Prepárate para venir al encuentro

Transcripción

Prepárate para venir al encuentro
Cristo vive y Viene
Prepárate para venir al encuentro...
Autor Efrain Araya
martes, 15 de julio de 2008
Modificado el miércoles, 20 de agosto de 2008
"Prepárate para venir al encuentro de tu Dios" En la vida, el ser humano debe capacitarse para poder enfrentar su
existencia, con un relativo éxito. Es así que esa preparación, en muchos casos, es larga y continuada, lo que puede
tomar toda la vida. Dios nos habla de este ser nuestro, que lo tenemos tan ocupado sin pensar, que en cualquier
momento puede partir. "Los días de nuestra edad son setenta años; y si en los más robustos son ochenta años, con
todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan , y volamos." (Salmo 90: 10).Si tenemos que capacitarnos
para esta vida que es tan corta, cuán sensato es prepararse para la Eternidad, porque tenemos por delante un
encuentro con Dios, "queramos o no", y muchos no están en condiciones de hacerlo.El estado que Dios busca en el
hombre, no es exterior, él no mira la actividad religiosa y el esfuerzo humano que se pueda realizar, ni las aparentes
buenas obras que el hombre hace, "el Señor mira, y prueba el corazón que sus ojos ya conocen, y no lo encuentra
bueno"."Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Yo Jehová, que
escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino" (Jeremías 17: 9 - 10).Debemos dar
cuenta ante Dios que nos conoce, ante esta tan grande y solemne realidad. El hombre sincero que ama su alma, debe
prepararse para ese encuentro, sin engaño, con un corazón abierto delante de los ojos de Dios, y, en una profunda
humillación decir: "Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí
camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno" (Salmo 139: 23 - 24).El Señor Jesucristo ha preparado, con su
muerte en la cruz del calvario, un encuentro que puede hacerte feliz delante del Santo Dios.Esta multitud de hombres
que son felices, no lo serán por haber sido mejor que los demás, pues nos dice la Palabra de Dios: "Si bien todos
nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia" (Isaías 64: 6).¿Cómo entonces se
podrá ganar esta seguridad? El Señor por su palabra nos contesta para nuestro bien: "Pero Dios, que es rico en
misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con
Cristo (por gracia sois salvos)" (Efesios 2: 4 - 5).Si el hombre pecador ahora salvo, tiene su fundamento en la palabra de
Dios, por haber aceptado la invitación que Dios le hizo: "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta" (Isaías 1:
18).Con un corazón contrito y humillado, sintiendo la carga del pecado, se confiesa a Dios, "y él lo escucha": "Los
sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios" (Salmo 51:
17).¡Qué maravilla! Este hombre, por haberse humillado, y por haber creído en la obra del Señor Jesucristo, por él es
levantado, por medio de su poderosa mano, quien lo lava y limpia de sus pecados, por medio de su sangre derramada
en la cruz del calvario, ahora es un hombre limpio, unido a Cristo, preparado para el encuentro final con Dios.El amor, la
gracia y la misericordia de Dios, desborda todos las medidas a favor del pecador perdido, de tal manera, que Dios le
dice por medio de su Palabra: "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de
Dios; no por obras, para que nadie se gloríe" (Efesios 2: 8 - 9).Se sabio, es el momento que te detengas, por amor de tu
alma, y te prepares para el encuentro con Dios, porque el tiempo es corto: "prepárate para venir al encuentro de tu
Dios" (Amós 4: 12).
E. Araya G.
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Generado: 22 December, 2016, 04:55

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