Efectos de la Música en el Deporte y el Ejercicio

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Efectos de la Música en el Deporte y el Ejercicio
Efectos de la Música en el Deporte y el Ejercicio Para muchos, música y ejercicios son instrumentos inseparables durante un trote, en el gimnasio, mientras se monta una bicicleta o se sube un cerro. Por otro lado sabemos que escuchar ciertas canciones nos provoca sensaciones de bienestar y atraemos con ellas distintas emociones. Es preciso entonces conocer que nos dice la ciencia respecto a los efectos de la música en el rendimiento. Para esto realicé un resumen de las investigaciones realizadas por Costas Karageorghis y sus colaboradores. La investigación científica ha revelado cinco principales formas en que la música puede influir en la preparación y el rendimiento competitivo. Así la música influiría en: a) la disociación b) la regulación de la activación c) la sincronización d) la adquisición de habilidades motoras, y e) el estado de flujo Disociación: Es preciso señalar que la Psicología del Deporte, no utiliza este término del mismo modo que la psicología clínica o la psiquiatría, donde el concepto se asocia a patología. En nuestro ámbito disciplinar Disociación tiene que ver con una estrategia de afrontamiento mental que apunta desviar los pensamientos de las sensaciones de agotamiento, es distraer la atención hacia aspectos no relacionados con la tarea, ej: planificar la semana mientras se corre, aprender la letra de una canción, estar pendiente del público etc. Diversos autores señalan que esta estrategia es especialmente efectiva cuando la intensidad del esfuerzo es baja o de nivel medio. Por tanto la música serviría para promover un estado de ánimo positivo, desviar la atención lejos de los pensamientos que surgen de las sensaciones fisiológicas de fatiga. Más concretamente, los aspectos positivos del estado de ánimo, como el vigor y la felicidad se agudizan, mientras que los aspectos negativos como la tensión y el dolor se atenúan. (Bishop, Karageorghis, y Loizou, 2007). Aunque la música no reduce la percepción del esfuerzo durante el trabajo de alta intensidad, mejora la experiencia de la misma, produce que entrenamientos duros parezcan más divertidos rompiendo con la monotonía. Regulación de la Activación: Cuando hablamos de activación, nos referimos a la energía psicofisiológica, que nos dispone a actuar en determinado momento y tarea. Mora (2000) habla de ella como una función energizante que es responsable del aprovechamiento de los recursos del cuerpo ante actividades vigorosas e intensas. En este sentido la música altera la activación fisiológica y emocional, en consecuencia se puede utilizar en entrenamiento como un inspirador o estimulante, del mismo modo como un sedante para calmar sensaciones de ansiedad. La música puede permitir aproximarnos a la personal Zona de Rendimiento Óptimo. Para esto es preciso identificar, qué emociones específicamente despierta en cada deportista. Bishop (2007).señala que los procesos fisiológicos tienden a reaccionar favorablemente a los componentes rítmicos de la música, mientras que las letras generan asociaciones que impactan en las emociones. Supuestamente, tempos rápidos se vinculan con niveles de excitación más altos que tempos lentos. Sincronización: Diversas investigaciones nos señalan (Bacon, Myers, y Karageorghis, 2008) que la sincronización de la música con el ejercicio repetitivo se asocia a mayor calidad de trabajo en entrenamientos, en deportes como el remo, el ciclismo, el esquí y el atletismo de fondo. Sincronizar movimientos con la música permite realizar tareas con mayor efectividad dando lugar a una mayor resistencia. En un estudio realizado con ciclistas de fondo en un rodillo, se descubrió que quienes realizaban el ejercicio acompañados de música necesitaron un 7% menos de oxígeno para completar la prueba en comparación con aquellos deportistas que no utilizaron música (Simpson y Karageorghis ,2006). La explicación es que la música proporciona indicaciones temporales que tienen el potencial de hacer que el uso de la energía de los atletas sea más eficiente. Adquisición de Habilidades Motoras: Según Chen, 1985 y Spilthoorn, 1986; hay tres posibles explicaciones para el aumento de la adquisición de habilidades a través de la música. ∙ En primer lugar, la música replica formas de ritmo corporal y muchos aspectos de la locomoción humana. Por lo tanto, la música puede transportar el cuerpo a través de patrones de movimiento eficaces, el cuerpo proporciona una analogía visual del sonido. ∙ En segundo lugar, las letras de la música bien elegidas pueden reforzar aspectos esenciales de una técnica deportiva. Por ejemplo, en el atletismo, letras que impulsen a correr (RUN), saltar (JUMP), resistir (RESIST). En deportes de combate, letras que se orienten a golpear, patear (hitting, kicking). ∙ En tercer lugar, la música hace que el ambiente de aprendizaje sea más divertido, por tanto se experimenta un aumento de la motivación intrínseca. Estado de Flujo (Flow): Para Csikszentmihalyi, (2002) experimentar fluencia, es sentirse completamente en sintonía con lo que se está haciendo, saber que uno es fuerte y capaz de controlar su destino al menos por un momento y conseguir sentido de placer independientemente del resultado. El “Flow” es caer absorto en la ejecución en el proceso de realización de una tarea. Pates, Karageorghis, Fryer, y Maynard (2003) refieren que los efectos de la música sobre las emociones y la motivación pueden ayudar a entrar en un estado de flujo. Dichos autores han investigado el uso de música en deportes de precisión e incluso en el ámbito de la selectividad universitaria. En ambos casos concluyeron que las intervenciones con música e imágenes podrían mejorar el rendimiento mediante la activación de las emociones y cogniciones asociadas a estados de concentración. ¿Y qué debemos considerar para elegir la música? Tipo de Ejercicio Preguntémonos entonces: ¿Qué tipo de actividad se llevará a cabo?, ¿Cuál es el resultado deseado de la sesión?, ¿Qué objetivos específicos se persiguen en la sesión? Actividades de naturaleza repetitiva se prestan especialmente bien al acompañamiento musical, (Karageorghis, Priest, Terry, Chatzisarantis, y Lane, 2006) por ejemplo:  ejercicios de calentamiento  entrenamiento con pesas  entrenamiento en circuito En cada caso, el atleta debe realizar selecciones (de una lista de pistas preferentes) que tienen un ritmo y un tempo que coinciden con el tipo de actividad a desarrollar. La intensidad de la Actividad Karageorghis y Priest (2009) aconsejan si un deportista cuyo objetivo durante el calentamiento es elevar el ritmo cardíaco a 120 latidos por minuto debería seleccionar una canción que tenga un tempo en el rango de 80 a 130 latidos por minuto. Pistas sucesivas deberían crear un aumento gradual del ritmo de la música para que coincida con el aumento gradual previsto en la frecuencia cardíaca. De esta forma se conseguiría un estado de activación preciso para determinadas tareas. Estos mismos autores han descubierto la tendencia entre los atletas para coordinar intervalos de esfuerzos con partes específicas de una pista musical que encuentran especialmente energizante. Priest y Karageorghis, (2008) denominan a esta práctica: Segmentación. El efecto de la segmentación es particularmente fuerte si el deportista conoce muy bien la canción pues puede anticipar el flujo de la música. También es beneficioso para que coincida el tempo de la música con la intensidad del entrenamiento. Procedimiento de selección Para empezar, se hará necesario reunir una amplia selección de temas familiares que cumplan los seis criterios siguientes: ∙ Ritmo, energización o calma, según los requerimientos ∙ Letras positivas asociadas con el movimiento ∙ Patrón rítmico bien adaptado a los patrones de movimiento del ejercicio ∙ Asociaciones con el deporte, el ejercicio, el triunfo o la superación de la adversidad ∙ Un estilo musical o lenguaje adaptado al gusto y cultura del atleta Conclusiones Sin duda saber ¿Cuándo?, ¿Cómo?, ¿Dónde? y ¿Por qué?, elegir música, puede ser aquel detalle que mejore la calidad de tu entrenamiento y el rendimiento en competición. Tal como indican Karageorghis y Terry, (1997) la música tiene el potencial de provocar un efecto pequeño pero significativo en el rendimiento y el bienestar de los atletas. Del mismo modo su aplicación puede provocar efectos a largo plazo reflejados en la adherencia al ejercicio. No es menor saber elegir una lista de canciones adecuadas, para el entrenamiento o para el trabajo pre‐competitivo. Recuerdo haber trabajado aspectos psicológicos de la rutina de calentamiento con un atleta velocista, quien me señalaba que durante el trayecto a la pista, mientras conducía su auto, escuchaba música de películas, soundtracks cuyo contenido evocaba imágenes épicas, esto en principio parecía acertado, sin embargo, nos dimos cuenta que la música provocaba pensamientos centrados en la obtención del resultado, por tanto a la hora de calentar se sentía agobiado y preocupado en exceso por rendir bien (ansiedad cognitiva). Luego de este descubrimiento, hicimos algunas modificaciones: Ahora durante el trayecto se escucharía música energizante, que evocara alegría pero ningún contenido en particular, el atleta eligió música electrónica. Más tarde, ya, en el calentamiento mientras realizaba los últimos progresivos (ascensiones) ponía la música de su soundtrack favorito, con el propósito de salir decididamente a competir. Las medidas de autoconfianza subieron, mientras la ansiedad somática y cognitiva bajaron significativamente. De este modo resulta de vital importancia el autoconocimiento del deportista, de sus sensaciones, emociones y pensamientos. Esta exploración la inicia el deportista, el primer experto en su propia experiencia y también puede ser guiado por Entrenadores y Psicólogos del Deporte. Te invito entonces a contarme ¿cuáles son tus canciones favoritas?, ¿en qué momentos las utilizas? y ¿qué emociones despierta en ti? (Escríbelo en los comentarios) Víctor Cepeda Salas Unidad de Bienestar y Rendimiento Referencia Bacon, C., Myers, T., y Karageorghis, CI (2008). Efecto de sincronía movimiento‐música y el tempo en el consumo de oxígeno ejercicio. Manuscrito presentado para su publicación. Bishop, DT, Karageorghis, CI, y Loizou, G. (2007). Una teoría basada en el uso de la música para manipular el estado emocional de los jóvenes jugadores de tenis. Journal of Sport & Exercise Psicología, 29, 584‐607. Chen, P. (1985). La música como estímulo en la enseñanza de las habilidades motoras. Nueva Zelanda Diario de Salud, Educación Física y Recreación, 18, 19‐20. Karageorghis, C. I. (1999). Música en el deporte y el ejercicio: Teoría y Práctica. El Diario Sport, 2 (2). Consultado el 28 de marzo de 2007, de http://www.thesportjournal.org/1999Journal/Vol2‐
No2/Music.asp Karageorghis, C. I., y Deeth, I. P. (2002). Efectos de la música asíncrona motivacional y oudeterous sobre la percepción de flujo [Abstract]. Revista de Ciencias del Deporte, 20, 66‐67. Karageorghis, IC, Jones, L., & Low, DC (2006). Relación entre la frecuencia cardíaca y la música preferencia tempo. Investigación Trimestral del Ejercicio y el Deporte, 26, 240‐250. Karageorghis, CI, Jones, L., y Stuart, DP (2008). Los efectos psicológicos de la música International Journal of Sports Medicine, 29, 613‐619. Karageorghis, C. I., & Lee, J. (2001). Efectos de la música asíncrono e imágenes en una tarea de resistencia isométrica. En la Sociedad Internacional de Psicología del Deporte, Actas del Congreso Mundial de Psicología del Deporte: Vol. 4 (págs. 37‐39). Skiathos, Grecia. Karageorghis, CI, Priest, DL, Terry, PC, Chatzisarantis, NLD, y Lane, AM (2006). Rediseño y validación inicial de un instrumento para evaluar las cualidades motivacionales de la música en el ejercicio: El Brunel Calificación Music Inventario‐2. Journal of Sports Sciences, 24, 899‐909. Karageorghis, C. I., y Terry, P. C. (1997). Los efectos psicofísicos de la música en el deporte y el ejercicio: una revisión. Journal of Sport Comportamiento, 20, 54‐68. Karageorghis, CI, Terry, PC, y Lane, AM (1999). Desarrollo y validación inicial de un instrumento para evaluar las cualidades motivacionales de la música en el ejercicio y el deporte: El Rating Música Brunel inventario. Journal of Sports Sciences, 17, 713‐724. Pates, J., Karageorghis, CI, Fryer, R., y Maynard, I. (2003). Efectos de la música asíncrona en los estados de flujo y el rendimiento de disparo entre los jugadores de netball. Psicología del Deporte y el Ejercicio, 4, 413‐427. Priest D. L., y Karageorghis, C. I. (2008). Una investigación cualitativa sobre las características y los efectos de la música que acompaña el ejercicio. Manuscrito presentado para su publicación. Mora, J; García, J, (2000) Psicología Aplicada a la Actividad Físico‐Deportiva. Ediciones Pirámide. España. 

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