado áreas de preservación y conservación de ecosistemas en los Resguardos Indígenas. Las autoridades indígenas han reglamentado el control del aprovechamiento y manejo de los recursos naturales a nivel local y zonal mediante sus propias normas. Se fomenta la producción agrícola y pecuaria en las comunidades indígenas de la zona. Existe una red de justicia indígena que abre los espacios para su mejor funcionamiento a nivel local y zonal. Se han diseñado planes de gobierno en cada comunidad y en la zona, contando con esquemas de planeación participativa. 97 • • • Los líderes conocen bien el tema de Derechos Humanos y han construido herramientas para hacerlos respetar para toda la población en las comunidades y territorios indígenas y fuera de ellos. Existen lineamientos regionales y zonales para afianzar la autonomía de las comunidades y territorios indígenas frente al conflicto armado. Se han hecho encuentros de socialización del documento final del Plan de vida y las comunidades han hecho recomendaciones para los ajustes de algunos aspectos y han adicionado más proyectos en el plan de Vida. 98 ESTRATEGIAS 99 5. ESTRATEGIAS Y LINEAMIENTOS Las estrategias que definen los pasos a seguir en el Plan de Vida, se enmarcan en el FORTALECIMIENTO, PROTECCION Y RESPETO DE LA IDENTIDAD CULTURAL FUNDAMENTADA EN LA RELACION CULTURA-TERRITORIO, política trabajada por los pueblos y organizaciones indígenas de la región del Chocó (OREWA, 2000), entre los cuales se encuentran CAMAWA y los Cabildos locales de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. A continuación se presentan cada una de las estrategias enfatizando los correspondientes lineamientos que deben seguir las comunidades y autoridades indígenas de la zona para hacer realidad su Plan de Vida o desarrollo propio. AFIANZAMIENTO DE LA AUTONOMÍA DE LOS PUEBLOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ Generar procesos de fortalecimiento institucional para poder adelantar planes, programas y proyectos. Las actuales condiciones en las que se circunscribe la realización de proyectos que afectan a los indígenas, desconocen la realidad en la que vivimos y nuestras formas de propias de responder a las diversas problemáticas; por tal razón, las organizaciones indígenas deben concertar con los diferentes entes institucionales, la transformación de los espacios que atienden a las comunidades indígenas, de manera tal que respondan a nuestras particularidades. Definir con el gobierno y las administraciones departamentales y municipales, los planes de inversión de los recursos que por ley deben ser destinados a los pueblos indígenas. Es importante que las entidades del orden nacional, regional y local, asuman las disposiciones legales que obligan a destinar un porcentaje de sus recursos de inversión para programas en beneficio de los pueblos indígenas; y las comunidades a través de sus diferentes niveles organizativos, deben velar por la planeación y ejecución de los recursos acordes con sus aspiraciones y necesidades. Participación y consulta de las comunidades y organizaciones indígenas en la toma de decisiones que tengan que ver con planes de desarrollo y obras de infraestructura en la región. Como el territorio ancestralmente ocupado por las comunidades indígenas, se ve afectado ambiental y culturalmente por los diversos planes de infraestructura diseñados por el gobierno para esta región, se hace necesario que se garantice un espacio de participación y consulta real de los pueblos indígenas, que no han sido tenidos en cuenta en la formulación y ejecución de estas obras como lo ordena la Ley 21 de 1991. Desarrollar un plan de seguimiento, evaluación y control de los programas y proyectos que se adelanten en las comunidades indígenas. Con el fin de garantizar efectividad en la solución de las problemáticas identificadas en las comunidades, los programas que allí se lleven a cabo deben inscribirse en un plan que permita brindarles seguimiento continuo en el tiempo, posibilitando el 100 replanteamiento de dichos programas sobre las observaciones que hagan las comunidades, para lo cual debe contarse con herramientas técnicas que viabilicen esta operación. CONSOLIDACIÓN ORGANIZATIVOS DE LA PARTICIPACIÓN Y LOS PROCESOS Socialización, implementación y seguimiento del Plan de Vida. Con el fin de que todas las comunidades conozcan las propuestas presentadas en el documento, se debe llevar a cabo un proceso de socialización del mismo, de tal manera que asuman un papel real tanto en la definición de los proyectos y alternativas como en el seguimiento y evaluación que garantice su continuidad y ajuste a través del tiempo. Garantizar la participación de toda la población en la toma de decisiones en cada comunidad. Los Cabildos locales deben socializar y comunicar permanentemente las actividades que están desarrollando en su mandato. Así mismo se deben elaborar mecanismos efectivos para la participación activa de las comunidades en las organizaciones zonales CAMAWA y ACIVA, y en la regional OREWA. Adelantar procesos de formación a los líderes de las comunidades. Las comunidades deben estar en capacidad de responder a los retos planteados en el Plan de Vida, como también a las propuestas que surgen de la relación con otros grupos étnicos e instituciones estatales y no gubernamentales; de ésta manera se deben proponer programas y planes de capacitación y formación de antiguos y nuevos líderes para que sea posible su relevo generacional en las comunidades. DEFENSA TERRITORIAL DE LOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN Reconocimiento de la propiedad de los territorios. A partir de considerar el territorio como elemento fundamental para la vida de los pueblos Wounaan y Siapidara del Bajo San Juan, se requiere que las instancias gubernamentales definan, de acuerdo a las legislaciones existentes, con prontitud y voluntad política, la territorialidad de los pueblos indígenas avanzando en los procesos de constitución de resguardos, su ampliación y saneamiento, porque estos constituyen una de las mejores estrategias de protección de la diversidad cultural y biológica en la región del Pacífico colombiano. Ordenamiento Territorial. Como una estrategia fundamental y permanente, hace posible el control del territorio, en la medida que busca una distribución geográfica de la población y sus actividades a partir de los valores culturales, de acuerdo con la integridad y potencialidad de los recursos naturales; y así ubicar en su justo medio los espacios sagrados, de actividad productiva, de vivienda, entre otros, permitiendo el equilibrio entre naturaleza y cultura requerido por los pueblos indígenas. 101 Control Territorial. Las acciones para ejercer control territorial deben partir del interior de las comunidades, con el fin de que lo organizativo y político tenga incidencia en la defensa del territorio. Este debe ser un compromiso de todos los miembros de la comunidad autoridades tradicionales, mujeres, jóvenes, maestros, promotores de salud; no es una función exclusiva de los cabildos. Para lograrlo, se debe impedir la entrada de personas no indígenas a los Resguardos y otros territorios tradicionales a explotar recursos naturales como oro, madera, palmitos, otros productos vegetales no maderables, fauna silvestre de caza y pesca. RECONOCIMIENTO DE LOS PUEBLOS WOUNAAN Y SIEPIEN COMO SUJETOS DE DERECHO Derecho a la Diferencia. Los pueblos indígenas son hoy en día sujetos de derecho a nivel nacional e internacional, esto implica la necesidad de unos nuevos marcos de relación con las diferentes sociedades y la redefinición del papel de los diferentes actores que han venido interviniendo en la relación de los pueblos indígenas con la sociedad nacional. Estos criterios, deben estar dados por el respeto a la diversidad étnica y las formas de vida de los pueblos indígenas, por la vigencia presente y futura de sus sistemas culturales y el reconocimiento de su identidad como un proceso en permanente redefinición y reafirmación histórica. Los pueblos indígenas son parte de la sociedad nacional. El derecho a la diferencia implica la readecuación de las instituciones, sus planes y programas para que se garantice la participación de los pueblos indígenas, respetando lo étnico y cultural, así como la integralidad de los derechos humanos; en ese sentido, los derechos humanos se deben armonizar en cuanto a la prevalencia del derecho a la vida y a la biodiversidad sobre todos los demás, para que podamos seguir existiendo como pueblos. Ejercicio de la Autonomía. La autonomía de los pueblos indígenas es a la vez un derecho y un concepto que debe aplicarse para garantizar, al mismo tiempo la articulación a la sociedad nacional, como una imperativa adopción de responsabilidades públicas del Estado, en relación con los indígenas. La autonomía tiene que ver con nuestra identidad, el territorio que habitamos y la participación en la vida política y social de la nación. Igualmente, hace referencia a la construcción de un futuro propio, realizando sus propias formas de bienestar y equilibrios sociales y naturales. FORTALECIMIENTO CULTURAL DE LAS ETNIAS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ Fortalecimiento de la organización familiar. Esta es la unidad fundamental de la organización social indígena. En ella históricamente se dan las primeras formas de socialización de las normas de convivencia de la comunidad y se reproduce el aprendizaje para la vida cotidiana. Es entonces necesario rescatar la familia como espacio de socialización primaria. Igualmente con este proceso se intenta recuperar 102 el papel de los padres de familia y los ancianos como los consejeros de la comunidad y así retomar las formas históricas de socialización de las normas de convivencia. Por último, esta estrategia aportaría así mismo al impulso de las formas de educación tradicional que se fundamentaban en la tradición oral y las labores diarias de pervivencia en el territorio. Amortiguamiento del impacto de la cultura occidental en las comunidades indígenas. Se hace necesario desarrollar programas y proyectos que permitan a las comunidades indígenas generar mecanismos de resistencia y protección frente a la entrada apabullante de la cultura occidental. Si bien no consideramos que sea nocivo el relacionarnos, aprender y asumir elementos de esta cultura que nos puedan enriquecer en nuestro transcurrir cotidiano, la realidad nos ha mostrado que parte de la cultura occidental de la que nos hemos apropiado, ha sido perjudicial para nuestra cultura y costumbres. CONSTRUCCION DE UNA EDUCACIÓN PROPIA DE LAS COMUNIDADES WOUNAAN Y SIEPIEN DEL BAJO SAN JUAN Elaboración y socialización de políticas de etnoeducación con los centros educativos y docentes indígenas. Con esta estrategia pretendemos apropiarnos del concepto de etnoeducación, el cual está presente en algunos de los programas escolares pero no es claro para la comunidad educativa aún. Es claro para el Plan de Vida que la etnoeducación es el mecanismo más apropiado para recuperar las tradiciones y creencias que paulatinamente se han ido perdiendo de las culturas Wounaan y /Siepien/ del Bajo San Juan. Los aportes del grupo de docentes de la Experiencia Educativa Wounaan, son el fundamento de esta estrategia. Formulación de políticas educativas que fortalezcan la cultura tradicional. Las herramientas que la educación brinda a los pueblos indígenas se deben utilizar para que cada vez más la cultura propia se afiance; es por esto que se deben trazar programas que permitan coordinar acciones para que tanto los centros educativos y culturales como las autoridades indígenas, elaboren propuestas conjuntas en torno a la promoción de la cultura tradicional en la educación. Fortalecimiento y apoyo a los programas de educación formal. Se deben generar programas que permitan la adecuación de los centros educativos a las necesidades de las comunidades, así como la ampliación de su cobertura para que los niños y jóvenes se vean beneficiados. Actualmente, en las comunidades donde hay escuelas y colegios, encontramos que hacen falta docentes, es por esto que el Estado Colombiano representado por el Ministerio de Educación, debe proporcionar las plazas docentes necesarias para llenar las expectativas de educación de la población indígena. Uno de los requerimientos es que los docentes designados en la zona del Bajo San Juan, deben tener un compromiso con las comunidades indígenas. Sabemos que hay todavía pocos docentes no indígenas preparados para asumir el reto del Plan de Vida y la educación propia de las comunidades; en este sentido, los docentes no indígenas deben ante todo conocer la cultura de los pueblos indígenas y 103 respetarla. Igualmente es necesario que el gobierno nacional y departamental, aporten en la infraestructura para dotar a las comunidades de las instalaciones y el material educativo adecuados. Conformación de programas de educación no formal. Sabemos que los procesos de socialización y educación no solo se viven en las instituciones escolares; es por esto que se hace necesario implementar los programas de formación y capacitación en las diferentes áreas y temas que las comunidades requieran. Cooperación Institucional para la educación media y superior. Para suplir las necesidades de educación que tienen las comunidades en los niveles básicos, medio y superior, se hace urgente que el Ministerio de Educación Nacional, y entidades de educación media y superior, realicen convenios para que las comunidades indígenas puedan becar a estudiantes con el fin de que se puedan desplazar a los lugares de estudio fuera de la zona, con sus necesidades básicas cubiertas. CUBRIMIENTO OCCIDENTAL TOTAL EN SALUD Y MEDICINA TRADICIONAL Y Recuperación de la medicina tradicional. Es indispensable desarrollar una estrategia que fortalezca la práctica de la medicina tradicional mediante la socialización de los conocimientos de los médicos tradicionales que poco a poco se han ido perdiendo por la falta de enseñanza a las nuevas generaciones por el desinterés de estas y “las soluciones fáciles” que brinda la medicina occidental. Salud pública. Debe responder a las necesidades de salud que hoy están viviendo las comunidades. Es decir, que resulta indispensable la puesta en marcha de esta estrategia porque las comunidades indígenas de la zona habitan en una concentración demográfica que históricamente no habían vivido, ya que se vivía en pequeños grupos en viviendas dispersas. Es por esto que hoy las comunidades viven y enfrentan enfermedades que no pueden controlar por la cantidad de población asentada en un mismo lugar. Asistencia permanente de brigadas médicas (occidentales). Estas deben colaborar con el control de epidemias y otros tipos de enfermedades que tradicionalmente las comunidades no padecían. Uno de los requerimientos para estas brigadas es que haya un entendimiento y respeto a las creencias y culturas de los Wounaan y Siapidara del Bajo San Juan. Elaborar programas de cooperación institucional en salud. Para suplir las necesidades en cuanto a salud familiar y pública que tienen las comunidades de la zona, teniendo en cuenta permanentemente el marco de referencia que es la cultura tradicional. 104 Régimen subsidiado de salud. Actualmente, el régimen subsidiado de salud tiene una precaria cobertura en la población indígena del Bajo San Juan; son pocos los miembros de la población que están afiliados a diferentes ARS, unas del departamento del Chocó, otras del Valle del Cauca. Esto ha fragmentado la atención en salud de las comunidades hasta el punto de no contar con el cubrimiento que tenían antes en los centros hospitalarios conforme a la Ley 1811. Hoy, sino presentan afiliación al SISBEN o a una ARS, las comunidades indígenas son poco o nada atendidas en sus necesidades de salud. PRESTACION DE SERVICIOS BASICOS A TODA LA POBLACION INDIGENA Establecimiento de infraestructura y servicios de saneamiento básico. La contaminación del suelo y las aguas por las basuras, que además atraen insectos y roedores transmisores de enfermedades, debe solucionarse con la disposición sanitaria de estos residuos y la construcción y adecuado funcionamiento de un relleno sanitario, a cargo de personal capacitado de las comunidades y con asistencia técnica institucional bien calificada. La falta de agua potable es otro problema de saneamiento básico que afecta a las comunidades de la zona, se requiere entonces de sistemas apropiados de acueductos que se surtan de acuíferos y de boca-tomas por gravedad, según las condiciones topográficas e hidrográficas de cada comunidad. Estas mismas condiciones se deben considerar para la implementación de adecuados sistemas de disposición final de aguas servidas y excretas en cada comunidad, que eviten contaminación y enfermedades. Mayor cubrimiento de infraestructuras y servicios del sector eléctrico. Son pocas las comunidades indígenas del Bajo San Juan donde cuentan con una planta y red eléctrica que surte energía a todas las viviendas. En este sentido, se requiere mayor dotación de plantas de generación diesel y redes eléctricas apropiadas en cada comunidad y para una futura conexión de las localidades Docordó-Malaguita que se proyecta en la zona. Implementación de un sistema apropiado de telecomunicaciones. Es necesario implementar un sistema de telecomunicaciones que incluya telefonía social y radio teléfono en cada comunidad. También se plantea la implementación de una emisora que tenga cubrimiento en la zona, y que incluya la capacitación de líderes en comunicación social y comunitaria y en el mantenimiento y manejo de los diferentes equipos de emisión. De esta manera, se mejorarán las telecomunicaciones entre las comunidades indígenas y de estas con los contextos local, regional y nacional. Dotación de equipamentos de vías y transporte comunitario. Muchas de las vías fluviales y caminos de las comunidades indígenas se encuentran en mal estado, haciendo difícil y riesgoso el tránsito de las embarcaciones y personas. Es prioritaria la puesta en marcha de campañas de limpieza de vegetación, troncos y piedras en las quebradas y esteros; también la reapertura, adecuación y limpieza de algunos 105 caminos intercomunitarios que se han dejado de transitar en los últimos años. Debido al mal estado en general de los medios de transporte, es necesario dotar a las comunidades de muelles, lanchas pasajeras, ambulancias fluviales, casetas para lanchas y gasolineras. Construcción y mejoramiento de viviendas e instalaciones comunitarias. Las viviendas de las comunidades indígenas del Bajo San Juan, presentan en general un regular y mal estado, ya que desde su construcción, son muy pocas las casas que se han reestructurado. El desgaste natural de los materiales de madera y las inundaciones, han causado daños en las vigas y pisos de las viviendas, las tormentas y ventiscas ocasionan daños en los techos de hojas de palma, eternit y zinc. Las viviendas, las casas de Cabildo, las casas de reunión y otras instalaciones de las comunidades, requieren programas y proyectos de construcción y mejoramiento. RECUPERACION E IMPLEMENTACION DE SISTEMAS DE PRODUCCION QUE MEJOREN LA SEGURIDAD ALIMENTARIA Y LA GENERACION DE INGRESOS Valoración e intercambio de los conocimientos con los mayores. Los conocimientos ancestrales sobre las especies y técnicas agropecuarias, están aún en la memoria de los mayores y ancianos de las comunidades indígenas. El proceso de transmisión de estos conocimientos a las menores generaciones, ha sido afectado por factores ambientales y socioculturales internos y externos, y por los cambios introducidos al sistema tradicional de producción. Este saber constituye una valiosa herramienta para enfrentar los problemas y conforma la base de lo que debe ser el fomento a la producción agrícola y pecuaria en las comunidades indígenas. Adecuación de técnicas actuales de aprovechamiento de recursos forestales y de flora y fauna silvestres. La conservación y recuperación de la flora y fauna silvestres, depende en gran medida del estado de las poblaciones de estos recursos y de las técnicas de extracción de plantas y captura de animales. Es por esto necesario recuperar el conocimiento tradicional sobre las técnicas de consecución, uso y manejo cultural de los recursos naturales, y apropiar alternativas de manejo que tengan viabilidad biológica y sociocultural en los territorios y comunidades indígenas. Recuperación de la cultura material. Muchos elementos de la cultura material Wounaan y /Siepien/, se han dejado de producir y utilizar debido a la introducción de artículos y utensilios de la cultura occidental en las comunidades. Es importante recuperar la producción de objetos y utensilios de cerámica, madera, fibras vegetales y otros materiales, con el fin de emplearlos en las comunidades y potenciar el diseño y la producción artesanal. Promoción de productos no maderables del bosque. Dentro del conjunto de especies promisorias están las que podrían ser materias primas de medicinas, artesanías, cosméticos y otros productos consumidos por la sociedad mayoritaria; estas especies hacen que el bosque brinde alternativas económicas y de ingresos a 106 las comunidades indígenas, quienes son las únicas poseedoras del derecho de aprovechamiento de recursos naturales en sus territorios. Protección a las economías locales frente al avance del sistema de economía de mercado. En las últimas décadas hemos visto que las comunidades han entrado paulatinamente a la economía de mercado, este proceso ha generado diversas problemáticas entre las cuales hemos encontrado marcados cambios culturales, inequidades sociales y fragmentación de la familia. Se deben generar programas que protejan las economías locales. Ensayos preliminares que evalúen el impacto de las alternativas productivas en los territorios y culturas indígenas. Toda posibilidad de innovación en el sistema tradicional de producción indígena, requiere de una minuciosa evaluación de los potenciales impactos tanto positivos como negativos y de su magnitud, previamente a la toma de decisiones que impliquen algún cambio en el manejo que las comunidades dan a sus territorios y recursos naturales. Al respecto, el Centro de Investigaciones Indígenas (CIBIA) de la OREWA, desempeña un importante papel. CONSERVACION Y APROVECHAMIENTO SOSTENIBLE NATURALES DE RECURSOS Capacitación y formación en educación Ambiental. Se debe proporcionar a los pueblos indígenas los elementos teóricos y prácticos para que entiendan los conceptos occidentales sobre los ecosistemas y recursos naturales, así como las normas jurídicas ambientales; es así que conjuntamente con los conocimientos tradicionales, esta capacitación brindará herramientas para la defensa y el manejo de los territorios y la biodiversidad con verdadera autonomía. Esta educación ambiental se debe hacer extensiva a las comunidades negras y a empresas e instituciones que hacen presencia y accionan en la zona del Bajo San Juan. Evaluación del estado de la biodiversidad. En una región donde las condiciones geográficas y climáticas determinan una rica biodiversidad y un alto grado de endemismos, y en particular en los territorios indígenas, se requiere mayor nivel de información sobre la diversidad de especies, el estado de sus poblaciones y la estructura y funcionamiento de los ecosistemas. Este conocimiento y el tradicional, son la base para plantear las pautas de manejo y uso sostenible de los recursos naturales. Plan de manejo de los recursos naturales. La gestión ambiental en los territorios indígenas, requiere de la elaboración de un plan de manejo de los recursos naturales en el cual se recojan las normas que las comunidades deben cumplir en las prácticas agropecuarias, de aprovechamiento forestal, recolección, caza y pesca; siempre y cuando se sigan los lineamientos de la educación ambiental y la evaluación de la biodiversidad. El plan de manejo debe proporcionar las bases 107 para el reglamento interno y zonal de control del aprovechamiento de los recursos naturales. Reglamentación del manejo y uso de los recursos naturales. La conservación y manejo de los recursos minerales, suelo, agua, flora y fauna, debe reglamentarse desde su consecución y uso sostenible hasta su preservación o NO extracción en áreas de refugio. La conservación y manejo de los territorios indígenas, dependen en gran medida de los reglamentos zonales de CAMAWA e internos de cada Resguardo Indígena, que se están consolidando fundamentados en la Ley Marco de control y aprovechamiento de los recursos naturales y el medio ambiente expedida por el VI Congreso de la OREWA (Junio de 1999). Esta reglamentación debe ser cumplida por las comunidades negras, empresas y personas particulares que explotan recursos naturales en los Resguardos Indígenas del Bajo San Juan. Evitar la deforestación comercial. El buen estado de las selvas de la región debe prevalecer sobre los intereses particulares y mercantilistas de empresas y personas relacionadas con la industria maderera, quienes han explotado intensiva y extensivamente los bosques, ocasionando la mayor alteración de los ecosistemas de la región. Es urgente detener esta explotación en los territorios indígenas y en los ecosistemas de importancia regional, haciendo cumplir la legislación vigente sobre los Resguardos Indígenas y mediante campañas de recuperación que reemplacen la deforestación indiscriminada por ciclos de corta selectiva, orientando la composición de especies aprovechadas. 108 PROGRAMAS 109 5. PROGRAMAS PROGRAMAS DE IDENTIDAD CULTURAL Comité de cultura: pretende conformar un comité permanente de cultura con el fin de propiciar los espacios y construir las disposiciones para reactivar las manifestaciones culturales que hacen parte de las costumbres tradicionales de las comunidades indígenas; además, se quiere restituir los roles tradicionales de socialización de los conocimientos prácticos y las normas, es decir, devolver el papel que tenían los padres de familias y mayores en estas actividades ya reseñadas en el diagnóstico (identidad cultural). Divulgación cultural: tiene como objeto desarrollar actividades para la difusión, socialización y comunicación de las actividades que estén relacionadas con la identidad cultural del pueblo Wounaan y Siepien del bajo San Juan, las cuales pueden presentarse en eventos folklóricos y fiestas de otros grupos culturales y étnicos de la nación y fuera de ella, y de la misma forma al interior de las comunidades. PROGRAMAS DE AUTORIDAD Y GOBIERNO PROPIOS Control social: pretende articular las formas tradicionales de control social de las comunidades indígenas y las formas modernas y occidentales de gobierno y justicia que se han venido introduciendo. Los consejos dados por los viejos, la prohibición de las mezclas con otras etnias y la aplicación de castigos severos, eran las formas más visibles de control social tradicional que hoy en día se encuentran conflictivamente con las nuevas formas de control social introducidas en las comunidades. Se hace necesario encontrar estrategias para que puedan implementarse formas rígidas pero democráticas de control social con el fin de que las comunidades indígenas puedan defender su cultura tradicional y autonomía. Fortalecimiento de la justicia indígena: no se puede pensar en la autonomía de los pueblos indígenas con una justicia débil, por tal razón se pretende generar acciones que tiendan a fortalecer la justicia indígena en los siguientes aspectos: readecuación del actual reglamento de justicia indígena, conformación de una red de justicia indígena y procesos de formación y capacitación de líderes en resolución de conflictos y justicia indígena. PROGRAMAS DE FORTALECIMIENTO ORGANIZACIONAL Y PARTICIPATIVO Con este programa pretendemos afianzar la autonomía de las comunidades del Bajo San Juan. Las organizaciones locales, zonales y regionales deben fortalecerse para enfrentar los retos de la autonomía y eventual conformación de las Entidades Territoriales Indígenas, es por eso que se plantean los siguientes programas: 110 Capacitación y formación de líderes: este tiene como objetivo proporcionar procesos de aprendizaje y formación los líderes de las comunidades en temas de gobernabilidad, planeación y evaluación institucional, legislación que afecta o beneficia a los pueblos indígenas, entre otros. Adecuación de las organizaciones y gobiernos para el ejercicio de la autonomía: en el diagnóstico encontramos que uno de los problemas de las autoridades y gobiernos locales y zonales, era la pérdida de credibilidad y el actual desajuste de las nuevas formas de gobierno y las autoridades tradicionales con las formas de vida cotidiana de las comunidades. Es por esto que, se hace necesario el desarrollar un programa que evalúen a los gobiernos y autoridades para que adecuen el ejercicio de la autoridad a las formas cotidianas de vida de las comunidades y retomen la credibilidad, y así ejercer el derecho a la autonomía, sin dejar los aportes que las formas modernas de organización y gobierno dan a la democracia y organización. Programas de mujeres: la creciente búsqueda de espacios de participación de las mujeres en la vida pública y política2 de las sociedades en la actualidad, permean también la sociedad Wounaan y Siepien y se manifiesta de una manera particular en las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Ello nos lleva a concluir que es pertinente que el Plan de Vida lleve a cabo acciones que generen organización en esta capa poblacional y de género. De la misma manera, se quiere ordenar más las actividades de las mujeres que beneficien a las comunidades como es el caso de su participación en los gobiernos locales y zonales, los ingresos recibidos producto de la elaboración y comercialización de las artesanías y los programas de atención a la infancia y preescolar. Conformación de comités y organizaciones comunitarias: para que las formas de gobierno y la democracia sean más efectivas, se plantea la conformación de organizaciones comunitarias o de carácter poblacional como es el caso de los comités de mujeres y organizaciones juveniles los cuales pueden buscar el cumplimiento de sus derechos y formar nuevos líderes, y así continuar convirtiéndose en actores con conciencia de las problemáticas de las comunidades indígenas que van a aportar al mejoramiento de éstas. Derechos Humanos: el conocimiento de los derechos de los pueblos indígenas y en términos generales de los Derechos Humanos de primera y segunda generación, son herramientas fundamentales para la exigibilidad de éstos y el fortalecimiento de la autonomía en la medida en que, en el caso del conflicto armado, se le pueden poner límites a los actores, haciendo uso de tan valiosa herramienta. PROGRAMAS DE EDUCACIÓN PROPIA Conformación de un comité de etnoeducación. Es necesario que las autoridades indígenas agrupadas en CAMAWA y ACIVA, conformen un comité con 2 se entiende la política como la intervención en las decisiones que se relacionan con el poder y no la visión clientelísta 111 personas expertas o preparadas en el tema de etnoeducación, con el fin de que este elaborare los conceptos y orientaciones que guíen el accionar de las instituciones escolares y los docentes que en ellas trabajan. De la misma forma, el comité debe buscar las oportunidades de capacitación para los docentes en el tema. Educación tradicional: el objetivo es el de generar espacios y procesos que recuperen el papel que tenían los agentes socializadores tradicionales y las formas de aprendizaje prácticos para la vida cotidiana, lo cual tiene que estar en estrecha relación con las políticas y estrategias trazadas para la recuperación y fortalecimiento de la identidad cultural. Consideramos que en los espacios de la educación formal e informal es donde se pueden desarrollar más ampliamente las disposiciones para recuperar y fortalecer la cultura. De esta manera, es necesario implementar programas que propicien los espacios de encuentros y socialización de los saberes tradicionales y ancestrales. Capacitación: es de suma importancia incluir los distintos procesos de capacitación que se llevan a cabo por instituciones estatales y no gubernamentales, diferentes a las del Ministerio de Educación, los cuales nos deben permitir prepararnos para enfrentar los retos que la cultura occidental permanentemente nos presenta. Es así como los seminarios y talleres a los que asistamos, deben ser aprovechados para adquirir herramientas y destrezas en áreas como la organizativa, política, administrativa, planeación de proyectos, técnicas de salud, artesanías y producción agrícola, entre otras. Cabe anotar que en cada una de las estrategias y programas, se presentarán proyectos que puedan capacitar cada vez más a la población indígena del Bajo San Juan en los diferentes componentes de su Plan de Vida. Capítulos especiales: • Educación y alfabetización de adultos: es igualmente indispensable que los adultos sepan escribir y leer en español y su propia lengua. Para ellos se deben desarrollar proyectos que disminuyan los niveles de analfabetismo y aumenten la capacidad de lecto-escritura. • Capacitación de líderes. Las comunidades se deben capacitar ellas mismas para tener mayor incidencia en la toma de decisiones. En este sentido las organizaciones deben elaborar programas especiales para la capacitación de las mujeres y así contribuir en la construcción de una mayor conciencia de los problemas políticos de cada comunidad y de la zona en general. Las autoridades locales y zonales, deben propiciar los espacios de encuentro para lograr mayor coordinación entre las dos Asociaciones de la zona (CAMAWA y ACIVA). En este caso se debe dar prelación a la coordinación de las acciones de la justicia indígena. • Capacitación en justicia indígena. Se debe fortalecer y capacitar a los Cabildos y otras personas encargadas de ejercer justicia en cada comunidad. Igualmente debe haber una readecuación del reglamento de justicia indígena, 112 este debe responder a las necesidades planteadas en el tema por el Plan de Vida y finalmente, es indispensable llevar cabo la socialización del reglamento de justicia indígena, en coordinación con los gobiernos locales y las organizaciones indígenas zonales y regionales. PROGRAMAS DE EDUCACIÓN FORMAL Dotación e infraestructura de los centros educativos: es necesario que la entidades encargadas del apoyo a la educación, elaboren y ejecuten proyectos que busquen construir, mejorar y dotar de los implementos necesarios para una enseñanza optima a los centros educativos de las diferentes comunidades indígenas del Bajo San Juan. Nombramiento de las plazas docentes necesarias para cubrir las demandas educativas de la zona. Es importante tener en cuenta los siguientes criterios para la selección del personal sea o no indígena: • • • Que tenga una comprensión de las políticas de etnoeducación de la zona. Que tenga un respeto a la identidad y la cultura indígena. Que sea preferiblemente indígena y en caso de lo contrario que sea un educador o educadora profesional en etnoeducación y su respectiva especialización en las materias de los ciclos educativos. Educación preescolar: al igual que los ciclos educativos de primaria y secundaria, la educación preescolar significa para nosotros la construcción de mecanismos y espacios para socializar adecuadamente a los niños de las comunidades, de acuerdo con nuestras tradiciones y no con los parámetros occidentales como lo han venido desarrollando la gran mayoría de los programas de bienestar familiar (ICBF). Si bien hoy en día es necesario tener programas que permitan a los niños estar juntos en su etapa de socialización y posibilitar espacios propios para sus actividades a las mujeres madres de familia, no se puede asumir la socialización con cualquier criterio. Estos deben ser programas que se desprendan del objetivo principal del Plan de Vida, que es la recuperación y fortalecimiento de la cultura propia. Por tal razón, se deben generar espacios de concertación y apoyo entre las Madres Comunitarias, el ICBF y sus programas regionales y el Ministerio de Educación. Básica primaria y secundaria: al igual que el otro componente de la educación formal es la etnoeducación enfocada específicamente para las comunidades indígenas del Bajo San Juan. En ese sentido los pénsum, el nombramiento de los docentes, la adecuación de los horarios y los calendarios escolares, deben partir de la asesoría y concertación del comité de etnoeducación. En el caso de los horarios y calendarios, se deben tener en cuenta las actividades cotidianas de la comunidad, distinguiendo las labores de los hombres y las mujeres, los ciclos de cultivos, pesca, caza y recolección, y también las fiestas culturales de las comunidades de la zona. 113 Educación media y superior: se deben buscar convenios con el Ministerio de Educación Nacional e instituciones de educación media y universidades para que, haciendo valer sus derechos, los estudiantes indígenas de la zona puedan ser becados y subsidiados. De la misma forma es conveniente tener un programa de orientación profesional para la educación superior, que a los interesados saber qué pueden estudiar, en dónde y qué facilidades tiene para su manutención. Capacitación y profesionalización de los docentes: es importante señalar que la capacitación permanente del cuerpo docente de los centros educativos, es necesaria para mejorar la calidad de la educación, es por eso que se deben diseñar programas que permitan a los docentes titularse en licenciaturas y otras carreras de las áreas de su profesión, y estar en continua actualización por medio de la asistencia a cursos, talleres, seminarios y postgrados. Con el fin de lograr este objetivo, se hace necesario que las instituciones públicas y privadas encargadas del tema de educación, realicen convenios y cooperen con la actualización permanente de los docentes. PROGRAMAS DE SALUD Y ATENCION MEDICA Salud y medicina tradicional: se quiere fortalecer las formas ejercer la medicina tradicional Wounaan y Siepien, entonces es necesario concertar los mecanismos para recuperar las enseñanzas y prácticas de esta medicina en las comunidades indígenas. Es por esto que se debe incentivar a los jóvenes para que aprendan las prácticas del jaibanismo y el uso de plantas medicinales en beneficio de la salud de las comunidades. De la misma forma, se crearán los espacios de coordinación para que los médicos tradicionales estén en permanentemente contacto con los promotores de la salud occidental. Salud y medicina occidental: la medicina occidental debe estar acorde con las necesidades planteadas por los habitantes de las comunidades indígenas del Bajo san Juan. Es por esto urgente que el régimen subsidiado de salud, cubra la totalidad de los habitantes de estas comunidades, mediante un plan que esté en concordancia con las leyes que benefician a los pueblos indígenas. Las entidades que presten estos servicios deben concertar las formas más adecuadas para atender la salud, que se armonicen con las costumbres y usos de los pueblos Wounaan y Siepien. De las misma forma lo deben hacer las brigadas institucionales de salud que eventualmente lleguen a las comunidades de la zona. Infraestructura y dotación en salud. La práctica de la medicina y atención en salud de los indígenas del Bajo San Juan, requiere de locaciones, equipo, material y medicamentos de los que actualmente las comunidades adolecen. Se deben dotar a cada comunidad de un puesto de salud que no poseen y construir centros de salud en comunidades ubicadas en sitios estratégicos para la atención de otras comunidades cercanas. 114 Contratación de promotores de salud: deben ser contratados por las secretarías de salud o en su defecto por la entidad que esté prestando los servicios de salud en las comunidades. Así mismo, los promotores deben estar permanentemente en capacitación y actualización. Esto es posible con la cooperación de las entidades del Estado y las privadas que manejen el tema de salud. La forma de atención de los promotores debe ser sistemática y con brigadas preventivas regulares en las comunidades. Salud Pública: este es un tema que deben manejar las comunidades indígenas del Bajo San Juan con el fin de prevenir las enfermedades de fácil propagación, como las gripas y otras infecciones por virus y bacterianas que son comunes en la zona y difíciles de erradicar. PROGRAMAS DE ORDENAMIENTO Y CONTROL TERRITORIAL Socialización del territorio tradicional. Desde la constitución de los Resguardos Indígenas, las comunidades en general, y particularmente los jóvenes, no tienen la percepción cultural ni el conocimiento de sus territorios tradicionales como lo poseen los mayores y ancianos; no conocen los sitios de origen y poblamiento ancestral, los lugares históricos y sagrados que están por fuera del área de Resguardo de cada comunidad, y aún dentro de estos se presenta cierto grado desconocimiento de los territorios tradicionales. Es por esto importante que se socialice el conocimiento de los sitios y áreas de los territorios ancestrales entre las mayores y las menores generaciones de las comunidades. Ampliación y saneamiento de Resguardos Indígenas, concertados con los Consejos Comunitarios y comunidades negras. El proceso de constitución, ampliación y saneamiento de Resguardos Indígenas, es una prioridad para el reconocimiento y apropiación territorial de las comunidades y autoridades indígenas de la zona del Bajo San Juan. La definición legal de los territorios indígenas y colectivos de comunidades negras, requiere de voluntad política y apoyo del INCORA y de otras instituciones de nivel municipal, regional y nacional, para que el Bajo San Juan continúe y mejore su histórica convivencia interétnica. Protección de áreas y sitios sagrados e históricos. Son las áreas y localidades que revisten importancia espiritual, religiosa e histórica en la cultura y cosmovisión Wounaan y /Siepien/. En ellas sucedieron o aún suceden hechos que tienen un significado mítico o histórico, tal es el caso de Durrapdur y Munguidó. Se deben recuperar y preservar estas áreas y lugares, mediante el saneamiento y ampliación de los Resguardos y la regulación de toda actividad minera, agrícola y extractiva de flora y fauna silvestre. Ordenamiento territorial. Las comunidades indígenas del Bajo San Juan, desarrollaron su propio ordenamiento territorial en el marco del Esquema y Plan de Ordenamiento Territorial Municipal, respectivamente en los municipios Litoral del San Juan y Buenaventura. Debe funcionar un programa de ordenamiento territorial 115 de las comunidades indígenas que haga el seguimiento y ajuste de los proyectos formulados en dicho marco a corto, mediano y largo plazo por las dos administraciones municipales para las comunidades indígenas de la zona. Entidad Territorial Indígena (ETI) del Bajo San Juan. El Bajo San Juan es una de las zonas indígenas del país que se está preparando para conformarse en una futura ETI. Esta debe ser una estrategia que garantice la diversidad étnica y cultural de la nación y no reducirse a una simple división político-administrativa; la ETI debe servirnos a los pueblos indígenas del Bajo San Juan para crecer, ampliarnos, desarrollar sobre nuestras raíces la manera de ser de cada pueblo y poder enfrentar mejor los tiempos presente y futuro; debe contribuir a formular la política de recuperación cultural, social y económica de las poblaciones que viven en ellos. PROGRAMAS DE RECUPERACION Y FOMENTO DE LA PRODUCCIÓN INDIGENA Fomento de sistemas agroforestales tradicionales. Los pueblos indígenas, desde tiempos ancestrales y como respuesta adaptativa al ambiente selvático, han desarrollado sistemas agrícolas que hacen posible una producción con insumos muy bajos. Estos sistemas se destacan por su capacidad de aprovisionamiento continuo de diferentes especies durante el ciclo anual, por rotar las áreas de cultivo a través de los años y por la práctica de la tumba selectiva -mediante la cual los indígenas no talan en las áreas cultivadas las especies forestales de valor económico-. Restablecimiento de las rotaciones en los cultivos. Considerando la disminución de los territorios indígenas en la actualidad y la crisis que se está presentando por la pérdida de la rotación de áreas de cultivos, se hace necesario el restablecimiento de esta práctica tradicional con el fin de que se den periodos de recuperación de la fertilidad del suelo mediante la sucesión del bosque y la acumulación de materia orgánica en los terrenos. Experimentación de la reproducción de especies promisorias. Las especies promisorias vegetales y animales, se constituyen en un potencial para la solución de problemas alimenticios de la gente y los animales domésticos. Estas especies han sido subutilizadas en las comunidades indígenas porque ellas han desarrollado más sistemas extractivos que de producción de estas especies, encontrándose la mayor limitación en la reproducción, sea de plantas sembradas o animales en cautiverio. Este trabajo debe partir de un proceso de experimentación o investigación sobre las especies que las comunidades determinen como promisorias, tanto las originarias de la región como las que sean fuente alimenticia de otros grupos humanos del país y que a partir de estudios de viabilidad, puedan ser introducidas en el sistema de producción de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Diseño de un sistema propio de comercialización. Se debe diseñar un sistema de comercialización que garantice la adecuada distribución de los productos y 116 genere los ingresos que satisfagan otras necesidades básicas de las comunidades indígenas. Para esto, se requieren estudios de mercadeo que determinen los productos a comercializar y que capaciten técnicamente a las comunidades para la definición y el manejo de las alternativas. Con el fin de dar funcionamiento a este nuevo sistema de comercialización, se hace necesario fortalecer el trabajo organizativo y de participación a nivel local, zonal y regional, para lograr mayor unidad y solidez ante los agentes externos que afecten el mercado. Se debe realizar un plan de comercialización donde prevalezca el interés comunitario sobre el individual, mediante la conformación de Juntas Comerciales Comunitarias que deberán coordinar el trabajo con los cabildos locales, CAMAWA y ACIVA, para controlar las transacciones que realicen los indígenas del Bajo San Juan. Provisión de medios de transporte y mejoramiento de las vías de comunicación. Con el fin de lograr una comercialización lo más directa posible, que disminuya los niveles de intermediación, es imperante proveer a las comunidades de medios de transporte necesarios y mejorar las vías de comunicación. Para lograrlo, se debe trabajar con instituciones a nivel nacional, departamental y municipal que fomenten el comercio y mejoren las diferentes vías. 117 ACTIVIDADES Y PROYECTOS 118 6. ACCIONES Y PROYECTOS CULTURA E IDENTIDAD Conformación del Comité zonal de Cultura: tiene como objetivo coordinar y promover las actividades y proyectos que el Plan de Vida Wounaan delinee para el fortalecimiento cultural. De la misma manera, debe estar en coordinación con las autoridades locales y en especial con CAMAWA para desarrollar los siguientes proyectos: • Formación en elaboración y gestión de proyectos culturales. • Encuentros culturales y multiétnicos. • Muestras culturales de la región. Investigación y recopilación de las tradiciones culturales: las acciones enfocadas a la recuperación de la cultura no solo tienen que ver con las actividades que tiendan a el fortalecimiento de la cultura tradicional, es igualmente necesario llevar un proceso investigativo que ahonde en los siguientes temas: • Cultura oral: historias, mitos y leyendas. • Cultura material: recuperación de la producción de objetos e implemento de usos tradicionales. • Recopilación de la música y bailes de las cultura Wounaan y Siepien. • Elaboración de material etnoeducativo acerca de la cultura tradicional del pueblo Wounaan y Siepien. Elaboración de convenios de cooperación para la protección de la cultura tradicional: Para poder lograr este objetivo es necesario establecer convenios con instituciones nacionales e internacionales. En el caso del Ministerio de Cultura, éste debe apoyar la construcción de las casas de la cultura y otros proyectos que beneficien a las comunidades indígenas. Por otro lado el Ministerio debe generar políticas para que las actividades cotidianas, sagradas y artísticas, sean respetadas y difundidas como la cultura del Pueblo Wounaan y Siepien. Con instituciones del gobierno y la cooperación internacional, se plantea hacer un acuerdo para la gestión de proyectos culturales y para la difusión de la cultura de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Casa de la Cultura: tiene como objetivo el promocionar y centralizar las actividades que estén enfocadas en los programas de fortalecimiento y recuperación de la tradición cultural del pueblo Wounaan y Siepien. Esta debe funcionar en cada una de las comunidades, debe estar manejada por las personas mayores de la comunidad y las que más conocimientos e interés posean; ellos serán los responsables de desarrollar las siguientes actividades: • Recuperación de los espacios tradicionales para la socialización de la tradición oral. 119 • Enseñanzas de música, bailes y cantos tradicionales de los Wounaan y los Siepien. • Fomento de los actos culturales relacionados con las rogativas. • Enseñanzas de la vida cotidiana que llevaban los mayores en la antigüedad. Restitución de los valores tradicionales: este proyecto quiere generar un proceso de sensibilización para que se puedan restituir los valores3 fundamentales de la cultura Wounaan y Siepien, los cuales han ido declinando ante la aculturación producida por la cultura occidental en las comunidades. Hay que aclarar que esta restitución solo se dará mediante un proceso largo, porque ello significa cambios de actitud de las personas indígenas. Además no hablamos de unos valores puros o idénticos a los que primaban en la sociedad de nuestros ancestros, porque entendemos que hoy en día nuestra identidad es parcialmente producto de una mezcla cultural. Es por esto que pretendemos con el Plan de Vida la permanencia y hegemonía de la cultura tradicional Wounaan y Siepien en las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Restitución de los roles tradicionales de los padres de familia y ancianos: este proyecto pretende generar los espacios para que sean los padres de familia y los mayores los que estén a cargo de las actividades que tienen que ver con la recuperación y fortalecimiento de la identidad cultural de las comunidades indígenas. CONTROL SOCIAL: Restitución de las formas tradicionales de socializar las normas: el objetivo del proyecto es el de restituir los consejos (socialización de las normas de convivencia); queremos encontrar los espacios que recobren la importancia de éstos en las comunidades, para lo cual los gobiernos locales y zonal y la organización regional, deben buscar las disposiciones que permitan llevar a cabo el objetivo en espacios como la escuela y la familia. Cabe resaltar que este es uno de los proyectos que tendrá resultados a largo plazo ya que se caracteriza por ser de cambios actitudinales de diferentes grupos de población de las comunidades indígenas. Concientizar y debatir al interior de las comunidades la relación de la democracia y el castigo: este proyecto al igual que el anterior se inscribe en procesos de cambios de actitud y toma de conciencia colectiva, lo que implica que los resultados no son medibles de una manera inmediata. Este proyecto pretende generar en las comunidades un debate sobre las implicaciones culturales en la estructura social Wounaan y Siepien, que puedan tener las maneras democráticas de control social en relación con las formas tradicionales de este ejercicio. Socialización, debate y readecuación del Reglamento de Justicia Indígena: este tiene como objetivo socializar con el conjunto de los pobladores de las 3 De los valores depende en gran medida la organización social tradicional, la aplicación de la cosmovisión y en términos generales la vida social del Wounaan y Siepien del Bajo San Juan. 120 comunidades, el actual Reglamento de Justicia Indígena elaborado por las organizaciones zonales y la regional; someterlo a debate y reformar los artículos que sean poco convenientes a la luz de la cosmovisión indígena Wounaan y Siepien, y las formas propias de aplicación de la justicia; y por último producir un documento final que sea socializado nuevamente con las comunidades. Esto se logrará mediante una serie de encuentros de autoridades a nivel local y zonal, donde se estudie y adecue dicho reglamento. Constitución de una red de justicia indígena: es necesario que se creen mecanismos de coordinación efectiva entre los diferentes comités locales de justicia en la zona del Bajo San Juan, y que la red se extienda a las comunidades y autoridades indígenas de las zonas del Medio San Juan y Serranía Wounaan. La conformación de esta red de justicia indígena permitirá responder ágilmente a los requerimientos de la zona y en algunos casos, en articulación con la organización regional. Formación de líderes en resolución pacífica y alternativa de los conflictos: este es un proyecto que permite fortalecer la justicia indígena brindando herramientas para un manejo de los conflictos de una forma creativa y constructiva que no disgregue a las comunidades y en cambio puede fortalecerlas y unificarlas en torno a la convivencia. Comité para la vigilancia y defensa de los Derechos Humanos en las comunidades indígenas del Bajo San Juan: ante las circunstancias que el país atraviesa, la vigilancia y defensa permanente de las autoridades indígenas al respeto de los Derecho Humanos, debe ser permanente. Las comunidades indígenas como otros grupos minoritarios y excluidos, son en muchos casos objeto de acciones violentas de los diferentes actores armados, como sucede regularmente en varias zonas del departamento del Chocó, en donde los indígenas han estado entre el fuego cruzado de los grupos armados o son atropellados y asesinados por estos por el hecho de tener una posición autónoma frente al conflicto armado. Por esta razón, la organización regional OREWA y CAMAWA, han delineado políticas que permitan proteger a las comunidades frente al conflicto armado. Dicha posición tiene que ver con el respeto por parte de los actores armados por el territorio y la autonomía de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Paralelamente, este comité debe estar alerta en la defensa de los Derechos de los pueblos Indígenas frente a las instituciones del Estado que en muchos casos son vulnerados y atropellados desconociendo la cosmovisión las comunidades. La implementación de políticas y planes que van en contra de los intereses, formas de vivir propias de los indígenas y en general de su cultura y territorio. Estos deben ser los aspectos respetados por el Estado y sus Instituciones. El no reconocimiento de los Wounaan y Siepien como sujetos de derecho por parte de otros grupos sociales, principalmente por los sectores hegemónicos de la sociedad colombiana, conduce a igualmente a un irrespeto de su cultura y territorio. Por todo lo anterior se debe estar muy atentos a todas las violaciones que se puedan estar cometiendo frente a 121 los Derechos Humanos, y para ello el comité debe estar bien capacitado sobre estos y su exigibilidad. FORTALECIMIENTO ORGANIZACIONAL Capacitación de líderes: los retos que plantean el Plan de Vida exigen que las personas que hoy en día son líderes sean capaces de afrontar las expectativas de las comunidades de una manera responsable y consecuente con las comunidades. Este proyecto pretende llevar a cabo procesos de formación de los líderes para se perfilen como líderes integrales, es decir que tengan los elementos carismáticos de las autoridades tradicionales y puedan poner en práctica las nuevas visiones de gobiernos que se han ido implementado en las últimas décadas en las comunidades indígenas. Así mismo, la elaboración conceptual de lo que se quiere como gobierno, como pueblo indígena y como organizaciones zonales en el caso de CAMAWA y ACIVA en temas como el de la autonomía, las ETIS y la unidad política del pueblo Wounaan y Siepien, son herramientas que benefician la gobernabilidad de las comunidades indígenas y por ende la autonomía. La capacitación de los tesoreros y fiscales de las organizaciones y gobiernos locales, en sistemas contables, administración pública, gestión de proyectos, economía solidaria y otros temas, se hacen necesarias para el adecuado manejo de las trasferencias y proyectos financiados. Proyecto CAMAWA: con este proyecto pretendemos fortalecer más la organización zonal como una Asociación de Autoridades Indígenas, es por esto que transcurrido un año del cambio de razón social del Cabildo Mayor del Bajo San Juan a Asociación de Autoridades Wounaan del Pacífico – CAMAWA, legalmente constituida, queremos construirle un perfil que nos permita mostrar la misión, visión, objetivos y estrategias que tiene la organización zonal y así, posicionarla en el ámbito regional, nacional e internacional como una organización que representa y defiende los intereses del pueblo Wounaan y Siepien del Bajo San Juan y que quiere trabajar no solo por el desarrollo de sus comunidades, sino por el de la región. Escuela de liderazgo: la falta de formación de los líderes, el poco interés de las nuevas generaciones en el gobierno de las comunidades, hacen que este proyecto sea pertinente para que haya una continuidad en los procesos organizativos y de liderazgo en las comunidades. De esta manera pretendemos desarrollar actividades orientadas a una formación permanente de las personas que se interesan por la vida de las comunidades mediante módulos de reflexión y aprendizaje y reforzamientos de los líderes, esto con el apoyo permanente de las personas que han asistido a los diferentes procesos organizativos del Bajo San Juan en los años y décadas anteriores. Comités de mujeres: para que el programa pueda tener un buen funcionamiento se deben conformar los comités locales de mujeres que centralicen la aplicación de las políticas dirigidas a ellas. Este proyecto quiere por un lado fortalecer los comités ya existentes de algunas comunidades indígenas y crear unos nuevos en donde no 122 los hay. De la misma forma se quiere que el comité tenga una perfil amplio y que el interés fundamental sea el de un órgano representativo de las mujeres Wounaan y Siepien a nivel local, y zonal con los siguientes proyectos específicos: • • • • • Núcleos Solidarios de Mujeres Capacitación de las Madres Comunitarias Procesamiento y preparación de alimentos Diseño y comercialización de Artesanías Salud reproductiva de la mujer EDUCACION PROPIA Recuperación de la Educación tradicional: los proyectos y acciones que se realicen en esta área van de la mano con lo planteado en la recuperación de la cultura tradicional y del papel que deben tener los padres de familia y los ancianos en la transmisión de conocimientos y valores. Los proyectos enfocados en ésta área son los siguientes: • Recuperación de las enseñanzas de actividades tradicionales: el objetivo de este proyecto es el de retomar las formas de enseñanza de los ancestros en la práctica de las siguientes actividades tradicionales: labores domésticas, agricultura, pesca, caza, recolección, construcción de viviendas y embarcaciones, elaboración de implementos y artesanías. En este caso la transmisión de los conocimientos se enfocaría en las técnicas y tecnologías empleadas en las labores anteriormente señaladas de aprovechamiento y uso de recursos naturales. • Restitución de los espacios familiares para los relatos orales: el objetivo es el de recobrar las formas de conocer la historia, los mitos y las leyendas de la cultura Wounaan y Siepien. Los relatos contados por los ancianos eran realizados luego de las jornadas de trabajo, este era una lugar importante para la reproducción cultural de las comunidades. La ocupación de estos espacios no se da de la misma manera como se hacían antes, ya que hoy en día la tradición oral está siendo desplazada por el tiempo escolar, la radio y la televisión, los juegos de fútbol y billar en algunas comunidades. Recobrar la tradición oral oral y valorar sus protagonistas, por lo genera los ancianos, requiere de mecanismos para que los relatos y los consejos sean otra vez actividades de la cotidianidad. • Escuela de música, bailes y danzas: el objetivo de este proyecto es el de desarrollar actividades que revivan las formas tradicionales de hacer las rogativas y fiestas tradicionales por medio de las danzas, el baile y la música que se hacían en tiempos antiguos. Este proyecto fomentará el aprendizaje de estas manifestaciones culturales en los niños. Comité de Etnoeducación: el objetivo es el de orientar los procesos educativos de las guarderías infantiles, las escuelas y colegios de las comunidades indígenas del Bajo San Juan, con las políticas y acciones que a nivel regional la OREWA ha 123 delineado, y que a nivel zonal del Bajo, Medio y Serranía, la Experiencia Educativa Wounaan ha adelantado en lingüística, profesionalización maestros y producción de materiales educativos en las comunidades indígenas. Estas sientan las bases para estructurar los centros educativos con una perspectiva de educación propia que igualmente intenta rescatar elementos de la cultura tradicional de los pueblos indígenas y agregar conceptos que refuerzan la identidad indígena en los estudiantes. Sin embargo, es necesario consolidar más estas orientaciones en la zona del Bajo San Juan, mediante un proyecto que constituya un comité de líderes y docentes indígenas que conceptualicen sobre el tema y asesoren permanentemente las escuelas y colegios de la zona en la formulación de sus planes educativos. Este proceso implica la capacitación de los docentes y madres comunitarias en conceptos de etnoeducación. EDUCACIÓN OCCIDENTAL: Elaboración de proyectos Educativos que refuercen la identidad cultural Wounaan: con este proyecto se pretende elaborar los parámetros y herramientas para la construcción de PEI y otros como los PRAES para que cada institución educativa pueda implementar las orientaciones del comité de etnoeducación y así reforzar la identidad cultural. Capacitación y profesionalización de los docentes indígenas: para cumplir con los objetivos propuestos por el Plan de Vida, se recomienda que las personas más indicadas para la transmisión de conocimientos en las escuela y colegios, deben ser los docentes indígenas. De esta manera el objetivo del proyecto es el de diseñar planes para que los docentes que son bachilleres inicien su etapa de profesionalización y los docentes que están en proceso de obtener un título universitario, se les debe apoyar en términos financieros y de asesoría profesional. De la misma forma se pueden implementar cursos sobre la etnoeducación y las políticas educativas de las organizaciones indígenas del Bajo San Juan, con los maestros indígenas y no indígenas que actualmente están contratados en los centros educativos. Ampliación de cupos y plazas docentes e infraestructura física en los centros educativos: este proyecto tiene como objetivo el mejorar las condiciones logísticas para el funcionamiento de los centros educativos de las comunidades indígenas. Para lograr esta meta se deben desarrollar las siguientes actividades: • Mejoramiento de las locaciones físicas de las escuelas y colegios de las comunidades: Construcción de salones y edificios adecuados para la zona. Esto implica que las construcciones deben responder, por un lado a la cosmovisión Wounaan, es decir que debe ser parecida a las formas de construcciones tradicionales y por el otro deben ser de materiales duraderos y aptos para las condiciones climáticas de la región. 124 • • Plazas docentes: como lo hemos venido diciendo en reiteradas ocasiones, la elección de los docentes deben ser a partir de las características que se han definido que debe tener el profesor en las comunidades indígenas este debe ser en principio indígena, manejar los conceptos de etnoeducación, ser una persona democrática e integral en su forma de ser. En el caso de los docentes no indígenas, lo que se quiere es que estas personas sean conocedoras de nuestra cultura, que la respeten, que sean buenos profesionales en su área de conocimiento, que en primer lugar que sean formados y titulados en algunas de las disciplinas de la enseñanza y que manejen la pedagogía. Elaboración de materiales educativos bilingües (Wounaan-español o Siepien-español): en gran parte los materiales educativos de hoy no son apropiados a las culturas Wounaan y Siepien, ni al medio que estas habitan en el Bajo San Juan; por ese motivo este proyecto pretende elaborar materiales que se ajusten a la cosmovisión Wounaan y Siepien y que sean fácil de comprender por parte de los estudiantes indígenas; esto deben ser bilingües. Se debe partir de la recopilación de los materiales que existen en los centros educativos de la zona, buena parte de los que han producido el grupo de docentes de la Experiencia Educativa Wounaan. Guarderías Infantiles y Madres Comunitarias: Este es un proyecto que para nosotros es muy importante, ya que en estos espacios podemos iniciar un proceso de socialización que fortalezca nuestra cultura. Es por esto que si bien pensamos que es pertinente que las madres tengan el cuidado de los niños, el programa de Bienestar Familiar debe prestarse a algunas modificaciones partiendo de las siguientes actividades: • • Formación de las madres comunitarias: el objetivo de este proyecto es capacitar las mujeres indígenas en el ejercicio de ser Madres Comunitarias, a partir de programas educativos fundamentados en las creencias y costumbres del pueblo Wounaan y Siepien, lo que significa que en los jardines se puede recuperar los cantos tradicionales de cuna, así como los juegos tradicionales que son parte de la socialización de los niños en los valores de su cultura y la sociedad indígena. Las madres comunitarias igualmente deben estar preparadas para brindar un menú alimenticio adecuado para el crecimiento de los niños, con los alimentos propios de la región e igualmente su forma tradicional de prepararlos. La pedagogía es otra herramienta muy valiosa que deben aprender las Madres Comunitarias y que este proyecto contempla también como objetivo. La locaciones físicas en donde funcionen estos programas deben ser casas típicas ya que no solo recuperan cultura con la construcción, sino que además son las más frescas para mantener a los niños en un ambiente sano. Orientación Profesional para la educación superior: este proyecto pretende como su nombre lo indica, orientar a los bachilleres indígenas que deseen cursar carreras en universidades y otros centros de educación superior, con el fin de que sepan de qué se trata la carrera que han escogido y en qué pueden aportar a la comunidad desde sus estudio. Igualmente pretende instruir a los estudiantes sobre 125 la ubicación de las universidades o centros donde existen las carreras, así como la facilidad de pago, convenios y modo de educación (presencial a no presencial) que por derecho propio de los indígenas pueden acceder. Preparación de los estudiantes para el ingreso a la universidad. Dentro de los muchos diagnósticos que se hacen acerca de la educación secundaria pública en el país, se detectan muchas debilidades producto de la baja calidad de la enseñanza en estos centros. Los colegios de las comunidades indígenas y a los que van a estudiar los indígenas fuera de sus comunidades, no se escapan de este problema; y es un problema mayor si tienen bajos puntajes en las pruebas del ICFES y por ende pocas oportunidades de ingreso a las universidades públicas4. Es por esto que además de la orientación para la escogencia de las carreras es indispensable que se establezcan convenios con instituciones debidamente acreditadas para que el ingreso a las universidades públicas sea más fácil. En este contexto, se deben el acceso de los estudiantes de las comunidades indígenas del Bajo San Juan a la educación superior por medio de convenios con las universidades y otros centros educativos. SALUD Y MEDICINA TRADICIONAL Recuperación de las prácticas médicas tradicionales: el objetivo de este proyecto es el de recuperar las formas tradicionales de curación de enfermedades que afectan a los Wounaan y Siepien. El diagnóstico que se realizó en las diferentes comunidades develó que poco a poco se han ido perdiendo las costumbres de recurrir a los médicos tradicionales para la curación y recuperación de las enfermedades, esto se debe en gran medida a la presencia de los promotores de salud y los medicamentos de la medicina occidental, y a la falta de relevo generacional de quienes ejercen la medicina tradicional en las comunidades -jaibaná o /Benkhun/, Tongueros, hierbateros, parteras, sobanderos y otros-, y a las facilidades que brinda la medicina occidental en el tratamiento de enfermedades no tradicionales. Por esta razón el proyecto pretende recuperar paulatinamente el aprendizaje y la práctica de la medicina tradicional de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. SALUD Y MEDICINA OCCIDENTAL Proyecto de afiliación permanente de todos los pobladores de las comunidades indígenas al régimen subsidiados de salud. Deben lograrse la afiliación de toda la población indígena del Bajo San Juan a una ARS que preste servicios integrales de salud dentro y fuera de la zona; igualmente, las comunidades y autoridades indígenas se deben organizar para crear su propia IPS que preste cobertura total en la zona. Tanto la ARS como la IPS a las cuales las comunidades se afilien, deben reconocer la importante función que tiene la medicina tradicional en 4 La Universidad Nacional tiene un programa especial para que los estudiantes de grupos étnicos indígenas ingreses facilmente ala universidad, sin embargo no es suficiente, es necesaria más preparación académica por parte del aspirante. 126 los tratamientos de las enfermedades que afectan actualmente a las comunidades. Estas empresas deben coordinar brigadas de salud periódicas y no eventuales como lo han venido realizando diferentes instituciones estatales y no gubernamentales en la zona. Construcción y dotación de puestos de salud en cada una de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Este proyecto pretende que entidades internacionales y el Ministerio de Salud, financien el mejoramiento de los centros de salud existentes y la construcción de estos en las comunidades donde no los hay. Así mismo pretendemos que cada puesto de salud esté dotado con los equipos y medicamentos necesarios para la atención básica y en primeros auxilios. Capacitación y contratación de los promotores de salud de las comunidades indígenas: se deben continuar y mejorar los procesos de capacitación que vienen desarrollando el Ministerio de salud, el BID y otras entidades. Con la gestión de la OREWA se han capacitado algunos de los promotores de salud de la zona del Bajo San Juan, pero desafortunadamente no son todos los que han podido participar de las capacitaciones. Es por esto que consideramos prioritario que todos los promotores de salud se formen en los temas que se han considerado importantes para la prevención de enfermedades. Por otro lado es urgente que el Ministerio de Salud y las entidades que se encargue de prestar el servicio, contraten a los promotores de salud escogidos por las comunidades, y así poder lograr una atención integral en la zona. 127 CONSERVACION NATURALES Y MANEJO DEL TERRITORIO Y LOS RECURSOS PROYECTOS DE EVALUACION DE COBERTURAS Y APROVECHAMIENTO DEL TERRITORIO Tipo y descripción Prácticas Usos predominantes de general de la cobertura predominantes de recursos naturales consecución de recursos MR: Monte Reservado Cacería selectiva de Alimenticio y comercio Selvas de mamíferos y aves grandes local de carne de montañas, lomas y bajos, y escasos. mamíferos. poco deforestadas y en Tala selectiva de árboles y Construcción de viviendas avanzada recuperación palmas muy escasos y de y lanchas, labrado de (más de 20 años). Tienen madera fina. canoas y tallas. dominancia de árboles Recolección de tallos, Medicinal, alimenticio y Sande (Sandal) y Sajo hojas y frutos de árboles, artesanal (Sajal). Son llamados palmas y otras plantas no bosques de colinas bajas. maderables. Pesca de peces y Alimenticio. crustáceos de quebrada ME: Monte Explotado Tala de árboles y palmas Construcción de viviendas Selvas de lomas y escasos, de madera fina y y otras obras comunitarias. bajos, deforestadas y en de mediana calidad. media recuperación (entre Recolección de tallos, Artesanal, alimenticio y 10 y 20 años). Presentan hojas y frutos de árboles, medicinal. Construcción dominancia de árboles palmas y otras plantas no de techos de hojas de Cuángares (Cuangarial) y maderables. palma. palma Milpesos (Milpesal). Cacería de aves mamíferos Alimenticio Son también conocidos y reptiles medianos y como bosques inundables escasos. o de Guandal. Pesca de peces escasos de Alimenticio río y quebrada. R y C: Rastrojos y Cultivos Agricultura de tumba y Alimenticio, selección de Vegetación de pudre de cultivos semillas y comercio local bajos y faldas de lomas, tradicionales. de productos muy deforestadas y en reciente recuperación Tala de árboles y palmas Leña de consumo (menos de 10 años). Son abundantes y de madera doméstico rastrojos de Guandal con de baja calidad. dominancia de cultivos de Cacería de mamíferos, Alimenticio papachina, banano y caña. aves y reptiles abundantes. Pesca de peces Alimenticio abundantes de río. 128 M y N: Manglares y Natales Bosques de bajos, en las bocanas, esteros y detrás de las playas; muy deforestados y en temprana recuperación (menos de 10 años). Tienen dominancia de árboles de mangle (manglar), Nato (Natal) y palma Naidí (Naidizal) Pesca de peces, crustáceos y moluscos estuarinos Cacería de mamíferos, aves y reptiles escasos Tala selectiva de árboles y palmas maderables escasos Recolección de frutos y hojas de palmas y otras plantas no maderables Alimenticio y comercio local Alimenticio y comercio local de carne de mamíferos y reptiles Construcción de viviendas y otras obras comunitarias Alimenticio y construcción de techos de hojas de palma 129 PROYECTOS EN AREAS DE CONSERVACION Y MANEJO FUTURO DEL TERRITORIO Tipo y descripción Funciones de las áreas Prácticas general de las áreas reglamentadas de aprovechamiento de recursos naturales AHS: Areas históricas o Proteger los sitios que Las que justifique y sagradas revisten importancia y autorice el Cabildo de cada significado histórico o comunidad. sagrado para las comunidades. Saneamiento dentro del R.I. Ampliación fuera del R.I. RRN: Refugio de Recursos Preservación o NO NO se permiten las Naturales extracción de recursos prácticas de tala de Areas de Monte Reservado, naturales. madera, cacería, pesca y alejadas y de difícil acceso. recolección de plantas no Son poco aprovechadas y Refugio, fuente y corredor maderable; con excepción mantienen hábitats y biológico de poblaciones de las que justifique y poblaciones de flora y de flora y fauna silvestre. autorice el Cabildo de la fauna silvestres en buen comunidad. estado. A establecer en Preservación de fuentes corto plazo (0 a 3 años). hídricas o nacimientos de quebradas RF: Reforestación Recuperación de especies Recolección de tallos, Areas de Monte escasas de árboles y hojas y frutos de árboles, Explotado, a mediana palmas maderables. palmas y plantas no distancia y acceso. Son maderables, de uso aprovechadas y sostienen Siembra y crecimiento de alimenticio, medicinal o hábitats y poblaciones de especies maderables. artesanal. flora y fauna silvestres en regular estado. A Conservación de hábitats Cacería y pesca. establecer en largo plazo de fauna silvestre (más de 6 años). 130 AF: Agroforestería Areas de monte Explotado y Rastrojos y Cultivos, cercanas y de fácil acceso. Son muy aprovechadas y tienen hábitats y poblaciones de flora y fauna silvestres en mal estado. A establecer en mediano plazo (3 a 6 años). MR: Monte Reservado ME: Monte Explotado R y C: Rastrojos y Cultivos M y N: Manglares y Natales A establecer en corto plazo (0 a 3 años). Agricultura de cultivos tradicionales, combinada con parcelas de siembra de árboles, palmas y plantas no maderables útiles. Fuente de recursos alimenticios para la fauna silvestre. Fuente de recursos vegetales y animales para el aprovechamiento sostenible por parte de la comunidad. Adecuación de terrenos, siembra, mantenimiento y cosecha de cultivos tradicionales y de árboles, palmas y plantas silvestres alimenticias, artesanales y medicinales. Cacería y pesca. Tala de árboles y palmas maderables. Recolección de tallos, hojas y frutos. Agricultura de cultivos tradicionales. Cacería y pesca. 131 PROYECCIÓN DE UNA ENTIDAD TERRITORIAL INDÍGENA (ETI) EN EL BAJO SAN JUAN El Bajo San Juan es una de las pocas zonas indígenas de la región del Pacífico de Colombia y de todo el territorio nacional, que posee las características y particularidades para conformarse en una Entidad Territorial Indígena. El continuo geográfico de aproximadamente 100.000 hectáreas que constituyen los Resguardos y territorios indígenas tradicionales del Bajo San Juan, una población de 6.280 habitantes y la unidad étnico-territorial de sus comunidades y autoridades, son el fundamento de una futura ETI en la zona. Las Entidades Territoriales Indígenas fueron reconocidos en la Constitución de 1991 para que los pueblos y comunidades indígenas se dirijan y manejen por sí mismos y con mayor autonomía; son Entidades o Divisiones Territoriales del territorio nacional como los municipios, departamentos, los distritos; son colectividades de carácter público, cuyo papel es dirigir y gobernar a las personas y comunidades ubicadas en su interior y administrar sus recursos; deben fortalecer las organizaciones y comunidades para la administración de los presupuestos nacionales y propios, con el fin de prestar los servicios que necesitan las comunidades, entre los cuales están el agua potable, la electricidad, vías de transporte, telecomunicaciones, educación y salud. En materia de las Entidades territoriales Indígenas (ETIS), el artículo 329 de la Constitución Política de Colombia, presenta los siguientes condicionamientos: • • • La conformación de las Entidades Territoriales Indígenas se hará con base en la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial; esto significa que no se podrán conformar sino existe dicha Ley. La delimitación de las ETIS corresponde al Gobierno Nacional, con participación de las comunidades indígenas y previo concepto de la Comisión de Ordenamiento Territorial. La ley debe definir cómo serán las relaciones de coordinación entre las ETIS y los departamentos en cuya jurisdicción se encuentren. El artículo transitorio 56 de la Constitución Nacional dice que mientras se expida la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial, el Gobierno podrá dictar las normas fiscales necesarias y las demás relativas al funcionamiento de los territorios indígenas y su coordinación con las demás entidades territoriales. Se infiere entonces que la autorización que reciba el Gobierno para propender por el funcionamiento de los Territorios Indígenas, se condiciona a que no haya sido expedida la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial, como en efecto ha venido ocurriendo. No obstante, se deben fijar actos preparatorios por parte de las comunidades y organizaciones, para que los territorios indígenas puedan constituirse hacia el futuro en ETIS. 132 Gobierno. Estas entidades tendrán como gobierno un Consejo que será conformado y reglamentado de acuerdo con los usos y costumbres de las comunidades que los habitan; lo que implica que las comunidades comprendidas dentro de una ETI tienen que elegir a un grupo de personas (Consejo) que se encargará de administrar política y financieramente la entidad territorial. Las comunidades indígenas del Bajo San Juan eligen cada año a sus respectivos Cabildos locales, han participado de las elecciones y gobiernos del anterior Cabildo Mayor de la zona (desde el año 2000 Asociación CAMAWA) y han elegido y conformado las directivas de la Organización Regional OREWA. Además de estas experiencias organizativas indígenas a nivel local, zonal y regional, algunos líderes de las comunidades de la zona han participado de los comicios electorales y han participado de la administración y el Consejo Municipal del Litoral del San Juan. Estos hechos, potencian a las comunidades indígenas del Bajo San Juan para elegir democráticamente y según sus usos y costumbres, a un Consejo idóneo que ejercerá un gobierno y una administración acordes a las aspiraciones y necesidades de la población indígena en su propia entidad territorial. El Consejo no debe reemplazar a las autoridades propias o tradicionales que tenga cada comunidad, como Benkhun, ancianos y el Cabildo local, las cuales deberán seguir cumpliendo sus funciones dentro del ámbito cultural y económico de la población que lideran y gobiernan, coexistiendo y coordinando con el Consejo de la ETI del Bajo San Juan. Funciones. En el artículo 330 de la Constitución Política, están contempladas las funciones que debe cumplir el Consejo Indígena, no obstante, la ley puede asignarle otras funciones: • Velar por la aplicación de las normas de usos del suelo y del poblamiento del territorio. • Diseñar las políticas, planes y programas de desarrollo económico y social. • Promover las obras públicas. • Percibir y distribuir los recursos que le corresponden. • Colaborar con las comunidades en los programas y proyectos que promuevan. • Velar por la conservación de los recursos naturales. • Colaborar en el mantenimiento del orden público. • Llevar la vocería de la entidad territorial ante el gobierno Nacional. De diferentes formas, CAMAWA, los Cabildos y otras autoridades indígenas del Bajo San Juan, han venido cumpliendo casi todas las anteriores o similares funciones en los Resguardos y comunidades indígenas. No será imposible ni tan difícil que el Consejo que gobernará de la futura ETI de la zona, cumpla estas y otras funciones que se definan por ley. Recursos. Las ETIS tienen derecho a que el Estado, los Departamentos o Municipios si están incluidas en sus jurisdicción, les asignen recursos de su presupuesto para que puedan cumplir sus funciones. Igualmente, les pueden 133 transferir recursos para el cumplimiento de funciones específicas que les deleguen por ordenanzas departamentales o acuerdos municipales. CAMAWA y los Cabildos locales han velado por la asignación de los presupuestos de transferencia a cada Resguardo de la zona, frente a los municipios del Litoral del San Juan y Buenaventura. Sin embargo, hace falta mayor gestión de las administraciones municipales y de las mismas autoridades indígenas en torno a las propuestas y recursos necesarios para llevarlas a cabo. Es por esto que se hace necesario emprender programas de capacitación a las comunidades y líderes indígenas en áreas específicas como administración pública, planeación y desarrollo, manejo presupuestal, entre otras, con el fin de dar un apropiado manejo político y administrativo a la ETI de la zona. Además de los recursos por participación o transferencia de las rentas de la nación, a las ETIS les corresponden recibir regalías directamente por la explotación de los recursos naturales dentro de sus territorios, o indirectamente por participación en el Fondo Nacional de Regalías. Estas entidades también deben gestionar recursos propios prestando bienes y servicios que les generen ingresos, como actividades productivas comerciales e industriales, contribuciones de organizaciones no gubernamentales y de las mismas comunidades. Procedimientos para su conformación. Las Entidades Territoriales Indígenas son para un futuro, ya que previamente se deben cumplir los trámites que dice el artículo 329 de la Constitución Nacional. Primero, el Congreso de la República debe dictar la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial que va a reglamentar las ETIS en los siguientes aspectos: • Requisitos para la conformación. • Funciones que deben desempeñar los Consejos. • Recursos económicos que les corresponden. • Relación y articulación con otras entidades territoriales del país. Como hemos visto, aunque poco y a paso muy lento, el Estado ha avanzado en estos puntos; situación que debe ser aprovechada por CAMAWA y los Cabildos locales para seguir adelantando trabajos organizativos y territoriales que definan y consoliden las particularidades de los procedimientos para conformar una ETI en el Bajo San Juan, entre los cuales están: • Continuidad en los procesos de Constitución, Saneamiento y Ampliación de los Resguardos Indígenas. • Fortalecimiento de la autonomía y el control territorial. • Mejores relaciones interétnicas territoriales con las comunidades afrocolombianas. • Capacitación a líderes y comunidades en aspectos de la administración pública. • Implementación de una sede de gobierno del Consejo de la ETI. Después, la Comisión de Ordenamiento Territorial creada por la Constitución Nacional y conformada por el Gobierno, debe proponer la conformación de la ETI al 134 Congreso de la República y emitir un concepto al Gobierno Nacional para su delimitación. Delimitación: la definición de los límites territoriales de las ETIS estará a cargo del Gobierno Nacional con la participación de representantes de los pueblos indígenas. La nueva Constitución prevé la posibilidad de que periódicamente se revisen y modifiquen los límites de las entidades territoriales del país, los cuales deben ser publicados en el mapa oficial de la República. El trabajo territorial las organizaciones indígenas del Bajo San Juan, ha capacitado a todas las comunidades, sobre todo a sus líderes, en aspectos relacionados con los Resguardos Indígenas, la percepción cultural sobre el territorio y el ordenamiento territorial, que han aportado suficientes elementos de apropiación y definición con proyección una ETI. PROYECTOS DE IMPLEMENTACION DE UNA PRODUCCION INDIGENA ALTERNATIVA Diseño e implementación de sistemas agroforestales alternativos. Los efectos de la precipitación y la pendiente de los terrenos, determinan un alto nivel de susceptibilidad y pérdida del suelo por erosión en los territorios indígenas y los consecuentes bajos niveles de producción. Los sistemas agroforestales que tradicionalmente manejan las comunidades, contribuyen al control de la erosión en la medida que proporcionan una adecuada cobertura vegetal al suelo y permiten un reciclaje de nutrientes. De esta forma, se reconoce estos sistemas ancestrales como los más apropiados para el manejo de la fertilidad del suelo en las selvas húmedas tropicales y como la base sobre la cual se deben hacer diseños e implementaciones agroforestales que mejoren el estado actual de los suelos, la producción de cultivos y la conservación de los hábitats y especies silvestres que los componen. Apoyo e incremento de la producción agrícola. La agricultura es la principal fuente de alimentos energéticos y reguladores en la dieta de las comunidades indígenas del Bajo San Juan. La baja fertilidad de los suelos de la zona, la declinación en la rotación de áreas de siembra y las pérdidas de cultivos ocasionadas por las recientes inundaciones, han disminuido la producción agrícola en las comunidades indígenas del Bajo San Juan. Es necesario implementar proyectos integrados de adecuación de tierras, selección de semillas, mantenimiento, cosecha y comercialización de productos agrícolas, principalmente de banano, arroz, caña de azúcar y frutales. Estos proyectos deben rescatar los sistemas tradicionales de producción sostenible de las comunidades de la zona y además tener apoyo y asistencia técnica de instituciones con amplia experiencia en el diseño e implementación de sistemas agroforestales en selvas bajas tropicales. Mejoramiento técnico del sector pecuario y de producción animal. La pesca y como complemento la cacería, son las principales y a veces únicas fuentes permanentes de proteína y grasa animal en las comunidades indígenas del Bajo San Juan. La escasez de fauna de cacería y pesca, aumentan las necesidades proteicas de la población indígena y es por ello que el fomento técnico a la avicultura, la cría 135 de cerdos y la ganadería con especies apropiadas para la zona, deben fomentarse. La producción animal en las comunidades indígenas también se puede fomentar mediante la experimentación de la cría en cautiverio de especies promisorias de pesca (Mojarras, Lisas, etc.) y cacería (Guagua, Tatabro, Pavas, Iguana, entre otras), dirigidas a la implementación de una piscicultura y una zoocría que sean viables tanto biológica como socio-culturalmente, con el fin de que sean fuente alimenticia en las comunidades y de producción de individuos de las mismas especies para su repoblamiento en la zona. Fomento a microempresas comunitarias. Las únicas pequeñas empresas colectivas que se encuentran en algunas comunidades indígenas son las tiendas de abarrotes y misceláneas de otros artículos de frecuente consumo en la zona. Aunque algunos miembros de las comunidades se han capacitado en carpintería, sastrería y otros oficios, no han tenido apoyo para montar empresas propias o comunitarias. Las comunidades necesitan financiación y más capacitación para poner a funcionar microempresas como casas de mujeres artesanas, trapiches, trilladoras, panaderías, sastrerías y modisterías, carpinterías, ebanistería y tallas. SERVICIOS BASICOS Construcción y funcionamiento de relleno sanitario, acueductos y alcantarillados apropiados su funcionamiento en las comunidades. Se deben formular y gestionar proyectos que solucionen integralmente los problemas de saneamiento básico en las comunidades. Es prioritario solucionar el problema de las basuras, la disposición de aguas servidas y excretas y la disponibilidad de agua limpia y potable en las comunidades indígenas, mediante proyectos que incluyan la capacitación de las comunidades y personal indígena que ponga en funcionamiento las diferentes tecnologías que se implementen. Dotación de plantas eléctricas, postes y redes eléctricas adecuadas para una futura interconexión Docordó – Malaguita. Son pocas las comunidades que cuentan con plantas diesel que den cobertura a todas las viviendas y necesidades de energía eléctrica en las comunidades. Es necesario gestionar proyectos que brinden solución a toda la población en cuanto a dotación y funcionamiento de plantas y redes eléctricas que sean útiles para una futura conexión a la red eléctrica nacional. Implementación de teléfonos, radio-teléfonos, antenas parabólicas y emisoras comunitarias. Es necesario mejorar las telecomunicaciones que son prácticamente inexistentes en las comunidades. Se debe aprovechar los proyectos de telefonía social que viene impulsando el Ministerio de Comunicaciones a través de las alcaldías de Buenaventura y Litoral del San Juan para lograr un buen nivel de cobertura en el servicio. Reapertura y mantenimiento de caminos intercomunitarios y limpieza de vías fluviales y esteros. Se requiere mantener en buen estado las principales vías 136 de comunicación terrestre y fluvial de las comunidades indígenas del Bao San Juan; los caminos intercomunitarios, el río, los esteros y las quebradas, deben ser mantenidos en buen estado con el fin de que transiten las personas y sus productos agrícolas y forestales. Dotación de muelles, lanchas pasajeras, ambulancias fluviales, casetas para lanchas y gasolinera. Así como deben mantenerse en buen estado las vías, deben dotarse a las comunidades de medios apropiados de transporte de personal y de carga. Las comunidades deben administrar y optimizar el servicio de lanchas, muelles y gasolineras con el fin de prestar un servicio oportuno de transporte. Construcción y mejoramiento de viviendas, casas de cabildos, casas de reunión comunitaria, casas de mujeres artesanas y casas de alojamiento en las comunidades. Las viviendas y otras instalaciones comunitarias requieren de proyectos periódicos de construcción y mejoramiento, ya que materiales de madera y los techos de eternit y zinc, son vulnerables a las condiciones del clima muy húmedo y de altas precipitaciones de la zona del Bajo San Juan. Los proyectos deben considerar las amenazas de inundaciones y deslizamientos, con el fin de reubicar las viviendas y aún comunidades completas a lugares de mayor estabilidad y menor riesgo. Así mismo se deben considerar la construcción de cárceles, calles adoquinadas, puentes en madera y/o concreto, escaleras y muros de contención en las comunidades. EVALUACIÓN Y MONITOREO DEL PLAN DE VIDA Capacitación en Planeación, Monitoreo y sistematización: el objetivo es el de capacitar a un grupo de líderes, mujeres y jóvenes en el manejo de las herramientas para evaluar permanentemente el Plan de Vida. Los componentes de la capacitación tienes que ver con : • Conceptos de planeación, monitoreo, evaluación de proyectos, plan de Vida e institucional. • Elaboración de herramientas que permitan sistematizar las los resultados y acciones y hacer un seguimiento de los proyectos. Construcción de herramientas para la elaboración de planes: Se deben implementar herramientas para que el desarrollo del Plan de Vida sean evaluados permanentemente y así poder ver el grado de cumplimiento de las metas. Por esta razón se propone elaborar, previo una capacitación, indicadores de resultados, de gestión y de impacto durante los años de duración del Plan de Vida. Igualmente se propone hacer un esquema de planeación por año y así tener mayor control técnico en el desarrollo de Plan. Evaluación institucional: los objetivos son la creación de mecanismos y herramientas que permitan evaluar de una manera efectiva y sistemática las organizaciones indígenas de la zona. 137 PLAN DE INVERSIONES 138 7. PLAN DE INVERSIONES DEL PLAN DE VIDA ESTRATEGIA AFIANZAMIENTO DE LA AUTONOMÍA DE LOS PUEBLOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ CONSOLIDACIÓN DE LA PARTICIPACIÓN Y LOS PROCESOS ORGANIZATIVOS DEFENSA TERRITORIAL DE LOS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ DEL BAJO SAN JUAN RECONOCIMIENTO DE LOS PUEBLOS WOUNAAN Y SIEPIEN COMO SUJETOS DE DERECHO FORTALECIMIENTO CULTURAL DE LAS ETNIAS WOUNAAN Y /SIEPIEN/ CONSTRUCCION DE UNA EDUCACIÓN PROPIA DE LAS COMUNIDADES WOUNAAN Y SIEPIEN DEL BAJO SAN JUAN CUBRIMIENTO TOTAL EN SALUD Y MEDICINA TRADICIONAL Y OCCIDENTAL PRESTACION DE SERVICIOS BASICOS A TODA LA POBLACION INDIGENA RECUPERACION E IMPLEMENTACION DE SISTEMAS DE PRODUCCION QUE MEJOREN LA SEGURIDAD ALIMENTARIA Y LA GENERACION DE INGRESOS CONSERVACION Y APROVECHAMIENTO SOSTENIBLE DE RECURSOS NATURALES EVALUACIÓN Y MONITOREO DEL PLAN DE VIDA Y SUS PROYECTOS VALOR PORCENTAJE DEL 100% 15 % DE $ 20,000.000.000 10 % DE $ 20,000.000.000 15 % DE $ 20,000.000.000 5 % DE $ 20,000.000.000 15 % DE $ 20,000.000.000 10 % DE $ 20,000.000.000 10 % DE $ 20,000.000.000 5 % DE $ 20,000.000.000 10 % DE $ 20,000.000.000 10 % DE $ 20,000.000.000 5 % DE $ 20.000.000 139 8. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS Bravo-Pazmiño, H.E., H. Sánchez-Páez y R. Alvarez-León. 1998. Diversidad cultural y manglares del Pacífico colombiano. Ministerio del Medio Ambiente, ACOFORE, OIMT. Santa Fe de Bogotá. Comunidad Wounaan San Bernardo, M. Usma y H. J. Ruiz Palma. 1999. Aprovechamiento de recursos de flora y fauna silvestres en la comunidad Wounaan San Bernardo del Bajo río San Juan, Pacífico de Colombia. Informe final. Cabildo Indígena San Bernardo, ECOFONDO. Cali. IDEAM, 1998. Datos de la estación hidroclimatológica la Misión, Comunidad Cabeceras, Municipio Buenaventura. Valle del Cauca. Martínez, H. 1996. Ecosistemas forestales. Estudios básicos para los lineamientos del ordenamiento territorial y manejo ambiental de la costa Pacífica vallecaucana. CVC. Cali. OREWA. 2000. Lo que queremos y pensamos hacer en nuestro territorio. Organización Regional Embera Wounaan. Quibdó. Restrepo, J. D. & I. D. Correa. 1995. Resultados preliminares geomorfológicos y biológicos del Delta del Río San Juan, Pacífico colombiano. Pp. 30 – 47 En: Cantera, J.R. & D. Restrepo (eds.) Delta del Río San Juan, Bahías de Málaga y Buenaventura, Pacífico colombiano. COLCIENCIAS/Univ. EAFIT/Univ. del Valle/(Colombia), 337 p. Reichel-Dolmatoff, G. 1965. Colombia: ancient peoples and places. In: Glyn D. (ed.). Thames and Hudson. London (U.K.). Sánchez-Paez, H. Y R. Alvarez-León (Eds.), 1997. Diagnóstico y zonificacón preliminar de los manglares del Pacífico de Colombia. Ministerio del Medio Ambiente, OIMT. Santafé de Bogotá. 343 p. West, R. 1956. Pacific lowlands of Colombia. Lousiana State University. Baton Rouge, USA. Romoli, K. 1975. El Alto Chocó en el siglo XVI. Revista Colombiana de Antropología. Volumen 19. Bogotá. Romoli, K. 1976. El Alto Chocó en el siglo XVI. Parte Segunda: Las Gentes. Revista Colombiana de Antropología. Volumen 20. Bogotá. 140 Vargas, P. 1993. Los Embera y los Cuna. Impacto y reacción ante la ocupación española. Siglos XVI y XVII. CEREC, Instituto Colombiano de Antropología. Bogotá. Lotero Villa, L. 1977. Monografía de los indígenas Noanamás. Servigráficas. Medellín.