Stones

IENFOQUEI
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GET IN SATISFACTION
Los viejos rockeros
nunca mueren
T
ras la espantada del 2006, motivada
por pintorescas caídas de cocoteros y
vulgares laringitis, por fin, los Rolling
Stones han vuelto a pisar suelo español. Y lo
han hecho como siempre, en loor de
multitudes y sonando contundente y
espectacularmente en todos los conciertos.
Enrique de Mora
Socio Director de EXCELTIA.
www.exceltia.es
Los Rolling Stones irrumpieron en la escena
musical en 1962. Más allá de ser los reyes del
rock (¿o del rhythm & blues?), son desde hace
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música, los grupos y los solistas, tienen siempre
fecha de caducidad, tengan o no factor X... Si son
buenos, su música, sus composiciones, sus
discos, quedarán por los siglos de los siglos. Si
no, caerán en la habitual efimereidad de la
mediocridad. Sea o no de calidad, un grupo o un
cantante, por razones meramente biológicas,
dura lo que dura…
En el caso de los Rolling, sorprende
particularmente la longevidad, unida a la
intrínseca calidad y fuerza Stone. Desde el inicio
de los ochenta, cada vez que se ha anunciado
una nueva gira del mítico grupo inglés todos nos
hemos preguntado si sería la última. Y así
seguimos, gira tras gira.
No es precisamente que ellos, como personas,
hayan dado con la fórmula del elixir de la eterna
juventud, según se aprecia en sus ajados rostros, pero la forma física y musical les sigue
acompañando. Mick Jagger, Keith Richards,
Charlie Watts y Ron Wood superan ampliamente
los sesenta y están al borde de la edad de jubilación, pero ahí los tenemos, dando un concierto
detrás de otro a lo largo y ancho del mundo.
“Billboard”, y pese a las anulaciones de muchos
conciertos, la actual gira mundial de los Rolling
Stones, “A Bigger Bang”, es la más lucrativa de
la historia de la música, al superar el récord de
recaudación anteriormente en poder de los irlandeses U2. Desde agosto de 2005 hasta diciembre
de 2006, por tanto sin contabilizar los conciertos
de 2007, los Rolling Stones recaudaron más de
330 millones de euros en 110 conciertos, a los
que asistieron 3,5 millones de fans. El record
hasta entonces lo ostentaba U2 con su tour
“Vertigo” que logró hace unos años algo más de
250 millones de euros… Desde el punto de vista
estricto de beneficios, se estima que la actual
gira mundial les supondrá a los Stones unos
ingresos de cincuenta y cinco millones de euros,
sin considerar los generados por el merchandising.
Otro record mundial en manos de los Rolling
Stones es el de asistencia de público a un
concierto. El 18 de febrero de 2006 fueron
capaces de congregar en Rio de Janeiro, en un
concierto gratuito, a dos millones de personas
en la playa de Copacabana.
EL VALOR DE LA MARCA
Por otra parte, la capacidad de generar negocio
de los Rolling Stones se mantiene intacta.
Además de ser de los pocos grupos
-junto con U2, la reflotada Police y poco máscapaces de llenar estadios, son el grupo que más
dinero gana en las giras. Según la revista
Publicado en septiembre de 2005, “A Bigger
Bang” es el vigésimo cuarto disco de los Stones
con material original y el primero del nuevo
mileno. Aunque los críticos parecen coincidir en
que es su mejor disco en el último cuarto de
Fotógrafo: Mark Seliger
años, un fenómeno a analizar por su
ILA MARCA
“ROLLING STONES”
SE CREO Y
CONSOLIDO EN LOS
incombustibilidad. Precisamente, estos dias
se estrena en Estados Unidos, una película
sobre el grupo, “Shine a Light”, dirigida por el
gran Martin Scorsese.
SESENTA Y DESDE
ENTONCES NO HA
HECHO MAS QUE
ACUMULAR VALOR,
COMO
DEMUESTRAN SUS
EXITOSAS GIRAS.I
Organiza
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¿Qué significa esto? Que cuarenta y cinco años, repito,
cuarenta y cinco años después de la formación de la banda, los
Rolling Stones siguen en la cresta de la ola. Musicalmente
hablando no emiten signos de decaimiento, a pesar de los
achaques propios de su ya venerable edad…
EL CICLO DE VIDA DEL PRODUCTO
Cualquier producto, en cualquier mercado, tiene, inevitablemente,
un ciclo de vida. El producto nace, crece, se estanca, decrece y
muere. Es ley de vida. Es ley de marketing. En el mercado de la
Organiza
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siglo, desde “Tattoo You” (1981), también convergen en que aún así está lejos de los gloriosos
frutos de los sesenta y setenta, como “Beggars
Banquet” (1968), “Let it bleed” (1969), “Sticky
Fingers” (1971) o “Exile on Main Street” (1972).
De hecho, desde hace décadas, los conciertos de
los Stones son mucho más un exponente de
marketing corporativo (interpretan sus temas
históricos) que de marketing de producto (la clásica promoción del último disco). Por ejemplo, en
la actual gira “A Bigger Bang”, sólo interpretan
un tema (Rough Justice) de su último álbum, a
pesar de la calidad de éste.
La marca “Rolling Stones” (y el famoso logo
lingual) se creo y consolidó en los
sesenta y desde entonces no ha hecho
más que acumular
valor, como
demuestran
sus exitosas
giras.
Según datos recientes del dominical londinense
“The Sunday Times”, la fortuna de los Stones
asciende en la actualidad a 832 millones de
euros (que sólo superan U2, con 1.022 millones
de euros, y los dos supervivientes de los Beatles
y sus herederos, con 2.117 millones de euros).
LA FUERZA DEL DIRECTO, LA FUERZA
DEL MARKETING DIRECTO
Desde hace años, los ingresos principales de los
Stones proceden de las giras (más que de los
royalties de sus discos). Cada concierto de los
Rolling Stones es un verdadero espectáculo. En
su actual gira mundial, la escenografía se fundamenta en dos inmensos edificios-torres,
magistralmente iluminados, que hacen de fondo
de escenario. Para
interpretar algunos
temas, Jagger y
su banda
recurren
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a un segundo escenario móvil, una pasarela
hidráulica de más de 40 metros que se adentra
entre el público de pista.
Es el grupo más caro, a efectos de contratación,
cosa harto comprensible si se tiene en cuenta no
sólo la magnitud y complejidad del doble
escenario y del show lumínico y sonoro sino
también que su equipo se compone de
prácticamente trescientas personas.
Para cualquier grupo musical, un concierto tiene
una doble componente de marketing: por un
lado, es una excelente forma de dar a conocer
un producto nuevo (disco), para incitar a su
compra y disfrute, y, por otro, es una experiencia
de consumo. En el caso de los Rolling, empresa
y producto singular dónde los haya, desde hace
ya muchos años los conciertos son por encima
de cualquier otra cosa una experiencia –única e
irrepetible- de consumo. No dan a conocer un
producto nuevo, sino que, por así decir, se dan a
consumir a ellos mismos (del mismo modo que
no es lo mismo degustar un producto envasado
que tenga el sello de Ferrán Adrià que cenar en
su restaurante, El Bulli).
Los Rolling Stones son un caso absolutamente
atípico de longevidad, de tal modo que son
unánimemente considerados como los
principales mitos vivientes del rock. En su
mercado, el de las bandas de música, se han
convertido en un producto de inusual larga vida,
como le sucede a la Coca-Cola en el mercado
de las bebidas y a la Aspirina en el mercado
farmacéutico. Son tres marcas universales y
longevas, que siguen aportando valor. La CocaCola nos da la chispa de la vida, la Aspirina nos
quita quebraderos de cabeza, y los Rolling –y
esperemos que por muchos años- nos brindan
SATISFACCION.
Duren lo que duren, siempre sentiremos
simpatía por estos diablos, incluyendo, por
supuesto, al pirata Keith Richards, 63 años, el
abuelo que todo niño rebelde desearía tener...I
PD: los Rolling no parecen envejecer, y en
cambio yo sí, a pasos agigantados, número tras
número de Organiza y sino vean el bebé
convertido ya en adolescente…
IUN CONCIERTO
Fotógrafo:
Steven Klein
TIENE UNA DOBLE
COMPONENTE DE
MARKETING: POR UN
LADO, ES UNA
EXCELENTE FORMA
DE DAR A CONOCER
UN PRODUCTO
NUEVO (DISCO),
PARA INCITAR A SU
COMPRA Y
DISFRUTE, Y, POR
OTRO, ES UNA
EXPERIENCIA DE
Fotógrafo: Mark Seliger
CONSUMO.I
Organiza
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Organiza
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