ban en su modo de hablar llano y sin rodeos. Así, en cierta ocasión

ban en su modo de hablar llano y sin rodeos. Así, en cierta ocasión

ban en su modo de hablar llano y sin rodeos. Así, en cierta
ocasión que la M. Coínta les abrió la puerta y se retiró, uno de
los obreros dijo a la otra religiosa: « Madre, esa monja que se
ha ido no es una mujer, parece una virgen »73.
Secretaria de la M. Priora
Desde su llegada a Talavera de la Reina la M. Coínta fue
secretaria de la M. Priora. Ella le confiaba las cartas y especialmente las que iban dirigidas a las postulantes que solicitaban su entrada en la vida religiosa en aquella Casa.
« M. Coínta, desde su llegada a Talavera, había sido procuradora de la Casa, secretaria, consultora … » (P. O., T. 12, ad 9.
Summ., p. 90).
La M. Herminia Montero Sol conservó durante mucho
tiempo las cartas que ella le escribió por encargo de la superiora.
ASÍ NOS TRABAJA DIOS
« Las cartas que yo recibía venían firmadas por la M. Superiora
pero escritas de puño y letra por la M. Coínta, cosa que he
podido comprobar confrontándolas con otras escrituras de M.
Coínta y que tuve entre manos una vez entrada en religión.
Aquellas cartas estaban llenas de espíritu y de amor a la vida
religiosa, y de la bondad tan característica en M. Coínta. Las
quemé en tiempo de la guerra » (P.O., T. 4, ad 2. Summ.,
p. 20).
Lo cierto es que sus cartas hacían bien y que en un
empleo y otro, en todos los que la obediencia le señaló, la M.
Coínta daba pruebas de virtud y se preparaba día a día para
los que en lo sucesivo le habían de confiar.
Se le concede el título de « Madre ».
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Cfr. E. y E., p. 83.