Los momentos extraordinarios (Benka Miller)
Transcripción
Los momentos extraordinarios (Benka Miller)
Los momentos extraordinarios Benka Miller Ganador del I Concurso de Relatos de Timeria Biblioteca de Timeria Durante la sesión de piano y guitarra nuestras miradas se entrecruzaban, rebasando las partituras. Así nos quedamos como hipnotizados en el estribillo; a punto de potenciar el entusiasmo necesario para procurar la agonía de la canción. Después él tomó mis manos para dirigirlas hacia el público, que a nuestros pies parecía aplaudir anodino, aunque deliberadamente, como si hubiéramos ejercido de sacerdotes en un sacrificio ritual. Fue entonces cuando la directora del espectáculo se nos apareció como un fantasma para preguntar: - ¡Eh! – casi juraría que le acaricia la cara mientras se lo dice, aunque en medio de todo el ruido y luces no podría estar segura - ¿Vendrás conmigo a algún bar? . Me habría encantado tumbarla allí mismo y gritarle que no, que ella jamás podría hacerle elevarse como yo lo había logrado sobre aquel escenario, pero estoy segura de que él se comportará como un caballero y se excusará para volver a dedicarme sus ojos. Me tomó de la mano y me empujó hacia fuera. Después de cruzar la calle entramos en una cafetería que parecía haber sido creada por mi inconsciente. Al entrar sentí palpitar su mano porque todo estaba repleto de gente, pero en esta ocasión nadie estaría examinándonos. Nos sentamos en una mesa desolada al fondo donde ni siquiera los focos alcanzaban a alumbrar miradas indiscretas. No sé si quieres hacerme sentir como en un sueño o si me has drogado, pero sé que soy adicta a estos momentos extraordinarios.