Orizon #4 - Spainmedia
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Orizon #4 - Spainmedia
Descubre tu lugar en el mundo Número 4 · 5 € Un viaje al Bilbao del siglo XXI 54 Sumario — nÚmero 4 El Palacio de Congresos y de la Música Euskalduna de Bilbao. los magos de oz 18 bazar 37 A las puertas de los JJ.OO. del próximo verano, Londres –y todo lo inglés– están más de moda que nunca. Por eso hemos dedicado nuestro Bazar a marcas exclusivamente británicas. 26 escapadas oz Hay muchas formas de tomar el té de las cinco. Una de ellas es a la orilla de un lago en un cottage de lujo en el condado de Lancashire, al noroeste de Inglaterra. 38 De las verdes praderas de las Highlands escocesas a la alocada noche de Manchester pasando por una exploración por el Ártico. Planes para todos los gustos. 32 No aparece en las guías de viaje convencionales, pero bajo la superficie de Londres se encuentra un fantástico lugar conocido como el País de las Maravillas. Descubre cómo puedes llegar hasta él. 39 la maleta de No sabemos si la atleta española Mayte Martínez regresará de los Juegos Olímpicos de Londres con una medalla en su equipaje, pero conocemos otras muchas cosas que seguro que meterá en su maleta. 33 horas Es el tiempo que hemos pasado en la ciudad de Glasgow disfrutando de su vanguardista arquitectura, del legado de Mackintosh y de su escena musical. Nos ha sabido a poco. Volveremos. 8 comunidad underground Los mercados al aire libre son uno de los mayores atractivos de Londres. Hay una infinidad de ellos repartidos por toda la ciudad, pero a nosotros nos gusta especialmente el viejo Camden Market y el fascinante y multicultural Ridley Road Market. 34 no molestar o rizo n 40 skyline Observamos los contrastes arquitectónicos de Londres desde la orilla del Támesis. Pura sangre. Nuevo SL. Un auténtico pura sangre, así es el nuevo SL. Un superdeportivo creado para que descubras emociones y sensaciones nunca conocidas. Con un cuerpo de aluminio que reduce su peso en 110 kg, el nuevo SL es un pura sangre que incorpora las últimas innovaciones tecnológicas de Mercedes. Descúbrelo en www.mercedes-benz.es/sl sumario 92 Mezcla de culturas y looks imposibles en el East End londinense. 72 42 La historia de amor-odio entre el pintor malagueño Pablo Picasso y el público británico. 48 especial ARTE 74 Hoy en día todavía se pueden seguir las huellas que dejaron los grandes escritores y viajeros del siglo XIX en la ciudad. grand hotel Revivimos el esplendor de los años treinta y el estilo victoriano entre las cuatro paredes del londinense The Savoy Hotel. 80 efecto guggenheim 86 entrevista 92 Lourdes Fernández dirige Alhóndiga Bilbao, un antiguo almacén de vinos que se ha reinventado como centro cultural. 64 la cantera vasca Entrevista Charlamos con Miguel García Vizcaíno, de la agencia Sra. Rushmore, sobre la próxima edición del Festival Publicitario El Sol. 10 ori zon east end Ponemos rumbo al Este, pero esta vez al de Londres para descubrir la zona más emergente de la capital inglesa. 98 El cocinero Eneko Atxa pone su granito de arena (y su enorme talento culinario) en la construcción del nuevo Bilbao. 70 clubs privados Nos colamos en algunos de los lugares donde los más poderosos de Inglaterra mueven los hilos del mundo. Cómo Bilbao ha pasado de ser una ciudad gris y sombría a un modelo de modernidad imitado en todo el mundo. 60 el soho Estaba de moda en los años treinta y lo sigue estando ahora. El paso del tiempo no marchita el carisma de este barrio. portada 54 londres literario portfolio Echamos la mirada atrás para observar con nostalgia cómo era aquel Londres de finales del s. XIX y principios del XX. 115 bitácora Para que no te pierdas si acudes a los Juegos Olímpicos, te ofrecemos una guía de las nuevas instalaciones deportivas. Experiencia Business Plus se puede ir a la cama a cualquier hora Todo en la clase Business Plus está pensado para vivir y sentir la exclusividad. Desde su butaca cama hasta una pantalla táctil, desde una exquisita bodega a lo mejor de nuestra cocina. Disfrutar la clase Business Plus, es hacer el viaje con el que siempre ha soñado. iberia.com EDITORIAL El motor del Guggenheim El catálogo –quizá el lector en busca de su lugar de titanio. No puedo olvidar la primera vez que lo ví. Más que en el mundo (virtual) lo encuentre en eBay– merenada porque me dolían los huesos como a Sancho ce la pena porque contiene textos de celebérrimos Panza después de que lo mantearan. A mí no me amantes de las dos ruedas a motor, como Hunter S. mantearon, pero a lomos de una BMW LT, por Thompson o Dennis Hopper, entre otros. Por no hablar de las fotografías de las momuy cruiser que sea y por mucho tocicletas, las mejores que uno pueque pudieses escuchar el Carrusel da imaginar. Intento recordar si me deportivo antes de parar en el Hotel sorprendió que una vieja dama de la Landa, los casi quinientos kilómeexhibición y la cultura como es el tros que separaban el foro de la ría Guggenheim reconociera la estétide Bilbao pesaban bajo la lluvia. ca de los carburadores como digna El motivo del viaje no era otro que de muestrario. Y no fue así. Fue tal compartir con amigos (motoristas y el impacto de la belleza de aquellas parejas) The Art of the Motorcycle, máquinas, que cualquier valoración la exposición que el Guggenheim contracultural quedó sepultada. Museum de Nueva York había orgaHay que volver a Bilbao. Para nizado meses antes frente al Parque disfrutar del nuevo restaurante de Central de Manhattan. Illustración de portada Eneko Atxa. Fantástico. De la AlRecuerdo perfectamente que enFrank Gehry hóndiga, con su piscina en el ático, tre las piezas de la muestra se encontraba una MV Augusta de la colección del Rey para ver las piernas de los bañistas desde la columJuan Carlos. Sorprendente. El monarca, motorista nata de Philippe Starck. Y qué diablos, para ver a empedernido, disfruta de piezas de colección. Y los amigos que, en Bilbao, como todo el mundo sabe, son amigos, amigos. Buena gente. además las presta. Nota: mi moto es una Royal Enfield Clubman ¡AY EL GUGGENHEIM! CON ESAS ESCAMAS – ANDRÉS RODRÍGUEZ / Editor de Orizon twitter.com/ArodSpainMedia EDITOR Andrés Rodríguez ([email protected]) Ramón Reboiras ([email protected]) JEFE DE CIERRE Pablo Ortega ([email protected]) Mercedes Abengoza ([email protected]) DISEÑO ORIGINAL Fernando Gutiérrez ([email protected]) EDITOR GRÁFICO Diego Martínez ([email protected]) REDACTOR JEFE JEFA DE DISEÑO HAN COLABORADO EN ESTE NÚMERO REDACCIÓN Jaime López, Ana Valls, Unai Elorriaga, Cristina Bisbal, Clemente Corona, Arantxa Neyra, Alfonso Ussía Hornedo, Camino Martínez. FOTOGRAFÍA Cristina de Middel, Mario Chavarría. AGENCIAS FOTOGRÁFICA Getty Images, Cordon Press. ILUSTRACIÓN Victoria de Diego EDICIÓN Alejandro Romero ASISTENTE DEL EDITOR Airin Milá de la Roca ([email protected]) SPAINMEDIA DIRECTOR GENERAL Carlos Sánchez ([email protected]) ASISTENTE DEL DIRECTOR Victoria Álvarez ([email protected]) JEFA DE PUBLICIDAD Cristina Peñalba ([email protected]) DELEGADA COMERCIAL BARCELONA Sandra Serra ([email protected]) DELEGADA COMERCIAL LEVANTE Pilar Cuello ([email protected]) COORD. DE PUBLICIDAD Sara Gijón ([email protected]) JEFE DE MARKETING Fernando Yustas ([email protected]) MARKETING Miguel Zafra ([email protected]) ADMINISTRACIÓN Director financiero Juan Alberdi ([email protected]) Contabilidad Fran Arteaga ([email protected]) SISTEMAS Inquietudes Tecnológicas, S.L (www.inquietudestecnologicas.com) IMPRIME Cayfosa Impresia Ibérica Ctra. de Caldes, Km. 3 Santa Perpetua de Mogoda (Barcelona) DISTRIBUCIÓN SGEL, Avda. Valdelaparra, 29. 28018 Alcobendas (Madrid). Tel 91 657 69 00 SUSCRIPCIONES [email protected] Madrid _C/Almirante 9, 3º izqda. 28004, Tfno. +34 91 206 10 40 Fax +3491 206 10 44. Barcelona_ Calle Tuset 3-Moià 2ª Planta. 08006 Tfno. +34 93 241 37 14 Fax +34 93 414 70 36 Spain Media, S.L. Depósito Legal B. 35316-2011 ISSN: 2174-8055 www.spainmedia.es Orizon no se hace responsable de las opiniones vertidas por los colaboradores en sus artículos. Reservados todos los derechos. Prohibida su reproducción, edición o transmisión total o parcial por cualquier medio y en cualquier soporte sin la autorización escrita de Spain Media, S.L. 12 ORI ZO N www.emidiotucci.es SOLO EN reparto 14 Arantxa Neyra Londres tuvo la culpa. Antes de empezar la carrera, se fue allí a aprender inglés y tuvo una revelación: lo suyo era viajar. Desde entonces, y previo paso por la Universidad Complutense de Madrid, Arantxa ha hecho del periodismo de viajes su forma de vida. Escribe para varios medios generalistas y especializados de España y también colabora en la radio. Prefiere la mochila a la maleta, el tren al coche y la playa a la montaña. En sus artículos trata de contar lo que compartiría con cualquier amigo. Ahora ha vuelto a viajar a Londres –en realidad lo hace menudo, cualquier excusa le vale para volver– para hablarnos del Soho y de sus lugares favoritos. Jaime López De pequeño siempre contaba historias; ahora las busca y escribe para ganarse el pan. Asegura sin rubor que “se hizo periodista porque es lo más parecido a no tener que trabajar”. Pronto la madrileña redacción del diario El Mundo en la que trabajaba se le quedó pequeña y decidió poner rumbo a Centroamérica y Venezuela, donde ha vivido cinco años colaborando con el citado periódico, con la agencia AFP y revistas como La Clave y Yo Dona. Ahora, de vuelta en la Vieja Europa –nadie sabe por cuánto tiempo–, concretamente en Londres, explora para nosotros la influencia de Pablo Picasso en el modernismo británico y recorre dos mercados callejeros de la capital inglesa. Clemente Corona El viaje es una constante en la vida de este periodista y escritor madrileño. Viajero impenitente, Corona ha publicado guías –varias de las del Trotamundos llevan su firma– y reportajes y crónicas en medios de comunicación nacionales e internacionales –Esquire, Monocle, Excelsior…–, además de ser el autor del e-book de viajes Los galgos grises (losgalgosgrises.blogspot.com), y, en los últimos años, directivo de uno de los grupos turísticos más importantes del mundo. En este número nos cuenta cómo sacar el máximo partido a Glagow en 33 horas y nos da las claves para seguir las huellas de los grandes exploradores y escritores victorianos en el Londres actual. Cristina de Middel Fotógrafa freelance afincada en Londres, desde donde compagina proyectos documentales con otras propuestas personales que cuestionan precisamente la validez de la fotografía como documento. Este posicionamiento ambiguo entre la realidad y la ficción constituye una línea de trabajo cuyos resultados se han visto reconocidos fuera de nuestras fronteras con premios (Sony World Photography Awards 2012), becas (Humble Arts Women in Photography 2011) y exposiciones (Jen Bekman, Nueva York). Cristina ha puesto a nuestro servicio su talento y su objetivo para inmortalizar ese Londres urbano y transgresor que podemos encontrar tanto en el West End como en el East End. Camino Martínez Desde que una vez oyó a alguien decir que se dedicaba al “periodismo de viajes”, es decir, que tenía como trabajo recorrer el mundo y contar a la gente lo que había visto, tuvo claro lo que quería hacer en la vida. Los últimos ocho años, esta joven periodista madrileña ha estado colaborando para suplementos de El Mundo –como M2, Aula y, sobre todo, Metrópoli–, en la página web de viajes Voyainternet (www.voyainternet.com) y en revistas como Marie Claire, InMadrid o Elle... Especialista en tendencias y lifestyle, ha realizado una incursión al vibrante East End londinense, la zona más emergente de la ciudad, donde se ha sentido como pez en el agua. Unai Elorriaga Nacido en Bilbao y criado en Guetxo, es uno de los escritores más valorados de la literatura vasca actual. Su opera prima, SPrako tranbia (en castellano Un tranvía en SP) recibió el Premio Nacional de Narrativa de España, convirtiéndose así en el segundo autor en euskera en obtener dicho galardón. A ésta le siguieron otras tres novelas, todas ellas traducidas a varios idiomas. Además, colabora con algunas publicaciones como El País, Deia, Euskaldunon Egunkaria o Berria. Unai desenfunda su pluma en este número para hacer un ejercicio de memoria y nostalgia, para recordar cómo era ese Bilbao gris de cuándo era niño, y cómo ha ido evolucionando hasta convertirse en símbolo de vanguardia. ori z o n Descubre por qué las estrellas eligen Budapest. IBEROSTAR Grand Hotel Budapest ***** BUDAPEST, HUNGRÍA Nuevo IBEROSTAR Grand Hotel Budapest. Un hotel boutique 5 estrellas situado en pleno centro de la capital. El lugar ideal para que disfrutes de todo el encanto de Budapest, de su relajante Spa, su magnífica gastronomía y un excelente servicio en un sofisticado ambiente de lujo vanguardista. Un lujo sólo al alcance de las estrellas. Estrellas como tú. ESPAÑA · GRECIA · TURQUÍA · BULGARIA · CROACIA · HUNGRÍA · MONTENEGRO · MARRUECOS TÚNEZ · CABO VERDE · JAMAICA · REPÚBLICA DOMINICANA · CUBA · MÉXICO · BRASIL iberostar.com - 902 995 555 - contacta con tu agencia de viajes Disfruta siendo una estrella Suscripciones: [email protected] ó 902542045 LOS MAGOS DE OZ 32 tivo clima londinense lo Siempre que el intempes- permita, recorremos sus mercados al aire libre en busca de los objetos más underground. 34 sólo tenemos 33 horas No hay tiempo que perder: para recorrer la ciudad escocesa de Glasgow y disfrutar de todos sus encantos. 38 un lugar muy especial que El País de las Maravillas es se encuentra en el subsuelo de Londres y está habitado por una comunidad de naipes. 39 Martínez nos enseña el La atleta española Mayte contenido de la maleta que espera poder llevar a los Juegos Olímpicos de Londres. MADE IN U. K. Las novedades de las marcas inglesas, los cócteles que triunfan en la City y las tiendas londinenses que no te puedes perder. Así es nuestro Bazar, cien por cien british style. O RIZ O N 17 BAZAR Sombrero Ben Sherman. Precio: 62 €. www.bensherman.com Camisa Fred Perry. Precio: 135 €. www.fredperry.com Caja de chocolatinas After Eight. Precio: C.P.V. www.nestle.es Botella de ginebra Plymouth Sloe Gin. Precio: 30 €. www.plymouthgin.com Corbata Hackett. Precio: 75 €. www.hackett.com Cazadora Lyle & Scott. Precio: 216 €. www.lyleandscott.com Gafas Marc Jacobs. Precio: 140 €. www.marcjacobs.com Botas Short de Hunter Precio: 95 €. www.hunter-boot.com Falda Pepe Jeans. Precio: 90 €. www.pepejeans.com Llavero Dunhill. Precio: 480 €. www.dunhill.com Cojín Flag UK. Precio: 15,90 €. www.maisonsdumonde.com 18 ORI ZO N Bolso Barbour. Precio: C.P.V. www.barbour.com de personas (aproximadamente) viven en el núcleo urbano de Londres y entre 12 y 14 millones contando su área metropolitana. 8 millones BAZAR Camisa Barbour. Precio: 115 €. www.barbour.com Gafas Paul Smith. Precio: C.P.V. www.paulsmith.co.uk Funda para iPad de Hackett. Precio: 250 €. www.hackett.com Camiseta y bolso, ambos Burberry. Precio: 1.445 y 15.000 €, respectivamente. es.burberry.com Mocasines Dr. Martens. Precio: 115 €. www.drmartens.com Taza The Rolling Stones. Precio: 4,99 €. www.fnac.es Chaqueta Pepe Jeans. Precio: 75 €. www.pepejeans.com Auriculares P5 de Bowers & Wilkins. Precio: 299 €. www.bowers-wilkins.es Juego de dos baúles London flag box. Precio: 69,80 €. www.maisonsdumonde.com MINI Cooper D Country Man. Precio: 23.900 €. www.mini.es 20 O RI ZO N BAZAR Gafas Burberry. Precio: C.P.V. es.burberry.com Zapatillas Reebok. Precio: 70 €. www.reebok.com/es Casco Kiddimoto. Precio: 29,90 €. www.elpaisdelosjuguetes.es Pizarra Red Box. Precio: 59 €. www.maisonsdumonde.com Camiseta Ben Sherman. Precio: 41 €. www.bensherman.com Pajarita Hackett. Precio: 75 €. www.hackett.com Camisa Lyle & Scott. Precio: 122 €. www.lyleandscott.com Moto Steve McQueen SE de Triumph. Precio: C.P.V. www.triumphmotorcycles.es Botas de niño Clarks. Precio: 75 €. www.clarks.es 22 ORI ZO N Juego de backgammon Ralph Lauren Home. Precio: C.P.V. www.ralphlaurenhome.com Bolso Hackett. Precio: 375 €. www.hackett.com EL CONSUMO DE HOTELES LUABAY PUEDE PROVOCAR CAMITIS, RELAXITIS Y MUCHAS OTRAS ITIS. T E N E R I F E · L A N Z A R O T E Reserva ahora en luabay.com o en el 902 996 522 · M A L L O R C A Luabay es una empresa de minuciosamente seleccionados y procedentes de todo el mundo, 12 botánicos, son los que componen la fórmula de la ginebra premium The London Nº1 BAZAR GIN REVOLUTION La ginebra está viviendo una segunda juventud gracias a propuestas como The London Nº1 y cócteles tan originales como los que te mostramos. Imprescindible en tu minibar. Botella de ginebra premium The London Nº1. Precio: 32 €. www.thelondon1.com GIN & TONIC Llenar una copa highball con hielo. Añadir una piel de limón. Remover los hielos hasta enfriar la copa. Añadir The London Nº1. Verter dos medidas de tónica por cada una de ginebra. Perfumar la copa con cáscara de lima y dejarla caer. ORANGE NEGRONI 3,5 cl. de The London Nº1. 2 cl. de bitter vermouth. 1,5 cl. de Aperol. 2 gotas de angostura de naranja. Se prepara en vaso mezclador, se presenta en vaso o copa de Cosmopolitan y se decora con bayas de enebro flotando en la copa. LONDON COLLINS 5 cl. de The London Nº1. 3 cl. de almíbar de lychee. 3 cl. de zumo de lima. 3 cl. de Vichy Catalán. 2 hojas de hierbabuena. Perlas de granada. 2 lychees. Echar en este orden: almíbar, zumo de lima, hielo, gin, perlas, hierbabuena, lychees, agua y decorar con lima. NEW LONDON-BRONX 3,5 cl. de The London Nº1. 1,5 cl. de vermouth seco francés. 1,5 cl. de vermouth rojo italiano. 1,5 cl. de zumo de naranja. 1 cl. de zumo de pomelo rojo. Se prepara en coctelera, se presenta en vaso tipo old-fashioned y se decora con twist de piel de naranja. 24 ORI Z O N ATLANTIC 7 cl. The London Nº1. 6 cl. Zumo de arándanos. 2 cl. Miel de jengibre. 1 cl. Blue Curaçao. Llenar con refresco de jengibre. Se prepara directamente en vaso tumbler y se puede decorar con ralladura de jengibre. escapadas oz highlands (escocia) sin mal de altura Colinas de intenso verde, pueblos medievales, ríos teñidos por la turba y melancólicas playas. Así son las Highlands, el entorno natural más privilegiado de Reino Unido, al norte de Escocia. po r pablo o r t eg a las Higlands –o Tierras Altas escocesas– es una región montañosa al norte del país. La mejor forma de recorrerla es en coche particular. Dado las sinuosidad de las carreteras, lo abrupto del terreno y la inestabilidad meteorológica, donde la humedad y la niebla son habituales, conviene escoger un coche fiable y robusto al mismo tiempo, que nos permita adentrarnos por caminos difíciles pero con el que también podamos movernos con soltura por los núcleos urbanos que visitemos. Una estupenda opción es el Range Rover Evoque, de inspiración urbana y alma de 4x4. Pondremos rumbo al norte desde Edimburgo no sin antes realizar una rápida –pero obligatoria– visita a su Castillo, a la Catedral de St Giles y a los Jardines de Princes Street, la calle principal. A un centenar de kilómetros, pasamos por el pueblo medieval de Dunkeld primero y el victoriano de Pitlochry después. Continuamos hacia el Speyside, el corazón de las Highlands, que toma su nombre del río Spey, cuyas aguas, teñidas por la turba, tienen una irreal apariencia oscura cuando se observan desde lo alto. Esta zona se encuentra entre las 26 o ri z o n Range Rover Evoque 2.2L SD4 190 CV 4x4 Prestige Motor: Diesel 2.2. Potencia: 190 CV. Consumo medio: 5,7 l./100 km. Emisiones de CO2: 149 g./km. Medidas: 4,365 metros de largo × 1,635 metros de ancho × 1,965 metros de alto. Peso: 1.700 kg. (con conductor). Cambio: manual, 6 velocidades. Tracción: 4x4. Puertas: 5. Maletero: 575 litros. Aceleracion (0-100): 10 seg. Velocidad máx.: 200 km./h. Precio: 48.200 €. ciudades de Inverness y Aberdeen, limitando al norte con las solitarias playas escocesas, como la de Findhorn, de inmensa belleza melancólica. También es posible visitar el Cairngorms National Park, el mayor de Gran Bretaña, con sus infinitos bosques y lagos. El paisaje de Speyside está dominado por colinas de intenso color verde y cultivos de cereal. En esta región hay una sucesión infinita de destilerías donde nacen los mejores whiskys de malta. Pero recuerda que el alcohol no es un buen compañero de viaje. Así que si quieres disfrutar de estos espirituosos, lo mejor es que hagas noche en alguno de los tradicionales hoteles de la zona, como The Craigellachie, en cuyo pub encontramos la más variada colección de whiskys del planeta. No podíamos terminar nuestro viaje sin visitar el lago Ness y su legendario monstruo. Así que al día siguiente nos dirigimos a Forth William, a los pies de la montaña más alta de Gran Bretaña, el Ben Nevis. Seguimos por el Gran Valle hasta llegar a Forth Augustus, a orillas del lago Ness, donde –con un poco de suerte– quizá veamos al bueno de Nessie. Suscripciones: [email protected] ó 902542045 escapadas OZ cruceros hurtigruten por el ártico Emulando a los grandes exploradores ponemos rumbo a las gélidas tierras del norte a bordo de uno de los los barcos de la compañía Hurtigruten. Una gran aventura con todas las comodidades. corría el año 983 cuando el vikingo Eric el Rojo y su tripulación descubrieron las lejanas tierras de Groenlandia. Impresionados por el esplendor de sus valles, se bautizó la región como Green Land (Tierra Verde). A partir de entonces, muchos han sido los que se han sentido atraídos por sus paisajes, jalonados por montañas de afiladas aristas, témpanos de hielo y pintorescos pueblos habitados por los hospitalarios inuit, quienes a lo largo de la historia han mantenido un admirable equilibrio entre su cultura y el medio. Afortunadamente, la travesía para visitar hoy en día Groenlandia no supone el arriesgado viaje de antaño. Al menos si vamos a bordo del crucero MS Fram, de la compañía Hurtigruten. Este barco está especialmente diseñado para adentrarse en las regiones polares. Es un crucero moderno y confortable que navega por las aguas más gélidas del planeta desde abril de 2007. Igual que su homólogo del siglo XIX, puede penetrar en lugares que otros cruceros no alcanzan, ya que está preparado para surcar el hielo. Se da así una fantástica com28 ori zo n groenlandia Hurtigruten ofrece dos itinerarios con diferentes salidas durante junio, julio y agosto. Es preciso volar a Copenhague y pasar allí la noche para embarcar en el vuelo que conduce hasta Kangerlussuaq, capital de Groenlandia. Desde aquí se alcanza Qeqertarsuaq. Precio: 5.546 €. www.hurtigrutenspain.com. binación entre las grandes comodidades de un crucero y las características de un explorador. El barco navega las aguas del Ártico en busca de parajes y localidades de excepcional belleza y nombres de pronunciación imposible como Uummannaq, en la falda de una montaña; Kullorsuaq, una remota región donde el hombre libra una batalla constante por la supervivencia; la población abandonada de Dunda o la septentrional Siorapaluk. Otra buena opción que propone la compañía Hurtigruten es visitar el último lugar habitado del planeta, el más cercano al Polo Norte: el archipiélago noruego de Spitsbergen. Sus icebergs azules y sus glaciares surgen a las puertas de un océano helado. En esta ocasión el viaje también se realiza a bordo del buque MS Fram y se sigue una ruta a lo largo de la costa noroeste de Spitsbergen, pasando por el asentamiento de Longyearbyen, la base científica de Ny Alesund y la estación minera de Barentsburg. También se visitan los espectaculares fiordos de Magdalenefjorden y Smeeremburgfjorden; y las islas Dansk y Amseterdam. –vega alonso Suscripciones: [email protected] ó 902542045 LOS MAGOs DE OZ nos vamos de tiendas Londres es una de las capitales de la moda. Y de las compras... Para que no te pierdas entre tanta oferta, te enseñamos nuestras tiendas favoritas de ayer y de hoy, ¡mide bien tus esterlinas! murdock london Cortes de pelo masculinos, lustrado de zapatos y afeitados tradicionales. Pero hoy en día aquí también es posible adquirir todo tipo de complementos hechos a mano, como sombreros, carteras, gemelos o fundas para iPad. Cuatro tiendas: 340 Old Street (Shoreditch), 5b Stafford Street (Mayfair), 18 Monmouth (Covent Garden) y 210-220 Regent Street (Soho). www.murdocklondon.com bulgari Aunque la marca es italiana, su calidad traspasa fronteras y no puede faltar en nunguna guía de tiendas del mundo (la nuestra de Londres no iba a ser menos...). Joyería, relojes, perfumes y accesorios de ensueño sólo al alcance de los bolsillos más solventes. Existen múltiples tiendas Bulgari repartidas por toda la ciudad. Puedes consultar sus ubicaciones en la web www.bulgari.com harviey & Hudson c.f. trumper Además de ser una de las barberías tradicionales más prestigiosas de la ciudad, también es posible adquirir una gran gama de exclusivas fragancias y productos de aseo: cremas, jabones, bálsamos para después del afeitado, brochas, espejos, cepillos para el pelo... Ideal para el verdadero gentleman del siglo XXI. Existen dos establecimientos en la ciudad: 9 Curzon Street (Mayfair) y 1 Duke of York Street (St. James’s). www.trumpers.com john lobb Posiblemente son los mejores zapatos del mundo. Están fabricados de forma totalmente artesanal y a la medida de cada cliente. Actualmente son conocidos (y deseados) en los cinco continentes, pero todo empezó en una pequeña tienda de la mítica St James’s Street en el año 1866. 9 St. James’s Street. www.johnlobb.com 30 o ri zo n Tienda familiar de ropa masculina en cuya elaboración emplean sus propios materiales. Puedes encargar prendas con la forma y el tejido que quieras: camisas (su especialidad), accesorios, medias, corbatas o pijamas de seda, entre otras muchas cosas. Cuatro locales: 77 Jermyn Street (St. James’s), 96-97 Jermyn Street, 55 Knightsbride (City), 12-13 Lime Street. www.harveiandhudson.com harrods Son los grandes almacenes más conocidos del mundo y todo un icono de la capital inglesa. 20.000 metros cuadrados repartidos en cinco plantas en las que podrás encontrar absolutamente de todo. Un consejo: tómate tu tiempo en la sección de delicatessen. No te arrepentirás. Ltd 87–135 Brompton Road. www.harrods.com bazar recibirá Londres a partir del 27 de julio con motivo de 880.000 visitantes los Juegos Olímpicos, según la organización London & Partners. dunhill bicester Village Se trata del hermano británico de Las Rozas Village de Madrid y La Roca Village de Barcelona, dos de los nueve Chic Outlet Shopping® Villages que hay repartidos por Europa. Su filosofía es ofrecer prendas de primeras marcas de la temporada anterior a precios reducidos. Aunque no está en Londres, sino en Oxford, merece la pena el paseo. 50 Pingle Drive, Bicester, Oxfordshire. www.bicestervillage.com La Bourdon House es la tienda bandera de esta marca de lujo de marcado carácter british, indispensable en el armario de todo gentleman: desde atuendos deportivos hasta trajes de noche, pasando por impermeables o chaquetas de tweed. Aquí encontrarás ropa para cualquier ocasión, así como una amplísima gama de complementos que van desde objetos puramente clásicos hasta los más extravagantes y provocadores que te puedas imaginar. Además, la tienda en sí misma no tiene desperdicio. Ubicada en la anterior residencia del duque de Westminster en Mayfair, conserva parte de su mobiliario original. 2 Davies Street; Mayfair. www.dunhill.com TURNBULL & ASSER Si sus camisas son lo bastante buenas para los miembros de la Casa Real británica, puede que también lo sean para ti. Están realizadas a medida, empleando los mejores materiales del planeta: podrás escoger entre más de mil tejidos diferentes. Ellos son los inventores de la camisa de doble puño y dos botones. Pero además también encontrarás trajes, tirantes, corbatas, jerseys, pijamas, chaquetas, abrigos, paraguas, pañuelos, gemelos, bufandas... 71-72 Jermyn Street. www.turnbullandasser.com pepe jeans london hackett Ubicada en la célebre Carnaby Street (aquella calle en la que compraban los miembros de los Rolling Stone o The Beatles, entre otros), encontramos esta tienda en la que se exponen las últimas tendencias en moda urbana y casual. Y aunque el denim es el protagonista absoluto y la especialidad de la casa, en sus 152 metros cuadrados también hay otras muchas cosas: camisas, camisetas, chaquetas de punto, vestidos... Esta tienda londinense –y cualquiera de las muchas que la marca tiene repartidas por todo el mundo– es sinónimo de estilo british. Desde su nacimiento en 1983, esta joven firma ha conseguido mantener la esencia de la tradición británica al tiempo que reinventaba las prendas más clásicas para adaptarlas sin miedo a los nuevos tiempos y las últimas tendencias que imperan en el universo moda. La prueba de que la elegancia y el estilo no está reñida con la modernidad. 26-27 Carnaby Street. www.pepejeans.com 137-138 Sloane Street. www.hackett.com o riz o n 31 Mercado de Camden Town, un clásico londinense que se mantiene igual de vibrante que siempre. mercados de londres mestizaje a pie de calle Si Chelsea fue el barrio de moda de los sesenta y setenta; Notting Hill de los ochenta y Soho de los noventa; la primera década del nuevo milenio ha encumbrado al Este de Londres como la nueva meca del arte urbano. Los fríos almacenes industriales de los barrios de Shoreditch, Hackney y Dalston han sido transformados en alternativas galerías y mercados callejeros con sello propio. Puede que no sea el más conocido de Londres, pero el mercado de Ridley Road en Dalston es un mosaico de culturas y sabores que vende comida de 32 ori zo n todas las partes del mundo. A principios de siglo XX, Ridley Road era un simple cruce de caminos, donde se asentó una importante comunidad judía. Desde entonces, asiáticos, griegos, turcos e hindúes también han buscado abrigo en esta zona. Fruto de este encuentro de culturas, este mercado es uno de los pocos sitios de Londres donde puedes degustar una infinita variedad de platos, aunque la comida afro-caribeña es la estrella. Lo más llamativo del mercado es su proyecto de ‘restaurante temporal’, que intercambia comida por fotos: cristina de middel LOS MAGOs DE OZ underground comida. La idea es de los colectivos The Decorators y Atelier Chan Chan, quienes invitan a chefs para que sorprendan todas las noches con una especialidad, cocinada con ingredientes comprados todos en el mercado. La cena se sirve cuando las casetas van a cerrar. El plato cuesta 15 libras (unos 18 euros) y todos los comensales reciben un cheque por cinco libras para que lo gasten en productos del mercado. A la entrada de Ridley Road, los visitantes pueden pedir un mapa para conocer mejor a los dueños de los puestos: al final del primer pasillo está Sharian, que lleva 35 años trabajando en el mercado; más adelante está Erjon de Albania, 12 años vendiendo especias… y así hasta cerca de 180 puestos. Aunque la comida es el plato estrella, también se pueden comprar libros, velas y accesorios, cosméticos, joyería, abrigos y ropa vintage para mujeres. El bazar abre de lunes a sábado. Un viejo rockero Si Ridley Road representa el incipiente gusto urbano por el buen comer; el mercado callejero de Camden Town sigue siendo un viejo rockero que se resiste a colgar la guitarra. Ni el espectacular incendio que devoró algunos emblemáticos pubs en 2008; ni la muerte de su musa, Amy Winehouse, el pasado verano, ha restado un ápice a su brillo. En realidad, el mercado de Camden Town son seis mercados en uno. El tour empieza cerca de la parada de metro del mismo nombre, en los puestos de Electric Ballroom, en Camden High Street. Los sábados hay una feria de música y cine, mientras que los domingos cerca de sesenta puestos venden también ropa gótica y vestidos funkies. El segundo mercado callejero, el de Inverness Street, arranca todos los días a las ocho y media de la mañana y se puede comprar fruta y vegetales, así como algunos souvenirs de la ciudad. El pub Good Mixer al final de la calle es el sitio perfecto para tomarse una pinta de cerveza local y, si hay suerte, disfrutar con la música en directo de alguna banda. El mercado de Buck Street es el más conocido de Camden, con más de 200 puestos vendiendo ropa, camisetas y accesorios. Algunos lo llaman The cages (Las cajas) porque el área de las casetas está delimitada por barrotes de hierro. Los pasillos son estrechos y los fines de semana están siempre abarrotados de gente. Es la zona preferida por los carteristas y los ladrones, así que vigila el bolso. Canal Market es el cuarto mercado de Camden. Muchos de sus locales fueron devastados por el incendio de 2008, aunque todos los negocios ya han sido restaurados y hasta se hicieron algunas mejoras. Este mercado está situado justo después del puente que cruza el Canal. Es el bazar más pequeño, aunque para muchos visitantes es el que más encanto tiene por su privilegiada ubicación. La segunda planta está llena de locales con terrazas para comer algo, y disfrutar de las vistas al canal. El quinto mercado es el Lock Market. Fue el primero que abrió sus puertas en 1970. Al principio estaba especializado en artesanía, pero ahora también se vende ropa, joyas y regalos y recuerdos más que atípicos de la ciudad. El sexto y último rastro de Camden Town es el Stables Market. Es el más grande, con cerca de 450 tiendas y puestos, que venden ropa vintage y accesorios. Las viejas catacumbas del Stables Market han sido recientemente renovadas, y algunos de los almacenes se comunican entre ellos a través de pasillos adoquinados. Durante el recorrido por los seis mercados de Camden Town, todos los viajeros se sorprenderán por la variedad de tribus urbanas que conviven en este barrio de músicos; desde punks, hippies, góticos hasta heavies y los nuevos hipsters, jóvenes londinense pretenciosamente modernos con extravagantes peinados y ropa sesentera. –jaime lópez Dos de los puestos del Mercado de Ridley Road de Dalston, al este de la ciudad, uno de los lugares más emergentes de Londres. Top 5 mercados Ridley Road Market Ridley Road. Metro: Dalston Kigsland. Lunes a jueves, de 6.00 a 18.00 h. Viernes a domingo, hasta las 19.00h. camden market Chalk Farm Road. Metro: Camden Town. Lunes a domingo, de 10.00 a 18.00 h. camdenlock.net Greenwich market 6, College Aproach. Metro: Cutty Sark. Martes a domingo, de 10.00 a 17.30 h. www.shopgreenwich.co.uk Brick Lane Market Brick Lane. Metro: Aldgate East. Domingos, de 9.00 a 17.00 h. www.visitbricklane.org west norwood feast Norwood Road. Estación de tren: Tulse Hill. Primer domingo de cada mes. westnorwoodfeast.com o riz o n 33 LOS MAGOs DE OZ 12.00 El alma de Mackintosh Barcelona tiene a Gaudí, Chicago a Lloyd Wright y Glasgow a Charles R. Mackintosh. Su impronta se aprecia por toda la ciudad pero es su obra maestra, la Glasgow School of Art, donde su talento se siente más protagonista: todo el edificio lleva su firma. 167 Renfrew St. Abierto toda la semana de 10.30 a 19.00 h. La entrada es gratuita. www.gsa.ac.uk 14.00 glasgow cool Un tradicional Tea Afternoon El Cup Glasgow, en el corazón del barrio más cool de la ciudad, el West End, es un lugar estupendo para disfrutar de un Afternoon Tea como manda la tradición: una generosa tea pot, sándwiches, tartas y scones. Más de cuarenta tipos de té, bullicio y camareros trendies. La ciudad pelea por arrebatarle a Edimburgo el título de la urbe más sofisticada del Norte de Europa gracias a su arquitectura vanguardista, al diseño de Mackintosh y a su escena musical. p o r cle me nte corona 311 Byres Road. Precio medio: 12 £. www.cupglasgow.co.uk 09.30 Aterrizaje Glasgow tiene dos aeropuertos: el que recibe vuelos internacionales es el Glasgow Airport, a 12 km. de la ciudad. Los autobuses al centro tardan media hora y salen cada diez minutos (4,5 £, 7 £ i/v. Operativos las 24 horas los siete días de la semana). El precio medio de la carrera en taxi es de 19 £. Air Nostrum vuela entre Madrid y Glasgow todos los martes y jueves desde 152’70 € (tasas incluidas). Más información en www.iberia.com 10.00 16.00 Efecto Guggenheim El espectacular icono de la ciudad es el Riverside Museum de Zaha Hadid, un museo consagrado al transporte que alberga más de 3.000 automóviles, motos, trenes y maquetas navales. Como broche, tienes al bellísimo Tall Ship, un carguero victoriano de tres palos, homenaje a cuando Glasgow era el puerto más laborioso del Imperio Británico, atracado en la puerta. El desván de la abuela y la casa del genio El Kelvingrove Art Gallery & Museum es el museo más importante de Escocia y uno de los quince más visitados del mundo: bien lo merece su estupenda y ecléctica colección (más de 8.000 piezas) en la que caben desde el Cristo de San Juan de la Cruz de Dalí hasta un caza Spitfire auténtico. Otra parada obligatoira es la réplica de la casa que Mackintosh diseñó y construyó como su vivienda familiar (la original fue derruida en los sesenta). Atesora muchas de las posesiones originales del arquitecto: los libros, los muebles, las obras de arte que decoraban las paredes... 100 Pointhouse Place. Abierto de lunes a domingo de 10.00 a 17.00 h. (jueves y sábados a partir de las 11.00 h). La entrada es gratuita. www.glasgowlife.org.uk/museums Kelvingrove Art Gallery & Museum: Argyle Street. Entrada gratuita. www.glasgowlife.org.uk/museums The Mackintosh House: Hunterian Hart Gallery, University of Glasgow. 82 Hillhead Street. Entrada: 5 £. www.glasgow.ac.uk/hunterian 34 ori z o n 33 horas 10.00 20.00 Desayuno escocés El Gandolfi es un café íntimo y de aires bohemios, con guiños a la cocina internacional –del Mediterráneo a Centroamérica– cuyos desayunos concitan a toda una parroquia de fieles. Sáltate la dieta pidiendo unos huevos florentine o haggis, el guiso tradicional escocés, con fama de ser uno de los mejores de todo Glasgow. Cena de altura Alterna con la crème de la crème en el lugar de moda, el Corinthian Club, donde encontrarás un restaurante abierto hasta las 3.00 h., un bar –el Bootleg– que te recordará a los speakeasy de la Ley Seca, una discoteca en el sótano y, last but no least, muchas mesas en las que intentar ganar una mano de Texas hold’em a futbolistas de los Rangers y los Celtics, y demás miembros del Wealhty Glasgow. Inolvidable. 64 Albion Street. Abierto toda la semana de 8.00 a 0.00 h (los domingos, desde las 12.00 h). Desayuno Gandolfi (salchichas, morcilla, bacón, tomate, puré de patatas, champiñones, huevos y tostadas): 8,50 £. www.cafegandolfi.com 191 Ingram Street. Menú de dos platos: 11’95 £. www.thecorinthianclub.co.uk 12.00 Shopping Experience en el Centro Deshazte del complejo de culpa por tu exceso calórico del desayuno dando un buen paseo por The Style Mile, y descubrirás porqué Glasgow es considerada por muchos –después de Londres, claro– el mejor lugar para ir de compras de todo el Reino Unido. En Sauchiehall Street, en las galerías Buchanan o Princess Square te esperan las mejores firmas para que quemes tu tarjeta de crédito: desde Viviente Westwood a Cos, pasando por Kart Geiger o Ralph Lauren y, naturalmente, también encontrarás todas las marcas típicamente británicas. Toda la información que necesitas para ir de shopping en Glasgow está en la página web www.seeglasgow.com 22.00 Una pinta y buena música Glasgow es una de las capitales musicales europeas precisamente por locales como el inmenso O2 ABC, una histórica sala de conciertos –inaugurada en el año 1875, se convirtió poco después en el primer cine de Escocia– que cuenta con dos escenarios y cinco bares. Una garantía de que, cualquiera que sea la noche de la semana que vayas, encontrarás siempre una banda o un deejay de los que hacerte devoto fan. 300 Sauchiehall Street. Precio de la entrada: 5£. www.o2abcglasgow.co.uk 00.00 Dormir como un Lord Ocupando una hilera de cinco casas victorianas en la mejor zona del West End, el Hotel du Vin es un hotel boutique de lujo cuyas 49 habitaciones y suites destilan charme con sus frescos en el techo y sus paredes paneladas con maderas nobles. No te sorprendas si en el Salón del Whisky una estrella de Hollywood que anuncia cafeteras o un músico de voz felina nacido en Belfast te preguntan si has terminado con la lectura del Herald... 1 Devonshire Gardens. Precio de la habitación: desde 160 £. www.hotelduvin.com 15.00 Lujo campestre La Pollock House es la máxima expresión de las mansiones campestres en Escocia. Hogar ancestral de la familia Maxwell, data del s. XVIII y alberga una de las mejores colecciones de pintura española del Reino Unido (Goya, Velázquez, El Greco...). No queremos asustarte pero, si te asalta un olor a lavanda, eso querrá decir que el fantasma de la mansión ha hecho acto de presencia… Pollock Country Park. Abierta todos los días de 10.00 a 17.00 h. www.nts.org.uk Vuelo de regreso: 18.35 h. Tiempo en la ciudad: 33:05 horas. Precio total: unas 230 £. o riz o n 35 escapadas oz En el sentido de las agujas del reloj, algunos locales nocturnos de Manchester, el Nissan Juke con el que realizamos el viaje, la plaza del Bridgewater Hall (la principal sala de conciertos de la ciudad) y el Lowry Bridge. Manchester postindustrial Al volante de un Nissan Juke recorremos esta ciudad del noroeste de Inglaterra, actualmente uno de los lugares más cosmopolitas y dinámicos de Europa. manchester fue la primera ciudad industrializada del mundo, y aunque es cierto que mantiene una gran actividad en zonas como Trafford Park, su paisaje actual poco tiene que ver con oscuras y sombrías fábricas. Desde los ochenta, la ciudad se ha reinventado y nos muestra una faceta fascinante y moderna, ofreciendo una inmensa actividad cultural, una incombustible oferta de ocio (nocturno, sobre todo) y una vanguardista escena musical que cada año atrae a un mayor número de visitantes, llegando a competir con la mismísima Londres por ocupar el puesto de destino más de moda de Inglaterra. Así que si vas a visitar la capital, plantéate una escapada a Manchester, a poco más de tres horas por carretera. Si decides hacerlo en vehículo propio, un coche que no desentona en absoluto con los valores actuales de la ciudad es el Nissan Juke. El nuevo crossover del fabricante japonés es polivalente, ágil y dinámico; perfecto para movernos libremente por la urbe y, a su vez, realizar confortables desplazamientos largos. Además, su diseño moderno y vanguardista encaja a la perfección con las últimas tendencias que habitan en las calles y clubs de Manchester. Hay algunos lugares de gran interés histórico, como su magnífica Catedral del s.XV, la iglesia de Saint Anne 36 o ri z o n del s. XVII o el Town Hall (el Ayuntamiento), ubicado en un sorprendente edificio de estilo neogótico. Pero como nos interesa más el presente que el pasado, te recomendamos que ocupes tu tiempo en visitar su colorido Barrio Chino, las espectaculares tiendas del Bohemian Northern Quarter (Barrio Bohemio) o el Gay Village, donde se concentra la mayor comunidad gay de Europa y, por tanto, algunas de las corrientes más emergentes del mundo. Uno de los lugares más interesantes es The Lowry, en las afueras, un imponente edificio que alberga exposiciones de arte, obras de teatro, conciertos, tiendas y restaurantes. Y, por supuesto, los más futboleros no pueden dejar de visitar Old Trafford, el mítico estadio del Manchester United. Pero es cuando cae la noche cuando la ciudad nos muestra una de sus caras más atractivas. Ha sido apodada como Madchester (mad en inglés es loco) debido a su agitadísima vida nocturna, que gira en torno a un vibrante circuito de clubs de música electrónica –de aquí son The Stone Roses o The Chemical Brothers, entre otros– que sigue tan vigente como en sus inicios hace más de dos décadas, y en el que destacan locales como Emporia, Tangled o Hacienda. –mateo palacios nissan juke Visia Motor: Gasolina 1.6i. Potencia: 117 CV. Consumo urb.: 7,7 l./100 km. Consumo interurb.: 5,1 l./100 Km. Consumo medio: 6 l./100 km. Emisiones de CO2: 139 g/km. Medidas: 4,135 metros de largo × 1,765 metros de ancho × 1,570 metros de alto. Peso: 1.172 kg. Cambio: manual. Tracción: 4x2. Puertas: 3. Maletero: 251 litros. Aceleración (0-100): 11 seg. Velocidad máx.: 178 km./h. PVP: Desde 15.950 €. NO MOLES TA R WOLFEN MILL COUNTRY RETRATS EL TÉ DE LAS CINCO Para disfrutar de esta ancestral tradición británica no hace falta acudir a un pomposo salón de la época victoriana. Con la llegada de la primavera, nos gusta más la idea de tomar el té –o una copa de vino, o un vaso de buen whisky de malta– al aire libre, a la orilla del lago de uno de los cottages (casas de campo) de lujo que alquila la compañía Wolfen Mill Country Retrats en el condado de Lancashire, al noroeste de Inglaterra, en el hermoso bosque de Bowland, que forma parte del Valle de Ribble. Las diez propiedades con las que cuentan son totalmente independientes y pueden acoger de dos a seis huéspedes. Fueron construídas hace más de trescientos años pero han sido meticulosamente reformadas para ofrecer todos las comodidades propias del s. XXI. Incluso tienen wifi gratuito, ¿pero quién va a querer consultar su correo pudiendo admirar el lago? –PABLO ORTEGA RESPETO MEDIOAMBIENTAL Los esfuerzos de la compañía por fomentar un turismo sostenible se vieron recompensados en 2008 con el premio ‘Be Inspired Business Awards’ al negocio medioambiental del año. O RIZ O N 37 COMUNIDAD LUGARES IMAGINARIOS PAÍS DE LAS MARAVILLAS PALACIO DE CORAZONES CAMPO DE CROQUET DE LA REINA SALÓN DE TÉ DEL SOMBRERERO LOCO CASA DEL CONEJO BLANCO CHARCO DE LÁGRIMAS ROSALEDA DE LA REINA RÍO TÁMESIS MADRIGUERA POSTALES LA PRINCESA DEL PUEBLO Con el paso del tiempo, Diana de Gales se ha convertido en un icono pop más para los británicos, como si se tratara de cualquier rockero maldito víctima de una sobredosis o de un personaje de alguna exitosa serie de televisión ochentera. Por eso nuestra lectora Vicky, amante de todo lo kitch, eligió esta original postal. “Queridos amigos de ORIZON, sé que no es Belén Esteban, pero esta princesa del village tiene mucho más glamour... Como esta ciudad: ¡London es increíble! Siempre que vienes es diferente. Os animo a visitarla porque es una pasada. No me he ido y ya estoy deseando volver. London Calling!”, nos escribía ella. ““God save the Queen!”–en versión de los Sex Pistols–, añadimos nosotros. Mándanos una postal de tus viajes a la redacción de ORIZON. Calle Almirante nº9, 3º Izq. Madrid. CP: 28004. 38 ORI ZO N ILUSTRACIÓN: VICTORIA DE DIEGO Todo el mundo es consciente de los atractivos que tiene la ciudad de Londres. Pero lo que muy pocos saben es que bajo su superficie se esconde un universo aún más fascinante. A través de una madriguera de conejos que se encuentra en los márgenes del río Támesis, a la altura de Oxford, se puede acceder al País de las Maravillas (o al menos así es como llegó una tal Alicia hace tiempo). Se trata de un lugar mágico habitado por una baraja de naipes y gobernado por el Rey y la Reina de Corazones (aunque todos sus súbditos saben que en realidad es ella la única que manda). El deporte más practicado por la realeza es el croquet, pero aquí se juega de una forma bastante especial: se utilizan a flamencos vivos para golpear a topos, que hacen las veces de bola. Pero es que en realidad nada es demasiado convencional por estas tierras: los alimentos hacen crecer o menguar el tamaño del que los consume, los animales hablan inglés (y algunos, como los ratones, incluso francés), los conejos llevan reloj y chaleco y sólo crecen rosas blancas aunque, eso sí, son pintadas de rojo... Aunque hay decenas de lugares sorprendentes, nuestro favorito, donde la diversión está asegurada, es el Salón de Té del Sombrerero Loco, donde (casi) todos los días hay algo que celebrar: ¡Feliz no cumpleaños a todos! LA MALETA DE ¿Sydney, Atenas o Londres? Londres, porque me gustaría que fuera la ciudad en la que compita en mis terceros JJ OO. Cuando viajas para competir, ¿te da tiempo a ver algo del destino al que vas? Habitualmente no. Vamos del aeropuerto al hotel y de ahí a la pista. Suelo conocer los alrededores del hotel y lo que se ve durante los trayectos en el autobús. ¿Qué es lo que más te gusta de Londres? El Puente de la Torre (Tower Bridge), sobre el Támesis. ¿Lo mejor y lo peor de viajar? Lo mejor es conocer culturas, personas, gastronomía... Lo que peor llevo es el desplazamiento físico de viajar. ¿Eres supersticiosa? ¿Tienes algún amuleto u objeto especial que te acompañe en todos tus viajes? No lo soy, aunque sí me gusta estrenar calcetines nuevos en cada competición. Tú que te pasas la vida pendiente del cronómetro, ¿en qué lugar se detiene el tiempo? En cualquier paraje natural. MAYTE MARTÍNEZ ¿El primer viaje que recuerdas? Unas vacaciones en Valecina con mis padres. ¿Cómo es tu maleta? Una Samsonite de color azul. Una conversación tan rápida como los tiempos de esta atleta, que lucha para recuperarse y poder competir en los JJ OO. ¿El más importante a nivel personal y profesional? Pekín y Osaka, respectivamente. 1 2 ¿Dónde fuiste de luna de miel? Zambia y Sudáfrica. 3 ¿Si pudieras viajar al pasado, a qué época irías? Me quedo donde estoy. -¿Un rincón poco conocido? San Cebrián. ¿Qué es lo que sí que encontraríamos seguro si abriéramos tu equipaje? Ropa de competición y zapatillas de la marca Adidas, vaqueros Levi’s, camisetas de tirantes, zapatillas Converse, colonia Nenuco para ir de sport y perfume de Coco Chanel. 4 ¿Sin qué no viajarías nunca? El cargador de la Blackberry. ¿Un lugar en el mundo ideal para correr? Canadá. Además del atletismo, ¿qué otros deportes practicas? Trekking en la montaña. ¿Volverás de Londres con una medalla en su interior? Después de casi dos años lesionada, sólo con ir ya me conformo. ¿Tu souvenir preferido? Un bumerán de Sydney. 5 6 7 8 9 ¿Sientes que has encontrado ya tu lugar en el mundo? Hay momentos en los que sí y otros en los que no. –PABLO ORTEGA 1. Colonia Nenuco. 2. Zapatillas Adidas. 3. Postal de Zambia. 4. Postal de Osaka. 5. Vaqueros Levi’s. 6. Postal de Londres. 7. Maleta Samsonite. 8. Zapatillas Converse. 9. Perfume Coco Chanel. ORIZ O N 39 LOS MAGOs DE OZ londres, inglaterra a orillas del támesis La arquitectura londinense, en la que se combinan edificios antiguos con otras construcciones contemporáneas, es un claro reflejo del carácter de esta ciudad, que se mueve entre la tradición británica y las últimas vanguardias. río támesis Es el principal río de Inglaterra, con 346 km. Es la principal fuente de abastecimiento de agua de Londres y el escenario de la famosa regata que enfrenta cada año a las universidades de Oxford y Cambridge. Además pasa por las localidades de Oxford y Eton, y desemboca en el Mar del Norte. 40 o ri z o n swiss re Conocido popularmente como ‘El Pepinillo’ debido a su peculiar forma, obra del famosísimo arquitecto inglés Norman Foster, se trata de un rascacielos de 80 metros de altura y 40 plantas en el corazón de la City, el núcleo financiero de la ciudad. Fue inaugurado en 2004. skyline el año en el que se estima que fue fundada la ciudad por el Imperio 43 EsRomano bajo el nombre de Londinium tras la conquista de Bretaña. torre de londres Oficialmente el Palacio Real y Fortaleza de su Majestad, es un castillo histórico situado en la ribera norte del río. La Torre Blanca, que da nombre al castillo entero, fue construida por Guillermo el Conquistador en el año 1078. Posteriormente el castillo se amplió en varias fases, sobre todo durante los siglos XII y XIII. tower bridge O el Puente de la Torre –en castellano– fue construído en 1894, debido al tráfico creciente en aquella época, que hacía necesario un nuevo paso sobre el río Támesis más abajo del Puente de Londres. Situado cerca de la Torre de Londres, de la que toma su nombre, es levadizo, tiene 244 metros de longitud y dos torres de 65 metros de altura. música para pasear por londres “London Calling” - London Calling - The Clash “Street Fighting Man” - Beggars Banquet - The Rolling Stones “London Love” - Parklife - Blur “Hoover Factory” - Taking Liberties - Elvis Costello “London Dungeon” - 12 Hits from Hell - The Misfits “London” - The World Won’t Listen - The Smiths o riz o n 41 arte 42 ori z o n arte picasso en la tate britain pablo entra en el reino Aunque en un primer momento las creaciones del pintor español no tuvieron gran calado en el Reino Unido, poco a poco fue ganando adeptos y ahora la Tate Britain recoge en una exposición la gran influencia que tuvo el malagueño sobre algunos artistas anglosajones. po r jai me ló pez Naturaleza muerta con mandolina de Pablo Picasso (1924), perteneciente a la Collection Stedelijk Museum Amsterdam. o riz o n 43 arte de la Royal Academy, Alfred Munnings, quien contó la siguiente anécdota durante la gala anual de la institución en el año 1945: “Alfred, si viésemos a Pablo Picasso andando por esa calle… ¿Te unirías a mí para patearle el…? ¡Algo, algo!”. Esta pregunta se la hizo el entonces primer ministro, Wiston Churchill, sobre la muestra de cuadros de Pablo Picasso y Henri Matisse que el gobierno francés había brindado al pueblo británico en agradecimiento por la liberación de los nazis. La historia entretuvo a la audiencia, y contribuyó forjar aquella leyenda negra que se fraguó contra un pintor que, además de representar extrañas mujeres con tres ojos, militaba en un partido comunista en plena emergencia de la Guerra Fría. El idilio entre el Reino Unido y Pablo Picasso tardó en cuajar. Su primera exposición en Londres, en las galerías Grafton en el año 1910, fue recibida con hilaridad, severas reseñas y caras blancas fruto del desconcierto. Sin embargo, estas críticas no desanimaron a Théodore Beauchesne, un marchante y mecenas del arte que había conocido al pintor malagueño años antes en París, y pensaba que sus pinturas revolucionarían el modernismo británico. Pese a su apoyo y entusiasmo, el establishment inglés nunca quiso a Pablo Picasso. Esta apatía por sus lienzos de formas amorfas, especialmente los cubistas, se extendió en el tiempo durante casi tres décadas, culminando con aquellas famosas declaraciones de Wiston Churchill. Sin embargo, Pablo Picasso siempre contó con un grupo de incondicionales en el Reino Unido. La primera generación de seguidores que intentó abrirle camino en la escena del arte británico incluye el grupo de Bloomsbury, con Roger Fry y Clive Bell a la cabeza. Si bien es cierto que este grupo de intelectuales y pintores que se reunía en la casa de la escritora Virginia Woolf en el londinense barrio de Bloomsbury acabó dominando la aristocracia de 1930, todavía a esas alturas había una oscura admiración por Picasso, debido a la falta de apoyo sobre su influencia en la pintura. El posmodernista Roger Fry, por ejemplo, afirmaba sentirse cautivado por la expresión cubista, aunque reconocía que no la entendía como tal, y la llamaba simplemente arte abstracto. rusos la capital británica tras la Primera Guerra Mundial insufló modernismo a la escena del arte con una nueva generación de jóvenes revolucionarios, un hecho que tanto agradaba a los esnobs como atraía a los intelectuales. El empresario ruso Serguéi Diáguilev, fundador de la pujante escuela rusa, invitó a Pablo Picasso para que diseñara los trajes y el atrezzo para la famosa obra Tres Sombreros de Picos, con música de Manuel de Falla, que se estrenó en el teatro Alhambra, en Leicester Square, el 22 de julio. No era la primera vez que Picasso trabajaba con el mecenas ruso; incluso se había casado con una de sus bailarinas, Olga Khokhlova. El pintor español se alojó junto al resto de la compañía de baile en el lujoso The Savoy Hotel y trabajó en el estudio de Diáguilev en Covent Garden, junto al inmigrante ruso Vladimir Polunin y su esposa inglesa Elizabeth, ambos conocidos por sus diseños y escenarios para espectaculares obras de teatro. Gracias al éxito del ballet ruso, Picasso y Olga fueron invitados a una serie de fiestas de la alta sociedad. El pintor español, que por entonces tenía 37 años, se dejó seducir por la estampa británica: encargó trajes en los mejores sastres de Savile Row y siempre apareció impecablemente vestido en todas las recepciones. Cuando se deja retratar en la londinense Leicester Square, Picasso aparece ataviado como un auténtico gentleman inglés: traje negro, camisa blanca y bombín. Una pipa de fumar en una mano, en la otra un bastón, chaleco negro, pañuelo blanco y hasta un reloj de bolsillo con una cadena engarzada en el primer botón del chaleco. Dicen que fue el presidente Picasso y Londres Con mayor o menor apoyo, la capital británica fue una ciudad de segunda para el pintor. Él siempre prefirió París, donde formó parte de esa generación de parias (Paul Gauguin, Matisse, ToulouseLautrec, Van Gogh…) instalada en Montmartre, que buscaba marchantes y galeristas entre burdeles y sorbos de absenta. El pintor sólo vivió en Londres durante los dos meses del verano de 1919. La llegada de los ballets 44 ori zo n sobre la tate Britain Conocida como Tate Gallery of British Art hasta el año 2000 (cuando cambió su nombre por Tate Britain), es uno de los museos más importantes de Londres. Abrió sus puertas en 1897 en el lugar en el que anteriormente se encontraba la Prisión de Millbank, en el paseo de la ribera norte del Támesis, al suroeste del centro de la ciudad y cerca del Parlamento. Forma parte de la red de galerías Tate en Gran Bretaña, junto con la Tate Modern (también en la capital), la Tate Liverpool y la Tate St Ives. Su inconfundible pórtico de estilo clásico –obra de Sydney R. J. Smith– es traspasado cada año por cerca de dos millones de visitantes. Picasso y el arte moderno británico Éste es el título con el que se ha bautizado la última exhibición de la Tate Britain de Londres y que recoge la antipatía inicial que tuvo que soportar el pintor español, y cómo éste terminó poco a poco cautivando al exigente público inglés. La exposición muestra la influencia de Picasso a través de siete grandes pintores británicos: Duncan Grant, Wyndham Lewis, Ben Nicholson, Henry Moore, Francis Bacon, Graham Sutherland y David Hockney. Compuesta por más de 150 obras, entre ellas 60 del artista malagueño, la exhibición está dividida por orden cronológico a través de 13 secciones; desde el primer fiasco de Picasso en Londres hasta su consagración con la exposición en la Tate Modern en 1960. Entre las obras más importantes del pintor español destacan Cabeza de un hombre con bigote (1912), La mujer que llora (1937) y Los tres bailarines (1925). Siguiendo este estricto orden cronológico, el británico Duncan Grant fue uno de los primeros pintores locales en responder a la esencia modernista de las pinturas del malagueño, como el Jarrón de Flores (1908), que inspiró su cuadro The Tub, que la arte The Tub del pintor escocés Duncan Grant (hacia 1913). o riz o n 45 arte En esta página, Cabeza de hombre de Pablo Picasso (1913). En la siguiente, 1933 (coin and musical instruments) de Ben Nicholson (1933). 46 o ri zo n arte de Picasso en el Reino Unido. La única capaz de capturar la violencia de la Guerra Civil española, y los preludios destructivos de la Segunda Guerra Mundial. De convertir la pintura abstracta en un símbolo de expresión política, desterrando el realismo como único y exclusivo movimiento de protesta artística. En un país donde la fascinación por el conflicto español hace que una gran parte de los ingleses conozcan nuestra Guerra Civil mejor que la mayoría de españoles, Picasso sin el Guernica no hubiera alcanzado el Olimpo de los mejores pintores de todos los tiempos. Y, por supuesto, la Tate Britain tenía que recordar que Picasso fue el autor de este cuadro... Tate Britain exhibe junto a uno de los autorretratos de perfil cubista de Wyndham Lewis. Aunque el cubismo sigue siendo la tendencia más admirada por los seguidores picassianos británicos, la muestra también incluye notables ejemplos de su periodo azul, como La Vie (1903). Sin embargo, fueron las figuras amorfas las que tuvieron mayor calado y tejieron una alargada sombra sobre los artistas ingleses. La escultura de cuatro piezas de Henry Moore, conocida como La figura reclinada (1934), aparece como una clara inspiración del cuadro de Picasso La Fuente (1921). A la vez que los estudios de anatomía que el pintor español publicó en la revista francesa Cahiers d ’A rt, comisionados por el poeta Guillaume Apollinaire, sirvieron de influencia para Moore, Francis Bacon o Ben Nicholson. El tríptico Tres figuras en la base de la crucifixión (1944) de Francis Bacon también demuestra la obsesión por los bañistas pintados por Picasso en la playa francesa de Dinard. Luces y sombras No obstante, muchos amantes del pintor español pueden encontrar que esta muestra despierta ciertas dosis de falsa expectación y escepticismo. Expectaciones frustradas al no encontrar la influencia entre el malagueño y los pintores ingleses en algunas salas que carecen de un claro hilo conductor. Y sobre todo desesperación, cuando a mitad del recorrido aparece una copia a gran escala del Guernica. El único objetivo de esta copia es rememorar el periplo británico del cuadro y de sus bocetos en 1937, cuando fue exhibida en la galería New Burlington de Mayfair, en la de White Chapel y otras tantas de Oxford, Leeds y Manchester. Porque fue este cuadro, el más emblemático del pintor, el que empezó a sobredimensionar la figura no sólo picasso Aparte de la muestra Picasso y el arte moderno británico que puede ser visitada hasta el próximo 15 de julio, la oferta cultural de la Tate Britain es mucho mayor. Además de otras exposiciones temporales, en su interior esconde una valiosa colección permanente que se compone de arte británico histórico, así como obras contemporáneas. Podemos encontrar salas dedicadas a un solo artista, como es el caso de Tracey Emin, John Latham, Douglas Gordon, Sam Taylor-Wood o Marcus Gheeraerts II. También es sede de la exhibición del (casi) siempre polémico Premio Turner, que muestra las obras de cuatro artistas menores de 50 años. www.tate.org.ukbritain El gran David Hockney Menos mal que está él para quitar el mal sabor de boca. En su condición del mejor artista británico vivo –después de la muerte del Lucien Freud en julio del año pasado–, Hockney se encarga de desempolvar la importancia del cubismo en las artes británicas. Una de las piezas que mejor resume la muestra es un grabado que hizo en el año 1973. El español (quien había muerto un año antes) aparece dibujado vistiendo una de sus características camisetas a rayas marineras, frente a la desnudez del pintor británico que sólo lleva puestas las gafas. El nexo entre ambos artistas se remonta a una donación que el padre de David Hockney realizó en una de las primeras exposiciones de Pablo Picasso en Londres para recaudar fondos para el ejército republicano. Su hijo sólo pudo conocerlo a través de sus pinturas. Aunque esta relación póstuma entre Picasso y Hockney fue la más prolífica y sincera. En 1960, la Tate Modern inauguraba una de las mayores exposiciones de Picasso en Reino Unido, acompañada por series de Delacroix y Velázquez. Hockney, quien visitó esta exhibición ocho veces para estudiar los grabados del malagueño, dejó plasmada la influencia de Picasso en muchas de sus obras, como en el caso de Parade (1980), encargada por el Metropolitan Opera de Nueva York, que captura la esencia de los diseños de ballet pintados por Picasso en 1917. El mismo David Hockney ha reconocido en una reciente entrevista publicada en el periódico inglés Daily Telegraph que las figuras cubistas de Pablo Picasso fueron su fuente de estímulo durante muchas décadas. También que sus obras fueron las que inspiraron sus grabados y le obligaron a superarse, utilizando fotografías para sumergir el arte en el cubismo más fashion. “Es fantástico cuando Pablo Picasso hacía tres cosas al día”, cuenta Hockney, “así podías saber qué había hecho por la mañana, por la tarde y por la noche. Eso te obliga a mirar sus cuadros tres veces; desde el principio hasta al final. Requiere algo de tiempo, pero es una experiencia que nunca aburre”. o riz o n 47 grand hotel the savoy hotel DéCo A LA INGLESA El resplandor de los años treinta y el tradicional estilo victoriano británico cobran vida en este legendario hotel londinense que reabrió sus puertas en 2010. por ana valls 48 ori z o n grand hotel o riz o n 49 grand hotel situada en la quinta planta del hotel, con ocho ventanas dirigidas hacia el Támesis y vistas a Canary Wharf, el London Eye y las Casas del Parlamento. El resto de habitaciones –un total de 268, incluyendo las suites– se caracterizan por ser completamente diferentes entre ellas y por combinar con acierto el estilo inglés más conservador característico del reinado de Eduardo VII, con piezas Art Déco que le otorgan una elegancia y glamour propios de los años del Hollywood dorado. Sin ir más lejos, artistas del celuloide como Katherine Hepburn, Marlene Dietrich o Charlie Chaplin (que solía subir a la azotea del hotel para disfrutar de las vistas) se hospedaron en él en multitud de ocasiones, creando un vínculo que llega hasta nuestros días. Varias de las suites se han personalizado en honor a éstas y otras conocidas figuras como Frank Sinatra, Churchill o María Callas; retratos de The Beatles, Bob Dylan o Marilyn Monroe, durante sus estancias, cuelgan también de muchas de las paredes del hotel. Winston Churchill convirtió The Savoy en su segundo hogar y en el centro de operaciones de The Other Club, un club de caballeros fundado en 1911 y frecuentado por hombres de estado y militares, que se reunían allí para discutir sobre política, alejados de las curiosas miradas del Parlamento británico. El busto del ex Primer Ministro comparte vitrina con otros curiosos objetos en el museo del hotel, que atestiguan la longevidad y trascendencia de este centenario establecimiento; como las hojas de registro que Coco Chanel firmó en su estancia en The Savoy, en mayo de 1924. Fundado por el mecenas y empresario inglés Richard D’Oyly Carte en 1889, el exclusivo hotel erigido junto al Savoy Theatre y cercano a Covent Garden y el West End, se ha convertido en toda una institución del buen gusto inglés al más puro estilo eduardiano. La entrada del hotel, flanqueada por flamantes Rolls Royce modelo Phantom –y un par de Aston Martins– transporta al visitante a la década de los treinta, unida a una estética Art Déco que recuerda inevitablemente al interior de edificios como el Chrysler o el Empire State Building. En el lobby, decorado con suelos de mármol en damero blanco y negro y piezas de maderas nobles, convergen por igual acaudalados huéspedes –que pueden pagar un precio de partida de 350 libras por noche–, así como curiosos, que no pierden la oportunidad de echar un vistazo al interior de esta joya hotelera. El pasado 2010, tras tres años de intensas reformas y con una inversión que superó los 200 millones de libras, volvieron a abrirse las puertas del hotel en un acto que contó con la presencia del actual propietario, el multimillonario príncipe saudí Al-Waleel Bin Talal, que seguro se hospedó en la Royal Suite (10.000 libras por noche), una colosal habitación de 325 metros cuadrados, 50 o ri zo n Dónde The Savoy Hotel se encuentra situado en 189 Strand, cerca de las estaciones de Charing Cross y Covent Garden y del West End. www.fairmont.com/savoy De compras Savoy Tea, la tienda del hotel localizada junto al gran salón Thames Foyer, ofrece todo tipo de infusiones, pastas, dulces y mermeladas, además de objetos procedentes de la Savoy Collection, como colecciones de platos, vasos, teteras y cubertería de plata. Tarifas Los precios por una habitación doble comienzan en 350 ₤. La ceremonia del té La amplia oferta de restauración ofrecida en The Savoy lo ha convertido en punto de encuentro de las clases pudientes londinenses. En el mismo corazón del edificio se encuentra el Thames Foyer, un delicado salón con un cenador acristalado en el centro, destinado a albergar a un pianista que ameniza las tardes a todos los que se acercan para saborear un tradicional té inglés (hay que reservar mesa con al menos dos meses de antelación). Extensas familias de origen árabe, parejas celebrando su aniversario o grupos de mujeres con notable poder adquisitivo son los clientes más frecuentes de esta sala, con un marcado carácter femenino. Las comidas y cenas en The Savoy se reparten entre el Savoy Grill, comandado por el chef británico Gordon Ramsay, que ha reinventado la tradicional comida de pub dándole un toque mucho más sofisticado de acuerdo a la clientela y el River Restaurant, que ofrece una delicada carta de aire francés, además de unas imponentes vistas del Támesis. La happy hour se celebra cada día en el American Bar, nombrado recientemente Mejor Bar de Hotel en los Cocktail Spirited Awards. El lugar evoca la edad de oro de los cócteles, allá por los años veinte, con una decoración en azul eléctrico y dorado y unos preparados de origen claramente americano, procedentes de The Savory Cocktail Book, la biblia de los bartenders creada por Harry Craddock. El jazz y un constante murmullo acompañan a una clientela compuesta en su mayor parte por hombres y mujeres de negocios que disfrutan de una copa afterwork. Tras la caída del sol, Beaufort Bar enciende sus tenues luces para ofrecer el mejor champán (pueden encontrarse variedades vintage de Louis Roederer), así como espectáculos de cabaret y burlesque. Sin duda el lugar idóneo para toparse con rostros conocidos y rememorar la edad de oro de The Savoy, un auténtico tesoro arquitectónico escondido en pleno corazón de Londres. grand hotel o riz o n 51 Suscripciones: [email protected] ó 902542045 54 hace 15 años con el Gug- Frank Gehry abrió la veda genheim, pero han participado otros muchos arquitectos en la metamorfosis de la ciudad. portada 60 Fernández, la directora Charlamos con Lourdes del centro cultural y de ocio Alhóndiga Bilbao, el último gran espacio recuperado. 64 una generación de jóvenes 70 fundador de la agencia Sra Eneko Atxa forma parte de cocineros vascos que están revolucionando el recetario tradicional. Miguel García Vizcaíno, Rushmore, nos comenta qué le parece que el Festival El Sol estrene sede en Bilbao. bilbao, 15 años en vanguardia Nuevos edificios de los gurús de la arquitectura, una oferta cultural sólida y consolidada y una gastronomía que no deja de reinventarse son los ingredientes principales que han hecho que la capital vizcaína sea actualmente el modelo urbano admirado por todos. o riz o n 53 portada Efecto Guggenheim Su construcción supuso el pistoletazo de salida de una carrera hacia la modernidad en la que Bilbao dejaba atrás su pasado gris e industrial para convertirse en ejemplo de vanguardia gracias a su arquitectura, su gastronomía y su oferta cultural. PO R unai elorriag a 54 ori z o n bilbao Vista nocturna del Museo Guggenheim, construido hace quince años por el arquitecto Frank Gehry. oriz o n 55 portada Bilbao, lo sabe hasta la última hormiga, 56 o ri z o n después se convertiría en museo y en uno de los iconos no sólo de Bilbao sino, en ciertos sectores, de gran parte del mundo. Desde la ventana de la Universidad, por tanto, vimos el día a día de la construcción del museo Guggenheim… Bilbao en el mapa con muchas tablas No todos los edificios que forman parte activa de la vida del nuevo Bilbao son construcciones recientes. Un buen ejemplo es el Teatro Arriaga (en la imagen), uno de los núcleos culturales más importantes de la ciudad que fue construido a finales del siglo XIX por el arquitecto Joaquín de Rucoba. Su nombre es un homenaje al compositor bilbaino Juan Crisóstomo de Arriaga, a quien se le ha llegado a denominar como el Mozart español. A lo largo de sus más de cien años de historia, este edificio neobarroco ha tenido que ser restaurado en varias ocasiones, tras sufrir calamidades como el incendio que lo asoló en 1914 o las lluvias torrenciales que lo inundaron en el año 1983. Actualmente, el Teatro Arriaga se mantiene en plena forma, ofreciendo a los ciudadanos una completa y variada programación. www.teatroarriaga.com No fue breve la polémica que envolvió su construcción. Para unos era una especie de colonialismo cultural, un modelo que iba a dejar de lado la cultura propia; para otros situaría a Bilbao en el mapa cultural. Es posible que ambas opiniones sean ciertas, quizá necesitemos otros quince años, o cien más, para calibrar su alcance, pero hace una semana, en Roma, antes de dirigirme a una conferencia que debía de dictar en el barrio universitario de la ciudad, entré en una librería, y en un atlas infantil, uno de esos en los que aparecen dibujados los símbolos más conocidos en cada lugar del mundo (la Estatua de la Libertad en Nueva York, un canguro en Australia), solamente aparecían tres dibujos en toda la península ibérica, incluido, por supuesto, Portugal: La Alhambra, La Sagrada Familia de Gaudí y el museo Guggenheim. Nada se puede concluir de esta insulsa anécdota, pero es evidente que el mundo da tumbos en ciertas ocasiones. La cuestión es que a alguien de esta ciudad llamada Bilbao otro le propone: “Vamos a construir uno de los edificios más extraños del mundo en el centro de la ciudad”. Los administradores de esa época para qué quieren más; encantados de que algo de Bilbao sea lo más lo que sea del mundo. Todo ello recuerda la célebre anécdota de un grupo de bilbaínos que en las postrimerías de la Primera Guerra Mundial, en un ambiente de excesos y opulencia, viajaron a Donostia para ver un partido del Athletic contra el equipo local. El conjunto de Bilbao obtuvo una contundente victoria, y los aficionados, sin reparar en gastos, entraron en un conocido restaurante para no salir sin haberse llevado al estómago una de las cenas más suculentas en varios años. Después de haber engullido infinidad de platos, los clientes pidieron agua de Bilbao; los camareros contestaron que no había, que lo sentían, que tenían otras aguas, otras marcas. Entre risas, sin embargo, aquellos personajes explicaron que en Bilbao el champán se bebe como agua y que es por eso por lo que lo llamaban agua de Bilbao. Bebieron, pues, todo el champán que les sirvieron, o que pudieron, y a la hora de pagar se percataron de que no estaba incluido en la cuenta. Preguntaron y los dueños les devolvieron el tiro: “En nuestra casa el agua no se cobra”. Tiempo después, no podía ser de otra manera, se comercializó el agua de Bilbao con el lema: “Agua fría que calienta”. Y así es como, poco a poco, Bilbao fue dando un giro radical, con pequeñas obras, adecentando calles, fachadas, parques, pero también con cons- foto (doble página anterior): Erika Ede. ©FMGB, Guggenheim Bilbao Museoa, Bilbao, 2012. no siempre ha sido como es ahora; se podría decir incluso que nunca ha sido lo que está consiguiendo ser ahora, lo que sale en las guías, en las revistas especializadas, en los folletos que colocan en los asientos de los aviones, folletos que acostumbramos a atrapar cuando más nos tiembla el pulso, al despegar, con turbulencias, a diez mil pies. De pequeños, por ejemplo, en los setenta, reconozcámoslo de una vez, nos daba miedo ir a Bilbao. Creo coincidir con la mayoría de los niños de aquella época que, desde cualquier pueblo de Bizkaia, tomábamos el tren, o el autobús, algunos incluso aquel extraño invento llamado trolebús; ese primer paso lo hacíamos medianamente contentos, a pesar de que, en nuestro caso al menos, el tren tardaba más de una hora en recorrer los diecisiete kilómetros. Pero al llegar a Bilbao, los ojos se nos empezaban a derretir, todo empezaba a ser gris, de un gris desconocido, marrón, de un marrón extraño, fábricas, humo… Nuestro único objetivo era acabar lo antes posible lo que habíamos ido a hacer y volver a casa. Lo que habíamos ido a hacer muchas veces se llamaba médico o, lo que es peor, dentista, y eso también contribuiría a aquel estado de ánimo. Pero lo cierto es que lo oscuro de Bilbao en los años setenta y primeros ochenta hacía poco atractiva la ciudad para un niño. Después llegó la época en la que nos dirigíamos a Bilbao, principalmente, a sentarnos en las localidades de San Mamés, en la mayoría de los partidos del Athletic. También era, para mis catorce años, un poco siniestro: cruzábamos en gasolino la ría, llena de suciedad y desperdicios, nada que ver con la de ahora, de ese marrón extraño, y llegábamos a unas callejuelas desconchadas antes de arribar al campo de fútbol. Pero fueron los años de los últimos grandes triunfos, de las dos Ligas, de alguna final de Copa, e ir a Bilbao nos costaba un poco menos. Vivimos ahora una especie de retorno en ese aspecto; es decir, todo el que se acerque durante estos meses a Bilbao, podrá recordar aquellos años ochenta, de euforia deportiva, todos los balcones decorados con banderas del equipo; si atendemos a lo que dicen los que últimamente nos están visitando, parece que es complicado conocer otra ciudad en el mundo con tal identificación. Y aún no ha sucedido nada: estamos a la espera de jugar una final (la Copa del Rey) y de llegar a otra (el equipo está en semifinales de la Europa League). Entonces llegó el momento en el que nos tocó, a muchos, tomar el tren hacia Bilbao todos los días para asistir a las clases de la Universidad de Deusto. Ahí comenzó algo que para nosotros no significaba demasiado entonces, pero que años después tomó una relevancia insospechada: justo enfrente de la ventana de nuestra aula comenzaron a levantar una enorme estructura que años bilbao La Torre Iberdrola, el edificio más alto de Bilbao, de 165 metros de altura, construido por el argentino César Pelli. o riz o n 57 portada En el sentido de las agujas del reloj: la escultura de Oteiza con el Ayuntamiento de Bilbao al fondo; el interior del Auditorium del Palacio Euskalduna y el polémico puente Zubizuri (Puente Blanco), obra de Santiago Calatrava. 58 ori zo n bilbao nombrado todos ni mucho menos, y para que esto deje de parecerse a una especie de guía para principiantes de nueva arquitectura bilbaína, solamente nombraremos uno más, el más reciente: el edificio más alto de Bilbao, de 165 metros de altura, construido por el argentino César Pelli y conocido como Torre Iberdrola. trucciones de mucho más calado. Así nació el Palacio Euskalduna, donde antes, durante muchos años, con diferentes denominaciones, habían estado situados los astilleros, símbolo durante los años ochenta principalmente de la lucha obrera que envolvió la llamada desindustrialización del entorno. Hoy en día es un peculiar edificio donde se realizan múltiples actividades de carácter económico, social o cultural; es allí, por ejemplo, donde se desarrolla la temporada de ópera. La nueva cocina vasca Catálogo de Premios Pritzker Es en ese ambiente de grandes estructuras y ambiciosos proyectos en el que Bilbao comienza a convocar a otros grandes nombres de la arquitectura, y de ese modo une, en un espacio relativamente escaso, a dos potencias mundiales: Santiago Calatrava y Arata Isozaki. El primero realizó una pasarela peatonal llamada Zubizuri (Puente Blanco) que no ha dejado de ser polémica desde su inauguración, ya que debido a su superficie de cristal, se produjeron varios accidentes, siempre con tiempo lluvioso; la cuestión es que todo el que visite Bilbao en cualquier época de año, caerá en la cuenta de que la lluvia rara vez se ausenta de estos parajes. Isozaki, por su parte, construyó sus torres en una de las márgenes que unía el puente Zubizuri, y para comunicar ambas estructuras, hubo que realizar una leve modificación en la obra de Calatrava; éste denunció al Ayuntamiento de Bilbao por violar parte de la propiedad intelectual, pero lo cierto es que, compensaciones económicas aparte, Isozaki y Calatrava, por medio de sus respectivas obras, juegan todas las mañanas al mus en el centro de Bilbao… Mano a mano, eso sí; no encuentran otra pareja que les haga frente, aún. Norman Foster, por otro lado, fue elegido para diseñar el metro de Bilbao; un metro que, comparado con los de otras ciudades cercanas, es, según se oye a ciertas malas lenguas, demasiado alto, demasiado limpio, demasiado impersonal… Pero, como no podía ser de otra manera, diferente. Además, a pesar de ser un proyecto que corre a través de los sótanos de nuestras ciudades y municipios, ha dejado en el paisaje urbano algo que ya, en tan pocos años, se ha convertido en poco menos que clásico: las originales bocas de metro, llamadas popularmente fosteritos en honor al arquitecto. Tampoco hay que olvidar la recuperación de espacios característicos del centro. La famosa Alhóndiga, un antiguo almacén de vino, construido entre 1905 y 1909, siguiendo las órdenes de un joven Ricardo Bastida, fue remodelado hace pocos años por Philippe Starck, convirtiéndolo así en un peculiar espacio abierto a visitantes. Para finalizar con los proyectos que durante estos últimos años han inventado un nuevo escenario para Bilbao, a pesar de que no hemos los fosteritos Así se llaman popularmente a los accesos al metro de Bilbao (en la imagen), obra de Norman Foster. Su construcción tardó en llegar, pero la espera mereció la pena. De hecho, la intención de construirlo data de 1922, aunque –por múltiples circunstancias– no sería hasta el año 1987 cuando el Gobierno Vasco aprobó finalmente el plan para realizar y financiar el proyecto. Se convocó entonces un concurso internacional para su diseño y el ganador fue el célebre arquitecto inglés, quien ideó un arriesgado y sofisticado modelo –por el que recibió el premio Veronica Rudge Green Prize de la Universidad de Harvard–, en la línea del nuevo concepto urbanístico que se estaba empezando a fraguar por aquel entonces. Hoy en día constituye un icono más del nuevo Bilbao y el propio Foster ha declarado que “tuvo algo de visionario”. www.metrobilbao.net Pero existen en Bilbao otras construcciones más perecederas y, ante todo, más suculentas: aquellas que se edifican con pimientos, anchoas o merluza. La gastronomía es, como todo el mundo intuye, otra de las columnas vertebrales del nuevo Bilbao. A diferencia de la mayoría de las ciudades europeas, con dignísimas excepciones, prácticamente en cualquier establecimiento hostelero quedará el comensal más que medianamente bien atendido. Existe una anécdota, bien puede ser real o no, que ilustra esa relación de los bilbaínos, y probablemente todos los vascos, con pucheros, sartenes y demás mobiliario culinario. Cuentan que en 1835, un comerciante dedicado a la importación de bacalao pidió por carta que le mandasen “100 o 120 bacaladas” de la mejor calidad. Aquellos que recibieron el mensaje interpretaron mal las cifras al confundir la conjunción “o” con otro cero; así pues, enviaron a Bilbao 1.000.120 bacaladas. Parece ser que la capital estaba por aquel entonces sitiada por las tropas carlistas que no dejaban entrar alimentos. En consecuencia, el bacalao se convirtió en prácticamente lo único que llevarse a la boca. Es probable que muchas de las recetas que conocemos hoy tengan su origen en el desesperado intento de las madres porque los hijos no sospecharan que llevaban días y días comiendo lo mismo. Pero hoy los cocineros que habitan las calles y restaurantes de Bilbao saben que la gastronomía no puede quedar en manos del azar o de las necesidades de cada momento, y construyen laboratorios en sus cocinas, o detrás de ellas, o en los sótanos, y ahí crean lo que otros en estudios, teatros o talleres, y sitúan a Bilbao –también– en el mapa gastronómico. Con todo, es un hecho que hoy, 2012, año olímpico, ningún niño de los municipios que rodean a Bilbao, niños de Algorta, de Sondika, de Gernika, de Durango, de Igorre… siente el miedo que sentíamos nosotros cuando, después de hora u hora y media de viaje, llegábamos a esas calles grises, de un gris desconocido, marrones, de un marrón extraño… Es más, muchos padres hoy planifican excursiones a la capital, de la misma manera que antes nos llevaban al monte, sobre todo en los días lluviosos y, evitando siempre Zubizuri, llevan a sus hijos a la biblioteca de la Alhóndiga, a algún festejo en el Arenal o a pasear por los salones del Museo de Bellas Artes o el Guggenheim. oriz o n 59 portada “Bilbao sortea la situación actual de crisis con agilidad y esta circunstancia la posiciona en un puesto de vanguardia incluso en estos momentos tan complicados” 60 ori zo n entrevista ALHÓNDIGA FUTURISTA El viejo almacén de vinos se ha convertido en un poderoso centro cultural en la vida bilbaína. Su directora, lourdes fernández, analiza los ingredientes culturales de una ciudad que está enamorando al mundo. La nueva perla bilbaína, que se suma a la larga lista de edificios y centros con actividad cultural es La Alhóndiga, un viejo edificio industrial modernizado por el prestigioso diseñador francés Philippe Starck. Al frente de la institución está Lourdes Fernández, una mujer que ha pasado por la dirección de ARCO (la feria de arte contemporáneo más poderosa de España) y que cuenta con un extenso historial en programción de galerías privadas y eventos públicos. Con Lourdes hablamos del enorme reto que supone llenar de ideas y contenidos culturales esos flamantes y modernos edificios que, sin ellas, quedarían huérfanos. El llamado Efecto Guggenheim además de situar a Bilbao en el mapa de la Modernidad ha ejercido un efecto multiplicador para la cultura. ¿Cómo podría definir estos quince años de actividad? Evidentemente, Bilbao se ha situado gracias al Guggenheim en el mapa de la Modernidad. La profunda e innovadora transformación urbanística de la ciudad, que comenzó con el metro de Norman Foster y culminó recientemente con la Torre Iberdrola de César Pelli, ha contado además con edificios singulares de la mayoría de los arquitectos de prestigio internacional: Edificio de viviendas de Isozaki, Puente y Aeropuerto de Calatrava, Biblioteca de Deusto de Rafael Moneo, Auditorio de la Universidad País Vasco de Álvaro Siza, la Alhóndiga de Philippe Starck, y un larguísimo etcétera.También ha supuesto para la ciudad un cambio económico, cuyos contenidos son ahora el gran reto y la prioridad en el trabajo y el diseño de la actividad ciudadana. La sociedad no sólo bilbaína, sino vasca en general, ha presenciado este cambio con gran admiración, y se ha esforzado por adaptarse a la nueva situación, con una gran capacidad emprendedora cuyos frutos se irán viendo a partir de ahora. De hecho, Bilbao es una capital que sortea la situación actual de crisis con agilidad y esta circunstancia la posiciona en un puesto de vanguardia, incluso en estos momentos tan complicados. Suponemos que su paso por una feria tan importante como ARCO le habrá otorgado una gran experiencia en el conocimiento del mercado, pero también en los riesgos que entraña la mercantilización de la cultura. ¿Cuál es su posición en dicho juego de equilibrios? El mercado del arte se mueve por parámetros muy diferentes a los que habitualmente maneja el resto de la cultura. La industria del cine, la industria del libro u otras ¿Qué es la Alhóndiga? ¿Un centro cultural más o una iniciativa con sello propio? La Alhóndiga es un centro de ocio y cultura, ya que los espacios del edificio se distribuyen en áreas que abarcan desde la actividad física hasta la cultura más exigente. Precisamente, dotarla de un sello propio es nuestro principal reto en estos momentos. Una vez puesta en marcha, salvados los primeros meses, estamos trabajando para que su personalidad la diferencie de otras infraestructuras y consiga ser un claro referente en la ciudad de Bilbao, en una red internacional pluridisciplinar. ¿Busca usted una transversalidad en la actividad de su centro o eso que muchos críticos engloban en la llamada sociedad del espectáculo? Por supuesto que buscamos una transversalidad. Es la manera de trabajar en nuestra era, si no, de poco sirve a la ciudadanía. Ello no impide que ciertas actuaciones o ciertos proyectos vayan acompañados de acciones más espectaculares. El desarrollo de estas actividades intentarán marcar también la posible asimilación por parte del público, tanto del habitual como del ocasional. “No toda la cultura puede ni debe ser subvencionada, sino que debe generar cierta economía. En Bilbao esta resulta ya muy significativa” industrias culturales están enraizadas en una mercantilización necesaria y obviada por los ciudadanos. El arte tiene un plus en el mercado, marcado fundamentalmente por las casas de subastas y por su carácter de inversión, que el resto de las industrias culturales no poseen. Por ello, es difícil hablar de mercantilización de la cultura en términos globales. Creo firmemente que el equilibrio es posible. No toda la cultura puede ni debe ser subvencionada, sino que debe generar una cierta economía. El avance que en ese sentido se está realizando para potenciar la economía creativa en una ciudad como Bilbao es muy significativo y es realmente el futuro de la posibilidad de permanencia de ciertas prácticas artísticas. ¿En este mundo dominado por las redes sociales, un centro cultural debe ser el lugar para el debate y la participación o una especie de temporada de ópera para gente que no participa en la elaboración del programa? En línea con la pregunta anterior, este centro debe ser un lugar de encuentro, de debate y de trabajo participativo y comunitario. De hecho uno de nuestros grandes retos va a ser la captación de agentes que trabajan en la ciudad en los distintos ámbitos a los que nos vamos a dedicar –arte, tecnología, diseño y ciencia– para que sean ellos mismos y sus colectivos u organizaciones los que puedan tener voz. Trabajao riz o n 61 portada El edificio del centro de ocio y cultura la Alhóndiga, en Bilbao, obra de Philippe Starck. 62 o ri z o n entrevista remos conjuntamente. Esa voz tiene que ser siempre exigente y nuestra labor es permitir que la excelencia y el buen hacer sean los protagonistas en un programa que debe estar formado tanto por actividades de producción propia como por propuestas externas a la organización. ¿Cuál es el apoyo de las instituciones municipales en este caso en concreto? ¿Se trata de un compromiso duradero, a largo plazo? El apoyo es absoluto, duradero y a largo plazo. La Alhóndiga es un proyecto cien por cien municipal en el que el Ayuntamiento de Bilbao ha realizado una apuesta desde hace tiempo por regentar un lugar de cultura para la ciudad y sus visitantes. Es una gran inversión para un buen servicio al ciudadano. Vivir y hacer cultura en una ciudad que es un catálogo de premios Pritzker puede entrañar sus riesgos… ¿Cuál es la mezcla entre lo local (la cultura vasca, digamos) y la ya consabida tradición internacional? La ciudad, como he afirmado en la primera pregunta, es evidentemente un catálogo de premios Pritker y supone su gran activo y atractivo. Este hecho atrae a un tipo de personas diferentes y crea entre los ciudadanos una serie de demandas y exigencias también diferentes y de alto nivel. Más que un riesgo es una gran ventaja para los que trabajamos en cultura. El reto es mayor y la capacidad para dar respuesta a esa exigencia debe ser, por lo tanto, del mismo nivel. La cultura vasca es muy rica en sus contenidos. Tanto en el arte como en la música o en la literatura existen grandes creadores que tienen ya un reconocido prestigio internacional. Lo local, en esta sociedad globalizada, tiene mayor cabida y es más accesible a un nivel internacional de lo que había sido anteriormente. El desarrollo del carácter internacional pasa por un encuentro con la cultura local que enriquece a ambas partes. Más que una mezcla es una fusión y un poder hacer común. Los objetivos, como he dicho, son claros: arte, tecnología y diseño. Además de ciencia y conocimiento. La Alhóndiga debe ayudar a formar a las personas en estos ámbitos, a producir con creadores de estas disciplinas y a difundir internacionalmente los resultados. Sin formación, producción y difusión no conseguiremos un centro que apoye la cultura de la ciudad y que a su vez la sitúe en el mundo. Bilbao parece atraer a un viajero de gran estilo de vida basándose en sus museos, sus instalaciones hoteleras y su oferta gastronómica. La ciudad puede ser una meta para un turismo de calidad, ¿qué pasos estratégicos se están dando en esta dirección? Esta pregunta debería responderla el máximo responsable de Bilbao Ekintza, una sociedad municipal que, de la mano del Alcalde, promueve una estrategia en la que estamos también involucrados nosotros como Alhóndiga. Esta estrategia está basada en tres ejes fundamentales: el arte y la tecnología; las soluciones urbanas y la Bilbao comparte honores este número de Orizon con la Londres olímpica. Son dos ciudades unidas por una tradición muy industrial y tienen muchas características en común. Pese a las diferencias de población, ¿podemos hablar ya de una ciudad Premium, de una ciudad que compite en las grandes ligas internacionales o todavía falta mucho camino que recorrer para eso? Claro que se puede hablar perfectamente de una ciudad Premium, sin detrimento de los esfuerzos que todavía se deben hacer en materia de contenidos y en los ejes estratégicos citados anteriormente. Claro que la escala es importante y no puede ser comparable a una ciudad como Londres... Por último, ¿cuáles son sus recomendaciones para el viajero que visite por primera vez la ciudad? ¿Puede proponerle un itinerario de 36 horas? Un formato que nos gusta mucho en nuestra publicación, de hecho hay una sección que se llama así… Sin duda un paseo por la ría desde el otro lado del Guggenheim, en tranvía o en barco da una imagen perfecta de la gran transformación urbana que ha experimentado la ciudad. Ir al Casco Antiguo a tomar unos pintxos por supuesto, y visitar el Museo de Bellas Artes de Bilbao, que tiene una gran colección que a veces está más en la sombra de lo que se merece… También visitar la Alhóndiga, consultar su programación y la del Teatro Arriaga o Euskalduna, que siempre tienen espectáculos de calidad. Comería y cenaría en diferentes restaurantes, aunque me compromete citarlos: Sin duda en Yandiola (AlhóndigaBilbao) o La Viña de la calle Henao; el Baskcook, el Trueba e incluso iría a Larrabetzu a disfrutar de las delicias de Eneko Atxa. Dormiría en el Hotel Domine pidiendo habitación con vistas al Guggenheim (que obviamente habría visitado antes), y desayunaría en Panko, cerca de la Gran Vía con sus deliciosos panes. –ramón reboiras “La Alhóndiga debe ayudar a formar a las personas, a producir con creadores de distintas disciplinas y a difundir internacionalmente los resultados” ¿Qué puede hacer La Alhóndiga por Bilbao? ¿Cuáles son los objetivos de su programación? ¿Sobre qué ejes gira la importancia de un centro periférico en España pero dotado de buen presupuesto? gastronomía, el turismo y la salud. Todo ello está impulsando una serie de actividades que permitirán (y están permitiendo ya) situar a Bilbao en la meta del turismo de calidad y del turismo cultural. ¿Tantos Starck, Calatrava, Gehry, no pueden ser en cierto modo enemigos, contenedores vacíos, si no se acompañan de una programación coherente? Efectivamente. Pero por ello cada uno tiene su contenido muy preciso: nadie duda de la calidad del Guggenheim en su programa, aunque sea el edificio lo que haya causado el mayor impacto. Lo mismo ocurre con el resto de construcciones. En el caso de la Alhóndiga, además de las actividades y la personalidad propia que estamos poniendo en marcha, se trata de un lugar de usuarios, que cuenta con un promedio de visitas altísimo debido a su multidisciplinaridad. Para más información puedes consultar la página web de la AlhondigaBilbao, donde encontrarás toda la programación cultural para los siguientes meses. www.alhondigabilbao.com AlhóndigaBilbao se encuentra en uno de los edificios más representativos de la ciudad, en el viejo almacén de vino de estilo modernista, que ha sido reformado por el diseñador industrial Philippe Starck. oriz o n 63 portada La cantera vasca Han aprendido de los más grandes, pero ahora les toca a ellos. Charlamos con Eneko Atxa, representante de esta nueva generación de cocineros vascos. POR cris tina b isb al 64 o ri zo n gastro Eneko Atxa (derecha) y uno de sus ayudantes trabajando en la cocina de su restaurante Azurmendi. o riz o n 65 portada Eneko Atxa no es tan joven. Nosotros creemos que sí, pero él no lo percibe de esa manera. La culpa, seguramente, será nuestra, con esa manía enfermiza por etiquetarlo, por acotarlo todo y soltar una coletilla tipo: Nueva generación de cocineros vizcaínos, o vascos, o vaya usted a saber de dónde. “Hombre, yo agradezco que la prensa me llame joven, yo me veo ya en una edad adulta y con kilómetros hechos y espero que me queden muchísimos más. Pero bueno, sí, somos una generación que ha venido después de los Adúriz, Berasategui, Arzak… sí, es así”, nos comenta Eneko. Las cosas de la edad son relativas, en efecto. Eneko Atxa nació en Bilbao hace 34 años (¿no creen que es joven?), pero enseguida le trasladaron la cuna a Amorebieta, lugar en el que siempre ha vivido y trabajado. Sus primeros balbuceos con las cosas del comer empezaron muy temprano: “Siempre digo que en mi casa, el centro neurálgico del hogar estaba en la cocina, era el punto de encuentro para toda la familia, y eran siempre experiencias placenteras, y no sólo por la gastronomía, que era el hilo conductor de la mesa, sino porque en torno a ella había experiencias de aprendizaje importantes. Cuando las personas mayores iban hablando, charlando, escucharlas siempre ha sido un placer para mí”. De su madre y de su abuela no aprendió a cocinar, pero sí a disfrutar de la comida, de cenar en tertulia, de estar alrededor de una mesa. Nos podemos imaginar a un barbilampiño Eneko correteando un domingo por la mañana por los alrededores del caserío en el que vivía, el día anda fresco y algo nublado. De repente se para, unos aromas le engatusan hacia la cocina. Aún recuerda (y prepara) esos platos que Tere (su madre) y Serafina (su abuela) hervían a fuego lento: “Pues son tópicos típicos diría yo, porque son los que hacen en casi todas las casas: las croquetas, unas almejas que hacía mi madre los domingos (y que sigue haciendo), hay tantos y tantos que hacía mi abuela, como el moroquil”. ¿El moroquil, qué es eso? “Pues es de sus tiempos, de cuando había mucha necesidad y bastante hambre, con harina de maíz y leche de caserío hacían una especie de plastón para comer… También hacía los talos. La oferta gastronómica de mi casa siempre giraba entorno a los productos del caserío. En la época de alubias pues me hacían unas alubias increíbles los sábados. Y los domingos sopa de garbanzos y carne con tomate. No olvidaré nunca cuando traían la leche de caserío del Múgica, del pueblo de mi abuela, hay tantas cosas que son recuerdos imborrables...”. Aquí ya comenzamos a vislumbrar alguna de las esencias del recetario de Azurmendi (en Larrabezúa, Vizcaya), el restaurante de Eneko Atxa, del que cuelgan dos estrellas Michelin. Productos de temporada, cercanía, cocina del kilómetro cero que la llaman, de proximidad, capturarles el alma y llevarla al plato, la herencia culinaria, las tradiciones. 66 ori z o n “Somos muy afortunados porque tenemos el Golfo de Vizcaya, los prados, las montañas, todos los productos habidos y por haber que nos da el campo, y luego ese clima tan particular que es excelente. Y la manera de comer; habría que irse casi a épocas muy antiguas, mejor que lo explique un antropólogo. También la situación que se ha vivido aquí, desde las épocas de mi abuela con las hambrunas... ¡Ellas sí eran revolucionarias! Fíjate con qué pocos productos qué maravilla de recetas hacían. Desde las purrusaldas, hasta un marmitako de los pescadores, el talo, el moroquil… El hambre agudiza el ingenio. Es cierto, yo lo pienso siempre, y lo digo. Ahora hablan mucho de que nosotros estamos revolucionando la nueva gastronomía vasca, pero nosotros sólo estamos dando un paso más… Es algo casi genético, es la evolución humana. Siempre tengo un punto de inflexión ahí, que es algo que yo he palpado y he vivido, y es la generación de mi abuela. Éstas fueron una revolucionarias porque tenían tanta necesidad, que consiguieron hacer muchísimo con nada. Y eso no lo debemos olvidar”. Sus primeros pasos moderno y ecológico Lo más sorprendente (y nuevo) del reino de Eneko Atxa es el Azurmendi gastronómico, una construcción sostenible y bioclimática pionera en el aprovechamiento energético, concebido por la arquitecta Naia Eguino (que ya intervino en el primer Azurmendi). Como nos cuenta Naia,“hemos tratado que sea un edificio que se mimetice con la naturaleza, la vegetación forma parte de su funcionamiento y por eso todo es muy natural, reciclable, incluso los forjados son de madera de la zona, piedra y con alto componente de reciclados”. Esta especie de cubo alberga un invernadero y un voladizo donde se ubica la cocina y el comedor. Pero aún hay más: la cubierta (un depósito con una lámina de diez centímetros de agua) se utiliza para la plantación de huertas y plantas aromáticas, además de un atrio con un jardín interior diseñado por el paisajista Íñigo Segurola. Otro detalle sostenible: aprovechan la temperatura de la tierra para el agua caliente del suelo radiante… y también dispone de puntos de recarga para vehículos eléctricos. Pero volvamos a un jovencísimo Eneko Atxa. Tiene 16 años. Acaba de terminar el primer ciclo del instituto y llega el momento de decidir qué hacer en la vida, qué rumbo tomar. O una carrera universitaria convencional o buscar otros caminos. Él optó por lo segundo y enfiló hacia una escuela de hostelería. “De una manera muy inocente pensaba que eso de cocinar debía ser algo muy divertido, placentero, siempre he sentido esa atracción por poder transformar al final los alimentos hasta un punto en que los ingerimos a modo de placer. Empecé tontamente, me fui enganchando y vi que era un mundo por descubrir y que había cosas que aprender todos lo días –y sigo pensando lo mismo– y hasta hoy”. En la Escuela de Hostelería aprendió lo que se aprende en una Escuela de Hostelería: se coge un producto y se preelabora (picar, cortar y demás), luego se manipula y se le somete a todos esos procesos químicos que corretean en una cocina; más tarde se da forma a los platos, “luego aprendes el recetario tradicional y ves que hay otros campos… y hoy en día sigo con la misma ilusión de aprender de antes”. A los 18 años terminó los estudios gastronómicos y, como suelen hacer la mayoría de los aprendices de cocinero, se paseó por las cocinas de algunos de los mejores chefs españoles, esa diáspora obligada y necesaria. Pulió sus artes a las órdenes de, por ejemplo, Adrià, Arzak, Berasategui… “Tengo 34 años, empecé con 16, terminé la escuela con 18 y luego uno se va formando en la vida laboral, de un sitio a otro… He trabajado con muchos, pero no me suele gustar decir nombres, de todos he aprendido y sería injusto recordar sólo a uno. Para nosotros es imprescindible moverte de un lado a otro, conocer distintas maneras de tra- gastro El elegante y sofisticado comedor del restaurante Azurmendi, en Larrabezúa (Vizcaya). o riz o n 67 portada Pichón con los aromas del bosque, uno de los platos que elabora Eneko Atxa en su restaurante Azurmendi. 68 o ri z o n gastro san cosas y normalmente son cosas bonitas. Hace tiempo, en un diario deportivo, había un pequeño cómic sobre vascos, y decía que eran muy fuertes, que comían muy bien y que todos se dedicaban a ser aizkolaris o levantadores de piedras, y luego ponía debajo: y los que salen un poco tirillas, se dedican a cocinar, que lo hacen muy bien... Y muchas veces me veo reflejado en eso (risas)”. Pero podríamos acotar aún más lo de antes, lo del País Vasco, a fin de cuentas Eneko es de Bilbao, y este número de Orizon está dedicado a esa ciudad. “Hombre, la cocina de Bilbao tiene algo de particular respecto a sus vecinas, tiene ciertas recetas emblemáticas, y yo digo además que tenemos algunos platos que son insuperables, y aquí saco pecho: un bacalao al pil pil y a la vizcaína son para morirse. Y por muchas vueltas que le demos a la nueva cocina y demás, son recetas que ahí quedan porque prácticamente son difíciles de mejorar. Yo he pensado mucho en esto, sobre todo cuando voy al extranjero a hacer una ponencia de alta gastronomía. Estoy por sacarles la receta del bacalao al pil pil y enseñarles cómo hacer la salsa, que tiene un montón de años y que para mí sigue siendo contemporánea, vanguardista y técnicamente una obra de arte. El poder ligar sin ningún otro elemento más que la gelatina, el agua y el aceite, es una barbaridad”. bajar, ver distintos pensamientos de los maestros... Y luego ir haciéndote tus ideas propias, forjando poco a poco tu estilo personal”. El templo Azurmendi Llegó el momento, la decisión: abrir su propio negocio, tirarse al barro, vamos. “Tenía 27 años, y bueno, con mi familia decidimos emprender un proyecto gastronómico. Y ahí me ha tocado… de la necesidad hemos hecho la universidad. Me ha tocado aprender a marchas forzadas. Tengo una ilusión tremenda por el oficio, me encanta, para mí no es un trabajo, es mucho más, es una parte importantísima de mi vida y adoro lo que hago. No supone un esfuerzo, supone un placer, el poder estar todos los días entre pucheros para que la gente se lleve un trocito de satisfacción”. En siete años de andadura con el restaurante Azurmendi sobre sus espaldas, Eneko Atxa ha conseguido –aparte de, como él puntualiza, dar placer a los comensales– dos estrellas Michelin (la última se la concedieron el pasado año). Los galardones que otorga la guía francesa han llegado a ser, para muchos cocineros, un fardo muy duro de llevar (perder alguna ha arruinado a más de uno…). Se llama presión. “Es un placer inmenso, para nosotros fue un empujón, es casi como que te digan que estás haciendo las cosas bien y que eso se percibe por los clientes en el día a día también. Pero bueno, ¿a quién no le hace ilusión una cosa de éstas? Que la presión nos la metemos nosotros todos los días cada vez que atendemos a nuestros clientes, estamos siempre en la excelencia y el placer para ellos, todo tiene que salir perfecto. Vienen buscando una experiencia placentera y nosotros debemos ofrecerles eso”. A Azurmendi se viene a disfrutar (como debería ser en todos los restaurantes), a degustar esas atmósferas que recrean Eneko y su equipo –“recreamos aromas del mar, del bosque, son paisajes comestibles”– mediante, por ejemplo, la tecnología de los ultrasonidos, con la que roban la esencia a la naturaleza. Suena a brujería, pero no. Quién mejor que el propio Eneko para destripar su cocina. “Es una cocina que respeta mucho la herencia culinaria, que está guiada por el entorno y la identidad, pero sin radicalidad, que también está abierta al mundo, a los productos que pueden ser foráneos, pero sobre todo con un alma, con una guía seria que es la identidad y el producto cercano, con muchísimas ganas de innovar y con una única finalidad, la búsqueda eterna del placer, del placer inmenso, en la medida de lo posible para el cliente”. Una pregunta que, casi siempre, surge cuando uno charla con un cocinero del País Vasco es qué tiene de especial esa tierra para germinar tantos excelentes chefs… “Yo creo que más que una sensibilidad especial es parte de nuestra cultura, soy muy reiterativo, pero es que en torno a la mesa siempre pa- Dedicación absoluta La experiencia Azurmendi Comienza en el jardín. Ahí reciben personalmente a los comensales con unos aperitivos: pan de leche de caserío con una infusión de cebolla morada. Después, en mesa, el menú degustación va pasando ante los ojos: un huevo de caserío trufado en directo, un ravioli de rabo de vaca Betizu, una ostra y aromas del golfo de Vizcaya, en directo también. Una pausa y seguimos: cigalitas de Bermeo sobre un trazo de remolacha y codorniz sobre un caldo concentrado de estos mismos; un paseo por una huerta con un estofado de salazones y bombones de Idiazábal, unos salmonetes asados con un caldo concentrado de sus espinas y champiñones (en la foto), un pichón con los aromas del bosque, las castañas y aromas de sarmiento de nuestra bodegas. Terminamos con las fresas y rosas y los aromas del Txacolí. www.azurmendi.es Nos estamos acercando a los postres, a ese final de banquete que uno nunca quiere que llegue (si la comida es buena, claro). Eneko Atxa se pasa todo el día en el ‘mundo Azurmendi’, un microcosmos que engloba un bistro, un restaurante gastronómico (que acaba de inaugurar), un jardín y una bodega de txacolí que “es la más grande que existe en el País Vasco. Por lo tanto sería la más grande del mundo, porque txacolí no se hace nada más que aquí, pero no quiero pecar de bilbaíno, que luego nos dan collejas (risas)”. Como nos confiesa, nunca cuenta las horas que pasa en Azurmendi… “Mi familia no se queja. A mi pobre hija le ha tocado, tiene un año y medio. Y, bueno, a mi mujer nadie la obligó a casarse conmigo (risas). Organizándose bien no hay problema. Bastante privilegio es que tengamos trabajo hoy en día y encima que nos guste”. Otra opción, si la de ir a Azurmendi no se contempla, es caerle bien a Eneko Atxa, ser su amigo, así igual les invita a su casa. Pero no se crean, en su hogar reina la sencillez: una tortilla de patata, una ensalada, unos pimientos verdes fritos o un potaje. Incluso le pueden ayudar a cocinar. Si no les gusta pelearse con ollas y fuegos, sigan esta regla: “Te voy a dar un consejo si te estresa cocinar: una buena botella de vino abierta, música que te agrade, coger los alimentos, ordenarlos todos y pensar que vas a darle placer a alguien, y ya está. Y verás como disfrutas”. ¿A que se les ha abierto el apetito? Pues que ustedes lo disfruten. o riz o n 69 portada “Bilbao se ha convertido en icono” Con motivo de la próxima edición del festival publicitario El Sol, que estrena nueva sede en la capital de Vizcaya, hablamos con miguel garcía vizcaíno, fundador y director creativo ejecutivo de Sra Rushmore. Llamándose Vizcaíno deduzco que alguna relación debe tener con Bilbao… Debo ser descendiente del vizcaíno que aparece en El Quijote, porque mi abuelo era manchego. Aunque hay quien dice que aquel vizcaíno era en realidad guipuzcoano. ¿Qué me dice de que salga el Sol publicitario por primera vez por el Botxo? Echaremos de menos La Concha de San Sebastian, pero conoceremos mejor Bilbao, que tampoco está nada mal. ¿Van a comer mejor o vamos a ver mejores anuncios? Es un maridaje perfecto: spots con pintxos. ¿Quiénes crees que son los mejores de la categoría: los españoles, los brasileños, los argentinos? No suelo valorar el festival El Sol en términos nacionalistas. También hay piezas maravillosas en países como Portugal, Colombia, México, Perú… Me da totalmente igual de donde vengan. Lo importante es disfrutar viendo buenas campañas. Hablemos en serio: ¿Qué se cuece este año de profunda crisis económica? ¿Se ha notado mucho la tijera en el sector publicitario? Si comparamos el año 2012 con 2006, podemos ver que se ha volatilizado el 50% de la inversión publicitaria. Y ese dinero que no llega está asfixiando a las agencias, a las productoras, a los medios de comunicación, a todos… Se habla mucho de la crisis de la construcción o la del automóvil, pero nuestro sector también está atravesando problemas muy serios. ¿Y eso encoge la creatividad o, por el contrario, las mejores ideas surgen cuando se aprieta el cinturón? La crisis produce pánico. Y el miedo siempre paraliza. Se cumplen quince años del Guggenheim, la mejor píldora arquitectónica que se recuerda en la historia de España desde El Escorial, ¿no cree? Me fascina el edificio y me encanta la idea. La ciudad se ha transformado alrededor del Guggenheim. El problema es que todas las ciudades españolas han querido tener su Guggenheim y la megalomanía de los alcaldes se ha convertido en epidemia. ¿Cuál es su idea para el renacimiento de una ciudad de sus cenizas? ¿Qué puede hacer la publicidad? La publicidad por sí sola puede hacer poco si no está al servicio de una idea de ciudad. Barcelona o Bilbao se han convertido en iconos gracias a muchas actuaciones a lo largo de los años, y la publicidad es sólo una pequeña parte. En Madrid todo es más caótico, por definición. No hay un plan, no hay una idea de ciudad. Y aún así, en medio del caos, todos los días amanece una ciudad viva, donde pasan cosas, donde merece la pena vivir. Madrid es un misterio. “Todas las ciudades españolas han querido tener su Guggenheim y la megalomanía de los alcaldes se ha convertido en epidemia” Dicen que la Sra Rushmore es una viejecita algo despendolada… “La más señora de todas las putas, la más puta de todas las señoras, dueña de un corazón tan cinco estrellas…”. La Rushmore es sabinera, canalla y colchonera. ¿Con esas barbas cómo es capaz de convencer a los clientes? He probado de todo: con barba, con coleta, con rastas, skin head… El problema es que no tengo personalidad. La verdad es que un creativo con corbata es como Isabel Presley en chándal… Efectivamente, no entiendo cómo hemos podido llegar hasta este punto. ¡Con lo elegantes que éramos los creativos en la época de Mad Men! 70 o ri z o n Sólo por curiosidad, ¿cuándo fue la última vez que estuvo en Bilbao? Hace tres años. Demasiado tiempo. Estoy deseando volver. Usted es del Atleti (de Madrid), ¿pero qué piensa del Athletic (de Bilbao)? Lo considero como un club hermano. De hecho, mi Atleti de Madrid lo fundaron estudiantes vascos del Athletic de Bilbao, allá por el año 1903. Además, me parece que ambos clubs están mucho más cerca del fútbol verdadero, de la cantera, del sentimiento auténtico... Y más lejos del show business que encarnan los grandes equipos que hoy monopolizan los títulos. Estoy radicalmente en contra del bipartidismo que está destrozando la Liga española. ¿Va a echar de menos Donostia o queda mal decirlo delante de Azkuna? Seguro. Han sido muchos años, muchos pintxos, muchos gintonics, mucha Concha. Tantas alegrías, tantos nervios, tantas decepciones. Personalmente, le debo muchísimo a Donostia. Me veo tentado de pedirle un claim para nuestra revista, pero es q tan bueno el que tenemos –“Descubre tu lugar en el mundo”–, que no creo que pueda mejorarlo... Venga, así a bote pronto, ¿Qué se le ocurre? Jamás tendría la osadía de improvisar algo así. Crear un claim es un trabajo que requiere mucho tiempo, talento, experiencia y una inmersión más concienzuda. Improvisarlo sería frivolizar. –ramón reboiras entrevista “No suelo valorar El Sol en términos nacionalistas. Me da igual de dónde vengan las campañas. Lo importante es disfrutar viendo buenas piezas” o riz o n 71 SUSCRIPCIONES súbete a otra velocidad Descubre tu lugar en el mundo 902 54 20 45 Sólo para Península y Baleares (oferta no válida para Canarias, Ceuta y Melilla). Suscríbete a ORIZON por sólo 28 € al año (6 números) con esta mochila valorada en 100 €. Para rellenar tu suscripción: [email protected]. Promoción válida hasta agotar existencias. especial 74 Charles Dickens... Han sido 80 sigue siendo el escaparate 86 giados que pueden acceder 92 los últimos años de ser Stendhal, Joseph Conrad, muchos los escritores que han estado vinculados con Londres. Seguimos su legado literario. El céntrico barrio de El Soho que el resto del planeta observa con atención para conocer las últimas tendencias. Muy pocos son los privile- a los clubs privados londinenses. Te contamos qué se esconde tras sus elitistas puertas. El East End ha pasado en una zona puramente industrial a convertirse en el epicentro del Londres más alternativo. capital del mundo La ciudad siempre ha estado (y estará) en el punto de mira. Nosotros te proponemos que eches un vistazo a la metrópoli desde cuatro ángulos distintos: el literario, el moderno, el elitista y el emergente. Porque Londres tienen tantas caras como viajeros la visitan. o riz o n 73 Literario especial Imagen de la Oxford Arms, una posada londinense del siglo XVII que fue demolida en 1876. 74 ori zo n foto: exposicióN ‘dickeNs aNd loNdoN’ del MUseUM of loNdoN, hasta jUNio de 2012. loNdres literario un tOur lIterArIO Londres, donde nacen todos los mapas punto de partida obligado para todos aquellos que querían conocer mundo, por la capital británica pasaron los más importantes exploradores y literatos de la época victoriana. te invitamos a seguir las huellas de un pasado que pervive en algunas de sus calles y museos. PO R CLEMENT E CO RONA ToDoS ESTAMoS DE ACUErDo En QUE nUEVA YorK sigue siendo de lo más cool, que el buzz de Shanghai es atronador y sabe a futuro, y que Ciudad del Cabo, San Francisco o Sydney son casas de muñecas en las que nunca, ay, viviremos. Pero, amigo, a diferencia de todas ellas, la vieja, caprichosa y –este año– olímpica Londres, fue, es y siempre será el lugar donde comienzan los mapas, la capital imperial donde explotó el big-bang que haría de ella el centro del universo viajero. Si el mismísimo Stendhal decía que iba a Londres porque allí encontraba un antídoto contra el spleen, cuánto más iremos nosotros, convalecientes siempre de una nostalgia nómada que en ningún lugar como esta ciudad podremos atemperar: y no sólo porque –aunque también, claro– en Londres resulte imposible aburrirse pues ofrece todo cuanto hay en la vida y “quien se cansa de Londres, está cansado de vivir” (Samuel Johnson dixit), sino por la bendita certeza de que en la vida de todo viajero hay un momento en que su brújula vital marcará la posición de esta ciudad. Será porque necesite financiación para una suicida expedición al corazón de Asia Central, reclutar una cuadrilla de forzudos brazos escoceses para domeñar el veld de natal, veinticuatro lotes de prendas Burberry’s para perderse otra vez en el Polo Sur –caso de Shackleton– o, simplemente, seguir la huella que han dejado en la ciudad otros viajeros: Londres es la flor de lis de la rosa de los vientos, cuna, escala y tumba de los mayores viajeros de la Historia, punto de salida y llegada de expediciones y periplos y donde también, detalle nada baladí, nació ese rasgo de carácter de nuestra civilización que es el turismo, esa bendita perversión del viaje que se inventó Thomas Cook al vislumbrar un futuro en el que los ingleses se transportarían en grupo por lugares ignotos con mapas que representaban un mundo pintado de color rosa victoriano. Punto de partida Este mapa de nuestro Travelling London tiene su primera chincheta clavada al este de la ciudad, en los Docklands (www.dockland.co.uk), una zona inmensa que se desparrama al sur del Támesis y que se pelea con otros barrios por ser lo más trendy de la ciudad: aún no lo ha conseguido. Pero no es eso lo que venimos a buscar en nuestro viaje, y sí el espíritu mismo que capturó a ese man bigger than life que fue Joseph Conrad y para quien este impenetrable y excesivo tramo del Támesis, que va desde el puente de Londres hasta los Albert Docks, era a otros puertos fluviales lo que la selva virgen a un jardín. Hectáreas y hectáreas de muelles y astilleros en o riz o n 75 los que, desde el siglo I y hasta los años del swinging London, se fabricaron y botaron mastodónticos galeones, ágiles goletas, esbeltos clippers y contundentes vapores, que transportaron a las cinco esquinas del mundo tropas, excéntricos, aventureros, indeseables y desheredados, y retornaban con las bodegas repletas de lana, marfil y oro, a mayor beneficio y gloria del Imperio, de la Hudson Company, o de ambos al mismo tiempo. Hoy, al pasear por este lugar, tenemos que hacer un gran esfuerzo, algo más que un voluntarioso ejercicio de autosugestión, para imaginarnos que aquí, donde actualmente los refulgentes rascacielos de Canary Wharf dan sombra a viejos condominios de realojados, lujosos lofts para hipsters e inmensos almacenes desvencijados, estuvo durante los siglos XVIII y XIX el puerto más importante de todo el mundo. De aquí partieron a descubrir de qué estaba hecha la realidad y a encontrar la inmortalidad todos los viajeros, aventureros y exploradores que han sido: Livingstone, Scott, Shackleton, Chatwin, Lewis, Dickens, Vaughn, Stark, Churchill… Todos ellos se embarcaron en muelles cuyos nombres –East India, West India, London Docks, St Catherine– siguen resonando hoy en nuestros oídos como cantos de sirena, llamándonos a enrolarnos, como hicieron también miles de británicos de toda condición –burgueses, nobles provincianos y, sobre todo, John Bulls en busca de la gloria que puliría su inglés de acentos cockney o de Wigan– que, relamiéndose el grog de la boca y tatareando el God save the queen, soñaban despiertos con cambiar de vida y de fortuna a bordo de todo tipo de barcos, pero ninguno tan bello como el más bello de todos, el Cutty Sark. 76 o ri zo n el regreso de un mito El Cutty Sark es un verdadero emblema de Inglaterra en general y de Londres en particular. Icono nacional de la historia marítima británica, fue fabricado en el año 1869, siendo uno de los últimos veleros de estilo clipper que se construyeron en el mundo. Pero además es el último superviviente de su generación y el más rápido y más grande de su tiempo. El paso de los años no ha acabado con él. Ni siquiera el terrible incendio que sufrió en 2007. Una vez terminados los trabajo de restauración, se vuelve a abrir al público a partir del 26 de abril. Comienza así un nuevo episodio de la extraordinaria y emocionante vida de este velero, uno de los barcos más famosos del mundo y un testimonio vivo de los tiempos pasados y gloriosos de la vela y, sobre todo, un monumento a todos aquellos marinos mercantes a los que el mar les arrebató la vida. Más información en www.cuttysark.org.uk El clipper más famoso del mundo sufrió un incendio pavoroso en el año 2007, y es en esta primavera cuando podremos, por fin, volver a pasear bajo su quilla (2 Greenwich Church St. www.cuttysark.org.uk). El Cutty Sark es el único tea clipper que se conserva en el mundo: a esto debían referirse cuando decían que el vapor mataría a la navegación. Puro British Pride, el barco es una bellísima bala de velamen blanco que, casi, volaba sobre los océanos con sus tres mástiles, sus mil toneladas de carga y sus setenta metros de eslora, y todo con una finalidad: llegar a Londres desde Shangai con las bodegas repletas de la primera cosecha del año de té antes que los tea clippers de las navieras rivales. Eran carreras en toda regla (tea races) que copaban portadas y hacían millonarios a los patronos. A las espaldas del Cutty Sark, muy cerca, atravesando el parque de Greenwich, se encuentra un lugar donde parecería que se hace magia, pues divide al mundo entre Oriente y Occidente y marca, además, el comienzo de cada uno de los días de nuestra vida: el Royal Observatory de Greenwich (Blackheath Avenue. www.rmg.co.uk). Allí, resulta casi imposible hacer una foto sin que en el tiro aparezca alguien a horcajadas sobre la línea en el patio que representa el meridiano Cero, que marca tanto la Hora (así, con mayúsculas) como la separación entre los hemisferios este y oeste. Dos convenciones con las que vivimos desde el año 1884 y que hacen de este observatorio una app analógica, de carne y hueso –venerables cemento, piedra y cristal–, perfecta para calibrar el smartphone o ese reloj que, albricias, hemos heredado: da a la perfección la longitud –0º 0’ 0’’– y la hora –cuando el reloj del observatorio marca la hora en punto, amigo, te guste o no, es la hora en punto–. Hoy, en cada atardecer, la posición de la línea del meridiano la marca en el cielo un láser verde: una línea verde que es, también, el hilo con el que se cosen los mapas. Los clubes del Pall Mall Si para Virginia Wolf el mayor placer de la vida urbana era dar una caminata por las calles de Londres, hagámoslo por la reluciente y pomposa Pall Mall. Propiedad en parte de la Corona, hasta bien entrado el siglo XX un marinero podía, como la ardilla de Plinio, saltar de sede de naviera en sede de naviera –Peninsular, Oriental, White Star, Union Castle…– sin pisar sus aceras. Esta calle es la quintaesencia británica, donde la refinada Albión alcanza una de sus más altas cotas, si no la mayor, en los clubes de caballeros, esas instituciones solemnemente fotos: exposición ‘dickens and london’ del museum of london, hasta junio de 2012 (izquierda) y visit britain (derecha). especial londres literario En la página anterior, ilustración del río Támesis de 1859. En ésta, el mítico Cutty Shark, fabricado en 1869. o riz o n 77 fotos: exposición ‘dickens and london’ del museum of london, hasta junio de 2012. especial Portada de La pequeña Dorrit, novela por entregas escrita por Dickens hacia 1855. 78 ori z o n londres literario misóginas y elitistas en cuyos recargados y acogedores salones uno espera ser despertado a las seis de la tarde no por un lechero, si no por Anthony Hopkins o cualquiera de esos shakesperianos actores devenidos en sires o caballeros del Imperio. De todos los clubes de Pall Mall –y hay unos cuantos aquí– dos son lugar obligado para los viajeros. El primero de ellos es el imponente Reform Club (104 Pall Mall, www.reformclub. com), donde Phileas Fogg apostó 20.000 libras con sus compañeros de club a que daría la vuelta al mundo en menos de 80 días (compañeros que no eran, pero podrían haberlo sido pues sí fueron socios del club, Cartier-Bresson, Thackeray, Barrie o Churchill). El segundo es el contiguo y legendario Traveller’s (106 Pall Mall, www.thetravellersclub.org.uk), considerado el epítome de los clubes ingleses, y al que también querríamos pertenecer, donde solamente el susurro de los periódicos sábana nos distraería de las ensoñaciones viajeras o de la escritura de la crónica de nuestras aventuras. Sólo para viajeros: su regla número seis exige de sus miembros el haber viajado “fuera de las islas británicas a una distancia no inferior de 500 millas desde Londres en línea recta” (no cuenta haberse desplazado a, pongamos, Aberdeen). Por desgracia, sólo puede visitarse por invitación de un miembro. Con todo, ninguno de estos clubes es el más famoso: ese honor corresponde a un club que ya no existe, el descacharrante Pickwick Club, cuyos papeles póstumos recopiló ese genio de la literatura universal e hijo predilecto de Londres que fue Charles Dickens. El legado de Sir Charles No se concibe Londres sin Charles Dickens, ni viceversa. Ningún escritor como él entabló jamás una relación tan íntima y absoluta con ella: todas sus novelas –menos una, Tiempos difíciles–, transcurren en la ciudad. Este año 2012 se cumplen dos siglos de su nacimiento, y eso quiere decir que la pasión agradecida de la capital británica por Dickens –de quien ya se decía en vida que era “el corresponsal en Londres del futuro”– se convierte en auténtica fiebre que salta por encima del Green Belt y salpica todo el Reino Unido de exposiciones, eventos y jornadas que exploran exhaustivamente bajo todos los prismas posibles esta relación simbiótica entre ciudad y autor. Para encontrar al escritor, nada mejor que comenzar poniendo rumbo al corazón de Bloomsbury, donde está la coqueta casa en la que vivió un par de años y que en la actualidad acoge el Museo Charles Dickens (48 Doughty St, www. dickensmusem.com). Actualmente –desde el mes de abril– está cerrado por obras de ampliación pero esperemos que pronto podamos volver a curiosear durante horas entre los más de cien mil –sí, cien mil– objetos personales del autor: manuscritos, primeras ediciones, pinturas, daguerrotipos, trajes… Otra opción más factible si se viaja a Londres en estas fechas es visitar la exposición Dickens and London, una imponente muestra que aguarda en el Museo de Londres (150 London Wall, www.museumoflondon.org.uk/london-wall).Por encima de la lograda y prolija recreación de la atmósfera del Londres victoriano –montajes, vídeos, instalaciones de todo tipo–, destacan la exhibición de dos de los manuscritos del autor: David Copperfield y Casa desolada. Hay tiempo hasta el próximo 10 de junio para conocer de la mejor manera posible a Dickens y a la ciudad. Aunque para ir abriendo boca, no hay nada como la espectacular aplicación para iPad y iPhone que el Museo ha realizado de esta exposición. un año de celebraciones 2012 es un año muy especial para los ingleses. Y no lo es sólo porque Londres acoja unos Juegos Olímpicos por tercera vez, sino porque también se celebra el bicentenario del nacimiento de Charles Dickens, uno de los escritores más celebrados del país, autor de obras tan inolvidables como Un cuento de Navidad, Grandes esperanzas, Oliver Twist, Tiempos difíciles o Historia de dos ciudades, sólo por citar algunos ejemplos. Con motivo de esta fecha tan especial, durante todo este año 2012 se celebran multitud de eventos culturales relacionados con Dickens no sólo a lo largo y ancho del Reino Unido, sino en diferentes puntos del planeta. Puedes consultar la extensísima agenda cultural que gira alrededor de la figura del escritor en la página web www.dickens2012.org El hogar de los aventureros Dickens conoció de primera mano las paredes estucadas de la mítica Royal Geographical Society (1 Kensington Gore, www.rgs.org), la venerable institución presidida por el ex Monty Python Michael Palin que pone, desde hace dos siglos, millones de libras en manos de viajeros y exploradores para cartografiar el mundo, expandir el conocimiento y contarlo a los cuatro vientos (bueno, no siempre: Shackleton consiguió de ella, a falta de fondos, que le prestaran tres cronómetros para la expedición del Nimrod al océano antártico y le dieran “toda su simpatía”). Lamentablemente sólo están abiertas al público general las exposiciones que se celebran en el Pavilion y la impersonal –por contemporánea– sala de lectura Foyle. En la nómina de miembros, amigos, patrocinados y conferenciantes de la RGS no falta un solo apellido: Stanley, Kipling, Livingstone, Darwin, Scott, Hillary, Shackleton, Burton... Y es Sir Richard Burton, tal vez el más célebre de todos los viajeros de la Royal Geographical Society, el que que reposa de manera más original, más merecedora de su fama viajera: el infiel que dio siete vueltas a la Kaaba, que descubrió para Europa el Kamasutra, Las Mil y una noches y las fuentes del Nilo, descansa en una jaima árabe levantada en el patio trasero de la anodina iglesia de St. Mary Magdalene (61 North Worple Way, Mortlake, www.stmarymags.org.uk), en el oeste de la ciudad, en un escenario urbano corriente. La mejor muestra que en Londres la esencia del viaje aguarda en cualquier (o en toda) esquina. oriz o n 79 Soho especial En las calles del Soho se da cita gente de cualquier edad, raza o condición. 80 o ri zo n sOhO SoHo, LonDrES El espejo de la modernidad Desde los años treinta hasta nuestros días las céntricas calles de este barrio han acogido un crisol de culturas y tendencias de todo tipo que lo convierten en uno de los puntos más fascinantes de la ciudad. si ha nacido algo nuevo, lo encontrarás en el soho. T EXTO : AR ANT XA NEYR A FOTO S: CR IST INA D E MID D EL ESTÁ CUSToDiADo Por oXForD CirCUS, Picadilly y regent Street. Y sus placas azules recuerdan constantemente a personajes como Casanova, Marx o William Morris, entre muchos otros. Sus calles han sido hogar de judíos, italianos y chinos. Esta zona también ha sido cuna del rock y del movimiento mod británico. En la mítica Carnaby Street aprendimos cómo vestirnos para estar a la moda en los ya lejanos años sesenta. Medio siglo después, seguimos viniendo. ¿Por qué? Porque nos gusta. Porque en este barrio ha estado y está todo lo nuevo. Y porque mimetizados, entre luces de neón y escaparates de vivos colores, sobreviven –en algunas ocasiones no– lugares que han sido claves para la cultura del siglo XX. Pero mejor empecemos a contar la historia del Soho desde el principio. Un día cualquiera r sale de casa con su mejor traje. Chaqueta y pantalón blancos, camisa negra, pajarita, zapatos de punta y sombrero de medio lado. Se sienta en la barra y pide una copa de champán, media docena de ostras y un steak tartare. Así dicta la norma en el Bob Bob ricard (1, Upper James St. www.bobbobricard. com), un lugar de espejos y marquetería art déco, que le gusta para las grandes ocasiones. Pulsa un botoncito que sólo tiene una función: ordenar más burbujas. Hoy r tiene cosas que celebrar. Que hace catorce años que llegó a Londres, que está enamorado de su mujer y que una preciosidad de dos años y ojos achinados le llama papá. Es viernes, y como una vez al mes (antes, cuando tenía menos compromisos, lo hacía una vez por semana, y muchas, incluso varias), r se viste con prendas adquiridas en algún perchero de Shoreditch, y deja que sea la noche –y lo que ella le regale– la que vaya marcando su ruta por el Soho. Con esta ropa, caminando por Dean Street, r parece uno de esos cientos de italianos que vivían en estas mismas calles en los años treinta. La italiana fue una de las comunidades de inmigrantes más numerosas, sobre todo tras la Primera Guerra Mundial. La mayoría se instalaron en esta zona, compartieron espacio con griegos, franceses y judíos y buscaron una forma honrada de vivir; otros, se juntaron y crearon mafias que controlaban el juego y el alcohol. Los primeros abrieron restaurantes, vendían cafés en la calle para calentar a los trabajadores del antiguo mercado de Berwick Street (hoy repleta de fascinantes reliquias de tiendas de vinilos), y apostaron por comercios que ofrecían los productos típicos de su país de origen: salami, pastrami, quesos y vinos importados desde italia. Los segundos simplemente se enriquecieron todo lo que pudieron, hasta que llegó la Segunda Guerra Mundial y el eno riz o n 81 especial tonces primer ministro Winston Churchill ordenó el internamiento de los italianos residentes en Londres. De aquella no se salvaron ni los hermanos Sabini, los capos por excelencia que tuvieron que dejar paso a un tal Billy Hill, que se hacía llamar Boss of Britain’s Underworld. Durante ese tiempo, aunque muchas de las familias, ya de segunda y tercera generación, no tenían ninguna relación con los fascistas, hubo miles de reclutamientos. Algunos nunca volvieron a abrir sus negocios pasado el conflicto bélico, pero otros, como las tiendas de Algerian Coffee shop (52, Old Compton Street. www.algcoffee.co.uk ) o Camisa (61 Old Compton St. www.camisa.co.uk), sobreviven prácticamente intactas y siguen vendiendo deliciosas viandas. A ellos en los últimos tiempos se les han sumado nuevas incorporaciones, como el restaurante Princi (135, Wardour Street. www. princi.co.uk), siempre frecuentado por italianos, perfecto para comer una lasaña o una focaccia recién hecha en una de sus barras, o el muy exitoso Polpo (41, Beak Street. polpo.co.uk). Este local, que sirve deliciosas tapas venecianas, fue el primero que introdujo en Londres la moda de no aceptar reservas. La verdad es que no importa. Esperar más de una hora para conseguir mesa forma ya parte de la liturgia y la causa lo merece: el ambiente es cool pero sin pretensiones, la música alta, la iluminación agradable… Y la comida tan rica, que ya han tenido que abrir otras dos sucursales en la ciudad. El mejor café de Londres De todos estos locales de aquella época el más fascinante no es otro que el Bar Italia (22 Frith Street. www.baritaliasoho.co.uk), donde R acude a menudo a desayunar y a leer el periódico. Desde fuera parece simplemente un local decadente y anticuado. Dentro, es un diminuto cafecito de suelos de formica y mareantes ventiladores, repleto de fotos antiguas y balones de fútbol. Los días que hay jornada del calcio (la liga de fútbol italiana), se congregan los hinchas para ver el partido en una enorme televisión, y los domingos por la noche se dan cita los amantes de las Vespas. Además de todo, aquí se sirve (junto con el Monmouth Café; www. monmouthcoffee.co.uk) el mejor café expreso de todo Londres: corto, intenso, potente... La clave –según dicen– depende de tres factores: la cafetera original; el café, que compran desde su apertura en la tienda de Mr Angelucci, en la puerta del al lado, y las pequeñas tacitas con una forma y un tamaño perfectos (y un precioso dibujo de la fachada). Su dueño cuenta orgulloso que una vez Francis Ford Coppola le pidió que le regalara una de ellas para llevársela a su madre (que se llama Italia) y él le empaquetó 82 ori zo n dos de espresso y dos de capuccino. Agradecido, el director le aseguró que en su próximo viaje a Londres le traería una de las botellas de su vino. Dos semanas después, para su sorpresa, el aclamado cineasta apareció de nuevo por el local para cumplir su promesa. También la banda inglesa Pulp rindió un sentido homenaje en 1995 a este establecimiento y a su café (el mejor del mundo según ellos) con el tema Bar Italia, perteneciente al álbum Different Class. Pero más allá de ser una nueva bebida, el café italiano significó para aquel Londres de los años cincuenta un cambio de hábitos. La actriz Gina Lollobrigida abrió en el año 1953 el Moka Bar (29, Frith Street, ya desaparecido). Fue la primera coffee house de toda la ciudad, que se convirtió rápidamente en el lugar de moda de aquella época. Se llegaron a servir más de mil tazas de café al día (que se hacían con una máquina Gaggia importada), además de tarta y sándwiches variados. Era exactamente el modelo de local que Londres necesitaba: acogedor, luminoso y perfecto para las mujeres que se sentían menos intimidadas que en los oscuros pubs. La junk box contribuyó a su éxito definitivo e hizo que el rock comenzara a colarse por las rendijas del Soho. Cómo llegar La compañía Iberia, junto con British Airways, ofrece hasta 15 vuelos diarios a Londres desde Madrid y hasta 9 desde Barcelona. Además de conexiones para viajar desde el resto de los destinos de la red de Iberia vía la T4 del aeropuerto de Madrid-Barajas. La clase Business Europa ofrece ventajas como parking VIP gratuito durante tres días en los aeropuertos de Madrid o Barcelona, zona de facturación exclusiva, embarque prioritario en el aeropuerto de Barajas y mayor franquicia de equipaje y prioridad en la entrega del mismo, además más espacio a bordo, exquisitos menús basados en la dieta mediterránea y una selección de vinos que incluye las mejores DO españolas, entre otros. En iberia.com se encuentran los mejores precios: en estos momentos se pueden encontrar billetes de ida y vuelta desde 160 euros con todo incluido en clase Turista y desde 626 euros en Business. En esta web también puede contratar su hotel, reservar un coche de alquiler o adquirir un seguro de viaje. Más información en Serviberia (Tel.: 902 400 500) y agencias de viaje. Banda sonora original Ya en los años treinta el Palladium Theatre (Argyll Street) había recibido con los brazos abiertos a Duke Ellington y Louis Armstrong en una Europa poco acostumbrada a la música jazz. Pero el Soho estaba llamado a ser un laboratorio inigualable para todos los movimientos de música del siglo XX. Desde los años veinte, cuando comenzaron a abrir para recibir a los soldados, la lista de clubs es interminable. Fred Astaire y Nöel Coward eran miembros de The Gargoyle (60, Dean Street), decorado por Henri Matisse; el 2I’s es considerado –ni más ni menos– el lugar de nacimiento del rock británico y The Scene el primero de los clubs mod de Londres. En el selecto Miranda Club (9 Kingly Street, todavía abierto hoy, www.mirandaclub.com) se conocieron Paul McCartney y Linda Eastman y en el mítico Marquee debutó Mick Jagger y actuaron The Who, Pink Floyd y Led Zeppelin. En el límite con Chinatown, Admiral Duncan (54, Old Compton Street, la arteria princpal de la zona rosa) fue –y sigue siendo– el bar gay por excelencia en una zona donde no escasean los neones, las plumas ni las banderas arcoiris. Además ha sido escenario de dos curiosos episodios: En 1999 un neonazi homófobo entró en el local y preguntó por el banco más cercano. Al salir dejó un paquete. Era una bomba que causó tres muertos. Casi medio siglo antes, el poeta Dylan Thomas huyó de Inglaterra y escondió en el pub soho Unas Vespas, inconfundibles iconos del movimiento mod, aparcadas en las inmediaciones de Carnaby Street. o riz o n 83 especial Una de las entradas a Chinatown, uno de los barrios chinos más importantes de Europa. 84 ori z o n soho la única copia de su manuscrito Under Milk Wood con un mensaje claro: la persona que lo encontrara podía quedárselo. Douglas Cleverdon, un productor de la BBC lo consiguió, pero prefirió quedarse con las dos mil libras que le dieron por él. De vuelta al presente Enamorado de la música, R ha seguido la evolución de muchos de estos clubs y la apertura de otros nuevos en los últimos años. No concibe ningún otro lugar donde vivir en Londres. Cada semana sigue consultando la página web de Ronnie Scott’s (www.ronniescotts.co.uk) para comprar las entradas de los conciertos de los mejores grupos de jazz. También está muy pendiente de la programación de Madame Jo-jo’s (8-10, Brewer Street. www.madamejojos.com), con sus espectáculos de cabaret kisch y sus fiestas temáticas salvajes todos los fines de semana; así como de todas las novedades de Soho Theatre (21 Dean Street. sohotheatre.com), uno de los focos culturales más activos del barrio. Paralelo al auge de la música, la moda fue ganando terreno poco a poco en las calles del Soho. Uno de los pioneros fue John Stephen, que abrió una boutique masculina llamada His Clothes en Beak Street que vendía fulares, chaquetas de terciopelo y otras prendas llamativas y estrafalarias importadas directamente desde Italia. Sus vitrinas eran verdaderamente innovadoras y entre sus clientes estaban los componentes de Small Faces, Yardbirds o The Who, y, por supuesto, toda una legión de seguidores de stas bandas. El local se quemó, pero en 1960 abrió otro en Carnaby Street. Después de esta tienda vino otra, y luego otra, y luego otras tantas más, y así la calle se convirtió en un escaparate de tendencia masculina. En 1966 The Kinks le dedicaron su single Dedicated Follower of Fashion y ese mismo año la revista Time publicó su artículo Swinging London, donde se hacía eco de este auténtico fenómeno urbano. Por aquel entonces la fama de Carnaby Street ya era universal. Y aún lo continúa siendo. Actualmente la calle, con sus fachadas de colores y su mural que representa los personajes más célebres que por ella pasaron, sigue siendo un interesante punto de peregrinación para los fashionistas y modernos en pleno centro de Londres. Mientras que en los mercadillos del Este se va a componer armarios vintage, aquí se concentran las pop up stores (locales que van rotando sus tiendas para testar su adaptación), las concept store, con ediciones limitadas y únicas de grandes marcas como Adidas, Levi’s Vintage, Lomography, Lee o Fred Perry; o la americana Johny Cupcakes, que abrió hace un año y fue una auténtica revolución en el barrio. Aunque lo mejor son los establecimientos independientes como The Great Frog (10, Ganton Street. www.thegreatfroglondon.com), genial por su provocadora joyería con diseños con calaveras y motivos rockeros; los trajes de Sir Thomas Baker (4, D‘Arbley street. tombakerlondon.com) o la lencería de The Lingerie Collective (8, Ganton Street. www.thelingeriecollective.com). Las dos ultimísimas incorporaciones son Monkey y Cheap Monday (www.cheapmonday.com). lo que el ojo no ve Señales misteriosas. En el pavimento de Soho Square hay unas marcas en la piedra, cruces que nadie sabe lo que son. Probablemente se trate de símbolos masónicos, recordatorios de los muertos del incendio de 1666. ¿Quién era él? Además de tener buenos precios y una clientela mucho más cool que la de la mayoría de los pubs, el John Snow homenajea al médico que descubrió la causa del brote de cólera de 1854. Las ‘modelos’ sospechosas. Gerrard Street es la calle principal de Chinatown. Además de restaurantes, tiendas eróticas y locales de masajes, hay algunos pisos que dicen models. No esperéis que salga Kate Moss. Es prostitución encubierta. El lugar sin letrero. La puerta negra y destartalada del 13 A de Gerrard Street parece no llevar a ningún lugar. Sin embargo, traspasarla implica entrar en el Experimental Cocktail Club, un local donde se sirven las mezclas más originales de Londres. Más allá de la moda El efecto de Carnaby Street hoy en día se ha extendido tanto geográficamente –a otros lugares como Kingly Court, Fourbert´s Place y Newburgh Quarter– como conceptualmente: ha ido mucho más allá del universo de la moda. También hay infinidad de restaurantes de todo tipo de comida, peluquerías de aire retro e incluso hoteles muy especiales, como el Sanctum Hotel (20, Warwick Street. www.sanctumsoho. com), conocido como el hotel de los músicos por su estética rockera y sus detalles gamberros y provocadores: las amenities de las habitaciones consisten en una cámara de fotos, unas gafas de sol y un kit con dos preservativos y dos pastillas de viagra. Después de usarlo todo por su debido orden, en su roof garden hay un hydro spa maravilloso donde relajarse. A tan sólo diez minutos de allí, situado en pleno West End, está otro de los hoteles más peculiares que puedes encontrar en todo Londres, el Park Hyatt The Churchill (30 Portman Square, london.churchill.hyatt.com). Aunque en apariencia es muy serio y formal, esconde en una de sus suites una grata e inesperada sorpresa: la Limited Edition Saatchi Gallery Suite, una habitación que está decorada exclusivamente con piezas de la deliciosa Saatchi Gallery de Chelsea. ¿El plan que haría Mick Jagger? Darse un baño de burbujas con las amenities de la firma Molton Brown, pedir servicio de habitaciones de su restaurante Locanda Locatelli y devorárselo sentado en uno de sus sillones orejeros de diseño. Quizás, también, pintarle unos morritos a todas las piezas de arte contemporáneo que forran las paredes. Pero además en el Soho las tiendas abren hasta tarde y en su interior se llevan acabo talleres, cursos y concursos. Incluso las hay que celebran animados happenings y fiestas con dj’s o artistas por las noches. Precisamente en una de ellas R conoció a B hace catorce años y hace dos tuvieron una preciosidad de ojos achinados que ya pasea por el barrio, y devora tallarines en los restaurantes de Chinatown mientras luce una moderna camiseta de calaveras. Los tres son una familia típica del Soho. Aunque puede que atípica en cualquier otro lugar. oriz o n 85 Clubs especial Muy pocos son los elegidos que pueden traspasar la puerta de los clubs privados londinenses. 86 o ri z o n cluBs pRivaDos clubS PriVadoS dE londrES Reservado el derecho de admisión aunque han proliferado en los últimos tiempos y muchos han perdido su halo de exclusividad, todavía quedan algunos gentlemen clubs auténticos. Te invitamos a que nos acompañes a algunos de ellos, pero te tendrás que quedar en la puerta: sólo se admiten socios. TE X TO : ALFO NSO USSÍA HOR NED O FOTO S: MAR IO CHAVAR R ÍA o por lo menos pretenderlo. Actualmente en Londres hay cientos de gentlemen clubs, antiguos o modernos, nuevos o centenarios, pero es inevitable aceptar que están ahí y cada vez son más. Lo que en un primer momento comenzó siendo un pequeño reducto de las clases altas, se ha convertido en una práctica habitual de todos los londoners que pasan, habitan o hacen suya la ciudad. Ahora hay tantos y de tantos tipos, que parece como si se hubiera abierto la comercialización de estos templos. Pero una cosa hay que dejar clara desde el principio: ser un gentleman no es llevar ropa de marca ni tener buenos modales. Es una actitud y una forma de ver la vida. Puedes vestir ropa comprada en un establecimiento low cost, que la percha de gentleman no deforma las prendas y, por supuesto, no gusta de grandes coches ni grandes restaurantes. Un gentleman nace, no se hace. Y eso tristemente no se puede comprar ni con todo el dinero del mundo. De ahí que por mucho que se paguen hoy en día miles de libras por lo bajini para sacarse un título nobiliario, o un acceso a clubs privados como el Carlton, el White’s o el Boodle’s. Un gentleman de verdad evita al poderoso, evita al pretencioso y, sobretodo, odia a la gentuza que revolotea alrededor del dinero. Ya le pasó al Gran Duque de osuna, cuando por sus deudas le intentaron expropiar su cas- HoY CUALQUiEr HoMBrE PUEDE SEr Un GEnTLEMAn. tillo belga. reunió a todos sus sirvientes en torno a la enorme chimenea del salón de caza de su castillo: “Coged todo lo que queráis excepto el retrato de mi madre”, les dijo. Cuadros de Velázquez, del Greco y muchas otras obras de arte fueron a parar a las manos de sus trabajadores. Posteriormente, prendió fuego al castillo y esperó a que se consumiera en cenizas. Al llegar las autoridades belgas a ejecutar su embargo, el Duque esperaba junto al retrato de su madre y una carroza preparada para partir hacia su Capricho en Madrid. Al llegar, el Duque les dedicó las siguientes palabras: “Esto es lo que le pasa a un belga cuando intenta embargar a un Grande de España”. Ésta es precisamente la actitud de gentleman, la que de verdad merece la pena rescatar. Aunque no deja de ser curioso que de entre todas las anécdotas que se pueden encontrar sobre los gentleman clubs, sea precisamente un español quien saque pecho, historia y, por supuesto, maneras. Dicen que el esnobismo no lo inventó el desdichado. La palabra esnob etimológicamente proviene del latín sine nobilitate, que significa sin título nobiliario, que no sin nobleza. Tiene gracia que lo acuñaran los directores de las universidades de oxford y Cambridge cuando comenzaron a recibir inscripciones de ricos que sin títulos nobiliarios querían aparentar más. En sus fichas apuntaban la palabra s/nob. oriz o n 87 especial Hoy en día son muchos los derivados que ha adquirido su significado y es que en el fondo nadie se para a pensar el origen de las cosas. Lo dijo el Duque de Bedford en una ocasión: “El esnobismo lo ha inventado Marx, pero ni Karl ni uno de los cómicos hermanos, el esnobismo lo ha inventado Mark(x) & Spencer”, cuando la mítica cadena de tiendas comenzó a vender ropa posh a precios asequibles y, claro, todos en Londres podían tener buena pinta gracias a las prendas que allí se vendían. Algo parecido ocurrió en estos templos de las formas y las reglas que son los gentlemen clubs, cuando comenzaron a inaugurarse los que, varios siglos después, inspirarían la creciente moda esnob de pertenecer a alguno de ellos. Pero a pesar de la opinión generalizada en esta sociedad del siglo XXI de que todo el mundo tiene derecho a todo, que cualquiera puede ser cualquier cosa y de que nada es imposible; hay ciertos aspectos que seguirán siendo inalcanzables para la mayoría: no todo el mundo puede ser un White’s, un Boodle’s o un Buck’s. Por mucho que ahora todos quieran ser todo, queridos amigos, aquí el esnobismo se queda en la puerta de entrada: Are you member sir? El número 3 de St James’s Street Todo comenzó cuando un rey muy caprichoso y poderoso, llamado Enrique VIII, decidió dar rienda suelta a los caprichos de su segunda mujer y levantar su nueva residencia real en la zona de St James. El Rey decidió, para poder llenar este nuevo espacio de la ciudad, otorgar a sus más cercanos colaboradores las calles adyacentes a palacio para así poco a poco levantar negocios y comercios. De esta forma, en el año 1698 en el número 3 de St James’s Street, dos hermanos comenzaron a importar café y té y a suministrarlos a los primeros clubs privados que abrieron sus puertas en Londres. Estas bebidas espirituosas hasta entonces estaban prohibidas, pero el nuevo rey las consideró aptas para el consumo de sus señores. De esta forma nacía Berry Bros. & Rudd, una tienda que mantiene desde su fundación la misma fachada, por dentro y por fuera, que definiría los principales rasgos de la conducta gentleman. Pero Berry Bros. & Rudd es mucho más que un simple comercio. Cuando comenzaron su actividad, era fundamental administrar la dosis exacta de café según el peso de cada cliente. Por eso, la báscula que preside la entrada de la tienda sigue intacta, recordando a cada visitante que no está entrando en cualquier sitio. Tras su legendaria puerta de entrada –que se sigue abriendo igual de bien desde hace más de trescientos años– hay mucha historia. Todavía se conserva en la parte trasera de la tienda la 88 ori zo n un establecimiento con mucha historia En los antiquísimos cuadernos de contabilidad que se conservan intactos en la sede de Berry Bros. & Rudd –ubicada en el número 3 de ST James’s Street– todavía hoy los visitantes pueden admirar los pedidos que un joven Lord Byron realizaba cada jueves. Por aquel entonces, el poeta pertenencía al mejor de los clubes de antaño que, entre el Dukes Hotel y St. James’s Street, tuvo su cuartel general bajo el nombre de Waiter’s Club o, cómo él mismo lo apodó: The Dandys Club. Desgraciadamente este club ya forma parte de un lejano pasado, tan sólo pudo mantenerse abierto durante veinte años, y es que su corta existencia en suelo británico fue igual de breve que la del mismo Lord Byron o Brummel, quienes encontraron en Francia la aceptación y el escondite que su hogar nunca les brindó. www.bbr.com última farola de gas que antaño alumbraba la pérfida capital de Albión y sigue alumbrando cada noche Pickering Place, la plaza más pequeña de todo Londres, que fue testigo de los últimos duelos a espada allá por 1820, cuando la policía londinense aún los permitía, antes de su prohibición definitiva. Más o menos por esas fechas los hermanos de la calle St James trajeron de Holanda la ginebra, una bebida que hacía furor entre el pueblo llano. El entusiasmo llenó las calles y, por supuesto, la nueva bebida también tuvo mucha aceptación entre aquellos señores que querían beber sin ser molestados. Desde ese momento –y hasta nuestros días– Berry Bros. & Rudd se convirtió en proveedor habitual de estos templos de las costumbres y la exquisitez. También en lo que al empine de codo real se refiere, ya que disponían de un pasadizo que comunicaba sus bodegas con las cocinas del rey, para así poder llevarle los mejores caldos espirituosos que, a día de hoy, siguen dominando. La principal razón de la fundación de los clubs privados no era otra más que disponer de un lugar para poder dar rienda suelta a las extravagancias y vicios de sus miembros. El problema en Londres era obvio: sólo existían los concurridos pubs, donde el pueblo se refugiaba del hostil clima de la capital británica en torno a sus pintas de cerveza. Además, Londres era una ciudad donde la gastronomía no brillaba precisamente por su excelencia, y la nobleza se dio cuenta de que no disponía de lugares de encuentro y ocio adecuados. Algo que por supuesto no tardaron en cambiar con la apertura de estos clubs privados. Desde el primer momento las mujeres tenían prohibido el acceso a estos elitistas establecimientos, ya que estaba muy mal visto que ellas tomaran café o té (una polémica tradición que se mantiene en la actualidad). Aunque, como hemos dicho, este tipo de establecimientos han proliferado mucho en los últimos tiempos, y por eso nosotros nos hemos quedado en los auténticos, en los míticos, en los de verdad. El hogar de los conservadores Desde que fuera bombardeada por la Luftwaffe su sede, en 1943, The Carlton Club estableció en el número 69 de St James’s Street su base de operaciones. En Londres, los conservadores siguen viniendo cada tarde a este club para tratar de afrontar nuevas estrategias contra los liberales. Fundado a principios del siglo XIX, sólo ha expulsado una vez en toda su historia a un socio, y fue precisamente por pasarse al Partido Liberal. Se podría decir que es la meca del conservadurismo británico por excelencia. Considerado por sus rivales como el club más pijo de clubs privados Una de las estancias de la sede de Berry Bros. & Rudd, proveedores de muchos de los clubs privados de Londres. oriz o n 89 especial Callejón de entrada a Pickering Place, la plaza más pequeña de todo Londres. 90 ori z o n clubs privados la ciudad, sólo una mujer ha conseguido subir las escaleras que conducen a su salón principal: Margaret Thatcher. Esta gran excepción no se da por casualidad, sino porque –como rigen sus estrictos estatutos– todos los líderes del Partido Conservador serán socios del Carlton. James Cameron, actual primer ministro y por ente, líder de los tories, se negó a pertenecer a este club por el trato que reciben las mujeres en él, es decir, ninguno. Sin embargo, esta razón no le impidió al señor Cameron aceptar formar parte de los miembros del White’s, el club más restringido de todos, y que por supuesto considera que las mujeres no tienen sitio entre sus paredes forradas de retratos de sus honorables miembros del pasado, campeones de esgrima y cricket, fotos de los caballos que compitieron en las memorables tardes de Ascott y su Grand National y, por supuesto, las imágenes del equipo de rugby que en su juventud se hizo con la copa de Gran Bretaña arrebatándosela a los chicos de Harrow. Miembros ilustres Fundado por Lord Shelburne en el año 1762, el Boodle’s es uno de esos clubs en los que reina la nostalgia y las formas de antaño. Sigue en el mismo lugar de su fundación, en el número 28 de St. James’s Street. Uno de sus más carismáticos miembros fue Beau Brummel, al que muchos consideran el primer dandy de la historia y el padre de la moda por naturaleza. Además, su amistad con Jorge IV le propició poder acceder, como nunca antes lo había conseguido un sine nobilitate, a todos los clubs que su caprichosa existencia hubiera elegido. Otro de sus más honorables socios fue el creador de James Bond, el escritor Ian Fleming, quien además de no faltar a su cita puntual con el gin tonic cada tarde a las seis y media, mencionó a este club en más de una de sus novelas. Las paredes del Boodle’s han sido testigo de las mayores y mejores extravagancias de estos gentlemen. Todavía se comenta aquella anécdota de la llamada que un día recibió unos de los conserjes del club. Una mujer, muy alterada por la falta de compañía de su marido, no escatimó en valor y llamó por teléfono con la intención de localizar de una vez por todas a su esposo: “¡Póngame con mi marido, soy la Condesa de putunifoi!”. A lo que el conserje respondió en el acto y sin alterarse lo más mínimo: “Aquí no hay maridos señora Condesa, sólo socios”. Otro de sus más memorables episodios ocurrió cuando un camarero inoportuno acabó con la paciencia de uno de los socios del club. Sin mediar palabra, el distinguido decidió empujar al pobre camarero por la ventana del tercer piso del club: “Póngamelo en la cuenta, por favor”, pidió a uno de los empleados que atónitos observaron el lanzamiento. Sólo para militares El Buck’s marca diferencias en cuanto a sus fundadores se refiere. Es necesario incluirlo en esta lista porque los clubs en Londres, desde finales del siglo XIX, se fundaban también por honorables militares y burgueses de éxito. Y fue durante los últimos suspiros de la Primera Guerra Mundial cuando el capitán H. J. Buckmaster decidió fundar este club con el fin de hacerlo exclusivamente para militares ingleses y americanos. Además, por supuesto, de un selecto grupo de elegidos. Entre ellos se encontraba el gran escritor P. G. Woodhouse, dueño del humor inglés y quien incluyó este club en varias de sus obras. La diferencia con los demás radicaba fundamentalmente en las tres normas que Woodhouse implantó en su Club de los Zánganos: para ser socio no se podía ni estar casado, ni tener estudios universitarios y, por supuesto, se debía ser noble. Estudiar era una frivolidad para los que se consideraban señores. Otro destacable socio fue Winston Churchill, quien aseguraba que prefería la pureza de corazón de los miembros del Buck’s que a cualquiera del White’s o Boodle’s, a quien en el fondo consideraba una panda de estúpidos estirados. Sigue en el número 18 de Clifford Street. london dry gin nº3 En ginebras hay un mundo. Eso sí, no desconocido y muy inventado. Viene a ser como aquello de “para gustos, no hay nada escrito”, pero al revés. Porque, no se equivoquen señores, está todo escrito en realidad. Y como homenaje a la gran tradición que acompaña a esta bebida, ha nacido London Dry Gin Nº3 de la mano de Berry Bros. & Rudd, los dealers oficiales de los gentlemen clubs. La llave que decora cada una de sus botellas abre la puerta de esta tienda, ubicada en el número 3 de St. James’s Street (de ahí el nombre de la ginebra). Su gran secreto: ni una ni dos, sino tres destilaciones para encontrar la ginebra seca más pura y auténtica de todo Londres. Esta bebida no se mezcla con rosas ni perfumes ni cosas raras. ¿El resultado? Vibrante en nariz, con la pasión vehemente del enebro, matices florales y notas especiades. Para preparar los martinis y gin tonics de los auténticos gentlemen. Dinero y poder El White’s tiene de gentleman club lo que el poder financiero tiene de respetable: muy poco. En el fondo es esencial, como lo es a su vez el dinero, así que podemos definir el White’s como eso, el club de los que manejan guita e influencia. Dicen que el poder no se mide por el dinero que tienes ni por el puesto de trabajo que desempeñas. Hay tres personas en Gran Bretaña que si te contestan al teléfono cuando les llamas demuestran de qué pasta está hecha tu lista telefónica y hasta donde llega tu influencia: Lord Chamberlain, el primer ministro y, por supuesto, el Duque de Westminster, el mayor latifundista inglés y español, y primo hermano de la Reina. Pues bien, no hay un solo White’s que no se permita estas tres llamadas. Entre su larga lista de poderosos miembros encontramos nombres y apellidos tan importantes como: Cecil Rhodes, Sir Walter Scott, Wiston Churchill, Charles Dickens y, por supuesto, la Familia Real Inglesa al completo. El Príncipe Carlos celebró aquí su despedida de soltero antes de casarse con Diana. Pero la realidad es que le falta algo. Un noble de verdad desprecia el dinero. Sin embargo en el White’s el dinero es el lema que impera. Y eso es precisamente lo más esnob que existe. oriz o n 91 East End especial Una joven en bicicleta frente al escaparate de un moderno establecimiento del East End. 92 o ri zo n East end east end Rumbo al Este (de Londres) Desde hace algo más de una década, este antiguo suburbio conocido por la pobreza y la criminalidad, ha ido mutando progresivamente hasta ser considerado hoy en día el barrio más joven, artístico y de moda de la capital inglesa. Bienvenido al Londres más emergente. texto : cami no mar t ínez Foto s: cr ist i na d e mi d d el que hace referencia a los habitantes del East End, fue bautizado el culebrón británico creado hace casi treinta años para hacer la competencia al (aún) más longevo Coronation Street. Todo el que ha pasado una temporada larga en Gran Bretaña sabe que, años y años después, estos dos míticos fenómenos televisivos siguen gozando de buena audiencia cuando se emiten semanalmente en prime time. Al parecer, su éxito reside en que reflejan la vida de gente normal. EastEnders fue ideada por la cadena pública BBC para mostrar el día a día de una zona típicamente obrera de Londres. Y, ¿qué zona fue elegida para tales menesteres? El East End, sí. Una de las áreas que mejor ha representado siempre el ambiente de la clase trabajadora londinense. Pero la cosa va más allá. En la época victoriana, no es que esta barriada fuera paradigma de la working class, sino que empezaba a tenerse incluso como uno de los peores barrios de la ciudad, debido a los grandes índices de pobreza y a la delincuencia reinante en sus calles, ya retratadas por Charles Dickens en algunas de sus obras. En parte por su cercanía al río Támesis y los muelles, esta barriada al este de la City también fue tradicionalmente un lugar de asentamiento para inmigrantes, que llegaban en barcos de distintas partes del mundo. Los más numerosos, EastEnders. Con este palabra, los hugonotes (protestantes franceses) en el siglo XVIII; luego los judíos del Este y, más recientemente, los bengalíes. La multiculturalidad siempre ha sido, pues, otro de los rasgos más significativos y visibles de este suburbio, como también lo fue durante años su leyenda negra. Y es que el hacinamiento y la falta de trabajo y recursos de sus habitantes influyeron, a veces, en el aumento de la citada criminalidad, sobre todo a partir del siglo XIX, de modo que ostenta el honor de haber sido hogar de algunos de los criminales más famosos de la Historia. Turbios orígenes Antes de mi viaje al East End, había estado leyendo sobre la zona y, un día, charlando con un amigo londinense que vive en Madrid, me dispuse a contarle uno de mis hallazgos, así que, en un momento de la conversación le solté la (supuestamente) reveladora pregunta de: ¿Sabías que Jack El Destripador cometió sus crímenes en el East End? Me respondió con un escueto: “Claro, soy londinense”. En efecto, en Londres todo el mundo conoce el East End. Con sus luces y sus sombras. Entre ellas, que el célebre asesino de prostitutas cometió sus tropelías, allá por el siglo XIX, en sus callejones oscuros, concretamente cerca de Whitechapel, donde hoy encontramos oriz o n 93 especial la homónima y muy prestigiosa galería de arte (www.whitechapelgallery.org). Junto a él, otras celebridades de la delincuencia local han contribuido también a engrosar la mala reputación del lugar. Véanse afamados gánsteres, como los Kray Brothers, que, con sus negocios legales y con los que no lo eran tanto, se convirtieron en los amos absolutos del lugar. En fin, lo que parece claro es que, hasta hace apenas unos treinta años, el East End no era precisamente el paraíso terrenal. Entonces, esta zona más bien industrial, compuesta casi enteramente por almacenes de mercancías y talleres textiles, fue quedándose poco a poco obsoleta debido a la deslocalización, cuando la mayoría de las factorías comenzaron a ser trasladadas a Asia para abaratar costes de fabricación. Esos enormes almacenes y talleres empezaron a quedarse vacíos. Cambio radical Algunos artistas, atraídos por estos viejos locales, mucho más baratos que los de otras zonas de Londres, fueron instalándose por allí. Aquellos pioneros atrajeron a otros y éstos, a su vez, a otro tipo de comercios y locales, llenando el East End de energía nueva. Tal ha sido la transformación en estos diez o quince últimos años, que el otrora deprimido y deprimente suburbio, es ahora la zona más vibrante y de moda de la ciudad. Ver para creer. La tradicional amalgama de razas y culturas del East End se ha visto enriquecida en estos tiempos con la oleada creativa de gente del mundo del arte, el diseño o la moda, que se ha mudado a la zona para aportar su particular granito de arena. “Desde hace unos años, todo el que tiene alguna idea original viene aquí a montar su pequeño negocio”, comenta Pat Holmes, una londinense que se conoce el East End al dedillo. Hoy por hoy, esta zona, que aún apenas aparece en las guías de viajes por haber estado tradicionalmente fuera del circuito más turístico de Londres, es el área más floreciente y trendy de la ciudad. “A mucha gente le sigue pareciendo que lo más moderno de Londres son Camden Town, el Soho... Y, sí, el Soho no está nada mal, pero ¿Camden? Camden estaba de moda cuando yo era adolescente, ¡y de eso hace ya unos cuantos años!”, bromea Pat. Precisamente porque es un área redescubierta, porque no se considera turística ni hay rastro de las típicas tiendas de souvenirs, porque cuando llegas no sabes demasiado sobre ella, el East End tiene un sabor... más genuino. A diferencia del West End, no cuenta con plazas emblemáticas o renombrados monumentos a los que hacer la visita de rigor, así que puedes dedicar todo tu tiempo a perderte por las calles, vivir su 94 o ri z o n ambiente, pararte a mirar los escaparates o curiosear en sus cientos de originalísimos locales. Ése es su encanto. Antes de continuar, tengamos clara una cosa. El East End no es un barrio como tal, sino un área gigantesca. Aunque no tiene unos límites oficiales, su territorio tradicional abarcaba Tower Hamlets y Hackney, dos de los 32 distritos en que se divide Londres. Es lógico pensar que todo este territorio no es igual ni tiene las mismas características. Allí está Wapping, la zona de los muelles, cerca de la Torre de Londres; Canary Wharf, el complejo financiero más potente de la capital inglesa en los últimos años; sectores de casas de protección oficial o áreas residenciales, sin mucho interés desde el punto de vista viajero. Así que, al hablar del East End, el arty y molón, nos referimos a esa zona joven y modernilla que se extiende por Shoreditch, Whitechapel, Spitalfields... Dónde dormir Hotel Boundary. De diseño pero acogedor, ubicado en pleno centro del East End. Te encantará su terraza-bar de la azotea. 2-4, Boundary St. www.theboundary.co.uk Dónde comer Poppies. Para los que buscan algo 100% british. Es un restaurante ambientado en los años cincuenta, cuya especialidad es el fish&chips en todas sus versiones. 6, Hanbury St. www.poppiesfishandchips.co.uk Dónde comprar Beyond Retro. El East End es sinónimo de vintage. Hay infinidad de mercados y tiendas de segunda mano, aunque el referente es éste. 110, Cheshire St. www.beyondretro.com dónde tomar una copa LoungeLover. Club medio rococó-medio decadente, perfecto para tomar un cóctel (¡Madonna celebró allí su 50 cumpleaños!). Whitby St., 1. www.loungelover.uk.com Capital del curry Aunque no es su arteria principal, Brick Lane es algo así como el corazón de la zona. Su extremo sur comienza con un exótico arco que marca el inicio de Banglatown, como se ha bautizado este tramo de la calle por su alta concentración de bengalíes. Una tercera parte de la población actual del distrito de Tower Hamlets procede de Bangladesh, lo que la sitúa como la comunidad bengalí más grande del Reino Unido. No nos extraña que también sea conocida como la capital londinense del curry, teniendo en cuenta la cantidad de restaurantes de este tipo que hay por allí. Muy cerca, está la vieja fábrica de cerveza Old Truman Brewery, que dejó de funcionar en el año 1989. Sus dos edificios, a ambos lados de la vía, albergan ahora bares de copas, como Vibe (www.vibe-bar.co.uk); tiendas, entre ellas, Junky Styling (www.junkystyling.co.uk), donde se reciclan trajes para la confección de otras prendas; mercados como el Sunday Up Market (www.sundayupmarket.co.uk) o la sede de la Fashion East (www.fashioneast.co.uk), una iniciativa que, desde hace años, beca a diseñadores emergentes, que presentan sus colecciones en la pasarela de la London Fashion Week. Existen otros muchos sitios imprescindibles en Brick Lane. Laden Showrooms (laden.co.uk) es una tienda donde puedes comprar ropa de jóvenes diseñadores a precios muy asequibles. Y, más allá, Beigel Bake, el establecimiento de beigels más famoso de todo Londres, ¡abierto las 24 horas del día! Cerca de Brick Lane hay otras calles que ver. Por ejemplo, Redchurch Street, donde un antiguo taller textil ha sido reconvertido en Aubin (www.aubincinema.com), un cine, bar, galería y east end Es habitual encontrar infinidad de obras de arte urbano mientras se pasea por las calles de esta zona de Londres. oriz o n 95 especial Unos jóvenes charlan en un uno de los parques del East End. 96 ori zo n east end tienda de moda, todo en uno. Ya sea por imaginación o por aprovechar el espacio, lo de combinar negocios está por aquí a la orden del día. En esta misma calle encontrarás además Story, una decadente pizzería orgánica; Aesop, cosmética botánica unisex, o Chaat (www.chaatlondon.co.uk), un salón de té bengalí muy recomendable y a buen precio. Cheshire Street también merece una excursión. Aparte del comercio de ukeleles Duke of Uke (www.dukeofuke.co.uk) o de la original peluquería Taylor Taylor (www.taylortaylorlondon. com), donde desearías que te hicieran todos los peinados del mundo, esta calle te gustará por las tiendas de segunda mano. Lo vintage es casi otra de las religiones de la zona, pero, más aún aquí. Puedes pasar horas, de local en local, rebuscando entre sus antiguallas. Palabra. Un poco más allá, en Fournier Street, sobreviven todavía casas y viejas fachadas de comercios típicamente judíos. En un extremo de esta vía se ubica la Mezquita de Brick Lane (que antes fuera sinagoga) y, justo al otro, la famosa iglesia Christ Church, ejemplo claro del pacífico popurrí de etnias, culturas y religiones que se dan cita en esta zona de Londres. Justamente ahí está Commercial Street, en cuyo número 110 se encuentra el pub tradicional Golden Heart, de los más frecuentados. Entre Commercial Street y la concurrida Liverpool Station está el Mercado de Spitalfields (www.spitalfields.co.uk), todo un icono del East End. Aunque antiguamente era un importante bazar de frutas y verduras, fue remodelado hace años y, en la actualidad, es un moderno edificio acristalado, repleto de tiendas y restaurantes, en cuyos puestos se despacha toda suerte de ropa y artículos curiosos. Es cubierto, así que apúntatelo para un día de lluvia. Cerca encontrarás la sorprendente Dennis Severs’House (www.dennissevershouse.co.uk), una antigua casa hugonota del siglo XVIII (rehabilitada a modo de museo) y, semioculto en uno de los inmuebles georgianos de Elder Street, el taller del reputadísimo sastre Timothy Everest, que ha vestido a gentlemen como Ralph Fiennes o David Beckham (se puede entrar sin pedir cita y, como dato a tener muy en cuenta, también vende prêt-à-porter). Continuando por Commercial Street, llegas a Whitechapel Road, que en su interior acoge la homónima galería de arte moderno y contemporáneo –mencionada anteriormente–, en la que se han expuesto, entre otras, obras de Picasso o Frida Khalo. Al otro lado, Commercial Street se cruza con Shoreditch High Street, otra de las arterias importantes. Siguiendo Shoreditch hacia el Norte, además de descubrir un montón de sitios pintones, llegarás a Kingsland Road. Lo sonría a la cámara Las imágenes que acompañan este reportaje han sido realizadas con la cámara Canon EOS 5D Mark II (arriba), un prodigio técnico que, combinado con el talento de nuestra fotógrafa, da como resultado instantáneas tan llamativas como éstas. dos planes arty Galerías. Además de las muy famosas White Cube (48, Hoxton Sq. www.whitecube.com) y Whitechapel Gallery (77-82, Whitechapel High St. www. whitechapelgallery.org), existen otras muchas, sobre todo en la zona de Vyner street. La entrada suele ser libre. Arte urbano. Lo más atractivo del East End es que la creatividad no se queda entre cuatro paredes. Para ver las creaciones de Banksy y muchos otros artistas, puedes dar una vuelta a tu aire o apuntarte a un tour. En AlternativeLondon te mostrarán y explicarán lo mejor del lugar. www.alternativeldn.co.uk Para más información visita la página web www.visitbritain.es más peculiar de ella es que está llena de restaurantes vietnamitas, uno tras otro. Si quieres probar, Viet Hoa (www.viethoarestaurant.co.uk) es de las mejores opciones. También puedes echar un ojo a The Grocery (thegroceryrestaurant.com), un curioso establecimiento-comedor ecológico muy apetecible. Un poco más adelante está el Geffrye Museum (www.geffrye-museum.org.uk), instalado en un bonito recinto que antiguamente sirviera de residencia y que hoy alberga este museo sobre el interiorismo british desde el siglo XVII hasta la fecha. No muy lejos, está Hoxton Square. Junto a la movida nocturna (más alternativa, eso sí) de Brick Lane, es la principal zona de copas del East End. Zigfrid Von Underbelly (zigfrid.com) suele ser de los locales más animados. Allí mismo, pero a la luz del día, verás mejor la White Cube (whitecube.com), la otra galería de referencia del East End. Los domingos por la mañana, mientras una colorista y multiétnica procesión se dirige a oír misa a la iglesia católica de Santa Mónica, en el lado opuesto de la plaza, parroquianos de otro estilo hacen cola para tomar el brunch en The Breakfast Club. Al otro extremo de Shoreditch, en Bethnal Green, está Boxpark (www.boxpark.co.uk), el primer centro comercial pop-up (es decir, de quita y pon) de todo el mundo, cuyas micro tiendas, espacios de arte o cafés han sido instalados en llamativos containers industriales, que estarán allí durante los próximos cinco años. Aunque un poco más a desmano que todo lo anterior, merece la pena llegar hasta Victoria Park (cerca del final de Hackney Road), cada vez más pujante frente a Hyde Park en eso de acoger conciertos al aire libre. En estado puro La vida en este lado del East End no suele empezar hasta pasadas las doce del mediodía. Entonces, renace de nuevo. Ahora bien, para ver su ambiente en estado puro, nada como echar un vistazo a sus mercados dominicales, como el cien por cien floral Columbia Road Market (columbiaroad.info) –¡ojo no se te ocurra perderte las tiendas de los alrededores!–, o el de Brick Lane (www.visitbricklane.org), de segunda mano y gastronomía de todo el mundo, un verdadero mar de gente, vapores, olores, colores... En el camino de uno a otro, me desoriento un poco al tomar un atajo, y Siân Finn, trabajadora de un centro social del East End, me guía amablemente mientras me va contando: “Los ingleses siempre hemos conocido la riqueza histórica y cultural del East End, pero ahora estamos descubiendo esta otra cara. Paseando por aquí te das cuenta de que es la parte más auténtica de Londres”. oriz o n 97 portfolio Así era Londres Fue la capital y el centro del mundo en el siglo XIX y, a la vista de estas imágenes, podemos soñar con esta ciudad de almas perdidas. Imagen cotidiana del Lambeth Bridge en el año 1896, que cruza el río Támesis en la parte central de Londres. 98 o ri zo n portfolio o riz o n 99 portfolio Imagen de 1893 en la que vemos la recién construída estatua del Ángel de la Caridad Cristiana, en Piccadilly Circus. 100 o r i zo n Con la llegada del siglo XX, comienzan a hacer su aparición los carteles publicitarios luminosos, como éste de 1907. oriz o n 1 01 portfolio Comerciantes y transeuntes en una concurrida calle comercial hacia los últimos años del siglo XIX. 102 or i zo n portfolio Los primeros automóviles conviven con los carruajes en esta fotografía tomada en Oxford Circus en 1910. o riz o n 1 03 Obreros que participan en la demolición de unos edificios para las obras de rehabilitación de Holborn-Strand, en 1902. 104 or i z o n o riz o n 1 05 portfolio Imagen de Catherine Court en 1913, un estrecho callejón ubicado entre Seething Lane y Trinity Square. 106 orizon portfolio Una elegante mujer en la puerta de la South American Missionary Society, 1-9 Clifford's Inn. fotografías del libro lost london, publicado por english heritage (www.english-heritage.org.uk). oriz o n 1 07 el viajero 108 or i zo n el viajero La declaración de George Silverman ilUSTraCioNeS De riCarDo Cavolo reproducimos un capítulo de una de las obras menos conocidas pero más bellas de CHARLES DICKENS, en la que el gran escritor británico del siglo XiX nos narra la desgarradora historia de este huérfano. Pasen y lean. E L HErMAno HAWKYArD (como insistía en que le llamara) me metió en la escuela, y me dijo que trabajara para salir adelante. —no tendrás problemas, George —me dijo—. He sido el mejor siervo que el Señor ha tenido a su servicio durante estos treinta y cinco años (¡oh, sí!), y Él conoce el valor de un siervo como el que yo he sido para Él (¡oh, sí, Él lo sabe!), y Él hará que tu educación prospere como parte de mi recompensa. Él hará eso, George. Él lo hará por mí. Desde el principio me desagradaba aquella familiaridad con los designios del sublime e inescrutable Todopoderoso por parte del hermano Hawkyard. A medida que me hacía más y más juicioso, menos me gustaba. Su forma de reafirmarse entre paréntesis —como si, conociéndose a sí mismo, dudara de su propia palabra— también la encontraba repelente. no podría decir lo que me supuso esta aversión, pues temía que fuera parte de mi egoísmo. Con el paso del tiempo, conseguí la ayuda de una buena fundación, y no le costé nada al hermano Hawykard. Una vez me hube abierto camino, trabajé aún más duro, con la esperanza final de conseguir presentarme a la Universidad y obtener una beca. Mi salud nunca ha sido muy fuerte (creo que no consigo librarme de los vapores del sótano de Preston), lo que, junto al mucho trabajo y alguna debilidad, hizo que se me llegara a considerar de nuevo, por parte de mis compañeros de estudios, un asocial. Durante mi época de colegial becado estuve a unas pocas millas de la congregación del hermano Hawkyard, y siempre que estaba de, lo que llamábamos, permiso de domingo, me acercaba hasta allí como él me había pedido. Antes de que la propia experiencia me forzara a reconocer que, fuera de su lugar de reunión, aquellos hermanos y hermanas no eran mejores que el resto de la familia humana, sino, en general, y por decirlo suavemente, tan malos como la mayoría (en lo que respectaba, por ejemplo, a practicar el engaño en el peso en sus tiendas, o a no contar la verdad)... Sí, antes de verme forzado a reconocer sus prolijos discursos, su desmesurada vanidad, su atrevida ignorancia y su revestir al Supremo Gobernante de Cielo y Tierra con su propia y triste avaricia y mezquindad, me impresionaron fuertemente. Y durante un tiempo sufrí la tortura de preguntarme a mí mismo si aquel joven, ambicioso y demoníaco espíritu mío no podría estar secretamente presente en el fondo de mi posterior falta de aprecio por aquella gente. El hermano Hawkyard era el más célebre orador de aquella asamblea, y generalmente ocupaba el primero el estrado (había un pequeño estrado, con una mesa enci- oriz o n 1 09 el viajero ma, en lugar de un púlpito), los domingos por la tarde. Era droguero de profesión. El hermano Gimblet, un anciano de cara hosca, con el gran cuello de la camisa gastado, sobre el que se anudaba un pañuelo de lunares azules que le llegaba casi hasta la coronilla, también era droguero y orador. El hermano Gimblet profesaba la más profunda admiración hacia el hermano Hawkyard, pero (pensé más de una vez) también le guardaba un rencor repleto de envidia. Quienquiera que examine estas líneas, tómese amablemente la molestia de leer dos veces mi solemne promesa de que lo que escribo sobre el lenguaje y las costumbres de la congregación en cuestión lo escribo escrupulosa y literalmente, exactamente desde la vida y desde la verdad. El primer domingo después de haber ganado lo que durante tanto tiempo me había esforzado por conseguir, y cuando era seguro que iba a ir a la Universidad, el hermano Hawkyard acabó así una larga exhortación: —Bien, amigos y hermanos pecadores, ahora os digo que cuando empecé, no sabía ni una palabra de lo que iba a deciros (¡Y no, no lo sabía!), pero me daba lo mismo, porque sabía que el Señor pondría en mi boca las palabras que yo quisiera. —¡Así es! —el hermano Gimblet. —Y Él puso en mi boca las palabras que yo quería. —¡Eso hizo! —el hermano Gimblet. —¿Y por qué? —¡Ea, a ver! —el hermano Gimblet. —Porque yo he sido su fiel siervo durante treinta y cinco años, y porque Él lo sabe. ¡Durante treinta cinco años! Y Él lo sabe, ¡ojo! Conseguí las palabras que yo quería a cuenta de mi salario. Las obtuve del Señor, compañeros en el pecado. ¡A cuenta! Dije: «Aquí hay un montón de salarios adeudados; cobremos algo, a cuenta». Y yo cobré, y ahora os pago a vosotros, y vosotros no lo envolveréis en una servilleta, ni siquiera en una toalla, ni en un pañuelo, sino que lo depositaréis a un buen interés. Muy bien. Ahora, hermanos y hermanas pecadores, concluiré con una pregunta, y haré que tenga una forma tan simple (¡Con la ayuda del Señor, después de treinta y cinco años, así lo espero!) que el Diablo no será capaz de confundirla en vuestras cabezas, lo cual le llenaría de alborozo. —Eso sería muy propio de él, viejo y taimado canalla —el hermano Gimblet. —Y la pregunta es ésta: ¿son sabios los ángeles? —No lo son. Ni lo más mínimo —el hermano Gimblet, con la mayor seguridad. —No lo son. ¿Y dónde está la prueba? Enviada al instante por la mano del Señor. Bien, aquí y ahora hay uno entre nosotros que posee toda la sabiduría de la que se le podría embutir. Su abuelo era —esto no lo había oído yo antes— 110 or i zo n uno de nuestros hermanos. Era el hermano Parksop. Eso es. Parksop. Hermano Parksop. Se le conocía con el nombre de Parksop, y era miembro de esta hermandad. Por lo tanto, ¿no era él el hermano Parksop? —Tenía que serlo, no lo podía evitar —dijo el hermano Gimblet. —Bien, él dejó entre nosotros a alguien que está presente aquí y ahora... Lo dejó al cuidado de uno de sus hermanos pecadores (y, atención, este hermano pecador era en sus tiempos un pecador más grande que cualquiera de vosotros, ¡alabado sea el Señor!): el hermano Hawkyard. Yo. Yo le proporcioné sin honorarios ni recompensa (sin un ápice de mirra, ni de incienso, ni siquiera de ámbar, ni mucho menos de panales de miel) toda la sabiduría posible. ¿Le ha traído esto hasta nuestra congregación? No. ¿Acaso no hemos tenido algunos hermanos y hermanas ignorantes que no distinguían la «o» de la «s»? Muchos. Luego los ángeles NO son sabios, luego apenas si se saben la cartilla. Y ahora, amigos y hermanos pecadores, habiendo llegado hasta aquí, ¿algún hermano aquí presente, usted quizás, hermano Gimblet, rezaría un poquito por nosotros? El hermano Gimblet se encargó de la sagrada función, después de pasarse la manga por la boca, y masculló: —¡Está bien! Tampoco veo yo la forma de daros a ninguno de vosotros donde más os conviene. Dijo esto con una sonrisa siniestra, y luego comenzó a rugir. De lo que nos teníamos que guardar particularmente, según sus peticiones, era: de despojar al huérfano, de la supresión de las intenciones testamentarias por parte de un padre o (pongamos) un abuelo, de la apropiación de las propiedades inmobiliarias del huérfano, simulando condescender por caridad hacia el agraviado, y esa clase de pecados. Finalizó con la petición «¡Danos la paz!», lo cual, en lo que a mí respecta, era muy necesario después de veinte minutos de sus rugidos. Aunque no lo vi mirar de reojo al hermano Hawkyard, e incluso aunque no escuché el tono en el que le felicitaba éste por el vigor con el que había bramado, tendría que haber detectado un ruego malicioso en aquella oración. Muy parecidas sospechas sin fundamento me habían pasado por la mente en mis primeros años de escuela, y siempre me habían causado un gran malestar, ya que eran de naturaleza ambiciosa, y estaban lejos, muy lejos, del espíritu que me había apartado de Sylvia. Eran sospechas mezquinas, sin una sombra de prueba, dignas de haber nacido en aquel insalubre sótano. No sólo eran sospechas sin prueba, sino que eran a prueba de pruebas. Pues ¿no era yo mismo la prueba viviente de lo que había hecho el hermano Hawkyard? Y sin él ¿cómo podría haber advertido yo cómo miraba el cielo, lleno de lástima, a aquel desgraciado chico de Hoghton Towers? el viajero Aunque el temor a reincidir en mis días de egoísmo salvaje ejercía menos fuerza sobre mí según iba acercándome a la edad adulta y podía actuar por mí mismo en mayor grado, aún estaba en guardia contra cualquier tendencia a semejante recaída. Después de que aquellas sospechas no me dejasen en paz, me preocupó no ser capaz de apreciar los modales del hermano Hawkyard o la religión que profesaba. Así pues, ocurrió que, mientras volvía caminando aquella tarde de domingo, pensé que un buen acto de desagravio por cualquier ofensa que mis pensamientos le hubieran proferido, aun sin quererlo, sería escribirle y entregarle en mano, antes de ir a la Universidad, un completo reconocimiento de su bondad para conmigo, un generoso elogio en prueba de agradecimiento. Podría servirle como un mérito suyo contra cualquier sórdido escándalo de un hermano u orador rival, o de cualquier otro tipo. Por consiguiente, escribí el documento con mucho cuidado. Debería añadir que también con mucho sentimiento, pues me iba conmoviendo según lo escribía. Sin tareas escolares ya, en el breve intervalo entre dejar la fundación e ir a Cambridge, tomé la determinación de caminar hasta su oficina y entregárselo en mano. Era una tarde de invierno cuando llamé a la puerta de su pequeña oficina, que estaba en el extremo más alejado de su estrecha tienda, de techos muy bajos. Mientras lo hacía (tras haber entrado por el patio trasero, donde se almacenaban las cajas y toneles, y donde estaba la inscripción camino privado a la oficina), un dependiente me llamó desde el mostrador en el que estaba ocupado. —El hermano Gimblet —dijo el dependiente, que era uno de los de la hermandad— está con él. Pensé que aquello era lo mejor para mi propósito y me armé de valor para llamar otra vez a la puerta. Estaban hablando en voz baja y el dinero corría, porque yo oía contarlo. —¿Quién es? —preguntó el hermano Hawkyard. —George Silverman —respondí, sosteniendo la puerta—. ¿Puedo pasar? Los hermanos parecían tan sorprendidos de verme que me sentí más tímido de lo habitual. Pero tenían un aspecto bastante cadavérico a la temprana luz de gas, y quizás aquella circunstancia exageraba la expresión de sus caras. —¿Qué pasa? —preguntó el hermano Hawkyard. —Sí, ¿qué pasa? —preguntó el hermano Gimblet. —Absolutamente nada —dije, extrayendo mis papeles apocadamente—, traigo una carta de mi parte. —¿De tu parte, George? —chilló el hermano Hawkyard. —Para usted —dije yo. —¿Y para mí, George? Empalideció más aún y la abrió con prisas, pero al echarle un vistazo y ver en general lo que era, perdió las prisas, recuperó su color y dijo: —¡Alabado sea el Señor! —¡Así sea! —gritó el hermano Gimblet—. ¡Bien dicho! Amén. Entonces, el hermano Hawkyard, con un tono más vivo, dijo: —Debes saber, George, que el hermano Gimblet y yo vamos a hacer de nuestros dos negocios uno. Vamos a establecer una sociedad. Lo estábamos arreglando ahora. El hermano Gimblet se va a llevar una mitad limpia de los beneficios (¡Oh, sí se la llevará! Tendrá hasta el último cuarto de penique). —¡Deo volente! —dijo el hermano Gimblet con el puño derecho fuertemente apretado sobre la pierna. —¿No hay objeción —prosiguió el hermano Hawkyard— a que lea esto en voz alta, George? Como, después de la homilía del día anterior, eso era lo que yo deseaba en realidad que hiciera, le supliqué que leyera en voz alta. Así lo hizo, mientras el hermano Gimblet escuchaba con una sonrisa perversa. —En buena hora llegué aquí —dijo, entornando los ojos—. En buena hora. Del mismo modo pinté ayer, para terror de los malvados, un carácter diametralmente opuesto al del hermano Hawkyard. Pero ha sido el Señor quien lo ha hecho: yo le sentía allí mientras transpiraba. Después de aquello, ambos propusieron que asistiera a la congregación una vez más antes de mi marcha definitiva. A qué se sometería mi tímida reserva al ser sermoneada y objeto de oración expresamente ya lo sabía de antemano. Pero consideré que sería por última vez, y que podría sumarse al peso de mi carta. Era bien conocido por los hermanos y las hermanas que no había un sitio reservado para mí en su paraíso, y si yo mostraba esta última señal de deferencia hacia el hermano Hawkyard de modo ostensible, a pesar de mis pecadoras inclinaciones, "Era bien conocido por los hermanos que no había un sitio reservado para mí en su paraíso" o riz o n 111 el viajero 112 orizon el viajero podría acudir a socorrer un poco mi declaración de que él se había portado bien conmigo, y de que yo le estaba agradecido. Tras convenir que no realizarían ningún esfuerzo explícito para convertirme (lo cual hubiera implicado los revolcones de varios hermanos y hermanas por el suelo, manifestando que sentían todos sus pecados amontonados en el costado izquierdo, pesando tantas o tantas otras libras, como sabía por lo que había visto de aquellos repugnantes misterios), lo prometí. Desde la lectura de mi carta, el hermano Gimblet había estado limpiándose un ojo con el borde de su pañuelo a intervalos mientras sonreía para sí. Sin embargo, aquello era ya un hábito del hermano Gimblet: sonreír de una manera desagradable incluso al predicar. Me viene a la memoria como algo extraordinariamente repulsivo el gruñido de placer con el que solía detallar desde el estrado los tormentos reservados a los inicuos (es decir, toda la creación humana, a excepción de aquella hermandad). Dejé a los dos que arreglaran las cláusulas de su sociedad y contaran el dinero, y no volví a verlos hasta el domingo siguiente. El hermano Hawkyard murió dos o tres años después, legando todo lo que poseía al hermano Gimblet, en virtud de un testamento fechado (según me han dicho) aquel mismo día. Ahora estaba en paz conmigo mismo, sabiendo que había vencido mi propio recelo y que reparaba el buen nombre del hermano Hawkyard frente a la visión llena de prejuicios de un rival. Llegó el domingo y fui a aquella tosca capilla en un estado menos sensible del habitual. ¿Cómo podría yo prever que el delicado, quizás enfermo, rincón de mi cerebro que me hacía estremecer y encogerme cuando lo tocaban, o cuando apenas se acercaba alguien a él, iba a ser manoseado como tema de toda la ceremonia? En esta ocasión se le encomendó al hermano Hawkyard la oración, y al hermano Gimblet el sermón. La oración abriría la ceremonia, el sermón vendría después. Ambos, los hermanos Hawkyard y Gimblet, estaban en el estrado: el hermano Hawkyard de rodillas delante del altar, a disgusto pero listo para rezar; el hermano Gimblet, sentado y pegado a la pared, sonriente y listo para predicar. —ofrezcamos el sacrificio de la oración, hermanos y hermanas pecadores. Sí, pero el sacrificio era yo. Era por nuestro pobre, depravado y ambicioso hermano aquí presente por quien se luchaba. La incipiente carrera de este nuestro aún dormido hermano podría conducirle a convertirse en ministro de lo que llamaban la iglesia. A eso era a lo que él aspiraba. La iglesia. no la capilla, Señor. La iglesia. no hay párrocos, ni vicarios, ni archidiáconos, ni obispos, ni arzobispos, en la capilla, pero, ¡oh, Señor!, tantísimos en la iglesia. Protege a nuestro pecador hermano de su amor al lucro. Limpia del pecho de nuestro aún dormido hermano su pecado de ambición. La oración tenía muchas más palabras, pero no venía a decir nada más que lo ya dicho aquí. A continuación, el hermano Gimblet avanzó y escogió (como yo sabía que haría) el texto «Mi reino no es de este mundo». ¡Ay!, pero, ¿de quién era, compañeros míos pecadores? ¿De quién? Pues bien, era de nuestro hermano aquí presente. El único reino del que tenía alguna idea era de este mundo. —¡Así sea! —varios de la congregación. —¿Qué hizo la mujer cuando perdió la moneda? Fue a buscarla. ¿Qué debió hacer nuestro hermano cuando erró la ruta? —ir a buscarla —una hermana. —ir a buscarla, cierto. Pero, ¿debe buscarla por el buen o por el mal camino? —Por el bueno —un hermano. —¡Así hablaron los profetas! Tiene que buscarla por el buen camino, o no podrá encontrarla. Pero él le había dado la espalda al buen camino, y no iba a encontrarla. Ahora bien, mis compañeros en el pecado, para mostraros las diferencias entre la inclinación ambiciosa y la inclinación desinteresada, entre los reinos que no son de este mundo y los reinos de este mundo, aquí tenemos una carta sobre el hermano Hawkyard escrita por nuestro hermano de ambiciosas inclinaciones. Juzgad, al escuchar su lectura, si es o no el hermano Hawkyard el fiel siervo que el Señor tenía en mente el pasado día, sin más, cuando Él os dibujó el retrato del siervo fiel. Pues fue Él quien lo hizo, y no yo. ¡no lo dudéis! Después, el hermano Gimblet se abrió paso a través de mi redacción rugiendo y graznando, y así durante una hora. El servicio religioso se cerró con un himno, en el cual los hermanos bramaron y las hermanas me chillaron al unísono que yo estaba siendo engañado por los ardides del lucro mundano mientras que ellos eran arrullados sobre las aguas del amor más dulce; que yo luchaba en la oscuridad contra Mammón, mientras que ellos viajaban en el Arca de noé. Escapé de todo aquello con el corazón y el espíritu abatidos, no porque fuese tan débil como para considerar intérpretes de la Divina Sabiduría y Majestad a aquellas criaturas de estrechas miras, sino porque estaba lo suficientemente débil como para sentir que era fruto de mi mala suerte el ser incomprendido y tergiversado justo ahora, cuando intentaba dominar con más fuerza que nunca cualquier resurgir en mi interior de los intereses mundanos, y cuando más esperaba lograr el éxito, a fuerza de intentarlo fervorosamente. ‘La declaración de George Silverman' está publicado por la editorial Periférica. www.editorialperiferica.com oriz o n 113 ¿Cómo bautizarías el nuevo Club de Viajeros de Orizon? Mándanos un tweet con tu propuesta. La más ingeniosa se llevará un viaje a Cancún-Riviera Maya para dos personas*. #ClubViajerosOrizon twitter.com/RevistaOrizon *El viaje será de siete días de duración y tendrá lugar entre el 20 de mayo y el 31 de diciembre de 2012. Hotel de lujo en régimen de todo incluido. Vuelos y estancia sujetos a disponibilidad. Tasas aéreas incluidas. Viaje no reembolsable por dinero (ni el vuelo ni las estancias). BITácora 118 Orbit preside la Villa Olím- 120 Peter Cook ha creado el La torre ArcelorMittal pica y ya es un nuevo símbolo para la ciudad. EL prestigioso arquitecto Estadio Olímpico más eficiente jamás construído hasta la fecha. 126 del Festival de Publicidad 129 Cure encabeza la amplia Llega una nueva edición El Sol, que a partir de este año cambia San Sebastián por Bilbao. La legendaria banda The propuesta musical del festival Primavera Sound de Barcelona. tiempo de juegos Las olimpiadas marcarán un antes y un después para Londres, especialmente en el Este de la ciudad, zona que ha sido profundamente reformada para acoger la Villa Olímpica. o riz o n 115 bitácora 116 or i z o n juegos olímpicos Escenario olímpico Las instalaciones deportivas que acogerán las pruebas de los próximos JJ.OO. de Londres siguen las principales tendencias arquitectónicas contemporáneas. por alfonso ussi a horned o o riz o n 117 bitácora Masterplan Villa Olímpica ArcelorMittal Orbit Son veinte hectáreas entre Hackney y Newham que cruzan el Támesis hasta Greenwich (imagen de arriba). El Parque Olímpico reparte arquitectura entre islas conectadas por puentes que cruzan los canales. Londres fue la elegida porque se diseñó una regeneración global de toda la deteriorada y obsoleta franja industrial del Este: El Lower Lea Valley Regeneration Strategy configura la herencia de una vieja y contaminada zona industrial convertida en un gran distrito urbano. La clave está en Stratford International, un mega intercomunicador de trenes (metro, nacional y eurostar) y el desencadenante de parte de todo esto. El proyecto urbano es especialmente interesante por el escenario natural, se ha diseñado una topografía que controla los niveles que se inundan con las subidas y bajadas del caudal del Támesis. Esto recupera la fauna local y ofrece un escenario sostenible para los JJ.OO. y usos futuros. Se conecta la ciudad, Este y Oeste dejan de estar separados por una barrera industrial. Es una estrategia urbana sostenible ecológica y económicamente. Esta vez, tras el evento, no quedará una ciudad fantasma. Es una pieza de arte permanente de 115 metros de altura que se encuentra entre el estadio de Peter Cook y el centro Acuático de Zaha Hadid y que presidirá la Villa Olímpica (imagen de la derecha). Diseñada por el escultor anglo-indio Anish Kapoor y con ciertas reminiscencias a la parisina Torre Eiffel para algunos, la construcción aspira a convertirse en un nuevo símbolo de la ciudad y un lugar de peregrinación para los turistas una vez que los Juegos Olímpicos hayan terminado. Se puede subir a través de un gran ascensor y bajar a pie por unas escaleras. Hay un restaurante de lujo arriba y un mirador desde el que se puede admirar todo el conjunto arquitectónico de la Villa Olímpica. La intención era producir la sensación de inestabilidad, de movimiento constante, ya que la forma varía según caminas a su alrededor. Es un objeto que no se puede percibir como una imagen concreta, que se debe observar desde todas sus perspectivas. Es necesario un viaje entorno y a través de la torre. Requiere, como la de Babel, la participación del público. Existe una especie de sentido medieval entorno a la intención de alcanzar el cielo, una espiral que aspira a atravesar las nubes de forma mítica. 118 orizon juegos olímpicos La torre ArcelorMittal Orbit, un nuevo icono en la ciudad obra del escultor anglo-indio Anish Kapoor. o riz o n 119 bitácora El Estadio Olímpico, obra del arquitecto Peter Cook, el más sostenible construído hasta la fecha. 120 or i zo n juegos olímpicos Estadio Olímpico Centro Acuático El estudio de arquitectura HOK Sport y Sir Peter Cook –fundador del influyente grupo arquitectónico de vanguardia Archigram– han ideado el Estadio Olímpico más sostenible jamás construido (imagen de la izquierda). Utiliza un 75% menos de acero que una estructura normal de estas dimensiones, hormigón de bajo contenido en carbono reciclado de residuos industriales. Reduce, reutiliza, recicla; éstos son los principios en los que se ha fundamentado la estructura que ha conducido el proyecto. Viniendo de Peter Cook no esperábamos menos. Al fin y al cabo, alguien tenía que compensar las toneladas de despilfarro de Zaha Hadid y su Centro Acuático... Sorprende su aspecto y su carácter temporal. Se observa un énfasis en la funcionalidad y flexibilidad más que en la creación de una arquitectura icónica. Incluso se han colocado antiguas tuberías de gas coronando el estadio. Ésa era exactamente la intención, minimizar al máximo toda la estructura temporal: Tiene una capacidad para 80.000 espectadores y tras los JJ.OO. sólo 25.000 asientos serán permanentes. Los 55.000 restantes pertenecen a una estructura que se desmontará después de la competición. Obra de la prestigiosa arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid (imagen de arriba), este impresionante y bello edificio se inspira en el movimiento geométrico de las olas del mar como homenaje a las actividades que se desarrollarán en su seno: pruebas de natación, saltos de trampolín y sincronizada. Situada en el borde sudeste del recinto olímpico, junto al Stratford City Bridge, esta construcción –realizada a base de hormigón y vidrio– se ha diseñado para acoger a 17.500 espectadores durante la competición olímpica, mientras que permitirá una óptima capacidad para 2.000 personas en su uso posterior al evento. El Centro Acuático crea espacios y un entorno en armonía con el resto de edificios de la Villa Olímpica y con el río que se encuentra dentro de ésta. No cabe duda de que el resultado formal de la arquitectura de Zaha Hadid es espectacular, elegante, monumental... Sin embargo, pasada la veneración inicial de la belleza cabe plantearse la calidad, la funcionalidad y el sentido común económico. Sus obras son estructuras pesadas y esconden mucho más de lo que cuentan a simple vista. o riz o n 121 bitácora Velódromo Olympic Park Basketball Arena Sir Michael Hopkins, antiguo presidente de la Architectural Association, nos deleita con este elegante velódromo (imagen arriba a la izquierda), sereno, esbelto, de madera cálida y finísima cubierta suspendida desde el perímero. Aunque los dos adjetivos que mejor lo definen son ergonómico y eficiente. Esta combinación perfecta de forma y función son las claves por las que fue elegido como el mejor edificio del año en el Reino Unido en los premios AJ 100. El Velódromo se asienta silenciosamente en el parque olímpico pero es un ejemplo de sencillez, elegancia y eficiencia. Por eso también ha sido reconocido por Riba (Royal Board of British Architects) como edificio bien resuelto respondiendo ingeniosamente al encargo. Tiene una capacidad máxima de 6.000 butacas, está acristalado y cuenta con visibilidad tanto hacia su interior como hacia su exterior. Los espectadores podrán moverse libremente por el edificio manteniendo contacto visual con la pista de alta velocidad en todo momento, donde tendrán lugar las pruebas de ciclismo en pista cubierta. Otro gran ejemplo de una estructura temporal (arriba a la derecha) que será desmantelada después de los Juegos Olímpicos y reciclará dos terceras partes del material empleado, ya que se podrá instalar en cualquier otro lugar del Reino Unido. El Olympic Basketball Arena tiene una capacidad máxima de 12.000 espectadores, los cuales acudirán a ver los partidos de baloncesto y las semifinales y la final de balonmano (además del rugby en silla de ruedas que se disputará en los Juegos Paralímpicos). Además, esta construcción también será utilizada como área de espera para los atletas durante las ceremonias de apertura y clausura. El edificio ha sido levantado sobre una gran estructura metálica con cerramiento textil tensado envolviendo el volumen total, tanto para la cubierta como para los parámentos verticales. El resultado es eficiente y barato (se cumplieron a rajatabla los tiempos y los presupuestos iniciales). Con efectos retro-iluminados se transformará su apariencia, su textura y su juego de luces y sombras. 122 orizon juegos olímpicos Olympic Park Handball Arena Chobham Academy Conocido también como Copper Box (caja de cobre, en español) debido al material predominante en su construcción (imagen de la izquierda). En los próximos JJ.OO. aquí se jugarán las competiciones de balonmano (excepto la semifinal y final) y de pentatlón moderno. Además de las de goalball de los Paralímpicos. El estadio cuenta con más de 3.000 metros cuadrados de revestimiento de cobre en su exterior, en su mayoría reciclado, para darle un aspecto distintivo y natural a medida que pasen los años. Tiene una capacidad máxima de entre 6.000 y 7.000 espectadores y está rodeado por una explanada a su alrededor, de forma que las personas que estén en el exterior del pabellón pueden acercarse y ver la competición que se esté disputando en el interior, ya que cuenta con una pared de cristal en la parte baja del edificio. Esto a su vez permite recibir luz natural durante el día. Además, los asientos son retractables, lo que permite cambiar los espacios con total flexibilidad. Se trata de una instalacón deportiva permanente, por lo que seguirá en pie una vez que los Juegos Olímpicos hayan llegado a su fin para el uso y disfrute de los londinenses. El Chobham Academy será el centro de operaciones de la Villa Olímpica. Tras los Juegos será un foco de actividad y un componente fundamental para que el legado de la ciudad olímpica se active. Es un proyecto muy interesante, más que por su arquitectura por su programa. Albergará a 1.800 estudiantes y está enfocado tanto a niños como a adultos. En su interior se desarrollarán un gran número de actividades de día orientadas hacia la integración de la educación y el deporte. Ofrecerá iniciativas sociales articulando la cultura, el deporte y la familia, con lo que representa a una nueva generación de centros educativos, siendo uno de los más contemporáneos de Europa. Allford Hall Monaghan Architects han realizado un proyecto que ofrece una alta calidad de luz en el espacio interior, es una arquitectura eficiente, económica y de bajo mantenimiento. Ofrecerá un escenario óptimo a sus futuros inquilinos. Una gran cubierta practicable se conviertirá en uno de los espacios más agradables que inspirarán a futuros deportistas con espectaculares vistas sobre Londres. oriz o n 123 bitácora El Millenium Dome del arquitecto Richard Rogers. En la página siguiente, vista aérea de la zona en la que se encuentra la Villa Olímpica. Millenium Dome Elemento clave del proyecto urbanístico de la Península de Greenwich (imagen de arriba), fue realizado por el arquitecto Richard Rogers para conmemorar y celebrar la llegada del nuevo milenio. Construído en tiempo (en 15 meses) y bajo presupuesto (43 millones de libras) ha sido premiado en múltiples ocasiones. Inicialmente acogió una importante exposición en el año 2000 y posteriormente se estableció como zona deportiva cubierta. En los próximos Juegos Olímpicos albergará la gimnasia rítmica. Mike Davies fue el director del proyecto, y lo define como “la proyección de cometas y estrellas en la superficie de la cúpula y en su detallada estructura racionalizada”. Doce mástiles –uno por cada mes del año o cada hora de la esfera del reloj– de cien metros de altura sostienen con mallas de cables una cubierta textil tensada con fibra de vidrio. Cuenta con una superficie de 100.000 metros cuadrados, 50 metros de altura y un diámetro de 365 metros, lo que la convierten en la mayor estructura de techo único del mundo. Destaca por su impecable solución constructiva y su extraordinaria calidad. 124 o r i zo n Si no te quieres perder detalle de lo que pase en los próximos Juegos Olímpicos de Londres, no te separes del nuevo Galaxy S Wifi 4.2 de la firma Samsung, patrocinador oficial de este gran evento deportivo. Aparte de su diseño totalmente actual, este ligero smartphone (pesa apenas 118 gramos) te ofrece una conectividad total estés donde estés, para que puedas disfrutar de los vídeos de nuestros deportistas ganando medallas con la calidad que se merecen gracias a su pantalla de 4,2’’ WVGA TFT y a su excelente sistema de audio SoundAlive. juegos olímpicos o riz o n 125 bitácora Barcelona arte: Salón Int. del Cómic Este festival, el más importante de España en la materia, celebra su treinta aniversario homenajeando por todo lo alto a uno de los grandes maestros y pioneros del cómic, Winsor McCay (18691934), con una exposición de carácter antológico. Se podrán ver páginas originales de su mítica serie Little Nemo in Slumberland, además de los ejemplares de prensa de la época donde se publicaron. Además, en el recinto de 19.000 m2 donde tendrá lugar el certamen, en el palacio 8 de Fira de Barcelona, también se mostrarán las últimas novedades editoriales y acudirán dibujantes consagrados como Enrico Marini o Craig Thomson junto a otros (hasta ahora) desconocidos talentos. Salón Internacional del Cómic, Barcelona, del 3 al 6 de mayo. www.ficomic.com EDIMBURGO Festival iberoamericano de la comunicación publicitaria el sol tormenta de (buenas) ideas más prestigioso en comunicación comercial será muy especial, ya que estrena nueva sede. El Sol abandona la playa de La Concha y la ciudad de San Sebastián para comenzar una nueva etapa en Bilbao. Se ha seleccionado la capital vizcaína como nuevo escenario de este festival publicitario debido a la calidad de las modernas infraestructuras de las que se ha dotado la ciudad en los últimos años, sus buenas conexiones aéreas estatales e internacionales, el modelo de transformación urbano y la imagen de vanguardia que Bilbao transmite al mundo entero. En esta línea, el evento se celebrará en cuatro localizaciones excepcionales. En el Palacio Euskalduna tendrán lugar los pases audiovisuales, las exposiciones y las conferencias de prensa. En el Museo Guggenheim se realizará la recepción de los participantes en el certamen, mientras que en la Alhóndiga Bilbao se celebrará el 3 de junio una jornada de puertas abiertas en la que se emitirá la Bobina Histórica El Sol, que contiene los anuncios y campañas ganadoras desde aquella primera edición de 1985. Aunque el momento álgido tendrá lugar el 2 de junio en el Bilbao Arena –recientemente galardonado como el Mejor Edificio del año 2011 por la prestigiosa página web de arquitectura Arch Daily–, donde se celebrará la gala de clausura del evento y la entrega de premios. Una de las principales novedades de este año será la inclusión por primera vez de las secciones de Branding (creación de marca) y Diseño, que compartirán protagonismo con las otras once categorías oficiales del certamen. la próxima edición del certamen iberoamericano Festival Iberoamericano de la Comunicación Publicitaria El Sol, Bilbao, del 31 de mayo al 3 de junio. www.elsolfestival.com 126 or i z o n celebraciones populares: Beltane o Fiesta del Fuego Se trata de un antiguo ritual celta que se celebraba cada año para festejar la llegada del verano pastoral, cuando se llevaba el ganado hacia los pastos verdes. Hoy en día esta tradición ha ido derivando en un festejo en el que el fuego es el principal protagonista. Tiene lugar la noche del 30 de abril en el Calton Hill, una colina en el extremo oriental de New Town desde donde se puede apreciar unas vistas espectaculares de Edimburgo. El lugar, con un monumento griego al estilo del Partenón, es el sitio ideal para convocar a la tribu en una ceremonia pagana muy colorida donde se mezcla el fuego de las hogueras y antorchas, el sonido de los tambores y los disfraces. Beltane o Fiesta del Fuego, Edimburgo (Escocia), del 30 de abril al 1 de mayo. beltane.org aGENDa oz “El negocio del cine es macabro, grotesco: es una mezcla de partido de fútbol y de burdel”, el cineasta italiano Federico Fellini (1920-1993). madrid múSICa: Concierto de Coldplay ParÍs arte: exposición Signé Dalí El Espace Dali, situado en pleno corazón de Montmartre, acoge una muestra que descubre el universo onírico del célebre pintor catalán. Se presenta por primera vez en Francia la colección de obras que Dalí le regaló y dedicó a su amigo y secretario Enrique Sabater. Sesenta piezas –entre las que figuran óleos, acuarelas y bocetos– que son un claro testimonio de la amistad que unía a estos dos hombres. ambos se conocieron durante una entrevista en el año 1968. Enrique Sabater fue amigo de Dalí antes de convertirse en su secretario personal y más tarde en su hombre de confianza. Exposición ‘Signé Dalí’, París (Francia), hasta el 10 de mayo. www.daliparis.com mÁlaGa CIne: Festival de Cine español e Iberoamericano Si eres de los que no te gustan las superproducciones de Hollywood y no aguantas los subtítulos, de los que prefieres a Almodóvar que a Scorsese, una historia de la Guerra civil a una del bronx, éste es tu festival. La máxima celebración del cine cien por cien en habla hispana, que este año llega a su décimoquinta edición, y en la que se presentarán al público y a la crítica las películas que llegarán a las salas comerciales en los próximos meses. nueVa orleans múSICa: Festival Int. de Jazz Si es cierto que actualmente se celebran eventos de este estilo musical en casi todas las ciudades del mundo, no lo es menos que ninguno se puede comparar al de la ciudad del Misisipí, cuna del jazz. cientos de artistas y grupos pasarán por los doce escenarios habilitados en el recinto durante siete días de (buena) música ininterrumpida. ¿Los platos fuertes del evento? tal es la variedad de artistas que es una pregunta de difícil respuesta, aunque nosotros nos quedamos con Eagles, zac brown brand, the beach boys o bruce Springsteen and the E Street band. En la variedad está el gusto. Festival Internacional de Jazz, Nueva Orleans, del 27 de abril al 6 de mayo. www.nojazzfest.com Festival de Cine Español e Iberoamericano, Málaga, del 21 al 28 de abril. www.festivaldemalaga.com Un abarrotado estadio Vicente calderón será testigo de uno de los conciertos más esperados del año. chris Martin y sus chicos agotaron hace ya meses las 50.000 entradas puestas a la venta para el único concierto que la banda británica dará en nuestro país, como parte de su gira mundial en estadios. aparte de esto, la prueba definitiva de que Coldplay sigue en plena forma es que su último trabajo de estudio, Mylo Xyloto, que fue lanzado el pasado mes de octubre, se ha posicionado en el número 1 de las listas de ventas en un total de 32 países (reino Unido y Estados Unidos incluidos). a lo largo de su historia el grupo ha vendido 50 millones de discos en todo el mundo. todo un récord. Concierto de Coldplay, Madrid, 20 de mayo. www.coldplay.com amsterdam CelebraCIoneS populareS: Fiesta de las Flores Cada primavera, cuando las flores están en su mejor momento, tiene lugar una de las atracciones principales de la isla. Los desfiles cruzan las calles de Funchal, la capital de Madeira, perfumando el aire y exhibiendo múltiples especies florales autóctonas. cada uno de los grupos presenta sus vestidos y sus nuevas coreografías.también se elaboran alfombras de flores, se entregan premios al escaparate mejor decorado y hay conciertos de música tradicional. moda: exposición British Glamour Since 1950 El Victoria&albert Museum de Londres acoge una muestra de los trajes de noche que han marcado la moda británica en los últimos sesenta años y que han sido los protagonistas en los grandes eventos de la alta sociedad. Se mostrarán sesenta creaciones de diseñadores de ayer y de hoy como Victor Stiebel, Jonathan Saunders, Hussein chalayan o alexander McQueen –entre muchos otros–, todos ellos artífices de lo que hoy día conocemos como british style. cambiamos de tercio y de estilo musical para asistir al festival de rock patrio con más solera. Este evento, que se celebra cada año -desde hace 17- en esta pequeña localidad albaceteña presenta un cartel sin grandes sorpresas ni dinosaurios internacionales, pero totalmente fiel a su esencia: Barricada, boikot, rosendo, reincidentes, Los Suaves... Leyendas vivas del rock español que compartirán recinto con grupos emergentes que fusionan estilos y con artistas de hip-hop, género éste por el que el festival ha ido apostando progresivamente en los últimos años. Queen’s day (día de la reina) como cada año, una marea de gentes de todas las edades, ataviadas obligatoriamente con prendas de color naranja, tomarán las calles de la capital holandesa para celebrar por todo lo alto el cumpleaños de su reina. Este evento comenzó en el siglo XiX, concretamente el 31 de agosto del año 1885, con la celebración del cumpleaños de la princesa Guillermina. La tradición se ha mantenido con el paso del tiempo, y lo que empezó siendo un evento que trataba de fomentar la unidad nacional holandesa, ha derivado en una fiesta tan divertida como salvaje que atrae cada año a miles y miles de turistas con ganas de soltarse la melena. Fiesta de las Flores, Madeira (Portugal), del 3 al 6 de mayo. www.ficomic.com Exposición ‘British Glamour Since 1950’, Londres (Inglaterra), del 19 de mayo al 6 de junio. www.vam.ac.uk Festival Viña Rock, Villarobledo (Albacete), del 28 al 30 de abril. www.vina-rock.com Queen’s Day (Día de la Reina), Amsterdam (Holanda), 30 de abril. www.amsterdam.info madeira CelebraCIoneS populareS: londres Villarrobledo múSICa: Festival viña rock o riz o n 127 bitácora Dublín literatura: Bioomsday VIENA arte: 150 aniversario del nacimiento de Gustav Klimt Es el pintor más famoso de Austria, autor de la celebérrima obra El beso (en la imagen de arriba), reproducida en miles de láminas que decoran otros tantos salones en todo el mundo. Con motivo de este aniversario tan especial, durante todo el año se organizan exposiciones sobre la figura y la obra del artista en toda Austria. Una de las más interesantes es la del Museo de Viena, que posee la mayor colección del mundo de dibujos de Klimt: 400 piezas entre las que encontramos tanto obras acabadas como esbozos pertenecientes a las distintas etapas creativas del artista. 150 aniversario del nacimiento de Gustav Klimt, Viena (Austria), del 16 de mayo al 16 de septiembre. www.austria.info Madrid literatura: Feria del Libro En uno de los eventos más importantes de la literatura de habla hispana que tiene como objetivo promover el libro, la lectura y la actividad profesional de los empresarios, entidades e instituciones que se dedican a este sector. El madrileño parque de El Retiro se convierte en punto de encuentro de autores, editores y aficionados a la lectura que recorren las más de cuatrocientas casetas temáticas que allí se instalan. El acceso es totalmente libre y gratuito y es habitual ver a escritores conocidos firmando ejemplares de sus últimas obras. Italia es el país invitado de este año. Feria del Libro, Madrid, del 25 de mayo al 10 de junio www.ferialibromadrid.com 128 orizon Los fans de esa transgresora y genial obra que es el Ulises de James Joyce, uno de los grandes imprescindibles de la Literatura Universal, se reunen una vez al año en la ciudad de Dublín (y en otras localidades irlandesas) para homenajear este libro. El evento consiste en emular los pasos de Leopold Bloom, el protagonista de la historia (de ahí el nombre de Bloomsday). Para ello, los participantes se visten como él, comen y cenan lo mismo e incluso repiten el itinerario exacto del libro. La fecha escogida, como no podía ser de otra manera, es el 16 de junio, día en el que transcurre la acción en la novela. Blooms Day, Dublín (Irlanda), 16 de junio. www.jamesjoyce.ie JEREZ motociclismo: Gran Premio de España de MotoGP Miles de moteros pondrán rumbo al sur para disfrutar de la concentración de aficionados a las dos ruedas más multitudinaria de nuestro país. ¿La excusa? La celebración del GP de España en Jerez, la segunda prueba del Mundial de Motociclismo. Pero aparte de la importancia deportiva, muchos son los que acuden llamados por la acampada, la barbacoa y la celebración en general. Al fin y al cabo, lo importante es participar, ¿no? Gran Premio de España de MotoGP, Jerez, del 27 al 29 de abril. www.circuitodejerez.com MURCIA Música: Festival SOS 4.8 PARÍS tenis: Torneo Roland Garros Con el eterno pique deportivo hispano-francés en su punto más álgido después de que parte de la opinión pública gala insinuara que nuestros deportistas se dopan, llega el torneo de tenis en tierra batida más importante del mundo. Una competición que, pese a jugarse en tierras parisinas, a nuestros compatriotas se les da de maravilla. Prueba de ello es que Rafa Nadal lo ha ganado en seis ocasiones (cuatro de ellas seguidas), es el vigente campeón y el jugador que más partidos ha vencido de forma consecutiva en este torneo. ¿Conseguirá el mallorquín repetir la hazaña y vengarse así de los humoristas franceses? Torneo de tenis Roland Garros, París (Francia), del 28 de mayo al 10 de junio. www.rolandgarros.com Sevilla celebraciones populares: Feria de Abril No sabemos si Sevilla tiene un color especial o no. Lo que sí tenemos claro es que su feria es única. Se trata del acontecimiento más importante del año para los sevillanos (y para los miles de visitantes que recibe la ciudad por esas fechas), sólo superado por la Semana Santa y sus procesiones. Son siete días (con sus siete noches, por supuesto) en los que la vida se desarrolla en las casetas y atracciones que se instalan en el recinto ferial del barrio de Los Remedios, para dar rienda suelta a una bacanal de farolillos, trajes de volantes y lunares, sevillanas y litros y litros de fino y de manzanilla. Pero todo, eso sí, con mucho arte. Feria de Abril, Sevilla, del 24 al 29 de abril. feriadesevilla.andalunet.com Con paso firme y seguro, el festival murciano llega a su quinta edición y se consolida como una cita a tener (muy) en cuenta por todos los amantes de la música indie. En esta ocasión el cartel está encabezado por la única actuación en España de Pulp (en la imagen), al que seguirán un gran número de artistas como The Flaming Lips, Gossip, Mogwai, CSS, The Kills, Matthew Herbert, Kiko Veneno o Love of Lesbian, entre otros. Aparte de la música, cabe destacar las secciones Mustang Arte y Voces, comisariada por Jordi Costa, en las que se realizarán exposiciones y ponencias sobre el universo de las series de televisión, tema elegido este año. Festival SOS 4.8, Murcia, del 3 al 6 de mayo. www.sos48.com Múnich Fútbol: Final de la Champions League El futurista estadio Allianz Arena, conocido popularmente como Schlauchboot (bote inflable), debido a su peculiar forma, será la sede de la final de la máxima competición europea de clubs de fútbol. Al cierre de esta edición, hay muchas posibilidades de que se enfrenten el Real Madrid y el FC Barcelona en dicho encuentro. Más emoción imposible. Final de la Champions League, Munich (Alemania), 19 de mayo. es.uefa.com de personas asistieron a la actuación de Rod Steward en la Playa 3,5 millones de Copacabana en 1994, el concierto más multitudinario de la historia. agenda oz HERNING Ciclismo: Giro de Italia Basilea Arte: Feria Art Basel Es una de las ferias de arte contemporáneo más prestigiosas del planeta que reúne en esta ciudad suiza cerca de trescientas galerías de los cinco continentes –seis de ellas españolas–, que expondrán sus más codiciadas obras, ya sean pinturas, esculturas, fotografías, videos o instalaciones. En la pasada edición, fue visitada por 60.000 personas, entre galeristas, coleccionistas, artistas y aficionados al arte contemporáneo. Cuenta también con una edición hermana en Miami Beach que se celebra en el mes de diciembre. Feria de Art basel, Basilea (Suiza), del 14 al 17 de junio. www.artbasel.com GETAFE Música: Festival Sonisphere Melenas al viento y cazadoras de cuero darán la bienvenida a una nueva edición española de uno de los festivales de hardrock más famosos del globo. Tremendamente difícil superar el cartel de este año: Metallica será el protagonista absoluto (que realizará un concierto especial con motivo del veinte aniversario de su Black Album, ahí es nada...) y se verá acompañado de Slayer, Evanescence, Soundgarden, The Offspring, Machine Head o Limp Bizkit, entre otros. Se aseguran emociones (y decibelios) fuertes. Festival Sonisphere, Getafe (Madrid), 25 y 26 de mayo. es.sonisphere.eu. Paradojas de la vida (o, mejor dicho, del deporte), el itinerario de la segunda competición ciclista más importante de Europa (sólo superada por el Tour de Francia), la que recorre Italia, tendrá su punto de partida en tierras danesas, concretamente en la localidad de Herning. Tras un total de tres etapas iniciales en Dinamarca, se pasará a la –esta vez sí– ciudad italiana de Verona, comenzando así un periplo que recorrerá el país de la bota de norte a sur, y viceversa, para concluir con una prueba contrarreloj en Milán. De las 21 etapas que componen el Giro, destaca especialmente la penúltima de ellas, con el Mortirolo y final en la cima del Stelvio, donde no se llegaba desde el año 1975, y que sin duda alguna será una carrera decisiva para conseguir la codiciada maglia rosa. Giro de Italia, Herning (Dinamarca), del 5 al 27 de mayo. www.elgiro.com MÓNACO AUTOMOVILISMO: Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 Circuitos hay muchos. Pero como el de Mónaco –integrado en las entrañas de la ciudad– ninguno. Este Gran Premio es uno de los acontecimientos deportivos más esperados de la temporada y se remonta al año 1929, lo que le convierte en una de las pruebas más antiguas de la Fórmula 1. El circuito de Mónaco es especialmente conocido por su complicado trazado, donde las curvas, los cambios de rasante, los carriles estrechos y las esquinas lo convierten en el recorrido más duro y más técnico para los pilotos y sus coches. Pero también en uno de los más espectaculares y más seguidos desde todos los rincones del mundo. Gran Premio de Mónaco de F1, Mónaco, del 24 al 27 de mayo ww.monaco-gran-premio.com Robert Smith y el resto de los componentes de The Cure serán los protagonistas de muchos de los festivales musicales europeos de los próximos meses. que no pare la música san miguel Primavera SOUND Este evento, que se lleva celebrando en la Ciudad Condal desde hace más de una década, es un referente indiscutible de la escena musical de nuestro país y está considerado como el festival urbano por excelencia. A lo largo de su trayectoria ha conseguido reunir a los artistas más importantes del mundo del pop, del rock y de las tendencias más underground de la música de baile. El mayor atractivo de esta edición será la presencia de la banda británica The Cure. Aunque por el Parc Del Fòrum de Barcelona también desfilarán otras importantísimas formaciones como Franz Ferdinand, M83, The Afghan Whigs o The War on Drugs. Sólo por citar algunos ejemplos de los más de 160 artistas que componen el cartel. Cabe destacar otras interesantísimas iniciativas puestas en marcha por la organización del festival y paralelas a éste, como el Primaverapro, dirigido a profesionales de la industria musical; el Primavera al Parc, cuyo objetivo es relacionar la conciencia ecológica con la oferta musical; el Flatstock, una muestra de posters de grupos y conciertos realizados por diferentes artistas plásticos, y Minimúsica, un espacio dedicado a los más pequeños. Pero la cosa no acaba aquí: cada otoño se organiza el San Miguel Primavera Club, con actuaciones repartidas por distintas salas de Barcelona y Madrid y, además, este año se celebra por primera vez el Optimus Primavera Sound, la versión portuguesa del festival, que tendrá lugar en la ciudad de Oporto una semana después de su homólogo barcelonés. San Miguel Primavera Sound, Barcelona, del 30 de mayo al 3 de junio. Puedes consultar el cartel completo del festival en la web www.primaverasound.com o riz o n 129 check out sobre ruedas se suele decir que la verdadera calidad hotelera se mide por los pequeños detalles. Detalles como encontrar en tu habitación un obsequio tan original como éste, un Black Cab de juguete –el taxi típico londinense– que recibirán los huéspedes que se alojen en la planta The Level del Meliá White House de la capital británica. Lo más curioso es que posiblemente éste sea el único taxi que necesiten los clientes de este hotel, ya que la gran baza del establecimiento es su perfecta ubicación, cerca de casi todo (de casi todo lo que merece la pena en Londres, claro). Sus ocho plantas se encuentran a un paso de Regent Park, uno de nuestros rincones favoritos. Por lo tanto está a tiro de piedra de los centros turísticos oficiales de la ciudad: Oxford Street y Piccadilly Circus. Andando se llega al British Museum, la zona de Camden Town y su popular mercadillo, Buckingham Palace y la Abadia de Westminster, la Torre de Londres y Kensington Palace & Gardens. Y de puertas para dentro tampoco está nada mal. Sobretodo la planta The Level, dotada de atenciones exclusivas como el check-in y check-out privados, amenities de lujo, menú de almohadas, carta de periódicos, desayuno inglés completo (gratis) en el lounge, así como té, café, bebidas, pasteles, aperitivos fríos y calientes a diversas horas del día... La cama king size es la protagonista absoluta de las habitaciones The Level, completamente insonorizadas y dotadas de enormes ventanales y una línea de baños de Etro para darse una merecida y relajante ducha rodeado de suelos y paredes de mármol después de una larga jornada de turismo recorriendo las calles de Londres. Y para terminar el día, nada mejor que una buena cena en uno de sus dos restaurantes – el español La Albufera o la brasserie The Place– para acabar disfrutando con un gin tonic como mandan los cánones y a ritmo de jazz en el Bar Longford. 130 or i zo n meliá white house Albany Street, Regents Park, Londres. Inglaterra. Tel.: 902 14 44 40 es.solmelia.com Información Volkswagen: 902 151 161 volkswagen.es volkswagen-das.es twitter.com/VW_es facebook.com/volkswagenesp Hoy son tres bosques. Mañana serán muchos más. Volkswagen, bajo su programa “Think Blue.”, desarrolla tecnologías más eficientes para reducir las emisiones de CO2* y crea iniciativas para compensar el resto plantando árboles en los bosques “Think Blue.”. Un árbol por cada vehículo nuevo vendido y muchos más por los paquetes opcionales de árboles del Programa CO2 Neutral, para compensar tantos kilómetros como se deseen. Hoy ya son 300.000 los árboles plantados que compensarán 90 millones de kg de CO2. Mañana serán muchos más. Conoce más sobre “Think Blue.” en www.thinkblue.es * El Grupo Volkswagen reducirá en un 30% las emisiones de CO2 de su flota de vehículos nuevos en Europa en el período entre 2006 y 2015.