Martinic_Anales_1 - Aike Biblioteca Digital de la Patagonia

Transcripción

Martinic_Anales_1 - Aike Biblioteca Digital de la Patagonia
y.
ANS.
INST. PAT, Ser. Cs. Hs.
(Chile), 1998. 26:5-22
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD FUEGUINA.
LA EVIDENCIA CARTOGRÁFICA*
MATEO MARTINIC B.
RESUMEN
se describe y analiza la que fuera la derivación oceánica austral de
la salida del estrecho de Magallanes en setiembre de 1578 y su repercusión en
En este artículo
Francis Drake
época.
la
Se
a
postula
la
hipótesis
del término insular de América
de
su
en una
hallazgo geográfico
época en que a la
y
comprobación
su
Tierra del
Fuego
efectiva
acerca
la consideraba
se
integrante de la Tena Australis Incógnita. Se presenta y discute la evidencia cartográfica probatoria.
SUMMARY
DRAKE AND THE DISCOVERY OF THE FUEGUIAN ARCHIPELAGOES
The southern oceanic
route
that Francis Drake took when he left the Strait of
the
Magellan in september 1578 is described and analyzed in this article. Here we claim
hypothesis that Drake is responsible for the geographic discovery and verification of
archipelagical ending of America in a time when Tierra del Fuego was considered part of
Terra Australis Incógnita. Probatory cartographic evidence is presented and discussed.
1
.-
Izt derivación austral de Francis Drake
en
1578.
escuadrilla
inglesa,
Marygold,
ra
El 6 de setiembre de 1578
una
corresponde al Proyecto Fondecyt N° 1970987, "Canografía Magallánica Histórica y Moderna (1523-1945). OHi
a
gen, evolución y registro descriptivo".
•
j
„
••
Centro de Estudios del
la
Patagonia,
•
.■
»
Hombre Austral, instituto de
Universidad de
Magallanes.
113-D, Punta Arenas, Magallanes, chile.
Casilla Correo
the
the
integrada
por tres naves de bandeGolden Hind, capitana, Elizabeth
y
al mando del capitán Francis Drake,
completaba
con toda felicidad el
trayecto del
estrecho de Magallanes, realizado en el menor
tiempo hasta entonces conocido 16 días. Hasta
„ii;
a"'
i^„
'os
l„l-
había
,„„-
i
traído
i
i
■'
ambiciosa
luuiuuaa
•
v
audaz
y .iuu.i/.
los primeros navegantes de
empresa
bandera extraña que penetraban al océano
,
de
Pacífico,
a
ser
entonces un
verdadero
marc
clausum
6
MATEO MARTINIC
del Imperio
fama de
en
el Nuevo
Mundo,
dejando
predando aquí
poco andar irían
costas a
cuyas
tra
Español
su
apropiándose
de
paso,
Pero
en
sinies
y allá,
ingentes riquezas.
a
de
partir
nes
aquella jornada
las condiciones climáticas que se habían mani
festado muy favorables a los ingleses variarían
enteramente, dando paso a expresiones eólicas
huracanadas que en breve lapso separaron a
las naves, lanzando a la capitana muy al sur,
hasta
una
latitud
canzar
por el
Magallánica.
alta
tan
precedente
embarcación
lado
ninguna
como
occidental
Ñuño da
otra
conseguido
había
de
al
la Tierra
Silva, piloto portugués
que había sido apresado por Drake en las islas
del Cabo Verde y que a la sazón se desempe
ñaba como tal en la capitana, relataría poste
riormente las circunstancias de aquella impre
vista y brava
de
la
dejaría
to
contingencia
trayectoria
la que
esa
parte
capitán inglés
los anales del conocimien
austral:
memoria
geográfico
con
náutica del
en
"[...) Y que salidos del Estrecho
fue
á
seis
de setiembre del dicho año que
que
navegaron tres días al norueste y al tercero día
les ventó a Norueste que les forzó a navegar
al oes-sudueste y navegaron diez u doce días
con poca vela, y que por el viento cargó mucho
tomaron
tía vés
había
todas las velas y estubieron
mar
al
hasta fin de setiembre; y que á los 28,
perdido el Inglés el Patax que sería de
toneladas, y que de allí haciendo vela
porque el tiempo les era algo largo navegaron
90
ázia el Nordeste siete
tubieron vista de
surgir,
mas
el
días, al cabo de los cuales
unas
tiempo
islas,
no
les
saltó el viento al Norueste
Sudueste, y que hizo
otro
quales fué á
dio lugar, y de allí
y navegó al Oesá las
día
perdió
la
otra
Nao que sería de 190 toneladas porque cargó
mucho el tiempo, de manera que quedó sola
la
Capitana,
Silva había
porque el Navio deste Ñuño da
quedado encallado en la Bahía á
donde invernaron, y que desde allí corrió con
el tiempo hasta altura de 57 grados donde
tomó Puerto en una Isla un tiro de verso de
la tierra donde había veinte brazas de fondo,
y estubo alli tres o cuatro dias, y de alli saltó
el viento al Sur; navegó al Norte dos dias; al
cabo de los quales tubo vista de una Isla
pequeña baxa y tomó las velas, y echó el Batel
fuera y tomó muchos Paxaros y Lobos mari
otro día se hizo á la vela y navegó Nornos;
y
Nordeste y al Norte hasta otra Isla que está en
la tierra firme de la parte del Norte..."1
Esa derivación y las observacio
realizadas
entonces
persuadieron
a
Drake
de haber alcanzado la latitud misma del térmi
del continente americano al sur del estre
cho de Magallanes, que hasta entonces se creía
que se prolongaba fundido en la mítica Terra
no
Australis
Incógnita,
magnitud todavía
de
conmensurable.
in
Es sabido que la isla a la que
había arribado fue denominada Elizabeth, en
homenaje a la soberana inglesa que había
consentido el viaje de corso,
aprovisionó
bles,
de agua, leña y
tornaban
en tanto
la cual
especies
variar
a
en
a su
se
comesti
favor las
condiciones climáticas que tras tan prolongado
y sufrido ajetreo le habían mantenido alejado
de su ruta proyectada hacia el norte por la
costa americana.
manera tras largo y
Inglaterra, habiendo comple
tado la segunda circunnavegación al globo
terráqueo, amén de rico, triunfante y afamado,
Retornó de tal
exitoso
periplo
a
convencido de haber alcanzado hasta la unión
de los océanos Atlántico y Pacífico, y de ser,
por lo tanto, la Tierra del Fuego una isla. No
fue, por cierto, Francis Drake el único persua
dido de ello, sino además
sus
propios compa
ñeros de aventura, de manera tal que al regre
so fueron varios los testimonios y documentos
que tal
to
podían
aseverarlo.
Sin
embargo, aquel
sensacional que
liquidaba
en
lo
descubrimien
de golpe
geográfico
el mito de la gran tierra austral
po
evidencia la posibilidad de un se
niendo
en
gundo
paso
los
del Norte y del
asestaba un golpe no
menos demoledor para la
hegemonía imperial
hispana en América y en las ricas tierras del
Oriente, poniendo las riquezas de sus colonias
Sur, y que
entre
en
lo
mares
político
occidentales americanas al alcance de
1
aventu-
Relación muy circunstanciada, reducida de la declaración
que hizo ante el Virrey de México en 20 de mayo de 1579
el piloto Ñuño da Silva natural en Porto en
del
Portugal,
viage y Navegación que hizo el Corsario Franco Drake
desde la Isla de Santiago en Cavo Verde donde le
prendió
en 19 de enero de 1578, hasta 16 en abril de
dicho año
de 1579 que le
de la costa del
dejo
mar
en
del
livertad
sur
en el Puerto de
Guaturco
de Nueva España {En Colec
ción de Documentos de Fernández de Navarrete
que posee
el Museo Naval. Instituto Histórico de Marina,
Documento
904")-
Madrid, 1946
6.
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
osados, recibiría
reros
país
el
en
pasaba
que
por ser el archienemigo de España una singu
lar y contradictoria recepción que al cabo de
sepultar
aquel importante hallazgo geográfico.
pocos años contribuiría
efecto,
En
res
ron
el olvido
en
a
y más allá de los hono
que se le tributa
homenajes personales
y
a
Drake y de la valía incontrastable que
ante su soberana, las conveniencias de
ganaría
propia Inglaterra acabaron por echar
cerrojo a la valiosa información obtenida
la
poniéndose
«política
una
Como
de
secreto».
lo
bien
muy
un
im
señala
Raymond Aker, uno de los estudiosos contem
poráneos más acuciosos y eruditos sobre la
navegación
portaba
glesas
Drake, «lo que les
de Francis
era
im
expediciones
española oeste
el futuro de las
de saqueo
a
la
costa
in
de
Sud América que ahora tenía una mta abierta
que no podía ser cerrada por España. No era
solamente
sus
nuevo
consejeros
uno
a
su
para el
de escape. La reina y
querían que se divulgara al
una ruta
casa,
a
llegar
camino para
Sur, sino que también
Mar del
regreso
un
no
mundo ni una palabra sobre ésto hasta que se
hubiera hecho un amplio uso de esta mía.
Apenas Drake hubo vuelto
se comenzaron a
repetición
de
su
planificar
viaje.
«Había
razones
a
casa
cuando ya
esquemas para
prácticas
para
Había además
tiempo
mismo
tualmente
posibilidad que por ese
venía planteando y que even-
otra
se
podía
considerarse: la de que
Ingla-
posesionara del estrecho de Magallanes
-considerado la llave estratégica del continen
te- y estableciera allí una colonia que sirviera
de base a una flota con la que se «podría
conquistar para Inglaterra todas las minas de
oro del Perú y toda la costa y tierra de Amé
tena se
rica
el Mar del Sur».3
en
Había, pues, razones de peso de
sobra para una política de secreto respecto de
las informaciones geográficas obtenidas duran
te el transcurso de la exitosa navegación de
Francis Drake, razones por demás suficientes
para que todos los diarios llevados a bordo,
todas las notas, informes y mapas elaborados
fueran puestos bajo celosa custodia. De esa
manera
el marino afamado
do de reclamar
lo que se refiere
sus
vio
se
en
y
no
la insularidad
a
ría
fueguina
conseguido trascender al públi
cualquier manera, según se verá, acaba
por perder todo crédito y olvidarse al fin,
obstante haber
co
imposibilita
descubrimientos, que,
de
consecuencia de las contradictorias y
confusas infomiaciones que se conocieron hasta
como
los inicios del siglo XVII.
una
con
de estado la completa
Drake y sus registros
además del nuevo pasaje mari
2.- Lo que llegó a divulgarse sobre el descubri
miento del sur fueguino.
servar como un secreto
relación
del
cartográficos,
no.
viaje
de
Ahí estaban los
lugares
donde
se
encon
traban los tesoros y el tipo de defensas. Estaba
la extensión septentrional de su búsqueda del
Paso Noroeste y de la ruta seguida para llegar
él. Se creía que la entrada de éste había sido
a
descubierta por Martin Frobisher antes del via
je de Drake. El interés en ese paso se mante
nía
muy
Pero
vivo.
puerto desconocido
el paso y
miento
en
no
en
obstante,
Nueva
refugio
había
un
Albión, útil para
para el reabasteci
las retiradas. Había una ruta a través
como
del
Pacífico;
cio
en
un
una
relación
las Islas de las
potencial
del
comer
Especias de Portugal;
camino hacia Indonesia y finalmente el
cimiento de la
costa
sur
el
cono
de Java, todavía
misterio para Europa»2
Pero no se trataba sólo de
Habiendo varios
2
Francis Drake and the
con
discovery of Cape
el autor.
Horn
con
y fuera de
Inglaterra, escapando al recaudo
soberana. De cualquier modo
fue un proceso espaciado en el tiempo que al
cabo de un lapso permitió tener información,
a veces poco clara
y aún confusa, sobre el
tro
impuesto por la
la
larga
acabaría por conven
restándole desde
toda la sensacionalidad propia de un
suceso, que
cer acerca
a
de
su
El
no
certidumbre,
luego
hallazgo geográfico
de
primer
importancia.
en enterarse fue
el propio embajador de España en la corte
inglesa Bernardino de Mendoza, quien atenién-
extraño
un
5
eso.
Richard
tomar
(Inédito).
Hakluyt
-Un
el estrecho de
discurso sobre conveniencia de
Magallanes-,
citado por Hamish L.
y fuentes de informa
ción de la
expedición de Drake al Pacífico 1570-1577-,
Anales del Instituto de la
Serie
Palagonia, vol-,
Stewart
Correspondencia
participantes
rango protagónico fue difícil al fin evitar que
diversas noticias se filtraran o difundieran den
en
Humanas,
-Objetivos estratégicos
Punta
Arenas, 1996, pág.
18
24,
Cs!
8
dose
MATEO MARTINIC
dichos del
a
propio Drake,
el 20 de abril
de 1582, esto es, a poco más de dos años del
retorno de aquél, escribió al Rey Felipe que el
capitán corsario había afirmado que «no había
un continente hacia el sur [del Estrecho)
y más
allá de la Tierra del Fuego, solamente islas y
abiertos».4
mares
posible
Es
ñola la información
no
la
la Corona
Espa
sorprendiera particu
que
a
larmente, existiendo como existían en la Casa
de Contratación noticias antiguas y recientes
que daban cuenta de avistamientos que si bien
no correspondían a descubrimientos propia
por reiterados,
dubitativa
en
como
cuanto
nal de la Tierra del
sunta
fundamento,
tales, contenían suficiente
mente
para formar una opinión
a la continuidad meridio
vale
Fuego,
continentalidad.
decir,
su
pre
Estas se referían al primer y afa
mado avistamiento de Francisco de Hoces, en
1526, quien arrastrado hacia el sur desde la
boca oriental del estrecho de Magallanes, con
su
carabela San
pareció
Lesmes, había alcanzado lo que
«el acabamiento de la tierra», y al
misterioso viaje que una de las naos de Fran
ser
Camargo había realizado en 1540 hasta
desconocido y distante puerto austral, ambas
por el lado este del supuesto continente me
ridional. Pero también a la derivación, ahora
cisco de
un
occidental, protagonizada por Hernando Ga
llego
llegó
1553, quien
en
hasta los
ia
Concepción
55°, comprobando que en lugar
con
nao
de costa que derivara hacia el oeste como se
creía y lo señalaban los mapas de la época,
había solamente mar abierto.
Tal lo habían ratificado hacía poco,
en
1580, subiendo todavía
rante
Juan de
Lamero al
ser
arrastrada
co, tan al meridión
piloto
el almi
Hernando
nave, San Francis
su
como
latitud,
en
Villalobos y el
para
sospechar
que
los mares del Sur y del Norte se unían, dán
dose por isla lo que se creía continente.
Esta información había sido pres
en
su
quien
do:
recogida por
el
jesuíta Juan de
lejos
de la tierra,
cada hora fue al
pensando
aflojar por
en
dar
en
tierra
revés, que siempre veían írseles
desviando más la tierra, hasta que al cabo del
Wallis,
págs. 134-135.
The
cartography
of Drake's
Voyage, 1984,
en
ella
tiempo.
tanto
con
Pero
la
no
pasaron más adelante ni supieron si se acaba
ba allí la tierra (como algunos quieren decir
que
es
que
se
isla lo que
hay pasado
juntan
opinión
allí los dos
estrecho,
el
y
de Norte y
Sur) o si iba corriendo la vuelta del Leste hasta
juntarse con la tierra de Vista, que llaman, que
responde al cabo de Buena Esperanza, como
mares
de otros-.5
Cuenta además Acosta que ente
rado el virrey del Perú, Martín Enríquez, de tal
avistamiento declaró enfático «que tenía por
inglés [Drake], la fama
había echado de que el estrecho hacía
luego isla y se juntaban ambos mares; porque
él, siendo virrey de la Nueva España, había
examinado con diligencia al piloto
invención del corsario
que
se
portugués
que allí dejó Francisco Drac, y jamás tal enten
dió de él, sino que era verdadero estrecho
y
tierra firme de ambas
partes-.6
"
Esta claro
rencia, que para
así,
tras esta
1582 cuando el
larga
refe
embajador
hispano sobre
Mendoza informaba el monarca
los dichos de Drake, en España había noticias
sufientes que a lo menos podían motera duda
acerca
de la continentalidad
si en efecto tal
sucedía,
fueguina. Pero.
Imperio
convenía al
divulgara aquel barrunto para man
por tiempo indefinido la creencia de ser
el estrecho de Magallanes el único
paso entre
los mares del Norte y del Sur. Y también
aquí.
que
no se
tener
asenta
temporal
de zabordar
travesía, que corrió
en
cuales
quedaron
posible dejar
sería
Id.
tres
hallaban más
admirados de don
rumbo que hasta el estrecho, sino que hacía
vuelta hacia el Levante, pues de otra suerte no
Op. cit,
sin
antes se
está de la otra parte del estrecho, como vamos
por el mar del Sur, no corría por el mismo
4
parte pertinente así la había
través,
el
no
de infirieron (como Fernando Lamero piloto
de la dicha nao me lo contó que la tierra que
*
Duróles el
56 grados, y viendo que
en
habían dado al
Acosta
«...
Helen
hallaron
Indias,
días, de los
4
se
Historia Natural y Moral de las
tamente
día, aplacando la tormenta, tomando
tercero
sol
edición de
id.
Madrid, 1987, págs. 181-182.
i Sin
embargo, tan convencido quedaría el piloto Lamero
de haber visto la unión de los mares en la
dicha latitud
que, tiempo después, el 22 de abril de 1583 escribió al
propio rey Felipe, contándole de su hallazgo y de su
intención de -entrar por ellas lias
aberturas
ver si
pasaban
a esa
otra
mar a ver
si
la tierra por razón de ir corriendo
que la de más atrás-. Tuvo
almirante
avistadas)
hacía punta
o
para
remate
diferente rumbo del
contradicción en ello con el
Villalobos, quien impuso
rio y el reconocimiento finalmente
a
su
opinión en contra
tuvo lugar
no
9
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
por conveniencia hegemónica, se impuso el
silencio, en lo que vinieron a coincidir las dos
enemigas, por
coronas
distintas
razones.
Tornando al escenario inglés, aquí
la noticia del hallazgo de Drake continuaba
trascendiendo casi insensiblemente a través
evidencias que no podían dejar de recogerse
por convenir así al interés nacional, entre ellas
principalmente a través de algunos mapas so
separada
bre los que se hará referencia
adelante. Para probarlo, basta tener
navegación que
las instrucciones de
más
presentes
hora
en su
Cavendish, en 1586 cuando
aprestaba para repetir el memorable y afor
tunado periplo de su compatriota. Sabemos de
ello por boca de Tomé Hernández, sobrevi
recibiera Tilomas
se
viente de la aventura colonizadora de Pedro
de
Sarmiento
Gamboa
Magallanes, quien
en
fuera
1587.
en
estrecho
el
de
aquél
rescatado por
bien, huido Hernández de
Cavendish en la rada de Quintero
Pues
la
de
nave
el 17 de mayo de ese mismo año, prestó de
claración ante el Gobernador y Capitán Gene
ral del Reino de Chile sobre todo lo aconteci
do a la expedición pobladora del Estrecho,
desde la salida de España hasta el avistamiento
de los sobrevivientes por los ingleses, y en un
punto declaró que Cavendish le había dicho
(...] »que traía la orden de la Reyna,
su
Señora,
que si se hallaba poblado el Estrecho y gente
que le defendiese el paso, que bajase a cin
cuenta
y
nueve
grados
y hallaría
por donde podía pasar aunque
grosa.
mar
era
.-3
.
El dato
importa porque
ancha
muy
se
peli
trataba
una
expedición que tenía el patronazgo
real y a la que, por consecuencia, debían
habérsele entregado todas las informaciones
de
disponibles
en
lo
seguridad.
debe quedar
tocante a
Así entonces,
bre la insularidad
se
8
ha hecho
mención,
José- Miguel Barros,
sobre
las
Magallanes-.
pág. 72,
fueguina.
Además de los mapas
en
especial
a
los que
los primea
Estrecho de
Anales del Instituto de la Palagonia, vol. IX,
hispánicas
Punía Arenas, 1978.
es del autor.
Lo destacado
del
construyeron, tempranamente
Inglaterra alguna información
se
en
se
es
comprensiblemente
crita, aunque deliberada y
oficial sobre el viaje.
vaga dado el secretismo
Tal acontenció con la publicación hecha en
1582 por Richard Hakluyt, un clérigo que ofi
ciaba de editor, quien lo hizo en su obra (Divers
Voyages touching
incluyó
que
un
Michael Lok.9
the discouerie
mapa
of America),
confeccionado por
Años después, en 1587, Hakluyt
editaba la afamada obra de Pedro Mártir de
Angleria
agregó
Orbis,
Décadas del Orbe Novo, en la que
interesante mapa titulado Novus
un
obra
a su vez
de
ampliada
hará referencia
Philip Galle,
al que
adelante,
más
y
se
en
el
que de manera indubitable se presentaba el
término meridional de América como un archi
piélago, figurando en él la isla Reginae
Elizabelhae, descubierta por los ingleses en 1579,
error
de fecha este que
repitiendo
venía
se
desde 1582.
Probablemente
publicaciones,
marse
a
la
capellán
en
época
segunda,
entre
una
y otra
que debería aproxi
Fletcher, antiguo
Francis
de Drake, de algún modo haría divul
del
contenido del diario por él llevado
gación
a bordo de la Golden Hind± texto acompañado
algunos
por
mapas burdamente elaborados que
como aquél, eran muy explícitos
descripción del hallazgo geográfico
fueguino. Este diario habría sido difundido
obstante,
no
la
en
alrededor de 1586-87 y posteriormente se ex
traviaría, siendo conocido por la posteridad
por
una
copia
hecha casi
un
John Conyers.
En lo tocante
hallazgos geográficos
siguieron, 1588
una
a
Por
determinante
en
de
1592, dieron lugar
una
parte y
desempeñado
años que
en
luego
del
Ingla
papel
por Francis Drake
española
que había
patria, su fama
involucrándose en ella los
a su
alcanzó el cénit,
hechos pasados y recientes del personaje.
'
La discreción
de Hakluyt no dejó de
sorprender
Edward Stafford, embajador inglés en París,
en
dirigida
por
la difusión de los
Drake, los
la derrota de la armada
con la invasión
amenazado
a
siglo después
situación contradictoria.
fuera
-Primer testimonio de Tomé Hernández
fundaciones
conoció
terra a
cualquier duda que en Inglaterra, hasta 1586
a lo menos, se aceptaba como buena la infor
mación del hallazgo geográfico de Drake so
de
que
ros
quien
Así
a
Sir
carta
a Lord
Walsingham el 16 de octubre de 1584,
comentó que lo que en
Inglaterra era un secreto, allí -en
Francia- estaba en la boca de todos
(Wallis, op. ciL, pág.
139). Esta es una señal clarísima acerca de la
difusión
que hacia el exterior había alcanzado el viaje de Drake.
10
MATEO MAR'IINIC
publicaron
entonces se
los que
en
do,
se
particular
en
en
mostraba
1589
una
de América
nuevos
mapas
imagen del mun
austral, en la que
hallazgos hechos por aquél,
por supuesto, el de la insularidad
fueguina. Uno de estos mapas conformaba el
motivo de una medalla conmemorativa acuña
se
advertían los
incluyendo,
da
homenaje
antiguo corsario y que tuvo
amplia difusión en la Inglaterra de la época.
al
en
una
Pero, curiosamente,
parangón
tenía
no
pareció
esa
divulgación cartográfica
lo
en
escrito,
en
donde
política secretista, melin
en nada ayudaba a dilucidar las
persistían sobre, a lo menos, el
continuar la
drosa, que
dudas que
hallazgo
austral hecho durante el viaje.
De modo paradojal, el regreso
en
1588 de Thomas Cavendish, el segundo nave
gante de su nación que repitió el exitoso
periplo circunnavegatorio
del
globo
y
su
per
sonal convicción de ser tierra firme la que
seguía al sur del estrecho de Magallanes, su
mada
a
los difundidos dichos de Pedro Sar
miento de
Gamboa, que había sido capturado
por los ingleses y llevado a Inglaterra donde
sería liberado, quien se empeñó en desacredi
captores el descubrimiento de la
tar ante sus
fueguina, arrojaron una sombra de
sobre el hallazgo de Drake, de tal mag
insularidad
duda
nitud que acabaría por hacerlo no creíble.
Y esta situación se vería reflejada
particularmente
globo terráqueo
do
globo
la elaboración del primer
hecho en Inglaterra, el llama
en
Molyneux,
de
en
cuya
ejecución
tuvo
responsabilidad el grabador y cartógrafo ho
landés Jodocus Hondius, debido precisamente
al influjo que sobre el mismo tuvieran las ideas
de Cavendish y Sarmiento (Wallis, op. citj. La
popularidad que alcanzarían los globos de
Molyneux
sería
muy
grande,
y la doble cir
cunstancia de haberse construido los mismos
con
arreglo
a
las informaciones
geográficas
más
y
precisamente excluida toda
mención a la insularidad fueguina, significa
rían un contraste muy severo para la credibi
recientes
estar
lidad de Francis Drake.
Así el daño
público
en
al crédito del
medio de
sus
dudas o escrúpulos para in
formar oportuna y adecuadamente sobre la
realidad de los hechos que había protagoniza
incomprensibles
do,
él.
la
tuno
do-.10
acabaría por perderse para
lo escribiera la historiadora
el orgullo nacional había sido
Helen Wallis,
«...
Pero
secreto.
de
publicaciones
Las
pas del mundo
reconocimiento
un
para ganar
1595 y
en
generaliza
nuevos
1599-1602
en
ma
en
los
el descubrimiento de Drake
que
recogería
sobre la insularidad fueguina en nada ayuda
rían a cambiar la opinión en contrario ya vir
tualmente sostenida en los ámbitos públicos y
privado del reino inglés, convicción que tras
cendería y tendría eco en los medios especia
se
lizados
(navegantes
potencias
y
cartógrafos)
de
otras
europeas.
Al fin
lo que restaría del
avistamiento descubridor de Francis Drake al
del estrecho de
sur
el reconocimiento
de la isla
Magallanes
aceptación
incluso al
brazo de
siglos
mar
desplazada
1578,
sería
hallazgo
su
de por
medio,
Fuego,
en
o
extenso
los mapas de
XVIII, y presentada bajo los
XVII y
Drake,
al sudoccidente
de la Tierra del
sur
nombres de Elizabetidas
de F.
en
de
la que había recalado, la denomi
en forma de una tierra
en
casi mítica sería
los
o
Elizabeth, que
nada
o
Elizabetides, islas
Portus Francisci Draci y
otras
variantes.
Entre
esta
los mapas que
recogerían
versión deben mencionarse el del
cho de
Magallanes
de Levinus Hulsius
estre
(1603),
fray Gregorio de León, construi
probablemente durante el primer tercio del
siglo XVII, cuya información sería recogida en
el de Chile de
do
1646 por el jesuíta chileno Alonso de Ovalle
Tabvla Geographica Regni Chile (versión
en su
dedicada al
Papa Inocencio X) y el de la Re
gión Magallánica publicado por Richard Dudley
la obra Dell' Arcano del Mare
en
época,
con
bución,
al
a
en
sur
edición
en
contribuiría,
Ello
paradojal
inglés
segunda
en
la misma
1661.
de
modo
obstante lo errado de esta atri
y
perpetuar el nombre del navegante
no
el ancho paso oceánico que transcu
de América, que al fin devendría un
justiciero homenaje
reconocimiento.
de la
posterioridad
Finalmente, cabe
en
su
mencionar que
poco más de tres décadas
del fallecimiento de Francis Drake (ocurrido
recién
en
1628,
oportunidad
Como bien
del
los reclamos de prioridad en el descubrimien
to debían haber sido hechos en tiempo opor
rre
navegante estaba hecho, y
política
bien servido por la
10
Op. cit, pág. 137.
a
11
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
H-í i'li'
'
"r*
;"
"L íl*^
si
¥¿$% f#
¿«
!/;*4
liii^
12
MATEO MARTINIC
;
.
:
.%.u^^<&h
•
:.Y.;\: : ,;
•
::./."
.
J¡&&*
'
-
•
/,;
*
:v:::— *•
+***&*;
•\^Mní?:;:>.-:.\\
f f**Ü-c
*fqL~h
'
>Ha*
?^¿
Figura
> ¿--/£f.
v*
n^ C <--_/«.
'SUlltli
2.
Croquis
-
de la extremidad austral de América por Francis Fletcher
Cortesía de The British
Library
ca.
1586-87.
£<•
13
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
1596), su sobrino y heredero John Drake
publicaría The World Encompassed, esto es, la
descripción completa y circunstanciada de la
afamada cincunnavegación de 1577-80, en el
en
que naturalmente se incluiría la información
sobre la derivación al sur del estrecho de
Magallanes.
publicación, provechosa
Esta
el estudio histórico del
viaje
recería de mayor relevancia
del
para
corsario,
en su
época
ca
que para los contemporáneos y para la poste
ridad quedaría resuelto el misterio de la con
Incógnita.
3.- La
separada
cartografía surgida
tral de Francis Drake
el
En
en
región fueguina,
ya
de la Terra Australis
de la derivación
aus
derivada del
mentación informativa
de
lo expuesto
a la
viaje de Drake, docu
especializada
cuya abun
estrecho de Magallanes y conformaría todo un
aporte de valor para la historia de la evolución
Región Magallánica.
primera pieza conocida es el
mapa construido personalmente por Drake
que tenía al parecer un especial talento como
dibujante y pintor- y que le fue obsequiado a
fa Reina Isabel a poco del arribo de aquél en
de la
La
-
1580, documento que fue tan apreciado por la
soberana que lo hizo colgar en una galería
inmediata a su cámara privada del palacio de
mapas del
mundo entonces conocido. Este valioso mapa
se perdería un siglo
después en el incendio
que destruiría la mansión real. Allí estuvo,
entretanto, a la vista de cuantos accedían a la
cámara regia
la
a otros
como una
capacidad
importantes
prueba
manifiesta de
náutica y descubridora de los
marinos ingleses de la época isabelina.
pieza original, bellamente
coloreada, sirvió con seguridad, de modelo para
otras
varias copias manuscritas que se
Esta
de
ejecución
una
IV de Francia.
que medió entre la
piezas, hacia 1582-83,
mapa impreso sobre el
tiempo
otra
y
conoció el primer
se
Es la carta elaborada por Nicola
Este mapa
en Amberes.
viaje de Drake.
Sype y publicado
denominado La Herdike (Heroike) Enlreprinse
van
faicl par
le
seigneur Draeck, que
el Museo Británico, muestra
rematando la tierra continental
conserva
se
a
en
Sudamérica
forma
en
re
Giganlum),
guar
necida al meridión por un conjunto más bien
escaso de islas entre las que se muestra
la
=
con indicación de la ruta seguida
por las naves del corsario. Importa destacar
que el mapa lleva al pie la leyenda Carte veuee
le diet
corige par
et
te en
contemporánea. Esta producción manuscrita e
impresa quedaría como la evidencia más nítida
y precisa sobre la realidad avistada al sur del
Whitehall, junto
largo tiempo.
primer lugar
Navarra, futuro Enrique
Seigneur drack,
ración.
a
(Fig. 1)
Corriendo
conocieran
se
muestras
trata.
der
del
Se
a
alusión
la intervención que cupo al navegan
la inspiración y supervisión de la elabo
precisa
dancia relativa no deja de sorprender, habida
cuenta de la paupérrima información escrita
cartográfica
en
Flizabeth,
1578.
contexto
y que, salvo una,
del mapa
confeccionado hacia 1583 y que fuera donado
de
por Drake a Edmund Grindel, arzobispo
hacia
constmido
de
otro
Canterbury, y luego
1585 para ser obsequiado al rey Enrique de
Se trata
dondeada (Tetra Ginanlin
hasta ahora ha habido varias referencias
cartografía
se
hace ya
En el
el lado oriental y austral de la Tierra del Fue
go, acontecido, bien se sabe, en 1616, con el
definitivamente
perdido
han
cono
cido y archidivulgado como era ya el viaje
descubridor del holandés Willem Schouten por
tinuidad meridional de la
posteriormente
contruyeron
los
1586-87,
es
simultaneaidad
cartográficas
sobre el
posible
que
otras nuevas
viaje
de que
se
Dos de ellas debieron conesponel diario
Fletcher divulgado por esa época.
croquis que acompañaban
capellán
trata
en
de dos
dibujos
de similar y burdo
trazado, posiblemente copias deficientes de
bocetos elaborados por Drake durante el viaje,
que muestran la parte meridional de
Sudamérica, desde el río de la Plata al sur, y
y
en
el que el
remate
archipielágico
se
presenta
Terra
clarísimo, afirmado por la leyenda
Australis bene
la
cartografía
parte austral
cognita,
de la
como
cognita, (Fig. 2).
en
época
tierra
irónica referencia
a
presentaba a la
incógnita o nundum
que
Más interesante, ilustrativa
y va
liosa es, por cierto, otra carta manuscrita de
ese tiempo,
que ha logrado conservarse hasta
el presente y que de acuerdo con los estudios
especializados
parece haberse basado igualmen
el mapa original de 1580 donado
reina Isabel. Se trata del conocido como
te
en
Drake-Mellon, encontrado
en
a
la
Mapa
1970 y que
se
1-1
MATEO MARTINIC
"\,
■:
\:¿&4 I
2Í? i Oí
<:
i
"*
.
S-"éS*
N
-
h
*a..
•*.
>»*
.
'
v
i
.
v«*
j¿'
I
;
)
I
¡
¡
i Si??*
Í!
;
v
i
";: ?
::
;
t
';:
.
*.
■;
•
-
-
:
.
_.S3L*
15
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
IVwCxxV v>í/t^^.
m\\Sc^V*V
\ V\V\^X
/*V
'
\
X*^
jC /jX 7r^3. ^W\
SsfSitY. X/3?~J\ s\*¡
,JJ^
jv
-.
/v /SelȒ?fi /rTOMSAW A
jKjs@y&fnT
n^~rz"4
•
r^ ^T
j~_
M LlN
i
—
S^^»«í» "i
•
—
°
/B'-^r7Sí:5=
'TTStT 3SrO%
l&s&\*L2&x^\
¿ste^i!*-^*^
"*V
/
T"*H r/,J,
^Fn 2G^
i
'«2Ü
"1*
—
JA
£ V i
t
Hh a ovil n i a_Yv
ü_
r~
r\
\
0
—
bf¡%
'-r
.
#1
■SE*1 v*nN i
¿1 "^aaKaX*Í}í<Í-^~v~
,
V
^
0
Vr^&*t»&?C^cr\A Vv"
\¡C
\fi
L
JijE
1 1»^ wh4
\__3i—r
\ \
: ti a
¿
—■*
t
—
Br
t
-■
—
33el
c
V
ir»
v
*4
i
!
^F^SC^-S^. ,/)
~*í
—
^ÍL
;ijS
líSs-sa)'^--^0
ra
,
4 v-V\> \
;iW\/\,
\£ S\ \ \ L^-í:
l
/\
íztt^&SX/ A #
íbs'/v/ "1¿\ /
\sS^\^M-Tr^iísyvvK
w
■
¿/
X^x^xS tB^StoX
^JK/
Figura
4. Medallón de
plata grabado
*■
¡jgjy\\,v¿n
por Michael Mercator 1589 que
el Yale Center for British Art, Paul
Mellon Collection (Fig. 3).
conserva en
En esta
parte
redondeado
un
pieza, Sudamérica, cuya
extrema austral se
Chili,
el nombre de
como
presenta
lago fueguino,
íntegra bajo
el término continental
el mapa de
antemural de islas
van
significativo
Sype,
del
es
con
archipié
donde destaca al final muy
notoria la isla Elizabetha, sobre la que campea
bandera
inglesa
y hasta la que alcanza el
punteado que identifica el trayecto realizado
por la Golden Hind.
una
más, como para reafirmar un
explícito sobre el descubrimiento
Es
dibujo
así de
de la insularidad
fueguina,
inmediatamente
del mismo hay una cartela donde se ha
inscrito en latín la leyenda Cum omnes fere
debajo
hanc
partem australem
pro
certo
serianl
continente
ínsulas
w%¿s^
esse
esse
pulen!
earua
australissiman EI.IZABETHAM diclam esse a
Francisco Draco ciusde inbenlore.
(Como to
dos saben esta parte austral del continente tie
ne muchas islas
y la más austral de ellas fue
llamada ELIZABETH por Francisco Drake su
muestra
en
punteado
el viaje de F. Drake.
descubridor).
No cabe la
autor
del mapa tenía
sobre cl
minado
duda
que el
convicción absoluta
hallazgo geográfico
que había deter
la insularidad
alguna
puede hacerse a
Sype, es lo redu
la
fueguina.
este
menor
una
mapa,
advertencia
Si
como
de
crítica
al de
van
e
insignificante que se presenta el archi
piélago fueguino, considerando su realidad.
cido
Por eso
expresión geográfica
en
el
siguiente mapa
es
más
aproximada
que del mismo
en
se
consideración,
la
hace
el de
América labrado por Philip Galle, e incluido
en la obra De Orbe Novo editada en París en
1 587 por Richard Hakluyt. No sólo el
archipié
lago magallánico adquiere proporciones,
sino
que además el continente asume una forma
terminal aguzada mucho más
aproximada a su
verdadera conformación que la
en
presentada
las anteriores cartas. En este
mapa cone
leyenda al sudoeste del archipiélago
que expresa taxativamente
Elizabeta 1579 ab
Ang/is.
Ins.
una
fueguino
Reginae
16
MATEO MARTINIC
Eigura 5.
Sector del
Drake Broadside
Map
En el a 1589 se publicaron tres
mapas, dos impresos sobre papel y un tercero
grabado en la medalla conmemorativa que se
ha mencionado
precedentemente.
Los dos
mano
del experto
primeros
cartógrafo
se
deben
a
la
holandés Jodocus
Hondius: uno, Typus Orbis Terrarvm, que como
en el de Galle, al que se le asemeja en las
formas continentales, muestra el archipiélago
austral y en el mismo se destaca In. Regine
Elizab.; y otro,
en
que
se
medallón
Ameticae Novissima
descriptio,
repiten las características descritas.
Él mapamundi contenido en el
fue grabado por Michael Mercator,
miembro de la afamada familia vinculada al
arte cartográfico y en el mismo se muestran
los continentes según se los conocía entonces
y
se
que
Cortesía The British
puntea el recorrido cincunnavegatorio de
muestra
Library
el viaje de Francis Drake.
Drake que, en lo que interesa,
incluye la parte
conespondiente a su derivación austral y la
consabida leyenda In R Elizabeta 1579 ab
Anglis, (Fig. 4).
El
siguiente mapa
descubrimiento de que
Jodocus Hondius,
blemente
en
el
se
planisferio
Amsterdam
recogió
que
trata
fue
otro
el
de
editado proba
1595 y conocido
como Drake Broadside
Map, y que se guarda
en The British
Library. Como en los preceden
temente descritos las formas
geográficas y el
trayecto navegatorio
son
en
claramente expresa
dos, agregándose la mención Elizabetha junto
a
la
notoria
isla
fueguino (Fig. 5).
terminal
del
El duodécimo
mapa
y el ultimo conocido para la serie
desa es el planisferio construido
archipiélago
a
considerar
anglo-holanen
1599 por
17
MATEO MARTINIC
42
£
&
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
PATAGONIA
Cabo
Vírgenes
Estrecho de
Magallanes
S9
o o
o
■s
ta
LU
Cabo de Hornos
Oct. 24-28
*s
Figura
7. Reconstrucción de la
o
dr
*K
probable trayectoria
de Francis Drake
según Raymond
Aker
19
DRAKE Y EL DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
Edward
Wright
incluido
e
en
edición de
la
1599-1600 de Principal Navigalions de Richard
Hakluyt. En éste las formas continentales están
algo burdamente dibujadas y en lo que res
pecta
Sudamérica,
redondeada,
a
terminal
seguido
retorna
esta
a
la forma
sin mención del
Drake, pero
trayecto
con la indicación de
el continente, aquí bajo
que
el nombre de Queens Hand.
Todavía podemos agregar otras
la isla
por
tres piezas de la
cartografía universal que re
sultan interesantes para el efecto.
Una es el
planisferio
editó
del
tal
y
Universa/le descrittione di tutto il
obra de
1597,
en
Fuego
Giuseppe
el que
en
isla,
como una
Rosaccio y que se
muestra la Tierra
se
con otra menor
(¿de los Estados?) separada por
bajo
la misma el Novum Marc
expresión
un
orien
época,
de
una
y que,
verdaderamente, resulta suge
permite colegir
cuánto de la
meridional estaba en el
conocimiento de los cosmógrafos de entonces.
Dos ejemplares de este mapa se conservan
rente
por
realidad
cuanto
geográfica
respectivamente
Chicago
y
la
en
Newberry Library
Houghton Library, Harvard.
otras dos corresponden a dos
The
en
Las
de
mapas del mismo género que datan de 1602:
Orbis Terrae Novissima Descriptio y Nova
Universi Orbis Descriptio, debidas a Jodocus
Hondius y Jean Le Clec, y que se conservan
en The British
Library, Londres. Ambas evi
dentemente derivan su información geográfica
expedición
austral de la
por tanto,
un
archipiélago,
De
Años
publicaría
de Francis Drake y,
la Tierra del
Fuego
después,
su
afamada
X
que
se conserva en
de Cartas y Planos de la Biblioteca Na
cional de París). Pues bien, en este mapa figuran al sur
del cabo de Hornos unas islas, junto a las cuales corre la
latina Existente solé in
nulla occupanl, ul ap:
Capricornio
pulsae
illuc
ínsulas
naves
noxfere
retulere ductu
Francisci Draci (Estando el sol en el Capricornio estas islas
casi no tienen noche: lo afirma Francisco Drake que llegó
hasta allá
la
con sus
interpretamos
posteridad
Pues
naves).
Esla
expresión gráfica
como una suerte
inmediata
por el corsario
en
su
bien,
en
ella
se
término continental de América
muestra el
con
el
estre
cho de Magallanes y allende el mismo una
grande y compacta isla de Tierra del Fuego
(que no se identifica como tal), guarnecida
hacia el oeste
por algunas contadas islas
menores, presentación geográfica que defiere
en forma, tamaño
y rumbos
descritas anteriormente.
aquella
separada
de
mar
pado
la
de
una
gran tierra austral por
amplio, junto
al cual
se
brazo
un
ha
estam
leyenda Canal descubierto por nugnos
piloto portuges de franco drache.
de una aseve
de
que
primera evidencia
fuente informativa distinta a la anterior
Se
ración
una
de las
Lo más notable del mapa es que
gran isla fueguina está visiblemente
muy
de Silua
geográficos
trata ciertamente
soiprendente,
mente conocida (la
inglesa), esto es, se trata
del propio Ñuño da Silva, quien rectificando,
o precisando mejor, sus dichos expuestos ante
el virrey de México en 1579 habría reivindica
do para sí el descubrimiento de la insularidad
fueguina, informando al cartógrafo sobre ello.
Notable, además, porque
mación
tancia
aleja cualquier
geográfica
con tan
rotunda afir
duda sobre la circuns
que interesa
(Fig. 6).
Este interesante mapa que da al
descubrimiento de Drake una nueva perspec
consideración,
Esta, que sin exagerar puede ser
calificada como abundancia cartográfica, desa
rrollada entre 1580 y 1602 hubo de ser cono
1646,
Departamento
leyenda
Marítimo de 1591-
el Padre Alonso de Ovalle
Tabvla Geographica Regni Chile
manera
en
Sur dibu
mapa de América del
e incluido en su Atlas
deliberada, alterando
como
donde destaca notoriamente
(versión dedicada al Papa Inocencio
el
un
jado sobre pergamino
citado por W.
Biblioteca del
Estado de Prusia, información dada a conocer
12
por F.C. Wieder en 1924.
nuiestran a
la ínsula Regina Elizabeta.n
11
Se trata de
estrecho
Australe, clara
noción informativa que po
dría haber estado originada, si no en el viaje
de Drake, en otra desconocida expedición de
la
pieza singular e interesante construida por
el prestigioso cartógrafo español Joan Martínez.
una
remata
en
Mondo,
el orden cronológico seguido en la presenta
ción de los mapas, hemos dejado para el final
acerca
y literaria
de reconocimiento de la
de la alta latitud alcanzada
derivación austral.
tiva para
Ruge
su
como
cida de
depositado
cualquier
cializado
a
lo
permitir formar
del hecho
fueguina,
manera
largo
una
geográfico
y
con
de
en
es
la
por un público espe
dicho lapso y pudo
opinión favorable
informado:
ella la existencia
acerca
la insularidad
de_j¿rLj>egun-
20
MATEO MARTINIC
pudo
que, estimamos,
nar
definitivamente
suficiente para ga
convicción entre los
ser
una
cartógrafos
y navegantes de fines del siglo XVI
y los comienzos del XVII, pero, al parecer, no
habría ocurrido así.
duda persiste, sin embargo,
pues se hace difícil creer que tanta evidencia
hubiera sido desechada.
De tal manera, en
es
en
el ambiente que
tonces,
posible que
interesa esta información se conservara y fuera
La
tenida
cuenta
en
fue necesario
nueva
cuando, corrido el tiempo,
adoptar una decisión sobre una
importante expedición de búsqueda
e
Nos referimos a la empresa organiza
da por el rico comerciante holandés Isaac Le
Maire en 1615 con el objeto de encontrar un
austral.
paso de mar por el sur de América que permi
tiera romper el monopolio que sobre el uso
del estrecho de Magallanes ejercía la Compa
ñía
Magallánica
Bajos.
los navegantes de los
entre
Países
La
determinación
en
el rumbo
adoptado
por Guillermo Schouten con su nave
exploradora Eendracht, que le condujo a des
le hizo
por el
cruzar
avistando
su
sur
extremo
llamar la atención del
pudo
Le Maire y luego
la Tierra del Fuego
primero el estrecho de
cubrir
ser tan
certero
terminal, no dejan de
historiador, pues ¿cómo
y seguro tal rumbo para
que resultó ser la más meridional de cuantas
pudieron observar los navegantes.
En efecto, se ha visto antes
piloto
que el
Silva declaró que
Ñuño da
57°,
habían alcanzado los
españoles
en
1582,
depuso posteriormente
dato que merece valorarse por cuanto
se halló siempre en íntima comu
nicación con el capitán y estuvo así en situa
el declarante
ción de
enterarse
de todas
la
las
cartográficas? ¿Qué
admitir
tan
otra
curioso hecho
modo
explicación podría
como no sea
aquéllos
poseerse por parte de
ción sobre la vía de
enterados
una
la de
informa
mar libre que únicamente
del viaje de Drake?
Tal vez el misterio que envuelve
a la respuesta nunca pueda ser satisfactoria
mente dilucidado, pero no por ello la posibi
podía proceder
lidad que
4.-
se
barrunta
Alcance
Drake.
podrá
geográfico
Las distintas
ser
desestimada.
de la derivación de
interpretaciones.
Las diversas fuentes que informan
sobre la derivación austral de la Golden Hind1
luego de su separación de la Elizaheth, concuerdan en que la misma alcanzó una elevada
latitud al
tocar tiena
en
una
isla desconocida
las noticias de
pri
capellán Fletcher, a su vez, en
su diario consignaría como latitud alcanzada la
de 55e y algunos minutos, en tanto que el
mismo John Drake, años más tarde, al publicar
The World Encompassed, tornaría a afirmar el
dato de los 56e como el correspondiente a la
posición extrema alcanzada.
fuente.
mera
El
Pues
bien,
más meridional del
sabe que la tierra
archipiélago fueguino, la
se
isla Hornos, está situada (su cabo terminal) en
los 559 58' 40" Sur, lo que conduce a suponer
con fundamento que los ingleses habrían lle
gado
hasta la isla más distante del grupo insu
más allá de la cual, hacia el meridión.
el levante y el poniente se extiende inmenso
lar
austral,
el
mar
contaban para ello.
Que tal debió
de
algún
ante
56°,
los
realidad que esperaban encontrar por
evidencias documentales diversas, entre ellas
estuvieran de
que John
las autoridades de Lima (1587), señalando que
en su derivación austral habían llegado hasta
prendente aproximación
capitán
se
Drake, sobrino del corsario y compañero del
mismo en el viaje, que fuera capturado por los
precisamente y con increíble facilidad con
el objetivo geográfico buscado? ¿Cómo expli
carlo, a menos que el factor organizador y el
dar
tanto
en
tud
abierto, habiendo calculado
correspondiente,
medios
con
sor
para la época la lati
habida cuenta de los
rudimentarios
o
limitados
fluye
ser
te, además, de la constancia
con
que
claramen
dejada por Fletcher,
quien bajó a tierra en el lugar acompañado
por un paje, se internó por la isla y comprobó
que la misma se extendía «tres partes de grado
más al
sur que
cualquiera de las islas vecinas»,
observación que es coincidente con el relato
del propio Drake (The World
Encompassed),
también bajó a la isla y caminó
decididamente hacia la costa sur, alcanzando
hasta el farallón terminal y encontrándose allí
quien
a su vez
extendió hacia el vacío cuanto pudo su
cuerpo
fin de reclamar para sí el privilegio de haber
a
sur que hombre
alguno hasta
entonces, contemplando de paso el mar que
se extendía abierto y donde se
juntaban los
alcanzado más al
océanos. El mismo Drake informaría sobre lo
acontecido
poder
a
naval
Sir John
inglés
Hawkins,
durante la
constructor del
época isabelina.
21
DRAKE Y El. DESCUBRIMIENTO DE LA INSULARIDAD
y
de
acerca
certidumbre sobre el
su
hallazgo
austral, hecho del que daría cuenta más tarde
el hijo de Hawkins, Richard, en 1622.
debiera, pues,
No
caber
duda
del sitio al que habrían arribado Drake
y compañeros en su derivación, teniéndolo
como la posición geográfica meridional más
acerca
extrema
posible
bablemente
piélago
de alcanzar, esto es, muy pro
isla Hornos del archi
la actual
terminal de América.
posición alcanzada,
1.a
sin embar
go, ha sido materia de discusión en el tiempo,
conociéndose distintas interpretaciones para la
misma.
to
El primero que se ocupó del asun
fue el historiador naval inglés capitán James
Burney, en los comienzos del siglo XIX, quien
concluyó que Drake había descubierto el cabo
Hornos, pero sus argumentos no fueron
suficientemente convincentes, por lo que en
tal respecto la duda permaneció. Más sólido
de
alegato
fue el
idéntico sentido hecho por
Sir Julián Corbelt en 1898 en su obra Drake
en
and the Tudor Navy, lo que le valió una acep
tación general que se mantuvo vigente hasta
que
en
1926 el historiador Henry R. Wagner
replanteó
bre el
el
tema
viaje del
en
su
acabado estudio
corsario alrededor del
so
mundo,
afirmando que la isla alcanzada por éste había
sido la Henderson, ubicada algo al noroeste
de la isla Hornos, predicamento que a su tiem
po también aceptaría el prestigioso historiador
naval
Samuel
E.
Morison
en
European Discovery of America
su
.
Voyages (1974).
Pero recientemente
estudioso de Drake
como
es
libro
The
The Southern
un
Raymond Aker,
cente
argumentación, fruto en parte de su co
personal del área geográfica de que
nocimiento
se
trata,
otra vez
alegación
el
En
que ha puesto de actualidad
los historiadores de lemas
tema entre
Cfr. el artículo de Andrew Pierce, -Drake Historians lay
claim to Cape Horn- ( The Sunday Times, edición del 20 de
marzo de
En él se da cuenta de una disputa
1995).
académica que en dicho respecto involucra a The National
Maritime Historical Society de Nueva York y The Drake
Navigators
California, por una parte, y por otra
Horners Foundation, con el arbitraje de The
Royal Geographical Society de Londres y Tlie National
Geographical Society de Nueva York.
la Dutch
Guild de
Cape
argumentación
Aker utiliza
citas
gran sentido lógico las
interpreta
de los protagonistas (Silva, Fletcher y los dos
Drake),
lo tocante
en
a su
aplicación
referencial
inclusive demostrando
geográfico,
al territorio
Drake al zarpar de la isla (ElizabethHornos), fue el primero en ciuzar frente a ella
de este a oeste para ir a recalar al cabo de
horas de navegación en las próximas islas
cómo
situadas hacia el
Ildefonso,
noroeste
algo lejos
de la costa, que identifica claramente con la
«isla pequeña y baja» (da Silva), en donde se
de
aprovisionó
pájaros
y lobos marinos que
tiempo inmemorial, antes
de proseguir ya sin tropiezos su viaje hacia el
norte por la costa occidental chilena, (Fig. 7).
allí abundan desde
Cabe finalmente
la
y
hipótesis
elaborada
una
mención
puesta
mó que
su
ex
libro Cabo de Hornos, quien afir
la casi mítica isla Elizabeth habría
en su
desaparecido
que
a
1939 por el escritor
en
antiguo capitán velero Félix Riesenberg,
hundida
en
el océano Pacífico y
ubicación coincidiría
con
la correspon
Burnham, hacia el sudoeste de
del Fuego. Pero, ha quedado demos
diente al banco
la Tierra
trado que la suya fue una afirmación basada
en
apreciaciones erróneas de las informacio
nes
contenidas en la declaración de Ñuño da
en la edición de 1600 de The Famous
Silva y
Voyage, de Richard I lakluyt, y desde hace lar
go tiempo ha sido totalmente desestimada.
5.- Una controversia que debiera terminar.
Considerando las opiniones más
es, se identifique a la isla
sostenidas,
Herderson
esto
o a
la de Hornos
como
la tiena más
meridional alcanzada por Drake y a la que
nombrara Elizabeth, debe convenirse que en
cualquiera
que más
cualquier
de las dos ubicaciones (no obstante
la segunda que en la primera)
en
observador tiene
dad real de
tuvieron
13
su
con
e
acucioso
el norteamerica
ha vuelto a sostener la
del
primacía
navegante por el hallazgo del
cabo de Hornos, con variada, sólida y convin
no
marítimos. "5
los
enorme, sin
contemplar
ante
sí la
posibili
día claro (como la
hacia el sur un mar
en
ingleses)
término, expresión indudable
de
la unión oceánica que allí se verifica.
De esta manera, sin que
juzgue
mos como secundario el
aspecto de si Drake
llegó
o
no
efectivamente al cabo terminal de
en latitud entre los dos
América, la distancia
puntos
geográficos
de que
se
(aproximadamente 20') y por
trata es
lo
mínima
tanto casi irre-
22
MATEO MARTINIC
levante frente al hecho geográfico más tras
cendente como es el de la unión oceánica y
por
hace
y
de
evidente,
sus
en
fueguina
la insularidad
tanto
que allí
se
y que tal debió parecer a Drake
hombres. Las inequívocas instrucciones
navegación impartidas
cuanto
remontar
a
obstáculos
a
Cavendish
en
latitud si
acceder al
para
en
1586
hallaba
estrecho
de
Magallanes y la afirmación ulterior de Ñuño da
Silva, bien expresada en el mapa de Joan
Martínez, no debieran dejar lugar a duda algu
cho de
MARTINIC
Así
Francis
Drake,
concluimos, procede
sin retaceos, cuando
descufjrimiento de la insularidad
memorable
1578.14
su
derivación
acreditar
el
menos
fueguina
Buenos Aires.
SHIRLEY,
autor
con
el
co
WALLIS,
Punta Arenas.
Museo
Naval,
que posee el
Instituto Histórico de
...
nuestra
propia reticencia,
trabajos anteriores (Martinic 1977 y 1992),
alcance e importancia geográficos de la deriva
en
acerca del
ción austral del navegante
inglés.
Serie Cs. Hu
Voyage Around
the World ils aims
and achievements, San Francisco.
HELEN 1984. The Cartography of
Voyage.
En Norman
J.
W.
Circunnavigation of the Earth,
Berkeley, University of California
WIEDER,
F.C.
1924. De Reís
Cor des
door
Magalhanes
en
MATEO 1977. Historia del estre
modo rectificamos
De este
manifestada
Patagonia,
manas, vol. 24, Punta Arenas.
HENRY L. 1926. Sir Francis Drake 's
Press.
Marina, Madrid.
B.,
de Drake al Pacífi
1.580: Essays Commemorating the
Quadricentennial of Drake's
IX,
NAVARRETE, 1946 Colección
de Documentos de
'•'
vol.
Holland,
1570-1577". Anales del Institu
Drake's
Primer testimo
Patagonia,
New
Thrower (ed). Sir Francis Drake
and the Famous Voyage 1577-
fundaciones hispánicas del Estre
cho de Magallanes. Anales del Ins
MARTINIC
expedición
la
nio de Tomé I lernández sobre las
tituto de la
Mapping of
Printed World
STEWART, HAMISH L. 1996. -Objetivos estraté
gicos y fuentes de información de
1995-1996.
BARROS, JOSÉ MIGUEL 1978.
The
Early
London.
WAGNER,
correspondencia epistolar
1993.
the World.
to de la
AKER, RAYMOND (inédito) Francis Drake and
the discovery of Cape Horn (draft)
FERNANDEZ DE
RODNEY W.
Maps, 1472-1700,
en
FUENTES DE CONSULTA
y
de
Voyages. New York.
RIESENBERG, FÉLIX 1950. Cabo de Hornos,
setiembre de
de
Historia de la Re
Magallanes, Santiago.
MORISON, SAMUEL E. 1974. The European
Discovery of America. Southern
gión
na.
a
Magallanes, Santiago.
B., MATEO 1992.
van
Mahtt
de
Straat
naar
en
de
van
¿uid-Amerika
Japan 1598-1600.
Nijhoff, 'S-Gravenhague.
Martinus

Documentos relacionados