Órgano: Consejo de Seguridad

Órgano: Consejo de Seguridad
Tópico: Operaciones de mantenimiento de la paz con el Consejo de Seguridad
Introducción:
En nuestro planeta, nuestra gente, es incansablemente victima de conflictos armados, que
nacen por disputas políticas, territoriales o por tal o cual recurso. Frente a esta situación, hace
ya más de 60 años, Naciones Unidas impulso la idea de crear cuerpos de acción rápida
conformados por efectivos militares, civiles, etc. con el objetivo de cooperar en el desarrollo
pacífico y armónico de un Estado miembro de la organización, el cual se encuentre en una
situación de emergencia.
Actualmente el Consejo de Seguridad tiene la coordinación responsable de 15 misiones
dispersadas en 4 continentes e históricamente ha concretado el trabajo de más de 50.
Reseña histórica:
Históricamente, la región del Medio Oriente siempre ha sido un punto candente de conflictos.
No casualmente, esta fue la 1° misión de paz desplegada, la cual hasta el día de hoy sigue
efectiva y trabajando en el área.
Tomando como punto inicial esta primera misión, Naciones Unidas se vio como un actor más
en los conflictos, uno de los tantos objetivos buscados desde su origen: ser una entidad lo
suficientemente aceptada internacionalmente como para que se le tome como mediador y
tutor de la paz. Más de 3.100 miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz,
procedentes de unos 120 países, han muerto en acto de servicio bajo la bandera de las
Naciones Unidas.
Desde 1948, las Naciones Unidas han contribuido al cese de conflictos y al fomento de la
reconciliación mediante la realización de misiones de mantenimiento de la paz satisfactorias
en decenas de países, entre ellos Camboya, El Salvador, Guatemala, Mozambique, Namibia,
Tayikistán y Timor-Leste.
Lamentablemente, la demanda de misiones de paz se vio incrementada con el artificial
conflicto de la "Guerra fría", donde sin enfrentarse directamente EEUU y la Ex URSS, crearon
en el mundo, puntos de tensión tan grandes que la mayoría devenían en conflictos armados.
Es por ello que el periodo de mayor actividad es el que transcurriódurante los años 1989 1994, demandando un númerode efectivos jamás antes pensado: 11.000 a 75.000.
Los '90 presentaron un nuevo desafío para Naciones Unidas, el cual consistió en la falta de
efectividad a la que se vieron expuestas muchas de las misiones, ya que no cumplían con su
cometido, dejando que los focos de tensión no desapareciera o resurgieran. Es por ello que el
Consejo de Seguridad, durante estos años, se vio obligadolimitar el número de nuevas
misiones de paz y a iniciar un proceso de reflexión para evitar que estos fallos se repitieran.
Ya en el siglo XXI, las misiones se vieron obligadas a adaptarse al nuevo mundo. Siendo así que
su ultimo y gran desafío fue cuando la Organización prestó servicios como administradora de
los territorios de Kosovo, en la ex Yugoslavia - Misión de Administración Provisional de las
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Naciones Unidas en Kosovo (UNMIK), llegando a colaborar en el literal puesta en acción de un
Estado.
Hasta aquí hemos visto cual ha sido la evolución de esta herramienta internacional, con sus
aciertos y desaciertos, hasta el día de hoy son protagonistas en todo foco de tensión en el
globo.
Situación actual:
Es una realidad inevitable que el tiempo corra, y en medida que este lo hace, organismos como
Naciones Unidas deben ser los primeros en "ponerse al día". Es por ello que desde el cambio
de milenio, el Consejo de Seguridad se vio obligado, nuevamente, a una restructuración
integral de las misiones y sus mecanismos de mantenimiento de paz.
En el año 2000, la Asamblea General y el Consejo de Seguridad, se expidieron uniformemente
bajo un mismo entendimiento: el informe Brahimi. Esta iniciativa fue impulsada por el
entonces Secretario General, Kofi Annan, por el mes de marzo. Encomendando a un grupo de
especialistas en el tema, la observancia y estudio minucioso sobre las misiones y elevar un
informe del mismo.
Ya para agosto el informe fue llevado por Kofi Annan a la atención del Consejo y la Asamblea,
quienes, luego de añadir otras inquietudes, realizaron dicho informe.
Cabe mencionar que el informe se elabora como consecuencia de que el Secretario General de
la ONU publicara un estudio en el año 1999, señalando que la Organización había fracasado en
su intento por prevenir el genocidio en Ruanda en el año 1994, por lo tanto, se debía tomar en
cuenta las experiencias y errores del pasado con la finalidad de ser más eficaces en el futuro.
Es así como este grupo de profesionales, presidido por el Sr. Lakhdar Brahimi – de ahí el
nombre del informe- ex Ministro de Relaciones Exteriores de Argelia con basta experiencia en
aspectos militares, tomó las consideraciones del Secretario General y elaboró un documento
con 57 recomendaciones a considerar.
Cada una de las recomendaciones del informe tenía por objeto remediar un problema grave en
materia de dirección estratégica, adopción de decisiones, despliegue rápido, planificación;
apoyo operacional y empleo de la tecnología moderna de la información en las distintas
Operaciones de Paz.
El mismo pretendió una restructuración político-militar muy importante, ya que uno de los
más grandes problemas de Naciones Unidas en niveles generales, es su bajo presupuesto. Por
ello con este informe se centralizo más en las prevenciones de aquellos conflictos o situaciones
así como también la coordinación y cooperación con otras organizaciones internacionales
como OTAN, Cruz Roja, etc.
El informe señala que la principal falla de las Operaciones de Paz de la ONU había sido la
completa neutralidad frente a quienes violan acuerdos de armisticio en forma clara, para lo
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cual se propuso una reestructuración total de la forma en que se planifican y se ponen en
marcha las Operaciones de Paz, contemplando la creación de un departamento – en la sede de
Naciones Unidas- de carácter integrado, que planifica desde el inicio y hasta el final, cada una
de las misiones de mantenimiento de la paz. A su vez, recomienda que el Consejo de Seguridad
al momento de aprobar el despliegue de las misiones dicte mandatos suficientemente firmes
para que las fuerzas desplegadas pudieran hacer uso de la fuerza y así evitar ceder la iniciativa
a los agresores.
La clave del éxito en las futuras Operaciones de Paz reside en el apoyo político, financiero y
operacional por parte de los Estados Miembros de la ONU, como también, realizando
despliegues rápidos con una clara demostración de querer hacer uso de la fuerza,
complementado con una buena estrategia política de consolidación de la paz. Por ello,
también recomienda incluir los programas de desarme, desmovilización, a fin de facilitar la
disolución rápida de combatientes que pudieran reanudar el conflicto y poner en riesgo la
estabilidad lograda, lo cual se aplica en la actualidad.
Finalmente, propone la creación de las llamadas “Listas de personal de guardia”, que hace
relación a que el personal nombrado por los Estados Miembros debería participar en cursos de
adiestramiento anticipado, con la finalidad de que desarrollen planes operativos y tácticos de
la operación, como también, ejercer labores de coordinación y enlace antes del despliegue
definitivo de las unidades.
Concluyendo los puntos más sobresalientes del informe, se destacan:
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Se autorizó al Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz aumentar su
dotación.
Se fortalecieron las oficinas de asesoría militar y policial.
Creación de la oficina de Prácticas Recomendadas de Mantenimiento de la Paz, que
analiza la experiencia adquirida y asesora a las misiones en cuestiones de género,
planificación de los programas de desarme, desmovilización, reintegración e imperio
de la ley, entre otras cosas.
El Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz reorganiza el sistema
relativo a las fuerzas de reserva de las Naciones Unidas, enumera recursos concretos
de los Estados Miembros, que incluye el personal militar y civil especializado, el
material y el equipo disponible para las misiones de mantenimiento de la paz de las
Naciones Unidas.
A su vez dispone que para el establecimiento de una nueva operación, las fuerzas
deben poder facilitarse en un período de 30 a 90 días.
Otro de los medios que ayuda a las operaciones de paz, es la diplomacia preventiva. La misma
tiene como fin, uno de los principios más profundos de Naciones Unidas, "El dialogo antes que
el conflicto", siendo así, una intervención efectiva como una misión, la última opción.
La diplomacia preventiva, como táctica va indisolublemente ligada a otros mecanismos, tales
como el establecimiento, el mantenimiento y la consolidación de la paz, sin los cuales la
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diplomacia preventiva no tendría consistencia. Cada una de estas fases cumple su propia
función, si bien son complementarias entre sí:
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El "establecimiento de la paz" son aquellas medidas destinadas a lograr que las partes
enfrentadas lleguen a un acuerdo, que a ser posible se alcance por la vía pacífica.
Por "mantenimiento de la paz" se entiende el despliegue de las fuerzas de paz de
Naciones Unidas en el terreno (incluyendo personal militar, policial y civil), que cuenta
con el consentimiento de todas las partes implicadas. Ésta constituye una técnica
eficaz para aumentar la prevención de conflictos.
El término "consolidación de la paz" significa el conjunto de medidas destinadas a
definir y fortalecer aquellas estructuras que tiendan a reforzar la paz y eviten la
reanudación del conflicto.
Disparadores:
1. Las misiones actuales deben ser analizadas si su trabajo ya ha sido realizado o si
necesita reformas, para ello el Consejo de Seguridad necesita rever este tópico con
frecuencia. Es de lógico conocimiento que las situaciones internacionales muchas se
ven estancadas por la falta de diálogo y cooperación de las partes, es por ello que
desde Naciones Unidas se pretende un acercamiento amistoso de ambos bandos,
buscando los puntos en común para el bien de sus interés y el de su pueblo. En más
deseado de los casos, si estas diferencias y distancias son lo suficientemente fuertes,
Naciones Unidas debe hacer un inmediato y desinteresado alejamiento, dejando claro,
una supervisión preventora por una posible reescalada.
2. Análisis profundo y minucioso a la hora de abrir una nueva misión y si
verdaderamente es lo que la situación amerita. El tiempo y los recursos deben ser
empleados inteligentemente con el fin de evitar un sobreesfuerzo o agotamiento de un
personal cada día más grande. Así también, teniendo en cuenta que la remuneración
de cada integrante de los cuerpos de paz corre por su gobierno, es una forma de
colaborar con las economías nacionales a racionalizar el recurso humano.
3. Instar a la mayor cooperación con entidades apolíticas y a partidarias, como así
también con otros organismos internacionales. "La unión hace la fuerza" y por ello,
Naciones Unidas no debe actuar como un inmaculado protector de los derechos
mundiales, dejando a otros actores, con los mismos fines y objetivos, colaborar en
estos delicados escenarios mundiales, dejando la posibilidad de una tarea conjunta.
4. Planificar a futuro que las misiones de paz sean cada vez un órgano consultor más
que una herramienta de intervención. Siendo que la realidad internacional difiere
mucho de esto, no es utópico plantarse que se deriven esas medidas bélicas y militares,
en un instrumento de acercamiento y cooperativo trabajo preventivo, como así
también contemporáneo a dichos conflictos. No hay mejor ejemplo de ello como la
misión de paz en Kosovo, la cual empezó como cualquier otra y hoy en día a derivado
en una institución forjadora de un Estado independiente.
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Anexos:
- https://www.un.org/es/peacekeeping/operations/ - Misiones en general
- https://www.un.org/es/peacekeeping/ctte/cttee_ind.htm - Asamblea General y su tarea en
las Operaciones de paz.
- http://www.un.org/es/peacekeeping/missions/unmik/ - Misión de UNMIK (Kosovo)
- http://www.cinu.org.mx/temas/paz_seguridad/a55305.pdf - Informe Brahimi
- http://www.cinu.org.mx/temas/paz_seguridad/reforma_pk.htm#diplo_prevent - Reformas
Misiones actuales:
Datos de interés:
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