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CONDUCIENDO...
LAS LLAMADAS PUEDEN COSTAR VIDAS
GUARDAR MENSAJE
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www.nopodemosconducirporti.com
NO PODEMOS CONDUCIR POR TI
INTRODUCCIÓN
El desarrollo tecnológico y la necesidad de estar constantemente en comunicación, convierte al
teléfono móvil en el “cordón umbilical” que nos une y nos adentra en el entorno.
Las millonarias cifras de ventas, uso, posibilidades, o modelos… demuestran su utilidad y su
proyección de futuro. La percepción de seguridad y protección que aporta un móvil, es
especialmente significativa en momentos de urgencia o de necesidad. Por eso, llevarlo en el
vehículo permite en caso de avería, colisión, accidente, atasco o cualquier otro tipo de urgencia
transmitir información rápida y precisa, así como demandar la ayuda necesaria.
Sin embargo, LA UTILIZACIÓN DEL MÓVIL conduciendo genera un elevado riesgo de
distracción evaluado en los siguientes datos:
- Tras un minuto y medio de hablar por el móvil (incluso con manos libres) el conductor
no percibe el 40% de las señales, su velocidad media baja en el 12%, el ritmo cardiaco
se acelera bruscamente durante la llamada, y se tarda más en reaccionar.
- Algunos estudios comparan su peligrosidad con la conducción con exceso de alcohol.
- Un alto porcentaje de conductores (entre un 30% y un 50%) no percibe este riesgo.
Esto hace necesaria la sensibilización de los conductores en varias direcciones:
- Disuadir a los usuarios de llamar o coger el móvil mientras conduce.
- Desistir de realizar una llamada a quién se sabe que va conduciendo.
- Comprender que como peatones, abstraídos en la conversación, también caminamos
ajenos a los riesgos viales.
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TRATAMIENTO LEGAL
Ley 17/2005, de 19 de julio, por la que se reforma la Ley de Seguridad Vial, modificando la
calificación de algunas infracciones y las sanciones que les corresponden. Además, se regula
el sistema del permiso y la licencia de conducción por puntos.
Art. 65: Es infracción grave “conducir utilizando cascos o auriculares conectados a
aparatos receptores o reproductores de sonido, el uso durante la conducción de
dispositivos de telefonía móvil, así como cualquier otro medio o sistema de
comunicación que implique su uso manual ... “. Corresponde una sanción de 91 a 300
euros (art.67) y “podrá imponerse, además, la suspensión del permiso o licencia de
conducción por el tiempo mínimo de un mes y máximo de hasta tres meses”.
Anexo II: “Conducir utilizando manualmente el teléfono móvil, cascos, auriculares o
cualquier otro dispositivo incompatible con la obligatoria atención permanente a la
conducción” supone la pérdida de 3 puntos.
Real Decreto 1428/2003, de 21 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento General
de Circulación para la aplicación y desarrollo del Texto Articulado de la Ley sobre Tráfico,
Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial.
Art. 18.2: “…Se prohíbe la utilización durante la conducción de dispositivos de telefonía
móvil y cualquier otro medio o sistema de comunicación, excepto cuando el desarrollo
de la comunicación tenga lugar sin emplear las manos ni usar cascos, auriculares o
instrumentos similares”.
Art. 115.3: “…Para cargar combustible en el depósito de un vehículo…debe hallarse
apagados…los dispositivos emisores de radiación electromagnética como los teléfonos
móviles”.
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UN PELIGRO ASUMIDO
Los conductores saben que conducir y hablar por el móvil a la vez supone un riesgo importante
y reconocen abiertamente que lo utilizan. Según un estudio reciente de la DGT, más de un 30%
de los conductores confesaba esta práctica. Y lo que es peor: en 6 de cada 10 casos, el
aparato utilizado era manual, el más peligroso. Sólo un 14% era “manos libres”.
Las conclusiones de dicho estudio resultan preocupantes: 5 de cada 10 conductores reconoce
haber usado el móvil por lo menos una vez para hacer o recibir una llamada. Otras fuentes de
investigación coinciden en los datos y señalan, en números absolutos y como media, que más
de 3.300.000 conductores usa el móvil mientras conduce.
Sin embargo, los conductores son conscientes del riesgo que asumen con esta práctica, hasta
el punto de que el 10% dice haber sufrido algún percance. Marcar un número, según los
encuestados, es lo más peligroso y puntúan con una nota de 8,2 sobre 100 el riesgo que, en
general, el móvil añade a la conducción.
CONDUCTAS DE RIESGO
Los conductores que hablan y conducen suelen cometer determinadas infracciones, que cada
vez son más identificables por el resto de los conductores. Aquí van las más frecuentes,
aderezadas con una sonrisa.
Sólo con una mano
Poner el intermitente, cambiar las marchas, manejar el volante e
incluso sujetar un cigarrillo en algunos casos. Todo eso sin una
mano, que ya está ocupada por el móvil. Mucho para un sólo
conductor, ¿no le parece?
Estar sin estar en ti
La conversación puede absorber tanto al conductor que se olvide
de que está en la carretera y se “autotransporte” a los problemas
de casa o de la oficina sin moverse del coche. Los demás
conductores sí se darán cuenta.
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Adelantar como si nada
Hablando, la atención sobre el tráfico disminuye y, con ello, el peligro
aumenta. Qué decir si, además, hacemos una maniobra tan
arriesgada como adelantar y encima contestamos al móvil. ¿Nos
hemos vuelto locos?
A paso de tortuga
Otro de los síntomas que no suele fallar entre quienes hablan y
conducen. No frenan, no aceleran, no se apartan ... Metidos en su
mundo, son ajenos a las molestias que, en el mejor de los casos,
provocan a los demás.
Ataque por la espalda
“Comerse” la distancia de seguridad es un síntoma claro de los
conductores ligados al móvil.Con suerte el peligro no llegará a más,
salvo que el de delante frene bruscamente por un peatón, un
atasco, un semáforo que se pone en rojo...
Seguir la carretera
Aquello de que “la línea recta es el camino más corto entre dos
puntos” parece especialmente pensado para quienes hablan
mientras conducen. O al revés, depende del momento. Seguir la
carretera es una tarea muy difícil en estos casos.
“Tragarse” un peatón
O cualquier otra cosa que se ponga delante. Pero, ¿quién ha
pintado, de repente, esas rayas para que pasen peatones? Menos
mal que éste no iba hablando por el móvil, porque sumar
distracciones hubiese sido el colmo.
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Dormirse en los laureles
El tiempo corre que es un primor. Uno aprovecha un semáforo en
rojo para hacer una llamadita y cuando quiere darse cuenta los de
atrás también están intervienendo en la conversación. Y no
precisamente de buen tono.
Vaya maneras
Estar localizado tiene sus inconvenientes porque, a veces, uno no
recibe las noticias que esperaba para alegrar el día.Y en ese
momento, cómo no hay con quién pagar el pato...
Al volante y a lo loco
Antes de realizar cualquier maniobra, hay que señalizarla para
avisar a los demás. Y mirar por el retrovisor, cambiar la marcha,
poner el intermitente... y si uno tiene la cabeza y una mano
ocupadas en otra cosa...
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LOS METROS DEL PELIGRO
DISTANCIAS
distancia que se recorre mientras se usa el móvil conduciendo
(Baja el volumen de la radio, marca el nº o contesta y termina la comunicación)
239
Marcar Nº completo con móvil normal
HACER
LLAMADA
Marcar Nº memorizado con móvil normal
193
465
137
Marcar Nº abreviado con móvil normal
330
211
Marcar Nº completo con manos libres
507
184
Marcar Nº memorizado con manos libres
442
124
Marcar Nº abreviado con manos libres
297
20 46
Sistema integrado radio+rec. de voz
RECIBIR
LLAMADA
571
118
Móvil normal
285
124
Manos libres
10
Sistema integrado + rec. de voz
299
23
Señales no vistas
600
550
500
450
400
350
300
250
200
150
a 50 km/h
a 120 km/h
Metros
acumulados
100
50
0
distancia en metros
Prioridades no respetadas
Recorrido sin móvil
5%
Recorrido sin móvil
12%
Manos libres
0%
Reconocimiento de voz
8%
Manos libres
25%
Móvil normal
25%
Móvil normal
42%
Cómo varía el ritmo cardiaco
en distintas operaciones (pulsaciones/minuto)
Recorrido sin móvil
88
Bajar el volumen de la radio
93
Llamar con rec. de voz
94
Llamar con manos libres
100
Llamar con movil normal
102
Fuente: estudio OCU. Revistra TRÁFICO julio-agosto 2.000
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PARA LA REFLEXIÓN
1) El accidente.- Una llamada de móvil fue el desencadenante de un
trágico siniestro ocurrido hace algún tiempo, en el que 28 personas
perdieron la vida. Todo sucedió cuando, tras sonar el móvil en la
cabina de un camión, éste chocó violentamente contra un autobús
que circulaba en sentido contrario. Sólo 12 personas sobrevivieron.
2) Conmoción social.- El fuerte impacto emocional que produjo
este accidente y sus dramáticas consecuencias, motivó un
exahustivo análisis posterior para clarificar sus causas. Los
investigadores descubrieron que ni en la calzada había huellas de
frenada, ni los tacógrafos reflejaban exceso de velocidad en
ninguno de los vehículos, ni las condiciones meteorológicas de la
zona eran adversas. Además, había buena visibilidad, el pavimento
estaba seco y la señalización era correcta.
3) Conclusiones de los expertos.- Ante esos datos, los
investigadores atribuyeron el siniestro a la distracción del
conductor del camión por una llamada telefónica, que fue
contestada por su acompañante y en la que prácticamente no dió
tiempo a conversación alguna. La hipótesis más probable es que un
despiste de apenas 2 segundos, (en los que se recorren 44 metros
a 80km/h) llevara al conductor a continuar recto en lugar de
seguir la trayectoria de la carretera, con una curva amplia que
empezaba en ese momento.
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DISTRACCIÓN FATAL
Momento de mayor peligro
Cuando se recibe la llamada, la sorpresa que produce el sonido se traduce en una aceleración
del ritmo cardiaco del conductor y el cerebro, desde ese momento, tiene que dividir su atención
entre el desarrollo de la conversación y las circunstancias del tráfico.
Contenido de la conversación
Según la importancia de la llamada, la atención de desvía de la conducción hacia la conversación.
Mientras habla y conduce, el conductor pierde la capacidad de mantener una velocidad
constante, de guardar la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante y
su tiempo de reacción aumenta considerablemente: entre medio a dos segundos, según los
reflejos de cada uno. En este tiempo, que parece mínimo, se recorren entre 23 y 70 metros a
120 km/h lo que, evidentemente, es distancia más que suficiente para sufrir un accidente.
Nivel de distracción
Es equivalente a haber ingerido alcohol, hasta el punto de que el 40% de las señales le pasan
desapercibidas. Tampoco es menos peligroso hacer una llamada en la que, para marcar un
número, la vista se desvía de la carretera y la mano del volante.
Modelos según su riesgo
Móvil normal
➤ Riesgo: extremadamente peligroso
➤ Hay que soltar una mano del volante para manejarlo y la capacidad de utilizar
los mandos del coche queda limitada.
➤ Es relativamente fácil olvidarse de otras obligaciones (intermitente, disciplina de
carril, cláxon, etc).
➤ En caso de necesitar tomar datos, faltan manos.
➤ Algunas marcas ya recomiendan “mucha prudencia” en los manuales si se tiene
que utilizar mientras se conduce.
➤ Su uso está prohibido y sancionado con una multa de hasta 300 euros, la
posible retirada del carnet durante uno a tres meses y tres puntos menos del
Permiso por Puntos
Manos libres con auriculares
➤ Riesgo: muy peligroso
➤ Unos pequeños auriculares y un micrófono permiten escuchar y hablar sin
utilizar las manos.
➤ La conversación, impide escuchar el entorno.
➤ Salvo programación previa, hay que marcar nueve dígitos para llamar y pulsar
OK para contestar.
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➤ Paralelamente, habrá que bajar el volumen de la radio.
El uso de auriculares está prohibido y sancionado con una multa de hasta 300 euros,
la posible retirada del carnet durante uno a tres meses y tres puntos menos del Permiso
por Puntos.
Equipos manos libres
➤ Riesgo: bastante peligroso. Solo debe utilizarse para realizar llamadas cortas.
➤ Se conecta a la red o a través del encendedor del coche. Va en el salpicadero
y se escucha a través de un altavoz o por el de la radio, que se apaga cuando
recibe una llamada.
➤ En el más sencillo hay que marcar el número, salvo que pueda memorizar los
teléfonos más usuales.
➤ Los sistemas más avanzados pueden contar con reconocimiento de voz y
llamada automática.
Autorradio con GSM
➤ Riesgo: menos peligroso
➤ Es, de todos, el único que ofrece cierta seguridad, ya que el reconocimiento
de voz permite llamar sin necesidad de pulsar ninguna tecla. Dispone de un
mando a distancia incorporado al volante.
➤ Es bastante más caro.
➤ El peligro principal estriba en la distracción de la propia conversación y en la
autoconfianza que genera.
➤ Una buena alternativa para quienes, necesariamente, tienen que estar
permanentemente “en línea”.
Tecnología WAP y GPS
➤ Riesgo: menos peligroso
➤ Los teléfonos, con tecnología wap, son pequeños ordenadores de bolsillo que
permiten conectarse a Internet.
➤ Su uso en plena conducción para buscar información del tiempo, ver la
cotización de la Bolsa o hacer la compra en el hiper, puede complicar el manejo
del coche hasta límites insospechados.
➤ Es ideal si lo maneja el acompañante, porque puede consultar el correo
electrónico e incluso pedir información de tráfico.
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MENSAJES PARA GUARDAR
Conduciendo, olvídese del móvil.
Parece difícil pero es lo más seguro. Nada puede ser tan urgente que compense el riesgo de
sufrir un accidente, ya que incluso la sorpresa de oirlo sonar al entrar una llamada puede
suponer algo más que un susto. La solución ideal es desconectarlo durante la conducción.
Sólo con “manos libres”
Aunque son los únicos permitidos y menos peligrosos, no disminuyen todos los efectos de
riesgo: distracción, señales que no se ven, mayor tiempo de reacción, maniobras sin señalizar...
Conversación contrarreloj
Pasados los dos primeros minutos, el conductor aleja su atención de la carretera y la pone en
la conversación que está teniendo. Si, encima, lo que le llegan son malas noticias, a la falta de
atención se sumará un grado importante de agresividad.
También distrae andando
El peligro de distracción también afecta a los peatones, que pierden la noción del riesgo cuando
caminan hablando por teléfono: cruzan sin mirar, bajan a la calzada de repente, ....Si habla,
párese.
Mire a quién llama
Todos podemos ayudar a evitar accidentes. Antes de llamar a un móvil piense si el destinatario
puede ir conduciendo. Si cree que sí, no llame.
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CRÉDITOS
TELÉFONO MÓVIL Y CONDUCCIÓN
DIRECCIÓN GENERAL DE TRÁFICO
Idea original, textos y coordinación:
Teresa González y Juana Sánchez
Subdirección General de Educación, Divulgación y Formación Vial
Información:
Revista Tráfico
Subdirección General de Normativa y Recursos
Ilustración:
Visual Media
Antonio Aragüez
Diseño y Programación:
Visual Media
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