Mensaje del JEMGE en ocasión de conmemorarse el Día del Buzo

Mensaje del JEMGE en ocasión de conmemorarse el Día del Buzo

Mensaje del JEMGE en ocasión de conmemorarse el Día del Buzo de Ejército
En el año del bicentenario de la patria, rendimos homenaje a todos los oficiales, suboficiales y
soldados que poseen la aptitud especial de buzo.
Esta joven aptitud es un componente esencial e indivisible del ejército, cuyo primer curso de buceo
se realizó en 1952 en el batallón de zapadores pontoneros de grandes ríos y en 1958, con la creación
de la compañía de zapadores anfibios, se dio paso al desarrollo de esta capacitación
Años más tarde, se elaboró el cuerpo doctrinario, se aprobó la aptitud especial de buzo de ejército y
se extendió la formación a personal de las otras armas, especialidades y servicios.
Con orgullo, podemos decir que también contamos con mujeres que desempeñan sus actividades a
la par del hombre y con el mismo espíritu de tenacidad y profesionalismo.
Hoy, los buzos de ejército participan en los cursos de formación de otras aptitudes especiales, y
contribuyen, de esa manera, al desarrollo de las capacidades y al logro de la autosuficiencia táctica
que permite a la conducción de la Fuerza disponer de un elemento especialmente apto para operar
en ambientes geográficos particulares.
Su preparación impone el empleo de equipos específicos y de elevado grado de tecnicismo para
ejecutar operaciones tácticas complementarias enmarcadas parcialmente o en su totalidad en el
medio acuático. A esta responsabilidad se le suma también, la ejecución de operaciones de
salvamento, rastreo, localización, reparación y recuperación de objetos, materiales, equipos y
personal.
Los logros alcanzados manifiestan el espíritu de sacrifico de sus integrantes, que han demostrado
poseer un concepto claro del deber, y una voluntad y entusiasmo profesional, que los hace capaces
de alcanzar los objetivos propuestos y que demuestra en los hechos de estar en condiciones de
cumplir acabadamente con su misión, sirviendo a la patria en el marco de lo que establecen la
constitución, las leyes de la nación y las instituciones republicanas.
Ustedes saben de riesgos y desafíos, porque se adiestran para operar en situaciones de aislamiento y
en condiciones extremas de supervivencia, por ello los exhorto a que continúen haciendo honor a su
lema: “¡lo más difícil, siempre….!
Nuestro eterno y emocionado homenaje a todos los caídos en cumplimiento del deber.
Hago llegar mi saludo y reconocimiento a todos los integrantes de la especialidad, en actividad y en
situación de retiro, a sus familias que, con alegría y dedicación, acompañan nuestro diario transitar
en la vida militar. a las esposas de los camaradas que ya no están, y a los jefes, oficiales,
suboficiales y soldados que, en los cuarteles, en el exterior y en la antártida, dedican sus vidas en
beneficio y al servicio de todos, para que nuestro ejército sea el eficiente brazo armado que la
nación necesita.
Por último, mi más ferviente deseo que su patrono, san pedro apóstol, les conceda la gracia de servir
a la patria con honor, con dignidad y con alegría.