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Playa de Las Aneas - Infonortedigital.com
Rutas por
Gran Canaria
Playa de Las Aneas
Por José Manuel Quesada Medina
Infonortedigital.com
PLAYA DE LAS ANEAS
Respecto a la vegetación, en tiempos pretéritos, el termófilo, fue sin duda el
soberano en esta área, ya que así nos lo indican los topónimos de barrancos y montañas;
la fuerte explotación a que fue sometida la isla lleva a la desaparición de esta masa
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La Cuenca hidrográfica Tasarte- Tasartico se encuentra enmarcada dentro de la
unidad del relieve denominada” Barrancos y Cuchillos del Suroeste”, un espacio
localizado en el exterior de la Caldera de Tejeda, separado y diferenciado de los
Macizos de Inagua, Güi-Güi y del Macizo en rampa de Tauro, es una unidad del relieve
bastante homogénea de coladas basálticas, aunque también encontramos material
riolítico – traquítico, por supuesto hablamos de materiales, surgidos durante el Ciclo I,
hace 14,5 millones de años. La erosión con su trabajo constante nos ofrece este
espectacular paisaje, donde podemos apreciar relieves residuales del antiguo escudo
micénico insular, de ese gran estratovolcán surgido en el Ciclo I.
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La cuenca hidrográfica del Barranco de Tasarte, comprende una superficie de
30,90 Km2, y está formada por la divisoria de aguas de los barrancos de Tasartico y
Tasarte, a simple vista desde Tasartico, nos parece que tras las majestuosas crestas que
conforman Montaña Las Loas o Lobas, Almogarenes, Acebuche, La Cisterna, Piletas y
Balo, nos encontramos con el barranco de Tasarte, nada más lejos de la realidad, no solo
tenemos una amplia red de tributarios que nutren a los barrancos ya mencionados, nos
encontramos con barrancos con identidad propia, que mueren en la costa después de un
corto, pero brutal recorrido hacia el mar. Estamos hablando de los Barrancos de Las
Aneas, Enmedio y del Balo.
vegetal, siendo sustituida por el cardonal, tabaibal, enmarcado en el piso bioclimático
termocanario árido y semiárido. El Cardón, símbolo vegetal de Gran Canaria, se
convierte en el señor del lugar, con unos individuos de autentico encandilamiento que
nos transportan, a un gran salón natural, adornado por los más bellos candelabros que
brillan con el intenso azul del cielo, donde aves, reptiles e insectos bailan al son, del
dulce zumbido del viento.
Desde el punto de vista antrópico encontramos como elementos principales,
restos de zonas abancaladas, así como pequeñas construcciones usadas para el refugio
del ganado. La constante lucha por captar el líquido elemento se ve reflejada en tuberías
plásticas de gran longitud, cuyo origen son pequeños nacientes, que aprovechan la más
mínima gota de este recurso tan escaso.
Se propone, llegar a la playa de Las Aneas desde Tasartico, subiendo por la
Cañada del Acebuche, siguiendo el cauce del barranco de Altabaca y Las Aneas, hasta
llegar a la playa.
Es conveniente resaltar, que puede resultar un recorrido bastante exigente, si
pretendemos realizarlo, con mucho calor o en horas del mediodía. Lo lógico es
aprovechar las horas frescas de la mañana para llegar a la playa, disfrutar en ella, y
volver al punto de partida por la tarde con tiempo suficiente para que no nos coja la
noche.
Se ha dividido el recorrido en tramos claramente diferenciados, en base a
referencias, lugares concretos fácilmente identificables, donde cambia básicamente,
pendiente, vegetación, tipo de firme, etc.
TRAMO 1: Barranco Tasartico- Degollada del Acebuche.
TRAMO 2:. Degollada del Acebuche –Playa de Las Aneas.
TRAMO
FIRME
ALTITUD
(metros)
PENDIENTE
1
PistaVereda
224- 620
Moderada - Alta
Media
3150 m.
100- 120
minutos
2
VeredaFondo de
Barranco
620- 0
Moderada- baja
Media
4300 m.
90- 100
minutos.
DIFICULTAD DISTANCIA
TIEMPO
Distancia total : 14,9 Km.*
Ascenso total : 1310 m.*
Cota máxima: 620 m.
Área : 0,02 km2 *
Descenso total: 1310 m.*
Cota mínima: 0 m.
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*Ida y Vuelta.
TRAMO 1: Barranco Tasartico- Degollada del Acebuche.
Podemos comenzar desde la cancha de deportes de Tasartico, justo donde
comienza la pista de tierra, la cual seguiremos durante unos 900 metros. Al llegar a la
subida que nos lleva a Güi-Güi, debidamente señalizada, apreciamos a nuestra
izquierda, un barranco tributario del B. de Tasartico, “la Cañada del Cardón”,
continuamos por la pista hasta el segundo barranco que vemos a nuestra izquierda, “La
Cañada del Acebuche”, es este barranco al que debemos acceder para recorrerlo en su
totalidad y coronar la Degollada del Acebuche.
Lo más difícil es llegar al fondo del barranco, para ello cogemos por una pista, a
nuestra izquierda, que nos lleva a una casita rehabilitada. La pista tiene una cadena que
impide la entrada de los coches. Pasamos por la casa y un pequeño huerto. Sobra decir
que debemos pasar con el máximo respeto, sin pisar lo plantado en el huerto. Después
de pasar el huerto, lo pasamos que nos quede a nuestra izquierda, buscamos una tubería
negra de plástico, cogemos por ella, dejando una pista de tierra a nuestra derecha.
Vemos como el terreno esta pisado conduciéndonos al fondo del barranco.
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Al llegar al fondo del barranco nos tropezamos con un muro de metro y medio
de altura aproximadamente, que servía de divisoria de terrenos antes plantados, siendo
en la actualidad el único testigo de ello, ya que en la actualidad la dinámica del
barranco, los cardones y los balos han conquistado la zona para disfrute de nuestra vista
gracias a la vistosidad de estos ejemplares.
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Para llegar al fondo de la Cañada del Acebuche, debemos pasar por delante
de la casa y seguir aproximadamente por la línea marcada en la imagen.
Debemos seguir por el fondo de barranco siempre pegados a la ladera izquierda,
sin saltar el muro, que queda a nuestra derecha, por donde se aprecia que esta pisado
hasta que nos topamos con un caidero que nos impide seguir por el fondo del barranco.
Antes de llegar al caidero, es
imprescindible saludar y rendir
pleitesía al ejemplar de acebuche que
encontramos, único superviviente de
lo que debió ser un bosquete,
ateniéndonos al topónimo del lugar.
A unos 60 metros del caidero debemos localizar a nuestra izquierda un muro de
piedras, restos del camino, ese es nuestro objetivo, debemos llegar a él como más fácil
nos resulte, pero podemos subir aprovechar un pequeño dique que nos sirve de escalera.
Restos del camino, que
debemos localizar a la
izquierda del caidero.
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Accediendo al camino
por el dique.
Vale la pena mirar a ratitos hacia atrás, la Degollada de Aguasabina y el camino
que nos conduce a Güi-Güi se aprecian claramente.
El muro de piedras es parte del antiguo camino, que se aprecia claramente, tan
solo debemos seguirlo barranco arriba. Siempre tenemos que ir por la ladera izquierda,
siguiendo lo pisado, casi en el fondo de barranco, pero sin llegar a este.
A los 2170 metros de haber comenzado nuestro recorrido, el barranco se divide
en dos, topándonos con un pequeño refugio abandonado para ganado pasamos por él y
nos metemos por el barranco de nuestra izquierda, para a unos 50 metros (del refugio),
subir por la ladera derecha de este tributario del barranco Cañada del Acebuche,
saliendo a un glacis por el que debemos seguir, siempre por el borde, viendo a nuestra
derecha el fondo de barranco y siguiendo lo pisado. Atravesamos otro barranquillo
dirección Sur y seguimos por el glacis, divisaremos un mojón que nos indica que
comenzamos a ganar cota. A partir del mojón, el camino se ve claramente pisado y
amojonado, con seguir los mojones llegamos sin pérdida a la degollada, tras pasar otro
barranco tributario y la fatigosa subida de la cabecera del barranco.
TRAMO 2:. Degollada del Acebuche –Playa de Las Aneas.
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Bajada a fondo barranco
por el
Lomo de
Altabaca, abordando la
bajada por el lado
derecho del morro, tal
como indica la imagen ,
para salvar el desnivel
que nos separa de él.
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Debemos tener presente que al llegar a la degollada se ve pisado a nuestra
derecha, tenemos que desecharlo, ya que esta vereda nos lleva a la Montaña de La
Cisterna. En la misma degollada lo que hacemos es pasar al otro lado de la divisoria, su
ladera sur, es decir llegamos a la degollada por su cara norte y bajamos por su cara sur.
A nuestros pies apreciamos el Barranco de Altabaca, comenzamos a descender por una
vereda pisada por la cabecera del Barranco de Altabaca, pronto nos encontraremos los
mojones indicándonos que abandonamos la cabecera del barranco para descender de
manera acusada hasta la Hoya de Altabaca, donde aterrizaremos en el fondo de
barranco. Al bajar veremos 4 o 5 mojones, estos desaparecerán, por lo que iremos
campo a través por el Lomo de Altabaca para llegar al fondo de barranco, hay que ir por
el centro del lomo, para llegar al fondo de barranco justo donde se unen los dos
barranquillos donde nace el barranco.
Conquistado el fondo de barranco, lo seguiremos, como si fuéramos el agua que
corre por él cuando está en funcionamiento. No hay problemas, es bastante cómodo,
recorreremos todo el barranco hasta su finalización, cuando se une al de Las Aneas, ya
que Altabaca es un tributario de este. Vamos saltando pequeños caideros, todos sin
ninguna dificultad, salvo el último, antes de llegar al B. de Las Aneas, que lo pasaremos
por la parte izquierda del cauce, los mojones nos guiaran.
Ya en el Barranco de Las Aneas, siguiendo su cauce, al igual que el de Altabaca,
tenemos tres dificultades, descritas según nos las vamos encontrando:
1. Caidero no sorteable : lo salvamos por la ladera derecha, se ve claramente un
pequeño muro de contención y el camino.
2. Muy cerca de la marea, casi en la finalización del barranco, encontramos el
caidero más espectacular, se salva por la ladera izquierda, se ve bastante pisado,
ganamos un poquito de altura, no perder la vereda.
3. Para llegar a la playa debemos sortear el último caidero, el que llega al mar.
Aunque parezca que la playa es inabordable después de tanto andar, es fácil, lo
hacemos por nuestra izquierda.
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Sorteando el último caidero, que nos lleva a la playa.
En la playa, la madre naturaleza, nos obsequia con una marea cristalina y
tranquila donde disfrutar de fantásticos chapuzones.
Volvemos al punto de partida, Tasartico, siguiendo nuestros pasos.
Existen dos puntos negativos en el camino, obra de una especie denominada
Homo Sapiens, el primero lo encontramos al llegar al fondo del Barranco de Altabaca,
donde en una cueva, un individuo/a, ha instalado su segunda residencia, sus pertenecías,
saco de dormir, calderos, bebidas , etc se encuentran en ella, arrojando todos los
desechos que produce, justo al lado de la cueva, donde tiene montado un verdadero
vertedero, cosa impensable en cualquier lugar civilizado dentro de un espacio natural
protegido, ya que toda esta zona pertenece al Parque Rural del Nublo. El segundo punto
negativo es la gran cantidad de desechos, tirados desde embarcaciones, que el mar
arroja en los temporales de sur, estos quedan pegados al risco, ya que las mareas
tranquilas no son capaces de llevárselos.
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La playa de Las Aneas, franqueada por una meseta que se desploma sobre el mar, tiene
una anchura media de 15 metros, siendo su longitud de 60 metros aproximadamente la
zona de arena, en el resto encontramos bolos o cantos rodados.
Calatropis Procera. Flor de
Seda. Planta introducida,
procedente del Norte de
África.
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De regreso, en vez de sortear el primer caidero que encontramos en La Cañada
del Acebuche por el dique , podemos seguir el sendero que nos lleva a fondo de
barranco un poquito más adelante., en el comienzo hemos subido por el dique para
poder ver el Acebuche, ya que el sendero nos deja más abajo.
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El Mamut. El dios Eolo,
moldea el terreno, creando
las más caprichosas de las
formas.
VEGETACIÓN
NOMBRE
NOMBRE COMÚN
CIENTIFIVO
Euphorbia canariensis
Cardón
Echium decaisnei
Tajinaste
Periploca laevigata
Cornical
Euphorbía balsamifera
Tabaiba dulce
Aeonium Percaneun
Verol
Aeonium Manriqueorum
Bejeque.
Phoenix Canariensis
Palmera canaria.
Rubia Fruticosa
Tasaigos
Sonchus acaulis
Cerraja
Ceropegia fusca
Cardoncillo
Plocama pendula
Balos
Senecio Kleinia
Verode.
Recomendaciones:
 Imprescindible las botas.
 No ir con lluvias, pues se corre no sólo el riesgo de desprendimientos sino de
que se formen barranqueras.
 El agua y un gorro protector no deben faltar.
 Si se tiene vértigo abstenerse totalmente.
 No dejar la más mínima huella de nuestra estancia en el lugar.
 Llevar pantalones largos para evitar rozaduras con la vegetación
 Un bastón ó dos para caminar es una buena ayuda.
 Evitar las que horas centrales del día nos cojan caminando.
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José M. Quesada Medina
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Reservados todos los derechos. Junio 2012

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