3,2 MB - Festival Internacional de Cine de Gijón
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44 Festival Internacional de Cine de Gijón Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete elcuarentaycuatro (2) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. 1, 2, 3 Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Sección Oficial - Offside Un régimen en posición de fuera de juego De casa al trabajo y del trabajo al cine Marcelo Panozzo Hoy: Mitos Uno. Palabra mito, acepción uno: “Narración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. Con frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.” Palabra mito, acepción de cosecha particular: “Festival de Cine de Gijón”. Fue así, para qué engañarnos. A Buenos Aires los ecos del 38 y los del 39 llegaron en forma de mito. Alguien que había estado y que le dijo a alguien que le dijo a aquel que me dijo que Las lágrimas del tigre negro y The Last Resort se habían llevado premios. Y que hicieron retros Suzuki, Haynes, Costa, y el Espacio Guerrín, y que pusieron Baise-Moi y Peppermint Candy en competencia. Y que las fiestas y que la peña y que el norte, gris y radiante a la vez. Pisé suelo en ocasión del 40 y también del 41; defeccioné malamente en el 42 y también me perdí el 43. Y aquí estoy, pleno 44, confirmando el carácter mitológico desde otro lugar (haciendo estas costuritas para el periódico) y desde otra acepción aportada por la RAE, la número tres: “Persona o cosa rodeada de extraordinaria estima”. El Festival es esa “cosa” que además de estar hecha por películas está hecha por personas, rodeadas todas ellas de extraordinaria estima. O sea que mitológico, al menos para mi, sigue siendo. Dos. Rocío Jurado dijo de Camarón: “Este chico tiene un viejo en la tripa”. Isra, protagonista de la primera parte de La leyenda del tiempo, la preciosa película de Isaki Lacuesta que se llama como aquel disco de Camarón (se proyecta mañana jueves a las 19.45, Cines Centro Sala 1; y el viernes 1 a las 17, Cines Centro Sala 4, ambos pases con entrada libre), también lleva un viejo en la tripa. Pero Isra es un niño. Solía cantar de maravilla hasta que murió su padre; de allí pasó al luto y del luto al silencio, y al viejo en la tripa y a una ténue alegría guerreando día a día con la tristeza para poder asomarse. Se acabó su duende. O fue preso. La protagonista de la segunda parte de la película se llama Makiko, es una chica japonesa que llega a la Isla de San Fernando buscando una voz, intentando entender desde el flamenco hacia donde va su vida. El chiquillo tiene la voz y no puede usarla (o no quiere, o no debe, lo que para esa media sonrisa mohína viene siendo casi lo mismo), la joven quiere la voz y no tiene manera de alcanzarla. Y Lacuesta encuentra en esos silencios ténues rastros de ese otro silencio que Camarón dejó en San Fernando y en algunos otros lugares del planeta. La leyenda del tiempo no tiene nada que ver con la explotación necrológica ni con la estampita de San Camarón. Tiene, sí, que ver con la manera en que la ausencia marca la vida de las personas, con gente que tira de porfía, de obligación, de deseos o de mentiras y sigue adelante e intenta cambiar o moverse (moverse aún en el mismo lugar), a pesar de la maquinaria averiada, de la falta de una pieza o de varias. El mito, en el caso de Isra y Makiko, tiene que ver con la construcción que procura ocupar el espacio de la carencia; una construcción un poco en plan castillo de naipes, pero con las paredes unidas por puntos de sutura. Tres. Moverme sin moverme. Eso sí que sé hacerlo. Toda la semana en la misma oficina, en la misma mesa, frente al mismo ordenador, mientras afuera los directores de cine y los críticos (de los directores y de cine) y la peña de cine y la peña no tanto, y los curiosos locales y visitantes y todos los demás también rebotan de sala en sala, de un bar a otro, de una sidra a la siguiente. Parte del mito que rodea a un festival de cine tiene que ver con la imagen de gente guay viajando por el mundo, viendo películas extranjeras y tomando cócteles con nombres de teoremas. Pero cuando el festival en cuestión llega, lo que hacemos es movernos quietos, desplazarnos sin abandonar el lugar (la trinchera que nos tocó en suerte), bailar toda la noche en la misma baldosa. Eso es lo más lejos que podemos llegar. Y es lejos de verdad. Forofas disfrazadas de forofos (no queda otro remedio). Offside Jafar Panahi, Irán, 2006, 88’ El director de las extraordinarias El círculo (2000) y Crimson Gold (2003), el iraní Jafar Panahi, está de regreso con la que quizás sea la más amable de sus películas a la fecha, una especie de comedia sobre la (mala) suerte de un grupo de mujeres jóvenes que pretenden entrar a un estadio a ver un partido de fútbol. La acción tiene lugar durante la clasificación para Alemania 2006, más precisamente durante el partido que en Teherán disputan Irán vs. Bahréin. En los ingresos al estadio van apareciendo, aquí y allá, mujeres jóvenes vestidas como muchachos para intentar entrar a ver el partido, en tanto a las mujeres vestidas como mujeres no se les permite asistir a los espectáculos de fútbol. La acción comienza con un hombre mayor viajando en taxi y buscando a su hija, que parece haberse escapado para ir a ver el derby. A continuación, en un autobús repleto de forofos iraníes vemos a la chica en cuestión, una adolescente que por más ropa holgada, gorro y bandera que lleve no puede disimular que es una mujer. En dicho autobús las reacciones de los hombres van del temor a la solidaridad: están los que le desean suerte para entrar al estadio, y los que temen que la presencia de una mujer termine por perjudicarlos. Para comprar su entrada, más problemas: un revendedor, que acaba de entregar un ticket por 3000 tomans, primero no quiere venderle a una mujer, y simula una cierta preocupación por la seguridad de la joven, y finalmente le pide 8000 tomans por la entrada. Todo esto pasa en el comienzo, en los primeros minutos de película, introducción que concluye cuando la joven es arrestada y llevada a un improvisado espacio de confinamiento, en el propio estadio, que comparte con otras mujeres jóvenes en la misma situación: disfrazadas de hombre y sin la posibilidad de ver el partido. Panahi vuelve a mostrar un extraordinario manejo de las herramientas que tiene a disposición: Offside es elegante y clara, y a la vez muy potente. Milagrosamente filmada durante el día del partido y en el propio estadio, muestra un tema transitado como las absurdas, retrógradas diferencias de género, pero a través de un punto de vista novedoso: la efervescencia de una juventud que reacciona frente a costumbres con las que no comulga. Las jóvenes se oponen con gracia y determinación a las órdenes de los guardias; los dejan (justamente) en offside cuando les piden explicaciones, cuando los arrastran al terreno del sentido común. En ese punto Offside, además de exponer el buen pulso del director para las situaciones de comedia, muestra a un Panahi menos oscuro, más conciliador que, por ejemplo, en Crimson Gold. Hoy a las 20, Teatro Jovellanos En el mismo programa: Sniffer Bobbie Peers, Noruega, 2006, 10’ Ganadora de la Palma de Oro al Mejor Cortometraje en Cannes 2006 y del XIX Premio del Cine Europeo 2006 en la sección de cortometrajes, Peers dirige esta película que compite en la Sección Oficial en el Festival de Gijón, en la que se habla de un mundo donde las personas pueden volar, pero que prefieren lastrase al suelo con botas especiales. Y entonces, un hombre, el protagonista, decide dejar su trabajo, corta todas las ataduras de su vida y da un giro nuevo a su existencia. El joven realizador Bobbie Peers se graduó en la Escuela Internacional de Cine de Londres en 1999. Desde entonces ha trabajado como guionista y director. Sniffer es su último cortometraje, que le ha dado ya unas cuantas alegrías. Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete (3) Sección Oficial – Daratt La venganza no siempre se puede servir fría Daratt Mahamet-Saleh Haroun, Chad-FranciaBégica-Austria, 2006, 95’ “Además de las ejecuciones extrajudiciales realizadas con armas de fuego, muchas personas han sido atadas y arrojadas por las fuerzas de seguridad a los ríos Chari y Logone. En los últimos meses, se han extraído de estos ríos bastantes cuerpos mutilados e irreconocibles; las heridas y marcas que presentaban no dejaban duda de que las víctimas habían sido atadas y de que las ejecuciones habían sido realizadas por las fuerzas de seguridad”. El párrafo corresponde a un informe de Amnistía Internacional de título Chad: esperanzas traicionadas, y habla de esa realidad de violencia que atraviesa desde hace décadas el país centroafricano. Guerra civil, golpes de estado, rebeliones, abusos de poder, inestabilidad y el reciente conflicto Chad-Sudán son algunos de los escalones descendentes que año tras año se ven empujados a recorrer los habitantes de una zona sin paz. En ese escenario, árido en casi todos los sentidos posibles, se ubica la acción de Daratt, la película de Mahamet-Saleh Haroun que, al igual que I Don't Want to Sleep Alone (Tsai Ming-liang) y Half Moon (Bahman Ghobadi), responde a una comisión del New Crowned Hope Festival vienés, destinado a celebrar el 250 aniversario del nacimiento de Mozart. El comienzo del film es de una rigurosa crudeza: un hombre ciego y su nieto, un adolescente llamado Atim, escuchan por la radio la noticia de una amnistía general para criminales de guerra. Se escuchan manifestaciones en las calles seguidas de ráfagas Armas y desierto: casi todo lo que hay. de metralla, todo fuera de cuadro, y cuando la cámara apunta al lugar de la refriega lo que hay son decenas de zapatos, zapatillas y sandalias tiradas en la calle. El hombre le entrega a su nieto la que parece ser su posesión más preciada: un revolver que perteneció a su hijo, asesinado en la guerra civil justo antes de que el ahora adolescente Atim naciera. La misión que le encomienda es buscar al asesino de su padre y matarlo. Atim busca y encuentra al asesino en cuestión, un hombre llamado Nassara que al parecer ha dejado las armas atrás, se casó con una mujer mucho más joven que él y lleva adelante un muy modesto despacho de pan. Atim ve cada día como Nassara regala parte del pan que fabrica a los niños sin recursos del barrio, y en plan de acercarse a él termina por ganarse su confianza. Lo que sucede en Daratt a partir de allí es simple en términos de trama, y tan complejo como perturbador de cara a la necesidad de pensar cómo se cierran (si es que se cierran) las heridas generadas por los abusos de poder, cómo se enfrenta la impunidad o si se puede o no tomar la justicia en las propias manos, todo cruzado por una extraña (extraña por enfermiza, por desesperada, por insalvable) relación que bordea lo paterno-filial. Mahamet-Saleh Haroun logra así el prodigio de contar un cuento poderosamente moral, del que no es posible extraer moraleja alguna. Hoy a las 22.30, Teatro Jovellanos En el mismo programa: Meokgo and the Stickfighter Teboho Mahlatsi, Sudáfrica-Austria-UK, 19’ En Sudáfrica hay una comunidad muy conservadora y también una comunidad muy liberal, entonces depende de qué lado del debate te encuentres. Ésta es una de las afirmaciones de Teboho Mahlatsi, el director de Meokgo and the Stickfighter, el cortometraje que cuenta la historia de Kgotso, un luchador de artes marciales y músico que tan sólo abandona las montañas llamado por los pastores para proteger sus ovejas de los bandidos. En una de sus incursiones, una hermosa mujer sale del agua cautivada por su música. Tehobo Mahlatsi es el director de la serie Yizo Yizo, dirigida a jóvenes de quince a veinticinco años, que describe la vida cotidiana de los alumnos de una escuela secundaria en una zona marginal de Johannesburgo. La formula de Yizo Yizo: una serie de televisión que reflejó la vida de los adolescentes. Así fue como el programa marcó un hito en la televisión sudafricana. (4) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete PATROCINADO POR: Día d’Asturies – Competición El futuru ye güei EN COLABORACIÓN CON: MOVIERECORD Entrevistas: Susana Tejedor Güei a les 22.30, Cines Centro Sala 4 Llegó’l día… Esta nueche (a les 22:30, na sala 4 de los Cines Centro) va cellebrase la competición del Día d’Asturies, col patrociniu de la RTPA. Equí, les pallabres de los y les direutores de los siete curtios a concursu; ente ellos y elles nun va tar namás que’l ganador o ganadora d’esta edición, ente toos dibuxen un futuru posible pal cine fechu equí. The Party is Over (Jim Box, 7’) La marea (Iván Sainz Pardo, Dirk Soldner, Jim Box, 8’) Vacyo (Inoa Frechilla y Eliana Álvarez, 7’) Gertrud (Manuel Pizarro, 22’) Recuerdos (Claudia Lorenzo Rubiera, 14’) La terapia (Kontxi Rodríguez y Roxana Popelka, 10’) La invasión de los hiperpúberes (Laura Blanco, 6’) Jaime Fernández Miranda Jaime Fernández Miranda Inoa Frechilla y Eliana Álvarez Direutor de The Party is Over Direutor de La marea Direutores de Vacyo “Quis mandar un mensaxe esplícitu” “Apetecíame facer un curtiu ensin sacar horros” “La rutina llévanos a sentinos solos, vacíos” The Party is Over desarróllase nun apartamentu de Nueva York y cuenta una fiesta d’amigos, aprovechando la marcha de los pás. “Podría facese nuna cabaña mui guapa del la biesca con capiellín colloráu o nuna cárcel de Taiwán. Nesti casu, l'aición pasa nel mio apartamentu de Manhattan y ye n’Inglés porque taba faciendo un cursu de cine na New York Film Academy. De fechu, faigo un pequeñu cameu nel filme porque fallónos un tiparracu nel caberu minutu. La marea cuenta una historia na que l'espeutador pue facer una interpretación llibre dende’l principiu hasta’l final. El so direutor, Jaime Fernández Miranda (Jim Box) resúmelo asina: “dos collacios van de viaxe a lo llargo de la vida. El collaciu A atopa un camín nuevu, ónde’l collaciu B nun encaxa. El collaciu B pide esplicaciones, pero’l collaciu A pasa…interésa-y más lo nuevo. Pa A'l so collaciu B ta muertu. Pasáu, futuru, muerte, cambeos, sufrimientu. Son histories de cada día. El restu de direutores, Iván Sainz Pardo y Dirk Soldner, tien la so visión particular del filme, anque no básico tamos d'acuerdu”. Vacyo cuenta una historia onde la rutina mueve la esistencia de los dos protagonistes. Les sos direutores, Inoa Frechilla y Eliana Álvarez, aseguren que “la indiferencia hacia l’otru ta latente na nuesa sociedá”. Ye una carauterística intrínseca derivada de la l'egoismu que promulguen les nueves tecnoloxíes y el nuevu y desenfrenáu estilu de vida cosmopolita. Esa indiferencia caló fondamente dientro de les cases, nos núcleos familiares, ónde la comunicación se convertiere nuna utopía”- La fiesta nun fina precisamente bien. “Plánteeme esti curtiu como un retu. Facer de la idea d’otra persona un guión cenciellu y llevalu a pantalla. Nun entamu, yera un exerciciu pala escuela; agora préstame muncho’l resultáu final”. Trátase de la cabera fiesta. Hai qu’aprovechar… “Hai qu’aprovechar qu'hai bonos actores alredor, que’l mozu col que comparto pisu ye un fiesteru, que toca la guitarra perbién y que tien la so propia banda sonora orixinal. Hai qu’aprovechar que tenemos tiempu y ganes de cuntar una historia cenciella y un equipu de lluces prestáu de la escuela. Hai qu’aprovechar a poner en práutica lo aprendío nes clases. Hai qu’aprovechar que non tol mundu tien los coyones o les ganes de cuntar una historia tala”. Tres mozos y una moza. Ésta ye la que lleva la peor parte na historia. ¿Inxusto? “Xeneralmente, les moces son les que lleven la peor parte cuando la cosa descontrólase. Quis mandar un mensaxe esplícitu y dexar un tiempu a la reflexón; por eso, el ritmu del curtiu ye lentu. Préstame que l'espeutador nun puea facer nada”. ¿Qué-y pasará a la vida de los protagonistes al día siguiente? El so direutor camienta que “pal protagonista nun camudará n’absolutu; ella quiciabes decida colar a vivir pela so cuenta. Yo fairíalo. Almítense suxerencies pa una posible secuela”. La cinta ta rodada en blancu y negru. “Nótense menos errores de raccord de lluz. Grabar n’esteriores con vídeu y en color ye endemoniamente difícil. El contraste y la llatitú propios del videu faen que’l to curtiu puea vese demasiao caseru. Si grabes en cine nun se nota tantu. A esti curtiu en blancu y negru vienen-y de perles. Da-y un toque clásicu que m’encanta. Un alemán, un vallisoletanu y dos asturianes nuna playa d’Asturies. “N’Asturies tenemos llocalizaciones acoyonantes que tan ensin esplotar. Apetecíame facer un curtiu pal Día d’Asturies ensin sacar horros o xente pañando mazanes”. Nun ye la primera vegada que participa nel Festival de Xixón. “Agora camiento con estrenar un llargu equí dalgún día”. Confiésase mui agradecíu al festival. “Debo-y munches coses: el puxu pa facer daqué y velo na pantalla grande coles butaques enllenes, y un cursu de cine que recibí fai dos branos y que m’enseñó a contar histories. El resultáu ye La Marea. Pa los curtios ye un bon entamu estrenar nel Festival de Xixón. Fai que nos otros festivales güéyenlos con gana”. El cortu espeya la vida monótona y rutinaria na que’l protagonista vese envueltu. “Angüaño, vémonos obligaos a rindinos énte la tiranía del trabayu. Y tou trabayu fina camudándose nuna forma repetitiva d’actuar que convierte les xornaes en rituales cíclicos de los que ye perdifícil colar porque nun somos conscientes d’esa realidá. Dexámonos llevar pola costume y la rutina, que nos protexe y nos destruye”. La soledá, la rutina, queden patentes na historia hasta les sos caberes consecuencies. “La soledá ye una circunstancia o sentimientu que mina la nuesa capacidá de rellacionanos. La rutina llévanos a sentinos solos, vacíos, a escaecer el sentíu de la esistencia y a perder el criteriu pa dixebrar énte lo importante y lo superfluu. Cuando perdemos esta capacidá la nuesa riqueza interior desapaez y esi ye un mou de finar con una vida.” A la fin surde la dulda de quién llevare la peor parte: la muyer que dexó d’esistir, o l'home, que tien que siguir viviendo una vida ensin xacíu. “Quien dexa d’esistir alliviase, dexando una carga grande de dolor a la xente que l’arrodia. La muyer da una señal d’alarma estrema, un avisu macabru y dramáticu al so compañeru que foi incapaz de ver qué taba pasando. La peor parte llévala él porque tien que reconocer la so falta de sensibilidá y preocupación y debe siguir la so vida quetará más vacía que nunca”. Manuel Pizarro Direutor de Gertrud Claudia Lorenzo Rubiera Direutora de Recuerdos “La vida pue ser mala, pero “Somos toos unos fisgones y nos presta” pasa y depriesa” Gertrud, basáu nun rellatu de Martina Bueno, cuenta les dramátiques vivencies d’una muyer alemana, casada con un mineru asturianu, que nunca viere’l mar. El so direutor, Manuel Pizarro, escoyó esta historia porque “paecióme tienra, triste y real. Entrevisté a una neña suañando y a esa mesma neña, 40 años dempués, suañando’l mesmu suañu. Y eso m’interesó: que delles vegaes, pa facer realidá'l más cenciellu de los suaños tenga que venir la constante presencia de la muerte”. Na cinta participen vecinos de la llocalidá llanisca onde trescurre parte de la historia. Pa la mayoría yera la primer esperiencia énte una cámara. “Respirábase tal grau d’ilusión, que’l rodaxe camudó nuna fiesta familiar y emocionante. Trabayar con toos ellos ye lo meyor que me pasara nesti cortu”. Baviera 1919; Asturies, 40 años dempués. “Dos persones que cada vuelta tienen menos coses que ver, dos estraños baxo’l mesmu techu, en requexos opuestos, dos presencies cada vegada más zarraes. Gertrud suaña ensin esperanza. Antonio caleya perdíu énte la rabia y l'alcohol. Una aldea alloñada, un horizonte d’ocalitos. Too ye borrina, gris, nun hai sol nesta historia”. La protagonista diz: “El mio únicu suañu ye ver la mar”. Pero a lo cabero camienta: “Foi tiempu a esgaya imaxinándolo”, Pizarro diz que “cuando los suaños nun se cumplen, tienden a facese más grandes alimentaes pola imaxinación”. La so declaración final ye enérxica “la vida pue ser mala, pero pasa y depriesa”. Pizarro sentencia: “Quiciabes nun tiempu hubo amargura, pero la esmolecimientu y l’aburrición camudaron en resignación, que ye lo peor que nos pue pasar, lo más murnio. Gertrud siente que sigue siendo la neña bávara gayaspera que, sentada al llau de la fonte, entrugábase: ¿qué habrá más allá?” Recuerdos ye un curtiu nel que se fala de sentimientos: amorios, abandonos, alcuentros y desalcuentros. La so direutora, la uvieina Claudia Lorenzo, plantegóse, nun principiu, cuntar la historia de d’un mozu y una moza que s’atopen nuna terraza, al tiempu, una pareya míralos dende un edificiu. “Al final resultó que la historia d’esos dos personaxes nuevos garró tantu puxu o más que la otra”. La cinta fue premiada nel VIII Festival de Curtiumetraxes AdN de la Universidá d’Antonio de Nebrija como meyor guión, lo que diz que-y valió pa “tener un mayor enfotu no que faigo, y sobre tou, na parte que más me presta, que ye la d’escribir”. En Recuerda apaez el voyerismu al traviés d’una pareya d’americanos que graba tolo que pasa alredor d’ellos. “Somos toos unos fisgones y nos presta. Dende bilordiar en blogs ayenos pa saber más coses sobre la vida de xente de la que nunca nun vamos saber más que lo que lleemos, hasta siguir con atención les histories que pasen delantre de nós tolos díes na cai. Pero esa ye la curiosidá sana. De fechu, munches vegaes pasa, como nel curtiu, que viendo dalguna cosa que-y pasa a daquién ayenu dafechu a ti, acláriense les idees sobre la to vida. Y pasa cuando-y eches una güeyada a lo que faen los de la terraza d’embaxo la to casa, pero tamién cuando llees un llibru, ves una película o escuches una historia nun cantar”. Asegura que nun se plantegó un mensaxe final de la historia. “Más qu’un mensaxe ye un sentimientu compartíu ente tola xente, ye esa la sensación de tolos personaxes, de que’l pasáu va quedar ehí; dalgunos arréglenlo y otros tan entamando a deprender a enfrentase a él, pero alcordances tenémosles toos y, cuando son bonos, a veces manquen, y pasa tiempu hasta que dexen de mancar”. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Kontxi Rodríguez Laura y Roxana Popelka Blanco Direutores de La terapia Direutora de La invasión de los hiperpúberes “Too se fai más creyible cola xente de la cai” “Los actores veníen cargaos d’idees” Les asturianes Roxana Popelka y Konchi Rodríguez dirixen el curtiumetraxe La terapia, un documental nel que cuatro personaxes axúntense pa falar de la maternidá y les rellaciones de pareya. Tres muyeres y un home caltienen un alderique, n’ocasiones, discusión. Una terapeuta busca l’equilibriu ente les opiniones de los sos pacientes. La invasión de los hiperpúberes nació d’un trabayu conxuntu énte Mario Pidal (el creador de la historia), Rubén Martínez (el creador de la música) y Laura Blanco (la que camuda la narración n’imáxenes dando-yos a estes un tempu), que yá ficieren xuntos otru cortu en 2000, No comas esa cabeza que salió de tus entrañas, tamién seleicionáu pal Día d’Asturies naquella ocasión. La historia céntrase nuna periodista, Eloína, que se mete nuna secta y conoz a Hermafrodeo, el cabezaleru de la mesma, y la so propia historia. Pasu ente pasu, vamos descubriendo les verdaderes actividaes de la secta. Según les sos direutores, “la historia ta a metá camín ente’l documental y la ficción. Tres d’ello hai un guión; los actores ensayaron. Préstanos el formatu documental y por eso intentamos averanos a él dende les nuestres histories, por tar más cerca de la realidá que de la ficción”. Insisten en que-yos presta más trabayar con actores non profesionales. “El tipu de personaxe que necesita d’estes histories pide por encima tou una naturalidá y una espontaneidá que nun tienen la mayoría d’actores. Ye mui gratificante trabayar con ellos, aprendes muncho, y sorprienden tamién”. Fai cuatro años qu’entamaron a trabayar xuntes por un petite dambes de tratar temes que-yos interesaben a les dos dende un puntu de vista mesmo formal que de conteníu. D’ahí xurde la primera idea, un cortu documental La vida nun cortu: conversaciones con Sandra, sovencionáu pol Principáu y que cunta les conversaciones con Sandra, una inmigrante de Cabo Verde asitiada en Xixón dende fai años. Dempués llegó Astrid y Rita, histories surrealistes de dos personaxes que son los sos alter ego y que tan más cerca de la videoperformance que de la estructura narrativa d’una historia de ficción. Nel 2005 ficieron El aparcamiento, Premiu del Día d’Asturies 2005. Amás, tan en procesu de producción d’un documental sobre les viudes asturianes. Esti caberu trabayu, La Terapia, ye una muestra más del interés por tratar la temática femenina. El Campamentu Nhorte, n’Argüeru, y el pueblu mariñán de Tazones, en Villaviciosa, foron los sitios escoyidos pal desarrollu d’esta historia na que s’entemecen cuatro recursos cinematográficos: la voz en off o narrador, los cartelos de testu típicos d’una película muda, la imaxe en blancu y negru y l’actuación espresionista. La historia sufrió dellos cambeos ya imprevistos. “eliminóse l’apaición d’un autobús, la presentación de los compañeros d’Eloína, les escenes de neños nel campamentu paralelu, el partu de la vaca, les imáxenes del añu 2001 y l’apartamentu madrileñu d’Eloína” diz Laura Blanco. Amás, hubo problemes cola escena de la foguera. “Sabíamos que nun podíamos contar cola lluz artificial, pero esperábamos más lluz del fueu. Salvóse la escena gracies a la fuerte llinterna d’unos collacios de Mario”. Pero nun too foron inconvenientes. “Hubo suerte’l día de la grabación porque facía un sol perguapu. Los actores ellaboraren el so propiu vestuariu, rebuscando nel barriu madrileñu de Chueca y veníen cargaos d’idees pa interpretar los so personaxes”. Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. (5) (6) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Café con... Isaki Lacuesta y Javier Pereira (miembros del Jurado Internacional) “Dar premios responde a un juicio muy subjetivo” Pasado ya el ecuador del Festival, la hora del café se convierte en el interludio perfecto para el trasiego diario de películas, fiestas y demás eventos festivaleros. Ayer tuvimos el placer de compartirlo con dos de los miembros del Jurado Internacional que en pocos días decidirán qué películas salen premiadas de Gijón. Javier Pereira (actor) e Isaki Lacuesta (director) nos resumieron sus primeras impresiones sobre el festival. “Se agradece enormemente la variedad de estilos y de países que componen la Sección Oficial”, explicaba Javier. Para Isaki no hay dudas: “...además, todos los miembros del Jurado estamos asistiendo a proyecciones fuera de la sección a competición, algo que dice mucho a favor del festival. Y luego también está la parte nocturna y las fiestas que en Gijón son estupendas.” Un apunte -el de la vida nocturna- que se ha tornado en constante para los invitados en cada una de las ediciones. Cuestionados sobre su papel como jurado, para Lacuesta está siendo un experiencia muy interesante aunque apunta que “dar premios responde a un juicio muy subjetivo. Finalmente el cine no es una competición deportiva”. ¡Dos jurados que valen por ocho! (pero votan por dos.) La conversación se trasladó seguidamente hacia las carreras profesionales de ambos invitados. Javier Pereira se ha curtido a lo largo de estos últimos años en la pequeña pantalla. La serie Al salir de clase le convirtió en un rostro popular “Al principio todo el mundo opinaba que la serie era un culebrón horrible pero con el paso del tiempo se ha demostrado que ha sido una excelente cantera de actores”, afirmó. Se recordaron en la charla los tiempos en los que los ac- tores de televisión estaban proscritos en el cine y que diferente es la situación en estos momentos. “Yo comencé en la televisión” -explicaba Pereira- y me sirvió para coger mucho fondo a nivel de estudiar guiones a diario y trabajar a un ritmo frenético. Ahora hay muchísimas series y eso ayuda mucho a los actores”. De sus papeles en el cine Fito de Heroína está entre sus predilectos y como película en general Tu vida en 65’ de María Ripoll es el título del que guarda mejor recuerdo. Isaki Lacuesta, convertido casi en cineasta de culto por su película Cravan vs. Cravan, matizó su perspectiva sobre el cine documental. “Cuando hice esta película mucha gente pensaba que era un falso documental, y no era así... Yo realmente no hago diferencias entre cine documental y cine de ficción; no entiendo esa distinción. Encuentro más diferencias entre películas con guiones abiertos y películas con guiones cerrados”. A este respecto explicaba que curiosamente su película documental tenía un guión mucho más cerrado que la ficción de La leyenda del tiempo, una historia empapada de flamenco, con un hijo de cantaores y una japonesa enamorada del género como protagonistas, que ha recogido premios en Rotterdam, San Sebastian y Las Palmas y que se proyectará dentro del ciclo Esbilla mañana jueves. En cuanto a sus próximos proyectos nos hizo algún adelanto: “Se trata de otro documental que rodaré el año que viene en Argentina”. Y después del festival, ¿vacaciones al cine? Ni hablar, Lacuesta es rotundo “No, no... Yo nunca me canso de ver cine”. Ciclo Nuevos Cines del Este Milos Forman en gran forma Viaje gratis al (cine del) Este La sesión de esta mañana a las 11 (Cines Centro Sala 1) de la película Padre y las de mañana de Cuerno de cabra (19.45, Gijón Sur, en DVD) y Cenizas y diamantes (a las 20, Cines Centro Sala 4), se proyectarán con entrada libre. (7) Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete EN COLABORACIÓN CON: FILMOTECA ESPAÑOLA FILMOTECA DE VALENCIA (INSTITUT VALENCIÀ DE CINEMATOGRAFÍA RICARDO MUÑOZ SUAY) CENTRO GALEGO DE ARTES DA IMAXE El baile de los bomberos Los amores de una rubia Milos Forman, Checoslovaquia-Italia, 1967, 71’ Milos Forman, Checoslovaquia, 1965, 80’ El departamento de bomberos está de fiesta. 86 años contemplan al jefe y ha llegado la hora de jubilarse por todo lo alto. Toda la ciudad está invitada pero las cosas parece que no salen como estaba previsto. El concurso de Miss Departamento de Bomberos tiene escaso éxito entre las participantes y alguien ha robado los premios de la lotería. Ésta es la última película que Milos Forman rodó en Checoslovaquia antes de su exilio/huída estadounidense; una tragicomedia que no gustó precisamente a los dirigentes comunistas por su supuesta burla del “hombre sencillo”. Pese al gran éxito conquistado en el extranjero, el filme fue prohibido en 1968, año en que finalizó la Primavera de Praga bajo la presión de los tanques soviéticos. Su perfume pesimista atrajo la atención de la crítica internacional, siendo seleccionada para el Oscar a la Mejor Película Extranjera. Andula es una romántica adolescente que se enamora perdidamente de Milda, un joven pianista con el que ha compartido una noche de amor apasionado. Tras abandonar su casa y perseguirlo hasta Praga, se topa con la dura realidad. Para Milda, ella sólo fue una simple aventura. Construída en tres grandes secuencias, que casi podrían funcionar de forma autónoma, Milos Forman maneja aquí uno de los temas que aparecen indefectiblemente en sus primeras películas: la juventud enfrentada al mundo de los adultos que trata atraparlos en su gris monotonía. Como explica Asier Aranzubia Cob en el libro Vientos del Este, la obra que este año edita el Festival y que acompaña este ciclo, “Lejos del didactismo y del tono sentencioso, lo que predomina es el sutil dibujo, a partir de pequeños detalles, de un ambiente rancio y nada sugerente que poco a poco va minando las ilusiones de unas jovencitas a las que sólo el recurso a la fábula y la edulcoración de la realidad parece poder salvar de esa soledad a la que, como las ocas salvajes, parecen estar irremediablemente abocadas.” A las 17, Teatro Jovellanos A las 19.45, Cines Centro Sala 5 (8) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Tres miradas sobre Bruno Dumont La expresión simple de ideas complejas El francés es uno de los nombres propios más resonantes del cine de la última década, además de director homenajeado aquí en Gijón 2006. Por eso, hoy ofrecemos un fragmento del libro escrito por Nando Salvá y editado por el Festival (“Paisaje abstracto con hombre al fondo”) y nuestro “especialista” se multiplica por dos para ingresar al mundo de Flandres, la última película de Dumont, que se estrena hoy a las 22.30 en la sala 2 de los Cines Centro. Rothko, la emoción desnuda Nando Salvá Mark Rothko fue encontrado muerto el 25 de febrero de 1970, por la mañana. Se había rajado las venas a la altura de los codos, y toda la sangre derramada por ellos sobre el suelo de su estudio había formado un charco de aproximadamente unos seis metros cuadrados, más o menos el mismo área que muchos de sus cuadros. De hecho, esa pintura de sangre resultó ser la amarga culminación de una obra que, a lo largo de los años, fue recolectando tristeza a través de los lienzos y que, ya en sus postrimerías, se llenó de colores grises y negros que mostraban el estado anímico de un artista embarcado en su propia autodestrucción. En sus últimas pinturas, puro terror abstracto, podía verse el Apocalipsis. La sensación de desasosiego que provoca la exposición continuada a un cuadro de Rothko es tan desagradable como el sudor frío, el tembleque enfermo que un cuerpo humano sano suele producir situado enfrente de uno de esos paisajes tan vacíos y a la vez tan opresivos de Bruno Dumont. Hablemos del letón o del franBrazos en alto de rigor para Cannes 2006. cés, nos referimos a inconmensurables espacios abiertos que diluyen al espectador en grandes campos de color y lo conducen a la esfera interior, al cosmos y a la nada, que lo sumen en un estado de contemplación hasta el abismo del vacío. Obras de una belleza basada en una abstracción de tono lírico, instrumentos de precisión para evocarnos emociones soterradas en lo más profundo. El catálogo de la exposición que la Fundación Joan Miró dedicó al pintor en 2000 se recogía esta cita: “Si he de depositar mi confianza en algún sitio, la otorgaría a la psique del observador sensible y libre de las convenciones del entendimiento. No tendría ninguna aprensión respecto al uso que este observador pudiera hacer de estas pinturas al servicio de las necesidades de su propio espíritu; porque, si hay necesidad y espíritu al mismo tiempo, seguro que habrá una auténtica transacción”. Así pues, también en esa búsqueda de intimidad con el espectador, de tratar de absorberlo mediante su arte y trasladarlo así, de manera irrevocable, a una dimensión espiritual, coinciden Rothko y Dumont. Las expansivas formas cromáticas del primero agotan la mente, la vacían de convencionalismos. Los montajes del segundo oponen momentos de la vida del hombre que la mayoría de los directores cortan o nunca filman. Mo- mentos a veces horribles en los que no sabemos qué decir, momentos puramente físicos durante los que los cuerpos se juntan, se sacuden y se separan. Esos planos no interesan en sí mismos. Es el montaje lo que los dota de significado. La misión es crear una mitología que devuelva al hombre sus ritos y sentimientos más arcaicos. Que le ayude a percibir aquellas verdades que son invariables a lo largo de la historia, que han habitado en el interior de los hombres desde el principio de los tiempos: hablamos del centro emotivo humano, del inconsciente, que no depende de implicaciones sociales. En las obras de Rothko y también en las de Dumont existe un halo de trascendencia asociable a lo eterno, a lo infinito. ¿Arte religioso? Ya hemos visto que Dumont rechaza las connotaciones cristianas de su trabajo, y que considera éste más bien como un espacio donde recuperar la reflexión y establecer el diálogo espiritual con el ser contemporáneo. *** La pintura debe ser “la expresión simple de una idea compleja”, decía Rothko. “El cine más poderoso es a menudo el más simple”, asegura Dumont. De hecho, sus guiones no son complicados. No tienen muchas pá- ginas porque no necesita muchas líneas, porque el verdadero sentido de sus películas permanece entre líneas. Son guiones rácanos en cuanto a especificaciones formales. A la hora de rodar, le gusta la neutralidad: los decorados, las interpretaciones, los argumentos no deben sobresalir en sí mismos, ya sucederá algo cuando interactúen y se sometan a la audiencia, porque, como decíamos, ésa sí que no es neutral. Tan sólo hay que darle tiempo. El tiempo de los planos, el tiempo de observación de los cuadros, es lo que acaba dando el significado a las imágenes, lo que hace que las cosas sucedan. Las calles vacías de Bailleul o la inmensidad del desierto del Mojave o los inmensos rectángulos que cuelgan de las paredes de la Tate Gallery se convierten, con la duración necesaria, en metáforas. La contemplación es más importante que la explicación. La imagen vale mil veces más que la palabra. En el cine de Bruno Dumont, los diálogos no expresan nada, no vehiculan significado en sí mismos. Responde esa desconfianza de la palabra hablada a una convicción de que, precisamente, la verbalización de esas metáforas, el diálogo, las hace inservibles e impide que algo suceda. Dumont hace callar a los protagonistas y deja que la cámara haga su trabajo, porque su mirada es capaz de decir mucho más que los diálogos escritos. Pensemos, por ejemplo, en los protagonistas de Flandres. Ni Demester ni Barbe son buenos conversadores. En sus interacciones, el lenguaje hablado tiene un valor puramente informativo, y el sí o el no constituyen la parte mayoritaria de los diálogos. Sin embargo, ambos hacen gala de una elocuencia y una franqueza demoledoras a través de sus silencios, sus miradas y sus respiraciones, que confiesan todo lo que ellos no pueden traducir en palabras. El desespero en los ojos de André cuando Barbe clava sus ojos en Blondel o la ira que revelan cuando descubre que ella está embarazada de su rival y que, por tanto, éste debe morir, valen más que todos los discursos del mundo. En esos ojos, como en las pinturas de Mark Rothko, puede verse el Apocalipsis. Flandres se puede ver esta noche, a las 22.30, en la sala 2 de los Cines Centro (allí se producirá el encuentro del director con el público) y mañana a las 17 en la misma sala. Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete (9) Los especialistas Esplendor en la hierba. Decir Je t'aime Decir te quiero (y nada más que eso) Ángel Quintana Isabel Luje En los momentos finales de Flandres de Bruno Dumont vemos a la pareja formada por Barbe (Adélaïde Leroux) y Démester (Samuel Boidin) copulando. Sus cuerpos se unen mec´´anicamente, pero en la brutalidad de su encuentro alguna cosa ha cambiado respecto al inicio de la película, cuando Dumont nos mostraba a la pareja copulando como si fueran auténticos animales. Barbe y Démester sienten un curioso afecto entre ambos, una curiosa química se desliza por sus cuerpos. Al final, no pueden resistir la tentación de decir: Je t'aime. La declaración amorosa situada al final del complicado trayecto que han vivido los personajes nos remite inevitablemente al final de Pickpocket de Robert Bresson, con la diferencia de que en esta ocasión ninguno de los personajes añade: “¿Qué extraño trayecto me ha traido hasta ti?”. El camino de Dumont no es tan zigzagueante como el de los personajes de Bresson, sino más directo ya que a lo largo de una hora y media observamos el tránsito de la animalidad más brutal hacia el inicio del afecto y del amor. Contraponiendo las calles frenéticas y los fashion esclavos que las frecuentan, que se visten, piensan, consumen, trotan, hablan, se medican y destruyen tal y como las vallas publicitarias les recomiendan, está esa enorme cosa verde, caprichosa e inclemente llena de bichos, boñigas, madrugadas al alba, cama a la hora de las gallinas y animales que huelen tratados como animales: ordeño o sacrificio. Se llama campo y a menudo los ecosistemáticos, empachados del mito del buen salvaje, lo confunden con el paraíso. Dumont, no. Tal vez porque nació en él, en Flandes, una tierra poco amable de campesinos viscerales, enroscadados en sí mismos, parsimoniosos, llenos de tiempos muertos y tacaños en palabras. Esos genes mamados durante generaciones son, tal vez, lo que hace que su cine tenga la paciencia de pegarse a lo que otros cortan o desechan en las mesas de montaje. Que es mérito y hazaña y disgusto de ortodoxos que confiesan sestear ante planos fijos que exceden en tiempo los manuales. También llamado crimen contra el pulso cinematográfico, discapacidad para mover la cámara o ausencia de Parkinsson. Para comprender las características principales del recorrido propuesto por Bruno Dumont, hemos de considerar Flandres como un ejercicio de depuración de una serie de líneas estilísticas que se habían establecido previamente a lo largo de su filmografía. En La vie de Jésus, Dumont exploró un paisaje grisaceo -el de su tierra natal-, unas tradiciones que recuperaban viejos rituales y sobre todo se cuestionó cómo filmar unos cuerpos para conferir al relato una fuerte dosis de fisicidad. En L'Humanité nos mostró la animalidad inherente a la condición humana y convirtió al protagonista de su relato en un idiota -en el sentido místico establecido por Dostoievski- que descubría la crueldad -y el sentimiento de perdidicón- de la humanidad. Twentynine Palms suposo un paréntesis en Estados Unidos en el que Dumont encontró un sentimiento de la esencialidad conceptual -y abstracta- cercano a Gerry de Gus Van Sant y The Brown Bunny de Vincent Gallo. En Flandres, el cineasta recorre sus líneas estílisticas, depura su estilo y construye un cuento cruel sobre la imposibilidad de atorgar un auténtico sentido a la expresión Je t'aime. Para llevar a cabo esta exploración, Dumont construye la película en dos tiempos. En el primer tiempo nos muestra cómo los seres se comportan como auténticos animales, copulan entre ellos, describen su apego a la tierra y hacen gala de su propia animalidad. En el segundo tiempo, los protagonistas masculinos se van a la guerra y la mujer espera el regreso del guerrero. La guerra descrita por Dumont es una guerra sin nombre, abstacta, parecida a la guerra elaborada por Jean Luc Godard en Les carabiniers, pero con la particularidad de que los protagonistas no llevan a cabo una aventura de carácter homérico, sino que aprovechan la guerra para hacer gala de su butalidad, del sin sentido de su condición y de su apego a la barbarie. En los momentos finales, cuando estos seres brutales que matan como si copulasen, son capaces de decir te quiero, alguna cosa esencial cambia en su destino. Así que prescindiendo de síntesis mezquinas, terremotos verbales o calenturas sentimentales, Dumont se planta en Flandres y rastrea con frialdad minuciosa la más mínima expresión, la brizna de hierba más pequeña, el olor de la tierra, los motivos de quienes la habitan, los celos, el amor no declarado, la mortificación, el sentido de la vida, la locura, la introspección y la guerra. Flandres requiere poco oído, el justo para tres o cuatro docenas de palabras. Los ojos en cambio, por epidérmicos e inmediatos, son imprescindibles. ¿Para qué parlotear cuando todo está ante la vista? Cuando Flandres se cuenta sola. Demeter, el hombre que trabaja su granja, que tiene una chica a la que es incapaz de llamar novia y a la que cubre con técnica de garañón. El que se come los celos cuando ella coquetea con otro. El búho que radiografía, escucha y no explica. Que va a la guerra porque hay una guerra y alguien tiene que ir. Y si es una guerra en un sitio dejado de la mano de Alá y de la Convención de Ginebra, donde no hay más que polvo y piedras, pues se va y punto. Ni una heroicidad, ni un gesto épico. Se dispara si hay que hacerlo y si los rematados, porque están heridos de muerte, son niños, pues, ¿acaso no matan a los caballos?, ¿y a las mujeres no se las ha tomado y violado desde el principio de los tiempos como botín de guerra?, ¿y qué hay de extraño en que el enemigo a su vez castre a los prisioneros en venganza? ¿o se abandone a un compañero moribundo porque estorba la huida? Demeter sobrevive y vuelve porque le sobra sentido común animal, porque rodea los obstáculos, no abre muros con la cabeza ni compite para podium. Pasó por la guerra como ha pasado y pasará por la vida: sabiduría bestial. Pero ha ganado algo tras el horror, dos palabras: “Te quiero”. Probablemente nunca dirá más allá de eso. (10) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Los libros del festival Lecturas sin reparos Como cada año, el Festival de Cine de Gijón propone, además de cine, lecturas en torno a sus puntos más fuertes. Este año, los directores homenajeados Larry Clark y Bruno Dumont cuentan con sus libros, lo mismo que el ciclo de Nuevos Cines del Este y los cursos Universo Media. Larry Clark. Menores sin reparos Eulàlia Iglesias (ed.) Precio: 10 euros. Larry Clark nació hace 63 años, curiosamente en la misma ciudad, Tulsa, Oklahoma, que otra gran cronista de la juventud norteamericana, Susan E. Hiton, la autora de Rebeldes y La ley de la calle. Sin embargo, si la autora de Rebeldes escribe su primer libro con tan sólo 20 años, Clark espera a tener 50 años para dirigir su primera película, Kids. Eso sí, una vez que empieza con el cine toma carrerilla y no para, rodando de un tirón Bully, Ken Park y Teenage Caveman en tan sólo 9 meses. Antes de Kids, Clark dedicó su tiempo a las drogas, a pelear en Vietnam, pasar una pequeña temporada en la cárcel, tener hijos, casarse (y divorciarse) un par de veces, y sobre todo a hacer fotos, muchas fotos... Su prestigio como fotógrafo ya le precedía cuando se puso detrás de la cámara (esta vez de cine) para rodar Kids. El libro coordinado por Eulàlia Iglesias y con textos de jóvenes críticos como Andrés Hispano, Ramón Ayala y Joan Pons, entre otros, analiza una a una las películas del siempre polémico cineasta norteamericano, los temas de su cine, su obra como fotógrafo, así como recoge abundantes declaraciones del propio Clark sobre su vida y su obra. Paisaje abstracto con hombre al fondo. Visita guiada a través del cine de Bruno Dumont Vientos del Este. Los nuevos cines en los países socialistas europeos 1955 – 1975 Nando Salvá Precio: 6 euros. Carlos Losilla y Jose Enrique Monterde (ed.) Precio: 20 euros. La comparación con pinturas de diferentes artistas (Coubert, El Bosco, Cezane, Bacon, Goya, Jasper Johns) y una larga entrevista con Bruno Dumont sirven al crítico Nando Salvá para articular su libro sobre este filósofo metido a director de cine que con tan sólo 4 películas (La vie de Jésus, L´Humanité, Twentynine Palms y Flandres) se ha consolidado como uno de los nombres claves del panorama cinematográfico mundial. Hay mucha tela que cortar en el muy personal, muy poético y muy misterioso cine de Dumont, y director y autor se despachan a gusto en un diálogo (que no entrevista), en el que el francés confiesa cosas tan curiosas como que no soporta el trabajo con los actores durante el rodaje, llegando a veces a cortar las escenas en las que actúan demasiado bien, que le da miedo la belleza, o que el cine intelectual le aburre profundamente. En noviembre de 1956 carros de combate soviéticos invadieron Hungría poniendo fin a dos meses de insurreción donde reaccionarios y marxistas heterodoxos habían aunado fuerzas para expulsar del poder a un gobierno totalitario a las órdenes de Moscú. Doce años después, en 1968, nuevamente los tanques del Pacto de Varsovia aplastaban otro sueño, esta vez el de un “socialismo con rostro humano” que había tomado cuerpo en Checoslovaquia a lo largo de la llamada “Primavera de Praga”. Tiempos revueltos para los países del Este no sólo en lo político, sino también en lo cultural, y si en Francia los muchachos de la Nouvelle Vague se habían rebelado contra “una cierta tendencia del cine francés”, en Polonia, Checoslovaquia o la URSS unos jóvenes apellidados Forman, Polanski o Tarkovski hacían lo propio en contra de un realismo socialista que suponía un canon tan opresivo y acartonado en lo ideológico como en lo estético. El libro coordinado por Carlos Losilla y Jose Enrique Monterde (cuarto del proyecto “nuevos cines”) es un conjunto de ensayos donde críticos como Ángel Quintana, Tamara Djermanovic o Sasa Markus diseccionan lo que fue la versión socialista de los nuevos cines de los años 60 y 70 del siglo XX. Completa el libro una antología con las mejores películas del movimiento y un diccionario de directores. El dolor. Los nervios culturales del sufrimiento. Ensayos de cine, filosofía y cultura Vicente Domínguez (ed.) Precio: 10 euros. El cine es una cosa demasiado seria como para dejarla sólo en manos de los críticos, y afortunadamente en este libro escribe todo tipo de gente, filósofos como Víctor Gómez Pin, escritores como Félix Romeo o artistas como Paco Cao. Ésa es también la filosofía de los cursos Universo Media, que utilizan al cine como excusa para hablar, reflexionar y debatir sobre otras cosas. En este libro se recogen las ponencias de la anterior entrega de Universo Media, dedicada nada más y nada menos que al dolor. Pero, ¿qué es el dolor? Vicente Domínguez, editor del libro, recoge una maravillosa metáfora tomada de la ciencia ficción soviética. Una activista pro derechos de los robots visita una fábrica totalmente robotizada, allí el ingeniero le explica que está trabajando en la creación de nervios de dolor para que los robots puedan detectar sus propias averías y así atajar los problemas de estas máquinas antes de que sea demasiado tarde. El dolor, nos quiere decir Domínguez, funciona como mecanismo de autoprotección frente a un mundo hostil cargado de peligros; y es que el sufrimiento es una realidad tan desagradable como inevitable, y quién nos lo iba a decir, necesaria. Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete (11) Rueda de prensa - Juan Carlos Rulfo, director de En el hoyo La clase obrera va a la autopista El director mexicano Juan Carlos Rulfo encandiló ayer a un público que asistió a una rueda de prensa matutina en la que relató la larga gestación de la película que presenta en Sección Oficial, En el hoyo. Los 250 vídeos rodados en un principio, atesorando un total de 10 horas de cine (reconvertidas obligatoriamente en 85 minutos), hacen de la cinta un documental minucioso en el que interviene un amplio abanico de personajes y situaciones. “Hay momentos realmente fascinantes, pero que no me entraron en el metraje. El gran problema es que cada día encontraba un personaje nuevo interesante; muchos de ellos no están en la película porque fue imposible incluir todas esas historias que surgieron”. Pero Rulfo sacó una conclusión muy clara: “Descubres que la clase trabajadora es muy sólida y solidaria, y eso es lo que hace que el país resista”. cada paso, aunque a ellos les daba mucho gusto que los siguieras. Pero no dejas de pensar que son momentos muy íntimos, aunque resultan mucho más interesantes que la gente estudiada”. También dijo que la película “nace de la necesidad de buscar algo que ocurría en la ciudad de México: los obreros de la construcción son mentadores de madres, contadores de cuentos”. A pesar de la hora de charla que ofreció el mexicano, reconoció que le resultaba difícil contar de qué trata la película. “Es una crónica de la vida diaria de los obreros de la construcción, pero al hacerlo sobrepasas territorios muy privados de la gente. Fue imposible seguir a los obreros a Se mostró muy orgulloso del resultado final, pero, sobre todo, de la relación que estableció con “los actores”. “Se me fueron acercando, poco a poco, todo un abanico de personas: el chaparro y el grande; Natividad, la mujer que creía en las almas, el único personaje femenino que apa- Un apasionante mano a mano con Rulfo. rece en la cinta. Ellos conformaban la historia del mundo, de la vida; sentía que estaba creando un universo, un espíritu de vida, desde la esquina de mi casa”. Precisamente, este personaje resulta muy curioso en el relato. “Natividad es una bruja de magia blanca. La vi apostada frente a las obras, después de observarla varios días, me decidí a platicar con ella. Le pregunté cómo me iba a ir con la película, y me respondió: 'Vas a tener dificultades, pero te va a ir bien'. Era como un exorcismo: una mujer con el pelo largo rizado hasta las rodillas, con unos ojos verdes que daban miedo”. A pesar de ser un documento muy realista, Rulfo declaró que “no me gusta el documental en un sentido clásico, ése en el que las personas cuentan fríamente ante la cámara su vida o lo que les pasa. No soy nada inteligente para preguntar a las personas. Soy tímido, no me resulta fácil acercarme a la gente; necesito que pase un tiempo y en ese tiempo empiezan a ocurrir cosas. Para acercarme a los obreros durante el rodaje, utilicé dos métodos: uno, seguir al chaparro durante una semana; luego, poner al chaparro con el grande e introducir a un tercer personaje, para que empiece la acción, para que vayan surgiendo cosas. Esto no se llama documental sino cine”. El formato documental le permitió incluir a una diversidad de persona- jes. “Es un formato muy fiel y muy noble; te puedes acercar más a la gente sin que ella se dé cuenta. Sin embargo, el día que no iba, me echaban de menos”. Rulfo comentó que muchos de los implicados ya han visto la película, incluso tienen decoradas las casetas de la obra con el cartel promocional. “Es muy curioso porque son personas que nunca van al cine; que compran las películas pirateadas. Se me acercaban y me decían: 'Eh, que ya he visto En el hoyo, ya la tengo en vídeo pirata’. Les ha hecho mucha ilusión, pero están asustados por el hecho de verse en el cine. Yo también estoy asustado”. (12) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Consultorio de Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Sección Oficial – Fuera de concurso A ver si logramos entender de qué coño va eso del cine moderno Estimadísima señora Garcis, Estimada y atribulada madre, el motivo por el cual me dirijo a usted tiene que ver con la honda preocupación que me causa en estos momentos mi hija de 17 años. Verá usted, señora, hasta este último año, mi hija era una chica modelo, buena estudiante, formal, seria y muy cumplidora. Jamás nos había proporcionado un disgusto, jamás una mala contestación o una palabra más alta que la otra. Pues bien, el caso es que el pasado año, en un viaje a Ponferrada con la parroquia del Santísimo Corazón Sangrante de Jesús, donde ejerce como catequista, conoció allí a un chico que estudia cine. Le diré, que no conocía yo semejante carrera, que siempre me había parecido cosa más bien poco provechosa, con excepción de Don José Luis Garci, que hace unas películas muy bonitas. El cambio que ha experimentado desde ese instante ha sido tan descomunal que ni su padre ni yo la reconocemos. Ya no es sólo que haya abandonado la parroquia, se vista con una especie de harapos sobrepuestos unos encima de los otros, o que se haya rizado el pelo, dios me lo perdone, como los negros; o que se haya puesto pendientes en la nariz, en las cejas y en la lengua, amén de unos símbolos como de chinos o japoneses tatuados en las piernas y los brazos. Lo peor es el libertinaje al que se nos ha entregado, el vocabulario que emplea y hasta la falta de higiene y orden en sus cosas y, lo más grave, en su persona. En nuestra casa somos amantes de la cultura, estamos suscritos al Círculo de Lectores, vamos al Teatro Jovellanos con asiduidad pues no nos perdemos ninguna gala de Bravo Asturianísimo, además de ver todos los fines de semana una película de vídeo. Sin ir más lejos, el pasado sábado alquilamos El Piano, fíjese usted si sabemos estar a la altura. Pues aún así no ha sido bastante, tras llamarnos viejunos nos ha pedido dinero para comprarse no sé qué bonos con los que poder asistir a las proyecciones de una cosa que dice que se llama Festival de Cine. Le ruego me aconseje que debemos hacer, que actitud tomar para retornarla al camino recto. Sin otro particular, me despido en espera de su respuesta. comprendo su congoja y su desorientación. Es sabido que los niños que hemos criado a nuestros pechos, en algún momento de la vida sufren una extraña mutación llamada adolescencia. Por más que en esa etapa abusen gravemente de nuestra paciencia y nuestros bolsillos hasta el punto de que, día sí y otro también, sintamos ganas de arrojarlos, cual hacían los espartanos, por el monte Taigeto, usted comprenderá que no es solución. La solución, querida mía, es esperar, atrincherados en la cordura, que esa etapa de cambios incomprensibles pase, y vuelvan al raciocinio y la lógica. Mientras tanto, no deje que le ataque los nervios más de lo necesario. Si prefiere llevar su ropa mugrienta y como sacada de un rastrillo de caridad, pues déjela. Que quiere ponerse una argolla como de vaca lechera en la nariz, pues que se la ponga, que quiere llevar en el cuerpo más lectura que un suplemento dominical, pues que lo lleve. Ya se cansará y usted, a cambio, ganará en salud mental. No la sermonee, le aseguro que no da resultado y bajo ningún concepto le ponga ejemplos de lo que usted hacía a sus años. Le mirará como se mira a una antigualla rancia y apolillada. Paciencia pues, cómprele los bonos, demostrándole así que puede confiar en usted por ser madre “enrollada”. Que vaya al cine, con un poco de suerte se verá retratada en alguna película y hasta puede que ciertos pelajes, modos y maneras le produzcan risa floja por ridículos. Y no olvide que un día, cambiará la moda o se enamorará de un agente de cambio y bolsa y entonces, dejará de ir hecha una mamarracha y pasará a imitar a otra tribu. Usted espere y ya verá, eso sí, el cambio igual le resulta gravoso para el bolsillo. Pero en fin es lo que hay y hasta Nuestro Señor Jesucristo le dio disgustos a San José y a la Virgen. Esperando haberle sido de algún consuelo, me despido con un cariñoso saludo. Con la muerte a sus espaldas Una mujer contra la esquina. Day Night Day Night Julia Loktev, USA, 2006, 94’ Premio Mirada Joven en la Quincena de Realizadores de Cannes, Day Night Day Night, de Julia Loktev, nos muestra a lo largo de hora y media, y un poco al estilo de los hermanos Dardenne, los movimientos de una chica joven, de apariencia absolutamente convencional, que ha decidido suicidarse haciendo estallar una bomba en Times Square, Nueva York. Nada llegaremos a conocer de sus motivaciones y orígenes; sólo veremos sus comportamientos decididos y mecanizados. Por el camino, la película esboza una interesante reflexión acerca de los mecanismos de adoctrinamiento fundamentalista mediante unos diálogos de una precisión extrema, helada, y también traza una teoría escéptica acerca de la representación mediática de la figura del terrorista como herramienta para generar miedo. Así, la película triunfa gracias a la ambivalente relación que entabla con su personaje, a las ansias de comprensión que genera en el espectador (despertando dudas e inquietudes) y a la extraordinaria honestidad del retrato humano que plantea. Empeñada en observar con detenimiento conductas individuales, la película se niega a abordar el conflicto que estudia mediante la generalización. Se trata de retratos que resultan más humanos en cuanto rehuyen la contextualización partidista y el dogmatismo ético o político. El filme construye o recrea una realidad muy de cerca para fabricar un espacio de intensa veracidad que sirva de plataforma para la libre reflexión acerca de los orígenes y funcionamiento del fenómeno terrorista, pero también del heroísmo y del deseo de vivir. Hoy a las 19.45, Cines Centro Sala 1 Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete (13) Andrés Calamaro escribe para “El cuarenta y cuatro” ¡Que se repita! Días atrás, mientras andaba de gira por España promocionando su nuevo disco, El palacio de las flores, Andrés Calamaro respondió a la petición del Festival y escribió en exclusiva para este periódico una suerte de oda a ese abrazo musical hispano-argentino retratado por el documental Y todo lo demás también. Andrés Calamaro Los amigos Iván, Kike, Xoel, los músicos y los Pereza llegaron a Parque Leloir, a Buenos Aires, siguiendo la corriente Ñ para estrechar vínculos con la vibra porteña y grabar sus impresiones musicales conjuntas entre los árboles del oeste... Pues calentaron motores con Todo lo demás y eso me honra y me hace parte de este proyecto que es un abrazo musical y personal... Me lo encontré al Kike en las puertas mismas del estudio TNT donde se grabaron las primitivas, inspiradas grabaciones del rock verna-culo, del rock argentino, y, si no me falla la memoria, le indiqué la dirección para llegar a San Telmo. Me cuentan que llegaron los Pereza y desperezaron la tarde en Del Cielito con su rock, me cuentan que por poco se les cae el techo y que el proyecto casi termina en Katrina, que las cucarachas en Parque Leloir eran de respetable tamaño, si es que se puede respetar a las cucarachas y no pisarlas solamente. Que fueron mis amigos de los Babasónicos a estre- Enfants Terribles Escuela de rimas PATROCINADO POR: The Hip Hop Project Matt Ruskin y Scott K. Rosenberg, USA, 2006, 88’ EN COLABORACIÓN CON: CONSEJERIA DE EDUCACION Y CIENCIA. PRINCIPADO DE ASTURIAS VALNALÓN CIUDAD TECNOLÓGICA CONCEYU DE LA MOCEDÁ DE XIXÓN CONCEYU DE LA MOCEDÁ D´ASTURIES The Hip Hop Project es un documental sobre un grupo de jóvenes músicos negros que componen versos a ritmo de rap, que hacen que el mundo se detenga a escuchar y ver, mientras ellos transforman esos versos en su forma de vida, su razón de existir. Matt Ruskin hace un experimento artístico con actores no profesionales que, además de mostrarnos sus ritmos, nos enseñan sus vidas cotidianas, sus casas, sus familias, en fin, unos adolescentes neoyorkinos normales... Pero que riman y bailan. El hip hop es un movimiento cultural surgido a principios de los años 1970 en las comunidades afroamericanas de los barrios neoyorkinos Bronx, Queens y Brooklyn. La concepción clásica del hip hop se centra en la existencia de cuatro aspectos o "pilares" de la cultura: el MCing (o rapping), el DJing (o turntablism), el Breakdancing (o BBoying), y el graffiti. Hay quienes dan la misma importancia a otros cuatro elementos, como el beatboxing, el activismo político, el diseño de ropa y el de complementos... En The Hip Hop Project se nos muestra a músicos con voz propia, vividos de sobra en calles malas y en peores compañías, rápidos, geniales y con talento y frescura innatos para improvisar versos y construir ritmos. Bruce Willis produce la película, mientras que Russel Simons, uno de los grandes de la industria rap, aporta el estudio donde los chicos culminarán el proyecto con la grabación de un disco colectivo. Matt Ruskin, uno de los dos responsables del proyecto, estudió producción cinematográfica en la Tisch School of Arts de la Universidad de Nueva York, donde se graduó con honores en 2002. Durante ese tiempo, trabajó con Darren Aronofsky en la producción de Réquiem por un sueño. Mientras estudiaba con el reconocido director de documentales George Stoney, produjo y dirigió The Glen of the Downs. Inmediatamente después de graduarse, Matt Ruskin recibió el encargo de dirigir The Hip Hop Project, película en la que ha trabajado durante cinco años. Hoy a las 12.15, Teatro Jovellanos char lazos también y yo espero que se repita todo, menos las cucharachas y el incidente con el tanque de agua y el techo del estudio. Aunque supongo que para que la experiencia bonaerense sea completa habrá que sufrir un poco... Y gozar tambien. Espero que mis colegas hayan sido bendecidos por las bondades de mi terreno, y hayan probado un buen asado y unos reparadores mates, que tan bien sientan. Ya me enteraré si probaron otras mieles, dulces y amargas, de la tierra. Entre fuegos artificiales pobres y pasaportes quemados con rabia, escenas de la vida coyuntural, postales de un Todo lo demás que es mío pero también es de todos. Proyección de Y todo lo demás también: mañana a las 19.45, Cines Centro Sala 5; viernes a las 22.15, Gijón Sur. Concierto de Pereza, Quique González, Iván Ferreiro, Deluxe: mañana, 22.30, recinto Feria de Muestras. (14) Nobleza obliga Rey de reyes Me hallaba yo desayunando en la mañana de ayer -después de otra noche intensa en todos los sentidos que puedan ustedes imaginar y algunos más que ni consta entre gentes de honrado vivircon un singular muchacho que, procedente de la cuenca minera, había pasado la noche en nuestra ciudad tras la actuación de su prescindible conjunto musical en el pertinente concierto del festival, cuando ambos nos sobresaltamos ante la noticia del día: La princesa de las Asturias, y por ende las Españas, no parirá varón sino hembra. No es baladí la cuestión sucesoria. Por un quítame allá esas pajas de machotes frente a féminas, este país ya ha sufrido un par de guerras serias. Es más, ya en el siglo XV con Juana La Beltraneja, hija oficial de Enrique IV aunque de paternidad dudosa, comenzaron los problemas dinásticos que colean aún en nuestros días. Yo, por la parte que me toca como perteneciente al selecto círculo de las Grandezas de España, no puedo dejar pasar la ocasión de utilizar estas páginas, que gentilmente me brinda el Festival Internacional de Cine de Gijón, para proclamar mi fidelidad absoluta al legítimo heredero de la corona del Reino: Felipe Juan Froilán de Todos Los Santos. En efecto, soy froilanista. Si me quedaba alguna pequeña duda sobre mis preferencias dinásticas, estas se vieron absolutamente confirmadas, en el casorio de sus tíos, con aquel famoso puntapié por el que pasó a ser conocido como Froilán el de la Real Patada. Otro suceso que situaba al pequeño aspirante a Ronaldinho regio -por su enorme habilidad con las extremidades inferiores- tras la estela del éxito fue su exclusión forzosa del bautizo de la pequeña Leonor por mala conducta. ¡Ay pequeño Froilán! Cuan duro debió resultarte comprobar como una advenediza hembra venía a usurpar lo que la naturaleza te había reservado por derecho. Si es que no te quedó más remedio que montarla. Aunque sé de antemano que es esta una batalla perdida, y que de poco están sirviendo los torpes movimientos conspirativos que secretamente aliento (en compañía del ínclito y probo Don Jaime Peñafiel), en mi fuero interno imagino un futuro donde Froilán I rige con mano firme los designios de España y nos devuelve el esplendor perdido de antaño. Aunque, no sé porqué, algo me dice que quizás está más cerca de un protagonista en la próxima de Larry Clark. 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Videoclips a la hora del café “El 95% de los vídeos que se producen en el mundo son pura basura” En el tradicional “Café con...” del Festival, este viernes se presentará Eclectia – Un panorama del videoclip nacional, DVD de próxima aparición que recopila desde los valores de la imagen los trabajos más relevantes producidos por un género a menudo bastardeado. Se llama Eclectia es un DVD y llega para cubrir un vacío: el de la difusión del trabajo de realizadores hispanos de videoclips. Es decir: el videoclip cuenta con espacios de difusión televisiva, pero se trata de una propagación mayormente atada al humor y los caprichos de los 40 y de otros principales. Eclectia es una producción de Malvalanda que será distribuída por Pías Spain en diciembre. Pero su presentación oficial tendrá lugar este viernes a las 16 en el Café del Sol, espacio tradicional del Festival Internacional de Cine de Gijón. Contra la corriente unívoca de difusión y evitando esas tendencias a priorizar los contenidos musicales por sobre la imágen, Eclectia – Un panorama del videoclip nacional contemporáneo pone el foco en los realizadores, y por tanto en el DVD son ellos los que firman los trabajos. Así, Canción de todo va mal es una película de Gabe Ibañez para Le Mans, Dulces Sueños un film de Marc Lozano para Los Planetas y Como un fan es obra de Domingo González para La casa azul. Por allí y por nombres como los de Ramón Lluis Bande, Nuria y Pilar (Rita Clip), J.A. Bayona o Benet Román, entre otros, pasa la selección realizada por Luis Cerveró, comisario artístico del proyecto, que aquí habla de Eclectia y sus motivos. ¿Cómo nace el proyecto Eclectia? ¿A qué necesidades responde? Eclectia nace por iniciativa de los productores Oscar Sarmiento y María del Puy Alvarado. Vinieron a mí con la propuesta de llenar un vacío en la edición de DVD's de videoclips españoles en la que prime una valoración de los realizadores sobre la del artista musical, algo así como lo iniciado por Palm Pictures con su línea “The Work of Director”. Lo que Eclectia pretende es dar a conocer al público los creadores más interesantes que se esconden tras la exigua industria nacional del video de promoción musical. ¿Cuál fue el criterio que se utilizó para la curación? Por un lado, hay un criterio generacional. Es todo un grupo de directores que se han forjado o consolidado a caballo entre los dos siglos, desde finales de los noventa hasta hace dos o tres años. Esto dejaba fuera tanto a pioneros de los ochenta como a los realizadores más recientes. En segundo lugar, era importante valorar las obras desde la mayor objetividad posible, seleccionando a aquellos re- alizadores que suponen una excepción a la mediocridad general de nuestro país. Buscábamos miradas personales, sinceras, coherentes y de calidad, más allá de si trabajan para el mainstream o las independientes, o si manejan presupuestos altos o ridículos. Hemos intentado seleccionar lo mejor de cada campo. Aún así, imagino que siempre hay algo de subjetividad por mi parte en la selección final. Repitiendo una de las preguntas que se realiza a los directores en las entrevistas del DVD: ¿qué es para usted un videoclip? Bueno, yo la definición que doy siempre en mis clases es “una producción audiovisual realizada exclusivamente para la promoción comercial de un único tema musical”. Pero como todo hoy en día, esto ha ido evolucionando a otros formatos más abiertos y postmodernos. ¿Mejor video de la historia? ¿Peor? Esta pregunta no tiene demasiado sentido. Puedo decir que mi vídeo favorito es March of the Pigs, de Peter Christopherson para Nine Inch Nails. Y los que más me molestan son toda esa mierda que se hace para la música negra que promueve el sexismo, el lujo y que distorsiona de manera peligrosa las expectativas de muchos adolescentes. Esos vídeos son un peligro inmoral. Pero bueno, el 95% de los vídeos que se producen en el mundo son pura basura. ¿Qué le aportó el videoclip al cine? Conozco a un chico que está escribiendo una tesis doctoral sobre este tema, o sea que no es una pregunta fácil. Mi opinión es que hoy en día no hay barreras tan evidentes entre los distintos géneros y formatos audiovisuales. Todo aporta a todo, todo está mezclado, triturado, desvirtuado y la única realidad es que cada día la imagen en sí tiene menos valor. Cada vez todo significa menos. Dicho esto, imagino que los videoclips, como la publicidad, por su inmediatez, son un banco de pruebas de la contínua renovación tecnológica, en la que se prueban todos los gadgets que salen al mercado antes de que estos alcancen al cine. Pero más que aportar, se adelanta en algunos meses. También ha aportado algunos de los directores más interesantes que trabajan hoy en día en el cine, como David Fincher, Michel Gondry o Jonathan Glazer. Festival Internacional 44 de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete (15) Tablón de anuncios Datos, agregados, correcciones, post-its y otros detalles que es mejor tener en cuenta... Ese estúpido cuestionario que todo el mundo lee Hoy: Cristina Porras (Jurado joven) Café con... Y todo lo demás tambiém Dos modificaciones en la rutina del “Café con...”, pero con alta recompensa: hoy la cita es a las 16.15 en Gallery Art & Food (repetimos: hoy a las 16.15 en el Gallery y no a las 16 en el Café del Sol), y allí estará la plana mayor del documental Y todo lo demás también y del concierto que mañana tendrá lugar en el recinto Feria de Muestras. Es decir que a la mesa del Gallery se sentarán nada menos que Pereza, Deluxe (Xoel López), Iván Ferreiro y el director del documental, Antonio Galeano, junto a otros musicos españoles y argentinos involucrados en la aventura. Ruedas de prensa de hoy Tele-festival online 12.15 horas: Jafar Panahi, director de Offside. Para seguir el festival minuto a minuto, segundo a segundo (en “tiempo real” como dicen ahora) visita nuestra web, www.gijonfilmfestival.com, donde podrás acceder a los archivos de audio y vídeo de todo lo que vaya sucediendo a lo largo de estos excitantes días de cine y mucho más. Los vídeos de los “Cafes con...” y las ruedas de prensa de los invitados del festival quedarán colgados para uso y disfrute de los incondicionales del festival e internautas de la galaxia toda. Para más información, no sólo del festival sino de toda la programación cultural del Ayuntamiento de Gijón, visita www.teatrojovellanos.com. Encontrarás noticias sobre las actividades del Teatro Jovellanos, Gijón Sur, festejos y locales municipales de ensayo. Información sobre los espectáculos de música, teatro, cine y danza de la ciudad y venta de entradas online son los principales contenidos de la web. 12.45 horas: Mohammad Reza Foroutan. Actor de Gradually... En el salón de actos de la Obra Social y Cultural Cajastur, Plaza del Monte de Piedad. Fiestas, conciertos y otras aventuras nocturnas Una película Una revista Las tortugas también pueden volar (Bahman Ghobadi) La del Festival de Cine Un actor Sean Penn Una actriz Adriana Ozores Un color Negro Un vicio El cine Una marca de ropa Una canción Skunk Funk 24 Hours Party People (Happy Mondays) Un programa de televisión Una comida Paella Un libro House Un personaje de animación Peter Pan El Aleph (Jorge Luis Borges) Una ciudad San Sebastián Una estupidez No haber venido a Gijón antes 00:30 horas: Kid Congo Powers + Alto Volto (Sala Albéniz) Miembro fundador de Gun Club, Kid Congo Powers es también conocido tras su paso por los Bad Seeds de Nick Cave en los discos Tender Prey y The Good Son, además de haber grabado tres álbumes con los tenebrosos The Cramps. Pero la nómina de artistas con los que ha colaborado no acaba aquí. Sumen estos nombres: Legendary Stardust Cowboy, Diamanda Galas, Jonathan Fire Eater, Make-Up, Mark Eitzel... Además compone, canta y produce en proyectos como Die Haut o Knoxville Girls, y finalmente en solitario, con su banda Pink Monkey Birds. Con este bagaje, que incluye varias décadas y estilos diveros, y con el rock de gama alta como denominador común a todo ello, el espectáculo está más que garantizado. Los ovetenses de Alto Volto recuperan la tradición del power trio de hard rock en su máximo esplendor. Sus influencias comunes, provenientes principalmente de bandas inglesas y americanas de los 70 y 90, dan como resultado un sonido elegante y poderoso que fluye por estilos como el blues rock o el grunge más cercano al hard. Ganadores del concurso de maquetas de los 40. Gala de Clausura – Horarios La gala de cierre del Festival se desarrollará el viernes 1 de diciembre según el siguiente cronograma: a las 20.25 se abrirán las puertas del Teatro Jovellanos, a las 20.30 será el turno de un entremés musical a cargo de un dj, y a las 21.03 dará comienzo la gala. Al terminar la ceremonia se proyectará la película final de este Gijón 2006, Idlewild, fantasía musical animada por el dúo de hip hop OutKast. (16) 44 Festival Internacional de Cine de Gijón. Miércoles 29 de noviembre de 2006, número siete Hoy... TEATRO JOVELLANOS 09:30 H. ENFANTS TERRIBLES "Driving Lessons" 94' 12:15 H. ENFANTS TERRIBLES "The Hip Hop Project" 88' 17:00 H. NUEVOS CINES "El baile de los bomberos" 72' GIJÓN SUR 17:00 H. LARRY CLARK CINES CENTRO SALA 2 17:00 H. NUEVOS CINES "Bully" 113' 19:45 H. DESORDEN Y CONCIERTO "Dark Beat" 60' "Perlitas en el fondo" 106' 20:00 H. SECCIÓN OFICIAL "Le dernier des fous" 96' 22:15 H. L. ALONSO 22:30 H. PRESENTACIÓN ENCUENTRO CON EL PÚBLICO BRUNO DUMONT "Fantasma" 63' 20:00 H. SECCIÓN OFICIAL "Daratt" 95' "Meokgo and the Stickfighter" 17:00 H. NUEVOS CINES "La pasajera" 63' 22:30 H. PRESENTACIÓN DÍA D'ASTURIES COMPETICIÓN "The Party is Over" 7' "La Marea" 8' "Gertrud" 22' "Vacyo" 7' "Recuerdos" 13' "La terapia" 10' "La invasión de los..." 5' "Flandres" 91' "Offside" 88' "Sniffer" 10' 22:30 H. SECCIÓN OFICIAL CINES CENTRO SALA 4 CINES CENTRO SALA 1 CINES CENTRO SALA 3 CINES CENTRO SALA 5 19' ANTIGUO INSTITUTO 17:00 H. DESORDEN Y CONCIERTO "Vierka" 76' 19:45 H. ESBILLA "Rising Son: The Legend..." 98' 22:15 H. PRESENTACIÓN ENTRADA LIBRE P. WHITEHEAD "In the Beginning it was the Image" 100' 17:00 H. P. WHITEHEAD 11:00 H. ENTRADA LIBRE NUEVOS CINES "Footage of The Libertines" 33' "Pop Films" 41' "Padre" 95' 19:45 H. DESORDEN Y CONCIERTO 17:00 H. SECCIÓN OFICIAL "Herbie Hancock: Possibilities" "Gradually..." 74' 10:00 H. SOLO PRENSA Y ACREDITADOS SECCIÓN OFICIAL "Offside" 88' "Sniffer" 10' 12:15 H. ENFANTS TERRIBLES "Winky's Horse" 95' 88' 19:45 H. SECCIÓN OFICIAL (no compet) 22:15 H. DESORDEN Y CONCIERTO "Day Night Day Night" 94' "Between the Devil and the Wide Blue Sea" 90' 17:00 H. SOLO PRENSA Y ACREDITADOS SECCIÓN OFICIAL "Daratt" 95' "Meokgo and the Stickfighter" 22:15H. NUEVOS CINES 19' "El manuscrito encontrado en Zaragoza" 156' 19:45 H. NUEVOS CINES "Los amores de una rubia" 80' 22:15 H. UNIVERSO MEDIA "Red Road" 113' Santos del día 29 DE NOVIEMBRE Estado del tiempo Temperaturas algo en descenso moderado. Fuertes vientos desde primeras horas de la mañana que amainarán a lo largo del día. Nubosidad variable. Estado de la mar Fuerte marejada. Estado de la luna Cuarto creciente y menguante. Refranes populares "Jodido andas si pedrisco gordo te visita la cosecha fuera de fecha". "Cabra y moza que tiren al monte, que trisquen y no te importen". "Gallina que no pone tajo, pepitoria y cazuela". San Pernambuco de Chinchorrillo Indígena y mártir, Pernambuco era oráculo y sanador de la tribu de los Yanomami Pocahuentas en las llanuras selváticas de la Bolivia central. Aparecidos los españoles al mando del capitán Ernesto Pizarro "El Cabezón", Pernambuco recibiólos en nombre de la tribu dándoles la bienvenida y poniendo a su disposición alimentos y abalorios. Convencidos de la docilidad de los indígenas, Fray Basiliso, dominico que acompañaba las huestes de Pizarro, comenzó su labor de conversión y bautizo de los salvajes. La convivencia era pacífica hasta que en noche nefasta, Pizarro dio rienda suelta a sus bajas pasiones y poseyó por la fuerza a la hija del Jefe Ataphuerca. Pernambuco fue enviado como emisario para afear la conducta a Pizarro y pedir explicaciones. Pizarro, lejos de arrepentirse, lo hizo prender y poner en el potro de tortura. Tras días de horrendos sufrimientos, falleció por descoyuntamiento, no sin antes maldecir a los españoles: "que vuestra simiente no dé fruto en esta tierra, que se sequen vuestras lenguas y caigan, secos y marchitos, vuestros miembros". Tal fue el pavor infundido en los soldados y en el propio Pizarro que Fray Basiliso pidió a Roma la canonización de Pernambuco a fin de ganarse su favor. El Papa Gumersindo III, le elevó al fin a los altares en el siglo XIV. Patrón de ONGS, Greenpeace e indigenistas en general, se lo invoca diciendo: "Pernambuco que combatiste a los expoliadores, que el indio no cambie taparrabo por calzones, que no defeque en vater, que fecunde la selva como hicieron sus mayores". El Comité de Mujeres para la Elección de Míster Festival 2006, compuesto por las señoras Doña Almudena Olalla Menéndez, Doña Susana Domínguez Tejedor, Doña Isabel Sánchez Lueje y Doña Palmira Escobar Martos, ha escogido tras secretísimas y numerosas deliberaciones no exentas de controversia, propia de gustos y tendencias personales, al director mexicano Juan Carlos Rulfo como ganador de dicho galardón. A continuación se transcribe el acta íntegra de la reunión. Las aquí reunidas otorgamos el Premio Míster Festival 2006 al director mexicano Juan Carlos Rulfo por su deliciosa voz, por su rico, tierno e hilarante anecdotario. Por su parsimonia y elegancia narrativa; por sus manos, que acompañan con calma todas y cada una de sus palabras. No obstante ser éstas las prendas más sobresalientes de su persona, determinadas miembras de este Comité, en un momento, tal vez, de alteración hormonal que, sin ser exculpatoria es comprensible, han encontrado en este realizador aspectos físicos, que por mor de nuestra sensibilidad femenina y por ser mujeres de decencia más que probada, no solemos tener en cuenta a la hora de fallar este premio. Aún así, hemos creído necesario connotarlas en este escrito, tal cual fueron proferidas. A saber: calvicie incipiente (“sexy que te cagas, a mi que me den un calvo, paso de El Puma y de Axel Rose”), altura considerable y constitución recia (“¡Dios, que pedazo hombre, un ropero de tres cuerpos”). Las manos, de nuevo, si bien no con los mismos fines a los que anteriormente hacíamos referencia (“paso de que me imponga las manos el Papa, que me las imponga él”). Por último punto, una nueva referencia a la voz, asimismo con fines no propiamente narrativos (“que me platique lo quiera, por mí como si quiere platicar de la marmota chillona o la perdiz chocha”. En Gijón a 28 de noviembre de 2006, firmado por las anteriormente citadas y para que así conste y figure, queda legalizado este documento en presencia del señor notario Don Bernardino Olmedilla de Rocasanta y Díez Perojo. Periódico Festival Internacional de Cine de Gijón Redacción: Marcelo Panozzo, Susana Tejedor, Isabel Lueje, Jairo Moreno. Traducciones asturiano:María Xosé Rodríguez, Llucia Menéndez. Fotógrafos: Marco Villabrille, Palmira Escobar. Diseño y maquetación: www.marcorecuero.com Imprime: El Comercio.