3.– Ser portadores de Esperanza

JULIO - AGOSTO/ 2013 / Año 5
3.– Ser portadores de Esperanza
“...Educar es apostar y aportar al presente y al
futuro. Y el futuro es regido por la esperanza.
… No cabe duda de que estamos viviendo un
tiempo de profundos cambios. Se suele decir un
tiempo de crisis…
...En primer lugar se trata de una crisis global, es
decir una forma de entender la realidad y de entendernos a nosotros mismos.
En segundo lugar la crisis es histórica. No es la
“crisis de hombre” como un ser abstracto o universal: es una particular reflexión del devenir de
la civilización occidental, que arrastra consigo al
planeta entero...Nunca como en esta época…, se
han visto tan radicalmente sacudidas las certezas fundamentales que hacen a la vida de los
seres humanos.
La esperanza nos invita a cultivar los lazos personales y sociales, revalorizando la amistad y la
solidaridad. La escuela sigue siendo el lugar donde las personas pueden ser reconocidas como
tales, acogidas y promovidas…
...Es fundamental que seamos “maestros de
humanidad”...aportemos el sentido de justicia y
la misericordia.
La invitación a ser audaces y creativos. Las nuevas realidades exigen nuevas respuestas...exigen
un espíritu abierto que realice un discernimiento
constructivo, que no se aferre a certezas rancias
y se anime a vislumbrar otras formas de plasmar
los valores, que no dé la espalda a los desafíos
del tiempo presente… a construir lo nuevo desde
el diálogo y la colaboración.
La invitación a la alegría, a la gratuidad y a la
fiesta. Está en la autenticidad de nuestra esperanza el saber descubrir, en la realidad cotidiana,
los motivos grandes o pequeños, para reconocer
los dones de Dios, para celebrar la vida, para
salir de la cadena del debe y el haber y desplegar
el gozo de ser semillas de una nueva creación.
Para hacer de nuestras escuelas un lugar de trabajo y estudio, sí, pero también, un lugar de celebración, encuentro y gratuidad”.
Jorge Mario Bergoglio. Educar: Exigencia y Pasión. Ed. Claretiana
Pensamos juntos:
 ¿Cómo definirías la Esperanza?
 ¿Qué clase de educador soy?¿Esperanzado?
¿Autosuficiente?¿Optimista?¿Pesimista?
¿Realista?
 ¿De qué manera lo manifiesto?
 ¿Cultivo los lazos personales y sociales en mi
comunidad educativa?¿Cómo?
 ¿Soy audaz y creativo o más bien cómodo y
temeroso en mi tarea cotidiana?
 ¿Vivo la alegría, la gratuidad y la fiesta que me
regala la Fe?
 ¿Cómo nos paramos como comunidad CRISTIANA / EDUCATIVA, ante los conflictos que
nos plantea la realidad dónde estamos insertas?
Rezamos juntos:
Gracias te damos Padre,
por concedernos el Bautismo,
que en profetas nos convierte
y nos mueve a proclamar,
La presencia de tu Hijo
quien nos viene a liberar.
Te pedimos por tu pueblo,
que sufre pecado y opresión,
situaciones que siempre nacen
por carencia del amor.
Mira con misericordia
nuestra tibieza y temor,
y envíanos a tu Espíritu
Que refuerce nuestra vocación.
Te ofrecemos nuestra vida,
para a Jesús seguir,
haznos sus testigos fieles
para tu Reino construir.
Mira a los muchos hombres y mujeres
que sufren de norte a sur,
y conviértenos en profetas tuyos
que aminoren su sufrir.
En tus manos nos ponemos,
inunda nuestro corazón,
de gran celo apostólico
y disposición para la misión.
Profetas de Esperanza
entre tu pueblo nos llamas a ser,
danos palabras sabias
y apóyanos en nuestro
quehacer.
Gloria al Padre...