el disfraz - Una Ruta para el Alma

EL DISFRAZ
“DESPOJATE DEL DISFRAZ QUE HAS LLEVADO EN ESTA VIDA, QUE EL VERDADERO SER
HUMANO SE MUESTRE, NO LA SOMBRA, NO LA MASCARA MAS PERFECTA, NO LA
IMAGEN DE LO QUE LOS DEMAS QUIEREN…SOLO LA VERDAD…TÚ”.
¿Por qué los seres humanos nos ponemos una y otra vez disfraces en la vida?
Respondió el maestro: “Por miedo”
Cuando se muestra la verdadera cara de lo que eres, se asoma el principio de todo en
ti, la verdad del aquí y ahora en toda su totalidad, aunque por muy raro que parezca
la mayoría de los seres humanos buscamos siempre estar con alguna mascara o disfraz
en la vida, la simple pero fastidiosa idea social nos ha llevado a enmascarar la vida casi
en su totalidad, vivimos vidas falsas e hipócritas, en algún momento o en casi toda
nuestra vida, y todo esto comienza en la niñez cuando vamos aceptando poco a poco
la conciencia de la razón en nosotros, aceptamos la conciencia social desde el
momento de que nuestros padres nos llevan de la mano con sus propias costumbres y
creencias y poco a poco vamos aceptando la experiencia “compartida”, “pensando”
que descubrimos un mundo cuando al mundo no hay que descubrirlo sino vivirlo y
disfrutarlo…algunos pensaran que al irlo descubriendo se va realizando eso, pero lo
hacemos con alguna mascara o disfraz y así la experiencia no es verdadera porque va
por la necesidad de satisfacer el creciente ego. La vida es cuestión individual, somos
individuos.
Nuestra mente nos lleva por inmensos laberintos de insatisfacción al vivir, situaciones
que son solo una y otra vez la cara del ego que se muestra constantemente y que
difícilmente nos detenemos a ubicar, por el contrario comenzamos a alimentar a esa
voraz bestia que nosotros mismos creamos, me atrevo a decir ahora que el principal
problema del ser humano no es tipo social o material, sino la creciente “gula” de ego
que todos experimentamos, el ego no te permite vivir verdaderamente porque
siempre vas a “necesitar” algo en la vida…el ego te necesita a ti…y esa es la mascara
mas grande que nos ponemos con mil y un rostros distintos, en un día común y
corriente nos ponemos mascara tras mascara, la de la soberbia, del orgullo, de ira, de
soledad, de amargura, de tristeza, de avaricia, de prepotencia, de vanidad, etc., y el
motivo mas grande de ponernos tantas mascaras es la ignorancia de realmente
aceptar la esencia de lo que somos.
Cuando somos pequeños, ubicamos que una sonrisa de quien sea significa algo
maravilloso, no importando el rol de ese ser humano, no importando si es familiar o
no, si es amigo de tus padres o enemigo de ellos, no importando su religión o creencia,
no importando su estado financiero, no importando su apariencia, no importando
nada…solo es una sonrisa hacia un ser humano de otro ser humano…pero con el
tiempo aprendemos a vender nuestras sonrisas, aprendemos a “ver” al ser humano
que nos de alguna, aprendemos el valor de una sonrisa según sea el caso y con ello
vamos ocultando la esencia, le vamos poniendo una capa tras otra capa, y la mayoría
del tiempo si darnos cuenta, si bien es “estrictamente necesario” que el ser humano
tenga esta vivencia, en algún momento de la vida el mismo ser humano, podrá
observar que eso no lo lleva a la plenitud de vida. De esta manera el ser humano
comienza la búsqueda hacia afuera para satisfacerse, comienza el peregrinar de
muchas experiencias, comienza a buscar respuestas de las tantas “carencias” que le
muestra el pensamiento, aunque definitivamente las respuestas no se encuentran
fuera del ser humano, no se encuentran en los padres, en la familia, en los amigos, en
el trabajo, en la riqueza o la pareja y definitivamente la respuesta no es la religión, ya
que ella te conduce a creer en algo o en alguien, de forma dogmatica, la respuesta no
es lo material, la respuesta es observarte plenamente tu mismo, es observarte desde
lo físico hasta lo mas profundo de tu pensar, para que sepas como funcionas en este
mundo, y no me refiero al aspecto “técnico”, de saber como medico el funcionamiento
de tus órganos, sino el funcionamiento de ti con todo lo que te rodea, es decir tu rol en
el universo, entendiendo que antes de ti había un vacio y después de ti lo seguirá
habiendo porque nadie lo va llenar, ese vacio que había ahora lo ocupas tu y solo esta
diseñado para que en este tiempo y en este espacio tu lo llenes, de esta forma el
verdadero trabajo del ser humano es en si mismo. De ahí que se va generando nuestra
conciencia, conforme vamos re encontrándonos en la vida, ya que no descubrimos
nada, solo lo re encontramos.
De esta manera creamos una conciencia social (moral) y una personal (yo) donde
Tendemos a poner nombres y apellidos a todo (etiquetas), y así transcurrimos en la
vida, creando mascaras hasta descubrir y pensamos que por mandato divino o por don
la conciencia real o amorosa a la que consideramos “EL ESPIRITU”. Y ahora mismo te
preguntaras si eres un ser espiritual al saberte participe de ti - contigo, y la respuesta
es simple…déjate ser y cada ves que te dejes ser, ubicaras el porque es mejor andar
desnudo tal cual llegaste a este plano…Dejarte ser es solo guiarte por tu esencia, no lo
que otros te mostraron, es de golpe ignorar la conciencia social y matar tu “yo”, y así
comenzar a vivir en este plano contigo mismo, ya que ni siquiera los grandes
maestros quieren que sigas su camino, ni Jesús, ni Buda, ni Mahoma, etc., ya que no
dejaron ninguno, solo te apoyan para que tu mismo observes tu vida, a tu forma y en
tu espacio, las religiones viven de la ignorancia, de la necesidad de creer en algo mas ,
de hacerte creer en algo mas, viven porque antes te plantaron el miedo, que poco a
poco va creciendo para que siempre necesites de ella, viven porque te anteponen
siempre alguien o algo que nunca jamás vas a poder entender y te venden la idea de
que en algún tiempo lo entenderás, de esta forma el ego colectivo se muda a tu
pequeño ego y lo hace mas poderoso, y con ello difícilmente lo soltaras y te soltara.
Debemos ubicar algo simple, no somos ni tantito espirituales cuando seguimos
temiendo un castigo “divino”, no somos ni tantito espirituales cuando las decisiones de
tu vida las toman por ti, no somos ni tantito espirituales cuando creemos que lo
somos, porque lo que nos hace creer que somos es el ego, el verdadero camino
espiritual no es mas que una mascara que nos han mostrado en esta vida y nos la
ponemos en algún tiempo para creer que estamos en el camino adecuado, cuando las
cárceles y los manicomios tienen mas seres verdaderamente espirituales.
Cada día debemos de agradecernos a nosotros mismos la decisión de estar y con ello
conciliarnos con la vida, para poder reconciliarnos con la mente y no con el
pensamiento, hay que ubicar que nuestro cuerpo es la manifestación de esa mente y
simplemente hay que amarlo, no hay que hacer mas y de esta manera la mente va
depositar en el pensamiento la sabiduría del ser, para que haga que nuestra vida sea
una experiencia única, si por el contrario seguimos reconciliándonos con el
pensamiento, dejamos de lado nuestra mente y lo único que hacemos es apapachar el
ego, así de esta forma el ser no necesita de nada, solo requiere de tu reconciliación
con la mente y ¡bum! Se da el proceso, te muestras verdaderamente en tu vida que
compartes con la misma vida…algunos pensaran que el proceso es muy complicado
para llegar a ello, pero déjame decirte que eso es lo que te hace pensar el ego, te hace
creer en todo menos en ti, cuando el proceso de la mente real es inmediato y no
necesita tiempo, la mente esta para que tu vida sea la manifestación total de ti, para
que el proceso de tu tiempo se disfrute, solo que al aceptar al pensamiento como
primer plano de tu vida este te lleva por la falsa ruta y uno mismo creerá que es la real.
Así de esta forma el camino espiritual es solo la fantasía mas grande que hemos creado
para creer en algo, el camino espiritual no existe…es solo una mascara mas del ego que
uno acepta al creer que se avanza, en el laberinto del pensamiento, en el camino de la
vida, cuando el verdadero motivo es vivir solamente, reconciliándote a cada instante
con tu mente para que ella te muestre la verdad siempre, dándole a la misma mente la
gratitud por mostrarme el universo que vivo, ubicando que el motivo real es aquí y
ahora, no ayer y jamás mañana, el aquí que transforma para que disfrutes el vivir en
tiempo presente, donde no existe ni huella, ni se te muestra alguna, solo el aquí y
ahora, donde el pensamiento es solo una herramienta de la vida y no la misma vida.
Sin duda alguna se que estas palabras en tu mente te hacen pensar y ese pensar te
puede confundir o reconocer lo que ya sabias, ese proceso es solo personal, quizá tu
ego te haga ofensivas estas líneas o sin importancia, pero verdaderamente no importa
si las lees, las comprendes o no, lo importante es que las plasme y es una
manifestación del espíritu y de mi vida, para solo apoyarte a reconocerte donde lo
que opines de ellas sale sobrando, realmente no te hará “crecer” ni “decrecer”, ya
que si reconocemos que el espíritu o luz o energía o como lo llames, es la
manifestación del todo y por ello mismo ya es sabio y no necesita nada, como te
vuelvo a repetir el que “necesita” es el ego que vive en cada uno.
Así que borra de tu mente que vas en un camino espiritual y comenzaras a quitarte
mascaras, acéptate como realmente eres y con ello reconcíliate contigo mismo para
que el amor que es tu verdadera naturaleza se muestre pleno, borra de tu mente que
existe un fin, porque esa es una ilusión que creíste, el ser, el espíritu, la energía o el
amor, son lo mismo y no tienen un fin, observa que cada instante de tu vida es la
oportunidad de estar contigo mismo y disfrutar la vida, hazlo simplemente porque ya
estas y no porque en algún tiempo sabes que llegaste, o porque te vas a ir, vive de la
manera en que tu consideres sea lo mas convincente para ti solamente, no hagas lo
que te conviene has lo que plenamente te convence, porque es lo que te muestra el
amor, esa es su naturaleza, acéptala en ti y entonces “veras” como el vivir se convierte
en una manifestación real, verdadera y única.
Al reconocerte como en verdad eres entonces ya no disculparas el enojo en ti, o la
tristeza, o al mismo miedo, solamente los vivirás y cada ves habrá menos “necesidad”
que se muestren en ti, pero reconoce que si en algún momento llegan es porque así
tiene que ser.
Si la vida te muestra el lado flaco, no lo juzgues y acéptalo, no como una manifestación
divina sino como una situación de vida que te muestra un aspecto distinto de ella y con
ello tu estancia actual será más plena, no realices un juicio donde al final el enjuiciado
serás tú, porque así es el ego en tu pensamiento, no busca destruir a otro, busca que
poco a poco te destruyas tu, para que tengas una imagen propia irreal siempre, para
que te presentes con la caracterización ante la vida que mas te convenga, para que
creas que lo verdadero esta fuera de ti, en lo material, en lo incomprensible, etc.
Dijo el maestro:”lo único que tienes que hacer es vivir, vivir y vivir”
Ama tu cuerpo como lo que es y no como algo mas (no es un objeto entre objetos), ahí
comienza la conciliación con la vida, ahí comienza la conciliación con la mente, ahí
comienza el verdadero vínculo amoroso contigo mismo, la creación de la conciencia
real, la que nace y muere en el pleno instante, no tiene pasado y no busca un futuro, la
que acepta la vida tal y cual es, la que no la juzga, la que no necesita moldes, la que
ubica que lo de afuera es la manifestación de lo de adentro, que si creíste que existía
Dios, ahora te muestra que eres tu, y no para que lo creas sino para que lo sientas y lo
muestres en tu vida, para que tengas la humildad de ir con ello sin mascaras, ni
disfraces.
De esta manera al realizar ese acto de amor a tu propia vida dejaras de hacer
sacrificios, ya no sacrificaras tu vida por nada, para nada y por nadie, de esta manera
no sacrificas tu rol en la sociedad, ni en tu familia, ni en ti mismo, ahora comienza el
verdadero sentido del amor en ti…amarte plenamente siempre.
Así que hoy es el momento ideal para que te desnudes, contigo mismo, ya no permitas
que el ego te cobije siempre, arranca los trapos viejos en tu vida, las mascaras y los
disfraces quémalos en la hoguera de tu propia luz, se un hombre o una mujer sin
pasado, no es algo peligroso, es algo maravilloso.
Medita para que el silencio y la quietud te abracen, no para que te cobijen, ya que no
lo necesitas.
Con amor y respeto Lama Yoyotzin.
( 2010 )