El susto de las empresas

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FÚTBOL…Y ALGO MÁS
El susto de las empresas
ólo faltaban cinco minutos para
que terminara el partido entre las
selecciones de fútbol de Argentina
y Uruguay, en el Estadio Centenario de
Montevideo, cuando Mario Bolatti convirtió un inesperado gol gracias a un
tiro de Verón que rebotó en un defensor local. Seis minutos antes había dejado el banco de suplentes para entrar a la
cancha por orden de un desconcertado
Maradona que para ese entonces sabía
que otro traspiés, luego de meses de una
deslucida campaña, significaría su despido como líder del equipo, aún cuando
contaba con la protección de Julio
Grondona, presidente de la Asociación
del Fútbol Argentino (AFA).
Realmente, ¿importa cómo se hizo el gol?
En este caso nada mejor que recordar
que Napoleón Bonaparte decía que quería generales que supieran mucho de
estrategia, pero si tenían suerte en las
batallas eso era mucho mejor. Resultó
suficiente un triunfo de uno a cero para
que la Argentina se clasificara para
jugar en el Mundial de Fútbol de
Sudáfrica 2010. Fue un héroe para
muchos fanáticos del fútbol, pero no
sabía que se convertiría en un ídolo
para los directivos de varias empresas
que tienen su sede en Buenos Aires.
S
64 // competencia
Si Argentina no se clasificaba, Adidas,
Claro, Coca- Cola, Italcred, Quilmes,
YPF, Standard Bank y Volkswagen
hubieran perdido varios millones de
pesos y, posiblemente, más de uno de
ellos tendría que haber salido a buscar
un nuevo trabajo. Esas firmas son los
principales sponsors que consiguió la
AFA para el negocio del año que viene.
Si el endeble equipo de Diego
Maradona hubiera sido eliminado, las
compañías tendrían que haber pagado
el 25 por ciento de sus contratos con
esa entidad sin tener ninguna posibilidad de generar ingresos por valores
similares. Además, los patrocinantes
tendrían que haber rediseñado sus
estrategias publicitarias para 2010, centradas básicamente en el fútbol como
eje temático principal, con el costo yel
tiempo que eso implica. Como una bola
de nieve el efecto hubiera afectado a
otras firmas que ofician de proveedores,
como Aerolíneas Argentinas, Powerade,
Dasani, Noblex y Fibertel. Hay quienes
aseguran que la pérdida hubiera sido
entre 4 y 7 millones de pesos para cada
empresa sponsor, y bastante menos
para las otras.
Pero hay más. En la medida que se
acerque la fecha del campeonato
muchas empresas de publicidad van a
presionar para que sus clientes pongan
unas fichas en el torneo. Es decir, todo
un mundillo se mueve alrededor de la
clasificación del equipo argentino de
fútbol. Un fútbol que hace tiempo dejó
de ser deporte para convertirse en una
actividad promotora de negocios.
Grondona, el zar desde hace 30 años
del fútbol argentino, conoce muy bien
el negocio como lo acaba de demostrar
con la rescisión del contrato de transmisión del fútbol argentino por TV, y el
inmediato acuerdo con el gobierno para
que la televisión quede en la órbita oficial. Compra y venta de jugadores,
campañas de publicidad, leyendas en
las camisetas de los jugadores, diseño
de nueva ropa y calzado deportivas son
operaciones paralelas al Mundial 2010.