mucha mierda - WordPress.com

Transcripción

mucha mierda - WordPress.com
MUCHA MIERDA
En el mundo del teatro desear buena suerte trae mala suerte, por lo que los actores
suelen utilizar la expresión que titula este artículo para invocar la buena suerte sin
espantarla por su nombre.
El hecho puede aplicarse al porvenir de nuestra economía ya que vamos a necesitar
mucha suerte para salir bien de ésta, pero habrá que despistar al mal fario, para que no
nos sigan creciendo los enanos en nuestra incipiente recuperación.
La experiencia nos demuestra que hay fenómenos acumulativos que son estados previos
a futuros problemas, es decir, nunca un solo hecho genera una mutación de un modelo,
es la acumulación de factores concurrentes lo que lo hace, y tenemos como ejemplo el
boom inmobiliario de la década 98/07, el problema no es que el dinero estuviera más
barato que nunca, ni que jamás en una década hubieran llegado a España tantos
inmigrantes, ni que el tamaño medio de la familia española se desplomara el problema
es que nunca antes había habido tantos elementos tirando de la construcción
inmobiliaria al mismo tiempo, la simultaneidad de los fenómenos fue la causa, cada uno
de ellos aislados, no fué causa suficiente, aislados no resultaban elementos peligrosos,
actuando de forma conjunta y simultanea fueron letales.
Cinco millones de parados no es causa suficiente, por duro que sea, pero ¿cómo está el
petroleo?, ¿Qué está pasando con los tipos de interés?, ¿Qué está pasando con las Cajas
y consiguientemente con el crédito a las pymes?, ¿Qué pasa con los precios de las
materias primas?, ¿Cómo se está desbocando la inflacción?, ¿En qué situación
financiera se encuentran las administraciones públicas?...... etc….
Es una acumulación peligrosa que puede hacer tambalear la incipiente recuperación en
curso, que por otro lado ahí está, vean la industria, vean el turismo, vean las
exportaciones …..; Estamos en el borde de una tormenta perfecta al mismo tiempo que
avanzamos hacia la recuperación, es una situación dual, en la que habrá que confiar en
la suerte, ya que los elementos clave no dependen solo de nosotros, el margen de
maniobra de nuestros gobernantes es escaso, los deberes ya están trazados, los
compromisos de estabilidad , déficit y consolidación fiscal ya están dados, los plazos
para las reformas ya están fijados, y el lado bueno de nuestra economía, la que mira al
exterior, depende en gran medida de los acontecimientos internacionales, ver como
ejemplo el turismo, por tanto solo cabe que los poderes públicos no reblen en las
reformas estructurales en curso y desearnos en todo lo demás mucha, mucha mierda.

Documentos relacionados