Sin titulo

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LUNES27DE
Enviada
especial
aMelbourTle
MIGUELA.ZuBIARRAIN
TENIS
SAMPRASIMPIDIOQUEELESPAÑOLCORONARASUCESTA
AL VENCERLEPOR6-2,6-3,6-3
Pete Sarnpras
jugó anteMoyáuno de sus grandespa#idosde los u/timostiemposy no permitióal nuevonumerounoespañolsoñarcon quesu primeravictoriaen OrandSiamllegaríatambiénen su primera final
Foco antesde comenzarla final
del Abiertode AustraliaenlreCar
los Moyá y Pete Samprasel ca
pitán del equiponacionalde Copa
Davis, ManoloSantana!nos decía
que aunqueél deseabade todo
corazóneltriunfode Carlos,legus
taría transmitira laaficiónespañola
el convencimiento
de que por bien
que estuvierajugando el mallor
quín! iba a tener enfrenteal más
fuerte rivalque lepudierahaberto
cado. Por ello, aunqueel corazón
le deciaCarlos,la cabezale decía
que eramuydifícilla sorpresa.
Y, no debemosdecirdesgracia
damente, pues el éxito ha sido
grande, Santanateníarazón.Pete
Sampras demostró(suena a mo
nótono, pero una vez tras otra es
así) que es el númerouno y no
tiene intenciónde dejar de serlo.
Ayer estuvootravezperIedo y Car
los sólo pudoresistirel tiemposu
ficiente para ceder por 6-2, 6-3 y
6-3 en una hora y veintisietemi
nutos de juego.
La proeza
delmallorquín
Carlos
Moyá
enelAbierto
deAustralia
de1997nopudo
tenercontinuidad
enlafinal,peroesquecuando
PeteSampras
estáatopeganarle
es unamisión
-nosatrevemos
a decir-imposible.
AnteCarlos,
elnúmero
unomundial
salióconcienciado
delapeligrosidad
desurivalynoledioopción
alguna.
dría que lidiarprincipalmente,y si
en os primeroscompasesdel par
tido parecióque tendríaalgunapo
sibilidad (un gran resto en el se
gundo punto del partido), pronto
se vio que no iba a ser posible.
Una vez más,Samprasestuvoper
fecto: su aciertocon elprimerolle
gó al 82 %y sólocedióun “break”,
pero sin que el españolpudiese
utilizarlopara,ya enlaterceraman
ga, enmendarelrumbodel partido.
Es posibleque, pese a su pro
verbial frialdad,CarlosMoyáacu
sara su primeracomparecenciaen
una final de GrandSIam (lo con
trario hubierasido casi impensa
ble). Es posible también que por
eso aparecieraen algunasfases
del partidoun tantoagarrotado.sin
cambiar de táctica. pero, pese a
El saque,
elsaque...
todo, hayque reconocerlounavez
La clavehayquebuscarla,unavez más: era muydifícil.
más, enel saque.Carlossaliótam
Sin embargo,no hayque obviar
bién convencidode que iba a ser que mientrasSamprasvarió mu
contra eseenemigoconelque ten- cho su saquey con él dominóel
juego inclusoen las escasasoca
siones en que no le entrabael pri
mer servicio, Carlos se mantuvo
demasiadoa laexpectativa.Dehe
cho, visitóla red en una sola oca
sión y, aunqueese no es su mejor
terreno, quizásí debierahaberin
tentado algo distinto,perolocierto
es que es muydifícilestarperfecto
en una primera final de Grand
SIam. Encuanto a los golpes ga
nadores, Peteapenasle dejó op
ción a dominarel punto,
Avisomortal
Hubo un momento,en el mismo
inicio del partido,que noshizocon
cebir esperanzas:en la segunda
vez que Samprassirvió,Carlosrea
lizó un resto perfectoy muy largo
que Petedejópasar,pero botóen
la pista.A otrojugadorquizále hu
biera desconcertado.A Pete, en
cambio, le puso sobreavisode lo
que es capaz de hacer Carlos,y
comenzóa sacarcomoen susme-
jores díasy a jugárselacon todos
los golpesparaconseguirque los
puntos durasenlo menosposible.
El significadode este encuentro
hay que buscarlomás bien en el
futuro: Carlos Moyá vino a Mel
bourne comoun buenjugadorque
prometía muchopara cuando lle
gara su “explosión”y se va del
Open de Australia1997como nú
mero unoespañol,como “top ten’
y como jugador cualificadopara
aspirar a un GrandSIam.
Sampras, por su parte,lo hace
con su noveno grande”en el bol
sillo y la posibilidadde aspirar a
ganar. por primeravez desdeque
RoId Laverlo hicieraen 1969,un
Grand SIamcompleto aunqueen
Roland Carrospuedaencontrarse
a un Moyá(ya losBruguera,Albert
Costa. Corretja,CarlosCosta,Be
rasateguiy el restode la“armada”
española)queestavezjugarámás
en su terreno.
El tiempoestáde nuestraparte.