SNA, buen principio - Centro de Estudios Espinosa Yglesias

Transcripción

SNA, buen principio - Centro de Estudios Espinosa Yglesias
Martes 12 de Julio del 2016 z REFORMA
BEnchmArk
JoRgE A.
MEléNDEZ RUIZ
¿Cómo se hace
un gran maestro?
E
l provocativo título de
una portada reciente de The Economist
(TE). Un tema muy apropiado ahora que algunos maestros en México “dan clases”
de violencia, bloqueos y cómo dañar a niños.
Mientras aquí nos peleamos para ver si “se evalúa al
maestro”, en el mundo desarrollado esto ya no es tema.
Allá buscan mejorar al maestro, el elemento clave en una
educación de calidad.
“El secreto de buenas calificaciones y alumnos estelares
son los maestros. Un alumno
que toma clases de un gran
maestro (del 10 por ciento
superior) aprende tres veces
más del que está en el grupo
de uno malo (del 10 por ciento
peor)”, explica TE.
John Hattie de la U. de
Maryland analizó resultados
de más de 65 mil estudios
de mejora en la calidad educativa aplicados a 250 millones de estudiantes. Sorpresa:
no pesan tanto cosas que los
papás aprecian como clases
pequeñas, uniformes o dividir
alumnos por habilidad.
Lo más importante: un
gran maestro. Que por cier-
U
na vez que el Congreso avaló las observaciones del Presidente Peña Nieto al artículo 32,
y otros, de la Ley General de
Responsabilidades Administrativas (Ley 3de3), el Sistema Nacional Anticorrupción
(SNA) esta listo para entrar
en vigor cuando se promulgue. El mismo da eficacia a
la reforma constitucional del
año pasado en materia de
corrupción y representa un
buen principio en el combate a este flagelo y a la impunidad que lo promueve. Es importante que como sociedad
lo conozcamos, valoremos
y empecemos a utilizarlo si
queremos que la corrupción
realmente se combata.
Entre los muchos atributos que hacen prometedor al Sistema, está el hecho de que será presidido
por ciudadanos elegidos por
ciudadanos. Esto fortalecerá su autonomía. También,
es de destacarse que en su
órgano de Gobierno (Comité Coordinador) estarán representadas todas las instancias federales encargadas de
prevenir, investigar y sancionar la corrupción, así como
to no nace, se hace: “se puede hacer extraordinarios a
maestros comunes y corrientes”. Algo que puede revolucionar a las escuelas (y al
mundo).
“Las escuelas olvidan enseñar a sus alumnos más importantes: los maestros. En
la OCDE, el 40 por ciento
nunca ha aprendido a presenciar clases de otros maestros”, añade.
Un buen maestro establece metas claras, estándares altos de comportamiento (del alumno), planea bien
sus clases y utiliza técnicas
didácticas probadas.
“En la docencia, el camino
a la maestría no pasa por teorías abstractas sino por práctica intensa basada en experiencias probadas y métodos
pedagógicos”. Lo que TE llama “el oficio del salón”.
La revista reseña el estudio de Rob Coe de la U. de
Durham que afirma que no
funcionan técnicas de enseñanza generalmente aceptadas como alabar al alumno sin
razón para motivarlo, aceptar
o promover “estilos diferentes
de aprendizaje” y pensar que
alumnos pueden descubrir
conceptos complejos solos.
No, el maestro tiene que
guiar. Por eso, instituciones
privadas y gubernamentales experimentan, generan
y capacitan con métodos
que sí hacen diferencia. Por
ejemplo:
n Hacer preguntas provocativas aleatorias a todos y no
solo a los “listos”.
n Encargar tareas cortas por
escrito.
n Planear clases con objetivos
calendarizados.
n Liderazgo del maestro
pero con alta interactividad
grupal.
n Anticipar errores comunes.
“El oficio del salón” aplica
recetas específicas obtenidas
de observar y desmenuzar las
mejores prácticas de los mejores maestros.
Por ejemplo, la revista
británica cita las 62 técnicas de Doug Lemov. Tienen
nombres pegadores, como
“estíralo”, “no pidas perdón”,
“empieza con el final”. O una
de mis favoritas, la 26: todos
escriben (vea un video en
nuestros sitios).
La premisa de esta técnica yo la he comprobado:
escribir algo antes de discutir o exponerlo ayuda a tener mejores ideas. Bien dice
Lemov: “reflexionar antes de
convertir pensamientos en
palabras da la oportunidad (al
estudiante) de participar con
mejores ideas y lograr mayor
confianza”.
El también autor del libro “Enseñar como Campeón” asegura que para llegar a ser experto en enseñar
bien (y en cualquier cosa) se
requieren tres cosas: práctica,
ENRIQUE
DÍAZ-INFANTE
CHAPA
SNA,
buen principio
la ciudadanía misma a través del Comité de Participación. Así, se ayudará a resolver muchos de los problemas
de coordinación y cooperación institucionales que tradicionalmente han favorecido la impunidad. Además,
su conformación fortalecerá
el sistema de pesos y contrapesos institucionales, evitando que una sola instancia de
Gobierno se empodere y actúe discrecionalmente por
consigna, como solía ocurrir
con la Secretaría de la Función Pública.
El Comité Coordinador
además, será el órgano en-
cargado de diseñar la política pública anticorrupción,
darle seguimiento y de generar inteligencia institucional.
El mismo estará apoyado
por una secretaria ejecutiva
quien producirá y gestionará la información necesaria
para evaluar la política nacional anticorrupción, emitir
recomendaciones de mejora
y darle seguimiento. Para poder desempeñar su labor, el
SNA contará con plataformas de información donde
obrarán, entre otra, las declaraciones de los funcionarios, los nombres de aquellos
que participen en procedi-
práctica y práctica. Igualito
que en los deportes.
“La forma como Roger
Federer golpea un revés es
el resultado de incontables
horas de práctica y análisis.
Al encontrar una falla en su
juego (un gran atleta) la desmenuza en partes y trabaja
en la ejecución de pequeños
cambios”, explica una nota
reciente sobre la revolución
educativa en el diario The
Guardian.
Sólo con un sistema ingenieril para mejorar a los
maestros se pueden obtener
grandes alumnos que contribuyan poco a poco a mejorar a un país (relea “Los dos
Méxicos”).
El rotativo británico es
contundente: “la globalización incrementa la presión
para que los sistemas educativos mejoren”.
Esta verdad indiscutible
es para México una tragedia. Mientras que países desarrollados buscan potenciar
su calidad educativa, nosotros estamos atascados en el
primer paso. Condenados a
verle las suelas a los que van
a ganar la carrera.
EN POCAS PALABRAS…
“El maestro hace la diferencia,
no el salón de clases”.
Michael Morpurgo,
autor inglés
[email protected]
Twitter: jorgemelendez
reforma.com
“Todos escriben”, una de
las técnica para enseñar
bien de D. Lemov
mientos de contratación, así
como las denuncias presentadas contra servidores públicos. Con esto, será cada
vez más difícil que el ocultamiento de información, la
falta de seguimiento o el olvido, jueguen a favor de la
impunidad.
Para combatir la corrupción ocasionada por el endeudamiento opaco y caro,
se contará con un sistema
nacional de fiscalización. El
mismo da facultades a la Auditoría Superior de la Federación para revisar la deuda
pública subnacional que el
Gobierno federal respalde.
Con esto se evitará que los
rescates de deuda estatal o
municipal que se den, en
términos de la Ley de Disciplina Financiera, tengan
fines político-electorales y
que el endeudamiento quede impune, en caso de existir irregularidades en la contratación y destino de los
recursos. Además, gracias
a la definición de conductas corruptas que hace la
Ley 3de3 y el Código Penal
Federal, entre las que se incluye el conflicto de interés,
aquellos funcionarios de Ha-
NEGOCIOS
5
A DEBATE
DAvID sHIElDs
CFE: incertidumbre
y limbo jurídico
L
a Comisión Federal de Electricidad
(CFE) vive tiempos
de gran incertidumbre,
no sólo por la sorpresiva
renuncia de su director general, sino por la incógnita que implica la “estricta separación legal”
—recién autorizada por
su Consejo— de CFE en
11 subsidiarias y filiales,
incluyendo seis empresas
generadoras.
No se sabe cómo serán esas empresas, ni cuáles serán los activos asignados a cada una —se ha
informado que no será sobre una base regional—, ni
cómo operarán en el nuevo mercado eléctrico. Tampoco se sabe si serán competidores leales, cuando el
marco jurídico de la Reforma Energética, con su agobiante exceso de regulación
y normatividad, establece
múltiples asimetrías, donde CFE —igual que Pemex—
no será simplemente “una
empresa más” en el escenario energético del País.
La falta de certeza en el
plano jurídico va más allá
de cómo actuarán las subsidiarias y filiales de esas
“empresas productivas del
Estado”. En el caso de CFE,
existe una “grave confusión” sobre su naturaleza
jurídica, ya que no queda
claro hasta dónde su condición como empresa productiva estatal se opone a
la de su status previo como
ente descentralizado del
Gobierno federal, nos comenta la licenciada Diana
Puente, abogada de Puente
y Asociados, quien escribe
un análisis al respecto en la
revista Energía a Debate.
“Habrá quienes piensan que CFE sigue siendo
un organismo descentralizado, quienes consideren
que no, o quienes pensemos que se ha creado un
híbrido. Es imprescindible que sea la Suprema
Corte de Justicia de la
Nación la que determine
qué normas son vigentes y aplicables y cuál es
la naturaleza jurídica de
CFE”, según Diana Puente.
En su opinión, la denominación empresa productiva
del Estado “es más política
que jurídica”.
La Reforma, sin duda,
alteró la naturaleza de CFE
y ahora se observa una oscilación de criterios sobre si
los juicios deben resolverse por la vía administrativa —es decir, contemplando a CFE como autoridad
en un juicio de amparo— o
por la vía mercantil. No es
cienda que en el pasado se
dedicaron a estructurar deuda local, ahora tendrán que
excusarse de conocer de su
rescate para no incurrir en
ese delito.
También, es de resaltarse la creación de una Fiscalía
para investigar los posibles
delitos de corrupción, a través de ministerios públicos
especializados. Éstos consignarán los hechos constitutivos de delitos ante jueces
penales. La experiencia de
países como Brasil demuestra que sólo la especialización y autonomía de investigadores y juzgadores hace
posible que un sistema anticorrupción funcione. Aquí
faltaría crear juzgados penales especializados en delitos
de corrupción.
En fin, que éstos son sólo algunos de los muchos
atributos positivos del SNA.
Ahora, lo que sigue es elegir
a los ciudadanos que integrarán sus órganos de Gobierno.
También falta que el SNA se
replique a nivel estatal. Asimismo, está pendiente pedirle a la Suprema Corte de
Justicia de la Nación clarifique el alcance de la condición
un tema menor para quienes vayan a contratar con
CFE, quien ya tiene 28 mil
juicios y procedimientos
administrativos en trámite, considerados como “de
alta cuantía y susceptibles
de materializarse”, por lo
cual mantiene un elevado pasivo contingente para
enfrentarlos.
¿Y cómo dividir a CFE
en tantas partes, cuando
se concibió y creció como una sola empresa integrada? Al parecer, nadie
sabe aún. Todos sus proyectos de infraestructura
se han armado bajo la lógica de una sola CFE nacional, no una CFE fragmentada. Otro hecho curioso es
que la Reforma Energética
promueve activamente —a
través de CFE— la integración de México con Estados Unidos en gas natural,
pero no en electricidad.
Al margen del propósito de separar a CFE —con
supuestas “murallas chinas” entre las 11 CFEs para
efectos de competencia y
transparencia—, una enorme duda es de dónde CFE
obtendrá flujos para nuevas
deudas inexplicadas e ir pagando los billonarios contratos recién adjudicados para
construir un sistema de gasoductos transfronterizos,
teniendo en cuenta el precio
más bajo de la electricidad
y la pérdida de clientes industriales que hoy impactan
sus finanzas. ¿Cómo repartir
entre las 11 hermanas esas
deudas y el enorme pasivo
laboral con el aún intocable
sindicato?
Tampoco se ve cómo
CFE podrá ser una empresa realmente productiva, siendo del Estado. A
diferencia de otras compañías en el sector eléctrico,
CFE sigue compartiendo
factores de riesgo con el
Gobierno federal. Por esa
razón, Moody’s ha cambiado la perspectiva de la calificación de CFE de estable
a negativa, en línea con la
perspectiva del País.
El gran riesgo que
flota en el aire es que, en
cualquier momento, el
Gobierno federal nos puede endosar el rescate de
CFE, y también el de Pemex, a todos los mexicanos,
con cargo al erario público.
Éste es el principal foco rojo de la Reforma Energética
y puede definir el éxito o el
fracaso de la misma.
*Analista de la industria
energética.
Su e-mail: david.shields@
energiaadebate.com
que establecieron los legisladores en el artículo 29 de la
Ley 3de3 de sujetar la publicidad de las declaraciones
patrimoniales y de intereses
de los servidores públicos, a
que no se viole su derecho a
la privacidad, algo que suena
extraño en el caso de quien
cobra del erario.
Igualmente, habrá que
ponerlo pronto a prueba con
algunos casos emblemáticos
de corrupción a fin de que el
SNA gane credibilidad entre
la ciudadanía. Y ahí no termina la cosa, seguirá la modificación de otras muchas leyes
relacionadas, tales como la de
Obras y la de Adquisiciones,
donde se alienta el ejercicio
discrecional y opaco del presupuesto. En suma, que este
es apenas un buen comienzo,
pero falta mucho aún para revertir la llamada “cultura de
la corrupción” (sic EPN)
El autor es Director del
Programa del Sector
Financiero y Seguridad Social
del Centro de Estudios
Espinosa Yglesias (CEEY)
Twitter: @ediazinfante
enrique.diazinfante@
ceey.org.mx

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