Carta de la asociación

Carta de la asociación
Niños del Río y de Enfants du Rio
La Carta es el texto que define la finalidad, el
modo de acción, los valores, el espíritu y la
identidad de la asociación Enfants du Rio y Niños
del Río.
Su vocación es servir como marco y como
referencia a todas las actividades actuales o futuras
de la asociación.
Cada miembro de la asociación se compromete a
hacer todo lo posible por respetarla.
I. Finalidad
La asociación busca ir al encuentro de los niños y jóvenes más desfavorecidos que
viven en la calle, quererlos, ser sensibles a su sufrimiento y ayudarlos.
La asociación busca solidarizarse con el niño y revelar su dignidad, belleza y valor a
sus propios ojos, los de su entorno y los de la sociedad.
II. Modo de acción y medios
Ir al encuentro de los niños y jóvenes…
Los miembros de la asociación vamos al encuentro de los niños en la calle, sin esperar
que ellos vengan a nosotros. Dialogando, escuchando, compartiendo actividades y
reflexionando juntos procuramos establecer y consolidar una relación fraterna de
amistad y confianza.
Buscamos que la relación establecida con el niño lo valorice y lo ayude a desarrollarse
como persona, a recuperar su autoestima y a sentirse un ser humano capaz y digno.
Buscamos que esta relación le permita adquirir la confianza y la fuerza necesarias para
sacar adelante sus propios proyectos.
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…acompañarlos …
Ayudamos a que el niño tome distancia con respecto a sí mismo y a que se proyecte
y sea capaz de elaborar un proyecto de vida que responda a sus aspiraciones. El niño
tiene la iniciativa de dicho proyecto y es el responsable y el motor del mismo. La
asociación lo acompaña durante el proceso que conduce a su realización.
Procuramos que este acompañamiento respete el ritmo del niño, sin forzar su
reinserción.
A través del acompañamiento, le brindamos apoyo a largo plazo en un proyecto de
vida que lo lleva a un mayor bienestar afectivo, familiar, social y material. Para ello,
nos apoyamos principalmente en sus propios recursos y en los que pueden ofrecerle
su familia y su comunidad.
…ser un intermediario entre sus familias y la sociedad
Nuestra labor es complementaria y se realiza de manera coordinada con las acciones
emprendidas por otras organizaciones, ya que somos un intermediario entre el niño,
su familia y las instituciones de reinserción social.
¿Qué resultados buscamos?
Los resultados de nuestra labor no se miden en el número de niños que se logra
reinsertar socialmente, sino a partir de la apertura y la autoestima generadas en
los niños y de los lazos que se crean entre ellos, sus familias y las instituciones que
representan a la sociedad.
¿Hacia qué desarrollo nos orientamos?
La asociación podrá, en respuesta a una necesidad concreta, crear y garantizar el
funcionamiento de estructuras de acogida complementarias que permitan revelar la
dignidad de los niños y jóvenes que viven en la calle.
III. Espíritu y valores
Compromiso y respeto
La asociación se compromete con los niños a largo plazo.
Pondrá su máximo empeño en no decepcionarlos ni herirlos.
Nunca abandonará a los niños a cuyo encuentro ha acudido.
Los miembros de la asociación harán todo lo posible por cumplir los compromisos
asumidos con los niños.
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Amistad
La amistad constituye la base de la relación que mantenemos con los niños. No se
trata de una relación entre benefactor y beneficiado, sino de un intercambio recíproco
y gratuito, de igual a igual, basado en la sinceridad.
Compasión
La compasión nos anima a acompañar a la persona desfavorecida en la soledad de su
pena hasta atrevernos a compartir su sufrimiento y estar en comunión de espíritu con
ella. La compasión es gratuita y da frutos, ya que acaba con la soledad y se convierte en
una prueba de amor y solidaridad con la persona que sufre y se siente indigna.
Esperanza y Perseverancia
Estamos seguros de que cada persona, sin importar su situación ni sus actos, tiene
derecho a un lugar en la sociedad y a un proyecto de vida y que ese proyecto es posible
y viable. Creemos que nadie es irrecuperable y que cada persona posee un valor único
e inestimable para el resto de la humanidad.
Ecumenismo
La asociación es cristiana ecuménica.
Nació por iniciativa un católico y de un protestante, como un proyecto sustentado
en la oración.
La asociación apoya las iniciativas espirituales de sus miembros y respeta la práctica
y la libertad religiosa de cada persona.
IV. Principios de funcionamiento
Gestión financiera
La asociación se compromete a mantener cuentas justas, transparentes y justificadas.
Las cuentas podrán ser presentadas en todo momento a los miembros de la asociación
que así lo soliciten.
La asociación aspira a mantener una independencia económica.
La búsqueda de fondos permite garantizar la estabilidad y continuidad de la
asociación, favoreciendo sistemas de donación regular como el padrinazgo.
Recursos humanos
Todos los miembros y todos los asalariados de la asociación se comprometen a
respetar los principios de esta Carta.
La asociación se apoya en compromisos de naturaleza complementaria:
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Fomenta el voluntariado en coherencia con los valores de amistad y
compasión de la asociación.
reconiza la contratación de personal con miras a estabilizar la actividad de
la asociación y contribuir con competencias complementarias para ahondar en
la labor emprendida.
La política salarial de la asociación es razonable y aspira a ser coherente con la de
las demás asociaciones presentes a nivel local y no ofrecer salarios superiores a los
correspondientes a puestos similares en dichas asociaciones.
Participación en la toma de decisiones
Considerados como responsables, los miembros de la asociación procurarán tener
en cuenta las ideas y opiniones de los niños que viven en la calle y hacer que participen
en la elaboración de reglas pedagógicas en las estructuras de acogida.
Comunicación y sensibilización que respetan la dignidad del niño
Los miembros de la asociación se comprometen a no difundir información personal
relativa a los niños fuera de la asociación, salvo si ello pone en peligro su vida o la de
otras personas.
La comunicación y la sensibilización son medios que ayudan a revelar la dignidad
del niño.
La asociación procurará que se produzca una evolución positiva en la visión que
tiene la sociedad de los niños que viven en la calle, tanto en los países desarrollados
como en aquellos en vías de desarrollo.
Pastoral
La asociación puede ofrecer cursos de catecismo, organizar momentos de oración
y celebrar las fiestas religiosas (cristianas) con aquellas personas que lo deseen,
respetando en todo momento su voluntad y libertad.
La asociación apoya las iniciativas de sus miembros en materia espiritual (momentos
de oración, celebración de fiestas religiosas, etc.).
IV. Conclusión
Con su autenticidad, generosidad y sufrimiento, los niños de la calle tienen el don
de llegar a nuestro corazón, transformarnos y revelar en nosotros la capacidad de
amar, ser sensibles al sufrimiento de los demás y ser solidarios.
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