Javier Mompel. XIV JORNADAS SMHSTAR La salud enla conduccion

Javier Mompel. XIV JORNADAS SMHSTAR La salud enla conduccion

LA SALUD EN LA CONDUCCIÓN. VIGILANCIA DE LA SALUD DE LOS CONDUCTORES.
Javier Mompel Gracia. Médico especialista en Medicina del Trabajo. Sociedad de Prevención MAZ
En primer lugar agradecer la invitación a los organizadores de estas XIV Jornadas de SMHST por la
deferencia. Tengo que decir que mi exposición es fruto de la colaboración desinteresada de muchísimas
personas y entidades, destacando a Sociedad de Prevención MAZ que me permite trabajar en equipo y
con absoluta libertad, a Mutua MAZsuma, al Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral (ISSLA), a
la Jefatura Provincial de Tráfico de Zaragoza, a la Dirección General de Tráfico (DGT), al Servicio
Aragonés de la Salud (SALUD), al Inspector de Trabajo de Zaragoza, D. Angel Gracia, a la Federación de
Empresas de Transporte de Mercancías de Zaragoza (FETRAZ), al Grupo Prainsa, a la Sociedad de
Medicina, Higiene y Seguridad del Trabajo de Aragón y la Rioja (SMHSTAR), a la Asociación Acupama, a
la Asociación Española de Centros Medico Psicotécnicos, al Instituto de Investigación en Ingeniería de
Aragón de la Universidad de Zaragoza, y a las Centrales Sindicales UGT y CC.OO …
En estos dos últimos años, la mayoría de los profesionales que representan a las entidades mencionadas,
nos hemos reunido para intercambiar criterios y opiniones sobre la vigilancia de la salud específica de los
trabajadores que conducen, y oír fórmulas de sensibilización que nos hagan comprender la importancia
que tiene el comportamiento vial y el cuidado de nuestra salud para conducir, sabedores de que los
accidentes de tráfico son de gran trascendencia en la siniestralidad laboral de las empresas, en primer
lugar por el daño que puede causar al que se lesiona, en segundo lugar por la probabilidad de lesionar a
terceras personas y en tercer lugar por las pérdidas económicas que generan estos accidentes al proceso
productivo de la empresa.
Por todas estas razones, el personal sanitario de Sociedad de Prevención MAZ, al saber de estos
trabajadores que conducen, que tienen un elevado riesgo debido a la utilización de un medio de
transporte, ya fuera en su desplazamiento al trabajo o durante el mismo, desarrollamos un protocolo
específico de vigilancia de la salud para los trabajadores que conducen cualquier tipo de vehículos
en su horario laboral, sin olvidar los trabajadores autónomos, agricultores y ganaderos, las fuerzas
policiales, el ejército, funcionarios públicos y los trabajadores propiamente del sector del transporte.
Aunque el Ministerio de Sanidad, en su día, no estableció ningún protocolo oficial de vigilancia de la salud
para los conductores, desde Sociedad de Prevención MAZ se entendió necesario plantearlo, diseñarlo y
por supuesto aplicarlo, como ocurrió con el protocolo de trabajadores en alturas que obvió en su momento
el Ministerio de Sanidad.
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En estos últimos años hay que decir que la siniestralidad de accidentes de tráfico la hemos disminuido en
Europa, en España, y en Aragón, comunidad autónoma que en el año 2004 sufrió en sus carreteras y
ciudades la pérdida de 272 personas. En el año 2010, disminuyó a 108 personas y en el año 2011 han
sido menos de 100. Pero a pesar de estas cifras, tenemos la asignatura pendiente de los accidentes
“in itinere” y los accidentes “en misión”, y en este campo habrá que seguir trabajando algo más, de
aquí la importancia que puede tener los planes de movilidad y seguridad vial en la empresa o en el
polígono industrial.
Desde Sociedad de Prevención MAZ junto con los grupos de trabajo mencionados, creemos que con esta
política estamos en la línea de disminuir los siniestros de tráfico; evitamos “que se produzcan esas
imágenes impactantes de los siniestrados” y a su vez ahorramos a la Caja Única, o sea el dinero de la
Tesorería de la Seguridad Social. Opinamos que con la difusión de medidas preventivas, sensibilización y
sobre todo una vigilancia de la salud específica a conductores, ayudamos tanto al trabajador conductor
como al empleador, en la prevención de accidentes y por supuesto a evitar conflictos.
Debemos recordar que las consecuencias visibles, siempre van parejas a las consecuencias indirectas
como puede ser la posible retirada del permiso de conducir de este trabajador, aunque sea provisional, los
costes de los vehículos siniestrados, los costes a las compañías de seguros, los costes laborales de la
empresa, los costes de la justicia y el drama humano del afectado.
Como asesores de las empresas en la gestión de la prevención y la vigilancia de la salud, consideramos
que debemos dar un paso al frente y a muy corto plazo enseñar a elaborar planes de movilidad y
seguridad vial, a realizar una formación específica a los trabajadores conductores, a aplicar protocolos de
vigilancia de la salud específica, a asesorar en la incorporación de nuevas tecnologías y equipos técnicos
en las flotas de sus vehículos, y aquí deseo mencionar el el elemento diseñado por la empresa Car-Angel,
una caja negra para los vehículos, que además de ayudar a mejorar la conducción de los trabajadores
conductores, puede ser una interesante y novedosa
herramienta de investigación para el personal
sanitario y técnicos de prevención.
Pero como médico, preventivo y educador lo que me cuesta comprender es el comportamiento de algunos
trabajadores conductores contratados por cuenta ajena y algunos trabajadores autónomos, que año tras
año vienen a realizarse la vigilancia de la salud a las dependencias de Sociedad de Prevención MAZ, y
año tras año les detectamos alteraciones visuales y auditivas tratables, hipertensión arterial que requiere
tratamiento farmacológico, episodios de apneas que necesitan estudio y posible tratamiento, alteraciones
analíticas que a corto o medio plazo podrían originarles un evento cardiovascular por hipercolesterolemia,
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hiperglucemias…, que les diagnosticamos una obesidad mórbida a valorar por el endocrino, y otros
factores de riesgo cardiovascular como el sedentarismo, tabaquismo, hábitos dietéticos inadecuados….
Y la pregunta es ¿Qué hacer con estos trabajadores que conducen y no cuidan su salud?
Aunque el personal sanitario de SPMAZ presiona a estos trabajadores, y les manifiesta “que esa actitud
no es correcta, ni ética” y mas en el caso de los trabajadores conductores que circulan por la vía pública,
a veces transportando a otras personas, y sabedores de que pueden poner en riesgo a esos pasajeros así
como a terceras personas que caminan por la calle, … la sensación es que un pequeño porcentaje de
trabajadores y esperamos que cada año sea menor, hacen caso omiso de estas recomendaciones… y
nuestra impresión es que en la empresa se está malgastando ese dinero empleado en la vigilancia de la
salud y no son conscientes de que además ponen en peligro a terceras personas y generan
responsabilidades al empleador.
Por otro lado está el trabajador cuidadoso de su salud y tras varios años de normalidad, sin alteraciones,
un buen día al acudir al reconocimiento médico le detectamos la alteración X.
Aquí tenemos que
reconocer que nadie de los presentes está exento de que hoy o mañana, nos pueda sobrevenir esa
enfermedad inesperada o un accidente con secuelas que nos imposibiliten conducir, y eso seguro que
generará conflicto, ya que la medicina, a pesar de sus avances, no siempre cura, y a partir de ese
momento tenemos que acatar la legislación vigente. El ejemplo más entendible sería un infarto de
miocardio, a veces leve, pero todos debemos saber que según la legislación vigente deberíamos
permanecer 3 meses sin conducir. Y pregunto, ¿ Esto se cumple siempre ?
Pero en vez de poner ejemplos, conozcamos el protocolo de vigilancia de la salud específica para
conductores que se está aplicando por el personal sanitario de Sociedad de Prevención MAZ, con un
criterio consensuado tanto en la obtención de la información médica necesaria para evaluar al trabajador
conductor, como en relación a la emisión del dictamen de aptitud. Se adjunta al final de este texto.
La gran mayoría de los trabajadores conductores que acuden las dependencias de Sociedad de
Prevención MAZ vienen informados sabedores de que solicitamos visualizar la vigencia de su permiso de
conducir. Excepcionalmente nos encontramos con personas “despistadas” que habían olvidado renovar el
carné de conducir y por lo tanto no han pasado el preceptivo reconocimiento médico obligatorio. Si están
con el permiso en vigor, para nosotros es una garantía legal, aunque al tener el reconocimiento médico
una periodicidad para muchos conductores de 10 años, caso del carné B, opinamos que en tan largo
período de tiempo pueden sobrevenir patologías y tratamientos, secuelas de lesiones, hábitos de riesgo
en el consumo de bebidas alcohólicas, etc. …que podrían limitar la conducción. Siempre preguntamos el
número de accidentes de circulación que ha sufrido a lo largo de su vida, tanto a nivel laboral como
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particular, asimismo preguntamos la pérdida de puntos del permiso de conducir y los motivos que conllevó
esa pérdida, y aunque parezca mentira, observamos que hay una gran sinceridad en las respuestas.
Al aplicar el
protocolo de conductores, con una sencilla anamnesis dirigida de varios minutos nos
comentan sus procesos sintomáticos y tratamientos médicos, y en general si generamos confianza y
empatía
podemos profundizar un poco más, ya que aplicamos desde muchos años una estricta
confidencialidad médica, y en general los trabajadores saben que lo que comentan en nuestros despachos
médicos, se queda en nuestra relación médico-paciente.
Si que es verdad que esta confidencialidad, a veces la rompe el propio trabajador, al comunicar a sus
compañeros de trabajo sus dolencias. Si volvemos al ejemplo del infarto de miocardio, sabemos que es
difícil ocultar este vento cardiovascular a sus compañeros y empleador. Respecto a los 3 meses de baja
laboral que exige la legislación, nuestra función es asesorar al trabajador y a la empresa, ya que son
numerosas las ocasiones donde el propio trabajador nos solicita adelantar su reincorporación al trabajo
antes de lo previsto. Hay que decir que sin lesionar los intereses del trabajador ni del empleador podemos
intentar buscar una solución, y si consideramos que este trabajador conductor aparentemente está
recuperado, vamos a solicitar de su Cardiólogo un informe favorable para adelantar la conducción, pero al
mismo tiempo vamos a exigirle que acuda a la Jefatura Provincial de Tráfico para comunicarlo y
asesorarse.
A pesar del volumen de trabajadores que atendemos anualmente, tenemos que decir que en Sociedad de
Prevención MAZ han sido muy pocos los trabajadores conductores necesitados de una actuación especial
y un dictamen médico excepcional como es el Apto en observación, Apto Condicionado o No apto.
Entre las patologías que destacamos, que se resuelven rápido y en poco tiempo, está la corrección de la
agudeza visual. Tras ser informado el trabajador de esa alteración se paraliza su expediente médico de
vigilancia de la salud y generalmente a los pocos días acuden de nuevo con las lentes correctoras
precisas.
También resultan de fácil solución patologías como la hipertensión arterial que responde a los fármacos
habituales. En estos casos, el trabajador es derivado a su médico de familia, y en general, en una semana
el trabajador vuelve a nuestra consulta con el tratamiento prescrito y con la tensión arterial controlada.
También tienen fácil solución las alteraciones analíticas que podemos considerarlas factores de riesgo
cardiovascular como la diabetes con hiperglucemia muy elevada o con hipoglucemias, las hiperlipemias,
hiperuricemias, las anemias sintomáticas … tras derivar al trabajador a su Médico de Familia, se resuelve
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en los días siguientes, si el trabajador conductor nos vuelve con el tratamiento prescrito o con las medidas
dietético preventivas recomendadas.
Hasta la fecha, nuestra experiencia en Sociedad de Prevención MAZ es muy positiva, ya que con estos
pasos que da el paciente trabajador, consideramos que se está intentando evitar a medio y largo plazo
que
sobrevenga un evento cardiovascular, que de ocurrir conduciendo, las consecuencias son
imprevisibles.
Otras alteraciones que atendemos son los efectos adversos de algunos medicamentos, máxime cuando el
trabajador conductor nos lo comenta en la anamnesis. El necesario ajuste de ese fármaco o su sustituto,
es igualmente necesario realizarlo con su Médico de Familia o el especialista que se lo ha prescrito.
Mas complejo nos resulta la sintomatología de mareos, inestabilidad, vértigos …en trabajadores
conductores. Tras la anamnesis y exploración detallada con electrocardiograma, según los casos se le
deriva a los especialista (Neurólogo, Cardiólogo, ORL …) y hay que esperar informe favorable para dar un
apto sin restricciones. Decir que generalmente cuando un trabajador nos manifiesta esta sintomatología
recomendamos la baja laboral hasta que el episodio remite. Igualmente ocurre con las patologías
osteomusculares, a veces muy sintomáticas y que necesitan de pruebas complementarias que permiten
detectar las posibles patologías de espalda.
Pero sin duda uno de los procesos más preocupante para el médico que realiza vigilancia de la salud, son
las alteraciones del sueño y especialmente las apneas en roncadores que manifiestan sintomatología de
somnolencia diurna, especialmente con la conducción de vehículos. Decir que tras aplicar el protocolo de
vigilancia de la salud, que incluye el test de Epworth y exploración de la faringe, fácilmente podemos
identificar a estos pacientes con la sospecha de SAOS.
Desde el momento que estamos ante esta situación, aplicaríamos el procedimiento de derivación urgente,
primero para el diagnóstico de certeza, y segundo para aplicar el tratamiento oportuno y si procede con
CPAP.
Los neumólogos de los hospitales del Salud, desde el primer momento han estado abiertos a estos casos
puntuales y generalmente son tratados de manera preferente.
Hay muchos más procesos, patologías, y desde luego no olvidamos las adicciones al alcohol, drogas.. de
algunos conductores, y en estos casos en cada
situación particular vamos a intentar resolverlo,
generalmente con el especialista del paciente y un equipo multidisciplinar.
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Por último, comentar la necesidad de la formación continuada que tenemos que realizar a los trabajadores
conductores tanto en conducción segura como en conducción eficiente, y así lo está exigiendo
recientemente la inspección de trabajo en sus requerimientos, solicitando a las empresas actuaciones en
el campo de la movilidad y la seguridad vial, como:
A) evaluación de riesgos en los factores que pueden incidir en la seguridad vial
(valoración del error humano, influencia de factores psicosociales, capacidad de
conducción, motivación, emociones, fatiga, sueño, alcohol, drogas, fármacos,
agresividad, estrés, ansiedad, velocidad …)
B) formación de los trabajadores en seguridad vial, incluyendo los contenidos
reseñados en la evaluación de riesgos y en la planificación preventiva y formación
específica de capacitación a los trabajadores conductores con permiso de
conducir tipo B,
que manejan equipos de trabajo tipo, palas cargadoras,
excavadoras en obra, tractores.
C) formación de los trabajadores en materia de primeros auxilios y plan de
emergencia.
D) registro y vigencias de los permisos de conducir de todos los trabajadores
conductores de la empresa.
E) análisis en la evaluación de riesgos de las rutas de transporte habituales de la
empresa, desde el punto de vista de la seguridad vial, haciendo constar los
factores de riesgo que pudieran identificarse (zonas con retenciones
u obras
habituales, cruces peligrosos, puntos negros …)
F) instrucción de trabajo y formación sobre un sistema seguro y claro para la
colocación en el vehículo de las lonas que puedan cubrir la carga de los camiones.
G) instrucción de trabajo e
información sobre los espejos retrovisores y señales
acústicas y luminosas, siempre en buen estado.
H) instrucción de trabajo y formación sobre la correcta señalización de las zonas de
tránsito de los vehículos y elaboración de un procedimiento de circulación por ella
y zonas de trabajo.
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I)
instrucción de trabajo y formación sobre carga y descarga
J) intercambio de información preventiva con las empresas clientes, teniendo en
cuenta el plan de seguridad
Asimismo la inspección de trabajo está exigiendo un procedimiento de actuación ante casos de
sospecha de adicciones ( alcohol, drogas, fármacos) en los trabajadores conductores, y nuestra
respuesta desde Sociedad de Prevención MAZ ha sido la elaboración de un flujograma sobre los pasos a
seguir ante estas diferentes situaciones. El programa de actuación específico se llama Alerta Acupama, y
está co-financiado por el Gobierno de Aragón.
Tenemos que agradecer al personal de la Asociación Acupama y al personal del Centro Municipal de
Atención y Prevención de las Adicciones ( CMAPA ) por habernos ayudado a formar un equipo
multidisciplinar en Sociedad de Prevención MAZ, que nos ha permitido elaborar numerosa documentación
y nos está sirviendo de base para implantar este proyecto de actuación, estando ya en marcha diferentes
escritos de derivación de asistencia de trabajadores afectados a su médico de atención primaria y al
CMAPA, con el escrito de consentimiento informado correspondiente.
Cuando conducimos, posiblemente no somos conscientes de la complejidad de esta actividad y la gran
atención que se necesita y personalmente opino que equivale a tareas tan complejas como realizar cirugía
en un quirófano, mezclar productos químicos peligrosos, o tocar un instrumento musical ante el público…
ya que ese error de segundos de duración,
nos lleva a consecuencias fatales tanto en el caso del
quirófano como en el escenario al escuchar esa nota fuera de lugar. Si conduciendo a cien kilómetro por
hora se produce el error, todos sabemos las consecuencias que podemos sufrir.
Todos los ciudadanos cuando decidimos convertirnos en conductores de moto o vehículo, previamente a
realizar el conocido examen de conducir, recibimos una formación vial teórico-práctico que nos sirve de
base para realizar ese famoso examen e indirectamente nos sirve para sensibilizarnos con los riesgos de
la conducción. Complementario a este trámite realizamos asimismo el conocido reconocimiento médico
psicofísico para obtener el permiso de conducir, dándole a veces una importancia menor.
Después de esta formación vial teórico-práctica, y una vez obtenido el permiso de conducir, salvo
excepciones, la mayoría de los ciudadanos españoles dejamos de recibir una formación continuada sobre
esta materia y tienen que pasar varios años hasta que de nuevo nos vuelven a realizar el reconocimiento
médico psicofísico para renovar el permiso de conducir. Y si un conductor no pierde puntos, posiblemente
a lo largo de su vida no vuelva a recibir ningún tipo de formación vial teórico-práctica.
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Solo las campañas de televisión, cuñas de radio y trípticos con consejos en la conducción que caen en
nuestras manos suelen ser los elementos que complementan la información a los ciudadanos
conductores.
Como sabemos, la Educación Vial abarca al conjunto de interrelaciones que se producen entre las
personas, las vías y los vehículos, y entre éstos y el medio físico, natural y social. Por tanto, los contenidos
y, sobre todo, las actitudes y procedimientos de Educación Vial se deben caracterizar, sobre todo, porque
han de ser significativos para cada destinatario, relevantes, útiles y, a la vez, tener carácter universal. Han
de estar presentes en la vida cotidiana de las personas y forman parte de su bagaje cultural y personal.
La tradicional creencia de que la Educación Vial, como otros muchos aprendizajes, se adquiere una parte
en la etapa escolar y otra al obtener el permiso de conducir, los que lo obtienen, está superada, y en este
principio de educación permanente, somos de la opinión de que las personas deben estar en un continuo
aprendizaje y que además de la escuela, el instituto, la universidad, academias… se debe aprender en
otros muchos lugares, espacios y contextos.
Así, el concepto de Educación Vial, desde Sociedad de Prevención MAZ lo consideramos como un
proceso educativo que se debe prolongar a lo largo de toda la vida. Además, se debe tener en cuenta, que
en cada edad y etapa del desarrollo humano afrontamos el fenómeno del tráfico de una forma diferente y
usamos la vía pública de forma distinta en función de multitud de variables.
Nuevas propuestas y la caja negra para vehículos pueden ser elementos complementarios para conocer y
mejorar la conducción de los trabajadores.
Personalmente como médico y educador, opino que en
seguridad todo lo que podamos aportar nos va a ayudar a prevenir la lacra de los accidentes. Nadie pone
en cuestión que los aviones, los trenes de alta velocidad … lleven su caja negra … y la pregunta es, ¿que
diferencia hay con un vehículo?
El personal de Sociedad de Prevención MAZ junto a todos los profesionales que se citan, opinamos que al
realizar vigilancia de la salud específica a este colectivo de trabajadores, estamos en la línea de ayudar
al trabajador conductor con patologías y a su empleador, ya que nos debemos a ellos, y de paso
ayudamos a esa caja única de la Seguridad Social y la Mutua, ya que cada siniestro es muy cuantioso
para todos.
Mencionar por último a los trabajadores conductores que puedan estar en contacto con la manipulación o
inhalación de sustancias peligrosas, y por tanto necesitaría una vigilancia específica al contacto con estas
sustancias.
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Para finalizar, decir que como médico preventivo me alegro de la realización de estas Jornadas en las que
presentamos ideas, debatimos y nos sensibilizarnos en este tema todos los compañeros de la Sociedad
de Medicina, Higiene y Seguridad del Trabajo de Aragón y la Rioja (SMHSTAR). Y sinceramente desear
que estas Jornadas anuales continúen en la estructura, contenido y formato de todos estos años.
GRACIAS
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PROTOCOLO DE VIGILANCIA DE LA SALUD A CONDUCTORES UTILIZADO EN SPMAZ
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