Sin título - Discípulas de Jesús

CURSO DE EVANGELIZACIÓN
1. INTRODUCCION
Para la proclamación del kerygma a través del curso de
evangelización, se requiere que se dé con un cierto grado de
excelencia, es decir que realmente se esté proclamando a Jesús de
una manera viva y personal, por lo que no se puede trasmitir como si
fuera una mera teoría, ni como una enseñanza, sino como una
verdadera vivencia.
Por tal motivo se debe trabajar con esfuerzo para realizarlo. Nosotros
somos servidores del Señor y tenemos que responder con eficiencia
(1Co 3,10).
El Señor nos escogió a nosotros para trabajar en la edificación de su
Reino, para que seamos colaboradores en el plan de salvación que Él
tiene para otros. El Espíritu Santo nos dará la capacidad y la sabiduría
necesaria para que así lo hagamos.
No debemos ser descuidados y negligentes, debemos hacer nuestro
mejor esfuerzo, de ello puede depender la salvación de alguien. No
hay que encubrirnos diciendo: “el Señor se encargará de que todo
salga bien” y así será, pero debemos asegurarnos de hacer todo lo
que esté de nuestra parte con verdadera responsabilidad y hasta con
sacrificio, porque una de las formas como el Señor se encargará de
hacerlo, es a través de nuestro trabajo, de nuestro esfuerzo por llevar
a las personas hacia Él.
Para realizar este trabajo que se nos encomendó, es necesario cuidar
mucho estas tres etapas:
LA PREPARACIÓN PREVIA - antes.
EL DESARROLLO DEL CURSO - durante.
LA CONCLUSIÓN Y SEGUIMIENTO – después.
2. ANTES DEL CURSO
Éstos son los lineamientos generales para la preparación del Curso de
Evangelización.
FORMACIÓN DEL EQUIPO
“Y cuanto me has oído en presencia de muchos testigos, confíalo a
hombres fieles, que sean capaces, a su vez de instruir a otros” (2 Tim
2,2).
Es necesaria y recomendable la formación de un equipo responsable,
que se haga cargo de la organización del Curso de Evangelización.
Para la formación del equipo puede hacerse de estas dos formas:
Que el equipo pastoral (coordinador) que ya está formado, se haga
cargo directamente de la evangelización.
Delegar la evangelización a hermanos firmes en el Señor, siendo
supervisados por el equipo pastoral ya existente.
SELECCIÓN DE LOS MIEMBROS DEL EQUIPO.
Los hermanos del equipo deben tener características esenciales como:
Conversión.
Ser una persona sana espiritual y emocionalmente.
Que tenga madurez en la vida cristiana.
Fidelidad y capacidad para este trabajo.
Conocer la sana doctrina de la Iglesia Católica.
Comprometidos en su trabajo en la evangelización.
Que esté subordinado a la dirección de alguien, en la comunidad,
grupo, etc.
DEFINIR LAS ACTIVIDADES DE LOS MIEMBROS
1. ENCARGADO DEL EQUIPO.
Características (1 Tim 3, 1-7 y Tito 1 7-9)
Irreprochable.
No arrogante.
No violento.
Sin vicios
No codicioso.
Hospitalario.
Amante del bien.
Sensato.
Hombre de oración.
Maestro hábil y competente.
Que gobierne bien su vida.
No recién convertido.
Estimado por la gente.
Que se mantiene firme en la Palabra.
Su entrenamiento:
Debe haber participado en Cursos de Iniciación, como miembro regular
del equipo.
Su función:
Velar por el Curso de Iniciación y asegurarse de que todo funcione
bien. A través de delegar eficientemente.
Ver que cada participante es bien atendido.
Formar a los miembros del equipo para que tengan unidad de espíritu
y tengan capacidad de trabajar juntos por el Señor.
Reportar el trabajo al responsable suyo inmediato.
2. FUNCIÓN DE LOS DEMAS MIEMBROS DEL EQUIPO.
Ser como levadura entre los participantes, aportando vida, creando el
ambiente.
Orar constantemente.
Seguir con prontitud y disposición las indicaciones del servidor
responsable del equipo.
Estar siempre alegres y con mucho ánimo.
Hacerse amigo de los participantes, realizar una evangelización a
través de relacionarse personalmente con cada uno de los
participantes.
Escuchar atentamente las charlas para apoyar a solucionar las dudas
de los participantes o para afirmar las ideas expuestas en los temas en
los grupos de compartir.
Orar por las personas en la renovación de su bautismo, para que
reciban una manifestación fuerte del Espíritu Santo.
Interceder por el Curso y por los participantes.
De los miembros de este equipo, uno será nombrado auxiliar del
encargado para apoyar más de cerca su trabajo, otro será secretario
para que lleve nota e informe de todo lo planeado.
LABOR DEL EQUIPO
INTERCESIÓN.
Sin la intercesión no puede haber evangelización.
La evangelización es obra de todo el cuerpo de Cristo, no sólo de
hombres dotados para evangelizar, sino de todos los que oran para
que Dios dé el crecimiento a la semilla que se está plantando.
Al interceder estamos diciendo: “Señor, yo sé que tú quieres que tu
Palabra llegue a todo el mundo, y que todos los hombres se salven,
por eso estoy orando, para que ésto se cumpla en la tierra... ¡hazlo
Señor!
La intercesión es importante por estos aspectos:
abre las puertas Col 4,3-4
da claridad.
da poder Hch 4,29-31
da valentía Fil 4,13
En general la intercesión es la manera de hacer la voluntad de
Dios. (Is 55,8)
Si la evangelización es la puerta para la conversión, podemos decir
que la intercesión es la llave que abre esta puerta. NO PUEDE HABER
EVANGELIZACIÓN
EFECTIVA
SIN
UNA
VERDADERA
INTERCESIÓN. Necesitamos la gracia de Dios para lograr buenos
resultados, la conversión es un don, un regalo de Dios, por ello
debemos implorar con humildad esta gracia para nuestros hermanos.
¿Por qué interceder?
Para pedir visión.
Para orar por las personas que se van a evangelizar.
Por el equipo que organiza.
Por los que van a predicar.
Por los ministerios.
Por las necesidades materiales.
Por los resultados del curso.
Por la perseverancia de los nuevos.
Cómo llevar a cabo la intercesión:
A través de reuniones fijas.
Con cadenas de oración.
Ayunos.
Por medio de los sacramentos.
Veladas de oración.
Rosarios.
¿Quiénes deben interceder?:
Todos los miembros del equipo.
Un grupo de hermanos delegado para ésto.
Toda la comunidad.
¿Cuándo hay que interceder?:
Antes, durante y después del curso de iniciación. Es decir, en todo
momento.
¿Dónde hay que interceder?:
El lugar dependerá de la forma que se designe para la intercesión, de
preferencia debe ser delante del Santísimo lo más posible.
PLANEACIÓN.
El equipo debe planear lo siguiente y establecer ministerios como:
* PUBLICIDAD Y PROMOCIÓN.
Cómo se va a promover el curso.
a través de carteles
mantas
boletines
cartas de invitación, medios de comunicación (radio, T.V. prensa, etc.)
Quiénes lo van a realizar.
Es decir, delegar a un grupo de hermanos dentro del equipo para
realizar ésto.
Cuándo se llevará a cabo.
Dónde se va a promover.
En la parroquia.
Escuelas.
Camiones
Comercios.
* ASESORES
Tener asesores, es importante para apoyar al Curso de Iniciación. Es
labor del equipo dar formación previa a los asesores antes del curso.
Las personas escogidas para este ministerio deben tener ciertas
características como:
a) Conversión a Cristo.
b) Hombre o mujer de oración.
c) Apego a la Palabra de Dios.
d) Apego a los Sacramentos.
e) Apertura a los dones del Espíritu Santo.
f) Experiencia en el grupo.
g) Apertura a las relaciones.
h) Con apertura al diálogo, sin complejos.
i) Sencillos y humildes.
*
*
*
*
*
*
DELEGAR EL SERVICIO PRÁCTICO.
ESTABLECER EDECANES.
DESIGNAR LA BIENVENIDA O RECEPCIÓN.
DELEGAR LA MÚSICA.
ESTABLECER QUIÉN SERÁ EL AMBIENTADOR.
DESIGNAR LOS TEMAS A LOS PREDICADORES.
La tarea de organizar el curso, implica además organizar a la gente
para realizar el plan elaborado, delegar y dirigir para alcanzar el logro
de los objetivos, con una constante supervisión. El trabajo en equipo
es el más enriquecedor y efectivo y el que menos desgasta.
Si no se planea, no sabremos lo que queremos, ni hacia dónde
llegaremos, por lo mismo requeriremos más improvisación que nos
limitará los resultados. Si no sabemos lo que deseamos alcanzar, no
podremos delegar a otros.
Si no nos organizamos y delegamos, las personas no sabrán lo que se
espera de ellas y habrá confusión, se duplicarán funciones o se
carecerá de recursos, habrá más pesimismo y deserción. Cada
persona ante la falta de organización hará las cosas a su manera, ésto
implica más desorden, pérdida de tiempo y de recursos. Es importante
además conocer las capacidades de cada hermano para colocarle en
el lugar donde pueda dar más.
Si no se dirige con seguridad y firmeza, no se harán las cosas tan
efectivamente, ésto implica una supervisión que otorgue confianza y
seguridad a los hermanos, así como oportunidad de sacar sus
iniciativas y creatividad.
No se puede olvidar la evaluación, la cual será constante para evitar
fracasos y favorecer alternativas, ésta nos ayudará a saber si estamos
logrando el objetivo.
3. DURANTE EL DESARROLLO DEL CURSO.
Hay una serie de elementos que deben cuidarse con esmero, por
ejemplo:
- EL AMBIENTE. El cual debe ser organizado previamente. Debe
contemplarse la limpieza del salón, sillas suficientes, instalación del
sonido preparado. El material preparado; hojas de cantos, láminas
alusivas al tema que se va a presentar, horario del curso, etc.
- MINISTERIOS.
Edecanes. Su misión es estar desde la puerta recibiendo a todos los
invitados, llevarlos hasta el lugar de inscripción y hasta su respectivo
asiento, así como estar pendiente de sus necesidades. Las personas
que se involucren en este ministerio deben ser acogedoras, amables,
no tímidas y que conozcan todo el desarrollo del curso.
Inscripción o recepción. Deben tener un lugar disponible y que sea
visible. Tener a la mano hojas de inscripción donde se recabarán los
siguientes datos; nombre, dirección, teléfono, ocupación, estado civil y
edad de la persona invitada al curso. Tener los gafettes a la mano para
escribir sus nombres. Debe dar los datos al encargado, hacer los
grupos de reflexión y guardar las listas para su seguimiento. Se
recogerá el gafette al final de cada día. Es importante que sean
personas amables y acogedoras, que mantengan una actitud animada
y amigable con todos.
Música. Es necesario que se hayan ensayado los cantos antes y tener
un momento de ensayo con la gente asistente, motivándolos a cantar
después de la bienvenida y mientras llegan los demás. Este tiempo
debe ser contemplado dentro del horario y prepararse con hojas de
cantos para favorecer el aprendizaje. Hay que tratar que sean cantos
sencillos y fáciles de aprender para que puedan participar en la
oración. Puede apoyarse de una pantalla para proyectar los cantos en
acetatos.
Intercesión. Este ministerio se reunirá desde antes del curso. Durante
el curso puede estar intercediendo por los asistentes y por la persona
que compartirá el tema y por los ministerios en servicio, para que
reciban la unción del Espíritu Santo. Interceder en batalla espiritual.
Asesores. Estos hermanos (as) apoyarán como encargados en los
grupos de compartir o de reflexión. Deben recibir una preparación
previa para atender los grupos de compartir. Deben tratar de reafirmar
las verdades expuestas en el tema, crear una relación personal con los
invitados para que se sientan en confianza y conquistarlos para el
Señor. Se encargarán de cuidar su motivación y ánimo para
perseverar durante el curso y aún después del curso. Es importante
que tengan corazón de pastor y deseo de salvar a sus hermanos. Él
podrá realizar la evangelización personal.
Expositores. Estos hermanos son responsables de exponer los
temas, por lo tanto deberán; estudiar con anticipación el tema y
prepararse. Orar en base al tema. Ser una persona convencida de lo
que se va a hablar. Saber enseñar y presentar con claridad y sencillez
lo que se va a dar y sobre todo dejarse guiar por el Espíritu Santo.
Debe ser ante todo un predicador, un testigo de Cristo.
- AMBIENTADOR. Es el encargado (a) de guiar el curso, como
maestro de ceremonias. Debe conocer muy bien el programa, dar la
bienvenida a los invitados, anunciar lo que es el curso y lo que verán
en él. Anunciará todos los servicios que hay y con quién dirigirse.
Presentará a la persona que ensayará los cantos, a la que compartirá
el tema y a quien compartirá el testimonio. Dará el aviso de los grupos
de compartir y su objetivo. Dará los avisos oportunos y la despedida,
haciendo una motivación a continuar.
- GRUPOS DE COMPARTIR O DE REFLEXIÓN. Después del tema,
es necesario que se divida a todos en pequeños grupos para
compartirlo, cerciorarse que se asimile más profundamente. El objetivo
es que hagan relaciones de amistad (aquí se evangeliza a través de
las relaciones) será un grupo homogéneo, no mayor de 8 personas, ni
menor de 4. Tendrá un asesor, que se presentará y hará que se
presenten. Deberá cuidar que se comparta sobre las preguntas que
dejó el expositor, favoreciendo la participación de todos. Se debe
cuidar que sea un grupo estable durante todo el curso y un poco más.
El asesor será el responsable del crecimiento espiritual de cada uno
de ellos desde el momento que se integran al grupo. Deberá llamarles,
buscarlos y motivarlos a seguir adelante, mostrarles amor y afecto,
orar por cada uno de ellos y estar dispuesto a dialogar con ellos más
ampliamente si lo requirieran. Durante este tiempo puede darse algún
servicio de cafetería que favorezca el intercambio amistoso, ésto es
opcional según se vea necesario.
- TESTIMONIOS. Es importante contemplar que haya hermanos que
nos compartan su testimonio personal, de lo que Jesús ha hecho en
sus vidas, respecto al tema que se ha visto. Ésto ayudará a que los
hermanos invitados vean algo vivo que los motive a dar fruto. El
testimonio debe ser preparado con anticipación, ser breve, claro, firme,
que muestre el convencimiento y el deseo de glorificar a Dios.
- ANIMADORES. Son hermanos que ya han tomado el curso
anteriormente y que ya son miembros estables del grupo o comunidad.
Su misión es animar, integrándose entre los asistentes para apoyar el
ambiente de oración, cantar y guardar el orden. Pueden también estar
en un grupo de compartir para apoyar y animar. Ellos también
apoyarán en la oración de invocación al Espíritu Santo, imponiendo las
manos a los recién evangelizados.
RENOVACIÓN DE NUESTRO BAUTISMO,
ESPÍRITU.
BAUTISMO EN EL
- Es importante aclarar que no se trata de bautizarse nuevamente, sino
que es una renovación o efusión nueva del Espíritu Santo.
- Desde días anteriores debe irse hablando para preparar este
momento, ya que es el culmen de toda esta preparación, pero el
comienzo de una nueva vida. Es importante invitar a la confesión como
una manera de prepararse espiritualmente y a mantenerse en una
actitud de oración.
- Se debe tener desde el inicio, un ambiente más fuerte de oración.
- Todo debe ser motivador, la intercesión menos que nunca debe
faltar.
Debe dirigir este momento una persona convertida y dócil a la
acción del Espíritu Santo.
- Pueden participar varias personas; una con el acto penitencial y
reconocimiento de Jesús y otra para la oración de renovación del
bautismo.
- Debe favorecerse la presencia de signos externos que ayuden a vivir
el momento, (hincarse, levantar la mano para la renuncia, hablar con
fuerza, etc.).
- Debe adecuarse el lugar de manera que se facilite la imposición de
manos (cuidar que haya espacio para pasar entre ellos).
- En el momento de la imposición, deben apoyar todos los hermanos
edecanes, animadores y asesores.
- Debe haber algunos hermanos dedicados a dar ayuda personal, a
hermanos que tengan manifestaciones fuertes como llanto, liberación,
gritos etc., para que no distraigan a los demás y se conserve un
ambiente de oración y de paz. Si es necesario, se le puede sacar del
lugar para orar más libremente por esa persona.
El ministerio de música debe tener cantos apropiados y en
coordinación con los que dirigen, apoyar el ambiente de oración.
- Al final debe haber testimonios.
- Es importante tener un tiempo de alabanza gozosa para agradecer a
Dios y dar la bienvenida a los nuevos hermanos.
- Hay que animar a continuar en la vida cristiana, es importante dejar
claro el seguimiento que se tendrá. No debe ser muy distante la
próxima reunión.
- Se puede realizar una fiesta.
4. DESPUÉS DEL CURSO.
Es importante la evaluación de cada uno de los ministerios y de todo el
equipo con vistas a mejorar, pero principalmente con la intención de
alimentarnos con la experiencia de servicio y de fe. Es importante
agradecer y honrar a cada hermano por su participación, así como dar
las sugerencias a mejorar para cada ministerio.
El equipo debe contemplar ahora que inicia un nuevo proceso con
estas personas recién evangelizadas y es darles crecimiento. Empieza
por ello una nueva etapa: EL DISCIPULADO.
¡Y RECORDEMOS!
“TODO CUANTO HAGÁIS HACEDLO PARA EL SEÑOR,
NO PARA LOS HOMBRES,
EL AMO A QUIEN SERVÍS ES CRISTO”
COL 3,23-24
¡DAD GLORIA AL SEÑOR!
¡AHORA Y POR SIEMPRE!
Discípulas de Jesús