PROSIGO AL BLANCO…PERO ¿CUÁL BLANCO? Extendiéndome
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PROSIGO AL BLANCO…PERO ¿CUÁL BLANCO? Extendiéndome
PROSIGO AL BLANCO…PERO ¿CUÁL BLANCO? Extendiéndome a lo que esta adelante, prosigo a la meta… Filipenses 3 En el contexto de nuestro país, podemos entender con claridad lo que es estar sin empleo, y todo lo que esto conlleva. Podemos ver con facilidad como cientos de personas ven pasar los días, al igual que se pueden ver pasar los carros en una avenida. Muchos de nuestros jóvenes han dejado toda intención de estudiar, pues no ven oportunidades en el futuro. Esto ha hecho que la gente siga adelante día a día, vea llegar el sol en la mañana, vea el mismo sol llegar a su punto más alto al medio día, y luego verlo caer y llegar una noche más y así día a día. Bueno, por la gracia de Dios tener el alimento y a veces sin saber cómo- siempre llega. Muchas personas prosiguen al siguiente día, y luego al que viene después y así sucesivamente. Pero ¿hacia dónde van? Cuando el apóstol Pablo habló de proseguir, de extenderse hacia adelante, de continuar en la vida, él tenía claro el lugar donde quería llegar. El hablo de que se esforzaba continuamente por alcanzar algo que estaba adelante, y que aún estaba dispuesto a renunciar a otras cosas por alcanzar esa meta, ese sueño, esa visión. Él podía hablar de seguir en pos de un blanco, un objetivo, porque lo tenía claro, para él era ser hallado fiel en el llamado que Dios le había hecho a servir en el Reino de los cielos, Alcanzar dicha meta, le representaba ser galardonado, ser premiado y eso lo motivaba aún más. Hoy se habla en forma enfática de la importancia que tiene el visionar, el establecer metas, y sí, en realidad esto tiene un efecto especial en nuestras vidas, por lo que será el tema de esta semana. Debemos entonces considerar se estamos prosiguiendo, y muy seguramente usted lo está haciendo, está avanzando y lo está siguiendo con su vida. Si no fuera así de seguro no estaría leyendo este devocional, pero también debemos considerar si estamos avanzando con un blanco claro, con un objetivo determinado, si podemos ver lo que queremos alcanzar. Esta visión es tal vez de las pocas cosas que nos unen al futuro. Preguntas para Reflexión: ¿Tengo claro hacia donde me dirigen mis pasos? ¿Puedo ver con claridad quien seré en 2, 5 o 10 años? La grandeza de un hombre no se mide por la huella que dejan sus pisadas, si no por el horizonte que contemplan sus ojos. Señor gracias porque nos permites avanzar en la vida, pero permítenos conocer hacia donde nos lleva ese avance
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