Heridas en La 30 de Octubre
Transcripción
Heridas en La 30 de Octubre
Heridas en La 30 de Octubre Desde que el kirchnerismo llegó al poder, cada fuerza con vocación de sostenerse en el gobierno se inspiró, a grandes rasgos, en La Cámpora: un conjunto de dirigentes jóvenes, con militancia y capaces de movilizar estructuras que son determinantes en los actos pero también en las internas. José Manuel de la Sota desarrolló ese concepto con La Militante, una agrupación liderada por Franco Miranda pero, al igual que La Cámpora, altamente alineada con un líder. En el caso de agrupación liderada por Máximo se trató primero de Néstor Kirchner y después de Cristina y en el de La Militante hay un alineamiento directo con De la Sota. Esas organizaciones tienen una característica adicional: con el correr de los años van adquiriendo vida propia aunque siempre se van alimentando gracias al poder del Estado. Cargos, contratos, estructura. En el radicalismo riocuartense hay un ejemplo equiparable aunque con sellos distintivos propios. Se trata de La 30 de Octubre, una agrupación de jóvenes dirigentes que comenzaron a militar en la Universidad dentro de la Franja Morada. Quienes hoy son sus líderes fueron la última camada que tuvo triunfos resonantes e indiscutibles en la UNRC; después, la Franja Morada se fue apagando hasta la opacidad que es actualmente. La 30 de Octubre está conformada por unos 100 miembros permanentes; 8 de ellos integran la mesa de conducción. Allí están Carlos Ordóñez, precandidato a intendente, Martín Carranza, Gonzalo Parodi, Luciano Albanesi, Yanina Moreno Zamanillo, Mauro Lorenzatti, entre otros. Hasta hace poco estaban también Guillermo Aón y Juan Pablo Casari. Esa agrupación creció de la mano de Juan Jure. El intendente les dio una enorme cantidad de puestos en el gobierno e, incluso, pagó costos políticos internos por esa decisión. Por supuesto que era una conveniencia mutua: mientras La 30 llegaba a puestos de poder, Jure se beneficiaba con el poder de movilización de esos dirigentes. La relación entre ellos se tensó, después de una serie de diferencias anteriores, con la conformación de las listas de candidatos a legisladores provinciales que compitieron el 5 de julio. Los jóvenes dirigentes le reprocharon a Jure no haber hecho nada por instalar a Lucas Castro, integrante de La 30, en un puesto expectable en la lista. En el puesto 11 apareció Rins y Castro quedó relegado al 21. Pero la crisis se agudizó ahora que Aón y Casari fueron eyectados de la Secretaría de Gobierno tras el affaire Antonio Frangie. Ellos fueron los responsables de recontratar a ese empleado que está siendo juzgado por venta de drogas. El último gesto de malestar de La 30 fue durante la asunción del nuevo secretario de Gobierno, Ignacio Fernández Sardina. Ninguno de ellos fue a la asunción. Además, aseguran que no está descartada su salida en masa de la gestión. Creen que Jure no tendría chances en la interna si ellos optaran por romper definitivamente la alianza. Jure prefiere no tensar más la cuerda. Cree que nada cambiará, que las relaciones se recompondrán y que la antigua alianza seguirá funcionando.